24
Número 2 octubre 2012 REVISTA FRENESI ”Dibujando en palabras los delirios y pasiones.“

Frenesí octubre

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Dibujando en palabras los delirios y pasiones

Citation preview

Page 1: Frenesí octubre

pág 1Número 2 octubre 2012

REVISTA

FRENESI”Dibujando en palabras los delirios y pasiones.“

Page 2: Frenesí octubre

SUMARIO1//2

3//4

5//67/

15/

17/9/

11/

12/

13/

16/

18//20

Recomendaciones para leer una Revista Frenesí N

La verdad no existeCaro Leguizamon

Vacaciones de por vida Kt D’Ascanio

Comienza la temporadaYardhi Abu Aiach

PoesíaJonás F. Mercado

Soy sin nombreJonás F. Mercado

El libretoDani Schechtel

Redefiniendo Roles Anselmo Valdez

Conversación conmigo misma M. Victoria Briccola

EstadosSol Santalucía

Ser un gamerZeky Gimenez

Reacciones de mierda para un James Bond N

Page 3: Frenesí octubre

{RF}Editorial

Hacemos Frenesí:Nehuén PaulucciMaría Victoria BriccolaYardhi Abu Aiachcorrección: Agustina Stazzone

Diseño y Maquetación Pablo Corradini <[email protected]>

Cuando comenzamos un proyecto, el entusiasmo y el amor que sentimos por él es embriagador, y verlo terminado te llena tanto de orgullo que no se puede explicar con palabras. Esto nos sucedió con la pri-mera edición de RF y nos seguirá pasando siempre, porque es lo que acontece cuando uno recuerda algo que tanto trabajo costó.Pero las segundas partes no siempre son

malas y esta edición de la revista se lleva consigo el esfuerzo no sólo de los organi-zadores, sino también de los escritores y de aquellos que nos han ayudado a ir mejorando.Queremos que todos tengan la posibi-

lidad de sentirse cercanos al escritor y se vean reflejados en lo que, aunque sea uno de ellos, escribió. Y así, número a número, que los jóvenes que nos lean -y por qué no, los mayores-, tengan no sólo ganas de leer sino también de escribir. Inspirarse para hacerlo, a veces, es muy

difícil, pero en cuanto la primer palabra sale, el resto es una magia inexplicable, como cuando mantenés una charla con alguien: simplemen-te, ya sabés qué palabra viene después de la otra. Pero, a diferencia de una conversación, el papel no tiene ni prejuicios ni contesta-ciones. Nunca nos va a refutar, por lo tanto, somos libres: libres de contar secretos, ideas o simplemente pavadas, pero libres en fin.Los seres humanos hemos buscado la

libertad por siglos y, aun así, pocas veces nos damos cuenta que los que verdadera-mente nos la limitamos, somos nosotros mismos con las excusas: el tiempo, la edad, la incapacidad o las otras personas. La reali-dad es que, si nos tomáramos dos minutos al día para sentirnos libres, no necesita-ríamos ni gurúes, ni pastillas ni nada. Y allí está la escritura, la expre-

sión máxima de la libertad.Ese amor (a la escritura y a la libertad)

es la base de este proyecto que nos lle-na el alma desde antes de su nacimiento impreso. Juntarnos a pensar, fantasear con un futuro, enojarnos por lo que nos sale mal y mejorar, página a página.Creemos que la juventud que muchas

veces es despreciada como inmadura o idealista, es la base de la creatividad y la libertad que nos empapa a todos los que creamos este medio gráfico de expresiónEn fin, les damos a la bienvenida a nuestros

fieles lectores y a los nuevos también, con la propuesta de que sean actores y no sólo protagonistas de este proyecto. Sean abso-lutamente libres para enviarnos sus creacio-nes, recomendaciones u opiniones a través de nuestro mail ([email protected]), Facebook (www.facebook.com/revista-frenesí) o Twitter (@revistafrenesi).¡No se pierdan la oportunidad de sentirse libres!

ARTISTA INVITADOObaya, Jeremías Bernardo

[email protected]

//revistafrenesi.blogspot.com.ar

/revistafrenesi

@RevistaFrenesi

[email protected]

Page 4: Frenesí octubre

pág 1

Recomendaciones para leer una Revista FrenesíSiéntese tranca como en su casa, como en

su inodoro, como cuando va a cagar. De todas maneras, hacer caras es inevitable, y no entraré en detalle del tipo de morisque-tas que hará aunque le aseguro que podrá disfrutar de las dos maneras, tanto en el baño como en cualquier espacio que la lea. A veces, imaginar que estamos en un lugar ideal es lo mejor, porque leer es otra forma de viajar; ahora, los pasos a seguir: Abra el paquete donde le llegó la revista

y verifique su número de sorteo. Si usted la recibió abierta, verifique que el nume-rito color verde esté abrochado adentro. Si no está, no participará por el sorteo de una visera con ventilador a pilas para el verano; seguramente, déjeme decirle, ya empezó mal. Pobre gil que buscó el numerito abrochado. Para acompañar una lectura copada nosotros recomen-damos que ponga la pava para unos buenos mates, asegúrese de que nadie lo moleste y el celular en vibrador. ¿Le dio de comer al perro? no sea cosa de que comience a ladrar. Ahora sí, ¡acomódese! Verifique la fecha de vencimiento al pie del

sumario, si está pensando que tiene fecha de vencimiento es verdad que no la tiene. Si usted se fijó en ella ni bien lo leyó, sig-nifica que es un lector compenetrado. Se pueden exponer usted y su revista al sol, a temperatura a gusto, para una lectura agra-dable. Contiene proteínas para la imagina-ción, es cero por ciento mala onda, produc-to netamente argentino, no apta para gente sin humor, cheque su colesterol antes, los que escriben tienen mucho huevo. Se puede leer en voz alta, y usted pensará que estamos un poco locos y es que sí, un poco no es malo. Los escritos no reflejan necesariamente nuestra opinión, la libertad de expresión es respetada evite la puteada.

Agítese antes de leerla (usted agítese, no la revista, ¿para qué va a agitar la revista? ¡Por favor!), practique unos saltitos de relajación. Si se perdió por el agite vuelva al punto negro, seguramente no encontra-rá el punto negro, así que déjelo ahí. Eso significa que está bien recomendado. En

fin, si usted se agita seguramente la revista le pegue un poco más, no aspirar por vía nasal, preferentemente oral, no se coma el papel, la tinta puede ser levemente tóxica tirando a flashera, pero, por las dudas no lo intente en su casa. Frente a los amigos puede ser pero nosotros no nos responsa-bilizamos por las estupideces que haga. Considere criticarnos constructivamen-

te, si no haremos vista sorda. Salvo que nos puteen en la cara allí la puteada será inflamable y peligrosa para usted. Recuerde que puede producir reacciones secunda-rias como incentivar la lectura o escritura. Evite el contacto, aíslese con Wilson, al mejor estilo “náufrago”. Y, ante contagio, se recomienda estar atento, ya que la reproducción es viral con gente allegada.Luego revise la pava que no se le pase. Si

le agarraron ganas de mear, por favor, haga su necesidad y luego vuelva a su frenesí. Considere que nuestro humilde aporte es humano y puede contener errores u horrores. Ah, ¡me olvidaba!: ¡no se olvide

porN

Considere criticarnos constructivamente, si no

haremos vista sorda.

Page 5: Frenesí octubre

pág 2

de lavarse las manos, ¡asqueros@! ¿Re-cordó la pava en el fuego? Si el agua se le hirvió, usted no puede seguir leyendo, así que, por favor, comience otra vez. Evite manchar con mate o migas de Criollitas, las páginas de esta preciosísima obra de arte que tanto esfuerzo costó. Está prohibida venderla -la revista es gratuita por el momento-, es sólo para gente con éxito, así que procure no estar embobado leyéndola frente a otras personas, típica acción de un black berrysta, que se aliena.El mate es su buen aliado a la hora de

acompañarlo ante estas situaciones, le da la pausa para pensar e imaginar que Frenesí no tiene grandes escritores sino cientos de lectores que comparten más

de una chifladura. Por favor, no nos tire a la basura, sepa disculpar las molestias: en caso de malestar general, recurra al centro de salud más cercano o consúltenos, lo podemos ayudar con remedios caseros. Si se apegó mucho a la revista, por favor, lave inmediatamente sus ojos con agua.Frenesí intenta ser un producto agra-

dable para gente anormal o sea que no busque personas normales, porque no las encontrará (no nos hacemos cargo de lo que usted interprete). Cualquier similitud con la realidad, es pura coinci-dencia o una locura frenética. Aquellos que deseen participar, comunicarse a nuestro e-mail que serán mal atendidos. Esta lectura se autodestruirá en breve.

PRODUCTO DE ENTREGA DIRECTA EN MANO PARA ESTUDIANTES DE PERIODISMO CONSULTE NUESTRAS BASES EN IRAK Y LE DEVOLVEREMOS SU DINERO DE A CINCO CENTAVOS Y UN ABOGADO LO AMENAZARÁ DE MUERTE VALIDO SOLO PARA LA PLATA Y ALREDEDORES.

“La respuesta es correcta cuando la pregunta tiene sentido.”

Page 6: Frenesí octubre

pág 3

Creo que estamos en un mundo donde la verdad no existe. Donde la gente dice sólo lo que se quiere escuchar. Cuando sos chico, te enseñan que mentir está mal y crecés mamando a tu mamá diciéndo-le a tu papá que lo ama, cuando por las noches escuchás que en realidad no.La gente te dice lo que es mejor para el mo-

mento por el que estás pasando, pero ¿está mal eso? Es decir, estás en una relación en la que sos capaz de perdonar la infidelidad, pero tu imagen exterior no te lo permite. La gente te ve como alguien que no puede aceptarlo, entonces rogás porque no te lo diga pero le pedís que sea sincero. Le revisas el teléfono buscando una verdad que, sabés, te va a doler. Entonces, ¿para qué la buscás?La vida es más fácil con la mentira en

puerta. La gente vive más feliz mintiéndose. No estamos preparados para vivir en una realidad tan sincera. En todo caso, lo que está mal es juzgar o, mejor dicho, no enten-der que los demás juzgan según su criterio, según la vida que para ellos está bien.Pero lo único que importa en tu vida, es

tu criterio. Pero la verdad, decir siempre la verdad, hace mal. Terminás siendo mala persona, dejás de ser sincera. Cuando sos frontal y decís lo que pensás, es ahí cuan-do te catalogan como reacia o agresiva.Lo primero que te dice la gente es: “A mí

me gusta la gente sincera”. Y ya te está min-tiendo. Si alguien, un amigo, viene y te dice que no tiene ganas de hablar con vos porque le cayó como el orto lo que dijiste, te vas a enojar, te va a herir, te vas a sentir una basu-ra, lo vas a querer mandar a la mierda y vas a decir que es histérico. ¿Qué tan malo puede ser decir lo que uno siente cuando lo siente?Por supuesto que la próxima respuesta

va a ser, no es lo que decís, sino cómo lo decís. Pero, ¿yo sé cómo se lo tengo que

decir a cada persona que conozco? ¿Cómo hago para que entienda lo que quiero decir y no malinterprete las palabras, el tono y lo no dicho? ¿Cómo hago para sentir que puedo decirle cualquier cosa a cual-quiera que, total, va a estar todo bien?Pero entonces me pregunto: si el otro me

dice algo que yo no quería escuchar, como puede ser “ya no te quiero como antes”, automáticamente voy a tratar de transformar las palabras para que terminen diciendo “mis amigos me convencieron de que la sol-tería es mejor, disculpame, yo quiero seguir estando con vos, pero los pibes son los pi-bes”. ¿Cómo hace el otro para que yo entien-da lo que él me quiso decir y yo no tergiverse las cosas, es decir, adapte a mi experiencia de vida las palabras, el tono y lo no dicho?Claramente, la verdad, a veces, no es

la mejor respuesta o, por lo menos, la verdad con pocas palabras. Y volvemos a lo mismo, ¿cuándo mentir está bien?, ¿cuándo decir la verdad está bien?¿La sinceridad es una forma de seguir

manteniendo adentro mío una forma de poder lastimarme sin darme cuenta?... Yo pido sinceridad, pero ¿a mi misma me la digo? Trato siempre de tener los pies sobre la tierra, trato siempre de palpar la vida misma, indagándome a mi misma sobre la vida. Actúo de forma inadecuada según la gente que miente y dice querer la verdad. Pero ¿quién soy yo para andar tirando verdades en las narices de alguien? Si la gente no la quiere escuchar, ¿para qué lastimar a la gente con mi naturaleza bruta?Es absolutamente cierto que me miento

cada vez que me duele. Es real que me digo que todo va a estar bien cuando sé que falta para que eso pase, porque no me creo. Porque sé que me estoy mintiendo para poder sonreír. Entonces, si te mentís, ¿está

La verdad no existe

Caro Leguizamon

CUENTOS

Page 7: Frenesí octubre

pág 4

bien o está mal? En fin, estoy haciendo lo mismo que el resto, nada más que sólo me miento a mi misma, para creer que estoy rodeada de gente que miente y no quiere escuchar la verdad, cuando sólo soy yo la que se miente y no soporta a aquella gente que no lo hace. Que puede vivir su realidad.Pero ¿es verdad eso u otra vez, otra vez

me estoy mintiendo? ¿Estoy creando una duda sobre mi misma para estar un poco más conforme con el mundo en el que me toca vivir? ¿De verdad estoy manipulando las palabras de los demás a favor de mi beneficio emocional o simplemente es-toy siendo más cruel conmigo misma?Entonces, no sé si quiero escuchar la verdad

de los demás. Entonces, no sé si en ese mo-mento quise escuchar de tu boca “no siento las mimas ganas de estar con vos como antes”. En ese momento, sólo buscaba un abrazo y que te calles y me mientas. Y que me digas que estabas confundido, porque tus amigos te estaban dibujando la realidad, pero que simplemente me querías con vos.Aunque no creo que hoy te

quiera al lado mío. Exijo las cosas de frente, sólo eso pido,

para poder explicar cuál era en realidad mi objetivo con esas palabras, poder disculparme y tener otra oportunidad para no lastimar. Que en fin es eso lo que busco cuando digo la verdad.“La verdad duele menos que la mentira”...Esa frase me la dijeron una vez, y sólo una

vez bastó para que yo no quiera volver a mentir. Me puedo dar el lujo de jactarme de manipuladora de la verdad cuando era aún más joven e inexperta, y sé que lo sigo siendo, es por eso que no sé si lo que hago está bien o está mal. Decir la verdad cuesta caro, es un juego del que cuesta salir. Ser falsa como todo el mundo, hipócrita, eso no cuesta, pero en tus valores interiores es donde te espera la factura. Es ahí cuando el dolor se incrementa porque te vas viendo cada vez un poco más sola. Cuando en-tendés que a la gente no le gusta la verdad porque vive bien en su mundo de fantasía.Estuve mucho tiempo creyendo en la

gente, y siempre dudando. Hoy no dudo. Hoy sólo escucho lo que me dicen y espero sinceridad. Espero eso que doy. Espero que la verdad duela menos que la mentira.

“Pobre de aquel que necesita del espejo del mundo para poder verse.”

foto> Kt D’ascanio

Page 8: Frenesí octubre

pág 5

Comienza la temporada: Caras y contra caras de los eventos de moda

larguísima, y una más cara, en la que se puede ver un desfile sentada en tercera fila y codearse con los editores de todas las revistas, famosos, modelos y gente que ni idea quiénes son, pero se sacan fotos con todo el mundo. Entrar en este evento es una mezcla de

glamour popular y una incomodidad tre-menda. Es decir, hay gente que tiene una energía increíble y hace sentir súper exclusiva alos asistentes, pero por otro lado están los elitistas con cara de hambre que pasan por al lado como si no debieran estar ahí. Este tipo de cosas se suceden en todos los eventos de moda (desgraciadamente).Saltando el hecho anterior, el evento está

siempre bastante bien organizado: hay stands de las diferentes marcas que auspician (que permiten a los futuros diseñadores, por ejem-plo, diseñar su propio par de zapatos) y un showroom de marcas que no hacían desfile. Personalmente, debo decir que la mejor parte del evento son los desfiles y las diferentes cosas que te regalan, que van desde aspirinas hasta bebidas energéticas y café. En cuanto a los desfiles, desde RF, concurri-

mos al de la marca UMA que presentó una colección en la que reinó el fucsia, los colores shockeantes, pero también los pasteles y los beige, todo muy joven y fresco, con prendas muy cómodas para el calor que nos atormenta-

Antes que nada, es indispensable explicar algunas cosas para comenzar a interiorizarse en la moda: no, no tiene nada que ver con colores, tipos de tela o esa delgada línea entre lo in y lo ridículo, sino de quienes manejan este mundillo.En el mundo, los denominados Fashion

Week (o semana de la moda) son eventos que, en menos de una semana, presentan a las principales marcas de moda internacio-nales con sus colecciones acorde a la esta-ción. Las mismas son las que marcan qué es lo que se va a usar, porque ellos manejan la industria. Cada semana de la moda, está auspiciada por marcas de lujo (obviamen-te, quien puede pagar 14 mil dólares por un vestido, puede comprar una camioneta Mercedes Benz). Estos eventos en el exterior son absolutamente exclusivos (léase, hay que tener invitación de la casa de modas hasta para ir) y comienzan en la ciudad de Nueva York, que es la más moderna porque mezcla tradición con nuevos talentos; continúa en Londres, Milán, que es la encargada de la moda masculina, y finaliza en la tradicional y más exclusiva: París.Por supuesto, otros lugares del mundo fue-

ron emulando estos fashion weeks y nuestro país, que ama imitar lo extranjero, no se que-dó atrás, y también tiene semana de la moda. Algo que le podemos destacar a los eventos fashionistas locales, es que no son absoluta-mente elitistas o exclusivos, en su mayoría: hay para todos los gustos y bolsillos. Yendo por partes: cada temporada argenti-

na, se inaugura el BAFWeek (Buenos Aires Fashion Week), organizado en La Rural y se divide en dos partes; los desfiles por invitación de la casa de modas y el evento público en el cual hay dos entradas: una general en la que para entrar al desfile hay que hacer una cola

YardhiAbu Aiach

enviada especial

No sé si será de público conocimiento, pero los que saben de moda, empiezan cada temporada emocionados por una sucesiva de eventos y desfiles (algunos exclusivos y otros, no) que presentan cada temporada. Por supuesto, RF, tenía que estar presente y nos dimos una recorrida por el submundo de los denominados fashionistas.

Reinan el fucsia, los colores shokeantes,

pasteles y los beige. Todo muy joven y fresco.

MODA

Page 9: Frenesí octubre

pág 6

rá en verano, pero con camperas de cuero que todavía no logramos saber quién puede llegar a ponerse con 40 grados de enero. Los zapatos que presentaron tenían bastante variedad desde los aparatosos en plateado hasta las chatitas y mocasines. A su vez, otro destacado son los bolsos: playeros, bandolera o de cuero, todo en gamas de azules, rojos y coral.Lo más sorprendente de las colecciones,

en general, fue el rosa: donde se mirara, ahí estaba, después de más o menos tres años sin ser utilizado oficialmente. Todo lo demás no fue ningún descubrimiento: los que siguen de cerca las tendencias, sabian que volvían los desteñidos y los flúo.En cuanto a los trajes de baño, se podrán

observar esta temporada los lunares, el pla-teado y el dorado, el flúo, los colores pasteles y las rayas tanto verticales como horizontales. Habrá diseños para todos los tipos de cuerpo y gustos. Obviamente, podrán ser acompa-ñados por las tan glamorosas capelinas que puestas en la ciudad quedan ridículas pero en la playa se usan bastante.La siguiente parada de moda, la hicimos

en el BAAM (Buenos Aires Alta Moda), un evento de alta costura al que sólo se accede por invitación. Allí pudimos ver la colección de Christian Lacroix (tienda internacional que marca tendencia), marcada por los rosas muy

llamativos, colores nude o crudos, vestidos bellísimos con telas vaporosas y los hom-bres vestidos de colores pasteles informales, válidos hasta en noches de gala. También se destacó la cantidad de piel que se veía: mu-chísimo escote y espaldas al aire, siempre con elegancia, algo distintivo de la marca.La experiencia en este evento no fue tan

grata como en el BAF, el hotel en el que se desarrolló el evento no sabía (o no quería, si se me permite sospechar) dar información y quienes organizaban el mismo clasificaban como la gente más elitista y esnob vista en la Tierra. El desdén y las caras que ponían cuando se les consultaba algo era bastante desagradable. En resumen: el desfile fue una belleza y muy puntual, pero la atención dejó bastante que desear. Para concluir, es importante siempre sentirse

bien: todo lo que uno se ponga, luce mal si uno se siente así o si estás mal predispuesto para los demás; eso es lo que se puede sacar como aprendizaje al ir a este tipo de eventos.

1 Showroom: lugar donde venden ropa a “menor” precio que en los locales y antes de que la colección salga a la venta pública.

2 Esnob: Dícese de quien se cree de clase alta, imi-ta sus usos y costumbres y mira a quienes cree menos de manera despectiva, desagradable.

“La realidad no es lo que uno ve, sino lo que uno cree.”

Page 10: Frenesí octubre

pág 7

Vacaciones de por vidaHarto del ruido, los robos, las calles sucias,

la gente y la ciudad en todo su conjunto, Julián decidió aprovechar esa semana libre que tenía para viajar, despejarse y olvidarse de Buenos Aires. Un compañero del trabajo le había co-mentado que Río Negro era una provincia muy bonita y que en el verano había estado pasean-do por el Valle Medio, y le encantó. Julián era tranquilo y que los pocos habitantes de la zona eran muy amigables. El domingo por la mañana subió los bolsos al baúl del auto, puso un disco de los Rolling Stones y emprendió su viaje al sur del país. Eran aproximadamente las ocho de la noche y estaba totalmente oscuro cuando arribó al pueblo de Choele Choel. Reconoció el lugar, cosa que no le llevó demasiado tiempo, debido a que es bastante chico. Decidió pasar la noche en un hotel que quedaba en el centro, cenó una hamburguesa en el café de al lado y, antes de irse a dormir, fue al cine, el cual le pareció maravilloso, porque por sólo cinco pesos pudo ver una película argentina y ni siquiera tuvo que hacer cola para entrar. En el hotel le comentaron de varios lugares para ir, y a Julián le gustó la idea de ir a un pueblito costero que se llama Las Grutas, en el que en esa época del año parece fantasma, como cualquier otro lugar con playa en el mes de mayo. Subió nuevamente los bolsos al auto y ascendió a la Ruta Nacional 250, para seguir paseando. Le encantaba cómo se veían los álamos al cos-tado del camino, el hecho de que cruzaba muy pocos autos y el aire frío que entraba por su ventanilla abierta. Mientras cantaba emociona-do un tema que escuchaba en la radio, vio a la derecha de la ruta un cartel que decía “vendo cerezas”. Sin saber que el letrero hacía años que estaba, y que además en esa época no había cerezas, decidió meterse por un camino de tierra a comprar la fruta.

Kt D’Ascanio

Llegó hasta una tranquera, bajó del auto y se encaminó hasta la enorme casa que estaba del otro lado. Tocó la puerta y, mientras esperaba que alguien saliera, miró a su alrededor. Le encantaba el paisaje, el piso lleno de hojas secas por el otoño, los álamos verdes alrededor del terreno, el aire frío y el sol cálido. Estaba encantado. A los minutos, una viejita abrió la puerta y lo invitó a pasar, le ofreció mate y pastelitos que estaba haciendo, y le explicó que ya hacía mu-cho tiempo que no había cerezas, dado a que la chacra dejó de trabajar cuando su marido murió. Julián le contó de lo mucho que le gus-taba el lugar, de la tranquilidad y de la gente, que era muy buena. La anciana, contenta por el comentario, lo invitó a pasar el día en su casa, para que pueda conocer aún más cómo era la vida en aquel lugar. Pasaron una tarde muy agradable y comenzó a caer la noche. Julián no quería irse todavía y no sabía cómo hacer para que la vieja lo invite a pasar toda la semana o, al menos, la noche en su casa. En su cabeza, imaginaba lo feliz que sería viviendo en un lugar como ese por el resto de su vida. No se animaba a preguntarle a la se-ñora si podría quedarse a dormir, y tampoco soportaba el hecho de tener que seguir viaje. Él estaba en la cocina tomando unos mates mientras la anciana buscaba el álbum foto-gráfico en el comedor. Había tenido una idea: la llamó, le pidió que vaya a la cocina porque no encontraba azúcar, y se paró detrás de la puerta. Cuando la señora entró con su paso lento y espalda encorvada preguntando qué era lo que buscaba, Julián bajó los brazos lo más fuerte que pudo. La mató. Mató a la señora para poder que-darse en el lugar que tanto lo había mara-villado, para estar en tranquilidad y paz y poder alejarse del ruido, el movimiento y la violencia de la ciudad que lo había hartado.

CUENTOS

Page 11: Frenesí octubre

pág 8

Page 12: Frenesí octubre

pág 9

Jonás F. Mercado

La niña de los ojos de mar, clava su mirada en la mía. Contornea mis pupilas. En su aire revolotean mariposas y con su perfume, ángeles parecen agitar sus alas. Sus manos esbozan una pequeña forma en el aire... Sus delgados dedos forman un abanico de ilusiones, mientras la luz y la sombra juegan a descubrirlas. Mis ojos atrapan su magia,  dejando ver su hechizo. De ahí en más, su cuerpo es toda una imagen etérea para mí.

¿Y si era la lluvia lo que buscábamos? ¿Mojarnos, empaparnos y rebalsar de tanta agua? Era inevitable poder ver nuestros cuerpos felices bajo el aguacero, corriendo y chapoteando entre las calles… Tu cara regocijada por el agua, tus ojos abiertos y salpicados de lluvia. Pues ellos allí tenían el brillo, ese que tú tienes cuando sueñas sin dormir. Tu mirada que me buscaba, y la mía que la encontraba allí, bajo ese manto húmedo y glorioso. Mis pupilas brincaban entre tu cuerpo mojado, endulzado, y acariciado por la lluvia. Nuestras manos parecían soldarse con cada nueva gota, y tú así más fuerte me tomabas. Esa creo es la bendición de la cual hablábamos, a la cual buscábamos… Sin más nada que decir la lluvia hizo su trabajo, cumplió con su pronóstico.

Jueg

os e

tére

osH

umed

ecid

os h

asta

des

apar

ecer

Poesía POESÍA

Page 13: Frenesí octubre

pág 10

“La riqueza trae a los amigos, la pobreza los selecciona.”

Page 14: Frenesí octubre

pág 11

Sol Santalucía

El vaivén de las palabras, de los sentimien-tos que cambian constantemente, que nos atrapan a sentir distinto en cada amanecer. Los amores van y vienen pero cada uno de ellos, sorprendentemente, es “el amor de nuestra vida”. Es mentira que nos enamo-ramos sólo una vez: puede ser que guarde-mos un sentimiento especial por esa primer alma gemela, pero no es la más fuerte.Sufrimos a desdenes; cada estación en

la que el tren se detiene es nueva, única, incomparable y, por sobre todo, pasaje-ra. Cuando empieza a alejarse, corremos desesperadas y otra vez nos quedamos esperando otro transeúnte que vislum-bre nuestro ser y nos deje sin aliento.Amor. ¿Qué es? Un sentimiento, alguna fuer-

za interna que nos atrapa y nos hace ver todo color de rosa. Perfecto. ¿Cuánto tiempo dura? Indefinidamente. Pero lo que sé, o sabemos, es que amor no es sinónimo de seguridad.Ayer era el amor de tu vida, la razón por la

cual querías salir corriendo a un mundo remo-to, convertir el castillo de naipes en un mundo factible de sueños que no los deje despertar mientras estén juntos. Pero amanecieron separados. Porque te evadió, te buscó por una noche y te dejó pensando; pensando tanto tiempo que dejó que el sentimiento se fuese. Sentiste una destrucción interna como si el mismo Aconcagua se hubiese desmoronado en tu corazón. Tu sueño se desgajó en mil y un pedazos. Corrieron juntos a una meta ilusoria y, cuando quisiste alcanzarlo, lo habías

perdido. Sentiste dudas, incertidumbre: si el tiempo es la cura, se demoró demasiado. Sin embargo, no hay herida que no cicatrice,

que no llegue a su recuperación completa hasta olvidar por completo que estuvo allí. Sólo deja marcas para que recordemos que no hay nada que nos pueda detener. Corris-te a otros brazos, a otro sueño extraño, a unos ojos que te invitaban a encandilarte, a una sonrisa que era tu locura. Ya no ha-bía lágrimas: sólo había risas. Sólo buenos días y noches eternas queriendo soñar.Pero, de repente (o no tanto), aquel otro amor

vuelve. Cruel ave que regresa a su nido, tarde o temprano, con miedo de perder “lo suyo”, su posesión.  Claramente, el dicho que se hace presente en estas ocasiones es: “Parece un niño jugando con un globo. Si tenés otro juguete, lo quiere, lucha hasta que lo consigue y cuando se da cuenta que el globo se voló, sale corriendo alterado, porque no hay nada que él pueda perder”. Surgen las dudas: amor pasado y amor presente. Si te acercás, estás perdida. Si te alejás, quedás vacía. ¿Por qué siempre que una persona está bien con otra vuel-ven esos amores o aparecen nuevos y tan soñados? Qué hipócrita es la vida. Mien-tras más lo pensamos, más nos confun-dimos. Mientras más nos alejamos, más nos acercamos. Y acá estás, sin saber qué hacer. Acá estamos, sin saber qué hacer.

EstadosAMOR

Un comunicador es aquel que puede ver más allá de la comunicación. Jesús Martín Barbero

Page 15: Frenesí octubre

pág 12

María Victoria Briccola

Señoras y señores:Sepan ustedes disculparme,tengo una doble vida.Acaso ésta tenga que ser una confesión

digna de ser revelada frente a mi gran amor.Pero, no.Resulta que mi vida me pertenece a mí.

Soy yo la primera en ocuparse y pre-ocuparse.por ella. Soy la mujer de mi vida. Entonces, vuelvo a decir(me) y

corregir(me).Perdón, Victoria, tengo una doble vida.Tengo una doble identidad.-¿Por qué? ¿Desde cuándo? ¿No nos da

vergüenza?Te pido, no juzgues, no mal-interpretes.

No saques de contexto. No construyas pala-bras en mi boca. Por favor, no lo hagas.

Resulta que entre el egoísmo y egocentris-mo de la gente de estos tiempos (y de los anteriores, también) no puedo moldear a mi gusto, mi propia identidad. Ellos quieren que sea lo que ellos más quieren y anhelan. Para

sentirse más acompañados, comprendidos, en sintonía.Yo, me desvivo por abrirle los ojos. Contarles que no existen las personas ideales sino ese alguien que elije cómo ser y punto. O sea, yo.

Conversación conmigo misma

Entonces, acá estoy. Sobreviviendo en una pelea sinsentido entre quien, con gritos, digo ser y quienes los demás me imponen que sea.

-Al final, no somos nadie.Eso quieren ellos. Que no sea nadie. Algo

etéreo. Su objetivo es sentirse mejor consigo mismos.

-¿Acaso son malas personas?¡No! ¡Jamás!. Nada de maldad. Sólo trato

de ordenar sus significados y sus acciones. Trato de ordenarme.

Yo seré miope, señoras y señores, pero tengo los ojos bien abiertos. Tan abiertos que con ellos puedo hasta escuchar y hablar.

-¿Ustedes?Eso mismo. ¿Y ustedes? En la última

hora, antes de irse a cerrar los ojos, ¿pueden distinguir si han obrado desinteresadamen-te, si han sido justos con el otro, si han sido abiertos de cabeza, si han escuchado a quien lloró frente a ustedes? ¿O sólo buscan deses-perados instalar su discurso, sus ideologías, sentimientos y banderas a un supuesto ente?

Si es así, aléjate de mí.Si vos estás leyendo esto y sentís que ca-

minás tus días de esta manera, no te quiero conocer. No te quiero ver más. Me estás dañando; estás borrando mi identidad.

-No quiero desaparecer. ¡Por favor se los pido!

¡No! No vamos a desaparecer, Victoria. Medimos 1.54 cm. y somos muy altas.

Porque me ha costado tanto ser yo que me dan lástima aquellos que me quieran anular.

Estamos solas, sí. Pero el triunfo es todo para nosotras.

-Tengo una sola vida. Un solo discurso. Una sola identidad. La mía, mía y solo mía.

¿O solo buscan desesperados instalar su discurso, sus ideologías, sus

sentimientos, sus banderas a un supuesto ente?

Page 16: Frenesí octubre

pág 13

Escucho a varios estudiantes de comu-nicacion despotricar por los dos lados, a favor y en contra. Los oficialistas ningu-nean: “Esas fueron las preguntas de los estudiantes de la prestigiosa universidad de Harvard? Esa es la prestigiosa forma-cion? Cristina les cerro el pico a todos con sus respuestas.” Desde el otro lado no faltan quienes se amargan diciendo “Que manera de esquivar las preguntas!”Confieso no haber visto la conferencia

entera, y no viene al caso si me pare-ce que fue esquiva o no. Es la cuestion teorica de fondo que me intriga.Un compañero/colega me dijo una vez

“que la politica comunicativa del gobierno lamentablemente es gracias al media coa-ching”. Por ese medio periodistas enseñan a politicos a abordar situaciones polemicas y poder salir airosos. Asi esquivan pregun-tas haciendo puentes con cuestiones que pueden tratar y demas. Eventualmente eso llevo directamente al silencio de las pre-

guntas por parte del politico al periodista (y en cierta medida una eventual falta de insistencia del ultimo). Y desde esta doctri-na del atril se dejo de lado al intermediario.Mis ideales me llevan a pensar que con las

redes sociales la idea es fantástica. Que el pueblo tenga un acceso sin intermediarios y que interprete lo que quiera de lo que el gobierno publica. Pero la cuestion peligrosa del asunto es “¿que se publica?” y su obvia contraparte “¿que NO se publica y DEBERIA publicarse?” Y ante un pais cuya politica educativa fue ignorada por izquierda y de-recha ayer y hoy, con su correlato concreto en el dia a dia, “¿QUE interpreta la gente?”La politica comunicactiva del gobierno

redefinio el rol del periodismo parecie-ra. ¿Nos relegará al rol de simples co-mentadores sentados en las tribunas populares de cada lado de la cancha en este partido que es el dia a dia? Y si ese es el rol que ha de tener el periodismo moderno, cual va a ser su respuesta?

Redefiniendo Roles(O Que Nos Dejo la Conferencia de Cristina en Harvard)

Anselmo Valdez

POLÍTICA

Page 17: Frenesí octubre

pág 14

Kent School of English

Calle 6 esq 525 Nº 692 La PlataTel : 0221-154375481

e-mail: [email protected]

Como centro adscripto el instituto ofrece cursos de preparación para los exámenes internacionales de Anglia Examinations Syndicate :

* Ingles general: Advanced- Proficiency y Masters

* Certificación internacional en Traducción Aplicada, la cual se ofrece como dos exámenes separados e individualmente certificados – el

Certificado y el Diploma en Traducción Aplicada.

* Inglés comercial, 3 niveles de certificación.

*Viajes de Estudio a Chichester College, Inglaterra para estudiantes de inglés y docentes.

Tambien se dictan cursos de:

* Preparación para IELTS ( Academic English & General Training)*Preparación para los exámenes internacionales de la Universidad de Michigan ( ECCE & ECPE)*Ingles para Turismo (tres niveles)*Cursos especiales de pronunciación y conversación.* Cursos para todos los niveles: Niños, Jóvenes y Adultos.*Apoyo en todos los niveles.

Page 18: Frenesí octubre

pág 15

Gamer. Alguna vez te criticaron, te llamaron antisocial o que no tenías vida. Te gustan los videojuegos o videogames. Desde chiquito te criaste con Mario Bros. Al poco tiempo conociste el Winning Eleven. De grande conociste el League of Legends. Les rogaste a tus viejos. Pasaste tardes y noches enteras en lo de un amigo. Jun-taste moneda por moneda, el dinero para poder comprarte esa consola que tantos años te ayudaron a pasar el tiempo. Te encerraste en el cyber a pesar del calor, el olor, el dolor de cabeza. Siempre dijiste presente. Vos sabés quién es. Lo reco-noces. Aunque por ahí te equivoques.Dentro del mundo gamer existen di-ferentes tipos de jugadores que se distinguen según las preferencias de acuerdo a las consolas o plataformas. Hay quienes eligen la Play Station (PS), X-Box o la computadora, entre otras.“La computadora es de donde parte el dise-ño de las consolas, del software en general”, relató Gonzalo, confirmando su preferencia. Dentro de ellos, se destacan quienes se au-todenominan “pros”. Son los “snobs” de los games. Insultan y critican a los nuevos (“no-obs” o novatos) y a los usuarios casuales.La ciudad de La Plata no es un caso aislado en relación al universo de los videojuegos. La llegada de internet, primero a los cyber cafés y luego a los hogares en forma masiva, permitió la apertura e inserción de aque-llos que criticaban a los usuarios diarios.Hoy en día, existen convenciones y eventos de participación para aquellos amantes de las consolas. Tal es el caso de la C.G.C Connection que se realizó el mes pasado en la ciudad, donde coincidieron cientos de personas, entre ellas curiosos que querían experimentar en carne propia el ambiente.Un gamer platense, reconocido como tal,

Ser un gamer

expresó que los videogames “son un escape a la realidad, como cualquier adicción”. Más allá, o quizá menos allá de eso, sig-nifican una forma de divertirse, de pasar el rato, de interactuar con otros usuarios. Jugando con alguien al lado o a través de internet es una manera de relacionarse.José, amante de los juegos para com-putadora, dijo que “eso es una genera-lización. Siempre hay excepciones”.Lucía, estudiante de Psicología de la UNLP, evidenció que “depende de la personalidad del gamer, de su introversión o extroversión. Muchos juegos realizan encuentros masivos de gamers donde se conocen, compar-ten fiestas, hacen torneos. Socializan”.Por más que los gamers sean criticados, todos alguna vez hemos jugado a algún videogame. Hoy en día hasta los celula-res vienen con juegos incorporados. Empezando por la vieja Nintendo o el Family Game (Contra, Mario Bros); después con la plataforma Sega (Mortal Kombat, Sonic); o la computadora (Carmen, Age of Empires, World of Warcraft). Porque nos enfurecimos cuando nos trabamos en algún nivel o perdemos vidas. Porque invertimos dinero en ellos pero no nos defraudaron nunca. Porque nos hicieron compañía. Por todo eso. Salud, gamers.

Por Zeky Gimenezraveyhips.blogspot.com.ar

Zeky Gimenez

Cada vez más personas utilizan los videogames para pasar el rato. Durante muchos años, los gamers fueron criticados. Hoy vienen incluidos hasta en los celulares.

TECNOLOGÍA“Dichosos los que pueden dar sin recordar y recibir sin olvidar.”

Page 19: Frenesí octubre

pág 16

Desde que dije que todo cambiaría má-gicamente, decidí ya no tener nombre. Bueno, en realidad no sé si alguna vez lo tuve, creo que sólo fue una imaginación, un supuesto orden de personas y cosas que decidieron llamarme como lo hacían. Todas esas veces en las que me habían llamado o señalado, ya las había dejado atrás. Ahora, comenzaba un nuevo punto de partida, un renacer desde mis propios años.Pensé que así como yo desmontaba y “borraba” mi nombre de este mundo, los demás ya olvidarían lo que algún día fui; lo que un día amé; todo lo que aprendí a sufrir; la cantidad de momentos en los que partí y otros en las que debí dejarme morir; las tierras en las que hurgué; los campos que crucé y tantas otras cosas que formé. De todo esto, era un regreso: recor-daba y así borraba, pensaba y ta-chaba, olvidaba y corregía…Busqué tanto ser quien fui, añoré mu-

Soy sin nombre

Jonás F. Mercado

CUENTO

chos buenos momentos para dejar mi marca en tantos lugares y cosas que toqué, que acepté que, de hoy en adelante, no iba a tener nombre.Decidí ser una onomatopeya, un suspiro, quejidos, murmullo, goce, excitación, fiebre y escalofrío... Que detrás de las ventanas sea solamente una mirada y que, más allá de ella, sea la imagen de los colores que te dan vida y te vuelven más salvaje.

foto> Pablo Corradini

Page 20: Frenesí octubre

pág 17

Que feo es cuando vas a un baño ajeno y te deja pagando; la primera vez que lo hacés y ¡ohh, justa casualidad!, se traba y es muy grande para tan pequeño agujero. He aquí el comienzo del problema: auto-máticamente se activa parte de tu zona de emergencias y tu inteligencia emocional para ver qué excusa coherente se te ocurre si eso no baja. Sin embargo, cuando buscás al culpable, te das cuenta que el baño ya estaba tapado -o sea, no te sentís tan cul-pable-: claro, el tema es que nadie te avisó, pero bueno, no hay tiempo para analizar el por qué se tapo el inodoro de Pereyra.Mientras tanto, tratás de ver cómo ca-

rancho sacás al Arzolote de ahí y te das cuenta que, tirando la cadena varias ve-ces, no funciona. Lo peor de todo es que el inodoro se llena hasta el tope y la cosa no baja… ¡qué cagada eh! ¡qué complica-da la situación! Y reaccionás, te ponés a pensar qué haría McGiver o el Agente 007 para tal acontecimiento de vida o muerte, sobre todo cuando estás en casa de tus suegros e hiciste una buena digestión.Menos mal que siempre hay un cepillito

limpia mierda: lo usás, pero eso no alcan-za, así que tirás nuevamente la cadena y le buscás la ingeniería; comenzás a tratar de que no se desparrame todo ello, por-que sino entre el río marrón y el pequeño agujero no vas a ver cómo se puede so-lucionar. La cuestión está en que, mien-tras te esforzás, el agua finalmente vaya bajando porque sino se te inunda todo.Justo allí, con mucha onda, encontrás

un gran palito con una sopapa y le das, como loco con pala. Los de afuera de-ben pensar que estás en medio de una batalla con el monstruo del Lago Ness (por el ruido que hacés de las aguas turbias) pero no, estás peleando contra

Reacciones de mierda para un James Bond

lo que acabás de dejar: un gran residual estercóreo y, con suerte, sin olores que traspasen las paredes. Ahí estás como un gil, dándole rosca al agujero para que la mierda se baje; pero no, no pasa naranja.De repente, te mirás al espejo y, del fiel re-

flejo, ves un tipo que parece tener la postura de un campero arremangado con pala en mano. Pero la realidad es que ese tipo está tratando de pasar el sorete sin peaje, así que allí vamos, otra vez, “treque te treque”, pero la cosa no anda. Le das a la cadena, te mirás al espejo y decís “en algún momento de la vida me tenía que pasar”, y con cara de gil recibido le decís al del espejo: ¡qué

sorete hijo de puta, realmente, una mierda!Pero lo peor no termina allí: tus cache-

tes comienzan a sonrojarse cuando te tocan la puerta y sabés que te falta poco, pero la gran bestia parece irse y retoma como pidiendo revancha. Que situación tan extrema. ¡¡Ya va!!, gritás, y abrís la canilla para disimular, mientras le seguís dando al palito y al botoncito hasta que el gladiador se rinda y decida pasar al in-framundo. Pobre del gil que viene atrás, seguro apreta el Poett y raja a la mierda. Por dentro, te remuerde el miedo pero

recordás toda la acción y salís con la ca-beza en alto, hecho un James Bond, con expresión de ¿qué estaban hablando? Te estirás un poco y con la cara más rota que tengas decís: “¡estaba bueno el asadito!”.

porN

HUMOR

Que feo es cuando vas a un baño ajeno y te deja pagando.

Page 21: Frenesí octubre

pág 18

Garabateado sobre el papel amarillento:Hallé este texto, hace ya varios meses, y

me cambió la vida, pero ahora temo por mi vida: vienen por mí y vaticino que no voy a sobrevivir. Dejo para vos, futuro lector, este papelucho en este hoyo en la pared para que lo halles y lo divulgues. Es necesario despertar.Debajo se lee un texto en el mismo lenguaje

incomprensible, el cual traduje, como pude, desde mis conocimientos lingüísticos -exhaus-tivos diría yo- para que sea divulgado entre nuestra modernidad venidera. Acá está, enton-ces, espero que alguien prefiera transcribirlo a quemarlo; por mi parte, me deshago de él por cuestión de principios instintivos: amo la vida.Hace poco tuve un sueño algo extraño.

Me hallaba disperso en mi cama cuando, de repente, vi una luz en la oscuridad. Por supuesto, yo creía que se trataba de la reali-dad, porque nunca en mi vida había sentido conscientemente el pasaje de la vigilia al universo onírico; pero, aun así, era un sueño, según parecía (no lo digo por la sensación del momento, sino por la posterior percepción de la vigilia, por contraste). En él se veía a un hombre que parecía ser como ustedes quieren que sea, y hablaba en el idioma que ustedes hablan. Lo relevante fue lo que dijo. No lo entendí, realmente, ya que ello no estaba en el libreto, pero pude deducir, por los sonidos (o quizás por pura retahíla de pensamientos sucesivos que le dieron su propio significa-do), que expresó algo así como lo siguiente: “¿Por qué eso?”. Por increíble que les parezca, pude retener el verso, más allá de que no haya estado jamás en ninguna parte del libreto, y desperté con esas palabras en la punta de mi lengua; es decir, era capaz de pronunciarlas.Salí entonces a la calle y me vi pronto en el trabajo con uno de mis colegas. Dejé el pico a un lado y lo miré. Como indicaba el libreto de los gestos, él se vio observado y me miró

El libretocon algo de inseguridad. Enseguida, recitó el verso número 1309 de la página 76, el capítulo sobre RETROALIMENTACIÓN INICIADORA: “¿En qué pensás?”. Lo miré fijamente y hallé algo raro en lo que dijo. No digo que no haya dado en el clavo, por supuesto que lo había dado; mi compañero había sido siempre un maestro en la versatilidad del libreto y se sabía todos los pasajes sociales habidos y por haber. Pero en su voz había cierta reticencia, algo así como cautela. Paradójicamente, noté a su vez algo así como un esbozo malogrado de seguridad. Parecía un muro de piedra: protegía pero ostentaba la debilidad del que se hallaba detrás. Entonces lo miré, y en lugar de ofrecer una de las 978 variantes que responden, según el libreto, a dicha indagación, hice lo que ninguno de ustedes podría imaginarse: violé el libreto. Sí, como lo leyeron o lo tradujeron: violé EL LIBRETO DE LA VIDA SOCIAL PARA EL BIEN COMÚN Y LA GARANTÍA DE LA PAZ ETERNA, di una respuesta que no estaba en ninguna parte del mismo.Aducir por razones sería algo inefable. ¿Por

qué lo hice? No sé, pero sentía algo raro en mí. Descubrí, ya se habrán dado cuenta al leerme, que hay más expresiones más allá de las que nos brinda el COGOBIERNO MUN-DIAL DEL PARAÍSO, a lo largo de nuestra vida, a través del libreto. Hallé algo raro y ciertamente heresiarca: mi propio libreto. Sí, aunque sientan que sus corazones tiemblan y sus manos transpiran, así como sus mentes se queman al leer estas líneas, fue así como lo viví. Quizá me había cansado de repetir cosas como “¿Cómo estás?”, “Bien ¿y vos?”, “Acá andamos”, “Dos pesos”, “Padre nuestro…”, “De nada, hasta luego”, “Déme una cerveza por favor”, etcétera. Tal vez el tanto estar repitiendo hizo a mi cabeza dar un click, una especie de deja vu revelador. No lo sé, pero lo único que tengo en mente es que puedo decir

Dani Schechtel

Page 22: Frenesí octubre

pág 19

más cosas, además de las que nos inculcaron en casa al inicio de los días y en la escuela en nuestra etapa de aprendizaje. Pronto vi el infinito frente a mí: era capaz de crear construcciones nuevas. ¡Podía armar ideas nuevas! No había forma de creerse aquello, y vos, lector, seguro estás en el mismo estado. Seré un loco o un maniático, pero esto no puede pasar desapercibido: el libreto no es la verdad de las verdades sociales, no te ayuda a recorrer la vida. ¡Al contrario, te encasilla!En fin, lo que le dije a mi compañero ya

no interesa, pero fue lo que oí en el sueño: “¿Por qué eso?”. Al instante se amedrentó, se enredó en su propia lengua y formuló un par de versos inconexos y completamente incoherentes. Me pregunté cuánto tardaría en volver a recobrar el sentido del libreto; pero a su vez una duda nació en mi cabeza, y con eso la completa noción del universo cambió a mi alrededor: quizá mi interlocutor pensara ahora lo mismo que yo o quizá se hallara sin respuesta y estuviera en plena pesquisa de reminiscencias de algún pasaje mal dado en clase o una noche en la que quizá se hubiera dormido estudiando. Como fuera que suce-dió, noté un cambio en su postura y en su imagen. Lo que hace a su respuesta, jamás respondió nada, pero los dos ya teníamos un acuerdo implícito, una pequeña complicidad.Ese día una carta llegó a casa. Decía algo

de que debía presentarme al CENTRO DE FILTRACIÓN DRAMÁTICA a revisar ciertos conceptos acerca del libreto. Al instante me sobresalté: parecía una invitación a un escaneo mental, lo que suponía una sola cosa: una perfecta memoria o el perfecto castigo. El que no sabía el libreto y generaba una duda en su cabeza, debía sufrir un proceso de reacomoda-ción. Pero ¿por qué les cuento esto? No lo sé, quizá por el terror que siento; en fin, déjenme seguir narrando en pretérito y crear esta ilu-sión de supervivencia, aunque sé que me van a acortar la sintaxis a frases cortas. Conozco ese tratamiento, un amigo lo vivió. Quedó in-capacitado casi. Lo encerraron en un CENTRO DE REHABILITACIÓN LINGÜÍSTICA y jamás salió de allí; vive atado a una cama, vociferan-do locuras que ya no me parecerían tan locas si las oyese desde esta nueva perspectiva.

Me dirigí entonces al CENTRO DE FILTRA-CIÓN DRAMÁTICA y me hicieron un test. Siempre había sido muy hábil con las rela-ciones sociales, aunque mi memoria fuera bastante pobre. Lo que respondí acertada-mente provino de mi capacidad de crear respuestas desde mi experiencia y el sentido común (y no de ninguna memoria sobre diálogos del libreto), término que acuñó un longevo sabio que vivió en el sótano de una casa de mi barrio durante seis años, hasta que lo hallaron y lo ejecutaron por analfabe-to, por no saber hablar o no hablar como se debía. Es decir, visto desde una perspectiva más amplia, a decir verdad, siempre había creído yo que hablaba en relación a lo que creía que era lo correcto, pero siempre me hallaba repitiendo frases que había aprendi-do a rajatabla y que habían sido creadas por el gobierno para preservar el orden. Ahora, mi sentido no era tan común como aquel vejete dijera, o mejor, tenía completo poder sobre el verdadero sentido común, del cual este viejecito había hablado realmente.En el centro, no se percataron de mi nuevo

estado y usaron las mismas fórmulas de siempre para tratarme. Respondí con seguri-dad a todo lo que me repetían formulaicamen-te y pronto me hallé exasperado. No podía evitar apretar los puños al sentir que mi boca hablaba por mí, pero no podía hacer otra cosa que aflojar mi corazón ante tanta idiotez. Me fui de allí con la tranquilidad en un puño y la impotencia en el otro. Comenzaba a entender que lo que le habían hecho al vetusto sabio de mi barrio y a mi amigo era pura injusticia. Yo no era ningún indulgente y sentía cierto rencor, como el sistema había propiciado que sintiera, pero decidí hacerle frente.Pasaron varios días y me dispuse a volver a

estudiar el libreto. Hallaba muchos espacios vacíos de por medio, le faltaba consistencia al documento. Más allá de su supuesto origen divino, encontré algunos versos en desuso que no tenían siquiera sentido. Me dispuse a investigar a fondo la cuestión y por ello me dirigí a la casa en la que vivía el sabio anciano. Me recibió formulaicamente el hijo del antiguo protector del viejo y me hizo pasar. Le pedí por favor si no me prestaba los libracos antiguos

Page 23: Frenesí octubre

pág 20

del ahora difunto achacoso personaje. Me dijo que me los daba con una  condición: si me los quedaba para siempre y juraba decir que eran míos en caso de que fueran hallados por el COGOBIERNO MUNDIAL DEL PARAÍSO. Le hice el debido (y ya memorizado) ritual de juramento y me llevé la pila de libros a casa.Hallé tantas verdades que no tengo ni el

espacio ni el tiempo para explayarme por este medio. Comencé a observar que había otros patrones de diálogos y versos. Hallé conversaciones monológicas en muchos libros e, incluso, charlas ficticias con voca-blos nunca antes vistos. Encontré que dentro de las obras había muchas obras con más mandamientos y reglas. Parecía el universo un contenedor de pequeños universos. Hallé el universo psicológico, bíblico y el biológico. Me encontré a la deriva entre varias lenguas inentendibles, fórmulas jamás vistas ante-riormente, o pretendidas negligentemente por algún casual lector irresponsable y cobarde. Supongo que lo nuevo amedrenta, amilana, arredra, atemoriza, aterroriza.Se ven entonces varias páginas en un

alfabeto imposible de codificar. Pare-ce que el diario fue escrito por varias personas. Luego, hay algo más:Temo por mi vida. Estuve hablando con ami-

gos y me dijeron algo que jamás había oído: te delataré. Hace una semana salió a luz la nueva ley, la edición del capítulo sobre CONSERVA-CIÓN DE LA PAZ A TRAVÉS DE LA PRAG-MÁTICA PERLOCUCIONARIA. Se agregó el verso te delataré junto a varias fórmulas para poder dar aviso a las autoridades de que hay un hereje o rebelde que subversivamente alimenta una revolución lingüística. Desde entonces, me pregunto cuánto me queda de mi encierro seguro hasta que me larguen a la libertad del hambre y la miseria, la cual me va a llevar inevitablemente a la muerte.Creo que esta noche van a venir por mí, lo

presiento. Hoy, al llegar a casa del trabajo, hallé mi pared escrita: “traidor” y mis papeles estaban revueltos. Perdí gran parte de mis escritos, pero seguramente dejaron éstos para probar que soy un subversivo, según esta terminología. Espero, sinceramente, haber iluminado a alguno de mis interlocu-

tores. Me pasé las últimas semanas trans-figurando los conceptos, cambiando los significados, jugando con las situaciones, intentando revivir la creatividad en cada uno de mis colocutores. Intenté reavivar la llama del individualismo, si se entiende la idea. En fin, comprendí que el mundo está loco, o lo estoy yo, pero que algo hay que hacer al respecto. El papel va a quedar en un hoyo en la pared, así que de allí lo habrás sacado si estás leyendo todo esto. Por lo pronto, ya creo que no estoy acá, que esto no está pasando.Ahí se termina el texto. El papel que se halló

en aquel hoyo estaba en una lengua antigua que he transcripto, el cual constituye una fuente secundaria; la fuente primaria, es decir, el papiro, fue perdido según parece, pues no hay indicios de él en ninguna bibliografía sobre el tema. No he hallado demasiado acerca de estos hechos, ni sé colocarlo en la línea del tiempo. Pero no fue eso, de cualquier manera, lo que me llamó la atención sino el conteni-do y la resonancia que dichas ideas podrían tener en un mundo como el de hoy, en el cual la comida está lista para ser digerida, no tiene que ser procesada por nuestra cuenta. Leer este texto y traducirlo fue como oír

ecos de Sócrates, Jesús y Siddharta. Me hallé ante una negativa vital: temí por mi vida. Pero no puedo ir a favor del libreto, así que me hallé negándole a mi moral una culpa que realmente sentía, pero que otra moral más poderosa me obligaba a sufrir con tal de compartir semejante verdad. En fin, creo que si llegan a hallar este texto voy a correr grave peligro. He oído hablar de viajes en el tiempo, de control de cerebros a través de drogas, de supervisión constante de nuestras acciones, de quema de libros, pero jamás había creído que nuestra realidad sea el corolario artístico y fosilizado de un libreto.Si no fuera porque el psicólogo es otro

retazo de la gran obra dramática de mi vida, iría en este mismo instante a contarle lo que tengo en mi cabeza. Me pregunto si usa-ría la tan conocida fórmula de la amenaza de un inminente soplo. Recemos porque las fórmulas sigan siendo parte de mi co-tidianidad, antes de verme implicado en el peor de los delitos: la improvisación.

Page 24: Frenesí octubre

SAHAYARServicio integral de limpieza

Limpieza y mantenimiento de edificios privados en general

Parquizaciones

Limpieza de frentes, toldos y piscinas

Finales de obra

Tel: 47-17062Cel: 221-504-4302Oficina: 509 N° 1864