19
EL LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO JUAN VILLALBA

LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Análisis gestual en el libro de Javier Tomeo Amado monstruo

Citation preview

Page 1: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

EL LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

JUAN VILLALBA

Page 2: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

1

RESUMEN.

Amado monstruo es un relato dialogado entre dos

personajes: Juan, joven de treinta años que por primera vez

se enfrenta a su madre para abandonar el hogar y participar

en una entrevista con el fin de optar al puesto de guarda

jurado de un banco, y Krugger, Jefe de Personal de dicho

banco que lo someterá a un exhaustivo interrogatorio

personal.

Aparentemente ambos personajes son muy distintos:

Krugger es un hombre impasible, seguro de sí mismo y

dominador. Juan es un joven tímido y en principio,

inseguro, que acaba de abandonar el confortable-asfixiante

regazo materno para enfrentarse al mundo. Sin embargo,

conforme avanza la conversación descubrimos que la relación

de poder se invierte, y que dos personajes tan dispares

comienzan a parecerse más, hasta el punto de compartir un

vínculo personal común: La obsesión por una madre

dominante, posesiva y absorbente de su personalidad.

La conversación, la interacción comunicativa entre

ambos personajes va revelando sus auténticas

personalidades, y en el caso de Krugger, un terrible

secreto que, en el fondo de su mente, tortura su conducta:

El asesinato de su propia madre cometido en la infancia.

Como se observa por este resumen del argumento, Amado

monstruo es una novela de trasfondo psicológico que

enfrenta a dos personalidades que en principio intentan

engañarse y engañarnos, pero que, poco a poco, como

consecuencia de los diferentes elementos que actúan en la

comunicación, terminan revelando su auténtico ser. De esta

Page 3: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

2

forma, el lenguaje no verbal está presente en el libro y,

en gran medida, por medio de él se descubre la evolución

de la conversación y la auténtica personalidad de los

protagonistas, pues revela las impresiones del yo no

explicitamente declaradas pero presentes en la entrevista-

enfrentamiento: el furor, la admiración, la estima, la

culpa, la duda, la confianza, el status, el poder social,

etc. En suma, nos descubre los secretos más profundos de

los personajes, aquello que no dicen pero que viven

intensamente.

Page 4: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

3

DESARROLLO DEL ANÁLISIS DEL LIBRO.

1.-Proxémica

La novela comienza significativamente de la siguiente

manera:

Está sentado tras una enorme mesa y ni

siquiera hace ademán de levantarse cuando

entro en el despacho. Se limita a darme la

mano. Tiene los ojos azul porcelana que

armonizan con el color de su corbata, pelo

rubio de paja, mejillas sonrosadas y nariz

afilada de canónigo intrigante. Su aspecto,

en líneas generales, resulta afable.

Veremos, sin embargo, que sucede a partir de

ahora. Me invita a tomar asiento, refuerza

su sonrisa y se presenta como H. J. Krugger,

Director del Departamento de Personal1.

Nos encontramos ante una persona que analiza e

interpreta un entorno y un aspecto físico (recuérdese que

en la vida diaria se juzga frecuentemente a las personas

por la primera impresión que causan).

La proxémica es la ciencia encargada de estudiar los

microespacios que rodean al hombre, y por ella sabemos que

el espacio proporciona signos evidentes del status social

de los intervinientes en un acto de comunicación. Así, en

nuestro caso concreto esa "enorme mesa" es signo de poder.

1Javier TOMEO, Amado monstruo, Barcelona, Anagrama, 1985,

p.7. A partir de ahora citaremos entre paréntesis adjuntos a la

propia cita las páginas correspondientes.

Page 5: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

4

De igual forma, el no hacer "ademán de levantarse"

corrobora ese poder que anticipa la mesa (obsérvese en las

reuniones de trabajo como los cargos de posición más

elevada adoptan posturas relajadas y asumen un aire

informal, mientras que el personal de menor categoría

mantienen posturas más formales y forzadas).

2.-Importancia de la forma de vestir.

De esta manera el autor describe inicialmente la

superioridad del Director de Personal del banco, Krugger,

frente al candidato al puesto de vigilante jurado, Juan. La

cita se completa con una descripción física de Krugger,

bastante agraciada y de la que cabe destacar esa "corbata"

a juego con sus ojos, pues denota la importancia de vestir

adecuadamente para cada ocasión y de la presencia física,

elemento sobre el que más adelante insiste al tratar de la

Page 6: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

5

elección del traje que viste Juan en la entrevista:

Me sirvió otra taza de café (sigo

contándole), y mientras lo hacía me preguntó

qué pensaba ponerme para acudir a esta cita.

Le dije que la chaqueta azul y los

pantalones grises, es decir, lo que llevo

puesto ahora. Arrugó la nariz y me recordó

que esta chaqueta (véalo usted mismo) tiene

los puños deshilachados, y que los

pantalones me clarean por las rodillas. Me

aconsejó que me presentase a esta entrevista

lo mejor vestido posible, como si fuese de

boda. Y dijo también que si ustedes me veían

con esta chaqueta y estos pantalones iban a

pensar que era un infeliz, por aquello de

que el hábito hace al monje. Reconocí que no

dejaba de tener razón y le propuse ponerme

un traje de cuadros, que tiene ya bastantes

años, pero que he llevado pocas veces y está

todavía de buen ver. No le pareció

suficiente y justificó su negativa con otros

argumentos. Dijo que a la perdiz se la

reconoce por su plumaje y al hombre por su

ropaje y que, al verme mal vestido, pensasen

que tenía que trabajar por necesidad. Seguro

que entonces se librarían de ti con

cualquier excusa, sentenció (p.95).

La cita continúa y resulta altamente significativa

para recordar que la forma de vestir expresa nuestro

respeto por una situación social dada y por las personas

que la integran. De ahí muchos convencionalismos, que

aunque los interpretemos como tales, debemos asumir si no

queremos que los otros nos miren con reticencia y nos

juzguen como provocadores-alteradores de la norma social

que permite la convivencia.

Page 7: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

6

3.-La voz.

La descripción de Krugger se completa de la siguiente

manera: "Habla con un ligero acento extranjero arrastrando

las erres y oscureciendo las vocales..." (p.7). Llamando de

esta forma la atención sobre otro elemento paralingüístico

importante, la voz. A este respecto resulta conveniente

recordar a los alumnos que todos nosotros manifestamos

mediante el tono, ritmo, timbre y volumen de voz, gran

cantidad de información sobre nuesro estado de ánimo,

personalidad y afectos.

En la novela Juan (es el narrador) está atento a este

elemento y lo analiza constantemente: "Y añade, en tono

conciliador, que al margen de nuestros asuntos privados, no

le pareció bien que menospreciase al Director del Banco..."

(p.62). "Si quiere que le sea sincero (dice, con tono

ligeramente zumbón..." (p. 70).

Page 8: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

7

4.-El contacto físico como manifestación de afecto.

La regulación de la comunicación se ve influida, en

cierto modo, por la orientación física de los hablantes.

Las personas regulan el flujo de su hablar-escuchar de

forma más fácil cuando interactúan a una distancia "cómoda"

(proxémica). Esta distancia varía según la intimidad y

aprecio existente entre los interactuantes y la naturaleza

del encuentro, pero en líneas generales podemos afirmar que

la distancia denota, dentro de ciertos límites,

distanciamiento y despego, mientras que la proximidad

produce sentimientos de solidaridad y atracción.

El hombre expresa infinidad de estados emocionales y

juzga e interpreta los sentimientos de los demás por el

contacto físico, por la sensibilidad de la piel al tacto. A

este respecto, Juan rememora el intento de su madre por

convencerle de que abandone la búsqueda de trabajo de la

siguiente manera: "Yo creo (sigo contándole a Krugger) que

pensó que empezaba a convencerme. Imagínese que me cogió de

la mano y pretendió que me sentase sobre sus rodillas..."

(p. 13), logrando de esta forma un contacto físico directo

y precioso para lograr sus objetivos al tiempo que situaba

la conversación a menos de cuarenta y cinco centímetros,

Page 9: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

8

distancia apropiada para reñir, hacer el amor o, como en

este caso, conversar íntimamente y cargar la comunicación

de intención, pues a esta distancia las personas se

comunican no sólo por medio de palabras, sino también por

el tacto, el olor, la temperatura del cuerpo, la

respiración, la textura de la piel...

De igual forma, la madre de Juan, ante la negativa de

este para asumir sus requerimientos de que abandone la idea

de trabajar, le niega su afecto rechazando sus besos:

"Quise darle un beso en la frente (recuerdo), pero ella me

rechazó con las dos manos..." (p.103).

5.-Reguladores de la conversación.

La entrevista Krugger-Juan, como cualquier

conversación cara a cara, exige elementos claros y concisos

para regular el flujo y reflujo del hablar y escuchar de

las personas. La mayoría de estos elementos son no verbales

e involuntarios o inconscientes, pero necesarios para

indicar cuestiones tan importantes como acelerar, repetir,

continuar, elaborar, demorar, permitir hablar al otro, etc.

Los reguladores más reiterados y comunes son pequeños actos

no verbales: Asentir con la cabeza, el contacto visual, los

cambios de posición del cuerpo, los movimientos de manos

puntualizadores, los movimientos de cejas, etc. A lo largo

de la novela los ejemplos son múltiples: "Sacude la cabeza,

sorprendido tal vez por mis metáforas..." (p.9); "Krugger

Page 10: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

9

levanta el índice. Quiere saber si mi madre..." (p.13);

"Krugger resopla suavemente por la nariz y alarga las

piernas por debajo de la mesa. Traza con la mano que

sostiene el cigarrillo un ademán indefinido y recuerda que

también tuvo un tren electrico..." (p.14); "Le veo agudizar

la expresión como el centinela que en el silencio de la

noche, oye de pronto el rumor de pasos lejanos. Se quita el

cigarrillo de los labios y me mira a los ojos. Quiere saber

si me gusta la música y espera mi respuesta con expresión

expectante..." (p.16); "Levantó las cejas y le pregunto

quién es Chopín, pero no responde..." (p.17)

En general se puede afirmar que las personas actúan

con movimientos corporales frecuentes y vigorosos cuando

tratan temas que les son familiares. Así, Krugger en la

novela cuanto trata el tema gastronómico se manifiesta

siempre de forma contundente, pues su madre le hizo

heredero de una libreta con numerosas recetas de cocina que

él conoce a la perfección: "Krugger niega con solemnes

movimientos de cabeza, pero sin perder su expresión afable.

Abre uno de los cajones del escritorio y me muestra una

pequeña libreta de cubiertas rojas..." (p.34); "Krugger

niega con un enérgico movimiento de cabeza, recurre a la

vieja libreta de su madre..." (p.70)

Lo mismo sucede cuando el Presidente del Consejo de

Administración felicita a Krugger por un informe elaborado

recientemente: "Krugger, tras unos inicios vacilantes, se

expresa cada vez con más rotundidad. Su mirada va

encendiéndose progresivamente, como alimentada por una

batería interior que, poco a poco, fuese haciéndose más

Page 11: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

10

potente. Asiente con enérgicos movimientos de cabeza,

mantiene las mandíbulas contraídas, y su mano derecha,

sobre el tablero del escritorio, se abre y cierra

espasmódicamente. Acaba cortando las palabras como con un

cuchillo y arrojándose a través del teléfono con aire

triunfal..." (p.55)

Por otro lado, los movimientos son más restringidos

cuando el tema sobre el que se discute no nos resulta

familiar o nos es desagradable. Juan describe el relato de

Krugger rememorando la muerte por accidente de su madre de

la siguiente manera: "Me ha dicho todo eso con una sonrisa

indulgente y se queda luego en silencio, con la barbilla

clavada en el pecho y la mirada puesta en el cenicero, como

si allí estuviesen, convertidos en ceniza, los mejores

recuerdos de su vida. En estos momentos se parece muy poco

al hombre seguro de sí mismo que me tendió la mano al

entrar en este despacho" (p.39)

En definitiva, como se ve, los factores del movimiento y

las posturas corporales -contacto visual, distancia física,

orientación del cuerpo, grado de relajamiento, ángulo de

postura y ángulo de movimiento físico- son indicadores

significativos de afecto interpersonal. Los movimientos y

posturas del cuerpo más tensos, inhibidos, están vinculados

con la comunicación en condiciones de ausencia de armonía

personal o cuando la relación interpersonal se realiza con

desconocidos o con quienes no se tienen en alta estima. En

la novela son frecuentes las siguientes actitudes-respuestas

entre Krugger y Juan:

Frunce los labios (Krugger), como si mis

palabras sólo le hubiesen convencido a

Page 12: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

11

medias... Me siento desconcertado (Juan),

sin saber que responderle. Enrojezco y

desvío la mirada... Mueve la cabeza de

izquierda a derecha y opina que un hombre

como yo no debiera de hablar de ese modo, ni

recurrir a tantos tópicos... Hay

situaciones, de cualquier modo, ante las que

un hombre no puede permanecer cruzado de

brazos, así que alzo la frente, decidido a

jugármelo todo a una carta. Me reencuentro

con su mirada y reconozco que tiene razón,

que jamás tuve una mujer entre los brazos,

pero que precisamente por eso él y yo

estamos condenados a entendernos... Y ahora

soy yo quien le mira fijamente a los ojos,

hasta que le veo humillar la mirada.

Carraspea, alarga la mano derecha para

acariciar el teléfono (es un gesto

instintivo que refleja su turbación

interior) y guarda silencio... (pp. 60-61)

6.-Los contactos visuales como indicadores.

Las personas somos muy sensibles a las miradas de

quienes nos rodean, en particular cuando se dan contactos

directos cara a cara. Podemos afirmar que el contacto visual

es un indicador fundamental de la orientación psicológica de

los hablantes.

De esta forma, Amado monstruo está plagada de

Page 13: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

12

interpretaciones de miradas de Krugger por parte de Juan:

"... me mira a los ojos, como tratando de descubrir si le

estoy tomando el pelo. Le sostengo la mirada sin parpadear,

hasta que desaparece su expresión suspicaz..." (p.9); ;En la

mirada azul de Krugger se enciende un brillo nostálgico"

(p.14); "Empiezo a pensar (opina Krugger, envolviéndome con

una mirada compasiva...) (p.18); "Krugger me escucha ahora

con una mirada vidriosa perdida en el aire, como si el

resbalón de mi madre le hubiese despertado penosos

recuerdos" (p.44); "Consigo, por fin, que me envuelva con

una mirada agradecida" (p. 55); "...me miró gravemente a los

ojos y asintió con un movimiento de cabeza..." (p.75)

Los ejemplos son numerosos a lo largo de la novela, pero

con los expuestos comprobamos que la mirada manifiesta la

"nostalgia", la "compasión", la "pena", la "gravedad", etc.

Los indicadores en general, y la mirada en particular, son

sugerencias no verbales de tipo personal y subjetivas. La

información que señalan se agrupa en torno de lo que cada

persona piensa de los atributos personales de los demás, así

como de qué manera define cada persona su propio papel en un

intercambio dado.

Page 14: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

13

7.-Análisis práctico de algunos gestos.

En la novela encontramos gestos como los descritos en

el anexo I, y que, en cierta manera, corroboran lo expuesto.

Así, Juan, cansado de las burdas trampas que Krugger le

tiende a lo largo de la entrevista, nos dice: "Me cruzo de

brazos (es la primera vez, desde que entré en este despacho,

que me permito esa postura) y procuro tomarme las cosas con

filosofía" (p. 49), en una actitud claramente defensiva, que

luego vuelve a repetir por motivos similares: "No se me

ocurre nada, sus argumentos me parecen tan absurdos como

desmoralizadores. Cruzo los brazos, cambio las piernas de

postura y me quedo contemplando la lluvia" (p. 85)

El gesto de seguridad y confianza lo realiza Krugger: "Sus

aires de suficiencia resultan ahora insultantes. Ha perdido

ya la cordialidad de los primeros momentos. Permanece

erguido en la butaca, con los antebrazos sobre el tablero

del escritorio y las manos unidas por las yemas de los

dedos..." (p.68)

Otros gestos no incluidos en el anexo también pueden ser

interpretados, por ejemplo la actitud reflexiva que adopta

Krugger con el siguiente gesto: "... la mirada ausente y el

índice de la mano derecha apoyado en el entrecejo..." (p.

Page 15: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

14

54), o la actitud de desacuerdo que adopta Krugger cuando

"frunce el entrecejo... Aplasta el cigarrillo contra el

cenicero y en el silencio..." (p.12), etc.

Page 16: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

15

EMBLEMAS.

Los signos más fácilmente descifrables son los que:

1.-Inidican dirección: "Vaya por allí", "Ven aquí".

2.-Dan órdenes: "Cállate", "Estate quieto".

3.-Contienen un insulto: "Jódete" o "vete al infierno" (dedo

levantado con o sin corte de mangas)

4.-Indican una respuesta: "Sí", "No", "Lo prometo", "Me

gusta".

5.-Ofrecen descripciones: "Mujer hermosa", "Figura delgada".

6.-Piden un favor: "Llévame en coche", "Pagar", "Dame de

comer".

ILUSTRADORES.

Describir ilustradores resulta muy complicado por su

numero y variedad, sin embargo diremos que son usados para

recalcar una palabra, hacer un dibujo ilustrativo en el

aire, indicar relación o imponer un ritmo a la palabra

hablada.

Page 17: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

16

REGULADORES.

Los reguladores son signos que tienen como principal

función señalar el momento del relevo en la comunicación

lingüística, así como también son utilizados para indicar al

interlocutor que debe acelerar, frenar o continuar la

conversación.

Los reguladores usados con más frecuencia son las

inclinaciones de cabeza y la mirada fija. Las inclinaciones

rápidas de cabeza llevan el mensaje de apresurarse y acabar

de hablar, mientras que las lentas, los movimientos más

deliberados, piden que el interlocutor continúe e indican

que al oyente le parece interesante y le gusta lo que se

está diciendo.

Otros reguladores pueden ser el levantar el dedo índice

para señalar que se desea intervenir en la conversación o un

ligero toque en el brazo por parte del que tiene la palabra

quiere significar que se desea seguir haciéndolo por un

tiempo más.

ADAPTADORES.

Los adaptadores son movimientos, gestos y otras

actuaciones corporales usadas para dominar, esconder, y

Page 18: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

17

controlar nuestros sentimientos y respuestas.

El catálogo de los adaptadores puede ser muy extenso y

variado, nosotros nos limitaremos a señalar algunos

sencillos y significativos que los alumnos comprenden con

claridad meridiana, son los siguientes:

-Manos en ojiva, gesto en general de confianza en sí mismo,

expresa actitud de seguridad.

-Cruzar los brazos, expresa una actitud defensiva o

negativa.

-Cruzar las piernas, actitud igualmente negativa o

defensiva.

-Dedos pulgares asomando por los bolsillos, expresan

dominio, superioridad e incluso agresión.

-Cabeza inmóvil, actitud neutral respecto a lo que se está

escuchando. Si en una conversación el oyente inclina el

cuerpo hacia adelante, ladea la cabeza y apoya su barbilla

en la mano, significa que la elocuencia del hablante está

surtiendo efecto. Sin embargo, la cabeza inclinada hacia

abajo, indica una actitud negativa del oyente.

-Manos en las caderas, denotan una actitud agresiva.

-Tirarse de la ropa, frotarse las manos o tocarse el lóbulo

de la oreja, indican contrariedad.

-Cepillarse el cabello, señala incertidumbre.

Page 19: LENGUAJE NO VERBAL EN AMADO MONSTRUO

18

BIBLIOGRAFÍA

-DAVIS, F., La comunicación no verbal, Madrid, Alianza,

1976.

-FAST, J., El lenguaje del cuerpo, Barcelona, Kairós, 1992.

-FORNER, A., La comunicación no verbal, Grao, 1990.

-LEWIS, D., El lenguaje secreto del éxito, Barcelona,

Círculo, 1993.

-MORTENSEN, C. D., Comunicación: El sistema interpersonal,

Madrid, Tres Tiempos, 1977.

-SERRANO, S., Signos, lengua y cultura