2
Enganchados a la literatura Irvine Welsh, autor de ‘Trainspotting’, en una reunión de adictos mexicanos Estamos en un céntrico hotel de Monterrey, en el estado de Nuevo León (México), uno de los que cuenta con más cárteles de todo el país. Junto a la delegación de invita- dos a la feria del libro UANLeer, va- rios centenares de personas asisten, en la primera planta, a otro tipo de convención. Vienen de todos los rincones de México, y algunos de Estados Unidos. Son miembros de Narcóticos Anónimos (NA), una asociación internacional que, a la manera de sus primos de Alcohóli- cos Anónimos (AA), ayuda a perso- nas de todo el mundo a dejar las dro- gas, a partir únicamente de sesiones de terapia de grupo, donde los adic- tos hablan con la confianza que les da el anonimato. Que nadie piense sólo en las versiones pequeñobur- guesas de este problema: Ezequiel es de Pánuco y han decapitado a un amigo suyo; Lupe fue secuestrada y obligada a prostituirse en la colonia Portales de Ciudad de México; Gus- tavo se salió por piernas del cártel Santa Rosa de Lima y tiene miedo de que aún le busquen; Irvine es es- critor y... un momento, ¿qué hace aquí Irvine Welsh? El autor de Trainspotting –novela publicada en 1993, sobre cinco chi- cos enganchados a la heroína en Edimburgo, una de las obras más influyentes del siglo XX– pertenece a los invitados de las plantas supe- riores del hotel, los asistentes a la fe- ria del libro. Desde Miami –donde vive ahora– ha venido a participar en las actividades de la cátedra Ana- grama de la UANL y a hablar de su última novela, Un polvo en condicio- nes, las andanzas de un taxista adic- to al sexo. Informado por La Van- guardia de que se estaba celebrando una convención de NA, acude a charlar con algunos participantes.. Conoce perfectamente el percal: “Yo asistí a estas reuniones en ciu- dades como Londres o Amsterdam, estuve enganchado a la heroína 18 meses y fue una gran ayuda para po- derlo dejar. Ahora tengo 60 años, y bebo sólo ocasionalmente, pero si, en algún momento, viera que vuel- vo a tener problemas de control con alguna sustancia, no dudaría en vol- ver a asistir. Es una campana de emergencia que sé que siempre está ahí”. Welsh, hijo de una camarera y un estibador, se acerca a la mesita don- de reposa el termo de café. “Chicos, ¿puedo tomar uno? Lo echo de me- nos... ese momento de la máquina de café, cuando era una piltrafa hu- mana y sentía que, al menos allí, me querían”. La llegada de Welsh ha causado una pequeña conmoción en los pasillos. Todos parecen muy fans suyos y le piden que les firme bolsas, camisetas, programas, se ha- cen fotos junto a él (“esto de los sel- fies no es muy anónimo ¿no?”, bro- mea el escritor)... “¡Señor Welsh! ¡He visto cincuenta veces Trains- potting! –le confiesa Luis, de Du- rango–, 25 de ellas mientras consu- mía y 25 estando limpio. Nos la po- nían en el centro de rehabilitación... Siempre aprendo cosas nuevas”. “Vaya, así que te sacaban la pasta en el centro y a mí no me enviaban los royalties”, le suelta el escocés, con aire divertido. Autor de 15 libros, le preguntan sobre todo por los de la serie con los personajes de Trainspotting, esto La otra cara de un novelista mítico Enviado especial XAVI AYÉN El escritor Irvine Welsh en un hotel de Monterrey (México), con un grupo de adictos de Narcóticos Anónimos Monterrey (México) La Vanguardia 07/04/19

La Vanguardia 07/04/19 - Editorial Anagrama PN 985 - La... · GUSTAVOVALDEZ es, Cola (2001), Porno (2002), y la precuela Skagboys (2012), “allí los veréis antes de caer, unos

  • Upload
    others

  • View
    3

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: La Vanguardia 07/04/19 - Editorial Anagrama PN 985 - La... · GUSTAVOVALDEZ es, Cola (2001), Porno (2002), y la precuela Skagboys (2012), “allí los veréis antes de caer, unos

Enganchados a la literaturaIrvineWelsh, autor de ‘Trainspotting’, en una reunión de adictos mexicanos

Estamos en un céntrico hotel deMonterrey, en el estado de NuevoLeón (México), uno de los quecuenta con más cárteles de todo elpaís.Juntoaladelegacióndeinvita-dosa la feriadel libroUANLeer,va-rioscentenaresdepersonasasisten,en la primera planta, a otro tipo deconvención. Vienen de todos losrincones de México, y algunos deEstados Unidos. Son miembros deNarcóticos Anónimos (NA), unaasociación internacional que, a la

manera de sus primos de Alcohóli-cosAnónimos (AA), ayuda a perso-nasdetodoelmundoadejarlasdro-gas,apartirúnicamentedesesionesde terapiadegrupo,donde losadic-tos hablan con la confianza que lesda el anonimato. Que nadie piensesólo en las versiones pequeñobur-guesas de este problema: Ezequieles dePánuco yhandecapitado aunamigo suyo;Lupe fue secuestradayobligadaaprostituirse en la coloniaPortalesdeCiudaddeMéxico;Gus-tavo se salió por piernas del cártelSanta Rosa de Lima y tiene miedodequeaún lebusquen; Irvinees es-critor y... un momento, ¿qué haceaquí IrvineWelsh?ElautordeTrainspotting–novela

publicada en 1993, sobre cinco chi-cos enganchados a la heroína enEdimburgo, una de las obras másinfluyentesdelsigloXX–pertenecea los invitados de las plantas supe-rioresdelhotel, losasistentesalafe-ria del libro. Desde Miami –dondevive ahora– ha venido a participarenlasactividadesdelacátedraAna-grama de la UANL y a hablar de suúltimanovela,Unpolvoencondicio-nes, lasandanzasdeuntaxistaadic-to al sexo. Informado por La Van-guardiadequeseestabacelebrandouna convención de NA, acude acharlar con algunos participantes..Conoce perfectamente el percal:“Yo asistí a estas reuniones en ciu-dadescomoLondresoAmsterdam,

estuve enganchado a la heroína 18mesesyfueunagranayudaparapo-derlo dejar. Ahora tengo 60 años, ybebo sólo ocasionalmente, pero si,en algúnmomento, viera que vuel-voatenerproblemasdecontrolconalgunasustancia,nodudaríaenvol-ver a asistir. Es una campana deemergencia que sé que siempreestáahí”.Welsh,hijodeunacamarerayun

estibador, seacercaa lamesitadon-de reposael termodecafé. “Chicos,¿puedo tomar uno?Lo echodeme-nos... ese momento de la máquinade café, cuando era unapiltrafa hu-manay sentíaque, almenosallí,mequerían”. La llegada de Welsh hacausado una pequeña conmoción

en los pasillos. Todos parecenmuyfans suyos y le piden que les firmebolsas,camisetas,programas,seha-cen fotos junto a él (“estode los sel-fies no esmuy anónimo ¿no?”, bro-mea el escritor)... “¡Señor Welsh!¡He visto cincuenta veces Trains-potting! –le confiesa Luis, de Du-rango–, 25 de ellasmientras consu-mía y 25 estando limpio. Nos la po-níanenelcentroderehabilitación...Siempre aprendo cosas nuevas”.“Vaya,asíque tesacaban lapastaenel centro y amí nome enviaban losroyalties”, le suelta el escocés, conairedivertido.Autor de 15 libros, le preguntan

sobre todopor losde laseriecon lospersonajes de Trainspotting, esto

La otra cara de un novelista mítico

Enviado especial

XAVI AYÉN

El escritor IrvineWelsh en un hotel deMonterrey (México), con un grupo de adictos de Narcóticos Anónimos

Monterrey (México)

07/04/19La VanguardiaEspaña

Prensa: DiariaTirada: 75.397 EjemplaresDifusión: 59.115 Ejemplares

Página: 50Sección: CULTURA Valor: 48.353,09 € Área (cm2): 953,5 Ocupación: 96,51 % Documento: 1/2 Autor: XAVI AYÉN Núm. Lectores: 543000

Cód: 124747541

La Vanguardia 07/04/19

Page 2: La Vanguardia 07/04/19 - Editorial Anagrama PN 985 - La... · GUSTAVOVALDEZ es, Cola (2001), Porno (2002), y la precuela Skagboys (2012), “allí los veréis antes de caer, unos

GUSTAVO VALDEZ

es, Cola (2001), Porno (2002), y laprecuela Skagboys (2012), “allí losveréis antes de caer, unos queríanser futbolistas profesionales, otroscorríanmaratones...”. Welsh cuen-ta que, en inglés, ya ha publicadootro de la misma pandilla, DeadMen’sTrousers. “¿Cómo les va aho-ra?, ¿quéhacen?”, pregunta alguiencomointeresándoseporunosviejosamigos. “Bueno, son 25 años másviejos –responde el autor–, Rentonesundjdeéxito, viajamucho, tomacoca y tranquilizantes; Sick Boy seha metido en los negocios, es unaespecie de chuloputas y toma cocade vez en cuando; Spud sigue sien-dounyonqui, no sehamudado, y lodeja intermitentemente; y Begbiees el que ha tenido más éxito, pueses un artista internacional de pres-tigio yni siquierapruebael alcohol.Spud y Sick Boy, además, se metenenelmundodeltráficodeórganos”.“¿A cuál de ellos te pareces túmás?”,preguntaalguien.“Decarác-ter, a Renton –dice Welsh– queaunque le vaya bien siente que lefalta algo importante en la vida, tie-ne esa ansia por controlarlo todo ysocialmenteesmuy inepto”.

Welshsesientaa tomarelcaféenuna sala con un grupo reducido demiembros: Luis; Francisco yYogui,de Saltillo; y Bernardo, de NuevaRosita. “Yo canalicé –les cuenta–esa tendencia genética a la compul-sión, la obsesión... en algo positivo.Ledi lavueltaamitrastornoobsesi-vo-compulsivo.Todos losrasgosdemi carácter que eran un problemaahora los canalizo en laproducciónde libros.Tambiénhagoyogacomoun loco, nopuedopasar sinesapar-te espiritual. Sigo siendo un obseso¡yme va como la seda! La obsesión,enunescritor, esunavirtud”.Losadictos ledicenque, comoél,

intentan escribir todos los días,pues“unapartedelaterapiaconsis-te en eso”. “¡Todos somos escrito-res, artistas, cantantes, dibujantes!–responde Welsh– Si miras un ni-

ño, son lasprimerascosasquehace,es algomuyhumano. Pero nos pre-paranparael puto sistema laboral ynos rompen esa personalidad, nosdesintegran, nos hacen dejar depintar, escribir y bailar. Por eso es-cribís, porque cuando volvemos ahacer eso reconectamos con nues-tra humanidad y la gente se sientemejor.Escomovolveracasa”.Uno de los presentes acude tam-

bién a reuniones de alcohólicos, yWelsh mueve la cabeza. “Yo nopuedo dar lecciones, porque a cadauno le vabienuna cosadistinta, pe-ro siempre recomiendo ir a las reu-nionesdeNA–replica–aunquesólohaya un problema de alcohol, por-quelagenteesmásenrollada, losjó-venes van a NA porque, ya me di-réis, ¿quiéneselque,hoyendía, só-lo haya tomado alcohol?” (todosríen).“AAAvanlosabuelosquehantrabajado toda la vida en la fábrica–prosigue el escritor–. EnNA yo vimás gente creativa, artistas, músi-cos, escritores, me sentí más esti-mulado.Enpocoslugaresseconocea tantagente interesante”.Para Welsh, “más allá de todos

los problemas físicos y mentalesque traen las drogas, entre ellos laansiedad o la depresión, hay un in-dicador claro, esemomento en quesólo las tomas ya porque, si no, tesientes enfermo. Eso significa: hayque parar. Yo al principiome lo pa-saba bien, me otorgaba un senti-miento de invencibilidad, pero lue-go se convirtió en un grave proble-ma. Si lo consigues dejar, te dascuentade toda laenergíaque teníasahídormida... ¡inclusoenel sexo!”.“Existimos en todo el mundo

–apuntaLuis–,tambiénenBarcelo-na,póngalo, si sólounapersonaconproblemas que lo leyera nos cono-ciera y consiguieradejar lasdrogas,suartículohabríavalido lapena”.c

Cero cero cero (Anagrama/Em-púries, 2014)deRobertoSaviano.“Escribir sobre la cocaína–cuentael autor, periodista italianoame-nazadodemuertepor lamafia– escomoconsumirla.Cadavezquie-resmásnoticias,más informa-ción....”.Muestra cómo funcionael tráfico internacional delpolvoblanco, “la drogaquemueveelmundo”, conespecial atenciónaColombia yMéxico, y supapel enlas finanzas internacionales.

Hasta quepuedas quererte solo(Alfaguara, 2016) dePabloRamos.La adicción, desdedentro.Elautor, argentino, realizaun im-pactante viaje autobiográfico almundode lasdrogas a travésdeunprotagonista queentra en terapiayde lospersonajes queva cono-ciendo.El libro se estructura endocepartes, siguiendoel progra-madeDocePasosde las asociacio-nes comoAlcohólicosAnónimos.Familiares, síndromesdeabsti-nencia, recaídas...

Quédíamásbueno (ReservoirBooks, 2018)deAyeletWaldman.Unmesen la vidadeunamujer,abogada, escritora, esposa ymadrede cuatrohijos enEE.UU.quebusca la estabilidad tomandomicrodosis deLSD.Enesteensayo, explora asimismo lahistoria y losmitos en relaciónalasdrogas, así como la luchabizantinaqueelEstadomantieneconellas. ZadieSmithdijo queera“el libromásdivertidoqueheleídoúltimamente”.

El asesino tímido (SeixBarral,2018)deClaraUsón.En laEspañade la transición, la narradora (lapropiaUsón) resigue la biografíade la actriz dedestapeSandraMozarovskimientras ella sedes-peñaporunabismopersonal quelahará ser ingresada enuncentrode rehabilitacióndedrogadictos.Unade lasmejoresnovelas enespañol de losúltimos tiempos,ganóel premioSor Juana InésdelaCruzde laFILdeGuadalajara.

Sirenas (Roja yNegra, 2018)deJosephKnox.Novelanegra avala-daporLeeChild, el protagonistaes el detectiveAidanWaits, en-ganchadoa las anfetaminas, que semueveporunManchesterpostin-dustrial ynocturnoenel queZainCarver, el señorde ladrogade laciudad, parece controlar el cursode los acontecimientos.

Miañodedescanso y relajación(Alfaguara, 2019) deOttessaMoshfegh.Maravillosanovelasobreunamujer jovenquedecide,trasundesengañoamoroso, ence-rrarse en suapartamentodeMan-hattanpara, con la ayudade lasrecetas que le suministraunaextravagantedoctora, hibernar enlamedidade susposibilidades.Elextenso catálogodemedicamen-tos y los efectos que cadaunotienenenel ánimode laprotago-nista generanunpuñadode situa-ciones tragicómicas.

Drogas por escrito

PRIMERA PERSONA

“Fui adicto a laheroínadurante 18meses, yestas reunionesmeayudaron”, diceWelsh

“TODOS SOMOS ARTISTAS”

“Un niño dibuja,escribe, canta... pero elputo sistema laboralnos desintegra”

07/04/19La VanguardiaEspaña

Prensa: DiariaTirada: 75.397 EjemplaresDifusión: 59.115 Ejemplares

Página: 51Sección: CULTURA Valor: 30.841,93 € Área (cm2): 608,2 Ocupación: 61,56 % Documento: 2/2 Autor: XAVI AYÉN Núm. Lectores: 543000

Cód: 124747541

La Vanguardia 07/04/19