12 de febrero de 2012Nº 2.607 Semanario de la Diócesis de Segorbe-Castellónhojaparroquial

2 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

Pastoral de la Salud: cercanía y caridadNo hay días de descanso, y su medio natural es el su-frimiento, el dolor y, no en pocas ocasiones, la muerte. Pero por eso precisamente la Pastoral de la Salud se desarrolla como un canal de misericordia, de espe-ranza y de Vida. Su objeto es ofertar salud y salvación realizando su misión en el encuentro con el enfermo, su familia, con los profesio-nales de la salud, frente al dolor, al sufrimiento, a la discapacidad, a la agonía, a la muerte, al duelo y la defensa de la vida. Esa es la gran tarea de la Delegación diocesana que coordina la presencia y acción de la Iglesia en este medio.

Actualmente se está constituyendo el equipo de la Delegación, compues-to por personal sanitario (médicos y enfermeras de diversas disciplinas y ser-vicios) junto con los cape-llanes de hospital. Además también se cuenta con la participación de la pasto-ral del sordo, dirigida por el sacerdote Raúl López, y abre la puerta a los nume-rosos movimientos y reali-dades que de un modo u otro están presentes en el mundo sanitario.

El delegado, José Luis Valdés, adelanta que la respuesta que ha encontra-do por parte de los profe-sionales es muy buena, de modo que está convenci-do que habrá una buena representación que realice las disposiciones del Con-cilio Vaticano II respecto al protagonismo de los segla-res. A partir de este equipo, Valdés espera que también se podrá relanzar de nuevo el movimiento de Profesio-nales Sanitarios Católicos (Prosac).

Pero esta estructura únicamente tiene sentido como servicio al enfermo. De hecho, la Delegación

engloba no solo a los agen-tes de pastoral, sino de una manera muy especial a los propios enfermos. Por esto

siempre se ha asegurado la presencia de la Iglesia en los centros hospitalarios (ver cuadro de Atención Religiosa) y se promueven tanto los visitadores como sesiones de formación para atender y vivir el sufri-miento.

Sacramento de sanación

Desde esta perspectiva, la labor de la Pastoral de la Salud toca dimensiones muy profundas de la persona y tiene acceso a terrenos pro-picios para la evangelización. Entre la asistencia religiosa, está la administración de los sacramentos de sanación, como la unción de enfer-mos, de la que el Papa subra-ya el valor en su mensaje de este año para la XX Jornada Mundial del Enfermo. “Hay gente que la rechaza porque dicen que no se están mu-riendo -argumenta Valdés-, pero no es la unción de los moribundos, sino una ora-ción ofrecida a los enfermos para sanar. Todo el mundo que ingresa en el hospital tendría que pedir la unción de enfermos”.

A nivel más general, Valdés explica que “como seres humanos, religiosos que somos, nos acordamos de Dios cuando truena, y si estás en el hospital es que truena”, y concluye: “La gente llama al capellán, y nos encontramos con faci-lidades para toda la labor”. Aún más. La legislación vi-gente prevé la creación de Comités de Bioética Asis-tencial en todos los cen-tros públicos, en los que es obligatoria la presencia de una persona que atienda la dimensión espiritual. Así se pueden aportar los valores del Evangelio en ámbitos profesionales y universita-rios.

G. FARRÉ.

Reportaje

Atención religiosa en los hospitales− Hospital de la Plana. D. José Navarro García y D.

José Francisco Pastor Teruel− Hospital de la Magdalena. D. Vicente Polo.− Hospital Provincial. D. José Manuel Beltrán Alba-

lat, D. Manuel Carceller (emérito)− Hospital Rey Don Jaime. D. Miguel Antolí Guasch− Hospital General de Castelló. D. José Luis Valdés

Aguilar, Carlos Mauricio Castelló Escrig, y Eloy Vi-llaescusa Mañas.

Para contactar con el capellán hospitalario, solici-tarlo al control de planta, al servicio de información del centro o directamente a los capellanes.

La espiritualidad del agente de pastoral de la salud

− Inspirada en Jesucristo. El agente de pastoral es un enviado, y el enfermo Cristo mismo.

− Centrada en el misterio pascual. La Cruz ilumina el sufrimiento y la Resurrección motiva e inspira la lucha por la salud y por la vida.

− Forjada desde la propia experiencia del sufri-miento y las propias heridas.

− Vivida y enriquecida en el servicio concreto al en-fermo en sus necesidades.

− Autentificada desde los valores del Reino. La op-ción por los más necesitados, la sencillez evangélica y los medio pobres, la gratuidad, el realismo, dejar a Dios su espacio, más que la eficacia y el éxito.

− Protagonismo del enfermo y del visitador. Los dos son sujetos que dan y reciben.

− Cultiva el sentido de comunidad.− Necesitada de alimentarse continuamente.− Fuente de alegría y gozo.

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 3

Amor a los enfermosQueridos diocesanos: En la fiesta de la Virgen de Lourdes, el 11 de febrero, toda la Igle-sia celebra la Jornada Mundial del Enfermo. Es un día para renovar la cercanía, la solicitud y el afecto de toda la Iglesia hacia los enfermos. Como nos recuerda en Papa, Benedicto XVI, “en la acogida generosa y afectuosa de cada vida huma-na, sobre todo la débil y en-ferma, el cristiano expresa un aspecto importante de su tes-timonio evangélico siguiendo el ejemplo de Cristo, que se ha inclinado ante los sufrimien-tos materiales y espirituales del hombre para curarlos”.

Es admirable el ejemplo que nos dio Jesús. Siempre atendía a los enfermos. Tam-bién y especialmente a los que habían quedado arrinconados por la sociedad. Como dice el Catecismo, “la compasión de Cristo hacia los enfermos y sus numerosas curaciones de dolientes de toda clase son un signo maravilloso de que Dios ha visitado a su pueblo y de

que el Reino de Dios está muy cerca... Su compasión hacia to-dos los que sufren llega hasta identifi-carse con ellos: estuve enfermo y me visitas-teis” (CaIC 1503). Es verdad que su curación quería llegar más hondo: él libera-ba del pecado. Quería que el ciego buscara una luz más pro-funda que la de sus ojos, la luz de la fe; que la samaritana ape-teciera un agua más saciante que la del pozo, el agua viva; o que el leproso agradeciera una liberación más total que la de su enfermedad, la del pecado. Por eso el encargo de no decir-lo a nadie: para que no le si-guieran solo por los milagros.

Pero Jesús no se olvidaba de la situación humana y cu-raba el cuerpo para preparar el ánimo a la aceptación del Reino y como signo de la sal-vación. Eso mismo es lo que él encargó que hicieran sus discí-pulos. “Sanad a los enfermos.

La Iglesia ha recibido esta tarea del Señor e intenta realizarla tanto mediante los cuidados que propor-ciona a los enfermos como por la oración de intercesión con la que los acompaña” (CaIC 1509). “Su amor de predilección

para con los enfermos no ha cesado, a lo largo de los siglos, de suscitar la atención muy particular de los cristianos hacia todos los que sufren en su cuerpo y en su alma. Esta atención dio origen a infatiga-bles esfuerzos por aliviar a los que sufren” (CIC 1503).

La Iglesia quiere transmitir a todos, siguiendo el ejemplo de su Señor, la verdadera sa-lud. Por eso facilita la partici-pación en sacramentos como la Eucaristía, que restaura continuamente las fuerzas de los débiles; la Penitencia, que nos reconcilia con Dios y nos da la mejor armonía total; y la Unción de los enfermos, en la

que la gracia del Espíritu da fuerzas para los momentos de la enfermedad. Pero no olvida a la vez acercarse con amable generosidad a los enfermos allí donde están, también a los más abandonados. Lo ha hecho a lo largo de toda la his-toria y lo sigue haciendo hoy para dar esperanza y atender a todos, por medio de sacer-dotes, religiosos y seglares que han sentido de modo particu-lar la vocación de trabajar para en el campo de la salud.

El amor a los enfermos y su atención no puede faltar nunca en la acción pastoral de nuestra Iglesia diocesana y de cada parroquia. Los enfer-mos han de ocupar un lugar prioritario en la oración, vida y misión de todas nuestras comunidades cristianas y de los cristianos, siguiendo el ejemplo de Cristo al modo del buen samaritano.

Con mi afecto y bendi-ción,

Tribuna

(*) Obispo de Segorbe-Castellón

por Juan Manuel GilEl retroceso de la civilización

Sabemos muy bien que se ha hablado, y no poco, de la alianza de civilizaciones. El sentido de esta proposición supone que en la citada alianza se realiza un encuen-tro positivo de tantos valores, procedentes de variadas culturas, que la síntesis final es todo un resultado altamente admirable. Ojalá llegue a serlo. Sería señal de un ade-lanto entre pueblos diversos, que valdría la pena constatarlo.

¿Pero ya se dan los ingredientes ape-tecibles y suficientes para ensalzar como una realidad tangible la tal alianza así lla-mada de civilizaciones? A juzgar por lo que voy a explicar, comentando el título de esta colaboración mía, parece ser que a la mencionada alianza le faltan ingredientes importantes. Desde el punto de vista del Catolicismo más auténtico, existen franjas que todavía nos invitan a decir que, has-ta conseguir una alianza fiable, habrá que desaparecer algún que otro aspecto que suponen un claro retroceso, que denuncia

una excesiva prisa, para afirmar que ya se está dando con respecto a las civilizaciones una convergencia muy deseada pero bas-tante alejada.

La Iglesia Católica apunta detalles que son auténticos fallos a superar, antes de conseguir la meta. Fallos tan considerables que no son precisamente adelantos hacia tan deseada alianza, sino retrocesos demos-trables. “En las reformas legislativas, en proyecto o en acto, de algunos Estados de-mocráticos que se declaran aconfesionales, se configura el peligro de un fundamenta-lismo laicista, distinto del sano concepto de laicidad, que se puede convertir en una especie de religión de Estado, en un ateis-mo militante no declarado pero real”.

“Se está produciendo otro fenómeno preocupante: me refiero al progresivo em-pobrecimiento ético de las leyes civiles o de proyectos políticos que se quieren conver-tir en leyes: desprecio de la indisolubilidad del vínculo matrimonial y aún del mismo

concepto natural de matrimonio; libera-lización del aborto, de la eutanasia, de la droga; insuficiente tutela de la institución familiar, reducción relativista de la libertad religiosa. En estos casos se puede decir que se asiste a una especie de retroceso de la ci-vilización”.

Estas afirmaciones son del Cardenal Julián Herranz, Presidente del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos. Una figura científica indiscutible no solo en la Iglesia, sino en la intelectualidad. En efecto, son todavía los detalles que ha se-ñalado tanto volumen, que no tienen sitio en cualquier esquema de alianza de civili-zaciones… Ojalá pronto el lugar que me-recen estas advertencias del sabio Carde-nal adquieran una aceptación tan general que de veras modifiquen el significado de “alianza”, y pueda realizarse esa tal alianza entre pueblos y grupos humanos que hoy no las comparten. Ahí queda un reto para el futuro.

Mons. Casimiro López Llorente *

4 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

El cardenal Carlos Amigo, arzobispo emérito de Sevilla y uno de los 6 cardenales españoles, pronunció una conferencia sobre el primer gitano elevado a los altares en la historia de la Iglesia Católica: Ceferino Gimé-nez. El acto estuvo organi-zado por la Fundación Pun-jab, de Castellón. Antes, tuvo la ocasión de pasar por la Parroquia de El Salvador para venerar la imagen del Cristo de la Misericordia, obra del escultor sevillano Darío Fernández.

Del beato Ceferino Gi-ménez, “el Pele”, mons. Carlos Amigo aseguró que es uno de esos referentes

que el Papa, con motivo del próximo Año de la Fe y el Sínodo sobre la Nueva Evangelización, pide que se den a conocer: “puede ser un ejemplo de hombre sencillo, humilde, que hacía catequesis con un lenguaje

comprensible en su cultura gitana, y un cristiano de ley que ponía las manos en el rosario para poner el cora-zón en el cielo, y así poner el pan en las manos de los necesitados”.

Respecto a su visita re-

lámpago de El Salvador, el cardenal Amigo declaró que no pudo negarse a la invita-ción de venerar la imagen del Cristo de la Misericordia porque es una advocación a la que le tiene una gran devoción: “Nos podemos arrepentir de muchas cosas, pero jamás de haber sido misericordiosos, porque es el único pañuelo blanco que limpia el corazón para ver a Dios”. El arzobispo emérito de Sevilla también auguró un futuro promete-dor a la joven parroquia de El Salvador: “Ya verán uste-des como dentro de poco será un auténtico santuario del Cristo de la Misericor-dia, porque la Misericordia siempre se abre camino”.

Vida Diocesana

El mes pasado se con-cluyeron las obras de res-tauración de la torre del campanario del templo parroquial de Alcudia de Veo, dedicado al Arcán-gel San Miguel. Esta in-tervención, que ha tenido un coste de 54.000 euros, ha sido íntegramente asu-mida por el Obispado de Segorbe-Castellón, ya que se trataba de una medida de urgencia porque la es-tructura amenazaba ruina.

Desde la administra-ción diocesana se decla-ra que la restauración de elementos en poblaciones pequeñas -Alcudia de Veo supera de poco los 200 habitantes- es una apues-ta por mantener el patri-monio, a pesar de que el gasto sea importante y no se consiga un beneficio ni lleguen ayudas institucio-nales. Aunque de momen-to no hay previstas otras intervenciones de urgen-cia, sí que es necesaria la reparación de tejados en

muchas iglesias parroquia-les, sin contar la situación de numerosas ermitas.

La alcaldesa, María del Carmen Alós, ha mani-festado por partida doble la satisfacción y agradeci-miento de esta restaura-ción: porque elimina un peligro en la vía pública -desde hace tiempo el perímetro estaba acordo-nado para evitar daños por la caída de piedras- y porque permite recuperar un elemento patrimonial local: “el año que viene

podremos volver a poner la estrella de Navidad”, comentaba la primera edil.

El campanario restau-rado está adosado al tem-plo, de una sola nave, y datado del siglo XVIII. En la intervención se ha reducido el último cuerpo de la estructura para evitar desprendimientos, se han sellado filtraciones y se ha repasado la cubierta así como las gárgolas de des-agüe. Las obras han sido realizadas por la empresa Arko10.

Santa Elvira fue discípu-la de San Pablo y murió mártir. La fiesta se celebra el 26 de enero, el día si-guiente a la Conversión de su maestro, el apóstol de las gentes.

Su imagen, obra del

escultor de Villarreal Pas-cual Amorós, se guarda ahora en el despacho de la Delegación Diocesana de Medios de Comunicación Social.

La familia castellonen-se que la veneraba en su domicilio particular, la depositó hace un tiempo

en el Obispado, aunque todos los años la visitan e invocan el día de su fiesta, depositando unas flores a sus pies.

Ella nos vigila, protege y acompaña en nuestro trabajo diario al servicio de la información dioce-sana.

REDACCIÓN. ALCUDIA DE VEO.

REDACCIÓN.

El Obispado restaura el campanario de Alcudia de Veo

Santa Elvira en la Delegación Diocesana de Medios

El Cardenal Amigo con fieles de El Salvador ante la imagen del Cristo de la Misericordia

REDACCIÓN. CASTELLÓN.

Cardenal Carlos Amigo: “El beato Ceferino Giménez es un modelo de fe”

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 5

Vida Diocesana

La primera jornada de for-mación sacerdotal de este año, mantenida en el Semi-nario Mater Dei a finales de enero, ha sido un baño de optimismo por el papel y la misión de las parroquias. El ponente era el sacerdote de la Archidiócesis de Madrid, Jesús Higueras, que ejerce su ministerio como párroco de la comunidad de Caná, en Pozuelo de Alacón, don-de cada fin de semana se reparten diez mil comunio-nes entre las seis eucaristías dominicales.

La clave para vivificar las comunidades de creyentes es, según el ponente, pasar de una pastoral de mante-nimiento a una misionera, es decir, estar a la escucha de las necesidades de la gente para darles respuesta con creatividad y actitud positiva: “No se ha acabado de ningún modo el prota-gonismo de las parroquias. Creo que tenemos un papel insubstituible y primordial en la Nueva Evangeliza-ción; Y el Papa nos invita a ello”.

Otra de las claves es la sinergia con los diversos

movimientos eclesiales, tanto los más tradicionales como los nuevos. En este sentido, Higueras reconoce que, al comenzar su labor para fundar la parroquia de Caná hace 16 años, se planteó qué es lo que estas realidades ofrecen que no se encuentra en las estructuras existentes y que atrae a mu-cha gente.

Trato personalizadoLa respuesta, a parte de

una espiritualidad propia, la encontró en el trato per-sonalizado y en ofrecer una pedagogía: “El movimiento aporta sobretodo una aten-ción cuerpo a cuerpo con

las personas, conocer a cada uno, hacer un seguimien-to... Además ofrecen escue-las de oración en las que en-señan de modo particular a encontrarse con Jesucristo”. Por su parte, lo específico que ofrecen las parroquias es la comunión y pluralidad de la Iglesia.

Precisamente por esto, todo se juega en la capaci-dad de construir un pro-yecto común superando juicios, desconfianzas o me-sianismos. “Mi criterio para acoger a una movimiento es este: no se viene a pescar en la pecera, pero sí a sumar para construir una comuni-dad rica y plural”, afirma

Higueras. El resultado es una parroquia en la que en las misas diarias participan quinientas personas, y otros tantos jóvenes que cada se-mana se reúne para hacer adoración eucarística. Tam-bién hay iniciación a la fe de niños pequeños, acom-pañamiento de los padres de catequesis, formación post-matrimonial, grupo de separadas, diversas ini-ciativas de voluntariado…

Claves de la pastoral juvenil

En su introducción a la jornada, el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, resaltó la importancia de estar atentos a los medios para avanzar en la Nueva Evangelización, en parti-cular con los jóvenes. En este sentido, Higueras se refirió a la experiencia de la reciente Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, como un modelo de pasto-ral juvenil según las pautas expuestas por el Papa: dar experiencias de pluralidad y comunión, la Eucaristía, el voluntariado, la reconcilia-ción y responsabilización, y descubrir la belleza de exis-tir y ser amado.

REDACCIÓN. CASTELLÓN.

Baño de optimismo por la misión de las parroquias

De izqda y drcha, Higueras, el Obispo y el Delegado del Clero, Joaquin Muñoz

Agenda DiocesanaMartes 14.* Por la tarde visita pastoral a la parroquia de Santa Sofía

de Vila-real.

Viernes 17.* Visita pastoral a la parroquia de Santa Sofía de Vila-real.* 19h Confirmaciones en la parroquia de San Juan Bau-

tista en Vall d’Alba.* 19h El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE.

Sábado 18.* Visita pastoral a la parroquia de Santa Sofía de Vila-real.

* 17h30 Eucaristía del IV encuentro interdiocesano de Cofradías en Benicasim.

Domingo 19.* 9h45 Iglesia Viva en COPE.* Fiesta Diocesana de la Hospitalidad de Lourdes en

Moncofa.* Jornada de formación de ANFE en Villavieja.* 15h Encuentros en Popular Televisión.* Retiro Eclesial en San Nicolás (Castellón) GOA.* Por la tarde visita pastoral a la parroquia de Santa Sofía

de Vila-real.

Jornada de Formación Sacerdotal

6 // Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón

La Fraternidad Monás-tica de la Paz acogió a principios de enero la profesión temporal de la hermana María de los Re-yes. En la homilía de la eucaristía durante la que pronunció los votos de pobreza, castidad y obe-

diencia, el Padre Prior, Alberto María, describió al monje como miembro del “coro de los ángeles”: “Su oración se suma a la oración de los santos y de los ángeles en el cielo, y necesitamos tomar cons-ciencia de ello cada día, re-conocer que nuestra vida está ligada a Dios por un

lazo indisoluble, y descu-brir la mirada de Dios so-bre nosotros y el cuidado que tiene de cada uno”. El día anterior, el Obispo de Orihuela-Alicante, mons. Rafael Palmero, confi rió la ordenación sacerdotal al hermano Jacob, en el monasterio de la Trinidad (Muchamiel, Alicante).

San Bartolomé de Onda acuña una moneda solidaria

Caritas parroquial de San Bartolomé de Onda han acuñado una moneda soli-daria con la que las perso-nas con necesidades pue-den acceder a determinadas ayudas. El nombre que le han dado es “Quisqueya”, -nombre nativo de la Isla de República Dominica-na, donde hay una misión diocesana- y se consigue a cambio de acciones de vo-luntariado. El objetivo es “dignifi car las ayudas, pa-sando de una asistencia pa-siva a una actitud activa”. La iniciativa comenzó el año pasado pero ahora se está consolidando y los resulta-dos son positivos: “Crea en la gente mucha esperanza e ilusión, y se sienten mejor”.

Los medios para ganar “quisqueyas” son adapta-dos a diversas situaciones y necesidades. Por ejemplo,

las mujeres árabes las con-siguen asistiendo a clases de castellano. También pueden

ser charlas de planifi ca-ción familiar y autoestima, o servicio concretos en la

guardería o limpiando y planchando ropa en el ro-pero. Después, esa moneda solidaria permite personali-zar las bolsas de comida que se distribuyen según lo que precisa cada familia.

Según el párroco, José García, esta iniciativa tam-bién ayuda a que “se haga comunidad entre la gente porque se ayudan unos a otros, y a salir de la dicta-dura del dinero, mostrando que se puede ser productivo y útil de otro modo. La Ca-ritas parroquial de San Bar-tolomé atiende a quinientas familias, que representan más de tres mil, y todo esto con una población que por sí misma ya cuenta con recursos muy pobres. El equipo de voluntarios de las quisqueyas es además una experiencia de multicultura-lidad, al formar parte espa-ñoles, árabes, ecuatorianos, colombianos, y rumanos.

REDACCIÓN. ONDA.

Vida Diocesana

REDACCIÓN.

Profesión religiosa en la Fraternidad de la Paz

Meditación dirigida por Mossén Josep Miquel Francés

Domingo 19 de febrero

en la capilla de San Nicolás de CastellónExposición del Santísimo, Vísperas, meditación

y Eucaristía dominical.

Retiro Eclesial“La Iglesia es una y santa “

Asamblea diocesana

Moncofa, Domingo 19 de febrero, a las 18 h

Inicio a las 10h en la Casa de la CulturaInformación: 619 58 32 80

Fiesta Diocesana de la Hospitalidadde Ntra. Sra. de Lourdes

Hoja Parroquial de la Diócesis de Segorbe-Castellón // 7

El Evangelio del Domingo

“Si quieres, puedes limpiarme”Primera LecturaLev 13,1-2.44-46. El Señor dijo a Moisés y a Aarón: -«Cuando alguno tenga una infl a-mación, una erupción o una mancha en la piel, y se le produzca la lepra, será llevado ante Aarón, el sacerdote, o cualquie-ra de sus hijos sacerdotes. Se trata de un hombre con lepra: es impuro. El sacerdote lo declara-rá impuro de lepra en la cabeza. El que haya sido declarado enfermo de le-pra andará harapiento y despeinado, con la barba tapada y gritando: “¡Im-puro, impuro!” Mientras le dure la afección, segui-rá impuro; vivirá solo y tendrá su morada fuera del campamento.» Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 31. R/. Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de libera-ción. R/. Dichoso el que está absuelto de su culpa, a quien le han sepultado su pecado; dichoso el hom-bre a quien el Señor no le apunta el delito. R/. Había pecado, lo re-conocí, no te encubrí mi delito; propuse: «Confe-saré al Señor mi culpa y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R/. Alegraos, justos, y gozad con el Señor; acla-madlo, los de corazón sincero. R/.

Segunda Lectura1Cor 10,31-11,1. Hermanos: Cuando co-

máis o bebáis o hagáis cualquier otra cosa, ha-cedlo todo para gloria de Dios. No deis motivo de escándalo a los judíos, ni a los griegos, ni a la Igle-sia de Dios, como yo, por mi parte, procuro con-tentar en todo a todos, no buscando mi propio bien, sino el de la mayo-ría, para que se salven. Seguid mi ejemplo, como yo sigo el de Cristo. Palabra de Dios.

EvangelioMc 1,40-45. En aquel tiempo, se acer-có a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas: -«Si quieres, puedes lim-piarme.» Sintiendo lás-tima, extendió la mano y lo tocó, diciendo: -«Quiero: queda limpio.»

La lepra se le quitó inme-diatamente, y quedó lim-pio. El lo despidió, en-cargándole severamente: -«No se lo digas a nadie; pero, para que conste, ve a presentarte al sacer-dote y ofrece por tu pu-rifi cación lo que mandó Moisés.» Pero, cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes pon-deraciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún Pueblo, se quedaba fue-ra, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes. Palabra del Señor.

Próxima semana: Is 43,18-19.21-22.24b-25 / Sal 40 / 2Cor 1,18-22 / Mc 2,1-12

Domingo VI del Tiempo Ordinario (2ª Semana del Salterio)

Los Hospitales públicos, así como el Jaime I de Castellón,

cuentan con servicio religioso católico.

Pida el servicio cuando acuda a cualquiera de ellos, contactando con el control de planta o información.

Delegación Diocesana de la Salud

Servicio Religioso Católico en los Hospitales

José Luis Valdés, delegado diocesano de pastoral de la salud

Dep. Legal: CS97-1960Suplemento del B.O. del Obispado

Edita: Obispado de Segorbe-Castellón Director: Juan Manuel Gil Coordinador: Josep Miquel Francés Redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: Teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / mcssegorbecastellon@planalfa.es / hpsegorbecastellon@hotmail.com / www.obsegorbecastellon.es

Impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. Ind. Fadrell, nave 75. 12005 Castellón / Teléfono 964 255 100

hojaparroquial

“Ante la enfermedad, curar, curar. Resignarse, no”

El mismo día que lo orde-naron, en 2005, recibió el nombramiento para la aten-ción religiosa del Hospital General de Castellón. Des-de el año pasado, José Luis Valdés también es delegado diocesano de pastoral de la salud. En este servicio, siem-pre hay un referente: Cristo en la cruz, que da sentido al sufrimiento y salva. Asegura que “no hay una peculia-ridad para ser capellán de hospital, pero Dios te capa-cita dándote mucha oración como soporte interior”.

− ¿Cómo acercarse a un enfermo?

− Sobretodo con mucha humildad, porque ya tiene suficiente con lo que sufre para que venga un agente de la pastoral de la salud con soberbia para impo-nerle algo. Cada uno tiene su estilo, pero es muy im-portante el amor, mucho amor. Somos conscientes de que se ha puesto en nuestras manos parte del tesoro de la Iglesia porque los enfermos, los huérfanos, las viudas, los ancianos y los necesitados son las joyas de la Iglesia en general.

− ¿Qué sentido se le

puede dar al dolor y el su-frimiento?

− Que el enfermo lo una a Jesucristo y viva en su cuerpo los dolores que faltan a la pasión de Jesucristo. Es un sentido general pero no todos los pacientes son igua-les, ni son conscientes... por eso lo digo si me lo permi-ten.

− ¿Curar o resignarse?− Curar, curar. Resignar-

se no. Pienso que la resigna-ción no tiene cabida. Dios ha dado al personal sanitario

una vocación, y como pro-fesionales se han capacitado con unos estudios. Por tanto Dios ya va por delante dan-do la vocación a este servicio concreto de salud hacia el prójimo. Y si Él suscita per-sonal sanitario, ¿cómo nos vamos a resignar?

− En el General forma parte del Comité de Bioé-tica. ¿Por qué?

− Lo dispone la ley. Es necesario porque el enfermo no aparca el espíritu cuan-do ingresa en un hospital,

y si ese espíritu lo alimenta con una religión, tiene que continuar. Somos cuerpo y alma, y el enfermo físico trae el alma al hospital, no la deja en casa. También para el sacerdote es una fuente de formación para realizar con más propiedad la asistencia religiosa-sanitaria.

− ¿Cómo es la relación con los familiares de los enfermos?

− Sobretodo es una rela-ción de consuelo y ánimo, porque lo primero que le viene a la mente al ingresar un familiar es que puede perderlo. Y después todas las personas son agradecidas: vuelven tras ser dados de alta o los parientes del difunto nos visitan y manifiestan su agradecimiento de manera muy concreta.

− Aunque el objetivo es curar, en ocasiones al final está la muerte. ¿Cómo se vive?

− No es lo mismo cuan-do muere una persona con fe o sin ella. Por mi parte, en seis años, llevo más de cien pacientes que se han muerto cogidos de mi mano, y no me acostumbro a la muerte. Sin embargo no lo siento como un fracaso: es la puer-ta de entrada a la eternidad.

G. F. CASTELLÓN.