17
ftEVptüCI¿)N<K"'í!-. idevcuentas el peso de la cultura en cuyo interior '^^ctraTMJanKss.-^aña-cuJtura que convirtió a la revolución en un resistente ^ «feticjíe^üeíse'tornarel análisis de-las"constantes y las variables, así g^cd&p^^^ cuestiones tan f£difíciles delograrxomo la camaradería..' V wr.-• ,»,i .-<:•. ~ M •SrC.-ü'f -'"ríe:. :.-..v - ^^1^tfpd^j9^-^;^np^;r'.??v^fl^;"- vs-.^v.'; ••"-, fe* *«* :»'.,*£*; >>r L^ruex •5 44. LA REVOLUCIÓN Y LA INDUSTRIA MANUFACTURERA MEXICANA, 1910-1925 ' ' ;. V Stephen H; Haber* DURANTE el periodo de 1890 a 1910 México experimentó un auge industrial que creó nuevas industrias (en particular las del .acero, el r¿»mentr> y la dinamita') V estipiu}p la rápida expansión y rretnichirarión deJas_antiguas_(como el papel, los cigarros, la cerveza y los textiles' i dé algodón y lana). Este crecimiento industrial se caracterizó por una gran intensidad de capital, por la integración vertical y por la produc- ción oligopólica y monopólica. En suma, este fue el periodo en que las grandes empresas llegaron a dominar las manufacturas mexicanas. Además de exhibir un alto grado de concentración, la industria mexicana se caracterizó durante el periodo por el hecho de que sus propietarios y administradores eran principalmente miembros de un pequeño grupo de comerciantes financieros de origen extranjero. Aprovechando la oleada de crecimiento económico desatada por la inversión extranjera en el sector exportador y por la estabilidad política creada por la dictadura de Porfirio Díaz (quien gobernó a México desde 1876 hasta 1910, en el periodo conocido como el Porfiriato), estos empresarios depositaron sus fortunas en diversas inversiones industriales y dedicaron considerable energía a lograr que el gobierno de Díaz protegiera y subsidiara sus nuevas empresas. Uno de los clichés nV la historia mexicana es la aseveración de que la Revolución de 1910-1917 destruyó por_co_mpjfilo esta.planta-in- dustrial y creó una nueva base productiva.-más_eficiente..guiada por una burguesía "auténtica", nacionalista. Como ha señalado John Womack, se considera generalmente a la Revolución como un perio- do de mutilación en e< q>r fÚ aparato productivo del Porfiriato qn^dó destruido y lns^nug4ia^mnnopolistas^ifiHanos><ie^erorH^ligados a hiÚLdeLpaisJ Al examinar ese periodo de la historia mexicana la * Departamento de Historia, Columbia University [traducción del inglés de Eduardo USuárez]. . .-'•*•• 1 John Womack, ""The Mexican Economy During the Revolution, 1910-1920: Histo- riography and Analysis", Marxist Perspectives, 1:4,1978, pp. 92-93 [véase el artículo 43 de este volumen]. 415 1 ••-¿ai

La Revolución y la Industria Manufacturera Mexicana, 1910 - 1915

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  • ftEVptCI)N
  • 416 LA REVOLUCIN

    mayora HP \n investigadores lo han descrito_en__Lrminos de un "pwygcn A* A^f^ff^"^ "ruina revolucionaria", "aos perdidos para Mxif" n ' f an t triktnlCT 2 Esta creencia, surgida de supuestos ideolgicos ms bien que de datos empricos, ha llevado a la mayora de los investigadores a negar que la Revolucin pudiera haber pro-ducido algo que no fuera una destruccin generalizada. Es decir, como seala Womack,(gllos han supuesto que "sin 'ordenlrio-puede haber-progreso sin p37 no podra hahrhir.r_in"-l

    Este ensayo sostiene que la Revolucin logr, en muchos sentidos, exactamente lo opuesto de lo que han credo la mayora de los investigadores. La maynr.partp de la planta manufacturera-de-Mxico emergi de la lucha intacta: no fue destruida. Los capitanes de la industria mexicana no abandonaron permanentemente la nacin," creando un vaco que pudiera llenar una burguesa "nacional", sino que permanecieron donde se encontraban. Adems, la Revolucin no cre una nueva oleada de comportamiento empresarial, dando lugar a una bas industrial nueva, ms eficiente. Si acaso, las empresas desinvirtieron en los aos siguientes a la Revolucin. Tampoco destruy la Revolucin el poder-de los monopolios-y-oligopolios-que rrtnlmlahan las manufacturan rppyiranag- el mercado se concentr ms an que antes de la Revolucin. En suma, si la industria mexicana se caracteriz durante el Porfirito por la existencia de monopolios y oligopolies grandes, verticalmente integrados, que recurran a la proteccin gubernamental para compensar las ineficiencias estructu-rales, tal situacin se consolid en los aos siguientes a la Revolucin. Es decir, en lugar de destruir la estructura industrial del Porfirito la

    'Revolucin la reforz hasta cierto punto. Hasta fines d 1913,-tres aos despus del estallido de la Revolu-cin impulsada por Francisco I. Madero en contra de Daz, la Revo-lucin haba teido: escaso efecto en la economa. Todava en marzo 'de J913 Ja prensa financiera mexicana estaba informando que los .jneg'ocios'andaban, bieni Un artculo sealaba que "se ha observado

    'han'icrmentd' ligeramente".4 ,j.l.Miytetfi fSfH&Ufj* &-.Bf^Mccjn iiianuiaclurera corroboran

    iiIbinZwit6

    LA INDUSTRIA MANUFACTURERA ?417.

    estos informes. En la industria textil del algodn (la mayor y ms desarrollada de las Industrias manufactureras de Mxlee), pepejenv po,,la produccin anual de 1910, 1911, 1912 y 1913 fue slo ligeramente menor que en el periodo anterior. En efecto, las series referentes a la cantidad total del algodn en rama consumido, al nmero de husos y telares en operacin, y al nmero de trabajadores empleados en esos aos indican que la industria se estaba desempe-ando por lo menos tan bien como durante el periodo de 1901 a 1907. Slo haba declinado apreciablemente el nmero de los molinos en operacin. Pero aun aqu era pequea la disminucin, de 132 molinos en 1908 a 118 en 1913 (vase el cuadro 1).

    Cuadro 1. Industria textil del algodn, principales indicadores econmicos, 1895 a 1938

    Ao fiscal 1895 1896 1897 1898 1899 1900 1901 1902 19Q 1904 1905 1906 1907 1908 1909 1910 1911 1912 1913 1914 1915 1916 1917 1918 919 1920

    Molinos* Husos* Telares' Trabajadores11 cJ*,e

    110

    112 120 134 133 124 . 115 119 127 130 129 132 129 123 119 126 118 90 84 93 92 104 110 120

    411496 430 868 458 795 469 547 491 443 588 474 591506 595 728 632 601 635 940 678 058 688 217 693 842 732 876 726 278 702 874 725 297 762 149 752 804

    '

    573 072 689 173 735 308

    . 753 837

    12 335 12 874 13 874 14 581 14 759 18 069 18 733 18 222 20 271 20 506 22 021 22 774 23 507 24 997 25 327 25 017 24 436 27 019 26 791 ...

    20 489 25 017 26 995 27 301

    19 975

    23 731 27 767 26 709 24 964 26 149 27 456 30 162 31673 33 132 35 816 32 229 31 963 32 147 32 209 32 641

    22 187 27 680 32 815 37 936

    21540 21988 24 199 25 067 26 518 28 985 30 262 27 628 27 512 28 841 31230 35 626 36 654 36 040 35 435 34 736 34 568 33 154 32 821

    20 334 31095 31694

    '??.:';

  • 41$ J . Am-'ir.LA REVOLUCIN

    Cuadro 1 (conclusin) Ao

    'r fiscal Molinos* Husos* Telares' Trabajadores^ Algodn

    consumido' 1 9 2 1 \f 1922 i-. 1923 108: >-. .19244j#f.il6:\ .

    :,

    -,. -.- .* r 1926/.f:. 1*ri38> . :"~ '-* I927l^^J44 , .v ?^v

    2?**: v 1929 .,liJiJ45:1::: :.-,

    770945' 803 230 802 363 812 165 838 987 842 793; .821 21 r

    28 409 29 521 29 668 29 888 31094 31 296 30 437'

    $!*& &/ujiij.." iiifi-ia. lu5 839J09K-845 607 840 498b 832 386 860 937

    30 191 30 820 30732-, 30 056 30 981

    38 227 39 677 38 232 37 732 43 728 43 776 41 238

    39 515-38 988 36 247 33 474 36 822

    35 924 34 654 32 343 30 517 40 997 41 522 41 170 39 356 39 437 40 585 ,34 627 34 434 41 229

    Fuiafife Tonudo de Fuerza de trabajo, p. 106; Joseph Sterret y Joseph Davis, "The Fiscal arid Economic Condition of Mexico" (informe presentado a! Comit de Banqueros

    Ode Mexico, mayo d e l 928), p. 105;'Yamada, pp. 26 y 29; Departamento de Estadstica t- rKtOfulAnuario estadstico, 1923-1924, vol. II, pp. 124-125; Secretaria de Hacienda

    y Crdito'Pblico, Departamento de Impuestos Especiales, "Estadstica del ramo de hilados y tejido* de algodn y de lana" (registros fiscales inditos), mayo de 1925 a noviembre de 1933; Secretara de Hacienda, Anuario de estadstica fiscal, 1918, p. 170; Secretara de Hacienda, Anuario de estadstica fiscal, 1919, p. 166; Moiss T. de la Pea, La Industria textil del algodn: crisis-salarlos contratacin, Mxico, Sindicato Nacional de Economistas, J?38), p'. 7; Ministerio de Fomento, Estadstica del Departamento de Mexico, pp. 18-19,'Secretaria de Hacienda, Estadstica de la Repblica Mexicana, 1880,

    V. cuadro'2; Secretara de Fomento, Memoria 1857, p. 64; Boletn Financiero y Minero, 22 ... -. .. - -de junio de 1933, p.1; El Economista Mexicano, 4 de julio de 1914, p. 138; Boletn de

    lo Secreta/u de Hodenda. segundo semestre 79/5-7/6, vol. II, p. 327; Boletn de la Secretarla de Hacienda, primer semestre 1916-1917, vol. Ill, p. 685; Boletn de la Secretaria de Hacienda, segundo semestre 1917, vol. IV, p. 439; Boletn de la Secretaria de Hacienda, primer-Mmestre 1917-1918, vol. V, p.~563; Secretaria de Hacienda, "Directorio de las

    5V fbricasde hiladas y tejidos registradas, 1938" (registro fiscal indito); Secretaria de la .;>-. Economa Nacional, La industria textil en Mxico: el problema obrero y los problemas ' econmicos, Mxico,Talleres Grficos de la Nacin, 1934, p. 14. -X' v* Nmero de molinos en operacin.

    '" ' k

    Nmero de husos activos. No incluye los usos fuera de servicio. Nmero de telares activos. No incluye los telares fuera de servicio. 4 Nmero de trabajadores empleados. No incluye al personal gerencial Ante* de la

    Revolucin lo* o'wf'j* |tpl>*jalr*n (iwtalnifnic uiw Jmiuda de 12 a 14 horas; despus de U Revolucin esta jornada se redujo a 8 horas.

    ' Total del algodn consumido durante el ao, en toneladas mtricas. Esto se toma como una aproximacin de la produccin, con el razonable supuesto de que no cambi con el tiempo la razn del consumo de algodn al producto de bienes terminados.

    '\isE >",. :#-

    %

    LA INDUSTRIA MANUFACTURERA 419

    Datos parciales para la industria cervecera indican una respuesta similar a los primeros aos de la Revolucin- Aunque se carece de datos globales, las cifras referentes a las ventas de la Cervecera Cuauhte-moc, una de las tres cerveceras ms grandes del pas, indican que sus actividades seguan siendo normales hasta T914. En efecto, las ventas llegaron en 1912 a un nivel sin precedente de ms de 16.5 millones de litros. Alano siguiente bajaron considerablemente las ventas, a 11.7 millones de litros, pero esta cifra estaba todava claramente por arriba del promedio de antes de la Revolucin (vase el cuadro 2).

    Cuadro 2. Ventas de la Cervecera Cuauhtemoc, 1911a 1925 (Miles de litros)

    Ao Ventas

    1911 1912 1913

    1914-1915 1916 1917 1918 1919 1920 1921 1922 1923 1924 1925

    14 172 16519 11 732 3 359 2 758 4 640 4 977 7 735 14 929 16 689 13 156 12 335 11 564 15 736

    FUENTE: Datos inditos del Departamento de Ventas de la Cervecera Cuauhtemoc. * Ao combinado.

    Aunque los primeros aos de la Revolucin no parecen haber LntfTfpPrlo sjgnf'f'at'vam''nt'> rnn-la-prnduccin-y-la-distribucin-de biejrjues.de-consumo^o-dufaderos-tales-como-Ia^cerveza -y los textiles, la-inestabilidad^oHtic^-cTeada-por-el-derrocamiento de Daz.afect negativam^ritp. a, los fahr"*'"8 A

  • mi - S t -

    ^y-0/^^^Gedrj^^t\izacin de la capacidad instalada

    -.'>;-.. s ^W^^t^SSjCppCcUaddtl/hi'^'i-i , Produccin

    j$i6 ;^-tn n o

    ?jfe&>-j*is*f no ' 1922 :r;~ n o

    924 cJ $10 1925 n o

    - V , T - 7 . 1 f t

    - .33 "

    ..-O v" Produccin dividida entre la capac idad inc!a!aHa

    Utilizacin de la capacidad (porcentaje)1

    30 23 17 14 6

    11 17 23 23 20 23 32 41 48 50

    nas experimentaron slo una ligera declinacin en el periodo de 1911 a 1913, en comparacin con el periodo anterior a la Revolucin. rmo.vA en 1911 tena una tasa de rendimiento de 6% sobre el acervo de capital, y en 1912 una tasa de 8%, slo ligeramente menor que su promedio de 10% durante el Porflriato (vase el cuadro 5). De igual modo.CivsA tuvo en 1912 una tasa de rendimiento de 12% y en 1913 una tasa de 10%, muy similar al nivel anterior a la Revolucin. Incluso la Fundidora Monterrey, que apenas cubra sus costos durante el Porflriato, pudo obtener ganancias en 191 I y 1912. En efecto, 1911 fue un ao de prosperidad sin precedente para la compaa: por primera vez su tasa de rendimiento lleg a 3% (vase el cuadro 6). Esta tasa de rendimiento baj a 1% en 1912 y a menos del 6% en 1913.

    Los datos respecto a los rendimientos de las acciones narran una historia similar. Examin un grupo ms amplio de 13 de las princi-pales empresas manufactureras de Mxico (todas ellas sociedades annimas de valores cotizados en la bolsa de valores de la ciudad de Mxico) a fin de calcular sus rendimientos efectivos. Como se observa en el cuadro 7, casi todas estas empresas tuvieron buenos rendimientos en 1911, 1912 y 1913. En efecto, como lo revela el

  • 422 LA REVOLUCIN

    Cuadro 5. CIDOSA, tasa de rendimiento sobre el acervo - -J, de capital, 1911 a 1925*

    Ano Acervo de capital Ganancia Tasa de rendimiento

    1911 "T '20 128 326 1912 1913 1914 t Q K

    1916 1917 1918 1919 1920 1921 1922 1923 1924 1925

    19 176 892 .

    t

    _

    18 411047

    17 300 000

    16 363 224 17000 000

    1 259 368 1 465 242

    2 596 762

    2 197 799

    595 799

    14

    13

    4

    FUENTE: Tonudo de The Mexican Yearbook, Londres, McCorquodale and Company, 1912, p. 123; El Economista Mexicano, Mxico, 27 de abril de 1912, p. 67, y 19 de abril de 1912, p. 37; Boletn Financiero y Minero, Mxico, 30 de enero de 1920, p. 8; 3 de febrero de 1920, p. 8; 2 de julio de 1921, p. 8; 5 de abril de 1923; p. 4; 28 de marzo de 1925, p. 1; 29 de marzo de 1927, p. 1, y 1 de abril de 1927, p. 1.

    ' Vase un anlisis de la manera como se calcularon las ganancias, el acervo de capital y la tasa de rendimiento sobre el capital, y el mtodo empleado en el ajuste de los datos originales, en el apndice A de mi tesis: "The Industrialization of Mxico, 1890-1940", uci^, 1985.

    cuadro 8, los promedios de los rendimientos de 1911 y 1912 fueron efectivamente mayores que antes de la Revolucin. En 1913 bajaron marcadamente los rendimientos de las acciones, pero incluso este promedio del rendimiento de 4.2% era muy aceptable en compara-cin con la situacin en el periodo de antes de la Revolucin, cuando los rendimientos de las acciones alcanzaron un prome-dio de 4.6%. Detrs de estos rendimientos relativamente fuertes se encontraba una corriente sorprendentemente slida de pagos de divi-dendos a los accionistas. En 1911 once de las trece empresas exami-nadas pagaron dividendos a sus accionistas. Slo la Fundidora Moti-len r.y, pie jaiima [>ai> dividendos Incluso durante el l'orfirialo, y La Tabacalera Mexicana (para la que no existen datos anteriores a 1910), no pagaron dividendos. Es muy similar la situacin de 1912 y 1913, aunque los datos indican una baja en los pagos de dividendos en

    0 -XJ. MM&: '3m ,\\ Ktt| W&

    LA INDUSTRIA MANUFACTURERA 423

    Cuadro 6. Fundidora Monterrey, tasa de rendimiento sobre el acervo de capital, 1911a 1925'

    . Ao _

    *i9ir ' .1912 :i913 1914 1915 1916 ;

    : 1917

    :M918.; ; .

    rr'1919 * ' \ 1920' 1921 1922 1923 1924 1925

    Acervo de capital

    12 150 506 -11627 366 11379 415 11262 387 ,10183 267 "

    . 10320 2 8 2 ^ 9 855 241

    ' 10 160 729) * ; T0 099 372;^ 12 527 242 " 13 364 126 13 689 525 14 148 271 14 041 756 14 155 461

    Ganancia Tasa de rendimiento

    331 785 ' 75 033. -670 124 -829 849 1002 244 > -V! -613 450- -2 064 243 333 128

    -537 713 X 1 132 825 899 535 497 746

    1 526 247 -78 673 708 500

    3 , 1 -6 -7 -10 -6 21 3 5 9 7 4 11 -1 5

    FUENTE: Tomado de Fundidora Monterrey, Informe anual, 1910 a 1926. 1 Vase un anlisis de la manera como se calcularon las ganancias, el acervo de capital

    y la tasa de rendimiento sobre el capital, y del mtodo empleado en el ajuste de los datos originales, en el apndice A de mi tesis: "The Industrialization of Mexico, 1890-1940",

    "ucxA, 1985.

    1913 (vase el cuadro 9).J En suma, ya sea que examinemos las seriesNJe la produccin o de las ganancias, los datos indican que los negocios marchaban normalmente por lo menos hasta mediados de 1913.

    PPJT> a finfts (\e 1 9 1 1 rjnhr iitv^^n^i-*>n-4a-gTtnarmn; los, fahrrantftg tTipdfjmfL

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    "I

    \

    19111#o. J B,3 J$ ?4.0 '= o S i 0

    0 0

    10.3 -16.1

    6.7 8.6

    14.2 6.8 8.3

    Cervecera Moctezuma.

    1 /5.2 : ' 6.6

    > r4.3 * '"4.4' rt

    ,* ^0.2 % 0 0 8.5

    14.5

    :': .-

    11.0 5.9 6.6 7.2

    CtVSA* . ' T' -

    6.4 5.9

    t > : 5 ^ "SE ? Q; r:

    0 0 4.7 7.0

    10.7 12.7 16.3 6.9

    12.3 4.8

    'Industrial jabonera La Laguna

    ,8.7 10.7

    Z A4.2 .'"? 1- , j j -

    l # , 0 -

    9.9 19.9 22.9

    5.2' 0

    13.4 \ 19.8

    ' San Antonio

    Abad

    9.4 0

    . 0 "0 - o' , 0.4

    31.0 14.3 12.2

    .33.3 0 0 0 0

    Cerv. Toluca Mxico

    ' 9.0 0 4.2

    . 3.1

    d 0 0 0 0 0

    10.0 0 0 0 0

    Cigarrera Mexicana

    5.5 6.6 ;.-';

    0 ' 0 0 0 -. .:

    0 14.5 :

    12.5' 17.1 16.3 14.8 22.6 13.4

    FUESTE; Torrjdo de El Economista Mexicano, 1910 a 1914; Boletn Financiero y Minero, 1916 a 1926. Los nombres completos de compaas y productos son los siguientes: Fundidora Monterrey (acero). Compaa Industrial de Atlixco (textiles

    de algodn). Compaa Industrial de San Ildefonso (textiles de lana). Compaa Industrial de Orizaba (textiles de algodn). La Tabacalera Mexicana (cigarros). Compaa Manufacturera El Buen Tono (cigarros). Compaa Industrial de San Rafael y Anexas (papel), Cervecera Moctezuma (cerveza), Compaa Industrial Veracruzana (textiles de algodn). Compaa Industrial Jabonera de La Laguna (jabn y glicerina). Compaa industrial de San Antonio Abad (textiles de algodn). Cervecera de Toluca y Mxico (cerveza) y La Cigarrera Mexicana (cigarros).

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  • ".uadro 9. Dividendos en >. / S-l*' compaas manufctUrerasiseeccdjrta(3as>9 l^Hp25". V'. \ '0f | ^ (Ganancias por accin, pesos coniei^ ^ ^ ^ ^ : ^ . ^ ^ , ^ ^ . -

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    1911 1912 1913 1914 1915 1916 1917 1918 1919 1920 1921 1922 1923 1924 1925

    Fiinduitra Montc-ry

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    . 0 0

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    Atlixco

    4.00 3,00 3.00 0 0 .

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    San Ildefonso

    2.00 2.00 3.00

    3.00 0.60 0 2.72 2.99 4.02 7.14 5.13 4.12 4.14 2.03

    CIDOU

    20.02 20.02 11.26 20.02 20.02

    0 14.34 13.59 34.87 40.25 53.62 34.48 38.67 15.54 15.24

    Tabacalera Mexicana

    0

    10.00 0 6.00 6.00 2.82 2.00

    12.00 0

    12.00 35.00 20.00 10.00 20.00

    El Buen Tono

    30.00 30.00 0

    14.06 0 0

    23.44 23.44 23.44 39.84 46.88 46.88 46.88 46.88 46.88

    San Rafael,

    8.00 10.00 5.00 0 0 0 0 0 0 6.00

    10.00 5.00 6.00 8.24 5.00

    Cervecera Moctezuma

    14.00 12.00 8.00 8.00 0 0 0

    10.16 37.24 23.94 37.24 33.25 19.95 19.95 19.95

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    as i LA REVOLUCIN

    Mundia l ' - ; Pero Brlt ingham no acababa todava de conocer a Vi l la . No se sabe si V i l la supo alguna vez que se le haba pagado demasiado poco por.el. algodn; pero para .1915 amenazaba con confiscar las fbricas de jabn de Britt ingham y administrarlas l mismo si la compaa no le;entregaba varios prstamos forzosos. En total, Vi l la obtuvo de esta manera 350 mi l dlares de la compaa de jabn y glicerina.".:r;! ,.,.-. K

    En vista de.estas consideraciones financieras, la gran mayora de las plantas' industrJaies-de-\4xiee-sffle~de4fl-fievoh3cin- reto+iva-njente inHerpn^. Los ejrcitos revolucionarios quitaban a menudo las correas a la maquinaria cuando se retiraban de una fbrica (aparen-temente las correas tenan usos militares), pero en general provoca-ban escasos daos graves. Aqu y all se destruan algunas fbricas, pero en general se trataba de operaciones pequeas. La correspon-dencia del Departamento del Trabajo en esos aos revela pocos casos de fbricas enteras destruidas o gravemente daadas.12 Ninguna de las empresas que resultaron totalmente destruidas por la Revolucin era g r a n d e TP BftaiaOS g o t e r a | MYrv-> lenian-loseetHses-poiiticos-^^mancieros^ecestrios-paFa^efexiderse por-s-solos-J(la Compaa Industrial Jabonera de La Laguna, de Britt ingham, es un buen ejemplo de esta situacin). Por lo tanto, atravesaron la Revolucin inclumes.

    Mucho ms grave que la amenaza de la confiscacin por los ejrcitos revolucionarios era la destruccin de las comunicaciones y los transportes. Fl angp manufacturero dft-Mxico.durantft-el-Rorfi-ri.aJo_sjjasueiaainificacinJeJ.niercado-por.los-ftrTOcarales_La redJiejiaviaua_riacionalf)e-r4t)ifa-que^os--fabrieantesaproveeliaran las economas-de-escala-produciendo para un-mercado-ms-amploque antes, lo que permita el desarrollo de nuevas industrias y la integra^-

    . cin y la expansin de las anliguas.Vfcl principal efecto econmico-de I-i R/vplnrir>n f|ii [a af^r lar inn_-f l f tL-giUfMA-di* -cangpni i^Uo q u e restringa ?| mateada y tomaba nrfi' ' ' 'nt '*g-n tnninr>it1'&i..-

  • 430 LA REVOLUCIN

    Departamento del Trabajo solicitando algn tipo de intervencin pn rn que las fbricas pudieran obtener las materias primas y las refaccio-nes que necesitaban para continuar trabajando.16

    Para el otoo de 1913 por todo el pas empezaron a cerrar las fbricas, y las que continuaron operando lo hacan de manera limita-da. En la industria de los textiles de algodn, por ejemplo, el nmero de molinos en operacin baj de 118 en 1913 a 90 en 1914. Para 1915 slo 84 de los ms de 148 molinos del pas estaban en operacin (vase el cuadro 1). Otras industrias de biees de consumo tambin fueron severamente afectadas. En la industria cervecera, por ejemplo, el principal productor del pas, la Cervecera Cuauhtemoc, redujo su produccin en ms de 80%. Como se observa en el cuadro 2, mientras que en 1912 salieron de la cervecera 16.5 millones de litros, lasN ventas combinadas de 1914 y 1915 apenas llegaron a 3.4 millones de litros (la cervecera estuvo ocupada por el ejrcito de Pablo Gonzlez durante la mitad de 1914). En 1916 el total de las ventas de la compaa apenas lleg a 2.8 millones de litros, menos del 20% de su nivel en 1912. -

    Aunque no se dispone de datos para otras industrias de bienes de consumo, podemos inferir del pago de dividendos a sus accionistas que la situacin era similar a la existente en la Cervecera Cuauht-mociy en la industria de los textiles de algodn. Como lo indica el cuadro-9, la mayora de las empresas ya no estaba pagando ningn dividendo en 1915, lo que implica que en el mejor de los casos estaba cubriendo apenas sus costos variables. En ese ao slo 3 de las 13 empresas examinadas pagaron dividendos a sus accionistas. En 1916 y 1917 ocurri uria situacin muy similar. Aunque algunas empresas continuaban ganando dinero y pagando dividendos, los datos indican

    :,',-. . que,durante este periodo lo hacan en montos muy reducidos. Dada la ausencia de un ndice de precios para los aos de la Revolucin no

    . se pueden convertir estos valores nominales a valores reales, pero es seguro que la Revolucin produjo tasas de inflacin muy elevadas.

    Pqr?Io tanto, en vista del aumento de los precios las ganancias por . /.'accin estaban bajando. . ,i> IS.--; ^-j'.(: : '4-1 - A'^r '&^.pagqsjde escasos .dividendos se reflejan en la serie de los ;' rendimientos. El promedio de los rendimientos de las 13 empresas

    Je la muestra apenas lleg a 1.6% en 1914, a cero en 1915, a 0.1% :!>* ' en 1916, y a cero en 1917 (vase el cuadro 8). 2 * t # Y* *& !*> '' '' : * " ' ; ' ' : - GT, 5 2 , 1 2 , 1:3; A G M T , 9 0 , 1 7 , 1 ; A G N T , 9 1 , 2 1 , 1-2; A G I T , 9 6 , 5 , 4 9 - 5 3 ; A G I T , 9 6 , ':

  • s3 -3o3un)y: las fbricas-relativamente pequeas de Loreto y Pea

    Pobre.' Se ignora la medida en que estas operaciones menores hayan '- pdidostisfacer la demanda; aunque la falta de materias primas y

    refacciones Jas obligaba a trabajar de manera limitada.19 Esto se com-- pilcaba ms n.por el hecho deque-los propietarios de Pea Pobre [y, de Loreto eran:ciudadanos alemanes y estaban en la lista negra del gobierno.de Jos Estados Unidos paraqu no recibieran exportaciones

    Sfs; ^p^d>ifetiai*seirameht;afectada por la Revolucin. Por ejemplo, lasdos; principales publicaciones financieras del pais durante el

    -c YoiotaSemanaMercantil y / Economista Mexicano, dejaron

    jde publicarse al estallar la guerra civil en 1914. 1 - V.--As pues, la rri'ii'S cprnwr"">1 dt>4044 UUari ^ los pr^hUmac

    ; de:Ia~oci|pnrirn armadn-y-lm prritnmrn fofZOSOS) prnvnrnmn-nnn

    grn. rifrl'naQi^^1''-f>'^^^ Aunque el efecto fue mayor para.los productores de bienes intermedios que para los productores de bienes de consumo, h Rpvoluc-in-cre-condiciones muy desfnvnrahW paro todos los producturevdehyector manufactu-rero T. as industrias del acero y el cemento dejaron fundamentalmente de., operar durante el periodo, el 40% de los molinos textiles de algodn tuvo !que cerrar, los productores de papel y de cerveza tuvieron que operar en escala limitada, y pocos fabricantes estaban obteniendo ganancias suficientemente elevadas aun para permitir el pago de dividendos limitados. --Pero aun en estas condiciones adversas muchas empresas conti-

    nuaron operando durante la Revolucin. As pues, de igual importan-cia para la baja del producto manufacturero de 1914 a 1916 fue el hecho de que muchas empresas, en especial en el sector de bienes de consumo, continuaron operando incluso en las peores fases de la lucha. En efecto,, hubo incluso algunas empresas que obtuvieron ganancias y pagaron dividendos durante todo el transcurso de la Revo-lucin. Tal fue el caso de CIDOSA,' El Buen Tono, La Tabacalera Mexicana y la Compaa Industrial de San Ildefonso, CIDOSA pag elevados dividendos durante la Revolucin, excepto en 1916. La I'olia. n l r | n M r c i | i a | ' " K " Inliiliiii

  • IiCRVLUaN X1

    1^5>"CriJT^I^ebmpaasestaban pagando de nuevo buenos dividendos |I>f fe*^^sus accionistas; Nose dispone de datos de CIVSA, pero tanto El Buen ^ f ^ ^ ^ w i i ^ o t ^ a p ^ A ^ d e c l a r a r o n ganancias impresionantes a los pocos r^^j -^a^j i^^enniradn 'deJa contienda'. En 1920 y 1922 CIDOSA obtuvo (f*;;i |gts^d^^ de 14 y 13% respecr iP^:-- ^tivlnente^cerca^de cuatro puntos de porcentaje por arriba del pro-7 - rnedibobtendpor la empresa durante el Porfiriato (vase el cuadro

    5).'Los rendimientos de El Buen Tono fueron ms impresionantes an; con tasas de 12% en 1918, 21% en 1919, 16% en 1923 y 12%

    . . en 1924 (vase el cuadro 10) ." . . . . : .

    y --Cuadro 10: El Buen Tono. Tasa de rendimiento sobre * el acervo de capital, 1911 a 1925'

    - i4o.^ '

    191 I V ^ v 1912 -1913 1914 1915. ... 1916 1917 1918 1919 1 9 2 0 -1921 1922 1923 1924 1925

    Acervo de capital ' .::-

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    10 650 733 9 706 661

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    13 186 402 12 837 403

    Ganancia

    1 264 375 2 036 842 '

    2 115 842 1 570 457

    Tasa de rendimiento

    12 21

    16 12

    FUKNTV:: Proveniente de Boletn Financiero v Minero, 28 de mayo de 1919, p. 8; 27 de agosto de 1920, p. I; 28 de agosto de 1920, pp. 1 y 8, 21 de abril de 1924, p. 1; 10 de septiembre de 1925, p. I, y 28 de octubre de 1923, p. 1.

    > Vase un anlisis de la manera como se calcularon las ganancias, el acervo de capital y la taisa de rendimiento sobre el capital, y el mtodo empleado en el ajuste de los datos originales, en el apndice A de mi tesis: "The Industrialization of Mexico, 1890 to 1940", iKTA, 1985.

    Los datos respecto a los rendimientos de las acciones y las ganan-i iaa ilc d iv idrndoa indican 1017 justo rirff[ttir7 Am h CIOIDlligacinrlpla-nnftVa Cnngiihirjon_mfyiraria, Ins fabricantes del pa.fS cnnvnc*t"n a-.una ^nffrtAiigia-nacinnal Hc-inHnitriales-enJa ciiidad-de.Mxica. Advirtiendo que las reglas del juego estaban siendo revisadas por el nuevo Estado que se estaba forjando, los industriales se unieron para defender sus intereses. Haba bsicamen-te tres temas en su agenda. El prim* ** refera a la presin que se eigrcglligbre Si gO-biemo. posrevolucionario para que mantuviera 1 qsjyfi les anteriotes-de-proteccin-arancelaria, El segundo.consis-ta eji^cexsaJ^rjal^obiemo^ue-se-oponan-a-los-artculos2Xy-l53 dejajaueya..C.cmslUnJI' J ^ dLdexechajde. asignar^los-recursos-de-la-tierra -y-los-derechos'del subsuelo, estableciendo que "la nacin tendr en todo momento el derecho de imponer a la propiedad privada las limitaciones que demande el inters pblico".22 .ELaricjjln.l?^ rstahWfa,.la jomada -, 20 Resea y memorias del Primer Congreso Nacional de Industriales, reunido en la

    'Ciudad de Mxico bajo el patrocinio de la Secretarla de Industria, Comercio y Trabajo, Mxico, Direccin de Talleres Orifico; 1918, pp. 82, 263; citado en adelante como Resea y memoria. -.., .'":. '. 2' Resea y memoria, pp. 72, 76.

    2 Citado en Michael C. Meyer y William L. Sherman, 7fce Course of Mexican History, Nueva York, Oxford University Press, 1979, p. 544. , v . . -

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    Dos factores intorralaelonadoe fueron Importantes en la elevaejn del nivel de la produccin y las ganancias, ninguno de ellos saludable para las manufacturas en el largo plazo! El primero era que la. ^ynlnri" aciusomoxualquex ^"cic c^la4ista4-elimin

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    mz^h^^^^^^'^^l^^i^^^^^ cmo la cerveza, e} acei^exnCTtp,?el '>adro'y^l jabn; no se concentr menos que i l iuoiilo p | I'>ift!nto Aqi i l y olla mino c'untilns rltiprcana n u e v a s entraban al mercado (una en la industria de la cerveza, otra en la del cemento), pero t a s empresas nuevas se creaban siempre a expensas 'de 'ho de los antiguos productores porflriarios. En el mercado de la cerveza de la ciudad de Mxico, por ejemplo, se fund

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    la Cervecera Modele, qu elimin y devor a IH m?m$ felente Compaa Cervecera de Toluca y Mxico. En el mercado cementero de Monterrey se fund Cementos Monterrey, pero pronto sta se fusion con la antigua Cementos Hidalgo para formar Cementos Mexicanos.

    : Asi-puesr-aunqne~tmas cuantas empresaBTtoevas~entiaiorral nier-ajJcdespuVde-4a-Revotaciir, uoTaiilbria-estnictura-bsiea-de la produccin glignpnlica-y-monopQlica. El pequeo nmero de empre-sas nuevas q'lfi Sf fiin^M*-Ait*itPiJftc-ir>e-i/Anti-o-^Agarrnll a

    .expensas-de smprwas ya ttXKfp.nj[f.sxl m'*'-^^O,r>O,.'gfl,Y0lvlg.rn,'' competitivb.[ Durante. este periodo .empez a ocurrir la inversin extranjera directa en las manufacturas por parte de'compaas esta-dunidenses, pero estas inversiones eran limitadas y pequeas. Por

    ; ejemplo, la Ford Motors estableci una operacin de ensamblado en la ciudad de Mxico, pero no se trataba de una operacin muy grande. En realidad era poco ms que un almacn donde unos cuantos mecnicos atornillaban equipos de ensamblado completamente ar-mados. La gran entrada de inversin extranjera directa en las manu-facturas slo ocurrira treinta aos despus.

    Est proceso de concentracin del mercado se ligaba inexplicable-mente al segundo factor causal del incremento de la rentabilidad observado despus de la Reyolucinda descapitalizacin-del-geetor rnanufaftiirern A u n q u e la Rpvnl i ir in raiK pgr-asn d a o f s i rn real aJa-p4anta-4T>anufaeturefa-ffl6x46anat provoc una-crisis de-enf4anza ntra-os4nvepsionistasr-Mientras que llev al poder a la burguesa nortea, la Revolucin tambin permiti el ascenso de otros grupos, en particular de la clase trabajadora sindicada. En efecto, el campe-sinado fue derrotado por un pacto entre la clase obrera y los intereses comerciales y terratenientes del norte de Mxico. Pero ni siquiera esta victoria fue total, y los campesinos del centro-sur siguieron desem-peando un papel en la poltica nacional. Por lo tanto, el nuevo Estado hubo de ocuparse no slo de los intereses de los capitalistas del norte en ascenso, sino tambin de los intereses de la clase obrera y del Campes inado. Pr>r Pgfa fa-rAn la rr.ncH'fli^JAn-XXiMtlttana-^o-tO-MT-cf.

    ,' Ompa dp la-pr-nptgHaH privaba y He la rHigtrihii^in./J-la.iAn-a-*Jitg aldeas corporativas, del capitalismo y de los derechos de la clase obrera. As pues, aunque los antiguos financieros industriales del Port mato y sus empresas se conservaban muy bien y hasta cierto punto se haban tornado ms poderosos por efecto de la Revolucin, ya no controlaban las riendas del poder poltico como lo haban hecho

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    Cuadr13. Industria textil del algodn. Capital invertido en maquinara y edificios, 1922 a 1933

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    LA INDUSTRIA MANUFACTURERA 445

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    Incluso con la recuperacin ocurrida en los precios de las acciones, los valores reales de eslas acciones 6e negociaban todava en 1925 a cerca de la mitad del nivel de 1912. . / - As pues, los rendimientos eran elevados porque los inversionistas perciban que el mercado era extremadamente riesgoso. Por lo tanto, demandaban una prima por el riesgo a fin de mantener su dinero en Mxico. De igual modo; los rendimientos reales para los inversionis-tas eran altos porque la incertidumbre creada por la Revolucin haba hecho bajar tanto los precios de las acciones para 1918, que todo incremento de los precios reales o de los dividendos reales generaba despus tasas de rendimiento muy elevadas.

    Si las ganancias estaban aumentando y acercndose a los niveles porfirianos en trminos reales (vase el cuadro 16), y si estas ganan-cias no se estaban reinvirtiendo en el sistema, cul era su destino? Sin unanlisis de las carteras de inversin de los principales finan-cieros de Mxico durante este periodo no podr encontrarse una respuesta concluyente a esta cuestin. Sin embargo, es posible que estas ganancias hayan salido del pas tras ser pagadas como dividen-dos. Existen ciertos datos en apoyo de este supuesto. En 1927 Joseph Sterret y Joseph Davis sugirieron la existencia de problemas de fuga de capitales en su informe al Comit Internacional de Banqueros, creado para supervisar el pago de la deuda extema mexicana. En un tono moderado, reservado para los banqueros, estos autores seala-ban que los bajos niveles de los depsitos en los bancos mexicanos se deban en gran parte "a una tendencia, observada en muchas empresas, a mantener cuentas de depsitos en el exterior ms bien que en Mxico, en vista de las fluctuaciones de la moneda y de los cambios, y del temor de acontecimientos desfavorables de varias clases".26 F S P Q C ' H T " - ' > 1 deceaiode lr>g wetoteiaya sidoun-pariodo de fuga de capital*?. npsHp lnr0, p'gtn-hahfa :iHr-pr>ngrH>ntft^ nn 'e[bajo nivel de confianza entre los inversionistasmexicanos-y-habra resj^la4.QJ]3Jiy_sxQSaiQ-en-v.ista de-las posibilidades existentes~en la^h^}gajje._Yj)nr^s d** Niiftva-ACnrk durante ese periodo. Sin em-bargo,! slo podr obtenerse una prueba concluyente con nuevas investigaciones. . . . j , , ,.. . . !.,.Asl'pues, aunque laSfifllUCP Mevirana afcrJr pnra ni-aparato

    .fsico de lq industria mexicana, ejerci un rfrrtn ;ignifiralivn fn_pl comportamiento de los inversionistas El reordenamiento del Estado

    2h Josph E. Sterrelt y Joseph Slancliffe Davis, The Fiscal and Economic Condition o/Mexico, informe presentado al Comit de Banqueros de Mxico, mayo de 1928, p. 190.

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