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Ahora mismo no se puede descartar una guerra civil en Egipto por RUBÉN MARTÍNEZ @ruben_mtnz Basel Ramsis (El Cairo, 1973) no para de fumar y entre pregunta y pregunta consulta las redes sociales. Discriminación, derechos de las mujeres y compromiso social son palabras pronunciadas a menudo por este cineasta y escritor egipcio. Del balcón de su piso madrileño cuelga la bandera de su país, del que ha vuelto hace apenas unos días. A la orilla del Nilo, relata, se cuelgan otro tipo de banderas. “En occidente están pro- hibidas las banderas negras porque son las del terrorismo de Al Qaeda. Si se ven en El Cairo se consideran democráticas”, ironiza. Ramsis domina con soltura el tabaco de liar, la historia de su país y detesta el término “Primavera Árabe”. Considera que los prin- cipales enemigos de Egipto son los islamistas, los restos de Mubarak y los generales si intentan tener un papel político importante. El autor de El otro lado, sobre la inmigra- ción en Lavapiés, afirma que la revolución egipcia todavía no ha conseguido su princi- pal objetivo: acabar con el régimen de Mubarak. ¿Se puede temer una guerra civil en Egipto o que evolucione hacia un modelo sirio? Es algo que no se puede descartar. La situación que vive Siria es muy compleja y no se puede explicar en dos frases, pero el modelo sirio estaba a la vista y estuvimos caminan- do poco a poco hacia este camino. Creo que la actuación del ejército, estés en contra o a favor de ella, y el impulso de la gente de salir de forma masiva hace un mes a las calles, ha salvado a Egipto, de momento, de una guerra civil. ‘‘ ‘‘ ENTREVISTA CON BASEL RAMSIS

ENTREVISTA CON BASEL RAMSIS ‘‘ Ahora mismo no … · Es algo que no se puede descartar. La situación que vive Siria es muy compleja y no se . puede explicar en dos frases, pero

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Ahora mismono se puede descartar una guerra civil en Egipto

por RUBÉN MARTÍNEZ @ruben_mtnzBasel Ramsis (El Cairo, 1973) no para de fumar y entre pregunta y pregunta consulta las redes sociales. Discriminación, derechos de las mujeres y compromiso social son palabras pronunciadas a menudo por este cineasta y escritor egipcio. Del balcón de su piso madrileño cuelga la bandera de su país, del que ha vuelto hace apenas unos días. A la orilla del Nilo, relata, se cuelgan otro tipo de banderas. “En occidente están pro-hibidas las banderas negras porque son las del terrorismo de Al Qaeda. Si se ven en El Cairo se consideran democráticas”, ironiza. Ramsis domina con soltura el tabaco de liar, la historia de su país y detesta el término “Primavera Árabe”. Considera que los prin-cipales enemigos de Egipto son los islamistas, los restos de Mubarak y los generales si intentan tener un papel político importante. El autor de El otro lado, sobre la inmigra-ción en Lavapiés, afirma que la revolución egipcia todavía no ha conseguido su princi-pal objetivo: acabar con el régimen de Mubarak.

¿Se puede temer una guerra civil en Egipto o que evolucione hacia un modelo sirio?Es algo que no se puede descartar. La situación que vive Siria es muy compleja y no se puede explicar en dos frases, pero el modelo sirio estaba a la vista y estuvimos caminan-do poco a poco hacia este camino. Creo que la actuación del ejército, estés en contra o a favor de ella, y el impulso de la gente de salir de forma masiva hace un mes a las calles, ha salvado a Egipto, de momento, de una guerra civil.

‘‘ ‘‘ENTREVISTA CON BASEL RAMSIS

Mubarak, con todo su poder y tiranía, no se atrevió a matar jóvenes que se manifiestan. Esto ha pasado con los Hermanos Musulmanes

¿Hay una explicación para saber por qué Egipto ha desembocado en este mes de enfrentamientos?Lo que ha pasado es que las fuerzas democráticas y re-volucionarias están divididas y no hay un eje que las una. Las otras tres fuerzas, ejército, restos de Muba-rak y Hermanos Musulmanes, son más poderosas y lo acontecido durante mes es la lucha por el equilibrio.

¿Quiénes son los enemigos ahora para Egipto?Son los restos de Mubarak y los islamistas, los que co-mercian con la religión. Es decir, los Hermanos Musul-manes. También los generales si intentan jugar un papel político importante. Pero para hablar de una nueva fase hay que acabar con las milicias armadas islamistas,.

¿Tanto han pecado los Hermanos Musulmanes?Ha sido un desastre a nivel social, político, económico y cultural. Su fallo ha sido controlar un estado que no conocen. Hay tres pecados fundamentales. El pueblo egipcio puede ser creyente, pero no quiere que se le im-ponga un modo de ver la religión. Los Hermanos Mu-sulmanes han traído el modelo saudí y este no funciona aquí. El segundo es no saber controlar un estado con muchas fases, las fuerzas de seguridad, policías y jueces. Han sufrido la derrota más importante de su his-toria y no pueden ni soñar con volver a gober-nar en muchos años. Han decepcionado en todo.

¿Han gobernando peor que Mubarak?El régimen de Mubarak, con toda su tiranía y todo su poder, no se atrevió a matar niños. Esto ha ocu-rrido con los Hermanos Musulmanes. Han mata-do a chicos que se manifestaban en las calles, los han torturado y los han tirado a las carreteras. Además, han metido la pata con derechos humanos, derechos sociales e incluso con la cultura. Trajeron una persona ignorante como ministro de Cultura al país más importante, culturalmente hablando, de África.

Usted ha visto banderas de Al Qaeda en las calles...Periodistas, arabistas y analistas han afirmado que este es un modelo democrático. O son ignorantes, o son mentirosos. ¿De qué democracia estamos hablan-do? ¿Qué medidas democráticas ha tomado el régimen de Morsi durante un año? Yo te puedo decir que es un régimen fascista. Más asqueroso aún que el modelo que conoce Europa, porque es un fascismo religioso. Pues sí, las banderas negras de Al Qaeda están en las ca-lles de El Cairo. Y dicen que son la legitimidad y la demo-cracia. No sé si tú te atreves, si simpatizas con Al Qaeda, a poner su bandera en Madrid. Está prohibida porque es la bandera del terrorismo. ¿Por qué en Egipto se acepta?

Satisface una parte de las motivaciones de la gente: sacrifica a Mubarak, pero también para mantener los intereses del ejército. Repite lo mismo el día 30 de ju-nio de 2013, el dia 1 de julio da un ultimátum a Mor-si y el día 3 se produce la declaración famosa, que se hizo con todas las fuerzas democráticas y revolucio-narias y con el movimiento Tamarrod/rebelión. Cor-ta esta huelga general nacional y mantiene al estado egipcio sacrificando a los Hermanos Musulmanes.

¿Cómo ha sido la relación entre Hermanos Musul-manes y ejército?Los Hermanos Musulmanes han empezado a sacar mi-licias islamistas en detrimento del ejército al estilo de los primeros años de la revolución iraní. Y claro, esto con-trasta con los intereses del ejército. Por el interés propio del ejército y también del Estado egipcio decide apartar-los, porque no hay que olvidar que estábamos a punto de caer en una guerra civil entre nosotros y los islamistas..

¿Quién es el Sisi?El Sisi es el jefe actual del ejército y es el hombre de los servicios de espionaje militares. Salió de la academia militar en el año 67. Es de la primera generación que se va a EEUU a aprender de la CIA y el Pentágono. A través de los acuerdos de Camp David empieza el con-

trol de los americanos sobre el ejército egipcio. Hay que entender el sentimiento de los norteamericanos, porque el ejército se ha movido contra su voluntad y sin su per-miso. Pero EEUU dona 1.300 millones de dólares a Egip-to, que no hay que olvidar que es en armamento, no en bienes ni alimentos, y no pueden pronunciarse mucho porque perderían para siempre a un aliado estratégi-co. Es la primera vez en cuarenta años que el ejército toma una decisión fuera de las órdenes norteamerica-nas. Se puede estar a favor o en contra del ejército, pero salvaron puntualmente a Egipto de una guerra civil.

¿Por qué le molesta el término “Primavera Árabe”?Quien lo haya inventado es alguien ignorante, al que le gusta mucho el término Primavera de Praga o la prima-vera de París del 68, y vio algo en el mundo árabe y lo llamó así. Lo que está ocurriendo es sencillo. Se llaman revoluciones árabes. Empezaron en invierno. Incluso la tunecina en diciembre de 2010. La egipcia en enero de 2011. Acabó el invierno, llegó la primavera, el verano, el otoño, y volvemos al invierno. Así dos años y medio. Pero hay una mala intención en comercialicar el térmi-no porque la primavera de París del 68 fue una revo-lución estudiantil que duró dos semanas y fracasó. No consiguió absolutamente nada. Creo incluso que hay un intento de ridiculizarlo llamándolo primavera árabe.

¿Por qué evita hablar de un golpe de estado?No puedo decir que ha habido un golpe de esta-do cuando hay 22 millones de firmas contra el go-bierno y el día 30 salen a la calle a protestar más de 30 millones de personas en un país de 84 millones.

¿Qué papel ha jugado el ejército históricamente en Egipto?Mehemet Alí, cuando construyó a principios del S.XIX el Estado egipcio, lo hizo al servicio de su ejército. Un ejemplo: en aquella época, la medicina moderna y la prostitución fue legalizada únicamente para dar ser-vicio al ejército egipcio. Hay que entender que el pue-blo le tiene mucho respeto a la institución del ejército. Hay mucha gente que compara a Nasser con Franco y para mí esto es un error. Nasser era un tirano, pero tenía un proyecto de desarrollo social para mi país. Empezó el proyecto de liberación del mundo árabe y ha sido el go-bernante más querido en toda su historia. Yo no soy nas-serista y estoy en contra, pero me es muy difícil tacharlo de la historia de Egipto, porque mucha gente lo admira.

Hay dos fases en el papel desempeñado por el ejército. La primera en la que todavía mandan y tienen la última palabra en decisiones políticas importantes. La segunda es un proyecto de herencia para el hijo de Hosni Muba-rak, que podía ser el próximo presidente. En esta fase, Mubarak intenta que la influencia del ejército sea más floja en favor de un proyecto de herencia para su hijo.Hay analistas que dicen que hubo un plan del ejército para enfrentarse al propio Mubarak. No hay que olvidar que el ejército controla el 35% de la economía de Egipto.

Vemos que ahora ha intervenido, pero no es la primera vez.Cuando empieza la revolución el 25 de enero de 2011, el ejército ve que se radicaliza la situación y da un paso al frente.

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El papel de la religión en la política ya no es un debate de intelectuales aislados. Des-pués de 200 años, trabajado-res, amas de casa o campesi-nos ya discuten sobre esto

El Baradei representa una de las bases de esta revo-lución: la clase media, pero no será el próximo presidente. Para mí es el político más inteligente de Egipto

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En sus documentales trata temas como la discri-minación, los derechos sociales o los derechos de las mujeres en Palestina. No se muerde la lengua...Ya, pero no soy el único que habla y trabaja sobre esto. Hay mucha gente que ya lo hace. De hecho yo escribo muchas veces sobre esto en árabe y creo que cada vez más se recibe bien hablar de estos asuntos, sobre todo después de la revolución. También hice en 2006 un do-cumental sobre las mujeres palestinas y ocupamientos. Ya podemos hablar con mayor libertad. Es tabú, si, pero la religión también lo es, y ya se puede opinar sobre ella.

Has pagado incluso con la cárcel por militar en política.Sí, pero fíjate, ahora el problema es la muerte. Cuando yo estudiaba en la universiadd y milité políticamente el peligro era el encarcelamiento unos meses o la tortura

puntual como me pasó. Sin embargo, a partir de la revo-lución de enero de 2011, el peligro ha aumentado. Reci-bes una bala y te matan. Hay 1.200 personas asesinadas en la revolución egipcia y otras 1.200 desaparecidas. Ese es el precio de salir a una manifestación. Yo salí a todas las importantes durante estos dos años y medio y no pasó nada, pero si que le pasó al chico que estaba al lado mío.

¿En qué estás trabajando ahora?Ahora mismo en dos proyectos, a parte de escribir., Estoy realizando un documental sobre mi generación. Expli-co que entra a la universidad en el año 90, en el mo-mento de la caída del bloque soviético y a pesar de esto empezaron a militar en el comunismo. Mi intención es presentar la evolución de cómo eran hace veinte años y cómo son ahora. Éste es un proyecto de antes de la

la revolución. Dio un giro porque vino el suceso más im-portante de nuestra historia. En dos meses termino el otro, que va sobre mujeres que son víctimas del comercio matrimonial. Familias que venden a sus mujeres a hom-bres de la zona del golfo a cambio de dinero. Es para un proyecto en Egipcio en contra del comercio de las mujeres.

¿Qué le parece la situación que está viviendo Siria?No opino sobre el caso sirio porque es muy complica-do y necesita mucha información para opinar. Me está molestando bastante alguna gente que elo hace sin sa-ber. Lo único que puedo decir, según la gente que co-nozco y que está allí sobre el terreno, es que un tirano está en batalla contra otros tiranos islamistas. Claro que existen en Siria fuerzas democráticas revoluciona-rias, pero estos son minoría y los más debiles. Si Bassar

Fui encarcelado por militar en la política cuando era estudiante. Ahora el problema es la muerte

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Al Assad cae hoy, en Siria va a seguir la guerra civil y el nue-vo régimen no va a ser mucho mejor. Esto lo digo porque con-fío en la gente que me está informando desde dentro de Siria.

¿Qué se ha dejado en el tintero la revolución egipcia?La revolución egipcia no acabó completamente con el régimen de Mubarak. (Mira la cámara con la que se graba la entrevista y ejemplifica). Yo para hacerme con esta cámara tengo que matarte o echarte de casa, pero no te puedo dejar moribundo en esta habita-ción. La revolución egipcia no ha conseguido el mayor objetivo, que era acabar con el régimen de Mubarak. Pero si ha conseguido otras cosas importantes como acabar en dos años con dos regímenes.

Un avance importante...Por primera vez en 200 años de historia del Estado egipcio moderno, hay una discusión clara en la calle sobre el papel de la religión en la política. Ya no es un debate que queda cerrado a los intelectuales ais-lados. Ahora los taxistas, los vendedores ambulantes, los funcionarios, los trabajadores, las amas de casa y los campesinos discuten sobre esto.

¿En qué fase está ahora mismo la revolución?Nadie te sabría decir. Para entenderla hay que mirar 20 años atrás. En todo lo que ocurrió políticamente: huelgas y protestas antes de la revolución. Había una fase, la primera de los 18 días, hasta la caída de Mubarak. Luego una segunda de año y me-dio con el control del Consejo Militar Superior. Luego una etapa de Morsi. Y ahora la ola del 30 de junio, que todavía no ha aca-bado, y que derrocó a los Hermanos Musulesta. La batalla ac-tual puede durar 2 días o prolongarse un año más. Quién sabe.

La revolución egipcia no ha conseguido el mayor objetivo, que es acabar con el régimen de Mubarak

¿Como valoraría a Mohamed El Baradei?Es un jugador político muy importante en estos tres años pasa-dos. Yo puedo estar en el terreno de libertades y democracia con él, pero no coincido en sus objetivos sociales y económicos. Perte-nece al nuevo liberalismo y sé el desastre social que provoca. En mi opinión ha sido la cara más importante de la revolución en es-tos dos años. Representa la base principal de esta revolución, que está divida en dos. La clase media y la pobre. El presenta la clase media. No hay un representante de la clase pobre. Yo creo que per-tenezco a ella, no por ser pobre sino por la defensa de sus intereses. Pero no tiene intención de ser presidente. Es la cara política mundial-mente más conocida e importante. Para mi, es el político más inteligente que hay en Egipto, e hizo bien en aceptar el cargo de vicepresidente de asuntos exteriores ante tanto “golpe de estado”. Su partido es, después de los islamistas, el más fuerte que hay. El partido de la construcción.

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