Claudia Isabel RamosLa técnica psicoanalítica, Etchegoyen, Primera parte.

La evolución que lleva (el psicoanálisis) desde el método de Breuer hasta el psicoanálisis se debe al genio y al esfuerzo de Freud. En una conferencia pronunciada por Freud en el Colegio Médico de Viena en 1904, establece las diferencias entre el psicoanálisis y las otras formas de psicoterapia que hasta el momento existían.

Freud es conocido como el padre del psicoanálisis por haber sentado las bases de una cura diferente a una psicoterapia normal, más profunda, guiada por el paciente con la idea de que es sólo él quien tiene los medios para reestructurar sus pensamientos y personalidad.

La técnica catártica descubre un hecho sorpréndete, la disociación de la conciencia, que se hace visible a ese método en cuanto produce una ampliación de la conciencia.

La coerción asociativa le confirma a Freud que las cosas se olvidan cuando no se las quiere recordar, porque son dolorosas, feas y desagradables, contrarias a la ética y/o a la estética. Así una nueva teoría, la teoría de la resistencia, lleva a una nueva técnica, la asociación libre, propia del psicoanálisis, que se introduce como un precepto técnico, la regla fundamental. (Asociación libre)

A partir de la asociación libre, dice Freud, es posible que el paciente tenga el insigt, pero para que esto pueda ser posible es necesario que el terapeuta establezca ciertas normas y actitudes para que el analizado pueda construir una buena trasferencia, lo cual proporcionara los medios para llevar a cabo la cura. Este marco que delimita el análisis incluye el encuadre (que se trata en la parte cuatro más ampliamente) que es la situación temporal y espacial del análisis. Incluye además la neutralidad que el analista debe tener para que al analizado le sea posible tomarlo solo como un espejo donde podrá “proyectarse”. Esta relación establecida entre el analista y el analizado es fundamental para que se lleve a cabo la dinámica psicoanalítica. “Para que la trasferencia surja claramente y pueda analizarse, el analista debe ocupar el lugar de un espejo que sólo refleja lo que le es mostrado.”

A partir de aquí varios descubrimientos se multiplican: La sexualidad infantil y el complejo de Edipo, el inconsciente con sus leyes y sus contenidos, la transferencia, etc….aparece la interpretación como instrumento técnico fundamental y en un todo de acuerdo con las nuevas hipótesis…hay que darle al individuo informes precisos sobre sí mismo y sobre lo que le pasa, y que él sin embargo ignora, para que pueda comprender su realidad psicológica: a esto le llamamos interpretar.

La interpretación, otra parte fundamental de la dinámica psicoanalítica, surge cuando Freud se da cuenta de que el analizado al darse cuenta de su situación la va aceptando y a su vez facilita que lo verbalice y facilite la cura por medio del habla, que es la asociación libre que se va haciendo entre un pensamiento y otro para llegar a los orígenes primarios de algún problema.

Freud dijo muchas veces que el psicoanálisis es una teoría de la personalidad, un método de psicoterapia y un instrumento investigación científica, queriendo señalar que por una condición especial, intrínseca de esta disciplina, el método de investigación coincide con el procedimiento

Claudia Isabel RamosLa técnica psicoanalítica, Etchegoyen, Primera parte.

curativo, porque a medida que uno se conoce a si mismo puede modificar su personalidad, esto es, curarse.

Es imposible que se separe el método de investigación del procedimiento curativo, ya que entonces la premisa de la cura por medio del habla no será verdadera. El analizado al estar en contacto con sus contenidos inconscientes inmediatamente va a realizar una autoexploración que facilite la modificación de estos contenidos mentales y por lo tanto encaminarlo al cambio en su personalidad y por lo tanto, la cura.

Las indicaciones de Freud son por demás sensatas; los casos francos de psicosis, perversión, adicción y psicopatía son siempre difíciles y hay que pensar detenidamente antes de tomarlos. Son pacientes que ponen a prueba al analista y que solo en circunstancias muy felices pueden llevarse a un buen puerto.

La edad pone un limitante al psicoanálisis…la edad es pues un factor a tener en cuenta, sin ser decisivo por sí mismo. No hay duda de que los años nos hacen menos plásticos, pero también puede un joven ser rígido, ya que esto depende en gran medida de la estructura del carácter.

Natch y Lebovici dividen las indicaciones y contraindicaciones del psicoanálisis del diagnóstico en tres grupos: los casos accesibles, los moderadamente accesibles y los débilmente accesibles…consideran aplicable el psicoanálisis a los estados neuróticos…pero no a las neurosis de carácter.

La indicación del psicoanálisis (en enfermedades psicosomáticas) variará en primer lugar según la mayor participación de los factores psicológicos; en segundo lugar, según la respuesta a los tratamientos médicos previamente efectuados y en tercer lugar según el tipo de enfermedad.

Las limitantes para el proceso psicoanalítico son varias y de diversas magnitudes siempre dependiendo de en qué grado están ligados a los factores psicológicos, hay casos de enfermedades muy avanzadas que no son candidatos para ser tratados con esta forma de psicoterapia, ya que es muy tardada y es un riesgo someter al paciente a análisis poniendo en riesgo su salud y hasta su vida.

La mayoría de los analistas que siguen a Anna Freud y Melanie Klein piensan que el análisis es aplicable a niños de la primera infancia y que todos los niños, normales o perturbados, podrían beneficiarse con el análisis.

La primera infancia suele ser la más influenciable y en la que se ven los resultados más claramente, porque es en donde que desata toda la cadena de relaciones establecidas que sientan las bases para el futuro desarrollo de la persona. Además de que los niños realizan este análisis de forma más simbólica y esto facilita el acceso al inconsciente del niño, de esta forma las interpretaciones son más aceptadas y la cura se lleva a cabo mejor.

En mi opinión esta parte del libro es muy interesante, ya que descubrí de una manera más sintetizada cómo llegó Freud a establecer las bases de la teoría psicoanalítica. También me sirvió

Claudia Isabel RamosLa técnica psicoanalítica, Etchegoyen, Primera parte.

para reafirmar los conceptos necesarios para la dinámica y la técnica psicoanalítica. El texto es muy fácil de leer a diferencia de otros y es muy entendible.