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Lengua materna (*) (Está escrito y entonces se escucha) La mirada sueña su ser sin ser cierto. Nada imprescindible es inversamente proporcional: el uso sacia lo silvestre, el empolvado a la par de la apariencia. Hace un rato y en el país aún paisajes. Las palabras preguntan por las plantas en lo que no podrían responder, ¿y, si lo son? Abruma un deslumbramiento, y dentro de la casa casi una situación; la casa, ese espejo para pecar después. Todo lo nuevo tendrá redor de urraca, librada membrana adonde despertarse. Corre a sus ansias una visión valiente: el río sagrado en lugar de los hogares, la velocidad del oro en aras del viento. Entre tanto el árbol del tabú osó soltar azores por las montañas nunca únicas, pasó el pulso del papiro a la memoria al morir la hora entre la ausencia y un espesor infinito: algo todavía por ipar y pare al alba el hábitat la sílfide feliz. Raspa por el paisaje lo que no es poca cosa y la costumbre de obrar en breve. Ya el tiempo o regresa la idea a su lid, regla grave para agregar a los agüeros. Detrás del austro otro estruendo atraen distraído por traer a las horas un drama. Entre hoy y ya pasaron varias semanas; quede para el domingo lo interminable, el perfume cuya forma fue la felicidad. Algún rato será mientras el aura ocurra, rápido rasgando la suerte de herraduras cuando a ras la siembra reciente roza al sauce en la sequía pero sin nunca serlo: nada simple es similar a la próxima vez. ¿O ha de ser el infinito, puro fin, de qué, y del cielo, qué ha sido por asomar ahí? Altura callada, hada del más dócil nido de voz a variar con la voluntad del tala.

Lengua Materna

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Eduardo Espina , poema

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Lengua materna (*)(Est escrito y entonces se escucha)

La mirada suea su ser sin ser cierto.Nada imprescindible es inversamenteproporcional: el uso sacia lo silvestre,el empolvado a la par de la apariencia.Hace un rato y en el pas an paisajes.Las palabras preguntan por las plantasen lo que no podran responder, y, silo son? Abruma un deslumbramiento,y dentro de la casa casi una situacin;la casa, ese espejo para pecar despus.Todo lo nuevo tendr redor de urraca,librada membrana adonde despertarse.Corre a sus ansias una visin valiente:el ro sagrado en lugar de los hogares,la velocidad del oro en aras del viento.Entre tanto el rbol del tab os soltarazores por las montaas nunca nicas,pas el pulso del papiro a la memoriaal morir la hora entre la ausencia y unespesor infinito: algo todava por ipar y pare al alba el hbitat la slfide feliz.Raspa por el paisaje lo que no es pocacosa y la costumbre de obrar en breve.Ya el tiempo o regresa la idea a su lid,regla grave para agregar a los ageros.Detrs del austro otro estruendo atraendistrado por traer a las horas un drama.Entre hoy y ya pasaron varias semanas;quede para el domingo lo interminable,el perfume cuya forma fue la felicidad.Algn rato ser mientras el aura ocurra,rpido rasgando la suerte de herradurascuando a ras la siembra reciente roza alsauce en la sequa pero sin nunca serlo:nada simple es similar a la prxima vez. O ha de ser el infinito, puro fin, de qu,y del cielo, qu ha sido por asomar ah?Altura callada, hada del ms dcil nidode voz a variar con la voluntad del tala.Tilos, hielo, aos de andubay como vanico el corazn del agua a darles caza,y zarzales al hacer del azur el resultadoy razones para las zorras en la cerrazn.Va por tal porvenir el dorado anuro, vala paja al pico en su pjaro, gira airado,a lo invencible viaja antes de saber esto.Ah del aire a solas como punto de vista.Cimas, alma para no dejar de parecerseal cierzo donde tanto est que ya estabacada vez ms cerca del sol hacia el albalibrada de madrporas, de mirar encimala misma similitud de lirio cerca del aire.Sea hasta turbar fuera una infinita esferacontra la fronda que en canfora viajarapor ver al verano esperando la respuesta,plan inmvil que la paz puso en peligro.Oh del tiempo! para despus de los dasdados a la penltima idea! que les diera,lingua, gualichos, noche de yutes chatossiempre y cuando en el tranco aprenda.Es por eso de pagarle a la belleza lares.Pero no todo embellecimiento hablarde lo oblicuo en la arboleda: el bosquebaado de vencejos, da el visto bueno;est la luna para que luego la explique.En la gema del ojo grazna lo agrietado.Dentro, lo que no es nada, deja de ser.

(*) De El cutis patrio (2006)