La Revelación De La Libertad Profeta Tito Pérez Estudio para Pastores Guatemala, 12 de octubre del Año De La Revelación

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Este año la revelación del Señor ha sido abundante pero sabemos que estamos cercanos al arrebatamiento y así como fue dada una proclama antes de que los israelitas salieran de Egipto, de la misma forma el Señor dará una proclama sobre nosotros, antes de que salgamos de esta tierra. Apocalipsis 1:1 (LBLA) La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la dio a conocer, enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan… A revelación es para los siervos doulos, que significa esclavo, entonces no es para todos sino solo para aquellos que están dispuestos a morir por Él, aún en medio del sufrimiento. La palabra revelación significa levantar el velo, quitar la cubierta y eso es lo que Dios quiere hacer en medio de nosotros. Lucas 16:13 (LBLA) Ningún siervo puede servir a dos señores, porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas. En este no se habla de un siervo doulos, sino un siervo okketes G3610 que se traduce como un doméstico de baja categoría, por lo cual debemos desear avanzar como siervos hasta llegar a ser esclavos del Señor por amor, pues solo así el Señor nos dará Su revelación para que la entendamos y la pongamos por obra. Proverbios 25:2 (BTA 2003) Gloria es de Dios cubrir con un velo su divina palabra; y gloria es de los reyes el investigar el sentido de ella. Es necesario que esa gloria de reyes caiga sobre nosotros y busquemos que el Señor nos levante ese velo para que la revelación de Su palabra nos sea dada. 1 Corintios 2:9 (PDT) Pero, así está escrito: «Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado y nadie ha imaginado lo que Dios tiene preparado para aquellos que lo aman». La revelación que recibiremos es gloriosa, y ya está preparada para los que amamos al Señor. Jeremías 29:11 (TLA) Mis planes para ustedes solamente yo los sé, y no son para su mal, sino para su bien. Voy a darles un futuro lleno de bienestar. El Señor ha destinado darnos un futuro lleno de bienestar en el que seremos verdaderamente libres de las cárceles que nos tienen atrapados, que no necesariamente son cárceles físicas, sino problemas y dificultades que no nos dejan ser verdaderamente libres, como lo vemos en este mismo verso en la versión Torres Amat: Jeremías 29:11 (BTA 2003) Porque yo sé los designios que tengo sobre vosotros, dice el Señor, designios de paz, y no de aflicción, para daros la libertad que es el objeto de vuestra expectación. Cuando alguien está pasando momentos difíciles, es casi imposible creer en el poder de Dios para sacarnos de problemas, para darnos esa libertad que Él ha prometido. En este sentido vemos que

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la expectación significa ansiedad, inquietud o emoción intensa que produce la espera de una cosa de interés o curiosidad, en especial cuando son muchos los que la esperan. Esperamos la promesa del Señor, y debemos creerla y recibirla como si ya hubiera sido cumplida. Juan 8:36 (LBLA) Así que, si el Hijo os hace libres, seréis realmente libres. Si Dios nos ha limpiado y nos ha liberado podremos levantar nuestras manos santas, sin acusación en ellas, creyendo que la libertad que Él nos da es verdadera. Éxodo 3:7-8 (LBLA) Y el Señor dijo: Ciertamente he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he escuchado su clamor a causa de sus capataces, pues estoy consciente de sus sufrimientos. [8] Y he descendido para librarlos de la mano de los egipcios, y para sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa, a una tierra que mana leche y miel, al lugar de los cananeos, de los heteos, de los amorreos, de los ferezeos, de los heveos y de los jebuseos. Sabemos que las cosas que le sucedieron al pueblo de Israel quedaron escritas como ejemplo para nosotros, por lo tanto podemos decir que Dios ve la aflicción y clamor de libertad de Su pueblo por estar bajo malas coberturas, por lo que nuestra misión como verdaderos siervos de Dios es proclamar esa libertad que el pueblo anhela. Es necesario entender que nuestra lucha no es contra carne ni sangre, sino contra potestades espirituales que tratan de que el pueblo permanezca en ignorancia, pues sin conocimiento el pueblo perece, sin embargo Dios da su decreto de libertad para todo aquel que lo quiera recibir. Éxodo 5:1 (LBLA) Después Moisés y Aarón fueron y dijeron a Faraón: Así dice el Señor, Dios de Israel: “Deja ir a mi pueblo para que me celebre fiesta en el desierto.” El desierto no representa solo la prueba, sino al ver el original hebreo vemos que se traduce de la palabra mitbar que también significa pastorear; esto quiere decir que aunque estemos en el valle de sombra y de muerte, el Señor nos pastoreará y nos llevará al desierto para hablar a nuestro corazón, pues lo que Él anhela es que tengamos un reinicio y que pongamos por obra todo lo que hemos aprendido, pues en eso consiste la revelación. Levítico 25:8-9 (LBLA) “Contarás también siete semanas de años para ti, siete veces siete años, para que tengas el tiempo de siete semanas de años, es decir, cuarenta y nueve años. [9] “Entonces tocarás fuertemente el cuerno de carnero el décimo día del séptimo mes; en el día de la expiación tocaréis el cuerno por toda la tierra. El cuerno del carnero anuncia el jubileo, y se tocaba en el día de la expiación, es decir el día del perdón. Cuando el shofar suena bajo la dirección de Dios, el ambiente se transforma y vivimos un Mahanaim entre el cielo y la tierra. Levítico 25:10 (LBLA) “Así consagraréis el quincuagésimo año y proclamaréis libertad por toda la tierra para sus habitantes. Será de jubileo para vosotros, y cada uno de vosotros volverá a su posesión, y cada uno de vosotros volverá a su familia.

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En este jubileo de libertad, Dios hará volver a todos aquellos que se han ido, a los que está lejos, de tal forma que volverán en sí como lo hizo el hijo pródigo, regresarán recordando que en su casa hay abundancia de pan. Levítico 25:10 (PDT) …el año cincuenta se proclamará santo y se declarará la libertad para todo el que viva en el país. Ese año se llamará el año del Jubileo. Cada uno de ustedes recuperará su propiedad y volverá a su familia. El jubileo era una fiesta solemne que los judíos celebraban cada 50 años en la que se cancelaban las deudas, se devolvían las propiedades a sus antiguos dueños y se daba la libertad a los presos. Hoy el Señor está decretando un jubileo para nosotros, por lo que debemos creerlo y recibirlo. Isaías 61:1-3 (TLA) El fiel servidor de Dios dijo: «El espíritu de Dios está sobre mí, porque Dios me eligió y me envió para dar buenas noticias a los pobres, para consolar a los afligidos, y para anunciarles a los prisioneros que pronto van a quedar en libertad. [2] »Dios también me envió para anunciar: “Este es el tiempo que Dios eligió para darnos salvación, y para vengarse de nuestros enemigos”. »Dios también me envió para consolar a los tristes, [3] para cambiar su derrota en victoria, y su tristeza en un canto de alabanza. »Entonces los llamarán: “Robles victoriosos, plantados por Dios para manifestar su poder”. Dios nos ha enviado para anunciar Su salvación. Isaías 51:14 (TLA) »Pronto serán liberados los prisioneros; no les faltará el pan ni morirán en la cárcel, Nuestro destino no es la cárcel, sino ser libres. Aunque el enemigo se oponga, el Señor nos levantará hacia nuestro destino en Cristo, y si hemos cometido errores, Él derramó Su sangre que nos limpia de todo pecado. Isaías 40:1-2 (LBLA) Consolad, consolad a mi pueblo—dice vuestro Dios. [2] Hablad al corazón de Jerusalén y decidle a voces que su lucha ha terminado, que su iniquidad ha sido quitada, que ha recibido de la mano del SEÑOR el doble por todos sus pecados. Estamos viviendo un tiempo de restitución, y si hemos estado en cárceles, podemos tener la certeza de que Dios ha escuchado nuestro clamor y ha decretado nuestra libertad.