12
XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014 1 Implicaciones medioambientales de la biosolarización en invernaderos de pimiento Fernández, P 1 ; Pascual, J.A 2 y Lacasa, A 3 (1) Oficina Comarcal Agraria Vega Alta (OCA). Consejería de Agricultura y Agua. Ctra de Murcia s/n. 30.530 Cieza (Murcia). Tel 968760705. Mail: [email protected] (2) Departamento de Suelo, Agua y Manejo de Residuos orgánicos. CEBAS-CSIC. Campus Universitario de Espinardo. 30100 Murcia. (3) Departamento de Biotecnología y Protección de Cultivos. IMIDA. C/ Mayor s/n 30150 La Alberca (Murcia). RESUMEN La biosolarización del suelo en invernaderos de pimiento ( Capsicum annuum L.) supone una estrategia de control de enfermedades telúricas (Phytophthora capsici y/o parasítica y incognita), de vegetación adventicia y de fenómenos de fatiga muy adecuada para mantener buenos niveles productivos en sistemas de monocultivo prolongado. Este trabajo pretende evaluar las repercusiones de la aplicación de cantidades importantes de materia orgánica, hasta 100 t/ha, en estos agrosistemas sobre la calidad del suelo y en el medio ambiente. El ensayo de lixiviación de nitratos en condiciones controladas se realizó sobre columnas de suelo inalterado los cuales habían sido sometidos a biosolarización de primer año (100 t/ha de enmiendas) comparándose con el efecto sobre un suelo de referencia tratado con bromuro de metilo (BM) en la dosis de 30 g/m2 + plástico VIF, sin la aplicación de enmiendas orgánicas. El contenido en agua lixiviada en las muestras biosolarizadas fue de 5,3 L/columna, mientras que la columna desinfectada con bromuro de metilo lixivió 9,9 litros, de un total de 29,7 litros aplicados en ambos casos. El total de nitrato lixiviado para cada uno de los tratamiento fue de 10,0 g NO3-/columna para el tratamiento con la enmienda y 25,7g NO3-/columna para el tratamiento con ausencia de enmendantes orgánicos. La actividad biológica medida en el suelo biosolarizado fue superior a la del suelo tratado con BM, sobre todo en los dos primeros perfiles de la columna (hasta 20 cm de profundidad) Palabras clave: Capsicum annuum, materia orgánica, bromuro de metilo, actividad biológica, actividades enzimáticas.

Estimación de las extracciones de nutrientes en el cultivo ... · cultivo en los invernaderos ecológicos de la comarca del Campo de Cartagena, de modo que en todo momento los resultados

Embed Size (px)

Citation preview

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

1

Implicaciones medioambientales de la biosolarización en invernaderos de pimiento Fernández, P

1; Pascual, J.A

2 y Lacasa, A

3

(1)

Oficina Comarcal Agraria Vega Alta (OCA). Consejería de Agricultura y Agua. Ctra de Murcia s/n. 30.530 Cieza (Murcia). Tel 968760705. Mail: [email protected]

(2) Departamento de Suelo, Agua y Manejo de Residuos orgánicos. CEBAS-CSIC. Campus Universitario

de Espinardo. 30100 Murcia. (3)

Departamento de Biotecnología y Protección de Cultivos. IMIDA. C/ Mayor s/n 30150 La Alberca (Murcia).

RESUMEN

La biosolarización del suelo en invernaderos de pimiento (Capsicum

annuum L.) supone una estrategia de control de enfermedades telúricas

(Phytophthora capsici y/o parasítica y incognita), de vegetación adventicia y de

fenómenos de fatiga muy adecuada para mantener buenos niveles productivos

en sistemas de monocultivo prolongado. Este trabajo pretende evaluar las

repercusiones de la aplicación de cantidades importantes de materia orgánica,

hasta 100 t/ha, en estos agrosistemas sobre la calidad del suelo y en el medio

ambiente. El ensayo de lixiviación de nitratos en condiciones controladas se

realizó sobre columnas de suelo inalterado los cuales habían sido sometidos a

biosolarización de primer año (100 t/ha de enmiendas) comparándose con el

efecto sobre un suelo de referencia tratado con bromuro de metilo (BM) en la

dosis de 30 g/m2 + plástico VIF, sin la aplicación de enmiendas orgánicas. El

contenido en agua lixiviada en las muestras biosolarizadas fue de 5,3

L/columna, mientras que la columna desinfectada con bromuro de metilo lixivió

9,9 litros, de un total de 29,7 litros aplicados en ambos casos. El total de nitrato

lixiviado para cada uno de los tratamiento fue de 10,0 g NO3-/columna para el

tratamiento con la enmienda y 25,7g NO3-/columna para el tratamiento con

ausencia de enmendantes orgánicos. La actividad biológica medida en el suelo

biosolarizado fue superior a la del suelo tratado con BM, sobre todo en los dos

primeros perfiles de la columna (hasta 20 cm de profundidad)

Palabras clave: Capsicum annuum, materia orgánica, bromuro de metilo, actividad biológica,

actividades enzimáticas.

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

2

INTRODUCCIÓN

El pimiento es un monocultivo en más del 90% de los invernaderos del

Campo de Cartagena (Murcia) y del sur de la provincia de Alicante (Lacasa y

Guirao, 1997), siendo Phytophthora spp. (capsici y parasitica) el principal

patógeno fúngico del cultivo (Lacasa et al., 1999; Ros et al., 2008). La

presencia de estos hongos, la de Meloidogyne incognita y el efecto de la fatiga

del suelo, generada por la reiteración del cultivo en el mismo suelo, había

motivado que todos los invernaderos, manejados convencionalmente, se

desinfecten anualmente con bromuro de metilo (98:2 a 60 g/m2 sellado con

plástico de polietileno de 0,05mm) desde 1985 (Lacasa et al., 1999) hasta 2005

(Guerrero et al., 1999), en que el bromuro de metilo quedó autorizado en forma

de usos críticos para una parte de la superficie, dejándose de utilizar en 2007 y

siendo sustituido por otros desinfectantes químicos en la actualidad.

Los invernaderos ecológicos que no disponen de estas herramientas, y

que debido al ciclo de cultivo tan largo no pueden realizar rotaciones, precisan

de técnicas compatibles con el medio ambiente para poder obtener unas

producciones suficientes. La biosolarización se ha propuesto como una técnica

eficaz de desinfección de suelos frente a patógenos telúricos. Sin embargo, la

aplicación de importantes cantidades de materia orgánica y su reiteración en el

tiempo plantea la necesidad de abordar el estudio de aspectos fundamentales

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

3

sobre el suelo y su impacto sobre el medioambiente. Entre ellos, una de las

serias dudas existentes ante la bondad de la biosolarización en cuanto a

desinfección de suelos, es el potencial riesgo de lixiviación de nitratos y el

posible aporte de metales pesados (Ros et al., 2008).

La lixiviación de nutrientes en sistemas de fertirrigación localizada está

directamente relacionada con el movimiento de cada nutriente en el volumen

de suelo humedecido por los goteros, donde se desarrollan las raíces de las

plantas. Los nutrientes presentan una distribución tridimensional, dependiendo

del movimiento de cada nutriente dentro del bulbo, de diversos factores entre

los que cobran especial interés las propiedades físicas y físico-químicas del

suelo, dosis y fórmula del insumo, volumen de riego y caudal de descarga del

gotero, influyendo directamente el desarrollo y distribución de raíces en el suelo

según régimen de riego y posición de goteros.

El objetivo del trabajo fue medir, en condiciones controladas, a partir de

columnas de suelo inalterado, la lixiviación de nitratos y los principales

parámetros biológicos en suelos biosolarizados en comparación con suelos

desinfectados con bromuro de metilo (BM), que no incluían la aportación de

enmiendas.

MATERIALES Y MÉTODOS

El ensayo de lixiviación de nitratos en condiciones controladas se realizó

sobre columnas de suelo inalterado sometido a biosolarización de primer año

con una dosis de enmienda en peso fresco de 100 t/ha (70 t/ha estiércol de

ovino y 30 t/ha de gallinaza), siempre comparándose con el efecto sobre un

suelo control tratado con bromuro de metilo en la dosis de 30 g/m2 + plástico

VIF (filmes virtualmente impermeables), sin la aplicación de enmiendas, que

era el método habitual de desinfección de los suelos. El suelo del invernadero

experimental es representativo de los suelos medios de cultivo de pimiento en

el Campo de Cartagena de textura fina y niveles medios de materia orgánica

(Cuadro 1). Se procedió a la toma de tres replicas de cada tratamiento,

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

4

mediante sondeo de suelo inalterado en cilindros de 80 cm de largo y 30 cm de

ancho (Figura 1). En el perfil de la columna se procedió a la colocación de

diferentes sondas de succión a distintas profundidades, una superficial y otras

3 cada 10 cm de profundidad, tipificadas como perfiles S, V, Y y Z. Durante el

cultivo, se evaluó el volumen de drenaje y de nitratos, determinando, en cada

uno de los perfiles, la calidad biológica de los mismos mediante parámetros

biológicos generales (ATP y CO2) y específicos (actividad fosfatasa,

glucosidasa y ureasa).

Figura 1. Esquema de la columna de suelo inalterada para la medida del potencial de lixiviación

En cada una de las columnas se plantó una planta de pimiento cv.

‘Requena’ la cual fue fertirrigada con la misma disolución con la que se riega el

cultivo en los invernaderos ecológicos de la comarca del Campo de Cartagena,

de modo que en todo momento los resultados obtenidos a escala de laboratorio

pudiesen ser extrapolables a suelos naturales. En cada riego se midió la

cantidad de disolución suministrada y la concentración de lixiviado obtenido en

un periodo de tiempo determinado, a través de un ICP (Espectrometría de

Masas con fuente de Plasma de Acoplamiento Inductivo). La toma de muestras

a lo largo de la columna se realizó con el fin de estudiar si existía algún cambio

destacable en cuanto al contenido de nitrógeno a lo largo de la columna, así

como la potencial incidencia del contenido en oxígeno/CO2 perfundido a lo

largo de la columna de modo que este afectase a potenciales inmovilizaciones.

Para determinar posibles variaciones en la producción de biomasa se pesaron

Solución nutritiva

Medida de volumen lixiviado Medida de macro y micronutirentes

V Y Z S

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

5

todas las recolecciones de frutos y al final del ensayo se pesó la planta entera.

En cada uno de los muestreos se medió peso fresco, peso seco (medido en

estufa a 65ºC hasta peso constante) y nitrógeno (MAPA, 1994). Al finalizar el

ensayo se analizó el suelo en cada uno de los perfiles de la columna (MAPA,

1994).

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La evolución del volumen de lixiviados a lo largo del ensayo fue variable,

presentando valores superiores en el tratamiento con bromuro de metilo en

comparación con el biosolarizado (Fig. 2). La dinámica del agua en las

diferentes columnas fue distinta, presentando las biosolarizadas una tasa de

infiltración superior, al menos en los perfiles superiores, en la línea de lo

obtenido por (Fernández et al., 2004; Rincón et al., 2005) en lisímetros con

cultivo de pimiento bajo invernadero, donde los primeros 25 cm de profundidad

la densidad aparente disminuye frente al mismo suelo sin biosolarizar. El hecho

de que los suelos con BM lixiviaran más cantidad puede deberse a la mayor

capacidad de retención hídrica que presentan los suelos estercolados, lo que

se manifiesta en una mayor retención de agua, disminuyendo la lixiviación de

ésta (Herai et al., 2006). El nitrato lixiviado a lo largo del ensayo también fue

superior en los suelos no enmendados, tal y como muestran (Abaas, 2012) en

columnas de suelo esterilizado frente a suelos naturales (Fig. 2). El volumen

total lixiviado en las muestras de suelo biosolarizado fue de 5,3 ± 0,5 L,

mientras que el suelo bromurado lixivió 9,9± 0,7 L, de un total de 29,7 litros

aplicados en ambos casos (Fig. 3a). Las cantidades totales lixiviadas fue de

10,0 ± 1,2 g NO3-/columna para el tratamiento con estiércol y 25,7 ± 3,0 g NO3

-

/columna para el tratamiento con ausencia de enmendantes orgánicos (Fig.

3b), resultados similares a los obtenidos por Rincón et al., 2005, en lisímietros

con cultivos de pimiento bajo invernadero, donde después de la aplicación de

hasta 100 t/ha y año de estiércoles presentaron tasas de lixiviación inferiores a

los suelos que no recibieron cantidad alguna. La concentración de nitratos

también fue muy variable a lo largo del periodo de muestreo presentando unos

valores máximos de 5,8 y 10,6 g NO3-/L, para columnas biosolarizadas y no

biosolarizadas, respectivamente, lo que quiere decir que durante el transcurso

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

6

de la disolución por la columna ocurren fenómenos de adsorción/desorción en

feedback, condicionada por la elevada actividad biológica y enzimática, sobre

todo ureasa (Fig. 4b). Abaas, 2012 justifica la menor lixiviación de formas

recalcitrantes del nitrógeno, especialmente de elevado peso molecular, en

columnas a la inmovilización microbiana. Esta mayor retención del nitrógeno en

la columna podría permitir a la planta un mayor aprovechamiento del mismo,

pudiendo permitir el reducir las aplicaciones nitrogenadas y, además, en caso

de realizarse, el riesgo de lixiviación es significativamente menor en cuanto a

concentración de nitratos (Ma et al., 2008).

0

2

4

6

8

10

12

14

18 días 8 días 7 días 7 días 5 días 5 días 5 días 8 días 11 días

Período de lixiviación

NO

3-

(g)

0

1

1

2

2

3

3

4

Vo

lum

en

lix

ivia

do

(L

)

Volumen lixiviado Biosolarización Volumen lixiviado Bromuro de metilo Nitratos Biosolarización Nitratos Bromuro de metilo

Figura 2. Medida del volumen medio de lixiviación y de nitratos por periodo de toma de muestra en la

columna de suelo inalterada. Media ± error estándar.

Volumen lixiviado

0

2

4

6

8

10

12

Período acumulado de lixiviación

Vo

lum

en

to

tal

de l

ixiv

iad

os (

L)

biosolarizacion Bromuro de metilo (a)

Acumulado de lixiviación de nitrato

0

5

10

15

20

25

30

35

Período acumulado de lixiviación

To

tal

de N

O3- l

ixiv

iad

os (

g)

biosolarizacion Bromuro de metilo (b)

Figura 3. Medida del volumen acumulado de lixiviación y de nitrato durante todo el periodo de ensayo en

la columna de suelo inalterada. Media ± error estándar

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

7

ATP

0

200

400

600

800

1000

1200

1400

1600

Biosolarización BM

ATP

4(n

g/g)

SVYZ

(a)

Ureasa

0,0

0,1

0,2

0,3

0,4

0,5

0,6

Biofumigación BM

mm

ole

s N

-NH

4+

g-1

su

elo

se

co h

-1

S

V

Y

Z

(b)

β-Glucosidasa

0,00

0,05

0,10

0,15

0,20

0,25

0,30

0,35

0,40

0,45

0,50

Biosolarización BM

mm

ole

s P

NP

g-1

su

elo

se

co h

-1

SVYZ

(c)

Fosfatasa

0,0

0,5

1,0

1,5

2,0

2,5

3,0

3,5

Biosolarización BM

mm

ole

s P

NP

g-1

su

elo

se

co h

-1

S

V

Y

Z

(d)

Figura 4. Contenido de ATP, actividad ureasa, ß-glucosidasa, y fosfatasa en las columnas de suelo

biosolarizadas y tratadas con BM en los diferentes perfiles de la columna de suelo. Media ± error estándar.

La aplicación de la técnica de biosolarización de primer año, la cual

incluía una dosis de enmienda aplicada de 100 t/ha y donde se tendría que

esperar un mayor contenido de nitrógeno lixiviado que en el caso del suelo de

referencia, se observa unos niveles absolutos de lixiviación 2,5 veces inferior

que el suelo de referencia (tratado con BM). Estos resultados ponen de

manifiesto que esta técnica de desinfección en cultivos protegidos, donde no

hay lluvia y por lo tanto se puede manejar el riego para limitar el lavado, no

aumenta los riesgos de lixiviación de nitrato, en comparación con otras técnicas

que no incluyan la aportación de enmiendas orgánicas (Delgado, 1998;

Delgado y Lemunyon, 2006; Diacono y Montemurro, 2010; Fernández et al.,

2004; Rincón et al., 2005). Con estos resultados parece lógico establecer una

discusión, al menos de cara al nuevo Reglamento de agricultura ecológica bajo

invernadero pendiente de publicar, sobre el límite legal de enmiendas

orgánicas a aplicar.

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

8

Se midió la actividad biológica del suelo mediante parámetros generales

tales como el ATP o respiración basal, así como parámetros específicos como

la actividad enzimática de tipo hidrolasa, relacionadas con el ciclo del carbono,

nitrógeno y fósforo (Nannipieri et al., 1990), sobre el perfil del suelo al final del

cultivo. Para el conjunto de parámetros medidos la calidad biológica del suelo

es mayor en el suelo biosolarizado que en el suelo tratado con BM.

En el caso del ATP, se pone de manifiesto como las dos capas más

superficiales muestran unos valores de actividad significativamente mayores

que los del suelo tratado con BM (Fig. 4a). Para el primer perfil de suelo el valor

de ATP del suelo con biosolarización es más de 6 veces superior al del

bromurado. Este hecho, es debido al efecto depresor del BM que no sólo

reduce la actividad microbiana actuando como desinfectante sobre del suelo en

el momento de su aplicación, sino que a pesar del tiempo transcurrido, casi

nueve meses desde su aplicación, todavía muestra efectos depresores sobre la

calidad, poniendo de manifiesto el efecto negativo y biocida de este modo de

desinfección (Tello y Lacasa, 1997). La aplicación de estiércoles para la

desinfección mediante biosolarización produce un aumento en los parámetros

biológicos y bioquímicos medidos (Pascual et al., 1997).

Se midieron otros parámetros biológicos y bioquímicos (Fig. 4). Se

demuestra cómo las dos capas más superficiales del suelo muestran unos

valores de actividad biológica significativamente mayores que los del suelo

tratado con BM, sobre todo, para las actividades ureasa y fosfatasa (Fig. 4b y

d). Parece, por tanto, puesto de manifiesto el efecto negativo que tiene el BM

sobre las poblaciones de microorganismos, medidos a través de varios

parámetros biológicos (Gamliel et al., 2000; Nannipieri et al., 1990). Un estudio

de la actividad biológica medida mediante la respiración de CO2, mostró que la

actividad microbiana en todos los suelos en los que se aplicó el BM tuvo una

incidencia negativa en la respiración respecto a los suelos biofumigados; con

excepción, del ultimo punto, o punto de muestreo más profundo, donde no se

encontraron diferencias entre ambos tratamientos, ya que a esta profundidad

no existe incidencia de la acción de la materia orgánica, así como tampoco

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

9

parece que el BM tenga algún efecto, ya que no debe de alcanzar estos niveles

de profundidad (Fig. 5).

La producción de frutos, en peso fresco, fue de 219,1 ± 21,8 y 188,0 ±

45,6 g/planta para los suelos biosolarizados y bromurados, respectivamente. El

peso fresco del total de biomasa desechada, incluyendo frutos, hojas y resto de

planta, no presentó diferencias significativas entre tratamientos con valores de

producción de 625,7 ± 38,2 en las columnas con enmiendas y de 572,1 ± 55,5

g/total biomasa desechada, para el tratamiento con bromuro de metilo sin

adición de materia orgánica. En cada uno de los órganos vegetativos

muestreados se analizó el nitrógeno, no encontrando diferencias significativas

entre tratamientos, tanto en hojas como frutos (Fig. 6). El análisis de la planta,

a partir de tallo y ramas, presentó, para la tesis biosolarizada, un valor de

nitrógeno de 2,89 ± 0,12%, y 2,63 ± 0,12%, para la bromurada.

CO2

0

100

200

300

400

500

600

1 2 3 4 5 6 7

Semanas

mg

CO

2/1

00 g

su

elo

y

día

Biosolarizacion S Bromuro de Metilo S

CO2

0

50

100

150

200

250

300

350

400

1 2 3 4 5 6 7

Semanas

mg

CO

2/1

00

g s

ue

lo

y d

ía

Biosolarizacion V Bromuro de Metilo V

CO2

0

50

100

150

200

250

300

1 2 3 4 5 6 7

Semanas

mg

CO

2/1

00 g

su

elo

y

día

Biosolarizacion Y Bromuro de Metilo Y

CO2

0

20

40

60

80

100

120

140

1 2 3 4 5 6 7

Semanas

mg

CO

2/1

00 g

su

elo

y

día

Biosolarizacion Z Bromuro de Metilo Z

Figura 5. Evolución semanal de la emisión de CO2 en cada uno de los perfiles de la columna de suelo

inalterado, siendo S el más superficial y Z el más profundo. Media ± error estándar.

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

10

0

1

2

3

4

5

6

7

Antes solución 13-abr 11-may 30-may

Fecha de muestreo

% N

(s.m

.s.)

Biosolarización BM (a)

0

1

2

3

4

5

6

11-may 17-may 26-may

Fecha de muestreo

% N

(s.m

.s.)

Biosolarización BM (b)

Figura 6. Evolución de la concentración de nitrógeno en hoja (a) y frutos (b). Media ± error estándar.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Abaas, E.; Hill, P.W.; Roberts, P.; Murphy, D.V.; Jones, D.L. 2012. Microbial activity

differentially regulates the vertical mobility of nitrogen compounds in soil. Soil Biology &

Biochemistry. Volumen: 53, pp: 120-123.

Delgado, J.A. 1998. Sequential NLEAP simulations to examine effect of early and late planted

winter cover crops on nitrogen dynamics. J. Soil Water Conserv. 53:241-244.

Delgado, J.A. Lemunyon, F. 2006. Nutrient Management. Pp 1157-1160. In R. Lal (ed).

Enciclopedia Soil Sci. Markel and Decker, New York, pp 1924. NY

Diacono, M.; Montemurro, F. 2010. Long-term effects of organic amendments on soil fertility. A

review. Agronomy for Sustainable Development Volumen: 30, Número: 2, pp. 401-422.

Fernández P.; Guirao P.; Ros, C.; Guerrero, M.M.; Quinto V.; Lacasa, A. 2004. Efecto de la

biofumigación con solarización sobre las características físicas y químicas del suelo.

Desinfección de suelos en invernaderos de pimiento. Publicaciones de la Consejería de

Agricultura, Agua y Medio Ambiente. Región de Murcia, 259-277.

Gamliel, A., Austerweil, M., Kritzman, G., 2000. Non-chemical approach to soil borne pest

management. Organic amendments. Crop Protection 19, 847-853.

Guerrero, M.M., Lacasa, C.M., Ros, C., Martínez, V., Fenoll, J., Torres, J., Beltrán, C.,

Fernández, P., Bello, A., Lacasa, A. 2009. Pellets de brasicas como enmiendas para

biosolarización de invernaderos de pimiento. Actas de Horticultura, 54, 424:429.

Herai Y, Kouno K, Hashimoto M, Nagaoka T. 2006: Relationships between microbial biomass

nitrogen, nitrate leaching and nitrogen uptake by corn in a compost and chemical fertilizer-

amended regosol. Soil Sci. Plant Nutr., 52, 186–194.

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

11

Lacasa, A.; Guirao, P. 1997. Investigaciones actuales sobre alternativas al uso del bromuro de

metilo en pimiento en invernaderos del Campo de Cartagena. En “Posibilidad de alternativas

viables al bromuro de metilo en pimiento en invernadero”. Publicación de la Consejería de

Medio Ambiente, Agricultura y Agua. Región de Murcia. Jornadas 11: 21-36.

Lacasa, A.; Guirao, P.; Guerrero, M.M., Ros, C., López, J.A., Bello, A., Bielza, P. 1999.

Alternatives to methyl bromide for sweet pepper cultivation in plastic green houses in South-

east Spain. In “Alternatives to Methyl Bromide for the Southern European Countries. Heraklion.

Creta. Grecia 7-10 december. Proceedings: 133-135.

Ma, L.R., Malone W, Jaynes D. B., Thorp, K. R., Ahuja K. R. 2008. Simulated Effects of

Nitrogen Management and Soil Microbes on Soil Nitrogen Balance and Crop Production Soil

Sci. Soc. Am. J., September 30, 2008; 72(6): 1594 - 1603.

MAPA, 1994. Métodos oficiales de análisis de suelos y aguas para riego. In Ministerio de

Agricultura, Pesca y Alimentación (Ed). Métodos Oficiales de Análisis. Vol. III.

Nannipieri, P., Ceccanti, C., Ceverlli, S., Matarese, E., 1980. Extraction of phosphatase, urease,

protease, organic carbon and nitrogen from soil. Soil Science Society America Journal 44,

1011-1016.

Nannipieri, P., Ceccanti, B., Grego, S., 1990. Ecological significance of the biological activity in

soil. In Bollag, J.M. and Stotzky, G. (Eds) Soil biochemistry, vol. 6 eds. Dekker, New York, pp.

293-356.

Pascual, J.A., Hernandez, M.T., Ayuso M., García C., 1997. Changes in the microbial activity of

arid soils amended with urban organic wastes. Biology and Fertility of Soils 24, 429-434.

Tello, J.; Lacasa, A. 1997. Problemática fitosanitaria del suelo en el cultivo del pimiento en el

Campo de Cartagena. En “Posibilidad de alternativas viables al bromuro de metilo en pimiento

en invernadero”. Publicación de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura y Agua. Región

de Murcia. Jornadas 11: 11-17.

Rincón, L.; Pérez, A.; Abadía, A.; Sáez, J.; Pellicer, C. 2005. Fertirrigación localizada en un

cultivo de pimiento grueso de invernadero en producción integrada. II Lixiviación de nutrientes.

Agrícola Vergel, 75-79 pp.

Ros, M., García, C., Hernandez, M.T., Lacasa, A., Fernández, P., Pascual, J.A. 2008. Effects of

biosolarization as methyl bromide alternative for Meloidogyne incognita control on quality of soil

under pepper. Biol Fertil Soils.

XI Congreso de SEAE: «Agricultura ecológica familiar». Vitoria-Gasteiz (Álava), 1-4 octubre 2014

12

ANEXO: CUADROS

Parámetro Bio S(1)

Bio V Bio Y Bio Z BM S(2)

BM V BM Y BM Z

pH 8,00±0,02 8,24±0,07 8,29±0,10 8,47±0,20 8,18±0,25 8,22±0,07 8,08±0,06 8,05±0,05

C.E. (dS/m) 0,81±0,29 0,57±0,27 0,86±0,14 0,74±0,33 0,58±0,25 0,69±0,26 0,855±0,12 0,93±0,16

N (Kjeldahl) (%)

0,35±0,08 0,30±0,02 0,21±0,05 0,19±0,07 0,25±0,05 0,23±0,04 0,21±0,06 0,17±0,08

P asimilable (mg/Kg)

496,0±49,0 389,3±97,7 215,7±93,1 91,3±8,4 342,3±25,0 301,7±50,0 272,7±59,8 127,5±39,6

K asimilable (meq/100g)

3,89±0,32 3,12±0,26 2,82±0,41 2,42±0,85 3,63±0,24 1,85±1,13 1,76±0,34 1,33±0,48

Nitratos (mg/Kg)

251,6±18,9 188,4±80,2 152,3±39,3 106,27±66,0 220,7±51,7 154,7±96,2 145,9±70,0 122,7±9,9

Amonio (mg/Kg)

4,40±1,90 3,60±0,40 3,60±0,29 4,47±1,95 3,50±0,33 4,87±0,55 5,10±2,12 3,80±1,13

C orgánico (%)

3,35±0,40 2,95±0,49 2,09±0,52 1,72±0,04 2,51±0,12 2,52±0,36 2,34±0,64 1,54±0,26

(1) Bio S= Perfil S de la columna biosolarizada

(2) BM S= Perfil S de la columna tratada con bromuro de metilo

Cuadro 1. Características del suelo al final del ensayo en cada uno de los perfiles de la columna. Media±error estándar.