Upload
others
View
0
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
VI Encuentro de Escuelas Sanatana Dharma
Marzo de 2018 - Zestoa
“El Método” 3
Vamos a invocar a los Jerarcas, a los grandes Maestros,
porque ¿qué somos nosotros sin los Grandes Maestros?
OM NAMAHA SRI PARAMA
RISHIBIO YOGUIBIAHA
SUBHAMASTU SARVA JAGHATHAM
OM, Gloria a los Grandes Ángeles y Santos,
que Ellos nos defiendan de todo mal
y nos conduzcan por el sendero de la
prosperidad material y espiritual.
Que nosotros y todos los seres alcancemos
la eterna y divina Felicidad.
Madhava
“El Método” 4
NAMASTE NARADEVAYA
Gloria a Ti, Naradeva
NAMO NARAYANAYA CHA
Gloria a Narayana que
BADARI VANA NATAYA
en los bosques de Badari
YOGUINAN PATAYE NAMAH.
de los Yoguis es el Señor, Gloria.
NAMASTE MITRA DEVAYA
Gloria a Ti, Mitra-deva
GURAVE BRAHMA VARCHASE
Guru de Divino Resplandor
NAMO MAHABDHYA SIDHEBYO GURUBYAS CHA
Gloria a los Mahatmas, Siddhas y Gurúes
NAMO NAMA
Gloria, Felicidad.
OM, OM, OM, HRIM, HIM, MAM, NAMAH
OM, OM, OM, HRIM, HIM, MAM, NAMAH
“El Método” 5
El Yoga es la mística del hinduismo; supone el paso del
culto a la Realización. La religión es culto, y en el culto hay
ideología, formas, emociones… La mística es la Verdad, la
Verdad no tiene ideología, tampoco formas. La Verdad es
Verdad y esta Verdad es la misma para todos.
Lo que actualmente se ha hecho o se está haciendo con
el Yoga nada tiene que ver con esta mística, con la Verdad.
Ocurre lo mismo con todas las místicas; una cosa es la
ideología, el cuento, la forma y otra la Verdad. Los místicos
cristianos eran perseguidos porque pasaban de ideologías y
buscaban la Verdad. Los místicos musulmanes, los sufís,
también son perseguidos por los ortodoxos, porque no
hacen lo que las ideologías dicen que hay que hacer. Los que
están más abajo, no tienen la comprensión suficiente para
entender a los que están más arriba, aunque sea solo un
paso más adelante.
La mística es el encuentro con la Verdad; es para
encontrar la Verdad y realizarla. La Verdad no tiene forma,
lo conforma todo. Cuando la Verdad quiere manifestarse, se
manifiesta de todas las formas.
La Verdad no la podemos identificar con una idea de lo
bonito; bonitas son las formas, lo que adorna, lo que ponen
nuestras emociones. La Verdad tiene que ver con la Esencia
y no con los atributos. Si perseguimos lo bonito nos
olvidamos de la ESENCIA.
El Método de nuestra Escuela es el mejor que existe en
el mundo; no se lo ha inventado nadie. Nuestro Método se
“El Método” 6
basa en la Enseñanza del Señor Narayana, director de los
destinos evolutivos del mundo, que en el Sanatana Dharma
Dipika dice:
“en este Kali Yuga el hombre alcanzará la felicidad y la
prosperidad solamente mediante la Meditación en el
Atmán”;
sin más, única y exclusivamente esto.
El Señor Narayana le encarga al Hamsa Yogui (el
Instructor de los Maestros) que diga cómo hay que hacer
para meditar en el Atmán.
Así, para cumplir con este
elevado propósito el
Hamsa Yogui nos trasmite
el Suddha Raja Yoga.
El Suddha Raja Yoga
tiene tres partes:
• BHÁVANA: Es la
Enseñanza. Nos enseña
qué es el Atmán, qué es
Brahmán, cuál es la Meta
y cuál es el Camino. Toda
esta Enseñanza se conoce como “YOGA BRAHMA VIDYA”.
Yoga = Unión, Brahma = el Ser, Vidya = Ciencia, Sabiduría.
Nosotros la llamamos “La Ciencia del Sendero”.
• KARMA: Son las diferentes Técnicas que tenemos
que utilizar para construir la Meditación. Para ello nos
“El Método” 7
apoyamos en las diferentes herramientas y sus técnicas
como son la Ciencia de la Meditación, la Ciencia del Sonido
(Mantras), Kundalini-Yoga, .... La Meditación no se da por sí
sola, tenemos que construir las condiciones para que se dé.
Esto constituye la Ciencia de la Meditación.
Para alcanzar la Meditación debemos construir las dos
únicas condiciones para que ella se dé: la Paz interior y el
Silencio. Tenemos que conseguir que el cuerpo físico deje de
molestar, que el cuerpo emocional se desconecte y hacer
callar también a la mente; y cuando los tres cuerpos han
desaparecido se da la Meditación.
• DHYANA, la Meditación: Llegados aquí ya no
tenemos que utilizar ninguna técnica, solo la Adoración, la
Entrega, la Rendición.
Ésta es la Enseñanza de Narayana. El Método de nuestra
Escuela está basado en esta Enseñanza; por eso podemos
decir que es el mejor que existe en el mundo, el Verdadero.
No quiere decir esto que en algún otro lugar no utilicen
también esta misma Enseñanza, puede que sí, en cuyo caso
también será la mejor.
Esta Enseñanza hay que ir adaptándola a los tiempos, a
nuestras capacidades de comprensión, a nuestro nivel
evolutivo… y esto va cambiando.
Se suele decir que hay que ser coherentes, pero hemos
de tener en cuenta que la coherencia tiene que ver con el
nivel evolutivo y, en estos momentos, muy pocas personas
“El Método” 8
están a la altura de sus expectativas mentales. Una cosa es
lo que se piensa y otra lo que se hace, y no hacemos lo que
pensamos porque no podemos; así de sencillo, no damos la
talla, no damos más de sí.
El hombre es lo que hace y si no hacemos las cosas
mejor es porque no podemos. Esto no quiere decir que
mañana no podamos dar más de sí. Y de eso se trata, ese es
el tema, llegar al máximo de la evolución humana. Ahora
utilizamos el 10% de la capacidad del cerebro y nos queda el
otro 90% por desarrollar, para llegar al límite máximo de
nuestra evolución. Ahora funcionamos con el 10% pero igual
pensamos con el 100%, pero actuamos con lo que tenemos,
que es el 10%, y no con lo que pensamos.
Por eso tenemos pensamientos muy elevados de PAZ,
AMOR, UNIDAD… y luego, a la hora de funcionar, no lo
hacemos desde esos pensamientos, sino que distan mucho
de ellos; actuamos como podemos y desde donde podemos,
expresamos lo que somos. Nuestros pensamientos y
nuestros actos no van de la mano.
Hablar y pensar sobre la PAZ, el AMOR, LA
COMPRENSIÓN... es muy fácil, pero luego a la hora de actuar
es muy diferente. A la hora de actuar no hay mentiras,
expresas lo que eres.
El YOGA es el mecanismo para acelerar el proceso de la
evolución humana. En la medida en que trabajamos con el
Yoga, vamos despertando y se va produciendo nuestra
“El Método” 9
evolución. Nuestro Método, pues, está basado en la
Enseñanza directa de Narayana.
Esto lo debemos tener muy claro; hay métodos por ahí
en los que la meta no está en la Meditación, está en las
técnicas; no hay Bhávana ni Meditación, están cojos y lo
llaman Yoga. ¡¡Que baje Narayana y lo vea!! Para que sea
Yoga debe de haber, como hemos dicho antes, Bhávana,
Karma y Dhyana. Es el Método que todos los Maestros
establecen y trabajan con él. Las técnicas son relativas (no
son un fin en sí mismo), lo importante es el Bhávana y la
Meditación.
Y para alcanzar la Meditación, como dice Krishna en el
Bhagavad Gita, hay que aplicar Abhyasa (el trabajo que hay
que hacer con la mente para enfocarla en la Meta a alcanzar
cada vez que se dispersa, así tantas veces como se vaya) y
Samya (mantener siempre presente en la mente la Meta a
alcanzar). No dice mediante Asanas, Pranayama…, dice
mediante Abhyasa y Samya. Si mantenemos siempre
presente en la mente la Meta a alcanzar, la mente se va
concentrando y esta concentración produce el silencio
mental llegando así a la Meditación y a la percepción del
SER.
El proceso y todos los pasos están así de claros; así de
fácil y así de sencillo. En esto se basa el método de nuestra
Escuela, en la Enseñanza y en la prescripción de Narayana y
del Hamsa Yogui.
“El Método” 10
Toda práctica del Yoga debemos realizarla contentos
porque vamos a trabajar para rendirnos al SER. Mediante
el estudio de Yoga Brahma Vidya, ya sabemos a qué nos
debemos de entregar, al SER. Después de Yama, después del
Estudio que me indica adonde tengo que llegar, al Ser, y
después de conquistar el contentamiento tengo que
sentarme: Asana. Luego empiezo a respirar para ordenar la
energía (Pranayama), luego hago Pratyahara, luego Dharana
(nos concentramos en la rendición al Ishwara). Toda la
práctica está basada en la Rendición al SER, al Atmán, al
Ishwara. Después alcanzamos el estado de Dhyana y de allí
llegamos al Samadhi.
El fundamento de una buena práctica se basa en:
✓ El conocimiento del Ishwara
✓ La rendición al Ishwara
✓ El Contentamiento
“El Método” 11
Todo esto según los dictados de los Grandes Seres, de
los Grandes Maestros.
Por lo tanto, YOGA es:
1. Conocimiento del Atmán mediante el YOGA BRAHMA
VIDYA
2. Percibir el Atmán en la Meditación
3. Realizarlo en el Samadhi
“El Método” 12
El lunes impartí una conferencia cuyo título, el sentido
de la vida, me está persiguiendo durante toda la semana y
no puedo sustraerme a seguir hablando de ello. Prometo
integrarlo con la propuesta que se nos ha hecho de hablar
sobre el método.
El sentido de la vida
La palabra sentido puede entenderse con sentidos (?)
muy distintos. Iré enumerando algunos de ellos,
asociándolos con símbolos, iconos.
• COLUMNA: Fundamento, Razón de
ser, Razón fundamental de la existencia,
Lógica, Motivo legítimo.
Frases que recogen este sentido: “Tiene mucho sentido
lo que expongo”, “No tiene sentido lo que hizo”.
La vida tiene sentido, no es un “sinsentido”. Tiene un
“sentido de fondo”, un “Razón de Ser” que está más allá de
nuestra pequeña razón, y de nuestros ‘pequeños sentidos’
cotidianos.
• FLECHA: Orientación, enfoque,
‘dirección’, tendencia, intención.
Frases que recogen este sentido: “ese
Kalki
“El Método” 13
coche viene en sentido contrario al nuestro”, “el sentido en
el que soplaba el viento era muy cambiante”, “el sentido de
su voto fue muy claro”.
Del mismo modo que un rio es siempre ‘empujado’ y
dirigido hacia el mar, la Vida siempre ‘empuja’ y dirige a los
seres hacia su despertar. Igual que el sentido de giro del
planeta tierra es fijo, el sentido de la Vida también está
fijado: la evolución de los seres.
• OJO: Capacidad, Facultad, Poder,
Órgano.
Frases que recogen este sentido: “Los
ojos son órganos de los sentidos”, “tiene un
gran sentido del humor”, “Pepe aguza el sentido cuando
salimos a por setas”.
La vida nos exige facultarnos, capacitarnos,
empoderarnos para ´buscarnos la vida´ y para ‘buscar la Vida
que somos’. Hemos de desarrollar los sentidos que nos
llevan hacia el exterior y también hacia el interior.
• CORAZÓN: Sentir, Sentimiento,
Sensible, Afectivo.
Frases que recogen este sentido: “Juan es
muy sentido”, “Su madre me dio un sentido pésame”.
Vivir es ‘sentirnos’ vivos. Podemos ‘sentir’ la vida desde
lo más visceral y físico, desde lo emocional y pasional, desde
la mente, o desde el Observador. Son ‘sentires’ de grados y
“El Método” 14
matices muy diversos; todos son desenvolvimiento de la
Conciencia.
Todo ello podemos asociarlo con nuestro método de
Yoga.
• COLUMNA: VERDAD - BRAHMAN
• FLECHA: LEY - DHARMA
• OJO: META (SUDDHA DHARMA)
ATMAN, CONCIENCIA
• CORAZÓN: DEBER (SWADHARMA)
SERVICIO-AMOR
• SOL: VIDA PLENA
Este sol representaría la consecuencia de haber
orientado yóguicamente los 4 sentidos descritos.
“El Método” 15
Es una ‘vida plena’, con Sentido, con una auténtica
‘Sensación de Vivir’. No es mera supervivencia, es una
‘super-vivencia’, una vivencia Superior.
El método Sanatana Dharma está basado en la
enseñanza de los Maestros e integra todos estos sentidos
que hemos descrito.
Por un lado, nos habla de la Verdad (Brahman): raíz y
fundamento de todo, lo que sostiene y compenetra todo, lo
que no cambia, etc.
Esa Verdad se manifiesta como la Ley (Dharma) que
lleva a todos los seres a la evolución.
La evolución tiene una Meta (Suddha Dharma), realizar
el Ser; facultarnos para
vivir establecidos en la
Conciencia (Atman)
que Somos.
También será
necesario atender a
todos los deberes que
comporta la existencia
humana. Primero, el
Deber de los deberes,
el que nos va a
posibilitar encontrar la
Meta: la meditación
diaria, que nos ‘re-une’ con lo esencial de nosotros mismos
“El Método” 16
(Atman). “Encontrar nuestro Sitio Interno” “Sentirnos Vida
Consciente”.
Después, el deber de Servir al mundo; “encontrar
nuestro sitio externo” (Swadharma). “Nadie puede servir
con calidad si no está bien servido”. El Servicio es el Amor
hecho obras; el Servicio nos humaniza. “Sentirnos vivos en la
Acción, en el Deseo y en el Conocimiento”.
Solamente con todos estos aditivos podremos acceder a
una vida plena, una vida consciente.
“El Método” 17
Comenzamos por la etimología de la palabra:
Método procede de una palabra griega “Methodos”,
que significa vía, camino para conseguir algo, para alcanzar
algún resultado, y el modo de realizarlo de forma
sistemática, los pasos a seguir.
Tanto en filosofía como en la ciencia se usa a menudo
esta palabra.
Y así se habla de método “deductivo”: extraer
consecuencias a partir de una proposición general; o
método “inductivo”: partiendo de hechos particulares
formular leyes generales.
Por lo tanto, tiene una conexión con lo futuro, pero ya
sabemos que lo futuro no es lo que va a pasar, sino lo que
hacemos ahora.
También podemos aplicar el sentido de la palabra al
pasado.
Escuchamos como en algunos círculos se habla de la
“casualidad” como la “razón” de la creación.
Esta forma de concebir el Universo parece como
que
Druva
“El Método” 18
condena, a quien la acepta como cierta, a una suerte de
pesimismo.
Si pensamos que todo aparece por casualidad, que todo
se da por azar, cualquier objetivo que a continuación se nos
proponga como bueno o digno de alcanzar, carece de
sentido.
Para qué vamos a esforzarnos si todo es azar, si no se ve
una continuidad ni en el origen, ni en la finalidad.
Podemos verlo de otro modo:
Cuando se nos propone que la Vida se manifiesta en
innumerables formas, que lo compenetra todo y que su
Voluntad como Conciencia es la de despertar, crecer y
expandirse … la esperanza, el optimismo y la alegría se
producen de forma natural.
“El Método” 19
Y esto lo podemos sentir como una fuerza difícil de
identificar en nuestro interior, que tiende a su
desenvolvimiento progresivo y que llamamos evolución.
Precisamente esta palabra deriva de “evolvere”:
desenvolver, para que “algo” se dé a conocer.
¿Qué significa esto que podemos sentir, de dónde
procede, a dónde conduce?
Las respuestas son conocidas desde siempre por los
Iniciados de la humanidad, que han guiado a los buscadores
sinceros de la Verdad, y que han mantenido el tesoro de
este Conocimiento a resguardo.
Y este Conocimiento nos habla del Propósito y del Plan
existentes.
Es decir, estamos aquí por algo y para algo, no por
casualidad.
El Propósito es conocer y realizar el Espíritu, del latín
“Spiritus”, Aliento de Vida, que suele aplicarse a toda
experiencia (espiritual) que nos conecta con algo profundo.
La humanidad siempre ha buscado trascender la
realidad cotidiana, siendo éste un rasgo probablemente
universal, y que se ha dado en todos los tiempos y culturas.
Y el Plan, el Método, en esta edad en la que
evolucionamos, es el que nos fue transmitido por Sri Krishna
en el Bhagavad Gita, donde nos habla de los cuatro Dharmas
o Leyes para acceder a la Realización espiritual:
“El Método” 20
• Conocimiento, Jnana
• Devoción, Bhakti
• Acción, Karma
• Síntesis, Yoga
El Método es Sanatana Dharma.
Vistos estos principios generales, me gustaría destacar
detalles más concretos del Método de enseñanza en nuestra
Escuela.
✓ Tenemos una Doctrina, antigua y siempre nueva, con
las claves que nos proporciona nuestro Maestro para
entenderla. Es propio de un Método con sentido no aceptar
ninguna teoría sin una previa indagación de su validez, tanto
de su contenido, razonable, como de su Origen.
“El Método” 21
✓ Tenemos procedimientos de trabajo de la tradición
oriental, que surgen de las experiencias acumuladas durante
largo tiempo, aunque se encuadren en contextos filosóficos,
culturales o religiosos específicos y distintos.
✓ Por lo dicho anteriormente, otro rasgo importante
de la Escuela es el trabajo de Madhava para “desideologizar”
la enseñanza. Aunque las ideologías, del tipo que sean,
religiosas, políticas, culturales, médicas, etc, puedan
producir una cierta satisfacción intelectual, y hasta
entusiasmo en ocasiones, a veces lo único que refuerzan es
la dispersión.
El trabajo meditativo, como encuentro con nuestra
Esencia, requiere dejar cosas para ganar en profundidad.
✓ Otro aspecto importante del Método Sanatana
Dharma es el humano. Deslumbrados por la idea de que
todo se dará por la “Gracia divina”, dejamos de lado el
factor humano, y así nos encontramos con una
espiritualidad maniquea y descompensada.
Una de las funciones del Método es hacer permeable la
estructura humana a esa Presencia, que es Conciencia,
creando mejores condiciones para el acontecimiento
espiritual. Por lo tanto, no debemos desentendernos, sino
comprender e implicarnos en nuestra vida cotidiana, en
nuestras relaciones, en la sociedad, en nuestra persona, en
nuestro cuerpo.
“El Método” 22
✓ Así, haremos converger y hacer coherente lo
científico con lo puramente Espiritual. Y además, con un
claro deseo de hacerlo lo más sencillamente posible.
A esto podemos añadir la experiencia acumulada a lo
largo de los años, con muchísimas personas de diferente
procedencia, condición y formación, que han ido
enriqueciendo la Escuela y depurado el Método.
Con estos ingredientes teórico-prácticos, más la labor
“invisible” del Maestro, y de los Maestros espirituales, lo
único que falta es dejar que la Palabra fecunde nuestra
alma, y la práctica nos abra a un nuevo horizonte, que
aunque no lo veamos, lo presentimos.
Recordando siempre que las grandes obras son hechas
no con la fuerza, sino con la perseverancia.
OM SHANTI
“El Método” 23
En el marco del Encuentro de Escuelas de YOGA
SANATANA DHARMA.
Buenos días a todos y todas. Agradezco una vez más la
oportunidad de poder expresar en palabras mi experiencia.
Me toca hablar del Método de nuestra Escuela.
El Método es un modo, una manera, lo que hay que
hacer para alcanzar un objetivo, un fin, una meta, etc.
En este sentido a mí se me ocurre decir que nuestra
Escuela tiene tres Métodos:
1. El de la Escuela Interna de Meditación “Suddha
Dharma Mandalam”
2. El Asthanga Yoga de los Sutras de Patanjali
3. Las tres Ciencias: la del Sendero, la de la Meditación
y la del Servicio
Al hilo de lo que estoy diciendo, me fijo en la puerta que
está al fondo, la puerta no es el marco, el marco no es la
puerta, y las discretas bisagras no son ni el marco, ni la
puerta. Tanto el marco, como la puerta, como las bisagras
forman parte de un todo, son UNO. Para que una parte
tenga sentido, se tiene que acompañar de las otras partes.
Rudra
“El Método” 24
He mencionado tres Métodos que pueden ser
independientes y que integrados tienen un mayor Sentido.
Resultando ser más ‘abarcativo’. Po lo tanto, resulta que los
tres son UNO.
No voy a comentar nada más del Método y no quiero
entrar en la naturaleza de cada uno de ellos. Solamente
decir que, un método, aun siendo excelente, no es nada ni
sirve para nada sin el “culo”. Sí, el culo, que en este sentido
va a resultar Divino. Ya sé que suena ordinario, pero para mí,
tiene sentido.
En cierta ocasión conversando con uno de mis hijos que
es estudiante, surgió la idea de que para hacer que los
estudios fueran fecundos había que aplicar la fórmula de las
tres CCC: culo, codos y cabeza; cualquiera de los presentes
que haya estudiado sabe a qué me refiero.
A nosotros lo que nos
ocupa es el YOGA, la
autorrealización y el
conocimiento profundo de
sí; nos toca aplicar la
fórmula de las cuatro Cs, o
sea, culo, coherencia,
comprensión y compasión.
• PRIMERA C – CULO: En este contexto suena
ordinario, sé que todos entendéis a qué me refiero; sí, a la
práctica. Posar esa parte del cuerpo sobre el cojín, el taco, la
banqueta… sentarse a Meditar, a estar y Ser. A estar en el
“El Método” 25
Ser. Yo personalmente opino que mantener una práctica de
Meditación de forma continuada en el tiempo es una gesta
heroica, y es que en el camino a la persona le va pasando de
todo. Esto me recuerda a Ulises, uno de los héroes
legendarios de la mitología griega, que aparece como
personaje en la Ilíada. El cine ha recreado muchas veces el
regreso al hogar, el origen de su viaje donde le espera el
descanso y su amada, el Amor original de su viaje de ida; se
conoce poco lo interesante de su viaje de vuelta. Para llegar
al origen tienen que superar él y su tripulación infinidad de
obstáculos: los gigantes de un solo ojo que amenazaban con
comérselos, la bruja que a través del confort, la comodidad
y la seguridad conseguía que olvidara el origen y la Meta,
sirenas enrocadas en un islote con canciones de seducción a
las que no podían resistirse los marineros para acabar
encallando en el islote y ser devorados por las salvajes
sirenas y por último, y ya en casa, la traición que le obliga a
seguir luchando.
Cada uno de nosotros de vuelta al origen, se enfrenta a
gigantes que amenazan con devorarnos. Si no, que cada cual
explore sus fantasías catastróficas, la comodidad del confort
del cojín, del taco. Nos adormece en la creencia de “ya está”
y nos dormimos en vez de despertar. ¿Y las sirenas?
¿Cuántas veces nos sentimos atraídos por personas, por
cosas y situaciones? Que aún sabiendo que son
perjudiciales, nos dejamos llevar contra las rocas…
Culo y lucha, lucha y constancia, constancia y claridad
“El Método” 26
de propósito (Meta) para superar los obstáculos de dentro y
de fuera sin perder de vista Ítaca, la tierra prometida de los
hebreos, Jerusalén, lo esencial, el Atmán.
• SEGUNDA C – COHERENCIA: A mi entender cierto
grado de incoherencia, incongruencia y alguna forma de
contradicción es
inevitable; incluso
bueno para la salud
mental. Sin embargo,
hay que decir que
cuanto más pequeño
sea el grado de
incoherencia, mejor.
Y, además, no
tendría que afectar a
lo esencial: la salud,
las relaciones
interpersonales, las sentimentales y por último al Yoga, la
Meditación y la Práctica.
Hablar es fácil, pensar más fácil todavía; hacer lo que se
dice y se piensa es un grado.
Se me ocurre decir, que hay cuatro tipos de discípulo:
1. El que conoce y no practica
2. El que conoce y práctica
3. El que conoce, práctica y enseña
4. El que conoce, no practica y enseña
“El Método” 27
Sacar vosotros las cuentas, hacer vosotros la valoración
de en cuál de ellos os incluís.
Lo cierto es que a lo largo del tiempo se pasa por
muchas etapas distintas; la vida es mucha tela. Hay veces
que estamos en hacer que las cosas funcionen, las clases, la
Escuela, la economía, la pareja, los hijos, las relaciones, la
salud, etc. Y así, nos olvidamos de funcionar nosotros.
Mi experiencia me dice que todos pasamos por esas
cuatro formas de estar en el discipulado dependiendo del
momento y, a su vez, si vamos en serio, si yo voy en serio,
me esfuerzo en establecerme coherentemente en ese punto
de equilibrio donde converge lo que digo, pienso, deseo-
necesito y hago.
• TERCERA C – COMPRENSIÓN: Cuando se llega al
Yoga y se sintoniza, se produce un efecto muy benéfico y
sanador que pasa por el autoconocimiento, el
autodescubrimiento y por la Práctica.
Es un estado de contentamiento y muchas veces de
euforia inconsciente. En estos momentos la Práctica va sola,
no cuesta, no se puede estar sin ella.
Con el paso del tiempo, la novedad y el entusiasmo
disminuye, la práctica es personal, individual, se medita por
la inercia que deja el entusiasmo, por la gran fuerza que fue
movilizada y ello empuja. Cuando hablo del tiempo, no
hablo de semanas, ni de meses, hablo de años.
Acabada la inercia, si se continúa practicando, muchas
“El Método” 28
veces es por Voluntad, por Deber. El trabajo sigue siendo
fecundo, sigue dando frutos y, a su vez, la sensación interna
cambia. No es lo que era y, en ocasiones, aún se duda de
poder alcanzar la Meta, de poder regresar a Ítaca. Si
persistimos surge una comprensión superior. Ya no medito
por entusiasmo eufórico, ni por inercia, ni por deber, medito
porque comprendo que mi experiencia vital pasa por ahí,
pasa por la Meditación. La Meditación se transforma, se
vuelve más flexible, es un gesto empático hacia uno mismo,
no importa si llego allí o allá. Importa estar y Ser, que es lo
mismo que decir estar en Ser. Todo ha sido necesario: la
euforia, la inercia, el deber… es imprescindible la
comprensión.
La compresión alcanza todas las etapas: la del culo y su
¿para qué?, la de la coherencia y su ¿para qué? Y, por
supuesto, la que le sigue a continuación, la de la compasión
y su ¿para qué?
• CUARTA C – COMPASIÓN: Compasión, que no con
pasión.
Hay una parte del Camino que inevitablemente se hace
con pasión, con vehemencia, con apasionamiento y con
apego. El apego que sea; cada ego tiene los suyos… La
pasión es lo que tenemos, con lo que contamos; o sea,
mejor con pasión, vivir, hacer, crear oportunidades… que
quedarnos quietos.
Si me muevo, muevo la energía, muevo la vida y creo
“El Método” 29
oportunidades. Es una Ley natural básica de la creatividad
fecunda; da igual que los objetivos sean egoístas, es lo que
hay.
Cuando se lleva tiempo en un camino de conciencia, de
autoconocimiento, de autorrealización, se comprende más
en profundidad por dónde pasa “La Liberación”, que el
Señor Buddha tanto mencionaba. Sí, pasa por el
desapasionamiento y, como consecuencia, por el desapego.
No he dicho en ningún momento que no haya que sentir,
no; yo no digo eso.
El desapasionamiento es un proceso emocional que
implica tanto a la conducta de lo que hago como a las
creencias de lo que pienso.
“El Método” 30
Para que este proceso tenga sentido, no es restar lo que
hay que hacer, sino sumar, sumar la Meditación, sumar un
profundo trabajo de desenmascarar al ego, sumar la tarea
de la reducción egoica, evitando caer en la negociación,
sumar el cultivar la virtud con sentido, con dirección y vivir
la vida.
La compasión es una forma de Amor que se va dando y
también provocando. Yo me esfuerzo consciente y
voluntariamente en cultivar la virtud. Comprendo que tiene
sentido hacerlo, contribuye a mi desapasionamiento y
facilita ser dueño de mí mismo. Todas las virtudes son
formas de Amor positivo: la serenidad paciente, la humildad,
la sinceridad, la ecuanimidad, el desapego, el coraje, la
acción con sentido y dirección. Si ahondamos en todas ellas
llegamos al Amor original, y la compasión está ahí también,
reside ahí, en esa parte de nosotros esperando ser
actualizada.
Para mí, la compasión no es sentir pena por los demás,
los perjudicados, los que sufren. La compasión es una
empatía que me hace sensible a los demás, puedo sentir lo
que siento, sin hacerlo mío, sin importarlo. Y a la vez, hacer
lo necesario para servir, ayudar, escuchar, enseñar, apoyar,
guiar abordajes más básicos como alimentar, curar, etc.
La compasión me activa otra forma de Amor que es el
perdón a uno mismo y a los demás. Es difícil perdonarme a
mí mismo si no me tengo compasión, si no comprendo que
tengo derecho a existir a pesar de los pesares y de los
“El Método” 31
errores, y más difícil perdonar a los demás y sobre todo
dependiendo de qué es lo que hay que perdonar.
De todas formas, perdonar no es una obligación, no es
un deber, es un derecho, es una acción, un gesto, una
decisión que uno hace si uno quiere. Perdonar es renunciar
consciente y voluntariamente al derecho de estar enfadado,
resentido, indignado, de odiar, de querer vengarse, para yo
quedarme en Paz. No lo hago por los demás, lo hago por mí.
Comprendo que hace más daño el odio al que odia que al
odiado. Sí, que nadie me quite el derecho a odiar; en todo
caso, después de haber odiado, voluntariamente renuncio a
ese derecho por Amor a mí mismo.
Esto me recuerda una película que vi hace unos años,
Patton. Después de mucha devastación, guerra, muerte y
desolación, el protagonista se hace estas reflexiones: “todo
esto ¿para qué? y ahora ¿qué voy a hacer?” Y se dice a sí
mismo: “tengo que caminar el sendero de la virtud, solo así
podré redimirme”.
No más por hoy. Aquí acabo la introducción de las
cuatro C.