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Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España Author(s): Tatjana Gajic Source: Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies, Vol. 11 (2007), pp. 25-41 Published by: Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies Stable URL: http://www.jstor.org/stable/20641846 . Accessed: 10/06/2014 21:56 Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at . http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp . JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range of content in a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new forms of scholarship. For more information about JSTOR, please contact [email protected]. . Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies and Department of Spanish and Portuguese, University of Arizona are collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies. http://www.jstor.org This content downloaded from 194.29.185.66 on Tue, 10 Jun 2014 21:56:10 PM All use subject to JSTOR Terms and Conditions

Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

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Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en EspañaAuthor(s): Tatjana GajicSource: Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies, Vol. 11 (2007), pp. 25-41Published by: Arizona Journal of Hispanic Cultural StudiesStable URL: http://www.jstor.org/stable/20641846 .

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Fronte ras liquidos:

Agua y bio-politica de la territorialidad en Espaha

Tatjana Gajic is an Assis tant Professor in the De

partment of Spanish and

Portuguese at Emory Uni

versity. She is completing a book manuscript entitled

^Defeated Thought: Legacy of Spanish Liberalism in

the Making and Unmaking ofFrancoism." This article is the first step in the deve

lopment of her new project about modern Spain and

bio-politics

El agua brota como el mayor conflicto geopolftico del

sigloXXI" reza una fr?se de la sinopsis de la pelicula Sed.

Invasiongota agota (2004).1 No hay que ir demasiado

lejos para encontrar datos que justifiquen tal afirmacion. La

misma informaci?n publicitaria para la pelicula informa que "se espera que en el ano 2025, la demanda de este elemento

tan necesario para la vida humana sera un 56% superior que el suministro." A su vez, Barlow y Clark, autores de Oro azul.

Las multinacionalesy el robo organizado de agua en el mundo,

especifican que "el consumo mundial del agua se dobla cada

veinte anos, mas del doble de la proporcion del crecimiento

de la poblacion humana"(28). Un estremecedor documento

visual, la fotografia de Desiree Martin "Cayuco en las costas

de Tenerife," ganadora del Premio Ortega y Gasset de Perio

dismo Digital en 2007, muestra un grupo de inmigrantes cuyo

primer contacto con la tierra espanola

es una botella de agua

lanzada hacia ellos desde un barco de salvamento marino. La

fotografa logra captar el momento en que la botella, brillante

contra el trasfondo azul de un cielo sin nubes, parece vacilar

antes de caer en manos oscuras que en un gesto de maxima

tension se extienden hacia ella.

Por razones que tienen que ver tanto con su geografia como con su historia, Espana es el caso paradigmatico de un

pais cuyo desarrollo econ?mico, politico y social se ha visto

condicionado por los problemas asociados con la falta y la

desigual distribution del agua. Desde los albores de la epoca moderna en el siglo XVIII hasta hoy, Espana ha vinculado la

promesa de su modernidad y su europeizaci?n a la necesidad

de mayor control y mejor uso de sus caudales acu?ticos. Si

Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies Volume 11, 2007

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26 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

a eso se anade la proverbial dedicaci?n a la

construction de grandes obras hidr?ulicas

de todos los gobiernos espanoles durante el

siglo XX?con el franquista a la cabeza?se

comprender? la rotundidad de la siguiente afirmacion de Eric Swingedouw:

Hardly any river basin, hydrological cycle, or water flow [in Spain] has not been subjected to some form of human intervention or use; not a

single form of social change can be understood without simultaneously

addressing and understanding the transformation of and in the hydro logical process. (95)

Dada la relevancia (y ocasional vehemencia)

que han adquirido los debates sobre el agua en Espana tanto en los medios de comunica

cion masiva como en el campo academico y entre los movimientos sociales, es llamativa

la ausencia de una reflexion sobre estos de

bates en el ?mbito de los estudios culturales

espanoles. Esto es aun mas sorprendente por tratarse de un tema en el que se juntan

la actualidad mas absoluta con una proyec ci?n historica que hace diflcil imagin?r una

discusion sobre la modernidad espanola sin

analizar el papel que ha jugado el agua en

el imaginario cultural y politico del pais. Ademas, los problemas relacionados con el

agua posibilitan y hasta requieren un estudio

interdisciplinario cuya ubicacion "natural"

deberfan ser los estudios culturales. En otras

palabras, de la misma forma en que las cau

sas y las implicaciones de la escasez del agua

traspasan las fronteras politicas existentes, el an?lisis critico del discurso de la escasez

tambien requiere hacer menos rigidas, mas

fluidas, las fronteras entre las ciencias socia

les, la literatura y la teoria critica.

Este ensayo se propone examinar dos

configuraciones del discurso de la escasez del

agua en Espana que pertenecen a coyunturas

hist?ricas precisas: el movimiento regenera cionista a finales del siglo XIX, y los debates en torno al Plan Hidrol?gico Nacional

promulgado en los albores del siglo XXI. El marco interpretativo del ensayo esta organi zado en torno a dos propuestas de lectura.

La primera indica que en ambas ocasiones se debate el papel del estado en la creaci?n

de una nueva politica del agua. En el caso

de Joaquin Costa, se trata de examinar el rol

del estado en fomentar un nuevo modelo

de agricultura, mientras que en los debates

actuales se trata de vislumbrar las conse

cuencias politicas de un nuevo concepto del

agua definida como un bien econ?mico o

una mercancia que se puede separar de su

medio natural (no). La segunda propuesta es que tanto la politica hidr?ulica de Costa, como la actual politica del agua representan dos formas de bio-politica orientadas hacia

la regulaci?n de la vida de la poblacion por medio del control del agua y del terri

torio. Por ultimo, la figura del novelista e

ingeniero hidr?ulico Juan Benet, clausura el articulo por ser el el que, en el contexto

cultural del siglo XX, representa el eslabon

perdido que permite vincular las discusiones

politico-econ?micas sobre el agua con una

fabulaci?n literaria sobre el papel que juegan la politica y la tecnica en la empresa belica

de la conquista territorial.

Joaquin Costa: Reducir las fronteras

del reino de la miseria

Hemos perdido el sentido del espacio, como

ya antes habiamos perdido el sentido del

tiempo.

Joaquin Costa

Junto con el "cirujano de hierro," el

concepto de "politica hidr?ulica" ofrece la

expresion mas emblematica del programa

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Tatjana Gajic 27

de regeneration nacional propuesto por

Joaquin Costa. En el marco de la politica hidr?ulica costiana, la necesidad de una

reforma economica, social y politica de Es

pana partia de la b?squeda de unasolucion

a los problemas que aquejaban al campo y la agricultura. La clave de esos problemas,

cuyas manifestaciones mas evidentes eran

escasa productividad agraria y la despo blaci?n del campo bajo los efectos de la

urbanization e industrialization, se encon

traba en la escasez y desigual distribution

del agua en la peninsula. Asi, para Costa,

el agua se convierte en el factor clave para

regular la relation entre los distintos polos del desarrollo: la agricultura y la industria, el campo y la ciudad, la libertad economica

y la politica, la iniciativa privada y el interes

nacional.2

El problema del agua y la agricultura se relacionaba en la Espana decimononica

con otro fenomeno importante: el cambio

en el regimen de la propiedad de la tierra es

timulado por el proceso de desamortizacion, llevado a cabo en oleadas sucesivas a partir de finales del siglo dieciocho, y de modo

mas significativo en 1820,1836 y 1855.3

Pieza clave en la desintegracion del Antiguo

Regimen, la desamortizacion desmantelo

el sistema traditional de la propiedad, en

el que la tierra pertenecia a la nobleza, la

Iglesia, o al tipo de propiedad comunal

conocido como "bienes de propios," gene ralmente municipios. En el caso de Espa na, desmembrar las grandes propiedades feudales y disminuir el poder de las fuerzas

sociales tradicionales, era una necesidad

perentoria para el fragil estado liberal. Un

estado cuya legitimidad e integridad terri

torial eran constantemente cuestionadas,

tanto por las fuerzas politicas reaccionarias

(el absolutismo de Fernando VII, seguido por la rebeli?n carlista), como en el arnbito

econ?mico, donde a las dificultades de una

economia de guerra, se juntaron los efectos

de la ola de luchas por la independencia en

las colonias latinoamericanas y los inicios

de la industrialization. La guerra, la im

plantation del regimen capitalista y la crisis

social, estos son los factores que en el siglo diecinueve suscitan el problema de la tierra

vinculado, directa e indirectamente, con la

territorialidad.

En sus resultados, la desamortizacion

fue mas que una medida politico-adminis trativa y menos que una radical reforma

agraria. Visto en retrospectiva y a largo

plazo, el proceso de la desamortizacion da

prueba, en la opinion de muchos historia

dores, de la existencia de un circulo vicioso

en la actuation economica y politica del

estado liberal espanol. La primera gran ola

desamortizadora del estado liberal, en la

que se pusieron en venta las propiedades eclesi?sticas, obedecia a razones politicas

respaldadas por la racionalidad economica.

El proposito de la venta de las propiedades eclesi?sticas era multiple: asestar un golpe a la Iglesia que, en el contexto de la guerra civil, ofrecia apoyo a las fuerzas enemigas del estado liberal (carlistas), y crear una

nueva clase de propietarios fieles al regimen, llenando de paso las areas del estado de

los fondos necesarios para ganar la guerra contra los carlistas. La propiedad privada de la tierra ofrecia la base economica para la consolidation politico-territorial del

estado liberal, a la vez que prometfa una

identification simbolica entre la nueva clase

de propietarios y el estado.

La otra cara de la moneda de la rees

tructuracion de la propiedad al amparo de

una politica estatal, fue el modo en que se

hizo la industrialization del pais. La indus

trialization de Espana, cuyo emblema era

el ferrocarril y la construction de una red

ferroviaria, fue uno de los proyectos fun

damentales del estado liberal que en 1855,

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un ano despues de retomar el poder, aprobo dos leyes: la Ley de Desamortizacion (una

ampliation de la ley desamortizadora de

1836, suspendida por los conservadores),

y la Ley de Ferrocarriles. Los historiadores

Josep Fontana y Gabriel Tortella han escrito

sobre una verdadera fiebre de inversiones en la red ferroviaria espanola, liderada por la banca francesa. A ese influjo del capital

privado se sumo el estado con importantes subvenciones a las companias constructoras

de la red ferroviaria. Pero el mismo retraso

economico espanol, que debia haber sido

compensado por el r?pido crecimiento en

la construction de la red, llev? a la empresa constructora a un desenlace parad?jico. El escaso desarrollo industrial del pais arruino

la rentabilidad del proyecto: habia vias y rie

les, pero apenas habia bienes que transpor tar. La promesa del progreso indirectamente

confirmo el atraso espanol representado por el desfase temporal entre el desarrollo

industrial del pais y la construction de la

red ferroviaria:

[E]l establecimiento de ferrocarriles,

que en otras partes habia sido con

secuencia de un estado elevado de

riqueza y adelanto, debia aqui nec

esariamente precederlo y producirlo.

(Fontana 179)

El pensamiento regeneracionista de Joaquin Costa se levanta sobre una critica del sistema

economico de la Restauration basado en dos

principios mencionados: la desamortizacion

de la tierra y el empuje estatal a la indus

trialization por medio de la construction

de la red ferroviaria. Igual que el liberalismo

decimononico, el regeneracionismo cos

tiano defiende la intervention estatal en el

desarrollo economico, pero a diferencia de

los liberales, en Costa, el papel del Estado no se reduce a una politica de inversion

industrial compaginada con la apertura

agraria a los mecanismos del mercado, sino

que depende de una regeneration de la

agricultura. En su obra mas famosa, Oligar

quia y caciquismo, Costa definio la politica hidr?ulica como "una expresion sublimada

de la politica agraria "

(204). El prop?sito de mi lectura de Costa es desglosar y analizar

las implicaciones politicas y bio-poh'ticas de esa aproximacion, para demostrar que la importancia de la agricultura reside en el

hecho de concebirla como la clave de la pre servation no solo del estado sino, en ultima

instantia, de la vida biologica y social.

El programa costiano de la regenera tion de la agricultura, basado en la politica hidr?ulica, parte de una conception con

junta de la vida:

[E]l modo de hacer vivir a los dem?s es disminuir la cantidad de muerte, esto es, del dolor [...], es

principal mente, reducir las fronteras del reino

de la miseria. (Costa, Politica 125)

En esta frase se entiende la vida en un sen

tido biol?gico, econ?mico y territorial, ya

que es en el ?mbito de lo territorial donde las

condiciones de la production se cruzan con

las condiciones de la reproduction de la vida

biologica y social. Para Costa, el fomento de la vida es el rol por excelencia del estado

al que le incumbe vincular el desarrollo

agricola a la reforma social, y la riqueza del

suelo al sostenimiento de la poblaci?n. A esa

ligazon entre la vida y la economia national

y, en ultimo termino, entre la bio-politica y la politica, apunta Costa cuando amonesta

en tono profetico que:

como dijo [...] el sabio por excelen

cia, Salomon [...] melius es enim mori

quam indigere, vale m?s estar muerto

que ser pobre. (Costa, Politica 125)

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Tatjana Gajic 29

Las fronteras de la miseria no son tanto

politico-administrativas como territoriales

y bio-polfticas. Se trata de fronteras que al

marcar la tierra en su condition de produc tiva o no-productiva, rentable o no rentable, tambien marcan a los que la habitan como

productores o como poblacion no-produc tiva, siendo esta ultima de la que surgfan huestes de emigrantes y proletariado urbano

en la Espana finisecular. En el vocabulario

actual, cuyo uso no es incompatible con los

analisis de Costa, diriamos que las fronteras

de la miseria son las que dividen a los ciuda

danos de los no-ciudadanos. Las fronteras de

la miseria son trazadas por el hambre o por la sed, y la ?nica postura critico-intelectual

que alguien como Costa puede asumir frente

a ellas, es que aquel, lease tierra o estado, que no da la vida, la quita.

Para Costa, son dos los argumentos

principales que indicaban que el estado

deberia tener la competencia linica y exclu

siva en asuntos relacionados con la politica del agua: primero, porque el estado era el

?nico sujeto politico al que se podia confiar

la empresa de construction de los canales

de riego (a diferencia de la empresa de la

construction ferroviaria cuyo motor era el

capital privado); segundo, por el valor que tiene el agua para la vida. En otras palabras, la importancia de la regulation y el control

del abastecimiento de agua no se reduce a la

tarea tecnica de mejorar la distribution de

los caudales, sino que implica la posibilidad de aliviar la miseria y remediar la escasez.

A diferencia de otros recursos, como es la %

riqueza minera, el agua en Espana funciona

como un indice de la escasez. La amenaza

constante de la escasez y la miseria que,

seg?n Costa, definia la vida del campesino

espanol y lo subordinaba a la tierra, se hizo

aun m?s patente a causa de la crisis del

campo y la agricultura en la segunda mitad

del siglo diecinueve. Los sintomas amplia

mente discutidos de esa crisis mundial y no

solo espanola, eran los cambios radicales en

el mercado de cereales, la inflation de los

precios de alimentos que, a su vez, produjo una crisis de subsistencias y una oleada de

disturbios sociales.4

En el contexto de esa crisis agricola mundial, desarrollar un nuevo modelo de

agricultura pasaba por humanizar y hacer

mas productiva la tierra por medio del pleno

aprovechamiento del recurso-agua. De la

posibilidad de crear una nueva agricultura, a la que Costa denominaba arm?nica, cons

ciente o racional, dependia no solo el futuro

de la agricultura como tal, sino tambien la

suerte del agricultor. Para poder sobrevivir, este ultimo deberia distinguirse tanto del

obrero, atrapado por la industria y la ciu

dad, como de los campesinos pobres cuya esclavitud a la tierra infertil Costa iguala una

y otra vez a la muerte:

[E] se surco fementido que abris, eter

no, inacabable [...], m?s que surco

para sembrar simiente agradecida, es

la sepultura donde enterrais el porve

nir de vuestros hijos y vuestra propia vida. (Costa, Politica 59-60)

Con su doble enfasis en la transformation

del agua de un bien escaso en portador de

vida y riqueza, y en la transformation del

campesino de un esclavo de la tierra a un

regante, la politica hidr?ulica aboga por una

superacion del sistema politico basado en el

parlamento y los partidos para conformar

una nueva misi?n propia y exclusiva del

estado: la mision de gobernar la poblaci?n

por medio del uso y el control del agua. El control de la poblaci?n, o la pre

ocupacion por ella, es lo que para Foucault

diferencia la conception de poder que el

llama "gubernamentalidad" (governmentali

ty) de las articulaciones del poder centradas

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en la figura del soberano.5 A diferencia de

la soberama, que emana del poder personal del principe consagrado por las leyes que todos deben obedecer, la gubernamentali dad concierne saberes y tacticas dirigidas a

la organization y preservation del bienestar

de la poblacion. La primacia del control

militar y politico que definia el ejercicio del poder en cuanto poder soberano, est?

aqui sustituida por la primacia de saberes

de gobernaci?n, siendo la economia el m?s

importante de ellos.

Dentro del marco de la gubernamen talidad, la relation entre el gobierno y la

poblacion se concibe no como una relation

dictada desde el poder, sino como un des

pliegue de saberes, estrategias y pr?cticas necesarias para que el gobierno pueda cum

plir con la funcion que le es propia; funcion

cuyo arte consiste precisamente en auto-li

mitar, encauzar y moderar racionalmente su

actuation para responder a las necesidades

y caracteristicas de una poblacion concreta.

En una entrevista, Foucault caracteriza de

forma sucinta esa nueva conception del

poder que surge junto con una toma de

conciencia del car?cter complejo y en cierto

sentido aut?nomo de la sociedad:

It seems to me that at that very moment [cuando se descubre la

naturaleza propia de la sociedad] it became apparent that if one governed too much, one did not govern at all.

(352, enfasis mio)

Con sus iniciativas para sustituir la politica "a secas" por la politica hidr?ulica, Costa

introduce un cambio en la conception del

poder que va de la idea del poder como

mero hecho de su ejercicio, al desarrollo

de estrategias y saberes que constituyen la practica de gobernar. Eso conlleva un

cambio de enfoque en la action politica

que se traslada del arnbito parlamentario de la Restauration, acechado de constantes

crisis, a la organization de la agricultura y la economia, entendidas como modelos

privilegiados de relation entre el estado y la poblaci?n.

<;Por que la agricultura, m?s que

cualquier otro saber o rama de la economia

nacional, proveeria el modelo de actuation

estatal para Costa? Lei'da en clave foucaul

tiana, la respuesta que ofrecen sus ensayos,

recogidos en dos vol?menes titulados La

formula de la agricultura espanola (1911), seria que, transformada por la politica hi

dr?ulica, la agricultura ofreceria un ejemplo de gubernamentalidad.6 La agricultura seria

un modelo de equilibrio entre las fuerzas

naturales (fundamentalmente, el calor y la humedad); un ejemplo de colaboraci?n entre la materia inorg?nica y org?nica que se distribuyen y circulan entre las plantas, los animales y los cuerpos humanos; final

mente, seria un ejemplo de reconciliation

entre las demandas de la geografia (clima,

suelo) y la historia (poblaci?n, forma de go bierno) que, juntas, determinan el car?cter

y el destino historico de una poblaci?n y un

territorio concretos.

Pero, tanto o m?s que el arte o la

tecnica que busca establecer un equilibrio entre los elementos naturales y la sociedad,

para Costa, la agricultura es un repertorio de estrategias para regular el desequilibrio. Es una pr?ctica correctiva, reguladora, que

proyecta y planifica un equilibrio ideal como

meta final de la actuation del agricultor,

ayudado por el estado. En este segundo sentido, hablariamos de la "agricultura rational" (Costa, La formula 8), aquella que depende del modo en que el agricultor hace uso de diferentes tecnicas y saberes para aumentar la production y su propio bien

estar. El modelo opuesto de la agricultura, a la que Costa llama "perturbadora" {La

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Tatjana Gajic 31

formula 8), se encuentra condicionada por el

objetivo contrario de extremar el uso de los

recursos humanos para alcanzar un domi

nio ?nicamente mec?nico de la naturaleza.

Ejemplificada por la orientation exclusiva de

la agricultura espanola hacia la domination

del suelo por medio del arado, la agricultura

perturbadora constituye un ejemplo de la

abdication del poder al ejercicio mismo de

la domination. Parafraseando el foucaul

tiano "if one governed too much, one did

not govern at all," diriamos que en el caso

de la agricultura perturbadora, su practica se reduce al ejercicio del excesivo gobierno del arado, y la fuerza viva (el trabajo del

agricultor) se agota en su transformation

en fuerza mecanica (el arado aplicado a la

tierra). La agricultura del arado, concluye Costa, es la que, finalmente, convierte al

agricultor en un esclavo de la tierra.

En proximidad con la formula foucaul

tiana de la gobernaci?n moderna, donde

gobernar demasiado viene a ser lo mismo

que no gobernar, la formula costiana de la

modernization de la agricultura espanola afirma que trabajar demasiado en la tierra

significa, para el campesino, convertir el tra

bajo en castigo, y para la tierra, desgastarla y robarle su potencial de productividad, que viene a ser lo mismo que despoblarla en

el futuro. La situation casi catastr?fica del

campo espanol, sugiere Costa, surge a causa

de privar de trabajo a aquellosseres (plantas

y animales) que existen para sustituir al

hombre en su funcion de trabajador en la

tierra. Trabajando para y por el hombre,

las plantas y los animales tambien trabajan incesantemente por y para la tierra:

Esos ?rboles que alargan en derredor

suyo sus cien brazos para ofrecernos

liberalmente los ricos y sustanciosos

frutos que han elaborado en los invisibles talleres de su corteza, son

para nosotros a modo de obreros gra

tuitos, cuyo salario paga el cielo, que no descansa [sic] nunca [...] que no

piden reduction de horas de trabajo, como los obreros en general [...] ni

profieren gritos subversivos [...] ni

infunden pavor en el ?nimo de clases

conservadoras. {La formula 45)

El trabajo de los ?rboles, animales, peces, frutas y hortalizas puede compensar por la escasa fertilidad del suelo y prolongar el

ciclo de la productividad de la tierra m?s

alia de la estricta temporada de la cosecha

que caracteriza, por ejemplo, al trigo, esa

"funesta planta" {Politica 45), hacia la que Costa profesa un autentico y no disimulado

odio.

Lo que representa la clave de la agri cultura como forma de bio-politica es que el trabajo en la tierra no sea un castigo

auto-infligido para el agricultor, castigo cuya realization plena llevaria a la desaparicion del agricultor, transformado en emigrante o

en un fantasma infrahumano y hambriento

que puebla campos deserticos. El contrapeso necesario de la emancipation del agricultor se encuentra en las iniciativas de Costa de

hacer la tierra m?s productiva por medio del

trabajo entendido como sacrificio volunta

rio de "trabajadores no-humanos," plantas y animales, que trabajando por si solos, dia

y noche, hacen que la tierra trabaje y rinda

m?s.7 En otras palabras, para asegurar el

futuro de la tierra, y de ahi el de la nation, es

necesario fomentar el trabajo de las plantas y los animales cuya funci?n es la de suplantar al agricultor en su "funci?n mec?nica" y liberarlo para que pueda ejercer su "funci?n

dirigente" del mundo natural, sentando

las bases para un aumento constante de la

poblaci?n, beneficiada por la existencia de

un ciclo ininterrumpido de production y consumo cada vez mayores. Por medio del

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32 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

control de la tierra y el dominio de su pro ductividad, el control del trabajo?quien

trabaja, por y para quien?llega a ser la

forma principal de bio-poder para Costa. Es

precisamente en ese punto, en haber puesto de relieve la conexion entre el dominio de la

tierra, el control del agua y de la poblacion, y en haber vislumbrado el vinculo entre el

trabajo de los sujetos humanos y los no

humanos, donde reside la relevancia de

los planteamientos de Costa para nuestra

situation contempor?nea.

La lectura que se propone aqui mues

tra como todo el paradigma hidraulico de

Costa consiste en concebir el riego como

el vehfculo que posibilita la sustituci?n

del arado, un instrumento de opresion del

campesino, por el trabajo de los agentes naturales no-humanos. El programa de

Costa busca sustituir el trabajo humano por la action beneficiosa de la planta y la labor

del animal, para alcanzar la emancipation econ?mica del campesinado y la eventual

traducci?n de la misma en el crecimiento y la mejora de la poblacion. Base y garantia de este proceso imparable de transformation de

la agricultura en bio-politica, el agua asume

en el pensamiento de Costa la funcion que tradicionalmente desempenaba el concepto del territorio: la de formar un contenedor, una frontera lfquida por medio de la que la

actividad beneficiosa de la production sea

revertida hacia dentro del territorio national en forma de la riqueza y el aumento de la

poblacion, y vertida hacia fuera en forma

de exportaciones, exploraciones y misiones

colonizadoras. No permitir que se pierda una sola gota del agua peninsular en el

Mediterr?neo, ese es el grito de guerra de

Costa, y de tantos otros antes y despues de

el.8 Esa es la fantasia tecno-ideologica de tantos autores espanoles, en la que el control

del agua sirve para compensar por las faltas

del territorio peninsular y para redimir a

Espana de su proximidad y su fatal seme

janza con Africa.9 Saber regar para poder

gobernar requiere convertir el agua en clave

de una politica que procede de la necesidad

de la recreation y reconquista del propio territorio para avanzar hacia la creation de una eficiente m?quina de la domination

bio-poh'tica, dentro y fuera de las fronteras

nationales.

Sobre la patria y los rios, o como

hacer la politica por otros medios

El espectro de Costa ha reaparecido en

los debates sobre la actual politica del agua en Espana, que han sido desencadenados

por la propuesta del ultimo Plan Hidrologi co National. Las posiciones antag?nicas que se han desplegado en esos debates parecen coincidir en un solo punto: que es el mo

mento de poner siete Haves al sepulcro, no

del Cid, sino de Costa, y clausurar una vez

por todas, el ciclo de la politica hidr?ulica.10 El agua y la politica hidr?ulica aparecen asi como una metonimia de la postura politica

global de Costa y los regeneracionistas a los

que Tierno Galv?n, en un famoso libro pu blicado en los anos sesenta, ha fijado como

precedentes intelectuales del franquismo y otras corrientes totalitarias y autoritarias

espanolas.11

En este articulo, no se trata tanto de

relacionar el control del agua con una poli tica poco o anti-democr?tica, algo que otros

han hecho y siguen haciendo con exito, sino

de analizar la manera en que el agua como

factor bio-politico ejemplifica, por un lado, la pervivencia de la fantasia politica de raiz

costiana sobre el control total de los recur

sos tanto acu?ticos como humanos y, por otro, la existencia de una frontera siempre

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Page 10: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

Tatjana Gajic 33

inestable entre la vida biol?gica y la vida po litica.12 Es precisamente esa inestabilidad de

la frontera entre la vida humana, entendida como vida desnuda ("bare life"), y la figura del ciudadano como la unica representation

legi'tima de la vida humana en la esfera poli tica, la que, para Giorgio Agamben, define

el concepto de la bio-politica:

The novelty of modern bio-politics lies in the fact that the biological given is as such immediately political, and the political is as such immediately the biological given. (148, enfasis del autor)

El proceso que para Agamben constituye el umbral del control bio-politico es el

sometimiento de la vida desnuda a la figu ration politica del ciudadano. Ese proceso tiene paralelismos claros con los discursos

recientes sobre el agua. El doble estatus del

agua como un don natural, identificado con

la vida misma, y como un bien escaso que se debe regular y someter al control politico y del mercado, evoca el sometimiento de la

vida humana a la bio-politica. En Espana, los debates recientes so

bre el Plan Hidrologico Nacional (PHN) ofrecen un buen ejemplo del impase al que

llegan los intentos de formular una nueva

politica estatal del agua. Las polemicas si

guen proliferando desde que el gobierno del

Partido Popular (PP) hiciera una nueva pro

puesta del plan, convertida en ley en 2001.

Esa ley, fuertemente debatida, fue revocada

por el nuevo gobierno del Partido Socialista

(PSOE) pocos meses despues de llegar al

poder, en marzo de 2004. El 7 de junio de

2004, el diario El Pais proporciono el foro

para un debate sobre el Plan Hidrologico cu

yos protagonistas fueron Francisco Camps y Marcelino Iglesias, representantes de dos sectores econ?micos, territoriales y polfticos

enfrentados en torno al PHN. Camps es el

presidente del PP en la Comunidad Valen

ciana y presidente de la Generalit?t Valen

ciana, una de las comunidades autonomas

mas desarrolladas en Espana. Valencia seria

receptora del agua del polemico trasvase

del Ebro que, si se realizara, seria la pieza clave del ultimo PHN. Iglesias es socialista

y presidente de Aragon, la patria no solo

de Joaquin Costa sino del Ebro (si es que los rios tienen patria), y una de las regiones

menos pobladas de Espana que todavia ve

en el Ebro su promesa de desarrollo.

A partir de ese contexto ideol?gico claramente marcado, el debate Camps-Igle sias sobre el Plan Hidrologico evoca no solo

los desacuerdos evidentes sino las divisiones

aparentemente superadas. Entre las ultimas

cabe mencionar la endemica desigualdad del desarrollo economico espanol, el des

equilibrio entre la Espana seca y la h?meda,

que ya fue tematizado indirectamente en

las apelaciones de Costa a favor de una

agricultura basada en el equilibrio entre la

humedad y el calor, y la cuesti?n del papel del estado en el contexto de la nueva politica del agua. En este caso concreto, el agua es

la del rio Ebro, el que le dio el nombre a

la peninsula y que, en vez de unir la patria

espanola como hubiera querido Costa, una

vez m?s vuelve a dividirla.

De una manera u otra, movilizando

argumentos economicos, ecologicos y politi cos, el debate Iglesias-Camps gira alrededor

de los topoi de una patria y un rio, donde tanto "patria" como "rio" funcionan como

met?foras de la vida. Podemos decir que la

"patria" funciona como una met?fora de la

vida social en su contexto natural, y es por esa identification de la patria con el entorno

natural, y del entorno natural con la patria,

que Marcelino Iglesias aflrma que el Ebro es

el rio de Aragon del mismo modo que los

aragoneses son riberenos del Ebro. A su vez,

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Page 11: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

34 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

el no funciona como una met?fora de la vida

por su fluir ininterrumpido que va del naci

miento/origen a la muerte/desembocadura.

Es por ser el flujo su propiedad principal,

por lo que se puede decir que el no lleva agua al mar y no la tira, como solian argumentar los defensores de la l?gica hidr?ulica, antes y

despues de Costa.13 A partir de las interpre tations divergentes de las dos met?foras, el

polemico trasvase del Ebro llega a significar dos cosas diferentes. Para Camps, el trasvase

es un simple medio de sustraer una cantidad

determinada del agua al rio para llevarla

alli donde hace falta o donde se puede usar

mejor. Para Iglesias, hacer eso significant alterar el curso del rio, es decir, "sacar un no

de su cuenca" (Dfaz 25). A esa formulation,

Camps responde indignado con un "Pero,

jc?mo sacar un rio de su cuenca! Espero que sea una met?fora '(Diaz 25).

Sustraer agua al rio por medio del

trasvase altera su curso, no solo en el sentido

fisico de cambiar los caudales en diferentes

tramos del cauce, sino en el sentido de llevar

agua y riqueza a otra parte, introduciendo un desequilibrio en la ecuacion costiana

seg?n la cual el agua es igual a la riqueza que es igual a la vida. Identificando el rio con

su curso y este con el flujo de los caudales,

Iglesias ve el trasvase como un Camino sin

retorno por el que la riqueza, y con ella la

vida, la poblacion, se va de Aragon. "No

existimos demogr?ficamente" (Diaz 25)

argumenta Iglesias en sus apelaciones por re

organizar la vida econ?mica de la region en

torno al rio, en vez de subyugar los caudales

del rio a los flujos econ?micos que deman

dan desviar el agua cada vez mas lejos de la cuenca. Mientras Camps defiende el trasvase

como una solution tecnica, una apuesta por el desarrollo economico pujante como una

manera de corregir el desequilibrio estruc

tural espanol entre la riqueza acu?tica y el

potencial econ?mico, Iglesias se opone al trasvase en cuanto impediria que la ecua

cion "agua es desarrollo" fuera aplicable al

lugar natural del nacimiento, a la patria del rio. Para este ultimo, llevarse mas agua del

Ebro significant, literal y metaforicamente, llevarse el rio de Aragon.

Nos encontramos aqui frente a una

inversion de la celebre met?fora de Jorge

Manrique que veia nuestras vidas como los

rios que dan al mar. (Dicho sea de paso, en

algo tiene razon Camps; aqui si se trata de

met?foras, particularmente si recordamos

que el significado etimologico de la palabra "met?fora" es "llevar fuera." De lo que no

se percata es que el trasvase es una met?fora tanto como lo es el rio). Al sustituirse en el

debate espanol sobre el agua la met?fora del

rio por la met?fora del trasvase, se alteran

radicalmente los dos polos de la met?fora

original manriquena, el rio y la vida. En el

contexto actual, el rio ya no lleva agua al mar de modo manriqueno donde el mar, o la muerte, es simult?neamente el punto de llegada y el final del trayecto. Segiin la

met?fora manriquena, es en la llegada del rio al mar donde se funden la riqueza de lo

que el rio lleva y su finitud, su movimiento

y su finalidad, su potencia y el limite de

la misma. Es justo en el punto de llegada donde el rio adquiere su car?cter metaf?rico

basado en la identification final con la vida

y su fluir hacia la muerte. Por otro lado, el trasvase es

precisamente ese cauce que no

lleva agua al mar sino lejos del mar. Si lo que identifica la vida y el rio es el "fluir hacia"

el mar, el trasvase indica lo contrario. AI

introducirse un elemento de arbitrariedad en el tipo de relation natural entre el origen y el destino del rio, al fabricarse un nuevo

cauce que corrige el ya existente, el rio se

desvia del mar para llegar allf donde antes

no habia (suficiente) rio. Mientras el rio

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Page 12: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

Tatjana Gajic 35

fluye, el trasvase dirige el agua de un punto a otro.14 El trasvase sirve para establecer una relation abstracta entre los lugares que no tienen una relation concreta; es mas, la

establece precisamente porque no la hay. En

contraste con la red ferroviaria mencionada antes en este articulo, diriamos que el trasva

se no existe tanto para posibilitar el trafico y el intercambio entre lugares distintos, sino

para cambiar la direction y la naturaleza del

flujo. A diferencia del trafico que requiere la

existencia de personas, bienes y vehi'culos, el trasvase mismo es el vehiculo que mueve

personas y bienes, a la vez que fija espacial mente su relation. En vez de una relation

directa y mutua, el trasvase crea otra relation

reticular en la que se multiplica el n?mero

de destinos a los que llega un mismo rio, con la consecuencia de que el rio mismo

depende del movimiento que constituye la red.

En el debate Camps-Iglesias, el agua

aparece como elemento com?n usado para

apoyar dos logicas mutuamente excluyentes: la de Camps, basada en razones cientificas

y econ?micas que supuestamente justifican el aprovechamiento del potential del rio

para llevarlo lo mas lejos posible de su ruta

natural, y la de Iglesias que aplica las mismas

razones cientificas y economicas en el senti

do contrario, ya que encuentra la razon de su

oposici?n al trasvase en la existencia de una

relation simetrica entre la riqueza de los cau

dales del Ebro y la riqueza de los habitantes

de su cuenca. Lo que une las dos posiciones es que el agua del Ebro aparece como la

clave de un razonamiento ideologico que consiste en confundir la causa y el efecto, encontrando la racionalidad de cada una de

las posturas en el beneficio que resultarfa de su aplicacion. La seriedad de esta afirma

cion se hace patente si pensamos, en clave

foucaultiana, que de la racionalidad de estas

medidas de gubernamentalidad depende no

solo el exito de las mismas, sino tambien la

existencia y el bienestar de los gobernados, que en este caso son el rio Ebro y todos los

que trabajan a causa de el o en torno a el. No

solo el desarrollo economico regional, sino

el futuro del no depende de la aplicacion de sus respectivas tecnicas de gobernaci?n. Para

el representante de Valencia, la actividad que

justifica sus razones es la economia boyante de la region que se beneficiaria del trasvase.

En el caso de Aragon, esa conception de la economia aparece como la enemiga de lo

mismo que pretende regular: el agua y, con

ella, el fluir del desarrollo a partir del lugar del nacimiento del rio. El agua, entonces, marca el limite entre un asunto hidrico y otros asuntos politicos no-hidricos, como

son, la solidaridad, la igualdad, el desarrollo

y el control de la vida.

El dilema que este debate plantea es claro aunque no simple. <;Que hacer?

,;Proteger el derecho al agua que se basa en

la procedencia del rio y usarla para los fines

del desarrollo propio, o re-distribuir el agua del rio para elevar los beneficios economicos

existentes por medio de una intensification

de su uso? Lo que subyace a ese dilema es la cuestion del valor del agua, no solo su valor

economico, aunque este es crucial, sino el

valor simb?lico del agua como met?fora

para la vida humana y para la solidaridad

social. <;C6mo ser solidarios con el agua sin

serlo con el rio? ,;Es la solidaridad una simple cuestion de redistribution de cantidades, lo

cual implica que son solo los fuertes los que

pueden ser verdaderamente solidarios?des

pues de que sus propias demandas hayan sido satisfechas, claro est??o es que la

solidaridad presupone regresar a la fuente

de la demanda de la solidaridad, que es la

existencia misma de la desigualdad, aquel punto en el que la sociedad se enfrenta con la

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Page 13: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

36 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

escasez y con la debilidad que forman parte de la vida humana y social, sea en forma de

enfermedad, sed o pobreza?15 Hablando de

la solidaridad, es interesante observar que

ninguno de los participantes en el debate

menciona las vidas de los trabajadores in

migrantes, muchos de ellos ilegales, cuyas manos haran el trabajo agricola creado

por el mayor aprovechamiento tecnico del

agua del Ebro. Costa, por lo menos, tenia

cristalinamente clara la funcion de la planta y el animal como sustitutos de las manos

humanas. En cambio, ni Camps ni Iglesias conciben el trabajo de las manos de los

inmigrantes como complemento necesario

del trabajo del rio, ni tampoco endenden la

escasez que existe en un polo de la relation

(Aragon, agricultura de subsistencia) como

la condition misma para la existencia de

la riqueza en el otro (Valencia, agricultura intensiva).

Este ejemplo de relaci?n antagonica entre dos intereses enfrentados que persis ten en la lucha a costa de alterar en el curso

de la misma el estatus y la naturaleza del

objeto por el que luchan, evoca el origen

etimologico del termino ' ovales," que es la

palabra "rio." Esto no debe extranarnos dado

que en un contexto hist?rico m?s amplio el control del agua evoca cada vez m?s el

fantasma de la guerra: las guerras de agua de las que ha escrito Vandana Shiva, entre

otros, o las guerras de conquista territorial,

cuyo ejemplo paradigm?tico fue la Guerra

Civil espanola, tal y como la describi? con

contundente precision el novelista e inge niero hidr?ulico Juan Benet.

A modo de epilogo: Juan Benet

Seria una imprudencia intentar resu

mir en pocas p?ginas la relaci?n entre los

ensayos de Benet dedicados al tema de la

ingenieria (hidr?ulica u otra), y sus novelas

sobre la Guerra Civil. Sin embargo, hay dos razones que justifican esta referenda, inevitablemente insuficiente, a la figura de

Benet. Primero, porque todo lo que se ha

dicho en este articulo sobre la relaci?n con

flictiva entre el agua, el territorio y la vida

ha sido inspirado en la creacion noveh'stica

benetiana de un territorio, llamado Region, cuyas caracteristicas naturales, humanas y

poh'tico-estrategicas lo convierten en una re

presentacion fisica de la dinamica de la Gue rra Civil. Segundo, porque la doble carrera

profesional del Benet, ingeniero y novelista,

ejemplifica la misma dinamica compleja entre la tecnica y la creacion, tejne y geno

que se problematiza en sus ensayos. Por

eso, los ensayos de Benet sobre la relaci?n

entre la ingenieria y la vida social servir?n

para clausurar este articulo con la propuesta de que los debates sobre el control del agua deben ser entendidos dentro de un marco

analitico que cuestiona el impacto de la tec

nica sobre la vida, y, relacionado con esto, el

papel del estado en el control del territorio

y los recursos naturales y humanos.

En el ensayo "Ingenieria y conducta

social," Juan Benet describe la relaci?n entre la tecnica y la ingenieria en terminos

del desarrollo hist?rico del dilema sobre el

papel que la tecnica ocupa o debe ocupar en la vida humana. El ensayo contrasta el

concepto de tejne, definido como "un arte

establecido, que goza de tradici?n y reglas," y el de geno "que remite a la acci?n de en

gendrar, producir algo nuevo, causar"(80). "Y a ese tenor," prosigue Benet,

cabe decir que la ingenieria se incor

pora a la tecnica en cuanto introduce

un elemento nuevo, concebido en el

espiritu [...] en el proceso de elabo

racion del objeto. (80)

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Page 14: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

Tatjana Gajic 37

Se trata del contraste entre el fluir imper

ceptible de tejne que de vez en cuando se ve

alterado por la irruption del geno de la inge nieria, destinada a transformar las practicas establecidas y crear nuevas. Cuando existe

una relation armonica entre la tecnica y la

ingeniena, el paso de la historia se asemeja a lo que Benet llama el "pacifico devenir

filogenetico de la historia'(81), aquel en el

que los cambios tecnol?gicos son apenas

perceptibles, o son perceptibles solo con el

paso de las generaciones. Pero, a partir de la Ilustraci?n, la Revo

lution Francesa y la invention de la m?quina de vapor, la relation entre la sociedad y la

tecnologia cambia radicalmente. Ese cam

bio, a juicio de Benet, tumba la conception de la cultura entendida como: "una creation

del hombre extraida de la naturaleza, pero en cierto modo externa e independiente de

ella (82). Lo que hace inviable esa concep tion traditional de la cultura, es el hecho

de que en nuestra epoca el medio natural

ha sido hasta tal punto transformado por la

tecnologia que nos resulta imposible marcar

nitidamente la frontera entre la tecnologia

y la cultura. AI senalar las consecuencias

de esa alteration de las relaciones entre la

naturaleza, la cultura y la tecnologia, Benet

llega a la siguiente conclusion:

[S]e puede decir [...] que la tec

nologia ha dejado de ser un accesorio

de la cultura para dividirse en dos

grandes actividades colindantes

pero diferentes: la recreation del

medio, la primera, y la adaptation del hombre a ese medio recreado, la

segunda. Y de esa suerte cabe definir la tecnologia por la via tautologica: una actividad del hombre para llevar a cabo y dominar esa misma

actividad; la tecnologia empieza a no ser otra cosa que el gobierno de

la tecnologia. (82)

Tomando como ejemplo el quehacer de

Benet mismo, ;no es la combinaci?n entre

su praxis de ingeniero y la labor del novelista

un ejemplo paradigm?tico de lo que indica

el ensayo, es decir, que con el avance de

la tecnica, se difumina la diferencia entre

el geno y el tejne, y el ingenio creativo se

hace preso de la demanda de controlar la

tecnica? La labor del novelista ,;no era ella

misma un testimonio de que el ingenio se

ha convertido en un ejemplo de lo que la

tecnica requiere hacer pero deja sin hacer:

controlar la tecnica?

La representacion geo-politica de esta

pregunta se encuentra en la descripci?n del

mecanismo de la Guerra Civil espanola en

el primer volumen de Herrumbrosas lanzas, el monumental ciclo novelistico dedicado a la contienda. La accion de la novela se

desarrolla en Region, un territorio que es

producto de la invenci?n de Benet. Region fue no solo inventada, sino tambien repre sentada en forma de un mapa, de modo

que podemos decir que no solo existe en

un mapa, sino que solo existe en UN mapa, creado por el ingeniero Benet. En la novela,

Region cumple dos papeles antag?nicos. Por un lado, se puede ver como una bolsa terri

torial, un ultimo baluarte de la resistencia

republicana incrustado en el territorio ya casi completamente conquistado por los

nacionales. Desde un punto de vista mas

afifn a la perspectiva del narrador, Region es

la representacion flsica de un agujero negro en la estrategia militar tanto republicana como nacionalista. Ese agujero negro sirve

no para llevar la guerra a su solucion final (la

conquista nacionalista de Madrid, o una paz

pactada), sino para alejar el cumplimiento de esa meta final un paso m?s.

La conquista o la defensa de Region, irrelevante desde el punto de vista de su

racionalidad, se convierte asi en el objetivo

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Page 15: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

38 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

deseado por los dos ejercitos. Sin embargo, solo lo es en la medida en que las estrategias de los dos bandos son presas de sus intencio

nes conscientes o inconscientes de postergar la victoria y prolongar la guerra m?s de lo

necesario. En cuanto un objetivo militar,

Region existe para hacer patente hasta que

punto las intenciones abiertas de los dos

lados son presas de sus intenciones ocultas

e inconfesables, hasta que punto la victoria

de uno u otro bando es pensable solo como

consecuencia de la domination total del m?s

debil por el m?s fuerte.

Esa constelaci?n de fuerzas, esa com

patibilidad de las dos estrategias que hizo

que los propositos evidentes de los com

batientes (ganar la guerra) dependieran de

sus propositos ocultos (prolongar la guerra), fue la raz?n principal por la que la Guerra

Civil espanola evoluciono de una guerra

ideologica a una guerra de conquista terri

torial, encaminada hacia un control total

del vencido por el vencedor.16 A causa de

la superioridad tecnica de los nacionalistas, o quiz? a pesar de ella, el resultado final de

la guerra podia ser solo la domination total

del enemigo. M?s que con la paz, la Guerra

Civil espanola termino con una afirmacion

de la victoria final, de la que la guerra misma

parecfa ser una prefiguraci?n o un ensayo

general. La guerra, entonces, era un avance

implacable por conquistar lo que despues de la victoria careceria de valor propio: en

Herrumbrosas lanzas el territorio de Region,

y en la historia espanola la vida de la pobla cion sometida al franquismo.

Si partimos de la idea de que la fabula

cion novelistica de Juan Benet complementa la meditation sobre la tecnica del ingeniero con el mismo nombre; si entendemos los

proyectos hidr?ulicos del ingeniero Benet

como un complemento de su contempla tion desenganada del desierto de la Espana

franquista, producto de una implacable victoria militar, ,;seria posible juntar esas

tramas, la hidr?ulica, la literaria y la politica,

para decir que las actuales guerras de agua son tambien guerras de conquista, pero no

de la conquista territorial, sino de la con

quista de un bien escaso? Como en el caso

de la Region, la victoria final de uno de los

lados en la guerra del agua llevar? a una

alteration profunda del estatus fisico y del

valor simbolico del objeto de la lucha. Ese

valor es la designation de su vida desnuda, su misma existencia como tal bien.17

Notas 1 Lasinopsisseencuentraen: <htm://w\vw.p2p.

ldnold.org/<iisplayimage.php?album=27&pos=0>. 2 El analisis m?s completo del programa costiano de regeneration de la agricultura

se

encuentra en Alfonso Orti (1984). 3 Vease: Tomas y Valiente, 1971. 4 La crisis de la agricultura espanola de la epo

ca estaba plenamente insertada dentro del con

texto global en el que el desarrollo del transporte

posibilito la intensification de las exportaciones de los grandes productores de cereales: EEUU, Rusia, Argentina. Espana, junto con otros paises

mediterr?neos, se vio obligada a reorientar su

production agricola hacia la fruta y las horta lizas. En ese sentido, la propuesta de Costa de

sustituir la production de cereales por la de fruta

y hortalizas representaba una respuesta logica a

la situation de la economia mundial. La colec

cion The Mediterranean Response to Globalization

before 1950 documenta el boom economico del mercado de frutos secos en EEUU:

According to R.L. Adams' 1921 farm manual, the market value of

'good' wheat land in the state was

approximately $ 100 per acre in the

period immediately before World War I. 'Good' land for prune pro

duction was worth $350 even before

planting and valued at $800 when

bearing. (209)

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Page 16: Fronteras líquidas: Agua y bio-política de la territorialidad en España

Tatjana Gajic 39

5 "Governmentality" en Foucault, 2000

(201-222). 6 En palabras de Erik Swyngedouw: The hydraulic Utopia of abun dant waters for all would not only produce

an ecological harmony,'

but would also contribute to the formation of a socially harmonious order. The production of a new hy draulic geography would reconcile the growing social tensions in the

Spanish countryside, tensions that were taking acute class forms and resulted from the adverse and con

flictual conditions of water scarcity and inequality. (102)

7 Costa se refiere a los peces como:

recursos gratuitos, li obreros que

require [n] para trabajar el minimum

posible de direction y ayuda por parte del hombre. {La formula, 24)

Los arboles son:

obreros que se brindan ? trabajar casi gratuitamente para la emanci

pation del agricultor. Son dociles y poco gravosos. Jamas se entregan al

descanso. {La formula, 12) 8 En sus demandas de evitar que el agua de

los rios espanoles se pierda en el Mediterr?neo, Costa sigue una tradition venerable, cuya ex

presion m?s emblem?tica es la siguiente frase

atribuida a uno de los arquitectos de la desamor

tizacion, Melquiades Mendiz?bal: "Espana no sera rica mientras los rios desemboquen en el

mar" (Ramos Gorostiza 9). 9 Sobre la conception costiana de la mision

colonizadora de Espana en Africa, vease: Eloy Fernandez Clemente.

10 La declaration oficial de la clausura del pa

radigma de la politica hidraulica y la exposition de las bases de la nueva politica estatal del agua se encuentran en el Libro bianco del agua en Espana, publicado en el ano 2000 bajo los auspicios del entonces

gobernante Partido Popular. 11 Tierno Galv?n, 1961. 12 Ejemplos relevantes de estudios que analizan

el Plan Hidrologico National en el marco de una trama politica que sirve de respaldo a la creation

de una economia del agua y la liberalization del mercado de energia en Espana y Europa son: la coleccion Agua ^mercancia o bien com?n?, y los

ensayos que componen la section tematica de la revista Archipielago titulada "El Agua: un despilfa rro interesado."

13 A pesar de que Tierno ha identificado a

Costa como uno de los precursores del fran

quismo, hay que senalar que las iniciativas que

abogan por el maximo aprovechamiento de los recursos hidricos espanoles

no han sido un pri

vilegio de las derechas. La defensa de las grandes obras hidr?ulicas en el franquismo es una conti nuation de la politica hidr?ulica de la Segunda Repiiblica, cuya formulation se encuentra en

plan de Lorenzo Pardo de 1933. Ingenieros y escritores de las izquierdas que han escrito sobre el problema del agua en Espana, compartian la

esperanza de Julio Senador Gomez de que:

jalg?n dia los espanoles empren deran la tarea de cortar la enorme

sangria de agua, de limo, de tierra

que por millones de toneladas se

pierda (sie) anualmente en el mar!

(Diaz-Marta 20) A su vez, Ramos Gorostiza recuerda que:

el objetivo de 'cruzar el pafs con un sistema arterial hidraulico' que

consiga 'crear' Naturaleza...seguia siendo un sueno vigente al final del

siglo XX. Asi Boreil [ministro de

obras p?blicas entre 1993 y 1996]

apelaba en 1993 a la razon para evi

tar que la Naturaleza, mientras siga existiendo ley de la gravedad, le de al

mar el agua que en Aragon no somos

todavia capaces de usar.' (18) 14 Dice Juan Benet de la profesion de in

geniero: Por lo general el ingeniero, tras unos

cuantos anos de ejercicio con la

tecnica, se convierte en director; de

lo que sea pero director, pues ,;que otra cosa puede hacer sino dirigir? ("Ingenieria e intimidad," 75)

15 Vandana Shiva ha dejado patente la fal sedad de la tendencia de pensar sobre el agua exclusivamente en terminos de cantidad:

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40 Arizona Journal of Hispanic Cultural Studies

Equitable use theory treats rivers as

static resources to be apportioned at

will. When it comes to rivers, what

is in fact appropriated is the flow; and because water is a flow and not

a stock, its distribution has nonlocal

impact. (80) 16 Para un analisis de Guerra Civil como gue

rra de conquista territorial vease Benet, 1976. 17 Este artfculo se ha nutrido del apoyo y

la inteligencia de Cristina Vega, Carlos Garcia

Santa Cecilia, Marta Hernandez y Carmen

Pereira Muro. Roxani Margariti y Fabricio

Forastelli lo han seguido desde la otra orilla, mientras que Steve Marsh ha estado y esta en la

desembocadura.

Obras citadas Agamben, Giorgio. Homo Sacer. Sovereign Power

and Bare Life. Trans. Daniel Heller-Roazen. Stanford: Stanford UP, 1998.

Benet, Juan. Quefue la Guerra Civil. Barcelona: La Gaya Ciencia, 1976.

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