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Universidad Nacional de Córdoba Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales Carrera de Posgrado en Manejo de Vida Silvestre Tesis de Maestría Modelo de gestión pública en el manejo del conflicto socioambiental entre producción agrícola y conservación de dos especies de fauna silvestre: paloma torcaza (Zenaida auriculata) y cotorra (Myiopsitta monachus), en la provincia de Córdoba Autor: MVZ. Katherine Pucha Cofrep Directora: Mgter. Daniela Tamburini Co-Directora: Ph. D. Sonia Canavelli Julio 2014

Modelo de gestión pública en el manejo del conflicto ...repositorio.educacionsuperior.gob.ec/bitstream/28000/1274/1/T... · En países latinoamericanos como Brasil y Venezuela existen

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Universidad Nacional de Córdoba

Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales

Carrera de Posgrado en Manejo de Vida Silvestre

Tesis de Maestría

Modelo de gestión pública en el manejo del conflicto socioambiental entre producción agrícola y conservación de dos especies de fauna silvestre: paloma torcaza (Zenaida auriculata) y cotorra (Myiopsitta monachus), en la provincia de Córdoba

Autor: MVZ. Katherine Pucha Cofrep

Directora: Mgter. Daniela Tamburini Co-Directora: Ph. D. Sonia Canavelli

Julio 2014

iii

AGRADECIMIENTOS

Expreso mi agradecimiento a la Biól. Tamburini D. y Dra. Canavelli S. por su constante

dirección, revisión, sugerencias y apoyo.

A la Universidad Nacional de Córdoba y el Programa de Maestría en Manejo de Vida

Silvestre. Al Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos de América

(U.S.F.W.S.) por el auspicio a esta maestría.

A los representantes legales de la Secretaría de Ambiente Córdoba, Secretaría de

Agricultura Córdoba y Agencia Córdoba Turismo, por la información y aportes brindados.

Al Econ. Correa R. Presidente de la República del Ecuador, por su importante programa

internacional de becas, para el fortalecimiento de talento humano. A la Universidad

Nacional de Loja por el aval de estudios.

Finalmente a todas las personas que de una u otra forma contribuyeron para la elaboración

y culminación de la misma

Este trabajo fue realizado gracias al financiamiento de la Secretaría de Educación Superior,

Ciencia, Tecnología e Innovación SENESCYT – Ecuador.

La Carrera de Maestría en Manejo de Vida Silvestre apoya y contribuye a la

implementación de la Convención del Hemisferio Occidental (1940) y a la Convención

sobre los Humedales (Ramsar 1971) en América Latina y el Caribe.

iv

RESUMEN

Se analizó la normativa vigente internacional, nacional y de la provincia de Córdoba

relacionada con el manejo del conflicto socio-ambiental entre producción agrícola y

conservación de dos especies de fauna silvestre: paloma torcaza (Zenaida auriculata) y

cotorra común (Myiopsitta monachus). El área de estudio se localiza en la provincia de

Córdoba. Se aportan datos explicativos desde las dimensiones jurídica, institucional y

política. Asimismo se reconocieron falencias o vacíos, lo cual permitió generar

información para la propuesta de un modelo de gestión más eficiente que prevenga el

conflicto socio-ambiental descrito. Se identificaron cinco acuerdos internacionales donde

Argentina es signataria de compromisos en el desarrollo sustentable y ambiental que tienen

un bajo impacto sobre la conservación de los recursos naturales ya que dependen de la

capacidad institucional para implementarlos; seis normas nacionales incluida la

Constitución Nacional y que a partir de ella las leyes de presupuestos mínimos constituyen

el instrumento que estructuran la política nacional y el umbral de protección ambiental; y

nueve normas de la provincia de Córdoba. En estas últimas existe contradicción entre leyes

que por un lado protegen la fauna silvestre y por otro declaran como plaga a las especies en

estudio. Desde el punto de vista normativo, el análisis muestra que éste ha sido

fragmentario y no se adecúa a criterios de sustentabilidad ambiental. No existe una

normativa integral que abarque la gestión de problemas ocasionados por los daños ni

conflictos que éstos producen entre actores, lo que a nivel institucional demuestra su

ineficiencia. Desde el punto de vista ambiental no se cuenta con estudios técnico-

económicos que determinen fehacientemente las pérdidas en los cultivos, así como

tampoco un análisis del concepto de plaga. Por otro lado se carece de planes de manejo

adecuado en relación a las actividades cinegéticas. En conclusión, el modelo de gestión

desarrollado en la provincia de Córdoba para abordar este problema no otorga respuestas

eficaces.

Palabras clave: Jurídico, institucional, político, plaga, cultivo, Córdoba.

v

ABSTRACT

MODEL OF PUBLIC MANAGEMENT IN THE HANDLING OF THE CONFLICT

SOCIOENVIRONMENTAL BETWEEN AGRICULTURAL PRODUCTION AND

CONSERVATION OF TWO SPECIES OF WILD FAUNA: TORCAZA DOVE

(Zenaida auriculata) AND PARROT (Myiopsitta monachus), IN THE

PROVINCE OF CÓRDOBA.

International, national and Córdoba province regulations related with socio-environmental

management conflict between agricultural production and conservation of two wildlife

species: the torcaza dove (Zenaida auriculata) and parrot (Myiopsitta monachus)

regulations were analyzed. Explanatory data was provided from the legal, institutional and

political dimensions also shortcomings or gaps were recognized, allowing generate

information for more efficient management model to prevent the described socio-

environmental conflict. Five international agreements which impose Argentina

commitments as a signatory of sustainable development and environmental were

identified, themselves have a low impact on the conservation of natural resources

depending on the institutional capacity to implement; six national standards including the

same National Constitution and from it the minimum standard laws that structure the

instrument of national policy and the threshold of environmental protection; and nine

standards in the province of Córdoba where there is contradiction between laws on the one

hand protecting the wildlife and other declared as pest species, between them our studied

species. From a policy perspective, this has been fragmentary and does not adjust to

criteria of environmental sustainability, there is no comprehensive legislation covering the

management of problems caused by damage or conflicts occur between these actors, which

at institutional level demonstrates inefficiency; and from an environmental point of view

there is no technical and economic studies that conclusively determine the crop losses, nor

an analysis of pest concept; and there is a lack of proper management in hunting activities.

Finally, the management model developed in the province of Cordoba to approach this

problem does not provide effective answers.

Key words: Legal, institutional, political, pest, crop, Córdoba.

vi

ÍNDICE

agradecimientos .................................................................................................................... iii

resumen ................................................................................................................................. iv

abstract ................................................................................................................................... v

INTRODUCCIÓN ................................................................................................................. 1

MÉTODOS ............................................................................................................................ 7

Área de estudio. ................................................................................................................. 7

Ubicación geográfica. .................................................................................................... 7

Características agroproductivas de la provincia de Córdoba......................................... 8

Características Ecológicas. ............................................................................................ 9

Cambios en los sistemas naturales ligados a las actividades agroproductivas ........... .10

Metodología ..................................................................................................................... 13

Búsqueda y revisión de información. .......................................................................... 13

Convenios y acuerdos internacionales. .................................................................... 13

Legislación vigente nacional y provincial. .............................................................. 14

Legislación Nacional. .......................................................................................... 14

Legislación de la Provincia de Córdoba. ............................................................. 14

Diagnóstico de la situación actual. .............................................................................. 15

Dimensión Jurídica. ................................................................................................. 15

Dimensión Institucional ........................................................................................... 18

Dimensión Política. ................................................................................................. 20

RESULTADOS ................................................................................................................... 21

Revisión de la información .............................................................................................. 21

Convenios internacionales. .......................................................................................... 21

Declaración de Río sobre medio ambiente y desarrollo, Naciones Unidas,

Río de Janeiro (1992). ............................................................................................. 21

Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) Río de Janeiro (1992). .................... 22

Objetivos de Desarrollo del Milenio – ODM-ONU (2000). ................................... 23

Acuerdo Marco sobre Medio Ambiente – MERCOSUR (2001). ........................... 23

Río + 20 (2012). ...................................................................................................... 24

Implicancia de los convenios y tratados analizados en la problemática

estudiada ...................................................................................................................... 25

Normativa vigente nacional. ........................................................................................ 26

Constitución Nacional Argentina (1994). ................................................................ 26

Decreto Ley de Defensa Sanitaria Agrícola N° 6.704 (1963) y Decreto

reglamentario N° 8.967 (1963). ............................................................................... 27

Ley Nacional N° 24.375 Convenio sobre la Diversidad Biológica (1994). ............ 28

Ley Nacional de Fauna N° 22.421 (1981) y Decreto Reglamentario 666

(1997). ..................................................................................................................... 29

Ley General de Ambiente N° 25.675 (2002). .......................................................... 30

Ley de presupuestos mínimos de protección ambiental de los bosques

nativos N° 26.331 (2007). ....................................................................................... 31

Implicancia de la normativa nacional en la problemática analizada. .......................... 32

Normativa vigente de la Provincia de Córdoba. .......................................................... 32

Constitución Provincial de Córdoba (2001). ........................................................... 33

Decreto Ley Régimen caza deportiva y protección de fauna silvestre N°

4046 (1958). ............................................................................................................ 33

vii

Ley de Sanidad Vegetal N° 4.967 (1968) y Decreto Reglamentario 6.373

(1979). ..................................................................................................................... 34

Ley de Medio Ambiente N° 7.343 (1985) y Decreto Reglamentario

Capítulo IX “del Impacto Ambiental” Nº 2.131 (2000) .......................................... 35

Ley de productos químicos o biológicos de uso agropecuario N° 9.164

(2004) y Decreto Reglamentario N° 132/05. ........................................................... 36

Ley de ordenamiento territorial de los bosques nativos Nº 9.814 (2010) y

Decreto Reglamentario 710 (2011). ........................................................................ 37

Decreto N° 1.751/11 Reglamentario del artículo 36 del Capítulo VI (de la

Fauna en sentido amplio) de la ley Provincial de Ambiente N° 7343. .................... 38

Otras normas relacionadas: Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón

N° 8.625 (1997) y Resolución de actividad turismo cinegético N° 1.115

(2012). ..................................................................................................................... 38

Implicancia de la normativa de la Provincia de Córdoba en la problemática. ............ 39

Modelo vigente de gestión pública .................................................................................. 40

Diagnóstico actual ....................................................................................................... 40

Dimensión Jurídica .................................................................................................. 40

Análisis de variables e indicadores ...................................................................... 40

Síntesis de la Dimensión Jurídica ............................................................................ 46

Dimensión Institucional. .......................................................................................... 48

Análisis de variables e indicadores. ..................................................................... 48

Síntesis de la Dimensión Institucional. ................................................................... 51

Dimensión Política. ................................................................................................. 51

Síntesis de la Dimensión Política ............................................................................ 53

Elementos a tener en cuenta para una nueva estrategia de gestión. ........................ 53

A nivel Jurídico. .................................................................................................. 53

A nivel Institucional. ........................................................................................... 54

A nivel Político. ................................................................................................... 55

DISCUSIÓN ........................................................................................................................ 56

RECOMENDACIONES ..................................................................................................... 61

BIBLIOGRAFÍA ................................................................................................................. 64

ANEXOS ............................................................................................................................. 70

1

INTRODUCCIÓN

Los sistemas de producción agrícola como cultivos de granos y cereales son una de las

actividades más importantes para la subsistencia del ser humano, pero también conllevan a

la disminución y modificación de sistemas naturales e intervención en el hábitat de la vida

silvestre (De Grazio 1978, Feare 1984). Esto puede provocar disminuciones o extinciones

locales de algunas especies o favorecer a otras que se adaptan con gran éxito a las nuevas

condiciones ambientales. Este último es el caso de algunas especies de aves, cuyas

poblaciones crecen y se hacen superabundantes, generando pérdidas económicas por los

daños que ocasionan en cultivos (Armando et al. 2010).

El número de especies de aves que causan daños en cultivos es relativamente

pequeño, pero sus impactos a menudo son importantes (Pinowski & Kendeigh 1977, De

Grazio 1978, Feare 1984, Bruggers et al. 1998). En Estados Unidos, por ejemplo, se estima

que las pérdidas atribuibles a aves como mirlos, patos y gansos en cultivos de maíz, arroz y

forraje, oscilan entre 50 y 100 millones de dólares (National Academy of Sciences 1978).

En Inglaterra y Holanda, la paloma torcaza (Columba palumbus) y los estorninos europeos

(Sturnus vulgaris) podrían causar daños que superarían los 2 millones de dólares anuales

(De Grazio 1978; Feare1984). En países latinoamericanos como Brasil y Venezuela existen

reportes de daño producidos por tordo renegrido (Molothrus bonariensis) en los cultivos de

arroz; esta especie ha sido reportada como plaga por su consumo frecuente de este cultivo

(Valencia 1985). En Colombia, se estableció que entre 1977 y 1978, del 3.4 al 12.7 % de

áreas entre 254 – 300 ha de arroz fueron afectadas por los daños mecánicos producidos por

otra especie de ave, la gallineta común (Gallinula chloropus), (Sedano 2003). Finalmente,

en países andinos como Perú, las aves más importantes señaladas como plagas agrícolas

incluyen palomas, jilgueros y gorriones, fundamentalmente por los daños que producen en

cultivos de quinua (Chenopodium quinua). La paloma torcaza (Zenaida auriculata), es

reportada en este país como la más común en las plantaciones, consume las semillas y

tumba las plantas con una disminución de rendimiento por ave del 60% que representa una

cifra mayor a la pérdida por insectos plaga (Robles et al. 2003).

En Argentina, algunas especies de aves silvestres son consideradas una limitante para

la productividad en cultivos anuales debido a los daños que causan en cultivos (Bucher &

2

Bedano 1976). Especies como la paloma torcaza (Zenaida auriculata) y la cotorra

(Myiopsitta monachus), han sido vinculadas a pérdidas en cultivos de girasol, soja, sorgo,

maíz, trigo y arroz en diversas regiones de Argentina (Bucher & Bedano 1976, Bucher

1984, 1992, Zaccagnini & Bucher 1983, Bruggers et al. 1998, Canavelli et al. 2008, Vitti

& Zuil 2012, Bernardos & Farrell 2013). Si bien los daños son difíciles de cuantificar, los

mismos serían más comunes e importantes en regiones donde el paisaje agrícola ha

cambiado por la expansión de la frontera agrícola o la introducción de nuevos cultivos en

lugar de usos ganaderos o mixtos, especialmente cuando se producen sobre tierras

previamente ocupadas por bosques (Bernardos & Farrell 2013). Este proceso de cambio,

denominado “agriculturizacion”, estaría entonces vinculado a la existencia de daños por

aves en cultivos.

El proceso de agriculturización en Argentina se basó, fundamentalmente, en la

ampliación de la frontera agrícola desde la región de la pampa húmeda hacia otras eco-

regiones, especialmente a partir de los años 70, entre ellas el Gran Chaco y el Espinal

(Manuel et al. 2005), y fue impulsado por el desarrollo científico y tecnológico y por las

políticas nacionales que, durante la década del 90, llevaron a una mayor apertura del

mercado con un proceso de modernización que tuvo gran impacto (Piñeiro 2003). Es así

como la estructura productiva y las relaciones del sector agropecuario con el resto de la

economía y la sociedad también se vieron afectados por estos cambios, con un marcado

proceso de concentración en el uso de la tierra, desequilibrios regionales, sociales y

productivos, que representan hoy limitaciones al crecimiento y desarrollo agropecuario

sustentable en el tiempo (Piñeiro 2003, Manuel et al. 2005). Estas transformaciones se

relacionan fuertemente con el impacto sobre los ecosistemas naturales, influyendo

directamente en la alteración y pérdida de la biodiversidad, desaparición de hábitats,

disminución de servicios ambientales y desplazamiento de pequeños campesinos (Bilenca

2000, Manuel et al. 2005). Estos procesos son más marcados en las regiones extra

pampeanas, donde los menores precios relativos de las tierras favoreció el avance de la

superficie agrícola sobre los bosques naturales, intensificándose los impactos sobre los

sistemas naturales (Manuel & Gallopin 2007).

Dado que el manejo sustentable de los sistemas naturales e intervenidos es de interés

común de toda la humanidad, la comunidad internacional está cada vez más preocupada en

mantener los hábitats naturales en el mejor estado de conservación posible, y aquellos

3

modificados con un manejo racional y sustentable, conscientes de las amenazas y riesgos

que conlleva su destrucción. En este sentido, a partir de la década del 90 y en especial con

la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo

(CNUMAD), efectuada en Río de Janeiro en 1992, se refuerza el debate sobre la situación

ambiental global y local, sus causas, las soluciones posibles y las acciones necesarias para

revertir las mismas. Asimismo el Convenio de Diversidad Biológica (1992), Objetivos del

Milenio-ONU (2000), Acuerdo del Medio Ambiente (2001), Río+20 (2012), entre otros,

buscan el desarrollo sustentable por medio de la conservación de la diversidad biológica y

reducción de los daños ambientales articulando políticas económicas, sociales y

ambientales. La propuesta de estas discusiones internacionales incluía la

institucionalización de la conservación de la diversidad y del manejo sustentable de los

agroecosistemas, a través de mecanismos que incorporasen estas temáticas en políticas,

planes y proyectos a nivel global y regional. Esto es, incluir el manejo de estos sistemas en

el contexto de la gestión pública regional y local, y las actividades productivas.

En este sentido, es la gestión pública ambiental el mecanismo que regula, favorece e

induce el desarrollo sustentable a través de actividades que corresponden al Estado y sus

instituciones; así, las problemáticas ambientales y la atención de las demandas sociales

pasan a formar parte en algún momento de la agenda de las instituciones (o motivan su

creación) (Juliá & Foa 2009a). Cabe mencionar aquí que la gestión pública ambiental es

una estrategia institucional administrativa y gubernamental; constituye el motor del Estado

para organizar y estimular la vida de la sociedad por medio de recursos tecnológicos,

fundamentales para asegurar las ventajas de la acción organizada que apoya, ordena y

favorece la aplicación de las políticas públicas (Uvalle 2002). La gestión pública

ambiental, cuyos componentes son los aspectos políticos, normativos y administrativos,

debe traducirse en un conjunto de acciones encaminadas a lograr la máxima racionalidad

en el proceso de toma de decisiones, a partir de un enfoque interdisciplinario que depende

del protagonismo del gobierno local para administrar la realidad o solucionar un problema

(Juliá & Foa 2009a). Esta debe tener como principal objetivo evaluar y programar el uso

del suelo y el manejo de los recursos naturales para armonizar las actividades productivas y

el desarrollo económico y social, con la integridad de los ecosistemas, evitando o

minimizando los impactos ambientales (Uvalle 2002).

4

En Argentina, en las últimas décadas, la institucionalidad y la legislación relacionada

con aspectos ambientales han experimentado un importante desarrollo por la creciente

presencia de organismos ambientales en las administraciones públicas en diferentes niveles

del Estado, y en el dictado de normas generales y específicas relacionadas con el ambiente

(Juliá & Foa 2009a). No obstante, se requiere de manera urgente que el Estado adquiera

mayor protagonismo en la planificación de los usos del suelo y en hacer cumplir normas de

manejo adecuadas y sustentables, especialmente en las regiones extra-pampeanas (Manuel

& Gallopín 2007). Asimismo, en relación a los modelos administrativos vigentes para la

gestión ambiental, se señala la necesidad de una estructura jurídico-administrativa que

permita un tipo de gestión integral e integrada del ambiente (Juliá & Foa 2009a). En este

sentido, dar cuenta de las formas en que los Estados llevan adelante sus modelos de gestión

frente a conflictos ambientales y productivos, requiere de la evaluación de la situación

actual, de tal forma que se conozcan los procesos administrativos y los elementos que

interviene en ellos (Tobar 1997).

En relación al manejo de los daños ocasionados por aves silvestres en cultivos, el

conocimiento del modelo de gestión de los problemas es particularmente crítico y

necesario, debido a que dicho manejo suele resultar en conflictos entre sectores de la

sociedad que perciben el problema y su manejo desde distintas perspectivas. Por ejemplo,

en Punta Indio (Buenos Aires) surgió hace unos años (2006-2007) un conflicto entre

productores orgánicos y convencionales por el uso de insecticidas para controlar cotorras

en sus nidos que, además de captar la atención de los medios, llegó a instancias judiciales

(La Nación 2006). Más recientemente en el año 2010, la iniciativa de un diputado nacional

por la provincia de La Pampa de crear un “Programa Nacional de Control Poblacional de

Palomas” (PRONACOPA) en el ámbito rural y periurbano del territorio nacional, reavivó

las discusiones en este tema. Estas son sólo algunas manifestaciones de un problema que

no encuentra actualmente respuesta en la normativa vigente, dado que la misma fue

elaborada hace décadas, basada en el concepto de “ave plaga” como instrumento legal

(Bucher 1992), sin incluir criterios de manejo basados en la sustentabilidad ambiental y

productiva.

Considerar a especies de aves como “plaga” presenta inconvenientes, ya que los

listados de especies declaradas como tal no son revisados periódicamente y al querer

cambiarlos los procesos son difíciles y lentos. Esta carencia de flexibilidad no condice con

5

las características de los problemas ya que una especie puede comenzar o dejar de ser un

problema de acuerdo con variaciones en las condiciones ambientales y de uso de la tierra.

Asimismo el estado de las poblaciones de estas especies de aves incluidas en los listados

puede ser interpretada de manera diversa y muchas veces contradictoria por los gobiernos

provinciales y el gobierno nacional, lo que lleva a veces, aún bajo una misma jurisdicción,

a la ejecución de políticas antagónicas al respecto tal como ha ocurrido con algunas

especies de loros silvestres, (Moschione & Banchs 2006). Finalmente, la declaración de

especies de aves como plaga implica la obligatoriedad de control aún en áreas donde las

especies no hacen ningún daño, obligando al Estado a proveer los modos para controlar las

especies, cuando en realidad no existen métodos adecuados para un control efectivo,

económicamente eficiente, y ambientalmente seguro a gran escala, ni tampoco información

certera de los daños producidos que justifiquen dicho control (Bucher 1992). Esto ha

generado situaciones de conflicto para los agentes de organismos provinciales encargados

de la aplicación de la ley de plagas pues, por un lado, por la ley (y algunos sectores de

productores) se ven obligados a proporcionar un método que no existe y, por otro, se

encuentran con que dicho método no existe y, las propuestas potenciales impulsadas desde

los gobiernos (ej: control letal con insecticidas no registrados como avicidas), son

rechazadas por algunos grupos de productores y ciudadanos en general (Anglada Marta,

com. pers.).

El presente trabajo tiene por objetivo aportar datos que permitan describir y proponer

sugerencias para el manejo del conflicto socio-ambiental entre producción agrícola y

conservación de dos especies de fauna silvestre: paloma torcaza (Zenaida auriculata) y

cotorra (Myiopsitta monachus) desde las dimensiones jurídica, institucional y política

dentro de un modelo de gestión pública en la provincia de Córdoba. Para ello, se analizó la

normativa vigente relacionada con el manejo de la vida silvestre y la producción agrícola a

nivel internacional y nacional. Además, a modo de estudio de caso, se analizó la normativa

específica de la provincia de Córdoba dado que en esta provincia la producción agrícola es

una actividad económica relevante, donde se verifican problemas relacionados con los

daños que ocasionan especies de aves silvestres en los cultivos de granos. Asimismo,

cuenta con los antecedentes de trabajos e investigaciones realizadas en este tema por

profesionales del Centro de Zoología Aplicada (UNC), las cuáles son referencia aún en

nuestros días para todo el país.

6

Se describió también el funcionamiento formal en relación a la existencia del

conflicto en la provincia de Córdoba. Este análisis permitió conocer de qué manera la

jurisdicción provincial ha formulado las políticas relacionadas con la problemática

abordada. En otras palabras, conocer en detalle el modelo de gestión vigente en la

provincia.

En función del análisis realizado, se pretende conocer si el modelo de gestión vigente

aporta elementos para el abordaje del problema mencionado, es decir, reconocer las

falencias o vacíos, con miras de generar aportes válidos para un modelo de gestión más

eficiente, que prevenga y evite conflictos, en lugar de provocarlos. Por esta razón, de

identificarse deficiencias normativas, institucionales y/o políticas, el trabajo

específicamente se propone sugerir recomendaciones para remediar dichas deficiencias. De

este modo, se espera este trabajo aporte lineamientos referidos a los aspectos legales e

institucionales, y por ende políticos, en relación a la gestión de la problemática planteada.

7

MÉTODOS

Área de estudio.

Ubicación geográfica.

El área en estudio es la Provincia de Córdoba (Fig.1) la cual forma parte de las 23

provincias en la República Argentina, ocupa una superficie de 165,321 Km2, lo que

representa el 4,4% del territorio nacional y el 5,9% de la Argentina continental, ubicándola

en el sexto lugar entre las jurisdicciones del país. Situada en el centro del país es la

jurisdicción argentina que limita con el mayor número de provincias: al norte y noroeste

con Santiago del Estero y Catamarca; al Sur con La Pampa y Buenos Aires; al este con

Santa Fe y al Oeste con San Luis y La Rioja. Su capital es la ciudad homónima, con una

población de 3,308.876 habitantes (INDEC 2010).

Desde el punto de vista de organización administrativa, se divide en 26

departamentos que a su vez se subdividen en pedanías. (Gobierno de la Provincia de

Córdoba 2013). La Ley de Regionalización Provincial N° 9206, reconoce en cada

departamento a una Comunidad Regional integrada por los municipios y comunas en

forma voluntaria.

La administración ambiental en Argentina se basa en los niveles de gobierno que se

trate (Nación, Provincia, Municipio) y a la jerarquía otorgada a la temática por parte de los

funcionarios de gobierno en el marco de las políticas ambientales fijadas (Juliá 2001).

8

Fig. 1. Ubicación geográfica de la provincia de Córdoba en el territorio nacional (Gobierno de la Provincia de Córdoba 2013).

Características agro-productivas de la provincia de Córdoba.

Córdoba participa de la estructura productiva pampeana que la inserta en el comercio de

granos y carnes para el mercado nacional e internacional. Existen polos industriales-

agrícola-ganaderos, que corresponde a las ciudades más importantes del interior de la

provincia, como San Francisco y zona de influencia con industria agroalimenticias de valor

internacional, así como Villa María y Río Cuarto con industrias agro-metálicas (Álvarez et

al. 2004).

La provincia es una importante productora de granos. Se caracteriza principalmente

por cultivos de soja, maíz, trigo, sorgo y girasol. Además, se destaca la producción de

maní, debido a que concentra prácticamente la totalidad de la producción nacional (85%).

En los años 2007/08 se registraron 7,794 millones de ha sembradas con los principales

cultivos, significando aproximadamente el 26% del total de superficie destinada a estos

cultivos a nivel nacional. Es la principal provincia productora de soja y maíz, aportando en

9

2007 y 2008 el 28% y 40% respectivamente del total producido en Argentina (Ghida &

Sánchez 2009).

La producción de soja se concentra en la zona centro y este; la producción de girasol

se aglutina en la zona sur y la de maní en la zona centro-sur de la provincia. La producción

de cultivos hortícolas, frutales, industriales y de plantas aromáticas, medicinales y

condimentarias, también ocupa un lugar importante en la economía provincial, se destacan

también la producción de papa, ajo, batata, olivo, durazno, algodón y orégano. A nivel

nacional se observa la importancia en hortalizas y plantas aromáticas (Ghida & Sánchez

2009).

Con respecto a la producción ganadera bovina, de acuerdo a los Censos Nacionales

Agropecuarios (CNA) de 1988 y 2002 existían en el territorio cordobés 7,103.074 cabezas

y 6,104.883 respectivamente, verificándose una disminución del 14%. Esta poco

significativa disminución frente a un proceso de notable agriculturización podría explicarse

mediante la recurrencia de un cambio en el manejo de los planteles, con nuevas tecnologías

en los procesos de cría e invernada (feed lot o engorde intensivo) y/o un corrimiento de la

frontera ganadera (Hocsman & Preda 2005).

Características Ecológicas.

Situada en el centro del país, el territorio de la provincia de Córdoba constituye una región

dominada por climas templados. Su relieve y circulación atmosférica local determinan dos

subtipos: uno pampeano en todo el sector oriental de la provincia y uno de transición,

hacia el centro del territorio. La aridez aumenta en sentido este-oeste y determina un

amplio sector de características áridas en el noroeste provincial (Cabrera 1976).

Los biomas xerófitos, de vegetación espinosa, leñosa y achaparrada predominan en

todo el territorio provincial. Desde el punto de vista fitogeográfico, en la provincia se

encontraban representadas formaciones boscosas correspondientes a las regiones Chaqueña

(subregiones Chaco Árido, Serrano y Semiárido), Espinal y Pampeana (Cabrera 1976).

En el Chaco Árido, al noroeste de la provincia, se destacan la Planicie Occidental y

las Salinas Grandes. En la primera, la vegetación original eran bosques cuyo dominante

10

fisonómicos era el quebracho blanco (Aspidosperma quebracho blanco). Estos ecosistemas

fueron profundamente modificados por las actividades humanas durante finales del pasado

siglo, originando matorrales de sustitución y bosques secundarios (Cabido & Zak 1999,

Cabido et al., 2005). Desde la planicie occidental hacia el este, se presenta la depresión de

las Salinas Grandes en un gradiente de concentración salina, determinando la aparición

paulatina de especies halófilas como jumes y cachiyuyos, así como zonas desprovistas de

vegetación (Cabido & Zak, 1999).

Al este de la subregión del Chaco Árido se ubica el Chaco Serrano, que comprende

el cordón central de las sierras de la Cumbre de Gaspar, Grande, Achala y Comechingones

y el cordón occidental con las sierras de Serrezuela, Pocho y Guasapampa. Se caracteriza

por la presencia de bosques de horco quebracho (Schinopsis marginata), acompañado por

molle de beber (Lithraea molleoides), coco (Fagara coco), tala (Celtis chichape) (Red

Agroforestal Chaco Argentina 1999).

Hacia el noreste de la provincia, está presente la subregión del Chaco Semiárido,

donde se destacan las zonas de la Planicie Oriental y la depresión de Mar Chiquita. Al

suroeste de la provincia se encuentra el Espinal con formaciones vegetales características.

Las mismas presentan bosques bajos de especies leñosas xerófilas, siendo el caldén

(Prosopis caldenia) la especie arbórea más representativa; los bosques alternan con

sabanas y con estepas graminosas. Hacia el sudeste de Córdoba se extiende la región

pampeana, con llanuras suavemente onduladas y serranías de poca altura, predominio de

gramíneas y ausencia de árboles. Los suelos de ambas regiones son aptos para la

agricultura, ganadería y explotación maderera, es por ello que la vegetación original ha

sido prácticamente destruida (Cabrera 1976).

Cambios en los sistemas naturales ligados a las actividades agro-productivas.

Gran parte de la geografía ha sido modificada profundamente por la acción antrópica y

explotación agropecuaria, siendo sistemáticamente reemplazada la vegetación natural en la

estepa pampeana, en el espinal y más recientemente en el Bosque Chaqueño del Norte

provincial. Las regionalizaciones fitogeográficas resultan insuficientes para entender la

dinámica ambiental gracias al avance de la frontera agropecuaria que se asocia con

procesos de degradación de suelos, desmontes, incendios, contaminación por

11

agroquímicos, etc., que a lo largo del tiempo han producido fuertes cambios sobre los

sistemas naturales del territorio (Barchuk et al. 2010).

La agriculturización se efectivizó sobre el monte y pastizales naturales, o bien por el

desplazamiento de la ganadería a zonas marginales (Hocsman & Preda 2005). Además de

afectar la biodiversidad, este proceso ligado a la expansión de la soja como principal motor

de cambio, generó concentración económica, modificación y debilitamiento de las

estrategias campesinas, favoreciendo la descampesinización. A expensas de los

ecosistemas nativos y de las comunidades campesinas, se está consumando una de las

mayores transformaciones de capital natural a capital económico en la historia de la región

(Cáceres et al. 2010).

La superficie de cultivos anuales en la provincia aumentó un 56% entre 1998 y 2002

(CNA), en detrimento de la superficie ocupada por cultivos perennes, forrajeras anuales y

perennes, y por reemplazo de sistemas naturales. La búsqueda por parte de las empresas

familiares de maximización de ingresos y acumulación de capital, fue conduciendo un

proceso de intensificación de la producción a través del consumo de insumos industriales.

La veloz y masiva adopción de la soja se debió en parte a la mayor rentabilidad, en

comparación con la ganadería y otras actividades agrícolas. La agriculturización y en

especial el cultivo de soja, se introduce en la zona acompañado de un paquete tecnológico

de la siembra directa, con uso sistemático de agroquímicos (Glifosato), semillas

transgénicas, intensificación del uso maquinaria agrícola, y del uso del suelo, con

disminución en las rotaciones (Hocsman & Preda 2005).

Así es como Córdoba contribuyó al aumento del área sembrada del país entre

1994/95 y 2001/02, con 2 millones de ha. El cultivo de soja de 1º ocupaba en 1988 unas

1,063.906 ha y 2.112.645 ha en 2002, en tanto que la soja de 2º pasó de 255,930 ha a

1.168.473 ha (mostrando un incremento en la superficie del 99 % y 356 %

respectivamente). En cuanto a la evolución del cultivo de trigo se registró un total de

510,946 ha en 1988 y 1,273.226 ha en el 2002 (un 149 % de aumento). Estas

consideraciones son importantes dada la vinculación entre la producción de soja de 2º y

trigo relacionado al sistema productivo agrícola dominante, que desarrolla ambos cultivos

en un mismo ciclo productivo y en la misma superficie (Hocsman & Preda 2005).

12

Este aumento en la implantación de soja de 1º y de 2º se produjo en todas las

regiones de la provincia (periodo 1988-2002). El mayor y altísimo grado de variación

verificado para zona lechera del Centro-Este se debe al desplazamiento y disminución del

número de tambos. También se observan niveles extremos de desarrollo de producción

sojera para el área agrícola-ganadera central (específicamente para los Dptos. Colón y Río

Primero) con una variación del 8,815% y 8.412% respectivamente para la soja de 2º. Otros

índices destacados se mencionan para Traslasierra (oeste provincial) con un incremento del

7,2865% (soja de 1º) y el alarmante registro de los departamentos extra pampeanos del

noroeste cordobés (Ischilín y San Javier) con una variación de 22,612% y 26,3336%

respectivos para el mismo tipo de cultivo (Hocsman & Preda 2005).

Este impresionante proceso de agriculturización propició la devastación de los

bosques nativos, que ocupaban originalmente el 71,4% del territorio provincial, alcanzado

la cobertura actual sólo el 4,9% del territorio; la vegetación nativa remanente comprende el

13% de la superficie. Los últimos relictos de bosque se encuentran en las zonas más áridas,

al oeste provincial; en el resto del territorio, la desertificación es superior al 35% (Barchuk

et al. 2010).

Los distintos modos de uso de los ecosistemas no sólo suponen una tensión entre los

distintos actores sociales con mayor poder respecto de otros más vulnerables. El conflicto

social involucra diversas normas o regulaciones, cuyo cumplimiento o incumplimiento

condiciona a unos y benefician a otros. Los conflictos socio-ambientales lejos de ser

mediados o resueltos, parecen haber sido facilitados por las diferentes normas nacionales y

provinciales relacionadas al aprovechamiento y protección del bosque nativo (Tapella,

2012).

La legislación provincial en relación al manejo y conservación de los bosques

nativos, como la Ley provincial de Bosques y Tierras Forestales Nº 8066/91 y Ley de

prohibición de desmontes totales Nº 9219/05 (para mencionar solo las más recientes), no

impidieron la devastación de las masas forestales naturales.

Luego, la sanción de la cuestionada ley para la Protección de los Bosques Nativos de

Córdoba (Nº 9.814/2010) que, además de contradecir el espíritu de la Ley Nacional de

Presupuestos Mínimos (Nº 26.331/07) que le dio origen, promueven una ambigua idea del

13

aprovechamiento sustentable y sobre todo, pone en duda el poder real o simbólico para

dirimir cómo se van a manejar, y en beneficio de qué intereses, los servicios eco-sistémicos

que ofrecen los bosques. Dado que el avance de la frontera agropecuaria ha continuado

sobre los bosques, se destaca una clara contradicción entre las políticas ambientalistas

surgidas en algunos sectores del gobierno, y las medidas que adopta el mismo gobierno

para sostener el crecimiento económico en base a la industrialización de los recursos

naturales (Tapella 2012).

En virtud de la manera por la cual se llega a la Ley, no sorprende que privilegie los

intereses de los sectores más concentrados de poder económico (asociados a CARTEZ –

Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona y la Sociedad Rural

Argentina). El desconocimiento y desvalorización de los procesos de consulta, debate y

construcción colectiva evidencian la vigencia de un modelo de desarrollo que exacerba la

existencia de conflictos preexistentes (Tapella 2012).

Metodología

Para la elaboración de este trabajo se realizaron las siguientes tareas:

Búsqueda y revisión de información.

Se realizó la búsqueda y revisión de la normativa vigente relacionada con la problemática

abordada. Para cada una se realizó una síntesis y se estableció jurisdicción y autoridad de

aplicación.

Convenios y acuerdos internacionales.

Se analizaron los siguientes convenios y acuerdos internacionales de los que Argentina es

signataria, teniéndose en cuenta para su estudio sus objetivos, organismo de aplicación en

Argentina y fecha de publicación:

Declaración de Río sobre el medio ambiente y el desarrollo, Naciones Unidas, Río de

Janeiro 1992.

Convenio sobre la Diversidad Biológica (aprobada por Ley 24.375/1994 )

14

Objetivos de Desarrollo del Milenio 2000 (hasta 2015 ODM-ONU)

Acuerdo Marco sobre Medio Ambiente del MERCOSUR 2001 (aprobado por Ley

Nacional N° 25.841/2003)

Río+20, Conferencia de las Naciones Unidas sobre desarrollo sostenible, Brasil 2012.

Legislación vigente nacional y provincial.

Se revisó y analizó la normativa nacional y provincial vigente relacionada con la temática

abordada. Para cada norma se estableció su implicancia con respecto a los objetivos

propuestos y se determinaron los artículos relacionados con la temática analizada,

organismo de aplicación, fecha de publicación o sanción. A continuación se detallan las

normas nacionales y de la provincia de Córdoba analizadas:

Legislación Nacional.

Constitución Nacional de Argentina, 1994.

Ley de Defensa Sanitaria Agrícola N° 6.704/63 y Decreto reglamentario N° 8.967/63.

Ley Nacional de Aprobación del Convenio sobre Diversidad Biológica N° 24.375/94.

Ley Nacional de Fauna N° 22.421/81 y Decreto reglamentario sobre conservación de la

fauna silvestre N° 666/97.

Ley General del Ambiente N° 25.675/02.

Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos N°

26.331/07.

Legislación de la Provincia de Córdoba.

Constitución Provincial de Córdoba, 2001.

Decreto Ley de Regulación de la Caza Deportiva o Comercial N° 4.046/C/58.

Ley de Sanidad Vegetal N° 4.967/68 y Decreto Reglamentario N° 6.373/79.

Ley de Medio Ambiente N° 7.343/85 y Decreto Reglamentario Capítulo IX del Impacto

Ambiental Nº 2.131/00.

Ley de Productos químicos o biológicos de uso agropecuario N° 9.164/04 y Decreto

Reglamentario N° 132/05.

15

Ley de ordenamiento territorial de los bosques nativos Nº 9.814 (2010) y Decreto

Reglamentario 710 (2011)

Decreto N° 1.751/11 Reglamentario del artículo 36 del Capítulo VI (de la Fauna en

sentido amplio) de la ley Provincial de Ambiente N° 7343.

Otras normas relacionadas: Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón N° 8.625/97 y

Resolución de actividad turismo cinegético N° 1.115/12.

Diagnóstico de la situación actual.

Se analizó la dimensión Jurídica y la dimensión Institucional así como del funcionamiento

institucional formal vinculado al conflicto planteado. Esto se llevó a cabo a partir de la

modificación de la metodología propuesta por Juliá y Foa Torres (2009), a los fines de

adaptarla a los objetivos planteados en este trabajo. Del análisis de las dimensiones

Jurídica e Institucional se buscó conocer de qué manera la jurisdicción provincial ha

formulado sus políticas públicas (dimensión Política), y finalmente dar cuenta de la gestión

pública sobre el problema en cuestión. Los pasos seguidos se detallan a continuación:

Dimensión Jurídica.

Para el análisis de la dimensión jurídica se identificaron cuatro variables: 1) Inserción de

las políticas públicas ambientales y productivas en el sistema normativo; 2) Regulación

específica del conflicto socio-ambiental de fauna silvestre y sistemas de producción

agrícola; 3) Forma de conceptualización general y, 4) Definición de actores para la gestión.

Estas variables expresan o precisan determinada política pública ambiental y

productiva, referidas en diferentes cuerpos normativos (constitución provincial, leyes

generales y específicas, decretos reglamentarios), tanto a nivel nacional como provincial. A

continuación se define cada variable que pueda explicar esta dimensión y los indicadores

de formulación de políticas públicas:

VARIABLE 1: Inserción de las políticas relacionadas al conflicto socio-ambiental

entre la producción agrícola y la conservación y/o manejo de dos especies de aves

silvestres (Zenaida auriculata y Myiopsitta monachus) en el sistema normativo. Esta

variable busca dar cuenta de las modalidades por las cuales la normativa nacional y

16

provincial ha incluido a la temática en su ordenamiento jurídico. Se analiza a partir de dos

indicadores:

Indicador 1: inserción constitucional de la política del conflicto mencionado: si ha

sido efectuado de manera explícita (si se mencionan a la gestión, manejo o políticas del

conflicto socio-ambiental); implícita (si se hace referencia a políticas ambientales y

agrícolas o económicas); inexistente (sin menciones de ninguno de estos aspectos).

Indicador 2: inserción en ley general del ambiente en jurisdicción nacional y

provincial. Se busca saber si la inserción ha sido: de forma explícita (si se mencionan a la

gestión, manejo o políticas relacionadas al conflicto socio-ambiental); implícita (cuando se

hace referencia a la conservación de la fauna silvestre y/o a aspectos relacionados con la

producción agrícola); inexistente (sin menciones de ninguno de los aspectos anteriores,

aunque se haga referencia de manera general a la protección y conservación de la fauna por

ej.).

VARIABLE 2: regulación específica relacionada con la fauna silvestre

(conservación, manejo) y de la producción agrícola. Muestra la manera en que las políticas

ambientales y de producción agrícola fueron gestionadas e introducidas en el sistema

jurídico.

Indicador 1: tipo de normativa específica adoptada: algunas leyes nacionales marco

dan la posibilidad que las provincias se adhieran a ella o, en su caso, dicten su propia

regulación. Así se distinguen tres formas de dictado de normativa específica: adhesión

plena a una ley nacional; adhesión semiplena (con reglamentación propia de la Provincia

que se trate); regulación propia. Para este punto se consideraron como normas marco la

Ley Nacional de Conservación de Fauna Nº 22.421 y el Decreto-Ley de Defensa Sanitaria

Agrícola N° 6.704/63.

Indicador 2: época de sanción de normativas específicas. En este caso se identifican

mediante números (arbitrariamente asignados) a cada década:

1. período entre 1940 y 1950

2. período entre 1951 y 1960

17

3. período entre 1961 y 1970

4. período entre 1971 y 1980

5. período entre 1981 y 1990

6. período entre 1991 y 2000

7. período entre 2001 y 2010

8. período desde 2011

Indicador 3: forma de conceptualización general del conflicto estudiado. La

legislación relacionada a la problemática estudiada suele realizar un primer acercamiento

general a la definición de que aspectos son requeridos en una especie de fauna para ser

considerada plaga. Así, y de acuerdo a la manera en la que las normas de la temática

conceptualizan el conflicto, se consideran dos modalidades: Amplia (refiere a especies de

la fauna silvestre que podrían causar daños no sólo en la producción agrícola sino también

sobre aspectos como la salud humana y consecuencias sobre los ecosistemas); Restringida

(cuando hace referencia a daños en la producción agrícola de una forma específica).

Indicador 4: definición concreta. Identificar si las normas de la temática (tanto las

relacionadas a la producción como a la fauna silvestre) definen los siguientes términos:

especie de la fauna silvestre como plaga, daño/perjuicio (en cultivos, producción agrícola,

ecosistemas). Se consideraron dos maneras posibles de diferenciar una definición:

Concreta (definiciones claras y precisas) y Genérica (definiciones vagas, poco claras a los

fines de la aplicación de la norma).

Indicador 5: existencia de normativa complementaria de leyes de presupuestos

mínimos. Frente a la sanción de leyes de presupuestos mínimos ambientales con

posterioridad a la reforma constitucional de 1994, este indicador intenta dar cuenta de la

incorporación en las jurisdicciones locales de normativas complementarias. En este caso se

tuvo en cuenta la Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques

Nativos N° 26.331/07.

VARIABLE 3: estrategias de control y fiscalización establecidos en cada normativa

específica de la provincia.

18

Indicador 1: tipo de instrumentos (sanciones)

Económicos (multas)

Mixto (económicos + incentivos + suspensión de actividades, etc.)

VARIABLE 4: definición de actores para la gestión, designados en normativa

específica.

Indicador 1: según el carácter tradicional de los actores establecidos, autoridad de

aplicación:

Actores gubernamentales

Actores no gubernamentales.

La información utilizada para responder este punto fue obtenida de fuentes

secundarias, del análisis de la normativa, y de entrevistas a funcionarios de la

administración pública. Las entrevistas semi-estructuradas, realizadas por medio de

cuestionarios personales permiten calificar las respuestas de cada entrevistado (Guber

2001). Cada cuestionario se estructuró en dos partes: información general, y preguntas

específicas acerca de normativa vigente, reformas de ley, formas de aplicación de la

normativa, sistemas de control, sanción y fiscalización, gestión de políticas públicas

ambientales, y de producción agrícola y turismo, contradicción entre normas, difusión, etc.

Las mismas fueron aplicadas a funcionarios de la Secretaría de Ambiente, de la Secretaría

de Agricultura y de la Agencia Córdoba Turismo.

Dimensión Institucional

Para el análisis del aspecto institucional, se determinaron dos variables: 1) denominación

de institución u organismo específicamente encargado de gestionar la temática y 2) lugar y

jerarquía asignada al área dentro de cada administración. Éstas hacen referencia a la

presencia de las políticas públicas en el sistema estatal mediante la creación o asignación

de áreas destinadas a gestionarla: Ministerio, Secretaría, Subsecretaría, Dirección, Área,

Gerencia.

19

La información acerca de la Dimensión Institucional relacionada con aspectos

administrativos y de gestión en relación a la problemática planteada y del funcionamiento

formal en relación a la existencia del conflicto se obtuvo a partir de fuentes secundarias y

entrevistas realizadas a funcionarios de la gestión pública. A continuación la explicación

de cada variable con sus respectivos indicadores:

VARIABLE 1: denominación de institución u organismo específicamente encargado

de gestionar la temática.

Indicador 1: nivel de especificidad del organismo:

Alto: cuando más allá de la jerarquía que tenga dentro de la administración, lleva un

nombre o denominación en forma específica, por ejemplo Dirección de Conservación de

Aves Silvestres, Dirección de control de plagas, etc., aunque tal denominación sea

compartida (por ejemplo Dirección de Control y Fiscalización de animales plaga ).

Medio: cuando el nombre del organismo se denomina de forma general, por ejemplo

Secretaría de Ambiente, Dirección de Fauna Silvestre, etc.

Bajo: cuando lleva otra denominación no comprendida en las dos anteriores.

VARIABLE 2: lugar y jerarquía asignada al área dentro de cada administración.

Indicador 1: según si se encuentra dentro de un organismo o en una institución no

específica. Asimismo, se considera la jerarquía del organismo del que depende: Alto (si

depende directamente de organismo específico por ejemplo una dirección dependiente de

la Secretaría de Ambiente o Secretaría de Agricultura); Bajo (con dependencia indirecta de

alguno de estos organismos o con dependencia de un organismo no relacionado con el

conflicto socio ambiental).

VARIABLE 3. Función del organismo. Si entre las competencias asignadas se

especifica o menciona la gestión del conflicto en estudio.

Indicador 1: Los criterios utilizados fueron: específico (si se menciona la gestión del

conflicto socio ambiental entre la producción agrícola y aves silvestres específicamente),

20

general (cuando se mencionan problemas entre la producción agrícola y especies plaga de

manera genérica), no se menciona (cuando no existen referencias al respecto).

Dimensión Política.

Del análisis de las dimensiones jurídicas e institucionales se logró conocer de qué manera

la jurisdicción provincial ha formulado sus políticas públicas relacionadas con la

problemática abordada. En otras palabras, conocer el modelo de gestión vigente.

Juliá y Foa Torres (2009b) entienden la formulación de políticas ambientales como

“el conjunto de esfuerzos por precisar, tanto en enunciados que buscan ser lo más claros

posibles como en actividades específicas, un mandato, proposición o política ambiental

general mediante diferentes mecanismos institucionales y jurídicos”. Por otro lado, la

implementación de estas políticas se refiere a aquel conjunto de acciones que buscan

plasmar en el territorio a las políticas ambientales formuladas y hacer cumplir la política

general enunciada a través de diferentes instrumentos de gestión de índole jurídica o

institucional.

21

RESULTADOS

Revisión de la información

A continuación se consigna una acotada síntesis de acuerdos y tratados internacionales, y

normas nacionales y provinciales relacionadas con la temática estudiada; los mismos se

ordenan cronológicamente, salvo las Constituciones nacional y de la provincia de Córdoba

que se consignan en primer lugar por su jerarquía normativa. Información más detallada de

cada norma se consigna en los correspondientes anexos.

Convenios internacionales.

Existen acuerdos y convenios internacionales que imponen a Argentina compromisos con

el desarrollo sustentable y las políticas ambientales (Anexo I).

Declaración de Río sobre medio ambiente y desarrollo, Naciones Unidas, Río de Janeiro

(1992).

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CNUMAD),

conocida como Cumbre para la Tierra, desarrollada en Brasil en 1992, reunió 72 gobiernos

y aprobó tres grandes acuerdos:

1. Agenda o programa 21, un plan de acción mundial para promover el desarrollo

sostenible.

2. Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, un conjunto de

principios que definen los derechos civiles y obligaciones de los Estados.

3. Declaración de principios relativos a los bosques, directrices para la ordenación más

sostenible de los bosques en el mundo.

Además dos instrumentos con fuerza jurídica obligatoria:

1. Convención Marco sobre el Cambio Climático, Protocolo de Kyoto 1997.

2. Convenio sobre la Diversidad Biológica.

22

Se definieron derechos y obligaciones de los Estados respecto a aprovechar sus

propios recursos sin causar daños al medio ambiente de otros Estados y la eliminación de

la pobreza y reducción de diferencias en los niveles de vida en todo el mundo. Se

proclamaron 27 principios cuyo objetivo busca establecer una alianza mundial nueva y

equitativa mediante la creación de nuevos niveles de cooperación entre los Estados, los

sectores claves de las sociedades y las personas, procurando alcanzar acuerdos nacionales

en los que se respeten los intereses de todos y se proteja la integridad, el sistema ambiental

y desarrollo mundial, los cuales deberán constituir la parte integral del proceso y no

considerarse en forma aislada por medio de leyes eficaces que reflejen el contexto

ambiental y de desarrollo. En la Agenda 21 se plasmaron criterios, y medidas políticas y

económicas para la conservación, manejo y uso sustentable de los recursos naturales del

planeta, entre otros aspectos, estableciéndose la necesidad de una legislación nacional que

guíe la implementación de políticas para el uso sustentable de la tierra y la conservación de

todas las formas de vida. Argentina, por ser signataria de este acuerdo, se comprometió

formalmente a hacer esfuerzos para implementar las recomendaciones propuestas.

Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) Río de Janeiro (1992).

En vigencia desde 1993, representa el primer instrumento jurídico internacional que

establece derechos y obligaciones de los Estados parte en materia de cooperación científica

y tecnológica. Reconoce que la conservación de la diversidad biológica es de interés

común de toda la humanidad y parte integrante del proceso de desarrollo (Bloch 2006). Sus

objetivos son: 1) conservación de la diversidad biológica; 2) utilización sostenible de sus

componentes o recursos biológicos y 3) distribución justa y equitativa de los beneficios

obtenidos del uso de los recursos genéticos.

Este convenio propone la elaboración de estrategias, planes o programas para la

conservación y utilización sostenible de la diversidad biológica, la adopción de medidas

para la utilización de los recursos naturales, ayuda a las poblaciones locales para preparar y

aplicar medidas correctivas en las zonas y el fomento de la cooperación entre sector

público y privado en la elaboración de métodos para la utilización sostenible de los

recursos. El convenio fue firmado por el Estado argentino en 1992, y ratificado por el

Congreso Nacional a través de la Ley Nº 24.375/94. Como resultado de esto, en 2003

Argentina presentó su Estrategia Nacional de Biodiversidad (aprobada por Res. SAyDS

23

91/03), elaborada con la participación de numerosos organismos gubernamentales y

ONG´s (ver apartado sobre Normas Nacionales).

Objetivos de Desarrollo del Milenio – ODM-ONU (2000).

Estos objetivos de desarrollo (ODM) nacieron como resultado de la Cumbre del Milenio de

las Naciones Unidas celebrada en el año 2000 en Nueva York; fueron desarrollados con la

participación de 189 países miembros y firmados y aprobados por unanimidad, con el

compromiso de eliminar la pobreza extrema y lograr el desarrollo sostenible como máxima

prioridad hasta el año 2015. Estos ODM se establecieron en 18 metas y más de 60

indicadores, que orienten la labor de organizaciones que promueven el desarrollo. Uno de

estos objetivos, el objetivo 7, busca garantizar la sostenibilidad del medio ambiente e

incorporar principios de desarrollo sostenible en las políticas y programas nacionales. Se

plantean como metas, incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y

los programas nacionales y reducir la pérdida de recursos y diversidad biológica; para ello

se apoya en indicadores como los índices de deforestación, cambio climático, pérdida de

diversidad biológica, especies en peligro de extinción, entre otros. En el reporte de este

objetivo se afirma que se necesitan mayores esfuerzos para proteger la biodiversidad pues

la extinción de especies y la amenaza a recursos hídricos y marinos no se detiene (ODM

2000).

Acuerdo Marco sobre Medio Ambiente – MERCOSUR (2001).

El Mercado Común del Sur MERCOSUR integrado por Brasil, Argentina, Uruguay y

Paraguay, es un proyecto internacional que tiene como objetivos la libre circulación de

bienes, servicios y factores productivos entre países, el establecimiento de un arancel

externo común, la adopción de una política comercial común, la coordinación de políticas

macroeconómicas y sectoriales entre los Estados partes y la armonización de las

legislaciones para lograr el fortalecimiento del proceso de integración. (MERCOSUR).

En este contexto, el tratado es básicamente comercial pero también establece que la

conformación de un mercado común debe alcanzarse preservando el medio ambiente. La

Reunión Especializada de Medio Ambiente (REMA) constituyó el primer antecedente

institucional para el desarrollo de la temática ambiental que se convertiría en el Subgrupo

24

de Trabajo N° 6 “Medio Ambiente del Grupo Mercado Común”, cuyo objetivo consiste en

formular y proponer estrategias y directrices que garanticen la protección e integridad del

medio ambiente. Para el año 2001 se aprobó el Acuerdo Marco de Medio Ambiente

(Decisión N° 2/01 del Consejo del Mercado Común). Argentina lo incorporó a su

ordenamiento jurídico por medio de la Ley 25.84/04 (Bloch 2006).

Este acuerdo pone de manifiesto el compromiso del país con el desarrollo

sustentable, protección del medio ambiente y aprovechamiento de los recursos disponibles

mediante la coordinación de políticas sectoriales, tratamiento prioritario de las causas de

problemas ambientales, articulación de las dimensiones económicas, sociales y

ambientales, armonización de las legislaciones y la necesidad de la participación de la

sociedad civil que reafirme la cooperación para la implementación de los compromisos

internacionales.

Es importante destacar que en los anexos del acuerdo se especifica su aplicación en

temáticas de fauna y flora silvestres, bosques, conservación del suelo, ecoturismo, residuos

peligrosos y legislación ambiental.

Río + 20 (2012).

En la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (UNCSD) Rio+20,

realizada en Rio de Janeiro en 2012, participaron jefes de Estado y otros representantes de

alto nivel que centraron su interés en dos temas: 1) Economía verde, bajo el contexto de

sustentabilidad y erradicación de la pobreza y, 2) Marco institucional sobre desarrollo

sostenible los cuales fueron focalizados en un documento político llamado “El futuro que

queremos”.

El futuro que queremos, busca definir vías hacia un desarrollo económico, social y

ambientalmente sostenible: reconociendo los derechos de la naturaleza como prioritarios,

mejorando la seguridad alimentaria, afirmando políticas de una economía verde, apoyando

medidas para enlentecer, detener y revertir la deforestación y degradación forestal, entre

otros. Estos lineamientos deben ser incluidos en programas y políticas en todos los niveles,

de conformidad con la legislación, circunstancias y prioridades nacionales.

25

Este convenio tuvo por objeto renovar el compromiso político firmado por Argentina

veinte años después de la primera cumbre histórica de Río de Janeiro en 1992.

Implicancia de los convenios y tratados analizados en la problemática estudiada

A pesar que Argentina es signataria de importantes tratados y convenios internacionales;

éstos por sí solos tienen un bajo impacto, en la práctica, sobre la conservación de los

recursos naturales, ya que deben ser operativizados a través de políticas públicas, proyectos

y programas nacionales.

Esto es, los mencionados instrumentos pueden acordar con la normativa del país (y

en consecuencia ser implementados como una ley), o puede requerir que el gobierno

realice un seguimiento específico, presente un informe ante un organismo internacional u

otro país. De esta manera, el tratado puede asignar a los gobiernos un rol en la

implementación que no tenían anteriormente, o puede requerir un cambio en la legislación

y generar su propia normativa.

En relación a esto, en 1994 Argentina reformó su Constitución y puede observarse la

influencia de la Declaración de Río (1992) al incorporar conceptos de desarrollo

sustentable en el texto del art. 41, y posteriormente en la Ley de Ambiente 25.675 (ver

apartado de normas nacionales). Se destaca también la elaboración de la Estrategia

Nacional de Biodiversidad (aprobada por Res. SAyDS 91/03), nacida a partir de la

aprobación del Convenio de Diversidad Biológica en 1992.

Otros tratados comprometen a Argentina a un sistema de comercio justo que proteja

al medio ambiente (como el MERCOSUR), en armonía con el convenio de Diversidad

Biológica; sin embargo aún no existe un procedimiento que se ajuste a las condiciones

actuales del país, siendo los objetivos priorizados de forma general, lo que significa que la

implicancia de este conjunto de normativas internacionales dentro del tema en estudio

aparecen como indirectas.

La incorporación de estas temáticas entonces, en las políticas públicas ambientales

dependen de la capacidad institucional para implementar las obligaciones del tratado;

también puede proporcionar importante información sobre la factibilidad del cumplimiento

26

en la práctica, y qué medidas de fortalecimiento se justifican para asegurar dicho

cumplimiento.

Normativa vigente nacional.

Para el análisis de la normativa nacional se partió de la Constitución Nacional Argentina, y

posteriormente de normativas nacionales que incluyen cinco leyes y un decreto, que se

relacionan con protección de fauna y producción agrícola. Más detalles de las normas se

encuentran en el Anexo II.

Constitución Nacional Argentina (1994).

La Constitución Nacional Argentina tiene entre sus objetivos “promover el bienestar

general y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y

para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”.

Como se mencionó antes, a partir de la reforma de 1994, esta Carta Magna introduce en su

regulación la protección ambiental estableciendo el derecho de todos los habitantes a gozar

de un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las

actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las

generaciones futuras así como el deber que tienen de preservarlo. Para ello la Nación

deberá dictar las normas que contengan los presupuestos mínimos de protección, y a las

provincias las necesarias para completarlas, sin que alteren las jurisdicciones locales.

En este sentido y a partir de la incorporación de este artículo se define la

responsabilidad de la nación en cuanto a su facultad de dictar los presupuestos mínimos de

protección ambiental, constituyendo una importante decisión política que dirime las

competencias entre nación, provincias (y municipios) en cuanto a las competencias

ambientales.

Por otro lado, delega a las provincias el dominio originario de los recursos naturales

existentes en sus territorios. Esto es, el manejo y gestión en el caso particular de este

estudio de las poblaciones de la fauna silvestre, sus cambios e incidencia en sistemas

agrícolas (por cambios a otros usos de la tierra de sistemas naturales) por ejemplo,

27

corresponden a cada provincia. Éstas deben generar sus propias normativas y además

adaptar las existentes a las leyes de presupuestos mínimos que la nación dicte en cada

temática. En este sentido son las leyes de presupuestos mínimos General de Ambiente N°

25.675/02 y de Bosques Nativos Nº 26.331/07 las relacionadas directamente con la

temática tratada en este estudio, debiendo la provincia de Córdoba adoptarlas y adecuarlas

a su cuerpo normativo y generar las nuevas legislaciones que sean necesarias, como la de

Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos 9.814/10.

Decreto-Ley de Defensa Sanitaria Agrícola N° 6.704 (1963) y Decreto reglamentario N°

8.967 (1963).

En agosto de 1963, se sancionó con fuerza de Ley el Decreto Nº 6.704 de Defensa

Sanitaria Agrícola, cuyo principal objetivo es defender la producción agrícola en todo el

territorio de la República contra animales, vegetales o agentes perjudiciales de cualquier

origen biológico. Esta norma establece que la autoridad de aplicación (en la actualidad el

SENASA) determinará los agentes causales de daños en la producción como

“perjudiciales”, determinando los métodos de control a implementar.

Por tal motivo prevé autorizaciones o facultades para quienes apliquen este decreto

como así también, las responsabilidades y obligaciones de los propietarios o tenedores de

vegetales o productos derivados de los mismos. Este organismo hará la nomenclatura de

los agentes perjudiciales y podrá declararlos plagas cuando puedan considerarse tales por

su carácter extensivo, invasor o calamitoso. En estos casos se dará a conocer los métodos

aconsejados por la técnica agroquímica para erradicarlas o establecer sobre ellas un

adecuado control. Asimismo, indica que las personas están obligadas a efectuar (por su

cuenta, dentro de los inmuebles y/o medios de transportes que posean u ocupen), las

medidas que el organismo de aplicación determine para destruir las plagas.

Esta norma, vigente aún (sancionada en 1963), destaca entre sus considerandos “la

necesidad de actualizar la normativa vigente en la materia a fin de contar con un

instrumento legal eficaz de contralor de la sanidad agrícola, acorde con los nuevos sistemas

de lucha y los conocimientos científicos en relación a las plagas de la agricultura”. En el

mismo año, fue reglamentada por el Decreto Nº 8.967 que establece que los organismos de

aplicación podrán designar, de común acuerdo, comisiones departamentales o de partidos,

28

integradas por un mínimo de tres miembros, dando preferencia a aquellos propuestos por

entidades locales representativas de productores, para colaborar en la organización y

coordinación de la lucha contra las plagas agrícolas (declaradas como tales en el artículo 2°

del Decreto Ley N° 6.704/1963).

La Disposición 116 (de 1964) de la Dirección de Lucha contra Plagas, completa el

mencionado reglamento con un listado de especies consideradas plaga para la agricultura.

Allí se incluyen numerosas especies animales y vegetales, entre las que se encuentran

especies de aves, como el loro hablador (Amazona aestiva) que enfrenta problemas de

conservación en la actualidad.

Ley Nacional N° 24.375. Convenio sobre la Diversidad Biológica (1994).

En setiembre de 1994 el Gobierno Nacional sancionó la Ley Nº 24.375 de aprobación del

Convenio de Diversidad Biológica. Fue reglamentada por Decreto Nº 1.347/97, designando

como autoridad de aplicación a la SAyDS.

Como políticas clave derivadas de este Convenio y a partir de su aprobación,

Argentina diseñó la Estrategia Nacional de Biodiversidad. Ésta fue coordinada por la

SAyDS, en colaboración con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la

Administración de Parques Nacionales (APN) y el Comité Argentino de instituciones

adherida a la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN). Fue aprobada por Res. SAyDS

91/03. La Estrategia propone garantizar la conservación y utilización sostenible de los

recursos biológicos, la reducción al mínimo de los efectos adversos para la diversidad

biológica derivados de las actividades productivas y la participación equitativa de todos.

Dentro de esta estrategia existe un capítulo directamente relacionado con el tema de esta

investigación, “Diversidad biológica y agroecosistemas”, cuyos objetivos son evaluar y

monitorear el estado de la diversidad biológica en estos sistemas, su importancia ecológica

y económica, y el impacto ambiental de las distintas prácticas de uso agropecuario,

sistemas de producción y proyectos de desarrollo y minimizar la pérdida de diversidad

biológica, a través de medidas de prevención o mitigación. Asimismo hace un enunciado

acerca de las actividades agropecuarias como base de la economía argentina que pueden

asegurar un manejo sostenible de la diversidad biológica en los agroecosistemas, siempre y

29

cuando se revierta el proceso de deterioro y se logre un ordenamiento del uso de los

recursos naturales con fines productivos con una visión a largo plazo, entendiendo que las

ventajas relativas pueden desaparecer muy rápidamente si las tendencias actuales

continúan, por lo tanto puntualiza concientizar a la población sobre la relación entre

calidad de vida, manejo sostenible y conservación de la biodiversidad.

Asimismo crea la Comisión Nacional Asesora para la Conservación y Utilización

Sustentable de la Diversidad Biológica (CONADIBIO), integrada por representantes de

organismos nacionales, gobiernos provinciales, organizaciones no gubernamentales e

indígenas, del sector científico-técnico y que deberá cumplir funciones de asesoramiento

sobre la materia. En 2010 se inició el proceso para poner en marcha esta Comisión, cuyo

rol fundamental sería asesorar al Secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable en temas

vinculados a la implementación del Convenio de Diversidad Biológica. Esto incluye dos

tareas fundamentales: la revisión y actualización de la Estrategia Nacional de

Biodiversidad, y el apoyo en la elaboración de las políticas y posiciones que lleve la

Argentina a los organismos y foros internacionales.

En el marco de este trabajo, Córdoba debiera trabajar fuertemente para incorporar y

aplicar los lineamientos y enunciados de esta Estrategia en la normativa local; sin embargo

es difícil identificar las acciones realizadas en este sentido, dado el impresionante avance

de la frontera agropecuaria sobre los sistemas naturales, y por ende sobre la diversidad

biológica.

Ley Nacional de Fauna N° 22.421 (1981) y Decreto Reglamentario 666 (1997).

Esta norma tiene como objetivo declarar de interés público la fauna silvestre que habita el

territorio de la República Argentina, así como su protección, conservación, propagación,

repoblación y aprovechamiento racional. En este sentido, se insta a las autoridades a

respetar el equilibrio entre los diversos beneficios económicos, culturales, agropecuarios,

recreativos y estéticos que la fauna silvestre aporta al hombre, pero dando en todos los

casos, la debida prelación a su conservación. Para ello se ajustarán a estas disposiciones la

caza, hostigamiento, captura o destrucción de crías, huevos, nidos y guaridas, tenencia,

posesión, tránsito, aprovechamiento, comercio y transformación de la fauna silvestre y sus

productos y subproductos.

30

La ley fue reglamentada en 1997 por el Decreto N° 666 estableciendo a la SAyDS

como autoridad de aplicación en jurisdicción nacional. Ésta deberá elaborar planes

nacionales de manejo para lograr un aprovechamiento racional y sostenible de las especies

de fauna sin comprometer la estabilidad de sus poblaciones. Asimismo, se establece

uniformar un régimen de exigencias generales de la actividad cinegética como licencias,

cotos de caza, empleo de armas, etc., para un manejo integral de las especies.

Para las especies consideradas dañinas o perjudiciales se deberán establecer planes

periódicos de control integrado, que contemplen evaluaciones de daño real, identificación

de variables que afectan la densidad de la especie en cuestión, diseño de estrategias de

control poblacional e indicadores de control efectivo, entre otros aspectos.

Ley General de Ambiente N° 25.675 (2002).

En noviembre de 2002 el Congreso Nacional promulgó la ley General del Ambiente

25.675, que contiene objetivos, postulados, principios y reglas de aplicación para el logro

de una gestión sustentable y adecuada del ambiente en todo el territorio nacional. La

autoridad de aplicación es la SAyDS de la Nación.

Esta ley establece la necesidad de asegurar la preservación, conservación,

recuperación y mejoramiento de la calidad de los recursos ambientales (naturales y

culturales) en la realización de las actividades humanas, instando a prevenir sus efectos

nocivos o peligrosos sobre el ambiente, en pos de la sustentabilidad ecológica, económica

y social del desarrollo. Incluye instrumentos de participación ciudadana, fundamental en la

elaboración de políticas; la educación ambiental cuya coordinación interjurisdiccional es

necesaria; la evaluación de impacto ambiental como herramienta de prevención del daño

ambiental; la necesidad de contar con un seguro de cobertura con entidad suficiente para

garantizar el financiamiento de la recomposición del daño de actividades riesgosas para el

ambiente, los ecosistemas y sus elementos constitutivos; etc.

Esta norma es de gran valor ya que, por su carácter general, orienta y estructura la

gestión ambiental, conformando el eje y las directivas que debieran guiar la ejecución de la

política ambiental en el territorio nacional. Esto incluye la elaboración de leyes

ambientales en las provincias que no las poseen, y la actualización o adecuación de la

31

normativa en aquellas, que si bien vigente, no responden a las realidades locales y

regionales.

Ley de presupuestos mínimos de protección ambiental de los bosques nativos N° 26.331

(2007).

El 28 de noviembre del 2007 se sancionó la Ley de Protección Ambiental de Bosques

Nativos N° 26.331, que establece los presupuestos mínimos de protección ambiental para

el enriquecimiento, restauración, conservación, aprovechamiento y manejo sostenible de

los bosques nativos, y de los servicios ambientales que éstos brindan a la sociedad.

Asimismo, establece un régimen de fomento y criterios para la distribución de fondos por

los servicios ambientales que brindan los bosques nativos.

Los objetivos de esta ley se centran en promover la regulación de expansión de la

frontera agropecuaria y de cualquier otro cambio de uso del suelo, promover el

ordenamiento territorial de los bosques nativos, controlar la disminución de la superficie de

bosques nativos existentes, mejorar y mantener los procesos ecológicos y culturales en los

bosques nativos que beneficien a la sociedad, etc. Clasifica a los bosques en tres categorías

de conservación: Categoría I (rojo), sectores de muy alto valor de conservación que no

deben transformarse; Categoría II (amarillo) zonas de mediano valor de conservación, que

pueden estar degradados pero que a juicio de la autoridad de aplicación jurisdiccional con

la implementación de actividades de restauración pueden tener un valor alto de

conservación y que podrán ser sometidos al aprovechamiento sostenible, turismo,

recolección e investigación científica; Categoría III (verde) sectores de bajo valor de

conservación que pueden transformarse parcialmente o en su totalidad (por ejemplo a la

agricultura) aunque dentro de los criterios de la presente ley.

Con la aplicación de esta ley se pretende lograr una mayor eficacia en la protección

de los bosques nativos, evitar su disminución, propendiendo a la utilización racional de los

recursos boscosos. Las provincias tienen la obligación de adecuar su normativa a la

realidad local y regional de sus bosques nativos, tomando los criterios de la norma

nacional. La autoridad de aplicación es la SAyDS de la Nación.

32

Implicancia de la normativa nacional en la problemática analizada.

A nivel nacional, primero la Constitución y a partir de ella las leyes de presupuestos

mínimos, son los instrumentos que estructuran la política nacional para la formulación de

las normas regionales y locales relacionadas con los recursos naturales y su uso

sustentable. Las leyes de presupuestos mínimos constituyen el umbral básico de protección

ambiental que la nación debe dictar, rigen en forma uniforme en todo el territorio nacional

como piso inderogable y garantizan la protección ambiental mínima para todos los

habitantes del territorio. Incluyen conceptos y principios rectores de protección ambiental,

así como las normas técnicas que fijen valores que aseguren niveles mínimos de calidad.

Así, la Ley General de Ambiente 25.675 es la norma más importante en jerarquía a

nivel nacional por establecer principios y mecanismos para la gestión ambiental en todo el

territorio nacional. Es la ley marco que las demás jurisdicciones deben seguir, ya que al ser

una norma de presupuestos mínimos encuadra la política ambiental nacional a través de sus

objetivos, los que las autoridades nacionales deben cumplir y las provinciales adoptar y

adecuar a su cuerpo normativo. De la misma manera, la Ley de presupuestos mínimos de

Protección Ambiental de Bosques Nativos 26.331 constituye la formulación de una política

pública ambiental, que incluye protección, aprovechamiento y manejo sostenible de

bosques y de los servicios ambientales que éstos brindan. Ésta determinó en Córdoba la

obligación de realizar el ordenamiento de los bosques nativos de su territorio, como

expresión espacial de las políticas sociales, a través de un proceso participativo, el que se

vio concretado en la ley cuestionada 9.814/10.

Otras normas generales importantes tienen influencia directa en Córdoba. La ley

Nacional de Fauna 22.421, a la que la provincia adhiere y aplica en el territorio como

propia, y en relación a la producción agrícola, el Decreto-Ley de Defensa Sanitaria

Agrícola 6.704 que si bien antiguo, regula temas relacionados a la producción agrícola

frente a agentes perjudiciales de origen biológico.

Normativa vigente de la Provincia de Córdoba.

Para el análisis de la legislación cordobesa se partió de la Constitución Provincial y luego

del estudio de cuatro leyes, dos decretos y una Resolución de la Secretaría de Ambiente.

33

Para cada una se consigna la autoridad de aplicación. Otros datos se detallan en el Anexo

III.

Constitución Provincial de Córdoba (2001).

Es el instrumento normativo de mayor jerarquía en la Provincia. En materia ambiental

declara que toda persona tiene el derecho a gozar de un medio ambiente sano, lo que sto

incluye la conservación y protección de los recursos naturales y culturales, los valores

estéticos que permitan asentamientos humanos dignos y la preservación de la flora y fauna,

comprometiéndose a protegerlos. Para ello se deben dictar normas que aseguren la eficacia

de los principios de armonía de los ecosistemas y la integración, diversidad, mantenimiento

y recuperación de recursos, así como su uso racional; la compatibilidad de la programación

física, económica y social con la preservación y mejoramiento del ambiente.

La Constitución de Córdoba como norma vertebradora de las políticas públicas del

territorio, establece la necesidad de resguardar el equilibrio ecológico, la protección

ambiental y la preservación de los recursos naturales, evitar la contaminación del ambiente

y participar en la defensa ecológica, como un deber de cada persona. Otras directrices

relacionadas con este estudio refieren a la conservación de los recursos naturales y

culturales y la preservación de la flora y fauna. Afirma que es deber del Estado Provincial

resguardar la supervivencia y conservación de los bosques, promover su explotación

racional y correcto aprovechamiento, propender al desarrollo y mejora de las especies y a

su reposición. Es importante el reconocimiento de la tierra como un bien permanente de

producción, por lo que garantiza su preservación y recuperación, resguardando asimismo la

conservación de los bosques a través de su explotación racional.

Decreto Ley Régimen caza deportiva y protección de fauna silvestre N° 4046 (1958).

Para cuando se sancionó el Decreto Nº 4.046 de caza deportiva y comercial en abril de

1958, se consideraba que el ordenamiento legal vigente no había sido suficientemente

rígido para evitar los abusos propios de las actividades de caza desarrolladas con fines

ajenos al deporte, y considerando el número de adeptos a la práctica, se hacía necesaria la

intervención del Estado para regular dichas actividades. Esta norma regula la lucha o

34

defensa contra plagas, protección de fauna silvestre, así como también el tránsito y

comercio de sus productos en el territorio de la provincia.

Entre los aspectos regulados declara plaga: loros, cotorras, titas de las sierras, palomas

torcazas, palomas doradas o medianas, biguá o pato negro, gorriones, cacholotes, ovejeros,

halcones, semilleros, pumas, liebres, vizcachas, comadrejas picu, ratas, ratones y víboras,

pudiendo ser destruidos en toda época y hora. En la norma no se aclaran los nombres

científicos de las especies listadas.

De manera absoluta se prohíbe la caza en tierras de propiedad fiscal cercadas,

plantadas o cultivadas y sólo se permitirá en ellas, la destrucción de animales declarados

plagas, debiendo los interesados estar autorizados mediante permiso que otorgará la

autoridad de aplicación, Secretaría de Ambiente de la provincia. Cada año y mediante

Resolución, el mencionado organismo establece cupos de caza así como las especies

permitidas y prohibidas, y determina las zonas o áreas del territorio cordobés en las que se

puede practicar la caza deportiva.

Ley de Sanidad Vegetal N° 4.967 (1968) y Decreto Reglamentario 6.373 (1979).

En noviembre de 1967 se sancionó la Ley 4.967 de Sanidad Vegetal, con el objetivo de

defender la producción agrícola de animales o vegetales, o parásitos perjudiciales. El

organismo de aplicación propondrá al Poder Ejecutivo la nomenclatura de los agentes

perjudiciales declarados como plagas a los que resulten tales, por su carácter extensivo,

invasor o calamitoso.

El Decreto Reglamentario 6.373 (1979) provee un largo listado de organismos

vegetales y animales a los que declara “Plagas de la Agricultura” (con arreglo a la Ley N°

4.967), entre ellos la cotorra o cata común (Myiopsitta monachus) y la paloma dorada del

monte (Zenaida auriculata). Además, obliga a toda persona tenedora de un bien afectado

por una plaga, a efectuar las medidas que el organismo de aplicación determine (que

incluye métodos para su destrucción y extinción de la plaga si fuera necesario, la extinción

de la plaga). La destrucción de las plagas se debe realizar en el estado biológico en que sea

más susceptible a ser destruida y si esto no se puede determinar o no está determinado de

35

antemano, se la debe destruir en cualquiera de los estados en que se encuentre; considera

además la importancia de evitar la eliminación de depredadores.

La autoridad encargada de la aplicación de estas normas es la Secretaría de

Agricultura, dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentos de la

provincia de Córdoba.

Ley de Medio Ambiente N° 7.343 (1985) y Decreto Reglamentario Capítulo IX “del

Impacto Ambiental” Nº 2.131 (2000)

Con fecha 29 de Agosto de 1985 se sanciona la ley Nº 7.343 de Medio Ambiente, primera

en el país en abordar la temática ambiental en el país. Es una ley marco que establece los

principios tendientes a lograr y mantener una óptima calidad de vida en todo el territorio de

la Provincia, la preservación, conservación, defensa y el mejoramiento del ambiente.

Trata en forma particular lo referente al agua, a los suelos, la atmósfera, la flora, la

fauna y el paisaje, declarando de interés provincial los ambientes urbanos, agropecuarios y

naturales, y sus elementos constitutivos. Entre los propósitos a ser alcanzados se pueden

mencionar el ordenamiento territorial y la planificación de los procesos expansión de las

fronteras productivas, la prohibición y/o corrección de actividades perjudiciales para el

medio ambiente, entre otros. Expresa de manera particular que deberá evitarse la

desaparición de los ecosistemas terrestres y acuáticos que caracterizan ecológicamente la

Provincia.

De manera particular, al referirse al uso del suelo, establece que cada entidad

competente elaborará criterios o normas sobre caracteres físico-químicos y biológicos

compatibles con la preservación de la productividad de los agroecosistemas y el

funcionamiento normal de los ecosistemas terrestres no productivos que cada tipo de suelo

contribuye a sostener. Mientras que prohíbe el desarrollo de acciones, actividades u obras

que degraden o sean susceptibles de degradar (de manera irreversible, corregible o

incipiente), individuos y poblaciones de la fauna silvestre para lo cual será de estricta

aplicación la Ley Nacional de Fauna Nº 22.421, a la cual adhiere.

36

El capítulo IX “del Impacto Ambiental” fue reglamentado a través del Decreto Nº

2.131 (2000), cuyo propósito es lograr una efectiva elevación de la calidad de vida de la

población, evitando las dificultades que provoca en el desarrollo la falta de conocimientos

anticipados de los efectos de las acciones humanas sobre el ambiente, haciéndose

imprescindible instrumentar las acciones preventivas y correctivas del resguardo ambiental

para el desarrollo sostenible.

En su Anexo II se incluyen aquellos proyectos que obligatoriamente están sujetos a

presentar un Aviso de Proyecto, y condicionalmente a presentación de Estudio de Impacto

Ambiental (según lo disponga la autoridad de aplicación). Entre los proyectos incluidos

se mencionan los relacionados con agricultura y ganadería e instalaciones

complementarias, colonización rural, colonización de tierras incultas o seminaturales para

explotación agrícola intensiva, campañas de aplicación de pesticidas, campañas de

aplicación de fertilizantes, entre otros.

La autoridad de aplicación de ambas normas es, tanto de la Ley 7.343 como del

Decreto Reglamentario es la Secretaría de Ambiente (Ministerio de Agua, Energía y

Ambiente).

Ley de productos químicos o biológicos de uso agropecuario N° 9.164 (2004) y Decreto

Reglamentario N° 132/05.

La Ley N° 9.164 de Productos químicos o biológicos de uso agropecuario, sancionada en

2004 tiene por objetivo proteger la salud humana, recursos naturales, producción

agropecuaria, preservación de la calidad de los alimentos y materias primas de origen

vegetal y asegurar su trazabilidad y la de los productos químicos o biológicos de uso

agropecuario, contribuyendo así al desarrollo sostenible y a la disminución del impacto

ambiental que estos productos generan. Considera como producto químico o biológico de

uso agropecuario a todo producto químico inorgánico u orgánico o biológico, que se

emplea para combatir o prevenir la acción de insectos, ácaros, malezas, hongos, bacterias y

roedores, perjudiciales al hombre o a los animales y de todo agente de origen animal o

vegetal, que ataque o perjudique a las plantas útiles y sus productos. La autoridad de

aplicación es la Secretaría de Agricultura.

37

La ley fue reglamentada por el Decreto Nº 132 (2005) que regula entre otras

cuestiones todo lo relacionada al proceso de elaboración, formulación, fraccionamiento y

disposición final de envases de productos químicos o biológicos de uso agropecuario, así

como de la obligación de su inscripción en un Registro de Elaboradores, Formuladores o

Fraccionadores. Se deberá contar con la autorización para el desarrollo de esta actividad

del organismo de aplicación.

Ley de ordenamiento territorial de los bosques nativos Nº 9.814 (2010) y Decreto

Reglamentario 710 (2011).

A partir de la sanción de la Ley nacional 26.331 de protección del bosque nativo (2007),

cada provincia disponía de un año para realizar el ordenamiento territorial de sus masas

boscosas, teniendo en cuenta las necesidades ecológicas, productivas y ambientales de

cada región. El 4 de agosto de 2010 se aprobó la ley de bosques, con un contenido

fuertemente criticado tanto por las Universidades Nacionales de Córdoba, Río Cuarto y

Villa María, y demás organizaciones que participaron de su elaboración, por no respetar

los presupuestos mínimos de la ley nacional.

Los bosques han sido ordenados según las categorías previstas en la ley nacional:

sectores de máxima conservación que no deben transformarse (rojo); sectores de mediano

valor de conservación que pueden estar degradados pero con un manejo adecuado pueden

ser recuperados y ser sometidos al aprovechamiento sostenible, turismo, recolección e

investigación científica (amarillo); zonas de bajo valor de conservación que pueden ser

transformados por ejemplo a la agricultura (verde).

El objeto de la norma es establecer el ordenamiento territorial de los bosques nativos

de Córdoba, con el fin de promover su conservación mediante el ordenamiento territorial

de los bosques y la regulación de la expansión de la frontera agropecuaria, minera y

urbana, y de cualquier otro cambio de uso del suelo; disponer los mecanismos para

promover el incremento de la superficie total y calidad de los bosques nativos y mantener a

perpetuidad sus servicios ambientales.

38

Esta ley fue reglamentada a través del Decreto 710 de 2011, el que establece los

términos de referencia (TR) para las intervenciones sobre los bosques de la provincia.

Éstos, son lineamientos de carácter técnico administrativo necesarios para satisfacer los

requerimientos técnicos frente a los proyectos que se llevarán a cabo sobre áreas boscosas.

Decreto N° 1.751/11 Reglamentario del artículo 36 del Capítulo VI (de la Fauna en

sentido amplio) de la ley Provincial de Ambiente N° 7343.

Reglamenta el artículo 36 de la Ley Provincial del Ambiente N° 7343 referido a la fauna

en sentido amplio. Regula aspectos como introducción, transporte, comercio, posesión y

tenencia de fauna silvestre en la provincia, el que estará prohibida cuando se sean

ejemplares de especies que afecten o puedan afectar la salud y el ambiente.

Regula el comercio de especies en el territorio de la provincia de Córdoba, para ello

incluye un Anexo con las especies permitidas (deberá estar respaldado por un certificado

origen de un criadero legalmente habilitado); la venta deberá contar con Guía de Tránsito

expedida por la autoridad de aplicación.

Asimismo prevé la divulgación de la importancia del cautiverio de especies

potencialmente dañinas para la salud humana, por medio de talleres en los distintos niveles

de educación inicial.

Otras normas relacionadas: Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón N° 8.625

(1997) y Resolución de actividad turismo cinegético N° 1.115 (2012).

El 6 de agosto de 1997 se sancionó la ley de Prohibición de la práctica tiro al pichón N°

8.625, que para sus efectos define esta práctica como aquélla cuyo objetivo sea herir o

abatir animales previamente liberados; esta práctica también es llamada tiro a la paloma o

al vuelo. La ley prohíbe toda la normativa vigente que autorice esta práctica, también

llamada tiro a la paloma o al vuelo, o cualquier otra de similares características realizada

con palomas silvestres o criadas en cautiverio, así como también sobre cualquier otra

especie animal que se utilice con dicho fin. Sin embargo nunca fue reglamentada. La

Secretaría de Agricultura tendrá a su cargo la aplicación y contralor de estas actividades. El

39

tiro a la paloma, más conocido como “tiro al pichón”, se practica asiduamente a lo largo

del país a través de asociaciones y clubes (por ejemplo la Federación Argentina de Tiro al

Vuelo). Esta actividad se practica asiduamente porque la paloma está declarada plaga.

Por otro lado, en 2011 la Secretaría de Ambiente sancionó la Res. 1.115 ante la

necesidad de regular la actividad cinegética en la provincia de Córdoba y de determinar los

valores de concentración máxima de contaminantes ante situaciones riesgosas a la salud de

las personas como la generación de residuos peligrosos de plomo (Y31) por caza de

palomas. Sus objetivos son los de asegurar el uso y manejo racional de los recursos

renovables, velar la conservación del ambiente evitando la alteración y/o destrucción del

ecosistema, afianzar la seguridad de personas, bienes, flora y fauna y promover, fomentar y

consolidar el turismo cinegético en la provincia. Reglamenta la caza deportiva al vuelo a la

paloma dorada (Zenaida auriculata) en excursión de caza.

Prohíbe el uso de perdigones de plomo en humedales (zonas de bañados, lagunas,

lagos y ríos) y en zonas declaradas áreas naturales protegidas. En áreas secas donde se da

la mayor presencia de palomeros admite la actividad pero exigiendo a las empresas que se

inscriban como generadores de residuos peligrosos (como el plomo). Además, prohíbe el

uso de cebos tóxicos, redes, trampas, sustancias químicas y cualquier otro mecanismo

similar, como así también recurrir al uso de instrumentos de destrucción masiva de los

ejemplares, sus crías o sus huevos. La autoridad de aplicación es la Secretaría de Ambiente

de la provincia.

Implicancia de la normativa de la Provincia de Córdoba en la problemática.

La Ley de Ambiente 7.343 que regula aspectos generales relacionados con la conservación

del ambiente y el uso sustentable de los recursos naturales (incluyendo la necesidad de

ordenar las actividades en el territorio, planificar la expansión de la frontera productiva,

prohibir y/o corrección de actividades perjudiciales), es una norma marco, declarativa, de

aplicación en todo el territorio provincial.

El acervo normativo de Córdoba es nutrido. Numerosas leyes, decretos y

resoluciones de los organismos específicos, regulan distintos recursos y su administración.

Así, se cuentan por un lado, normas que protegen la fauna silvestre (Ley Nacional de

40

Fauna 22.421 y el Decr. Regl. 1.751/11), declarando de interés público su protección y

conservación, y la Ley de prohibición de la práctica tiro al pichón 8.625, que prohíbe

específicamente el tiro a la paloma o al vuelo. La Res. (Secretaría de Ambiente) de

actividad turismo cinegético 1.115, que regula la actividad cinegética en la provincia. Por

el otro, normas que declaran plagas e inducen a su exterminio las especies en cuestión. Así,

el Decreto-Ley régimen caza deportiva y protección de fauna silvestre N° 4.046 regula la

defensa contra plagas, incluyendo específicamente la obligación de destruir la paloma y la

cotorra (sin indicar especies); el Decreto 6.373 que reglamenta la Ley 4.967 de Sanidad

Vegetal, declara como plagas de la agricultura a Z. auriculata y M. monachus,

estableciendo sistemas de erradicación de las mismas.

MODELO VIGENTE DE GESTIÓN PÚBLICA

Diagnóstico actual

Dimensión Jurídica

Análisis de variables e indicadores

El análisis de la normativa vigente y la modalidad con la que, tanto la provincia como la

nación, han formulado las políticas públicas ambientales relacionadas con el problema en

estudio se detallan en los Anexos IV y V. Los resultados indican:

VARIABLE 1: La inserción de las políticas relacionadas al conflicto socio-

ambiental entre la conservación de (Zenaida auriculata y Myiopsitta monachus) y la

producción agrícola en el sistema normativo se explica por medio de los siguientes

indicadores (Anexo VI):

Indicador 1: Inserción constitucional. En la Constitución Nacional, las políticas

relacionadas al conflicto en estudio están incluidas de manera implícita, esto es, sólo se

hace referencia a políticas ambientales y económico-productivas. Así, en el art. 41 se

establece que todos los habitantes tienen el derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto

41

para el desarrollo humano y el deber de preservarlo, para que las actividades productivas

satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras.

Asimismo, en la Constitución de la Provincia de Córdoba las mencionadas políticas

se incluyen de manera implícita en los artículos 11, 38, 53, 54, 66 y 68, los que hacen

referencia a la protección y defensa del medio ambiente, al mantenimiento del equilibrio

ecológico, y a la preservación de los recursos naturales renovables y no renovables en base

a su aprovechamiento racional e integral, y al uso sustentable de la tierra como bien

permanente de producción.

Indicador 2: La inserción en ley general del ambiente de las políticas relacionadas

al conflicto socio ambiental:

A nivel nacional, en la Ley General del Ambiente Nº 25.675, la mención de las

políticas referidas a la problemática estudiada es inexistente ya que sólo menciona de

manera general la necesidad de un ordenamiento ambiental de la realidad local, regional y

nacional; la necesidad de asegurar el uso adecuado de los recursos ambientales, así como

posibilitar la máxima producción y utilización de los ecosistemas, garantizando la mínima

degradación, entre otros.

En tanto que en la provincia de Córdoba, en la Ley de Ambiente Nº 7.343 la

inserción de las políticas referidas al conflicto es implícita. En los artículos 2, 23 establece

la preservación, conservación, defensa y mejoramiento del ambiente en todo el territorio de

la Provincia de Córdoba, para lograr y mantener una óptima calidad de vida; en el art. 36

refiere expresamente a la fauna y su conservación, y en el art. 18 refiere al ordenamiento

territorial y a los criterios que se deben tener en cuenta para la regulación de los usos de la

tierra (evaluación de características y evolución de los ecosistemas; verificación de los

actuales usos de la tierra, que indique su grado real de utilización, falta de uso o

degradación, etc.).

En síntesis, las políticas referidas al conflicto socio ambiental entre producción

agrícola y conservación y/o manejo de dos especies de la fauna silvestre a nivel

constitucional (tanto en la Nación como en la provincia) han sido incluidas de manera

42

implícita, ya que no refieren a políticas específicas del mencionado conflicto sino de

manera más integral referidas a producción o ambiente.

Entre las normas generales de ambiente nacional y provincial, se observa una

inclusión diferente de la política discutida. Mientras que en la norma de la provincia de

Córdoba la inclusión de políticas referidas a conservación de fauna y producción agrícola

se realiza de manera implícita, en la nación es inexistente. Estas normas son de gran

relevancia ya que vertebran y estructuran la gestión ambiental, conformando el eje y los

lineamientos que orientarán la ejecución de la política ambiental en cada jurisdicción.

VARIABLE 2: Refiere a la regulación específica referida a la fauna silvestre

(conservación, manejo) y a la producción agrícola, y a la forma en que las políticas

ambientales y de producción fueron introducidas en el sistema jurídico de la provincia de

Córdoba. En el análisis de esta variable se incluyen cinco indicadores:

Indicador 1: tipo de normativa específica adoptada: La provincia de Córdoba

adhirió de manera semiplena a la Ley Nacional de Conservación de Fauna Nº 22.421 la

que fue realizada a través de la Ley de Ambiente 7.343; la reglamentación especifica de la

misma ha sido realizada por Decr. Reglamentario 1.751/11 (art. 36 Capítulo VI de fauna),

es decir regulación propia. Además, periódicamente la Secretaría de Ambiente (autoridad

de aplicación) emite regulaciones específicas (por ejemplo a través de Resoluciones) para

cuestiones particulares del manejo de la fauna. En cuanto a los aspectos referidos a la

producción agrícola, Córdoba posee regulación propia a partir de la sanción de la Ley de

Sanidad Vegetal N° 4.967/67 y su Decreto Reglamentario 6.373/79.

Indicador 2: época de sanción o publicación de normativas específicas. Se tuvieron

en cuenta además de las mencionadas arriba, otras legislaciones importantes relacionadas a

la temática estudiada. Así, se analizaron 6 normas vigentes nacionales y 7 normas vigentes

en Córdoba, las que fueron sancionadas o publicadas entre 1958 y 2011, dentro de 6

períodos (décadas), el período 4 (2001-2010) es donde ha existido mayor producción de

normas (Anexo VII).

43

Indicador 3: la forma de conceptualización general, refiere a la manera en que las

normas específicas de la temática mencionan cuáles aspectos son requeridos para que una

especie de la fauna sea considerada plaga (Anexo VIII).

Las normas relacionadas con la fauna silvestre no hacen referencia a los aspectos

considerados en este indicador; en las relacionadas a la producción agrícola

(específicamente en la Ley de Sanidad Vegetal Nº 4.967 y Decr. Regl. 6.373) se menciona

a la fauna como plaga de contra la producción agrícola, mostrando una forma de

conceptualización restringida (refiere sólo a daños en la producción y no incluye aspectos

relacionados con la salud de los ecosistemas).

Indicador 4: el método para la definición concreta, consiste en identificar si las

normas de la temática incluyen términos como: especie de la fauna silvestre como plaga;

daño/perjuicio (en cultivos, producción agrícola, ecosistemas).

La Ley de Sanidad Vegetal N° 4.967 incluye el término plaga refiriendo a aquellos

agentes que resulten perjudiciales por su carácter extensivo, invasor o calamitoso; el Decr.

Regl. 6.373 sólo declara plaga un detallado listado de especies sin agregar ninguna

definición al respecto. Refiere a daño y/o perjuicio de manera general.

La Ley de Caza 4.046 prevé (entre otros aspectos) la caza para lucha o defensa

contra plagas y la protección de la fauna silvestre; declara plaga un listado de animales, los

que podrán destruirse en toda época ya cualquier hora, incluyendo las aves en cuestión.

En todos los casos las definiciones son genéricas, y poco precisas para la aplicación

de las normas mencionadas, no prevé cambios de condición para cada especie, revisiones

en el tiempo de acuerdo a parámetros técnicos, etc.

Indicador 5: en relación a la existencia de normativa complementaria de leyes de

presupuestos mínimos.

A partir de la sanción de la Ley de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental

de los Bosques Nativos N° 26.331/07, la provincia de Córdoba elaboró y sancionó la Ley

Nº 9.814 de Ordenamiento territorial de los bosques nativos en 2010.

44

A modo de síntesis de la variable e indicadores analizados, se puede inferir que la

provincia de Córdoba posee normativa relacionada al conflicto socio ambiental estudiado

que regula algunos de los aspectos relacionados a la problemática estudiada. Sin embargo,

esta legislación, sancionada en otro contexto político, ambiental y social, ha tenido en

cuenta sólo el aspecto económico de la problemática (ej. declarando algunas especies de la

fauna como plaga y la necesidad de destruirla).

En relación a la incorporación de normas de presupuestos mínimos ambientales en

Córdoba, el ordenamiento de los bosques nativos de la provincia ha sido establecido

mediante la Ley 9.814/10, que, a pesar de las críticas en cuanto a su contenido y proceso

durante su elaboración y sanción, es la norma actualmente vigente.

VARIABLE 3: control y fiscalización establecidos en cada normativa provincial. A

continuación se analizan sus dos indicadores:

Indicador 1: tipo de instrumentos de control (sanciones) pueden ser Económicos

(multas) o Mixto (económicos + incentivos+ suspensión de actividades, etc.).

En este sentido, el control y fiscalización en cada normativa de aplicación en el

territorio nacional y provincial se realiza de forma mixta (Anexo IX).

La Ley Nacional de Fauna N° 22.421, en el Artículo 28 sanciona las infracciones

prescriptas ante la violación de sus disposiciones y consisten en: a) multa monetaria que

llevará aparejada el comiso de los animales, pieles, cueros, lanas, etc. Se decomisarán las

armas o artes empleadas, cartuchos, trampas y otros instrumentos utilizados para cometer

la infracción; b) suspensión y cancelación de la licencia de caza deportiva, sanciones que

serán graduadas de acuerdo a la naturaleza y gravedad de la infracción, el perjuicio

causado y los antecedentes del infractor; c) Suspensión, inhabilitación o clausura de los

locales o comercios, como asimismo suspensión o cancelación de licencias de caza

comercial. Mientras que el Artículo 24 establece que será reprimido con prisión de un mes

a un año el que practicara la caza sin la autorización.

Ley de Sanidad Vegetal N° 4.967. En el artículo 11 esta ley prevé que será

sancionada las infracciones a sus disposiciones y las que establezca la reglamentación, con

45

multa económica según la importancia de la infracción. El Decr. Regl. de la Ley de

Sanidad Vegetal N° 6.373 establece sanciones a toda persona que luego de tres días de

haber acusado en sus cultivos la existencia de plagas no hubiere puesto en ejecución las

medidas sanitarias dispuestas más apropiadas. El responsable será tenido como infractor y

sancionado con la multa económica o clausura del establecimiento en caso de reincidencia.

Decreto- Ley de Regulación de la Caza Deportiva o Comercial N° 4.046.

Establece sanciones (decomisos de arma y animales cazados, y la inhabilitación

permanente para cazar) cuando la caza se realice en época de veda. Al que cazare sin

licencia habilitante o transportase productos de caza ocultos, sufrirán además inhabilitación

por el término de dos años y decomiso del arna empleada. Y quien cazare con medios o

métodos prohibidos, serán inhabilitados por el tiempo de uno a cinco años, según la

cantidad de piezas cobradas y sufrirán además el decomiso del arma empleada cuando la

cacería sea de más de cinco ejemplares. No refiere a la caza de especies declaradas plaga

en esa u otra normativa.

Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón N° 8625. Establece sanciones con

inhabilitación temporaria o definitiva de la entidad organizadora, y las personas físicas que

participen en dichos torneos podrán además ser sancionadas con multas económicas.

Ley de Productos químicos o biológicos de uso agropecuario. Decreto N° 132.

Establece en casos de inobservancia de cualquiera de los requisitos y obligaciones

establecidos en la misma y su reglamentación, las siguientes sanciones: a) Llamado de

atención; b) Apercibimiento; c) Multa; d) Interdicción de predios y/o decomiso de los

productos y/o mercaderías contaminadas y/o de los elementos utilizados para cometer la

infracción. En estos casos se impondrá al infractor la obligación de disponer a su costa de

los productos decomisados, según los procedimientos que se fijen en la reglamentación; e)

Suspensión y/o baja del registro correspondiente; f) Inhabilitación temporal o permanente;

g) Clausura parcial o total, temporal o permanente de los locales y depósitos; h) Secuestro

de equipos de aplicación y/o vehículos utilizados para cometer la infracción, i) Arresto.

Resolución de actividad turismo cinegético N° 1.115. Los guías y operadores

cinegéticos podrán ser sancionados además con inhabilitación temporaria o definitiva para

46

la actividad cinegética. Se podrá disponer también la inhabilitación temporaria o definitiva

para la actividad cinegética de los campos utilizados a tal fin.

Para sintetizar, la normativa que se aplica en la provincia de Córdoba incluye

mecanismos de control y fiscalización viabilizados a través de sanciones económicas

(multas) como medida más común, decomisos de elementos relacionados con la caza por

ej. (Armas, productos y subproductos de animales), incluso la clausura de

establecimientos.

VARIABLE 4: definición de actores para la gestión, designados en normativa

específica.

Indicador 1: según el carácter de los actores establecidos, autoridades de aplicación:

Actores gubernamentales

Actores no gubernamentales

Tanto a nivel nacional como provincial, los actores establecidos para la aplicación de

cada una de las normativas analizadas o autoridad de aplicación, son de carácter

gubernamental (Anexo X). En ninguno de los casos fueron designados actores no

gubernamentales.

Síntesis de la Dimensión Jurídica

En base a lo analizado se encontró que las normas que regulan el conflicto socio ambiental

entre producción agrícola y elementos de la fauna silvestre, se proponen desde dos

direcciones distintas y opuestas: por un lado las normas que se abocan a la conservación de

la fauna, y que controlan y regulan mecanismos de manejo para evitar su daño o perdida,

mientras que las referidas a la producción agrícola apuntan directamente a eliminar los

organismos dañinos que ocasionan una disminución en la rentabilidad de esta actividad

productiva.

Sin embargo es necesario hacer algunas consideraciones:

47

- En relación a la fauna silvestre, la provincia regula la actividad de Caza a través de

un Decreto-Ley que data de 1.958 (sancionada en un contexto histórico político particular),

y que regula la caza (deportiva, comercial, de lucha o defensa contra plagas), la protección

de la fauna silvestre, el tránsito y comercio de sus productos en la Provincia. En la misma

se declara plaga a loros, cotorras, titas de las sierras, palomas torcazas y doradas, ente

otros, los que podrán destruirse en toda época y a cualquier hora. Al momento de la

sanción de esta norma, la situación ambiental de la provincia era diferente; los ecosistemas

no presentaban el grado de deterioro actual, si bien la frontera agropecuaria avanzaba

rápidamente.

Con posterioridad, la provincia adhiere en 1985 a la ley nacional de fauna 22.421/81,

que, si bien es amplia, no incluye entre los objetivos de la caza o cacería aspectos

relacionados a su posible condición de plaga. La caza deportiva se reguló año tras año a

través de Resoluciones que indicaban las especies factibles de ser cazadas, el cupo y las

zonas permitidas para el desarrollo de la actividad.

Los funcionarios de la Secretaría de Ambiente entrevistados confirmaron la

aplicación de normativa relacionada con conservación, caza y turismo cinegético para la

paloma torcaza y cotorra, en particular la Ley Provincial de Ambiente N° 7.343/85,

Resolución de Caza Deportiva N° 196/12 (que autoriza la caza deportiva de especies de

fauna silvestre, entre ellas paloma común Zenaida auriculata y lora común Myiopsitta

monachus en las fechas de apertura y cierre de temporada para 2012), y Ley Nacional de

Fauna 22.421/81.

- En cuanto a la producción agrícola, las normas que abordan la problemática en

Córdoba son las relacionadas a Sanidad Vegetal 4.967/67 y su Decr. Regl. 6.373/79. Estas

fueron sancionadas con el fin preciso de combatir especies de la flora y de la fauna que

generan daños o perjuicios en los cultivos. Son normas sancionadas hace alrededor de

cuarenta años; las mismas no mencionan la necesidad de realizar estudios poblaciones

periódicos, ni revisar la lista de especies consideradas plaga (sólo mencionan “incluir” en

dicha lista otros agentes no tenidos en cuenta).

Por otro lado, el funcionario entrevistado relacionado a la Secretaría de Agricultura

mencionó la aplicación de las leyes de Sanidad Vegetal N° 4.967/67 y de Agroquímicos N°

48

6.629/81 (norma que regulaba los depósitos de agroquímicos, tema que pasó a ser regulado

por la actual ley 9.164/04 que la deroga).

Para finalizar, las normas estudiadas no poseen definiciones concretas de plaga,

daño/perjuicio ni las particularidades y condiciones que determinan su inclusión en dichas

categorías, o las características que debieran asumir para cumplir con estas condiciones.

Tampoco incluyen conceptos relacionados con la sustentabilidad ambiental y el manejo

sustentable de ecosistemas en general y poblaciones de la fauna en particular. No ha

habido otras normas que actualicen los listados de especies consideradas plaga, ni que

incluyan criterios técnicos, científicos necesarios para determinar la condición poblacional

de estas especies.

Tanto en la normativa nacional como provincial no existen herramientas específicas

que regulen esta problemática de manera integral, posiblemente por la complejidad de la

temática.

Dimensión Institucional.

La Dimensión institucional se refiere a la presencia de las políticas públicas dentro del

sistema, mediante la creación o asignación de áreas destinadas a gestionar la problemática

en cuestión (Anexos VI y VII).

Análisis de variables e indicadores.

VARIABLE 1: denominación de institución u organismo específicamente encargado

de gestionar la temática.

Indicador 1. El nivel de especificidad para la nominación de organismos con

respecto al tipo de gestión frente al conflicto es medio, tanto para la Secretaría de

Agricultura, Secretaría de Ambiente como para la Agencia Córdoba Turismo, puesto que

sus nombres representan de manera general la administración de políticas ambientales o de

producción agrícola.

VARIABLE 2: lugar y jerarquía asignada al área dentro de cada administración.

49

Indicador 1: Teniendo en cuenta si el organismo de gobierno se encuentra dentro de

una institución no específica. En el caso en estudio la dependencia es alto para la

Secretaría de Agricultura (dependiente del Ministerio de Agricultura, Ganadería y

Alimentos), y para la Secretaría de Ambiente (depende del Ministerio de Agua, Energía y

Ambiente). En ambos casos dependen directamente de organismos específicos. Por otro

lado la Agencia Córdoba Turismo depende directamente de la Gobernación; por no

depender de un organismo especifico a la temática su nivel de dependencia es Bajo.

VARIABLE 3. Función del organismo. Si entre las competencias asignadas se

especifica o menciona la gestión del conflicto en estudio.

Indicador 1: Los criterios utilizados fueron: específico (si se menciona la gestión del

conflicto socio ambiental entre la producción agrícola y aves silvestres específicamente),

general (cuando se mencionan problemas entre la producción agrícola y especies plaga de

manera genérica), no se menciona (cuando no existen referencias al respecto).

Dentro de la Secretaría de Agricultura (Subsecretaría Fiscalización y Control) se

encarga entre otras tareas del control sanitario y bromatológico de la producción. Es

órgano de aplicación de normas relacionadas con el tema en estudio como la ley de

agroquímicos, utilizados para eliminación de plagas, por ejemplo. En este caso, entre sus

funciones no se menciona el conflicto, es decir, solo refiere a la aplicación de normas y no

a una gestión integral de la problemática en cuestión. Por otro lado en la Secretaría de

Ambiente, entre las funciones de la Dirección General de Recursos Naturales, Áreas

Naturales Protegidas, Bosque y Forestación se destaca el desarrollo de acciones de control

integrado de plagas, con participación de otras áreas de los gobiernos provincial y

nacional. En este caso su función se consideró general en relación a la problemática.

Otra información obtenida a partir de las entrevistas a funcionarios de las Secretarías

de Ambiente y Agricultura, y Agencia Córdoba Turismo

A partir de las entrevistas aplicadas (Anexos XI y XII), los funcionarios pertenecientes a

las Secretarías de Ambiente y de Agricultura confirmaron la existencia de la problemática

planteada en relación a la producción agrícola en la provincia. El mismo fue señalado por

los funcionarios de la Secretaría de Ambiente como una resultante del crecimiento

50

poblacional de estas especies, “sobrepoblación o superpoblación”, constituyendo un

indicador de la expansión urbana y pérdida de biodiversidad; el funcionario de la

Secretaría de Agricultura definió estas poblaciones (y su crecimiento) como “plaga”, por

su ciclo biológico y reproducción acelerada. Todos afirman haber sido consultados por

productores agropecuarios, los que manifestaron una gran preocupación acerca de la

presencia de estas aves en sus cultivos. Las reparticiones no llevan un registro de las

consultas de realizadas por los productores, siendo en todos los casos el asesoramiento de

manera verbal.

Con respecto al trabajo conjunto y coordinado de estas dos reparticiones para la

formulación de las políticas públicas provinciales relacionadas con el tema, uno de los

funcionarios de la Secretaría de Ambiente manifiesta haber participado en la formulación

de políticas públicas provinciales, mientras el funcionario de la Secretaría de Agricultura

indica que no haber sido convocados para trabajar en conjunto. Pero todos afirmaron que

existe coordinación y comunicación entre los organismos, trabajan conjuntamente ya que

tratándose de temas en común es importante conocer cuál es el grado de incidencia que

cada uno considera para llegar a un acuerdo.

En cuanto a la capacidad de fiscalización del Estado Provincial, tanto en la

aplicación de normas como en su correcto cumplimiento, la Dirección de Control y

Fiscalización de la Secretaría de Ambiente afirma que las tareas de fiscalización son

suficientes, mientras que la Dirección de Recursos Naturales de la misma entidad

menciona lo contario, atribuyendo el problema al insuficiente personal capacitado. La

Secretaría de Agricultura señala que la capacidad de fiscalización es suficiente.

La aplicación de la normativa y control de caza son competencia de la Secretaría de

Ambiente. La actividad de los cotos de caza está determinada por temporadas, en base a un

calendario establecido por la Secretaría de Ambiente. Cuando existe incumplimiento en la

norma se aplican sanciones por medio de multas, secuestro de armamento y de todo

elemento utilizado al momento de cometer la infracción (incluye vehículos). Los controles

se hacen en forma periódica, especialmente en la parte norte de la provincia por ser el área

más visitada. Para realizar las actividades de cacería se exige documentación,

principalmente licencia o permiso de caza y Certificado de registro de armas emitido por

51

RENAR (Registro Nacional de Armas). Las actividades de cacería son desarrolladas por

turistas nacionales y extranjeros pero no por los productores agrícolas.

El funcionario de la Agencia Córdoba Turismo desconoce información específica

relacionada al tema. En este sentido, sabe de la existencia de normas que permiten la

cacería de las especies en estudio y de cotos de caza que son regulados por la Secretaría de

Ambiente. Desconoce información específica como el número de aves cazadas por

año/área, uso o manejo que se les da a las aves cazadas, número de cazadores registrados al

año que practican esta actividad, origen de los turistas, porcentaje de turistas nacionales y

extranjeros que predominan para realizar actividades de caza, cantidad de dinero que

ingresa, pero menciona que es alta.

Síntesis de la Dimensión Institucional.

En la provincia de Córdoba se encontraron espacios institucionales que intervienen en la

gestión de la problemática; sin embargo no cuentan con entidad ni tareas específicas. Esto

se evidencia en el nivel de especificidad para la nominación de estos organismos con

respecto a la gestión del conflicto, ya que no llevan un nombre o denominación específica

y relacionada a la gestión del problema (ej. Dirección de control de aves).

En cuanto a la jerarquía dentro de la administración, tanto la Secretaría de Ambiente

como la de Agricultura dependen directamente de organismos específicos, esto es, los

respectivos Ministerios. Sin embargo, no se encontró ninguna Dirección especifica

destinada a la gestión del conflicto dentro de las estructuras de las Secretarías (de

Ambiente y Agricultura).

Por último, y en cuanto a las funciones, si bien múltiples, en ninguno de los casos fue

especifica ni particular en relación al problema.

Dimensión Política.

Las acciones llevadas a cabo en el territorio de la provincia expresan las políticas

ambientales formuladas a través de diferentes instrumentos de gestión jurídica o

52

institucional. Así, en este estudio, la dimensión política surge del análisis de las

dimensiones anteriores: jurídica e institucional.

A través de la dimensión política se intentaron conocer los aspectos más

significativos en cuanto a la manera en la que la provincia de Córdoba ha formulado sus

políticas públicas relacionadas con la problemática abordada, y de esta manera, el modelo

de gestión vigente.

Las políticas referidas al conflicto socio ambiental abordado han sido incluidas de

manera implícita a nivel constitucional, esto es, no refieren a políticas específicas sino de

manera más integral a producción o ambiente. Entre las normas generales de ambiente, a

nivel nacional la inclusión de estas políticas es inexistente, mientras que a nivel provincial,

en la norma cordobesa (Ley 7.343) la inclusión de políticas referidas a conservación de

fauna y producción agrícola se aborda en sentido amplio desde la conservación y la

sustentabilidad de los sistemas agrícolas. Estas normas son de gran relevancia, ya que

contienen los lineamientos que deben estructurar la gestión ambiental, y debieran orientar

la ejecución de la política ambiental en cada jurisdicción.

Existe regulación específica del problema, de manera sectorial es decir desde el

punto de vista de la conservación de la fauna (a través de adhesión a ley nacional y

regulación propia, ley de caza), y por otro lado, normas que persiguen evitar el daño en los

cultivos (Ley de sanidad vegetal y su reglamento). Esta última a pesar que legisla sobre

especies que afectan la producción, no aporta un concepto claro de “plaga” o aspectos que

debe tener una especie para ser plaga. No existe una norma específica que aborde el

problema de manera integral.

Por otro lado, la ley de ordenamiento territorial de bosques nativos de Córdoba N°

9.814/10, forma parte de la política provincial ya que define las categorías de bosque y las

actividades que se pueden realizar en ellas. Sin embargo podría estar en contradicción con

los criterios propuestos por la Ley de presupuestos Mínimos N° 26.331, ya que algunos de

los criterios propuestos podrían estar favoreciendo (o no limitando) el avance de la frontera

agrícola y con ello la pérdida de sistemas naturales y de servicios ecosistémicos.

53

En todos los casos los actores involucrados en la aplicación y control de las normas

son de carácter gubernamental, designados en la misma legislación. En ningún caso se

prevé la intervención de actores de otras áreas no pertenecientes al Estado.

Por otro lado y dado que la misma institucionalización se realiza a través de normas,

permite identificar el lugar que ocupa el ambiente en la gestión gubernamental que se trate.

En este sentido, el conflicto en cuestión es regulado de manera fragmentada, por

organismos de distintas Secretarías, pertenecientes a Ministerios diferentes, sin coordinar

acciones ni objetivos. No existe una repartición especial, con personal técnico capacitado

que se ocupe del tema, ni asesore los productores, a pesar que la producción agrícola es la

actividad más importante en la provincia, y por la cual sí se han realizado otras acciones de

carácter político (como la sanción de la ley 9.814 como se explicó anteriormente).

Síntesis de la Dimensión Política

El modelo de gestión pública vigente en relación al conflicto socio ambiental planteado, no

demuestra seguir enunciados claros ni una política ambiental general coherente que atienda

o incluya aspectos sociales, económicos y ambientales a través de herramientas jurídicas

ni institucionales específicos.

Elementos a tener en cuenta para una nueva estrategia de gestión.

Luego del análisis del modelo de gestión pública vigente en Córdoba (teniendo en cuentas

sus dimensiones jurídica, institucional y política) en relación a la problemática existente

entre especies de aves silvestres y la producción agrícola, se propone el siguiente esquema

que, si bien es general, podría constituir en una base para elaborar un modelo para la

gestión más completo que responda a las necesidades de los productores agrícolas por un

lado, y de sustentabilidad ambiental por el otro para la provincia.

A nivel Jurídico.

En base a la normativa vigente analizada se sugieren algunas medidas:

54

a) Dado que la legislación que aplican actualmente la Secretaría de Ambiente por

un lado para la protección de la fauna silvestre, caza deportiva, comercial, y de lucha o

defensa contra plagas (Ley 4.046/58), como la Secretaría de Agricultura (N° 4.967/68 y su

Decreto Reglamentario 6.373/79) datan de varias décadas, presentan listados de especies

vegetales y animales a las que se consideran plaga. La presencia de estas listas genera

dificultades en su aplicación, es poco adecuado desde el punto de vista del control y de la

protección ambiental, dificultando el manejo cuando la especie cambia de status

poblacional, por lo que se sugiere que estas normas sean revisadas y actualizadas.

Incluso, se propone que se analice la posibilidad de eliminar estas listas previendo

otros mecanismos institucionales más operativos de revisión periódica que facilite la toma

de decisiones.

b) Reforzar y especificar las funciones de ambas Secretarías en cuanto a su

intervención en el manejo del conflicto estudiado, para coordinar acciones, y administrar

de una manera más eficiente la problemática.

c) Algunos aspectos que debieran ser tenidos en cuenta al momento de revisar y

actualizar la normativa que regulan esta compleja problemática son: procurar abordar la

gestión con un enfoque sistémico, no solo desde la conservación de la fauna o desde el

control de especies que dañan los cultivos, sino con un abordaje integral del problema, que

incluya conceptos de sustentabilidad ambiental local y regional.

A nivel Institucional.

Dado que la problemática abordada en este trabajo entre los productores agrícolas y

especies de la fauna paloma torcaza Zenaida auriculata y cotorra Myiopsitta monachus- en

los cultivos, se aborda e intenta ser manejado desde dos organismos públicos con objetivos

diferentes, se identificó como necesidad la implementación de una instancia de

coordinación de políticas entre ellos, para la gestión, partiendo de la organización

institucional de cada entidad (Anexos XIII y XIV). Esto es, un área específica para

desarrollar la política conformada por técnicos, especialistas, funcionarios etc. que trabajen

55

en conjunto, coordinen acciones que tiendan a la producción de líneas más claras de

trabajo.

A nivel Político.

La política ambiental se instrumenta y ejecuta a través de herramientas de la gestión

pública ambiental. Por un lado las normas que regulan distintos aspectos del problema en

cuestión, y por otro las instituciones que administran. Así, si la decisión de gestionar el

conflicto es tomada por el gobierno provincial, la nueva gestión de la problemática debe

ser encarada atendiendo los aspectos que se mencionan en este trabajo a nivel jurídico e

institucional para un manejo eficiente.

56

DISCUSIÓN

El nivel y modalidad en que la Provincia de Córdoba ha gestionado el avance de la frontera

agropecuaria, la modificación y pérdida de los sistemas naturales, la producción agrícola y

la sustentabilidad ambiental, en particular en lo referido al manejo de los daños producidos

por aves en cultivos de granos, presenta vacíos importantes a nivel normativo e

institucional. Desde el punto de vista normativo, el tratamiento de esta problemática a nivel

nacional en general, y en Córdoba en particular, ha sido fragmentario y no se adecua a

criterios de sustentabilidad ambiental. Históricamente, el problema ha sido abordado a

partir de normas que toman como una de las principales medidas la declaración de especies

de la fauna como plaga. Es así como aún se encuentran vigentes normas (y listados de

especies incluidos en ellas), como el Decreto-Ley Nº 4.046 (de Caza) de 1958 y la ley de

Sanidad Vegetal N° 4.967 de 1968 (y Decreto Reglamentario 6.373/79). Éstas, sancionadas

en un contexto productivo y ambiental diferente al actual, surgen de criterios perimidos, de

difícil aplicación y dudosa efectividad. Entre otros aspectos, se requiere de análisis técnico-

económicos que determinen fehacientemente las pérdidas, así como la necesidad de

discutir el concepto de plaga. Al momento, no existe una normativa específica que abarque

de manera integral la gestión de los problemas ocasionados por los daños ni los conflictos

que estos producen entre diferentes actores, quienes difieren en el modo de encarar el

problema.

A nivel institucional, la gestión del problema es atomizada e ineficiente, recayendo

en la Secretaría de Agricultura la aplicación de la ley de Sanidad Vegetal y en la Secretaría

de Ambiente la ley de Caza y otras relacionadas a la conservación y manejo de la fauna

silvestre. Los funcionarios de cada Secretaría desconocen la normativa que aplica la otra;

la comunicación dentro la Secretaría de Ambiente y entre ésta y la Secretaría de

Agricultura es insuficiente, descoordinada, con contradicciones al momento de aplicar la

normativa. A modo de ejemplo, en el presente estudio, las personas entrevistadas en la

Secretaría de Ambiente aseguraron que la ley de Sanidad Vegetal estaba derogada, y

desconocían el listado de especias declaradas plaga en el Decreto-ley 4046 de Caza que

ellos mismos aplican. No existe una repartición específica que se encargue del control de

plagas; el problema es tratado en el área de Sanidad Vegetal, dificultándose una gestión de

los conflictos efectiva e integral.

57

Desde el punto de vista ambiental, la provincia de Córdoba ha perdido más del 70% de sus

bosques nativos, principalmente por la descontrolada expansión de la frontera

agropecuaria, sin planificación ni criterios de manejo adecuados (Barchuck et al. 2010).

Esta desaparición de ecosistemas boscosos fue funcional a políticas productivistas; a pesar

de la profusa legislación que regulaba la conservación de los bosques nativos (la primera

norma relacionada data de 1948, Ley de Defensa de la Riqueza Forestal Nº 13.273). El

resultado de esta transformación ha sido la generación de paisajes en mosaico donde se

alternan sitios adecuados para la nidificación y refugio de las palomas torcazas, con sitios

de provisión de agua y alimento concentrado (cultivos), características que favorecerían el

crecimiento poblacional de las palomas medianas (Bucher y Ranvaud 2006). El aumento

poblacional de las palomas tiene implicancias no sólo en el daño a los cultivos, sino en las

actividades de caza deportiva o turismo cinegético, que se ha transformado en una fuente

de recursos en la provincia de Córdoba.

Es importante destacar el crecimiento en los últimos años del turismo cinegético en

la provincia, especialmente de la paloma torcaza. Éste comenzó a ser regulado a partir de

la Resolución N° 1.115, la que contribuye a consolidar esta actividad, intentado asegurar el

uso y manejo racional de la fauna silvestre como recurso renovable, conservación del

medio ambiente, evitando la alteración y/o destrucción de los ecosistemas, especialmente

con residuos de plomo en el suelo y agua. Pero, actualmente, no existe un manejo

adecuado en las actividades cinegéticas. Prueba de ello es que se desconocen datos

importantes como número de aves cazadas por área/año, disposición de las aves cazadas,

número de turistas que ingresan al país y a la provincia para realizar estas actividades,

ingresos económicos obtenidos por cacería, etc. De este modo, se pierde la oportunidad de

obtener información poblacional valiosa para vincular a los problemas ocasionados por las

palomas en los cultivos. Además, se pierde la oportunidad de considerar a la caza,

realizada dentro de marcos legales que minimicen el impacto ambiental de la misma, como

una alternativa para disminuir los daños o asignar valor positivo a una especie que, para

otros actores (productores), tiene valor negativo.

Cabe mencionar aquí que las políticas públicas nunca son neutrales, ya que con o sin

intencionalidad, los actores sociales introducen sus posiciones, intereses y expectativas en

el establecimiento de prioridades, la toma de decisiones y la implementación de las

intervenciones públicas (Juliá & Foa 2013). Esto es significativo al observar que la

58

normativa específica vigente (fauna, sanidad vegetal, bosques etc.) ha sido formulada en

respuesta a una línea política de énfasis productivista, en épocas y contextos diferentes a

los actuales, respondiendo a las demandas de solución del sector productivo, y sin tener en

cuenta el aspecto ambiental. Por otro lado, cuando se habla de políticas “ambientales”, se

hace referencia al conjunto de aspectos y temáticas que normativa o institucionalmente se

presentan ligadas a la protección y conservación del ambiente; no incluye las políticas que

tienen por objetivo la gestión económica o el aprovechamiento de determinados recursos

(Juliá & Foa 2013). Surge como necesario, entonces, que las políticas públicas que

involucran aspectos productivos incluyan la complejidad de los problemas ambientales

vinculados a los mismos. Por tanto, deben ser integrales y contextualizadas según las

condiciones del territorio local. Esta situación es compleja y excede las fronteras de una

provincia y requiere de tomas de decisiones regionales. Actualmente se reconoce que, a

menos que se persigan objetivos de tipo políticos, la tendencia generalizada es que cada

sector se haga cargo de la resolución de sus problemas (aunque en algunos casos sea

necesaria cierta cooperación del Estado) (Juliá & Foa 2009b, Canavelli et al. 2008, 2010).

El manejo de los daños causados por aves en cultivos involucra aspectos de

sustentabilidad ambiental y producción agrícola de manera transversal. Por ende, debiera

posicionar el tema en el ámbito de las instituciones públicas relacionadas. A pesar que la

producción agrícola en la provincia de Córdoba es una de las principales actividades

económicas, aquí no se ha institucionalizado el problema, tampoco los objetivos a lograr

en relación a éste, estrategias a seguir; ni gestión coordinada con otras áreas de

administración pública. Las acciones más bien son orientadas a asegurar niveles mínimos

de aceptación por la ciudadanía, dejándose de lado criterios técnicos y dando prioridad a la

presión de un reducido sector de la sociedad.

La coordinación entre instituciones, actualmente debilitada, aparece como prioritaria

al momento de gestionar o aplicar medidas de manejo para prevenir o minimizar los daños

causados por aves en cultivos. La gestión desarrolla la capacidad de movilizar recursos de

manera racional y coherente para el desarrollo sustentable, incluyendo la capacidad de

diseñar políticas públicas socialmente consensuadas. Esto apunta a un nuevo estilo de

gestión caracterizado por un mayor grado de interacción y de cooperación entre el Estado y

los actores no estatales en concretar arreglos interinstitucionales que permitan coordinar

59

competencias, aunar esfuerzos, abarcar zonas denominadas grises, consensuar políticas

internas, etc. (Juliá & Foa 2009a).

La problemática descrita en este contexto es un indicador del desempeño de la

gestión pública; sin políticas públicas responsables y sostenidas el desarrollo social se

encuentra afectado. Proponer un modelo de gestión pública frente a este problema

constituye una alternativa de solución frente a los obstáculos que impiden un mejor

desempeño de los objetivos institucionales, consolidación de normas las cuales pasarán de

ser un simple conjunto de reglas de protección al ambiente y producción, a un sistema

jurídico que regule la protección y aprovechamiento sustentable de los ecosistemas y sus

recursos. Además permite articular decisiones, capacidades, recursos, estrategias,

programas y acciones que se encaminan a la exitosa gestión de las políticas públicas.

De los resultados analizados se infiere que el modelo de gestión desarrollado en la

actualidad en la provincia de Córdoba para abordar el problema del daño en cultivos por

especies de la fauna silvestre no es efectivo, y no otorga respuestas validas al sector

afectado. Una herramienta para contribuir a mejorar la eficiencia en la aplicación de los

componentes técnicos e institucionales sería la elaboración y desarrollo de un Modelo de

Gestión Pública por medio de la descripción de la problemática, competencias de los

actores involucrados, y análisis de la normativa vigente a nivel internacional, nacional y

provincial, el cual debería ser elaborado conjuntamente entre los funcionarios de la

Secretaría de Ambiente y Secretaría de Agricultura. Córdoba debiera hacer un esfuerzo en

que sus políticas publicas ambientales estén en consonancia con las nacionales en relación

a la conservación y manejo de bosques (por constituir un ambiente natural de cría de

algunas especies de aves), de la fauna y no sólo atender aspectos productivos. En este

sentido, esfuerzos en implementar los lineamientos de la Estrategia Nacional Biodiversidad

en su normativa sería un comienzo alentador.

En este trabajo se propone una guía que se espera constituya un primer instrumento

de base que oriente a tomadores de decisiones y administradores en la mejora del modelo

de gestión vigente del conflicto. La alternativa de abordaje a este problema socio-

ambiental no debiera basarse solo en métodos de control para las aves y en mejorar el

manejo de los cultivos, sino en la elaboración de políticas públicas integrales (ambiente y

producción), cuyos marcos legales e institucionales surjan del consenso entre los distintos

60

actores involucrados, en una nueva manera de afrontar una gestión eficiente y negociada de

esta problemática.

61

RECOMENDACIONES

En base a todo lo expuesto, se realizan las siguientes recomendaciones para elaborar un

modelo de gestión pública más acorde que favorezca el manejo adecuado del problema es

decir los daños por aves en cultivos sin generar conflictos entre las partes involucradas:

1) Reforzar, adecuar y trabajar en definir una política ambiental clara en la

provincia de Córdoba en relación al tema estudiado. Éstas debieran estar en consonancia

con las nacionales y regionales, incluyendo los lineamientos que surgen de los convenios y

tratados que Argentina firmó en relación a conservación de fauna. Se debe realizar un

esfuerzo en no sólo atender aspectos productivos, sino trabajar en políticas integrales de

conservación de los sistemas naturales de la provincia en general y bosques nativos en

particular, como ambiente natural de cría de aves, integrando la actividad productiva de

manera sustentable.

2) Adecuar la normativa provincial vigente a la normativa nacional, incluyendo

criterios de sustentabilidad ambiental y conceptos de manejo agrícola que permitan

mantener la diversidad biológica en sistemas modificados (comprendiendo propuestas para

prevenir y mitigar los impactos ambientales adversos y optimizar los impactos positivos), y

desarrollen acciones de restauración ambiental, mecanismos de compensación, medidas de

monitoreo, etc.

3) Actualizar la legislación de Córdoba, especialmente los conceptos de plaga y

daño incluidos en las mismas.

4) El manejo de los daños producidos por aves en cultivos debe ser abordado

conjuntamente desde lo técnico, lo normativo y lo institucional para definir una política

clara. Generar espacios de discusión, trabajo, intercambio de ideas, talleres, etc.

relacionados al tema estudiado, como iniciativa de los organismos públicos con

competencia en el tema. Para ello es imprescindible convocar a todos los actores

interesados e involucrados directamente en la problemática como INTA, productores

agrícolas, ONG’s, asociaciones rurales, universidades etc.

62

5) Las instituciones involucradas actualmente en la temática (Secretaría de

Ambiente y Agricultura) deberían trabajar coordinadamente en la construcción de una

política provincial clara que atienda el desarrollo sustentable regional y local. Para ello, se

debiera crear un espacio institucional específico que tenga por competencia el manejo de

los problemas que experimentan los productores agrícolas ante la presencia de especies de

la fauna silvestre que afectan la actividad agrícola.

6) Implementar un adecuado mecanismo de interacción y coordinación a nivel de

organizaciones gubernamentales de sanidad vegetal y manejo de fauna a nivel regional y

provincial a fin de uniformar políticas y criterios de manejo del problema de aves en la

región. Esto incluye eliminar las listas de especies declaradas plaga de manera permanente,

las cuales no reconocen la dinámica de los cambios en las poblaciones de las aves

silvestres y su interacción con el ambiente (y los cambios en el mismo).

7) Continuar las investigaciones relacionadas con pérdidas reales producidas por

aves, identificándolas y diferenciándolas claramente de las producidas por otros factores

(ej: meteorológicos, prácticas agrícolas, condiciones edáficas, etc). Debe impulsarse la

investigación tendiente a mejorar la tecnología de los cultivos afectados a fin de no

favorecer el incremento de poblaciones de aves plaga y los daños por ellas causados,

particularmente pérdidas en cosecha.

8) Vincular el trabajo que realizan programas públicos como el Programa de

Pérdidas en Cosecha y Post-Cosecha (PRECOP – INTA) en el asesoramiento a los

productores en todas las etapas de la producción de granos, desde la siembra hasta la

cosecha, y el almacenamiento y traslado del grano, a los daños ocasionados por las aves,

considerando la relación entre los derrames de granos y el favorecimiento de la presencia y

crecimiento de las poblaciones de aves potencialmente dañinas.

9) Elaborar diagnósticos y programas para el manejo de las aves que son cazadas

en las actividades de turismo y, a su vez, están vinculadas a daños en cultivos, como es el

caso de la paloma torcaza, ya que no se emiten datos como número de cazadores/año,

manejo de aves muertas, número de aves cazadas, etc. por medio de registros y bases de

datos. Controlar el funcionamiento de los cotos de caza, la ubicación de los sitios de caza y

63

su relación con sitios de cultivos susceptibles de ser dañados, vinculando las actividades de

los cazadores con los problemas de los productores.

10) Fomentar la difusión, educación y capacitación para todos los interesados en

esta temática, como causas de sobrepoblación de aves, impactos ambientales por expansión

de frontera agrícola y medidas de manejo adecuadas y sustentables.

En síntesis, se recomienda la formulación de una política integral que considere las

recomendaciones y que avance en el manejo adecuado de los problemas ocasionados por

las aves en cultivos. Dicha política debe incluir además de componentes ambientales y

nuevos sistemas de manejo agrícola, aspectos técnicos, jurídicos, económicos y financieros

que le permitan a la autoridad mejorar los procesos, por medio de planificación,

identificación de errores y potencialidades, para la adecuada aplicación de políticas

públicas.

Este trabajo ha sido una primera aproximación desde el punto de vista de la gestión

pública de la problemática relatada. Se espera que el mismo contribuya a mejorar el

conocimiento de los aspectos normativos e institucionales de esta problemática reiterada e

histórica en la provincia de Córdoba, sentando las bases para ampliar los procesos de

interacción sustentable entre conservación del capital natural de la provincia y el desarrollo

productiva de la región.

64

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70

ANEXOS

ANEXO I

NORMATIVA INTERNACIONAL

(Convenios y Acuerdos)

NORMA FECHA OBJETIVO

ORGANISMO

DE

APLICACIÓN

en Argentina

ARTÍCULOS RELACIONADOS

Objetivos de Desarrollo

del Milenio ONU-2015 2000

Los Objetivos representan las necesidades

humanas y los derechos básicos que todos

los individuos del planeta deberían poder

disfrutar: ausencia de hambre y pobreza

extrema; educación de buena calidad,

empleo productivo y decente, buena salud y

vivienda; el derecho de las mujeres a dar a

luz sin correr peligro de muerte; y un

mundo en el que la sostenibilidad del

medio ambiente sea una prioridad, y en el

que tanto mujeres como hombres vivan en

igualdad. Los líderes mundiales también han

prometido forjar una alianza de alcance

mundial en pos del desarrollo, para así

lograr esos objetivos universales

Organización de

Naciones Unidas

Meta 1.

Incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y los

programas nacionales e invertir la pérdida Objetivo 7 de recursos del

medio ambiente.

Meta 2.

Reducir la pérdida de biodiversidad, alcanzando, para el año 2010, una

reducción significativa de la tasa de pérdida

Convenio sobre

Diversidad Biológica 1992

Artículo 1. Los objetivos del presente Convenio, que se

han de perseguir de conformidad con sus

disposiciones pertinentes, son la

conservación de la diversidad biológica, la

utilización sostenible de sus componentes y

la participación justa y equitativa en los

beneficios que se deriven de la utilización

de los recursos genéticos, mediante, entre

otras cosas, un

acceso adecuado a esos recursos y una

Artículo 6. Medidas generales a los efectos de la conservación y la

utilización sostenible.

Cada Parte Contratante, con arreglo a sus condiciones y capacidades

particulares:

a) Elaborará estrategias, planes o programas nacionales para la

conservación y la utilización sostenible de la diversidad biológica o

adaptará para ese fin las estrategias, planes o programas existentes, que

habrán de reflejar, entre otras cosas, las medidas establecidas en el

presente Convenio que sean pertinentes para la Parte Contratante

interesada; y

b) Integrará, en la medida de lo posible y según proceda, la conservación

71

transferencia apropiada de las tecnologías

pertinentes, teniendo en cuenta todos los

derechos sobre esos recursos y a esas

tecnologías, así como mediante una

financiación apropiada.

y la utilización sostenible de la diversidad biológica en los planes,

programas y políticas sectoriales o intersectoriales.

Artículo 10. Utilización sostenible de los componentes de la diversidad

biológica. Cada Parte Contratante, en la medida de lo posible y según

proceda:

b) Adoptará medidas relativas a la utilización de los recursos biológicos

para evitar o reducir al mínimo los efectos adversos para la diversidad

biológica;

d) Prestará ayuda a las poblaciones locales para preparar y

aplicar medidas correctivas en las zonas degradadas donde la diversidad

biológica se ha reducido; y

e) Fomentará la cooperación entre sus autoridades gubernamentales y su

sector privado en la elaboración de métodos para la utilización sostenible

de los recursos biol.

Acuerdo Marco Del

Medio Ambiente Junio 2001

Art. 4º El presente Acuerdo tiene por objeto

el desarrollo sustentable y la protección del

medio ambiente, mediante la articulación de

las dimensiones económicas, sociales y

ambientales, contribuyendo a una mejor

calidad del ambiente y de la vida de la

población

MERCOSUR

Artículo 3. a) promoción de la protección del medio ambiente y del

aprovechamiento más eficaz de los recursos disponibles mediante la

coordinación de políticas sectoriales, sobre la base de los principios de

gradualidad, flexibilidad y equilibrio.

d) tratamiento prioritario e integral de las causas y las fuentes de los

problemas ambientales

Artículo 6. b) Incentivar políticas e instrumentos nacionales en materia

ambiental, buscando optimizar la gestión del medio ambiente.

c) buscar la armonización de las legislaciones ambientales, considerando

las diferentes realidades ambientales, sociales y económicas de los países

del MERCOSUR.

Declaración de Río sobre

el Medio Ambiente y el

Desarrollo

1992

Con el objetivo de establecer una alianza

mundial nueva y equitativa mediante la

creación de nuevos niveles de cooperación

entre los Estados, los sectores claves de las

sociedades y las personas, procurando

alcanzar acuerdos nacionales en los que se

respeten los intereses de todos y se proteja

la integridad el sistema ambiental y de

desarrollo mundial.

Organización de

Naciones Unidas

PRINCIPIO 4 A fin de alcanzar el desarrollo sostenible, la protección del medio

ambiente deberá constituir parte integrante del proceso de desarrollo y no

podrá considerarse en forma aislada.

PRINCIPIO 11 Los Estados deberán promulgar leyes eficaces sobre el medio ambiente.

Las normas, los objetivos de ordenación y las prioridades ambientales

deberían reflejar el contexto ambiental y de desarrollo al que se aplican.

Las normas aplicadas por algunos países pueden resultar inadecuadas y

representar un costo social y económico injustificado para otros países, en

particular los países en desarrollo.

72

Río+20 Conferencia de

las naciones unidas

sobre desarrollo

sostenible

Junio 2012

Reducir la pobreza, fomentar la equidad

social y garantizar la protección del medio

ambiente

ONU

39. Reconocemos que el planeta Tierra y sus ecosistemas son nuestro

hogar y que “Madre Tierra” es una expresión común en muchos países y

regiones, y observamos que algunos países reconocen los derechos de la

naturaleza en el contexto de la promoción del desarrollo sostenible.

Estamos convencidos de que, para lograr un justo equilibrio entre las

necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones

presentes y futuras, es necesario promover la armonía con la

naturaleza.52. Reconocemos que los agricultores, incluidos los pequeños

agricultores y los pescadores artesanales, los pastores y los silvicultores,

pueden contribuir en gran medida al desarrollo sostenible mediante

actividades de producción que sean ambientalmente racionales, mejoren

la seguridad alimentaria y los medios de vida de los pobres e impulsen la

producción y el crecimiento económico sostenible.58. Afirmamos que las

políticas de economía verde en el contexto del desarrollo sostenible y la

erradicación de la pobreza deberán:b) Respetar la soberanía nacional de

cada país sobre sus recursos naturales, teniendo en cuenta sus

circunstancias, objetivos, responsabilidades, prioridades y margen de

acción con respecto a las tres dimensiones del desarrollo sostenible.

* Turismo sostenible

Reconocemos la necesidad de apoyar las actividades de turismo

sostenible y la creación de capacidad conexa que permitan crear

conciencia ambiental, conservar y proteger el medio ambiente, respetar la

fauna y la flora silvestres, la diversidad biológica, los ecosistemas y la

diversidad cultural y aumentar el bienestar y mejorar los medios de vida

de las comunidades locales apoyando a las economías locales y el medio

humano y natural en su conjunto

* Bosques

Pedimos que se realicen mayores esfuerzos para lograr la ordenación

sostenible de los bosques, la reforestación, la restauración y la

forestación, y apoyamos las medidas para enlentecer, detener y revertir la

deforestación y la degradación forestal.

* Biodiversidad

198. Reiteramos nuestro compromiso con el logro de los tres objetivos del

Convenio sobre la Diversidad Biológica y pedimos que se emprendan

medidas urgentes para reducir, detener y revertir efectivamente la tarea de

pérdida de biodiversidad.

201. Apoyamos que se incorpore la consideración de los efectos y

beneficios socioeconómicos de la conservación y uso sostenible de la

biodiversidad y sus componentes, así como los ecosistemas que

proporcionan servicios esenciales, en los programas y políticas

pertinentes a todos los niveles, de conformidad con la legislación,

73

circunstancias y prioridades nacionales.

201. Apoyamos que se incorpore la consideración de los efectos y

beneficios socioeconómicos de la conservación y uso sostenible de la

biodiversidad y sus componentes, así como los ecosistemas que

proporcionan servicios esenciales, en los programas y políticas

pertinentes a todos los niveles, de conformidad con la legislación,

circunstancias y prioridades nacionales.

* Desertificación, degradación de la tierra y sequía

205. Reconocemos la importancia económica y social de una buena

gestión de la tierra, incluido el suelo, y en particular su contribución al

crecimiento económico, la biodiversidad, la agricultura sostenible y la

seguridad alimentaria. Destacamos que la desertificación, la degradación

de la tierra y la sequía son problemas con una dimensión mundial que

siguen suponiendo un serio desafío para el desarrollo sostenible de todos

los países, en particular los países en desarrollo

* Productos químicos y desechos

213. Reconocemos que una gestión racional de los productos químicos es

fundamental para la protección de la salud humana y el medio ambiente.

74

ANEXO II

NORMATIVA NACIONAL

NORMA No

FECHA

DE

SANCION

OBJETIVO

ORGANISMO

DE

APLICACIÓN

ARTÍCULOS RELACIONADOS SANCIONES

1.

Constitución

Nacional

Argentina

22 de

Agosto de

1994

Constituir la unión

nacional, afianzar la

justicia, consolidar la paz

interior, proveer a la

defensa común, promover

el bienestar general, y

asegurar los beneficios de

la libertad, para nosotros,

para nuestra posteridad, y

para todos los hombres

del mundo que quieran

habitar en el suelo

argentino: invocando la

protección de Dios, fuente

de toda razón y justicia:

ordenamos, decretamos y

establecemos esta

Constitución para la

Nación Argentina.

Artículo 41- Todos los habitantes gozan del

derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto

para el desarrollo humano y para que las

actividades productivas satisfagan las necesidades

presentes sin comprometer las de las generaciones

futuras; y tienen el deber de preservarlo. El daño

ambiental generará prioritariamente la obligación

de recomponer, según lo establezca la ley. Las

autoridades proveerán a la protección de este

derecho, a la utilización racional de los recursos

naturales, a la preservación del patrimonio natural

y cultural y de la diversidad biológica, y a la

información y educación ambientales.

Corresponde a la Nación dictar las normas que

contengan los presupuestos mínimos de

protección, y a las provincias, las necesarias para

complementarlas, sin que aquellas alteren las

jurisdicciones locales.

Artículo 43- Toda persona puede interponer

acción expedita y rápida de amparo, siempre que

no exista otro medio judicial más idóneo, contra

todo acto u omisión de autoridades públicas o de

particulares, que en forma actual o inminente

lesione, restrinja, altere o amenace, con

arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y

garantías reconocidos por esta Constitución, un

tratado o una ley.

Podrán interponer esta acción contra cualquier

forma de discriminación y en lo relativo a los

derechos que protegen al ambiente, a la

competencia, al usuario y al consumidor, así como

Artículo 29- El Congreso no puede conceder

al Ejecutivo nacional, ni las Legislaturas

provinciales a los gobernadores de

provincias, facultades extraordinarias, ni la

suma del poder público, ni otorgarles

sumisiones o supremacías por las que la

vida, el honor o las fortunas de los

argentinos queden a merced de gobiernos o

persona alguna. Actos de esta naturaleza

llevan consigo una nulidad insanable y

sujetarán a los que los formulen, consientan

o firmen, a la responsabilidad y pena de los

infames traidores a la Patria.

Artículo 36- Esta Constitución mantendrá su

imperio aun cuando se interrumpiere su

observancia por actos de fuerza contra el

orden institucional y el sistema democrático.

Estos actos serán insanablemente nulos.

Sus autores serán pasibles de la sanción

prevista en el Artículo 29, inhabilitados a

perpetuidad para ocupar cargos públicos y

excluidos de los beneficios del indulto y la

conmutación de penas.

Tendrán las mismas sanciones quienes,

como consecuencia de estos actos, usurparen

funciones previstas para las autoridades de

esta Constitución o las de las provincias, los

que responderán civil y penalmente de sus

actos. Las acciones respectivas serán

imprescriptibles.

75

a los derechos de incidencia colectiva en general,

Artículo 124.- Las provincias podrán crear

regiones para el desarrollo económico - social y

establecer órganos con facultades para el

cumplimiento de sus fines y podrán también

celebrar convenios internacionales en tanto no

sean incompatibles con la política exterior de la

Nación y no afecten las facultades delegadas al

Gobierno Federal o el crédito público de la

Nación; con conocimiento del Congreso Nacional.

La ciudad de Buenos Aires tendrá el régimen que

se establezca a tal efecto.

Corresponde a las provincias el dominio

originario de los recursos naturales existentes en

su territorio.

2.

Ley Nacional

de

Aprobación

del Convenio

sobre

Diversidad

Biológica.

24.375

Publicada 6

de Octubre

1994

Conservación de la

diversidad biológica, la

utilización sostenible de

sus componentes y la

participación justa y

equitativa en los

beneficios que se deriven

de la utilización de los

recursos genéticos,

mediante, entre otras

cosas, un acceso adecuado

a esos recursos y una

transferencia apropiada de

las tecnologías

pertinentes, teniendo en

cuenta todos los derechos

sobre esos recursos y a

esas tecnologías, así como

mediante una financiación

apropiada

Artículo 10. Utilización sostenible de los

componentes de la diversidad biológica Cada Parte Contratante, en la medida de lo posible

y según proceda:

a) Integrará el examen de la conservación y la

utilización sostenible de los recursos biológicos en

los procesos nacionales de adopción de

decisiones;

b) Adoptará medidas relativas a la utilización de

los recursos biológicos para evitar o reducir al

mínimo los efectos adversos para la diversidad

biológica;

c) Protegerá y alentará la utilización

consuetudinaria de los recursos biológicos, de

conformidad con las prácticas culturales

tradicionales que sean compatibles con las

exigencias de la conservación o de la utilización

sostenible;

d) Prestará ayuda a las poblaciones locales para

preparar y aplicar medidas correctivas en las

zonas degradadas donde la diversidad biológica se

ha reducido; y

e) Fomentará la cooperación entre sus autoridades

gubernamentales y su sector privado en la

elaboración de métodos para la utilización

sostenible de los recursos biológicos.

76

Artículo 14. Evaluación del impacto y

reducción al mínimo del impacto adverso 1. Cada Parte Contratante, en la medida de lo

posible y según proceda:

a) Establecerá procedimientos apropiados por los

que se exija la evaluación del impacto ambiental

de sus proyectos propuestos que puedan tener

efectos adversos importantes para la diversidad

biológica con miras a evitar o reducir al mínimo

esos efectos y, cuando proceda, permitirá la

participación del público en esos procedimientos.

b) Establecerá arreglos apropiados para asegurarse

de que se tengan debidamente en cuenta las

consecuencias ambientales de sus programas y

políticas que puedan tener efectos adversos

importantes para la diversidad biológica.

ESTRATEGIA NACIONAL DE

BIODIVERSIDAD

III. Diversidad biológica y agroecosistemas

Objetivo 1.

Evaluar y monitorear el estado de la diversidad

biológica en los agroecosistemas, su importancia

ecológica y económica y el impacto ambiental de

las distintas prácticas de uso agropecuario,

sistemas de producción y proyectos de desarrollo.

Objetivo 2.

Minimizar la pérdida de diversidad biológica en

los agroecosistemas, a través de medidas para su

prevención o mitigación.

3.

Ley de

Defensa

Sanitaria

Agrícola

6704/63

12 de

Agosto de

1963

Artículo 1. La defensa

sanitaria de la producción

agrícola en todo el

territorio de la República

contra animales vegetales

o agentes de cualquier

origen biológico

perjudiciales se hará

efectiva por el Poder

Ejecutivo y por los

medios que este decreto

establece.

Ministerio de

Agricultura,

Ganadería y

Alimentos

Artículo 2.- El organismo de aplicación de este

decreto hará la nomenclatura de los agentes

perjudiciales referidos en el Artículo anterior

respecto de los cuales regirán las disposiciones del

presente o podrá declararlos plagas a tales efectos

cuando puedan considerarse tales por su carácter

extensivo, invasor o calamitoso. En tales casos se

dará a conocer los métodos aconsejados por la

técnica agroquímica para erradicarlas o establecer

sobre ellas un adecuado control.

Artículo 4.- El organismo de aplicación podrá

utilizar los procedimientos aconsejados por las

Artículo 11. Toda infracción a las

disposiciones contenidas en los Artículos 3º,

5º y 6º será penada con una multa desde un

mil pesos moneda nacional ( m$n 1.000 ) a

un millón de pesos moneda nacional ( m$n

1.000.000) según la importancia de la

infracción y de acuerdo a las circunstancias

de cada caso Las penas podrán duplicarse en

caso de reincidencia Se considerará

reincidente cuando entre una pena y la

subsiguiente infracción no hayan

transcurrido dos años.

77

prácticas científicas para combatir los agentes

perjudiciales referidos en el Artículo 2, está

facultado para ordenar la destrucción parcial o

total de sembrados, plantaciones, sus productos,

derivados de éstos cuando, a su juicio, la

infestación o infección pudiera ocasionar mayores

perjuicios a la producción.

Artículo 6.- Las personas a que se refiere el

Artículo anterior están obligadas a efectuar por su

cuenta, dentro de los inmuebles y/o medios de

transportes que posean u ocupen las medidas que

el organismo de aplicación determine para destruir

las plagas, con personal y elementos suficientes,

proporcionados a la extensión del fundo o la cosa

y a la intensidad de la infestación o infección.

Artículo 17.- Los propietarios de bosques,

sembrados, vegetales, sus portes, productos

derivados de éstos o plantaciones cuya

destrucción se ordene tendrán derecho a una

indemnización cuyo monto será determinado en

base a la justipreciación del estado en que se

encontraban y de los beneficios que pudieran

obtenerse de las cosas destruidas. La destrucción

se hará constar en acta con intervención del

interesado y en su ausencia ante dos testigos o

ante la autoridad nacional o provincial más

inmediata.

No habrá lugar a indemnización cuando el ataque

por su intensidad o por la naturaleza misma del

agente productor de la infección o infestación

debía de haber producido la destrucción o pérdida

de los bosques, sembrados, vegetales, sus portes

productos o derivados de éstos o plantaciones.

Tampoco tendrán el derecho a ser indemnizados

los que no hubieran dado cumplimiento a las

órdenes de los funcionarios para realizar los

trabajos de lucha necesarios.

Artículo 25. Cuando se comprobare la

realización de trabajos por cuenta de terceros

sin estar inscripta la empresa en el registro

referido en el Artículo 22, la empresa

locadora será pasible de una multa de un mil

pesos moneda nacional (m$n. 1.000) a un

millón de pesos moneda nacional (m$n

1.000.000).

78

4.

Ley Nacional

de Fauna

22421

Publicada

12 de

Marzo de

1981

Declarar de interés

público la fauna silvestre

que temporal o

permanentemente habita

el Territorio de la

República, así como su

protección, conservación,

propagación, repoblación

y aprovechamiento

racional.

Secretaría de

Ambiente

Artículo 2 - En la reglamentación y aplicación de

esta Ley las autoridades deberán respetar el

equilibrio entre los diversos beneficios

económicos, culturales, agropecuarios, recreativos

y estéticos que la fauna silvestre aporta al hombre,

pero dando en todos los casos la debida prelación

a la conservación de la misma como criterio rector

de los actos a otorgarse.

Artículo 4 - Se ajustarán a las disposiciones de

esta Ley y su Reglamento, la caza, hostigamiento,

captura o destrucción de sus crías, huevos, nidos y

guaridas, tenencia, posesión, tránsito,

aprovechamiento, comercio y transformación de

la fauna silvestre y sus productos y subproductos.

Artículo 28. Las infracciones que se

cometen en violación de las disposiciones de

esta Ley y sus reglamentaciones, serán

sancionadas con:

a) Multa de setenta mil pesos ($ 70.000,00) a

cincuenta millones de pesos

($50.000.000.00), la que llevará aparejada el

comiso de los animales, pieles, cueros, lanas,

pelos, plumas, cuernos y demás productos,

subproductos y derivados en infracción. En

todos los casos se decomisarán las armas o

artes empleadas, cartuchos, trampas y otros

instrumentos utilizados para cometer la

infracción. El destino de los animales u

objetos decomisados será establecido en las

disposiciones reglamentarias.

b) Suspensión de un (1) mes a dos (2) años y

cancelación de la Licencia de Caza

Deportiva, sanciones que serán graduadas de

acuerdo a la naturaleza y gravedad de la

infracción, el perjuicio causado y los

antecedentes del infractor.

c) Suspensión, inhabilitación o clausura de

los locales o comercios, como asimismo

suspensión o cancelación de licencias de

caza comercial. En todos los casos podrán

ser de un (1) año hasta cinco (5) años y se

aplicarán solo a los reincidentes.

Artículo 24. Será reprimido con prisión de

un (1) mes a un (1) año y con inhabilitación

especial de hasta tres (3) años, el que cazare

animales de la fauna silvestre en campo

ajeno sin la autorización establecida en el

Artículo 16.

79

5.

Decreto

reglamentario

sobre

conservación

de la fauna

silvestre.

666/97

Publicado

25 de Julio

de 1997

Artículo 2. La autoridad

de aplicación promoverá y

coordinará la realización

de estudios y evaluaciones

técnicas con el objeto de

determinar la situación de

la fauna silvestre, a los

fines de la adopción de las

medidas de protección,

conservación y manejo de

la misma establecidas en

la ley.

Secretaría de

Ambiente

Artículo 47. — Las sanciones establecidas en la

Ley 22.421 se aplicarán previo sumario que

asegure el derecho de defensa, conforme al

procedimiento que fije la autoridad de aplicación,

y con aplicación supletoria de lo prescripto por la

Ley 19.549 de Procedimientos Administrativos.

Artículo 8: La autoridad de aplicación, sobre la

base de los estudios y evaluaciones realizadas

respecto de aquellas especies de la fauna silvestre

cuya utilización fuera posible y conveniente,

elaborará planes nacionales de manejo a efectos

de lograr un aprovechamiento racional y

sostenible de las mismas.

Artículo 9: El aprovechamiento de las especies

que involucrarán estos planes deberá limitarse a

una cantidad o porcentaje tal que no comprometa

la estabilidad de sus poblaciones.

A tales efectos se fijarán cupos, ya sea globales,

por hectárea explotable u otro sistema

técnicamente aplicable, así como otras medidas de

regulación que se consideren pertinentes.

Artículo 13. Caza deportiva— La autoridad de

aplicación procurará uniformar con las respectivas

autoridades provinciales competentes, un régimen

de exigencias generales de la actividad cinegética,

a fin de lograr un manejo integral de las especies

involucradas.

Artículo 20. — Para las especies consideradas

dañinas o perjudiciales, la autoridad de aplicación

deberá establecer planes periódicos de control

integrado, que contemplen evaluaciones de daño

real, identificación de variables que afectan la

densidad de la especie en cuestión, diseño de

estrategias de control poblacional e indicadores de

control efectivo, entre otros aspectos.

Artículo 47. — Las sanciones establecidas

en la Ley 22.421 se aplicarán previo sumario

que asegure el derecho de defensa, conforme

al procedimiento que fije la autoridad de

aplicación, y con aplicación supletoria de lo

prescripto por la Ley 19.549 de

Procedimientos Administrativos.

Artículo 54. — Las armas de fuego que sean

secuestradas serán entregadas contra recibo

por duplicado al destacamento de fuerzas de

seguridad o autoridad municipal más

próxima adjuntándose copia de dicho recibo

al acta de infracción y entregando el original

al infractor. El mismo deberá adoptar los

recaudos para preservar adecuadamente las

armas por largo período.

80

6.

Ley General

del Ambiente

25.675

6 de

Noviembre

de 2002

La presente ley establece

los presupuestos mínimos

para el logro de una

gestión sustentable y

adecuada del ambiente, la

preservación y protección

de la diversidad biológica

y la implementación del

desarrollo sustentable

Secretaría de

Ambiente

Artículo 2— La política ambiental nacional

deberá cumplir los siguientes objetivos:

a) Asegurar la preservación, conservación,

recuperación y mejoramiento de la calidad de los

recursos ambientales, tanto naturales como

culturales, en la realización de las diferentes

actividades antrópicas;

g) Prevenir los efectos nocivos o peligrosos que

las actividades antrópicas generan sobre el

ambiente para posibilitar la sustentabilidad

ecológica, económica y social del desarrollo.

PRESUPUESTOS MÍNIMOS

Artículo 6. Se entiende por presupuesto mínimo,

establecido en el Artículo 41 de la Constitución

Nacional, a toda norma que concede una tutela

ambiental uniforme o común para todo el

territorio nacional, y tiene por objeto imponer

condiciones necesarias para asegurar la protección

ambiental. En su contenido, debe prever las

condiciones necesarias para garantizar la dinámica

de los sistemas ecológicos, mantener su capacidad

de carga y, en general, asegurar la preservación

ambiental y el desarrollo sustentable.

Artículo 22. — Toda persona física o jurídica,

pública o privada, que realice actividades

riesgosas para el ambiente, los ecosistemas y sus

elementos constitutivos, deberá contratar un

seguro de cobertura con entidad suficiente para

garantizar el financiamiento de la recomposición

del daño que en su tipo pudiere producir;

asimismo, según el caso y las posibilidades, podrá

integrar un fondo de restauración ambiental que

posibilite la instrumentación de acciones de

reparación.

Artículo 27. — El presente capítulo establece las

normas que regirán los hechos o actos jurídicos,

lícitos o ilícitos que, por acción u omisión, causen

daño ambiental de incidencia colectiva. Se define

el daño ambiental como toda alteración relevante

que modifique negativamente el ambiente, sus

Artículo 28. El que cause el daño ambiental

será objetivamente responsable de su

restablecimiento al estado anterior a su

producción. En caso de que no sea

técnicamente factible, la indemnización

sustitutiva que determine la justicia ordinaria

interviniente, deberá depositarse en el Fondo

de Compensación Ambiental que se crea por

la presente, el cual será administrado por la

autoridad de aplicación, sin perjuicio de

otras acciones judiciales que pudieran

corresponder.

81

recursos, el equilibrio de los ecosistemas, o los

bienes o valores colectivos.

Artículo 34. — Créase el Fondo de

Compensación Ambiental que será administrado

por la autoridad competente de cada jurisdicción y

estará destinado a garantizar la calidad ambiental,

la prevención y mitigación de efectos nocivos o

peligrosos sobre el ambiente, la atención de

emergencias ambientales; asimismo, a la

protección, preservación, conservación o

compensación de los sistemas ecológicos y el

ambiente.

7.

Ley de

presupuestos

mínimos de

protección

ambiental de

bosques

nativos

26331

Sancionada

28 de

Noviembre

del 2007

Artículo 1. La presente

ley establece los

presupuestos mínimos de

protección ambiental para

el enriquecimiento, la

restauración,

conservación,

aprovechamiento y

manejo sostenible de los

bosques nativos, y de los

servicios ambientales que

éstos brindan a la

sociedad. Asimismo,

establece un régimen de

fomento y criterios para la

distribución de fondos por

los servicios ambientales

que brindan los bosques

nativos.

Secretaría de

Ambiente o el

organismo de

mayor jerarquía

con competencia

ambiental que en

el futuro la

reemplace.

Artículo 1. La presente ley establece los

presupuestos mínimos de protección ambiental

para el enriquecimiento, la restauración,

conservación, aprovechamiento y manejo

sostenible de los bosques nativos, y de los

servicios ambientales que éstos brindan a la

sociedad. Asimismo, establece un régimen de

fomento y criterios para la distribución de fondos

por los servicios ambientales que brindan los

bosques nativos

Artículo 3º - Son objetivos de la presente ley:

a) Promover la conservación mediante el

Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos

y la regulación de la expansión de la frontera

agropecuaria y de cualquier otro cambio de uso

del suelo;

b) Implementar las medidas necesarias para

regular y controlar la disminución de la superficie

de bosques nativos existentes, tendiendo a lograr

una superficie perdurable en el tiempo;

c) Mejorar y mantener los procesos ecológicos y

culturales en los bosques nativos que beneficien a

la sociedad;

d) Hacer prevalecer los principios precautorio y

preventivo, manteniendo bosques nativos cuyos

beneficios ambientales o los daños ambientales

que su ausencia generase, aún no puedan

demostrarse con las técnicas disponibles en la

actualidad;

Artículo 29. - Las sanciones al

incumplimiento de la presente ley y de las

reglamentaciones que en su consecuencia se

dicten, sin perjuicio de las demás

responsabilidades que pudieran

corresponder, serán las que se fijen en cada

una de las jurisdicciones conforme el poder

de policía que les corresponde, las que no

podrán ser inferiores a las aquí establecidas.

Las jurisdicciones que no cuenten con un

régimen de sanciones aplicarán

supletoriamente las siguientes sanciones que

corresponden a la jurisdicción nacional:

a) Apercibimiento;

b) Multa entre TRESCIENTOS (300) y

DIEZ MIL (10.000) sueldos básicos de la

categoría inicial de la administración pública

nacional. El producido de estas multas será

afectado al área de protección ambiental que

corresponda;

c) Suspensión o revocación de las

autorizaciones.

Estas sanciones serán aplicables previo

sumario sustanciado en la jurisdicción en

donde se realizó la infracción y se regirán

por las normas de procedimiento

administrativo que corresponda,

asegurándose el debido proceso legal, y se

graduarán de acuerdo a la naturaleza de la

82

e) Fomentar las actividades de enriquecimiento,

conservación, restauración mejoramiento y

manejo sostenible de los bosques nativos.

Artículo 9º - Las categorías de conservación de

los bosques nativos son las siguientes:

- Categoría I (rojo): sectores de muy alto valor

de conservación que no deben transformarse.

Incluirá áreas que por sus ubicaciones relativas a

reservas, su valor de conectividad, la presencia de

valores biológicos sobresalientes y/o la protección

de cuencas que ejercen, ameritan su persistencia

como bosque a perpetuidad, aunque estos sectores

puedan ser hábitat de comunidades indígenas y ser

objeto de investigación científica.

- Categoría II (amarillo): sectores de mediano

valor de conservación, que pueden estar

degradados pero que a juicio de la autoridad de

aplicación jurisdiccional con la implementación

de actividades de restauración pueden tener un

valor alto de conservación y que podrán ser

sometidos a los siguientes usos: aprovechamiento

sostenible, turismo, recolección e investigación

científica.

- Categoría III (verde): sectores de bajo valor de

conservación que pueden transformarse

parcialmente o en su totalidad aunque dentro de

los criterios de la presente ley.

infracción.

83

ANEXO III

NORMATIVA DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA

NORMA No

FECHA

DE

SANCION

OBJETIVO

ÓRGANO

DE

APLICACIÓN

ARTÍCULOS RELACIONADOS SANCIONES

1.

Constitución

Provincial de

Córdoba

10 de

Diciembre

del 2001

Exaltar la dignidad de la persona y

garantizar el pleno ejercicio de sus

derechos; y reafirmar los valores de

la libertad, la igualdad y la

solidaridad; consolidar el sistema

representativo, republicano y

democrático; afianzar los derechos

de la Provincia en el concierto

federal argentino; asegurar la

autonomía municipal y el acceso de

todas las personas a la justicia, la

educación y la cultura; y promover

una economía puesta al servicio del

hombre y la justicia social; para el

definitivo establecimiento de una

democracia pluralista y participativa

y a la consecución del bien común

Gobierno

Provincial

Artículo 11: Recursos naturales y medio

ambiente. El Estado Provincial resguarda el

equilibrio ecológico, protege el medio

ambiente y preserva los recursos naturales.

Artículo 38. De los deberes de toda persona:

Literal 8. Evitar la contaminación ambiental y

participar en la defensa ecológica.

Artículo 53: Protección de los intereses

difusos. La ley garantiza a toda persona, sin

perjuicio de la responsabilidad del Estado, la

legitimación para obtener de las autoridades la

protección de los intereses difusos, ecológicos

o de cualquier índole, reconocidos en esta

Constitución.

Artículo 64: Ciencia y Tecnología. El Estado

Provincial protege, fomenta y orienta el

progreso, uso e incorporación de la ciencia y

la tecnología, siempre que reafirmen la

soberanía nacional y el desarrollo regional,

que no alteren el equilibrio ecológico y

contribuyan al mejoramiento integral del

hombre.

Artículo 66: Medio ambiente y calidad de

vida. Toda persona tiene derecho a gozar de

un medio ambiente sano. Este derecho

comprende el de vivir en un ambiente físico y

social libre de factores nocivos para la salud, a

la conservación de los recursos naturales y

culturales y a los valores estéticos que

permitan asentamientos humanos dignos, y la

preservación de la flora y la fauna.

El agua, el suelo y el aire como elementos

vitales para el hombre, son materia de especial

Artículo 100: Sanciones La Legislatura tiene facultades

para sancionar las faltas

cometidas dentro y fuera del

recinto, que atenten contra el

orden de las sesiones. Puede

imponer arrestos o servicios

comunitarios a terceros por un

lapso de tiempo que no pase de

treinta días, sin perjuicio de

ponerlos, si correspondiera, a

disposición del juez

competente. En todos los casos

debe asegurarse el derecho de

defensa y debido proceso.

Artículo 166. Atribuciones 6. Aplicar sanciones

disciplinarias a magistrados,

funcionarios y empleados

judiciales, de conformidad al

régimen y procedimiento que

se fije.

Artículo 187. Régimen

sancionatorio y tribunal de

faltas Las disposiciones orgánicas

municipales y las ordenanzas

que en consecuencia se dicten

pueden autorizar a las

autoridades para imponer

multas; disponer la demolición

de construcciones, clausura y

desalojo de los inmuebles;

84

protección en la Provincia.

El Estado Provincial protege el medio

ambiente, preserva los recursos naturales

ordenando su uso y explotación, y resguarda

el equilibrio del sistema ecológico, sin

discriminación de individuos o regiones. Para

ello, dicta normas que aseguren:

1. La eficacia de los principios de armonía de

los ecosistemas y la integración, diversidad,

mantenimiento y recuperación de recursos.

2. La compatibilidad de la programación

física, económica y social de la Provincia, con

la preservación y mejoramiento del ambiente.

3. Una distribución equilibrada de la

urbanización en el territorio.

4. La asignación prioritaria de medios

suficientes para la elevación de la calidad de

vida en los asentamientos humanos.

Artículo 68: Recursos naturales. El Estado

Provincial defiende los recursos naturales

renovables y no renovables, en base a su

aprovechamiento racional e integral, que

preserve el patrimonio arqueológico,

paisajístico y la protección del medio

ambiente.

La tierra es un bien permanente de

producción; la ley garantiza su preservación y

recuperación, procura evitar la pérdida de

fertilidad, la erosión y regula el empleo de las

tecnologías de aplicación.

Las aguas que sean de dominio público y su

aprovechamiento, están sujetas al interés

general. El Estado reglamenta su uso racional

y adopta las medidas conducentes para evitar

su contaminación. El Estado Provincial

resguarda la supervivencia y conservación de

los bosques, promueve su explotación racional

y correcto aprovechamiento, propende al

desarrollo y mejora de las especies y a su

reposición mediante forestación y la

reforestación que salvaguarde la estabilidad

secuestro, decomiso o

destrucción de objetos, para lo

cual las Municipalidades

pueden requerir el auxilio de la

fuerza pública y recabar

órdenes de allanamiento.

También pueden imponer

sanciones de arresto de hasta

quince días, con recurso

judicial suficiente y efectos

suspensivos ante el juez que la

ley determine. Las

disposiciones orgánicas pueden

establecer Tribunales de Faltas

85

ecológica.

Artículo 187. Régimen sancionatorio y

tribunal de faltas Las disposiciones orgánicas municipales y las

ordenanzas que en consecuencia se dicten

pueden autorizar a las autoridades para

imponer multas; disponer la demolición de

construcciones, clausura y desalojo de los

inmuebles; secuestro, decomiso o destrucción

de objetos, para lo cual las Municipalidades

pueden requerir el auxilio de la fuerza pública

y recabar órdenes de allanamiento. También

pueden imponer sanciones de arresto de hasta

quince días, con recurso judicial suficiente y

efectos suspensivos ante el juez que la ley

determine. Las disposiciones orgánicas

pueden establecer Tribunales de Faltas.

Artículo 104: Atribuciones de la Legislatura.

Literal 17. Legislar sobre el uso y enajenación

de las tierras de propiedad del Estado

Provincial y dictar leyes de colonización que

aseguren una más productiva y racional

explotación de los recursos agropecuarios.

Literal 21. Dictar normas generales sobre la

preservación del recurso suelo urbano,

referidas al ordenamiento territorial, y

protectoras del medio ambiente y del

equilibrio ecológico.

Artículo 186: Competencia material. Son

funciones, atribuciones y finalidades

inherentes a la competencia municipal:

Literal 7. Atender las siguientes materias:

Protección del medio ambiente, paisaje,

equilibrio ecológico y polución ambiental

86

2.

Ley de

Sanidad

Vegetal

4967

Sancionada

y

promulgada

27 de

Noviembre

1967

Defensa sanitaria de la producción

agrícola en el territorio provincial, en

contra de animales o vegetales,

parásitos o perjudiciales

Secretaría de

Agricultura

Artículo 3.- El organismo de aplicación

propondrá al Poder Ejecutivo la nomenclatura

de los agentes perjudiciales a que se refiere el

Art. 1, quién declarará "Plagas" a los que

resulten tales, por su carácter extensivo,

invasor o calamitoso.

Artículo 11.- Toda infracción a

las disposiciones contenidas en

esta Ley y las que establezca la

reglamentación, será

sancionada con una multa

desde Cincuenta mil pesos

$50.000) hasta Diez millones

de pesos ($10.000.000), según

la importancia de la infracción

y de acuerdo a las

circunstancias de cada caso.

3.

Decreto

Reglamentario

a la Ley de

Sanidad

Vegetal 4967

6373 1979 Secretaría de

Agricultura

Bajo Decreto N° 6373/79, Art. 2, declara

como plagas a Zenaida auriculata y Myiopsita

monachus.

Articulo 5.- Todo propietario, arrendatario,

tenedor precario, usufructuario u ocupante a

cualquier título, de predios destinados a la

explotación agrícola y a la cosecha de sus

productos, efectuará tratamientos sanitarios

preventivos y curativos contra las plagas que

atacan a sus cultivos y que figuren en la

nomenclatura contenida en el Art. 2° del

presente reglamento o posteriores decretos …

dicte el Poder Ejecutivo.

Artículo 6.- Las personas a que se refiere el

artículo anterior están obligadas a efectuar por

su cuenta, dentro de los inmuebles y/o medios

de transportes que posean u ocupen, las

medidas que el organismo de aplicación

determine para destruir las plagas con

personal y elementos suficientes,

proporcionados a la extensión del fondo o la

cosa y a la intensidad de la infestación o

infección.

Artículo 13°.- La destrucción de las plagas se

debe realizar en el estado biológico en la que

sea más susceptible a ser destruida; si esto no

se puede determinar o no está determinado de

antemano, se la debe destruir en cualquiera de

87

los estados en que se encuentre. Se debe evitar

la eliminación de depredadores.

4.

Ley de Medio

Ambiente

7343

29 de

Agosto de

1985

La presente Ley tiene por objeto la

preservación, conservación, defensa

y mejoramiento del ambiente en todo

el territorio de la Provincia de

Córdoba, para lograr y mantener una

óptima calidad de vida.

Artículo 59.

Secretaría de

Ambiente, sin

perjuicio de la

necesaria

intervención de

los organismos

Provinciales y

Municipales a los

que las normas

vigentes otorguen

competencia

según los casos.

Artículo 2. - Decláranse de interés provincial

a los fines de su preservación, conservación,

defensa y mejoramiento aquellos ambientes

urbanos, agropecuarios y naturales y todos sus

elementos constitutivos que por su función y

características, mantienen o contribuyen a

mantener la organización ecológica más

conveniente tanto para el desarrollo de la

cultura, de la ciencia y la tecnología y del

bienestar de la comunidad como para la

permanencia de la especie humana sobre la

tierra, en armónica relación con el ambiente.

Artículo 36. - Prohíbese el desarrollo de todo

tipo de acciones, actividades u obras que

degraden o sean susceptibles de degradar en

forma irreversible, corregible o incipiente a

los individuos y las poblaciones de la fauna.

En todo lo referente a fauna será de estricta

aplicación la Ley Nacional Nº 22.421.

Artículo 23. - La Autoridad de Aplicación

elaborará, en coordinación con los demás

entes provinciales competentes, los criterios o

normas de calidad para cada tipo de suelo

tomando en consideración, entre otras

variables, las siguientes cuestiones: (a) La

organización ecológica óptima o más

conveniente para el mejor funcionamiento de

los suelos; (b) Los caracteres físico-químicos

y biológicos compatibles con la preservación

de la productividad de los agroecosistemas, la

protección de la salud humana y el

funcionamiento normal de los ecosistemas

terrestres no productivos que cada tipo de

suelo contribuye a sostener.

Artículo 63. Las personas

físicas o jurídicas que

contaminaren o concurrieren, a

contaminar arroyos, ríos, lagos,

aguas subterráneas, sean

públicas o privadas, que se

aprovechen para consumo

humano o para riego de

explotaciones agropecuarias,

serán pasibles de multa al

equivalente en pesos de dos

mil quinientos a setenta mil

litros de combustible NSP.

Idéntica sanción corresponderá

a las personas físicas o

jurídicas cuando los autores

materiales de la infracción

fueren sus dependientes y

actuaren en función o como

agentes de los mismos.

Artículo 65. Cuando la

contaminación resultare un

daño irreversible al ambiente,

se aplicará al responsable

multa equivalente en pesos al

valor de doce mil a ciento

veinticinco mil litros de

combustible NSP. La sanción

se elevará en un cincuenta por

ciento si el siniestro se hubiere

producido por causa de

inobservancia de las normas de

seguridad o higiene que rigen

la materia.

Artículo 66. Deberán

considerarse como agravantes

los supuestos de

irreversibilidad en la

88

degradación, atendiendo a la

eventual extinción de los

recursos o a la magnitud del

impacto ambiental, así como la

hipótesis de daño a bienes de

valor ético o estético, no

susceptible de valoración

económica e imposible de

reproducir, en cuyo caso las

sanciones respectivas se

elevarán al doble.

Artículo 67. Deberán

considerarse conductas

agravadas, las imputables a

funcionarios públicos que

autorizaren, toleraren o

posibilitaren de cualquier

manera, la comisión de faltas

como las descriptas en los

artículos precedentes, u

omitiesen la aplicación de las

disposiciones contenidas en la

presente ley, aplicándose para

tal caso la multa

correspondiente elevada en un

treinta a cuarenta por ciento.

Artículo 68. Las sanciones se

levarán de un treinta a un

cincuenta por ciento cuando

causaren lesiones o

enfermedades a personas y de

un cincuenta a un cien por

ciento cuando se causare

peligro común a la población o

enfermedad incurable o

muerte.

Artículo 69. En caso de

reiteración de la conducta

sancionada, las multas

establecidas se duplicarán.

Artículo 73. La Subsecretaría

89

de Medio Ambiente deberá

completar la información

sumaria en el término de treinta

días, determinando y aplicando

la sanción de multa.

5.

Decreto - Ley

de Regulación

de la Caza

Deportiva o

Comercial

4046/C/

58

Sanción 22

abril 1958

Artículo 1. La caza deportiva,

comercial, de lucha o defensa contra

plagas y la protección de la fauna

silvestre, como así también el

tránsito y comercio de sus productos

en el territorio de la Provincia,

quedan sujetos a las disposiciones

del presente Decreto Ley.

Dirección

General de

Agropecuaria

Artículo 3 -Toda persona mayor de 16 años

tendrá derecho a cazar con armas de fuego,

con sujeción a las disposiciones comprendidas

en el presente Decreto-Ley previa obtención

de la licencia habilitante.

Artículo. 11- Queda absolutamente prohibido

cazar en tierra de propiedad fiscal cercadas,

plantadas o cultivadas. Sólo se permitirá en

ellas la destrucción de animales declarados

plagas debiendo los interesados estar munidos,

además de la licencia habilitante, de un

permiso especial sin cargo que a tal efecto

otorgará la Dirección General de

Agropecuaria.

Artículo. 12- El permiso de caza da derecho

para practicar la misma con arma de fuego y

perro de levante, pero queda prohibido:

c) Cualquier método que tenga por objeto la

captura o destrucción en masa de aves, nidos,

huevos y crías;

g) Cazar en horas de la noche, exceptuando la

caza de animales declarados plagas;

h) Cazar a bala a menos de 2.000 metros, ya

munición a menor distancia de 400 metros, de

las poblaciones;

Artículo. 17- Autorizase la caza con fines

deportivos, de perdices, martinetas, becasinas,

chorlos, pavos y gansos silvestres y aquellas

que determine la Dirección General de

Agropecuaria, de conformidad a las

condiciones establecidas en el presente

Decreto-Ley.

Artículo 19 -Declárase plaga y podrán

destruirse en toda época y a cualquier hora, los

siguientes animales: loros, cotorras, palomas,

torcazas, palomas doradas o medianas.

Art. 289 -Los sancionados en

virtud del inciso a) del Art. 269

(al que cazare en época de

veda), sufrirá además como

penas accesorias el comiso del

arma y la inhabilitación

permanente para cazar.

Art. 309 -Los sancionados en

virtud del inciso c) del Art. 269

(al que cazare sin licencia

habilitante o transportase

productos de caza oculto),

sufrirán además inhabilitación

por el término de dos años y

comiso del arma empleada,

como penas accesorias.

Art. 339. Los sancionados en

virtud del inciso E) del Art. -

269 (con multa al que cazare

con medios o métodos

prohibidos) serán inhabilitados

por el tiempo de uno a cinco

años, según la cantidad de

piezas cobradas y sufrirán

además el decomiso del arma

empleada cuando la cacería sea

de más de cinco ejemplares.

90

6.

Ley

Prohibición de

la práctica

Tiro al Pichón

8625

Sanción 06

de Agosto

de 1997

Artículo 1. Prohíbese en el territorio

de la Provincia, la práctica de tiro al

pichón, también llamado tiro a la

paloma o al vuelo.

A los efectos de la presente Ley,

entiéndese por práctica de tiro al

pichón, a la paloma o al vuelo a

aquélla cuyo objetivo sea herir o

abatir animales previamente

liberados a tal fin.

Artículo 3.-

Secretaría de

Agricultura,

Ganadería y

Recursos

Renovables.

Artículo 1.

Artículo 2. En caso de

incumplimiento total o parcial

de la presente Ley, la entidad

organizadora será sancionada

con la inhabilitación

temporaria o definitiva. Sin

perjuicio de

esta sanción, tanto la entidad

organizadora como las

personas físicas que participen

en dichos torneos, podrán

además ser sancionadas con

una multa de hasta 50 U.M. de

acuerdo a lo previsto en el

Código de Faltas de la

Provincia de Córdoba en su

Artículo 27.

7.

Ley de

Productos

químicos o

biológicos de

uso

agropecuario

Decreto N

132/05

9164

Sanción 28

de Junio del

2004

Artículo 1: Son objetivos de la

presente Ley la protección de la

salud humana, de los recursos

naturales, de la producción

agropecuaria y del patrimonio de

terceros, de los años que pudieran

ocasionarse por usos contrarios a lo

dispuesto en la presente Ley y su

reglamentación, y la preservación de

la calidad de los alimentos y materias

primas de origen vegetal, como

también asegurar su trazabilidad y la

de los productos químicos o

biológicos de uso agropecuario,

contribuyendo al desarrollo

sostenible y a la disminución el

impacto ambiental que estos

productos generan.

Secretaría del

Ambiente

Artículo 2: A efectos de esta Ley, se

considera producto químico o biológico de

uso agropecuario a todo producto químico

inorgánico u orgánico o biológico, que se

emplea para combatir o prevenir la acción de

insectos, ácaros, malezas, hongos, bacterias y

roedores, perjudiciales al hombre o a los

animales y de todo agente de origen animal o

vegetal, que ataque o perjudique a las plantas

útiles y sus productos.

Artículo 54. EN los supuestos

de inobservancia de cualquiera

de los requisitos y obligaciones

establecidos en esta Ley y su

reglamentación, el Organismo

de Aplicación, previo sumario

administrativo, podrá aplicar a

los sujetos de la presente Ley

las siguientes sanciones:

a) Llamado de atención;

b) Apercibimiento;

c) Multa;

d) Interdicción de predios y/o

decomiso de los productos y/o

mercaderías contaminadas y/o

de los elementos utilizados

para cometer la infracción. En

estos casos se impondrá al

infractor la obligación de

disponer a su costa de los

productos decomisados, según

los procedimientos que se fijen

en la reglamentación;

e) Suspensión y/o baja del

91

registro correspondiente;

f) Inhabilitación temporal o

permanente;

g) Clausura parcial o total,

temporal o permanente de los

locales y depósitos;

h) Secuestro de los equipos de

aplicación y/o vehículos

utilizados para cometer la

infracción, e

i) Arresto.

8.

Ley de

Ordenamiento

Territorial y

Bosques

Nativos

9814 Sanción

2010

Artículo 2. Establecer el

ordenamiento territorial de los

bosques nativos para la

Provincia de Córdoba.

a) Promover la conservación del

bosque nativo mediante el

Ordenamiento Territorial de los

Bosques Nativos y la regulación

de la expansión de la frontera

agropecuaria, minera y urbana, y

de cualquier otro cambio de uso

del suelo

Secretaría de

Ambiente

Artículo 4. La presente Ley establece los

criterios para:

a) La conservación, recuperación,

restauración, enriquecimiento, manejo y

aprovechamiento sostenibles de

los bosques nativos de la Provincia de

Córdoba;

b) El resguardo de los servicios ambientales

que los bosques nativos brindan al resto de los

ecosistemas y a las sociedades en su conjunto,

presentes y futuras;

ANEXO II. Criterios de Sustentabilidad

Ambiental para el Ordenamiento Territorial de

los Bosques Nativos.

2) Vinculación con otras comunidades

naturales: Determinación de la vinculación

entre un parche de bosque y otras

comunidades naturales con el fin de preservar

gradientes ecológicos completos. Este criterio

es importante dado que muchas especies de

aves y mamíferos utilizan distintos

ecosistemas en diferentes épocas del año en

búsqueda de recursos alimenticios adecuados.

92

9.

Decreto

Reglamentario

Forestal

(Ley 13.273

Defensa de la

Riqueza

Forestal)

710 1995 Defensa de la riqueza forestal Secretaría del

Ambiente

Artículo 1. Decláranse de utilidad pública y

sujetos a expropiación, cualquiera sea el lugar

de su ubicación, los bosques clasificados

como protectores y/o permanentes, tendientes

al mejor aprovechamiento de las tierras. La

expropiación será ordenada en cada caso por

el PODER EJECUTIVO NACIONAL, en

cualquier tiempo que lo estime oportuno,

previos los informes pertinentes y el

cumplimiento de los demás requisitos

establecidos en la ley de expropiación.

Artículo 2. Quedan sometidos a las

disposiciones de la presente ley:

c) los bosques protectores y tierras forestales

que respondan a algunas de las

condiciones especificadas en el Artículo 6º,

ubicados en territorio provincial,

siempre que los efectos de esa calidad incidan

sobre intereses que se encuentren

dentro de la esfera de competencia del

gobierno federal, sea porque afecten al

bienestar general, al progreso y prosperidad de

DOS (2) o más provincias o de

UNA (1) provincia y el territorio federal.

Artículo 3. Las provincias que se acojan al

régimen de la presente ley

gozarán de los beneficios siguientes:

a) participación en la ayuda federal, afectada a

obras de forestación y reforestación.

Artículo 6. Decláranse bosques protectores

aquellos que por su ubicación sirvieran,

conjunta o separadamente, para:

a) proteger el suelo, caminos, las costas

marítimas, riberas fluviales y orillas de

lagos, lagunas, islas, canales, acequias y

embalses y prevenir la erosión de las

planicies y terrenos en declive;

b) proteger y regularizar el régimen de las

aguas;

c) fijar médanos y dunas;

d) asegurar condiciones de salubridad pública;

93

e) defensa contra la acción de los elementos,

vientos, aludes e inundaciones;

f) albergue y protección de especies de la flora

y fauna cuya existencia se declare necesaria.

10.

Resolución de

actividad

turismo

cinegético

1115 2011

La presente resolución tiene como

propósito: a) Asegurar el uso y

manejo racional de los recursos

renovables. b) Velar la conservación

del medio ambiente evitando la

alteración y/o destrucción del

ecosistema. c) Afianzar la seguridad

de personas, bienes, flora y fauna. d)

Promover, fomentar y consolidar el

turismo cinegético en el ámbito

provincial.

Secretaría del

Ambiente

1. Ámbito de Aplicación Queda sujeta a la presente reglamentación la

caza deportiva al vuelo de la paloma dorada

(Zenaida auriculata) en el ámbito provincial,

realizada en excursión de caza organizada por

personas físicas o jurídicas, e integrada por

contingentes de cazadores nacionales y/o

extranjeros, conducidas por una o más

personas debidamente habilitadas en calidad

de guías responsables.

4. Armas y Municiones - Prohibiciones

Queda prohibido el uso de munición de plomo

en humedales.

Se prohíbe el uso de cebos tóxicos, redes,

trampas, sustancias químicas y cualquier otro

mecanismo similar, como así también recurrir

al uso de instrumentos de destrucción masiva

de los ejemplares, sus crías o sus huevos.

El incumplimiento de las leyes

sobre la materia y de

cualquiera de las disposiciones

aquí establecidas será

sancionado conforme la

legislación vigente. Los guías y

operadores cinegéticos podrán

ser sancionados además con

inhabilitación temporaria o

definitiva para la actividad

cinegética.- La Secretaria

podrá disponer también la

inhabilitación temporaria o

definitiva para la actividad

cinegética de los campos

utilizados a tal fin.

94

ANEXO IV

ANÁLISIS DE VARIABLES E INDICADORES DE LA NORMATIVA NACIONAL

DIMENSIÓN JURÍDICA

Constitución

Nacional

Ley General

del Ambiente

Ley Nacional

de Fauna

Decreto

Conservación de

fauna silvestre

Ley de Defensa

Sanitaria

Agrícola

Ley Protección

de bosques

nativos

VARIABLE 1

Inserción de

políticas públicas

ambientales y

agrícolas en el

sistema

Constitucional y

nacional.

INDICADOR 1 Inserción

Constitucional.

a. Explícito

b. Implícito Artículo 41

c. Inexistente

INDICADOR 2 Inserción dentro de

normativa Ambiental.

a. Explícito

b. Implícito

c. Inexistente X

VARIABLE 2 Regulación

específica del

conflicto

INDICADOR 1 Tipo de normativa

específica adoptada a

una ley nacional

a. Adhesión plena

b. Regulación propia

INDICADOR 2 Fecha de sanción o

publicación 22 Ag. 1994 6 Nov. 2002 5 Marz. 1981 25 Jul. 1997 12 Ag. 1963 28 Nov 2007

INDICADOR 3 Conceptualización

general

a. Amplia

b. Restringida

INDICADOR 4

Definiciones términos Definición concreta

Definición general

INDICADOR 5 Presupuestos mínimos

Artículo 1.

Artículo 24. Artículo 1.

VARIABLE 3 Control y

fiscalización

establecidos en

cada normativa

específica.

INDICADOR 1 Sanciones económicas,

mixtas

Artículo 29

Artículo 36 Artículo 28 Artículo 28 Artículo 11 Artículo 29

INDICADOR 2

Registros o exigencia

de Certificación

ambiental.

Artículo 22

Artículo 3

Artículo 23

Artículo 28

Artículo 50

Artículo 22 Artículo 18

Artículo 27

95

VARIABLE 4 Definición de

actores para la

gestión, designados

en normativa

específica.

INDICADOR 1 Según el carácter de

los actores establecidos

a. Gubernamentales

Autoridades

representantes de:

Poderes del Estado Secretaría de

Ambiente

Secretaría de

Ambiente

Secretaría de

Ambiente

Ministerio de

Agricultura

Ganadería y

Alimentos

Secretaría de

Ambiente

b. No

Gubernamentales

DIMENSIÓN INSTITUCIONAL Constitución

Nacional

Ley General del

Ambiente

Ley Nacional de

Fauna

Decreto

Conservación de

fauna silvestre

Ley de Defensa Sanitaria

Agrícola

Ley Protección de

bosques nativos

Organismo de Aplicación Nacional Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la

Nación

Ministerio de Agricultura,

Ganadería y Alimentos

Secretaría de

Ambiente

VARIABLE 1 Denominación de

institución

específicamente

encargada de

gestionar la temática.

INDICADOR 1 Nivel de

especificidad del

organismo:

a. Alto

b. Medio X X X X X X

c. Bajo

VARIABLE 2 Lugar y jerarquía

asignada al área

dentro de cada

administración.

INDICADOR 1 Si se encuentra

dentro de un una

institución no

específica.

a. Alto

b. Bajo X X X X X X

96

ANEXO V

ANÁLISIS DE VARIABLES E INDICADORES DE LA NORMATIVA

DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA

DIMENSIÓN JURÍDICA

Constitución

Córdoba

Ley Medio

Ambiente

Ley Sanidad

Vegetal

Caza y

Comercio Tiro al Pichón

Productos

Químicos y

Biológicos

Turismo

Cinegético

VARIABLE 1

Inserción de las

políticas públicas

ambientales y

productivas

agrícolas en el

sistema normativo

provincial.

INDICADOR 1 Inserción en las

normativas

ambientales y

productivas

a. Explícito

b. Implícito

Artículo 11

Artículo 38

Artículo 53

Artículo 54

Artículo 66

Artículo 68

Artículo 2

Artículo 18

Artículo 23

Artículo 36

c. Inexistente

VARIABLE 2 Regulación

específica del

conflicto

INDICADOR 1 Tipo de normativa

adoptada

a. Adhesión plena X (semiplena)

b. Regulación propia

X

INDICADOR 2

Fecha de sanción de

la norma 10 Dic. 2001 29 Ag. 1985 27 Nov1967 22 Abr. 1958 6 Ag. 1997 28 Jun. 2004 2011

INDICADOR 3 Conceptualización

general

a. Amplia

b. Restringida Artículo 2

INDICADOR 4 Identificación de

definiciones

Definiciones de: especie de fauna

silvestre como plaga,

daño/perjuicio (en

cultivos, producción

agrícola, ecosistemas)

PLAGA PLAGA

INDICADOR 5

Presupuestos

mínimos. _ _ _ _ _ _ _

97

VARIABLE 3 Control y

fiscalización

establecidos en

cada normativa

específica.

INDICADOR 1

Sanciones

económicas o

mixtas

Mixtas

(económicas, servicio

comunitario, clausura,

decomiso, prisión,

etc)

Artículo 100

Artículo 166

Artículo 187

Artículo 68

Artículo 73 Artículo 11

Artículo 289

Artículo 309

Artículo 339

Artículo 2 Artículo 54 Literal 11

INDICADOR 2

Registros o exigencia

de certificación

ambiental.

_ Artículo 7 Artículo 17

Artículo 5

Artículo 239

Artículo 569

Artículo 659

_

(Capítulo IV)

Artículo 10

Artículo 12

Artículo 13

Artículo 25

Literal 5

Literal 6

Literal 7

Literal 3.11.

Literal 4.11.

VARIABLE 4 Definición de

actores para la

gestión,

designados en

normativa

específica.

INDICADOR 1 Según el carácter

de los actores

establecidos

a. Gubernamentales

Autoridades

representantes de:

Gobierno

Provincial de

Córdoba

Secretaría de

Ambiente

Secretaría de

Agricultura

Dirección

General de

Agropecuaria

de la

Provincia de

Córdoba.

Secretaría de

Agricultura

Secretaría de

Agricultura

Secretaría de

Ambiente

b. No

Gubernamentales _ _ _ _ _ _ _

DIMENSIÓN INSTITUCIONAL Constitución

Córdoba

Ley Medio

Ambiente.

Ley Sanidad

Vegetal

Caza y

Comercio

Tiro al

Pichón

Productos Químicos

y Biológicos

Turismo

Cinegético

Organismo de Aplicación Gobierno Provincial

de Córdoba

Secretaría de

Ambiente

Secretaría de

Agricultura Secretaría de Ambiente

Secretaría de

Agricultura

Secretaría de

Ambiente

VARIABLE 1 Denominación de

institución encargado

de gestionar la

temática.

INDICADOR 1 Nivel de

especificidad del

nombre del

organismo:

a. Alto

b. Medio X X X X X X X

c. Bajo

VARIABLE 2 Lugar y jerarquía

asignada al área dentro

de cada

administración.

INDICADOR 1 Dentro de un

organismo o una

institución no

específica

a. Alto X X X X X X X

b. Bajo

98

ANEXO VI

INSERCIÓN DE POLÍTICAS AMBIENTALES Y DE PRODUCCIÓN AGRÍCOLA DENTRO

DE LA NORMATIVA NACIONAL Y DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA.

DENTRO DE LA NORMATIVA NACIONAL

Constitución N. Ambie

nte Fauna Decreto Fauna Agrícola Bosques

Explícito Art. 41

Art.124

Implícito

Art. 2

Art. 22

Art. 27

Art. 34

Art. 2

Art. 4

Art. 24

Art. 8

Art. 9

Art.13.

Art.20.

Art. 2

Art. 4

Art. 17

Art. 3

Art. 9

Inexistente

DENTRO DE LA NORMATIVA DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA

Constitución

Córdoba

Medio

Ambiente

Sanidad

Vegetal

Caza

Tiro al

Pichón

Productos

Químicos y

Biológicos

Turismo

Cinegético

Explícito

Implícito

Art. 11

Art. 38

Art. 53

Art. 54

Art. 66

Art. 68

Art. 2

Art. 23

Art. 36

Art. 3

Art. 6

Art.3

Art. 11

Art. 12

Art.17

Art. 1

Inexistente Art. 2 Literal 1

Literal 4

99

ANEXO VII

ÉPOCA DE SANCIÓN O PUBLICACIÓN DE LA NORMATIVA NACIONAL Y DE LA

PROVINCIA DE CÓRDOBA

PERÍODOS NORMATIVA FECHA DE

SANCIÓN

FECHA DE

PUBLICACIÓN JURISDICCIÓN

1 1950-1960

Decreto Ley de Regulación

de la Caza Deportiva o

Comercial

22 abril 1958 Provincia

Córdoba

2 1961 - 1970 Ley de Defensa Sanitaria

Agrícola. 12 Agosto 1963 Nacional

Ley de Sanidad Vegetal 19 Enero 1968 Provincia

Córdoba

3 1981 - 1990 Ley Nacional de Fauna 5 Marzo 1981 12 Marzo 1981 Nacional

Ley de Medio Ambiente 29 Agosto 1985 Provincia

Córdoba

4 1991 - 2000

Constitución Nacional

Argentina 22 Agosto 1994 Nacional

Decreto reglamentario

sobre conservación de

fauna silvestre.

25 Julio 1997 Nacional

Ley Prohibición de la

práctica Tiro al Pichón 6 Agosto 1997

Provincia

Córdoba

5 2001 - 2010

Ley General del Ambiente 6 Noviembre

2002

Nacional

Ley de protección ambiental

de los bosques nativos

28 Noviembre

2007 Nacional

Constitución Provincial de

Córdoba

14 Septiembre

2001

Provincia

Córdoba

Ley de Productos químicos o

biológicos de uso

agropecuario

28 Junio 2004 Provincia

Córdoba

6 2011 - 2020 Resolución de Ley Actividad

turismo cinegético 2011

Provincia

Córdoba

100

ANEXO VIII

ARTÍCULOS QUE INCLUYEN FORMAS DE CONCEPTUALIZACIÓN, AMPLIA O

RESTRINGIDA.

NORMATIVA NACIONAL CONCEPTUALIZACIÓN

Amplia Restringida

Constitución Nacional

Ley General del Ambiente

Ley Nacional de Fauna

Decreto Conservación de fauna silvestre

Ley de Defensa Sanitaria Agrícola

Ley Protección de bosques nativos

NORMATIVA PROVINCIAL

Constitución de la provincia de Córdoba

Ley de Medio Ambiente

Ley de Sanidad Vegetal Artículo 2

Decreto - Ley de Regulación de la Caza Deportiva o Comercial

Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón

Ley de Productos químicos o biológicos de uso agropecuario

Resolución de actividad turismo cinegético

101

ANEXO IX

ARTÍCULOS QUE INCLUYEN SANCIONES EN LAS NORMATIVAS.

NORMATIVA NACIONAL SANCIONES

Económicas Mixtas

Constitución Nacional Artículo 29, Artículo 36

Ley General del Ambiente Artículo 28

Ley Nacional de Fauna Artículo 28

Ley de Defensa Sanitaria Agrícola Artículo 11

Ley Protección de bosques nativos Artículo 29

NORMATIVA PROVINCIAL

Constitución de la Provincia de Córdoba Artículo 100, Artículo 166,

Artículo 187

Ley de Medio Ambiente Artículo 68, Artículo 73

Ley de Sanidad Vegetal Artículo 11

Decreto - Ley de Regulación de la Caza

Deportiva o Comercial

Artículo 289, Artículo 309,

Artículo 339

Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón Artículo 2

Ley de Productos químicos o biológicos de uso

agropecuario Decreto N°132/05

Artículo 54

Proyecto de resolución de actividad turismo

cinegético

Literal 11

102

ANEXO X

AUTORIDAD DE APLICACIÓN PARA LA GESTIÓN DE NORMATIVAS NACIONALES Y

DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA.

NORMATIVA N° ÓRGANO DE APLICACIÓN

NACIONAL

Constitución Nacional de Argentina

Ley Nacional de Aprobación del Convenio sobre la

Diversidad Biológica. 24.375

Ley General del Ambiente 25675 Secretaría de Ambiente

Ley Nacional de Fauna 22421 Ministerio de Agricultura,

Ganadería y Alimentos

Decreto reglamentario sobre conservación de la fauna

silvestre. 666/97 Secretaría de Ambiente

Ley de Defensa Sanitaria Agrícola 6704/63 Ministerio de Agricultura,

Ganadería y Alimentos

Ley de protección ambiental de los bosques nativos 26331 Secretaría del Ambiente

PROVINCIA DE CÓRDOBA

Constitución Provincial de Córdoba Gobierno Provincial

Ley de Medio Ambiente 7343 Secretaría de Ambiente

Ley de Sanidad Vegetal 4967

Secretaría de Estado de

Agricultura y Ganadería, (Sanidad

Vegetal)

Decreto - Ley de Regulación de la Caza Deportiva o

Comercial 4046/C/58

Dirección General de

Agropecuaria

Ley Prohibición de la práctica Tiro al Pichón 8625 Secretaría de Ambiente

Ley de Productos químicos o biológicos de uso

agropecuario (Decreto N 132/05) 9164 Secretaría de Ambiente

Proyecto de resolución de actividad turismo cinegético 1115 Secretaría de Ambiente

103

ANEXO XI

ENTREVISTA A FUNCIONARIOS ADMINISTRATIVOS SECRETARÍA DEL AMBIENTE – SECRETARÍA DE AGRICULTURA

ENTREVISTA No: ………

FECHA: …………………

A. INFORMACIÓN GENERAL

Nombre de la institución: …………………….……...…...………………...……

Cargo que ocupa: …………………..…………….………………...……

Formación académica: ………………………...………...……….………...…

Funciones que desempeña actualmente: ………………………………...…...…….………...…

Departamento o área a la que pertenece: …………………………….…………..…………...…

Tiempo que trabaja en esta institución: …………………………….…………......………...…

Áreas de esta u otra repartición que se desempeñó

¿Por cuánto tiempo?: …………………….……………………....………….

B. ENTREVISTA

1. ¿Existe conflicto entre las poblaciones de la paloma torcaza (Zenaida auriculata) y/o cotorra

(Myiopsitta monachus) en relación de los cultivos agrícolas?

SI ( ) ¿Por qué?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 2. ¿Conoce si en las políticas públicas ambientales y productivas de la provincia de Córdoba está incluido

este tema?

SI ( ) ¿De qué manera?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 3. ¿Existe normativa relacionada con conservación/caza/turismo cinegético/otras, para la paloma torcaza

(Zenaida auriculata) y cotorra (Myiopsitta monachus)?

SI ( ) ¿Cuál/es?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 4. ¿Existe normativa de protección a la producción agrícola en relación al tema?

SI ( ) ¿Cuál/es?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 5. ¿Conoce si las distintas reparticiones de administración provincial (Ministerio de Agricultura,

Ganadería y Alimentos; Secretaria de Ambiente) han participado en la formulación de las políticas

públicas provinciales relacionadas con el tema?

SI ( )

NO ( )

DESCONOCE ( ) ¿A Ud. lo han consultado?

¿Cuando existe un problema entre fauna silvestre y producción agropecuaria, qué normas se

aplican? 6. ¿Estas normas son aplicadas también por otras reparticiones de esta u otra área/secretaria/etc.?

SI ( ) ¿Cuál/es?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 7. ¿Hay coordinación y comunicación entre los diferentes organismos de aplicación que gestionan la

producción agrícola y el manejo y conservación de especies silvestres? ¿de qué manera?

104

SI ( )

NO ( )

EXPLIQUE

DESCONOCE ( )

8. ¿Las normas que se aplican en este tema/conflicto le parece que son :

Eficaces ( )

Adecuadas ( )

Ineficaces ( )

Inadecuadas ( )

¿POR QUÉ?

9. ¿La aplicación de una norma viola o se contradice frente a la aplicación de otra?

SI ( ) ¿Qué medidas toma en ese caso?

NO ( )

EXPLIQUE

DESCONOCE ( )

10. ¿Las normas incluyen un sistema de estrategias de control establecido?

SI ( ) ¿Cuál?

NO ( )

DESCONOCE ( ) 11. ¿Cuáles son los mecanismos de sanción y fiscalización establecidos frente al conflicto?

- Económicos ( )

- Mixtos ( ) (económicos + incentivos, por ejemplo)

EXPLIQUE:

12. ¿Los productores agropecuarios le consultan en relación a este conflicto?

SI ( )

NO ( )

¿Lleva un registro de estas consultas? 13. ¿La capacidad de fiscalización es suficiente por parte del Estado Provincial tanto en la aplicación de

normas como en su correcto cumplimiento?

SI ( )

NO ( )

EXPLIQUE

14. ¿Se han reformado las normas en base a actuales conceptos de conservación y manejo?

SI ( )

NO ( )

EXPLIQUE

DESCONOCE ( )

15. ¿La normativa es apoyada por los acuerdos internacionales de los cuales Argentina es signataria?

SI ( )

NO ( )

¿DE QUÉ FORMA?

DESCONOCE ( )

16. ¿Existe difusión de la información en cuanto a normas vigentes, cumplimiento, y sanciones para la

población en general?

SI ( )

NO ( )

DESCONOCE ( )

EXPLIQUE

GRACIAS

_________________

105

ANEXO XII

ENTREVISTA A FUNCIONARIOS ADMINISTRATIVOS AGENCIA CÓRDOBA TURISMO

ENTREVISTA No: …..………

FECHA: ……...……………

A. INFORMACIÓN GENERAL

Nombre de la institución: ……………………...….……………………...

Cargo que ocupa: …………………..……..……………………...

Formación académica: …………………......…...…………………..…

Funciones que desempeña actualmente en relación al

manejo de la paloma/ cotorra, en Córdoba:

…………………..……………….....…………

Departamento o área a la que pertenece: ………………………..……….………...…….

Tiempo que trabaja en esta institución: ……………..………………..….…………......

Áreas de esta u otra repartición que se desempeñó

¿Por cuánto tiempo?:

………….…………………..….…...…………

B. ENTREVISTA

1. ¿Se practica actividades de: Turismo cinegético (caza deportiva), caza comercial, de subsistencia, o

caza por control de stock (especies que afectan una explotación productiva) en la provincia de

Córdoba?

SI ( ) ¿Cuál de ellas?

NO ( )

DESCONOCE ( )

2. ¿Qué especies son cazadas principalmente? ¿Por qué razón?

3. ¿Existen cotos de caza en la provincia de Córdoba?

a. ¿Cómo están regulados?

b. ¿Quién los controla?

c. ¿Existe una norma que los regule?

4. ¿Existe alguna norma que permita la cacería de paloma torcaza (Zenaida auriculata) y cotorra

(Myiopsita monachus) a nivel nacional o provincial?

SI ( ) ¿Cuál/es?

NO ( )

DESCONOCE ( )

5. ¿La aplicación de esta norma viola o se contradice frente a la aplicación de otra?

SI ( ) ¿De qué forma?

NO ( )

DESCONOCE ( )

6. ¿Se aplican sanciones en caso de infringir una norma?

SI ( ) ¿Cuáles?

NO ( )

DESCONOCE ( )

7. ¿Se ha establecido una temporada de caza o cotos de caza para estas especies?

SI ( ) Explique

NO ( )

DESCONOCE ( )

8. ¿Existe un sistema de caza controlada?

SI ( ) ¿Por quién?

NO ( )

9. ¿Cuántos individuos de aves se cazan por año/ área?

DESCONOCE ( )

10. ¿Cuál es el uso o manejo que se les da a las aves cazadas?

NINGUNO ( )

106

DESCONOCE ( )

11. ¿Cuál es el número de cazadores registrados al año que practican esta actividad?

DESCONOCE ( )

12. ¿Cuáles son los países de origen de los turistas que ingresan para cacería de estas especies?

DESCONOCE ( )

13. ¿Qué porcentaje de turistas predominan para cazar, nacionales o extranjeros?

DESCONOCE ( )

14. ¿Conoce cuánto dinero deja a la provincia de Córdoba esta actividad?

SI ( ) ¿Cuánto?

NO ( )

DESCONOCE ( )

15. ¿Se exige documentación para poder realizar actividades de cacería?

SI ( ) ¿Cuál?

NO ( )

16. ¿Qué zonas o lugares son los más visitadas por los turistas para cacería?

DESCONOCE ( )

17. ¿Los productores de cultivos participan en las actividades de cacería?

SI ( ) ¿De qué forma?

NO ( )

DESCONOCE ( )

18. ¿Cuáles son los métodos de cacería más usados?

DESCONOCE ( )

19. ¿Las armas que se utilizan tienen municiones a base de plomo? SI ( )

NO ( )

DESCONOCE ( )

20. ¿Existe alguna norma que controle el uso de municiones de plomo? (Del Registro Nacional de Armas

RENAR x ej)

SI ( ) ¿Cuál?

NO ( )

DESCONOCE ( )

21. ¿Conoce las consecuencias residuales que tiene el plomo en el medio ambiente? SI ( )

NO ( )

22. Existe algún mecanismo de mitigación o administración, que maneje los residuos de plomo

depositados en el suelo?

SI ( ) ¿Cuál?

NO ( )

DESCONOCE ( )

23. ¿Conoce si en las políticas públicas de turismo de la provincia de Córdoba está incluido este tema?

SI ( ) ¿De qué forma?

NO ( )

DESCONOCE ( )

24. ¿Se puede garantizar la no predación de vida silvestre de estas especies con las actividades de caza

realizadas?

SI ( ) ¿Por qué?

NO ( )

DESCONOCE ( )

GRACIAS

107

ANEXO XIII

ORGANIGRAMA DEL MINISTERIO DE AGRICULTURA, GANADERÍA Y

ALIMENTOS

Página oficial del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentos, 2013.

108

ANEXO XIV

ORGANIGRAMA DEL MINISTERIO DE AGUA, AMBIENTE Y ENERGÍA

SECRETARÍA DEL AMBIENTE

Página oficial del Ministerio de Agua, Ambiente y Energía, 2013.

109

ANEXO XV

DEFINICIONES DE TÉRMINOS IMPORTANTES

BIODIVERSIDAD

En el Convenio sobre Diversidad Biológica en 1992 se definió como Biodiversidad a la

“variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos, entre otras cosas, los

ecosistemas terrestres y marinos y otros sistemas acuáticos, y los complejos ecológicos de

los que forman parte; comprende la diversidad dentro de cada especie, entre las especies y

de los ecosistemas”. La biodiversidad puede agruparse en tres niveles: diversidad ecológica

o de espacios; diversidad de especies o de organismos vivos, y diversidad genética. Estos

tres elementos de la biodiversidad se organizan en niveles jerárquicos, de modo que el

primero, diversidad de espacios, incluye la diversidad de especies, y éste la diversidad

genética. Como uno de los indicadores más adecuados para medir la biodiversidad está el

número de especies diferentes frente al número de genes; un mayor número de especies

diferentes significará un mayor número de genes responsables de las diferencias entre ellas

y también una mayor diversidad ecológica, ya que habrá representantes de un mayor

número de hábitats y ecosistemas (Fundación Biodiversidad 2009).

CONFLICTO AMBIENTAL

Hay consenso en cuanto a caracterizar los conflictos ambientales como un tipo particular

de conflicto social. Cabe entonces preguntarse sobre el significado que se atribuye a los

términos conflicto social y aspectos ambientales.

Los conflictos sociales son procesos, es decir, no son estáticos y tienen un desarrollo

temporal que pueden analizarse en términos de ciclos o series de ciclos con un inicio, un

desarrollo y un cierre parcial o total. Estos procesos tienen lugar en el ámbito público, por

lo que se excluyen las disputas del espacio privado. En cuanto al ambiente, un daño en el

mismo puede considerarse como la base de un potencial conflicto ambiental. Ahora bien, si

no se producen acciones por parte de actores sociales que a su vez generen reacciones en

otros actores, no estaremos ante un conflicto ambiental. Un conflicto social lo es cuando

adopta estado público e involucra más de un actor. Presupone por lo tanto acciones

colectivas, en las que grupos de personas entran en disputa. Un conflicto alude, en síntesis,

a una dinámica de oposición, controversia, disputa o protesta de actores (Santandreu &

Gudynas 1998).

El conflicto ambiental trata de conflictos relacionados con el daño a los recursos

naturales, donde la oposición proviene principalmente de actores exógenos, por lo común

activistas de organizaciones ambientalistas, no existe “conflicto ambiental” sin dimensión

social (Fontaine 2004).

GESTIÓN PÚBLICA

Cabrero (1998) hace referencia a la gestión pública como un sinónimo de administración

pública que representa un enfoque en la estrategia (no en el proceso empresarial), en las

relaciones interorganizaciones (no en las relaciones intraorganizaciones) y en la

intersección de las políticas y la gestión pública.

110

El Banco Mundial en 1992, define gestión pública como “la forma en que se ejerce el

poder en cada país para la gestión de los recursos sociales para el desarrollo” y señala tres

aspectos diferenciados: la forma del régimen político; el proceso de ejercicio de la

autoridad para la gestión de los recursos económicos y sociales para el desarrollo de cada

país; y la capacidad de los gobiernos para elaborar, formular y aplicar políticas y

desempeñar funciones. Para tomar en consideración la calidad de la gestión pública en la

calificación de los resultados y para destacar los problemas que se planteen en relación con

la gestión pública se plantean seis elementos: (FIDA 1999).

a) sostenibilidad de las reformas estructurales;

b) derechos de propiedad y gestión pública basada en normas;

c) calidad de los procesos presupuestarios y de inversión pública;

d) eficiencia y equidad de la movilización de recursos;

e) eficiencia y equidad del gasto público; y

f) rendición de cuentas y transparencia de la administración pública.

INSTITUCIONALIDAD

Conjunto de normas que regulan el comportamiento de los actores, las organizaciones, la

calidad de las mismas, los modelos de organización y gestión, los arreglos institucionales

Entre los aspectos a destacar en lo institucional está la identificación y reconocimiento de

los actores de la política social, y la forma en que se organiza Estado (CEPAL 2010).

NORMA JURÍDICA Y LEY

NORMA JURÍDICA: Norma social obligatoria, establecida con carácter general y

permanente por la autoridad pública y sancionada por la fuerza.

LEY: Es una especie de norma jurídica, definida como una declaración de la voluntad

soberana que manifestada en la forma prescrita por la Constitución manda, prohíbe o

permite (Universidad de Chile 2010).

PLAGA

Al hablar de plaga se debe tomar en cuenta los diferentes conceptos y definiciones para de

este modo poder tomar las decisiones más adecuadas.

La Real Academia Española, 2001, define como plaga a la “aparición masiva y

repentina de seres vivos de la misma especie que causan graves daños a poblaciones

animales o vegetales, como, respectivamente, la peste bubónica y la filoxera”.

La FAO (1997) en su glosario de términos fitosanitarios define a plaga, como

“cualquier especie, raza o biotipo vegetal o animal o agente patógeno dañino para las

plantas o productos vegetales”.

Brechelt (2004), se refiere a plaga cuando “un animal, una planta o un

microorganismo, aumenta su densidad hasta niveles anormales y como consecuencia afecta

directa o indirectamente a la especie humana, su salud, comodidad, predios agrícolas,

forestales o ganaderos, de los que el ser humano obtiene alimentos, forrajes, textiles,

madera, etc”. Es decir, ningún organismo es plaga per se. Aunque algunos sean en

111

potencia, más dañinos que otros, ninguno es intrínsecamente malo. El concepto de plaga es

artificial. Una especie se convierte en plaga cuando aumenta su densidad, de tal manera

que causa una pérdida económica al ser humano.

Para, Rey (1976), el término “plaga” tiene un sentido antropocéntrico, ya que el

hombre lo aplica a todo lo que le produce daño. Si se define plaga a todo organismo que

daña la salud, bienestar y recursos de otro ser vivo, entonces la humanidad constituye una

plaga que amenaza no sólo la biósfera sino la supervivencia del hombre. “Plaga es todo lo

que el hombre considera que es plaga”

Para Bruggers et al. (1998), plaga es un concepto antropocéntrico y circunstancial y

citan como ejemplo a las termitas, las cuales al alimentarse de madera muerta en el bosque

contribuyen a la degradación y retorno de los nutrientes al suelo y en estas circunstancias

no son plaga; sino son especies benéficas para el hombre. La misma especie, cumpliendo la

misma función ecológica pero en el interior de una habitación humana se considera una

plaga.

Selfa & Anento (1997) el término plaga se asocia exclusivamente con insectos y

artrópodos terrestres (ácaros), aunque dentro de ella deba incluirse también algunos

invertebrados no artrópodos y ciertos vertebrados como roedores y aves y deban excluirse

microorganismos (virus, bacterias, hongos) porque ellos constituyen las enfermedades. El

concepto de plaga varía según los conocimientos y nivel de vida que posee el hombre; ésta

puede ser reconocida como tal según el grado en el que el perjuicio se aprecia o tolera, por

lo tanto existe un umbral económico por encima del cual una población es perjudicial y

viceversa.

Por lo tanto definir una especie como plaga, ya sea animal o vegetal depende de los

conocimientos y niveles de vida antropocéntricas que se posea, como menciona Rey

(1976) “plaga es todo organismo que daña la salud, bienestar y recursos de otro ser vivo”

mientras que Bruggers et al. (1998) para ejemplarizar de mejor manera el concepto, citan a

las termitas como especies benéficas para el hombre al alimentarse de madera muerta en el

bosque por contribuir a la degradación y retorno de los nutrientes al suelo y no son

consideradas plaga, pero la misma especie, cumpliendo la misma función ecológica en el

interior de una habitación humana ya se considera como plaga.

Causas de la aparición de las plagas

Para entender la causa de aparición de las plagas es necesario analizar los factores que

diferencian los ecosistemas naturales de los artificiales (cultivos agrícolas, plantaciones

forestales, fincas de ganado). Algunos de estos factores se señalan a continuación (Brechelt

2004):

- El ser humano ha transformado áreas de vegetación natural, de gran complejidad

estructural, en áreas uniformes de cultivos que, en ciertos casos, pueden alcanzar

centenares de hectáreas plantadas con monocultivos. En el monocultivo se presenta una

sobreabundancia de alimento, muy concentrado físicamente mientras que en la

naturaleza el alimento es más escaso y está más espaciado; tal disponibilidad del recurso

permite a un organismo herbívoro o aun patógeno alcanzar niveles epidémicos, de

plaga.

112

- Se ha eliminado la vegetación silvestre que, según se ha documentado en algunos casos,

sirve como fuente de alimento o refugio a los enemigos naturales (parasitoides y

depredadores) de las plagas, por lo que la densidad de éstos disminuye y, de manera

concomitante, aumenta la de la plaga.

- Ciertos cultivos exóticos, al ser introducidos en una nueva región, pueden resultar

atacados por organismos que nunca habían estado en contacto con ellos, y que se

alimentan de plantas silvestres. Este cambio de preferencia, aunado a la plantación

extensiva del nuevo cultivo, favorece la conversión en plaga de un organismo

previamente inocuo.

Existen otros factores que regulan las poblaciones: el potencial biótico y la

resistencia al medio; la relación entre ambas nos indicará la abundancia poblacional de una

especie.

- El potencial biótico (P), es la habilidad que tiene una especie para multiplicarse,

depende de la tasa de fecundidad, número de generaciones de vida y proporción de

individuos de cada sexo.

- La resistencia al medio (R), abarca factores que ayudan a disminuir la multiplicación de

la especie: abióticos o físicos (temperatura, humedad, luz y viento) y bióticos

(nutricionales y fisiológicos)

- La abundancia (A) de una especie se determina por el cociente entre P y R; A=P/R. En

esta relación el numerador suele mantenerse constante por ser una característica

intrínseca de la propia población y el denominador cambiante puesto que resulta de la

acción conjunta de factores ambientales.

Por ejemplo en condiciones normales una población de artrópodos vive a expensas

de una especie vegetal sin que su número llegue a ser una amenaza para el cultivo, para

ello debe haber un equilibrio entre los factores de la variable R de modo que el cambio de

uno sea compensado por el otro y su valor total quede entre pequeños límites de variación.

Cuando R disminuye la relación se inclina a favor del artrópodo ya que también aumenta

su abundancia, de manera que se dan las mejores condiciones para que aparezca el

fenómeno plaga (Romanyk & Cadahia 1992).

Tipos de plaga

Rogg (2000), desde el punto de vista económico, de densidad y fluctuación, menciona la

clasificación de plagas de la siguiente forma:

Plaga subeconómica

Se denominan plagas subeconómicas por su contribución al daño total del cultivo. Parece

contradictorio, pero son verdaderas plagas aunque provoquen un daño insignificante. Aún

poblaciones altas de este tipo de plaga, no llegan a pérdidas importantes, por tal razón no

se justifica un control. Sin embargo, se debe monitorear sus dinámicas poblacionales. Un

complejo de plagas del tipo subeconómico puede en conjunto provocar daños importantes

al cultivo.

Plaga ocasional

Normalmente su nivel de daño está debajo del umbral económico, pero su fluctuación

poblacional puede llegar a niveles sobre el umbral económico. Es un tipo muy común entre

las plagas, puede ser asociado con el cultivo por muchos años sin causar daños.

113

Plaga severa (plagas clave)

Provoca los peores problemas para el productor. Solo algunos insectos pertenecen a este

tipo y generalmente se refiere como plagas clave, los problemas provocados son causados

en el valor alto del cultivo y/o en las poblaciones altas de la plaga. Incluye insectos y otros

artrópodos que atacan directo al cultivo y su producto y los cuales aparecen en cantidades

grandes. El control requiere un complejo de diferentes métodos de control para reducir las

poblaciones debajo del umbral económico.

Fig.2. Tipos de plagas (claves, ocasionales y potenciales) según la densidad de sus

poblaciones, respecto al umbral económico (Cisneros 1992).

Por ejemplo, un ecosistema que favorece la nidificación, reproducción y descanso de

Zenaida auriculata son los bosques xerófilos de baja o media altura cuya fisonomía es

altamente adecuada para que esta ave prolifere, este es el caso del Bosque de Caldén que se

encuentra cercano a las plantaciones de girasol en la provincia de La Pampa (Bernardos &

Ferell 2013), donde en algunos parches de vegetación se encuentran sectores de cría

colonial de paloma torcaza con densidades de alrededor de 5000 nidos/ ha. Esta conjunción

de bosque xerófilo sumamente cerrado, disponibilidad de alimento y agua son

características del ambiente que favorecen el crecimiento continuo de esta ave (Burton et

al. 1974).

El MIP tiene que considerar un sinnúmero de factores que favorecen a que las

especies consideradas plaga proliferen, así continuando con el ejemplo de la Zenaida

auriculata, es de vital importancia analizar que si bien las pérdidas ocasionadas en el

proceso de cosecha son de naturaleza distinta, el grano abandonado en el suelo es alimento

diferido para la época invernal para, justamente, la misma paloma que causa daño. Esto es

un sistema de retroalimentación positiva, que lleva a un aumento creciente de la población

de la torcaza, motivo por el cual es fundamental mejorar la eficiencia de cosecha

(Bernardos & Ferell 2013).

El tratamiento de problemas con aves no debería ser diferente del planteado para

insectos, enfermedades o malezas. El Manejo Integrado de Plagas (MIP), ha probado ser

114

aplicable enteramente en especies de vertebrados. Este enfoque intenta combinar varias

medidas de control basadas en la ecología de las especies plaga, coordinando acciones con

las prácticas de manejo del cultivo o la agricultura de la región, las que en conjunto,

tendrían un mayor éxito que si se usaran en forma aislada. El MIP se distingue del manejo

de plagas tradicional en que apunta a reducir el estado de plaga de la/s especies a niveles

tolerables, con criterios ecológicos aceptables, basado en realidades económicas,

integrando varias tácticas y manteniendo la calidad del ambiente (Canavelli, et al. 2008).

Vitti (2011) resume la biología y ecología comparadas de “paloma mediana” y

“cotorra común” haciendo referencia a los cultivos de girasol Heliantuhs annuus L., y

recalca que estos parámetros no son estáticos ni universales, sino que varían en el espacio y

el tiempo según las circunstancias y las densidades poblacionales. Sin embargo, son útiles

para destacar las diferencias entre ambas especies (Tabla N° 1).

Tabla N°1. Características biológicas de la paloma torcaza (Z. auriculata) y cotorra

(M. monachus), (Vitti, 2011).

Características Paloma torcaza Cotorra común

Alimentación Semillas cultivadas (85%) y

silvestres.

Semillas, frutos, flores y brotes

silvestres y cultivados.

Reproducción Capacidad de criar todo el año,

en función del alimento

disponible.

Número de posturas al año: 4-

5.

Iniciación temprana (6 a 8

meses).

Nidos simples, en múltiples

sustratos (incluido el suelo).

Tamaño medio de la postura: 2

huevos.

Temporada reproductiva entre Octubre

y Diciembre.

La mayoría realiza 1 postura al año.

Iniciación tardía (1 a 2 años de edad).

Nido elaborado en árboles, postes,

torres eléctricas, etc.

Tamaño medio de la postura: 6

huevos.

Supervivencia Juveniles (1er año): 20-50%,

Adultos 50%

Juveniles (1er año): 62%, Adultos

81%

Regulación poblacional Dependiente de la

disponibilidad de alimento.

Incierta (disponibilidad de alimento,

de sitios de nidificación, etc).

Hábitos gregarios Muy desarrollados,

constituyendo grupos de

cientos de miles de individuos.

Forman congregaciones de

grandes colonias para refugio y

nidificación.

Si. Desarrollados, pero en grupos

relativamente pequeños; cientos de

individuos.

Movimientos diarios

(entre dormideros y

sitios de alimentación)

50 - 100 km. 3 – 8 km en época reproductiva

(septiembre a febrero) y hasta 24km

en época no reproductiva (marzo a

agosto).

Movimientos

estacionales

(migraciones)

Hasta 500 km. Ausentes. Es un ave residente.

115

MANEJO INTEGRADO DE PLAGAS (MIP)

El sistema de control adecuado para combatir y reducir la incidencia de plagas en el campo

agrícola es el Manejo Integrado de Plagas (MIP). La FAO (Food and Agricultural

Organization 1997) define al MIP como “Una metodología que emplea todos los

procedimientos aceptables desde el punto de vista económico, ecológico y toxicológico

para mantener las poblaciones de organismos nocivos por debajo del umbral económico,

aprovechando, en la mayor medida posible, los factores naturales que limitan la

propagación de dichos organismos”.

En el caso de cultivos para aplicar los diferentes métodos de control no solamente es

necesario conocer los sistemas de producción agrícola, sino también la biología y ecología

de las especies consideradas plaga y el momento adecuado para aplicarlos (prefloración,

floración, fructificación, etc., dependiendo de la especie). Para conocer este momento

adecuado se debe seguir los siguientes pasos (Rogg, 2000):

1. Conocimiento de la especie plaga (densidad de las poblaciones, daños causados)

2. Umbral económico

3. Métodos de control

En el caso de especies animales se puede aplicar este mismo proceso.

Conocimiento de la especie plaga

Incluye la identificación correcta de la especie, su comportamiento ecológico, daño

provocado, distribución dentro del campo y del cultivo, estructura demográfica (tasa de

incremento, mortalidad, tasa de sexo, etc.). Con métodos de monitoreo se debe evaluar

constantemente la densidad de la plaga. Para seleccionar el método adecuado de control, se

debe conocer en qué parte del cultivo y en qué fase fisiológica ataca la especie plaga.

UMBRAL ECONÓMICO

Para determinar si las pérdidas económicas superan los costos de protección del cultivo y

decidir sobre un adecuado método de controlar la plaga.

Desde el punto de vista económico, para saber si es necesario implementar un control

contra una cierta plaga se tiene que establecer el Umbral Económico (UE), definido como

“…el punto en el cual la densidad de especies plaga presentes, está apenas por debajo de

aquel en el que el costo y el daño hecho en el valor del cultivo igualan el costo de

tratamiento. En otras palabras cuando la relación del costo de control con el beneficio

obtenido como resultado de éste es un poco menos que 1:1” (King & Saunders 1984). El

UE se puede definir sencillamente como el nivel de daño o de plagas que justifica la toma

de medidas necesarias para su control.

116

Fig. 3. Representación gráfica de Umbral Económico (Labrada y Caseley 1996).

A través del muestreo en campo se puede conocer la densidad poblacional de las plagas o

sus daños y se debe realizar un control cuando se tenga definido el umbral económico,

aunque en general, es muy difícil de evaluarlo y los factores que lo establecen varían

significativamente de un cultivo a otro, de un campo a otro y de un lugar a otro. El

productor tiene que aplicar su propia experiencia en la evaluación de su propio umbral

económico utilizando los datos de instituciones y organizaciones agrícolas (Rogg 2000).

Hay que tener en cuenta que la sola presencia de una especie considerada plaga en el

cultivo no se traduce necesariamente en una disminución de calidad o cantidad de la

cosecha, por lo menos en términos que justifiquen el costo de las medidas de control, si es

que se aplica. Esto está ligado íntimamente al tipo de plaga, fase de desarrollo de la planta,

de las plagas y sus enemigos naturales, estado sanitario y vegetativo del cultivo, las

condiciones ambientales favorables, o no al desarrollo de la plaga, así como la presencia en

cantidad y calidad de los enemigos naturales (entomopatógenos, parasitoides y

predadores).

Por lo tanto para llegar a medir un nivel de UE se debe tomar en cuenta:

- Pérdidas económicas por invasión vs impacto ambiental

- Grado de daño en los cultivos por la presencia de aves (soja, maíz, trigo, sorgo).

- Factores que generan pérdidas significativas en los cultivos:

- Sobrepoblación/plaga sp.

- Factores productivos

- Factores climáticos

- Tiempo

- Pérdida en cosecha y postcosecha

Según la FAO (2002), los factores relevantes para determinar las repercusiones

económicamente inaceptables de una plaga no cuarentenaria reglamentada (plaga cuya

presencia en las plantas para plantación influye en el uso propuesto para esas plantas con

repercusiones económicamente inaceptables y que, por lo tanto, está reglamentada en el

territorio de la parte contratante importadora) incluyen:

117

- Reducción de la producción comerciable (por ejemplo reducción del rendimiento)

- Reducción de la calidad (por ejemplo reducción del contenido de azúcar en uvas para la

producción de vino,

- Reducción del grado de calidad del producto comercializado)

- Costos adicionales del control de plagas (por ejemplo, raleo, aplicación de plaguicidas)

- Costos adicionales de cosecha y clasificación (por ejemplo, selección)

- Costos por replantar (por ejemplo, debido a la pérdida de longevidad de las plantas)

- Pérdidas a causa de la necesidad de sustituir cultivos (por ejemplo, debido a la

necesidad de plantar variedades

- Resistentes de bajo rendimiento del mismo tipo u otros cultivos).

En casos especiales, podrán considerarse como factores relevantes los efectos de las

plagas en otras plantas hospedantes en el lugar de producción.

A nivel nacional, no existe una metodología consensuada para estimar el daño

ocasionado por este tipo de aves, los reportes de daños ocasionados por paloma torcaza

(Zenaida auriculata) en cultivos de girasol registraron una amplitud de cifras, en el sur de

la provincia de Córdoba se alcanzaron pérdidas del 33% al 51 %. Canavelli et al. (2011)

reportaron pérdidas entre el 8 % y 1 % en la provincia del Chaco, Entre Ríos, San Luis y la

Pampa.

Es necesario planificar acciones de mitigación para abordar este problema, además

consensuar la metodología de estimación de daño para su aplicación a escala regional y así

poder contar con estimaciones reales en base a una metodología validada, hecho que

dimensionará correctamente la magnitud del problema.

SOBREPOBLACIÓN

La superpoblación proviene de la superación por una especie animal de los límites de sostenibilidad

del biotopo que habita. Esto es, una especie demanda más alimento, produce más residuos y exige

más espacio del que el biotopo puede darle o aceptar sin sacrificar el futuro de otras especies que

habitan en él. La superpoblación no es tanto una cuestión de espacio, como de limitación de

recursos, y sobre todo, como consecuencia directa, de extinción de las especies que cohabitan la

región superpoblada con la especie humana. Se estima que cerca de un 99,9% de todas las especies

que han surgido en el planeta se han extinguido por una u otra causa, siendo la actual causa

principal de extinción la actividad humana, además de que sin estas extinciones la especie humana

nunca hubiera llegado a ocupar todos los ecosistemas del planeta (Walsh 1995).

TURISMO CINEGÉTICO

Es una actividad que desarrolla un cazador deportivo nacional o extranjero, que visita

destinos, localidades o áreas donde se permite la práctica de la caza de fauna silvestre de

interés cinegético (de cacería) en su entorno natural, y que hace uso de servicios logísticos

y turísticos para hacer más fácil la práctica de este deporte, en un marco de conservación y

sustentabilidad de la vida silvestre. (Moncada 2005).