Los Caminos a Santiago. Diarios de Una Bicicleta Volumen 2

Mis caminos a Santiago Diarios de una bicicleta (II)

Damin Rojas Gmez 1

Mis caminos a santiago (Diarios De una bicicleta ii)

Camino manchego-sureste 2013.

Camino del salvador y primitivo 2015.

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INDICE

Prlogo . Pg 4 Camino Manchego-Sureste 2013 .. Pg 5 Prlogo Pg 6 Captulo I. Sonseca Escalona (83 Kms) .. Pg 8 Captulo II. Escalona vila (83 Kms) Pg 13 Captulo III. vila Tordesillas (115 Kms) .. Pg 18 Captulo IV. Tordesillas Benavente (100 Kms) .. Pg 28 Captulo V. Benavente Requejo (100 Kms) .. Pg 36 Captulo VII. Requejo Vilar de Barrio (104 Kms) Pg 43 Captulo VIII. Vilar de Barrio Ourense (41 Kms) .. Pg 51 Eplogo .. Pg 54

Camino del Salvador y Camino Primitivo 2015 Pg 55 Prlogo Pg 57 Captulo I. Len Pajares (70 Kms) .... Pg 61 Captulo II. Pajares Cornellana (101 Kms) Pg 67 Captulo III. Cornellana Grandas de Salime (112 Kms) ... Pg 75 Captulo IV. Grandas de Salime Lugo (89 Kms) Pg 85 Captulo V. Lugo Arza (86 Kms) .. Pg 93 Captulo VI. Arza Santiago de Compostela (44 Kms) Pg 101 Eplogo . Pg 107


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PRLOGO

El texto que el lector tiene entre sus manos corresponde al segundo volumen de nuestras aventuras en bicicleta. Aventuras que giran en torno a diferentes peregrinaciones. Y por qu un segundo volumen? La respuesta es que nunca vemos el final a nuestras ganas de conocer diferentes lugares de Espaa a travs del deporte de la bicicleta y las alforjas que nos acompaan. En 2010 cerramos una serie de peregrinaciones a Santiago de Compostela, pensando que era el final del Camino. La repeticin del camino sanabrs como homenaje al camino ms bonito y que ms habamos disfrutado de los 6 anteriores, era el fin de un ciclo. Hemos hecho parte del Camino Francs, la Va de la Plata, el Sanabrs, el Portugus, y el del Norte por las dos variantes: Costa y Primitivo..Pero pese a cerrar un ciclo nos faltaba una ilusin y algn que otro camino ms. La ilusin era partir desde Sonseca rumbo a Santiago, y los caminos que nos faltan por recorrer, pues del Camino del Salvador desde Len a Santiago pasando por la Catedral de Oviedo, y algn que otro camino de peregrinacin como por ejemplo a Guadalupe en Cceres, y repetir otros de los ya realizados. En 2013 iniciamos este segundo volumen con el Camino Manchego-Sureste en el que recorreremos casi 630 kilmetros pese a no llegar a Santiago de Compostela, y en 2015 lo ampliamos con una nueva aventura en la que hemos recorrido el Camino del Salvador y el Camino Primitivo con el trayecto Len-Oviedo-Santiago y un total de 502 kilmetros. Nuevas aventuras, que esperamos ir completando en aos venideros con otros muchos retos.

ESPERO QUE DISFRUTES CON NUESTRAS AVENTURAS

Las murallas de vila en el Camino Manchego-Sureste

Iglesia de S. Juan Evangelista de Sonseca. Una ilusin personal: peregrinar desde mi pueblo


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EL CAMINO MANCHEGO Y SURESTE

Sonseca ourense

(2013)


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Prlogo Cuando acab el Diario de nuestro penltimo Camino, el Sanabrs por segunda vez, realizado en 2010, deca que no sabamos si aquella sera nuestra ltima aventura. Eso, la verdad es que nunca se sabe. Es como cuando sales de copas con los amigos, nunca debes decir la ltima, sino la penltima. S que es cierto, que siempre he tenido un sueo o ilusin, y era la de salir pedaleando desde la puerta de mi casa, en Sonseca. Este sueo se fue materializando comprobando que por Sonseca pasaba un nuevo camino, el Camino Manchego.

O no tan nuevo, porque indagando en las diferentes guas y bibliografa de los caminos, compruebo que esta va que una Ciudad Real con el camino de Levante y camino Sureste, vena utilizndose ya en el siglo XVI. Esta ruta transcurra por Malagn, la comarca de las Guadalerzas, Los Ybenes, Sonseca y llegaba hasta Toledo. Este runrn en mi cabeza, me haca planear una nueva aventura. A esto se aadi la posibilidad de contar con la Gua Prctica para peregrinar desde Ciudad Real a Santiago de Compostela. El Camino Manchego, editada en 2011 por diferentes Asociaciones de amigos del Camino: de Novelda, Ciudad Real, y la Universidad de Castilla-La Mancha.

Pero los sueos no pueden llevarse a cabo sin contar con las personas que estn a nuestro alrededor y que forman la base de nuestras vidas. En primer lugar, por supuesto a mi familia, y en segundo lugar, a Antonio. Pues bien, en el invierno me plante si no ramos capaces de hacer un nuevo camino. Yo, la verdad, tampoco lo tena pensado para hacerlo ya mismo. Mis hijos son pequeos y dejar a Sonia sola con los dos nenes, me daba respeto y no estaba yo mentalizado de hacer en 2013 este camino, pero el hecho de que fuera casi ella quien me anim, o al menos, no me puso ni una sola pega para hacer el camino, fue el pistoletazo de salida para ponernos en marcha.

Hacer el Camino Manchego y enlazar con el Sureste, supona regresar al Camino Sanabrs, el camino que ya hicimos en 2002 y 2010, y que para nosotros es el ms bonito de todos, lo que era un aliciente ms. Es ms, para nosotros, el reto estaba, no en llegar a Santiago, sino en conocer nuevos territorios de Castilla y Len, atravesando Toledo, Madrid, vila, Valladolid y Zamora. Lo dems, era un premio al esfuerzo, si llegbamos a Santiago bien, si no, pues nos dbamos por satisfechos con llegar de nuevo a enlazar con el camino Sanabrs.

Lo primero, por supuesto, encontrar las fechas adecuadas a ambos.


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Como casi siempre, elegimos el mes de agosto para hacer la aventura. Otra cuestin es planificar las etapas de acuerdo a los albergues que pudiramos encontrar en el Camino. Para ello diseamos 8 etapas, que podran hacerse en 7 si hacamos un esfuerzo extra, o bien quedarnos en Ourense que era otra posibilidad por cuestiones de fechas, ya que el lunes 19 Antonio tena una cita ineludible en Puertollano.

Lo dems, lo de siempre, preparar el material, yo en este caso tena que hacer una puesta a punto de mi vieja bici Peugeot, de la cual no quiero desprenderme debido a que le tengo un cario especial al haberme acompaado en los 7 caminos anteriores, sin ni un solo problema. En este caso la tengo que hacer un apao en la tija del silln con una soldadura de aluminio que, desgraciadamente me dar problemas en esta aventura.

El resto, lo normal: los maillots, culottes, camisetas, el neceser, el saco y la esterilla, las alforjas, los productos de limpieza, recambios, herramientas, etc. La fecha elegida para el inicio de nuestro 8 camino ser el Domingo 11 de Agosto. Sonia aprovechar para marcharse unos das de vacaciones a Villaminaya con los nios, y as todos contentos.

Y por ltimo, la credencial, la cual me bajo de Internet y me sella el prroco de mi pueblo, por lo que ya tenemos la proteccin divina para hacer el Camino.

Mi vieja Peugeot 200 del ao 95. Acero puro

Todo preparado para iniciar nuestro 8 Camino de Santiago


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CAPITULO I. SONSECA ESCALONA 83 Kms (11 de Agosto)

Salimos de Sonseca a las 8,30 de la maana. Es domingo, y por lo tanto apenas hay un alma en las calles del pueblo. Tras encontrarme con Ernesto, un compaero del Club Ciclista Sonseca que va para hacer su habitual salida dominical en bicicleta, enfilamos los primeros kilmetros direccin norte. El primer pueblo es Ajofrn, mi lugar de trabajo habitual, y que dista de Sonseca unos 4 kilmetros. Hoy la ruta transcurrir prcticamente en su totalidad por caminos vecinales. En Ajofrn aprovechamos para hacer una foto en el Rollo jurisdiccional que est en la calle Real.

Como hoy estaba cerrado el Ayuntamiento, me ocup durante la semana en poner el sello en la credencial. Enfilamos los Cuatro Caminos, viendo permanentemente flechas amarillas, que ya no nos abandonarn durante todo el recorrido. Cruzamos la Ermita de la Virgen de Gracia, donde los ajofrineros celebran su romera el martes siguiente al primer domingo de mayo. Paralelos al arroyo de la Degollada, llegamos a Cobisa, donde nos alcanzan otros bikers sonsecanos. Alguno duda de que con la bicicleta que llevo pueda llegar a Santiago. El carbono y las tecnologas han provocado que se le pierda el respeto a las bicis clsicas, muy pesadas, arcaicas, pero fiables en todo momento. Les explicamos donde vamos, y ellos se desvan hacia Args.

Nosotros tomamos el carretern asfaltado que nos llevar hacia Toledo por los Cigarrales. Desde aqu es todo bajada. Llevamos poco ms de una hora y ya hemos llegado a Toledo por las proximidades del Valle. Hacemos las tpicas fotos desde esta zona y rpidamente nos volvemos a poner en marcha.

Rollo jurisdiccional en Ajofrn

Tradicionales fotos en la Ciudad Imperial


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La salida de Toledo es un poco complicada. Por el Puente del Paseo de la Vega, buscamos la Avenida de la Reconquista y por la Avenida de Barber salimos de la ciudad hacia la zona de la Peraleda. Aqu es un poco complicado salir debido a las obras paralelas a la autova de Talavera A-40, pero una pareja de guardias civiles de trfico, muy amablemente nos orientan por donde salir ya que nos ven un poco desorientados. Vamos por la va de servicio de la Autova hasta salir de la ciudad por la urbanizacin de la Legua. Aqu Antonio aprovecha para echarse su primer cigarrito. No ser el ltimo, porque vaya caminito a fumar que se ha marcado, ser que los 50 aos recin cumplidos le provocan ansiedad. Debemos indicar al lector, que en este punto hay dos variantes para hacer el camino, una ms larga y compleja que nos llevara por Rielves hasta Huecas y Novs, y la que cogeremos nosotros, ms apta para ciclistas que ser acortar por Villamiel. Seguimos el camino de la va de servicio de la A-40, hasta que por fin, cruzamos el ro Guadarrama y cogemos la carretera CM 4011 que nos llevar bordeando Villamiel hasta Huecas, donde hacemos nuestra primera gran parada. La excusa, la primera cerveza del camino. A esta cerveza la llamaremos a partir de ahora cervezaca, porque sern siempre de medio litro. El mejor refresco que un ciclista se puede encontrar, una buena cervecita en una jarra congelada. Si adems, como fue este el caso, se nos acompaa de un buen pincho y encima el mesonero nos llena los bidones de agua de hielo para seguir el camino, se agradece encontrarse con gente tan amable durante el camino.

Desde Huecas, cogemos el camino que cruza con la Caada Real Soriana. Los paisajes son de eternos campos de rastrojos del cereal ya cosechado. Algunas huertas y algunas vias ya a punto de ser recolectadas. Nuestro siguiente pueblo en cruzar es Novs, cosa que hacemos sin apenas detenernos. Buscamos de nuevo el camino de tierra que nos llevar a Quismondo. Pasamos por una aldea o casero que se llama San Silvestre, en el que hay un castillo y una ermita junto a un puado de casas, parece que abandonadas, pero todo es privado, porque est vallado y no podemos cruzarlo.

En Huecas, lugar de la primera parada del camino, y por caminos toledanos


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Antes de llegar a Quismondo vemos que hay marcas de flechas en el suelo, parece ser que ha habido alguna competicin de mountain bike, cosa que confirmamos cuando segn nos acercamos al pueblo empezamos a ver botellas de agua vacas amontonadas en los caminos, seal de que ha habido un avituallamiento y que se ha respetado poco el entorno. Suponemos que la organizacin lo recoger posteriormente porque adems nos consta que en este pueblo toledano hay mucha aficin al ciclismo de montaa. Efectivamente, entramos en Quismondo y vemos que estn de fiestas y entregando los premios a la prueba ciclista. Paramos a tomar un respiro. El calor comienza a ser insoportable. De hecho Toledo est estos das en alerta naranja por elevadas temperaturas, y doy fe de que es cierto. Debemos andar a la 1 del medioda a 35. Nos queda ya poco para llegar a Escalona donde tenemos previsto comer. Salimos por el Camino Real de Castilla, y tras cruzar la autova de Extremadura que lleva hasta Maqueda y Talavera, nos ponemos por camino de tierra en direccin a Escalona. Aqu el camino est bastante peor, hay numerosos bancos de arena que nos desequilibran la bici cargada con las alforjas. Antonio sufre ms, porque no est acostumbrado a andar por caminos, pero se defiende. Cuando nos quedan unos 5 kilmetros para llegar a Escalona y en una zona de bajada con piedras oigo un crujido en el silln y me voy para detrs. Miro y veo que se ha partido la soldadura que me hicieron en Sonseca. El silln no se quita del todo, pero se mueve y es incmodo. Ya creo que la aventura ha tocado a su fin, prcticamente sin empezar. Me dan ganas casi de llorar, pero antes de tomar una decisin, mejor llegar a Escalona y pensarlo detenidamente.

Seguimos el camino dudando porque hemos dejado de ver las flechas, pero por fin, a lo lejos divisamos el castillo y el pueblo. Llegamos a la carretera y Antonio me alerta de que lleva pinchada su rueda delantera. Vamos, dos averas en apenas 5 kilmetros. La cosa pinta fea. Decidimos llegar a la gasolinera que est unos 300 metros ms abajo para estar al menos a la sombra. Primero arreglo el pinchazo que es un mero trmite, pero lo peor es la tija del silln, no lo veo muy seguro que esto se pueda volver a soldar.

Pero tenemos que ser prcticos, y tras barajar la opcin de llamar a mi cuado Javi para que desde Toledo venga hasta Escalona y me cambie la bici, decido llamar a Julin, de la Asociacin de Amigos del Camino de Santiago de Escalona, con el que mantengo contacto desde hace un tiempo. Me atiende amablemente y me dice que lo mejor es que pernoctemos en Escalona, en el albergue y que justo al lado del mismo hay una carpintera metlica y fragua donde podrn arreglar la avera. Tras indicarnos que para ir al albergue hay que llamar a

Camino de Escalona, ya se ve el Sistema Central


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la Polica Local, stos muy atentos vienen a buscarnos a la misma gasolinera y nos llevan hasta el local, que est junto al cuartel de la Guardia Civil en la carretera de Pelahustn. Tendremos que pasar toda la tarde en Escalona y hasta el da siguiente nada de nada, no podemos seguir la ruta. El albergue es sencillo, pero acogedor. Solo tiene dos literas, pero tiene ducha de agua caliente y unas pilas para lavar la ropa. Tras la colada y la ducha de rigor, nos planteamos pasar la tarde lo mejor posible. As que el plan pasa por comer primero, lo que hacemos en un bar llamado La Casona con un plato combinado y cerveza. Lo mejor es que nos invitan a unos chupitos. Yo, tras tanta cerveza voy un poco achispado por lo que lo mejor ante el calor es echarnos una buena siesta. A las 7 de la tarde decidimos irnos a baar en la playa fluvial del Ro Alberche donde hay numerosos baistas y darnos un refrescante remojo, para posteriormente hacer la visita turstica de rigor por el pueblo y echarnos una cervecita antes de comprar la cena de hoy que ser modesta: bocadillos de jamn ibrico con queso.

Playa fluvial en el ro Alberche Frente a la puerta del casco histrico de Escalona

Unos chupitos de orujo para levantar el nimo de los peregrinos tras los problemas de la jornada de hoy.


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A todo esto le he comentado a Sonia lo que nos ha ocurrido, y casualidades de la vida, los propietarios de la fragua prxima al albergue son primos del cuado de mi cuado Roberto, o sea de Romn a cuya familia conozco desde hace aos por temas de mi trabajo en Marjaliza. Romn contacta con ellos y le dicen que no pueden arreglar la avera si no tienen electrodos de aluminio y que hasta las 9 de la maana no abren las ferreteras del pueblo, as que nos tocar esperar. Con la esperanza de que nos lo puedan solucionar y aguantar todo el viaje nos vamos a la cama a las 11 de la noche. Pero cuesta conciliar el sueo, no estamos apenas cansados, el calor es asfixiante y aunque hemos abierto ventanas y puerta del albergue es insoportable, los mosquitos nos rodean. Tras echar los colchones al suelo conseguimos dormirnos ms all de la media noche, aunque eso s, los mosquitos se cebaron conmigo. Hoy hemos avanzado 83 Kilmetros.


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CAPITULO II. ESCALONA VILA: 83 Kms (12 de Agosto)

Hoy he madrugado. El nerviosismo por saber si podr o no continuar me ha despertado, y a las 7,30 ya estaba en el taller hablando con Jose, el propietario. Estaba esperando que viniera, pero me comenta lo que ya saba: que hasta las 9 no podrn saber si lo pueden arreglar porque si no encuentran electrodos de aluminio aqu cerca tendran que ir a buscarlos a Torrijos con lo que el retraso sera an mayor. No vale impacientarse. Despierto a Antonio y nos vamos a desayunar en el mismo bar donde comimos ayer. Un caf con leche y magdalenas y a esperar. Nos impacientamos y a las 9,30 ya estamos otra vez en la puerta del taller esperando. La suerte parece estar de nuestro lado, ya que encuentran los electrodos y en un plis plas me arreglan la tija. No es un trabajo muy fino, pero s que muy efectivo. La avera me ha costado 6 euros, por lo que no me puedo quejar. Lo peor es el retraso acumulado que ya llevamos. Ante esto, decidimos cambiar el recorrido sobre la marcha. Para adelantar y recuperar terreno nos saltamos el trayecto por camino entre Escalona, Paredes y Cadalso de los Vidrios, que es ms largo y lento, para coger la carretera de Avila N-403, que ya no abandonaremos en todo el da. Es ms, las guas recomiendan a los ciclistas que hagamos esta opcin, especialmente desde el cruce entre Cadalso y El Tiemblo, porque por S. Bartolom de Pinares es muy complicado para andar en bici. Pronto llegamos a Almorox. El arcn es muy ancho, pero es lunes y el trfico va en aumento. La carretera va picando para arriba todo el rato, y nuestras piernas lo van notando. Pronto llegamos a la Comunidad de Madrid y bordeamos San Martn de Valdeiglesias. El paisaje va cambiando, comienzan a aparecer los primeros bosques de robledales, avellanos y castaos. Estamos en las faldas de Gredos y la carretera se va empinando. El calor comienza a hacer mella, especialmente en Antonio, menos mal que se ha preparado a conciencia y lleva frutos secos que nos van aportando un extra de energa. A las 13,00 llegamos a El Tiemblo, ya en la provincia de vila, y para mantener la costumbre, la cervezaca de rigor. Buen trato y buen pincho en el Rincn Gallego, justo en la entrada. A Antonio le cambia la cara con la jarra que nos echamos y ya estamos preparados para seguir con continua subida que nos espera a lo largo del da de hoy.

Detalle de la reparacin de la tija del silln.


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La salida de El Tiemblo la marca el embalse de El Burguillo. Salimos por la carretera vieja la cual apenas tiene trfico y que nos lleva hasta la misma presa. Este tramo nos da un respiro puesto que no ser hasta que lleguemos a la cola del pantano cuando comience la verdadera subida hacia el Alto de la Paramera, pasando antes por el pueblo de El Barraco. Sigue haciendo cada vez ms calor, y llegados a una gasolinera junto al pantano, veo que Antonio lo viene pasando mal. Sacamos unos botes de coca-cola y nos damos un pequeo respiro. Ya solo quedan unos 6 kms hasta El Barraco donde tenemos pensado comer hoy. Con sufrimiento llegamos por fin a El Barraco a las 2, y tras echarnos una caa en un bar bastante cutre y caro, del cual lo nico que mereca la pena eran las fotos dedicadas del fallecido Chava Jimnez y de su cuado Carlos Sastre, pero poco ms. La comida la hacemos en un bar en la plaza llamado Bar San Marcos, que la verdad es un men sencillo, humilde y barato, pero que nos sent a gloria y que nos repar para la dura jornada de la tarde: ensalada de pasta y escalope de cerdo con sanda de postre. Tras la siesta junto a la iglesia de Nuestra Seora de la Asuncin nos ponemos de nuevo en ruta a las 5 de la tarde.

Antonio, tan feliz con su cervezaca (El Tiemblo) Embalse de El Burguillo (Avila)

Iglesia de la Asuncin de El Barraco.


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Comenzamos la subida de los ltimos 9 kilmetros hasta coronar el Alto de la Paramera (1.395 metros de altitud). Se trata de un puerto de un total de 16 kms con un desnivel medio de en torno al 4 %. Nada del otro mundo, porque adems tiene un buen firme.en condiciones normales claro. Pero hacerlo a las 5 de la tarde, cargados con unos 12 kgs de equipaje y con 35 de temperatura, nos va haciendo mella. Para colmo, se avecina tormenta a lo lejos, lo que hace que se levante un viento de frente muy molesto. Pero la verdad, hay que decirlo, la comida nos ha venido de perlas, porque yo subo a muy buen ritmo. Pero como esto no es una competicin, paramos un par de veces a refrescarnos, y yo sobre todo a dar nimos a Antonio, que se est portando como un jabato. Antonio tiene un motor disel, apenas anda en bici en su pueblo Mestanza, pero si hay que hacer 100 kms, los hace.y si hay que hacer 120, tambin los hace. Nunca va ni muy rpido ni muy lento, pero a su tran tran va superando todos los obstculos. Es la madurez de los 50 aos recin cumplidos.

El descenso hasta vila es muy pronunciado, por lo que a las 6,30 ya estamos en la ciudad de Santa Teresa y San Juan de vila, tras pasar por la Ermita de Nuestra Seora de Sonsoles que dejamos a nuestra derecha. Buscamos el albergue que se encuentra justo en el norte de la ciudad junto al ro Adaja y cuando llegamos est cerrado. Menos mal que hay un telfono de contacto y tras varias llamadas, un voluntario de la Asociacin de Amigos del Camino de Avila nos lo abre y ensea.

Coronando por fin el Alto de la Paramera (Avila)

La muralla de vila desde el albergue Albergue Las Teneras en Avila.


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El albergue, que se llama Las Teneras, est muy buen equipado y tiene TV, cocina, duchas, tres habitaciones con varias literas., pero seguimos estando solos. No hemos visto an ni un solo peregrino durante todo el viaje. Es curioso, porque en viajes anteriores siempre habamos visto peregrinos, ms o menos, porque buscamos caminos menos transitados, pero tan pocos como en este camino, ninguno. Situacin sta que se repetir a lo largo de las jornadas sucesivas, incluida Galicia. Siguiendo con las rutinas de siempre, tras lavar la ropa, ducharnos y asearnos, limpiar y engrasar las bicicletas, decidimos salir a conocer un poco mejor vila, echarnos unas cervezas y por supuesto cenar.

La verdad es que tanto Antonio como yo habamos estado alguna que otra vez en vila, y no nos haba dicho mucho como ciudad, pero hoy la hemos encontrado bastante ms atractiva, adems con mucho ambiente en las distintas plazas. No debemos olvidar que esta ciudad forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 1985.

Nos echamos unas caas en la Plaza Mayor y luego hacemos unas fotos a la catedral de San Salvador donde hay un mercadillo de chiringuitos con msica, ambiente callejero, etc.

La cena, es de antojo, buscamos un Telepizza y nos marcamos dos pizzas medianas acompaadas de jarras de medio litro de cerveza.todo por unos baratos 21 euros. Una pena, se quedan dos porciones de pizza en el plato. No podemos ms. Estamos hasta arriba.

Catedral de San Salvador (Avila) Ayuntamiento de Avila

La habitual colada de todos los das.


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Damos un paseo por vila, ya de noche, por la pradera de csped que hay alrededor de las murallas y comprobamos que para ser lunes es una ciudad llena de vida y de trfico. Vemos el perfil del Palacio de Congresos que est justo detrs del albergue. Nos vamos a dormir a las 11. Hemos recorrido otros 83 Kilmetros

Cena del peregrino: pizzas y cervezas. Nos lo hemos merecido


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CAPITULO III: VILA - TORDESILLAS: 115 Kms (13 de Agosto)

Amanece fresquito en vila, parece que las temperaturas nos darn un pequeo respiro en las jornadas venideras. Tras volver a colocar toda la ropa y enseres en las alforjas compruebo que el culotte sigue hmedo, as que hoy toca ir con la ropa colgada en los pulpos para que se seque. Cerramos las puertas y dejamos la llave en un buzn a la salida del albergue y sin desayunar iniciamos el camino. El objetivo de hoy es llegar a Tordesillas, de donde nos separan ms de 100 kms. Salimos de vila por el puente romano sobre el ro Adaja. Salimos por la carretera de Salamanca y a la altura del mirador de los 4 postes, paramos a desayunar un caf con leche y churros. Nada mejor para coger energa ante la larga travesa castellana que nos toca hoy. Aprovechamos el mirador para hacer las ltimas fotos de la ciudad. Nada ms salir, prcticamente a los 3 kms cogemos una carretera comarcal sin nada de trfico que nos llevar hasta Narrillos de San Leonardo. Es todo cuesta arriba, pero se pedalea con tranquilidad y a buen ritmo. Pasamos por este pueblecito y abandonamos la carretera para adentrarnos en una zona de caminos rurales, pequeas fincas de pastos con alambradas y vaqueras. Atravesamos varios pasos canadienses que, lgicamente debemos cerrar para evitar que el ganado se escape. Y llegamos a una de las zonas que ms me han gustado de este camino: el tramo de calzada medieval que finaliza en un puente de piedra muy bonito. Adems es en bajada lo que a Antonio le causa algn que otro problema para evitar las lascas de la calzada.

Panormica de vila desde el mirador de los cuatro postes.


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Desembocamos en una carretera y preguntamos a los operarios de Renfe que estn haciendo labores de mantenimiento dnde nos llevara esa va. Nos dicen que a Cardeosa, por lo que decidimos cogerla, puesto que apenas tiene trfico. Nos plantamos rpidamente en Cardeosa y decidimos seguir por carretera AV-804. Esta localidad destaca por la Iglesia de la Santa Cruz del siglo XVI, y poco ms.

A poco ms de 3 kilmetros de Cardeosa est Pealva de vila, que pasamos sin detenernos. El objetivo es parar en Gotarrendura para comprar fruta, puesto que en las guas parece ser un pueblo significativo, aunque luego veremos que no es as. Pasamos por Las Berlanas y por fin llegamos a Gotarrendura. Lo nico que destaca de este pueblo es su albergue llamado Entre Adobes, el cual es considerado de los mejores de este camino, pero no hay ni tiendas ni apenas servicios para el peregrino. Destaca su iglesia de San Miguel Arcngel. Nos hacemos unas pocas fotos, entre ellas una curiosa imagen en metal de un peregrino sobre un banco de piedra.

Nuestras permanentes compaeras de camino: las flechas amarillas

Tramo de calzada medieval camino de Cardeosa.


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Como no encontramos fruta, y la echamos en falta, seguimos camino y llegamos a Villanueva de Gmez, pasando antes por Hernansancho. En Villanueva por fin encontramos una tienda donde compramos melocotones y naranjas. Tomamos un pequeo respiro frente al cuartel de la Guardia Civil, para estar protegidos ante cualquier eventualidad del camino. De nuevo cogemos la carretera comarcal que nos llevar a El Bohodn y a Tiosillos donde paramos a sellar la credencial en el Ayuntamiento. Estamos cerca de Arvalo y aqu la carretera es cuesta abajo, hay que aprovechar la velocidad y la facilidad con la que andamos. Antonio tiene algn problemilla con el cambio, ya que no le entra el plato grande. Tras algunos consejos, conseguimos que funcione y a toda pastilla nos dirigimos direccin norte. Es sorprendente la carretera, puesto que estamos atravesando bosques y bosques de pinares resineros. Paramos a observar los tajos que se les abren en la corteza donde se coloca un recipiente para recoger las gotas de resina que caen poquito a poco. Es una industria ms, esta de la resinera que segn he escuchado recientemente se est recuperando en zonas rurales de Castilla-La Mancha, como en la comarca del Alto Tajo.

Detalle de la industria resinera cerca de Arvalo (vila)

Tpica foto peregrina en un crucero en Gotarrendura.


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A las 12 de la maana estamos ya en Arvalo. Es uno de los pueblos ms importantes de la provincia de vila. Tiene ms de 8000 habitantes y destaca que es la capital de la comarca de La Moraa. Tiene un importante castillo que est frente a la confluencia de los ros Arevalillo y Adaja. Tambin tiene una muralla que est muy derruida y que apenas se ve. Tambin cuenta con varias iglesias de especial importancia: Santa Mara la Real, San Nicols de Bari que est en ruinas, la Iglesia de San Salvdor, etc. Salimos de Arvalo por el Puente de Medina sobre el ro Arevalillo y al lado se ve el castillo de la localidad. Este camino nos lleva a un Polgono Industrial que desemboca en un camino rural asfaltado. Esto nos evita tener que ir por carreteras, y es muy cmodo. Vamos cruzando maizales y campos de girasol, con regados importantes.

Llegamos a Palacios de Goda, que el ltimo pueblo de la provincia de vila antes de entrar en la de Valladolid y ya desde aqu volvemos a retomar caminos rurales. Tenemos previsto echarnos una cervecita en el siguiente pueblo. Pero antes, atravesamos un pueblo abandonado que se llama Honquilana. Es muy curioso, porque este pueblo estaba construido en adobe y quedan restos de la iglesia mudjar de la Asuncin.

Sin llegar a entrar en Ataquines, cogemos un camino de tierra que nos lleva hasta San Vicente de Palacio. Paramos en un parquecillo muy agradable donde aprovechamos para recargar los bidones de agua, porque ya va haciendo calor. Es la 1 del medioda, y ha llegado la hora de la cervezaca de las 13,00 h. Nos atiende un chaval muy majete en un bar de la localidad. Nos pone dos jarras alargadas de

Diferentes monumentos de Arvalo (vila)

El pueblo abandonado de Honquilana


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medio litro de Estrella de Galicia, que nos sientan fenomenal. Las imgenes dan muestra de lo reconfortante que son estos caldos cuando uno va haciendo esfuerzos.

Desde San Vicente de Palacio hasta Medina del Campo hay apenas 11 kilmetros, en terreno muy favorable que transcurre entre hectreas inmensas de campos de girasol. Las fotos en este tramo son muy bonitas. Aprovechamos para recrearnos un poco, ya que no vamos muy cansados. Discutimos un poco de lo divino y lo humano. Debo comentar que en este camino apenas hemos discutido, como es habitual entre amigos que se conocen desde hace muchos aos. Creo que debe ser la madurez que da la edad, especialmente los 50 de Antonio y los 40 mos. La verdad es que en cuestiones de recorridos, Antonio se deja llevar y yo tengo que asumir la condicin de gua, mecnico, y a la vez preparador fsico, pero lo hago gustoso. l a cambio me deleita con sus lecciones de historia, sobre el tratado de Tordesillas, las revueltas comuneras de la provincia de Valladolid, las historias de Juana la Loca y de Isabel la Catlica. No debemos olvidar que estamos atravesando pueblos histricos que forman parte de la historia del Reino de Castilla y como tal, es importante saber por donde nos andamos. No todo es dar pedales, comer y beber cerveza. Los Caminos de Santiago nos dan la oportunidad de conocer parajes

Reponiendo lquidos en San Vicente de Palacio (Valladolid)

Antonio entre girasoles.


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de nuestro pas, que quizs de otra forma no les daramos importancia. As lo contemplamos nosotros, no se trata de hacer ms y ms kilmetros, si no de parar, disfrutar, contemplar, conocer, hablar con las gentes. Por que lo importante del Camino no es llegar, sino el propio trayecto, el propio Camino.

Tras esta disertacin filosfica sobre lo que es para nosotros el Camino, continuamos por caminos favorables hasta Medina del Campo. Este pueblo ya lo conocemos nosotros del Camino Sanabrs de 2002, puesto que hicimos transbordo en el tren que nos traa hasta Zamora para iniciar la aventura. Por fin hoy vemos a los primeros peregrinos de este Camino. Van andando, el primero es un alemn que viene desde Valencia. Lleva 22 das andando, y lleva una enorme mochila. Es delgadito y no sabemos como puede soportar el peso.

Poco despus vemos a otros dos, pero separados. Parecen tambin extranjeros. Es curioso, porque no volveremos a ver a ninguno hasta la llegada a Benavente. En la entrada a Medina del Campo vemos que hay un parque enorme con sombrajes y csped donde poder echarnos la siesta tras la reparadora comida que haremos en una terraza de la Plaza Mayor donde aprovechamos para hacernos unas fotos frente al Ayuntamiento, que es un edificio barroco del siglo XVII. Tambin destaca en el horizonte el castillo de la Mota, que es una fortaleza gtico-mudjar que se finaliz de construir en la poca de los Reyes Catlicos. Est muy bien conservado.

Plaza Mayor de Medina del Campo

El castillo de la Mota (Medina del Campo)


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Hoy llevamos ya 86 kilmetros recorridos antes de la comida, creo que nos la tenemos merecida. El lugar, el Restaurante Gloria, el men: presa ibrica y unas ensaladas acompaadas de unos buenos cafs con hielo y por supuesto, cerveza. Comida castellana, sin alardes ni florituras, pero que al ciclista peregrino le mantienen con bro para completar su misin, en este caso llegar a Tordesillas. En los cafs planeamos el recorrido de la tarde, deleitndonos con la posibilidad de cruzar tierra de vinos, primero los de la D.O Rueda y luego la D.O Ribera del Duero. Antonio, gran amante de estos caldos, se relame con la posibilidad de echarse unos vinos, aunque luego la realidad ser otra.

Tras la siesta de costumbre, y tras arreglar tipo Mc Gyver mi cuenta-kilmetros que se ha roto su soporte tras un golpe al manillar, nos ponemos en marcha a las 5 de la tarde. Salimos de Medina del Campo por la calle Mondragn y tras cruzar las vas del tren y dejar a un lado el polideportivo, comenzamos a buscar la Autova A-6, la cual cruzamos en un par de ocasiones hasta coger el camino de servicio del lado derecho que nos llevar hacia Rueda y despus a Tordesillas. El paisaje ha cambiado, comenzamos a atravesar viedos de uva blanca, la uva verdejo que es con la que habitualmente se hacen estos caldos de la D.O. Rueda Adems, la sucesin de bodegas de renombre con importantes instalaciones nos hacen ms ameno el recorrido. No hay cuestas de importancia, quizs algn pequeo promontorio en el camino, y en el horizonte ni una sola montaa. Estamos en la meseta castellana y a bien que hace honor a su nombre, porque es un llano absoluto. Pasamos por bodegas importantes: Yllera, la finca La Capitana, Marqus del Riscal, PradoRey, Montepedroso, etc. El calor aprieta, y aunque nos queda ya poco para llegar a Medina, decidimos hacer una pequea parada en Rueda. Adems Antonio, es curioso, me dice que el cuerpo le pide azcar. Tras echarse a la boca un chicle, le digo que es un sntoma de que est con una leve bajada de azcar y lo mejor en estos casos es tomarse una coca-cola, as que el vinito que nos tenamos pensado tomar en esta localidad, lo dejaremos para mejor ocasin. Paramos en una vinoteca-bar a la

Bodegas en la zona vitivincola de la Denominacin de Origen Rueda


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entrada del pueblo, y nos pillamos un par de botes de refresco que le recuperan en breve. Pasamos por el pueblo con rapidez, en l destaca la ermita del Cristo de las Batallas y la Iglesia de la Asuncin, pero poco ms. Salimos de Rueda por las bodegas del Marqus de Riscal. Alternamos tramos de asfalto con caminos de tierra y pasamos por zonas de arboleda y de pista. Nos quedan solo 12 kilmetros y a buen ritmo llegamos al majestuoso ro Duero, que marca la entrada a la ciudad seorial de Tordesillas. Pasamos por el monumento al famoso Toro de la Vega y tras hacer unas fotos del ro y del puente llegamos a la Plaza Mayor.

Antonio, pedaleando camino de Tordesillas

El ro Duero a su paso por Tordesillas


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Tordesillas nos ha parecido de las ciudades ms bonitas del Camino Sureste. Todas sus callejuelas estn llenas de historia. Buscamos el albergue que est justo a unos 100 metros de la Plaza Mayor, y tras hablar con la polica local, avisan al hospitalero que gustosamente nos atiende. El precio es de 5 por persona, pero es que realmente merece la pena el albergue. Es una pena que no nos encontremos peregrinos porque los albergues son estupendos. Este, concretamente, huele todava a nuevo y parece una casa rural a estrenar. Tras la ducha habitual y la limpieza de ropa, decidimos darnos una vuelta por esta preciosa ciudad. Aprovechamos para hacer unas fotos al puente sobre el ro Duero, que desde arriba impresiona an ms. Y la cena, pues para que andar mucho, nos vamos a cualquiera de las muchas terrazas de la plaza mayor. Yo estoy de antojo y me meto un bocadillo de calamares, mientras que Antonio pide varias tapas de tortilla, morcilla y cecina,

Detalles del precioso albergue de peregrinos de Tordesillas.

El puente medieval sobre el ro Duero


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para acabar con unos ricos helados. Todo a precio muy econmico y con buen trato en la atencin. Damos despus un paseo por los alrededores de la plaza, visitamos el monumento a Juana La Loca, la cual pas recluida aqu los ltimos aos de su vida en el Monasterio de Santa Clara. Tambin es importante la Casa del Tratado, donde se firm el Tratado de Tordesillas entre los reinos de Castilla y Portugal y por medio del cual se repartieron el nuevo mundo en 1504. Nos sorprende tambin la gran cantidad de bares y pubs que hay en este pueblo. Ser que hay marcha, aunque a las 10 y media de la noche estaba todo cerrado.

Tambin es sorprendente la cantidad de museos que hay: el de la radio, el

del encaje, el museo del Tratado, el museo de San Antoln., vamos que a quien le guste el turismo cultural, aqu tiene un lugar para pasar varias jornadas de visitas musesticas.

Pero nosotros no estamos para museos, y a las 11 de la noche nos vamos al albergue, el cual, aunque tiene TV, apenas perdemos diez minutos delante de ella. El cansancio va haciendo mella, y ms hoy que hemos recorrido 115 Kilmetros. Maana nos espera otra dura jornada.

La Plaza Mayor de Tordesillas y en algunas callejuelas.


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CAPITULO IV: TORDESILLAS Benavente: 100 Kms (14 de Agosto)

Qu placer dormir en camas con buenos colchones !!!, adems el cansancio

hace el resto, y hoy da mucha pereza levantarse. Pero como todos los das, a las 7,45 mi reloj toca diana y es hora de comenzar la faena. Recogemos todo, dejamos el cuarto de bao limpio y preparamos las alforjas, no sin antes engrasar las cadenas de las bicis, que en estos caminos de polvo es lo que ms sufre.

El desayuno nos lo tomamos en la misma terraza de la Plaza Mayor donde cenamos ayer, aunque la verdad es que es la nica que est ya abierta. Un caf con leche con unas magdalenas, vamos el desayuno habitual en este viaje. Hoy est previsto que no cojamos ni un solo kilmetro de carretera, y que hagamos todo el recorrido por caminos.

A las 8,30 y tras el habitual cigarrito maanero de Antonio, estamos dando pedales. Salimos por la va de servicio de la A-6 y detrs de unos matorrales junto a un puente de la autova vemos a unos vagabundos que estn desperezndose. No sabemos si son indigentes o peregrinos. Yo me inclino por lo primero.

El recorrido nos lleva inicialmente a Villavieja del Cerro, pero nosotros decidimos seguir por el camino de servicio de la A-6 ya que en las guas contemplan la opcin de evitar Villavieja y Berceros. As que el primer pueblo del da de hoy es Vega de Valdetronco, del cual destaca la Ermita de Nuestra Seora de Canteces, la cual est en ruinas conservndose la espadaa y los nervios de la nave central. Hacemos unas pocas fotos.

El camino es sencillo, pero hay que evitar algunas fuertes subidas, una de ellas, quizs sea la ms dura de las que hemos tenido que afrontar en este camino, y es una rampa de unos 200 metros, hormigonada, que tendra un porcentaje del 20 % y que, curiosamente est en un camino de servicio de la autova. Antonio tiene que poner pie a tierra porque no le ha entrado el platito pequeo. Es un buen calentn para iniciar la jornada. Llevamos ya 15 kilmetros y las piernas ya est bien calientes.

Vega de Valdetronco (Valladolid)


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Tenemos que comprar fruta, como siempre, por lo que en Mota del Marqus, preguntamos a unos vecinos si hay tienda. Nos informan que est el frutero ambulante en el pueblo y por los pelos le pillamos en la plaza del Ayuntamiento. Hoy tocan ciruelas y kiwis. Mota del Marqus tiene el palacio de los Ulloa y la Iglesia de San Martn, ambos del siglo XVI, pero adems en lo alto de un cerrete tiene una iglesia en ruinas, que es la Iglesia del Salvador y que est muy cerca del castillo.

Tras intentar sellar sin xito en el Ayuntamiento, el cual permanece curiosamente cerrado nos ponemos de nuevo en marcha. Aqu el camino se separa de forma considerable de la Autova, cosa que se agradece por evitar el ruido de los coches y camiones. El camino ahora est pleno de campos de girasoles, en los que aprovechamos para hacernos alguna foto. Merecen la pena. Adems, en esta provincia aparecen miliarios que nos indican los kilmetros para Santiago, lo que hace ms ameno el trayecto.

Nos sorprende un pueblecito llamado Villardefrades, al cual llegamos casi de forma casual, porque la gua lo dejaba a un lado. Nos sorprende por un pedazo de obra inacabada que es la Colegiata de San Andrs, y que una vecina nos dice que coloquialmente lo llaman la obra, porque siempre ha estado en obras. Se inici su construccin en el siglo XVIII, pero as se qued.

Plaza Mayor de Mota del Marqus y al fondo la Iglesia de S. Martn

Campos de girasol camino de Villardefrades


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Y luego, otra curiosidad, tiene una Iglesia de San Cucuf, que es la primera vez que oigo este nombre, y resulta que este santo era cataln, y se llamaba San Gugat, pero desconozco el por qu se le venera por estas tierras, junto a otro santo cataln, San Flix, patrn de Tarragona.

Nos comemos unos frutos secos, y reiniciamos la marcha camino de San

Pedro de Latarce, el cual dista 7 kilmetros. Estamos a unos 380 kilmetros de Santiago, por lo que hemos llegado casi al ecuador de nuestra aventura. Los campos de rastrojos de cereal recin cosechados y de nuevo los girasoles lo cubren todo. Alguna via de poca importancia y poco ms. Los girasoles regados con enormes motores de gasoil que no paran de sonar a lo largo del camino.

Llegamos a San Pedro de Latarce y Antonio aprovecha que es da de mercadillo para comprar una camiseta, ya que lleva poca ropa para evitar peso. Yo me dirijo al Ayuntamiento donde el secretario me sella la credencial. Es un tipo muy simptico que me pregunta hacia donde vamos, y me aconseja que comamos en San Pedro porque en Villalpando estn en fiestas y a lo mejor no encontramos sitio. Pero son las 12 del medioda y es muy pronto, as que tras hacer unas fotos y Antonio cerrar su compra nos ponemos en marcha con ritmo ligero.

Estamos a punto de abandonar la provincia de Valladolid para entrar en Zamora, de hecho en el camino nos encontramos un cartel que nos lo indica, acompaado de un mapa con el resto de pueblos que nos encontraremos hasta unirnos en Benavente con la Va de la Plata que viene de Sevilla y la prolongacin hasta el camino Sanabrs que enlaza en Santa Marta de Tera.

Detalles de la colegiata de San Andrs, obra inacabada de Villardefrades

Campos de girasol camino de San Pedro de Latarce


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Estamos en una zona de pinares, donde el camino apenas se advierte porque vamos entre pastizales secos, pero con buen firme. No hay apenas piedras por lo que avanzamos a buen ritmo. Hace bastante calor, y como vamos muy bien de tiempo, decidimos hacer una pequea paradita en un giro a derechas que nos encontramos. Despus por buena pista forestal iniciamos una trepidante bajada hasta Villalpando, primer pueblo de Zamora, donde llegamos pasadas la 1 del medioda. Efectivamente, estn de fiestas, en la plaza mayor estn haciendo un encierro de toros para los nios. Hacemos unas fotos, y como es la hora de la cervezaca, pues buscamos un bar donde echrnosla. Hemos visto a la entrada un parquecillo con mucho csped y fuente, y al lado varios bares sencillos. As que nos echamos la cervecita reponedora de estas horas y buscamos un sitio donde comer.

Frontera entre las provincias de Valladolid que abandonamos y Zamora, en la que entramos.

Fiestas con toros en Villalpando y cervezas con tapa de morcillas para reponer fuerzas.


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Mientras hablo con Sonia y los nios, Antonio sale del bar a echarse un cigarrillo y a buscar un restaurante de men del da. El lugar sealado, el hostal Athlanta, un lugar a la entrada de Villalpando, modesto, pero muy limpio, aunque nos mosquea un poco que apenas hay nadie en el comedor. Mosqueo injustificado, porque en cuestin de media hora est totalmente lleno. Claro, viendo la comida, no nos extra: judas pintas de primero y chuleta de cerdo de segundo espectaculares, y la mejor cuajada casera que me he comido nunca, todo acompaado de cafs, por 21 euros los dos mens. Ni que decir tiene que la siesta fue ms necesaria que nunca, ante la sentada a comer que nos hemos metido.

Dicho y hecho, el parquecillo que haba comentado antes, lleno de csped y de sombras, es ideal para el descanso del peregrino y as lo hacemos. Casi dos horitas de siesta que alivian cualquier cansancio.

A las 16,30 nos ponemos de nuevo en marcha, estamos a punto de enlazar con la Va de la Plata y nos quedan unos 30 kilmetros para llegar a Benavente.

El paisaje, poco a poco va cambiando, comienzan a verse zonas importantes de choperas o alamedas como decimos en La Mancha. A lo lejos empiezan a verse las primeras montaas de la zona de Sanabria y las Sierras de la Culebra, bordeando Portugal. La salida de Villalpando nos devuelve de nuevo a la A-6, puesto que nos va a llevar por caminos de servicio paralelos a la autova, con lo que el sonido de los coches y camiones volver a acompaarnos durante casi toda la tarde.

Pasamos por Cerecinos del Campo, cuyo nombre hace referencia a cereales o a la Diosa Ceres, y a bien que hace honor a su nombre, porque es todo campos de trigo recin cosechado. Seguimos camino y pasamos una zona que estn de obras, parece ser que alguna nueva autova o lnea de tren. El caso es que unas mquinas enormes estn removiendo tierras. Llegamos a San Esteban del Molar, donde nos tomamos una coca-cola para iniciar el tramo final. Estamos a 16 kms de Benavente, el cual ya se divisa en el horizonte. La entrada a Benavente se hace cruzando el ro Esla. Esta ciudad est rodeada por los ros Esla por el sur y el rbigo por el Oeste, por lo que no es de extraar la cantidad de campos de maz y alamedas que la rodean. La verdad es que nos da envidia ver ros tan grandes a los que somos de tierra de secano.

Choperas y primeros bosques camino de Benavente


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Hacemos algunas fotos, e iniciamos los ltimos 5 kilmetros por polgonos industriales y canalizaciones de agua para regar los campos de maz. La verdad es que la entrada a Benavente no es fcil, y ms hasta buscar el albergue, el cual nos cuesta dar prcticamente toda la vuelta a la ciudad hasta encontrar la N-525 que maana nos llevar hasta tierras sanabresas. Adems se da la circunstancia de que ha habido un corrimiento de tierras que nos cortan el paso hasta la vieja estacin de tren donde se ubica el albergue. Pero finalmente damos con l, gracias a que un peregrino abre la ventana y nos indica que podemos subir. Es muy curiosa la forma de gestionar este albergue: hay que ir a por las llaves a la oficina de turismo que est tras subir una enorme cuesta en el caso histrico, pero que no te atienden pasadas las 8 de la tarde. Menos mal que estaba Pedro, que as se llama el peregrino, y nos abre e incluso nos deja una llave que haba del da anterior. Mejor, nos saldr totalmente gratis este albergue, porque nadie se preocup de venir a controlarnos. El albergue est formado por dos habitaciones con literas y cocina, bao y un saln. Es acogedor y sencillo. Tras las rutinas de rigor: lavado de ropa, higiene personal, ordenar un poco el material, etc, decidimos salir a tomarnos unas cervezas junto a Pedro, un peregrino que viene andando haciendo la va de la Plata desde Sevilla, y que reside en Barcelona aunque es onubense.

Hacemos primero una visita por las distintas iglesias romnicas que hay en la ciudad, destacando la de Santa Mara de Azogue, que tiene 5 bsides y la iglesia de San Juan del Mercado, ambas del siglo XII. Otras iglesias menores son la de San Nicols y la ermita de la Soledad. Damos una vuelta por la plaza mayor y compramos frutos secos y gominolas de azcar para reponer esfuerzos ante las dos prximas duras jornadas que tenemos por delante.

Nos tomamos una cerveza en la plaza junto a la Iglesia de Santa Mara de Azogue y decidimos ir a cenar al bar El Regional, donde pedimos que nos hagan una tortilla de patatas. Tras la espera de unos 20 minutos, nos apretamos entre

Cruzando el ro Esla, camino de Benavente

Albergue de Benavente, en la antigua estacin de tren.


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Antonio y yo una buena tortilla que nos sienta de maravilla, acompaada de las correspondientes cervezas.

En este bar, curiosamente Antonio coincide con un chico que es polica y que tienen amigos comunes. En este intervalo de tiempo entre que se levanta a saludarle, yo voy a pagar a la barra, y sorpresa, me dejo el monedero con el fondo comn que llevbamos. Pero es que de esto nos dimos cuenta a la maana siguiente, como ya os contar.

Tras la cena, los tres peregrinos nos vamos a tomar un caf al Parador Nacional de Benavente que est ubicado en el Castillo de la Mota. Aqu no nos damos cuenta de la prdida del dinero porque Pedro es quien nos devuelve la invitacin, ya que anteriormente le habamos invitado nosotros a las jarras de cerveza. Hay mucho bullicio por la ciudad, se nota que hay mucho turismo y gente de vacaciones. Adems es 14 de agosto, da previo a fiesta en toda Espaa y la mayora de la gente no trabaja, por lo que es normal este ajetreo. No es momento de entretenerse mucho, y antes de las 11 de la noche nos recogemos a dormir en el albergue, donde vemos que han llegado otros dos peregrinos que vienen haciendo la Va de la Plata, y los que Pedro reconoce. Es ms, yo le dejo a uno de ellos gasas, betadine y esparadrapo para reparar las enormes ampollas que lleva en los pies. Cuando ya estamos a punto de meternos a dormir, Antonio me dice que quiere hablar conmigo. Miedo me da cuando se pone tan serio !!!. Me dice que est

Una buena tortilla espaola para cenar en Benavente

Los aventureros junto a la Igelsia de Santa Mara de Azogue.


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un poco preocupado por el regreso el domingo, ya que tiene mdico en Puertollano el lunes a primera hora por un tema de ciruga menor, pero que tiene que acometer. Yo le indico que si todo va bien, llegaramos a Santiago el domingo por la maana y nos vendramos en el AVE, si hay billetes y las bicis las podramos enviar por paquetera con las numerosas empresas que se dedican a estos menesteres en Santiago. Adems tengo telfonos de varias que me han dado presupuesto. Pero tambin le digo, que si esto le preocupa de verdad, que por mi parte ya hemos realizado lo ilusionante del camino, que era salir de Sonseca y enlazar con el Camino Sanabrs, y que podemos llegar a Ourense y venirnos desde aqu con un coche de alquiler hasta Toledo. Antonio se inclina por esta opcin, porque considera que tendramos que meternos mucha paliza para llegar por la maana a Santiago y que adems era muy precipitada la vuelta el mismo domingo, que prefiere regresar con ms tiempo. Le tranquilizo dicindole que me da igual llegar o no a Santiago, que est ah y que ya hemos ido 6 veces ms. Tras el alivio que siente Antonio, nos vamos a dormir. Hoy hemos recorrido otros 100 kilmetros exactos.

Castillo de la Mota, actual Parador Nacional de Benavente.


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CAPITULO V: Benavente - REQUEJO: 100 Kms (15 de Agosto)

Hoy es fiesta, es el da de la Asuncin de la Virgen Mara, 15 de agosto, y la ciudad amanece dormida, con muy poca gente en las calles. Tras madrugar un poco, y montar las alforjas, Antonio me dice si yo tengo el monedero donde estaba el fondo comn, a lo que le respondo que no, que ayer pagu la cena en el bar donde nos comimos la tortilla, pero que el que lo suele llevar es l. En fin, que creo que lo hemos perdido. Desmonto las alforjas y con la bici subo la enorme cuesta que hay desde el albergue hasta el casco antiguo. El bar, evidentemente est cerrado, me quedo con el nombre y el telfono para llamar a medioda, por si alguien que encontrara el monedero hubiera tenido la gentileza de entregarlo en el local. El bar se llama El Regional, pero desgraciadamente no habr suerte, y tras llamar a lo largo del da de hoy al local, no recibimos respuesta positiva. En fin, son 160 euros los que hemos perdido, hay que pensar en que mantengamos la salud, que gracias a Dios, dinero tenemos suficiente.

A las 8 ya estamos dando pedales, sin desayunar. Hoy no abandonaremos la N-525 ya que es la antigua carretera nacional que tras hacer la Autova A-52 que enlaza la A-6 con Ourense, se qued medio abandonada, pero con un firme espectacular y sin nada de trfico. Es ideal para entrar en Galicia sin problemas, pedaleando con tranquilidad sin los agobios de los coches aunque va continuamente picando hacia arriba. Compruebo que Antonio va pisando huevos. Me enfado un poco, no le entiendo, parece que lo hace adrede.

Me dice que no ha desayunado, y que hay que buscar un lugar donde desayunar. Cruzamos el ro rbigo y el primer pueblo del da de hoy es Santa Cristina de la Polvorosa, donde vemos que hay varios bares y pubs, pero todos cerrados. Habr que seguir pedaleando, pero tenemos suerte, y a los 10 kms de la salida, en Colinas de Trasmonte, encontramos una gasolinera donde hay cafetera. Nos echamos un caf con leche con unas magdalenas de bolsa que estn riqusimas. No dejamos ni una. Creo que ya hemos repuesto fuerzas para todo el da de hoy. Seguimos avanzando entre campos de siega, pastizales y regados. Llegamos a Sitrama de Tera ya que nos vamos acercando a la Comarca del ro Tera, que enlaza con la comarca de Sanabria. Sin novedades llegamos a la primera gran parada del da de hoy que es Santa Marta de Tera, ya llevamos 31 kms. Paramos a recordar viejos tiempos, puesto que aqu pernoctamos en nuestro primer Camino Mozrabe o Sanabrs, all por 2002.

Foto desde el albergue. Es la antigua estacin de Renfe de Benavente.


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La Iglesia de Santa Marta de Tera perteneci a un antiguo monasterio mozrabe del siglo XI, por lo tanto es de las muestras ms antiguas del romnico espaol. A la entrada tiene dos estatuas de San Juan y de Santiago as como un recordatorio de que estamos en el camino de Santiago Sanabrs. Es uno de los puntos ms emblemticos de este camino que viene desde Zamora y de Tbara. Se puede decir que aqu enlazan el Camino Sureste con el Camino Sanabrs.

Mientras estamos haciendo fotos de los bsides, una anciana sale a mi encuentro. Me pregunta de donde venimos, le informo que desde Toledo. Me pregunta cmo se encuentra el camino, si es transitable. Los motivos son su preocupacin porque uno de sus nietos est haciendo en estos mismos momentos el Camino de Santiago inicindolo desde Salamanca en bicicleta, que es donde reside. La tranquilizo dicindole que est muy bien, y que seguro que no tendr problemas. Seguimos camino, comprobando que la carretera va paralela al ro Tera en gran parte del recorrido de hoy.

Pasamos por Camarzana de Tera y Vega de Tera, donde no paramos. Nos damos cuenta de que vamos moviendo el plato grande y que es agotador. Aunque no hace apenas viento, lo poco que hace nos da de cara. Poco a poco vamos gastando fuerzas y en Junquera de Tera, decidimos parar a comernos unos frutos secos. Llevamos ya 42 kms y son las 11 de la maana. Hablamos con la familia y con algn aldeano del pueblo. Sigue sin haber apenas trfico, lo que se agradece, pero vemos que va haciendo cada vez ms calor.

Santa Marta de Tera, enlace con el Camino Sanabrs. Imgenes de la Iglesia romnica de Santa Marta


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Seguimos avanzando hacia una de las localidades ms importantes de este tramo: Rionegro del Puente. Aqu vemos que el albergue, inaugurado en 2006 est en la misma carretera. Paro a sellar la credencial y aprovecho para preguntar al hospitalero si hay muchos peregrinos. Me dice que este ao pocos, coincide con lo que hemos comprobado nosotros mismos, apenas nos encontramos a gente haciendo el camino, cosa que en aos anteriores no ocurra, durmiendo con gente en la mayora de albergues. La Autova va paralela a nosotros, y adems empezamos a ver las primeras obras del AVE Madrid-Galicia, el cual est an inacabado. Continuos enlaces con salidas de camiones. Llegamos a Mombuey, donde aprovechamos para comprar fruta, que siempre viene bien a media maana. Unos pltanos y unas ciruelas sirven para afrontar el resto de la maana. Adems llenamos los bidones. Indicar que es fundamental llevar siempre agua en los bidones, aunque suele haber fuente en casi todos los pueblos, no siempre es agua fresquita. En estos das de calor son varios los litros de agua que podemos llegar a beber, y es necesario llevar siempre reservas, y sobre todo beber sin sed, as se evita la deshidratacin y la aparicin de calambres sobre todo si vamos a hacer muchos kilmetros. La Iglesia que destaca es la de Nuestra Seora de la Asuncin, que tiene una torre fortaleza de origen Templaria.

Rionegro del Puente

Iglesia de Nuestra Sra de la Asuncin con su torre fortaleza de origen templario.


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Las sensaciones fsicas no son las mejores. Es curioso que en un terreno llano, de asfalto aunque en continua y leve pendiente, vayamos tan cansados. Las piernas van muy cargadas fruto de tener que mover el plato grande tanto tiempo, pero bueno, la idea programada de hoy era llegar a pernoctar en Lubin, para lo cual tendramos que subir el Alto del Padornelo. Nos quedan an 53 kilmetros para llegar y lo vemos muy lejos, demasiado. Seguimos camino, con paso firme y ligero. El sol aprieta y hace cada vez ms calor. Llegamos a Asturianos, donde en caminos anteriores hemos parado a comer. En esta ocasin paramos en una terracita de la misma carretera donde como son las 12,30 del medioda toca la cervecita maanera. No tienen jarras de medio litro, pero nos ponen unos tercios bien fresquitos de Estrella de Galicia. Riqusima. Nos da vida tras el esfuerzo. Nos queda ya bien poquito para llegar a Puebla de Sanabria, donde tenemos previsto comer. Tras pasar por Palacios de Sanabria y Otero de Sanabria, a la una y media estamos en Puebla de Sanabria, uno de los pueblos ms bonitos de esta Ruta Jacobea, y donde ya pernoctamos en 2002 y 2010. En esta ocasin no pasaremos apenas, porque ya lo conocemos y porque tenemos que avanzar unos kilmetros ms para ir bien con el itinerario programado. La comida la hacemos en el Hostal Las Truchas, muy prximo al albergue y al ro Tera, y que ya habamos utilizado en los dos caminos anteriores, pero la calidad va menguando en este caso. Comida mala y adems cara, pero bueno, no todo son aciertos en esto del camino. Uno llega tan cansado a los sitios que no se va a poner a buscar ofertas, comparar precios y calidades y dems. Llega, ve un lugar donde pongan comidas, y se sienta cansado a comer casi lo que le sirvan. En este caso, creo que le hemos hecho una cruz y no volveremos a caer en el error. Tras la comida si que tenemos decidido donde descansar, en la ribera del Tera donde tienen una playa de csped con arboledas. Recordamos como en 2002

Cerca de Palacios de Sanabria. Antonio llegando ya bastante desfondado al final del trayecto.


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llegamos a media tarde a Puebla y nos dimos un bao espectacular en el ro. En esta ocasin, y aunque Antonio tiene muchas ganas no nos baamos, porque son ms las ganas de tumbarse a dormir un rato. El descanso no es pleno, porque como hoy es festivo, hay varias familias en la zona, que no paran de dar voces., pero es normal, tienen nios, es zona de baos, no zona de siesta. Pero siempre viene bien estar un rato tumbados a la sombra, escuchando la radio tranquilamente.

A las 4 de la tarde ya estoy llamando a Antonio para ponernos en marcha, porque la idea era subir el Padornelo hasta el albergue de Lubin. Salimos de Puebla y empezamos a notar que el viento es muy fuerte y da de cara. Hasta Requejo, el siguiente pueblo hay unos 11 kilmetros, que se nos hacen interminables. Pasamos la aldea de Terroso que dejamos a la derecha y por fin vemos Requejo. Antonio viene detrs, hecho polvo.igual que yo. Le espero y le hago una propuesta: por qu no nos quedamos aqu a pernoctar? Es que subir el Padornelo que no es muy duro, pero son unos 6 kms y luego hay que bajar hasta Lubin lo que suponen unos 20 kms ms en total con el calor que hace y el viento de cara se nos van a hacer interminables, y ya llevamos 100 kms. La respuesta de Antonio es inmediata: aqu hay albergue? S, pues nos quedamos. Efectivamente, llegamos al albergue a las 5 y vemos que hay solo una pareja de peregrinos a pie. No est muy equipado, ya que le falta una cocina, pero est superlimpio y con literas suficientes.

La hospitalera llega enseguida. Es muy agradable y nos explica un poco lo que hay en el pueblo, las tiendas y bares. Nos cobra 5 euros por persona que es la tarifa que tienen aqu estipulada. No es ni caro ni barato, sino que suponemos que es para cubrir gastos, aunque por lo que vemos tampoco es que pernocte ltimamente mucha gente en este albergue. Casualmente en este pueblo hay una zona de piscinas fluviales en el ro Castro. Cmo es muy pronto, y tras la colada, y sin ducharnos, decidimos hacer dos cosas: comprar la cena de hoy en una tienda y marcharnos a darnos un bao fresquito en la corriente del ro. Por un camino entre bosques se llega a la zona de bao que es una pradera de csped o pasto, con columpios para los nios y canastas

Preparando el equipaje para retomar el camino.

Puebla de Sanabria desde la N-525


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y con una piscina natural en una zona de represas del ro. Todo con muy buena pinta. Habr adems unas 40 personas, familias que han ido a pasar el da de fiesta, gente del pueblo que vuelve al mismo por vacaciones.

Le enviamos a Julia Ponce algunas fotos por el wassap para darle un poco de envida. Hay que ver lo que han cambiado los tiempos en cuanto a los primeros caminos a ahora. Antes ibas con tu cmara de fotos de carrete, hacas las fotos sin tener la seguridad de si iban a salir o no. Guardabas los carretes, tenas que ir con 4 o 5 y esperar una semana cuando regresabas para ver el resultado. Y si queras compartirlas con alguien, tenas que llevarte el lbum o como mucho escanearlas y enviarlas por correo electrnico. Ahora haces la foto y en dos segundos y a golpe de click, puedes compartirlas con el resto del mundo a travs de las redes sociales y a travs de los chats o wassap entre amigos. No s con qu quedarme, antes era un poco ms mgico. Ahora si no te gusta la foto, la eliminas al instante. Pero en 14 aos haciendo caminos, las nuevas tecnologas lo han revolucionado todo. Otro ejemplo, antes tenas que comprar guas, o pedirlas por correo postal a las asociaciones de amigos del camino. Ahora, no hace falta ni imprimirlas de Internet, las puedes llevar en el mvil, o en un gps, que es casi imposible perderse. A nosotros esto nos ha venido bien para situarnos en las grandes ciudades o pueblos, para encontrar las calles, los albergues, etc. Pero no utilizamos ni gps ni nada, sino que buscamos la flecha amarilla y la gua en papel.y no nos hemos perdido ni una sola vez. Tras esta disertacin tipo Punset sobre las nuevas aplicaciones de las nuevas tecnologas, retomo el relato de la etapa de hoy. Tras el bao, una merecida cerveza. Vamos, cerveza no, cervezaca. En este caso, se nota que estamos ya muy cerca de Galicia, porque nos sirven una Estrella de Galicia, que nos sabe riqusima pese a que no nos ponen pincho.

Antonio bandose en el ro Castro En la bajada a la playa fluvial del ro Castro


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Estamos en un bar de pueblo, donde me da una envidia tremenda ver a dos parejas jugando al mus. Aprovechamos para leer la prensa deportiva y la regional y planificar la etapa de maana. Tenemos una etapa de rdago: 4 puertos (Padornelo, A Canda, O Caizo y Alberguera), ms un terreno escarpado, como diran los entendidos en ciclismo de continuas subidas y bajadas, y ms de 100 kms hasta poder hacer noche en Vilar Do Barrio. Nos vamos a cenar al albergue. La cena es sencilla: Antonio se mete un bocadillo de sardinas en aceite y yo uno de jamn York con queso, eso s, con un pan de horno exquisito. Y de postre yogur lquido de fresa. Decidimos salir a dar una vuelta. Es an pronto y hay bares abiertos. Nos tomamos un caf en un hostal que hay a la salida de Requejo y donde suelen pernoctar trabajadores del AVE. Damos un ltimo paseo, hacemos alguna foto y nos vamos a dormir a las 11. Hoy hemos recorrido otros 100 kms justos.

Iglesia de San Lorenzo en Requejo


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CAPITULO VI: REQUEJO VILAR DE BARRIO 104 Kms (16 de Agosto)

Nuestra idea de hoy es levantarnos ms temprano que otros das, para intentar adelantar la hora de partida y ver si somos capaces de llegar a Vilar de Barro, ya en Ourense. Pero nos despertamos a las 8 menos cuarto. Los otros dos peregrinos se han levantado a las 5 y media, y han hecho bastante ruido cuando se han marchado. Deberan respetar al que se queda durmiendo, tal y como hicimos nosotros ayer por la noche cuando volvimos a dormir y ellos ya estaban acostados. En fin, es lo que hay. Pero la siguiente sorpresa ser cuando vamos a montar las alforjas y compruebo que mi rueda trasera est totalmente pinchada. Es raro, porque hemos ido en la jornada de ayer todo el rato por asfalto. En cinco minutos est arreglado el problema. Ha sido una grapa la que se ha insertado en la cubierta y ha perforado la cmara. Menos mal que repas bien la cubierta para encontrar la causa, porque si no lo hubiera hecho, al montar la nueva cmara se hubiera pinchado igualmente. Nos tomamos un caf con leche con sobaos en el hostal que hay a la salida de Requejo, y a las 8,30 estamos dando pedales. Lo primero, la subida al Alto del Padornelo (1.313 m). Se trata de un puerto de unos 9 kms desde Requejo, con un porcentaje medio del 4 % y con una pendiente mxima del 9 %. No es duro, y lo hacemos rpidamente.

Antonio va un poco ms atrs que yo, y le espero pasado el tnel. Es un tnel ms corto que el de A Canda que pasaremos despus. Tras el tnel vemos que hay una gasolinera donde paro para darle ms presin a mi rueda trasera, porque la veo floja y temo que se vuelva a pinchar. En la aldea de Padornelo, que tanto nos haba gustado en aos anteriores, paramos a coger agua en una fuente. Seguimos camino de Lubin, al cual se llega prcticamente en bajada. Adems, la N-525 est cortada por las obras del AVE.

Hay muchos tramos de carretera provisional. Pasamos por Aciberos en zonas de tejos, castaos, robles y de frondosa vegetacin. El sol de la subida anterior ha dado paso a las sombras espectaculares de los bosques de los ltimos pueblos zamoranos. A buen ritmo, llegamos a Lubin. Es uno de los pueblos ms bonitos del recorrido de hoy, todo lleno de flores en las casas, con sus techos de pizarra. Se nota que es un territorio de nieves y de fros invernales.

Coronando la Portilla del Padornelo (1.313 m)


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Aunque son las diez de la maana, nos damos cuenta que ayer fue un acierto no llegar hasta aqu. Hubiramos hecho finalmente 120 kms y con dureza acumulada. Mejor subir estas zonas de continuos sube-bajas con el frescor de la maana. En Lubin destaca la iglesia de San Mams, que tiene un tejo centenario y el Santuario de la Virgen de la Tuiza, junto a la Autova A-52. Nada ms reincorporarnos a la N-525, empezamos la subida a la Portilla de A Canda (1.254 m) que tiene 4 kms y un porcentaje medio del 4 %, vamos, nada del otro mundo. Aqu el recorrido va paralelo todo el tiempo a la A-52, y los tneles estn juntos. Tres agujeros en la montaa, a los que hay que aadir los nuevos que estn haciendo para el AVE. A veces me pregunto si son todos necesarios, porque estn dejando el monte como un queso gruyere. Antonio viene detrs, pero a buen ritmo. No se le ve cansado. Nos sorprendemos de que pese a que el recorrido de hoy es ms rompepiernas yduro que el de ayer, estamos bastante menos cansados. Cruzamos el tnel y ya estamos en Galicia. Iniciamos una bajada trepidante donde pasamos Vilavella y O Pereiro, para en suave pendiente iniciar la subida al tercer alto del da de hoy, el Alto de O Caizo (1.085 m), cuyo nombre lo da el pueblo en el que se encuentra. Estamos ya muy cerca de nuestra primera gran parada del da de hoy: A Gudia. En A Gudia llamamos a las empresas de alquiler de vehculos: Atesa y Europcar. Sorpresa: no hay ni un solo vehculo disponible para maana sbado. A Antonio le cambia la cara, yo me enfado con l, porque parece que el culpable de que no podamos volver maana soy yo. Le digo que no se preocupe, que podemos

Lubin, el ltimo pueblo de Zamora

Otro tunel ms, este para el AVE Antonio llegando a Lubin (Zamora)


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volver el domingo en el AVE, si hay billetes claro, haciendo un enorme esfuerzo de llegar a Santiago por la maana. Para colmo comienza a bajar una gran niebla, lo que hace que bajen las temperaturas. Yo me pongo los manguitos. Decidimos comer fruta para ver si los nimos se relajan. Hemos discutido finalmente. Y as iniciamos la que, como en 2002 y 2010, debera ser la mejor jornada del camino, toda la carretera que une A Gudia con Laza. En A Gudia se divide el camino en dos opciones: por Laza, por la que faltaran 195 para Santiago, o la opcin que va por Vern, que es ms larga en unos 30 kilmetros. Lo bonito de la opcin de Laza es recorrer toda la comarca de la Serra Seca y Castrelo do Val. Una zona en la que la carretera comarcal, estrecha pero sin apenas trfico transcurre por la cresta de la sierra, observando a la izquierda los valles de la comarca de Vern y a la derecha el embalse de As Portas. El recorrido es una sucesin continua de subidas y bajadas, de rampas duras con porcentajes prximos al 15 %, pero con bajadas importantes. Adems suele hacer sol, lo que aade dureza a este tramo, pero que para los amantes del ciclismo y del camino de Santiago es un enorme placer poder llevarlo a cabo. Atravesamos pequeas aldeas o caseros: Venda do Espio, Venda Teresa, Venda Capela y Venda Bolao, donde ya empezamos a ver el embalse de As Portas en el ro Camba. El enfado ya se nos ha pasado a ambos. Nos echamos unos frutos secos y poco antes de las 2 estamos en Campobecerros, el lugar previsto para comer hoy. Este pueblecito, perteneciente al Concello de Castrelo do Val y hemos observado con el paso de los aos que va aumentando de vida.

Paisajes espectaculares en la comarca de la Serra Seca (Ourense)

Campobecerros a lo lejos


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En 2002 apenas haba un bar, la pea madridista. En 2010 haba otro bar, modesto donde se solan reunir los mayores y mujeres del pueblo. En 2013 las obras del AVE han revolucionado la comarca. Este mismo bar tiene una terraza para unos 30 / 40 comensales que se llena a la hora de la comida por los obreros del ferrocarril. Tiene buena pinta lo que estn comiendo, as que decidimos apretarnos un arroz a la cubana y de segundo un churrasco de cerdo con helado y caf. Todo regado, por supuesto, con cervezaca.

El precio del men, pues casi de peregrino: 21 euros por las dos jarras de medio litro, los dos platos, el postre y los cafs. Ideal. Tras la sentada que nos hemos metido hay que rebajarlo. Para ello nos vamos al ro que pasa por Campobecerros, el ro Camba, donde hay un pequeo parque y piscina natural. Nos tumbamos en el pasto a la sombra a recargar fuerzas para iniciar las ltimas subidas del da de hoy.

Men hipercalrico para afrontar las duras rampas del Alto de Alberguera que nos queda hoy an por superar.

Descansando junto al ro Camba en Campobecerros (Ourense)


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El da vuelve a nublarse, lo que hace que la temperatura baje y se agradece. A las 4 de la tarde ya estamos de nuevo en ruta. Nos queda todava un tramo de importante subida hasta Portocamba, una aldeta que dista de Campobecerros casi 3 kilmetros, y que tiene unas buenas rampas de subida. Lo hacemos rpidamente, siempre por carreterines asfaltados sin nada de trfico hasta que llegamos al Cruceiro que supone dejar la carretera para iniciar una bajada trepidante por pistas forestales de unos 10 kilmetros hasta la aldea de As Eiras.

Este tramo de bajada, pese a que la pista forestal est perfecta y bien sealizada, hay que hacerlo con extrema precaucin, puesto que bajar con alforjas es peligroso, y ms con las cadas y precipicios que se ven en los bordes del camino. Alternamos tramos de pinares, bosques, con otros de monte de helechos y de arbustos. Es precioso, el problema es que no puedes disfrutarlo. Se ven numerosas aldeas desde lo alto, y acojona un poco ver hasta donde tenemos que bajar.

Pero hay que reconocer que solo por hacer este tramo, ya merece la pena todo el esfuerzo del Camino de Santiago Sanabrs. Pasarn los aos y volveremos, seguro, y siempre disfrutar con estos kilmetros como en ningn otro camino.

Llegamos a As Eiras, y de nuevo encontramos el asfalto en continua bajada hasta Laza. Pasamos junto a un enorme castao con el tronco abierto en la parte de abajo donde en 2002 me hice dentro una foto que guardo con mucho cario. Hoy no estamos para parar, tenemos que seguir porque nos queda lo ms duro del da.

En Laza, cogemos la carretera que va a Vilar Do Barro. Pero antes nos detenemos en un bar de la carretera para echarnos una coca-cola y coger las ltimas fuerzas del da de hoy. Enfrente vemos a un peregrino que va en bicicleta. Nos paramos a hablar con l. Nos comenta que ha salido hoy de Lubin y que duda entre subir el Alto de Alberguera o pernoctar en Laza. Le indicamos que si no tiene prisa por llegar a Santiago, este puerto que sin ser de una dureza extrema se agarra bien, es mejor subirlo con las fuerzas intactas a primera hora de la maana con el fresquito, y que adems el albergue de Laza es de los mejores del camino. El chaval se convence y finalmente no sube el puerto en la tarde de hoy.

Mientras estamos en el bar, le comento a Antonio el porqu no hacemos un intento con alguna empresa de alquiler de coches por si tuvieran furgonetas industriales disponibles, que incluso puede que sean ms econmicas que un turismo. Dicho y hecho, llamo a Atesa, y me comentan que tienen disponibles para maana sbado en Ourense una Citroen Berlingo que nos vale 137 euros. Bastante ms econmico que cualquier coche, y con las mismas prestaciones. Le consulto a Antonio, se le ilumina la cara y decido reservar. Adems no hay que abonar nada en

Cruceiro junto a Portocamba


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concepto de reserva, por lo que si no llegamos a tiempo a recogerla maana no pasara nada.

Tras los azcares que nos inyecta la coca-cola, iniciamos la subida hasta Vilar de Barrio por el Alto de Alberguera. Este puerto, segn los datos de altimetras tiene una distancia de 10,3 kms desde Soutelo Verde, con una pendiente mxima del 11 % y un desnivel medio del 4,4 %. Es un puerto pestoso, ms que nada porque comienzas a subir curvas y curvas y nunca ves el final del mismo. Se hace pesado. Adems, cuenta mucho hacerlo al inicio de la jornada como hicimos nosotros en 2002 y 2010 o hacerlo de postre como haremos este ao.

Comenzamos a llanear juntos desde Laza, pronto llegamos a Soutelo Verde, un pequeo pueblo en el margen del ro Tmega. Hasta aqu es llano, y justo pasadas las ltimas casas comienza el puerto. Hemos acordado esperarnos en la aldea de Alberguera, que est justo en la ltima parte del alto. Cada uno queremos ir a nuestro ritmo.

Yo empiezo bastante fuerte, voy a buen ritmo. Es cierto que los primeros dos kilmetros son ms suaves, no superarn el 5 / 6 %. Pero a partir del tercer kilmetro la carretera se empina un poco. Pero con el sufrimiento de los kilmetros que ya llevamos en el da de hoy, por fin acabo la zona de curvas, para afrontar los dos ltimos kilmetros que me llevan a la aldea referencia en cuanto a albergues, y cuyo nombre (no poda ser de otra manera) es Alberguera.

Espero a Antonio que llega pasados unos diez minutos. Me comenta que ha sufrido mucho, pero creo que para los kilmetros que llevamos hoy, y la dureza de la etapa, ha subido fenomenal. As se lo digo, me deja sorprendido. Un to que apenas anda en bici durante el invierno, que solo la coge unos meses antes de cada camino que hacemos, y que se hace los kilmetros todos los das sin ni un solo calambre, sin ni una queja y con un motor disel, que ya quiero yo para m cuando tenga su edad. Paramos un segundo a reponer fuerzas, y afrontamos los dos ltimos kilmetros de subida, ms sencilla para iniciar el descenso hasta Vilar de Barrio. Vemos en el horizonte hacia el Este un enorme incendio, y adems varios helicpteros con bolsas de agua para sofocarlo. No olvidemos que estamos en

Paisajes en la subida al Alto de Alberguera Preciosas hortensias en Alberguera


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Galicia, y que parece que ya es habitual que haya incendios como nos ocurri en el Camino Portugus en 2005, donde casi da tras da pasbamos zonas recin quemadas tanto en Portugal como en Galicia. Seguimos viendo obras del AVE, zonas de cementeras, camiones, movimientos de tierras, etc. Es lo que tiene el progreso y la comodidad: que supone un impacto ambiental tremendo. El paisaje va cambiando a peor. Nosotros que llevamos desde 2002 pasando por estos terrenos comprobamos que lo salvaje y lo autctono y rural, va dejando paso al hormign, a los tneles, las carreteras, las lneas de energa y de tren.Es lo que tiene el progreso. Sobre las 6,30 de la tarde llegamos a Vilar de Barrio. nicamente hay un peregrino que viene en bicicleta desde Zamora. Nos comenta que a l le gusta ir solo porque va muy despacio y no quiere ser una rmora para nadie. Aqu comprobamos que cada uno tiene su filosofa totalmente vlida para hacer el camino. La hospitalera es extranjera y no maneja mucho la geografa espaola, no sabe si Ciudad Real es provincia o comunidad autnoma ni a cual pertenece, pero lo que importa es que nos tom los datos, nos cobr y nos dio unas fundas desechables para el colchn y la almohada. Esta prctica, la de cobrar y darte fundas la llevamos viendo en los albergues de Galicia desde hace unos aos. Nos parece perfecto, porque eso de dar un donativo es muy relativo y de esta forma se mantienen los albergues y adems, cada uno se responsabiliza de cuidarlo con las mejores condiciones higinicas posibles.

Tras la ducha y ya sin tener que hacer lavado de ropa, porque maana si todo va bien nos volveremos para La Mancha, salimos a comprar la cena y a tomarnos una cervecita, la que ser la ltima cerveza de este camino de Santiago. La cena que compramos es sencilla: una lata de pulpo en aceita, que para eso ya estamos en Galicia, un buen pan de horno y yogures. Yo aprovecho para comprar un cartn de leche y unos bollos para el desayuno de maana. Echo en falta beber ms leche en este Camino, porque nos hemos limitado al caf con leche del desayuno y poco ms. En una terraza en la Avenida de San Fiz nos tomamos la cerveza y aprovechamos para leer la prensa deportiva. Hay ambiente en el pueblo y se est fenomenal.

Antonio deshaciendo las alforjas en el albergue de Vilar do Barro

Nuestra ltima cerveza de este CaminoHan sido muchas, pero muy agradecidas.


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La verdad es que no queremos casi levantarnos de la terraza, pero a las 9 de la noche decidimos que hay que ir a cenar al albergue. La cena es sencilla, aunque yo me doy el placer de echarme de postre un buen tazn de leche con bollos que me dejan totalmente satisfecho. Salimos a dar un paseo

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Los Caminos a Santiago. Diarios de Una Bicicleta Volumen 2