Hope, Anthony - El Collar Del Cardenal

7/24/2019 Hope, Anthony - El Collar Del Cardenal

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El CollarEl Collar

del Cardenaldel CardenalAnthony HopeAnthony Hope

Traduccin y notas de C. Vendrell

Coleccin dirigida por

Carlos Ezquerra


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Captulo I

Una multitud de buenas razones

De acuerdo con los numerosos precedentes que existen, podra comenzar reclamando

la simpata que merece un hurfano que se halla solo en el mundo. Podra incluso apelar ami niez sin gua y a la ausencia de aleccionamiento paterno, a fin de excusar mis faltas yatenuar mis imprudencias. Pero la simpata que pudiera despertar con ello se perdera, metemo, a la vista de mis pretensiones. Pues la verdad es que mi condicin solitaria apenasrepercuti en m los tristes eventos que la provocaron se ha!an mitigado de!ido a lacostum!re y el tiempo transcurrido, y exista un acuerdo para de"arme no solo enteramenteli!re para dirigir mi vida como quisiera sino, asimismo, !ien provisto de competencias queincrementa!an el poder de esa li!ertad. # en cuanto a las imprudencias $no quiero haceruso de un trmino m%s acer!o$ en que incurr durante ese par de semanas, he de decir queno fueron en su mayor parte originadas ni incitadas por m. &n lo que sucedi tras millegada a 'rancia, yo fui mucho m%s vctima de las circunstancias que no provocador de

ellas, y el papel principal que desempe en el asunto lo fue a la fuerza, por o!ra de unextrao azar y, m%s tarde, por las incitaciones a las que fui sometido de!ido a la posicinque adopt.

(unque, claro est%, la misma razn que me a!suelve de tener que excusarme, mepriva de reclamar el menor elogio. )irando hacia ese pasado, me satisface no hallar nadade lo cual de!a estar seriamente avergonzado y me alegra reconocer que, aunque el destinome someti a extraas prue!as, no fue realmente nefasto y, ahora que el asunto haconcluido, no tengo motivo de que"a por cmo aca!. Digo esto *nica y exclusivamente porlo que respecta a m mismo, pues hay otra persona de la cual podra tal vez aventurar lomismo sin in"usta presuncin, pero no lo har+ en cuanto a los dem%s protagonistas, me!asta con recordar sus diversos destinos sin entrar en las profundas y graves disquisicionesen que quiz%s entraran quienes gustan de considerar reflexivamente el car%cter y existenciade aquellos con quienes han mantenido contacto durante su paso por el mundo.

a !ondad en malas personas, lo profundo en gente superficial, las maquinaciones enlo casual, las insensateces en lo sagaz, todo ello existe a fin de que algunos de nosotrospodamos reflexionar, o para que lo ignoren quienes se contentan con etiquetar a laspersonas con una cualidad prescindiendo de todo lo dem%s, que solo podr% ser detectado yentendido plena e inteligentemente por los pocos que poseen el don de leer e interpretar los


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secretos del corazn humano que es un don que me supera, una tarea demasiado difcilpara m. 'rancamente, nunca pude discernir con la claridad que hu!iera deseado las causasde la conducta de mis camaradas protagonistas en los hechos+ y el relato que hago de sus

sentimientos y motivos de!e ser aceptado como fruto de la mera o!servacin, y todo suvalor reside en eso. os sucesos ha!lan por s solos. -ue cada cual los vea como quiera+ yquien no est de acuerdo con mi punto de vista, me atrevera a decir que ser% recompensadocon una historia a la que la familiaridad y la reflexin no han logrado que haya perdido miinters por ella. Pero tam!in he de admitir que tengo m%s razones que nadie para analizarcon avidez cada paso, cada derivacin del drama, y para discernir en la actualidad lo queentonces me era oscuro y confuso.

odo empez del modo m%s corriente del mundo, aunque tal vez sea demasiadota"ante ha!lar as. -uiero decir que empez de manera muy normal, muy controlada,comparado con lo que sigui. (unque ya en el inicio tuvo un aroma inusual,suficientemente intenso como para sorprender a alguien tan ha!ituado a una existenciamontona, a alguien tan poco dado a lo fuera de lo com*n como yo.

(s fue como se inici la historia.

/na maana, me halla!a sentado fumando un cigarro tras el desayuno, en mi piso dela calle 0ames, cuando se present en l mi amigo 1ustave de 2erensac. 3us vivos o"osmarrones destella!an, su mostacho pareca m%s alegre y con las puntas m%s elevadas quenunca, y su talante apareca impregnado de euforia. 3in em!argo, era una maana triste,som!ra y ne!linosa aunque estuvisemos en "ulio, a pocos das de agosto. Pero 1ustave eraun tipo alegre, aunque 4como tendr ocasin de recordar m%s tarde5 sin so!repasar loslmites de la "ovialidad, algo respecto a lo que puede existir, seguramente, gran diferencia

de opinin.

$6amenta!le7 $exclam seal%ndome$. 68o tienes ocupaciones, nadie te o!ligaa permanecer aqu y sin em!argo aqu est%s t*, en esta atmsfera asfixiante, teniendo'rancia a tan solo veinte millas al otro lado del mar7

$am!in hay nie!la en 'rancia $di"e yo$. Pero 9a qu viene esa exaltadaperorata, querido amigo: 9&st%s de permiso:

1ustave era, por esa poca, secretario supernumerario en la em!a"ada francesa deondres.

$9De permiso: 3, lo estoy. # lo que es m%s me han hecho una incitante invitacin.

$'elicidades $di"e.

$/na invitacin que incluye a un amigo $continu, tomando asiento$. 6(h7,sonres. 9-uieres decir que por eso la invitacin es menos incitante:

$(lguien puede sonrer sin ser perverso $di"e$. 8o quiero decir nada por el


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estilo. 3onro por la euforia que manifiestas, virtuoso ciudadano ingls que soy como t*.

1ustave es!oz una mueca+ luego agit su cigarrillo en el aire y exclam

$6&lla es encantadora, mi querido 1il!ert7

$-ueda explicada tu euforia.

$8o hay nada que se pueda decir en su contra $aadi, veloz.

$o cual no me desanima $di"e$. Pero, 9por qu me invita tam!in a m:

$&lla no te invita a ti+ 6me invita a m a venir con... alguien7

$o que me lleva a pensar que se a!urre.

$9-uin no se a!urrira en su situacin: 6;l es inhumano7

$9&l marido:

$6


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$98ormanda:

$Precisamente. &s ah donde la duquesa...

$6>h, la duquesa7

$


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sa!a por amigos comunes+ solo una serie de fastidiosos incidentes me ha!an impedidoaveriguar lo que el trato directo de la duquesa poda ha!erme aclarado.

$3iempre ha!as querido conocerla $di"o 1ustave.


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$# dado que el duque est% en (rgelia, se nos espera all $di"o 1ustave.

$# uno de!e ir a donde se le espera $di"e.

$3o!re todo si es una mu"er la que invita.

$3era $exclam$ una falta de cortesa no acudir.

$3era, antes !ien, una co!arda. (dem%s, 6piensa en cmo gozaras cuandorecuerdes7

$9=u%ndo recuerde: $repet, de"ando de andar arri!a y a!a"o.

$3er% una dulce memoria, la que quede $di"o.

$6(h7$Porque, amigo mo, ser% una loca aventura en tu caso.

$9# no en el tuyo:

$8o. ady =ynthia...

De" de ha!lar de golpe, satisfecho de invocar el escudo que le protega. Pero erademasiado tarde para volverse atr%s.

$-ue la aventura sea lo loca que quiera $di"e.

$-ue quiera el duque, querr%s decir $replic 1ustave, gui%ndome el o"o.

$&s un plan tan atrayente...

$=omo lo es la duquesa $di"o 1ustave.

# as, por todas las excelentes razones manifestadas en la anterior conversacin 4que,por cuidadosamente expuestas que fueran creo que eran tan numerosas como consistentes5,decid aceptar.


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Captulo II

La importancia de la mesa en la cena

os (ycon, de (ycon Enoll, han siempre sido una estirpe despierta y sensata. 8o nos

hemos de"ado llevar por entusiasmos, hemos tenido pocas am!iciones, ninguna ilusin yhemos dado lugar a escasos esc%ndalos. enemos la ca!eza so!re los hom!ros y elmonedero en el !olsillo. 8o hemos ascendido mucho pero tampoco nos hemos hundidonunca. @a!itamos Enoll desde hace generaciones y siempre hemos considerado nuestraprolongada existencia como un servicio al estado y un honor para la casa. enemos me"orconcepto de nosotros mismos del que admitimos y nos permitimos ironizar cuandocenamos con no!les recientes. 3omos un poco m%s ricos cada dcada que transcurre yaadimos una nueva propiedad a nuestros dominios cada cinco aos. os !aches por rentasperdidas los hemos salvado mediante !ien meditadas compras de tierras cercanas aciudades en ascenso+ y no tenemos duda alguna de que ante nosotros se a!re un futuro tanprspero y prometedor como lo ha sido nuestro pasado. 8o somos mundialmente conocidos

y en ello vemos un tri!uto a nuestras valiosas cualidades.)e permito insistir en estas virtudes y caractersticas de la familia porque en algunos

am!ientes se piensa que nos las tuve presentes durante los sucesos que ocurrieron, lo cuales una impresin errnea. =omo he dicho antes, no hice nada que no fuera por o!ligacin.(lguno de mis antepasados ha!ra, estoy seguro, hecho lo mismo de ha!erse visto !a"osimilares circunstancias en relacin a madame de 3aintA)aclou y dem%s personas que tuveel privilegio de conocer. @a!ra hecho lo mismo, si esas personas hu!ieran o!rado de lamisma manera que lo hicieron cuando me mezcl con ellas.

1ustave mantuvo su alegra y !uen humor sin m%cula durante el transcurso denuestro via"e a =her!urgo. &l dulce misterio que aureola!a nuestra excursin le era

sumamente grato. Bnsisti en que furamos sin sirvientes y me persuadi de no revelardireccin alguna. >!ligado l a de"ar sus seas en la em!a"ada, indic que le enviasen lascartas a (vranches, adonde l las ira a !uscar. (dem%s de las doce millas de marinterpuestas para ponerle a salvo de posi!les testigos curiosos, la casa a la que nosdirigamos se halla!a a diez millas de esa po!lacin, en una apartada y desolada zona delterritorio que !ordea!a la costa.

$)i hermana dice que es el lugar m%s triste del mundo $di"o$, aunque estoy


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seguro de que cam!iar% cuando nosotros lleguemos.

8ada nos o!liga!a a llegar cuanto antes para aliviar la depresin de mademoiselle de2erensac, por lo que, a mitad del da siguiente, nos encontr%!amos en (vranches yempleamos la tarde en deam!ular sin rum!o y contemplar, al otro lado de la !aha, la moledel monte 3aint )ichel. De!a"o nuestro, mientras nos hall%!amos en la colina, en lnearecta con el monte, ha!a una gran casona !lanca en el !orde de la arena. 3e nos di"o era unconvento.

$&l lugar, en con"unto, no es tan incitante como adonde nos dirigimos $di"e!ostezando$. -uerido amigo, 9por qu no proseguimos el via"e:

$=onviene que antes conozcas esta interesante po!lacin $respondi 1ustave congravedad, aunque tam!in con un alegre destello en los o"os$. &n cualquier caso, de!emosesperar al coche que he ordenado, as que s paciente.

$9@asta cu%ndo:

$@asta las nueve, la hora de la cena.

$9&staremos aqu hasta la noche, pues:

$9h, no la de"an mal+ o, al menos, no demasiado. (unque para la gente sencilla...

De" la frase en el aire con un significativo encogimiento de hom!ros.

$9# el duque:

$&s un !uen hom!re $respondi con seriedad$, y muy inteligente. &n Pars letienen mucho aprecio.


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@a!a esperado escuchar que se trata!a de un canalla+ pero resulta!a que era un !uenhom!re. # no de"a de ser algo vil "ug%rsela a un !uen hom!re. Pero, en fin, no poda hacernada. Prepar la maleta con incipientes recelos+ la doncella, incomodada por mi presencia,

continua!a frotando la mesa con un !arniz de muy fuerte olor.$(l menos $continu, como si no hu!iera hecho pausa alguna$ da mucho a la

iglesia y a los po!res.

$al vez sea por mala conciencia $di"e, mirando hacia arri!a con aire esperanzado.

$&s posi!le, monsieur.

$> tam!in $di"e con una sonrisa$ puede ser hipocresa.

a sacudida de ca!eza de la doncella me hizo ver que rechaza!a rotundamente la

idea+ pero mi conciencia se aferr a ello y se tranquiliz. #a no duda!a el hom!re era untaimado hipcrita. Poda ir, pues, al ch?teau con toda tranquilidad seguro que ese duque semereca cualquier engao al que la duquesa y mi amigo 1ustave le quisieran someter.

( las nueve en punto, como ha!a dispuesto 1ustave, partimos en un voluminosocarrua"e llevado por dos grandes ca!allos !lancos y conducido por un estlido y gruesopalafrenero. entamente avanzamos al trote, !a"o las estrellas y con el monte 3aint )ichelde permanente compaero a nuestra derecha mientras seguamos la carretera que !ordea!ala !aha. =inco o seis millas m%s tarde, giramos de repente y fuimos tierra adentro. acarretera tena taludes a am!os lados mientras su!amos la colina, pequea elevacin deterreno que so!resala en medio de la llanura.

$9a casa est% en lo alto: $pregunt a 1ustave.

$0usto arri!a del todo $di"o.

$)e"or ir andando.

)e ha!a impacientado el lento trote que llev%!amos y que vena a ser, casi, como ira pie.

2a"amos pues, nos pusimos a caminar y pronto de"amos atr%s el carrua"e. 8uestraanimada charla produca un ligero eco que resona!a en la noche.

$)e extraa que nadie venga a reci!irnos $di"o 1ustave$. )ira, all est% la casa.

/n pronunciado giro de la carretera permiti que la pudiramos ver de lleno. &ra unch?teau !astante pequeo, en estilo gtico moderno. 3e halla!a conforta!lemente u!icado!a"o la colina, la cual se eleva!a a!ruptamente tras l. a carretera por la que nosacerc%!amos pareca ser el *nico modo de acceso y ninguna otra casa se vea. Pero, aunsiendo el lugar !astante desolado, la mansin presenta!a un aire alegre, pues todas las


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ventanas, desde el primer piso al *ltimo, aparecan iluminadas.

$Parece que la duquesa tiene compaa $o!serv.

$&s que nos espera $respondi 1ustave$. a iluminacin es en nuestro honor.

$h, por supuesto, se siente o!ligado a decir eso7 $me interrumpi$. Pero entrenya, la cena esta lista. 6-u delicia poder cenar a gusto7 8unca estoy de !uen %nimo paracenar cuando me encuentro sola. 3e van a sentir terri!lemente incmodos, ca!alleros. 8o


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hay nadie m%s en la casa que un vie"o y cinco mu"eres, incluyndome a m misma.

$9# todos ellos son...: $empez 1ustave.

$9Discretos: $pregunt ella interrumpindole de nuevo$. 6>h, nunca diran laverdad7 68o temas nada, querido 1ustave7

$9-u noticias hay del duque: $pregunt mi amigo mientras la duquesa camina!aunos pasos por delante de nosotros.

$6>h7, las me"ores. &s decir ninguna $di"o ella volviendo la ca!eza y movindolaafirmativamente$. 98o es ese un !uen dicho, monsieur (ycon:

$Bncluso los dichos aciertan a veces $me atrev a apuntar.

legamos a la mansin y pasamos por la puerta que esta!a a!ierta de par en par. rascruzar el vest!ulo nos encontramos en una pequea sala cuadrada con cortinas de colorrosa. a cena se halla!a all preparada. 1ustave fue hacia la mesa y la duquesa se sent enuna !utaca. @a!a sacado el pauelo del !olsillo lo su"et ante sus la!ios y parecimorderlo. @a!a levantado las ce"as y su rostro manifesta!a una mezcla cmica de agrado yaprehensin. /na mirada r%pida que me dirigi pareci que me invita!a a compartir laarriesgada humorada en la que la conducta de 1ustave representa!a un papel principal.

1ustave, "unto a la mesa, pareci perple"o.

$6/no, dos, tres7 &xclam en voz alta, contando los cu!iertos preparados.

a duquesa no di"o nada. 3olo alz las ce"as hasta casi hacer que tocasen elarracimado ca!ello.

$9/no, dos, tres: $repiti 1ustave, inequvocamente interrogativo$. 9=lara no vaa !a"ar:

Bnters, diversin, temor, vergFenza, exultacin, todo ello se manifest en los o"os demadame 3aintA)aclou. 3e manifest y se esfum de modo tan r%pido que pareci fundirseen una genuina emocin exclusiva de la duquesa y de ninguna otra mu"er de este mundo. #,mientras, segua mordiendo el pauelo con m%s fuerza que nunca. Por mi parte, no pudeevitarlo me puse a rer mientras el rostro de la duquesa desapareca tras el pauelo.

$9-uieres decir que =laire no est%: $grit 1ustave volvindose hacia ella de modor%pido y acusador.

a ca!eza tras el pauelo hizo un movimiento afirmativo, al principio tmido y luegoenf%tico. =on voz ahogada anunci la noticia

$3e ha marchado hace tres das.


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1ustave y yo nos miramos. @u!o una pausa. (l final, apart una silla de la mesa ydi"e

$3i madame est% lista...

a duquesa guard enseguida el pauelo y se levant. Dirigi una mirada al rostrograve de 1ustave y, luego, soltando una alegre carca"ada, me tom por el !razo y exclam

$98o es divertido, monsieur (ycon: 68o hay aqu nadie m%s que yo7 -u divertido,9verdad:


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Captulo III

Lo inesperado como costumbre

odo depende del punto de vista y, asimismo, posee diversas facetas. /n cuadro

puede parecer su!lime desde un %ngulo de la sala y un mamarracho desde otro. &l rostro deuna mu"er puede, de frente, ser perfecto, pero su perfil decepcionante. Por encima de todo,lo que uno admira de s mismo puede ser muy desagrada!le para el vecino. o que de!eprivar es, pues, la tolerancia, o algo por el estilo.

=uando la duquesa afirm que la situacin, o el asunto en general, era Cdivertido yosolt una carca"ada+ pero por otro lado, 1ustave de 2erensac, tras quedar perple"o, fue haciael vest!ulo.

$9Dnde est% el coche: $le omos decir.

$3e ha marchado hace tres minutos, monsieur.

$


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1ustave+ se nos qued mirando un momento y luego, de"%ndose caer en la tercera silla, sesirvi vino en el vaso. a duquesa no le mir.

$9)ademoiselle de 2erensac se ha visto o!ligada a marchar: $suger.

$3 se ha visto o!ligada $respondi la duquesa.

$9De repente:

$8o $di"o la duquesa, y en sus o"os apareci de nuevo una mezcla de comple"ossentimientos+ yo re, y ella se lament$. 6>h7 98o se han muerto nunca de a!urrimiento:

1ustave no replic+ continua!a con las ce"as fruncidas.

$98o es una l%stima $pregunt$ estropear una fiesta por un leve desacuerdo:

a presencia de mademoiselle de 2erensac ha!ra aumentado infinitamente nuestroplacer y disminuido nuestro sentimiento de culpa!ilidad.

$)e hu!iera gustado conocerle antes, monsieur (ycon $di"o la duquesa$+ as nole hu!iera tenido que pedirle a 1ustave que le tra"era.

e hice una leve reverencia, aunque prefera que las cosas fueran como ha!an sido.a duquesa esta!a sentada con aspecto de nio al que se ha acusado de ser un desastre y lse niega a aceptar el calificativo. )e halla!a perple"o ante el arre!ato de moralidad quemostra!a mi amigo 1ustave. 3u siguiente apreciacin aclar de alg*n modo lo que senta.

$6=ielos7 3i llegara a sa!erse, 9qu pensaran: $pregunt de pronto.

$3i a alguien le preocupa lo que se pueda llegar a pensar $di"o la duquesaencogindose de hom!ros$ es...

$/n est*pido $di"e yo$. 6> un amante7

$6(h7 $exclam la duquesa con una sonrisa en los la!ios$. 3i es as te perdono,querido 1ustave. 9# quin temes que pueda de"ar de tener !uena opinin de ti:

$6@e escrito $di"o 1ustave, con un gesto retrico$ diciendo que voy a casa de

unos amigos a encontrarme con mi hermana7$@as escrito... $murmuramos a la vez.

$9# qu ocurre si mi hermana tam!in escri!e a alguien diciendo que no seencuentra aqu:

$3i ella tam!in escri!e... $murmuramos de nuevo.


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$&ntonces se va a pensar...

$9-uin lo va a pensar: $pregunt la duquesa.

$ady =ynthia =hillingdon $di"e yo.

$6&sto ha sido un engao, una trampa7 $continu el po!re 1ustave.

$&n verdad que ha sido una imprudencia que vinieras $di"o, represiva, la duquesa$. 9=mo i!a a sa!er lo de lady =ynthia: 3i lo hu!iera sa!ido no te hu!iera llamado.@u!iera llamado solo a monsieur (ycon. > quiz% tam!in usted, monsieur (ycon...

$)adame $di"e$ estoy solo en el mundo.

$9(dnde ha ido =laire: $pregunt 1ustave.

$( Pars $di"o la duquesa con un mohn en los la!ios.

1ustave se levant de"ando la servilleta so!re la mesa.

$De!o ir con ella maana $di"o$. 3upongo que t* regresar%s a Bnglaterra, 1il!ert.

3i 1ustave nos a!andona!a pareca ineludi!le que yo tam!in regresase a Bnglaterra.

$3upongo que s $di"o la duquesa, afligida$. 6>h, 9no es exasperante: 6)e ha!aimaginado que todo sera tan agrada!le7

$3i hu!ieras dicho la verdad... $empez 1ustave.

$8o de!era de ha!er invitado a cenar a un predicador $di"o la duquesa, mordaz+luego, ri de nuevo.

$98o hay forma de que mademoiselle de 2erensac regrese: $suger.

$Bmposi!le. e toca!a el turno de cuidar de tu vie"a y rica ta, 1ustave.

=reo que hu!o cierto tono de malicia en la duquesa al decir esto.

Pareca que nada m%s se poda hacer. a duquesa no os desafiar los

convencionalismos invit%ndome que me quedara. Para hacerle "usticia, tan pronto como seencontr ante lo inevita!le, lo acept con gracia y, tras la cena, se ocup de que sushuspedes pudieran emprender los respectivos via"es. al vez sea presuncin, pero creo quese sinti invadida por una melanclica satisfaccin al descu!rir que 1ustave de 2erensacde!a marcharse a las diez en punto del da siguiente mientras yo ha!ra de perder muchotiempo en =her!urgo si me i!a antes de las cinco de la tarde.

$3i has de perder el tiempo me"or que sea durante el via"e $me recomend


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1ustave.

a duquesa me mir y yo mir a la duquesa.

$)i querido 1ustave $di"e$. &res muy considerado. #o no hara otra cosa siestuviera enamorado de lady =ynthia.

$8i yo $di"o la duquesa$, si fuese incapaz de soportar una reprimenda.

$3i el que me quede aqu hasta la tarde no molesta a la duquesa... $di"e.

$a duquesa lo soportar% $di"o l con una sonrisa.

# as se decidi una sacudida de ca!eza expres la opinin de 1ustave. Pocodespus, madame de 3aintA)aclou nos dese las !uenas noches. =ansado del via"e y 4a

decir verdad5 algo decepcionado de mi amigo, no tard en ir a dormir. &n lo alto de lasescaleras un grupo de tres chicas cuchichea!a. /na de ellas me entreg una candela y a!rila puerta de mi cuarto con una pcara sonrisa en su ancha y simp%tica cara.

$/na de las grandes virtudes de las mu"eres $di"e, detenindome antes de entrar$es la fidelidad.

$3omos devotas de madame la duquesa $di"o la chica.

$# la siguiente gran virtud es la discrecin $continu.

$)adame nos la inculca diariamente $di"o, y yo saqu un napolen.

$3eoras $di"e, depositando el napolen en la mano de la chica$, les agradezcosus ama!les atenciones. 2uenas noches $y cerr la puerta mientras les oa soltar unassatisfechas y excitadas risitas. )e gustan estas cosas me llenan de contento, pues animaneste vie"o mundo que, a pesar de todo, ofrece considera!les disfrutes. =on el murmullo deesas gratas risas me dorm enseguida.

6a duquesa impartiendo clases de discrecin7 68o se ha!a visto nada igual desdelas conversaciones de =harles y 3teenie ante el rey 0aco!o7GPero la discrecin tiene dosvertientes+ la del C8o lo hagas, y la del C8o lo digas. =onsiderando tal am!igFedad,a!solv a la duquesa de toda hipocresa.

( las diez de la maana siguiente, nos vimos li!res de mi querido amigo 1ustave de2erensac. a franqueza me o!liga a exponerlo de esta forma, puesto que la inquietud que lea!ruma!a desde la noche anterior dur hasta la maana siguiente, y no vacil en largarlealgo parecido a un sermn a su anfitriona. 3us *ltimas pala!ras fueron de invitacin a quesu!iera a su coche y me fuera con l+ y cuando cortsmente rehus, me di"o que lolamentara. )e reconforta pensar que su profeca, aunque m%s de una vez estuvo a punto de

GHespectivamente, el hi"o y el favorito del rey 0aco!o B, am!os ua y carne. 48. del. .5


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confirmarse, al final qued en nada de!ido a los acontecimientos que acaecieron.

1ustave march colina a!a"o en el carrua"e y la duquesa suspir de alivio.

$(hora $di"o$ podremos disfrutar solos de unas pocas horas, monsieur (ycon. 6#luego... la soledad de nuevo7

o senta mucho por la duquesa. &videntemente, la sociedad y la alegra le erannecesarias como la comida y el aire, y el pat%n de su marido se las denega!a. )isoportunidades eran escasas, pero me predispuse a sacarles el mayor partido. 8o le podade"ar otra cosa m%s que un grato recuerdo, y me determin a que as fuese.

&mpleamos la mayor parte del da en pasear por los !osques que !ordea!an lasladeras de la colina, en la parte posterior de la casa. Durante horas la duquesa charl so!reella misma, su vida, su familia, y, posteriormente, so!re el duque. 3i poda dar crdito a las

insinuaciones que me hizo, su marido mereca poca consideracin y, en el peor de los casos,el que se quisiera resarcir le serva de excusa, si precisa!a alguna. &lla neg que necesitaraexcusas y en esto fui m%s proclive a creerla. Porque conmigo, como con 1ustave de2erensac antes que la som!ra de lady =ynthia se interfiriese, ella era, a todas luces, unaC!uena camarada. &n nuestra conversacin no hicieron acto de presencia los sentimientosy, mientras el da avanza!a despiadadamente, lament tener que marcharme enconsideracin a un convencionalismo que pareca, en este caso al menos $y el =ieloproh!a que incurra en generalizacin alguna$, no ocultar realidad alguna. 3in em!argo laduquesa era un ser delicioso, so!re todo en virtud de su vitalidad. Por el !osque se expandiuna y otra vez el eco de nuestras risas.

( las cuatro regresamos algo tristes a la mansin, donde las alegres doncellas seafana!an prepar%ndome un refrigerio. a duquesa insisti en que compartisemos lacomida.

$&sta noche me ir a la cama sin cenar $di"o+ y nos sentamos malhumorados comodos nios que de!en volver al colegio.

De pronto, se oy un !arullo fuera+ las chicas ha!la!an entre ellas en tono r%pido ynervioso. a duquesa levant la ca!eza para escuchar. uego se volvi hacia m y mepregunt

$9Puede or lo qu dicen:

$8o puedo entender nada excepto C6H%pido, r%pido7.

)ientras esta!a ha!lando, la puerta se a!ri de golpe y entraron dos personas, laprimera diciendo

$6>tra vez, madame, otra vez7


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$6Bmposi!le7 $exclam la duquesa levant%ndose.

$Pues es verdad. 0ean se halla!a fuera cazando un cone"o cuando ha visto elcarrua"e,

$9-u carrua"e: 9&l carrua"e de quin: $pregunt.

$6&l de mi marido7 $di"o la duquesa !astante tranquila$. &s una de suscostum!res favoritas aparecer de pronto. 6Pero, (rgelia7 Pens%!amos estar a salvotenindole en (rgelia. @a de!ido de via"ar escondido !a"o tierra como los topos, 3uzanne, ohu!iramos sa!ido de su regreso.

$6(qu no llega a sa!erse nada7

$9# qu vamos a hacer con monsieur (ycon: $di"o la duquesa.

$@ay una solucin f%cil $indiqu$. )e marcho ahora mismo.

$6Pero l le ver%7 $exclam 3uzanne$. 6&st% solo a media milla7

$)onsieur (ycon puede tomar el camino lateral $di"o la duquesa.

$&l duque le ver% antes de que llegue al camino $replic la chica$. Puede verledurante casi cincuenta yardas.

$Puedo esconderme entre los ar!ustos $propuse yo.

$>dio hacer nada que suene a sospechoso $coment la duquesa, todava tranquila$. # si ocurre que le ve a usted, 6eso sera de lo m%s sospechoso7 # mi marido tiene o"osde gato para estas cosas.

&ra innega!le que resultara sospechoso si me sorprenda escondido entre losar!ustos. )e sent en silencio, no ocurrindoseme nada m%s.

3uzanne, con una diligencia que, esper no correspondiese a una ha!itual costum!re,propuso una h%!il solucin.

$6&l criado ingls que madame despidi hace una semana7 $di"o$. &l ca!allero

podra hacerse pasar por l. &l hom!re de" sus vie"as ropas aqu, ya que al marchar secompr otras. &l ca!allero se las puede poner y moverse por aqu sin pro!lemas.

$9Puede hacerse pasar por un criado: $me pidi la duquesa$. 3i mi marido lepregunta algo, empeore su francs un poco $di"o sonriendo.

Parecan todos tan tranquilos y pr%cticos que hu!iera resultado descorts y a!surdoponer o!"eciones.


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$e enviaramos el equipa"e sin tardanza $di"o la duquesa$. 3uzanne esconde elequipa"e de monsieur (ycon en tu cuarto. o siento, pero creo que de!e usted darse prisa,monsieur (ycon.

6De nuevo, en virtud de la sangre fra de la duquesa y de la desenvuelta prontitud de3uzanne, lo que est%!amos haciendo pareci una costum!re ha!itual entre ellas7 =incominutos despus me presenta!a ante la duquesa ataviado con un atuendo proletario algoestrecho para m y aderezado con un feo som!rero inclinado ominosamente so!re uno demis o"os. a duquesa me inspeccion con gran curiosidad.

$(fortunadamente el duque no es un hom!re muy o!servador $di"o$. >h, porcierto, su nom!re es 1eorge 3ampson y procede de 8eImarJet+ y se marcha por pro!lemasde !e!ida. (dis, monsieur (ycon. &spero que nos volvamos a encontrar en m%s agrada!lescircunstancias.

$al vez no sean m%s agrada!les pero espero que sean m%s duraderas $repliqu yo.

$)e ha gustado mucho que viniera $me di"o, con un apretn de manos.

$&l carrua"e est% ya a un cuarto de milla $exclam 3uzanne alert%ndonos.

$6-u fastidio7 6>"al% el =ielo hu!iera dispuesto que los argelinos se hu!ierancomido al duque7

$8o olvidar este da que he pasado aqu $le asegur.

$6>h7, es usted un encanto. 6-u a!urrido volver% a ser todo nada m%s llegue mimarido7 2ien, adis.

# con un *ltimo y sostenido apretn de la mano de la duquesa, yo, con el atuendo ypersonalidad de 1eorge 3ampson, despedido por !e!er m%s de la cuenta, sal por la puertadel ch?teau.

C@ay una cosa $me di"e cuando sala$ que me parece altamente pro!a!le que estetipo de situaciones hayan sucedido anteriormente.

a idea no me complaca. )e gusta ser siempre el primero en todo.


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Captulo IV

La duquesa define su postura

(nduve a paso tranquilo+ el pesado carrua"e se halla!a cerca de la cima de la colina.

res minutos m%s tarde me cruc con l. &n el coche vena, solo, un hom!re alto y moreno,con una hinchada cara !lanca, un espeso mostacho y unos o"os glidos. 'uma!a un cigarro.)e saqu el som!rero a su paso y continu mi camino.

$9-uin es usted: $me grit, deteniendo el carrua"e.

#o le cont lo que me ha!a sido dicho, en un francs deficiente.

$9De dnde es usted: 6>h, es ingls7 Por la 1racia de Dios, ha!le ingls, no esa"erga. $)e repiti que ha!lara ingls y continu en esa lengua que l pronuncia!a concierta afectada correccin.

&scuch mi relato con rostro impasi!le.

$9iene usted alg*n documento, alg*n certificado: $pregunt.

$8o, monsieur $!al!uce en el estilo que cre m%s adecuado para el papel querepresenta!a.

$&s curioso, 9no: 93e em!orracha usted por sistema:

$8o me he em!orrachado en mi vida, monsieur $di"e humildemente pero confirmeza.

$&s decir, que cuestiona que su despido haya sido "usto.

$3, monsieur $di"e pensando que tal protesta se avena con mi impostado car%cter.

)e mir atentamente mientras fuma!a su cigarro.

$9@a intentado seducir a las doncellas: $pregunt de repente.


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$8o, milord. /na tarde, milord, haca mucho calor y... el vino, milord...

$&ntonces s que se em!riag.

0ugu con mi som!rero, rezando para que el hom!re prosiguiera su camino.

$9=u%ntos criados hay en la casa: $pregunt, sealando hacia la mansin.

$=uatro doncellas, milord, y el vie"o 0ean.

)edit unos momentos y luego di"o con aspereza

$9@a servido alguna vez la mesa:

3upona yo que, de alguno u otro modo, todos ha!ran servido la mesa alguna vez,

por lo que pens que decir esto no sonara a mentira$De vez en cuando, milord $respond pregunt%ndome qu de!a pretender.

$/nos huspedes llegan maana $di"o$. )i sirviente viene con ellos, pero tal vezhaya demasiado tra!a"o para l solo. 9Puede quedarse y ayudar: e pagar el mismosueldo.

)e poda ha!er redo en sus narices+ pero el sentido del de!er me inclin a laseriedad.

$o siento mucho, milord $empec.

$9-u sucede: 9e han contratado en otro lugar:

$8o, milord, no exactamente.

$&ntonces su!a al pescante. 9> quiere que sus patrones le encuentren ofensivoadem%s de !eodo:

$Pero madame me ha despedido...

$&so d"emelo a m. 6


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poda significar que me registrase, y yo lleva!a un pasaporte a nom!re de 1il!ert (ycon.

Decid ser prudente. &n cuanto al resto, se puede atri!uir a un s*!ito deseo dedivertirme un poco. 6&ra tan solo cuestin de un da o dos7 uego me esca!ullira. 6Pensen la cara que pondra la duquesa cuando me viese aparecer sentado en el pescante7

$-uiz%... quiz% no pueda serle de ayuda $murmur.

$-uiz% no pueda $di"o$. Pero yo le contrato por necesidad, no por ganas, amigomo. 6


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$* siempre est%s sorprendindome $contest ella arqueando las ce"as.

De pronto, el duque se volvi y grit C63ampson7. uego la mir a ella, aadiendo

$(qu traigo a un vie"o amigo tuyo $y, con un leve empu"n en la espalda me hizoentrar en la sala.

a duquesa se puso en pie de un !rinco y exclam sorprendida C9>tra vez ustedaqu:.

)antuve mis o"os fi"os en el suelo pregunt%ndome qu i!a a suceder y si i!a a tenerque vrmelas con mi nuevo amo.

$3, aqu lo tienes otra vez $di"o$. o siento, querida, si no te agrada, pero me vaa ser muy *til.

3u sonrisa permiti un respiro a la duquesa. 8ot que esta me mira!a y yo tam!in lamir con cautela. &l duque se halla!a a un paso delante de m, por lo que el mensa"e de mimirada le pas desaperci!ido.

uego sucedi lo que yo !usca!a la gradual toma de conciencia de la situacin porparte de la duquesa y el refle"o de ello en sus hermosos o"os. &nlazando las manos profiriun prolongado C>h que indica!a su a!soluto contento y placer. 9-u hara el duque anteeso: Pues nada contempla!a a su esposa con ira indisimulada. a r%pida agudeza de laduquesa le hizo entender en el acto lo que yo le quera dar a entender. Di"o de nuevo C>h.Pero esta vez queriendo expresar humillacin e indignacin.

$9Para qu has trado a este hom!re: $pregunt.

$Para que ayude a mis sirvientes.

$#o lo ha!a despedido $di"o ella con altivez.

$Pues te ruego pospongas la e"ecucin de tu decreto $di"o el duque$. 8ecesito unsirviente y no tengo tiempo de encontrar a otro.

$9Para qu lo necesitas: 98o tienes a afleur: 4(hora la duquesa interpreta!a supapel a la perfeccin.5

$afleur viene maana+ pero no es suficiente.

$98o es suficiente para nosotros solos:

$3eremos m%s maana.

$9>tra sorpresa: $pregunt, arrellan%ndose en su silla.


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$3i es una sorpresa que invite a mis amigos a mi casa... $replic.

$# para eso no consultas a tu mu"er $di"o ella con una sonrisa.

&l duque se volvi hacia m cavilando. Pareca dudar de la conveniencia de que laconversacin la oyera un lacayo.

$


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$9Por qu no, en tan !uena compaa:

$9o sa!e madame:

$o sa!e, 3uzanne.


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$&sta es la despensa $di"o 3uzanne tranquila como si nada hu!iera sucedido$. #en esa alacena encontrar% la li!rea de 3ampson.

$9&s de calidad: $pregunt.

$=reo, monsieur, que le quedar% !ien $di"o con esa delicada y am!igua zalameraque tanto me gusta!a$. &stoy segura de que cualquier cosa de!e de quedarle !ien a usted$continu.

# mientras me cam!ia!a el tra"e de via"e por la li!rea, record m%s cosas de )arieDelhasse+ y, entre esas cosas, que se rumorea!a que el duque de 3aintA)aclou era uno desus m%s fervientes admiradores. (lguno deca que o!tena los favores de ella+ otros lonega!an con m%s o menos conviccin e indignacin. Pero, cualquiera que fuese la verdad alrespecto, esta!a claro que la duquesa algo quera significar al oponerse a reci!ir a esa dama.3u rechazo no era un simple capricho sino una firme determinacin, en la cual

pro!a!lemente i!a a persistir. # de hecho persisti, aunque las circunstancias i!an a variarconsidera!lemente.


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Captulo V

Una retirada estratgica

a llegada del duque, ayudada quiz% por su comportamiento con su mu"er y

conmigo, tuvo en m un curioso efecto. 8o dir que me sent con li!ertad para enamorarmede la duquesa, pero s que la cadena del honor que me ha!a impedido hasta aqu tomarventa"a alguna de su imprudencia, se aflo"a!a+ y perci! la posi!ilidad de satisfacer misinclinaciones si empeza!a a tirar de esa d!il cadena. ( este respecto, entre otros, resolv,mientras esta!a sentado en la despensa !e!iendo el vaso de vino que 3uzanne ama!lementeme ha!a servido, que mi estancia en la mansin del duque de!a ser lo m%s corta posi!le.(dem%s, ya no me diverta+ yo no era un criado genuino+ las doncellas me trata!an conmucha m%s distancia y deferencia que antes+ la diversin de escaleras arri!a ya no me eraposi!le y la de escaleras a!a"o no me interesa!a. &sta a!surda situacin de!a aca!ar. >iralo que la duquesa quera decirme y luego me ira, de"ando que afleur se las hu!iera con supesada tarea lo me"or que pudiera. # de!a, claro, evitar a )arie Delhasse. os "venes

somos unos locos.C-uiz% sea lo me"or, me di"e con un suspiro.

&sa noche no serv la mesa. a duquesa se ha!a encerrado en sus ha!itaciones y elduque no tom m%s que una tortilla y una taza de caf. /na vez aca!, indic a 3uzanne ysus ayudantes que les espera!a en la planta de las ha!itaciones y o que les indica!a dndeinstalar a los huspedes que aguarda!a. Pareca que los i!a a reci!ir por mucho que laduquesa no quisiera. 8o sa!iendo qu hacer ante esto, fui al "ardn y encend mi pipapersist en esa costum!re pese a mi cam!io de indumentaria.

(l poco apareci 3uzanne. &l que oyese al duque llam%ndola me indic que ro!a!a

unos instantes a su tarea. (firm con la ca!eza, seal el estrecho sendero de grava queconduca hacia la zona de ar!ustos y r%pidamente se retir. a comprend y fui por elcamino hasta alcanzar los ar!ustos. (ll vi otro pequeo sendero, casi perpendicular a aquelpor el que ha!a llegado y que se a!ra ante m. =ontinu caminando un rato y, cuando los%r!oles impidieron por completo que pudiera ser visto desde la casa, me sent en un tosco!anco de madera donde aguard hasta que me reclamaran. 3i hu!iese esperado a la duquesahu!iera de!ido aguardar largo rato+ pero enseguida tuve otra compaa. ras diez minutosvi que un hom!re pequeo, en"uto y reservado, vena por el camino hacia m, en direccin a


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la casa. Pens que se ha!ra apartado de la carretera para evitar las vueltas. leva!a ropasdecentes pero !astante radas e i!a con una vali"a en la mano. 3e detuvo frente a m, sequit el som!rero y pareci inspeccionar con inters mi pulcra chaqueta azul de !otones

dorados y cordoncillos !lancos.$9Pertenece usted a la casa del duque: $pregunt, alzando cortsmente el

som!rero.

e expliqu que s, provisionalmente.

$93e va usted a despedir, monsieur:

$3, tan pronto como pueda $di"e$. &stoy contratado de momento.

$93a!e por azar si el duque precisa de un sirviente !ien cualificado: e estara de lo

m%s agradecido si me presenta a l. &n Pars he odo decir que un criado le ha de"ado+ perose fue tan pronto que no me ha dado tiempo de ha!larle, y as es cmo he venido hasta aqu.

$=reo que es usted exactamente lo que el duque precisa $di"e$. 3i yo fuera usted,ira a la casa y solicitara que le contrataran. &l duque espera invitados maana.

$9# usted: 98o le es suficiente, de momento:

$=omo ve $le di"e indicando mi atuendo$, no soy un criado fi"o de la casa, sinoun mero sirviente interino.

3onri cortsmente en reconocimiento de mi modestia y aadi

$9=ree, entonces, de verdad, que puedo tener una oportunidad:

$/na oportunidad excelente, creo. 1ire a la izquierda, "unto a aquel castao, y alminuto de caminar se encontrar% ante la fachada de la casa.

)e hizo una leve reverencia, se puso el som!rero y se fue a paso r%pido, aunquecorto y arrastrado. &ncend otra pipa y !ostec. &sper que el duque contratara a ese recinllegado y me de"ara a m li!re, y lo esper de verdad, pues el tipo pareca vivaracho,perspicaz y maoso. 9# la duquesa: )e altera!a tanto la agitacin que me so!revena alpensar en la duquesa que exclam

$6Por 0*piter, lo me"or es irse7 6Por 0*piter, de!o hacerlo7

/n som!rero m%gico que materializase deseos o, me"or, esperanzas 4porque si aalguien que no es filsofo se le permite opinar algo, no siempre el deseo y la esperanzacoinciden5 no hu!iese podido hacer nada me"or por m que lo que realiz el Destino+porque en ese mismo instante o el grito del duque llam%ndome desde la casaC63ampson7. =orr respondiendo a su llamada. &sta!a en el porche con el pequeo


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individuo a su lado, que mostra!a una deferente, extremadamente satisfecha sonrisa.

$


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4que me toma!a la li!ertad de considerar un regalo5 de 1eorge 3ampson a 0ean, que lasacept muy contento. )e sent en ese instante otra persona, hasta tal punto el tra"e hace alhom!re.

$@a hecho !ien ponindoselo $murmur el vie"o 0ean$. 3i l le hu!iesedescu!ierto, le ha!ra desafiado y disparado.

$9&s !uen tirador:

$6)on Dieu7 $di"o 0ean con una expresin algo inquietante+ poda ser que elduque aun diera conmigo y yo no era precisamente un diestro tirador. De pronto di un!rinco.

$6=ielo 3anto7 $exclam$. 6)e ha!a olvidado7 a duquesa quera verme. 6Pare,pare7

0ean tir de las riendas, detuvo al ca!allo y me mir.

$8o puede regresar as como as $di"o haciendo una mueca$. endr% que ponerseesas ropas de nuevo $y me seal las que aca!a!a de cederle.

$6)e ha!a olvidado de la duquesa7 $di"e+ a decir verdad, en un primer momentome satisfizo ese olvido significa!a que ha!a vencido el irrefrena!le impulso al que healudido. Pero luego me llen de remordimiento. 3alt, pues, al suelo.

$De!es aguardarme hasta que est de vuelta.

$e disparar% $me rega 0ean.

$6(l dia!lo con l7 $di"e imagin%ndome a la po!re duquesa completamentedesamparada, a merced de la Delhasse, del marido y de no s quin m%s.

(firmo $es una opinin !ien meditada$ que nada hay m%s peligroso para unhom!re que olvidar a la mu"er que ha solicitado su ayuda. 3i la olvida por completo, algo!ien poco rom%ntico, puede que el dao sea mnimo. Pero si solo la olvida a medias, eso lede"ar% a merced de un intenso autoreproche. 8o se podr% "am%s quitar la ofensa de laca!eza.

&mpec a caminar hacia el ch?teau.

$6)e van a despedir por esto7 $exclam 0ean.

$8o te va a pasar nada $le asegur.

Pero apenas 4mi virtuoso orgullo mitigado por un tierno remordimiento5 ha!ainiciado ese tan mal visto via"e de retorno, que, tal como nos ha!a sucedido a 1ustave de2erensac y a m mismo la noche antes, una delgada figura apareci por el peralte de la


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carretera. &ra de nuevo la duquesa, que ha!a utilizado el ata"o. (penas "adea!a esta vezpareca sosegada y de !uen humor.

$Por un momento he pensado que usted me ha!a olvidado. Pero sa!a que no lohara, monsieur (ycon.

9=mo poda resistirme a tal prue!a de confianza:

$9>lvidarla, madame: $exclam$. (ntes olvidara...

$3a!a que me esperara.

$(qu estoy, en efecto, aguard%ndola fielmente $di"e.

$)uy !ien $di"o la duquesa$. enga esto, por favor, monsieur (ycon.

C&sto era un pequeo !olso. )e lo entreg y empez a caminar hacia el cochedonde 0ean fuma!a pl%cidamente un largo y negro cigarro.

$9iene algo que decirme: $suger caminando "unto a ella.

$o har $di"o la duquesa al llegar al coche$ cuando estemos en marcha.

0ean se quit el cigarro de los la!ios. #o retroced dos pasos.

$6Perdneme7 $exclam, pero 9ha dicho Ccuando estemos en marcha:

$&s lo me"or $di"o la duquesa entrando en el coche 4sin que le prestara ayuda,siento decirlo5$, ya que el duque puede percatarse de que me he ido y ponerse aperseguirnos, ya sa!e.

8ada me pareca m%s pro!a!le, de!a admitirlo.

$&ntre, monsieur (ycon $continu la duquesa+ y entonces, empez a ha!lar depronto en ingls$. e he dicho a mi marido que no permanecera en casa si venamademoiselle Delhasse, y l no me ha credo. Pues ya ver%. 6=laro que no voy a quedarme79Por qu no entra usted de una vez:

)edio aturdido, entr en el carrua"e. 8o le expuse mi parecer so!re el asunto demademoiselle Delhasse. Para empezar, sa!a poco al respecto+ y, en segundo lugar, mepareca que ha!a algo m%s apremiante.

$6H%pido, 0ean7 $di"o la duquesa.

# el coche empez a avanzar pesadamente mientras 0ean haca girar su cigarro ygrua continuamente. a cara del anciano lo expresa!a todo sin pala!ras.


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$3, me despedir%n+ y a usted le pegar%n un tiro.

Heco!r el uso de la pala!ra.

$9&ra para esto por lo que me necesita!a: $pregunt.

$Por supuesto $di"o la duquesa, ha!lando de nuevo en francs.

$6Pero usted no puede venir conmigo7 $exclam con indisimulado horror.

a duquesa alz la mirada. 'i" sus o"os en m por un momento, los a!ri y arquelas ce"as. uego sus la!ios se curvaron, se puso muy colorada y solt una alegre carca"ada.

$6>h, querido7 $ri la duquesa$. 6-u divertido es esto, monsieur (ycon7

$Pues a m me parece un asunto !astante serio $me atrev a o!servar$. De"andoaparte la cuestin de... si es correcto, ya sa!e 4fui muy apologtico en este punto5, esto esun poco arriesgado, 9no:

0ean as lo pensa!a, era evidente, ya que afirm solemnemente con la ca!eza sinde"ar de fumar.

a duquesa a*n rea+ en realidad, se seca!a los o"os con el pauelo.

$6-u opinin tiene de m7 $di"o al final$. #o no me voy con usted, monsieur(ycon.

>sara afirmar que mi rostro mostr alivio+ no s si de!o avergonzarme de ello. )icam!io de expresin, no o!stante, hizo que la duquesa se pusiera a rer de nuevo.

$8unca he visto a un hom!re con expresin tan satisfecha $di"o, animada y, sinem!argo, acechando en los pliegues de su voz 49o era en sus o"os:5, ha!a un leve reproche,una pizca de desafo. De pronto me sent menos satisfecho un cam!io de sentimiento queno voy a "ustificar.

$&ntonces, 9adnde va usted: $pregunt con gran curiosidad.

$


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la !aha, !a"o la colina de (vranches$. ( ese lugar es a donde voy. a )adre superiora esamiga ma y me dar% co!i"o.

a duquesa ha!la!a como si huyese de la guillotina. Permanec en silencio. asituacin se presenta!a !astante complicada para mis entendederas. Desafortunadamente,sin em!argo, a*n i!a a volverse m%s complicada+ porque la duquesa, volviendo a ha!larmeen ingls, puso la mano so!re mi !razo y di"o en su tono m%s halagador.

$# usted, mi querido monsieur (ycon, va a quedarse unos das en (vranches.

C68i una hora m%s7, hu!iera exclamado mi intelecto+ pero no somos todo intelecto ylo que en realidad di"e fue

$9Por qu:

$Por si $di"o la duquesa$ le necesito, monsieur (ycon.

$)e quedar, pues $di"e, afirmando con la ca!eza$, unos das en (vranches.

&st%!amos a media milla de la po!lacin. &l convento !rilla!a, resaltando su!lancura a la luz de la luna, a trescientas yardas a la izquierda. a duquesa, en ese instante,cogi su pequeo !olso, salt del coche gr%cilmente, me dio la mano para que se la !esara yse fue.

0ean no hizo comentario alguno, ya que los servidores de la condesa esta!an curadosde espanto. ampoco yo di"e nada. =ontinuamos el recorrido hacia (vranches.

(l principio, con 1ustave nos ha!amos hospedado en una pequea posada al pie dela colina. (hora quise que su!iramos a lo alto de la colina para hospedarme en el hotelprincipal. /n encargado sali corriendo, lanz una mirada de curiosidad al vehculo que metraa y !a" el equipa"e.

$@azme sa!er si tienes alg*n pro!lema por llegar tarde $le di"e a 0ean d%ndoleotros cinco francos.

&l hom!re asinti con la ca!eza y se march con el coche mientras masca!a la puntadel cigarro.

$9iene una ha!itacin: $pregunt, volvindome hacia el mozo.

$3 monsieur $di"o este, su"etando mi equipa"e con la mano.

$


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$)onsieur $di"o con esa incompara!le cortesa de los franceses$, usted puedevenir de donde le plazca.

$&sto $di"e entreg%ndole una menudencia$ es para que nos entendamosexcelentemente.

(cto seguido penetr en la salle K manger, donde casi ca en !razos de una muchachaextraordinariamente hermosa con quien top nada m%s entrar.

C@oy est% resultando un da realmente agitado, me di"e a m mismo.


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Captulo VI

Un atisbo de algo serio

Bncidentes como este suelen provocar en quien tiene imaginacin un sentimiento de

repentina y tmida familiaridad. &l encuentro fsico parece sim!olizar y prefigurar undestello del destino y esto posee peculiar intensidad cuando la mu"er resulta tan !ella comola muchacha que vi ante m.

$e pido disculpas, madame $di"e, haciendo un remolino con mi som!rero.

$# yo le pido perdn, monsieur $di"o la dama, con una inclinacin de ca!eza.

$8o he advertido lo precipitadamente que entra!a $o!serv.

$am!in ha sido est*pido por mi parte permanecer "usto "unto a la puerta $insisti la dama.

=onsciente de que estudia!a mi aspecto, no pude sino devolverle la galantera.

&ra muy alta, casi tanto como yo+ se le poda calificar de ma"estuosa m%s que dees!elta. &ra muy ru!ia, con grandes y l%nguidos o"os azules y, haciendo "uego, una nomenos l%nguida sonrisa. &n todos los aspectos contrasta!a grandemente con la duquesa de3aintA)aclou.

$9B!a usted a salir: $le di"e, su"etando la puerta.

@izo una inclinacin de ca!eza+ pero en ese momento otra mu"er, de avanzada edad,!astante ro!usta y, para decirlo con franqueza, de aspecto ordinario y poco atractivo, en laque hasta ese instante no ha!a reparado, llam desde la mesa a la que esta!a sentada en elotro extremo de la sala

$@emos de salir pronto, maana.

a "oven volvi la ca!eza con lentitud hacia quien le ha!la!a.

$-uerida madre $di"o$, no me gusta salir temprano. # esta po!lacin es


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interesante, nos lo ha dicho nuestro anfitrin.

$Por cierto quiere que lleguemos para d"euner.

$legaremos. 3aldremos por la tarde o maana temprano.

a "oven mir a su madre con un aire indiferente que me pareci extraamenteim!uido de aversin y desafo.

$6-uerida7 $grit la mu"er mayor, consternada$. 6)i querida )arie7

C&s como me la imagina!a, me di"e con satisfaccin.

)arie Delhasse $porque era ella, sin duda$ anduvo lentamente a travs de la sala yse sent "unto a su madre. #o tom una mesa cercana a la puerta+ al presentarse el sirviente

le orden una cena ligera. )arie tom una !otella que tena en la mesa y verti vino en suvaso+ aparentemente, ha!an estado cenando. =omenzaron a charlar en voz !a"a. =uandome sirvieron la cena, me concentr en la misma. Pocos instantes despus escuch a )ariedecir en su caracterstica, indolente manera

$8o estoy segura de que de!amos ir. &ntre nous, l me a!urre.

)ir con disimulo a madame Delhasse. &n su rostro apareca escrita la consternaciny, "unto a ello, la sospecha. Dirigi a su hi"a una r%pida mirada de reo"o y frunci las ce"as.(l menos que yo no la oyera no hu!o, con todo, amonestacin alguna por su parte. 3elevant, se envolvi en su chal y se encamin hacia la puerta. #o me levant enseguida aa!rirla y la mu"er sali. )arie acerc una silla al fuego y se sent, de espaldas a m, acalentarse los pies, pues, aunque veraniega, la noche empeza!a a refrescar. ermin micena. &n el relo" sonaron las once y media. 3ofoqu un !ostezo. 'umara un cigarrillo y a lacama, esto es lo que tena previsto.

Pero entonces )arie Delhasse volvi la ca!eza hacia m.

$8o de!e $me di"o$ de"ar, por mi causa, de fumar su cigarrillo. De!era de"arleen paz e irme a la cama, pero me cuesta dormir y en la ha!itacin el fuego no est%encendido.

3e lo agradec y me acerqu al hogar de la sala. &lla mir a las llamas, meditativa. (l

poco, alz la mirada.

$'ume, monsieur $me di"o, imperiosa pero l%nguidamente.

e o!edec, y me la quede mirando, admirando su !elleza estatuaria.

$9@a pasado el da aqu: $me di"o volviendo a mirar las llamas.

$&n el vecindario $di"e yo, discreta y vagamente.


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$9# se lo ha pasado !ien:

$6>h, ciertamente7 8o he tenido pro!lemas con eso.

$&st%, por supuesto $di"o con fatiga$, el monte 3aint )ichel. Pero 9puedeimaginarse a alguien viviendo siempre en estos para"es:

$3i el destino lo propicia... $empec a decir.

$3, claro, supongo $me interrumpi ella.

$9


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tiempo durante el prolongado silencio. &l *ltimo acto de la comedia de ese da parecapropiciar una escena m%s seria.

$9Por qu le hace a un extrao una pregunta cmo esa: $di"e al final, queriendoexpresar lo que me confunda.

$9# a quin se lo voy a preguntar: )e gusta su cara y no lo digo porque seaatractiva. 9&s usted ingls, monsieur:

$3, soy ingls. )i nom!re es 1il!ert (ycon.

$6(ycon, (ycon7 =uesta pronunciarlo como usted lo hace.

3us pensamientos la reclamaron de nuevo. #o arro" mi cigarrillo al fuego ypermanec aguardando a ver con qu me saldra. Pero pareci no tener m%s que decir, pues

se levant y me dio la mano.

$9)e permite shaJe hands 4estrecharle la mano5: $me di"o en ingls, sonriendo denuevo.

)e apresur a hacer lo que me peda. )arie Delhasse fue, luego, hacia la puerta.

$al vez $di"o$ le ver maana por la maana.

$&star aqu $y luego aad$. 8o he podido evitar orla ha!lar de que semarcha!a.

3e qued quieta en medio de la sala+ a!ri los la!ios para ha!lar pero los cerr denuevo y aca! por no decir nada m%s que

$3, he ha!lado de ello. )i madre lo desea. 2uenas noches, monsieur (ycon.

e dese !uenas noches y ella se fue despacio hacia la puerta, que cerr nada m%ssali.


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encontra!a solo, cara a cara con un asunto al que de!a enfrentarme. )i promesa a laduquesa me o!liga!a+ pero aunque no hu!iese existido tal o!ligacin, dudo que me hu!iesemarchado, porque mi inters no resida solo en la duquesa.

om el caf en la ha!itacin y, luego, tras ponerme el som!rero, !a" a dar unpaseo. )ientras el duque no apareciera por (vranches, podra mostrar mi rostro sinpro!lemas. 98o esta!a ocupado, l, disponindolo todo para sus huspedes: =ruc laentrada del hotel.

(ll encontr a )arie Delhasse+ delante de ella se encontra!a un rechoncho su"eto,!ien vestido y con patillas. (l pasar me quit el som!rero. &l hom!re pareci no advertir mipresencia aunque sus o"os se detuvieron en m por un instante. Pas lo m%s r%pido que pudeporque tem que fuera afleur y no quera que le diera al duque una descripcin deldesconocido ca!allero que ha!a llegado a (vranches. 3in em!argo, al pasar, tuve tiempode or la lenta y musical voz de )arie

$@oy no voy a ir.

-ued muy satisfecho por ello y continu con !uen %nimo mi ronda por la po!lacin.(l poco, tras media hora de paseo, me encontr frente a la iglesia, en la parte trasera delhotel. # all esta!a )arie Delhasse, contemplando la fachada.

ras alzar el som!rero fui hacia ella, su ama!ilidad de la noche anterior me diocora"e.

$&spero que se quede todo el da de hoy.

$8o lo s $di"o sonriendo aunque no con gran alegra$. =reo que me presionar%nmucho para que marche esta tarde $di"o.

#o di"e, aparentemente sin motivo, a ver qu poda sacar

$9a va a venir a !uscar alguien: $pregunt con irona.

$Pro!a!lemente. 3a!en que estoy aqu.

$9Pero es o!ligado que vaya:

)ir al suelo y no respondi.

$-uiz% $continu$ l o ella no venga. Puede que l est muy ocupado.

$9Para venir a !uscarme: $di"o ella con el primer toque de coquetera que notilumina!a sus o"os.

$3era posi!le que eso sucediese $afirm.


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&mpezamos a caminar "untos hacia el extremo de la plaza que se a!ra frente a laiglesia. &l convento apareci ante nuestra vista cuando alcanzamos la pendiente de lacolina.

$6-u paz se respira7 $di"o$. )e pregunto si ser% agrada!le residir ah.

Precisamente me esta!a preguntando en ese momento cmo se sentira la duquesa de3aintA)aclou, cuando un fuerte grito de advertencia nos so!resalt. 8os hall%!amos en el!orde de la carretera cuando un ca!allo se acerc a trote r%pido y, al llegar ante nosotros,de!i ser enrgicamente refrenado. Para mi asom!ro era el vie"o 0ean, el criado de laduquesa, quien lo monta!a. =uando me vio, una amplia sonrisa se di!u" en su curtida cara.

$=asi le aplasto $di"o$. 8o tiene usted odo.

0ean me hizo, entonces, un guio, insinuando que )arie Delhasse y yo nos de!amos

hallar a!sortos el uno en el otro.

a diplomacia de ha!er fingido que no nos conocamos se esfum ante la intromisinde 0ean. rat de salvar la situacin y pregunt

$9-u te trae aqu:

)arie esta!a a unos de pasos de nosotros, contempl%ndonos.

$


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e hice la pregunta tal como se me indica!a.

$8o lo hu!iera imaginado me"or de ha!erlo sa!ido $di"o 0ean+ una r%pida miradade )arie Delhasse me indic que sospecha!a que yo sa!a algo.

$9# qu ocurrir%, 0ean: $di"e.

$Dios lo sa!e $di"o el hom!re, encogindose de hom!ros+ luego, recordando miscinco francos, di"o ama!lemente$ &spero que se encuentre !ien, monsieur.

$@asta ahora s, gracias, 0ean $di"e.

Desvi, entonces, la mirada hacia )arie y sus arrugados la!ios se curvaron. 3uexpresin anuncia!a i!a a decir algo desafortunado.

$6(dis7 $le di"e enseguida, para salvar la situacin.0ean posea cierto grado de inteligencia. 3e a!stuvo de decir nada, pero su socarrona

mirada de soslayo fue suficientemente expresiva. (pret los talones contra los costados delca!allo y se fue, al trote, de vuelta por donde ha!a venido. 6Poda "urar que ha!a estado en(vranches, por lo que se i!a satisfecho7

)arie Delhasse se volvi hacia m y pregunt con altivez.

$9-u significa esto: 9-u sa!e usted del duque y la duquesa de 3aintA)aclou:

$Podra devolverle la pregunta $le di"e mir%ndole a la cara.

$9)e va a responder: $di"o ella con el rostro de pronto enro"ecido.

$8o, mademoiselle Delhasse, no lo har $le respond.

$9-u significa la Causencia de la duquesa de 3aintA)aclou a la que ese hom!rese refera con tanto nfasis:

&ntonces le di"e con voz !a"a y lenta

$9-uines son los amigos a los cuales se dispone a visitar:

$9# quin es usted: $grit ella$. 9# qu sa!e y qu le concierne:

8o ha!a, ahora, rastro de indolencia ni de falta de %nimo en sus modos. )einterroga!a con imperiosa indignacin.

$8o responder una sola pala!ra $di"e$. Pero me pregunt, la noche pasada, porlas cosas que sa!a de usted.


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$9# !ien: $di"o, apretando los la!ios.

)e mantuve en silencio y, acto seguido, ella prosigui con pasin.

$9-uin poda ha!erse imaginado que usted me i!a a insultar: 9&s su costum!reinsultar a las mu"eres:

$8o *nicamente ma, seg*n parece $di"e desafiando su mirada.

$9-u quiere decir, monsieur:

$9e ha invitado madame de 3aintA)aclou:

3e ech atr%s como si la hu!iese golpeado y yo me sent como si lo hu!iera hecho.)e mir un momento con los la!ios a!iertos. uego, sin decir una pala!ra o hacer un gesto,

se fue lentamente en direccin al hotel.Por mi parte, satisfecho de tener algo m%s con que ocupar mis pensamientos, me

encamin por el sendero que desciende por la colina y conduce a la carretera que lleva alconvento, puesto que tena una o dos cosas que decirle a la duquesa. # sin em!argo no erasolo en la duquesa en quien pensa!a mientras camina!a. am!in tena en mente elindignado orgullo con que )arie Delhasse me ha!a interrogado y la vergFenza en sus o"osa mi pregunta. a invitacin del duque de 3aintA)aclou pareca producir tanta inquietud asu husped como a su propia mu"er. Pero una cosa me inquiet y a la vez, de alg*n modo,me agrad el que pareciese convencida de que la duquesa i!a a estar en casa.

C62ah7, exclam para m mismo. C3i no fuese tan guapa no pensaras as.

# continu mi caminata malhumorado.


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Captulo VII

Escuchado tras la puerta

ras una caminata de veinte minutos, llegu al !osque que media!a entre la carretera

y el convento. )e di prisa+ pronto sal de entre los %r!oles y me hall ante una vertienteformada por un prado de hier!a gruesa donde pasta!an un par de vacas y media docena deca!ras+ una hilera de manzanos achaparrados !ordea!a el prado y en el otro extremo sealza!an los !lancos muros del convento+ a mi izquierda esta!a el cementerio, en cuyo arcode entrada apareca escrito C)ors "anua vitae. =amin so!re la hier!a y toqu la campana,cuyo eco se propag repetidamente. 8adie vino a a!rir. oqu una segunda vez con mayornfasis. ras otro intervalo, la puerta se entrea!ri cautelosamente, y apareci una "ovenmu"er. &ra una novicia de cara redonda, me"illas coloradas, con un a"ustado gorro !lanco enla ca!eza, un gran cuello !lanco extendido so!re los hom!ros y una t*nica negra. =uandome vio solt una exclamacin de alarma y trat de cerrar la puerta de nuevo. Pero introdu"eoportunamente el pie para impedirlo.

$e ruego me perdone $di"e cortsmente$, pero no me ha entendido. Deseoentrar.

&lla me escrut a travs de la rendi"a que mi pie de"a!a a!ierta.

$&s imposi!le $o!"et$. 8uestro reglamento no lo permite. &n realidad, nisiquiera de!era ha!larle. e ruego que aparte el pie.

$Pero entonces cerrar% la puerta.

8o lo pudo negar.

$8o pretendo hacer dao $protest.

$as maas del mal son infinitas $indic la pequea mon"a.

$-uiero ver a la madre superiora $di"e$. 9Puede anunciarme a ella:

> pasos. De pronto la puerta se a!ri completamente y una ro!usta y ma"estuosaanciana apareci ante m con las ce"as fruncidas.


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$)adame $di"e$ le ruego escuche lo que he de decirle antes de tomarme poralguien intempestivo y mal educado.

$9-u es lo que desea, monsieur:

$3e lo quiero decir a usted sola, madame.

$8o le puedo de"ar entrar $di"o ella con decisin.

Por un momento no supe qu hacer. &ntonces se me ocurri una sencilla solucin.

$#o no puedo entrar pero s usted salir $suger.

)e mir, dudosa, un minuto. uego sali cerrando cuidadosamente la puerta trasella. =ontempl el pequeo rostro de la novicia y not un punto de decepcin en l. a

anciana y yo empezamos a caminar por el sendero que lleva!a al cementerio.$8o s si ha odo ha!lar de m $di"e$. )e llamo (ycon.

$=reo que s, monsieur (ycon. # de!o decirle que tiene mucho que reprocharse. @ainducido a esa inocente y atolondrada criatura a comportarse deplora!lemente.

462ien hecho, duquesa7, pens para m, pero, por supuesto, no la i!a a traicionar.5

$amento profundamente mi poca consideracin $di"e muy serio$. 3in em!argohe de decirle que la actual situacin de la duquesa no es por culpa de mi... 9de!o llamarlamala conducta:, sino por la de su marido. #o no invit a...

$68o mencione su nom!re7 $me interrumpi la )adre superiora con horror.

@a!amos llegado a la puerta con el arco+ y all se encontra!a la persona m%sencantadoramente inapropiada para estar en un cementerio la duquesa en persona, luciendolozana como una margarita y tan feliz como un nio con "uguetes nuevos.


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halla!a en el hotel de (vranches y ha!a declinado continuar hoy su via"e.

$9&st% en el hotel: 9a ha visto usted: $me interrumpi$. 9=mo es ella:

$&xtremadamente hermosa $di"e$. (dem%s, me siento inclinado a simpatizar conella.

a )adre superiora a!ri los la!ios para repro!arme, sin duda+ pero la duquesa se leadelant.

$93impatiza con ella: al vez me de"e usted para irse con ella $exclam de unmodo indignado que creo que en parte era fingido. =iertamente, la duquesa no pareca muyalterada. Pero por lo que ha!a dicho, la anciana se vio o!ligada a preguntar algo

$9-u es para ti monsieur (ycon, nia: $di"o con cierta solemnidad$. 8o de!iera

representar nada para ti, nia ma.

$2ien, lo que deseo es que no tenga nada que ver con mademoiselle Delhasse $di"o la duquesa con un mohn hacia su protectora y una mirada hacia m.

$)ademoiselle Delhasse est% muy enfadada conmigo en este momento $di"e.

$>h, 9por qu: $pregunt con avidez la duquesa.

$Porque le di"e que crea que de!a aguardar una invitacin por parte de usted antesde acudir a la casa.

$Pues de!er% aguardar hasta el Da del 0uicio 'inal $exclam la duquesa.

$Decir eso no es apropiado $hizo notar la )adre superiora con sequedad.

De repente, sin pretexto o excusa, la duquesa se dio la vuelta y se fue r%pidamente $o me"or dicho corri$ por el sendero que rodea!a el grupo de tum!as. (ntes me ha!amirado como invit%ndome a seguirla y yo fui tras ella igual de r%pido. > un suspiro dedesesperacin por parte de la po!re anciana, pues le era imposi!le alcanzarnos. a audazescapada dio resultado.

$(hora podemos ha!lar $di"o la duquesa.

# claro que ha!l, solt%ndome la siguiente sorprendente afirmacin

$=reo que se ha enamorado usted de mademoiselle Delhasse. # si es as, le retiro lapala!ra para siempre.

$3i lo hace $di"e$, de!er aceptarlo al igual que otras desventa"as de esteem!rollo.


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$&so es muy poco delicado por su parte $seal la duquesa.

$/na expresin en condicional nunca es indelicada $di"e, mintiendo.

$os hom!res siempre han de estar enamorados de alguien $di"o, resentida.

$=iertamente, es casi una necesidad $le di la razn.

a duquesa me lanz una mirada. -uiz% yo tam!in lo hice+ espero que no.

$>h, !ien $di"o$. 9@a!lamos, me"or, de negocios:

$3, ser% mucho me"or $di"e, !ien consciente.

$9-u de!o hacer: $pregunt, volviendo a sus m%s afa!les maneras.

$8ada $respond.

1eneralmente es el conse"o m%s seguro para una mu"er, de modo a!soluto.

$9&st% satisfecho de la situacin: -uiz% preferira estar en el hotel.

$98o sera una persona algo complicada si no estuviese satisfecho:

$3 que quiere irritarme, pero no lo va a lograr, monsieur (ycon. 3uponga que mimarido viene a (vranches y le ve a usted.

$#a he pensado en ello.

$# !ien, 9qu ha decidido:

$8o preocuparme hasta que ello suceda. Pero 9no ser% usted y no yo quien de!apadecer:

$( m no me har% nada $di"o la duquesa$. &n primer lugar porque no quiereesc%ndalos. # en segundo, porque no me ama. 3i viene es para verla a ella.

C&lla era, por supuesto, )arie Delhasse. a duquesa le otorga!a la ominosadistincin de un simple pronom!re.

$3eguramente el duque hallar% la forma de que vuelva usted a casa $exclam.

$3i me hu!iera encontrado antes de llegar aqu, tal vez hu!iera podido. Pero ahorade!er% aguardar, porque si viene aqu y me reclama, todo el mundo se va a enterar.

ena razn+ la duquesa era una astuta maquinadora.


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$De hecho $di"e$, lo me"or sera regresar al hotel.

$&so no parece disgustarle mucho.

$2ueno aqu no puedo quedarme, 9verdad: $di"e mirando hacia el convento$.3era algo irregular, ya sa!e.

$Podra ir a otro hotel $sugiri ella.

$)e parece m%s importante estar al tanto de lo que sucede en el hotel en que meencuentro $di"e con seriedad, pues no tena intencin de cam!iar de hospeda"e.

$&s usted el m%s... $empez a decir la duquesa.

Pero su escena actoral de!i interrumpirse. enta pero segura, la )adre superiora

ha!a llegado hasta nosotros.$(dis, monsieur (ycon $di"o.

&sta!a seguro de que de!a servirse admira!lemente de las mon"as.

$6(dieu7 $di"e yo, como si fuese lo *nico que se pudiese decir.

$6(dieu7 $di"o la duquesa, como queriendo decir otra cosa.

# en un instante, me vi atravesando la puerta y cruzando el prado.

a duquesa corri, entonces, hacia m y grit

$6Hecuerde venir de nuevo maana7

&n el recorrido emple cerca de dos horas. 3on la una en el relo" de la torre de laiglesia cuando me halla!a ascendiendo lentamente la colina, creyendo 4de!o admitirlo5 queel resto del da i!a a ser !astante a!urrido. =uando llegu a la cima, sin em!argo, meencontr con madame Delhasse, que en apariencia da!a un paseo. )e dirigi unainclinacin leve y fra. )e alegr de su aire distante 4pues no me gust su expresin5, ledevolv el saludo y prosegu mi camino hacia el hotel. &n el porche se encontra!a un mozo,el mismo que ha!a estado pendiente de mis movimientos la noche anterior. an pronto me

vio, vino a mi encuentro por la carretera.$9=onoce usted a las seoras de las ha!itaciones del primer piso: $me pregunt

con aire misterioso.

$as he conocido ahora, desde que resido aqu $di"e.

)e pareci que duda!a de m+ quiz% los sirvientes estn ha!ituados a poner en duda,por sistema, lo que ven.


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$6(h7 $di"o$. 9&ntonces no le interesa sa!er que un ca!allero ha venido a visitara la "oven madame:

3aqu diez francos del !olsillo.

$3, me interesa $di"e, entreg%ndole el dinero$. 9De quin se trata:

$Del duque de 3aintA)aclou $me susurr misterioso.

$93e ha ido ya: $pregunt con cierta alarma. 8o desea!a encontr%rmelo.

$@ace media hora, monsieur.

$9@a visitado a las dos seoras:

$8o, solo a la "oven. )adame sali nada m%s llegar l y a*n no ha vuelto.$9# dnde est% mademoiselle:

$&n su ha!itacin.

Pensando en que no ha!a o!tenido mucho por mis diez francos salvo la !uenavoluntad del hom!re $puesto que no me ha!a dicho m%s que lo que espera!a escuchar$,me i!a ya a marchar cuando aadi, en un tono que me pareci m%s significativo que lapropia pregunta

$93e dirige a su ha!itacin, monsieur:

$&n efecto $di"e.

$Permtame indicarle el camino $di"o, aunque que me acompaase me pareca deltodo innecesario.

=on l delante, llegamos al primer piso. &n el otro extremo, a unos pocos metros, sehalla!a la puerta de la ha!itacin en que sa!a que esta!a )arie Delhasse.

$(delante $di"e.

$&n un instante, monsieur $respondi.

&ntonces puso la mano en actitud de quien se propone escuchar.

$/no no de!era escuchar $susurr, excus%ndose$. 6Pero es tan extrao7 =reoque si usted conociera a mademoiselle... 6escuche7

3 que no de!iera ha!erlo hecho, pero el misterio de la actitud del individuo y sutalante me incitaron a ello y me detuve a or.


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De detr%s de la puerta lleg a nuestros alertas odos el sollozo de una mu"er. )ir almozo a los o"os los tena clavados en m. De nuevo escuch el sollozo, apagado, r%pido,convulso. Prest toda la atencin posi!le. 8o sa!a qu hacer. =ontinuar escaleras arri!a

hasta mi ha!itacin y pensar en mis propios asuntos pareca lo m%s simple, f%cil yadecuado. Pero me sent como si tuviera los pies pegados a los ta!lones del suelo. 8o podamoverme con ese sollozo resonando en mis odos no me lo i!a a poder quitar de la ca!ezasi marcha!a. )ir de nuevo al criado. &ra un tipo de aspecto !onachn y de sus o"osempezaron a saltar l%grimas.

$6)ademoiselle es tan guapa7 $susurr.

$9# a usted qu dia!los le importa: $di"e, en tono !a"o pero enrgico.

$8ada $di"o$. 3olo quera de"ar el asunto en sus manos, monsieur $y sin decirm%s, me dio la espalda y se fue escaleras a!a"o.

&sta!a !ien que de"ara el asunto en mis manos+ pero fuera de la f%cil, simple,adecuada e imposi!le actitud de que he ha!lado, 9qu poda hacer yo:

2ien, lo que hice fue esto me acerqu a la puerta de la ha!itacin y llamsuavemente. 8o hu!o respuesta. &l sollozo prosigui. )e ha!a comportado groseramentecon la muchacha esa maana, pens mientras llama!a a la puerta.

$6Dios mo7, 9qu le de!e ocurrir: $musit.

# entonces a!r la puerta suavemente.

)arie Delhasse se halla!a sentada en una silla la ca!eza reposa!a entre sus manos,so!re la mesa, y su cuerpo se agita!a por el sollozo.

3o!re la mesa, no le"os de su ca!ello dorado, ha!a una ca"ita de cuero cuadrada. )equed en el um!ral contemplando la escena.

(hora ya no crea que el resto del da fuese a ser a!urrido+ pareca que meaguarda!an tareas m%s arduas que el mero soportar cierto ligero a!urrimiento.


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Captulo VIII

Hallo lo que me importa

Por un instante me qued inmvil y dese que el =ielo no me hu!iese permitido a!rir

la puerta+ porque no tena excusa alguna para mi intrusin y ninguna razn para apartarmede mis propios asuntos. &l impulso que me ha!a llevado a ello se agota!a en el mismohecho de ha!erlo realizado. a retirada fue, entonces, mi *nico o!"etivo y, retrocediendo,cerr la puerta tras de m. Pero, como quien dice, agarr la 'ortuna con la mano, puesto quela mani"a de la puerta rechin sonoramente cuando la su"et. 3indome imposi!le escapar,me qued quieto. )arie Delhasse alz la mirada, so!resaltada.

$9-uin es: $grit en tono asustado, apretando el pauelo en los o"os.

8o pude evitarlo fui hacia ella y le di"e

$)e avergFenza decirle que soy yo.

)ereca y aguarda!a un estallido de indignacin. )i sorpresa fue grande cuando lachica se reclin en su asiento con un suspiro de alivio. Bncmodo, continu en el um!ral dela ha!itacin.

$9-u desea: 9Por qu ha entrado: $pregunt, pero m%s por parecerle extrao quepor enfado.

$B!a hacia mi cuarto por las escaleras y me pareci que ocurra algo.

$9anto ruido haca: $di"o$. 3oy mala como un nio+ pero los nios lloran

porque no de!ieran hacer ciertas cosas y yo porque de!era hacerlas.Pareci que quera conversar, por lo que cerr la puerta.

$)i intrusin es de lo m%s impertinente $di"e$. iene todo el derecho amolestarse.

$6>h7, 9tengo derecho a molestarme por nada: 9Pensa!a usted eso esta maana: $pregunt, impetuosa.


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$a maana $o!serv$ es un momento del da muy impulsivo para m.

e pido perdn por lo que le di"e.

$9(*n piensa lo mismo: $replic con rapidez.

$&so no excusa el ha!erlo dicho $repliqu$. 8o era asunto mo.

$8o es asunto de nadie, supongo, excepto mo.

$( menos que usted lo permita $di"e, no pudiendo resistirme a la desolacin quesus pala!ras y tono implica!an.

)e mir con curiosidad.

$8o entiendo $di"o en un malhumorado y fatigado tono$ cmo se ha venido amezclar usted en todo esto.

$&s una larga historia $y luego prosegu, a!rupto$ /sted pensa!a que era otroquien ha!a entrado.

$9# si fuera as:

$(lguien que regresa!a $di"e yendo hacia la mesa ante la que esta!a.

$9-uin: $pregunt, pero de un modo cansado, no desafiante como por lamaana.

$)adame Delhasse quiz%, o tal vez el duque de 3aintA)aclou.

)arie Delhasse no respondi. Permaneci con los codos so!re la mesa y el mentndescansando so!re las manos entrelazadas+ tena los p%rpados semicerrados y no pude verla expresin de su mirada que, sin em!argo, diriga hacia m.

$2ien, !ien $continu$, no es preciso que ha!lemos de ello. 9@a ido de compras:$# seal la ca"a de cuero ro"a.

Durante medio minuto la muchacha permaneci sentada sin ha!lar ni moverse.uego di"o, en respuesta a mi pregunta, que no poda o!viar

$3, he estado regateando por ah.

$9# ese es el resultado:

De nuevo hizo una pausa antes de contestar

$&so $di"o$ es una !agatela o!tenida como propina.


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$9Para cerrar el regateo: $suger.

$3, monsieur (ycon, para cerrar el regateo.

$93e me concede mirar:

$=reo que todo le puede ser concedido. 3e extraara de no ser as.

&ntend que era una o!servacin sarc%stica a mi costa pero no me import+ preferaque me fustigase a verla sentada sollozando.

$&ntonces, 9puedo a!rir la ca"a:

$&st% la llave puesta.

om la ca"a y me sent en una silla. 1ir la pequea llave. /na mirada r%pida memostr que los p%rpados de )arie se ha!an alzado y tena los o"os fi"os en mi cara.

(!r la ca"a+ su interior contena, so!re el terciopelo azul, un !rillante y magnficocollar de diamantes+ el colgante lo constitua una gran piedra y fue en esa piedra donde sefi" mi mirada. a tom y la mir de cerca+ luego examin el collar. os o"os de )ariesiguieron cada uno de mis gestos.

$9e gustan estas !arati"as: $pregunt.

$3 $di"o en ese tono por el cual el Cs vale por mil expresiones de xtasis y lasprofundidades de sus o"os refle"aron el fuego de las piedras y relum!raron.

$Pero no sa!e nada de ellas $prosegu con calma.

$3upongo que son valiosas $di"o, haciendo un forzado gesto de nonchalance.

$3, tienen alg*n valor $conced sonriendo$. Pero me refera a su historia.

$@an sido compradas, supongo. =ompradas y vendidas.

$3ucede que s un poco de eso. De hecho, tengo un li!ro en casa donde hay unailustracin en la que aparece este collar. 3e le conoce por el C=ollar del =ardenal. @ar%unos treinta aos las piedras pertenecan al cardenal (rmand de 3aintA)aclou, (rzo!ispode =aen. &l collar fue confeccionado por e!eau de Pars, por orden del cardenal, que selas dio a su so!rino, nuestro amigo el duque. Desde su matrimonio, la duquesa ha usado elcollar, por supuesto.

odo esto lo di"e con un tono de veraz seriedad.

$9-uiere decir, entonces, que pertenecen a la duquesa: $pregunt )arie alzandode repente los o"os.


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$8o lo s. De!iera creer que no, de ser estricto $di"e, impasi!le.

)arie Delhasse alargo los !razos y toc las piedras con los dedos.

$&lla las ha!r% llevado, 9verdad:

$&n efecto.

$# yo, que supona que las aca!a!a de comprar... $di"o, apartando los dedos de la"oya.

$3e precisara una !uena suma para comprar toda la pieza $o!serv.

$9=u%nto:

$6>h, no s7 &l mercado vara tanto... tal vez un milln de francos, tal vez m%s. 8ose puede decir lo que mucha gente pagara por ello.

$8o, es difcil de imaginar lo que la gente pagara por esto $afirm )arie tocandode nuevo el collar.

)e reclin en mi asiento. @u!o una pausa. &ntonces sus o"os se encontraron con losmos de nuevo y exclam, desafiante

$6>h, usted sa!e muy !ien lo que significa7 9( qu viene fingir:

$3, s lo que significa $di"e$. 9=u%ndo ha prometido ir all:

$)aana $respondi.

$9( causa de esto: $seal el collar.

$( causa de... 9=mo se atreve a preguntarme algo as:

)e levante del asiento e hice una leve reverencia.

$93e marcha: $pregunt, los dedos a*n so!re el collar y sus o"os esquivando losmos.

$engo el honor $di"e$ de gozar de la amistad de la duquesa de 3aintA)aclou.

$9# eso le impide disfrutar de la ma:

(sent con una reverencia. &lla esta!a sentada a la mesa, quieta, la !ar!illa so!re lasmanos. B!a a salir cuando ca en la cuenta de que de"arla sola no era lo me"or, aunquepudiera ser lo m%s f%cil. Detuve mis pasos.


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$2ien $pregunt ella$. 9@a finalizado la visita:

# de pronto a!ri las manos y escondi el rostro entre ellas. &ra un extrao final parauna charla que ha!a empezado con tanta frialdad.

$6Dios 3anto, no vaya7 $di"e inclin%ndome hacia ella.

$9-u le sucede: 9-u les sucede a todos: $di"o entrea!riendo los dedos.

$3u madre... $empec a decir.

(part las manos de la cara y ri. 'ue una risa como espero no or "am%s otra igual.uego, pregunt

$9Por qu ella no quiere que vaya a su casa: 9Por qu se ha marchado: 9(caso no

soy digna de tocarla:$3i es ella quien est% equivocada, usted est% haciendo lo m%s conveniente para darle

la razn.

$3i todos te creen mala, me"or aceptarlo y vivir en paz.

$(ceptar "oyas $aad$, 9no le parece una perversidad:

$8o $me di"o mir%ndome a la cara con fi"eza$. 9Por qu tiene que ser perverso:

$8o, claro, en cierto sentido $di"e, aunque en mi interior pensa!a firmemente que

ella no de!a ir a la casa.

&ntonces )arie di"o en voz muy !a"a

$;l no me de"a en paz. 6(h7, hace que todos piensen...

$D"eles que piensen $di"e.

$Pero si todos lo piensan...

$6>h, venga, qu tontera7 $di"e.

$/sted lo sa!e. 9-u mu"er honesta querra tener algo que ver conmigo o quhom!re honesto:

8ada tena que decir al respecto, as que insist

$8o vaya, de todos modos.

@a!l en voz muy !a"a al responderme


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$8o puedo rehusar. ;l vendr% de nuevo y mi madre...

$(pl%celo un da o dos $di"e$. # no acepte el regalo.

)e mir, creo, con asom!ro

$9Healmente le importa: $me pregunt en voz muy !a"a.

(sent con la ca!eza. )e importa!a, de alg*n modo.

$9)e ayudar% si no voy:

(sent de nuevo.

$8o me atrevo a rehusar. )i madre y l...

3e interrumpi.

$(lgo que tiene que ver con usted alguna vi!racin ntima $suger.

3u rostro mostr un es!ozo de sonrisa.

$93e quedar%: $pregunt.

De!a hacerlo, en cualquier caso. al vez de!a ha!rselo dicho con franqueza y noha!erle hecho creer lo que no era+ pero todo cuanto hice fue asentir con la ca!eza.

$3i se lo pido, 9podr% hacer de intermediario entre el duque y yo:

&sperando que mi peripecia con el duque no llegase a conocerse, di"e tan solo

$6Desde luego7 @ar lo que pueda, por supuesto.

8o me dio las gracias+ solo me mir de nuevo. uego o!serv

$)i madre volver% pronto.

$Pues me"or ser% que me marche.

$3.

'ui hacia la mesa de nuevo y puse la mano so!re la ca"a que contena el =ollar del=ardenal.

$9# esto: $pregunt con indiferencia.

$9De!era devolverlo:


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$98o quiere hacerlo:

$3, pero 9servira de algo: )e gusta mucho. a devolucin la interpretar% l comoque no quiero ir. 6# no quiero que piense eso7

3olt un tiro al azar diciendo, mientras acaricia!a la ca"a

$3era algo magnfico por su parte que se lo entregase a la duquesa.

$9( la duquesa: $di"o, con asom!ro manifiesto.

$


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y, apartando la mirada, me lo entreg.

$9Para la duquesa: $pregunt.

$3, para la duquesa $di"o )arie, sin mirarme.

om la ca"ita y me la met en el hondo !olsillo de la chaqueta de caza que lleva!a.

$6h, t*, vie"a v!ora7, murmur en ingls, autom%ticamente.

$9Pardon, monsieur: $di"o madame Delhasse.

$Disc*lpeme+ ha!la!a para m mismo, un mal h%!ito $y a la vez que le haca unaprofunda reverencia, siento decir que sonre malvolamente. a anciana me contempl,sacudi ligeramente la ca!eza y pas de largo.

3al a la luz del sol, sil!ando con alegra. )i !uen amigo, el mozo del hotel, esta!a"unto a la puerta. 3us o"os se mostra!an inquisitivos.

$&lla est% mucho me"or $di"e tranquilizadoramente y continu mi camino, todavasil!ando con alegra.

Healmente esta!a contento con mi representacin. ( los hom!res les gusta pensarque entienden a las mu"eres. ena la impresin de que me ha!a pro!ado que posea unconocimiento ca!al de tan intrincado asunto. De hecho, se me ha dicho m%s de una vez quemi plan fue insensato. al vez lo fuera+ pero mi intencin era apartar ese peligroso collar de

las manos angustiadas de la po!re )arie. &s necesario que a uno no le importe ser un tantoinsensato una o dos veces en la vida, siempre que ello le lleve a hacer alg*n !ien. &n eseinstante, sin em!argo, no precisa!a de tal "ustificacin.


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Captulo IX

Un insulto sin parangn

(traves, medita!undo, la plaza frente a la iglesia !a"o el claro sol de la tarde. &ran

las cuatro y media. a po!lacin apareca llena de !ullicio, ya que la gente, tras la "ornadade tra!a"o, sala a distraerse y llena!a calles y cafs. 3ent que tam!in yo ha!acompletado una "ornada de tra!a"o, aunque mi tarea no estara enteramente completa hastaque no hu!iera puesto el preciado tesoro que transporta!a a salvo en manos de la duquesa.

(*n me queda!a tiempo, as que me sent en un !ar y ped un caf. )ientras me lotraan mis pensamientos se centraron en )arie Delhasse. Duda!a de si me disgusta!a porha!er sido presa de la tentacin o me gusta!a por ha!erse resistido a ella+ de cualquiermodo, esta!a satisfecho de ha!er podido ayudarla un poco. 3i poda, ahora, asimismo,persuadirla de que a!andonara (vranches, ha!ra hecho cuando se espera!a de m. 3i apartir de aqu el duque la persegua, ya sera cosa suya. (s cavila!a yo mientras toma!asor!os de caf+ y entonces record que la duquesa me ha!a dicho que me quera verpronto. 93era cierto: &ra necesario, en todo caso, que la viera, le apeteciese o no. 8o podaconservar los diamantes toda la noche. -uiz% ella querra aceptarlos.

$6


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$>h, lo ignoro monsieur. Hesulta muy "uicioso llevar encima uno de esos pequeosamigos. /no nunca sa!e.

$9&n caso de disputa con otro ca!allero:

$>h, no las solemos vender para duelos, monsieur.

$9(h no:

$3on simples pistolas de !olsillo, para llevarlas de noche por la calle+ y vendemosmuchas a ca!alleros que, por sus actividades, de!en transportar grandes sumas de dinero opagars. e dan seguridad, monsieur, aunque se sepa que no va a ser preciso usarlas.

$9# ese ca!allero que ha comprado dos: 9-uin era:

$8o lo s monsieur. 8o me dio su nom!re.$9# no lo conoce de vista:

$8o monsieur+ tal vez sea extran"ero. Pero en verdad que yo casi lo soy tam!inapenas hago negocio aqu.

$98o hay mucha clientela: $pregunt examinando la pistola.

$8o, los clientes no a!undan, monsieur $contest el hom!re, con pesar$. 9)ede"a que le venda una:

&ra verdad que por el asunto que me ocupa!a lleva!a encima algo de valor, peroespera!a que no fuera a ser por mucho tiempo,

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Hope, Anthony - El Collar Del Cardenal