Hurto, Robo. Jurisprudencia y Doctrina

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  • 7/23/2019 Hurto, Robo. Jurisprudencia y Doctrina

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    HURTO

    Para que se configure el delito hace falta un desapoderamiento y un apoderamientoilegtimo. El bien jurdico afectado es la propiedad y en opini!n de algunos autores la"tenencia". #e ello deri$a el hecho de que solamente se puede configurar la conducta tpica

    siempre y cuando el sujeto pasi$o haya sido remo$ido en el ejercicio de tales facultadespero ello por s s!lo no resulta suficiente.

    Hace falta adicionalmente un poder de disposici!n con relaci!n a la cosa mueble total oparcialmente ajena %&O'ER(. En cambio otros autores entienden que el simpleapoderamiento por s s!lo es consumati$o %)*+E,(.

    Elementos del tipo-

    El desapoderamiento y el apoderamiento ilegtimo cosa mueble total o parcialmente ajena.

    /0u1 es apoderarse2Tesis de la disponibilidad- &O'ER 3O)T4) 56'E&TR6. Perspecti$a del autor. )o bastacon desapoderar al sujeto pasi$o para la configuraci!n de la conducta reprochable hacefalta adem7s que la misma se encuentre bajo la disponibilidad del autor. 6poderarsematerialmente no resulta suficiente puesto que eso no implica otra cosa que eldespla8amiento f7ctico de la cosa. Tiene que haber e9istido disponibilidad del sujeto acti$oaunque sea por una fracci!n de segundo.

    'a consumaci!n del delito no nace mientras e9ista la posibilidad a fa$or de la $ctima o deun tercero o la autoridad que acuda en su au9ilio de $ol$er a hacerse con la cosa o deimpedir el delito. )o hace falta que la cosa est1 "en lugar seguro" el comportamiento seconsuma con la sola posibilidad de lle$ar a cabo la reali8aci!n de actos de disposici!n conrelaci!n a la res lo que implica- quitar la cosa de la esfera de custodia del sujeto pasi$oejercer un poder real sobre la cosa tenerla materialmente consigo que por lo pronto noquepa la posibilidad de impedir el apoderamiento.

    Tesis del desapoderamiento- )*+E,. Perspecti$a de la $ctima. El desapoderamiento pors s!lo resulta consumati$o. El sujeto acti$o con su comportamiento en $irtud del cuala$an8a y $ulnera el 7mbito o esfera de custodia del sujeto pasi$o y ha desapoderado a aquelde la posibilidad real de ejercer las facultades que el #erecho le concede con relaci!n a lares ya habr7 hecho "todo lo que tena que hacer" para que el delito se consume. Esnecesario entonces el desapoderamiento de la cosa de la $ctima puesto que se con$ierteen apoderamiento a partir del momento en el que aquella ya no puede acceder a lo quetena siendo que el dolo del autor estaba conectado a un "7nimo de apoderamiento". Estapostura ha sido criticada por reducir el hori8onte de desistimiento de la tentati$a inacabada.

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    TRABALLINI, EL NUEVO ROBO CON ARMAS

    6nali8a las modificaciones introducidas al r1gimen del :!digo Penal $igente en laRep;blica 6rgentina por $a de la sanci!n de la ley >

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    'a modificaci!n que se produce por la ley >< se da en el orden de que ahora el armaimpropia que produce intimidaci!n y a la $e8 genera peligro queda subsumida dentro del7mbito del primer p7rrafo %primer supuesto del inciso( con una pena menor que la del armaoperati$a %segundo p7rrafo( y mayor a la de los supuestos de pura intimidaci!n %armas noaptas y armas de utilera tercer p7rrafo(.

    6rmas de fuego

    'as armas de fuego configuran supuestos que quedan e9cluidos del primer p7rrafo y pasana conformar dos estratos- el m7s gra$e %del segundo p7rrafo( y uno intermedio donde lapena se reduce si el arma de fuego no es operati$a o es s!lo de utilera.

    6s entonces desde que el segundo p7rrafo s!lo alude al arma de fuego a secas es el te9todel tercer p7rrafo lo que determina el alcance de aquella anterior e9presi!n- en la medida enque la norma deri$a al p7rrafo final la especial situaci!n de las armas de fuego sincapacidad funcional a contrario se infiere que se reser$a la punici!n m7s gra$osa paraaquellas que son aptas para el disparo.

    Poniendo de este modo fin a la cl7sica discusi!n acerca del fundamento de la agra$ante lareforma adopta e9presamente tanto el peligro efecti$amente corrido por la $ctima en su$ida e integridad fsica como la mayor intimidaci!n como par7metros para graduar elcastigo. Entre ambos sin embargo resulta ob$ia la preponderancia que asigna al primeropor sobre la segunda ya que cuando el arma de fuego es operati$a la pena supera la delprimer p7rrafo mientras que cuando s!lo opera como factor amedrentante por nofuncionar o ser s!lo una r1plica la sanci!n es menor.

    #e otro costado la norma pone en claro que la capacidad funcional u operati$idad es une9tremo que debe ser particularmente probado en el proceso.

    'a reforma tambi1n hace perimir este debate. El nue$o segundo p7rrafo del inciso

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    fuego torna e$idente que supone a las que no re$isten tal condici!n menos peligrosas parala $ida e integridad fsica de la $ctima.

    6rmas impropias- ;nicamente en relaci!n con las armas propias se puede percibir ladistinci!n entre $erdaderas y de utilera. El ladr!n que acomete fsicamente con un sart1n

    de pl7stico duro se encuentra en id1ntica situaci!n que quien lo hace con una real en lamedida en que est7 utili8ando para agredir un elemento que no es t1cnicamente un armapero que aumenta su poder de hecho como instrumento de agresi!n contra la $ctima. &etrata en ambos casos de objetos no concebidos para la ofensa o el ataque y que s!lo por suempleo en forma agresi$a califican el desapoderamiento. Por lo dem7s la situaci!n de lasarmas impropias no ha $ariado y se mantienen compatibles tambi1n dentro del nue$osistema.

    6rmas de utilera

    El tercer p7rrafo hace referencia al robo cometido con arma de utilera.

    En primer lugar la norma no especifica si el arma de utilera refiere s!lo a las de fuego o sitambi1n alcan8a el resto de las armas propias. Una primer lectura parece indicar la primeraopci!n en especial atendiendo a que en la pr7ctica son poco frecuentes los casos en los quelo imitado no es un arma de fuego. &in embargo se puede pensar que una interpretaci!nintegrada de todo el inciso determina la segunda soluci!n y entonces queda tambi1nincurso en esta punici!n menor quien utili8a una na$aja de juguete para reducir a su$ctima.

    El triple escalonamiento seguido por la norma se ad$ierte que el tercer p7rrafo alberga

    situaciones de pura intimidaci!n mientras que los dos restantes agregan el peligro efecti$oderi$ado ya sea de un arma $erdadera cualquiera sea su tipo %primer p7rrafo( o m7sespecficamente de un arma de fuego apta para el disparo %segundo p7rrafo(.

    El giro empleado por el legislador al momento de redactar el contenido del tercer p7rrafo dela norma en cuestionamiento no abarca en toda su amplitud la simulaci!n de $iolenciaarmada sino s!lo aquella que se efect;a con un objeto que en s y no por su especial formade utili8aci!n imita remeda o reproduce las caractersticas e9ternas de un arma.

    En otras palabras puede afirmarse que no son armas de utilera el dedo ndice que se hace

    notar dentro del bolsillo ni el tro8o de ca@o que se apoya en la espalda pretendiendocon$encer a la $ctima de que est7 siendo enca@onada. #ebe tratarse de una cosa quepresente en apariencia las condiciones fsicas definitorias de un arma.

    &er7 la apreciaci!n del hombre medio la que determinar7 la configuraci!n de estaagra$ante. 6s entonces la e$entualidad de que la $ctima posea un ojo e9perto en lamateria y recono8ca la falsedad que el com;n denominador no ad$ierte no ser7 !bice parala aplicaci!n del tercer p7rrafo. G congruentemente quien esgrima un re$!l$er de pl7stico

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    amarillo con un logo de alguna empresa de juguetera y un corcho atado con un pioln en lapunta del ca@o no cometer7 un robo con un arma de utilera por m7s que el ni@o asaltadolo suponga $erdadero.

    :onclusiones

    'a cl7sica distinci!n entre armas ro!as e !mro!asse mantiene compatible en el nue$osistema. 'as primeras encuentran su regulaci!n en los tres p7rrafos del inciso mientrasque las segundas quedan reser$adas al primer p7rrafo primer supuesto.

    El empleo de armas de fuegodesdobla su punici!n en dos ni$eles- en el m7s gra$e seubican aquellas armas "u#a at!tud ara e$ d!saro %a s!do a"red!tada %art. ABB inc. B con una nue$a conformaci!n el mismo tribunal dict! el plenario"Costas" donde afirm! que el empleo de un arma de fuego apta para el tiro perodescargada no encuadraba en el concepto de "arma" del art. ABB inc.

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    peritaci!n a fin de determinar tales e9tremos. #e esta manera se sostu$o que para queopere la agra$aci!n del robo por el empleo de armas de fuego era necesaria la acreditaci!nde la aptitud para el disparo del artefacto en cuesti!n mediante el correspondiente peritaje.'a e9cepci!n a esta regla estu$o dada por aquellos casos en que el arma de fuego ineptapara el disparo o descargada fuere utili8ada como arma impropia a modo de objeto

    contundente por ejemplo golpeando con la culata a la $ctima. 6s se afirm! que si elarma de fuego se us! para golpear a la $ctima del robo no interesa la comprobaci!n de suaptitud para el disparo. En lo que respecta a las armas filocortantes o pun8antes tampoco see9iga el secuestro para una ulterior peritaci!n puesto que sus condiciones objeti$as paraagredir y $ulnerar se encuentran nsitas en su estructura e9terna y son perfectamenteobser$ables por la propia $ctima una jeringa hipod1rmica con su correspondiente aguja%se la consider! arma impropia pese a que no se encontraba cargada con sangre en ra8!n deque la mera presencia de aire en su interior le confiere poder $ulnerante( una jeringacargada con sangre infectada de L. ?. H. un destornillador un $idrio %que haba sido

    esgrimido por el imputado contra un polica que intent! e$itar el delito(o una bufanda quese utili8! para sujetar el cuello de la $ctima. En cuanto al modo de empleo del arma esrequisito de la figura que el robo se cometa con armas lo que conlle$a la e9igencia de queel arma sea utili8ada o empleada por el sujeto acti$o en una efecti$a acci!n $iolenta ointimidatoria para doblegar o e$itar la resistencia de la $ctima en esa acci!n dispar7ndolaapuntando con ella blandi1ndola o mostr7ndola significati$amente por ejemploabri1ndose el saco le$ant7ndose la remera o haciendo el adem7n propio de e9traerla.0uedan e9cluidos de la agra$ante los casos en que el agente solamente haya lle$ado oportado el arma aun a la $ista de la $ctima lo que la jurisprudencia ha entendido queacontece cuando "se muestre simplemente" o cuando "aunque se la lle$e a la $ista si esto

    dado las circunstancias particulares del caso no constituye una intimidaci!n". )o obstantecabe destacar que para un sector de la doctrina basta la mera portaci!n del arma para queel robo se considere agra$ado. 6s se@alaba Rodolfo Moreno %h.( que "... el delincuenteque lle$a armas no las ha de cargar para reali8ar un paseo ni para cumplir con deberessociales. &i las tiene es con un prop!sito delictuoso y para usarlas si lo considera preciso.'a portaci!n de armas re$ela en el sujeto una mayor peligrosidad demuestra que el hechoha podido tener consecuencias gra$simas con referencia a las personas y por tanto lasociedad debe preca$erse tomando mayores precauciones"%

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    Arma de fuego

    'a nue$a redacci!n del inc.

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    poder intimidante por el uso del arma como un incremento en el riesgo corrido por la$ctima lo que no puede determinarse en los casos en que el arma no fue hallada ye9aminada. )o obstante y como ya se ha mencionado dicha regla no era infle9ible ya quea $eces la falta de secuestro del arma para su posterior peritaci!n no descartaba de plano laposibilidad de agra$ar el robo. En efecto la :7mara )acional de :asaci!n Penal $ena

    sosteniendo que aun cuando el arma con la que se cometi! el delito de robo no haya sidoincautada las declaraciones testimoniales son suficientes para acreditar que efecti$amenteun arma fue disparada %en el caso todos los testigos haban referenciado su uso y se habaencontrado un proyectil que no era de la polica y el $idrio del local donde se cometi!el delito estaba astillado( y por lo tanto tiene esa calidad a los fines de la aplicaci!n de lacircunstancia agra$ante pre$ista por el art. ABB inc.

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    se estara efectuando una aplicaci!n anal!gica "in malam partem" de la ley penal lo queest7 prohibido en materia penal

    Armas "impropias"

    En un caso reciente donde los imputados haban utili8ado una botella y de una baldosa paraconsumar el desapoderamiento padecido por la $ctima el jue8 5ru88one en minorasostu$o que dicho accionar "... no puede ser considerado Nrobo con armasN porque esosobjetos no son t1cnicamente armas simplemente porque no lo son. &e trata de elementosque utili8ados de la manera en que lo hicieron le otorgan al agresor una mayor capacidadofensi$a pero que por ese solo hecho no pueden ser incluidos en el concepto de arma. 'ae9tensi!n para casos como el presente de la agra$ante del art. ABB inc. de la :.).(.

    ERCOLINI, AL'UNAS CONSI(ERACIONES SOBRE EL (ELITO (E ROBOVIOLENTO CON LESIONES 'RAVES O 'RAV)SIMAS

    &e trata de un tipo penal pluriofensi$o. Para que el mismo se consume m7s all7 de quedeben haberse cumplido los elementos que permitan determinar la atribuci!n de laresponsabilidad a ttulo objeti$o %imputaci!n objeti$a( y subjeti$o %imputaci!n subjeti$a(es menester que se haya consumado el desapoderamiento componente esencial en delitoscontra la propiedad de este tipo para que a su $e8 se pueda atribuir responsabilidad sobre labase de esta figura agra$ada del robo. En caso contrario cuando no se haya $erificado eldesapoderamiento como tal estaremos ante un supuesto de hecho que debe $islumbrarse deacuerdo a las reglas comunes de los concursos penales.

    #e todas maneras del an7lisis anterior no debe desprenderse la conclusi!n apresurada%seg;n su parecer( de que esta figura no admita una e$entual punibilidad por tentati$a. Todolo contrario. 'a $o8 robo debe ser tomada en cuenta como un elemento normati$o del tipoque requiere el apoderamiento de la cosa mueble cuando no se da en el plano de la realidadeste apoderamiento no puede afirmarse que el delito quede perfeccionado porqueprecisamente falta la consumaci!n del complejo construido por el legislador. &i hubodesapoderamiento ya habr7 un primer paso para afirmar que se puede tolerar una soluci!norientada hacia la tentati$a incluso en la consideraci!n de esta figura.

    "'a que no puede ser tenida por $7lida es la afirmaci!n de la e9istencia de adecuaci!n altipo que requiere apoderamiento cuando no lo hubo ya que en el plano de la realidad elintento infructuoso de apropiaci!n de una cosa es un hecho sustancialmente distinto al deun e9itoso apoderamiento. Por ello la afirmaci!n de que la figura en an7lisis "queda

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    tipificada con la mera producci!n de las lesiones %...( con prescindencia de la consumaci!ndel desapoderamiento" no lo consideramos acertada ya que aun coincidiendo en que ellegislador para la considerable agra$aci!n ha hecho hincapi1 en la importante afectaci!n ala integridad corporal no puede escaparse el int1rprete el hecho de que tambi1n esimprescindible la consumaci!n del robo la que no se produce sin la concurrencia de todos

    sus elementos".

    6 diferencia de lo que sostiene ER:O'?)? la jurisprudencia considera que la figuraagra$ada ya se consuma con la reali8aci!n de las lesiones. 'o que justamente critica elautor es que toda$a puede no haber e9istido desapoderamiento.

    *I'ARI, ARMAS (E UTILER)A

    6dhiere a la postura que distingue entre armas de utilera y armas de juguete puesto que noson lo mismo. 'as primeras se caracteri8an por haberse reali8ado a la lu8 de di$ersast1cnicas de refinamiento que las parifican e9ternamente con un arma com;n y corrienteapta para el disparo por lo cual habilita la aplicaci!n de la punibilidad de acuerdo con eltercer p7rrafo del artculo ABB modificado. 'as armas de juguete en principio e9cept;anesta posibilidad y quedan subsumidas en el delito b7sico de robo simple siempre y cuandodesde el punto de $ista de un hombre promedio se habra entendido y percibido$isiblemente la diferencia.

    36''O '6?

    &e haba considerado a '6? como autor penalmente responsable por el delito de robocometido con arma de utilera. 'a defensa considera que no corresponde que tenga lugar la

    aplicaci!n de la agra$ante puesto que con arreglo a c!mo se dieron los hechos %portaba unpeda8o de madera "con forma de arma"( se estara transgrediendo el principio de legalidad.&!lo puede decirse que concurre un arma de utilera cuando el elemento utili8ado re;ne lascaractersticas definitorias propias de aquel otro elemento que se pretendi! copiar. Por elloconsider! oportuno que tu$iera lugar la aplicaci!n del delito b7sico de robo simple.

    El tribunal inter$iniente consider! que la agra$ante a la que alude el ;ltimo p7rrafo delartculo ABB debe considerarse bajo el criterio del "hombre medio" desligado de la efecti$asecuela que ocasione o efecti$amente haya ocasionado a la $ctima.

    'os jueces negaron por unanimidad que se diera la configuraci!n del elemento calificantepuesto que el elemento utili8ado por el sujeto acti$o no re$esta de las condicionesnecesarias para sostenerse que se trataba de un arma de utilera. 'a mera utili8aci!n de unobjeto con forma de "'" y de color negro permite inferir como muy pobre la similitudlograda sin ninguna otra circunstancia adicional que procure un mayor parecido objeti$ocon su correspondiente $ersi!n real.

    36''O T?5ER?EL?:H EPG:H

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    &e conden! a la pena de prisi!n perpetua por el delito de robo agra$ado por el empleo dearma en grado de tentati$a en concurso real con homicidio criminis causa al concluir quelas lesiones que presentaba la $ctima no fueron accidentales porque el cuchillo utili8adopenetr! la pleura y los pulmones con una profundidad de ocho a nue$e centmetros. 'adefensa interpuso recurso de casaci!n afirmando que se trat! de un homicidio en ocasi!n de

    robo.

    'a defensa se@al! que el acusado ya haba consumado el desapoderamiento conanterioridad a la muerte acaecida y que no necesit! de una acci!n posterior porque elresultado ya se haba asegurado y que la ulterior muerte fue incidental no queridacircunstancias que no fueron tenidas en cuenta por el tribunal de primera instancia.

    En cuanto a la menci!n hecha en el fallo de que el defendido decidi! matar al comerciantepara procurar su impunidad se e9pres! que ello no era cierto ya que para poder escapar delnegocio el autor necesitaba las lla$es porque la puerta de salida del local dispona de un

    sistema el1ctrico que permita abrirla desde adentro del negocio defensa predispuesta quesi hubiera querido matar a 'ang le hubiera imposibilitado la huida. 6dicionalmente habrasignos de que en rigor de $erdad la muerte se produjo por una lucha entre los dos sujetosde la cual se habra inferido la lesi!n posteriormente mortal.

    &in perjuicio de ello cabe destacar que en lo referente a la aplicaci!n del supuestoestablecido en el art. AB=del :!d. Penal esta sala tiene dicho que- "...la muerte resultantedebe estar conectada como en los dem7s delitos preterintencionales bajo la forma deresponsabilidad culposa porque lo que sea resultado de un puro caso fortuito no es unresultado de la acci!n desplegada para robar de e9igirse el dolo en la acci!n de matar se

    despla8ara a la figura de homicidio "criminis causae" %art. >K inc. J :!d. Penal(..."%"Qrieco Quillermo P.srecurso de casaci!n" reg.