ENVEJECIMIENTOENLOSMUNICIPIOSESPAÑOLES:

SITUACIÓNYPERSPECTIVAS(2018)

InformeStratego–Agostode2019

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INTRODUCCIÓN Uno de los temas que más preocupan en los últimos años en España es el de la situación de la denominada ‘España vacía’ o ‘España vaciada’. En la misma línea mantenida en sus últimos informes, la Consultora Estratégica de Comunicación Stratego ha analizado los datos de los 8.131 municipios que hay en España, y lo ha hecho en un doble sentido. Por una parte, se ha estudiado la evolución de la población en cada uno de ellos entre 2000 y 2018 (últimos datos definitivos disponibles a día de hoy). De esta forma, obtenemos un retrato que nos señala cómo están evolucionando los movimientos demográficos en esta primera parte del siglo XXI y, sobre todo, cómo ese ‘vaciamiento’ está muy lejos de frenarse. Además, se ha llevado a cabo un cruce de datos que nos ha permitido conocer cuántos municipios hay (y dónde están) en los que no vive ni una sola persona de menos de 20 años, lo que nos ofrece una visión clara de cuáles son las perspectivas si no se adoptan medidas al respecto lo antes posible. Este informe incluye gráficos con datos de todas las Comunidades Autónomas y un anexo con los principales datos de cada una de ellas.

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La población en España: evolución en el siglo XXI, situación actual y perspectivas de futuro La evolución demográfica de España en los últimos años está avanzando hacia la construcción de dos países cada día más diferentes: uno que se vacía poco a poco y otro cada vez más poblado. Los datos de los primeros años del siglo XXI (2000-2018) son contundentes: en este periodo España ha ganado algo más de 6,2 millones de habitantes, con un padrón que crece un 15,37%... pero en esos años hay hasta 2.376 municipios (el 29,22%) donde el número de vecinos ha disminuido por encima del 25%. Pero esto no es todo. Las perspectivas apuntan que de cara a los próximos años este proceso podría agravarse. Un ejemplo ilustrativo son los casos más extremos: Ya hay 311 ayuntamientos donde no vive un solo joven de menos de 20 años. Evolución de la población entre 2000 y 2018 Si analizamos la evolución de la población en los municipios españoles entre 2000 y 2018 –datos del Instituto Nacional de Estadística-, comprobamos que el 62,86% de las localidades (un total de 5.111) ha perdido habitantes en esta primera parte del siglo XXI. De éstas, 2.288 (el 28,14% del total) ha visto cómo su padrón disminuía por encima del 25%. En el extremo contrario, hay 715 municipios donde la población crece por encima del 50% en este periodo (sobre todo en Cataluña, con 177, y Madrid, con 111).

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Pero la situación no es homogénea y varía mucho según la comunidad autónoma que analicemos. Así, mientras en Murcia sólo 6 de sus 45 localidades ven mermado el padrón, en Castilla y León más de la mitad (55,38%) sufren una caída superior al 25%. Le siguen como las regiones más afectadas Extremadura (45,25% de municipios con pérdidas superiores al 25% de habitantes), Castilla-la Mancha (39,5%), Galicia (35,14%) La Rioja (34,48%) y Asturias (30,77%). En total, el 62% de los municipios españoles ha perdido población entre 2000 y 2018, con una distribución muy desigual. El 89,74% de los municipios de Asturias pierde población, un ránking en el que le siguen Castilla y León (87,19%), Extremadura (84,27%) Aragón (77,15%) y Castilla-La Mancha (73,78%). Por el contrario, esas caídas apenan afectan a un 5,03% de las localidades de Madrid, a un 5,97% de las de Baleares y a un 13,33% de las de Murcia. En términos globales desde el año 2000 sólo tres comunidades autónomas han perdido población (Asturias, Castilla y León y Galicia), lo que apunta a un intenso proceso de trasvase de población de zonas rurales a zonas urbanas. De hecho, si analizamos los datos por provincias las que más población pierden son Zamora (-14,21%), Ourense (-10,41%), Lugo (-9,38%), Palencia (-9,13%) y León (-7,65%). En total son 13 las provincias que han perdido habitantes desde 2000. Además de las 5 ya citadas, Salamanca, Asturias, Ávila, Cáceres, Soria, Cuenca, Teruel y Jaén.

Y mientras esas provincias ven mermado su padrón, éste se ha disparado en Guadalajara (53,80%), y ha registrado también subidas destacables en Almería (36,88%), Girona (34,72%), Baleares (33,50%), Tarragona (32,98%) y Toledo (30,20%).

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Municipios con menos de 100 habitantes Este proceso de trasvase poblaciones entre el mundo rural y el mundo urbano se deja notar también en otra estadística: la del número de municipios que tenemos con menos de 100 habitantes. Y es que si en el año 2000 había 913 localidades por debajo del centenar de vecinos, en 2018 esa cifra había crecido hasta los 1.333 (420 más, con un incremento del 46%). Destaca el caso del País Vasco, donde en estos años se ha pasado de tener 4 ayuntamientos con menos 100 habitantes a ninguno. Por el contrario, esa cifra aumenta de manera especial en Extremadura (pasa de 1 a 10), Castilla y León (de 431 a 676) y Aragón (de 138 a 209). Si acercamos aún más la ‘lupa’, el INE señala que hay 14 localidades con menos de 10 vecinos. De ellas, siete se encuentran en Castilla y León, cinco en Castilla-La Mancha y las dos restantes en La Rioja.

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Perspectivas de futuro: Pueblos sin jóvenes… Pero más allá del tamaño de cada localidad, lo que resulta aún más llamativo es la perspectiva de futuro. O, dicho de otro modo, el vacío generacional que se detecta en algunas zonas que se están quedando (cuando no lo han hecho ya) sin población joven, lo que obliga a mirar al futuro con una evidente preocupación. En España hay a día de hoy hasta 1.108 municipios en los que no hay un solo niño de entre 0 y 4 años. En 311 localidades el caso es aún más grave: ningún vecino tiene menos de 20 años.

La mayor parte de estos pueblos se concentra en Castilla y León (tiene 168 localidades sin ningún joven de 0 a 19 años), Castilla-La Mancha (69) y Aragón (47). También hay casos en La Rioja (19), Navarra (4), Cataluña (2), Madrid (1) y Comunidad Valenciana (1). Por el contrario, no se da ningún caso en Asturias, Galicia, Cantabria, País Vasco, Extremadura, Canarias, Baleares, Andalucía y Murcia. En cuanto a las localidades sin niños de entre 0 y 4 años, más de la mitad se concentra en Castilla y León (hay 617 casos), y también destacan Castilla-La Mancha (202) y Aragón (146). Hay otro cruce de datos a tener en cuenta: de esos 1.108 municipios españoles sin menores de 5 años, 826 tienen ya menos de 100 habitantes. En total la población con menos de 20 años representa el 19,67% del padrón nacional, aunque la cifra oscila entre el 14,65% de Asturias y el 23,02% de Murcia.

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Por provincias, las cinco que tienen menos población juvenil son Zamora (13,03%), Ourense (13,29%), Lugo (13,48%), León (14,5%) y Asturias (14,65%), y las que están en el otro extremo son Murcia (23,02%), Almería (22,37%), Sevilla (22,10%), Guadalajara (21,87%) y Cádiz (21,56%). … Y pueblos envejecidos Por otra parte, el 19,07% de la población tiene más de 65 años en estos momentos. El peso de esa población mayor oscila entre el 15,58% de Canarias y el 25,25% de Asturias. O entre el 14,53% de Almería y el 31,16% de Ourense, si lo vemos por provincias.

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Se están generando grandes diferencias que aumentan aún más cuando ‘descendemos’ hasta un análisis municipal. En España hay nada menos que 402 pueblos donde el porcentaje de población con más de 65 años ya está por encima del 50%, con lo que ello supone en materia de servicios y de movilidad, entre otras cosas. De estos pueblos, 261 están en Castilla y León, 72 en Castilla-La Mancha, 37 en Aragón, 11 en La Rioja, 10 en Galicia, 5 en Navarra, 4 en Extremadura, 1 en Comunidad Valenciana y 1 en Cataluña. Entre éstos hay algunos casos realmente extremos. En Arandilla del Arroyo (Castilla-La Mancha) 9 de sus 10 vecinos superan esa barrera de los 65 años. En Cobos de Fuentidueña (Castilla y León) están en ese caso 29 de sus 35 habitantes, y en Castillonuevo (Navarra) 14 de los 17. Pero también hay casos singulares en algunos municipios por la elevada presencia de población joven. Es el caso de Cuarte de Huerva (Aragón), de 13.055 vecinos, donde apenas el 5,42% del padrón ha cumplido los 65 años mientras el 29, 35% está por debajo de los 20. O de Hontanares de Eresma (Castilla y León), con un padrón de 1.404 habitantes en el que sólo 56 vecinos (3,99%) tienen más de 65 años y 426 (30,34%) menos de 20. Y Zugarramurdi (Navarra), que entre sus 20.774 cuenta con 6.787 (32,67%) menores de 20 años y 969 (4,66%) mayores de 65. Y un caso curioso: el de Castilnuevo (Castilla-La Mancha), donde no hay ni población juvenil ni población mayor, ya que sus 9 habitantes están entre los 20 y los 64 años. *Las cifras están obtenidas en base a las estadísticas del Padrón Continuo, datos definitivos, a 1 de enero de 2018, últimos que existen a día de hoy con este nivel de detalle.

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ANEXO DATOS AUTONÓMICOS

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ANDALUCÍA Entre 2000 y 2018 Andalucía ha ganado algo más de 1 millón de habitantes, con un incremento del 14,23% algo inferior a la media nacional. Por provincias, únicamente ve como baja su padrón Jaén (-1,18%), mientras que las que más aumentan son Almería (36,88%) y Málaga (28,33%). A pesar de ello la realidad es que 422 municipios andaluces perdieron población en ese periodo, con lo que la despoblación ha afectado a más de la mitad de las localidades de la comunidad. Además, hay 48 localidades en las que esa caída del padrón ha superado el 25%. En el extremo contrario, hay 67 municipios donde la población sube por encima del 50%. En lo que se refiere a pérdida de población, los casos más extremos son los de Algarinejo (-50,83%), Murtas (-41,78%) y Arenas del Rey (-40,47%). Por el contrario, los mayores incrementos se dan en Benahavís (+284,47%), Vegas del Genil (279,57%) y Espartinas (+207,99%). Entre las grandes localidades, Roquetas del Mar gana un 113,94% de población, y Benalmádena un 113,94%). Además, en el año 2000 sólo había 2 localidades por debajo del centenar de habitantes en Andalucía y hoy la cifra se mantiene igual: son Cumbres de Enmedio y Benitagia. En Andalucía a día de hoy el 21,21% de la población tiene menos de 20 años, y el 16,83% tiene más de 65, con lo que su población es algo más joven que la media nacional. No tiene ningún municipio sin jóvenes por debajo de los 20, ni tampoco ninguna localidad donde más de la mitad del padrón supere los 65 años.

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ARAGÓN Entre 2000 y 2018 Aragón ha ganado algo más de 118.819 habitantes, con un incremento del 9,99, inferior a la media nacional. Por provincias, baja el padrón en Teruel (-1,39%) y aumenta en Zaragoza (12,59%) y Huesca (6,77%). A pesar de ello la realidad es que 564 municipios aragoneses perdieron población en ese periodo, con lo que la despoblación ha afectado a más del 77% de las localidades de la comunidad. Además, hay 217 municipios en los que esa caída del padrón ha superado el 25%. En el extremo contrario, hay 26 municipios donde la población sube por encima del 50%. En el año 2000 Aragón contaba con 138 localidades por debajo de los 100 habitantes. Hoy son 209. En lo que se refiere a pérdida de población, los casos más extremos son los de Bagüés (-73,91%, se queda con 12 vecinos), Cabolafuente (-63,22%, 32 vecinos) y Sisamón (-62,20%, con un padrón de 31 personas). Por el contrario, las mayores subidas se concentran en Cuarte de Huerva, que ha pasado desde el año 2000 de tener 1.847 vecinos a más de 13.000 (+606,82%); María de Huerva (+405,17%. De 1.121 a 5.663); y Tierz (+321,11%, de 180 a 758 habitantes). Las dos primeras están muy cerca de Zaragoza y la tercera a escasos kilómetros de Huesca. En Aragón a día de hoy el 18,65% de la población tiene menos de 20 años, y el 21,62% tiene más de 65. En 47 pueblos de esta comunidad no hay ningún vecino de menos de 4 años. En total tienen 146 localidades sin niños menores de 4 años, de las que 120 están ya por debajo de los 100 habitantes. Asimismo, hay hasta 37 núcleos aragoneses en los que más de la mitad de la población ha superado la barrera de los 65 años. El pueblo más pequeño de Aragón es Bagüés, con 12 vecinos.

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ASTURIAS Entre 2000 y 2018 Asturias ha perdido 48.323 habitantes, con una caída en el padrón del 4,49% que es la mayor registrada en España en ese periodo. Y es que 70 de sus 78 municipios (el 89,70%) han perdido población desde principios de siglo y hay 24 localidades en las que esta cauda del padrón ha superado el 25% en estos años. Los municipios más afectados han sido Illano (-44,91%), Pesoz (-44,91%) e Ibias (-40,59%). En Sobreescobio el padrón se mantiene igual, y entre las 7 localidades en las que aumenta (entre ellas Oviedo y Gijón) destacan los casos de Noreña (+19,61%), Llanera (+14,05%) y Oviedo (+9,78%). En Asturias no hay núcleos de población con menos de 100 personas, pero si en 2000 la localidad con menos vecinos contaba con 223 habitantes, hoy tiene apenas 140 (Yernes y Tameza). En Asturias a día de hoy el 14,65% de la población tiene menos de 20 años, y el 25,25% tiene más de 65, con lo que su población es la que menos población juvenil y la que más población mayor tiene de toda España. En dos municipios asturianos no hay ningún niño de menos de 4 años.

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BALEARES Baleares es la comunidad autónoma que más población ha ganado desde el año 2000, con un incremento del 33,50% (283.278 habitantes más) que duplica el incremento nacional. Sólo cuatro de sus municipios han perdido vecinos en este periodo: Escorca (-33,65%), Estellencs (-10,92%), Deia (-4,91%) y Banyalbufar (-3,27%). Por el contrario, 16 de sus 67 localidades han aumentado el número de vecinos por encima del 50%, especialmente Formentera (+94,24%), Sant Josep de sa Talaia (+83,64%) y Marratxí (+75,52%). Curiosamente, tres de los asentamientos que han perdido vecinos son los más pequeños de la comunidad. En Baleares a día de hoy el 20,2% de la población tiene menos de 20 años, y el 15,49% tiene más de 65, con lo que su población es bastante más joven que la media nacional. No tiene ningún municipio sin jóvenes por debajo de los 20, ni tampoco ninguna localidad donde más de la mitad del padrón supere los 65 años.

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CANARIAS Entre 2000 y 2018 Canarias ha sumado algo más de 411.000 habitantes, con un incremento del 23,97%, el cuarto más importante de entre todas las CCAA y muy similar en sus dos provincias (ambas crecen más de un 23%). Aun así, 22 de sus municipios (uno de cada cuatro) vieron cómo su padrón descendía en este periodo, e incluso hay tres de ellos en los que este retroceso poblacional supera el 25%: Artenara (-30,66%), Tazacorte (-25,17%) y Tejeda (-25,11%). Por el contrario, en catorce núcleos el padrón creció por encima del 50% en esos mismos años, destacando por encima del resto los casos de Adeje (+237,55%), Yaiza (+214,76%) y San Miguel de Abona (+168,93%) La localidad más pequeña de la comunidad es Betancuria, con 731 vecinos, único municipio por debajo de los 1.000 habitantes y que desde 2000 ha incrementado un 7.98% su padrón. En Canarias a día de hoy el 18,75% de la población tiene menos de 20 años, y el 15,58% tiene más de 65.

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CANTABRIA Entre 2000 y 2018 Cantabria ha sumado 49.070 habitantes, con un incremento del 9,24 que es el mayor registrado en España en ese periodo. A pesar de ese incremento, prácticamente la mitad de sus localidades (el 49%) han registrado retrocesos en sus padrones en estos años. En total tiene 16 municipios donde esa pérdida de población ha superado el 25%, que se contraponen con los 10 que la han incrementado por encima del 50%. Los mayores retrocesos en el padrón en lo que va de siglo XXI lo han experimentado Tudanca (-47,96%), Luena (-37,13%) y Valdeolea (-35,66%). En el extremo contrario están Piélagos (ha pasado de 11.862 a 25.223 vecinos, un +112,64%), Entrambasaguas (+105,82%) y Argoños (+98,50%). A diferencia de lo ocurrido en otras regiones, en este caso su principal ciudad, Santander, ha perdido población, concretamente 12.220 vecinos (-6,63%). En Cantabria hay únicamente dos núcleos de población con menos de 100 personas, Tresviso (64 habitantes) y Pesquera (68), los mismos que había en el año 2000. A día de hoy el 17,3% de la población tiene menos de 20 años, y el 21,47% tiene más de 65, con lo que su población tiene menos población juvenil y más población mayor que la media nacional España. Curiosamente en sus dos núcleos de población con menos de 100 vecinos no hay niños de entre 0 y 4 años. El pueblo con más población mayor es Lamasón, donde el 41,11% de sus vecinos ha superado los 65 años.

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CASTILLA Y LEÓN Castilla y León es una comunidad que está sufriendo de manera especialmente severa el proceso de despoblamiento rural que afecta a toda España. Entre 2000 y 2018 esta región ha perdido 69.954 habitantes, con un descenso en el padrón del 2,82%. En términos absolutos en la comunidad que más habitantes ha perdido a lo largo del siglo XXI. Este retroceso no ha tenido el mismo impacto en todas las provincias, ya que ha sido especialmente intenso en Zamora (-14,21%), Palencia (-9,13%), y León (7,65%). De hecho, Zamora es la provincia española donde el retroceso del padrón ha tenido un mayor impacto en este periodo, y Palencia, León, Salamanca y Soria están también entre las diez provincias españolas más afectadas por este fenómeno. Mientras, en ese periodo el número de habitantes ha aumentado en Valladolid (+4,87%), Segovia (+4,59%) y Burgos (+2,83%). En total el 87,19% de sus localidades ha visto cómo menguaba su población entre 2000 y 2018, y en 1.245 municipios (el 55,38% del total) ese descenso del padrón ha superado el 25%. Por el contrario, hay 78 núcleos que han incrementado su padrón por encima del 50%. Los casos más extremos son los de Cigudosa (-76,32%, de 76 a 18 vecinos), Navasequera (-74,19%, de 62 a 16) y Pajareros (-73,91%, de 46 a 12), aunque son muchos los que se han quedado al borde de la desaparición en este periodo. Tanto que si en el año 2000 Castilla y León contaba con 431 núcleos con menos de 100 habitantes, hoy esa cifra se ha disparado hasta los 676. Hay hasta 7 núcleos por debajo de los 10 vecinos, siendo el más pequeño Estepa de San Juan (con 6). Por el contrario, los padrones han aumentado de manera muy importante en lugares como Hontanares de Eresma (+750,91%), Castellanos de Moriscos (+601,07%) y Arcos de la Llana (+510,14%). Estas localidades se ubican muy cerca de Segovia, de Salamanca y de Burgos, respectivamente. En Castilla y León a día de hoy el 16,11% de la población tiene menos de 20 años, y el 25,06% tiene más de 65, con lo que su población tiene menos población juvenil y más población mayor que la media nacional. En 617 localidades castellanoleonesas no vive ningún niño de 0 a 4 años, y en 168 ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años. Además, se da la circunstancia de que en 430 núcleos de menos de 100 habitantes no hay niños menores de 5 años. A esto se suma que en 261 municipios más de la mitad de la población ha superado ya los 65 años, con lo que Castilla y León concentra el 65% de los casos de este tipo que se dan en España. Los ejemplos más extremos son

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Conos de Fuentidueña, que con un 85,29% es el segundo municipio español con mayor porcentaje de mayores de 65 años; Herrera de Soria (77,78%); y Cerezal de Peñahorcada (75%).

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CASTILLA-LA MANCHA En Castilla-La Mancha la población ha aumentado un 16,87% entre 2000 y 2018, algo por encima de la media. Esos 292.546 habitantes más se han concentrado especialmente en Guadalajara (+53,80%) y Toledo (+30,20%). La única provincia donde baja el padrón es en Cuenca (-1,91%). El caso de Castilla-La Mancha es un ejemplo claro del proceso de despoblación rural, porque a pesar de ese importante incremento en su población en términos globales, la realidad es que siete de cada 10 municipios de la comunidad (678, el 73,7%) han visto mermado su padrón en ese periodo. Incluso hay 363 –casi el 40% de los núcleos totales- donde esa caída ha superado el 25%. Mientras, hay 75 localidades que han incrementado su padrón por encima del 50%. Los casos más extremos son los de Arandilla del Arroyo (-77,78%, para quedarse con 10 habitantes), Angón (-77,78%, 10 habitantes) y Cendejas de la Torre (-73,03%). Así, hoy la comunidad tiene cinco municipios por debajo de los 10 vecinos, siendo el más pequeño Illán de Vacas (con cinco), mientras que el número de núcleos por debajo del centenar de habitantes ha pasado en los primeros 18 años de este siglo de 188 a 260 (con un incremento de algo más del 38%). Por el contrario, el padrón ha aumentado de manera espectacular en lugares como Yebes, municipio -a una hora en coche de Madrid y a 20 minutos de Guadalajara- donde el padrón ha pasado de 167 a 3.518 vecinos (+2.006%). También destacan los casos de Quer (+848%) y Pioz (+774,7%), y hay que llaman la atención por su volumen como Seseña (+471,51%) e Illescas (+171,23%) En Castilla-La Mancha a día de hoy el 20,29% de la población tiene menos de 20 años, y el 18,88% tiene más de 65, con lo que en términos generales su población tiene más población juvenil y menos población mayor que la media nacional. Sin embargo, en 202 localidades castellanomanchegas no vive ningún niño de 0 a 4 años, y en 69 ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años. Además, se da la circunstancia de que en 170 núcleos de menos de 100 habitantes no hay niños menores de 5 años. A esto se suma que en 72 municipios más de la mitad de la población ha superado ya los 65 años, siendo la segunda región con más casos de este sólo por detrás de Castilla y León. El ejemplo más singular es Arandilla del Arrollo, donde 9 de sus 10 habitantes superan esa edad, siendo el municipio con más porcentaje de mayores de toda España.

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CATALUÑA Entre 2000 y 2018 Cataluña ha ganado 1.338.066 habitantes, con un incremento del 21,37% que la sitúa como la quinta con mayor crecimiento a lo largo del siglo XXI. Este avance se ha producido en todas las provincias, aunque no con la misma intensidad en todos los casos. En Girona y Tarragona el aumento del padrón ha estado por encima del 30% (son la tercera y la quinta provincia con más aumento de toda España, respectivamente), mientras que en Barcelona y Tarragona ha estado ligeramente por debajo del 20%. Aun así, hay que tener en cuenta que en términos absolutos la provincia de Barcelona ha concentrado el 65% de esos nuevos habitantes. A pesar de estos datos, casi una de cada tres localidades catalanas (261, el 27,5%) ha perdido población en esta primera parte del siglo XXI. Mientras tenemos 27 núcleos catalanes que pierden más de un 25% de sus vecinos, hay hasta 177 donde se incrementa por encima del 50%. Los casos más extremos en pérdida de habitantes son los de Vallfogona de Riucorb (-48,17% de población), Forés (-38,24%) y Juncosa (-37,52%), mientras que los que más crecen son El Montmell (+252,41%) y La Pobla de Mafumet (+249,15%). Destacan dos casos singulares de pequeños municipios que parecen estar venciendo –al menos de momento- la batalla contra la despoblación, como son Tiurana, que ha pasado de 23 a 74 vecinos entre 2000 y 2018; y Renau, que arrancó el siglo con 61 habitantes y hoy tiene 153. En términos absolutos el núcleo que más población gana es Barcelona (124.077 vecinos más) y el que más pierde Badia del Vallès (-2.116). En el año 2000 la población más pequeña de Cataluña era Tiurana, con sus 23 vecinos, mientras que hoy es Gisclareny, con 26 (los mismos que hace 18 años). Si a principios de siglo Cataluña contaba con 29 núcleos con menos de 100 habitantes, hoy esa cifra ha aumentado hasta los 37. A día de hoy el 20,37% de la población tiene menos de 20 años, y el 18,07% tiene más de 65, cifras muy parejas a la media nacional. En 12 localidades de Cataluña no vive ningún niño de 0 a 4 años, y en dos ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años (Vallfogona de Riucorb y Forès). Además, se da la circunstancia de que en 6 núcleos de menos de 100 habitantes no hay niños menores de 5 años. A esto se suma que precisamente en Forès el 54,76% de los vecinos ya han superado los 65 años.

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COMUNIDAD VALENCIANA En la Comunidad Valenciana la población ha aumentado un 20,46% entre 2000 y 2018, cinco puntos por encima de la media nacional, con casi 843.000 habitantes más que a principios de siglo. Aunque crecen todas las provincias, lo hace especialmente Alicante (+27,24%), muy por encima de Castellón (+21,61%) y Valencia (+15,75%). A pesar de estos datos positivos, 201 municipios valencianos (el 37% del total) han visto cómo su padrón descendía. Sólo en 37 casos esa pérdida de población supera el 25%, mientras que –frente a eso- en otras 71 localidades el incremento del número de habitantes está por encima del 50%. Las mayores pérdidas de población se han registrado en Villamalur (-55,32%), Herbés (-52,43%) y Vallanca (-46,38%). En el año 2000 el municipio más pequeño era Palanques, con 21 vecinos, mientras que en 2018 es Castell de Cabres, con 19. El número de núcleos por debajo del centenar de habitantes ha pasado en los primeros 18 años de este siglo de 22 a 24. Por el contrario, los padrones han aumentado de manera espectacular en lugares como Llaurí (+924,58%), Guardamar de Safor (+622,06%) y Daya Vieja (260,53%). En la Comunidad Valenciana el 19,85% de la población tiene menos de 20 años, y el 19,07% tiene más de 65, con lo que se sitúa en términos similares a la media. Sin embargo, en 24 localidades valencianas no vive ningún niño de 0 a 4 años. Hay una localidad singular, Tollos, donde ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años. Además, se da la circunstancia de que en este núcleo el 64,29% de sus 56 vecinos ha superado ya los 65 años.

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EXTREMADURA Entre 2000 y 2018 Extremadura apenas ha variado su población. Ha ganado 3.443 habitantes (un 0,32%), aunque mientras Badajoz suma crece un 2,19%, Cáceres baja un 2,71%. A pesar de esta situación aparentemente estable, lo cierto es que el 84,2% de los municipios extremeños han perdido habitantes en esta primera parte del siglo XXI. Los casos más extremos en pérdida de habitantes son los de Descargamaría (-58,33%), Campillo de Deleitosa (-53,03%) y Galisteo (-51,99%). Esto ha llevado a que si a principios de siglo Extremadura contaba con un sólo núcleo con menos de 100 habitantes, hoy esa cifra ha aumentado hasta los 10. En 2000 la localidad más pequeña era Carrascalejo, con 73 vecinos, y hoy es Campillo de Deleitosa, que tras perder a 70 de sus 132 habitantes se ha quedado con apenas 62. A día de hoy el 18,69% de la población tiene menos de 20 años, y el 20,43% tiene más de 65, con algo menos de población joven y algo más de población mayor que la media nacional. En 7 localidades de Extremadura no vive ningún niño de 0 a 4 años, y cuatro de ellas tienen menos de 100 habitantes. A esto se suma que hay cuatro municipios donde más de la mitad de su padrón está por encima de los 65 años (Campillo de Deleitosa, Gargüera, Casares de Hurdes y Carrascalejo).

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GALICIA Entre 2000 y 2018 Galicia ha perdido 30.157 habitantes, con una caída del 1,10% que la sitúa como una de las tres regiones que están sufriendo un receso demográfico en los años que llevamos de siglo XXI. Y es que a pesar de que tanto Pontevedra (+3,19%) como A Coruña (+0,99%) han ganado población, Ourense (-10,41%) y Lugo (-9,38%) son, respectivamente, la segunda y la tercera provincia española que más habitantes pierden. Siete de cada diez localidades gallegas (225, el 70,9%) han perdido población en esta primera parte del siglo XXI. Mientras tenemos 110 núcleos gallegos que pierden más de un 25% de sus vecinos, hay sólo dos donde el padrón se incrementa por encima del 50%: Ames (+89%) y Barbadás (+74,21%). Los casos más extremos en pérdida de habitantes son los de Chandrexa de Queixa (-48,05%), San Xoán de Río (-46,70%) y Agolada (-46,03%). A pesar de todo, en la comunidad autónoma no hay municipios de menos de 100 habitantes. A día de hoy el 15,88% de la población tiene menos de 20 años, y el 24,91% tiene más de 65, lo que refleja escasa población joven y un porcentaje de población mayor cinco puntos por encima de la media nacional. De hecho, en Galicia hay diez localidades donde más de la mitad de los vecinos ya han superado los 65 años.

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MADRID En la Comunidad de Madrid la población ha aumentado un 26,37% entre 2000 y 2018, más de diez puntos por encima de la media nacional. Con 1,3 millones de habitantes más que a principio de siglo, es la tercera región que más crece porcentualmente y la que más lo hace en términos absolutos. Únicamente retrocede el padrón en nueve localidades madrileñas, y en tres de ellas (Robregordo, La Hiruela y La Serna del Monte) lo hace en más de un 25%. Por el contrario, el número de habitantes aumenta más de un 50% en 111 de sus 179 municipios. Los municipios que más crecen son Arroyomolinos (685,88%), Pozuelo del Rey (495,74%) y Casarrubuelos (407,11%). En el año 2000 la localidad más pequeña de Madrid era Madarcos, con 21 vecinos. Hoy lo sigue siendo a pesar de haber elevado su padrón hasta los 47 habitantes. En la comunidad madrileña hay 10 localidades con menos de 100 habitantes. En Madrid el 20,29% de la población tiene menos de 20 años, y el 17,55% tiene más de 65. Sin embargo, en cinco localidades madrileñas no vive ningún niño de 0 a 4 años y en una de ellas ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años: La Hiruela. Robregordo es el municipio con mayor porcentaje de mayores, puesto que el 47,92% de sus 48 vecinos ha superado los 65 años.

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MURCIA En la Región de Murcia la población ha aumentado un 28,64% entre 2000 y 2018, casi trece puntos por encima de la media nacional. Con 329.181 habitantes más que a principio de siglo, es la segunda región que más crece porcentualmente, solo superada por Baleares. Únicamente retrocede el padrón en seis localidades murcianas, siendo las mayores caídas de población las de Ricote (-17,7%), Ojós (-15,6%) y Ulea (-8,3%). Por el contrario, los mayores aumentos en el número de habitantes se dan en Los Alcázares (+108,6%), Villanueva del Río Segura (+75,9%) y San Javier (+68,5%). En el año 2000 la localidad más pequeña de Murcia era Ojós, con 593 vecinos. Hoy lo sigue siendo con un descenso de 93 habitantes que sitúa su padrón en las 500 personas. En la Región de Murcia el 23,02% de la población tiene menos de 20 años, y el 15,46% tiene más de 65. De esta forma, es la comunidad con más población joven y con menos población mayor de toda España.

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NAVARRA En Navarra la población ha aumentado un 19,09% entre 2000 y 2018, con más de 100.000 habitantes de incremento. Aun así, el 52% de los municipios navarros (un total de 143) ha perdido población en este periodo, y hay hasta 45 localidades donde ese retroceso demográfico ha superado el 25%. Por el contrario, en 26 núcleos el padrón crece por encima del 50%. Las mayores caídas son las de Desojo (-47,92%), Güesa (-45,95%) y Piedramillera (-44,78%). En el extremo contrario, Valle de Egués ha visto cómo se padrón se ha incrementado un 784,75%, por el 477,99% de Berrioplano y el 215,39% de Orkoien. Estos tres municipios están a menos de veinte minutos en coche de Pamplona. En el año 2000 la localidad más pequeña de Navarra era Castillonuevo, con 22 vecinos. Hoy lo sigue siendo con 17, seguida de Orreaga (21). En la comunidad navarra hay 42 localidades con menos de 100 habitantes, siete más de las que había a principios de siglo. En Navarra el 20,70% de la población tiene menos de 20 años, y el 19,53% tiene más de 65. Sin embargo, en 33 localidades navarras no vive ningún niño de 0 a 4 años, y de éstas 22 tienen ya menos de 100 habitantes. Además, hay cuatro núcleos en los que ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años: Castillonuevo, Azuelo, Abaurrepea y Sarriés. Por otra parte, hay cinco municipios donde más de la mitad de sus habitantes supera los 65 años. Castillonuevo es el núcleo con más mayores, ya que 14 de sus 17 habitantes han superado esa barrera. Le siguen Azuelo (62,5%), Javier (60,38%), Armañanzas (54,44%) y Piedramillera (51,35%). De todas éstas únicamente Javier está por encima de los cien vecinos (106 al cierre de 2018).

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PAÍS VASCO En el País Vasco la población ha aumentado un 4,79% entre 2000 y 2018, con algo más de 100.000 habitantes de incremento. Apenas el 21,91% de sus municipios han perdido población en este periodo, y sólo en tres casos este retroceso demográfico ha superado el 25%: Harana (-34,20%), Elantxobe (-25,75%) y Belauntza (-25,55%). Por el contrario, en 19 núcleos el padrón crece por encima del 50%, y lo hace especialmente en Irura (+148,60%), Ribera Baja (+130,54%) y Alegría-Dulantzi (+106,7%). Curiosamente, en el caso del País Vasco se da un fenómeno que no se observa en ninguna otra zona de España. En el año 2000 tenía 4 municipios por debajo del centenar de habitantes: Orexa, Baliarrain, Arakaldo y Altzaga. En todos ellos el padrón ha aumentado por encima del 50% y hoy la localidad más pequeña de esta comunidad es Orexa con 123 vecinos. En el País Vasco el 18,36% de la población tiene menos de 20 años, y el 22,01% tiene más de 65. Irura es el municipio con mayor porcentaje de mayores, puesto que el 41% de sus vecinos ha superado los 65 años, mientras que en Altzaga, por el contrario, más de un 30% de la población tiene menos de 20 años.

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LA RIOJA En La Rioja la población ha aumentado un 19,49% entre 2000 y 2018, con más de 51.000 habitantes de incremento. Aun así, el 65,5% de sus municipios ha perdido población en este periodo, y hay hasta 60 localidades donde ese retroceso demográfico ha superado el 25%. Por el contrario, en 11 núcleos el padrón crece por encima del 50%. Las mayores caídas son las de Jalón de Cameros (-61,7%), Torrecilla sobre Alesanco (-61,54%) y Pinillos (-47,83%). Por el contrario, Anguciana crece un 864%, Matute un 304% y Sojuela un 265%. De los 51.000 habitantes que gana la comunidad, casi 30.000 se concentran en Logroño (+22.620) y Lardero (+7.010)- En el año 2000 la localidad más pequeña de La Rioja era Villarroya, con nueve vecinos. En 2018 lo seguía siendo con sólo cinco habitantes, lo que convierte a este núcleo en el más pequeño de España junto a Illán de Vacas (La Rioja). En este periodo, además, la comunidad ha pasado de tener 51 municipios con menos de 100 habitantes a tener 61. En La Rioja el 19,32% de la población tiene menos de 20 años, y el 20,71% tiene más de 65. Son datos parecidos a los de la media nacional, pero hay que tener en cuenta que en 54 localidades riojanas no vive ningún niño de 0 a 4 años y en 19 de ellas ese ‘vacío generacional’ se amplía hasta los 20 años. Además, se da la circunstancia de que en 42 núcleos de menos de 100 habitantes no hay niños menores de 5 años. A esto se suma que hay once municipios donde más de la mitad de sus habitantes supera los 65 años. Villarroya es el municipio con mayor porcentaje de mayores, puesto que el 80% de sus vecinos ha superado los 65 años.

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