Geologia N 7.pdf

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  • 1E ditorialEditorial

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    Durante este perodo, los profesionales peruanos cumplen un rol importante en las exploraciones, demostrando un amplio conocimiento y capacidad para crear y dirigir programas exploratorios de gran envergadura presupuestal. Se han usado nuevos criterios de exploracin en relacin con la Tectnica de Placas y el INGEMMET ha confeccionado un mapa con las fajas metalognicas. Se ha descubierto importantes yacimientos como: Conga, Las Bambas, Antapakay, Ta Mara, Laguna Norte, Pierina, Yanacocha, Constancia, Antilla, Cotabambas, Galeno, Haquira, Chancas, La Zanja, etc. Muchos de ellos estn en plena produccin, otros listos para su explotacin, es decir, para generar ms divisas y canon minero, sin embargo han surgido problemas sociales con las comunidades campesinas e indgenas, azuzadas por ambiciones polticas de algunos Presidentes Regionales, Alcaldes Municipales y pseudos ambientalistas, creando enfrentamientos entre las poblaciones y las empresas mineras, rompiendo el equilibrio social, alegando que las mineras estn contaminando los ros y cabeceras de las cuencas, a pesar de que cada proyecto cumple estrictamente con las normas y estndares de nivel mundial sobre el cuidado del medio ambiente como EIA, PAMA etc., preparados por especialistas y aprobados por las entidades respectivas antes de la explotacin. A estas protestas se han sumado algunas ONG antimineras, que invierten sus fondos en organizar desrdenes y fomentar la antiminera, dificultando el normal proceso de desarrollo de los proyectos mineros.

    Si estos conflictos no se resuelven cuanto antes, pueden traer problemas a la economa nacional. Considerando la crisis mundial que se avecina, es urgente impulsar la ejecucin de los proyectos mineros que cumplan los requisitos ambientales, pues estos generarn trabajo y consecuentemente recursos econmicos frescos para ser invertidos en todo el pas.

    El Per posee un potencial minero variado y atractivo para los inversionistas, no se debe permitir que se alejen, sigamos buscando y encontraremos nuevos yacimientos, slo se estn explotando yacimientos minerales con evidencias superficiales, los gelogos debern utilizar tecnologas de avanzada para ubicar nuevos yacimientos ocultos en profundidad. Se debe continuar orientando a las autoridades, a las comunidades campesinas para que comprendan la importancia del sector minero en su conjunto, Hay que aportar nuevas ideas para que el canon minero se distribuya e invierta en proyectos sostenibles.

    Cornelio Lizrraga

    Si no hay exploraciones no habr minera

    El Per tradicionalmente es un pas minero, desde los prencas hasta nuestros das republicanos. Debido a la ubicacin, configuracin geogrfica y geolgica de nuestro territorio, la minera fue y es un factor determinante para el progreso del pas, fundamentalmente para dar trabajo y estabilidad econmica. La evolucin se inicia con los cateadores y prospectores en la minera artesanal, luego surgi la pequea y mediana minera hasta llegar a la gran minera moderna y competitiva con el asesoramiento de los gelogos.

    Durante la Colonia se dio algunas leyes para la prospeccin y explotacin en las cuales primaba el abuso autoritario sobre los indgenas. A partir de 1950 se promulga la Ley General de Minera, con normas claras para la prospeccin, exploracin y explotacin de los recursos mineros, contemplando que todos los minerales del subsuelo pertenecen al Estado. Muchas empresas mineras se animaron a invertir con tecnologa avanzada descubrindose nuevos yacimientos, tales como Toquepala, Cuajone, Quellaveco, Cerro Verde, Michiquillay, Yanacocha, Toromocho, Tintaya, Las Bambas, Antamina, entre otros; algunos de ellos estn en produccin. Sin embargo en esta legislacin no se puso nfasis en el cuidado del medio ambiente, lo cual ha dado como resultado los pasivos ambientales ms severos. Precisamente los pasivos ambientales de las minas ya cerradas originan los mayores problemas. La minera productiva genera impuestos, regalas, aportes voluntarios, etc.: los constituyentes del famoso CANON MINERO.

    Entre los aos setenta a los noventa, el gobierno militar de Velasco Alvarado estatiz y confisc el 95% de los prospectos y proyectos mineros para formar la Empresa Minera del Per, que se convirti en un gran depsito burocrtico de prospectos y proyectos mineros, esto sumado a los actos de terrorismo paraliz la minera peruana por ms de 20 aos.

    A partir de los noventa se dan leyes promocionales con nuevos incentivos para la minera, en especial para los trabajos de exploracin. Estas normas competitivas atrajeron a otras empresas nacionales y extranjeras con gran capacidad econmica, crendose un verdadero boom minero, que llev al pas a altos niveles en la produccin minera mundial y a importantes descubrimientos de yacimientos de cobre y oro.

  • 2Cornelio Leopoldo Lizrraga AguilarPresidente

    Nstor Teves RivasVicepresidente

    Oscar Saco RodrguezSecretario

    Mara Lau LuyoVocal

    Carlos Snchez JuaresVocal

    Ral Fuentes SilvaVocal

    Ao V N 7. Junio, 2012Colegio de Ingenieros del Per

    Consejo Departamental de [email protected];

    [email protected]

    Directiva del Captulo

    DirectorIng. Cornelio Leopoldo Lizrraga Aguilar

    Comite editorialIng. Rodolfo Valdez BustamanteIng, Luis Sassarini OlazbalIng. Alberto Caballero Noriega

    Coordinador GeneralDr. Ing. Nstor Teves Rivas

    ColaboradoresIng. Carlos Snchez JuaresIng, Ral Fuentes SilvaIng. Oscar Saco Rodrguez

    Correccin de estiloProf. Lily Cardich

    AsistenteWanda Ochoa

    Diseo e ImpresinCrea Ediciones Grficas e.i.r.l.Telf.:472-1810Nextel: (99) 830*[email protected]

    CartulaLaguna de Conga, Per (Fuente: Internet)

    Hecho el depsito legal N 2006-11307 en la Biblioteca Nacional del Per.

    La revista Geologa no se responsabiliza por las opiniones vertidas en los artculos publicados, los mismos que son de responsabilidad exclusiva de los autores. Se permite la reproduccin parcial o total de los articulos nombrando la fuente.

    LA DISTRIBUCIN DE LA REVISTA ES GRATUITA PARA LOS INGENIEROS

    GELOGOS COLEGIADOS EN EL CD LIMA

    Revista del Captulo de Ingeniera Geolgica - CD Lima

    Consejo Departamental

    de Lima-CIP

    Revista del Captulo de Ingeniera Geolgica - CD Lima

    Consejo Departamental

    de Lima-CIP

    ndice

    Indice

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    Editorial Ing. Cornelio Lizrraga Aguilar

    Geologa y Exploraciones- Estructura y termometra del depsito de Au. El Gigante; aplicaciones

    para la exploracin del Batolito de Pataz . La Libertad - Per. M.Sc.Ing. Vctor Snchez

    Geologa Marina- Distribucin de los sedimentos del margen continental peruano y su

    importancia en los estudios relacionados al sector pesquero. Ing. Federico Velazco

    Hidrocarburos- Per: Un territorio semiexplorado en hidrocarburos. Dr. Ing. Aurelio Ochoa Alencastre- Potencial exploratorio hidrocarburifero: "Plays" no tradicionales en las

    cuencas peruanas. Ing. Carlos Bianchi Ramirez- Pluspetrol: Desarrollo y exploracin de hidrocarburos en el Subandi-

    no Sur del Per. Dr. Ing. Federico Seminario Gros e Ing. Germn Salas Arias- Carbonatos paleozoicos en las cuencas Ucayali - Madre de Dios. Ing. Marco Vsquez - Anlisis del derrumbe como herramienta para minimizar tiempos no

    productivos de la perforacin. Ing. Jorge Washington Albeiro

    Paleontologa- La paleoflora del Per y los yacimientos de carbn. Ing. Alfredo Pardo Arguedas

    Climatologa y Meteorologa- Caso estudio: Precipitaciones intensas asociadas a la incursin de un

    sistema de baja presin atmosfrica de niveles altos. Ing. Sara Olivares e Ing. Ricardo Duran

    Geotecnia- Comentario sobre los errores en la aplicacin de las clasificaciones

    geomecnicas. M.Sc.Ing. Victor Tolentino Yparraguirre

    Geomecnica- Aplicacin del grfico mltiple para la estimacin preliminar del

    comportamiento del macizo rocoso en una excavacin subterrnea. Ing. Carlos Vallejo Corts

    - Seleccin de sistemas de refuerzo de roca para la prevencin de cada de rocas en minera subterrnea. Ing. Gaither De la Sota Perez

    Geofsica- Construyendo ciudades en riesgo. Dr. Ing. Hernando Tavera- Modelamiento mediante inversin condicionada usando datos geolgicos. Dr. Ing. Deny Bayona Pelez

    Hidrogeologa- Principales rocas reservorios de aguas subterrneas en el Per. M.Sc. Ing. Fluquer Pea Laureano- Disponibilidad y usos del agua en el Per. Ing. Jorge Tovar Pacheco

    Historia- Curiosidades geolgicas y mineras. Dr. Ing. Felipe de Lucio Pezet- Fsiles: Huellas de saurpodos y terpodos en Ancash. Ing. Ricardo Vega

    Nuestra Institucin- Actividades del Captulo de Ingeniera Geolgica: Conferencias - Discurso del representante de la Promocin 1961 - Bodas de Oro

    2011. Ing. Carlos del Solar Simpson- Discurso del representante de la Promocin 1986 - Bodas de Plata

    2011. Ing. Alberto Torres- Colegiados en el 2010 - 2011 UNMSM, UNI, UNSA, UNDAC Y UNP.

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    AUSPICIADORES: PERPETRO S.A. PLUSPETROL PER CORPORATION S.A. CEMENTOS PACASMAYO S.A.A.

  • 3Estructura y termometra del depsito de Au El Gigante; aplicaciones para la exploracin del Batolito de Pataz, La Libertad - Per

    G eologa y Exploraciones

    Geologa y Exploraciones

    3

    M.Sc. Ing. Vctor Snchez*

    IntroduccinLa zona de estudio est ubicada en la provincia de Pataz, departamento de la Libertad, a 435 Km al Este de la ciudad de Trujillo y a 993 Km al Norte de la ciudad de Lima, a una altitud promedio de 3900 m.s.n.m (Fig. 1).

    Las unidades estratigrficas ex-puestas incluyen el basamento metamrfico del Precmbrico:Com- mplejo del Maran; capas rojas del grupo Mitu perteneciente al Permio - Carbonfero; las calizas Norianas y Lisicas del grupo Puca-ra; las areniscas y lutitas del grupo Goyllarisquizga del Cretcico infe-rior; las calizas gruesas del Albiano y Cretcico superior de la Formacin Crisnejas, los piroclsticos del re-cientemente nombrado Volcnicos Lavasen de fines del Carbonfero inferior-Carbonfero superior, pu-diendo alcanzar el Permiano inferior (Schreiber D., 1990) y rocas intru-sivas representadas principalmente por el Batolito de Pataz (Fig. 2)

    de composicin calcoalcalina con un rumbo NNW - SSE en donde se hospedan las estructuras de cuarzo y sulfuros (pirita, arsenopirita, gale-na, esfalerita, calcopirita, etc.) con valores econmicos de Au.

    Para determinar la evolucin del fundido, que depende de la crista-lizacin fraccionada y procesos de asimilacin dentro del proceso de diferenciacin magmtica, se ha

    Fig. 1. Plano de ubicacin: Depsito El Gigante

    Fig. 2. Diagrama La vs. La/Yb para rocas intrusivas porfdicas (Depsito El Gigante).

    construido el diagrama La vs. La/Yb. Teniendo en cuenta que las razones La/Yb para Yanacocha y Minas Con-ga son de 22 y 12 respectivamente (Davies, 2005), se cree que los intru-sivos porfdicos se encuentran tan evolucionadas como los intrusivos de Minas Conga (Fig. 2), pero no al grado de los prfidos de Yanacocha, sin embargo se podra decir que existe un gran potencial econmico relacionado con los intrusivos del Depsito El Gigante.

    Estructuralmente la zona de estudio est afectada por diferentes oroge-nias que comienzan con la orogenia Hercnica originando una intensa fracturacin compleja; las estructu-ras econmicas (vetas) se encuen-tran microplegadas, fracturadas y falladas.

    De acuerdo a estudios mineralgi-cos se determin la paragnesis de vetas como sigue: cuarzo - pirita-arsenopirita - Au y cuarzo - galena-esfalerita - calcopirita - Au, teniendo al Au como mineral econmico (Fig. 3.), donde este mineral se encuentra rellenando fracturas y mi-crofracturas en los minerales antes mencionados.

    (*) [email protected]

  • 4Geologa y exploraciones

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    El diagrama spider de rocas intrusivas y mineralizacin (Fig. 4) muestra una concentracin baja en Eu, que podra significar precipitacin de plagioclasas producto de la cristalizacin fraccionada dentro del fundido inicial antes de llegar a la cmara magmtica. Adems se piensa que el enriquecimiento de elementos mviles (LILE) se deba a procesos de diferenciacin magmtica, mientras que el pobre enriquecimiento de HREE posiblemente es consecuencia de la presencia de granates en los fundidos iniciales producto de la fusin parcial.

    La estrecha relacin entre los intrusivos y la mineralizacin suge-rira que nos encontramos en un depsito de tipo intrusion related, sin embargo cabe la posibilidad de que el fluido mineralizante se haya contaminado con el material intrusivo preexistente.

    Termometra de inclusiones fluidas El estudio de la petrografa de inclu-siones fluidas muestra inclusiones bifsicas de CO2 y H2O tpicas de depsitos de tipo oro orognico, por otro lado, la termometra de inclusiones fluidas confirmara dicha observacin ya que se han podido determinar tempe-raturas de alrede-dor de los 300oC.

    Asimismo, de acuerdo a las medidas de termo-metra, se ha gene-rado el Diagrama de salinidad vs. Temperatura de homogenizacin (Fig. 5) de todas

    las muestras de veta, obteniendo como resultado tres grandes gru-pos de temperaturas:

    Primer grupo de 100o a 200oC. Segundo grupo de 200o a 250oC Tercer grupo de 250o a 330oC.

    Sntesis de resultados e inter-pretacionesBsicamente se podra indicar que el magmatismo que origin el Batolito de Pataz ocurri durante la Fase Orognica Eohercnica, justo despus de haberse gene-rado la falla regional Huinchus - La Paccha, que asumimos llega a profundidades mantlicas, ya que el Batolito de Pataz se emplaz a lo largo de esta es-tructura, de donde se infiere que los esfuerzos compresivos conti-nuaron hasta generarse las fallas subhorizontales tensionales a la falla Huinchus - La Paccha en el cuerpo intrusivo, ya consolidado, del Batolito de Pataz.

    Posteriormente, en la fase disten-siva ocurrida en el Pensilvaniano, se origin la mineralizacin como relleno de fracturas preexisten-tes. Siendo el feeder el sistema de fallas Los Loros.

    100 250

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    Rock/Chondrites Sun+McDon. 1989-REEs

    Granito

    Tonalita

    Granodiorita

    Diorita Terciaria

    Andesita

    Diorita

    MicrodioritaPre-Granito

    Veta Valeria

    Cuarzo de Segregacin

    Fig. 4. Diagrama spider para condritas de roca y mena (Depsito El Gigante).

    Fig. 3. Fotomicrografas de A) LR, N//, 50X; B) LR, N//, 20X.

    Fig. 5. Diagrama de salinidad vs. Temperatura de homogeni-zacin de todo el conjunto de muestras de veta (Depsito El Gigante).

    Finalmente, ocurrieron eventos mag-mticos estriles del Terciario, as como eventos tectnicos posteriores a la mineralizacin que afectaron la geometra de las vetas preexistentes,

  • 5Geologa y exploraciones

    5

    lo cual le dio la complejidad estruc-tural que observamos en el Depsito El Gigante.

    Por otro lado, de acuerdo a las temperaturas de homogenizacin determinadas, el Depsito El Gigan-te se encontrara dentro del rango correspondiente a depsitos de tipo oro orognico (Fig. 6).

    Referencias Herrera J. (2007). Anlisis es-

    tructural relacionado a la predic-tibilidad de clavos mineralizados en la Zona Norte del Bloque Par-coy, Batolito de Pataz, Retamas La Libertad.

    Hidalgo L., Granada C., Toropo-co J., Per (1997). Controles de mineralizacin en vetas de oro y caractersticas estratigrficas en el Batolito de Pataz Mina Par-coy.

    Rivera L., Per (1995). Anlisis estructural de vetas aurferas en el distrito de Pataz.

    Ruiz L. (2002). Anlisis estruc-tural de vetas aurferas en el Segmento Norte del Batolito de Pataz, XI Congreso Peruano de Geologa. Sociedad Geolgica del Per.

    Fig. 6. Diagrama terico de salinidades vs. Temperaturas de homogenizacin de Wilkinson (2001), en el que se muestra en rojo el rea donde se encontrara el Depsito El Gigante, categorizado como un depsito de tipo oro orognico.

    Haeberlin Y. (2002). Geological and Structural Setting, Age and Geochemistry of the Orogenic Gold Deposits at the Pataz Province, Eastern Andean Cordillera.

    Buxter & Bussell (1987). Structu-ral and chemical evaluation of ore potential at Retamas mine.

    Petersen U. (1984). Estudio

    Basado en todo ello, se muestra un cuadro resumen a continuacin:

    cuantitativo de zoneamiento hi-drotermal.

    Vela L. (2000). Geologa y mineralizacin de la mina El Gigante, zona San Vicente Las Chilcas.

    Vela L. (2000). Geologa y mine-ralizacin del contacto Batolito de Pataz - Grupo Mitu, proyecto El Tambo.

  • 6Distribucin de los sedimentosdel margen continental peruanoy su importancia en los estudios relacionados al sector pesqueroFederico Velazco*

    Los diversos aspectos de la geologa de los fondos marinos del margen continental peruano son estudiados por instituciones gubernamentales, como el Instituto del Mar del Per (IMARPE) y tambin por iniciativas del sector privado, universidades, expediciones cientficas internacio-nales o esfuerzos conjuntos entre ellas (**). En la ltima dcada se han efectuado importantes trabajos cien-tficos en el fondo marino referidos a caracterizacin de los sedimentos del fondo marino, la variabilidad climtica, recursos minerales, tecto-nismo, etc.

    El Instituto del Mar del Per (IMAR-PE) desarrolla el objetivo especfico Investigaciones Paleoceanogrfi-

    Fig 1. Tcnicas de muestreo directo desde el B/O Miguel Oliver. Izquierda: Empleando dragas tipo Van Veen para sedimentos (centro) y Derecha: Draga de roca (derecha).

    Fig 2. Superior: Registros de ecogramas de ecosondas cientficas monohaz cuya informacin proviene de Trayectorias de Navegacin en Cruceros Hidroacsticos de IMARPE. Inferior (Izq.): (HERBOZO et al. 2006, 2008). Inferior (Centro): Registro de ecosonda multihaz a bordo del B/O Miguel Oliver. Inferior (Der.) Registro ssmico de alta resolucin de los sedimentos subsuperficiales no consolidados del fondo marino, obtenido a bordo del B/O Miguel Oliver) con una ecosonda paramtrica Topaz.

    cas y Geo-ecolgicas en el Margen Continental (PALEOMAP), que

    incluyen estudios de reconstruccin de condiciones paleo-ambientales, la caracterizacin de hbitats del fondo marino, empleando algunos elementos de la geomorfologa y geoqumica marinas e integrando tambin estudios multidisciplinarios de la calidad del medio acutico.La morfologa del fondo marino, as como sus caractersticas fsicas y

    (*) rea de Geologa Marina. Und. de Investigacin en Oceanografa Qumica. Direcc de Investigaciones Oceanogrficas. IMARPE.(**) Convenios relacionados a la investigacin en cartografa geolgica relacionada a recursos vivos con la Secretara General del Mar de Espaa (SGME) IMARPE (Finalizado). Convenio de investigacin en Paleoceanografa con IRD (Activo).

    Geologa Marina

    Geologa Marina

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  • 7qumicas constituyen factores eco-lgicos limitantes de la distribucin de los organismos invertebrados y vertebrados llamados bentnicos porque que viven en relacin directa con el sustrato y de algunas especies de peces llamadas demersales por-que realizan actividades vitales en la columna de agua cerca del fondo marino (bsqueda de alimento, refu-gio, reproduccin). El conocimiento de estas interrelaciones contribuye a la evaluacin, manejo, gestin y conservacin de los recursos vivos y la biodiversidad del fondo marino que efecta el Estado con amplia proyeccin a sus diversos sectores (Medio Ambiente, Educacin, Salud Pblica, Pesquera, Energa y Minas, Transporte y Comunicaciones, etc.).

    Una de las actividades es la ela-boracin de Mapas Base de las caractersticas fsicas (batimetra, textura, etc.), geoqumica del fondo marino y establecer su relacin con los factores ocano-climticos y del medio ambiente deposicional que determinan la distribucin de estos parmetros.

    Los estudios se inician con la pla-nificacin de las operaciones. Pos-teriormente se realiza el trabajo de campo para obtener la informacin y muestras, empleando mtodos directos (Fig. 1) o tcnicas indirec-

    tas como el sondeo o la geofsica (Fig. 2). En muchos casos los mues-treos no obedecen precisamente a una investigacin geolgica deter-minada, sino que forman parte de estudios integrados de evaluacin de stocks de recursos vivos o estu-dios de su ecologa. En el laboratorio se analizan las muestras, y el trabajo de gabinete y procesamiento de datos permiten obtener mapas de distribucin, a diversas escalas, de los diferentes parmetros fsicos y geoqumicos de los sedimentos del fondo marino.

    El IMARPE ya ha logrado caracterizar la textura, estadgrafos del tamao de grano, composicin, contenido org-nico de los sedimentos superficiales en la plataforma y talud continental del margen continental peruano, as como sus relaciones con el relieve submarino y distintos factores del medio ambiente deposicional (DEL-GADO et al. 1987, 1998; VELAZCO et al., 2007, 2012) (Fig. 3).

    Estas investigaciones han permi- tido la caracterizacin del fondo marino y la determinacin de sus principales caractersticas sedimen-tolgicas, geoqumicas y morfol-gicas en tres grandes sectores del margen continental (3 30S - 15 30S) que se muestran resumida-mente en la Tabla 1 y conocer los

    factores del medio ambiente depo-sicional que intervienen en la preser-vacin y distribucin del contenido orgnico, as como ubicacin de zonas de inters para actividades de minera ocenica (Ej. depsitos arenas, de fosforita, carbonatos).

    Se han observado muy estrechas relaciones entre los menores tama-os de grano y los ms elevados contenidos de materia orgnica de los sedimentos con las depresiones del relieve o los sectores protegidos de la corrientes submarinas por algunas elevaciones sobre el fon-do marino (condicionado una baja energa hidrodinmica); escaso oxgeno disuelto en el fondo por influencia de la Zona de Mnimo Ox-geno (ZMO); condiciones anxicas sulfato-reductoras del sedimento, escasa fauna bentnica (bacterias anxicas principalmente); alta tasa de acumulacin; y la presencia de ncleos de alta productividad primaria en las aguas superficiales sobre estos centros de depsito que condicionan una alta tasa de sumi-nistro de material orgnico hacia el fondo, etc.

    Tambin han sido muy importantes las investigaciones de caracteriza-cin del contenido mineral realizados por el Instituto de Geologa, Minera-loga y Metalrgica (INGEMMET) en

    Fig 3. Izquierda: Mapa de distribucin de las estaciones de muestras de sedimentos del fondo marino. Centro: Distribucin del tamao promedio de grano. Derecha: Contenido de carbono orgnico de los sedimentos superficiales de la plataforma y talud continentales (DELGADO et al., 1987, 1995, VELAZCO et al., 2007, 2012).

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    Muestras de sedimentos

    (1975 - 2001)

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    Geologa Marina

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  • 8el marco del convenio con IMARPE y a la interaccin entre sus investiga-dores (GIRN 2006, GIRN et al., 2009, CORNEJO 2008, CORNEJO et al., 2010), que han logrado ob-tener, a la fecha, al igual que para la distribucin de las caractersticas sedimentolgicas, gran detalle en sectores de la plataforma y talud continentales, entre el extremo norte del Per y los 15S.

    Si bien se viene prospectando un amplio dominio de la Plataforma Continental, an resta por conocer con detalle la Plataforma Continental al sur de los 1530S, sector donde es muy escasa la informacin y la disponibilidad de muestras, cons-tituyendo un desafo el ampliar los conocimientos que ayudarn a co-nocer tambin mejor la fauna y flora que lo habita as como de posibles fuentes de riqueza mineral.

    Referencias

    CORNEJO T, M MORALES y C CHACALTANA. 2009. Caracteriza-cin mineralgica de los sedimentos superficiales de la Plataforma Con-tinental frente a los departamentos

    Caractersticas generales

    Tabla 1. Caractersticas comunes de las tres zonas definidas en base a la distribucin del contenido orgnico y sedimentolgico (DELGADO et al. 1998, VELAZCO et al., 2007, 2012).

    Zona I (aprox. 9o30'-14o00'S)

    Zona II (aprox. 6o15'-9o30'S)

    Zona III (aprox. 3o30'-6o15'S)

    1. Origen y Tipo de los sedimentos superficiales

    Tipos genticos predominantes

    Terrgenos y biognicos (diatomeicos) y autignicos en fraccin arenosa (fosforita, que disminuye hacia el sur)

    Terrgenos, biognicos (foraminferos) y autignicos (fosforita , que incrementa hacia el sur de esta zona)

    Principalmente terrgenos

    Textura de los sedimentos

    Principalmente fango (limoso y arcilloso)

    Principalmente arenas y fango

    Fango y arenas

    2. Geoqumica (Contenido orgnico)

    Carbono orgnico(C-Org.)

    >5%, hasta 12% < 2% a > 5%, hasta 7,6%

    < 2%, predominan los valores 15% hasta 29% < 5% a > 15%, hasta 26%

    < 10%, predominan los valores

  • 9Per: Un territorio semiexplorado en hidrocarburosDr. Ing. Aurelio Ochoa Alencastre*

    La evaluacin de los resultados de las ltimas subastas de lotes petroleros para la exploracin y explotacin de hidrocarburos em-prendidas por PERPETRO los aos 2007, 2008 y 2010, nos inducen a reflexin respecto a lo poco atrac-tivo que estuvo siendo considerado nuestro territorio en las gerencias de geologa (o en los departamen-tos de exploracin-produccin) de las grandes petroleras. Al parecer, esta condicin tendera a revertirse como se observar en las lneas subsiguientes.

    El Per, desde el punto de vista poltico y econmico, resulta hoy bastante interesante para cualquier inversionista, surge entonces la pre-gunta: por qu hasta hoy no hemos atrado a las grandes ligas petro-leras? Una explicacin podra ser que, a excepcin de Camisea, de los petrleos pesados de la selva norte, y del petrleo ligero descubierto en los pozos Situche en el lote 64, cer-canos a la frontera con el Ecuador, an no descubrimos yacimientos hidrocarburferos de alguna impor-tancia, situacin que injustamente nos viene estigmatizando en el am-biente petrolero internacional como un territorio de alto riesgo geolgi-co. Otra explicacin valedera, que estara complicando este panorama, seran los engorrosos trmites buro-crticos con los que deben batallar las empresas petroleras, particu-larmente los relacionados con el aspecto ambiental, cuestin que no solo viene impidiendo la fluidez de la exploracin, sino que viene di-suadiendo la inversin petrolera en nuestro pas. Resultan sintomticas las siguientes estadsticas: aunque

    se ha incrementado de 16 contratos para exploracin en el ao 2004, a 62 el ao 2010; sin embargo, en ese mismo perodo, en cuanto a la perforacin de pozos exploratorios, hemos pasado de 6 a solo 9; de lo que se infiere la evidente existencia de un obstruccionismo respecto a las aprobaciones gubernamentales, el cual debe y tiene que cambiar lo antes posible. Al parecer, y a ins-tancias de Perpetro, gracias a la dacin de la Resolucin Suprema N 042-2012-PCM, que ha creado la Comisin Viceministerial Multisecto-rial para establecer una ventanilla nica en hidrocarburos, electrici-dad y petroqumica, este panorama podra revertirse prximamente.

    No obstante, an haciendo abstrac-cin de aquel horizonte burocrtico, aparece la otra interrogante que to-dos se hacen en el mundo petrolero: Existe realmente potencial hidro-carburfero en el territorio peruano? Como gelogo, la respuesta es absolutamente afirmativa. Lo que ha sucedido es que en un espacio tan vasto como el nuestro (1285,215 km2), no se ha perforado lo suficien-te a travs de pozos exploratorios (la nica va conocida hasta hoy para hallar hidrocarburos), consecuen-temente, an no nos ha permitido

    descubrir y poner en valor el real potencial petrolero-gasfero del Per, lo cual es precisamen-te uno de los principales retos para Perpetro..

    Un escenario similar se produjo en Colombia, donde antes de la dcada de los noventa hubo dos oleadas exploratorias poco exitosas, las que por la

    escasa perforacin de pozos ex-ploratorios no permitieron, en ese perodo, descubrir aquellos gran-des yacimientos como lo fueron y son Cusiana y Cao Limn (adems de varios otros). En efecto, en las mismas reas que haban antes sido exploradas sin xito por otras petroleras, se reinici en los noventa (y prosigue actualmente) un inten-sivo y renovado esfuerzo tcnico-econmico; se trataba de la tercera ola exploratoria que finalmente logr develar aquellos y otros yacimientos importantes, posibilitndose a ese pas cambiar la posicin de neto im-portador de petrleo que hasta ese momento tena. Hoy Colombia, con cerca de un milln de barriles diarios de produccin, contina como neto exportador siendo el Per uno de sus habituales clientes, como lo fue a la inversa, all por la dcada de los ochenta, cuando nuestro pas exportaba el 50% de su produccin de alrededor de 200,000 barriles diarios.

    Dieciocho cuencas hidrocarbu-rferas sedientas de exploracin

    En el Per se tienen identificadas 18 cuencas sedimentarias con algn potencial por hidrocarburos (ver mapa de cuencas), de las

    (*) Presidente de Perpetro. [email protected]

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    H idrocarburos

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    cuales, slo tres (Talara, Maran y Ucayali) han sido apreciablemente exploradas y vienen siendo explotadas, pero, incluso en ellas restan reas por explorar, como lo demuestran los hallazgos de crudo ligero en los pozos Situche del lote 64 en la selva norte. Otras cuencas lo han sido o son poco exploradas (Progreso, Sechura, Madre de Dios, Titicaca, Pachitea, Ene, Bagua). Lo ms significativo de aquel escenario es que la mitad de esas 18 cuencas tiene solo entre 0 y 1 pozo exploratorio, consecuentemente, es fcil inferir que en nuestro territorio todava falta mucho por explorar, no slo en el rea continental, sino sobre todo en el llamado off-shore (zcalo continental). En ese sentido, vale la pena destacar que gracias a los levantamientos ssmicos se han detectado alrededor de 380 prospectos no perforados, de lo que se deduce que poner en valor aquellas cuencas es y ser un reto para PERPETRO estos y los prximos aos. Debe recordarse que en el trienio 2008 - 2010, hemos perforado solo 16 pozos exploratorios, mientras en el mismo perodo, Colombia haba sumado 285 pozos exploratorios. Felizmente, el ao 2011 ya habramos comenzado a cambiar tal situacin, pues en diciembre se estuvo perforando el pozo N 18, esperando que el 2012 y subsiguientes, superemos esa cifra, lo que nos permitir a ciencia cierta, en algn momento no lejano, anunciar al pas la buena noticia de algn (o algunos) descubrimiento(s) de hidrocarburos. Un reto para la actual y las futuras administraciones de Perpetro.

    Entretanto, gracias al yacimiento de Camisea, descubierto en 1984, nuestras reservas de gas natural y LGN (lquidos de gas natural), podran darnos una autonoma cercana a los 20 aos al ritmo actual de consumo. Empero, en esa parte del pas existen varias estructuras geolgicas a la espera de ser perforadas, que de materializarse, ayudaran a superar largamente las actuales reservas de esos hidrocarburos.

    Con relacin al petrleo, el paisaje es preocupante. En los aos ochenta poseamos reservas mayores a 850 millones de barriles, como resultado de la intensa campaa exploratoria de los setenta y ochenta, consecuentemente, en esa poca ramos exportadores del 50 % de nuestra produccin (+200,000 barriles diarios); empero, desde hace varios aos somos netos importadores de petrleo, adems de tener hoy unas muy modestas reservas probadas: 582 millones de barriles. Reservas que vienen extinguindose inexorablemente vis a vis de nuestra nfima produccin de 69,000 barriles diarios, lo que nos obliga a acelerar el proceso exploratorio en el pas a fin de revertir tan obscuro panorama, el mismo que viene generando una recurrente balanza comercial de hidrocarburos negativa, que bordea anualmente los mil millones de dlares, cifras preocupantes para una economa emergente como la peruana; sencillamente, una ardua tarea para Perpetro.

    Es posible revertir aquel pano-rama petrolero desolador?

    Los 18 pozos exploratorios perfora-dos el 2011, frente a igual nmero pero en todo el trienio 2008 - 2010, pareceran dar indicios de ello. De

    otro lado, en agosto de 2011, agen-cias como Dow Jones, Bloomberg, Platts y Reuters, luego de tener conocimiento del Plan Estratgico de Perpetro orientado a reposi-cionar el territorio peruano para la exploracin petrolera, lanzaron al mundo anlisis especializados, los que rebotaron en 47 importantes medios como el Financial Times, The Wall Street Journal, Forbes, Fox Business, Nasdaq, etc. (ver: www.perupetro.com.pe). Tal aco-gida meditica previa, al parecer, redespert en el mundo petrolero el inters por el Per, conforme pudo apreciarse en octubre 2011 en la IV Feria Internacional de Petrleo y Petroqumica de Dongying, China, as como en la inauguracin de la primera oficina virtual de Per-petro, en Houston, USA, donde participaron 33 empresas, entre ellas: Exxon Mobil, Total, Anadarko, BP, Chevron. Igual ocurri en el XX Congreso Mundial de Petrleo de Doha, Qatar, donde empresas rabes como Qatar Oil, Kuwait Oil, Empresa Nacional Libia de Petr-leo, etc., mostraron inters por ese territorio semiexplorado como es el Per. Igual ocurri en otros eventos petroleros recientes en Bogot, Ro de Janeiro y en el ltimo Congreso Mundial de Gas Natural en Malasia, realizado la primera semana de junio 2012.

    Hidrocarburos

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    Potencial exploratorio hidrocarburfero:Plays no tradicionales en las cuencas peruanasIng. Carlos Bianchi Ramrez *

    GlosarioPlay: Idea, percepcin o modelo de cmo una posible roca almacena-dora (roca reservorio), un sistema de carga de petrleo (generacin, migracin y entrampamiento), un sello regional y trampas pueden COMBINARSE para producir acumulaciones de petrleo en un determinado nivel estratigrfico. Este concepto se basa en el enten-dimiento de la evolucin estructural y estratigrfica de una cuenca se-dimentaria.

    Sistema Petrolero (SP): Estudia y describe la relacin gentica entre una porcin de roca generadora activa y la resul-tante acumulacin de petr-leo y gas. Abarca elementos y procesos necesarios para que una acumulacin de hidrocarburos exista. Los elementos esenciales son: roca generadora, roca re-servorio, roca sello, presin y temperatura. Los procesos incluyen la generacin-migracin, formacin de la trampa, entrampamiento y preservacin. Tanto elemen-tos como procesos deben darse de manera sincrnica para que la acumulacin de petrleo y gas tenga lugar.

    IntroduccinLa industria de los hidrocar-buros en la ltima dcada ha ido evolucionando de manera muy rpida en varios as-pectos: tanto tecnolgicos como en los conceptos exploratorios, a medida que avanza el tiempo, el pe-trleo fcil ya ha sido descubierto y enfrascarse hoy en da en buscar

    hidrocarburos nuevos es realmente desafiante; sin embargo la tarea de los gelogos en este campo apa-sionante de la exploracin es ardua y continua. Hoy en da es mucho ms difcil tratar de convencer a los directivos de las empresas para ir a perforar un prospecto, la primera pregunta que se hace es: Tiene ssmica? Es 2D 3D?, Qu riesgo tiene? Es econmicamente viable el proyecto?, etc. En todas estas interrogantes intervienen muchos supuestos y adems muchas veces se desechan proyectos porque fal-tan algunos de estos elementos.

    Por otro lado, ya hace unos aos se utiliza el concepto del Sistema Pe-trolero (SP) (introducido por Wallace Dow), el cual considera una serie de elementos y procesos que tienen que cumplirse de manera sincrnica

    para que exista un descubrimiento, es decir, debe existir roca generado-ra, roca reservorio, roca sello, tram-pa, presin, temperatura; y adems ha de darse una serie de procesos como generacin, migracin, en-trampamiento y preservacin.

    Si alguno de estos elementos y/o procesos fallan, simplemente no ten-dremos un descubrimiento. Bajo esta premisa, algunas empresas, mediante herramientas de explora-cin que les ayuden a demostrar la existencia de cada uno de los ele-mentos antes mencionados, como

    son la geofsica, geoqumica, mtodos potenciales, etc., y mediante interpretaciones y evaluaciones, enfocan sus esfuerzos en disminuir el riesgo exploratorio en sus proyectos; otras empresas, sin embargo, se concentran en uno o dos elementos, pues an mantienen los con-ceptos tradicionales, tales como la trampa anticlinal y para ello, por ser un con-cepto netamente geomtrico y estructural, usan la ssmica 2D, 3D para que esta les resuelva el problema, suce-diendo que muchas veces se perfora y el resultado es ne-gativo. Despus de evaluar este resultado se concluye que el sistema fall porque no hubo carga, no hubo generacin, no exista roca madre, o que cuando ocurri la generacin-migracin la trampa no estaba formada,

    etc. En suma son excusas y lo que realmente est pasando es que el concepto de Sistema Petrolero (SP) solamente se est usando como un clich y no como el concepto que verdaderamente es.

    (*) Gelogo de exploracin por hidrocarburos. Docente UNMSM. [email protected]

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    Con este artculo no pretendo desmerecer o levantar algn mtodo exploratorio en especial, muy por el contrario, lo que trato es de invocar a los gelogos y empresas, a emplear los mximos esfuerzos en usar toda la informacin existente, que completen todo el ciclo y definan el SP activo, que consta de elementos y procesos, a fin de ir disminuyendo el riesgo al buscar nuevas reservas de hidrocarburos.

    Atractivo exploratorio del PerEl Per, a diferencia de otros pases de la regin, presenta una variedad de rocas, estilos estructurales, es-tratigrficos, reas atractivas para explorar y adems, si nos basamos en el concepto del SP, existen gran variedad de rocas con potencial generador de distintas edades, al-gunas probadas y otras con muchas evidencias de llegar a serlo. Como se muestra en la figura 1 tenemos cuencas sedimentarias en todas las regiones y algunas de estas cuen-cas con uno o dos SP. Estas cuen-cas, por su posicin geogrfica, se clasifican as:

    Cuencas Costa Fuera (Offshore). Son las cuencas de sur a norte, como Progreso, Talara, Sechura, Trujillo, Salaverry, Lima, Pisco y Mollendo, y dentro de las cuales la ms importante es la cuenca Talara por su filiacin petrolfera y su antigedad productiva. Sin embargo en la ltima dcada se han realizado descubrimientos en las cuencas Progreso, Sechura, sobre todo los plays no tradicionales como, por ejemplo, el Cretceo en la cuenca Talara y Sechura, el Paleozoico fracturado en la cuenca Sechura que abren posibilidades a las cuencas restantes del sur. Se tienen rocas generadoras, que van desde el Paleozoico (Grupo Ambo), Cretceo (Muerto, Redondo) y terciario (Fm. Heath), y una variedad de rocas reservorios clsticas y fracturadas, que hacen bastante atractiva la exploracin en este sector del pas.

    Cuencas Costa Adentro (On- shore). En este sector las cuencas ms importantes son la cuenca Maraon y la cuenca Ma-

    dre de Dios, en ambas se han en-contrado hidrocarburos lquidos y gaseosos, los cuales han probado su filiacin. Adems existen otras cuencas en etapa de exploracin temprana pero con gran poten-cial como las cuencas Huallaga, Ene, Ucayali, Santiago, Bagua y Titicaca, en esta ltima tambin con produccin de lquidos en el pasado. Al igual que las cuencas anteriores, en estas existen varie-dad de rocas generadoras que van desde el Paleozoico (Grupos Ambo y Cabanillas), Jursico (Grupo Pucar) y Cretcico (Fm. Chonta-Raya) y rocas reservorios, clsticas y fracturadas, de diferen-tes edades geolgicas.

    Plays no tradicionalesComo se puede apreciar el terri-torio tiene mucho potencial por descubrir pero hay que romper el viejo paradigma de lo tradicional e ir a buscar los no tradicionales, como ejemplos puedo mencionar el play Paleozoico en el sector sur oriental de la cuenca Maraon, Cuencas Trujillo, Salaverry, Pisco; el play precretcico en las cuen-cas Huallaga, Ucayali, Madre de Dios y Titicaca, El play Cretcico en las cuencas Trujillo y Pisco. Por mencionar los ms importantes (Fig. 2). Adems si nos apartamos de la vieja tradicin de buscar plays estructurales, existen innumerables plays estratigrficos como cuas,

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    UCAYALI

    MADRE DE DIOS

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    SP K - REDONDO

    SP K - CHONTA

    SP K - MUERTO

    SP J - PUCARA

    SP PZ - CABANILLAS

    SP PZ - AMBO

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    SISTEMAS PETROLIFEROS

    LIMITE DE CUENCAS

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    Fig.1. Mapa mostrando los Sistemas Petroleros y sus rocas

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    LEYENDA

    LIMITE DE CUENCAS

    CRETACEO

    JURASICO

    PALEOZOICO

    TERCIARIO

    pinchamientos, antiguas bahas, en-golfamientos (geomrfico) que con nueva informacin ssmica, datos de pozos, informacin de geologa de superficie, muestreos sistemticos y estudios regionales hacen muy atractiva la exploracin. Es cierto que este tipo de oportunidades no

    Fig. 3. Tipos de trampas de hidrocarburos.

    convencionales son consideradas de alto riesgo por el grado de conocimiento que se tiene actual-mente, sin embargo hay algunas compaas que han tomado el reto de ir a buscar este tipo particular de plays, y ojal que este proceso tenga un efecto persuasivo en las

    dems compaas para demostrar realmente el potencial que tiene nuestro pas.

    ConclusinEl Per cuenta con un enorme potencial hidrocarburfero, susten-tado por la presencia de diferentes tipos de rocas generadoras de alta calidad, diferentes tipos de reservorios y condiciones adecuadas para que los sistemas petroleros funcionen.

    La exploracin en todas estas reas potenciales debe ser enfo-cada usando toda la informacin existente disponible y adems dife-rentes mtodos de exploracin que ayuden a identificar cada elemento del sistema petrolero y cada uno de sus procesos , rompiendo viejos paradigmas y apuntar a los plays no tradicionales que pueden dar ms de una sorpresa.

    Nota: Se agradece la colaboracin de los gelogos Kevin Andamayo y Susy Abanto.

    Referencias FURTADO, Cleber; Geologa del

    Petrleo de la Cuenca Solimoes. 4 PDPETRP, Campinas SP CLARK, Joao; Brasil Round 4,

    Cuenca Solimoes. HERMOZA, Wilber; Impacto de

    las estructuras Pre-Cretcicas en el Entrampamiento de la Cuenca Maran.

    X Simposio Bolivariano Explora-cin Petrolera en Cuencas Su-bandinas, Cartagena, Colombia.

    Geological Society of America, Solimoes Basin, 1991

    Wallace Dow, The petroleum System From Source to Trap

    Hunt, Geochemistry for esploration & Production.

    Fig. 2. Mapa mostrando presencia de reservorios en las cuencas

    Hidrocarburos

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    IntroduccinSe denomina Subandino a la re-gin situada entre la cadena de los Andes y la llanura amazni-ca (ceja de selva). Esta franja de alta complejidad estructural se encuentra intensamente fallada y deformada por consecuencia de la tectnica andina, y en ella se albergan grandes estructu-ras anticlinales, que han sido formadas principalmente por corrimientos y retrocorrimien-tos. En Sudamrica, desde Venezuela hasta Argentina, pa-sando por Colombia, Ecuador, Per y Bolivia, la faja subandi-na presenta un gran potencial en hidrocarburos (Fig. 1 y 2).

    Pluspetrol es una empresa reconocida por haber desa-rrollado muchas actividades de exploracin y desarrollo en esta zona por ms de 30 aos. Empez en el yacimiento de Ramos, al norte de Argentina; luego sigui en Tacobo, Bo-livia; y hoy en el Per, donde posee inversiones en importantes yacimientos de gas y condensado, como es el caso de Cashiriari, San Martn, Pagoreni y Mipaya, aqu es el operador del consorcio Camisea.

    Adicionalmente, la compaa sigue invirtiendo en el Per con la explora-cin de los lotes 108 y 76, ubicados en la cuenca Ene y Madre de Dios respectivamente. De esta manera, Pluspetrol est posicionndose con gran visin en la faja plegada del sur del pas.

    Cabe resaltar que para trabajar en esta franja, la compaa operadora

    debe contar con experiencia y habilidades especiales por las dificultades geolgicas, geo-grficas y climticas que se presentan. Adems por tratar-se de zonas remotas, social y ambientalmente sensibles, hay que operar con sumo respeto a las comunidades y al medio ambiente para llevar adelante los proyectos en forma soste-nible.

    Desarrollo de los yacimien-tos en Camisea En el ao 2001, el Consorcio Camisea, liderado por Plus-petrol, asumi el compromiso de desarrollar los campos descubiertos a travs de la perforacin de pozos y la construccin de sistemas de captacin y la planta de sepa-racin de lquidos en el rea de Malvinas con una capacidad de procesamiento actual de 1,100 millones de pies cbicos por da (MMPCD) (Fig. 3). El prximo mes de julio, finalizar

    la segunda ampliacin de la planta logrando la capacidad de procesar

    Pluspetrol: Desarrollo y exploracinde hidrocarburosen el Subandino Sur del Per Dr. Ing. Federico

    Seminario Gros*

    (*) Gerente de Geociencias - Pluspetrol Per Corporation S.A. [email protected](**) Coordinador de Proyectos, Gerencia de Geociencias - Pluspetrol Per Corporation S.A. [email protected]

    Ing. Germn Salas Arias**

    Cordillera Oriental Zona Subandina

    Yac. Camisea

    Fig. 1. Unidades morfolgicas de los Andes.

    Fig. 2. Seccin estructural mostrando Zona Subandina.

    Hidrocarburos

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    1,580 MMPCD y 120,000 Bls de lqui-dos de gas natural. Adicionalmente, para transportar el hidrocarburo, se tendieron ductos, el primero, de gas desde la selva, atravesando los Andes hasta la ciudad de Lima; el segundo, de lquidos, que llega a la costa de Pisco, donde se instal una planta de fraccionamiento de lqui-dos para darle valor agregado al producto, obteniendo as: buta-no, propano, diesel y naftas de altsima calidad.

    Pluspetrol, para desa-rrollar los yacimientos de Camisea, imple-ment varios progra-mas de participacin y monitoreo con comunidades como, por ejemplo, el pro-grama de monitoreo ambiental comunitario (PMAC), donde las comunidades nativas son las encargadas de monitorear su entorno; el programa de vigilan-cia fluvial comunitaria, el programa de vigas para el control de ac-cesos y el programa de contingen-cia antropolgica, entre otros.

    Tambin es importante tener en cuenta que para minimizar los posibles impactos ambientales, el sistema adoptado por el Consorcio fue el de operar las plataformas de perforacin en forma aislada, es decir, sin la apertura de vas de acceso que comuniquen centros poblados con el rea de operacin, a fin de evitar la generacin de rutas de penetracin al rea.

    SsmicaLa informacin ssmica 2D dis-ponible, antes de desarrollar los campos, era escasa y obsoleta, ya que provena de los aos ochenta. El Consorcio decidi adquirir un re-gistro ssmico 3D, de 1,127 Km2 con el objetivo de mejorar la resolucin ssmica y resolver las principales incertidumbres estructurales y es-tratigrficas, as mismo obtener una mejor imagen de las heterogeneida-

    des del reservorio y la distribucin de fluidos (Fig. 4).

    La ssmica 3D registrada fue de alta calidad y dio una imagen completa de la estructura, as como una interesante anomala de amplitud que representaba la distribucin del fluido en la estructura.

    Varios trabajos de procesos espe-ciales sobre los datos ssmicos, tales como la impedancia acstica para determinar litologas; AVO (amplitud versus offset) para identi-ficar contenidos de fluidos, han sido efectuados, lo que ha permitido una mejor carac-terizacin de los reservorios.

    PerforacinUno de los ms grandes desa-fos del proyecto de Camisea fue la perforacin de pozos de desa-rrollo en un rea remota, social y ambientalmente sensible. Se em-ple la tcnica en tierra tipo costa afuera (en ingls offshore-

    on-land). En consecuencia, se perforaron varios pozos desviados de largo alcance, desde una misma posicin en tierra, encontrando los objetivos profundos con ngulos de hasta 60 grados de inclinacin y, en promedio, ms de 2,000 m de des-plazamiento horizontal y una profun-didad final de ms de 3,000 m.

    Se perforaron y se dejaron listos y en produccin 8 pozos en el yacimiento San Martin, 7 pozos de Pagoreni y 10 pozos en Cashiriari.

    La mayora de las herramientas conocidas en la industria fueron implementadas en los pozos de Camisea: tomar registros durante la perforacin exitosamente (Logging While Drilling); tener los perfiles de Densidad y Neutrn, mientras se perfora es de invalorable ayuda al momento de reconocer areniscas de buena porosidad con gas. El registro de Resonancia Magntica Nuclear aport con un mejora-miento en la calidad de los datos petrofsicos.

    La obtencin de 654 m de ncleos convencionales adicionales en los pozos, por parte de Pluspetrol, fue de gran utilidad en la identificacin de los ambientes sedimentarios, facies y propiedades petrofsicas de las rocas. Esos datos tambin permiten calibrar la informacin de perfiles elctricos y el comportamiento de los atributos de las ssmica 3D.

    Fig. 3. Yacimientos Camisea.

    Fig. 4. Perspectiva de la estructura San Martn.

    Hidrocarburos

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    El resultado productivo obtenido a la fecha podemos resumirlo de la siguiente manera: una produccin diaria de 1,100 MMPC de gas natural y 78,000 Bls de lquidos del gas natural (LGN). En mayo del 2012 se alcanz una produccin neta acumulada de 1.1 TPC de gas y 150, 000,000 Bls de LGN.

    Trabajos exploratoriosrecientesEl ao 2008, el Consorcio Camisea dio inicio a un programa de explo-racin en los lotes 56 y 88 para sus-tituir las reservas producidas con el desarrollo de los campos existentes y adicionalmente encontrar nuevos yacimientos, que posibiliten incre-mentar las reservas de gas y con-densado.

    Entre las actividades involucradas en la exploracin, estn los estudios ambientales, trabajos de geologa y geofsica, perforacin de pozos y construccin de facilidades para la perforacin y produccin de los nuevos campos.

    Se efectu la adquisicin de 150 km2 de ssmica 3D en el rea de Mipaya, geoqumica de superficie en el lote 56, adquisicin gradiomtrica en el lote 88, geologa de campo e interpretacin de informacin para la generacin de los proyectos exploratorios. Se perforaron los pozos exploratorios Mipaya 1001, Mipaya 1002 y Pagoreni west 1001. Se iniciaron las construcciones de facilidades de produccin para los nuevos campos Mipaya y Pagoreni. La inversin efectuada en exploracin ha sido del orden de US$ 190 millones.

    Para los aos 2012 2014, el Consorcio tiene programado efectuar las siguientes activi-dades: Conseguir los permisos ambientales para la perforacin de los pozos en San Martn Este y Samani, as mismo el permiso ambiental para efec-tuar ssmica 2D y 3D en el lote 88 y de las locaciones Kimaro, Kentsori y Maniti; efectuar un reprocesamiento especial de la

    ssmica 3D; modelar el sistema de hidrocarburos en la cuenca, realizar geologa de campo, etc.

    Luego de obtener los permisos ambientales y de interpretar la ssmica 2D y 3D por adquirir, se tiene planificado la perforacin de dos pozos exploratorios, Kimaro y Maniti. Se estima para el ao 2012 tener una inversin de US$ 230 millones, mientras la inversin total en exploracin llegara a los US$ 770 millones.

    Exploracin en otros lotes Pluspetrol est comprometido en la bsqueda de hidrocarburos en el Subandino, y es por eso que participa en la exploracin de los lotes 108 y 76 (Fig. 5).

    En el lote 108, Pluspetrol, conjunta-mente con sus socios, desde enero del 2006, ha efectuado trabajos de exploracin en la cuenca Ene: Reprocesamiento ssmico, gravim-trico y magnetomtrico, numerosos trabajos de geologa de campo, anlisis petrogrficos, bioestratigr-ficos y geoqumicos y evaluaciones del potencial exploratorio del lote.

    Actualmente se tiene el compromiso de adquirir ssmica 2D, con este fin est preparando el estudio am-

    biental para conseguir los permisos respectivos.

    En el lote 76 de la cuenca Madre de Dios, Pluspetrol tambin va a participar como socio en la exploracin de esta parte de la cuenca, donde anteriormente ya hubo un descubrimiento de gas en la estructura Candamo.

    En el lote 57, Repsol, en el ao 2007, efectu el descubrimiento del campo de gas de Kinteroni. Entre sus planes se encuentra continuar con la perforacin de otros prospectos exploratorios.

    En el lote 58, Petrobras ha tenido una serie de descubrimientos de campos de gas significativos como Urubamba (2009), Picha (2010) y Taini (2011). En la actualidad, est perforando el pozo Paratori.

    Todas estas actividades nos muestran que el Subandino Sur del Per presenta un atractivo para la inversin exploratoria por hidrocarburos. Con el conocimiento adquirido de esta rea y las inversiones de riesgo que realizan las compaas, podemos estimar que se podran encontrar finalmente grandes volmenes adicionales de gas, necesarios para asegurar el futuro energtico del pas.

    Fig. 5. Ubicacin lotes Pluspetrol Zona Subandina.

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    Carbonatos paleozoicos en las cuencas Ucayali - Madre de DiosIng. Marco Vsquez*

    ResumenEl presente estudio tiene como obje-tivo despertar el inters en la inves-tigacin de los depsitos de carbo-natos pertenecientes al Paleozoico del Per, de las cuencas Ucayali y Madre de Dios, debido a que estos podran constituir reservorios de gran importancia para esta zona.

    dantes horizontes fosilferos. Esta unidad ha sido descrita en los pozos San Martin-1 y La Colpa, en donde algunos niveles dolomticos han pre-sentado porosidades de 12 a 15% y han mostrado impregnaciones de petrleo y fluorescencia en los cuttings.

    El factor previamente descrito, as como la presencia de fisuras relle-nas con calcita secundaria, podra ser indicativo de la existencia de una porosidad krstica en las dolomitas, que pudieran generar un reservorio que habra sido alimentado por algunas de las fallas de la regin, creando as interrogantes sobre el verdadero potencial como reservorio de estos carbonatos en las cuencas Ucayali Madre de Dios.

    Geologa - Estratigrafa y Sedimentologa - ReservorioEl reservorio que se analiz son los carbonatos dolomitizados y acumu-laciones fsiles que se ven en los Grupos Tarma - Copacabana.

    - Grupo Tarma. De abajo hacia arriba, el primer ciclo pertenecien-te al Grupo Tarma empieza en su base con una secuencia clstica de areniscas verdes, que han sido siempre un objetivo en la etapa de exploracin pero que hasta el momento no constituye un nivel pro-ductivo comercial.

    El segundo ciclo, que es el primer objetivo principal, son las calizas dolomticas del Grupo Tarma que estn alternando con paquetes de lutitas negras indicadores de esta-dos de comunicacin con el mar abierto, las dolomas dan lecturas de gas durante la perforacin, 5u

    Fig. 1. Mapa de ubicacin.

    (*) Senior Geologist - Repsol Exploracin Per. [email protected]

    dentro del grupo de Reservorios No Convencionales.

    Los carbonatos del Oriente peruano, ubicados en las cuencas terciarias de Maran, Huallaga, Ucayali, Madre de Dios, Ene y Bagua, pre-sentan una edad que oscila entre el Carbonfero superior al Prmico

    inferior (Grupo Tarma Copaca-bana) y del Jursico inferior al Cretcico inferior (Grupo Pucar, Fm. Chonta, Fm Jumasha), sien-do el presente estudio orientado a los carbonatos Paleozoicos

    del Grupo Tarma Copacabana, los cuales marcan el inicio de la transgresin marina en una cuenca restringida desarrollada en el Carbonfero superior hasta

    el Prmico inferior.

    El Grupo Tarma ha sido descrito en secciones de campo y muestras de pozos, como una sucesin de dolomas grainstone y wackstone, intercaladas con lutitas y limolitas que infrayacen concordantemente al Grupo Copacabana de edad Pr-mico inferior y que consta de una secuencia de calizas y dolomas de mar abierto.

    En el Grupo Copacabana la litolo-ga predominante son las calizas mudstone, dolomas grainstone y dolomas wackstone con abun-

    Encontrndose as la necesidad del reanlisis de las muestras de pozo, secciones de campo y modelos deposicionales de los carbonatos de los grupos Tarma - Copacabana, objeto de estudio, cuyos espesores (600 a 800 m) y ubicacin en el rea de anlisis los hacen especialmente atractivos para las futuras perfora-ciones.

    Es necesario enfatizar que por el alto costo que puede representar la explotacin de estos depsitos, as como por sus caractersticas pe-trofsicas han de ser considerados

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    a 30u de Total Gas. Esta ocurren-cia ha sido detectada en todos los pozos perforados en el sur de la cuenca Ucayali (La Colpa, Runuya, Sepa, Sipan) y en el noroeste de la cuenca Madre de Dios (San Martin, Pagoreni).

    - Grupo Copacabana. Se han identificado hasta siete ciclos que desde el ms antiguo al ms recien-te son:

    El tercer ciclo est en la base del grupo Copacabana, son calizas micriticas, dolomas y lutitas re-gistradas en los pozos San Martin, Pagoreni, en el Pongo de Mainique y Alto Manu. Durante la perforacin en los pozos se tuvieron lecturas de gas. Los niveles dolomticos en perfiles llegan hasta 13% de poro-sidad.

    El cuarto ciclo presenta un intervalo de caliza mudstone y lutita hallados en los pozos San Martin y Pagoreni, tambin en el Pongo de Mainique; en los pozos la porosidad fue baja (7-9%). En el Alto Manu se identific un nivel de 5 a 20 m de trozos de ca-lizas con espacios rellenados de ar-cilla. Este es un clsico indicador de una zona de colapso muy frecuente en ambientes marinos calcreos de gran extensin.

    El quinto ciclo expone un nivel do-lomtico con buenas caractersticas petrofsicas midiendo hasta 15% de porosidad, registr gases y mues-tras de shows de petrleo (fluores-cencia con corte hasta 100%).

    El sexto ciclo en el Grupo Co-pacabana muestra en los pozos presencia de calizas grainstone y dolomas, en el Pongo de Mainique se describe algas y corales que son muy importantes porque siem-pre presentan buenas condiciones petrofsicas permitiendo el almace-namiento de hidrocarburos, en los pozos la lectura de porosidad en perfiles es de 15% -14% -16%, no se tomaron muestras de coronas y/o SWC para hacer otro tipo de me-diciones, algunos niveles tuvieron interesantes aumentos en el registro de gases y muestras de shows de petrleo.

    Este intervalo es el ms importante en la secuencia carbonatada como el mejor reservorio de este Grupo, sera importante sacar coronas en futuras perforaciones y volver a revi-sar la descripcin de las secciones medidas en campo.

    El sptimo ciclo de calizas mudstone, wackstone y dolomas corresponden a los picos de gas registrados en los pozos Sepa, San Martn y Pagoreni; la porosidad no es constante con picos altos de 15% y niveles de 8%, hay intervalos de shows de petrleo con corte. En el pozo Los Amigos se registr gas en todo el intervalo; este nivel fue probado en el pozo La Colpa obtenindose petrleo de 29o API y de bajos caudales, no comercial.

    El octavo ciclo se caracteriza por la presencia de dolomas en toda el rea del lote 57 y alrededores, en los pozos San Martn, Pagoreni, Sepa, Los Amigos han tenido shows de pe-trleo y las porosidades en el ltimo pozo vara entre 22% hasta 9%.

    El ciclo noveno presenta una alter-nancia de caliza del tipo mudstone, wackstone y dolomas con porosida-des entre 9% al 18%, las dolomas, registran gases en todos los pozos y shows de petrleo. En el pozo San Martin se prob, pero el resultado fue agua, posiblemente se haya debido a la invasin que sufri la formacin durante la perforacin, habra sido necesario una estimulacin para lim-piar la zona invadida. En el tope se ha identificado una capa de cherts

    probablemente influenciada por la actividad volcnica que se inicia a finales del Prmico inferior.

    Conclusiones- La ocurrencia de dolomas en la columna carbonatada de los Grupos Tarma - Copacabana son sinnimo de roca almacn de hidrocarburos, su presencia coincide con los picos de gas registrados en los pozos perforados, San Martn, Sepa y Pa-goreni.- La presencia de corales y algas insinan estadios arrecifales, estos deben ser corroborados en pozos y secciones, solo se han identificado en la columna del Pongo de Maini-que y Sinquebeni. - La presencia de petrleo en las calizas puede ser de un API mediano.- El gas puede ser el componen-te secundario que acompaa al petrleo.- El hidrocarburo almacenado puede ser proveniente del Grupo Cabanillas y/o de la Formacin Ene.- Se estima que el mayor almacena-miento de petrleo del grupo Caba-nillas (Mioceno) fue en el momento de la expulsin por la rampa, hacia los carbonatos, desplazndose por el gran homoclinal que exista, y que la migracin inicial debi haber sido vertical a travs de fallas. - Es atractivo el espesor total de los Grupos Tarma-Copacabana (en-tre 400 y 800 m) podra obtenerse un buen espesor neto.- La extensin regional de los Gru-pos Tarma-Copacabana es unifor-

    Fig. 2. Modelo de Facies Carbonaticas para la cuenca Madre de Dios Ucayali.

    J. Wilson/C. Jordan 1983

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    me, cubre el oeste de las cuen-cas Ucayali y Madre de Dios. Un factor importante es encontrar petrleo en niveles distintos de los que actualmente producen gas en la zona, los carbonatos seran los reservorios del futuro en el Per para reemplazar las reservas que se van consumien-do de los reservorios clsticos.- Existen instalaciones de su-perficie que pueden usarse para la explotacin futura del petrleo en las calizas al confirmarse su presencia comercial.

    Referencias J. L. Wilson, C. Jordan (1983)

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    Quiones, J. (1990) Estudio palinoestratigrfico del Paleo-zoico del Pongo de Mainique.

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    AAPG Memoir 69. (1997) Re-servoir Quality Prediction in Sandstone and Carbonates.

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    AAPG Memoir 81. (2004) Seismic Imaging of Carbonate Reservoirs and Systems.

    Massaferro, J.L. (2005) Car-bonate Reservoir Characteri-zation.

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    Vsquez, M. (2011) Estudio sobre los Carbonatos. VII Ingepet 2011.

    Anlisis del derrumbe como herramientapara minimizar tiempos no productivos de la perforacinIng. Jorge Washington Albeiro*

    IntroduccinDe acuerdo a estadsticas mundia-les, el tiempo no productivo de la perforacin (NPT, por sus siglas en ingls), puede alcanzar en promedio un 20% del tiempo total estimado para perforar un pozo, y en algunos casos, este porcentaje puede al-canzar hasta un 40%, en reas tc-nicamente complejas, o con escasa informacin. El NPT puede atribuirse a fallas del equipo de perforacin o herramientas, principalmente condi-ciones climticas adversas en reas remotas, que impiden la llegada de suministros, o condiciones propias del pozo, que no han permitido desarrollar en forma normal ope-raciones de perforacin, perfilaje o corrida de caeras. En muchos casos, la incidencia de estos NPT ha adquirido tal envergadura, que muchos proyectos de perforacin, literalmente se han abandonado por la imposibilidad de disminuir estos porcentajes. En otros casos, opera-ciones de perfilaje o de extraccin de coronas, se han cancelado, lue-go de mltiples intentos, debido a condiciones adversas no esperadas en la perforacin. Esto no solo ha generado un NPT, en los mltiples intentos de completar estas opera-ciones, sino costos adicionales en la renta de herramientas, que finalmen-te no se han utilizado, sin mencionar la prdida de informacin valiosa para el desarrollo del proyecto.

    En mi experiencia de campo y des-pus de trabajar por muchos aos en reas complejas (desde el punto de vista de la perforacin), he tenido ocasin de analizar en tiempo real

    diferentes eventos de NPT, o inter-cambiar opiniones con expertos en diversos campos de la perforacin (geomecnicos, ingenieros de per-foracin, ingenieros de lodos, per-sonal de perforacin direccional y responsables de proyectos), sobre la incidencia y los costos adiciona-les del NPT, cuando se desarrollan, por ejemplo, condiciones de inesta-bilidad de la pared de pozo, debido a cuestiones mecnicas o qumicas, lo cual en las conclusiones prelimi-nares, siempre llegamos a coincidir, que estos eventos, se podran evitar o al menos disminuir el impacto directo. En esta oportunidad creo importante enfocar nuestra aten-cin en el anlisis y cuantificacin volumtrica de los derrumbes (caving), como una herramienta eficaz para minimizar el impacto negativo del NPT.

    Qu son los derrumbes?Mucha de la literatura consultada coincide en definir que Los de-rrumbes son fragmentos de roca, generados por procesos de ines-tabilidad de la pared del pozo, los cuales son llevados a superficie por el fluido de perforacin. El tamao del derrumbe puede variar entre 1 y 2 cm; sin embargo puede abarcar escalas de entre algunos milmetros, a bloques de ms de 10 cm (Foto 1). En ocasiones, el derrumbe pequeo se debe a la disgregacin mecnica de bloques ms grandes, y como ocurre muchas veces, son abun-dantes y cubren prcticamente toda la superficie de las zarandas. Estas muestras tienen una textura similar a una arena gruesa y se los suele

    (*) Gelogo petrolero consultor. / [email protected]

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    llamar informalmente granos de caf. En una primera aproximacin, se suele reportar errneamente que se est atravesando un nivel arenoso, dado que se toma una muestra de zaranda, y a ojo desnu-do, es decir, sin la ayuda de una lupa binocular o la asistencia de un gelogo experimentado, se reporta que est saliendo una abundante cantidad de arena gruesa porque es la impresin que da al tacto. El reconocimiento temprano de la presencia de derrumbe puede ser la primera seal de un proceso de inestabilidad en marcha. Cuando se reconocen las litologas, podemos definir qu formacin es inestable. Una descripcin morfolgica de detalle puede dar pistas sobre el mecanismo de ruptura prevalecien-te, ayudando as a definir las accio-nes correctivas que nos ayuden a disminuir o suprimir el NPT. Cuando no se han atendido estas seales, o no se han comprendido los riesgos que se asumen, he visto desarro-llarse procesos catastrficos, que han significado aprisionamientos de herramientas, con la consiguiente prdida de secciones de pozo y costos adicionales de herramientas, y en algunos casos hasta la prdida del pozo.

    Cules son las causas del de-rrumbe?Hay mltiples fuentes del derrumbe y que puede estar relacionado a: Reacciones del fluido de perfora-cin con la pared del pozo (ines-tabilidad qumica). Presencia de zonas de fallas o con microfisuras, en la trayectoria de la perforacin. Derrumbe debido al proceso mec-nico del trabajo, cuando se perfora con alta penetracin horaria (ROP),

    o cuando las RPM de la mesa rotaria son elevadas, quizs las adecuadas para el tipo de broca utilizada, pero agresiva para la pared del pozo por las excesivas vibraciones laterales. Tambin es fuente de derrumbe la presencia de zonas de lutitas con fisilidad marcada o planos de estratificacin, lo cual es inherente a la formacin atravesada. Aunque muchas veces menos entendida, la anisotropa de los campos de esfuerzos, en la posicin de la perforacin, es determinante en el tipo y cantidad de derrumbe en za-randas. Los cambios repentinos en la trayectoria del pozo son fuentes adicionales y finalmente cuando se atraviesan zonas con presin anormal (sobrepresin), son, entre otras causas, fuentes importantes de produccin de derrumbes.

    Cualquiera que sea la causa del derrumbe, la no accin inmediata puede generar un NPT, debido a que hay que circular en exceso para limpiar el pozo, y en el peor de los casos, puede ocurrir un colapso de la pared del pozo, generando un em-paquetamiento (pack-off) y muchas veces una prdida de la capacidad de circular, con el consiguiente aprisionamiento de la herramienta. Tengo una larga lista de ejemplos de campo, que me hacen pensar que en la mayora de las veces, es-tos eventos catastrficos se podran haber evitado.

    Dos casos histricos de eventos catastrficos

    1. Cuenca Paleozoica del NO de Argentina- Formacin Los Monos (Devnico):

    Lutitas con niveles de arenisca, con presin anormal.

    - Perforando con motor de fondo, broca PDC y ensanchando al mis-mo tiempo (12 x 14 ).

    - Pozo direccional en ambiente de faja plegada.

    - Emulsin inversa de alta densidad- ROP variable, 40 a 70 ft/h.- Seales de inestabilidad en super-

    ficie: Ninguna, segn los tcnicos consultados (?).

    - Cambios en los parmetros de perforacin: Si (aumento de la presin de circulacin, torque errtico).

    - Cambios en el ECD: Si (aumento progresivo).

    - Qu ocurri: Luego de dos das de perforar con alta ROP y escasa cantidad de recortes en zaran-da, la herramienta se aprision, durante una conexin. Durante la maniobra previa de cambio de broca, se haba observado relleno en el fondo de pozo, ya que la herramienta par arriba, a ms de 50 m del fondo alcanzado.

    - Resultado: Luego de que la he-rramienta se aprision, casi de inmediato se perdi la capacidad de circular, y de trabajar con el martillo de perforacin. Luego de mltiples intentos de librar la herramienta, se decidi realizar punto libre y desenrosque, para luego colocar un tapn de cemen-to y realizar una desviacin (side track). En este caso se perdi casi todo el arreglo de perforacin (BHA) y una larga seccin del pozo.

    - Anlisis del evento: Los reportes de la Unidad de Geologa haban puesto en atencin la escasa cantidad de material en zaranda, a pesar de que se perforaba y ensanchaba al mismo tiempo con alta ROP. Sin embargo la inexperiencia de los operadores de la unidad desafortunadamente fue decisiva, ya que nadie hizo un clculo del volumen de slidos que se debera haber recuperado en zaranda, de acuerdo a la ROP y el dimetro del pozo. Tampoco se dispona entonces de algn sistema para medir el volumen de slidos en zaranda. Tampoco se bombe una pldora de limpieza, luego de los primeros reportes de esta anormalidad. Los cambios en el torque se atribuyeron a la trayectoria del pozo, lo mismo que el alto torque errtico, se pens que era debido a la presencia de los estabilizadores en la columna de perforacin. Los cambios en la presin de bombas se atribuyeron la falta de homogeneidad del flui-do de perforacin.

    2. Cuenca Noreste de Per- Formacin Chambira: Arcillas

    reactivas con niveles inestables debido a presencia de microfrac-turas.

    Foto 1. Fenmeno de inestabilidad detec-tado en las zarandas, donde se observan bloques de gran tamao (Cuenca de Maran, Per).

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    - Perforando con broca de 12 y ensanchando a 14 . En el arreglo de perforacin (BHA) he-rramientas direccionales con GR (MWD) y estabilizadores.

    - Pozo vertical.- Lodo base agua.- ROP variable, 30 a 40 ft/h- Seales de inestabilidad en super-

    ficie: Ninguna o escasas, segn los tcnicos consultados (?).

    - Cambios en los parmetros de perforacin: Si (ligero aumento de la presin de circulacin, torque errtico, mientras se circulaba para realizar una maniobra de calibracin).

    - Cambios en el ECD: Si (variable).- Qu ocurri: Durante un viaje

    corto planificado (short trip) se circul menos del volumen requerido para tener un fondo arriba. Desde el principio se empez a extraer la herramienta con arrastre excesivo, por lo que fue necesario continuar sacando con circulacin y rotacin (back-reaming). A los efectos de mejorar la condicin del pozo, se bombe una pldora de limpieza, antes de continuar sacando con rotacin. Luego de retirar cinco paradas, la herramienta se aprision y la ca-pacidad de circular se perdi casi de inmediato. Tambin se perdi la capacidad de golpear con el martillo de la perforacin.

    - Resultado: Luego de mltiples intentos de librar la herramienta, se decidi realizar punto libre y desenrosque, para luego colocar un tapn de cemento y realizar una desviacin (side track). En este caso, se perdi casi todo el arreglo de perforacin (BHA) y una larga seccin del pozo.

    - Anlisis del evento: En este caso durante la perforacin no se observaron seales muy fuertes de un evento de inestabilidad, sin embargo es probable que la falta de limpieza durante la perforacin y ensanchado, hayan acumulado un exceso de material en el anular, el cual origin el arrastre excesivo durante la maniobra para calibrar el pozo. La falta de control del material recuperado en las za-randas, mientras se sacaba con circulacin, no permiti identificar un problema potencial.

    Seales de inestabilidad de la pared del pozoAlgunas seales que pueden ser una fuerte seal de inestabilidad del pozo son:1. Arrastre excesivo durante las

    maniobras de cambio de broca, o durante las conexiones.

    2. Torque errtico durante la per-foracin, debido a presencia de derrumbe en el espacio anular. Esto puede dar origen a esfuerzos axiales importantes, que pueden causar desgaste excesivo de las herramientas o hasta cortes de las mismas.

    3. Cambios en la tendencia normal de la presin de circulacin (au-mento gradual).

    4. Cambios en la Densidad Equiva-lente de Circulacin (ECD), debi-do a carga excesiva de recortes en el espacio anular.

    5. Aumento de la cantidad de ma-terial en las zarandas, durante la perforacin, o mientras se circula para una conexin o cambio de broca.

    Inestabilidad progresiva en el tiempoCuando ocurren eventos catastr-ficos, como pueden ser los aprisio-namientos de herramientas debido a un proceso de inestabilidad (me-cnica, qumica o inherente a la formacin), casi siempre se ha visto que antes de que ocurriera el even-to, hay algunos cambios en la ten-dencia normal de parmetros tales como el torque, arrastre durante las conexiones, o cambios en la presin de bombas. Es decir, que siempre pueden aparecer algunos avisos tempranos de un evento en curso. La clave es saber reconocerlos y to-mar las acciones y decisiones ade-cuadas para minimizar o cancelar el impacto. Es por eso que mi primera recomendacin es: Mantener la observacin sistemtica del material recuperado en las zarandas, o bien, el uso de escalas apropiadas de los parmetros que se controlan. Esto es el primer paso que puede ayudar a identificar un evento de inestabili-dad progresiva. En cualquier caso y ante la presencia de anormalidades de esta naturaleza, es mejor parar y analizarlas con todos los involucra-dos en la perforacin. Los cambios

    de presin pueden deberse a des-plazamiento de pldoras pesadas de limpieza. El torque o el arrastre pueden ser consecuencia de cam-bios en la geometra del arreglo de fondo (BHA).

    Inestabilidad mecnica- Es producida por la accin mec-

    nica de la herramienta de perfora-cin, frente a zonas sensibles de la pared de pozo.

    - Presencia de zonas de fallas.- Zonas con microfracturas.- Planos de estratificacin, fisilidad.- Prcticas de perforacin inade-

    cuadas.

    Cmo se reconoce:- Incremento del volumen de mate-

    rial en zaranda. - Presencia de planos de debilidad

    en los derrumbes.- Tamaos anormales de los de-

    rrumbes.

    Foto 2. Anormal tamao del material recu-perado en zaranda. Se observa material fresco (bordes angulosos) y retrabajado (bordes redondeados).

    Inestabilidad qumica- Interaccin del fluido de perfora-

    cin con la pared de pozo. - Incompatibilidad del fluido de per-

    foracin (Foto 3).- Pobre diseo del lodo de perfora-

    cin.- Falta de inhibicin de las arcillas.- Eventos de influjos de agua.- Escaso conocimiento del quimis-

    mo de las arcillas.

    Podemos cuantificar la canti-dad de derrumbe?No solo es posible, sino que es necesario cuantificar la cantidad de material que sale del pozo, durante la perforacin, o bien, durante las maniobras de acondicionamiento de pozo. Si podemos medir ese volumen de slidos, mediante siste-

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    mas automticos o cajas metlicas de volumen conocido, ubicadas en la descarga de las zarandas, afec-tndolo de un factor de correccin, debido a la humectabilidad del ma-terial, por ejemplo, luego podemos comparar el volumen medido con el terico (para un hueco de dimetro conocido), considerando el avance horario. Si obtenemos un volumen recuperado mayor que el terico, significa que hay un proceso de inestabilidad, lo cual debe notificar-se de inmediato al responsable de la perforacin. Si, por el contrario, el volumen medido est por debajo de lo que esperamos, significa que hay una deficiencia de material. En este ltimo caso, la limpieza del pozo no es adecuada, ya sea debido a la hidrulica de la perforacin, o bien, a propiedades del lodo (Fig. 1).

    En algunos casos particulares, la falta de material grueso en superficie puede ser engaosa respecto de la inestabilidad, pudiendo ocurrir que este material no pueda ser acarreado a superficie, precisamente por su tamao, aunque en estos casos deberamos tener alguna indicacin en el comportamiento anmalo de ciertos parmetros de perforacin (torque, arrastre, presin de bombas, etc.). Casos dramticos con NPT y prdidas de importantes intervalos del pozo han ocurrido cuando luego de varias horas de perforar, con escaso material en las zarandas, se ha detenido la circulacin por un cambio de bombas, por ejemplo, y todo ese material no transportado ha colapsado sobre la herramienta de perforacin,

    produciendo un aprisionamiento. En otras oportunidades, la lim-pieza inadecuada del pozo ha generado aprisionamientos de las herramientas de perfilaje, o bien, la citada operacin se ha debido cancelar por condiciones inseguras del pozo.

    Aplicaciones en tiempo realEl clculo del volumen de slidos es una herramienta fundamental en las operaciones de la Cuenca de Mara-n y Ucayali, permite identificar en forma temprana:

    - Procesos de inestabilidad de la pared de pozo.

    - Incremento de la cantidad de de-rrumbe, perforando o circulando.

    - Deficiencias en la capacidad de limpieza del lodo.

    - Efectos mecnicos sobre la pared de pozo.

    A partir de la determinacin del volumen de slidos, se discuten en el campo las mejores opciones para mejorar la capacidad de acarreo, o bien, para disminuir la cantidad de derrumbe en zaranda.

    Logstica de campo- Recoge-muestras (Sample Cat-

    cher) entrenados para reconocer fenmenos de inestabilidad en las zarandas.

    - Dispositivos mecnicos o ma-nuales para medir el volumen de slidos.

    - El gelogo y el ingeniero de datos de la Unidad de Mud Log-ging deben estar adecuadamente entrenados para supervisar que el trabajo de control de volumen de slidos se haga en forma continua y con la mayor exactitud posible.

    - El gelogo de la compaa operadora (Wellsite), junto con los responsables de la Unidad, deben colectar la informacin apropiadamente, actualizar y re-portar, en tiempo real, cualquier anormalidad que se observe en el volumen de slidos.

    - La medicin del volumen de sli-dos, mediante cualquier mtodo posible, debe ser un proceso continuo, ya sea perforando o circulando, o mientras se acondi-ciona el pozo.

    Muestreo durante la perforacin- Muestras representativas de los

    slidos recuperados deben ser colectadas por el personal de zarandas, llevadas a la Unidad de Mud Logging y etiquetadas, para que los gelogos de la Unidad, junto con el Wellsite, identifiquen el origen, definan la forma y pue-dan medir tamao del derrumbe (Foto 4 y 5).

    - Esta informacin, hora por hora o bien en funcin de la profundidad, se vuelca en planillas y se grafica para poder inferir el mecanismo de inestabilidad observado.

    - Muestras adicionales deben ser colectadas, cuando se circulan pldoras de limpieza, o durante toda la fase de acondicionamiento del pozo (Foto 5).

    Foto 3. La incompatibilidad del fluido de perforacin base agua ha generado, en este caso, la hidratacin de las arcillas y como resultado, la formacin de una gruesa capa de material de la pared del pozo, sobre todo el sondeo, limitando la capacidad de circulacin.

    Foto 5. Control sistemtico en funcin de la profundidad o del tiempo, del material recuperado en zaranda. Esta visin nos permite identificar procesos de inestabilidad y los mecanismos que contribuyen. De esta forma se puede discutir las acciones correctivas.

    Foto 4. Excesiva cantidad de material en zaranda, mientras se perfora en niveles con fisilidad marcada (lutitas). En este caso, un incremento en la densidad del lodo ayud a controlar la cantidad de material (derrumbe), as como el tamao tambin.

    Dispositivo para medir el volu-men de slidosUn dispositivo sencillo para medir el volumen de slidos se puede construir en el campo. Se trata de una caja metlica de volumen co-

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    nocido, la cual se coloca frente a la descarga de la zaranda y posee un dispositivo de apertura manual inferior para descargar el material, una vez que la caja se ha llenado y contabilizado. Esto requiere de una persona en continuo control del vo-lumen recuperado (conteo de cajas) y lo ms importante, el muestreo sis-temtico del material recuperado. El anlisis de este material, siguiendo un orden estricto de litologa, forma y tamao, informar si la formacin presenta signos de inestabilidad, y qu mecanismo de los menciona-dos arriba est contribuyendo a la inestabilidad.

    RecomendacionesDurante la perforacin de un pozo de exploracin o desarrollo, no solo es recomendable medir la canti-dad de slidos transportados a las zarandas, sino que es importante describir con sumo detalle el tipo de derrumbe, la morfologa y la litologa involucrada, a fin de tomar las medidas correctivas necesarias, que contribuyan a minimizar el NPT a consecuencia del derrumbe. En mi experiencia de campo, son ml-tiples las acciones que podemos llevar adelante, para identificar la presencia de derrumbe.

    - Cuando la herramienta de perfo-racin sale a superficie, es muy importante recuperar el material que viene adherido a los estabili-zadores o a la broca, lavarlo (si es posible), fotografiarlo y etiquetarlo adecuadamente, para ser enviado a los laboratorios de geomecnica o de lodos, a fin de contribuir a futuros estudios.

    - Las muestras recuperadas en las canastas (junk bsquet) o pesca-dores, tambin son importantes, ya que pueden representar pro-cesos de inestabilidad generados por la rotacin del sondeo. Mu-chas veces podemos encontrar verdaderos moldes del sondeo, con superficies curvas suaves, que copian fielmente la curvatura del mismo.

    - Las pldoras de limpieza, que re-gularmente se bombean al pozo, deben ser monitoreadas en tr-minos de la cantidad de material recuperado, a fin de ver si hay un cambio significativo, cuando se compara al volumen recuperado durante la perforacin. Para esto es conveniente estar en la zaran-da, no menos de 10 minutos antes de que salga la pldora, y perma-necer hasta 10 minutos despus del retorno terico, con el fin de observar y medir la variacin o no, de la cantidad de material.

    - Si en nuestro seguimiento de volmenes tericos a recuperar versus el real recuperado, se ob-serva una deficiencia de material, es necesario recomendar una ma-niobra de limpieza, o bien, circular reciprocando la herramienta, o sugerir una pldora de limpieza. Durante este proceso de circula-cin de pldoras se recomienda no perforar.

    - Si hay un rpido incremento en la velocidad de perforacin (drilling break, Fig. 2), sin que haya habi-do un cambio en las condiciones de perforacin, en trminos de caudal de bombas, velocidad de rotacin de la mesa, o incremento del peso sobre la broca, se puede presumir que se ha entrado en una arena, o en una zona fracturada o con una presin de poros mayor que la normal. En estos casos es imperioso realizar mediciones adi-cionales del volumen de slidos.

    Hay numerosos casos en donde el retorno estuvo acompaado por un influjo de agua, seguido por un proceso de inestabilidad generali-zada de las paredes del pozo. En estos casos, es recomendable de-tener la perforacin, circular si es posible, hasta controlar el influjo, y salir hasta un punto seguro del pozo, para luego regresar y eva-luar las condiciones del mismo.

    - Cambios repentinos en los par-metros de perforacin, tales como aumento de las revoluciones de la mesa, pueden generar el pandeo de la herramienta de perforacin, y en consecuencia un trabajo me-cnico excesivo sobre la pared del pozo, generando derrumbe. Si se observan estos cambios, vigile la cantidad de derrumbe en las zarandas y notifique al perforador sobre los cambios observados, a fin de regresar a parmetros ms seguros, o menos agresivos para la pared del pozo. En muchos ca-sos, el uso de motores de fondo, ha sido una solucin tcnica ade-cuada, para tratar gentilmente a la pared del pozo.

    - Las formas redondeadas de los derrumbes, significan retrabajo en el pozo, es decir, material grueso que no sale y queda entretenido en irregularidades de la pared, tales como cavernas y eventual-mente salen a superficie, cuando se circula en puntos intermedio del pozo abierto, o bien, junto con las pldoras de limpieza.

    - El seguimiento de la produccin de slidos es aun ms crtica durante la perforacin de pozos dir