Los Movimientos Sociales y El Medio Ambiente Urbano. NUSO 1997

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  • 1Nueva Sociedad Nro. 149 Mayo-Junio 1997, pp. 146-161

    LOS MOVIMIENTOS SOCIALESY EL MEDIO AMBIENTE URBANO

    Peter Grohmann

    Peter Grohmann: gegrafo con posgrado en ciencias del Desarrollo de la Politcnica deZurich, actualmente consultor del Fondo de Inversin Social de Emergencia-FISE enNicaragua sobre Planificacin Municipal Participativa e Inversin Social.

    Palabras clave: medio ambiente, movimientos populares y comunitarios, Amrica Latina.

    Resumen:El desafo ecolgico de las ciudades se decidir en el futuro a nivel local,entre los habitantes. Conceptos como auto ayuda y participacin resultanclaves para un desarrollo urbano sustentable desde abajo. Sin embargo,tales conceptos no son unvocos, por cuanto la auto ayuda puede llevartambin a la explotacin y la participacin a la determinacin externa. Losactores principales del desarrollo barrial desde abajo y compatible con elmedio ambiente son los movimientos populares urbanos de los barriospobres, cuyos habitantes resultan los ms afectados por la destruccinambiental.

    En la Agenda 21 acordada en la Cumbre de la Tierra, celebrada en Ro en 1992,se asign un significado fundamental a las comunidades locales, y a lasorganizaciones no gubernamentales (ONGs) que las auxilian, en el logro de undesarrollo sustentable en las ciudades. Con ello los gobiernos reunidos en Roslo estaban reconociendo tardamente lo que ya era un hecho: losprotagonistas del desarrollo en las ciudades del Tercer Mundo no son el Estadoy la industria de la construccin, sino los habitantes mismos, sobre todo lospobres. Si hoy en da en numerosas ciudades mucho ms de la mitad de loshabitantes vive en vecindades proyectadas por ellos mismos, debera serposible aprovechar tambin ese enorme potencial creativo para un desarrollourbano ecolgico. No debe observarse sino con escepticismo el papel de losmovimientos ambientalistas propiamente dichos: ellos slo vinculancondicionalmente el aspecto ambiental con la pobreza y el cambio de lasestructuras sociales. Un autntico eslabn entre los movimientos ambientalesde la clase media, poseedores de mayores conocimientos sobre lascorrelaciones ecolgicas, y los movimientos populares, son las organizacionesno gubernamentales. Son las ms capaces de unir conceptualmente el trabajode desarrollo orientado a la pobreza y el trabajo ecolgico, pudiendo servir demediador con los afectados. Parece razonable que en lugar de tratar la cuestin

  • 2ambiental del desarrollo urbano como una rea particular con suscorrespondientes organizaciones, se introduzca la problemtica del ambienteen las instituciones ya existentes, en forma coordinada.

    Movimientos populares y movimientos ambientalistas urbanos

    En Amrica Latina existen dos tipos de movimientos sociales de caractersticasmuy diferentes y que parecen particularmente predestinados para el desarrollourbano ecolgico: los movimientos ambientalistas urbanos y los movimientospopulares urbanos. Mientras los primeros toman su identidad de una granconciencia ambientalista, los movimientos populares urbanos se definenprimordialmente por el espacio existencial que comparten sus miembros, esdecir, los barrios pobres. A continuacin caracterizaremos ambos movimientosde acuerdo a sus acciones, con el fin de destacar sus rasgos comunes ydiferencias.

    Los movimientos populares urbanos. Abarcan todas las formas deorganizacin de los pobres urbanos que buscan mejorar su calidad de vida atravs de acciones conjuntas. Entre ellas se cuentan desde las guarderasinfantiles hasta un extenso movimiento de oposicin al ajuste estructural. Losmovimientos populares estn muy relacionados entre s y muchas veces setransforman. De un grupo deportivo puede surgir una cooperativa de consumo, yuna cooperativa para la construccin de viviendas puede intervenir en unacampaa contra las violaciones de los derechos humanos. En virtud de sudiversidad y de su capacidad de transformacin, no es fcil incluir losmovimientos populares urbanos en categoras rgidas. Sin embargo, parapresentarlos de una manera ms o menos sistemtica vamos a caracterizarlosa continuacin segn sus actividades:

    1. Mediante la ayuda entre vecinos se resuelven en forma colectiva pequeosproblemas espaciales en la forma de autoayuda vecinal sin ninguna exigenciaal Estado. Este tipo de iniciativas se orienta a necesidades sentidas de mododirecto, factibles de respuestas inmediatas. Son espontaneas y de cortaduracin, aunque se basen en relaciones de amistad o parentescopermanentes. Entre ella se cuentan, por ejemplo, la ayuda mutua en laconstruccin de viviendas, la adquisicin o el tendido comn de tuberas desuministro y la ayuda recproca en casos de emergencia.

    2. La auto-organizacin incluye todas aquellas acciones un tanto informales, enlas que ante todo se plantean reivindicaciones directamente al Estado. Losgrupos auto-organizados surgen como reaccin a medidas estatales queamenazan la existencia de los pobladores, o debido a la negligencia de losdeberes estatales, en especial en el campo de la poltica social o laplanificacin de la infraestructura. Poseen una fuerza de movilizacin muygrande y llegan a conformar movimientos con participacin amplia sin hacerdistinciones poltico-partidarias. Debido a que por regla general se constituyen

  • 3para enfrentar un problema individual, muy raras veces logran edificar unaorganizacin slida y en lugar de eso se caracterizan por su horizontalidad. Enconsecuencia, estn muy propensos a caer en el carcter cclico propio de losmovimientos informales: cuando sus objetivos se han cumplido, se disuelven(Frank/Fuentes, p. 22). A estos procesos de auto-organizacin pertenecen laocupacin de tierras, la lucha por la adquisicin de infraestructura y protestaspor el desalojo de viviendas en barrios, as como las marchas de protestacontra la violacin de los derechos humanos, la escasez de agua y losprogramas de ajuste estructural del FMI.

    3. La autogestin Propiamente dicha incluye todas 1 acciones es cierto gradoformalmente organizadas, que apuntan hacia soluciones permanentes yautogestionadas, sobre todo de problemas locales. Las actividades seorganizan alargo plazo y se llega a conformar una estructura organizativa slidaque, o bien es reconocida formalmente, o bien se impone de modo informal.Las organizaciones de ayuda mutua que as surgen, estn dirigidas con nfasismayor a la satisfaccin directa de necesidades, a la creacin de una concienciapoltica, o a una combinacin de ambas cosas. Algunas se esfuerzan por lograruna participacin mayor en el sistema econmico y poltico, otras buscansoluciones alternativas y autogestionadas. Con frecuencia mantienenconexiones estrechas con diferentes grupos que se organizan por cuentapropia. A estas organizaciones populares ms permanentes pertenecen lasasociaciones de vecinos, los servicios sociales autogestionados, lascooperativas, los grupos culturales y deportivos, las organizaciones de derechoshumanos, etc.

    Estas tres clases de actividades se superponen con frecuencia, en parte inclusoen una misma organizacin. Pero adems, la ayuda entre vecinos y laauto-organizacin son a menudo el fundamento sobre el cual se construye unaorganizacin autogestionaria permanente. En su conjunto, todas estas formasde organizacin constituyen el movimiento urbano popular, ya que las grapasque lo sujetan son su base en los sectores populares de los barrios yvecindades. Los grupos y activistas individuales se encuentran entrelazadosentre s formal e informalmente de una y mil maneras (asociaciones, grupos decoordinacin, relaciones de amistad, etc.). Por eso los movimientos urbanospopulares como agrupaciones formales rebasan el mbito de accin de losgrupos locales y enfilan sus acciones contra los problemas que afectan laciudad o la nacin en su totalidad. Pero tambin como movimientos ampliosextraen su identidad de sus races locales. Eso los protege de la usurpacin,pero muchas veces tambin conduce a conflictos internos entre los que seocupan de las condiciones polticas bsicas y generales y los que se preocupanpor los problemas locales.

    El carcter fuertemente poltico de los movimientos populares urbanos deAmrica Latina, un carcter casi siempre izquierdista y que los especialistas en

  • 4desarrollo muchas veces pasan por alto, se muestra finalmente en el abandonodel nivel local (Hellmann, p. 55). Dada su situacin social, los sectorespopulares aspiran bsicamente a cambios estructurales en la distribucin delpoder y el bienestar, y as se diferencian fundamentalmente de lasorganizaciones urbanas de la clase media, que se interesan por laconservacin de su nivel de vida durante la crisis. Para lograr esos grandescambios, amplios sectores de los movimientos populares respaldaron acandidatos opositores a fines de los 80, por ejemplo en Mxico y Brasil. Elexperimento en ciernes de movimiento popular combinado con partido deizquierda en el gobierno fue detenido a duras penas mediante la manipulacin yel fraude electoral. En ese sentido queda pendiente la pregunta de si se justificael temor que tienen muchos miembros del movimiento popular a serabsorbidos por los aparatos partidistas. No obstante, tambin dentro de lospartidos de izquierda la participacin del movimiento popular ha impuestocambios en los contenidos y en la estructura interna. La nueva izquierda archivsus pretensin vanguardista y se abri a las organizaciones popularesindependientes en forma de una base ms democrtica, sin usurparlas. Porsupuesto que esos procesos no transcurren sin fricciones, y as lo demuestranlas tensiones entre la dirigencia y las bases, tanto dentro de esos partidoscomo dentro de los movimientos populares.

    Los movimientos ambientalistas urbanos. A diferencia de los movimientospopulares, los movimientos ambientalistas urbanos se orientan menos por unaunidad espacial determinada, y mucho ms por un fin claramente delimitado, asaber, la proteccin del medio ambiente. Claro est que algunas veces eseobjetivo se define ms ampliamente y otras en forma ms restringida, demanera que las vas para alcanzarlo resultan tambin diferentes. Gudynas (pp.107 ss.), por ejemplo, hace una distincin entre administradores ambientales yrepresentantes de posiciones contrahegemnicas, presentndolos como polosdel movimiento ambientalista. Los primeros se apoyan sobre todo en lospotenciales de solucin de la ciencia y la tecnologa. Los problemas sociales sesubordinan a los ecolgicos, entre los cuales se otorga una importanciaparticular a la proteccin de la flora y la fauna. Los contactos con otros grupossociales son relativamente escasos y, por el contrario, ms bien estrechos conalgunos empresarios y polticos. Ejemplos tpicos de esa orientacin son lasgrandes organizaciones conservacionistas dedicadas a la proteccin dedeterminados espacios naturales, como por ejemplo las selvas Tropicales. Encontraste tenemos a las organizaciones ambientalistas que unen laproblemtica conservacionista con una crtica de la ideologa del progreso, y quecuestionan el (actual) modelo desarrollista y el modelo social predominante.Las cuestiones ecolgicas y sociales estn muy estrechamente relacionadas yse aspira a una profunda transformacin de la sociedad. Los vnculos con otrosgrupos sociales son correspondientemente estrechos, sobre todo a nivel local.

    Con el fin de identificar los puntos de contacto entre los movimientos popularesurbanos, de fuerte orientacin local, y el movimiento ambientalista, revisaremos

  • 5a continuacin tres o cuatro niveles de accin del movimiento ambientalistaafincado en la ciudad.

    Los movimientos ambientalistas ms conocidos por la opinin pblica sonaquellos que abogan por la proteccin del medio ambiente global y nacional, yque se ocupan de temas como la proteccin del clima, la biodiversidad, etc. Alltoman parte tanto los movimientos ambientalistas polticos, que persiguencambios profundos en la sociedad industrial, como las organizacionesconservacionistas, ms bien apolticas, que entran en accin, por ejemplo, parala conservacin de un parque nacional.

    Por lo general dirigen sus exigencias a las autoridades estatales, que debenalcanzar las metas con las correspondientes medidas legales. Aunque losmiembros de esas organizaciones provienen primordialmente de la clasemedia urbana, los problemas directos del medio ambiente urbano tienen, comomximo, un papel indirecto en sus acciones.

    A nivel de la ciudad como un todo, pocas veces hay movimientos ambientalistasamplios que combatan directamente los problemas ambientales generalescomo la contaminacin del aire y de las aguas. Eso queda reservado paragrupos ms pequeos de los crculos cientficos, que ejercen presin sobre lasautoridades municipales para que elaboren y apliquen las medidas legales quecorrespondan. Sin embargo, all donde el problema es la eliminacin directa defuentes individuales de contaminacin ambiental, como por ejemplo fbricas decemento, la industria qumica, centrales de energa nuclear, etc., surgenmovimientos ambientalistas ms amplios, que abarcan toda la ciudad. En lamayora de los casos la formacin de coaliciones que trasciendan las clasesdepende del alcance espacial del contaminante. Por ejemplo, mientras para lalucha contra la central nuclear Laguna Verde, en los alrededores de Veracruz(Mxico), se form una amplia coalicin de organizaciones de diversas clasessociales y orientaciones polticas, contra la mayora de las factoras altamentecontaminantes los que luchan en primer lugar son las organizaciones de losbarrios adyacentes, que pertenecen mayoritariamente a la clase media-baja o ala clase popular.

    A nivel local existen diferencias sociales claras en las medidas de lasorganizaciones vecinales individuales. Mientras en las urbanizaciones de laclase media y alta una mejor calidad de vida significa reas verdes, alivio deltrfico automotor y seguridad personal, en los barrios de la clase baja se tratade medidas elementales como el logro de condiciones habitacionaleshumanas, suministro de agua corriente, recoleccin de desechos y de aguasnegras, mejoramiento de la red vial, proteccin contra la erosin de los terrenos,infraestructura social (educacin, salud), medidas de creacin de empleo, etc.Las variantes de movimientos populares urbanos que se forman ante esosproblemas, ciertamente no pueden considerarse movimientos ambientalistas,pero mediante sus medidas sencillas, adaptadas tecnolgicamente, colaboran

  • 6notablemente al mejoramiento de la situacin ambiental local. Con el mayorconocimiento de los efectos de la destruccin ambiental sobre las condicionesde vida de las personas (sobre todo sobre la salud), aumenta tambin en losbarrios pobres la conciencia ecolgica, y los movimientos populares existentesinterceden entonces explcitamente y cada vez ms por las cuestionesambientales.

    Sin los movimientos populares urbanos antes mencionados, el tan invocadocarcter multiclasista del movimiento ambiental estara sumamente restringido.La contaminacin ambiental de la ciudad, incluso el smog, no afecta a todas lasclases sociales por igual. Con la sensacin de deterioro de la calidad de vida,los pudientes desde hace tiempo trasladaron sus residencias a mejores zonas,y usualmente el sector estatal los subvenciona generosamente con la provisinde infraestructura de suministros y recoleccin. Por lo tanto, no resultasorprendente que slo algunas de estas organizaciones ambientalistas conconciencia poltica e impronta de clase media pidan tambin un cambio de lasestructuras distributivas. Por el contrario, la mayor parte de la clase mediaurbana con conciencia conservacionista se preocupa por los parquesnacionales, las especies en peligro de extincin, los cambios en el clima globalo problemas ambientales menores de su propio entorno.

    Los verdaderos impulsos para un mejoramiento del medio ambiente urbano anivel local surgen, por lo tanto, de los movimientos populares urbanos. Huelgadecir que a pesar de las esferas de intereses bsicamente diferentes, en elmbito conservacionista tambin existen movimientos que trascienden lasclases sociales, y que van ms all de un juego suma cero en la lucha de ladistribucin. De esa manera los movimientos populares pueden aprovechar losconocimientos y los recursos materiales parcialmente disponibles de losmovimientos ambientalistas, sin someterse a su discurso. Un puente son lasONGs, cuyos programas ecolgicos y de alivio a la pobreza buscan acercarse loms posible a las necesidades de los sectores populares.

    El arte de mediar: sobre el papel de las ONGs

    Con palabras no del todo concluyentes Koschtzke (p. 62) sentencia sobre lasONGs en Amrica Latina: Para los militares y los dictadores muchas veceseran un producto del comunismo, para la izquierda otrora radical, el caballo deTroya del imperialismo. Se puede presumir que no son ni lo uno ni lo otro, sinotodo lo contrario. Esta apreciacin muestra difcil es formarse un concepto delheterogneo mundo de las ONGs. cuan Se calcula que en Amrica Latina sunmero alcanza las 10.000. Nadie sabe si mueven 500 millones o 3.000millones de dlares al ao, ni si esa rama del crecimiento ha creado 50.000 o250.000 puestos de trabajo1. Mediante su expansin, estos mediadoresprivados entre donantes ricos y receptores pobres alcanzaron una relevancia

    1 Cifras y dudas conforme a Ila (1993) y Koschtzke.

  • 7que en las cuatro dcadas de desarrollo no slo los elev a socios reconocidosde gobiernos y organizaciones internacionales, sino que tambin los expuso ala crtica de intelectuales, donantes y receptores. A ms tardar a comienzos delos aos 90 (no casualmente habiendo quedado el modelo capitalista comonica opcin) comenz la discusin sobre el papel de las ONGs en AmricaLatina. En primer lugar se tematiz su relacin con el disminuido Estadoneoliberal, que las provee de generosos recursos; con los movimientossociales, que no siempre se ven representados por los mediadoresprofesionales; y con las instituciones de ayuda del Norte, de cuyos criteriosdependen a pesar de todas sus afirmaciones de que trabajan en colaboracin.

    Hasta ahora falta una definicin unvoca de lo que es realmente una ONG. Conlas apreciaciones antes mencionadas se meten en el mismo saco la mayorade las organizaciones de prestacin de servicios, los grupos de base,federaciones, etc., que no sean estatales ni estn orientadas al lucro. Sinembargo, en el contexto de la cooperacin para el desarrollo se diferencia engeneral entre las organizaciones populares ya ejemplificadas, y que pertenecenal grupo-meta, y las organizaciones que promueven la cooperacin, es decir, lasONGs. Conforme a eso, la caracterstica ms importante de una ONG es suactividad mediadora entre financieros estatales o privados, nacionales ointernacionales, y el as llamado grupo meta, ya se trate de grupos organizadoso de individuos. Dentro del mundo de las ONGs as circunscripto, podemosasociar ahora a las ONGs con los siguientes enfoques, tomando en cuenta suorientacin programtica, y haciendo la salvedad, por supuesto, de que existendiversas coincidencias2:

    a) Beneficencia y ayuda: el auxilio caritativo para asistencia social y casos deemergencia fue el enfoque clsico en la ayuda al Tercer Mundo y en laactualidad est teniendo cierto renacer. Generalmente es de duracin limitada,se dirige a grupos-meta no organizados y no ataca las causas estructurales dela pobreza. Una ONG con ese enfoque tiene una funcin puramentedistrbuidora.

    b) Desarrollo: mediante el respaldo de proyectos especficos con asistenciatcnica y recursos financieros se busca poner al grupo-meta en condiciones demejorar ante todo y a largo plazo su situacin econmica, utilizando laautoayuda. Las ONGs con esa tendencia son organizaciones profesionales quetienen conocimientos especficos, tcnicos, tcnico-sociales y/o deadministracin de empresas.

    c) Habilitacin (empowerment): a partir del anlisis de la pobreza comoproblema poltico-estructural, y a travs de un trabajo de organizacin yconcientizacin muchas veces unido a medidas para la autoayuda econmica, 2 Parcialmente puntualizadas y complementadas en el apndice (d) conforme a Charles Elliot:Some aspects of relations between the North and South in the NGO sector en WorldDevelopment vol. 5, Suplemento, otoo de 1987, como se cita en Wegner (p. 15).

  • 8se busca poner a los grupos pobres en condiciones de articular sus interesesen forma autnoma ante los organismos pblicos y privados e inducir cambiosestructurales. La ONG asume el papel de catalizador en un procesodeterminado idealmente por el propio grupo-meta.

    d) Representacin: partiendo de la opinin de que el grupo-meta no dispone dela capacidad necesaria para representar autnomamente sus intereses aniveles superiores (regional, nacional o internacional), las grandes ONGsasumen esa funcin, en parte con un trabajo simultneo en las bases, en parteapoyndose exclusivamente en el trabajo de investigacin. Ese trabajo de lobbyo grupo de presin se basa en una argumentacin racional-cientfica y/o en larepresentacin de intereses del grupo-meta respectivo o de una coalicin deONGs.

    ONGs orientadas a la pobreza y ambientalistas en el desarrollo urbano. Seconsidera que las ONGs son eficientes, innovadoras y estn prximas a losgrupos-meta. Esos atributos las convierten en socios apropiados de losorganismos de socorro del Norte en el desarrollo urbano orientado a lospobres. Su cercana a los grupos-meta y su disposicin a la innovacin laspredestinan adems a observar, hacer suyos y apoyar los procesos en lasbases, as como a llevar y trasladar a stas los temas relevantes de ladiscusin nacional o internacional. Si de las oficinas de los organismos deayuda del Norte llegan temas como la promocin de la mujer o la conservacindel ambiente, es objeto de otra discusin. Sin duda hoy en da la cuestinambiental tiene una importancia central en el trabajo de muchas ONGs, ya setrate de las tradicionales orientadas a la pobreza, que ahora armonizan susconceptos con las necesidades ecolgicas, o de las ambientalistas, que ponenen prctica proyectos ecolgicos. Adems, ambos grupos se acercan cada vezms, ya que (salvo las organizaciones exclusivamente conservacionistas)tambin las ONGs ambientalistas toman en consideracin los asuntos socialespara realizar su trabajo (Price).

    En muchos proyectos tcnicos del desarrollo de barrios se mezclanampliamente la orientacin a la pobreza y a la proteccin del medio ambiente.Por ejemplo, el empleo de materiales locales de construccin puede reducirconsiderablemente los costos de una casa; los programas para el servicio deagua corriente pueden desarrollarse en forma ms econmica y ecolgicamediante la utilizacin de agua de lluvia o recurriendo a fuentes locales; en laszonas en pendiente se recomienda la arborizacin para prevenir los derrumbes;el reciclaje de desechos no slo es ecolgico, sino adems una fuente deingresos para muchos pobres; en el rea de la salud, la medicina tradicionalcon hierbas del huerto casero adquiere gran importancia. Se puedenencontrarmuchos otros ejemplos de soluciones tcnicas adecuadas,desarrolladas y divulgadas por las ONGs (vase Hardoy, Mitlin y Satterthwaite,pp. 129 ss.; y Cerda).

  • 9El desarrollo econrnico es un reaclavedel desarrollo urbano ecolgico. Hastaahora es en el campo de la eliminacin de desechos (p. ej., el reciclaje) dondese han desarrollado fundamentalmente conceptos de compatibilidad con elmedio ambiente en el fomento de pequeas empresas; en cambio, en el reaproductiva salvo en la agricultura urbana los aspectos ambientales (p. ej.,ciclos de materias) pasan a segundo trmino en comparacin con lasnecesidades econmicas y sociales. Todava falta que se desarrolle unconcepto que, tal vez en forma anloga a la agricultura biolgica, combine unaseguridad de supervivencia econmica a corto plazo y de supervivenciaecolgica a largo plazo.

    Sin ninguna duda el rea de trabajo ms importante de las ONGsambientalistas es la educacin ambiental (Cerda, p. 164). En cierto modo poraqu pasa la tarea de concientizacin poltica que le corresponda a la educacinpopular, y que con la inclinacin de muchas ONGs alas soluciones tcnicas porun lado, y al trabajo de lobby por otro, ha perdido bastante relevancia. Loselementos del enfoque hacia el enipowerment, tanto en las ONGs orientadas ala pobreza como en las ambientalistas, parecen tener un papel particularmentesubordinado a los otros dos enfoques. Esto se debe a que hay una mayornecesidad de ayuda material directa en vista de la crisis sicial, pero tambin a latendencia a la despolitizacin de la ayuda directa y al traslado de los conflictospolticos a otros niveles con otros actores, a saber, las mismas ONGs.

    Las ONGs se encargan cada vez ms de la representacin de los intereses desu grupo-meta en las negociaciones con los entes pblicos. Por ejemplo, lasONGs urbanas elaboran propuestas para una poltica de descentralizacin, parafortalecer la democracia a nivel de la comunidad, privatizar la tierra en los barriospobres, establecer fondos para pequeos crditos, etc. Las ONGsambientalistas denuncian la destruccin del medio ambiente, influyen en laaprobacin de leyes ambientales, cte. Para la tareas como grupo de presin, lasONGs se apoyan en su propio trabajo de investigacin, con el cual se buscaobservar crticamente, volver transparentes y controlar tanto la poltica nacionalcomo las medidas de las organizaciones multilaterales. Siguiendo el lema deprotestas con propuestas, las ONGs no slo quieren protestar, sino tambinpresentar propuestas alternativas bien elaboradas en la negociacin conautoridades estatales. Esas propuestas se pueden exponer con un poder denegociacin an mayor cuando las ONGs se unen en redes (desde regionales ynacionales hasta internacionales).

    Las ONGs y el Estado: entre el conflicto, la armona y la dependencia. EnAmrica Latina se est desarrollando un proceso que Stahl describiacertadamente como la privatizacin de la crisis: conforme al Banco Mundial,la poltica social del Estado debe concentrarse antes que nada en losprogramas de ayuda social o de amortiguacin, mientras que los sistemasestatales de seguridad social, as como los sistemas de educacin y saludpblica, pueden privatizarse considerablemente (Stahl, p. 54). El alivio de la

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    pobreza tiene lugar a travs del llamado fondo social, que debe albergar uncarcter transitorio3 y que recibe la mayor parte de sus recursos de donantesmultilaterales y bilaterales. Los programas as financiados se orientan algrupo-meta y tienen sobre todo un carcter de asistencia salvo los programasde crditos en las reas de la construccin de viviendas y la pequea empresa.En consecuencia, tambin gran parte de ellos se desarrolla a travs de lasONGs, que de esa forma reciben abultados recursos financieros.

    Esas elevadas transferencias de recursos del Estado y las organizacionesfinancieras internacionales a las ONGs entraan, en primer lugar, el peligro deexonerar al Estado de sus responsabilidades de combatir las graves injusticiassociales mediante reformas estructurales y redistribucin, y establecer lasbases para un desarrollo sustentable mediante el desarrollo de los recursoshumanos. La estrategia que siguen las autoridades liberales es una divisin detareas segn la cual el Estado establece las condiciones bsicas precisas y lasorganizaciones privadas se encargan de la puesta en prctica de las medidascorrespondientes. Desde el punto de vista de las ONGs, esa divisin de tareasofrece tambin nuevas oportunidades, siempre y cuando no se dejendespolitizar y a travs de la cooperacin con el Estado busquen contribuirtambin al cambio de la condiciones bsicas. El nuevo objetivo puede serconfigurar los programas recin introducidos de forma tal que favorezcaneficazmente a la poblacin-meta.

    Una estrategia de mayor alcance para utilizar los recursos del Estado es la quesiguen las ONGs que trabajan en la constitucin de un tercer sectoralternativo, independiente del mercado (sobre todo del mercado mundial) y delEstado; un sector caracterizado por mtodos de produccin ecolgicos,sistemas mercantiles justos (sobre todo locales y regionales), sistemasalternativos de salud y educacin, variadas interrelaciones sociales ydemocrticas de la base, etc4. Basado en la autogestin, ese sector populareconmico aspira a reemplazar al Estado, al menos en parte, y a agrandar elcampo de accin de la sociedad civil as estructurada. Al mismo tiempo, comosector nicho depende de la proteccin del Estado, al menos mientras seestablece, del patrocinio estatal.

    Por lo tanto, quin utiliza a quin en la cooperacin entre el Estado y las ONGses algo que todava no est decidido. A pesar de las posibles ventajas para lasONGs, todava queda por saber qu intereses persigue la clase poltica yeconmica dominante al permitir esos campos de accin y cules mecanismos

    3 Puesto que segn la concepcin neoliberal la poltica social es superflua, si es que nocompletamente perjudicial, los programas para combatir la pobreza deben ejecutarsesolamente como una ayuda transitoria para franquear la dificultad, hasta que el crecimientoeconmico, activado por el ajuste estructural, elimine la pobreza mediante los efectos defiltracin. Que esa es una ilusin del Banco Mundial lo demuestra ya el hecho de que enBolivia, Chile, Costa Rica y Venezuela esos fondos sociales se establecieron como elementospermanentes de la poltica social (v. Koschtzke y Stahl).4 V. al respecto Mller (p. 21), Nerfin, Razeto y Razeto y Calgani.

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    usa para evitar un cambio general de las condiciones de predominio. Existencuando menos tres tcticas recurrentes para reconducir los espacios libres porlos que lucha la sociedad civil (movimientos sociales y ONGs) al caminoaceptable para la clase dominante:

    1) Controlar y guiar: la introduccin de leyes para las ONGs y del registro estataltanto de ONGs como de grupos de base (asociaciones de vecinos,cooperativas, organizaciones ambientalistas) se puede interpretar como unreconocimiento, pero se debe reconocer tambin como un intento de control.Por medio de la ley se fijan los objetivos y contenidos que guan la dinmica delas organizaciones por el camino deseado.

    2) Cooptar: la penetracin de las organizaciones de la sociedad civil, as comosu incorporacin y expropiacin poltica a travs de instituciones estatales ypartidos institucionales, es una prctica ideal para asegurar el poder contrapotenciales fuerzas de oposicin. Su dependencia financiera vuelveparticularmente susceptibles a las ONGs: la connivencia poltica con la polticagubernamental frecuentemente es la condicin bsica para los donativosfinancieros. A eso se aade muchas veces la infiltracin de las organizacionescon miembros del partido gobernante, el establecimiento de organizacionesparalelas, etc.

    3) Dividir y reprimir: la divisin de las diversas organizaciones de la sociedadcivil por medio del reconocimiento y favorecimiento de unas, y el descrdito deotras a travs de la propaganda, es otra estrategia del Estado. Todava seexcluye a las organizaciones desagradables tildndolas de subversivas; unprocedimiento que aprueban las organizaciones conformistas o dependientes.De esa forma es posible perseguir con medios represivos a las fuerzasopositoras ya aisladas, sin tener que temer que dentro de la sociedad civil surjauna solidaridad con los perseguidos. Al mismo tiempo se organizandeliberadamente ONGs particulares para dividir los movimientos sociales, porejemplo, para quebrar la oposicin a los programas de ajustes estructurales (v.Arellano-Lpez y Petras).

    Esos mtodos de manipulacin se aplican en igual medida al trabajo de lasONGs orientadas a la pobreza y al de las ONGs ambientalistas. Al caso destas ltimas se aade que la clase dominante se apropi tambin eficazmentedel concepto de ecologa. Es as que se cierran empresas con mrgenes deganancia en descenso alegando su contaminacin que tambin exista antes,por supuesto a pesar de la resistencia de sus trabajadores. Bajo el pretextoecolgico se desalojan barrios pobres y ese espacio se convierte despus enreas verdes para la clase alta. Se patrocinan centrales atmicas remitindosea la proteccin del clima. Y de esa manera el movimiento ecologista y sus ONGscorren el riesgo de que el poder manipule el sentido del concepto, antes de queel concepto pueda cambiar las relaciones de poder.

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    Las ONGs y los movimientos sociales: problemas de legitimacin en la base.Los esfuerzos de cooperacin de las ONGs con los organismos estatalesalcanzan particular conflictividad cuando chocan con los esfuerzos, a menudoms radicales, de los movimientos sociales, y stos directa o indirectamenteles quitan su legitimidad. No pocas veces los movimientos de base siguencaminos ilegales, aunque legtimos, para arrebatarle a la clase dominante susobjetivos, y de esa forma se encuentran en contradiccin con los planteosmuchas veces reformistas de las ONGs provenientes de la clase media.Dejando a un lado sus intentos de influir en los movimientos y amoldarlos a susconceptos, las ONGs con tendencia de representacin encaran una serie deinterrogantes para su legitimacin: a quin representan a fin de cuentas?;estn constituidas democrticamente?; qu posibilidades de influir en. lasdecisiones internas tiene el grupo-meta?; se legitiman solamente en base asus conocimientos tcnicos?; regresa la vieja ideologa de los cuadros enforma de una meritocracia?; quin determina los conocimientos correctosmediante el patrocinio financiero de las investigaciones?; el trabajo de grupode presin puede legitimarse con una argumentacin netamentecientfico-racional o las ONGs son las representantes de los pobres yexplotados sin tener que preguntarle a nadie?

    Actualmente la relacin con los movimientos sociales es un punto importante decrtica y desavenencia, tanto en las ONGs orientadas a la pobreza como en lasambientalistas. Mientras las organizaciones con tendencia a la habilitacin seencargan adems del fomento de la organizacin autnoma de la poblacin,otras ONGs se presentan orgullosamente como una fuerza poltica, cuandomenos con igualdad de derechos. Su autopresentacin como sector de lasociedad civil y fuerza social busca encubrir al mismo tiempo que ellas noson organizaciones de poblacin (Koschtzke, p. 55). Pero cuando las ONGs seconstituyen como fuerza autnoma, cuando prcticamente se emancipan de losmovimientos sociales para poder hablar con voz propia (Koschtzke, p. 61), sloles queda una base, aparte de los propios colaboradores: los donantes. Peroesa base financiera es precaria, especialmente ahora que tambin losmovimientos sociales comienzan a emanciparse de las ONGs y le piden a losdonantes su patrocinio directo (v. Ila 1993: 18).

    Por supuesto que adems de la rivalidad entre ellas, hay que sealar tambin laposible complementariedad entre las ONGs como fuerza social y losmovimientos sociales. Lgicamente no es incorrecto suponer que la mayora delas organizaciones de base no tienen las condiciones para el control deinstituciones nacionales o internacionales, como es el caso de ministerios deplanificacin o el Banco Mundial. Por otro lado, los resultados alcanzados con eltrabajo como grupo de presin (p. ej., la reformulacin de un proyecto del BancoMundial) slo pueden materiafizarse si los grupos de autoayuda los controlantambin dentro de las estructuras locales. Por consiguiente, la cuestin nopuede ser trabajo de lobby en lugar de trabajo de base: a lo sumo ambos vanjuntos.

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    En lo que se refiere a la reivindicacin de la representacin de intereses, losnuevos partidos y sindicatos antes mencionados captaron la atencin pblica araz del descrdito de los partidos establecidos. Muchas veces la poblacinconfa mucho ms en ellos que en las ONGs, ya que son tambin susorganizaciones (e igualmente muchas veces estn muy vinculados a lasorganizaciones populares). Estructurar la relacin con esos actores de lasociedad civil cada vez ms poderosos debera ser uno de los principalesnuevos desafos para las ONGs.

    Hacia un desarrollo urbano ecolgico desde abajo

    Hasta ahora no existe un plan de accin de amplio alcance para responder a lacrisis del medio ambiente urbano. Sin embargo, la mayora de los autores estde acuerdo en que tal estrategia debera aplicarse a nivel local. Cerdarecomend un programa ambiental aplicable a la base, denominado PrimaryEnvironmental Care. Anlogamente al Priniary Health Care, el programa sedistinguira por los siguientes principios: planteo que trascienda lo tcnico,incorporacin de la comunidad, descentralizacin, administracin sectorial ylocal, cooperacin de actores pblicos y privados, responsabilidad para lapoblacin, creacin de redes de servicios locales, nfasis en las medidas deprevencin. Para su implantacin deben construirse Primary EnvironmentalCare Centres, que como unidades tcnicas lleven a la prctica programasambientales conjuntamente con las comunidades, as como tambin entrenarhabitantes como inspectores ambientales que identifiquen posibles daos almedio ambiente e informen al respecto.

    Ese ambicioso programa es una primera propuesta concreta de cmo darnfasis el aspecto ambiental en el desarrollo urbano, desde la misma base. Sinembargo, su viabilidad es cuestionable considerando que la situacinambiental no tiene una primaca explcitamente alta en los problemas de lospobres urbanos. Por lo tanto, parece sensato comenzar por el estrecho vnculoentre pobreza y destruccin ambiental e impulsar el desarrollo de los barriospobres, incluyendo tambin aspectos ambientales. Mejorar el medio ambienteser entonces no slo una tarea sectorial sino una tarea transversal que seacometera en todas las reas del desarrollo del barrio (construccin deviviendas, infraestructura, pequeas industrias, salud, educacin, etc.). A esenivel, a travs de las medidas de muchas ONGs de diversos sectores, laproblemtica ambiental entr ya en el desarrollo de la base, con sus treselementos fundamentales:

    1) La educacin, en el sentido de adiestramiento por un lado y concientizacinpor itro. Adiestramiento, a modo de aprender las tcnicas para identificar yresolver los problemas (ecolgicos). Concientizacin, como reconocimiento delas correlaciones sociales y ecolgicas.

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    2) La organizacin de los grupos afectados por la pobreza y la destruccinambiental, como condicin necesaria para el cambio de las estructurassociales que causan y reproducen los problemas sociales y ecolgicos, y paraasegurar los cambios logrados mediante la creacin de institucionesadecuadas desde el nivel local hasta el internacional.

    3) El mejoramiento de la existencia, representado en avances materialesperceptibles y/o elevacin de la calidad de vida, a travs de medidas deautoayuda compatibles con el medio ambiente. La unin del mundo laboral y elmundo ambiental debera ser adems el mayor desafo en el espacio urbano.

    En ese sentido, junto al establecimiento de instituciones ambientalesespeciales, para el desarrollo urbano ecolgico es importante sobre todo quese incluya el aspecto de la compatibilidad con el medio ambiente en el trabajoprctico de los movimientos populares urbanos y de las ONGs que losrespaldan. Como facilitadoras de conocimientos, estas organizaciones tienenadems una posicin clave. En consideracin a sus medios limitados, lasorganizaciones ambientales sea como organizaciones de base u ONGsdeberan tambin entregarse menos a proyectos propios, limitadossectorialmente, y promover ms bien la conciencia y los conocimientosecolgicos, al igual que la coordinacin entre las organizaciones dedicadas aldesarrollo del barrio. Eso resultara decisivo para construir el nexo necesarioentre el combate a la pobreza y la conservacin ambiental.

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