7
Cuando el sol, con sus rayos, adorna la tierra, Y dora los mares y pinta la hierba, Me dice al oído, muy suave. una voz: << Existe un Dios Cuando brilla la luna, y su luz blanquecina Bañando lo creado, al mundo da vida, Se deja sentir a mi lado una voz: << Existe un Dios >> Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban alegres al Ser que las hizo, Me dicen gozosas con célica voz: << Existe un Dios >> Cuando pienso, oh buen Padre, en tu amor tan inmenso Que has dado a tu Hijo a morir cual cordero, Te alabo, oh Eterno, y voy de ti en pos, ¡Te alabo, oh Dios! ... Cuando aspiro el perfume que exhalan las flores, Tan bellas al día, tan puras de noche, En tono armonioso me dice una voz: << Existe un Dios >> Cuando elevo hacia arriba mi vista y contemplo Los mundos millares que pueblan los cielos, Me encuentro pequeño, y escucho la voz: << Existe un Dios >> Cuando veo los cielos, obra de tus manos, La luna y estrellas que Tú has formado... << Cuán grande es tu nombre >> escucho la voz, << ¡Cuán grande, oh Dios! >> Francisco A. Franco Brousse Existe un Dios Año XIX Núm 13 Domingo 26 de marzo de 2017

Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

  • Upload
    others

  • View
    2

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

Cuando el sol, con sus rayos, adorna la tierra,Y dora los mares y pinta la hierba,

Me dice al oído, muy suave. una voz:<< Existe un Dios

Cuando brilla la luna, y su luz blanquecinaBañando lo creado, al mundo da vida,

Se deja sentir a mi lado una voz:<< Existe un Dios >>

Cuando aves, en bosques, entonan sus trinosY alaban alegres al Ser que las hizo,Me dicen gozosas con célica voz:

<< Existe un Dios >>

Cuando pienso, oh buen Padre, en tu amor tan inmenso

Que has dado a tu Hijo a morir cual cordero,Te alabo, oh Eterno, y voy de ti en pos,

¡Te alabo, oh Dios! ...

Cuando aspiro el perfume que exhalan las flores,

Tan bellas al día, tan puras de noche,En tono armonioso me dice una voz:

<< Existe un Dios >>

Cuando elevo hacia arriba mi vista y contemploLos mundos millares que pueblan los cielos,Me encuentro pequeño, y escucho la voz:

<< Existe un Dios >>

Cuando veo los cielos, obra de tus manos,La luna y estrellas que Tú has formado...

<< Cuán grande es tu nombre >> escucho la voz,

<< ¡Cuán grande, oh Dios! >>

Francisco A. Franco Brousse

Existe un Dios

Año XIX Núm 13Domingo 26 de marzo de 2017

Page 2: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

1 2

En Shalom

Me dedico a

Para mi

Para mi

Shalom es

Shalom es...

Para miShalom es

En Shalom

Me dedico a

Maya Campos Farfán

Bertha de Alger

Carlos Alger

Somos médicos de los seminaristas, venimos al Instituto, asistimos con los adultos mayores.

Ayudámos en todo lo que se nos pide

Soy Médico Dermatólogo

Mi familia

Soy diseñadora y maestra de profesión. Consejera y emprendedora de corazón. Esposa, hija, herma-

na, tía y madre adoptiva de tiempo completo.

Soy Médico Internista

Mi familia. Son las manos de mi Señor para los apapachos y las palabras de ánimo, en las

buenas y en las malas.

Mi familia, mi segunda casa

- El salmo 91 y Romanos 8 son inyección de aliento a mi vida y cada tiempo y etapa tiene su versículo.

- En esta etapa de mi vida: “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va

contigo; no te dejará, ni te desamparará” Dt 31:6“Y le dijo Jehová: Yo he oído tu oración y tu ruego que has hecho en mi presencia. Yo he santificado esta casa que tú has edificado, para poner mi nombre en ella para siempre; y en ella estarán mis

ojos y mi corazón todos los días.” 1 Re 9:3“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sus-

tentaré con la diestra de mi justicia.” Is 41:10

Me dedico a

Mi versículofavorito es

Dios quiere que escuches las promesas que tiene para ti¿Éstas preparado?

ConociendonosCon los niños

Page 3: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

3 4

Hebreos 11:1 dice “la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” (Reina Valera, 1960) La fe es certeza, convicción: la seguridad de que aquello que no vemos es real y verdadero. La confianza en que Dios actúa, con el poder de su Palabra, haciendo visible y tangible lo que hoy no vemos.La misma acción de Dios en nuestras vidas, nos ha transformado de tener nuestra confianza en los bienes materiales, que solamente nos sentíamos seguros respaldados por los haberes, en quienes podemos descansar en las manos de nuestro Padre Celestial, cual dijera el salmista “estos confían en carros y aquellos en caballos; mas nosotros del Nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria” Salmo 20:7. Mi fe se ha originado en Dios. Él me la ha dado como un regalo al oír su Palabra y experimentar en mi propia vida Su fidelidad. Puedo confiar en Dios porque Él ha sido fiel a Su Palabra y a sus promesas. Puedo hacer memoria de cuántas veces Dios ha sido fiel a Sus dichos, recordando lo cual, se fortalece mi confianza en Él. Como cuando nos dice: “Me invocará y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia…” Salmo 91:15. No nos dice que la vida será miel sobre hojuelas, no. Dios nos promete estar con nosotros en la angustia, en la situación difícil que nos agobia, ahí mismo estará y nos librará. Mi experi-encia con Dios me ha confirmado que Él ha estado conmigo en toda situ-ación difícil o dolorosa; Él me ha confirmado su amor y me ha librado de la angustia: por eso sé y confío en que puedo depositar toda mi ansiedad en Sus manos, refugiarme en Su presencia, gozarme en Su compañía y depender de Su poder. Así, la fe, nuestra fe, se origina en Dios, como un regalo que recibimos al oír su Palabra: Romanos 10:17 dice “Así pues, la fe nace al oír el men-saje…” (Versión Dios Habla Hoy), crece al experimentar en nuestro diario vivir su cumplimiento y se fortalece al recordar cómo Él ha sido fiel a sus promesas. Por eso del Nombre de Jehová nuestro Dios hacemos memoria, e impulsamos a nuestra propia alma a bendecir al Señor y que no olvide ninguno de sus beneficios: perdón, sanidad, rescate, honra, favores, mi-sericordias y hasta nos rejuvenece como el águila (Salmo 103: 1-5)Esta fe nuestra, confianza y certeza en la misericordia de Dios, va más allá de la experiencia de la presencia de Dios en la vida cotidiana: esta fe en el sacrificio de Cristo Jesús nos pone en paz con Dios de manera tal que nos justifica delante del Padre Celestial. El mensaje que nos cautivó, respecto a que “Dios amó tantoal mundo, que dio a su Hijo único, para que todo

aquel que cree en Él no muera sino tenga vida eterna” (Juan 3:16. Dios habla hoy) y que nos hizo revisar nuestras vidas y reconocer cuán lejos estábamos de Dios y cuán ajenos éramos a la vida espiritual y que nos convenció que ya no podíamos vivir sin Él, nos llevó también a aceptar que solamente los méritos de Jesús son suficientes para acercarnos y reconcili-arnos con la santidad del Padre Celestial. Este mensaje sembrado por el Espíritu Santo en nuestro corazón, provocó en nosotros la convicción de que estábamos alejados del Padre, que nuestros propios méritos, si alguno tuviésemos, no eran suficientes y que Jesús ya había asumido el castigo por nuestro pecado en la cruz. ¿Cómo resistirse a tanto amor, si Él ya había abierto el camino a la reconciliación y había tendido el puente con su pro-pio cuerpo, su propia sangre, su propia vida?Este es el mensaje que hizo nacer la fe en mi vida. Su amor y misericordia gestaron la confianza, certeza y seguridad en Jesús: el autor y consumador de la fe; Él es quien origina y perfeccionará mi fe, pues se propuso salvar-nos de la muerte eterna, aunque eso significara, como dice Filipenses 2:7, tomar forma de siervo, hacerse humano como tú y como yo. En segundo lugar, asumir la muerte de cruz, a pesar de la vergüenza que ello repre-senta, quiso afrontarla, sufriendo en nuestro lugar (Hebreos 12;2) y sopor-tar el abandono del Padre, como lo vemos en Marcos 15:34. Sin embargo, su resurrección gloriosa es la confirmación del Padre y del Espíritu Santo de su victoria sobre el pecado y sobre la muerte. Pues aún ahora sigue intercediendo por cada uno de nosotros delante del Padre Celestial (He-breos 7:25-26) Por eso creo profundamente en que Su sacrificio único es suficiente, hecho una sola vez y con efectos eternos (Hebreos 7:27). Como dice aquel himno “Mi fe descansa en buen lugar, no en una religión”.Hermanos: creamos en Dios; confiemos en Él porque a ninguna de sus promesas ha faltado. Él dijo que estaría con nosotros todos los días hasta el fin el mundo. Y así como nuestros hermanos mayores se mantuvieron firmes como viendo al Invisible, sigamos dando de gracia lo que de gracia hemos recibido: compartamos nuestra fe!!Creemos en Dios, creámosle a Dios y demos de gracia lo que de gracia recibimos.

Guillermina Fraire Romero

Artículo

LA FE

Page 4: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

5 6

¡Un nuevo comienzo! Debemos aprender a vivir cada día, cada hora, hasta cada minuto, como si fuera un comienzo nuevo, como una oportunidad única de ha-cerlo todo nuevo. Imaginemos que pudiéramos vivir cada momento cargados de vida nueva. Imaginemos que pudiéramos vivir cada día como un día lleno de promesas. Imaginemos que pudiéramos ir avanzando a través de los años como si estuviéramos escuchando siempre una voz que nos dijera: “Tengo un trozo de mi gracia para ti y estoy impaciente de entregártelo, vamos sigue adelante”.

¿Es posible que nuestra imaginación pueda llevarnos a la verdad de nuestras vi-das? ¡Sí, es posible! El problema es que nuestro pasado que se va haciendo cada vez más largo, nos diga: “Todo eso ya lo sabes tú; ya lo has visto todo, sé realista; el futuro no será más que una repetición del pasado. Trata de sobrevivir lo mejor que puedas”. “No hay nada nuevo bajo el sol” ¿Qué hemos de hacer entonces? Abrir nuestros corazones a la voz que resuena sobre los valles y los montes de nuestras vidas, diciéndonos: “Déjenme que les muestre dónde vivo en medio de mi pueblo. Mi nombre es Dios con vosotros”. “Yo enjugaré las lágrimas de sus ojos; ya no habrá más muerte, ni luto, ni tristeza. El mundo del pasado ha desaparecido” (Ap.21:2-5).

AQUELLO QUE FUE, YA ESSon tantas las cosas que han pasado en nuestras vidas con las que nos sentimos incómodos, que lamentamos, nos irritan, nos confunden, o al menos hacen que tengamos sentimientos encontrados. Todos estos sentimientos se agolpan y se cubren bajo la sombra de algunas frases: “Si hubiera”. “Si hubiera actuado de otra manera, si hubiera dicho otra cosa, si hubiera acudido a Dios a tiempo. La otra es: “¿Qué pasaría sí?” ¿Qué pasaría si esto o aquello sucediera? Todos estos “si” pue-den saturar a tal punto nuestras mentes que nos hagan ciegos para tantas cosas bellas que también nos rodean. Oportunidades únicas que si las dejamos pasar sería una pena. Los enemigos reales de nuestra vida son los “hubiera debido” y los “si”. Ellos son los que nos tienen atados a un pasado inalterable y hacen que un futuro impredecible nos arrastre. Por eso el sabio, autor de este libro, dice, después de tantas experiencias pasadas y cosas vividas: “Aquello que fue, ya es; y aquello que ha de ser; fue ya”. Él había dicho momentos antes: “Todo tiene su tiempo”. Este tiempo que ya pasó, dejó su estela de luz o de sombra, pero ya pasó; ha dejado su huella, pero ya pasó; tuvo su costo de tristeza y alegría, pero ya pasóFue motivo de muchas interrogantes, luchas y confrontaciones con Dios, pero ya pasó, “y Él no nos trajo hasta acá para volver atrás”. Años después Jesús diría: El que pone sus manos en el arado y mira atrás no es apto”. Con esto quiere decir,.

que Dios nos ha acompañado en todo momento; lo hayamos notado o no; haya-mos sentido su presencia o no; hayamos escuchado su voz que nos animaba o no. Y aquello que habrá de acontecer, sucederá; pero no bajo el estigma de lo oculto, de lo que nos atormenta porque no lo conocemos, sino de aquello que vendrá como fruto de quién tiene nuestro tiempo en sus manos. No lleves cargas innecesarias del pasado que te hace sufrir y del mañana que te puede asustar. El pasado es algo que se vivió, y el mañana es el tiempo que no hemos vivido; entonces, de nada sirve mirar atrás y quedarnos paralizados; de nada sirve mirar hacia un futuro, y quedarnos paralizados porque no lo podemos descifrar, de la misma manera como se descifran las leyes de las matemáticas. Así no sucede con nosotros. No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas exhortaba el profeta al pueblo, porque esto paraliza la mente y el corazón (Is. 43:18). Cuando Jesús hablaba de Dios, lo hacía siempre como si Dios estu-viera continuamente en el momento y lugar en que nosotros nos encontramos. “Cuando me ven a mí, ven a Dios. Cuando me oyen a mí, oyen a Dios”. Sí, aquello que fue, ya es; y ahí estuvo Dios con nosotros. Emanuel no nos abandonó. Es cosa de mirar con otros ojos, como lo meditábamos el domingo pasado.

DIOS TIENE UN TRAZO PARA TODO LO QUE ACONTECEEl escrito del Eclesiastés nos dice: “Dios tiene un plan de ruta para las cosas que nos acontezcan”. Él es el eterno presente. Su hoy es eterno. Dios quiere que vivamos el hoy de Dios. Cuando es el momento de tomar una decisión, el mo-mento de realizar cambios, no nos detengamos, ni retrasemos el cumplimiento del propósito del Señor. La fe dice: “Señor, tú tienes tus ojos sobre mi agenda y tu mano sobre mí y tú harás que mi agenda y yo marchemos juntos, según tu propia agenda”. La fe cuando es fuerte, se regocija cuando esa reunión, ese encuentro, o esa llamada no programada ya es un hecho cumplido y registrado dentro de la agenda divina. Pero para que la vida siga de esta manera, hace falta una renovación. Es imprescindible que ésta se dé, porque si no somos capaces de renovarnos frente a los cambios, entonces, sufrimos y nos dejamos vencer. El Señor nos pone avisos oportunos de que hay algo en nuestra vida que necesita ser renovado, cambiado. Una crisis, del estilo que sea, suele reflejar la necesidad de hacer una renovación, de movernos en una nueva dirección. “Dios tiene un trazo para lo que nos acontece”. Podemos aprender de las águilas: El águila, es el ave que posee la mayor longevidad de su especie. Llega a vivir 70 años. Pero para llegar a esa edad, a los 40 años de vida tiene que tomar una seria decisión. A los 40 años: Sus uñas curvas y flexibles, no consiguen agarrar a las presas de las que se alimenta. Su pico alargado y puntiagudo, también se curva. Apuntando contra el pecho están las alas, envejecidas y pesadas por las gruesas plumas. ¡Volar es ahora muy difícil! Entonces el águila, tiene sólo dos alternativas: Morir o enfrentar un doloroso proceso de renovación que durará 150 días. Ese proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y refugiarse en un nido, próximo a una pared, donde no necesite volar. Entonces, apenas encuentra ese lugar, el águila comienza a golpear con su pico la pared, hasta conseguir arrancárselo. Apenas lo arranca, debe esperar a que nazca un nuevo pico con el cual después, va a arrancar sus viejas uñas. Cuando las nuevas uñas comienzan a nacer, prosigue arrancando sus

Sermón

JESÚS ES NUESTRO ETERNO PRESENTEEclesiastés 3:15

“Cuando ya no somos capaces de cambiar una situación, nos encontramos ante el desafío de cambiarnos a nosotros mismos”.

(Víctor Frankl)

Page 5: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

7 8

viejas plumas. Y después de cinco meses, sale victorioso para su famoso vuelo de renovación y de revivir, y entonces dispone de 30 años más. Podemos entender la importancia de la renovación, de no vivir en el pasado apegados a costumbres y tradiciones, apegados a la rutina y a la memoria de sucesos dolorosos. Las so-luciones que antes funcionaban no tienen por qué funcionar hoy. Las respuestas correctas del pasado es muy probable que hoy se hayan convertido en un pro-blema. Si no estamos atentos a los cambios, el presente nos devorará.“Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados” (Is. 43:18-19). ¡Qué renovadora y desafiante invitación de Dios! Hoy voy a enfrentarme a la vida con la convicción de que este día no va a volver nunca más, que puede que sea la última oportunidad que tenga para contri-buir con algo, porque no hay ninguna garantía que vaya a ver un nuevo amanecer. Hoy voy a ser lo suficientemente valiente para no dejar pasar la oportunidad que se me presenta; mi única alternativa será lograrlo. Hoy invertiré mi recurso más preciado: mi tiempo, en la posesión más importante que tengo: la vida que Dios me ha dado. Emplearé decididamente cada minuto, haciendo del día de hoy una oportunidad única. Abordaré cada obstáculo, sabiendo que con la ayuda de Dios lo podré superar. Hoy resistiré a la duda y al pesimismo, e iluminaré mi mundo con una sonrisa. Mantendré una fe firme, aguardando sólo lo mejor, aportando lo mejor y esperando lo mejor. Hoy apartaré tiempo para hacer algo digno, veré en cada tarea una oportunidad para honrar a Dios y me esforzaré para dejar sus huellas en los corazones de aquellos con los que me encuentre y con los que necesitan de la acción decidida de nosotros los cristianos. Hoy el Señor nos invita a comenzar de nuevo, a soñar otra vez, a “vivir día a día”, teniendo presente que para Dios todo es posible (Mateo 19:26b). El apóstol Pablo encontró una fortaleza de Dios tan maravillosa que escribió que se regocijaba en sus debilidades, sabiendo que cuando era débil, la fortaleza de Dios vendría sobre él y suplantaría esas de-bilidades (2ª Cor. 12:9-10). “Es mi Dios, el peñasco en que me refugio” (2º Sam. 22:3) ¿Tiene su costo? Sí. Pero vale la pena pagarlo, porque un nuevo comienzo está aguardando a los que esperan en Jehová: “Volarán con poder, como el águila”.

Hermanos y hermanas, ¿no es acaso algo deleitable que sepamos que aunque nos encontremos en un viaje tormentoso, el propio Señor está al timón? No co-nocemos el curso del viaje; ni siquiera sabemos nuestra presente latitud y longi-tud; pero el piloto sabe todo acerca de nosotros, y también acerca del mar. Será sabio de nuestra parte confiar en las acciones de nuestro capitán. Los cristianos no estamos en las manos de aquellos que se burlan de nosotros. Los perversos pueden crujir los dientes ante los creyentes, pero no podrán destruirnos. En esto radica nuestro consuelo: hemos confiado nuestro espíritu en las manos de Dios, y él preservará sagradamente el precioso depósito. Que la adversidad no nos aleje del Señor. No pongamos de excusa: “no puedo ir más a la casa de Dios, pues mis “ropas” no son tan respetables como solían ser” ¿Acaso nuestra pobreza espiritual ha de sacarnos de las manos de nuestro Señor? Claro que no. No dejemos que eso suceda nunca; sino más bien digamos: “Señor, en tu mano están mis tiem-pos.” Aferrémonos al Señor en las pérdidas lo mismo que en las ganancias, y así

dejemos que todos nuestros tiempos estén con él.

En una ocasión escuché a un pastor indígena decirle a su congregación, que es-taba enfrentando una difícil situación: “¿Hermano, puedo hacerte una pregunta? ¿Obtuviste algún bien alguna vez por angustiarte? Cuando no había suficiente lluvia para tu tierra, ¿conseguiste que cayera un aguacero por medio de tus preocu-paciones? Cuando había demasiada agua, ¿disipaste las nubes con tu aflicción? Dime, ¿produjiste alguna vez un frondoso árbol de café gracias a tu preocupación? Olvidarnos de que Dios nos tiene en sus manos, así como las tuyas cuando tienes cuidado de sembrar las semillas en los surcos, es un trabajo que no es rentable. Y quizá me preguntes: “entonces, ¿qué hemos de hacer en tiempos difíciles?” Va-mos a él porque en sus manos hemos confiado todo los que somos y tenemos”. “Él dará el fruto a la obra de nuestras manos”.

Hermanos y hermanas de Shalom, consultemos al Señor siempre por medio de la oración; digámosle lo que sentimos, y lo que tememos, porque es mejor diez minutos de oración que un año de murmuración. Consolémonos con el amor infinito mediante la comunión con él y con la comunidad de los hermanos y her-manas. Oremos unos por otros, porque al hacerlo reconocemos que tenemos que responsabilizarnos unos de los otros como hijos e hijas de un mismo Dios. Somos hermanos y hermanas y no competidores ni rivales. Somos hijos de un mismo Dios, no partícipes de dioses distintos. Donde vivo yo Dios vive conmigo, y donde vive Dios conmigo encuentro a todos mis hermanos y hermanas. De este modo, la intimidad con Dios y la solidaridad con todos los hermanos son dos aspectos del vivir el momento presente que no se pueden separar. Quien nos ha traído hasta este punto, y ha obrado tan amorosamente para con nosotros, vigilará nuestra seguridad en todo el resto del camino. Yo agradezco al Señor por las oraciones de todos ustedes por mí y mi familia, porque he experimentado que el Señor las con-vierte en fuente de paz y alegría para seguir mi camino. Esa paz y alegría que brota de vidas que saben que el Señor tiene un trazo para todo lo que nos acontezca. Esa paz y alegría que se basa en el conocimiento de que pertenecemos a Dios y que hemos encontrado en él nuestro pan para el día de hoy, que como el maná, es fruto de su gracia, que nos es suficiente y aún nos alcanza para repartirla con generosidad. Renovemos lo que hay que cambiar, confiemos en Dios y dejemos que él nos muestre su camino día a día. Amén.

Rev. Javier Ulloa Castellanos / Domingo 26 de marzo de 2017

Page 6: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

109

Agradecimientos

Peticiones

-Hna. Yolanda Ugarte- le da gracias a Dios porque su nieto cumple 19 años.-Hna. Silvia García- le da gracias a Dios porque aún en las cosas insignificantes pueden ver la mano de Dios en haber recuperado un teléfono de su hermano.-Hna. Bertha Alger- le da gracias porque su hijo Guillermo cumple años y su hija Leslie ya tiene trabajo.-Hna. Iliana García- le da gracias porque la hermana Josita cumplió 94 años. Le da gracias porque su hija Ornela ya tiene trabajo.

-Hna. Catalina Montoya- pide que oremos por la familia Olay, que Dios consuele sus corazones.-Hno. René Olivera- pide por la pronta recuperación de su operación de pierna del hermano Ariel Mirón.-Hno. Iván Ariel Canizal- pide que oren por las evaluaciones que tiene que realizar todavía para obtener una plaza en la UNAM. Pide oración por su alumno Isaac que tiene depresión.-Hna. Paty Suárez- pide que oremos por el retiro de mujeres, para que el Señor las bendiga.-Hno. Juan Carlos Zazueta- pide que oren por él y por su hija.-Hna. Eva Zazueta- pide que oremos por la salud de su mamá que tiene que hacer unos estudios en cardiología. Pide que oremos por el examen de su hijo Daniel para entrar a la universidad. Pide que oremos por su salud y por unos estudios que tiene realizarse.

OREMOS POR TODOS LOS ENFERMOS.OREMOS POR LOS HERMANOS QUE NO TIENEN TRABAJO.OREMOS POR LOS NIÑOS, ADOLESCENTES Y JÓVENES DE NUESTRA IGLESIA.OREMOS POR EL TERRENO DE LA IGLESIA.

Velada de oración

El jueves 30 de marzo a las 19:00hrs. en la Capilla de la Comunidad.

Amextra “PEJ,PEM ARTESANAL” Naturaleza que cura…

Jabones terapéuticosInfusiones medicinales

Pomadas y cremasShampoo y acondicionador

Miel natural de ChiapasBlusas, cojínes y tenis con

bordados artesanales.Muñecas artesanales

Próximo domingo 2 de abril

Con actividades Con oración

Page 7: Existe un Dios - iglesiabautistashalom.orgiglesiabautistashalom.org/shalom/wp-content/... · > Cuando aves, en bosques, entonan sus trinos Y alaban

Las promesas de Dios

El oro molido, el tesoro más grande, la lotería a nuestro alcance. Las promesas que Dios nos ha hecho son lo más valioso del mun-do. Es muy sencillo conocerlas: todas escritas en su Palabra. Es-tán al alcance de todo el que las quiera, no hay más requisito que conocerlas y ser hijo suyo para poder canjear cada una de ellas. Pero ahí reside el problema, no las buscamos, no las conocemos, no las creemos. Hay muchísimas: nos promete paz, tranquilidad, amor, prosperidad, triunfo, felicidad... ¿¡Qué más queremos!?

Hoy oro porque podamos buscarlas, podamos entenderlas y conocerlas y cada uno de nosotros podamos reclamarlas como nuestras como hijos e hijas de este amoroso Padre.

¡Creamos en las promesas de Dios y actuemos por el bien de nuestras vidas, nuestras familias y nuestro país! Podemos con todo eso y más, tenemos a Dios de nuestro lado.

Lunes Isaías 41:10 • Dt 31:6 • Ro 8:38-39 • Filipenses 4:19

Martes Jer 20:11 • Dt 11:24 • Jn 14:27 • Salmo 89:34

Miércoles Jer 29:11 • Is 40:31 • 1 Juan 2:25 • Salmo 34:4

Jueves Josué 1:9 • Pr 1:33 • Lucas 18:27 • 2 Corintios 1:20

Viernes Isaías 54:17 • Mt 11:28-29 • Ro 10:9 • Ezequiel 36:26