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LA SOMBRA al encuentro de nuestro lado oscuro Texto Lic. Fernando Yon “No es mirando a la luz como se vuelve uno luminoso, sino hundiéndose en su propia oscuridad” Carl G. Jung Una sombra es una región de oscuridad donde la luz es obstaculizada. Todos nacemos completos, pero la cultura y la educación nos exigen que sólo expresemos parte de nuestra naturaleza y despreciemos otras facetas de nuestro patrimonio humano. A un nivel psicológico, la sombra es todo lo que hemos arrojado al inconcient temor a ser rechazados por las personas que desempearon un papel determinante en nuestra formación. Temimos perder su afecto decepcion!ndolas o cre!ndoles malestar a causa de nuestros comportamientos o de algunos aspectos de nuestra personalidad. A temprana edad, aprendimos a distinguir lo que era o aceptable a sus ojos y para agradarles nos apresuramos a relegar gr porciones de nosotros mismos a los sótanos del inconciente, en nuestro af!n po eludir la desaprobación de las personas a las que am!bamos o de la depend"amos. #ensibles a la apreciación de los otros, nos mostramos amables, corr educados y responsables. $ para lograr este cometido tuvimos que rechazar todo aquello que pareciera vergonzoso o reprensible. %or una gran necesidad de afec y aceptación nos adaptamos a las exigencias, las reglas y las leyes de nuestro medio. &e esta forma, poco a poco se fue construyendo en el fondo de nosotros mismos un mundo subterr!neo hecho de represiones y rechazos acumulados. 's as" como la retroalimentación contin(a de nuestros padres, maestros y amigo va modelando la forma en que nos presentamos ante el mundo en un desesperado esfuerzo por sentirnos seguros, aceptados y queridos. &e

LA SOMBRA

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LA SOMBRAal encuentro de nuestro lado oscuro

Texto Lic. Fernando YonNo es mirando a la luz como se vuelve uno luminoso, sino hundindose en su propia oscuridad Carl G. JungUna sombra es una regin de oscuridad donde la luz es obstaculizada. Todos nacemos completos, pero la cultura y la educacin nos exigen que slo expresemos parte de nuestra naturaleza y despreciemos otras facetas de nuestro patrimonio humano.

A un nivel psicolgico, la sombra es todo lo que hemos arrojado al inconciente por temor a ser rechazados por las personas que desempearon un papel determinante en nuestra formacin. Temimos perder su afecto decepcionndolas o crendoles malestar a causa de nuestros comportamientos o de algunos aspectos de nuestra personalidad. A temprana edad, aprendimos a distinguir lo que era o no aceptable a sus ojos y para agradarles nos apresuramos a relegar grandes porciones de nosotros mismos a los stanos del inconciente, en nuestro afn por eludir la desaprobacin de las personas a las que ambamos o de las que dependamos.

Sensibles a la apreciacin de los otros, nos mostramos amables, correctos, educados y responsables. Y para lograr este cometido tuvimos que rechazar todo aquello que pareciera vergonzoso o reprensible. Por una gran necesidad de afecto y aceptacin nos adaptamos a las exigencias, las reglas y las leyes de nuestro medio. De esta forma, poco a poco se fue construyendo en el fondo de nosotros mismos un mundo subterrneo hecho de represiones y rechazos acumulados.

Es as como la retroalimentacin contina de nuestros padres, maestros y amigos va modelando la forma en que nos presentamos ante el mundo en un desesperado esfuerzo por sentirnos seguros, aceptados y queridos. De esta manera, el ego y la sombra van crendose simultneamente dentro de cada uno de nosotros, en una danza hasta conformar nuestra personalidad, que es la entidad o el conjunto de caractersticas con la que nos presentamos y expresamos ante la sociedad.

De acuerdo con Carl Gustav Jung la sombra psicolgica est constituida por el conjunto de frustraciones, experiencias vergonzosas y dolorosas, temores, inseguridades y agresividad que se alojan en el inconsciente del ser humano. La sombra contiene todo lo negativo de la personalidad que el yo, que es el centro rector de la parte consciente, no est siempre en condiciones de asumir y que por lo mismo puede llegar a frenar la manifestacin de nuestra autntica forma de ser y de sentir.

Para poder entenderla mejor, imagnese a la sombra como una reaccin igual y opuesta al rostro que mostramos al mundo. Si somos extrovertidos y sociables, la sombra ser introvertida y reservada. Siempre y cuando podamos incluir ambos polos de esta dicotoma en nuestra conducta, la sombra se parecer ms a nuestra personalidad consciente y nosotros estaremos ms y mejor integrados.

Podramos decir que todo lo que admiramos o rechazamos en otros existe en nuestro interior. La sombra que todava no ha sido integrada en la conciencia origina una multitud de proyecciones en las que acusamos a los dems de defectos, cualidades e impulsos que anidan en nuestro interior y que no nos gusta reconocer, tales como el egosmo, la negligencia, la ambicin desmedida, la pereza, el apetito sexual, etc.

Normalmente cuando la persona no puede asumir esas caractersticas en s misma, las atribuye a los dems, esto es que las proyecta en los otros. As podemos ver reflejados nuestros propios defectos o limitaciones, en las actitudes negativas que adoptamos hacia los que nos rodean. Cuando los prejuicios y la crtica exacerbada nos impiden relacionarnos con los vecinos, con las personas de otras ideologas o religiones, con las otras razas, con los extranjeros, con otros partidos polticos, est funcionando la sombra como una parte no integrada de la conciencia.

Es solamente despus de haber alcanzado una autodefinicin aceptada por el mundo exterior cuando aparece la sombra para exigir una totalidad. Y no se limita a tomar una posicin igual y opuesta a nuestra personalidad exterior, sino que asume una posicin de contrapeso alrededor de un centro representado por la persona que estamos destinados a ser. No hacia la perfeccin, sino hacia la plenitud.

El primer paso del encuentro con la sombra se origina en una necesidad de cambio que surge de una crisis personal. En esas circunstancias el individuo experimenta vivencias de estancamiento, depresin, falta de sentido de la existencia y en las que se siente frecuentemente angustiado, aislado o incomprendido. Es el momento de enfrentarse consigo mismo, de preguntarse que papel juegan sus actuaciones con respecto a sus valores, su forma de ser, y cmo est afrontando las dificultades que est viviendo. Esta proceso es difcil de realizarlo en soledad, ya que se necesita la comprensin o empata con el otro, un amigo, un profesional de la psicologa, un grupo de apoyo pueden ser de utilidad a crear el espacio psicolgico adecuado para comenzar el proceso de transformacin e integracin de la sombra.

Para erradicar el odio, la guerra y la destruccin debemos comenzar por asumir nuestros propios odios y resentimientos, esto implica despejar el camino hacia la autenticidad. Hacia lo que realmente soy que en ltima instancia, es una bsqueda espiritual, una bsqueda de la trascendencia del ser humano.

El narcisismo generalizado que caracteriza al hombre moderno dificulta enormemente el encuentro con este lado oscuro y reprimido de la personalidad. Dentro de esta concepcin energtica de la psique, la sombra puede invadir la consciencia inesperadamente llevando al sujeto a comportamientos de violencia inusitada, ansiedad descontrolada u otros tipos de actuaciones no habituales en las que se da una transformacin en el polo opuesto de su forma de ser.

La novela de Robert Louis Stevenson, Dr. Jekil y Mr Hyde describe magistralmente esta transformacin. Dr. Jekyl es un cientfico honorable y bondadoso que crea una sustancia mgica que separa todo lo negativo de lo positivo de su personalidad dando origen a Mr. Hyde un personaje malvado que disfruta de la vida cediendo a sus ms bajos instintos. Cada uno de nosotros lleva consigo un Dr. Jekyll y un Mr. Hyde, una persona afable en la vida cotidiana y otra entidad oculta y tenebrosa que permanece amordazada la mayor parte del tiempo. Bajo la mscara de nuestro Yo consciente descansan ocultas todo tipo de emociones y conductas negativas.

Que la sombra se convierta en nuestro amigo o en nuestro enemigo depende en gran parte de nosotros mismos. La sombra se hace hostil slo cuando es negada o mal comprendida, por lo que no es necesariamente un enemigo, de hecho es exactamente igual a cualquier ser humano con el cual tenemos que entendernos, a veces cediendo, a veces resistiendo, a veces mostrando amor, segn lo requiera la situacin.

Exteriormente podemos ser personas limitadas con una identidad limitada; pero interiormente contenemos el universo. Y se trata de un universo organizado y que tiene un propsito. Aceptar y hacer honor a nuestra propia sombra es una importante misin, porque gracias a ello se desarrolla la consciencia y se alcanza la plenitud y la totalidad de nuestro ser.

INTEGRANDO LA SOMBRA Cmo podemos integrar la sombra?En primer lugar hay que dejar de negar su existencia y aceptarla. El encuentro con la sombra implica una confrontacin con uno mismo en el ms amplio sentido de la palabra. Es un encuentro con lo inconsciente, con aquella parte de la personalidad de la cual no siempre aceptamos o nos damos cuenta, es el proceso que nos permite llegar a ser personas completas y nicas, es el de abrazar simultneamente la luz y la oscuridad que hay en nosotros mismos y favorecer el desarticular nuestra falsa personalidad y llegar a aceptar nuestra verdadera naturaleza.

Para integrar nuestra Sombra tenemos que afrontarla e integrar sus contenidos en una imagen ms global y completa de nosotros mismos, y que al llevarlos a cabo puede brindarnos los siguientes beneficios: Aumentar nuestro autoconocimiento y aceptarnos de una manera ms completa. Encauzar adecuadamente las emociones negativas que surgen inesperadamente en nuestra vida cotidiana. Liberarnos de la culpa y la vergenza asociadas a nuestros sentimientos y acciones negativas. Reconocer las proyecciones que definen nuestra opinin de los dems. Sanar nuestras relaciones mediante la observacin sincera de nosotros msmos y la comunicacin directa. Y utilizar la imaginacin creativa , por medio de los sueos, pintura, escritura y rituales, para hacernos cargo de nuestro yo reprimido.FORMAS DE ACERCARSE A LA SOMBRA PERSONALDESCUBRIENDO LOS ASPECTOS DE LA SOMBRA Para poder empezar a aceptar e integrar nuestra sombra, es necesario primero descubrir los aspectos bajo los que se oculta y esto lo podemos hacer al responder diversas preguntas tales como:Cules son tus rasgos que prefieres mantener en secreto?Qu temas de discusin tiendes a evitar en tus conversaciones?En qu situaciones te pones nervioso, sensible y a la defensiva?En qu situaciones te sientes inferior o te falta confianza en ti mismo?En qu situaciones sientes vergenza?Qu clase de crticas te irritan?Los temas que evitas, la incomodidad o una reaccin excesiva a ciertas situaciones revelan tu miedo a exponer un aspecto vergonzoso de ti mismo, y evidencian que se acaba de tocar una parte sensible de tu sombra.ANALIZAR NUESTRAS PROYECCIONESUna segunda forma, de aproximarnos a la sombra personal consiste en exa minar nuestras proyecciones. La proyeccin es un mecanismo inconsciente que acontece cuando se activa un rasgo o una caracterstica de nuestra personalidad que permanece desvinculada de nuestra conciencia. Como resultado de la proyeccin inconsciente percibimos este rasgo en la conducta de los dems y reaccionamos en consecuencia. As vemos en ellos algo que forma parte de nosotros mismos pero que no reconocemos como propio.

La manera ms sencilla de realizar este trabajo consiste en hacer una lista de las cualidades que nos desagradan de los dems como por ejemplo, la vanidad, el egosmo, la irresponsabilidad, la superficialidad, etctera. Una vez hecha la lista debemos seleccionar aquellas caractersticas que ms odiemos o despreciemos. Por ms difcil que nos resulte de creer este inventario final nos mostrar una imagen fidedigna de nuestra propia sombra personal.

Si, por ejemplo, he anotado que la arrogancia me resulta insoportable y si adems critico de manera inflexible este rasgo en los dems conviene que analice mi propia conducta para ver en qu medida yo tambin soy arrogante. Obviamente no todas nuestras crticas son proyecciones de rasgos propios indeseables pero cuando nuestra crtica sea desproporcionada o excesiva podemos estar seguros de que algo inconsciente hasido estimulado y reactivado.

INTERPRETAR NUESTROS SUEOS Y FANTASIAS

Todos nosotros soamos, ensoamos y fantaseamos y si prestamos atencin a esas actividades podremos aprender muchas cosas sobre nuestra sombra y sus contenidos. Cuando la sombra aparece en nuestros sueos reaccionamos ante ella con miedo, desagrado o disgusto, igual que lo haramos ante alguien a quien considerramos inferior. En los sueos huimos de la sombra, la evitamos y frecuentemente experimentamos que nos persigue. Tambin puede aparecer como una figura difusa a la que tememos y de la que intuitivamente escapamos. Nuestra tendencia habitual ante la sombra consiste en evitarla del mismo modo que solemos hacerlo en la vida consciente.

Pero esta figura es nuestra propia sombra por consiguiente, la actitud ms adecuada ser la de afrontarla y descubrir qu es y qu pretende. Debemos observar sus acciones, sus actitudes y sus palabras. A fin de cuentas, ella encarna dimensiones de nuestro ser que podran ser conscientes y, por tanto, constituye un yacimiento muy provechoso para nuestro autoconocimiento.

Suelen ser fantasas de violencia, poder, riqueza y sexo. Son ensueos de abundancia en los que conseguimos lo imposible. Una vez ms, la sombra se halla dispuesta a compartir su patrimonio si la aceptamos y reflexionamos sobre ella.

ACEPTANDO NUESTRO LADO OSCUROEl que podamos integrar nuestra sombra es una cuestin de amor y aceptacin. En qu medida aceptamos nuestros aspectos ms desagradables y perversos? Cunta caridad y compasin mostramos ante nuestra propia debilidad y enfermedad? Cul es nuestra participacin en la construccin de una sociedad basada en el amor en la que tenga cabida todo el mundo?

Amarse a uno mismo no es una tarea sencilla porque eso significa amar todo lo que hay en nosotros, hasta la misma sombra que nos hace sentir inferiores y socialmente inaceptables. Es por ello que la atencin que prestamos a nuestras facetas ms abyectas forma parte del proceso de curacin.