Upload
tecnicaturas-red
View
224
Download
2
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Revista Docente de las Tecnicaturas del Instituto Dr. Bernardo Houssay de Capilla del Monte
Citation preview
C A P I L L A D E L M O N T E - A R G E N T I N A
2011
Houssay Digit@l
Revista Docente
Año 1 – Número 1
INSTITUTO SUPERIOR “DR. BERNARDO HOUSSAY”
1
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
Editorial
Houssay Digit@l es un espacio pensado por y para los docentes
dedicados a la formación de Técnicos, aquellos docentes que
tienen la responsabilidad de desarrollar en sus alumnos y alumnas
las competencias relacionadas con la aplicación de saberes en
actividades laborales concretas, realizadas en diferentes escenarios
con un alto grado de especificidad.
Umberto Eco, el reconocido semiólogo, expresa en su artículo
Para qué sirve el profesor, lo siguiente: “Lo que hace que una
clase sea una buena clase no es que se transmitan datos y datos,
sino que se establezca un diálogo constante, una confrontación de
opiniones, una discusión sobre lo que se aprende en la institución
y lo que viene de afuera”.
Este espacio invita al diálogo de saberes y experiencias para
establecer una red que vincule acciones significativas desarrolladas
en el ámbito de la formación técnica.
Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación
(NTIC) favorecen el encuentro con el conocimiento pero la
reflexión sobre el mismo ocurre durante ese diálogo al cual se
2
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
refiere Umberto Eco y esto demanda de los docentes nuevas
destrezas para manejar las herramientas tecnológicas y también
un nuevo posicionamiento frente al conocimiento.
Como dice la profesora Mirtha Pérez en este número, “Contar
con equipamiento adecuado e insumos para la enseñanza, junto
con la actualización de los docentes en las nuevas tecnologías, es
el primer paso hacia una educación técnica de excelencia”.
La excelencia en un contexto colaborativo multiplica acciones
exitosas y permite el crecimiento personal favoreciendo las
estrategias didácticas y metodológicas que incidirán directamente
en la formación de Técnicos Profesionales preparados para
insertarse en el complejo mercado laboral actual.
Houssay Digit@l
3
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
Índice
Página
El desafío de formar técnicos para el mercado laboral del siglo XXI………………….…….4
Participación social para habitar y trascender……………………………………………………………..9
Discurso 25º Aniversario Instituto Superior “Dr. Bernardo Houssay”………………..…11
Colaboran en este número
Prof. Mirtha Pérez
Prof. Cecilia Llorca
4
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
EL DESAFÍO DE FORMAR TÉCNICOS PARA EL MERCADO LABORAL DEL SIGLO XXI
Por la Prof. Mirtha Pérez Desarrollar capacidad profesional para el empleo y adecuación a las demandas cambiantes del mercado laboral y comercio internacional, se constituye en una preocupación y desafío para todos los países del mundo; la realidad observable y numerosos estudios dan cuenta de ello. El economista Lester Thurow sostiene: “Las capacidades de los técnicos y operarios serán la principal arma competitiva del siglo XXI. La ciencia crea nuevas tecnologías a escala mundial, pero son los trabajadores calificados quienes permiten incorporar exitosamente, de manera concreta, estas nuevas tecnologías en nuevos productos y procesos. Los técnicos bien calificados serán así la única ventaja competitiva sustentable para los países en el siglo XXI”. Para competir en el mundo, de manera creciente, con productos de alto valor agregado, el fortalecimiento de la educación técnica, es en este sentido, prioritaria para el desarrollo de una Argentina industrializada, tecnificada y competitiva (Campos, J. y Pasman, C; 2007). En la mayor parte de los países de América Latina existe una situación de crisis social y laboral grave que afecta a grandes sectores de la población, cientos de miles de personas no tienen trabajo ni perspectiva para obtenerlo a corto plazo; tampoco poseen una formación profesional adecuada al desarrollo actual y futuro del mercado de empleo. Nuestro país, nuestra provincia y región vivencian la mencionada problemática; la realidad nos interpela y por ende convoca a los Institutos Superiores de Formación Técnica a afrontar el desafío de promover el desarrollo de competencias profesionales para que estudiantes y egresados no queden al margen de la inclusión social y laboral. Para no caer en un optimismo demagógico debemos considerar que no siempre el mejor calificado accede a un trabajo, pero ante un puesto laboral tendrá mayores posibilidades de obtenerlo. El desarrollo tecnológico, la mirada técnica compleja y la complementariedad de las competencias generales con las específicas de un campo científico determinado, unidos a actitudes y valores que aseguren una formación integral, son las condiciones para que un perfil profesional se acerque a la inserción laboral con pertinencia y eficacia. Gutierrez Darwich (2009). PEDAGOGÍA DE LA FORMACIÓN TÉCNICA Contar con equipamiento adecuado e insumos para la enseñanza, junto con la actualización de los docentes en las nuevas tecnologías, es el primer paso hacia una educación técnica de excelencia. Al decir de Cecilia Pasman y Jaime Campos (2007), todavía queda mucho por hacer si queremos instituciones educativas que respondan a las
5
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
necesidades de nuestros tiempos, si queremos instituciones educativas que formen sujetos con capacidad de desempeñarse en un mundo cambiante y altamente competitivo. La complejidad de los espacios institucionales y el desafío de alcanzar aprendizajes para todos en el desarrollo de competencias profesionales, supone trabajar en equipos, en redes, pensar en conjunto, abrir diálogos y establecer acuerdos, delegar tareas, “abrir el juego”, escuchar perspectivas distintas, reconocer la diversidad como parte constitutiva de la Institución Educativa y como de todo sistema, para construir y sostener un proyecto. (Pozner, Pilar; 2000). En el marco de una cultura democrática, quien lleva adelante la gestión del Instituto Formador debe habilitar espacios de discusión para la construcción de un proyecto colectivo que tienda a mejorar las prácticas profesionalizantes de los trayectos formativos de los estudiantes de las Carreras Técnicas. Las macropolíticas, las construcciones legales, las construcciones teóricas, las regulaciones laborales están siempre “fechadas”, vinculadas a las épocas, a los paradigmas vigentes, a las relaciones y configuraciones de poder que influyen y ocasionalmente “formatean lo pensable”. Por ello, es fundamental des-construirlas para comprender el contexto y el modo en que se han elaborado, verificar su pertinencia, revisarlas, modificarlas, mejorarlas, eventualmente dejarlas de lado y, en todos los casos, superarlas. En educación no hay neutralidad posible; educar es un modo de ejercicio de lo político entendido como una manera de reconocer e instituir justicia. Cada educador hace política todos los días, al enseñar, al distribuir la palabra, al provocar rupturas epistemológicas, al socializar saberes, al repartir el capital cultural. Lo político se expresa y traduce también en la manera de organizar su trabajo y el de sus estudiantes, en la forma en que promueve o estimula la participación, solicita el ejercicio del juicio crítico y asume su responsabilidad de adulto frente a las nuevas generaciones. En cada contexto institucional el conjunto de los actores, de manera explícita o implícita, construye micropolíticas. Éstas resultan de la manera en que, en cada contexto los actores interpretan, traducen, completan, profundizan, concretan de modos distintos, en diversas actividades, la política, utilizando tanto las prescripciones como los intersticios de los cuerpos normativos de las propuestas políticas sectoriales (Frigerio, Graciela, 2009). Así como no todos los caminos conducen al mismo lugar, cada uno constituye en sí mismo un modo particular de transitar y mirar los escenarios y los paisajes. Elegir un lugar al que llegar y un camino de acceso implica optar, y las opciones nunca son neutras, suponen la adopción de enfoques de interpretación y significación. El modo de trabajar, el modo en que se articula la autonomía de los Instituto de Formación Técnica con la pertenencia a un sistema mayor, cruzado por variables políticas, económicas, culturales y sociales y los efectos de factores ideológicos, culturales, emotivos y circunstanciales, además del cálculo racional, da a cada institución formadora un perfil propio, señas de identidad. Si el pensar y el hacer de una Institución formadora se integran en una visión compartida, valorada, deseada, comunicable, convocante y posible, adquieren un alto valor político generador de un movimiento colectivo orientado a mejorar las trayectorias
6
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
formativas de los estudiantes y a la posibilidad de concretar objetivos que tienen un alto consenso social, al decir de María Rosa Almandoz (2000) “calidad y justicia en la distribución de saberes y conocimientos”, que se traducen en el desarrollo de competencias que habilitan la inserción en el sector socio-productivo y la actuación de un ciudadano responsable. Depositar la confianza y expectativas sólo en los Institutos de Formación Técnica sería apostar a un optimismo ingenuo; se sabe que ese movimiento colectivo institucional que puede tener como base los marcos legales de nuestro Sistema Educativo y los lineamientos de políticas educativas nacionales y provinciales respecto de la educación técnica, alcanzará los impactos deseados si se suman aportes comprometidos del gobierno nacional, provincial, municipal y de organizaciones del sector socio-productivo. BASES PARA LA RELACIÓN ENTRE LOS INSTITUTOS DE FORMACIÓN TÉCNICA Y ORGANIZACIONES DEL SECTOR SOCIO-PRODUCTIVO Promover progresivamente la vinculación con instituciones y organizaciones del mundo socio-productivo, es una forma de fortalecer la educación técnica. Considero que el primer paso a dar tiene que ver con la comunicación, con el abrir espacios para comunicar qué hacemos, para qué lo hacemos y por qué lo hacemos. Es de suma importancia que la comunidad y las organizaciones del sector socio-productivo conozcan no sólo lo que se hace en los Institutos Formadores sino las bases sobre las que se asientan los haceres institucionales, dado que brinda las posibilidades de establecer acuerdos y asumir la formación conjunta de los estudiantes. La vinculación con el contexto productivo, además de contribuir a la mejorar de los trayectos formativos de los estudiantes, puede facilitar la promoción de las carreras técnicas de los Institutos, de manera progresiva. La experiencia de quienes trabajan en educación técnica habla de dificultades/obstáculos encontrados para establecer la mencionada vinculación y de que los marcos legales regulatorios son necesarios, pero no suficientes (Ley de Educación Nacional Nº 26206: artículos 1,2, 3, 8, 11, 35, 38, 122, 123, 124, 125, 126, 127; Ley Nacional de Educación Técnico-Profesional Nº 26058, artículos: 4, 7, 8, 10, 15, 16; Ley de Educación de la Provincia de Córdoba Nº 9870, artículos: 4, 41, 46, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 66), se necesita de la voluntad política de los gobiernos de turno y de las organizaciones/instituciones del sector socio-productivo. Para sentar las bases de la relación, además del marco legal, pueden ser útiles los interrogantes; considerando los aportes de Raúl Gagliardi (2008) dos preguntas son claves: ¿Cuáles son las organizaciones/empresas con las que es conveniente tener contactos regulares? ¿Qué proyectos pueden desarrollarse con las organizaciones del sector productivo relacionado con los trayectos técnicos formativos? Por otra parte, es fundamental una correcta gestión de la información, información relativa a las actividades y/o prácticas que se realizan en el Instituto, a los procesos externos, a la relación que podría establecerse con los sectores asociados y a la actividad y logros de los
7
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
graduados. Recopilar esa información, organizar los resultados dispersos y evaluarlos es una actividad importante que debe estar a cargo del Director/a y equipo a cargo de la prácticas profesionalizantes; revisar lo que se está haciendo en pos de una organización a partir de una visión común, elaborada a partir de la negociación. El/la Directora/a como responsable de la gestión del currículo, en un trabajo conjunto con los profesores de prácticas, debe asegurar que la ubicación en diferentes puestos de aprendizaje corresponda a necesidades reales de la formación de los estudiantes. Debe controlar que los alumnos no sean explotados por las empresas en las que realizan su aprendizaje; por ello en una toma de decisión colegiada se deben seleccionar aquellos grupos sociales, empresariales y comunitarios con los que el Instituto puede, y le es conveniente tener relación. El Instituto Formador debe ayudar a desarrollar competencias o capacidades básicas comunes a todos los empleos, que a la vez, permitirán desarrollar las específicas para cada empleo: competencias en comunicación, competencias interpersonales, competencias de pensamiento (estratégico y analítico), competencias organizacionales, competencias para el liderazgo, competencias con los clientes, competencias de autogestión y competencias técnicas operacionales. La complejidad y la apertura de los sistemas de innovación en las organizaciones laborales replantean la articulación entre el sistema formador y las empresas. Tomando los aportes de María Luz Ayuso (2009) a la hora de pensar la propuesta sobre educación y trabajo, cabe interrogarse: ¿Sobre qué concepción de trabajo se despliegan las propuestas que acercamos? ¿Sobre qué procesos de producción y distribución del saber se sostienen? ¿Desde qué sectores sociales se promueven?, ¿a quiénes benefician en última instancia? Guillermo Riveles (2009) propone mirar el trabajo, habiéndonos tomado el trabajo de mirar. Es necesario abrir la mente hacia nuevas formas de concebir la economía con toda su carga conceptual de ciencia social, superadora de una economía sólo al servicio del capital. Entender los procesos de producción y distribución de los bienes materiales que colocan al sujeto en el centro de la escena. Promover la distribución socialmente productivos, para trascender la mera capacitación en competencias puntuales y convertirse en una instancia de conciencia, capaz de articular la capacidad productiva y creativa del sujeto, con una formación crítico-contextual que le permita transitar el camino hacia mejores niveles de igualdad social. El trabajo con los distintos grupos sociales, con las empresas y la comunidad debe ser sistemático, estableciendo acuerdos. Pueden discutirse, entre otros temas, los criterios de evaluación o sus normas; las competencias profesionales que la Institución debe ayudar a desarrollar; cómo reconocer las capacidades y competencias de los graduados. La educación garantiza a las personas una exitosa incorporación al mercado de trabajo sólo allí donde existe una estructura productiva que valore y absorba los conocimientos. Plantear una vinculación mecánica entre el sistema educativo y el trabajo, ignorando la
8
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
complejidad de tal relación, podría conducir a formar personas que luego no encontrarían espacios donde sus saberes específicos sean valorados. Al decir de Liliana Sanjurjo (2009), las residencias y pasantías tienen la intención de ser espacios de formación, deberían responder a un proyecto acordado y el acompañamiento de las experiencias a cargo de un responsable del ISF como del que recibe a los residentes o pasantes; “…en ningún caso debería suponer que el residente o pasante se transforme en mano de obra gratuita o poco rentable”. En las Instituciones educativas es necesario superar lo anecdótico y no trabajar siempre sobre las situaciones urgentes, generar una ruptura con cierto conocimiento de “sentido común” y generar el desarrollo de un pensamiento objetivado a través del ejercicio de una práctica teórica y reflexiva (Pozner, Pilar; 2009); influir en la mejora proporcionando ayuda y sostén en la toma de decisiones; aprender con otros directivos, con otros docentes, con otras instituciones, con las organizaciones empresariales, con el sector socio-productivo. El ejercicio profesional exige, según Carlos Cullen (1997) tener internalizados conceptos fundamentales, poner en acto los conocimientos, evaluar acciones, corregir o superar errores y dificultades. Supone: estudio, práctica, evaluación, corrección y más estudio, y más práctica… es una continua prueba de validación y retroalimentación en pos de la mejora. BIBLIOGRAFÍA: -Almandoz, M.R. “Sistema Educativo Argentino, Escenarios y Políticas”. Ed. Santillana, Bs.As., 2000. -Ayuso, Luz María. En ¿Qué escuela, para qué trabajo? “El campo de la educación y el trabajo”. Revista Novedades Educativas. Septiembre de 2009 -Campos, J. (Director Ejecutivo de la Asociación Empresaria Argentina) y Pasman, C. (Coordinadora del programa Vinculación Empresa-Escuela de AEA), publicadas en la Revista El monitor de la educación, en diciembre de 2007. -Cullen, Carlos A. Crítica de las razones de educar. Editorial Paidós. Buenos Aires, 1997. -Darwich, Norma Gutierrez En ¿Qué escuela, para qué trabajo? “Requerimientos no atendidos de las relaciones educación-trabajo”. Revista Novedades Educativas. Septiembre de 2009. -Gagliardi, Raúl. Gestión de la educación técnica profesional. Formación de competencias profesionales. Colección educación y trabajo. Editorial Novedades Educativas. Buenos Aires; 2008. -Riveles, Guillermo. En ¿Qué escuela, para qué trabajo? “Mirar el trabajo, el trabajo de mirar”. Revista Novedades Educativas. Septiembre de 2009.
9
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
PARTICIPACIÓN SOCIAL PARA HABITAR Y TRASCENDER
Por la Prof. Ana Cecilia Llorca
Resumen del artículo homónimo
El trabajo tiene como objetivo reflexionar sobre la lucha que
están realizando “Los autoconvocados de Famatina y Chilecito” al
pie del cerro Famatina, en la provincia de La Rioja.
Este movimiento social, considerado “del pueblo” pues se
interpreta que los autoconvocados lo constituyen, está oponiéndose
a la explotación minera a cielo abierto que pretende realizar una
empresa multinacional: Barrick Gold Corporation; la cual cuenta
con el permiso legal provincial y nacional. Este tipo de explotación
altamente contaminante, consiste en demoler grandes extensiones
montañosas para extraer la roca con minerales y luego lixiviarla
(lavarla) con cianuro, utilizando cantidades voluminosas de agua.
La ejecución de este proyecto provocará serios problemas al medio
ambiente. La vida de los individuos será afectada tanto con respecto
a la salud como en otro sentido, ya que su lugar se transformará, el
paisaje que los identifica se modificará a tal punto que dejará de ser
su lugar.
Este trabajo propone categorías que interpretan esta movilización
social como una lucha para poder vivir, entendiendo vivir en dos
sentidos, como habitar y trascender.
Habitar supone que se vive en un paisaje, en un clima, en una
geografía, en una cultura, en una comunidad, en un nosotros. El
lugar constituye y forma a la comunidad y es también su espejo
para reflejarse, para identificarse.
El lugar imprime una marca de la singularidad de cada pueblo,
manifestada en las expresiones de los pobladores que crean la
propia cultura. Estas expresiones son atesoradas, son recreadas y
10
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
constituyen lo que se llama las raíces de los pueblos, que también
son identidad.
Esto implica que si se trasladara a las personas de ese lugar en
donde ellos viven, o si éste fuera transformado; se dejaría a las
personas sin ese espejo donde ellas se identifican.
Trascender hace referencia a dejar un marca que pueda ser
reinventada, de modo que cuando ya no se esté presente en ese
lugar, es decir cuando el vivir de cada uno termine corporalmente,
pueda éste continuar en un sentido no corporal como símbolo.
Los autoconvocados con esta lucha están dejando símbolos, que
podrán traspasar, abandonar a sus gestores y ser usados como
ejemplo; podrán ser reinterpretados por cada pueblo al que se le
vulneren sus derechos.
Esta marca está presente en la resistencia, en la lucha por la
licencia social que supone el permiso y aceptación de la sociedad
para hacer algo; ésta es la autodeterminación que tienen en
potencia todos los pueblos, que admite que puedan decidir sobre su
destino, y puedan ser partícipes de su propia historia
Asimismo, el trabajo propone pensar este movimiento social
dentro de la dicotomía legalidad/legitimidad. Esta oposición es vista
desde dos caras, por un lado la movilización del pueblo es ilegal, su
accionar transgrede la ley -corte de rutas, ocupación de espacios
públicos-; pero al mismo tiempo es legítima pues tiene la aceptación
de la mayoría de los que serán afectados.
Por otro lado, lo que intenta hacer la empresa es legal, existen
leyes que autorizan esta explotación, en el sentido de que no la
prohíben e incluso la favorecen; pero esta actividad no es aceptada
por las poblaciones y pretende imponérsela, lo que la vuelve
ilegítima.
De este modo, se percibe que el símbolo que ellos están
sembrando, la resistencia por la licencia social, constituye lo que en
ese pueblo es legítimo, aunque todavía no legal.
11
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
Con motivo del 25º aniversario de la creación del Instituto Superior “Dr. Bernardo Houssay”
su actual directora, la profesora Mirtha Pérez
pronunció el siguiente discurso durante el Acto de Homenaje:
“En un tiempo no tan lejano, en abril de 1984, cuando en nuestro país, bajo la llegada de la
reciente democracia, sufríamos los efectos de las políticas culturales, educativas y
económicas impulsadas por la última dictadura militar, y con la consecuentemente
disminución de la posibilidad de los jóvenes de continuar con estudios superiores, en Capilla
del Monte, un grupo de personas, alimentados por ideales de progreso, se reunía en el
Colegio Nacional y Sección Comercial Anexa junto a su Rectora, la Profesora Teresa Oviedo
de Montoya. Respondiendo al objetivo que los unía, crear un Instituto de Nivel Terciario,
conformaron una Comisión de trabajo.
Luego de dos años de intensa labor la Comisión Pro Creación Terciario vio convertido su
anhelo en realidad: el 26 de mayo de 1986 abría sus puertas el Profesorado en Geografía y
Ciencias Biológicas, formando parte de la Escuela Nacional Normal Superior del Profesorado
de Capilla del Monte.
Los registros escritos y la memoria de quienes fueron protagonistas de tal acontecimiento dan
cuenta de que un utopía integradora, protectora de los derechos de cursar Estudios
Superiores impulsó el accionar de esos vecinos capillenses.
En abril de 1988, el Profesorado de Educación Superior que funcionaba en el Colegio
Nacional es separado de él, se crea el INES “Dr. Bernardo Houssay” y se designa Rectora a la
Profesora Teresa Oviedo de Montoya.
En abril de 1989, como resultado del esfuerzo y perseverancia de la comunidad educativa
del Instituto, bajo la impronta de educar para el trabajo, se logró la apertura de carreras
técnicas: Técnico Superior en Administración de Empresas; Analista Programador y Analista
de Sistemas de Computación; Guía y Técnico Superior en Turismo. En un mercado laboral que
se avizoraba cada vez más competitivo, la obtención de un título brindaba mayores
posibilidades de inserción en el mundo del trabajo. Desde entonces, con cambios reiterados
en los planes de estudios y titulación, para responder a las demandas del sector socio-
productivo, conviven en nuestro Instituto carreras de formación técnica y de formación
docente.
En la década del 90, fruto de negociaciones y efectos de la implementación de políticas
neoliberales, nuestro sistema educativo se vio fuertemente afectado; en una sociedad
caracterizada por la falta de inversión y el empobrecimiento de vastos sectores de nuestro
pueblo, el imperativo fue promover la función asistencial por encima de la capacidad
creadora y transmisora de saberes. En este marco, y bajo la implementación de la Ley
Federal de Educación Nº 24195, varios Institutos de Nivel Terciario pudieron resistir a la política
de cierre, entre ellos nuestro Instituto, gracias a las oposiciones ofrecidas y al esfuerzo
realizado por integrantes de la Comunidad Educativa y determinados sectores de nuestra
sociedad.
Corría el año 1993 y bajo los principios de descentralización, calidad y democratización,
presente en el discurso de nuestros gobernantes, se materializaba la Ley de Transferencia de
los Colegios Nacionales a las Provincias, con una fuerte impronta financiera. Así, nuestra
Institución se constituye en IES, conservando su nombre. Llegado el siglo XXI, el contexto
social, político, cultural y económico interpela las funciones del sistema educativo y el lugar
que ocupa el Sistema Formador. En el marco de la Ley de Educación Nacional Nº 26206, las
políticas nacionales tienden a jerarquizar y revalorizar la formación docente, como factor
clave del mejoramiento de la calidad de la educación, y revalorizar la formación técnica
12
Houssay Digit@l Año 1 Nº 1
con el objetivo de promover aprendizajes relacionados con desempeños profesionales
propios del sector socio productivo. Las políticas educativas provinciales también operan en
ese sentido. Transcurridos 10 años del nuevo siglo, en el recorrido realizado por los 25 años de
vida del Instituto, observamos cambios y permanencias.
Igual que en sus comienzos la población escolar en su mayoría proviene de localidades
aledañas.
Igual que en sus comienzos encontramos una comunidad educativa que vela por el principio
de igualdad de oportunidades y posibilidades, que trabaja por proporcionar una formación
docente y técnica en el más alto nivel; una comunidad educativa que enfrenta con
compromiso y profesionalidad la adversidad. Y en este sentido quiero destacar con énfasis el
desempeño del personal docente, personal no docente y estudiantes de nuestra Institución
en lucha permanente con las desfavorables condiciones edilicias que presenta el “ala
antigua” del edificio que compartimos con el IPEM 279 y a ello se agrega la falta de espacio
físico que obstaculiza la optimización de los recursos, obtenidos en su gran mayoría por un
grupo de docentes que dedica tiempo y esfuerzo para la presentación y desarrollo de
proyectos financiados por el INFOD y por el INET, además de la presentación en proyectos
concursables jurisdiccionales.
Nuestro Instituto de Formación Docente cuenta con Equipos de Investigación, cumpliendo
funciones de alto valor académico.
Igual que en sus comienzos tienen lugar el compromiso, la iniciativa, la implicación…
Permanencias y cambios, innovaciones que responden a necesidades y problemáticas
actuales. Nuestras acciones y proyectos apuntan a fortalecer el vínculo con la comunidad y
a mejorar cada día más las trayectorias formativas de los estudiantes, promoviendo su
participación. Apuntan a seguir creciendo, apuntan a promover el trabajo colaborativo…
Dan cuenta que estamos avanzando en la construcción de espacios de trabajo conjunto el
desarrollo de proyectos con la participación de la Secretaría de Ambiente y Turismo de la
Municipalidad de Capilla del Monte, en el marco de un convenio firmado el año pasado
durante la gestión del profesor Eduardo Vázquez, con la participación de las Escuelas de
Educación Secundaria de nuestra localidad.
Por otra parte, el desarrollo del Proyecto de Empresa Simulada brindará la oportunidad de
fortalecer la formación en las prácticas profesionalizantes de las tecnicaturas de Gestión,
Informática y Turismo.
En nombre de la comunidad educativa del Instituto Dr. Bernardo Houssay agradezco al
Municipio y a Radio Milenio por el espacio semanal de 1/2 hora cedido gratuitamente para el
desarrollo de un programa educativo a cargo de alumnos de cuarto año del Profesorado de
Biología, coordinado por el Profesor Jorge Gutta.
En el 25ª aniversario de la fundación de nuestro Instituto evocamos el pasado desde los
relatos escritos y orales, recuperando la voz de los protagonistas.
Hablamos del presente, del aquí, del ahora, de las acciones que desarrollamos, de los valores
que transmitimos.
Y es aquí, en el ahora, en nuestro Instituto donde renovamos día a día la esperanza de que,
con la educación es posible un futuro mejor.
¡Decimos gracias!”
Prof. Mirtha Pérez
Capilla del Monte, 2011