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BASES CIENTÍFICAS PARA EL DISEÑO DE UN PROGRAMA DE EJERCICIOS PARA LA ESTENOSIS DEL CANAL LUMBAR AUTORES Juana Alañón Caballero (Fisioterapeuta de la Unidad de Rehabilitación del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid) Emilia Martín Sanz (Fisioterapeuta de la Unidad de Rehabilitación del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid) Mariano Tomás Flórez García (Jefe Unidad de Rehabilitación del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid) ÍNDICE INTRODUCCIÓN TRATAMIENTO Tratamiento conservador Tratamiento quirúrgico Tratamiento conservador frente a cirugía EVIDENCIAS CIENTÍFICAS SOBRE EJERCICIOS Indicaciones Tipos de ejercicio. Opciones terapéuticas Ensayos clínicos PROGRAMAS DE EJERCICIOS PROPUESTOS EJERCICIOS EN FLEXIÓN Detalles técnicos Número de ejercicios, repeticiones y frecuencia Material necesario Posiciones de partida Respiración Ejercicios incluidos EJERCICIO AERÓBICO O DE REACONDICIONAMIENTO FÍSICO Detalles técnicos Marcha en cinta rodante BIBLIOGRAFÍA Fecha última actualización: Octubre 2010 1

Estenosis de Canal

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Page 1: Estenosis de Canal

BASES CIENTÍFICAS PARA EL DISEÑO DE UN PROGRAMA DE EJERCICIOS PARA LA ESTENOSIS DEL CANAL LUMBAR

AUTORESJuana Alañón Caballero (Fisioterapeuta de la Unidad de Rehabilitación

del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid)

Emilia Martín Sanz (Fisioterapeuta de la Unidad de Rehabilitación del

Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid)

Mariano Tomás Flórez García (Jefe Unidad de Rehabilitación del

Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Madrid)

ÍNDICE

INTRODUCCIÓN TRATAMIENTO

Tratamiento conservador

Tratamiento quirúrgico

Tratamiento conservador frente a cirugía

EVIDENCIAS CIENTÍFICAS SOBRE EJERCICIOS Indicaciones

Tipos de ejercicio. Opciones terapéuticas

Ensayos clínicos

PROGRAMAS DE EJERCICIOS PROPUESTOS EJERCICIOS EN FLEXIÓN

Detalles técnicos

Número de ejercicios, repeticiones y frecuencia

Material necesario

Posiciones de partida

Respiración

Ejercicios incluidos

EJERCICIO AERÓBICO O DE REACONDICIONAMIENTO FÍSICO

Detalles técnicos

Marcha en cinta rodante

BIBLIOGRAFÍA Fecha última actualización: Octubre 2010

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Page 2: Estenosis de Canal

INTRODUCCIÓN

La estenosis del canal lumbar (ECL) es una causa relativamente frecuente

de dolor e incapacidad funcional, asociada en ocasiones a inestabilidad. Su

frecuencia se incrementa a medida que aumenta la edad (especialmente a

partir de la quinta y sexta décadas de la vida). Su incidencia exacta es

desconocida pero representa el diagnóstico más común asociado a cirugía

lumbar en pacientes ancianos. En Estados Unidos, aproximadamente 1 de

cada 1000 pacientes mayores de 65 años han sido sometidos a una

laminectomía por ECL1.

La ECL es un síndrome clínico complejo2. Este término se usa

habitualmente para referirse a pacientes que presentan síntomas relacionados

con una reducción de las dimensiones del canal raquídeo lumbar, con

disminución del espacio disponible para los componentes del sistema nervioso

alojados en su interior3. Normalmente ocurre como consecuencia de la

aparición de cambios artrósicos progresivos pero puede deberse a otras

muchas circunstancias. Esta definición anatómica es necesaria pero

insuficiente para determinar la gravedad de los síntomas ya que hay individuos

asintomáticos que pueden presentar grados variables de estenosis4,5 y, por otro

lado, pacientes sintomáticos con grados leves de ECL6. Su diagnóstico, aunque

no existen criterios radiológicos universalmente aceptados, ha aumentado en

los últimos años. Eso probablemente es debido a un mayor acceso a

determinadas pruebas de imagen7 y al envejecimiento progresivo de la

población8.

La ECL, desde el punto de vista de su origen, se clasifica en primaria y

secundaria. La forma primaria es poco frecuente y está relacionada con

alteraciones congénitas o trastornos del desarrollo postnatal que reducen el

calibre del canal lumbar. La secundaria aparece como consecuencia de

diversas enfermedades adquiridas en el curso de la vida. La forma secundaria

más habitual, la más común en las personas ancianas, es la relacionada con

alteraciones artrósicas, lentamente progresivas, que producen

sobrecrecimiento de algunas estructuras. Comienza, inicialmente, con

2

Page 3: Estenosis de Canal

desecación y pérdida de altura discal lo que termina originando hipertrofia de

elementos óseos y ligamentosos. Se puede asociar, en ocasiones, a

espondilolistesis y/o a deformidades en el plano sagital o coronal. La forma

adquirida afecta fundamentalmente a los últimos niveles de la columna lumbar,

sobre todo al espacio L4-L5. Puede ser mono o multisegmentaria y uni o

bilateral. Anatómicamente puede localizarse en la parte central del canal

lumbar, en el receso lateral y/o en la zona foraminal. En este último caso la raíz

afectada más a menudo es L5. Además de los cambios anatómicos la

estenosis de canal presenta un componente dinámico importante de modo que

el espacio disponible para los elementos neurológicos disminuye en carga y en

extensión y aumenta cuando se produce una distracción axial y en flexión6.

Desde el punto de vista fisiopatológico se ha relacionado también con la

presencia de alteraciones vasculares locales (alteraciones del retorno venoso

y/o isquemia) y con mediadores inflamatorios.

Existe dificultad para realizar con precisión el diagnóstico de ECL. Debido

a la habitual edad avanzada del paciente, puede coexistir con otros procesos

con los que habrá que hacer diagnóstico diferencial como artrosis de cadera o

de rodilla, claudicación vascular, neuropatía periférica, etc... Además es

frecuente el desacondicionamiento de la musculatura y las alteraciones de los

ligamentos de la columna.

Para efectuar el diagnóstico se recomienda basarse especialmente en la

historia clínica y en la exploración física. Los pacientes presentan síntomas

heterogéneos, a menudo con combinaciones variables de dolor lumbar y de

miembros inferiores, con sensación o no de acorchamiento9. El síntoma mas

comúnmente atribuido a la ECL, y el más característico aunque no todos los

pacientes lo presentan, es la claudicación neurógena10. También es

denominada pseudoclaudicación para diferenciarla de la claudicación vascular.

Como consecuencia de ello pueden ver limitada su capacidad de marcha11,12.

En otros casos aparecen síntomas radiculares. Todos estos síntomas pueden

ser uni o, más habitualmente, bilaterales y simétricos o no. Los pacientes

pueden referir dolor lumbar aunque el dolor más molesto suele ser el de las

extremidades inferiores. En el examen físico de la columna lumbar se puede

3

Page 4: Estenosis de Canal

encontrar una reducción inespecífica de la movilidad, sobre todo con limitación

de la extensión. A menudo se encuentra rigidez de algunos grupos musculares

como flexores de cadera y de rodilla. El examen neurológico suele ser normal

aunque pueden existir debilidad muscular y alteraciones sensitivas13.

En algunos casos, sobre todo cuando se van a plantear terapias

semiínvasivas o quirúrgicas, es preciso realizar exámenes complementarios,

como resonancia magnética, tomografía axial computarizada, mielografía o

pruebas electrodiagnósticas14,15. En diferentes trabajos, uno de ellos publicado

en 2007 y realizado con 150 personas, se considera que el diagnóstico de ECL

hay que basarlo, sobre todo, en los datos clínicos ya que las pruebas

radiológicas no han demostrado buena correlación entre síntomas y

alteraciones anatómicas, es decir, no diferencian bien individuos sintomáticos

de asintomáticos16-21. En población asintomática se ha encontrado que hasta el

20% de los individuos estudiados con pruebas de imagen presentan hallazgos

consistentes con estenosis de canal lumbar22,23. Por ello es muy importante

correlacionar la sintomatología y los hallazgos de la exploración física con los

datos de las pruebas de imagen cuando sea preciso un diagnóstico definitivo.

Aún así, en la práctica clínica, una de las pruebas de elección más habituales

para intentar visualizar cambios anatómicos que justifiquen la sintomatología en

estos pacientes, suele ser la resonancia magnética. El electrodiagnóstico se ha

considerado altamente específico y moderadamente sensible para el

diagnóstico de ECL y orienta sobre la posible discapacidad del paciente16.

La evolución de la ECL aún no es bien conocida. La creencia común de

que estos pacientes tienen síntomas invariablemente progresivos no se

sustenta cuando se analizan estudios sobre su historia natural. En 199224 se

observó, en 32 pacientes seguidos durante 4 años, que hasta el 70%

permanecían clínicamente estables mientras que un 15% experimentaba

mejoría importante y sólo en el 15% restante se producía algún

empeoramiento, en ningún caso grave. En diversas series de casos de ECL

tratados de modo conservador se ha visto que la sintomatología no

progresa25,26. Para un paciente concreto la evolución puede ser impredecible,

con periodos de estabilidad y de reagudización transitoria a lo largo del

4

Page 5: Estenosis de Canal

tiempo27. Según un estudio reciente de la North American Spine Society28 el

curso clínico de los pacientes sintomáticos con estenosis de canal lumbar ligera

o moderada puede ser favorable en 30-50% de casos. Se dispone de menos

datos sobre los casos con síntomas graves29.

TRATAMIENTO

En el momento actual la información procedente de estudios de alta

calidad metodológica es limitada y muchas terapias no han sido

suficientemente evaluadas1. Se han realizado numerosos estudios, la mayoría

de ellos de baja o moderada calidad metodológica, con el fin de conocer cuál

es el tratamiento más adecuado, tanto conservador como quirúrgico, para esta

afección tan frecuente. La conclusión a la que llegan la mayoría de los autores,

es que el tratamiento de elección, para pacientes con ECL que presenten

síntomas leves o moderados, es el conservador30-33.

Tratamiento conservador

Su denominador común incluye un programa de ejercicios terapéuticos,

teniendo en cuenta la historia clínica individual del paciente. Hasta el momento

no se ha conseguido demostrar, con estudios de alta evidencia científica, el

efecto beneficioso de terapias físicas pasivas como termoterapia, ultrasonido,

TENS, magnetoterapia, tracción lumbar, terapia manual, etc... No obstante, en

la mayoría de los trabajos publicados se han combinado los ejercicios con

algún otro tipo de terapia física o medicación, obteniéndose con ello resultados

favorables.

Ateniéndose a razones biomecánicas, todos los autores coinciden en

incluir en el programa de tratamiento ejercicios dirigidos a disminuir la lordosis

lumbar, con el fin de reducir la compresión de los elementos del sistema

nervioso presentes en el interior del canal lumbar y así ayudar a eliminar el

síntoma más típico en esta afección, la claudicación neurógena. Los ejercicios

de acondicionamiento físico general y de reeducación postural también pueden

mejorar la calidad de vida del paciente23,29.

5

Page 6: Estenosis de Canal

La mayoría de los pacientes con ECL sintomática son tratados

habitualmente con medidas conservadores, extrapolando los hallazgos de

estudios realizados en sujetos con dolor lumbar inespecífico o con radiculopatía

por hernia discal6. Entre ellas se emplean medidas farmacológicas (medicación

analgésica simple u opioide, antiinflamatorios no esteroideos, relajantes

musculares, calcitonina por vía nasal o subcutánea34,35, gabapentina ...),

modificación de la actividad, modalidades pasivas (terapia manual,

termoterapia, electroterapia analgésica, ortesis36...) o tratamientos activos

(ejercicios de fortalecimiento, ejercicios de estiramiento y ejercicios de

reacondicionamiento aeróbico como bicicleta o programas de marcha). Estos

tratamientos pueden combinarse entre sí. Como la evolución de los síntomas,

cuando ocurre, es lenta es recomendable siempre un ensayo de tratamiento

conservador37.

En pacientes que no responden a las medidas anteriores se pueden

utilizar, con beneficio limitado, tratamientos semiínvasivos como infiltraciones

epidurales de corticoides, con diferentes técnicas38-41. Puede ser una opción

razonable antes de plantearse la cirugía o en pacientes que no pueden ser

operados. Sólo han demostrado eficacia a corto-medio plazo en ensayos

clínicos42.

Tratamiento quirúrgico

La cirugía es otra opción terapéutica para la ECL43, siempre que no

existan contraindicaciones por otros motivos. Se reserva para tratar pacientes

seleccionados con síntomas progresivos, persistentes o graves, que produzcan

limitación funcional importante y reducción de la calidad de vida, que no se

hayan controlado suficientemente con tratamiento conservador. La técnica más

común es la laminectomía descompresiva44,45, para reducir la compresión de las

raíces nerviosas afectadas. Con ella suele producirse alivio, sobre todo del

dolor radicular o de la claudicación intermitente, con tasas de éxito superior al

60-70%14,15,23,29,37,46. En pacientes con afectación de varios niveles algunos

autores recomiendan asociar fusión, para evitar provocar inestabilidad, aunque

6

Page 7: Estenosis de Canal

eso aumenta la tasa de complicaciones. Se han propuesto muchas otras

técnicas quirúrgicas pero todavía no han sido suficientemente evaluadas47.

Las complicaciones graves de la cirugía descompresiva no son

frecuentes y la mortalidad es muy baja48. Su aparición es más habitual en

pacientes de edad avanzada y con presencia de comorbilidad49. La asociación

de depresión, diabetes mellitus, alteraciones cardiovasculares u otras

alteraciones que afecten la capacidad de caminar (como artrosis de cadera) y

la presencia de escoliosis o fracturas vertebrales previas son predictivas de

resultados desfavorables tras cirugía50-53. Por el contrario, en los pacientes con

importante estenosis radiológica los resultados son más favorables51. En

algunos estudios se ha observado que los beneficios de la cirugía en las fases

iniciales pueden deteriorarse ligeramente con el paso del tiempo37. En un

ensayo clínico controlado aleatorizado54 no se encontró que la realización de un

programa estructurado de rehabilitación postquirúrgico fuera superior a la

simple recomendación de permanecer activo.

Tratamiento conservador frente a cirugía

En los últimos años se han publicado diversos estudios comparativos de

los resultados obtenidos con cirugía y con tratamiento conservador en

pacientes con ECL sintomática. A continuación comentamos los resultados de

los más importantes.

Atlas et al26,55,56 publicaron, entre 1996 y 2005, los resultados de un

estudio prospectivo observacional de cohortes no aleatorizado denominado

Maine Lumbar Spine Study. Comparaban los resultados de 81 pacientes con

ECL intervenidos mediante laminectomía con los de 67 pacientes tratados de

modo conservador. Los resultados se analizaron a corto plazo (al año)55, a

medio plazo (4 años)56 y a largo plazo (8-10 años)26. Al año de seguimiento

había mejorado significativamente el dolor en el 55% de los pacientes

intervenidos quirúrgicamente frente al 28% de los no operados. Los resultados

funcionales también fueron superiores en el grupo de pacientes

laminectomizados. La superioridad relativa de la cirugía disminuyó

7

Page 8: Estenosis de Canal

progresivamente con el paso del tiempo pero a los 10 años los resultados aún

seguían siendo ligeramente superiores en los casos intervenidos.

Amundsen et al en 200025 y, posteriormente, Mariconda et al en 200257 y

Athiviraham y Yen en 200758 publicaron también estudios prospectivos, no

aleatorizados o parcialmente aleatorizados, que mostraron asimismo ligera

superioridad de los resultados de la cirugía comparados con los del tratamiento

conservador. No obstante estos trabajos presentaban limitaciones

metodológicas importantes. Además otros estudios59,60, también con

deficiencias metodológicas, no habían demostrado diferencias significativas

entre ambos tipos de tratamientos.

Malmiivara et al61 publicaron, en 2007, los resultados del primer ECCA

comparativo entre pacientes con ECL tratados mediante varios tipos de cirugía

(50 pacientes) con pacientes tratados de modo conservador (44 pacientes).

Estos autores, en el seguimiento realizado a los dos años, observaron mayor

nivel de mejoría en el grupo intervenido en grado de incapacidad (medido por la

escala de incapacidad por dolor lumbar de Oswestry) y en la intensidad del

dolor lumbar y de miembros inferiores. Sin embargo, la capacidad para caminar

mejoró de forma similar en ambos grupos.

El estudio SPORT62 representa un importante paso adelante en la

evaluación de tratamientos quirúrgicos frente a tratamientos conservadores en

los pacientes con diversas patologías de columna lumbar, entre ellas la ECL46.

Se trata de un estudio multicéntrico y prospectivo que combina un grupo

aleatorizado (289 pacientes) con una cohorte observacional (365 pacientes). El

tratamiento quirúrgico realizado fue una laminectomía posterior estándar,

efectuada a pacientes sin inestabilidad. El tratamiento conservador consistió en

los cuidados usuales (sesiones de fisioterapia, educación, enseñanza de

ejercicios domiciliarios y medicación antiiflamatoria no esteroidea por vía oral)

aunque algunos pacientes podían recibir, si se consideraba necesario, otros

fármacos incluyendo infiltraciones. El grupo tratado quirúrgicamente mostró

resultados superiores a los pacientes no intervenidos en lo referente a dolor,

función, satisfacción y calidad de vida relacionada con la salud. Sin embargo, el

8

Page 9: Estenosis de Canal

estudio presentaba algunos puntos débiles como un alto grado de

entrecruzamiento y un seguimiento corto, de sólo dos años.

Según los datos procedentes de los estudios antes mencionados no hay

todavía suficiente información, basadas en la evidencia, favorable a la cirugía

frente al tratamiento conservador en la ECL En conclusión, aunque los

tratamientos quirúrgicos parecen ligeramente mejores aún no hay datos

concluyentes, procedentes de suficientes estudios de calidad metodológica

elevada, que indiquen que los resultados de la cirugía son claramente

superiores al tratamiento conservador. Como la historia natural es, a menudo,

favorable y el riesgo de la cirugía puede ser elevado en determinados

pacientes parece aconsejable realizar inicialmente un periodo de tratamiento

conservador, al menos durante 3-6 meses, en pacientes con síntomas ligeros o

moderados. La cirugía podría proporcionar una resolución más rápida de los

síntomas, aunque el efecto beneficioso suele disminuir con el paso del tiempo.

EVIDENCIAS CIENTÍFICAS SOBRE EJERCICIOS

Indicaciones

Existe un marcado consenso sobre un enfoque conservador inicial, en el

tratamiento de la ECL leve o moderada, frente al tratamiento quirúrgico, pese a

los buenos resultados de este último, ya que se ha comprobado que a largo

plazo, se asemejan los resultados de ambas terapias.

En un estudio realizado con 144 pacientes, aplicando a la mitad de ellos

un tratamiento conservador y a la otra mitad cirugía, tras un seguimiento de 10

años, se observó que, aunque en un principio se obtienen mejores resultados

en el grupo quirúrgico, con el transcurso del tiempo, ambos grupos se

igualan46,60. Al obtenerse resultados similares con ambos tratamientos a largo

plazo, es lógico que la terapia inicial para la ECL en estadíos no graves, será la

que presente menor riesgo, la menos invasiva, la de mayor facilidad de

aplicación y de menor coste económico, como es la terapia conservadora.

Muchos autores la consideran, como la más adecuada para controlar y prevenir

9

Page 10: Estenosis de Canal

el progreso de los síntomas23,26,29,44,56,57,60,61,63-68. Además, también se ha

comprobado que, si fracasara el tratamiento conservador y hubiese que recurrir

posteriormente a la cirugía, no se perdería ni disminuiría su efecto beneficioso

al efectuarlo más tarde25.

Una guía publicada en 2007, recomienda también el tratamiento

conservador inicial, mediante terapia física y ejercicios, por haberse encontrado

evidencias de que pueden ser eficaces y ayudar a controlar los síntomas,

considerándose una buena estrategia de tratamiento69.

En 2006 se publicó un estudio, de 36 pacientes que presentaban ECL

grave, que recibieron tratamiento físico consistente en aplicación de ultrasonido

y onda corta, más un programa de ejercicios en flexión, con un seguimiento de

6 y 10 meses. Se vio que, para este tipo de pacientes, el tratamiento

conservador no se mostraba eficaz70. Muchos autores recomiendan la cirugía

cuando los síntomas del paciente son graves, cuando no se ha obtenido

mejoría con el tratamiento conservador o cuando la calidad de vida del paciente

se encuentra disminuida14,15,23,29,55,71-74. Otros especifican que se recomienda

cirugía cuando el dolor se considera intolerable y no controlable con la

medicación y cuando los síntomas neurógenos en miembros inferiores

persisten, sin respuesta, tras recibir un tratamiento conservador durante 8-12

semanas65.

En resumen, el ejercicio está indicado de entrada como tratamiento en

pacientes con ECL leve o moderada y su uso es discutible en casos de

intensidad grave75.76. En esta última circunstancia su puede valorar, tras intentar

reducir el dolor con otras medidas, añadir ejercicios antes de indicar cirugía77.

Tipos de ejercicio. Opciones terapéuticas

Los ejercicios más utilizados para el tratamiento de la ECL son los de

flexión. Se ha comprobado, mediante estudios de imagen (mielografías

dinámicas, imágenes tridimensionales) que la flexión aumenta las dimensiones

10

Page 11: Estenosis de Canal

del canal medular lumbar y que la extensión las disminuye, pudiendo provocar

los síntomas típicos de claudicación neurógena11,61,63,66,67,71,73,78-83.

También se han empleado los ejercicios de Williams y Mckenzie. En un

estudio Onel et al84 refieren un 75% de buenos resultados, aplicado junto con

otras terapias físicas, en 145 pacientes.

Otras alternativas que se han propuesto son: ejercicios de estabilización

lumbo-pélvica25,67,78,80-82, ejercicios en cuadrupedia80, reentrenamiento

propioceptivo78-82, ejercicios en piscina63,66,78,83 o ejercicios de flexibilización de la

cadera cuando su rango articular esté disminuido,78,79,82,85.

Ensayos clínicos

Sólo se han publicado 4 ensayos clínicos con grupo control y

aleatorizados (ECCA) que analizan la eficacia de diferentes pautas de

ejercicios en pacientes con ECL y todos en los últimos 5 años.

El primer ECCA se publicó en 2006. Whitman et al79 distribuyen al azar a

55 pacientes con ECL en 2 grupos. Uno de los grupos (Grupo I) realizó

ejercicios en flexión, ultrasonidos a nivel subterapéutico y marcha en cinta

rodante (sin inclinación) durante 6 semanas. El otro grupo (Grupo II) recibió

tratamiento mediante terapia manual (columna vertebral, pelvis y miembros

inferiores), ejercicios para mejorar la flexibilidad, fuerza y coordinación y macha

en tapiz rodante con descarga parcial del peso corporal. Además todos los

pacientes fueron instruidos en un programa de ejercicios domiciliario y se les

recomendó caminar diariamente. A las 6 semanas el Grupo II mostró una

mejoría algo superior al Grupo I pero las diferencias desaparecieron en el

seguimiento posterior. No observaron diferencias significativas en dolor,

distancia de marcha y escalas de valoración funcional.

En 2007 Pua et al85 comparan, en un ECCA con 68 pacientes, el efecto

de la combinación de un programa de ejercicios domiciliarios en flexión con dos

alternativas de ejercicio aeróbico: 1) marcha en cinta rodante con descarga

11

Page 12: Estenosis de Canal

parcial del peso; o 2) bicicleta estática a un ritmo confortable (50 a 60 ciclos por

minuto) en una postura con flexión anterior. Ambos grupos mejoraron pero sin

diferencias significativas entre ellos.

En 2009 Koc et al86 aleatorizan a 29 pacientes con ECL en 3 grupos: 1)

aplicación de compresas calientes, ultrasonido y estimulación eléctrica nerviosa

transcutánea (TENS) durante 2 semanas; 2) inyección epidural; y 3) grupo

control. Todos los grupos realizaron un programa domiciliario de ejercicios en

flexión combinando estiramiento y fortalecimiento y, durante 2 semanas,

tomaron diclofenaco. Los 2 grupos mejoraron pero sin diferencias significativas

entre ellos a medio-largo plazo. A corto plazo (2 semanas) se observó una

mejoría significativa en el grupo al que se realizó infiltración epidural pero las

diferencias desaparecían en las siguientes semanas.

Finalmente, en 2010, se publicó el único ECCA que compara un

programa de ejercicios con un grupo control. Goren et al87 distribuyen al azar a

45 pacientes en 3 grupos (cada uno con 15 pacientes): 1) ultrasonido más

ejercicio; 2) ultrasonido simulado y ejercicio; y 3) grupo control, sin tratamiento.

Después de 3 semanas de tratamiento observaron una mejoría significativa en

los grupos que realizaron ejercicios respecto al control en el dolor y la limitación

funcional. El grupo que además recibió ultrasonido real disminuyó el consumo

de analgésicos pero no hubo diferencias en el resto de parámetros. El

programa de ejercicios se basó en estiramientos (de iliopsoas, isquiotibiales,

cuádriceps y musculatura paravertebral), fortalecimiento (abdominales y

báscula posterior) y bicicleta estática con baja intensidad (60% de la frecuencia

cardiaca máxima para su edad y con un ritmo de 50-60 ciclos por segundo) y

efectuada en posición de flexión del tronco.

En resumen, la limitada evidencia de alta calidad disponible procedente

de ECCA sugiere que los programas de ejercicios en flexión son eficaces, que

la infiltración epidural produce un efecto significativo a corto plazo pero que no

se mantiene, que el ejercicio aeróbico en bicicleta estática tiene una eficacia

similar a caminar con cinta rodante y que la utilidad de las modalidades pasivas

es limitada.

12

Page 13: Estenosis de Canal

PROGRAMAS DE EJERCICIOS PROPUESTOS

Ejercicios en flexión

Están basados en la descripción realizada por Bodack y Monteiro en

200183, ya que es el programa de ejercicios más utilizado y recomendado.

Además es el único que ha demostrado eficacia en ensayos cínicos. Tiene la

ventaja adicional de que los ejercicios están bien descritos (forma de realizarlo,

posición de partida, respiración, número de repeticiones, tiempo de

mantenimiento, etc...).

El programa propuesto incluye: 1) ejercicios de estiramiento; 2) ejercicios

de fortalecimiento; y 3) educación postural.

Los estudios biomecánicos han demostrado que la flexión de la columna

aumenta de forma dinámica el área transversal del canal raquídeo mientras

que la extensión la disminuye88,89. Como consecuencia del aumento de

diámetro antero-posterior del canal raquídeo en flexión, existe mayor espacio

para las estructuras nerviosas y mejora la microcirculación, lo que permite a los

pacientes una mejor tolerancia al programa de ejercicios90. Esto podría

disminuir el dolor, la limitación funcional y aumentar el perímetro de marcha91.

Ejercicios de estiramiento. Su objetivo es disminuir las fuerzas de extensión

que, sobre la columna lumbar, pueden provocar músculos retraídos. Se

dirigirán a estirar la musculatura cuya retracción o hipoextensibilidad provoca

hiperlordosis lumbar y/o anteversión de la pelvis. Los grupos musculares que

deben estirarse son los flexores de cadera, los extensores vertebrales y los

isquiotibiales.

Ejercicios de fortalecimiento. El objetivo es fortalecer los músculos que

producen retroversión de la pelvis y que, por tanto, disminuyen la lordosis

lumbar. Los principales músculos retroversores son el glúteo mayor (que

tracciona hacia abajo el plano posterior de la pelvis) y los músculos

13

Page 14: Estenosis de Canal

abdominales (recto mayor del abdomen y oblicuos mayores y menores) cuya

contracción aproxima la pelvis hacia el tórax (traccionando del plano anterior de

la pelvis hacia arriba).

Educación postural. Pretende que el paciente sea consciente de la influencia

que el grado de lordosis lumbar tiene en la aparición de los síntomas para que

pueda evitar las posiciones en hiperlordosis y buscar posturas que faciliten la

corrección parcial de la lordosis. Su objetivo es disminuir la lordosis lumbar al

caminar y durante las actividades de la vida diaria25,63,67,78,81-83.

Detalles técnicos

- Número de ejercicios, repeticiones y frecuencia

Por tratarse de una población de edad avanzada y con posibles

patologías asociadas, el programa de ejercicios siempre será individualizado,

teniendo en cuenta las posibilidades y características del paciente, aumentando

progresivamente el número de ejercicios, así como las repeticiones, según se

vaya comprobando su tolerancia.

Se proponen un total de 9 ejercicios. Se recomiendan 10 repeticiones

para los ejercicios de fortalecimiento muscular, manteniendo la posición entre 3

y 5 segundos. En cuanto a los ejercicios de estiramiento, se realizarán de 3 a 5

repeticiones, y se mantendrá la posición entre 15 y 30 segundos79.

En cuanto a la frecuencia del programa de ejercicios, se propone

realizarlos entre 3 y 5 días por semana, y mantenerlo durante un periodo de 6 a

12 semanas65,79.

- Material necesario

Este programa está diseñado para que, una vez aprendido, tras la

enseñanza y supervisión por parte de un fisioterapeuta, lo pueda realizar el

paciente solo en su domicilio. Se requiere, únicamente, de una ropa adecuada

14

Page 15: Estenosis de Canal

(ligera, cómoda, que permita la realización de todos los movimientos), una

superficie semi-dura para los ejercicios que se realizan en decúbito supino

(puede ser una esterilla, una colchoneta, una alfombra, una manta en el suelo,

etc...), una silla, una pared y, a ser posible, una bicicleta estática o unos

simples pedales. El mayor inconveniente que suelen presentar algunos

pacientes, por su avanzada edad o por su obesidad, es el de tumbarse y

levantarse del suelo. Como alternativa, los ejercicios que deben realizarse en

decúbito supino, podrán hacerse sobre la cama, sobre un colchón o base, lo

más duro posible. Cuando realice estos ejercicios, el paciente puede colocar

una almohada bajo su cuello y cabeza, si se encuentra más cómodo así.

- Posiciones de partida

Se realizarán ejercicios en decúbito supino, sedestación y bipedestación,

si el paciente tolera bien todas estas posiciones. Cuando el paciente se

encuentre en decúbito supino, mantendrá todo el cuerpo alineado, los

miembros superiores apoyados y dirigidos hacia los pies, las rodillas y las

caderas flexionadas, y los pies un poco separados entre sí y apoyados en el

suelo. Puede poner una almohada bajo el cuello y la cabeza si se encuentra

más cómodo con de ese modo.

En el ejercicio de bipedestación, el paciente apoyará la espalda en la

pared, los brazos quedarán colocados a lo largo del cuerpo y mantendrá los

pies un poco separados entre sí, con los talones a una distancia de la pared de

unos 15 cm. La cabeza y el cuello deben permanecer en posición neutra y

alineados con respecto al tronco. Podrá apoyar la cabeza en la pared, si para

ello no requiriese hacer una extensión cervical.

- Respiración

Como la mayor parte de los pacientes que sufren ECL no están muy

habituados a hacer ejercicio físico es conveniente darles unas pautas a nivel

respiratorio, para evitar la congestión, la tensión y la fatiga. Como norma

15

Page 16: Estenosis de Canal

general, se recomienda inspirar profundamente antes de realizar cada ejercicio

y espirar despacio durante la ejecución del mismo.

- Ejercicios incluidos

Nuestro programa se compone de un total de 9 ejercicios, ordenados de

acuerdo a la posición de partida, para así conseguir que el paciente tenga que

cambiar menos veces de postura.

En decúbito supino se realizarán los siguientes ejercicios:

Ejercicio 1: Báscula pélvica

Ejercicio 2: Estiramiento de isquiotibiales

Ejercicio 3: Estiramiento de paravertebrales lumbares

Ejercicio 4: Estiramiento del psoas

Ejercicio 5: Fortalecimiento de glúteo mayor

Ejercicio 6: Fortalecimiento de recto anterior

Ejercicio 7: Fortalecimiento de oblicuos mayor y menor

En sedestación:

Ejercicio 8: Estiramiento de paravertebrales lumbares

En bipedestación:

Ejercicio 9: Báscula pélvica

EJERCICIO AERÓBICO O DE REACONDICIONAMIENTO FÍSICO

Su objetivo es mejorar la forma física y prevenir el desacondicionamiento

progresivo que se produce en muchos pacientes con claudicación neurógena.

Un objetivo secundario es disminuir la obesidad. El aumento del diámetro

abdominal debilita los músculos abdominales facilitando la hiperlordosis y los

coloca en una situación de desventaja mecánica que dificulta los ejercicios de

16

Page 17: Estenosis de Canal

fortalecimiento. Existen varias alternativas pero las más estudiadas y

recomendadas son: 1) marcha basculando la pelvis que se puede realizar en

cinta rodante (con diferentes grados de inclinación); y 2) bicicleta

estática63,66,73,78,79,81-83. Ambas pueden realizarse en ligera flexión del tronco lo

que disminuye la aparición de síntomas. Las dos parecen tener una eficacia

similar.

Detalles técnicos

En la bicicleta estática, el paciente se sentará a una altura adecuada,

teniendo en cuenta las posibles patologías asociadas de rodilla o cadera. Por lo

general, al pedalear no debería extender del todo las rodillas. Si siente

molestias en la espalda o en los miembros inferiores, el manillar se colocará

más adelantado para conseguir una mayor flexión lumbar.

En el ejercicio de marcha en cinta rodante, si el paciente se siente

inseguro, al principio caminará sujetándose a la barra delantera para conseguir

mayor flexión lumbar y estabilidad. Cuando sea capaz de hacerlo de ese modo,

caminará agarrándose a las barras laterales basculando la pelvis, y el objetivo

final, será lograr caminar sin apoyo, basculando la pelvis, en la cinta rodante o

sobre el suelo. En un principio se le puede permitir caminar con cierta flexión

de tronco, lo cual se intentará reeducar hasta conseguir la postura erguida. Si

no se dispone de cinta rodante, o el paciente no puede caminar sobre ella y

requiere de cierta flexión lumbar, podrá utilizar un andador con ruedas para la

reeducación de la marcha92.

Es conveniente que el paciente realice estos dos ejercicios, pero si le

costara mucho al principio, los podría alternar. Es importante que mantenga

con el tiempo, al menos uno de ellos de manera rutinaria, ya que el beneficio

de ambos se asemeja85. Como el ejercicio en bicicleta estática (ejercicio 10) no

provoca el desencadenamiento de los síntomas, por mantener la columna

lumbar en flexión, se recomienda realizar este ejercicio a diario, aumentando el

tiempo progresivamente, según la tolerancia individual14.

17

Page 18: Estenosis de Canal

En cuanto al último ejercicio (ejercicio 11), de marcha basculando la

pelvis, no se ha especificado “en cinta rodante”, ya que se considera que no en

todos los centros de rehabilitación disponen de ella, ni los pacientes en su

domicilio. La reeducación sobre la misma tiene ventajas e inconvenientes.

Como ventajas podemos reseñar que es una forma de controlar objetivamente

determinados parámetros tales como la velocidad, la distancia recorrida y la

posibilidad de variar la inclinación con respecto al plano horizontal. En nuestra

práctica clínica nos hemos encontrado también con algunos inconvenientes,

como son la tensión, la inseguridad y la inestabilidad que le provoca al paciente

caminar sobre una superficie en movimiento, así como la diferencia existente

entre dicha superficie lisa y la que se va a encontrar en la calle. Por eso,

consideramos que si se dispone de cinta rodante y al paciente le ayuda en su

reeducación, debería utilizarse, pero de no ser así, la reeducación podría

hacerse también en el gimnasio o en la calle.

Para caminar sobre la cinta rodante, pondremos el parámetro de

velocidad, lo más parecido posible a la habitual del paciente, según él nos

indique. En cuanto a la inclinación, observaremos cuál es la más adecuada en

cada caso individual, que coincidirá con aquella en la que se consiga mayor

tiempo de marcha. La reeducación irá encaminada a enseñarle a bascular la

pelvis mientras camina, y progresar consiguiendo el mayor tiempo posible de

marcha en llano (inclinación 0º). Detendremos el ejercicio en cuanto el paciente

nos indique que han aparecido los síntomas que normalmente provocan su

claudicación (dolor, adormecimiento, parestesias o debilidad en miembros

inferiores). En este caso, se sentará e inclinará la espalda hacia delante, en

flexión, para aumentar el calibre del canal lumbar. Lo normal es que en pocos

minutos desparezcan totalmente los síntomas. Al ser una técnica muy utilizada

en esta patología, tanto en el diagnóstico como en la evaluación y el

tratamiento, se incluye a continuación un apartado específico sobre la marcha

en cinta rodante para el paciente con ECL.

Marcha en cinta rodante

18

Page 19: Estenosis de Canal

No podemos dejar de hacer referencia a un gran apartado especial en

esta patología, como es el de la marcha, por ser, la claudicación neurógena,

uno de los síntomas principales y más preocupantes que presenta el paciente.

Por ello, muchos autores han investigado sobre este tema y aunque seguimos

sin encontrar estudios de alta calidad metodológica, nos aportan cierta

información que puede resultar interesante a la hora de plantear el tratamiento

para estos pacientes, con el objetivo de conseguir aumentar su perímetro de

marcha.

Se ha considerado que, para estimar el estado funcional del paciente,

puede utilizarse el test de la cinta rodante, por considerarse seguro, sencillo,

válido y capaz de proporcionar evidencias objetivas, cuantificables,

reproductibles y fiables18,93-96. Algunos autores, para llegar a esta conclusión,

utilizaron en la cinta rodante inclinaciones de 0º, 10º y 15º y observaron alta

especificidad (92,3%) al comprobar que el paciente aumenta su tiempo de

marcha al caminar con una inclinación de 15º respecto a los 0º, estando

significativamente asociado con la presencia de ECL95. La distancia recorrida

se correlaciona con el área del saco dural96.

Se ha intentado determinar cuál es la mejor posición para conseguir que

estos pacientes puedan caminar durante más tiempo, sin que reaparezcan sus

síntomas. En un principio, se valoró la posibilidad de marcha en cinta rodante,

con una inclinación que, fisiológicamente le hiciera disminuir la lordosis lumbar

y con ello, se redujera la compresión sobre los elementos del interior del canal

lumbar.

En un estudio se midió, mediante ultrasonidos que proporcionaban

imágenes tridimensionales del tórax y de la pelvis, la cinemática lumbar,

caminando en cinta rodante con inclinación de 0º y 10º, en 22 adultos, Se

concluyó que no se evidenciaban cambios significativos a nivel de la pelvis y

que la inclinación de la rampa ejercía mayor influencia en la zona torácica,

aumentando la amplitud de rotación axial en el plano frontal y transverso97.

19

Page 20: Estenosis de Canal

También se estudió la cinemática de la columna lumbar durante la

marcha, para determinar la importancia de la postura durante la deambulación.

Se observó el desplazamiento tridimensional desde la última vértebra dorsal

hasta el sacro, caminando a cuatro velocidades distintas y se concluyó que, el

rango de movimiento lumbar no excedió del 40% y que los rangos de rotación e

inclinación en la columna lumbar se incrementaban con la velocidad de la

marcha. Sin embargo, en el plano sagital, los rangos de movimiento no

cambian de manera significativa con la velocidad98.

Parece ser que caminar en llano, sin ninguna inclinación (0º), o hacerlo

con una inclinación pequeña (+10º, -10º) no ejerce influencia significativa en el

tiempo de marcha del paciente con ECL97,99.

Sin embargo, en un estudio en el que utilizaron una inclinación de 30º,

obtuvieron resultados positivos, al igual que con el ejercicio en bicicleta

estática, por conseguir, en ambos casos, mantener mayor flexión de tronco.

Concluyen que, aunque no queda claro cuál es la inclinación exacta que puede

mejorar más los síntomas en este tipo de pacientes, caminar en posición de

flexión de tronco disminuye la lordosis y consigue aumentar el perímetro de

marcha100.

Son bastantes los autores que recomiendan el ejercicio de marcha en

cinta rodante, especialmente con rampa, sin especificar grados de inclinación,

con el fin de aumentar la flexión lumbar e incrementar las dimensiones del

canal medular, disminuyendo con ello, la claudicación neurógena14,66,82,83.

En un estudio reciente, realizado con 80 pacientes, se observa la

influencia en el perímetro de marcha, caminando en cinta rodante en diferentes

situaciones (0º, 10º, -10º, 0º con 1/5 de descarga de su peso corporal, y 0º con

10 kg de carga). Se concluye que los cambios de inclinación en la rampa

afectan poco al tiempo total de marcha, que la carga adicional hace disminuir

ese tiempo y que la descarga parcial del peso corporal sí consigue aumentar su

perímetro de marcha99. Son muchos los autores que también consideran que la

20

Page 21: Estenosis de Canal

descarga parcial del peso corporal puede ayudar a aumentar el tiempo de

marcha en pacientes con ECL78,79,95.

En un estudio controlado y aleatorizado, con 64 pacientes, se formaron

dos grupos para comparar si la efectividad de la marcha en descarga superaba

la del ejercicio en bicicleta estática. Se comprobó que ambos grupos

conseguían iguales beneficios. Todos ellos realizaban, a su vez, un programa

específico de ejercicios85.

Otro estudio, también reciente, concluye que la terapia posicional en

pacientes con ECL y limitación de la marcha, consistente en caminar con un

andador de cuatro ruedas, les ofrece la posibilidad a corto plazo, de disminuir

sus síntomas en miembros inferiores, al inducirles a una flexión lumbo-sacra,

disminuyendo el dolor y aumentando su tiempo de marcha, con un mínimo

coste y riesgo92.

Por todo lo anteriormente expuesto, nosotros consideramos importante

incluir en el programa de ejercicios, la marcha, si es posible.

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