Después de pasar un semestre dentro de la comunidad de Cristo de miravalle, este semestre nos hemos trasladado un poco más lejos, siguiendo la misma vía de San Juan, llegamos a un pequeño y silencioso barrio llamado San Francisco de Pinsha, una comunidad muy tranquila en la cual se comenta viven mas de 117 familias, en esta podemos observar desde la calle principal que existe una pequeña iglesia, una escuela y muchas casas de diferentes tamaños, materiales y acabados.

Al momento de bajar de los carros entramos a la escuela fiscal que estaba al frente nuestro, la "Escuela fiscal Gustavo Vallejo Larrea" en la cual nos dejaron pasar tranquilamente para observar y conversar sobre quienes eran y en que podíamos ayudar como grupo de Nutriología de la UIDE. Esta pequeña escuela, cuenta con una infraestructura de un piso en forma de "L", en el cual se pueden destacar la presencia de 4 paralelos en los cuales se ubican dos grupos de estudiantes de diferentes años, en cada aula se puede observar un pizarron de tiza liquida, pupitres de madera y una sola profesora . Existe también una cocina, bastante pequeña, en la cual se encuentra una cocina industrial y una olla en plena cocción, una refrigeradora y una amable señora con la cual nos presentamos y nos mostró uno de los alimentos que servían a los niños, atrás de ella se pudo observar un pequeño comedor donde los niños se sentaban a comer los alimentos que les daban. Al frente de esta cocina estaba también una pequeña oficina en la cual se observaron carpetas y papeles que supongo yo eran parte de la institución. Lamentablemente cuando uno sale al patio y observa a su alrededor se observan varios intentos de construcciones que han querido realizar los miembros de esta institución, algunos son solo montañas de tierras y otras son andamios que han dejado ya que no se termino ninguna construcción, existe un pequeño parque recreacional el cual cuenta con llantas y un columpio, a lado de ellos están los baños separados entre hombres y mujeres y es hasta ahí donde llega la escuela.

Logramos hablar con la directora general de la escuela, la cual muy desconfiada y confundida nos recibió, con ella tuvimos el agrado de presentarnos, decir quienes éramos y que hacíamos en este lugar, muchas de las cosas que nuestra facilitadora dijo no fueron completamente entendidas por ella, pero con la ayuda y colaboración de los estudiantes logramos que nos entienda que hacíamos ahí, pedimos a la señora hablar sobre las cosas que a ella más le preocupaban, y en las cuales nosotros podríamos ayudarles, nos comento varios puntos que a ella le parecen los más importantes y en los temas con los cuales ella creería que nosotros podríamos aportar, entre los temas que nos dio fueron el concienciar a los padres de familia de los alumnos sobre la distribución del dinero que distribuyen a sus hijos, ya que una de los problemas más relevantes que ella ha podido observar, ha sido la adquisición de comidas chatarras y dulces, otro de los temas que nos comento fue la relación que existe entre las familias, en la escuela se denota el maltrato entre niños que según ella son características que han aprendido de sus padres en las casas tomando muy en cuenta el hecho por el cual mucho de los niños tienden a pensar y comentar que sus madres son “las brujas y malas” de la casa y los padres los señores consentidores portándose por ende como niños que no hacen caso a las personas, y por lo tanto causan disturbios dentro del nucleo familiar el cual también despreocupa a los padres de las cosas que suceden en las escuelas, alejándose y dejando a la deriva a los niños, la directora nos comento que la mayoría de los padres de los alumnos de esta escuela no eran parte de esta comunidad sino de lugares aledaños tales como: Santa Rosa, San Juan, Santa Inés y que los niños que vivían en la zona, eran hijos de padres que arriendan cuartos por temporadas de trabajo y luego regresan a sus pueblos por lo cual no son

constantes. Más ligado al tema de la nutrición en los niños se observo la inexistencia del almuerzo escolar así como de los productos que normalmente eran dados por el gobierno para las escuelas fiscales, por lo cual todo ha tenido que ser reducido y pagado por los padres de familia.

Después de conversar con la directora, nuestros ojos vieron todos los alrededores de la escuela, el comportamiento de los niños, lo que hacían, jugaban, comían para tener una idea de donde estábamos y para que los niños también se vayan acostumbrando a nuestra presencia dentro de su escuela.

Posterior a nuestra visita dentro de la escuela, nos fuimos a dar vueltas por la comunidad, caminos por calles recién adoquinadas, las cuales fueron trabajo realizado gracias a mingas de los pobladores según nos comento Doña Rosita, nuestra nueva mama de la comunidad, quien nos presento más o menos el lugar en donde estábamos, donde podíamos ver la iglesia, como habían con gran esfuerzo conseguido que un alimentador de la Ecovía logre llegar a la comunidad, los pobladores y como han luchado por salir adelante como barrio. Nos mando a recorrer las diversas calles, para que nos ubiquemos y orientemos en el trabajo que queríamos realizar.

A continuación les presentaremos el mapeo comunitario: