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LA DECLINACIÓNA.
CASOS Y FUNCIONES
En latín todo sustantivo posee sus casos, dando lugar a que morfológicamente la palabra cambie y ese cambio le otorgue distintas funciones. Los casos y sus respectivas funciones son:
CASOS FUNCIÓN
Nominativo Sujeto o Atributo
Vocativo Apelación
Acusativo CD (v. Transitivos) o CC (v. Intransitivos). Con preposición siempre CC
Genitivo Complemento del Nombre
Dativo Complemento Indirecto
Ablativo Complemento Circunstancial (con o sin preposición)
El dativo y ablativo del plural son iguales, para diferenciarlos hay que fijarse en la preposición, puesto que ésta aparece cuando hay dudas en cuanto a la función: el dativo siempre va sin preposición, mientras que el ablativo puede ir con o sin preposición. El contexto dará la solución, pero en caso de duda, en latín aparecerá siempre la preposición para diferenciar.
LA DECLINACIÓN
Las declinaciones son 5 en latín. Cada palabra se enuncia con el nominativo y genitivo, por lo que sabremos a qué declinación pertenecen; así, rosa – rosae es de la primera, por el tema en a, igual que filia – filiae. Dominus – domini es de la segunda, y así con todas.
Nominativo y vocativo del singular son siempre iguales excepto en la segunda declinación. Dativo y ablativo del plural son siempre iguales. Nominativo, vocativo y acusativo del singular son iguales en los sustantivos neutros. Nominativo, vocativo y acusativo del plural adquieren la desinencia a en los sustantivos neutros.
A. Primera declinación: Tema en a
Su característica es que la desinencia del genitivo es AE, rosa - rosae. Igualmente toman esta desinencia el dativo del singular y el nominativo y vocativo del plural.
La primera declinación contiene sustantivos femeninos en su mayoría, y ninguno neutro.
B. Segunda declinación: Tema en o
La segunda declinación acoge los sustantivos con tema en o, aunque debido a una evolución fonética el timbre de la o cambió y pasó a u. Hay tres tipos de sustantivos en esta declinación, aunque todos ellos hacen el genitivo en I:
o Los que tienen nominativo en US: dominus - domini o Los que tienen nominativo en ER: puer - pueri o Los que tienen nominativo en UM: templum - templi
Los dos primeros, US y ER son generalmente masculinos, mientras que los acabados en UM son neutros.
A. Tercera declinación
La tercera declinación se caracteriza porque el genitivo toma la desinencia IS. A su vez, los sustantivos de esta declinación pueden ser masculinos, femeninos y neutros. Hay tres tipos de sustantivos:
Tema en consonante Tema en vocal (I) Tema mixto
Tema en consonante
Cumplen, a la vez, dos características:
El tema en el genitivo acaba en consonante: homo – hominis. El número de sílabas en nominativo es distinto que en genitivo: consul – consulis, civitas – civitatis, tempus – temporis.
Los sustantivos neutros tienen variaciones con respecto a los masculinos y femeninos. El nominativo, vocativo y acusativo tienen la misma forma en singular, mientras que en plural adquieren la terminación A.
En la tercera declinación aparecen formas acabadas en I, como el genitivo de la segunda declinación, sin embargo, no pueden confundirse, porque en la tercera declinación corresponden al dativo, es decir, una función de complemento directo o circunstancial, sin embargo en la segunda son genitivos, complementos del nombre.
Tema en vocal o Tema en I
Cumplen, a la vez, dos características:
El tema en el genitivo acaba en vocal: mare – maris. El número de sílabas es igual en nominativo y en genitivo: navis – navis.
En los dos ejemplos anteriores el genitivo, aunque lo parezca, no acaba en consonante, puesto que la i del genitivo es la contracción de ii, es decir, mari is, por tanto son sustantivos con tema en vocal, aunque fonéticamente hayan evolucionado.
Se declinan igual que los de tema en consonante pero con dos excepciones:
Genitivo del plural toma la desinencia IUM. Nominativo, vocativo y acusativo del plural toman la desinencia IA.
Tema mixto
La característica de estos sustantivos es que mezclan las desinencias usadas en los otros dos temas:
El singular lo hacen como los temas en consonante. El plural lo hacen como los temas en i.
Ars – arcis: el número de sílabas en nominativo y genitivo es distinto, pero el genitivo del plural lo hace en IUM, arcium, igual que los sustantivos con tema en i. Lo mismo ocurre con urbs – urbis, cuyo genitivo del plural es urbium.
A. Cuarta declinación: Tema en u
Estos sustantivos pueden tener dos terminaciones:
US, son masculinos y femeninos. U, son neutros.
A. Quinta declinación: Tema en e
Son todos sustantivos femeninos, excepto dies – diei y sus compuestos que son masculinos. No tiene sustantivos neutros. Aparecen en esta declinación muchos sustantivos que son abstractos, por lo que sólo se encontrarán en singular.
El siguiente cuadro refleja las terminaciones de las cinco declinaciones latinas:
1ª Declinac. 2ª Declinación 3ª Declinación 4ª Declinación 5ª Declinac.
Tema en a Tema en o Tema en consonante Tema en i Tema en u Tema en e
Mas. / Fem. Masc. / Fem. Neutro Mas/Fem. Neut. Masc./Fem. Neut. Mas./Fem. Neutro Masc. / Fem.
Sg. Plu. Sg. Plu. Sg. Plu. Sg. Plu. Plu. Sg. Plu. Plu. Sg. Plu. Sg. Plu. Sg. Plu.
Nom A AE US/ER I UM A ES A ES IA US US U A ES ES
Voc A AE E / ER I UM A ES A ES IA US US U A ES ES
Acu AM AS UM OS UM A EM ES A EM ES IA UM US U A EM ES
Gen AE ARUM I ORUM I ORUM IS UM UM IS IUM IUM US UUM US UUM EI ERUM
Dat AE IS O IS O IS I IBUS IBUS I IBUS IBUS UI IBUS UI IBUS EI EBUS
Abl A IS O IS O IS E IBUS IBUS E IBUS IBUS U IBUS U IBUS E EBUS
EL ADJETIVO
Hay tres tipos de adjetivos en latín:
A. Del tipo bonus – a – bonum
Se enuncian con el nominativo del singular del masculino, femenino y neutro respectivamente. Se declinan como sustantivos de la segunda declinación los masculinos y neutros y como sustantivos de la primera declinación los femeninos.
Siguen esta norma los acabados en ER – A – UM (pulcher – pulchra – pulchrum).
B. Declinados como los sustantivos de la tercera declinación con tema en consonante
Se enuncian dando el nominativo y genitivo, que sirven para los tres géneros: vetus – veteris. Hay que tener en cuenta que el ablativo singular acaba en E y el genitivo plural en UM.
C. Declinados como los sustantivos de la tercera declinación con tema en i
Dentro de estos adjetivos se diferencian, a su vez, tres tipos:
a. De tres terminaciones, que equivalen a masculino, femenino y neutro: acer – acris – acrum, en los que el nominativo del femenino es siempre igual al genitivo.
b. De dos terminaciones, que equivalen, el primer término a masculino y femenino, y el segundo a neutro: brevis – breve, fortis – forte. c. De una terminación, por lo que sirve para los tres géneros. Siguen esta declinación los adjetivos acabados en:
NS prudens – prudentis OX ferox – ferocis
AX audax – audacis IX felix – felicis
LOS VERBOS LATINOS
LA CONJUGACIÓN LATINA
Así como el sustantivo se enuncia con dos términos, nominativo y genitivo, el verbo se enuncia con cinco términos:
1ª persona del singular de Presente de Indicativo. 2ª persona del singular de Presente de Indicativo. Infinitivo. 1ª persona del singular del Pretérito Perfecto de Indicativo. Supino.
Con la segunda persona del singular de Presente de Indicativo obtendremos todos los tiempos simples:
Presente: amo Pretérito Imperfecto: amaba Futuro Imperfecto o Simple: amaré
Con la primera persona del singular del Pretérito Perfecto obtendremos los tiempos compuestos:
Pretérito Perfecto. Se traduce al español como: Pretérito Perfecto: he amado Pretérito Anterior: hube amado Pretérito Indefinido: amé
Pretérito Pluscuamperfecto: había amado Futuro Perfecto: habré amado
Hay cuatro conjugaciones, o cinco si contamos una conjugación mixta, que mezcla la tercera y la cuarta. Las conjugaciones se reconocen en la 2ª persona del singular del Presente de Indicativo, al eliminar la desinencia obtenemos el tema de cada conjugación:
1ª conjugación: Tema en a
amo – amas – amare – amavi – amatum
laudo – laudas – laudare – laudavi – laudatum
2ª conjugación: Tema en e
habeo – habes – habere – habui – habitum
debeo – debes – debere – debui – debitum
3ª conjugación: Tema en consonante
rego – regis – regere – rexi – rectum
sumo – sumis – sumere – sumpsi – sumptum
Los casos de regis y sumis serían en realidad regs y sums, pero por evolución fonética se introdujo la vocal, por ser más fácil su pronunciación.
4ª conjugación: Tema en i
audio – audis – audire – audivi – auditum
5ª conjugación o mixta: Mezcla la 3ª y 4ª declinación
capio – capis – capere – cepi – captum
1ª persona singular Tema de Presente
2ª persona singularTema de Presente
Infinitivo
1ª persona singular Pret. PerfectoTema de Perfecto
Supino Temas
1ª Conj. Amo Amas Amare Amavi Amatum Tema en a
2ª Conj. Moneo Mones Monere Monui Monitum Tema en e
3ª Conj. Rego Regis Regere Rexi Rectum Tema en consonante
4ª Conj. Audio Audis Audire Audivi Auditum Tema en i
5ª Conj. Capio Capis Capere Cepi Captum Mezcla 3ª y 4ª conjugación
Con el tema de presente se forma:
- Presente
- Futuro Simple
- Pretérito Imperfecto
Con el tema de perfecto se forma:
- Pretérito Perfecto
- Futuro Compuesto
- Pretérito Pluscuamperfecto
LA FORMACIÓN DE LOS VERBOS REGULARES EN INDICATIVO
Los verbos regulares se forman añadiendo una serie de características modales y temporales y las desinencias propias de cada persona al tema del verbo, según su correspondiente conjugación, tal como muestra la tabla siguiente:
TIEMPO Temas Característicamodal-temporal Desinencias
Presente(amo)
Tema de Presente
AM (A)
MONE
REG (I)
AUDI
CAPI
O
S
T
MUS
TIS
NT
Pretérito Imperfecto(amaba)
Tema de Presente
AMAMONE BA
M
S
T
MUS
TIS
NT
REG
AUDI
CAPI
EBA
Futuro Simple o Imperfecto (amaré)
Tema de Presente
AMAMONE
B O
BI
S
T
MUS
TIS
BU NT
REG
AUDI
CAPI
A M
E
S
T
MUS
TIS
NT
Pretérito Perfecto(amé / he amado / hube amado)
Tema de Perfecto
AMAV
MONU
REX
AUDIV
CEP
I
ISTI
IT
IMUS
ISTIS
ERUNT / ERE
Pretérito Pluscuamperfecto(había amado)
Tema de Perfecto
AMAV
MONU
REX
AUDIV
CEP
ERA
M
S
T
MUS
TIS
NT
Futuro Perfecto o Compuesto(habré amado)
Tema de Perfecto
AMAV
MONU
REX
AUDIV
CEP
ER O
ERI
S
T
MUS
TIS
NT
LA FORMACIÓN DE LOS VERBOS REGULARES EN SUBJUNTIVO
El Pretérito Imperfecto de Subjuntivo se forma con el Infinitivo de Presente más las desinencia correspondientes a las personas.
El Pretérito Pluscuamperfecto de Subjuntivo se forma con el Infinitivo de Perfecto más las desinencias correspondientes a las personas.
TIEMPO Temas Característicamodal-temporal Desinencias
Presente(ame)
Tema de Presente
AM E M
S
T
MUS
TIS
NT
MONE
REG
AUDI
CAPI
A
Pretérito Imperfecto(amare o amase)
Tema de Presente
AMA
MONE
REGE
AUDI
CAPE
RE M
S
T
MUS
TIS
NT
Infinitivo Presente
Pretérito Perfecto(haya amado)
Tema de Perfecto
AMAV
MONU
REX
AUDIV
CEP
ERI
M
S
T
MUS
TIS
NT
Pretérito Pluscuamperfec.(hubiera o hubiese amado)
Tema de Pasado
AMAV
MONU
REX
AUDIV
CEP
ISSE
M
S
T
MUS
TIS
NT
Infinitivo Perfecto
INDICATIVO Y SUBJUNTIVO DEL VERBO "SUM"
El verbo sum + CC con in = haber
El verbo sum es un verbo copulativo e irregular, por lo que no sigue las normas de conjugación generales. Una de sus características es que carece de supino, por lo que su enunciación es así:
SUM – ES – ESSE – FUI
MODO INDICATIVO
PresenteSoy
Pretérito ImperfectoEra
Futuro SimpleSeré
Sum
Es
Est
Sumus
Estis
Sunt
Eram
Eras
Erat
Eramus
Eratis
Erant
Ero
Eris
Erit
Erimus
Eritis
Erint
Pretérito Perfecto Pretérito Pluscuamperfecto Futuro Perfecto
Fui/ He sido/ Hube sidoSe forma con el tema de perfecto (fu)
+ Pretérito Imperfecto
Había sido
Se forma con el tema de perfecto (fu) + Futuro
Simple
Habré sido
Fui
Fuisti
Fuit
Fuimus
Fuistis
Fuerunt/Fuere
Fueram
Fueras
Fuerat
Fuermus
Fueratis
Fuerant
Fuero
Fueris
Fuerit
Fuerimus
Fueritis
Fuerint
MODO SUBJUNTIVO
PresenteSea
Pretérito ImperfectoFuera o fuese / Sería
Sim
Sis
Sit
Simus
Sitis
Sint
Essem
Esses
Esset
Essemus
Essetis
Essent
PRETÉRITO PERFECTOHaya sido
PRETÉRITO PLUSCUAMPERFECTO
Se forma con el tema de perfecto (fu) + el infinitivo de presente (esse)
Hubiera o hubiese sido
Fuerim
Fueris
Fuerit
Fuerimus
Fueritis
Fuerint
Fuissem
Fuisses
Fuisset
Fuissemus
Fuissetis
Fuissent
LOS PRONOMBRES PERSONALES
Sólo hay dos pronombres personales en latín, de primera y de segunda persona, que no tienen caso vocativo:
Casos1ª persona 2ª persona
SignificadoSingular Plural Singular Plural
Nominativo EGO NOS TU VOS Yo
Vocativo TU VOS ¡Tú!
Acusativo ME NOS TE VOS A mí
Genitivo MEI NOSTRUM / I TUI VESTRUM / I De mí
Dativo MIHI NOBIS TIBI VOBIS Para mí
Ablativo ME (CUM) NOBIS (CUM) TE (CUM) VOBIS (CUM) Conmigo
Pronombre Reflexivo
Sólo hay un pronombre reflexivo, que corresponde a la tercera persona, por tanto no tiene vocativo ni nominativo:
Casos3ª persona Significado
Singular Plural
Nominativo
Vocativo
Acusativo SE SE / SESSE A sí
Genitivo SUI SUI De sí
Dativo SIBI SIBI Para sí
Ablativo SE (CUM) SE (CUM) Consigo
Pronombres Posesivos
Casos
Masculino Femenino Neutro
Sing. Plural Sing. Plural Sing. Plural
UN POSEEDOR
1ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
MEUS
MEUM
MEI
MEO
MEO
MEI
MEOS
MEORUM
MEIS
MEIS
MEA
MEAM
MEAE
MEAE
MEA
MEAE
MEAS
MEARUM
MEIS
MEIS
MEUM
MEUM
MEI
MEO
MEO
MEA
MEA
MEORUM
MEIS
MEIS
2ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
TUUS
TUUM
TUI
TUO
TUO
TUI
TUOS
TUORUM
TUIS
TUIS
TUA
TUAM
TUAE
TUAE
TUA
TUAE
TUAS
TUARUM
TUIS
TUIS
TUUM
TUUM
TUI
TUO
TUO
TUA
TUA
TUORUM
TUIS
TUIS
3ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
SUUS
SUUM
SUI
SUO
SUO
SUI
SUOS
SUORUM
SUIS
SUIS
SUA
SUAM
SUAE
SUAE
SUA
SUAE
SUAS
SUARUM
SUIS
SUIS
SUUM
SUUM
SUI
SUO
SUO
SUA
SUA
SUORUM
SUIS
SUIS
VARIOS POSEEDORES
1ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
NOSTER
NOSTRUM
NOSTRI
NOSTRO
NOSTRO
NOSTRI
NOSTROS
NOSTRORUM
NOSTRIS
NOSTRIS
NOSTRA
NOSTRAM
NOSTRAE
NOSTRAE
NOSTRA
NOSTRAE
NOSTRAS
NOSTRARUM
NOSTRIS
NOSTRIS
NOSTRUM
NOSTRUM
NOSTRI
NOSTRO
NOSTRO
NOSTRA
NOSTRA
NOSTRARUM
NOSTRIS
NOSTRIS
2ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
VESTER
VESTRUM
VESTRI
VESTRO
VESTRO
VESTRI
VESTROS
VESTRORUM
VESTRIS
VESTRIS
VESTRA
VESTRAM
VESTRAE
VESTRAE
VESTRA
VESTRAE
VESTRAS
VESTRARUM
VESTRIS
VESTRIS
VESTRUM
VESTRUM
VESTRI
VESTRO
VESTRO
VESTRA
VESTRA
VESTRARUM
VESTRIS
VESTRIS
3ª PERSONA
N
Ac
G
D
Ab
SUUS
SUUM
SUI
SUO
SUO
SUI
SUOS
SUORUM
SUIS
SUIS
SUA
SUAM
SUAE
SUAE
SUA
SUAE
SUAS
SUARUM
SUIS
SUIS
SUUM
SUUM
SUI
SUO
SUO
SUA
SUA
SUORUM
SUIS
SUIS
El resto de los pronombres tienen las siguientes características comunes:
No tienen vocativo. El genitivo del singular tiene como desinencia IUS para los tres géneros. El dativo del singular tiene como desinencia I para los tres géneros. El resto de los casos se declinan como bonus – a –um.
PRONOMBRES DEMOSTRATIVOS
Al igual que en español hay tres pronombres demostrativos, que indican la mayor o menor cercanía del objeto al hablante:
Masculino Femenino Neutro
Singular Plural Singular Plural Singular Plural
HIC - HAEC - HOC = ESTE - ESTA - ESTO
N
Ac
HIC
HUNC
HI
HOS
HAEC
HANC
HAE
HAS
HOC
HOC
HAEC
HAEC
G
S
Ab
HUIUS
HUIC
HOC
HORUM
HIS
HIS
HUIUS
HUIC
HAC
HARUM
HIS
HIS
HUIUS
HUIC
HOC
HORUM
HIS
HIS
ISTE - ISTA - ISTUD = ESE - ESA - ESO
N
Ac
G
D
Ab
ISTE
ISTUM
ISTIUS
ISTI
ISTO
ISTI
ISTOS
ISTORUM
ISTIS
ISTIS
ISTA
ISTAM
ISTIUS
ISTI
ISTA
ISTAE
ISTAS
ISTARUM
ISTIS
ISTIS
ISTUD
ISTUD
ISTIUS
ISTI
ISTO
ISTA
ISTA
ISTORUM
ISTIS
ISTIS
ILLE - ILLA - ILLUD = AQUEL - AQUELLA - AQUELLO
N
Ac
G
D
Ab
ILLE
ILLUM
ILLIUS
ILLI
ILLO
ILLI
ILLOS
ILLORUM
ILLIS
ILLIS
ILLA
ILLAM
ILLIUS
ILLI
ILLA
ILLAE
ILLAS
ILLARUM
ILLIS
ILLIS
ILLUD
ILLUD
ILLIUS
ILLI
ILLO
ILLA
ILLA
ILLORUM
ILLIS
ILLIS
PRONOMBRES INDEFINIDOS
QUIS – QUAE (QUA) – QUID (QUOD) Alguien, algo
QUIDAM – QUAEDAM – QUIDDAM (QUODDAM) Cierto hombre
QUISQUE – QUAEQUE – QUIDQUE (QUODQUE) Cada uno, cada cual
ALIQUIS (ALIQUI) – ALIQUA – ALIQUID (ALIQUOD) Alguien, algún, algo
Todos los pronombres anteriores se declinan como los relativos e interrogativos.
UNUS – UNA – UNUM Solo, único (solamente, únicamente)
SOLUS – SOLA – SOLUM Solo
TOTUS – TOTA – TOTUM Todo, toda, todo
ALTER – ALTERA – ALTERUM El uno, el otro (de dos)
ALIUS – ALIA – ALIUD El otro, otro (de más de dos)
Los pronombres anteriores se declinan como el adjetivo bonus – a – um.
NULLUS – NULLA – NULLUM Ninguno, ningún
Sólo se declina en:
Genitivo singular nullius Dativo singular nulli
NEMO, Nadie (masc. y fem.)
NIHIL, Nada (neutro)
El uso de estos tres últimos indefinidos es particular, puesto que sólo se utilizan en los siguientes casos:
Casos Masculino y Femenino Traducción Neutro Traducción
N.
Ac.
G.
D.
Ab.
Nemo
Neminem
Neminis
Nemini
Nullo (nullus – nulla – nullum)
Nadie
A nadie
De nadie
Para nadie
Con ninguno
NihilNihil
NadaA nada
Dos términos negativos en latín producen una afirmación:
Non nullus venit = No nadie viene = Aliquis venit = Alguien viene
Pronunciacion
* C/c siempre sonido [k], por lo tanto 'fecit' suena [fekit] * G/g siempre com [gu] en 'guerra'; 'regina' suena [reguina] * H/h al comienzo de palabra ligeramente aspirada /parecido a la 'h' de 'home'/. Así se distingue, al hablar, 'habes' (tienes) de 'abes' (estás ausente). En todos los otros casos nunca se pronuncia: pulcher [pulker], rhetoricam [retoricam], thesaurus [tesaurus]. Pero después de 'p' se pronuncia como la 'f', ejemplo: philosophia [filosofia]. * LL/ll se pronuncia como 'l' doble, 'puella' [puel-la], 'illorum [il-lorum]. Igual en el caso de otras * consonantes dobles: accidere [ak-kidere], appellare [ap-pel-lare], difficilis [dif-ficilis] V/u siempre se pronuncia como u: quidam [kuidam], sanguinemque [sangüinemkue], Vinum [uinum] * S la 's' inicial siempre se pronuncia, al igual que en ingles, schola [skola], scire [skire]. * X/x suena como 'ks', dixerat [dikserat], duxit [duksit] * Y/y suena como la 'u' del francés o la ü del alemán. * Z/z suena 'ds'; Xenonem [dsenonem], gaza [gadsa] * ae/oe las dos vocales forman diptongo. Se pronuncian aunque la e tiene un sonido cerrado: rosae [rósae]
Alfabeto
Mayúsculas:
A B C D E F G H I K L M N O P Q R S T V X Y Z
Minúsculas:
a b c d e f g h i k l m n o p q r s t u x y z
Casos
A diferencia del español, el francés, el italiano, el inglés y otras lenguas, no hay artículos en latín y los sustantivos y adjetivos varian en sus terminaciones, llamadas "desinencias". Éstas indican su función dentro de la oración. Veamos los seis casos de esta lengua:
Nota: Los "casos" son a los sustantivos lo que las "conjugaciones" son a los verbos.
Declinaciones
I Declinación
Casi todos los sustantivos de la primera declinación son femeninos, excepto un reducido número que son masculinos, como nauta, que es marinero. (Casi todos los masculinos son profesiones)
II Declinación
La mayoría de los sustantivos son masculinos y pueden terminar en -us, -er y -um
III Declinación
La mayoría de los sustantivos son masculinos y pueden terminar en -us, -er y -um
IV Declinación
La mayoría de los sustantivos son masculinos; manus es el único femenino
V Declinación
Todos los susntantivos de la 5ª declinación son femeninos, excepto dies que puede ser masculino o femenino.
Verbos. Voz Activa
Enunciados verbales:
amo, amas, amare, amaui, amatum (amar);
moneo, mones, monere, monui, monitum (avisar, aconsejar);
rego, regis, regere, rexi, rectum (gobernar, dirigir)
audio, audis, audire, auduvi, auditum (oir)
capio, capis, capere, cepi, captum (tomar, conquistar)
sum, es, esse, fui (ser)
possum, potes, posse, potui (poder, ser capaz);
eo, is, ire, iui, itum (ir)
Verbos Irregulares II
volo, vuele, volui (quiero)
nolo, nolle, nollui (no quiero, rehuso)
malo, malle, malui (prefiero)
fero, ferre, tuli, latum (llevo)
Circunstanciales de lugar
(Por si alguien lo ve chico o no entiende aca les dejo un link de una imagen de Tinypic para verlo bien, porque en la previsualizacion yo lo veia chico).
Link: http://i35.tinypic.com/2mequix.jpg
Yapa(Gracias ricardo_cssr por facilitarme esta introducción, aca dejo el link a su post http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/1858150/Introducci%C3%B3n-al-lat%C3%ADn.html): INTRODUCCION AL LATÍN.
Esta carpeta la preparé para alumnos que no tienen ningún conocimiento de la lengua latina. Basta saber bien la gramática castellano y de allí a lanzarse de lleno al latín.
UNIDAD 1
La lengua latina
El latín, lengua indoeuropea
El latín es una lengua de la “familia lingüística” conocida con el nombre de indoeuropea. Por familia lingüística se entiende el conjunto de lenguas que presentan unos rasgos básicos comunes en los distintos niveles del lenguaje: fonológico, léxico, morfológico, sintáctico. Estas coincidencias atestiguan un origen común, en una época remota y una zona limitada, a partir de las cuales se producirán la expansión y la posterior fragmentación.
A la familia indoeuropea pertenecen el latín y la mayoría de las lenguas habladas en Europa, tanto en el pasado como en el presente, además de algunas de Asia meridional que se extienden por la zona que va desde la actual Turquía hasta la India.
El origen de esta “familia” se remonta a hace mas de cinco mil años y se sitúa, según la teoría mas aceptada, en una zona al norte del mar Negro, entre la desembocadura del Danubio y los montes Urales.
Nacimiento y desarrollo del latín.
Cuando los inmigrantes indoeuropeos llegan a Italia entran en contacto con otros pueblos establecidos en la península. Los contactos de estos pueblos entre sí y con los pobladores autóctonos dan como resultado un intercambio de influencias culturales y lingüísticas que van moldeando las distintas lenguas.
El latín aparece hacia el año 1000 a. C. en el centro de Italia, al sur del río Tíber, entre los Apeninos y el mar Tirreno, en una región llamada Latium (Lacio), de donde proviene el nombre de la lengua y el de sus primeros habtantes, los latinos.
Junto al latín aparecen las otras dos lenguas del “grupo itálico”: el osco, al sur del Lacio, y el umbro, al noreste.
De las varias formas dialectales del latín primitivo (cada ciudad del Lacio tenía la suya), enseguida acabó imponiéndose la de Roma, a causa de su pronta hegemonía sobre toda la región.
Este latín “romano” se fue extendiendo a medida que se extendía también el dominio de Roma, primero en Italia, más tarde en los países ribereños del Mediterráneo occidental (incluida la Península Ibérica) hasta abarcar finalmente la Europa central, desde las Islas Británicas hasta Rumanía.
Tras la caída del Imperio Romano de Occidente, ocurrida en el siglo V, el latín continuó siendo la lengua común de gran parte de este territorio, hasta su fragmentación y transformación en las distintas lenguas románicas (siglos VIII-IX). Son, pues, dos mil años de uso ininterrumpido del latín, desde antes incluso de que Roma existiese hasta después de que dejara de ser la capital del Imperio.
Por lo que se refiere a la Península Ibérica, la presencia de la lengua latina duró alrededor de doce siglos (recordemos que la conquista romana se inicia en el siglo III a. C.).
El latín vulgar
A este latín “hablado”, corriente, popular, se le llama latín vulgar. Es una lengua en continua evolución y con diferencias dialectales entre las regiones de la misma Italia, y más aun entre las diferentes provincias del Imperio (así, por ejemplo, puede hablarse de la existencia de un latín “hispano”, “galo”, “africano”, etc.).
Al descomponerse el Imperio y empezar la Edad Media, la evolución y fragmentación de la lengua se aceleran y acentúan hasta que el latín se convirtió en otra lengua, en parte igual y en parte distinta del latín tradicional, a la que ya en el siglo IX empezó a llamarse lingua romana rustica, de donde procede el nombre de lenguas románicas o romances para denominar a las diversas lenguas nacionales a que dio lugar. No obstante, muchas de las diferencias entre éstas y el latín literario ya se habían iniciado en el latín vulgar.
El latín literario
A partir del siglo III a.C. comienza la literatura en latín: y con ella, el latín literario, culto, escrito. Tras un primer periodo de formación que tiene lugar en el siglo I a.C., el latín literario, fijado ya por las primeras gramáticas, se convierte en una de las grandes lenguas literarias de la antigüedad (lenguas “clásicas”), y como tal, a diferencia del latín vulgar, permanece prácticamente inalterado y unificado a través de los siglos; autores como Cicerón, Virgilio y Tácito, entre otros, dan fe de ello en distintas épocas de la antigüedad. En épocas posteriores, Tomas de Aquino, Dante, Petrarca...
Este latín culto, además de ser la lengua de la literatura en sentido estricto, fue la lengua en la que se transmitió todo el legado cultural romano: derecho, ciencia, lingüística, filosofía, etc.
El conocimiento del latín culto no plantea problemas, ya que poseemos documentos escritos. En cambio, apenas se conservan testimonios escritos en latín vulgar.
Pervivencia de latín
A lo largo de la Edad Media, el latín siguió siendo lengua de expresión de la cultura y alcanzó una revitalización extraordinaria en el Renacimiento (los humanistas como Erasmo o Luis Vives eran consumados latinistas). Como lengua de expresión culta y científica su uso se mantuvo hasta el siglo XVIII (Descartes, Leibniz, Newton, Linneo); y como lengua oficial de la Iglesia católica se ha mantenido en la liturgia y en sus documentos (en las encíclicas papales, por ejemplo) hasta la actualidad.
Ese carácter de vehículo de expresión universal de la cultura, romana primero y europea después, hizo que el latín estuviera presente en los estudios de los niveles medio y superior de todos los países civilizados durante tantos siglos. La presencia en los estudios ha sido además preeminente hasta hace no mucho.
A esta causa se debe también que todas las lenguas europeas, no sólo las lenguas románicas, hayan visto enriquecido su vocabulario con un gran número de palabras de raíz latina (cultismos) Asimismo puede apreciarse en muchas de esas lenguas el mantenimiento del uso habitual de expresiones latinas, no sólo en el nivel culto del lenguaje sino también muchas de ellas en el nivel coloquial.
Las lenguas romances
Ya dijimos que el origen de las lenguas románicas o romances hay que buscarlo en ese latín “vulgar” tardío transformado y fragmentado, bautizado con la denominación de lingua romana rustica en un concilio del siglo IX (para diferenciarla de las lenguas “bárbaras”, por un lado, y del latín “culto”, por otro).
Fue este un proceso que podría calificarse de “metamorfosis”. Una parte importante del sistema lingüístico latino permaneció en todas las lenguas románicas. Pero hubo cambios (innovaciones y pérdidas) muy sustanciales que afectaron a los distintos aspectos de la lengua: pronunciación, morfología, sintaxis, léxico. El sistema se convirtió en otro, con diferencias también sustanciales entre las lenguas de los distintos reinos medievales. Estas diferencias fueron aumentando con el paso del tiempo hasta la fijación definitiva de las distintas lenguas románicas. Entre las muestras escritas que nos han llegado de este latín y las primeras de las diversas lenguas románicas (siglos VIII-X) hay todavía muy poca diferencia.
Las principales lenguas romances, o sea “hijas” o derivadas del latín son:
*- Castellano (Español): España, Hispanoamérica, presencia decreciente en Filipinas y creciente en EE UU. (hablantes nativos: 352.000.000)
*- Portugués: Portugal, Brasil, Angola, Mozambique, archipiélagos de Madeira y Azores. (hablantes nativos: 170.000.000)
*- Francés: Francia, sur de Bélgica, cantones occidentales de Suiza, Antillas, Canadá (Quebec), países francófonos de Africa. (hablantes nativos: 72.000.000)
*- Italiano: Italia. (hablantes nativos: 40.000.000)
*- Rumano: Rumanía. (hablantes nativos: 26.000.000)
*- Gallego: Galicia. (hablantes nativos: 4.000.000)
*- Catalán: Cataluña, Rosellón (Francia), Andorra, Islas Baleares, Comunidad Valenciana. (hablantes nativos: 4.000.000)
*- Provenzal (Occitano): Provenza (sureste de Francia). (hablantes nativos: 3.000.000)
*- Sardo: Cerdeña. (hablantes nativos: 1.500.000)
*- Retorromano (Rético): Alpes. (hablantes nativos: 400.000)
El castellano es la lengua románica con mayor número de hablantes; la mayor parte de ellos pertenecen al continente americano.
Uso moderno del latín
Hoy en día, el latín sigue siendo utilizado como lengua litúrgica oficial de la Iglesia Católica de rito latino. Es la lengua oficial de la Santa Sede. Su estatus de lengua muerta le confiere particular utilidad para usos litúrgicos y teológicos, ya que es necesario que los significados de las palabras se mantengan estables. Así, los textos que se manejan en esas disciplinas conservarán su significado y su sentido para lectores de distintos siglos. Además, esta lengua se usa en medios radiofónicos y de prensa de la Ciudad del Vaticano. El Papa entrega sus mensajes escritos en este idioma; las publicaciones oficiales de la Santa Sede son en latín, en base a las cuales se crean las demás traducciones.
Por otra parte, la nomenclatura de especies y grupos de la clasificación biológica sigue haciéndose con términos en latín o latinizados. Además de la terminología de la filosofía y medicina, donde se preservan muchos términos, locuciones y abreviaciones latinas. En la cultura popular aún puede verse escrito: en los lemas de las universidades o algunas organizaciones, publicaciones de libros, o incluso oral, en los diálogos de algunas películas situadas en un escenario romano como La Pasión de Cristo.
UNIDAD 2
Repasemos algunas nociones básicas y a la vez fundamentales de la gramática castellana, porque el latín es una lengua muerta (que ya no se habla) y por lo tanto vamos a aprenderlo en relación a nuestra propia lengua, que es hija del latín.
Sujeto y predicado
La oración es un pensamiento expresado con palabras y tiene dos elementos principales, llamados términos de la oración y son: el sujeto y el predicado.
El sujeto es la palabra que indica la persona, animal o cosa de la cual se habla en la oración. Ejemplos:
Belgrano fue general. Buenos Aires es la capital de la Argentina. Los gallos cantan. La mesa es de madera.
El predicado es todo aquello que se afirma o niega (lo que se dice) del sujeto. Ejemplos:
Belgrano fue general. Buenos Aires es la capital de la Argentina. Los gallos cantan. La mesa es de madera.
El predicado puede ser de dos clases:
* Nominal, cuando está expresado por el verbo ser/estar. Ejemplos: El perro es fiel. Buenos Aires es la capital de la Argentina. La mesa era de madera. Las flores son hermosas. Mis hermanos fueron abogados.
* Verbal, cuando está expresado por cualquier otro verbo. Ejemplos: Los gallos cantan. Los alumnos estudiarán latín. Los soldados combatieron al enemigo.
Para encontrar el sujeto y el predicado en la oración seguiremos los siguientes pasos.
1.Se buscará y señalará el verbo (o sea la palabra que indica la acción).
2.Se buscará el sujeto haciendo la pregunta ¿Quién? o ¿Quiénes? y el verbo señalado.
3.El predicado se encontrará preguntando ¿Qué se dice del sujeto?
Las respuestas encontradas serán el sujeto (Suj) y el predicado (PN o PV). Ejemplo:
Los alumnos estudiarán latín.
1.Señalamos el verbo: estudiarán
2.Hacemos la pregunta: ¿Quiénes estudiarán? Respuesta: Los alumnos
3.Hacemos la pregunta: ¿qué se dice de los alumnos? Respuesta: que estudiarán latín.
El atributo o Predicativo obligatorio
Cuando el predicado es nominal, la función que le sigue se llama atributo o predicativo obligatorio. Miremos las siguientes oraciones que tienen predicado nominal:
El agua era turbia. Las joyas fueron robadas. Belgrano fue general. El niño es bueno.
Las palabras subrayadas son los atributos, y pueden ser sustantivos o adjetivos: general, turbia, bueno, robadas. Para encontrar el atributo (At.) o predicativo obligatorio (PO) seguiremos los siguientes pasos.
1.Se busca y señala el sujeto.
2.Se antepone la pregunta ¿Cómo es, era, será, etc.? o ¿Qué es, era, será, fue, etc.? el sujeto señalado.
El agua era turbia.
1.Señalamos el sujeto: El agua.
2.Hacemos la pregunta ¿Cómo era el agua? Respuesta: turbia
Objeto directo
Es la palabra sobre la cual recae directamente la acción expresada por el verbo.
El juez dictará sentencia . El tren no pudo frenar. Los alumnos estudiarán latín. Los soldados combatieron al enemigo.
Para encontrar el objeto directo seguiremos los siguientes pasos:
1.Se buscará y señalará el verbo y el sujeto. (De la forma señalada en la página anterior)2.Se les antepone la pregunta ¿Qué cosa?, ¿A quién? y el verbo y el sujeto señalado.
3.La respuesta es el objeto directo (OD).
El juez dictará sentencia. Los soldados combatieron al enemigo.
1.Señalamos el verbo: dictará; combatieron
2.Hacemos la pregunta para el Suj: ¿Quién dictará? Respuesta: El juez ¿Quienes combatieron? Respuesta: Los soldados.
3.Hacemos la pregunta para el OD: ¿qué cosa dictará el juez? Respuesta: sentencia. ¿A quién combatieron los soldados? Respuesta: al enemigo.
Objeto Indirecto
Es la palabra que designa al ser en quien termina o se cumple una acción, denotando la persona o cosa que se beneficia o no con la acción.
Se reconoce este complemento (OI) haciendo las preguntas ¿A quién? ¿Para quién? si se trata de personas y ¿A qué? ¿Para qué cosa? Si se trata de animales o cosas. Y otra manera de reconocerlos es que aparecen con las preposiciones a, al o para .
Daré dinero a Santiago. Compré flores para ti. Ambrosio dio limosnas para los pobres (a los pobres).
¿A quién daré dinero? ¿Para quién compré flores? ¿A quién (para quién) dio limosnas?
Modificador Indirecto
Es la palabra que determina a un sustantivo o indica la pertenencia de algo o alguien.
Se reconoce este complemento (MI) haciendo las preguntas ¿de quién? ¿de qué cosa? Y suelen aparecer con las preposiciones de o del.
El reloj de la torre dio las doce. El amigo de papá vendrá a cenar. Compré un ramo de rosas.
Complementos circunstanciales
Son las que complementan la significación del verbo expresando algunas circunstancias en que se cumple esta función. Hay circunstancias de lugar, tiempo, causa, medio, modo, compañía y otros más.
Por lo tanto, tenemos tantos complementos circunstanciales como sean las circunstancias indicadas.
Voy a la escuela. Estaré en casa. Los alumnos estudiarán por la tarde. Juego al fútbol con mis amigos. El atleta corría rápidamente.
Circunstancias: ¿A dónde voy? ¿En dónde estaré? ¿Cuándo estudiarán? ¿Con quién juego? ¿Cómo corría?
La invocación
Es la que designa a la persona o cosa a la cual se dirige la palabra. Muchas veces suele ir de la expresión ¡Oh…!
¡Juan! Haz silencio. Señor, danos tu salvación. ¡Jóvenes! Guarden mis consejos.
Muy importante: La invocación no es el sujeto de la oración, pero suele darnos una indicación de quién es. Generalmente el sujeto es tácito y suele ser la 2ª persona Tú o Vosotros (Ustedes).
UNIDAD 3
El acento en las palabras latinas:
En latín no existe acento gráfico. El acento viene marcado por la cantidad de la penúltima sílaba: si la penúltima sílaba es larga, la palabra es llana (autumnus); si la penúltima sílaba es breve, la palabra es esdrújula. Hay que observar que en latín no hay palabras agudas, es decir, nunca se acentúan en la última sílaba.
Sílabas largas y breves:
En latín hay sílabas largas y sílabas breves. Son sílabas largas las que contienen una vocal larga o diptongo; son sílabas breves las que contienen una vocal breve. Las reglas más generales para determinar la cantidad de las vocales son las siguientes:
* Los diptongos son siempre largos. Los diptongos en latín clásico son: ae, au, oe, eu (caelum).
* Una vocal seguida de dos o más consonantes o consonante doble es larga (ancilla).
* Una vocal seguida de otra vocal es breve (filia).
Caso y declinación
Noción de desinencia, caso y declinación
En latín, las partes de la oración son 8:
Sustantivo, adjetivo, pronombre, verbo, adverbio, preposición, conjunción e interjección.
Las primera cuatro son variables (es decir, que cambian), mientras que las últimas son invariables.
En la unidad anterior hemos repasado algunas de las funciones más importantes que las palabras desempeñan en la oración (Suj., At., PO, OD, OI, MI, CC., etc.); en el latín, esas diversas funciones se determinan NO por las preposiciones que suelen acompañarlas (de, del, a, al, para, con, etc.), sino por las diferentes terminaciones (desinencias) que adopta la palabra. Veamos un ejemplo: Deus, Deo, Deum, Dei son palabras que
corresponden a un mismo sustantivo, Dios, pero se escriben de diferente manera de acuerdo a la función que la palabra ocupa en la oración y se traducirán de acuerdo a esa función, como veremos más adelante. A esto nos referíamos cuando mencionábamos que las primera cuatro partes de la oración son variables.
Esas diferentes maneras de escribir las palabras variables se denominan casos . Entonces, podemos definir al caso como:
Las diferentes formas que toman los sustantivos, pronombres y adjetivos según la función que desempeñan por sus desinencias.
Una desinencia, por lo tanto, sirve para determinar si la palabra está en singular o plural, si es sujeto, atributo, objeto directo o indirecto, etc.
En latín, los casos son 6, tanto para el singular como para el plural. Observemos este cuadro clave para aprender los casos y comprender su relación con las funciones dentro de la oración.
Caso Corresponde a las Ejemplo
funciones
NOMINATIVO Sujeto, Belgrano fue general.
Atributo o Predicativo
obligatorio Belgrano fue general.
VOCATIVO Invocación ¡Oh Juan! haz silencio.
ACUSATIVO Objeto Directo El juez dictará sentencia.
GENITIVO Modificador Indirecto El amigo de papá vendrá a cenar.
DATIVO Objeto Indirecto Ambrosio dio limosnas para los pobres (a los pobres).
ABLATIVO Complementos Circunstanciales Estaré en casa. Los alumnos
estudiarán por la tarde. Juego al
fútbol con mis amigos.
La recitación completa de los casos tanto en singular como plural es lo que llamamos declinación. O vamos a definirla de la siguiente manera:
Declinar es hacer pasar ordenadamente a una palabra por sus desinencias o casos
Veamos dos ejemplos de una declinación castellana.
Casos Singular Plural
Nominativo La rosa Las rosas
Vocativo Oh rosa! ¡Oh rosas!
Acusativo A la rosa A las rosas
Genitivo De la rosa De las rosas
Dativo Para la rosa Para las rosas
Ablativo Con, por, sin, en la rosa Con, por, sin, en las rosas
Casos Singular Plural
Nominativo El alumno Los alumnos
Vocativo ¡Oh alumno! ¡Oh alumnos!
Acusativo Al alumno A los alumnos
Genitivo Del alumno De los alumnos
Dativo Para el alumno Para los alumnos
Ablativo Con, por, sin, en el alumno Con, por, sin, en los alumnos
Noción de raíz y desinencia
Hemos dicho ya que las palabras latinas varían y su caso se determina por su desinencia o terminación esto quiere decir que las palabras latinas tienen dos partes:
* La parte invariable (permanece igual en toda la declinación) llamada raíz.
* La parte variable (que cambia en la declinación) de acuerdo a las distintas terminaciones, llamada desinencia.
Veamos el ejemplo siguiente:
Deus, Deum, Deo, Dei
La raíz del ejemplo será De-, y las desinencias serán -us, -um, -i, -o. Ya veremos como se obtiene la raíz de una palabra.
Las declinaciones latinas
Las declinaciones latinas son cinco y se denominan primera, segunda, tercera, cuarta y quinta.
Se diferencian una de otras por la desinencia o terminación del caso GENITIVO SINGULAR. Veamos el siguiente cuadro explicativo
DECLINACIÓN DESINENCIA DEL GENITIVO SINGULAR
Primera -AE
Segunda -I
Tercera -IS
Cuarta -US
Quinta -EI
Otras características que tiene el latín:
* En el latín no existe el artículo (el, la, los, las).
* Las palabras pueden ser de género masculino, femenino (como en castellano) y un género que se perdió en nuestra lengua, el neutro (que significa ni lo uno ni lo otro). Se indicarán entre paréntesis al lado de cada palabra: (m), (f) y (n) respectivamente. Ejemplo: Columba (f), Discipulus (m), donum (n).
• Las palabras latinas se “enuncian”, es decir, se dicen una o más palabras para darnos información muy importante que nos permitirá saber:
1. Si estamos en presencia de un sustantivo, un adjetivo, un pronombre o un verbo.
2. Si son de las tres primeras mencionadas (sustantivo, adjetivo o pronombre), su declinación, su género, y como obtener la raíz y la desinencia.
3. Si es un verbo su conjugación y la manera de obtener los diferentes tiempos.
UNIDAD 4
La primera declinación Genitivo en –AE
La primera declinación comprende sustantivos femeninos (en su gran mayoría) y algunos pocos de género masculino, sobre todo nombres de oficios propios de varón: agricola, -ae (campesino), nauta, -ae (marinero), poeta, -ae (poeta); el género neutro no aparece en esta declinación.
Un sustantivo de esta declinación se enunciará de la siguiente manera: se escribirán los casos nominativo y genitivo singular. Ejemplo:
Rosa _ rosae (f): la rosa; nauta _ nautae (m): el navegante
Cuadro General de terminaciones:
Casos Singular Plural
Nominativo -a -ae
Vocativo -a -ae
Acusativo -am -as
Genitivo -ae -arum
Dativo -ae -is
Ablativo -a -is
Cómo declinar
De la palabra a declinar se obtiene la raíz quitándole la Ros / ae; la raízterminación del caso genitivo singular: Rosa, rosae obtenida es “ros” y se procederá de la siguiente manera:
Casos Singular traducción Plural traducción
Nominativo ros-a La rosa ros -ae Las rosas
Vocativo ros-a ¡Oh rosa! ros -ae ¡Oh rosas!
Acusativo ros -am A la rosa ros -as A las rosas
Genitivo ros -ae De la rosa ros -arum De las rosas
Dativo ros -ae Para la rosa ros -is Para las rosas
Ablativo ros -a Con, por, ros -is Con, por, sin,
sin, en la rosa en las rosas
También son masculinos los nombres de los ríos.
Se puede observar que hay desinencias iguales en varios casos: 3 veces en –a, 4 veces en –ae, 2 veces en –is. Pero de acuerdo a la función que ocupen en la oración se van a traducir de distintas maneras, de acuerdo a lo estudiado.
PARTICULARIDADES:
Particularidades son algunas excepciones que tienen las palabras respecto de la regla general. O sea, que no siguen fielmente el cuadro general y la manera que hemos aprendido para declinar, sino que sufren algunos cambios. Veamos cuáles son:
a. Algunos sustantivos de la primera declinación, para distinguirse de sus correspondientes masculinos, toman en el dativo y ablativo plural la terminación -abus:
• dea, deae (diosa).
• filia, filiae (hija).
• liberta, libertae (liberta).
b. Existen sustantivos en la primera declinación que sólo tienen plural (pluralia tantum)
* divitiae, divitiarum (riquezas),
* Athenae, Athenarum (Atenas).
c. Otros, por su lado, cambian de significado al cambiar de número, como:
* copia, -ae (abundancia) / copiae, -arum (tropas).