Upload
mariel-venegas-monge
View
612
Download
1
Embed Size (px)
Citation preview
INTRODUCCIÓN
Los grupos financieros se han venido consolidando desde la década de los
90’s como las organizaciones económicas más significativas para restaurar los vínculos
productivos y financieros que fueron destruidos tras las crisis que se han presentado desde
esos tiempos. Los grupos se constituyen principalmente por bancos y empresas. Son un
grupo de instituciones jurídicas que unen sus medios materiales y financieros,
integrándose tecnológica y económicamente, con el objeto de la financiación de proyectos
de innovación, la promoción de la competitividad y la demanda de productos nacionales o
la cancelación de las deudas entre las empresas.
CAPÍTULO IGRUPOS FINANCIEROS
CONCEPTO:
De acuerdo a la SUGEF son: Todo conjunto o conglomerado de empresas dedicadas
exclusivamente a la prestación de servicios financieros, constituidas como sociedades
anónimas o como entes de naturaleza cooperativa, solidarista o mutual, sometidas a
control común o a gestión común y organizadas y registradas conforme lo establece la Ley
Orgánica del Banco Central de Costa Rica y el Reglamento. Las empresas financieras que
podrán formar parte de un Grupo Financiero son bancos, empresas financieras no
bancarias, almacenes generales de depósito, puestos de bolsa, sociedades de inversión,
empresas de arrendamiento financiero, empresas de factoreo, comercializadoras de
seguro, operadoras de planes de pensiones complementarias, bancos o financieras
domiciliados en el exterior acreditados como tales por la autoridad foránea
correspondente, así como cualquier otro tipo de empresa no mencionada dedicada
exclusivamente a la prestación de servicios financieros y autorizada por la Junta Directiva
del Banco Central.
Los grupos financieros están administrados por una entidad controladora, que es la
entidad que tiene una o más entidades bajo su control. Tienen reconocimiento legal, se
comprometen a seguir políticas comunes y a responder conjuntamente de sus pérdidas.
Una ventaja que tienen estos grupos, es la posibilidad de que sus integrantes actúen de
manera conjunta, ofreciendo servicios complementarios al público.
COMPONENTES DE UN GRUPO FINANCIERO
Los Grupos Financieros están integrados por una Sociedad controladora y al menos tres de
las entidades siguientes: un banco o entidad financiera local, operadora de fondos de
pensión, administradora de fondos de inversión, empresa de arrendamiento y factoraje,
emisora de tarjetas de crédito, banco en el extranjero (off-shore), puesto de bolsa,
almacenes generales de Depósito, arrendadoras financieras, casas de Bolsa, casa de cambio,
instituciones de banca múltiple, instituciones de fianzas e instituciones de seguros, entre
otros.
Banco: es un intermediario financiero que se encarga de captar recursos en forma
de depósitos, y prestar dinero, así como la prestación de servicios financieros.
Sociedad controladora: Es una sociedad anónima, que tendrá como único objeto
adquirir y administrar las acciones emitidas por las sociedades integrantes del
grupo financiero. En ningún caso, podrá realizar operaciones que sean propias de
las entidades financieras integrantes del grupo. Su domicilio social estará en el
territorio nacional. Será propietario en todo momento del 25% del capital suscrito
de cada una de las entidades del grupo y responderá subsidiaria e ilimitadamente
por el cumplimiento de las obligaciones a cargo de cada una de las entidades
integrantes del grupo, aún por las obligaciones contraídas con anterioridad a la
integración del grupo.
Puesto de Bolsa: Es una sociedad anónima autorizada por la Bolsa de valores
correspondiente, cuya actividad principal es proponer, perfeccionar y ejecutar, por
cuenta de sus clientes o por cuenta propia, la compra o venta de valores, según las
disposiciones legales y reglamentarias correspondientes. De conformidad con la Ley
Reguladora del Mercado de Valores (LRMV), algunas obligaciones de los puestos de
Bolsa, son las siguientes:
o Cumplir las disposiciones de la LRMV y sus reglamentos y acatar los acuerdos
de la Superintendencia General de Valores.
o Proporcionar tanto a la Superintendencia como a la respectiva Bolsa de
Valores, toda la información estadística, financiera, contable, legal o de
cualquier otra naturaleza que se solicite en cualquier momento.
o Llevar los registros necesarios, en los cuales se anotarán, con claridad y
exactitud, las operaciones que efectúen.
o Entregar a sus clientes copias de las boletas de transacción, así como
certificaciones de los registros de las operaciones celebradas por ellos
cuando lo soliciten.
o Permitir la fiscalización de todas sus operaciones y actividades por parte de
la Superintendencia y de la respectiva Bolsa de Valores.
o Mantener a disposición del público su composición accionaria y la de sus
socios, cuando éstos sean personas jurídicas.
Empresas financieras de carácter no bancario: Son todas las empresas no
integrantes del Sistema Bancario Nacional, que actúen directa o indirectamente
como intermediarios financieros en el mercado nacional o extranjero; o que
participen en cualquier forma en este tipo de intermediación, en el entendido de que
esta participación se configura por el solo hecho de la captación de recursos del
público inversionista, cualquiera que sea el tipo de documento en el que se
formalice la obligación, y cualquiera que sea la finalidad a que estén destinados esos
recursos.
Almacenes Generales de Depósito: Son instituciones de crédito que tienen por
objeto la conservación y custodia de frutos, productos y mercancías de procedencia
nacional o extranjera, la expedición de certificados de depósito y bonos de prenda, y
la concesión de préstamos con garantía de los mismos.
Sociedades de inversión: Son sociedades que tienen por objeto la captación de
fondos, bienes y derechos del público para gestionarlos e invertirlos en bienes,
derechos, valores u otros instrumentos ya sean financieros o no.
Empresas de arrendamiento financiero: son aquellas que realizan contratos de
leasing, los cuales consisten en que el arrendador traspasa el derecho a usar un bien
a cambio del pago de rentas de arrendamiento durante un plazo determinado; al
término del cual el arrendatario tiene la opción de comprar el bien arrendado
pagando un precio determinado, devolverlo ó renovar el contrato.
Empresas de factoreo: Son aquellas que se dedican al descuento de facturas de
otras empresas u entidades.
Comercializadoras de seguros: Son aquellas empresas que se dedican a la venta
de seguros, entre los cuales se encuentran seguros de vida, contra incendio, para el
carro, para la casa entre otros.
Operadoras de pensiones complementarias: Son las empresas que manejan los
fondos captados de los trabajadores para que estos posean una pensión cuando se
retiren.
CAPÍTULO IICLASIFICACIÓN DE LOS RIESGOS
El riesgo es la probabilidad de que una amenaza se convierta en un desastre. Toda empresa
o entidad posee lo que se conoce como riesgo normal. Un intermediario financiero de
riesgo normal no presenta algún grado de riesgo superior al intrínseco de su propia
actividad, ni tampoco indicios de riesgos potenciales mayores.
A. RIESGO DE CRÉDITO
Son quizá, los más importantes porque afectan el activo principal: la cuenta colocaciones.
Una política liberal de aprobación de créditos generada por contar con excesivos niveles de
liquidez, y altos cosos de captación, o por un relajamiento de la exigencia de evaluación de
los clientes sujetos de crédito, ocasiona una alta morosidad, por ello debemos tener
cuidado con el dicho “en buenos tiempos se hacen los malos créditos”.
B. RIESGOS DE MERCADO
Son las perdidas de valor de mercado en la cartera de negociación de instrumentos
financieros de una entidad , provocado por los movimientos de las variables de los
mercados financieros.
Se da debido a las variaciones imprevistas de los precios de los instrumentos de
negociación. Cada día se cierran muchas empresas y otras tienen éxito. Es la capacidad
empresarial y de gestión la que permitirá ver el futuro y elegir productos de éxito para
mantener la lealtad de los clientes, preservar la imagen y la confianza.
C. RIESGO DE TASAS DE INTERÉS
Riesgo por variaciones en las tasas de interés Es la exposición a pérdidas debido al cambio
en las tasas de interés, por el descalce entre los plazos de recuperación de los activos y de
la atención de obligaciones.
Es producido por la falta de correspondencia en el monto y el vencimiento de activos,
pasivos y rubros fuera del balance. Generalmente cuando se obtiene créditos a tasas
variables. En ciertos mercados la demanda de dinero puede afectar las tasas de interés
pudiendo llegar por efecto de cambios en la economía internacional a niveles como los de
la crisis de la deuda.
D. RIESGO DE LIQUIDEZ O FONDEO
Riesgo de liquidez Se origina cuando la entidad financiera no posee los recursos líquidos
necesarios para atender sus exigibilidades u obligaciones con terceros en el corto plazo.
Se produce a consecuencia de continuas pérdidas de cartera, que deteriora el capital de
trabajo. Un crecimiento desmesurado de las obligaciones también puede conducir al riesgo
de pérdida de liquidez.
E. RIESGO DE CAMBIARIO
Riesgo cambiario Una entidad se enfrenta a este tipo de riesgo cuando el valor de sus
activos y pasivos en moneda extranjera se ven afectados por las variaciones en el tipo de
cambio.
Originado en las fluctuaciones del valor de las monedas. Las economías de los países en
vías de desarrollo como el nuestro no están libres de que crezca la brecha comercial o de
balanza de pagos. La consecuencia normal es la devaluación del tipo de cambio, que
afectará elevando el valor de los créditos otorgados en dólares, pudiendo resultar
impagables por los deudores si su actividad económica genera ingresos en moneda
nacional. Para protegerse de este riesgo, es necesario seleccionar la cartera de prestatarios
colocando créditos en moneda extranjera solo a quienes operan en esta moneda, y asumir
una regla de encalze entre lo captado y lo colocado (a un monto captado igual monto
colocado en moneda extranjera)
F. RIESGO DE INSUFICIENCIA PATRIMONIAL
El riesgo de insuficiencia patrimonial, se define como el que las Instituciones no tengan el
tamaño de capital adecuado para el nivel de sus operaciones corregidas por su riesgo
crediticio.
G. RIESGO DE ENDEUDAMIENTO Y ESTRUCTURA DE PASIVO
Se define como el no contar con las fuentes de recursos adecuados para el tipo de activos
que los objetivos corporativos señalen. Esto incluye, el no poder mantener niveles de
liquidez adecuados y recursos al menor costo posible.
H. RIESGO DE GESTIÓN OPERATIVA
Se entiende por riesgos de operación a la posibilidad de ocurrencia de pérdidas financieras
por deficiencias o fallas en los procesos internos, en la tecnología de información, en las
personas o por ocurrencias de eventos externos adversos.
Es el riesgo de que los otros gastos necesarios para la gestión operativa de la Institución,
tales como gastos de personal y generales, no puedan ser cubiertos adecuadamente por el
margen financiero resultante. Un buen manejo del riesgo operativo, indica que vienen
desempeñándose de manera eficiente.
I. RIESGO LEGAL
Se puede producir a consecuencia de los cambios legales o de las normas de un país, que
puede poner en desventaja a una institución frente a otras. Cambios abruptos de legislación
puede ocasionar la confusión, pérdida de la confianza y un posible pánico.
J. RIESGO SOBERANO
Se refiere a la posibilidad de incumplimiento de las obligaciones de parte del estado
K. RIESGO SISTÉMICO
Se refiere al conjunto del sistema financiero del país frente a choques internos o externos,
como ejemplo el impacto de la crisis asiática, rusa el fenómeno del niño, que ocasionan la
volatilidad de los mercados y fragilidad del sistema financiero.
L. RIESGO DE SOLVENCIA
Se presenta cuando el nivel de capital es insuficiente para cubrir las pérdidas no
protegidas por las estimaciones, erosionando su base patrimonial. La determinación de las
pérdidas estimadas se basa en la calidad y estructura de los activos de los intermediarios
financieros, por lo tanto este riesgo incluye el riesgo de los activos.
CAPÍTULO IIIREGULACIÓN
ACUERDO SUGEF 808
Artículo 33. Actos sujetos a autorización
Los siguientes actos están sujetos a autorización:
a) La incorporación de una empresa a un grupo financiero. En el caso de conglomerados
financieros, el acto homólogo sujeto a autorización es la constitución de una empresa o la
adquisición de participaciones en el capital social de una empresa.
b) La separación de una empresa de un grupo financiero. En el caso conglomerados
financieros, el acto homólogo sujeto a autorización corresponde a la venta de la totalidad
de las participaciones en el capital social de una empresa o a la disolución de la empresa
dentro del conglomerado financiero.
c) La constitución de un nuevo grupo financiero.
d) La fusión de uno o más grupos financieros.
e) La fusión de dos o más empresas de un mismo grupo o conglomerado financiero.
f) La variación de capital social de la sociedad controladora de un grupo financiero. De
acuerdo con su naturaleza jurídica, las organizaciones cooperativas de ahorro y crédito, las
Asociaciones Mutualistas de Ahorro y Préstamos para la Vivienda y la Caja de
Préstamos y Descuentos de la Asociación Nacional de Educadores, así como los bancos
cooperativos, no están sujetas a esta autorización.
g) La plaza extranjera en la que podrán estar domiciliados los bancos e intermediarios
financieros extranjeros integrantes de un grupo o conglomerado financiero.
h) El cambio de nombre de una sociedad controladora.
i) La disolución voluntaria de un grupo financiero.
Artículo 34. Determinación del órgano resolutivo
En el caso de los actos indicados en los incisos del a) al g) del artículo 33 de este
Reglamento el órgano resolutivo es el CONASSIF, y en el caso de los actos indicados en los
incisos h) e i) del mismo artículo, el órgano resolutivo es el supervisor responsable,
tomando en consideración las siguientes excepciones:
a) en cuanto al acto indicado en el inciso e) del artículo 33 de este Reglamento, cuando se
trate de la fusión de entidades supervisadas por SUGEVAL o SUPEN, el órgano resolutivo es
el supervisor correspondiente, y
b) en cuanto al acto indicado en el inciso f) del artículo 33 de este Reglamento, cuando se
trate de la sociedad controladora de un grupo financiero supervisado por SUGEVAL, el
órgano resolutivo es la SUGEVAL.
Artículo 35. Requisitos para constitución de un nuevo grupo financiero
Para la autorización de la constitución de un nuevo grupo financiero, el solicitante debe
suministrar al supervisor responsable la información que se detalla en el artículo 36 de
este Reglamento y en el anexo 8 de este Reglamento.
Los bancos e intermediarios financieros domiciliados en el exterior integrantes de un
nuevo grupo o conglomerado financiero, deben estar domiciliados únicamente en una plaza
aceptada por el CONASSIF.
Artículo 36. Información sobre socios y excepciones al suministro de información
Debe suministrarse la información sobre todos los socios que figuran en la estructura de
propiedad hasta el nivel final de persona física, independientemente de que las acciones
sean mantenidas a través de mandatarios, custodios u otras figuras jurídicas a través de las
cuales se pueda mantener la titularidad del capital, incluida la propiedad fiduciaria de los
títulos accionarios. Lo dispuesto en este artículo es aplicable para la autorización de la
incorporación de una empresa a un grupo financiero en lo que respecta a los socios
diferentes de la sociedad controladora.
Previa aprobación del supervisor responsable, pueden excluirse del requerimiento de
información sobre socios detallado en los anexos 1, 3, 8, 9 y 10, los siguientes casos:
a) Cuando el socio persona jurídica sea una institución gubernamental.
b) Cuando el socio persona jurídica sea un organismo internacional o multilateral para el
desarrollo.
c) Cuando el socio persona jurídica sea una empresa cuyas acciones se coticen en un
mercado organizado nacional o extranjero.
d) Cuando el socio persona jurídica sea una entidad financiera sujeta a supervisión
consolidada por parte de las autoridades de supervisión de su domicilio legal.
e) Cuando la entidad es una asociación cooperativa de ahorro y crédito, una asociación
mutualista o una asociación solidarista.
El solicitante debe indicar los incisos que le son aplicables.
Artículo 37. Requisitos para la variación del capital social de la sociedad controladora
de un grupo financiero
Para la autorización de la variación de capital social de la sociedad controladora de un
grupo financiero, el representante legal de la sociedad controladora debe suministrar al
supervisor del grupo o conglomerado financiero la información detallada en el anexo 5 de
este Reglamento.
Artículo 38. Requisitos para el cambio de nombre de una sociedad controladora
Para la autorización del cambio de nombre de una sociedad controladora, el representante
legal de la sociedad controladora debe suministrar al supervisor del grupo o conglomerado
financiero la información detallada en el anexo 6 de este Reglamento.
Artículo 39. Requisitos para la disolución voluntaria de un grupo financiero
Para la autorización de la disolución voluntaria de un grupo financiero, el representante
legal de un grupo financiero debe suministrar los requisitos que se indican en el anexo 11.
Artículo 40. Requisitos para la fusión de grupos y conglomerados financieros
En el caso de que el proceso de fusión resulte en una nueva sociedad controladora, la
solicitud debe referirse adicionalmente a la disolución de las sociedades controladoras
participantes en el proceso de fusión y a la constitución de la nueva sociedad controladora.
En el caso de que una o varias de las sociedades se encuentren autorizadas para realizar
oferta pública, la solicitud debe referirse al cumplimiento de la regulación sobre oferta
pública de valores que les sea aplicable.
En el caso de que prevalezca alguna de las sociedades controladoras, la solicitud de fusión
debe referirse adicionalmente a la disolución de las sociedades controladoras que dejan de
operar. La fusión debe efectuarse primero al nivel de las respectivas sociedades
controladoras, y según el proyecto de negocio, debe solicitarse la fusión de las empresas
que corresponda.
Previo a la fusión de una entidad perteneciente a un grupo o conglomerado financiero con
una entidad no integrante del mismo, debe solicitarse la incorporación de esta última al
grupo o conglomerado financiero.
Para la autorización de la fusión de grupos y conglomerados financieros, los representantes
legales de las controladoras deben suministrar conjuntamente al supervisor responsable la
información detallada en el anexo 9 de este Reglamento.
Artículo 41. Requisitos para la fusión de dos o más empresas de un mismo grupo o
conglomerado financiero
Para la autorización de la fusión de dos o más empresas de un mismo grupo o
conglomerado financiero, el representante legal debe suministrar al supervisor del grupo o
conglomerado financiero la información detallada en el anexo 9 de este Reglamento.
Artículo 42. Requisitos para la separación de una empresa del grupo o conglomerado
financiero
Para la autorización de la separación de una empresa del grupo o conglomerado financiero,
el representante legal de la controladora deberá adjuntar los requisitos que se indican en el
anexo 11 de este Reglamento.
Artículo 43. Requisitos para la incorporación o adquisición de una empresa a un grupo
o conglomerado financiero
Para la autorización de la incorporación o adquisición de una empresa a un grupo o
conglomerado financiero, el representante legal de la controladora deberá adjuntar los
requisitos que se indican en el artículo 36 y en el anexo 10 de este Reglamento.
Adicionalmente, los bancos e intermediarios financieros domiciliados en el exterior,
deberán estar domiciliadas únicamente en una plaza bancaria aceptada por el CONASSIF.
El CONASSIF, previo dictamen favorable por parte del supervisor del grupo o
conglomerado financiero, podrá autorizar la incorporación o adquisición de empresas
extranjeras que se dediquen exclusivamente a actividades financieras distintas a la
intermediación financiera, y siempre que se cumpla con los siguientes requisitos mínimos:
a) Requisitos para empresas sujetas a supervisión y regulación en su domicilio.
El domicilio legal de la empresa debe contar con un régimen de supervisión que, de
acuerdo con la naturaleza de sus actividades, cumple con las siguientes condiciones
mínimas:
i. La autoridad supervisora cuente con un régimen de supervisión prudencial que exija
capitalizaciones mínimas y cobertura por riesgos, visitas periódicas de valoración in situ por
lo menos cada dos años y potestades sancionatorias.
ii. La autoridad supervisora del domicilio de la empresa tiene facultades para suscribir
acuerdos de intercambio de información con el supervisor del grupo o conglomerado
financiero, que permitan la coordinación en materia de supervisión e intercambio de
información.
iii. La empresa debe contar con autorización del supervisor para prestar servicios financieros
con residentes en su domicilio.
iv. La empresa debe estar sujeta en su domicilio a leyes, Reglamentos y otras disposiciones
orientadas a prevenir el lavado de dinero, producto de actividades ilícitas o narcotráfico.
v. La empresa debe tener presencia física en su domicilio, entendiendo por presencia física un
lugar que no es sólo una dirección electrónica o postal, sino que debe tener oficinas y una
organización completa con niveles superiores que ostenten poder de decisión, y mantener
registros completos de todas las operaciones de esa empresa.
b) Requisitos para empresas no sujetas a regulación ni supervisión en su domicilio.
La empresa debe cumplir con las siguientes condiciones mínimas:
i. La empresa debe tener presencia física en su domicilio, entendiendo por presencia física un
lugar que no es sólo una dirección electrónica o postal, sino que debe tener oficinas y una
organización completa con niveles superiores con poder de decisión, y mantener registros
completos de todas las operaciones de esa empresa.
ii. La solicitud deberá contener una descripción detallada de los productos y servicios que
ofrecerá la empresa en su domicilio legal. Dicha información deberá ser actualizada y
verificada por el auditor externo en su informe anual.
iii. El límite de concentración con un deudor individual o un grupo de interés económico, debe
ser igual o menor al 20% del capital social más reservas de la empresa.
iv. No podrán ofrecer productos y servicios en Costa Rica si no cuentan con la autorización del
supervisor del grupo o conglomerado financiero.
Los auditores externos de la sociedad controladora, en su dictamen anual, deberán
referirse expresamente al grado de cumplimiento de todas las condiciones establecidas en
los incisos a) y b) de este artículo.
Artículo 44. Requisitos para la aceptación de plazas bancarias extranjeras y tipo de
licencia requerido
La aceptación de la plaza extranjera en la que podrán estar domiciliados los bancos e
intermediarios financieros extranjeros, está sujeta al cumplimiento permanente, a
satisfacción del supervisor del grupo o conglomerado financiero costarricense, de cada una
de las condiciones que se establecen en este artículo:
a) Requerimientos para el otorgamiento de licencias, que obligue a identificar a los
accionistas con participación relevante y determinar la honorabilidad de los mismos, así
como constatar la aptitud y capacidad técnica de los ejecutivos y la honorabilidad de los
directores de la entidad.
b) La confirmación del supervisor de la plaza, de que los grupos financieros costarricenses
con entidades constituidas en dicha plaza extranjera, sean supervisados de forma
consolidada por alguna autoridad de supervisión financiera aceptada por la SUGEF.
c) Exámenes in situ por parte del supervisor de la plaza, con una periodicidad de al menos
cada dos años, con alcances amplios sobre los aspectos de riesgo de la entidad que puedan
afectar su estabilidad, solvencia y solidez.
d) Disposiciones prudenciales y mecanismos de seguimiento sobre:
i. Coeficientes mínimos de adecuación de capital con base en las recomendaciones emitidas
por el Comité de Basilea.
ii. Límites para la concentración de riesgos de crédito, sobre la base de clientes individuales y
grupos económicos.
iii. Coeficientes mínimos de liquidez.
iv. Estimaciones mínimas sobre créditos.
v. Prácticas de gobierno corporativo, con referencia al esquema de gestión de riesgos y control
interno.
vi. Régimen sancionatorio sobre conductas riesgosas que atenten contra la estabilidad,
solvencia y solidez de la entidad.
vii. Esquemas para el manejo adecuado de situaciones de inestabilidad financiera e
intervención de entidades.
viii. Disposiciones orientadas a prevenir el lavado de dinero producto de actividades ilícitas o
narcotráfico.
Las disposiciones a que se refiere el inciso d) de este artículo, aplicables al tipo de licencia
otorgado a la entidad domiciliada en la plaza extranjera, deben ser al menos tan estrictas
como las aplicables a las entidades supervisadas dentro del territorio costarricense.
e) Facultad para establecer arreglos formales con el supervisor del grupo o conglomerado
financiero costarricense, que permitan la coordinación en materia de supervisión e
intercambios de información entre supervisores.
f) La licencia otorgada por la autoridad de la plaza debe ser de tipo general y debe:
i) Permitir la realización de todas las operaciones que los bancos o entidades pueden efectuar
con residentes en la misma plaza.
ii) Estar sujeta al régimen de regulación y supervisión más exigente, vigente en la plaza.
iii) Exigir que el intermediario financiero mantenga, en su domicilio legal, una organización
completa con niveles superiores con poder de decisión, organización funcional completa,
sistemas de procesamiento de datos independientes y registros completos de todas las
operaciones de esa entidad. La presencia física implica una organización independiente con
su propio poder de decisión; no se trata solamente de una dirección electrónica o postal, o de
una oficina de representación.
La controladora deberá mantener informado al respectivo supervisor del grupo o
conglomerado financiero costarricense, sobre cualquier disposición emitida por las
autoridades competentes de la plaza concerniente al intermediario financiero extranjero.
Artículo 45. Cambio en la condición de plaza bancaria aceptada o en el tipo de licencia
Una plaza previamente aceptada pierde dicha condición cuando se determine que ha
dejado de cumplir con alguno de los requisitos establecidos en el artículo 44 de este
Reglamento. En este caso, el supervisor del grupo o conglomerado financiero costarricense
debe notificar esta situación a la controladora para que en el plazo de doce meses contados
a partir del día siguiente a la fecha de notificación, traslade la empresa domiciliada en esa
plaza a otra plaza aceptada o cambie el tipo de licencia a otro que cumpla con los requisitos
dispuestos en el artículo 44 de este Reglamento.
El supervisor del grupo o conglomerado financiero puede ampliar el plazo señalado, por
una sola vez y hasta por un plazo de seis meses, cuando la controladora demuestre que los
trámites pertinentes ante las respectivas autoridades supervisoras extranjeras se iniciaron
dentro de los primeros tres meses posteriores a la fecha de notificación y que el proceso se
ha llevado a cabo en forma diligente.
La controladora debe rendir informes trimestrales al supervisor del grupo o conglomerado
financiero sobre el grado de avance en las gestiones para la incorporación de la empresa
extranjera en una plaza aceptada y sobre los trámites pertinentes para su retiro de la plaza
en cuestión o para el cambio en el tipo de licencia.
El incumplimiento por parte de la controladora, en cuanto al inicio de las gestiones
pertinentes dentro de los primeros tres meses posteriores a la fecha de notificación, o en la
presentación de los informes de avance trimestrales o de los plazos establecidos en los
párrafos anteriores, será causal para que el respectivo supervisor del grupo o
conglomerado financiero requiera a la entidad financiera costarricense sujetas a su
supervisión, la suspensión inmediata de la totalidad de las actividades indicadas en los
incisos del a) al d) del párrafo primero del artículo 72 de este Reglamento, hasta tanto no se
solvente la situación, e informará de la situación a los otros supervisores costarricenses.
SUPERVISIÓN
Artículo 57. Determinación del supervisor del grupo o conglomerado financiero
El supervisor de los conglomerados financieros y de los grupos financieros que incluyen a
un intermediario financiero domiciliado en territorio costarricense es la SUGEF.
En el caso de los grupos sin intermediario financiero domiciliado en el territorio
costarricense, el supervisor del grupo es la superintendencia que supervisa a las empresas
que poseen el mayor volumen de activos totales. Para este cálculo deben sumarse los
activos propios más los activos administrados por cuenta de terceros, de las empresas
sujetas a la supervisión de una misma superintendencia.
El supervisor del grupo financiero puede cambiar en función de los cambios en la
conformación del grupo financiero o en función de los cambios en el volumen de activos
totales.
El CONASSIF, atendiendo a motivos de oportunidad y conveniencia, podrá tomar en cuenta
otros aspectos para asignar la supervisión del grupo o conglomerado financiero a
otrosupervisor costarricense.
Artículo 58. Supervisión de la sociedad controladora
La sociedad controladora deberá sujetarse a la inspección y vigilancia del respectivo
supervisor del grupo o conglomerado financiero, y deberá proporcionarle la información
en los términos que con base en el marco legal y reglamentario aplicable se le solicite.
ORGANIZACIÓN
Artículo 62. Organización de los grupos financieros
Los grupos deben organizarse de la siguiente forma:
a) Deberá existir una sociedad controladora que será propietaria, en todo momento, de por
lo menos el veinticinco por ciento (25%) del capital suscrito de cada una de las empresas
que conforman el Grupo Financiero.
b) Deberán existir dos o más empresas dedicadas exclusivamente a la prestación de
servicios financieros, sujetas a gestión común, control común o vinculación funcional.
c) Podrán formar parte de un Grupo Financiero, las empresas a que se refiere el artículo
141 de la Ley Orgánica del Banco Central de Costa Rica.
d) Sin perjuicio de lo establecido en el artículo 29 de este Reglamento y de conformidad con
lo dispuesto en el párrafo segundo del artículo 146 de la Ley 7558, Ley Orgánica del Banco
Central de Costa Rica, las empresas integrantes del grupo financiero no pueden participar
en el capital social de otras sociedades.
e) La exposición del grupo financiero con empresas financieras domiciliadas en el exterior,
diferentes de intermediarios financieros, está sujeta a los siguientes límites:
i. Para el caso de empresas extranjeras reguladas o no reguladas en su domicilio legal,
pertenecientes a un grupo financiero cuyo supervisor sea la SUGEF, un máximo del 20% de
forma individual o conjunta.
ii. Para el caso de empresas extranjeras reguladas en su domicilio legal, pertenecientes a un
grupo financiero cuyo supervisor sea la SUGEVAL o la SUPEN, un máximo del 49% de forma
individual o conjunta.
iii. Para el caso de empresas extranjeras no reguladas en su domicilio legal, pertenecientes a
un grupo financiero cuyo supervisor sea la SUGEVAL o la SUPEN, un máximo del 20% de
forma individual o conjunta.
iv. Para el conjunto de todas las empresas extranjeras reguladas o no en su domicilio legal,
pertenecientes a un grupo financiero cuyo supervisor sea la SUGEVAL o SUPEN, un máximo
del 49%.
La exposición del grupo o conglomerado financiero con las empresas domiciliadas en el
exterior a que se refiere el inciso e) de este artículo, se determinará como la suma del
capital social aportado por la controladora a la empresa domiciliada en el exterior, las
contingencias de la empresa extranjera, los créditos, inversiones y garantías otorgados a la
empresa extranjera por otras empresas del mismo grupo financiero, y cualquier otra
operación activa con la empresa domiciliada en el exterior.
FUNCIONAMIENTO
Artículo 65. Cumplimiento de normas
Los grupos y conglomerados financieros autorizados están sujetos al cumplimiento de la
norma sobre suficiencia patrimonial, contabilización de operaciones, divulgación y
gobierno corporativo, que por acuerdo del CONASSIF, sean aplicables a grupos financieros.
Artículo 66. Registros contables
Las empresas integrantes de un grupo o conglomerado financiero deberán llevar su
contabilidad y el registro de las operaciones que realicen en forma separada de las otras
empresas del grupo, y mantener archivos claramente diferenciados.
En la prestación de sus servicios, todas las empresas del grupo o conglomerado deben
entregar al usuario un comprobante que identifique claramente la naturaleza y el detalle de
la operación que está realizando, así como el nombre de la empresa de que se trate.
Artículo 69. Financiamiento de la sociedad controladora del grupo financiero
La sociedad controladora organizada como sociedad anónima debe financiarse únicamente
mediante la emisión de acciones comunes o preferentes, y no podrá emitir garantías
solidarias.
Artículo 70. Depósito de acciones
La controladora debe depositar las acciones de las empresas en las que participe en una
entidad de custodia autorizada en el plazo de tres días contados a partir de la fecha de
comunicación de la resolución de constitución del grupo financiero, o de incorporación o
adquisición de una empresa por un grupo o conglomerado financiero. Asimismo, debe
informar al supervisor del grupo o conglomerado financiero sobre esos depósitos y sobre
los depósitos derivados de incrementos o disminuciones en el número de acciones de su
propiedad.
BASILEA
Basilea I
En diciembre de 1974, el Comité de Basilea, compuesto por los gobernadores de los bancos
centrales del G-10, donde se publicó el primero de los Acuerdos de Basilea, un conjunto de
recomendaciones alrededor de una idea principal: Se trataba de un conjunto de
recomendaciones para establecer un capital mínimo que debía tener una entidad bancaria
en función de los riesgos que afrontaba.
El acuerdo establecía una definición de "capital regulatorio" compuesto por elementos
que se agrupan en 2 categorías si cumplen ciertos requisitos de permanencia, de capacidad
de absorción de pérdidas y de protección ante quiebra. Este capital debe ser suficiente para
hacer frente a los riesgos de crédito, mercado y tipo de cambio. Cada uno de estos riesgos
se medía con unos criterios aproximados y sencillos.
Este acuerdo era una recomendación: cada uno de los países signatarios, así como
cualquier otro país, quedaba libre de incorporarlo en su ordenamiento regulatorio con las
modificaciones que considerase oportunas.
Entró en vigor en más de cien países.
Basilea II
La principal limitación del acuerdo de Basilea I es que es insensible a las variaciones de
riesgo y que ignora una dimensión esencial: la de la calidad crediticia y, por lo tanto, la
diversa probabilidad de incumplimiento de los distintos prestatarios. Es decir, consideraba
que todos los créditos tenían la misma probabilidad de incumplir.
Para superarla, el Comité de Basilea propuso en 2004 un nuevo conjunto de
recomendaciones. Éstas se apoyan en los siguientes tres pilares.
Pilar I: el cálculo de los requisitos mínimos de capital
Constituye el núcleo del acuerdo e incluye una serie de novedades con respecto al anterior:
tiene en cuenta la calidad crediticia de los prestatarios (utilizando ratings externos o
internos) y añade requisitos de capital por el riesgo operacional.
La norma de Basilea I, que exige
fondos propios > 8% de activos de riesgo , considerando: (riesgo de crédito + riesgo de
negociación+ riesgo de tipo de cambio)
mientras que ahora considera: (riesgo de crédito + riesgo de mercado+ riesgo de tipo de
cambio + riesgo operacional)
El riesgo de crédito se calcula a través de tres componentes fundamentales:
PD, o probabilidad de incumplimiento
LGD, o pérdida en el momento de incumplimiento (también se conoce como "severidad")
EAD, o exposición en el momento del incumplimiento
Habida cuenta de la existencia de bancos con distintos niveles de sofisticación, el acuerdo
propone distintos métodos para el cálculo del riesgo crediticio. En el método estándar, la
PD y la LGD se calculan implícitamente a través de las calificaciones de riesgo crediticio
publicadas por empresas especializadas (agencias de rating) utilizando una serie de
baremos. En cambio, los bancos más sofisticados pueden, bajo cierto número de
condiciones, optar por el método de ratings internos avanzado (AIRB), que les permite
utilizar sus propios mecanismos de evaluación del riesgo y realizar sus propias
estimaciones. Existe un método alternativo e intermedio (foundation IRB) en el que los
bancos pueden estimar la PD, el parámetro de riesgo más básico, y utilizar en cambio
valores precalculados por el regulador para la LGD.
Hasta la fecha, muchas entidades bancarias gestionaban su riesgo crediticio en función de
la pérdida esperada, EL = PDxLGDxEAD, que determinaba su nivel de provisiones frente a
incumplimientos. La nueva normativa establece una nueva medida, el RWA, que se fija no
en la media sino en un cuantil elevado de la distribución de pérdida estimada a través de
una aproximación basada en la distribución normal.
El riesgo de crédito se cuantifica entonces como la suma de los RWA correspondientes a
cada una de las exposiciones que conforman el activo de la entidad.
Dentro del riesgo de crédito se otorga un tratamiento especial a las titulizaciones, para las
cuales se debe analizar si existe una transferencia efectiva y significativa del riesgo, y si son
operaciones originadas por la entidad o generados por otras.
El riesgo de negociación y el riesgo de tipo de cambio se siguen calculando conforme a
Basilea I.
El riesgo operacional se calcula multiplicando los ingresos por un porcentaje que puede ir
desde el 12% hasta el 18%. Existen 3 métodos alternativos para calcularlo dependiendo del
grado de sofisticación de la entidad bancaria.
Por último, la definición de capital regulatorio disponible permanece casi igual a la de
Basilea I.
Hay que advertir una objeción en este cálculo del riesgo: que se ignora los efectos
agravantes/mitigantes de la concrentración/diversificación de riesgos (estructura de
correlación probabilística entre las diversas exposiciones). Esta es una de las principales
diferencias entre capital regulatorio y Capital Económico.
Pilar II: el proceso de supervisión de la gestión de los fondos propios
Los organismos supervisores nacionales están capacitados para incrementar el nivel de
prudencia exigido a los bancos bajo su jurisdicción. Además, deben validar tanto los
métodos estadísticos empleados para calcular los parámetros exigidos en el primer pilar
como la suficiencia de los niveles de fondos propios para hacer frente a una crisis
económica, pudiendo obligar a las entidades a incrementarlos en función de los resultados.
Para poder validar los métodos estadísticos, los bancos estarán obligados a almacenar
datos de información crediticia durante periodos largos, de 5 a 7 años, a garantizar su
adecuada auditoría y a superar pruebas de "stress testing".
Además se exige que la alta dirección del banco se involucre activamente en el control de
riesgos y en la planificación futura de las necesidades de capital. Esta autoevaluación de
las necesidades de capital debe ser discutida entre la alta dirección y el supervisior
bancario. Como el banco es libre para elegir la metodología para su autoevaluación, se
pueden considerar otros riesgos que no se contemplan en el cálculo regulatorio, tales como
el riesgo de concrentración y/o diversificación, el riesgo de liquidez, el riesgo reputacional,
el riesgo de pensiones, etc.
Para grupos financieros multinacionales se establecen Colegios Supervisores que, bajo la
coordinación del supervisor de la entidad matriz, se encargan de la coordinación
internacional de la supervisión del grupo financiero.
Pilar III : La disciplina de mercado
El acuerdo establece normas de transparencia y define la publicación periódica de
información acerca de su exposición a los diferentes riesgos y la suficiencia de sus fondos
propios. El objetivo es:
1) La generalización de las buenas prácticas bancarias y su homogeneización internacional.
2) La reconciliación de los puntos de vista financiero, contable y de la gestión del riesgo
sobre la base de la información acumulada por las entidades.
3) La transparencia financiera a través de la homogeneización de los informes de riesgo
publicados por los bancos.
Inicialmente la información incluirá:
Descripción de la gestión de riesgos: objetivos, políticas, estructura. organización, alcance,
políticas de cobertura y mitigación de riesgos.
Aspectos técnicos del cálculo del capital: diferencias en la consolidación financiera y
regulatoria.
Descripción de la gestión de capital.
Composición detallada de los elementos del capital regulatorio disponible.
Requerimientos de capital por cada tipo de riesgo, indicándo el método de cálculo
utilizado.
El requisito inicial es que se publique al menos anualmente, aúnque es previsible que la
frecuencia será mayor (al menos resumida) y a sus contenidos mínimos se irá añadiéndo la
información que el mercado exija en cada momento.
LEY ORGÁNICA DEL BANCO CENTRAL (LEY 7558)
Regulación de grupos financieros
Artículo 141.- Constitución de grupos financieros
Los grupos financieros deberán estar constituidos por una sociedad controladora y por
empresas dedicadas a prestar servicios financieros organizadas como sociedades
anónimas, tales como bancos, empresas financiadas no bancarias, almacenes generales de
depósito, puestos de bolsa, sociedades de inversión, empresas de arrendamiento
financiero, así como bancos o financieras domiciliados en el exterior, acreditados como
tales por la autoridad foránea correspondiente.
Además, la Junta Directiva del Banco Central podrá autorizar a otras empresas nacionales o
extranjeras como parte del grupo, siempre y cuando se dediquen a la actividad financiera
exclusivamente. Como excepción, el grupo financiero podrá tener una o varias sociedades
propietarias o administradoras de los bienes muebles o inmuebles del grupo.
En el caso de las cooperativas de ahorro y crédito, la empresa controladora podrá ser un
organismo de naturaleza cooperativa.
Artículo 142.- Integración y fines de la sociedad controladora
La sociedad controladora será una sociedad anónima, que tendrá como único objeto
adquirir y administrar las acciones emitidas por las sociedades integrantes del grupo. En
ningún caso, podrá realizar operaciones que sean propias de las entidades financieras
integrantes del grupo. Su domicilio social estará en el territorio nacional.
La sociedad controladora será propietaria, en todo momento, de por lo menos el
veinticinco por ciento (25%) del capital suscrito de cada una de las entidades del grupo y
responderá, subsidiaria e ilimitadamente, por el cumplimiento de las obligaciones a cargo
de cada una de las entidades integrantes del grupo, aun por las obligaciones contraídas con
anterioridad a la integración del grupo. Ninguna de las entidades del grupo responderá por
las pérdidas de la controladora o de otras entidades del grupo.
Las acciones representativas del capital social que la sociedad controladora posee en cada
una de las sociedades integrantes del grupo, se mantendrán, en todo momento, en deposito
en alguna de las instituciones para el deposito de valores, reguladas en la Ley reguladora
del mercado de valores conforme a las normas definidas en el reglamento.
Artículo 143.- Denominación de las empresas
Sólo las empresas que formen parte de un grupo financiero registrado ante el órgano
supervisor correspondiente, podrán utilizar denominaciones iguales o semejantes a las
usadas por otras entidades financieras, actuar de manera conjunta, ofrecer servicios
complementarios o presentarse como parte de un mismo grupo financiero. Lo anterior sin
perjuicio de las limitaciones previstas en la ley en cuanto al uso de ciertas denominaciones
como "banco", "financiera" u otras semejantes.
Artículo 144.- Reglamento de constitución de entidades fiscalizadas
La Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica reglamentará la constitución, el traspaso,
el registro y el funcionamiento de los grupos financieros. Con el fin de preservar la solidez
financiera del grupo y particularmente de las entidades sujetas a supervisión, ese
reglamento podrá incluir límites o prohibiciones a las operaciones activas y pasivas entre
las entidades del grupo, así como normas para detectar grupos financieros de hecho.
También, el reglamento fijará los criterios para determinar el órgano supervisor ante el
cual deberá registrarse cada grupo financiero.
La Junta Directiva del Banco Central, previamente a emitir el reglamento deberá
consultarlo a la Superintendencia General de Entidades Financieras, a la Superintendencia
General de Valores y a la Superintendencia de Pensiones. En el caso de conflicto en la
supervisión de los grupos financieros, entre estos órganos supervisores, la Junta Directiva
del Banco Central resolverá en definitiva.
Los órganos supervisores están autorizados para intercambiar todo tipo de información,
con el fin de hacer mas efectiva la supervisión de los grupos financieros; pero les serán
aplicables las disposiciones sobre confidencialidad, contenidas en esta o en otras leyes.
La incorporación de una nueva empresa a un grupo constituido, la fusión de uno o mas
grupos la fusión de dos entidades de un mismo grupo o la disolución del grupo, requerirán
la autorización; previa del órgano supervisor correspondiente.
Artículo 145.- Deberes de la empresa controladora
La empresa controladora sera la responsable de las relaciones del grupo con el órgano
supervisor correspondiente y deberá:
a) Consolidar y suministrar los estados financieros del grupo, de acuerdo con lo dispuesto
en el reglamento a que se refiere el artículo anterior.
b) Suministrar los estados financieros, debidamente auditados por empresas de aceptación
del órgano supervisor respectivo, de cada una de las empresas del grupo que no están
sujetas la fiscalización de alguno de los órganos supervisores.
c) Suministrar la información que se le requiera sobre las operaciones que se realicen entre
las empresas integrantes del grupo financiero.
d) Suministrar la información que se le requiera sobre la composición del capital social del
grupo financiero.
e) Suministrar información agregada y auditada por empresas de aceptación del órgano
supervisor respectivo, sobre la calidad, el riesgo y la diversificación de los activos de cada
una de las empresas integrantes del grupo.
f) Entregar al órgano supervisor informes auditados por empresas de aceptación de dicho
órgano sobre el cumplimiento de las normas establecidas en este capítulo todo de acuerdo
con lo establecido en el reglamento.
Artículo 146.- Prohibiciones a entidades de grupo financieros
Queda absolutamente prohibido, a las entidades integrantes de los grupos financieros,
realizar operaciones entre si en condiciones diferentes a las aplicadas en las operaciones
del giro normal con terceros independientes. Así mismo, queda prohibido a las entidades
del grupo participar en el capital de otras empresas, financieras o no financieras. Se
exceptúa la actividad de las sociedades de inversión, las cuales se regirán por lo dispuesto
al respecto en la Ley reguladora del mercado de valores.
Artículo 147.- Deberes de bancos o empresas con domicilio en el exterior
Los bancos o empresas financieras domiciliadas en el exterior e integrantes de un grupo
financiero deberán cumplir con los suficientes requisitos:
a) Tener un capital no inferior a tres millones de dólares estadounidenses ($3.000.000,00).
La Junta Directiva del Banco Central podrá aumentar este monto, de conformidad con el
índice de inflación aplicable, hasta para dos veces el monto de la variación del índice entre
cada periodo de ajuste.
b) Estar domiciliadas en una plaza bancaria aceptada por el Banco Central, conforme a lo
dispuesto en el reglamento.
c) Estar fiscalizadas y supervisadas por las autoridades correspondientes y cumplir con la
regulación del país donde estén registradas.
d) Por medio de la sociedad controladora, presentar al órgano supervisor informes
auditados por firmas de reconocido prestigio internacional, de aceptación del órgano
supervisor del grupo. El auditoraje deberá revelar ir formación agregada sobre la posición
financiera de la institución en general y, en particular, sobre la calidad, el riesgo y la
concentración de los activos.
e) No realizar operaciones en moneda nacional Las operaciones que estas entidades
realicen en el exterior no estarán sujetas al control monetario del Banco Central ni a la
supervisión de los órganos supervisores nacionales, excepto en lo previsto en este capítulo.
Artículo 148.- Aplicación de límites establecidos
Los límites establecidos en esta ley a las entidades financieras, en relación con el
otorgamiento de créditos a una sola persona, natural o jurídica, a grupos de interés
económico o a empresas vinculadas a la propia entidad financiera por propiedad o gestión,
serán aplicables a cada una de las entidades sujetas a supervisión que formen parte de los
grupos financieros.
Adicionalmente, dichos límites serán aplicables al grupo financiero consolidado, con el
propósito de reducir los riesgos del grupo y proteger todo el sistema financiero. Las
auditorías externas de los grupos financieros deberán dictaminar sobre el cumplimiento de
estos límites.
Lo anterior se entiende sin perjuicio de los límites o prohibiciones que establezca el
reglamento para las operaciones entre entidades integrantes de un mismo grupo
financiero.
CONCLUSIÓN
El análisis de los grupos financieros ha sido objeto de múltiples y variadas interpretaciones
y estudios de caso. Sin duda esto obedece a que esta forma de organización que de una
manera
La formación de estos grupos facilita la financiación de las necesidades básicas de sus
organizaciones integrantes a través de la concesión de créditos a corto plazo. De esta
manera, los grupos financiero permiten el funcionamiento de un mercado de crédito de
carácter más fuerte que el oficial.
Es muy útil contar con diversos grupos financieros en nuestro país, ya que a través de ellos
se pronostica como estará la economía nacional en los distintos años.