Nº 320

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  • 8/4/2019 N 320

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    Ao 6 - N 320, Tacuaremb-Rivera - del 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011 - Suscripcin $ 100 - Unidad $ 30

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    2 A CCI N I N FORMA T I V A Del 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    El 22 de agostopasado abr mi co-rreo virtual y me en-

    contr con un comunicadode la Jefatura de Polica quecontaba de tres accidentesgraves ocurridos el 21,

    catalogados as por quienesinforman desde la ayudantapolicial.

    En Sarand y Varela doshombres quedaron tendidosen la calle, padre e hijo (70y 45 aos), con diferentesheridas, cuando cruzabanen moto la esquina, justocuando un auto pasaba conpreferencia por Sarand.

    En la esquina de JulioGrauert y Figueroa dos j-venes chocaron sus motos ytuvieron heridas de entidad.

    En la esquina de Riveray Dr. Catalina, dos motoschocaron y un adolescentey un nio sufrieron lesionesimportantes, aunque uno delos conductores sali ileso.

    Estos tres casos en unsolo da provocan, en al-guien que solo ve las ini-ciales en la pantalla de sucomputadora, un estadorepentino de tristeza. Sinembargo uno imagina cmoestarn las familias en estosmomentos, viviendo estaslesiones graves de seresqueridos, porque lo ha vividoen la propia familia, o enamigos cercanos a algunode nuestros hijos.

    Nos est llegando a todos este virusde la irreverencia en las esquinas, desuponer que del otro lado no viene na-die, o que en la esquina, quien venga nopodr distraerse y s o s, deber respetarla derecha.

    Nunca es as. Somos bestias quecreemos que viviremos siempre, y quealgo mstico nos proteger cuando damosrienda suelta al atrevimiento de sacarlela lengua a la muerte.

    El mismo da que abr mi correo, peroen la tardecita, iba por 18 de julio en mipandita, y un conjunto de motos, casitodas sin luces y sin patentes, cerrabanla calle transitando despacio. Charlabanentre ellos. De pronto un motociclistalevant la rueda delantera y aceler una

    cuadra completa. El joven gir la motoall en la otra esquina y esper con unajovencita aferrada a su espalda, a que lle-gara el grupo que acababa de abandonar.

    Al grupo de motociclistas que cerraban

    el paso deb hacerles cambios de lucespara que me dejaran pasar, y algunosme miraron con arrogancia, desafiantes,hasta que comenzaron a abrirse. Pas yles levant la mano agradeciendo, peroel primero me mir desafiante. De prontoescuch un simptico grito Miguel de los

    motonetistas que venan detrs, pero yaestaba pasando al frente y no logr ubicara quien me saludaba, entre ellos.

    El rugido de la moto que levantabala rueda me hizo acordar a los felinosmachos cuando levantan la pata y meanmarcando el territorio. Y el grupo de mo-tos me record, una vez ms, que somosbestias que buscamos, en bandos, tenernuestros espacios de dominio, como unacuestin que est en nuestra conducta,metida desde siempre.

    Todos competimos en las calles, comoen diferentes lugares de la vida, y muchasveces pagamos precios altos.

    Regulamos esas conductas metiendoleyes y decretos o reglamentos, pero esdifcil frenar esa cuestin animal que nosimpulsa a creer que somos capaces detrasvasar los lmites y salir indemnes. Elasunto es que tambin all, a travs de losreglamentos, seguimos siendo bestiales.

    Hace poco una denuncia penal contrael director de trnsito se cuaj debido aque el jerarca se enter que varios ins-pectores de trnsito estaban recogiendofirmas para realizar el trmite judicial.

    Iban a denunciar que personas mul-tadas por infracciones en la va pblica,infracciones que no son leves, concurrena la Intendencia y jerarcas les bajan con-siderablemente los montos a valores muymenores. Lo hacen con correligionarioso amigos.

    Los inspectores queran denunciar que

    los jerarcas municipales que realizan lasquitas de las multas estaban perjudicn-doles econmicamente, pues el 50% delas multas les corresponde, como partede sus ingresos.

    Los inspectores de trnsito sealabanen la denuncia que finalmente no serealiz, de que estas prcticas se habanincrementado con el ingreso del ex edildel Partido Colorado Juan Carlos Osorioa la Direccin de Trnsito. Adems dabanun mensaje moral, sobre la pobre imagenque da la Intendencia, cuando es arbitra-ria a la hora de beneficiar a algunos, endetrimento de los dems.

    Esta denuncia se cuaj porque siem-pre hay algn loro, como me dijera unode los inspectores que ya haba firmado,

    y el director de trnsito se desquit, asme lo dijo, poniendo horarios incmodosy desacostumbrados a sus subordinados,y provocando temor entre varios de losinspectores que an no haban firmado

    ED

    ITO

    R

    IA

    L

    Miguel A. OliveraPrietto

    Semanario ACCION INFORMATIVA de TacuarembExpediente de M.E.C. N 1937

    Chaj 7 - Barrio Pereira Fontes - Tel.: 46324971. Tb.Paysand 1175 apto. 2 - Tel.: 46221099 Rivera

    [email protected]@gmail.com

    http://semanarioaccioninformativa.blogspot.comDirector Comercial: Miguel Olivera Prietto

    Redactor Responsable: Miguel Olivera PriettoDirector Comercial en Rivera: Nstor Chaves

    Diseo: Luis M. Gonzlez - [email protected] en: PubliAcontecer - Artigas 194 - Durazno

    Fundado el 6 de Octubre de 2004Las notas firmadas son exclusiva responsabilidad de los autores.

    Miguel A. Olivera PriettoR.U.C. 160113610017

    BPS N 3130578

    la otr a v oz ...

    la denuncia.

    Varios firmaron, otros no, entoncesresolvieron dejar en suspenso la denun-cia penal, que por miedo no prosper,cuando al principio, prcticamente todoslos inspectores estaban de acuerdo enrealizar.

    Entonces si consideramos que losinspectores son los representantes delbando de las buenas costumbres socia-les y son los que implementarn el ordennecesario en las calles, y si tenemos en

    cuenta la bronca que deben tener, ms deun inspector, cuando no son debidamenterespaldados en un trabajo que muchasveces es peligroso, volvemos entoncesa hablar de los espacios de poder quenosotros, animales de conductas impre-vistas, muchas veces ejercemos y nomedimos consecuencias.

    Las calles de Tacuaremb representancada vez ms un peligro porque hay cadavez ms vehculos, pero no porque las

    personas estn cambiando. Las debilida-des disfrazadas de fortalezas son ances-trales, y en nuestras calles, dos bandospugnan por el poder en las esquinas, yninguno es menos animal que el otro.

    Cr u c e s d e e s q u i n a s

    Junta Depar tam enta l de Rivera1825 ~25 de agosto ~ 2011

    Ce l e b ra m o s e l 1 8 6

    a n iv e rs a r io d e la

    i n d e p e n d e n c i a

    u r u g u a y aLa Junta Departamental de Rivera con motivo de cum-

    plirse un nuevo aniversario de la Declaratoria de la Inde-pendencia del Uruguay, se complace trasmitir un saludoa toda la comunidad Riverense, en la seguridad que losprincipios de libertad, igualdad y justicia social sustentadospor el prcer Jos Artigas y culminados por los GeneralesJuan Antonio Lavalleja, Fructuoso Rivera y Manuel Oribe,se mantienen vigentes y son el fiel sentimiento del pueblo

    uruguayo.Los invitamos a participar de las celebraciones de estos

    186 Aniversario de la Independencia Uruguaya.-

    Jorge Ariel Freitas Heber Freitas TurnesSecretario General Presidente

    Rivera , un obrero m uer t o

    En el da de ayer falleci Hugo Omar Arnal Videla de 44 aos, mientras trabajaba enel chipeado de madera, de la empresa URUFOR SA, propiedad de la familia Otegui.

    Se estaba investigando en la justicia por qu ocurri el accidente, pues habra su-cedido cuando un obrero accion una mquina que se hace el trabajo de chipeado,estando Videla trabajando en ella. El infortunado trabajador fue succionado por lamquina, la que le provoc una espantosa muerte.

    Algunos compaeros involucrados fueron atendidos por el dao psicolgico que lecaus presenciar el accidente, y no haber podido salvar a su compaero.

    En el momento de cerrar este semanario, se seguan investigando las causas delaccidente en la Justicia de Rivera.

    El comunicado policial dice, en parte: Prximo a la hora 13:30 de ayer (26/08/11)personal de Seccional Novena concurre a la Planta industrializadora de URUFOR,donde se haba protagonizado un Accidente Laboral Fatal Al lugar se constituyeronla Juez Letrado del 2 Turno, Dra. Isaura Tortora, Forense Dr. Bartolota, tambin com-parecieron el comando de Jefatura; el juez actuante luego de las instancias primariasen el lugar dispuso: autopsia del cadver, indagatoria de testigos y emplazamientopara la sede judicial, luego de culminada la autopsia entregue del cuerpo a deudos

    bajo recibo. Todo lo que se cumpli

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    3A CCI N I N FORMA T I V ADel 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    Por maop

    Los

    denunc iantes Son varias las personas

    que han tenido dudas conrespecto a los descuen-tos que les hacen de suscompras en Cantinas Mili-tares, que en Tacuarembfunciona en un costado delClub Lavalleja, en la calleWilson Ferreira, casi Apa-ricio Saravia.

    Con una de las personasque habl fue con JosRicardo Chineppe, queme dijo: La primera vezfue en el 2004, una vezfuimos a Montevideo y

    llevamos poca plata y fui-mos a la Cantina, porquecomprbamos todos losmeses en Tacuaremb yfuimos a comprar all, ynos encontramos que notenamos crdito pero stenamos una deuda de50mil pesos. Empezamosa buscar y fuimos a lasoficinas de cantinas mili-tares, nos atendieron perono nos resolvieron. Al otronos recibieron los jefesde Cantinas Militares y alo ltimo el oficial mayordijo que le devuelvan laplata si le descontaronmal, y si el mes que vienele vuelven a descontar, quese lo retengan y al messiguiente me descontarony se arregl.

    En el 2007 me volvierona hacer lo mismo. Hicelas averiguaciones, pedestado de cuentas y nome lo dieron. Luego noscont que le haba pedidoa su hija en Montevideo queaveriguara: Me dice mi hijaque tena 40mil y pico dedeuda, y eso no lo entiendenadie. Cuando voy a Can-tinas Militares a resolverexpresamente a resolvereso, y me maltrataron, metomaron el pelo, en Monte-video. Nos aseguro que:Hay mucha gente perjudi-

    Algunas personas estn desconformes con las cifras que se descuentan. En Cantinas Militares no entregan estado de cuentas a quienes se los piden, anotan conbirome en un cuaderno como en los boliches de antes, y las personas que adquieren mercaderas no reciben recibos o facturas para poder ejercer el control de suscompras. En ese estado de cosas, existe una gran inquietud.

    Tacuaremb

    Ca n t i n a s M il i ta re s : c o r r i e n d o e l l p i z

    cada por estas maniobras.Sin embargo el problemaes el estmago. Si dejande comprar en Cantinasno sacan nada. Para poderhacer algo (una denuncia)hay que tener dinero parapoder vivir.

    Sandra Kirtzemann espensionista militar desdeel ao 76, su padre fallecien acto de servicio. Empe-z a operar en CantinasMilitares desde el 2005,le descontaban todos losmeses, le daban un crdito

    de 6mil pesos, casi nuncasacaba esa cifra. El seor(el cantinero) no te dabatodo lo que pedas, si pe-da 4 paquetes de yerbale daba dos, porque habaque dejar para los otros.

    Refirindose al cantine-ro, dice: El nunca presentboletas, yo lefirmo un cua-derno y si me doy vuelta,si puso mil quinientos y sipone un uno ms son oncemil y pico.

    Luego le dijo que pororden de superiores debabajar los montos, y los baja 3mil pesos. Sin embargome daban los tres mil pesosy me venan descontadosseis. En el 2009 le ped

    aqu (en Tacuaremb) unestado de cuentas, y mecontestaron que CantinasMilitares no daba estadosde cuentas.

    En enero habl con elComandante Machiena ycon el Sr. Pomo, y cuandocitaron al encargado deCantinas el hombre enun estado de nerviosismodeca doa usted no debenada, y yo deca que porsupuesto no deba nada,pero de dnde haba salidola deuda. Y el hombre

    nervioso deca vamos adejarla en cero.

    La seora Sandra noscuenta que hasta le habandescontado un arma, y ellareclam la boleta firmadapor la compra de un armay no apareci nunca.

    Cuenta que fue a Monte-video y no la trataron bien,sin embargo se preguntacmo va a generar unadeuda de 53.100 pesos, yresulta que en Montevideono tiene cuenta.

    Chineppe asegura quemucha gente est descon-

    forme, pero no se animana hacer algo. Dicen que notiene arreglo, que tienen

    miedo.

    Sandra Kurtzemann pre-sent denuncia ante laJuez Letrado de PrimeraInstancia de Tacuarembde primer turno, que a partirde julio del ao 2005 secomenz a descontar desu pensin por supuestascompras que haba reali-zado. La seora Sandrano reconoce la totalidad delas cuentas hechas desdeTacuaremb, manifiestaque es irregular la anota-cin de las mismas, y que

    las cifras descontadas sonexcesivas. Inclusive diceen la denuncia que se lesegua descontando entreagosto de 2007 y junio de2009, sin que se realizaran

    compras.

    La otra caraAccin Informativa es-

    tuvo en la sede del ClubLavalleja, donde funcionaCantinas Militares, y ha-blamos con la persona alfrente. Nos explic que aveces la gente se excedey no lo quiere reconocer,y que l no maneja dineroen el local, sino que envamensualmente la lista dedescuentos que se lesdebe realizar a funcionariosmilitares como a retirados.

    Solamente en el casode personas que deseen

    pagar al contado algunamercadera, como paraachicar el descuento, peroen ese caso el cantinerodice que gira a Cantinas Mi-litares del Ejrcito el dinerorecaudado. La cantina deTacuaremb recibe un por-centaje sobre la venta total,y no permiten que haya encaja en esta dependencialocal ms de 5mil pesos.

    Sin embargo percibimosuna contabilidad demasia-do casera para la actividadque se desarrolla. Las per-sonas que retiran merca-deras firman un cuaderno

    al final de la lista anotadaa birome por el cantinero,y no se llevan a su casauna factura o un recibo delo que acaban de comprar.Es decir, que luego que

    dejaron su firma debajo deuna lista escrita a birome,no tienen ningn controlsobre sus erogaciones enCantinas Militares.

    Percibimos tachaduras,correcciones, etc., en loscuadernos, incluso encimade las firmas, y nos pareciuna contabilidad llevadaa la vieja usanza de losboliches de barrio, dondelos lmites los pone nica-mente la moral y las buenascostumbres de las partes,y no la documentacin quese maneja.

    Le preguntamos por quen un lugar que dependedirectamente del Ejrcito

    se lleva de esa forma lacontabilidad, y nos explicque en Montevideo tienentodo computarizado y quel no tiene nada de eso.Sin embargo no supo res-ponder por qu, de todasformas, no se les entregabauna factura o una copia delo que la gente se llevabaen mercadera, cada vezque pasaban por la Can-tina, y no supo responder.En un momento existicierto enojo, el funcionariose sinti enjuiciado porAccin Informativa, perole aclaramos que nosotrossimplemente preguntba-mos el funcionamiento yque no abriramos juicioal respecto, que para esoestaba la justicia.

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    4 A CCI N I N FORMA T I V A Del 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    Por ChumboNstor Chaves

    Al ser consultado sobre laafirmacin de la presidente delSindicato Mdico Dra. FernandaGarca quien asegur que se esten omisin de asistencia, el Dr.Cabrera dijo que me parece quees una barbaridad. Quizs nohayan medido bien los trminos.Quizs no es lo que querandecir. Nosotros hemos estadoaveriguando y la asistencia se

    brinda., las consultas se hacen,la emergencia atiende a la gente.

    Hace referencia al caso delbebe que falleci en la materni-dad, explica: naci con una doblecircular de cordn, lamentable-mente ocurri esto. Hoy tengola carta de los gineclogos encuestin hicieron seis cesreaese da, haba anestesista ese

    Cont ina la po lmic a en tor no a l Hospi ta l de Rivera. El subdi rect or Dr. Anton io Cabrera seal que se est en una c ampaa paraimpedi r que se habi l i te un CTI . Asegura que por det rs de todo hay intereses financ ie ros

    In te reses fi nanc ieros in tent an im pedi r lainst a lac in de un CTI en el Hospi t a l de Rivera

    da, fue coordinada la llevarona block. Lamentablemente todo

    se desencadena rpidamente yno hay una forma, no lo digo yo,lo dijo el jefe de ginecologa elDr. Rechy. No hay una manerade diagnosticarlo previamente,uno diagnostica el sufrimientofetal pero no la causa que lo estgenerando.

    Vuelve a referirse a las afir-maciones de la presidenta delSindicato Mdico de Rivera yacusa Es una gran reaccin detodas las fuerzas que estn enpugna para que el Hospital deRivera no tenga un CTI, para queel Hospital de Rivera no tenga lareforma, y para que el hospitalde Rivera no mejore su servicio

    de imagenologa. Pugna que noes un problema de no querer, demaldad, no, es lisa y llanamen-te un problema de plata. Sonintereses financieros, trato deno entrar en una paranoia, peroesto es una realidad. En estosltimos cinco o seis das, luegode reunirme con autoridades deASSE me doy cuenta que es as,

    es un problema de dinero, dermiedo a perder aportes, de miedo

    de competencia, de miedo que elhospital no sea el gran proveedor.Creo que hay gente que desearaque el hospital siguiese como mu-chos aos atrs, un lugar dondevas para que de ah te manden aotro y paguen por ti. Creo que elhospital, por la cantidad de genteque atiende, (55.000 personas)va tener que seguir recurriendoa otros servicios particularesy bueno es que recurra. Perotambin es bueno que el hospitaltenga su CTI, que tenga un mejorservicio de imagenologa, quetenga un mejor edificio. Eso va aredundar en beneficio de la genteque atendemos. Esta escalada,

    esta denuncia frente a la FEMIgremial, esto de salir a buscar, ira los ministerios, esto no es msque el empuje desesperado delos que se enteraron que el 2 desetiembre se inaugura el CTI enel Hospital.

    El sub director del Hospitalreconoce que el edificio es viejoy apunta es viejo desde hace

    tiempo, es viejo pero est muybien mantenido.

    Asegura que tienen los equipospara que funcione muy bien unCTI y advierte Espero que no losrompan las cosas ahora. Descri-be el acondicionamiento que sehizo del lugar donde va a estarel CTI. Dice que se ha armadoun lo brutal (por falta de anes-tesistas) Dos de los anestesistasvienen en un tira y afloje, quevienen, que tienen que recibirse,que tienen que dar la prueba,que la dan este mes que, la danel mes que viene. Se da unasituacin bastante interesante:nosotros estuvimos invirtiendoes estos dos muchachos, apenasestuvieron en condiciones, ya los

    salieron a contratar y hay quienesamenazan o sostienen que losvan a contratar con exclusividad.No tengo inconvenientes que loscontraten, al contrario me gusta-ra que lo hicieran pero que lespermitan actuar tambin para lapoblacin ms carenciada en elHospital de Rivera. Reconoce quehay algunos mdicos que no cum-

    plen el horario total pero tambines cierto que en otros momentos

    se quedan ms de loa que tienenque quedarse. Tambin es ciertoque de repente no vienen, perotambin es cierto que estn ha-ciendo otra tarea.

    Seala el subdirector del Hos-pital de Rivera que ASSE dismi-nuy la cantidad de usuarios yno podemos mejorar la calidadde la atencin. Con quien sequed ASSE con los usuariosms discapacitados, con menoscondiciones econmicas y conenfermedades crnicas. En-tonces el tiempo de asistenciamdica y el tiempo sigue siendoexactamente el mismo. Yo creoque en este pas, como en varios

    pases mas de Latinoamrica,nos estamos enfrentando a unareaccin desmedida de, yo di-ra, nazi-fascista, de la extremaderecha, para desestabilizar laestructura socialista que se estdando en toda Amrica Latina.

    Juan Carlos Aguirre delegadode los usuarios de Salud Pblicaen Rivera, tambin tom parte enla polmica por la instalacin deun CTI en el hospital de Rivera.Al ser consultado por Accin In-formativa dijo: La instalacin delCTI en el Hospital de Rivera esun s o un s. Se escapa al co-nocimiento de muchas personasque han salido ltimamente entodos los mbitos, es la relacincosto beneficio para el Hospitalde Rivera, con la instalacin delCTI. El ao pasado (2010), la uni-dad ejecutora 025, el Hospital deRivera, gast 800 mil dlares en

    internaciones en CTIs privados.Los costos de un CTI con diezcamas, es de 700 mil dlares.Estamos hablando que tener unCTI al costado del Hospital esms barato que seguir alquilando

    Hospi t a l de Rivera:

    En 2010 se gast U$S 800 m i l en

    ar r iendo de sa las en CTI pr ivadoel servicio a privados. No solo seinvirti 800 mil dlares se gastms. Se han hecho coordinacio-nes para internacin en CTI conPunta del Este, porque no habacama en otros lugares del pas.

    En el Hospital de Rivera estinstalado el Centro de Estabili-zacin de Pacientes que renecasi las condicionantes de unCTI. Se le debe incorporar dosrespiradores y algn otro instru-mento. Con eso ya se puedenhabilitar cuatro camas. Al costode 800 mil dlares se le suma eldesgaste de flota de vehculos,

    un traslado a Punta del este porejemplo, implica que una ambu-lancia no est en Rivera durante18 horas. Costos de combustible,pago de viticos, dos choferesuna auxiliar de enfermera y un

    mdico, suman ms costos. Nohay marcha atrs en esto el 2 desetiembre se inaugura CTI concuatro camas y a partir de enerodel 2012 se construye uno para10 camas, no hay marcha atrs.

    Anestesistas

    Aguirre inform que ya se fir-man contratos con los Drs. Lotitoy Gmez En estos das el Dr. Lo-tito recibe el ttulo. Al Dr. Gmezle falta un par de meses. Los dosprofesionales le confirmaron ala directora de segundo nivel deASSE que firman contrato con

    el Hospital de Rivera. Tambinse hacen tratativas con el Dr. IvoFerreira mdico de TacuarembQue tambin podra sumarse aestos dos profesionales.

    Rivera: lo propuso el edi l Edgar Leivasen la media hora prev ia

    P r o p o n e n h a c e r a r t een los muros de ca l leManuel Or ibe

    El edil Edgar Lei-vas del Frente Ampliopresent una intere-sante iniciativa en laJunta Departamentalde Rivera. Proponeque artistas plsticos, jvenes, se ocupende los muros de lacalle Manuel Oribe,todava ocupadoscon publicidad elec-toral. El legislador departamental se expres durante la media

    hora previa de la seccin del da mircoles 24.Con un espritu de construir, vengo exponer hoy ante esta

    corporacin un tema que afecta la imagen de la entrada denuestra ciudad.

    A la entrada de nuestra ciudad se encuentran muros quean permanecen pintados con propaganda electoral. En la calleManuel Oribe entre Lavalleja y Diego Lamas, an sigue con laspintadas en los muros.

    Ustedes pueden ver que no se trata de una imagen a la alturade la que queremos presentar, a los turistas que en gran nmeronos visitan, pero tampoco a los riverenses mismos.

    Es por ese motivo que vengo a proponer que la Intendenciaa travs de la direccin correspondiente, promueva a travsde algn proyecto que involucre a nuestra juventud as comoa artistas plsticos riverenses.

    La expresin artstica en esos muros y que se constituyan enun nuevo sitio del cual sentirnos orgullosos y dar nueva muestradel consabido potencial artstico que existe por estas latitudes.

    Calles

    .

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    5A CCI N I N FORMA T I V ADel 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    El martes 30 desde las 14horas, declararn en el JuzgadoLetrado de Primera Instancia deTacuaremb de Primer Turno,ante la Jueza Virginia Ginares,toda la plancha de ediles de la800 (Frente Amplio), el Dr. DanielApata, Dr. Jos Alberto Techera,Francisco Barboza y Luis AlbertoOlivera, como denunciantes deuna presunta irregularidad co-metida en el perodo preelectoral.

    El mircoles 31, entre las 14 y16 horas, declararn los denun-ciados, el Dr. Julio Cardozo, elDr. Jos Omar Menndez y DaroFerraz Braga. Estos declararnen calidad de Intendente en el pe-rodo preelectoral (Julio Cardozo),y Jos Omar Menndez y DaroFerraz Braga como SecretariosGenerales de la Intendencia De-partamental de Tacuaremb, enese perodo.

    Es coincidente que las 70 per-sonas reconocidas por la Inten-dencia, luego de varios trmitesque debieron hacer los edilespara que se les respondiera, la

    inmensa mayora pertenecan ala lista a diputado del seor Julio

    Tambin decl ararn Jo s Omar Menndez y Daro Ferr az Braga

    El m irc o les dec lara e lDr. Jul io Car do zo por

    p resunto de l i to e lec t o ra lCardozo, y todos ingresaron an-tes del 10 de mayo de 2010.

    Sin embargo, segn lo averi-guado por Accin Informativa,el nmero total de personas queingres el actual integrante delDirectorio del Instituto de Coloni-zacin, Dr. Julio Cardozo, es deunas 140 personas.

    Se debe recordar que todasestas personas fueron cesadasde la Intendencia el 12 de mayo,luego que asumiera el empresarioWilson Ezquerra como Intenden-te, a travs de una resolucin fir-mada el 7 de julio por Cardozo, enla que dejaba sin trabajo a todossus compaeros. Esto se debia las presiones que ejercieronsobre l a los efectos de ser re-comendado por el senador JorgeLarraaga para ocupar el cargoen el INC. Es decir, fue el precio.

    El juicio podra sentar un pre-cedente en la jurisprudenciauruguaya, pues sera la primeravez que se juzga una situacinque es frecuente, pero ilegal,

    aunque jams se ha hecho nadapor evitarla. Estamos hablando

    del proselitismo poltico, y eneste caso, de utilizar los recursosmunicipales creando cargos parael ingreso, previo a las eleccionesdepartamentales, de personas dela misma lista poltica del Inten-dente en funciones. Si prospe-rara la denuncia, podra cambiarmucho el estilo de hacer polticaen muchos departamentos delUruguay, pues en Tacuaremb se

    estara haciendo historia.

    Luego de tomarse un tiempopara discutir e intercambiar ideas,el Poder Ejecutivo, con la firma detodos sus Ministros finalmente en-vi al Parlamento el proyecto deley que incorpora el mencionadoimpuesto.

    Lo primero que debemos resal-tar es la forma (poco comn), enque se ha enviado el proyecto. Deentrada hubieron algunas vocesque mostraron alguna especie dedisidencia, pero luego de tomarseel tiempo suficiente para discutirel proyecto (e incluso se hizoalguna nueva incorporacin), seacord en forma unnime enviarel proyecto desde el Ejecutivo.

    Es ms, el proyecto no pre-tende (as lo manifest el propioMujica), que los legisladores delFrente se hagan eco del mismosin analizarlo, discutirlo e inclusomodificarlo. Cada uno tiene lalibertad de votarlo o no, aunqueahora todo parece indicar quetoda la fuerza poltica estar deacuerdo.

    Por el Edil GustavoGuerrero (MPP FA)

    El impuest o a la t ie r r aComo de costumbre aparecie-

    ron voces de la oposicin y de al-gunos sectores del agro (los mspoderosos), que estn en contra eincluso en los ltimos das preten-den argumentar que el proyectoes hasta inconstitucional.

    Nosotros en primer lugar in-

    tentaremos dejar claro en queconsisten las dos secciones queforman parte del proyecto, paraluego remitirnos al problema o node la inconstitucionalidad.

    La primera hace referencia alimpuesto a las extensiones detierra que superen las 2.000 hec-treas ndice coneat 100, que ennmeros anteriores explicramoscomo se hace el clculo.

    Es importante sealar adems,que el impuesto no es progresivocomo es el pago de IRPF, que sepaga por franjas y cada franjapaga el porcentaje que corres-ponde por separado, sino que esprogresional, es

    decir que si, por ejemplo, hayun predio de 7.000 hectreas(IC 100), que corresponde a lafranja de U$S 12 por hectrea,todas las 7.000 hectreas paganlos U$S 12.

    La segunda parte del proyectorefiere a la modificacin parcialde la recaudacin del pago delas personas fsicas o jurdicas

    cuando enajenan un inmueblerural que fue adquirido antes dejunio de 2007, a travs de IRPFo IRAE.

    En cuanto al tema de la po-sible inconstitucionalidad delproyecto, mencionamos que losque afirman esto se refieren al

    inciso 1 del Artculo 297 de laConstitucin de la Repblica queestablece que:

    Los impuestos sobre la propie-

    dad inmueble rural sern fijados

    por el Poder Legislativo, pero su

    recaudacin y la totalidad de su pro-

    ducido, excepto el de los adicionales

    establecidos o que se establecieren,corresponder a los GobiernosDepartamentales respectivos

    En este sentido hay que aclararque quin cobra es la DGI, peroes la comisin sectorial (integradapor OPP y las Intendencias), quie-nes determinan su destino y queva para las distintas Intendencias,ya que est establecido que espara el arreglo de la caminerarural.

    Lo que se destina para el INCo para distintos proyectos es loque se recaudar de las enaje-naciones de inmuebles rurales yno del impuesto.

    Para terminar recordemos unpar de cosas que escribiramosen este mismo semanario a me-

    diados de junio de este ao y queviene bien recordar:

    En el Uruguay hay unos50.000 productores, de los cua-les unos 1.100 concentran unas5 millones de hectreas de las16 millones que hay en nuestropas. Esos son los que pagaran,solo el 2% de los productores,los que poseen la tercera partede nuestro suelo y gran parte deellos improductivos.

    Si hacemos un clculo esti-mado de unos 3.000 dlares lahectrea en un campo bueno deCONEAT 100, unas 3.000 hect-

    reas valen 9 millones de dlares(slo la tierra). Este productorpagara 24.000 dlares al ao,o sea que estara pagando slo0,26% de su valor por ao.

    Por ltimo hay que destacarque si bien la estimacin de la re-caudacin del impuesto en si sonunos U$S 60 millones, se anuncila creacin de un fideicomiso porel cual se conseguirn unos U$S400 millones que se destinarn

    a las Intendencias del interior;se estima que cada Intendenciaentre 15 y 20 millones de dlarespara el arreglo de la caminera..

    Esc. Luis AlfredoDe Souza

    Sin lugar a dudas, el lugar queocupo hoy en da me da ciertosprivilegios. Y no me refiero malpensados- a privilegios del podero conseguir entradas para el cineo que me regalen cosas a fin deao aunque ante eventualesdonaciones acepto corderos,ternera, pollo, lechn o simi-lares- que pertenecen ms al

    imaginario colectivo del poltico que a la realidad de hoy en da.

    Si, es un privilegio por ejemplo, que el Diputado AntonioChiesa me permita concurrir a algunas reuniones con jerarcasacompandolo, pero an mayor es el privilegio al permitirmehablar y expresar opiniones en las mismas.

    Es as entonces que hemos concurrido a muchas reuniones,con variedad de jerarcas, desde Ministros hasta Directores deEntes, y en todas ellas segn mi limitada capacidad he podidoexpresar alguna opinin sobre algn tema concreto.

    Por ejemplo la semana pasada concurrimos a una reunin conel Director del BPS el Ing. Odizzio, ya que Antonio tena variedadde temas para hablar con l y preocupaciones genuinas denuestro pueblo que transmitir. Es as entonces, que hablamos dela preocupacin de nuestros jubilados por sus magros ingresosy le planteamos la necesidad de que nuestros veteranos cobra-ran un aguinaldo anual para reforzar su bienestar y en muchoscasos para ayudarlos a sobrellevar un poco mas dignamentetanto el invierno como las tpicas fiestas de fin de ao.

    Tambin, y en el otro extremo de la escala etaria, le plantea-mos la situacin gravsima que viven los nios que padecenVIH-Sida, quienes durante el tratamiento que reciben en elPereira Rossell, cobran un subsidio otorgado por el BPS, que selo suspende apenas los valores de la enfermedad mejoran, en-trando as en un crculo vicioso, ya que estos nios justamentemejoran en base a que, debido al subsidio, en su casa puedentomar leche y comer mejor, lo que ayuda a su organismo.

    Ustedes amables lectores, estarn pensando a esta altura,cual es el privilegio del que hablas..?? Y la respuesta es muysencilla, el privilegio de poder desde mi lugar ayudar a todaesta gente, a nuestra gente.

    No soy gobernante, ni gano millonadas, no tengo padrino niun prestigioso nombre familiar, pero siento que se puede. Quese pueden hacer cosas, aunque sean minsculas, pero sepueden hacer cosas para ayudar, para dejar un mundo mejorpara las generaciones de uruguayos que vienen.

    El mundo a veces necesita de grandes hroes, pero a diarionecesita del trabajo de hormiga que realiza mucha gente. Deesa actividad diaria que desarrolla mucha gente en nuestrasociedad con la nica intencin de ayudar al prjimo. De losque organizan los CAIF en los barrios que no los tienen, de losque ponen su esfuerzo gratuitamente para que llegue comiday ropa a los compatriotas carenciados, para esos luchadoressociales que pelean da a da para que haya ms dignidad yrespeto en el trato a los ms humildes.

    Ante ellos, mi actividad es solamente un nfimo grano dearena, pero es la suma que lleva a construir la esperanza, yese es mi privilegio, ser constructor de esperanza para muchos

    compatriotas.

    Priv i leg io

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    6 A CCI N I N FORMA T I V A Del 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    RIVERA

    Por Nstor Chumbo Chaves

    El Intendente Departamental,Dr. Marne Osorio, expres queesta firma del convenio resultabamuy importante para el Departa-mento porque hace referencia aobras de caminera rural, (realiza-das) con el esfuerzo del GobiernoDepartamental y las empresasforestales del Departamento.

    El trabajo viene a dar conti-nuidad y a consolidar una mo-dalidad de trabajo que ya es unarealidad, teniendo en cuenta lasdificultades que tiene la Comunapara poder atender los casi tresmil kilmetros de caminera ruralque existen en el Departamentoy las empresas forestales se

    La firma de un convenio entre las empresas forestales y la IntendenciaDepartamental favorecer al Departamento en su desarrollo local

    F i rman conven io en t r e empresasforesta les e In t endenc ia de Rivera

    suman para poder concretar lasobras, dijo.

    Este convenio se realiz en-tre la Intendencia y el grupo deproductores forestales integradopor las Empresas CompaaForestal Uruguaya S.A., ForestalOro Verde, Forestal Tierra Ver-de y Weyerhaeuser Productos.El convenio hace referencia alcamino que se inicia en BuenaUnin rumbo hacia La Calera, yque se trata de un camino de unosveinte kilmetros de extensin,lo que significa un aporte muyimportante en combustible (conmil doscientos litros de gasoil),material de cantera (siete milmetros cbicos de balastro), en

    la disponibilidad de camiones yen la contratacin de equipospara el traslado de este material,significando la tercera parte de lacapacidad de trasporte necesa-rios para realizar el camino.

    La inversin es de aproxima-damente cien mil dlares, en unaporte realizado por las citadasempresas forestales de Rivera enel marco del convenio.

    El Intendente Osorio realiz unreconocimiento respecto a la ac-titud de las empresas forestales,que siempre estn dispuestas aldilogo para encontrar las solu-ciones. Destac las asociacionespblico-privadas, que ms all delas normas y de las leyes, pasan

    por las actitudes de responsabi-lidad social y empresarial de lascompaas.

    A continuacin el representantede las empresas forestales, Ing.Andrs Gmez de Cofusa, mani-fest que las empresas radicadasen el medio tienen ya una largahistoria de trabajo en conjuntocon la Comuna en varias admi-nistraciones, sealando que estamodalidad de convenio es eficien-te y vital para nuestra economay para la sociedad.

    Agreg que este camino ser-vir para sacar la produccin delDepartamento. Se coordin conel sector de Obras de la Comunapara realizar el trabajo, aunandoesfuerzos con los equipos decada uno, para hacer la obra enel menor tiempo y con el menorcosto posible.

    El Director General de Obras dela Comuna, Arq. Jos M. Mazzoni,hizo referencia al trabajo del equi-po de la comuna que trabaj enla obra, ya que con su esfuerzohizo posible esta realidad, ex-pres. Dijo que es un t rabajo que

    se viene realizando hace ya unos

    cuantos aos y hoy se plasmabaen un documento legal, que seda por la buena voluntad de lasempresas.

    Se acord con la Intendenciay las empresas forestales qucaminos se necesitaban paraeste ao, que dieran mayoresrendimientos con los escasosrecursos que tenan, y se acordhacer aquellos caminos que lasempresas consideraran impor-tantes.

    El camino de Buena Unin tieneveinte kilmetros, con una recar-ga total de quince centmetros deespesor, superando los tres millo-nes de pesos de inversin y serel primer paso para la firma deun nuevo convenio, que ser enbreve, y es el referente al caminode Mangrullo con una extensinde dieciocho kilmetros.

    El Arq. Mazzoni manifest susatisfaccin por lo realizado ypor tener como socios con la co-muna a las empresas forestalesque buscan que el desarrollo delDepartamento..

    Pgina 12 ArgentinaDecenas de miles de personas

    marcharon en las calles cntricasde Santiago y otras ciudades endemanda de una amplia reformapoltica y econmica, movilizacinque coron el paro nacional de48 horas convocado por la CUTy que registr incidentes durantela desconcentracin. Con bailes y

    batucadas, cuatro marchas distin-tas confluyeron en inmediacionesde La Moneda, en reclamo deprofundos cambios que abarcandesde una reforma constitucional,electoral e impositiva hasta unaeducacin de calidad, pblica ygratuita.

    La jornada de protesta, con-

    Cientos de det en idos durantelas mani fes tac iones en Sant iago

    vocada por la Central nica deTrabajadores, cont con la adhe-sin de ms de 80 organizacionessociales y partidos de la opo-sicin, y se repiti en ciudadescomo Valparaso y Concepcin.Jaime Gajardo, presidente delColegio de Profesores, afirmque la magnitud de la moviliza-cin demuestra que estamos

    ante un movimiento de protestasocial ciudadano por reformasde fondo, estructurales; aqu yano es slo un movimiento de losestudiantes, eso es lo real. Ca-mila Vallejo, lder de la Federacinde Estudiantes de la Universidadde Chile (FECH), seal que elpueblo de Chile est cansadode que se privilegie la ganancia

    de unos pocos, a costa del bien-estar, los derechos y la dignidaddel pueblo chileno. El dirigentede los subcontratistas del cobre,Cristin Cuevas, confirm queentre otras demandas los traba-jadores chilenos reclaman el de-recho a negociaciones colectivasefectivas, el derecho a huelga,una reforma tributaria y un nuevoCdigo Laboral.

    Desde el gobierno, divididoentre conservadores y liberalesy con la imgen presidencial

    en mnimos histricos, algunosministros pretendieron aliviarlas tensiones, mientras otrosprofundizaron la confrontacin.El ministro de Economa, PabloLongueira, seal que el paroes intil pero reconoci que sino pudiera pagar la educacinde sus hijos tambin estaramarchando. El ministro de Sa-lud, Jaime Maalich, en cambio,calific de asesinos a los padresde los alumnos secundarios quedesde hace casi 40 das estn enhuelga de hambre. Por su parte,la ministra del Trabajo, EvelynMatthei, minimiz los efectos dela huelga al asegurar que el 90,9por ciento de los funcionariospblicos trabajaron normalmente,

    mientras la Asociacin Nacionalde Empleados Fiscales precis

    que ms del 80 por ciento de susempleados se adhiri al paro.

    El lder de la CUT, Arturo Mar-tnez, prefiri no polemizar conlas cifras del gobierno y apunta Matthei, quien hace rato vienedando tumbos y se pone muyhistrica cuando habla. Entoncesno razona bien. No me interesapolemizar con la ministra, me

    interesa que el gobierno debesaber que tiene que conversaracerca de los temas alrededor delos cuales se moviliz la gente.

    La movilizacin de hoy se habadesarrollado de manera pacficahasta el momento de la descon-centracin cuando comenzarona registrarse incidentes entreencapuchados y manifestantes.

    El ms grave de los disturbiosse produjo cuando un grupo demanifestantes prendi fuego alas puertas de la Iglesia de laGratitud Nacional, ubicada so-bre la Alameda, principal arteriade Santiago por donde habanmarchado los manifestantes. Elgobierno inform que hoy habansido heridos siete policas, y queayer haban sido detenidas 500personas. Report adems 108heridos -42 de ellos carabineros-,285 colectivos daados y 60 se-mforos destruidos.

    Las protestas, que continuarnen septiembre y cuyo ncleo es

    el movimiento estudiantil, revelaen el fondo una profunda crisispoltica derivada del sistema derepresentacin en Chile heredadode la dictadura pinochetista, quedetermina un Congreso prctica-mente equilibrado, sin mayorasclaras y con un esquema presi-dencialista muy rgido..

    Cmara s in len t e , de l tamao deuna cabeza de a lfi ler , y adems

    muy bara ta(SloCiencia.com)Adems, su fabricacin slo cuesta unos pocos centavos de dlar.

    Eso la hace mucho ms barata que otras cmaras montadas enun chip. Tambin es ms pequea que ellas.Si no le surgen competidores mejores, es muy probable que estacmara revolucione muchos campos, desde la ciruga hasta larobtica.La cmara ha sido diseada en el laboratorio de Alyosha Molnar,profesor de ingeniera electrnica y de computacin en la Universi-dad de Cornell, Estados Unidos. Del desarrollo, se ha hecho cargoel grupo dirigido por Patrick Gill, de la misma universidad.El prototipo, plenamente operativo, mide una centsima de milme-tro de grosor y medio milmetro en cada cara. Por su apariencia,parece un CD diminuto.La resolucin de la cmara es baja, pero su costo la hace ideal paraaplicaciones donde baste una resolucin modesta y sea imprescin-dible un costo bajo, y para situaciones que exijan miniaturizacin.Entre las aplicaciones de esta cmara estn la de ser componentede cualquier sistema electrnico barato, en dispositivos que, porejemplo, detecten la posicin del Sol o sirvan para que un micro-rrobot pueda desplazarse usando un sistema visual minsculo.Los cientficos del proyecto continuarn tratando de mejorar la

    resolucin y la eficiencia de la cmara.

    noticias heterogneas seleccionadas por M. Stella

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    7A CCI N I N FORMA T I V ADel 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    Dra. Mara Beatriz Martinol GmezGral. Artigas 246 Tel.: 46322568

    Abogada

    QUIENNADASABE, NADAPUEDE

    Por

    Sal Posada

    R e p a r a c i n

    e c o n m ic a p o r

    p r i s i n i n d e b i d a

    Ha tomado estado pblico, que el PoderJudicial enfrenta 269 juicios, en los que sele reclaman daos y perjuicios derivadosde ilegtimas privaciones de libertad, co-rrespondiendo aadir que en los primerosochos meses del presente ao, debidesembolsar una cifra aproximada a losU$S.80 millones. El tema recobra actuali-dad porque es frecuente que se critique alos magistrados por disponer de inmediatola liberacin de personas detenidas a nivelpolicial, por imputrsele ser autor de algndelito. Y en esa direccin, suele colocarsesobre las espaldas del juez, la responsa-bilidad de que el indagado en lugar de serenviado a la crcel, recupera su libertadponiendo en peligro los derechos de lacomunidad.

    Es oportuno recordar, que por man-dato de la Constitucin, el magistradopara decretar la prisin de una persona,debe contar con la semiplena prueba oelementos de conviccin suficientes, quedemuestren la participacin de aquella enla configuracin de una conducta delictiva.Y a la hora de toma la decisin, no tieneotra alternativa que proceder con sumacautela, no solamente porque est en juego su responsabilidad, sino porquemilita en favor del indagado la presuncinde inocencia.

    Obsrvese que en las causas que hanmotivado juicios contra el Poder Judicial,el juez decreta la prisin preventiva delacusado, convencido que la actividad

    probatoria desarrollada lo sealan como

    culpable, pero ulteriormente por variadascircunstancias, las diligencias cumplidas,no logran reunir la certeza indispensablepara proseguir el proceso, por lo que anteel riesgo de incurrir en error, aqul esabsuelto. En otras palabras - como lo des-tacan nuestros Tribunales el imputado esinocente durante toda la sustanciacin delprocedimiento, situacin que slo cambiacon la sentencia de condena.

    En este tramo del comentario, no ha deolvidarse que nuestra Carta Magna des-plaza la responsabilidad indemnizatoriaal funcionario (en ese caso al magistrado)cuando ste ha obrado con culpa grave odolo, lo que concede al Estado la facultad

    de promover un trmite resarcitorio por loque hubiere pagado por reparacin. Y queen materia de prisin ilegal, el art. 4to. de laLey No. 15.859, reconoce expresamente aquien la haya sufrido plantear la demandarespectiva.

    Como viene de verse, en momentos quela inseguridad ciudadana comporta el temacentral del pas como acontece en otraslatitudes del planeta la opinin pblicadebera ser orientada por especialistas, entpicos como los que vienen de researse.Y ello, porque con la informacin ade-cuada, la gente se capacita para analizary evaluar racionalmente los problemasque diariamente denuncian los mediosde comunicacin, rectificando la errneaconviccin de que suprimiendo los efectos,se corrigen las causas.

    ACCION DE DESALOJO: Segn opinin de nuestros Tribunales, no es el meca-nismo legal previsto para obtener la restitucin del bien en manos de un poseedor.Y quien acredita ser promitente comprador del inmueble, no puede ser calificadode ocupante precario, pues la circunstancia de empezar a comprar es demos-trativa del cambio de nimo, es decir que deja de vivir en el mismo gratuitamente.

    AUSENCIA DE UNA DEFINICION SOBRE EL ANCIANO: No obstante ello,se considera anciano a toda persona mayor de 65 aos. Y como lo seala elDr. Domingo Prat, la ancianidad es una etapa de la vida y como tal, un perodoexistencial entre varios, que crea, por las caractersticas biolgicas y squicasque lo distinguen, una serie de condicionamientos para la ineludible situacinde estar en el mundo, como cualidad siempre presente del ser uno y conciente.

    EL PAPEL DEL NIO EN LA FAMILIA: Segn F. Escard, al mismo tiempoque se diferencia, integra el cuadro familiar adquiriendo dentro de l funcionesespecficas y caractersticas. De modo que la familia se modifica, perfeccionandosu funcionamiento por la presencia del nio y la evidencia de su derecho progre-sivamente creciente.

    ALQUILERES:

    Go b e r n a d o s p o r c i e g o s

    e i r re s p o n s a b l e s

    agan, as como en el mundo en general,va creciendo una gran desigualdadsocial. En aquel pas, los ingresos delos ms ricos se incrementaron en los

    ltimos aos 273 veces ms que las delos pobres, segn informa Carta Maiorel 12/08/2011. Por eso, no es de extra-ar la decepcin de los frustrados anteun software social que les niega elacceso al consumo y ante los recortesen el presupuesto social, del orden del70%, que los castiga duramente. El 70%de los centros recreativos para jvenesfueron simplemente cerrados.

    Lo alarmante es que ni el primer minis-tro David Cameron ni los miembros dela Cmara de los Comunes se tomaronel trabajo de preguntar el por qu delos saqueos en las distintas ciudades.Respondieron con el peor remedio:ms violencia institucional. El conser-

    vador Cameron dijo con todas las letras:vamos a detener a los sospechosos ypublicaremos sus caras en los mediosde comunicacin sin importarnos laspreocupaciones ficticias con respectoa los derechos humanos. He aqu unasolucin del despiadado capitalismoneo-liberal: si la orden que es desigual e

    injusta lo exige, se anula la democracia yse pasa por encima de los derechos hu-manos. Y esto sucede en el pas dondenacieron las primeras declaraciones de

    los derechos de los ciudadanos.Si miramos bien, estamos enreda-

    dos en un crculo vicioso que puededestruirnos: necesitamos producir parapermitir el tal consumo. Sin consumolas empresas van a la quiebra. Paraproducir, necesitan los recursos de lanaturaleza. Estos son cada vez msescasos y ya hemos dilapidado un 30%ms de lo que la tierra puede reponer. Siparamos de extraer, producir, vender yconsumir no hay crecimiento econmico.Sin crecimiento anual los pases entranen recesin, generando altos ndices dedesempleo. Con el desempleo, irrumpenel caos social explosivo, depredacionesy todo tipo de conflictos. Cmo salir de

    esta trampa que nos hemos preparadoa nosotros mismos?

    Lo contrario del consumo no es elno consumo, sino un nuevo softwaresocial en la feliz expresin del polit-logo Luiz Gonzaga de Souza Lima. Esdecir, urge un nuevo acuerdo entre unconsumo solidario y frugal, accesible a

    todos, y los lmites intraspasables dela naturaleza. Cmo hacer? Existenvarias sugerencias: el modo sosteniblede vida de la Carta de la Tierra, el vivirbien de las culturas andinas, fundadoen el equilibrio hombre/Tierra, la eco-noma solidaria, la bio-socio-economa,el capitalismo natural (expresindesafortunada) que intenta integrar losciclos biolgicos en la vida econmica ysocial, y otras.

    Pero cuando los jefes de los Estadosopulentos se reunen no hablan de estascosas. Ah se trata de salvar el siste-ma que est haciendo agua por todaspartes. Saben que la naturaleza ya nopuede pagar el alto precio que el modeloconsumista cobra. Ya est a punto deponer en peligro la supervivencia dela vida y el futuro de las prximas ge-neraciones. Estamos gobernados porciegos e irresponsables, incapaces dedarse cuenta de las consecuencias delsistema econmico-poltico-cultural quedefienden.

    Es imperativo un nuevo rumbo global,si queremos garantizar nuestra vida y lade los dems seres vivos. La civilizacincientfico-tcnica que nos ha permitido

    niveles exagerados de consumo puedeponer fin a si misma, destruir la vida ydegradar la Tierra. Seguramente no espara esto para lo que hemos llegadoa este punto en el proceso evolutivo.Urge tener valor, osada para cambiosradicales, si es que todava nos tenemosun poco de amor a nosotros mismos.

    Afinando los muchos anlisis hechosacerca del conjunto de crisis que nosasolan, llegamos a algo que nos parececentral y sobre lo que toca reflexionar

    seriamente. Las sociedades, la globali-zacin, el proceso productivo, el sistemaeconmico-financiero, los sueos predo-minantes y el objeto explcito del deseode las grandes mayoras es consumir yconsumir sin lmites. Se ha creado unacultura del consumismo propalada portodos los medios. Hay que consumir elltimo modelo de celular, de zapatillasdeportivas, de ordenador. El 66% del PIBnorteamericano no viene de la produc-cin sino del consumo generalizado. Lasautoridades inglesas se sorprendieron alconstatar que, entre quienes promovanlos disturbios en varias ciudades, no so-lamente estaban los habituales extran-

    jeros en conflicto entre s, sino muchosuniversitarios, ingleses desempleados,

    profesores y hasta reclutas. Era genteenfurecida porque no tena acceso al tanpropalado consumo. No cuestionaban elparadigma de consumo sino las formasde exclusin del mismo.

    En el Reino Unido, despus de M.Thatcher, y en USA despus de R. Re-

    Por

    Leonardo

    Boff

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  • 8/4/2019 N 320

    8/20

    Direcc in: Prof. Mara Stel la Ol ivera Priet t o

    LITERATUR

    A

    Seleccin por: Mara Stella Olivera Prietto

    LITERATUR

    A

    jugaba con mi pelo, llenaba

    las gargantas con un zumbidode cristal, y agitaba las sedasfabulosas de los rboles queflorecan entre las rocas quebordeaban el camino. Largos fi-lamentos de todo tipo de hierbaslaman los troncos de los rbolescomo si fueran lenguas de fue-go; grandes flores se rompanabiertas en las ramas brillantesy, como copas volantes que re-zumaran luz del sol, planeabanpor el aire, exhalando en susjadeos unos ptalos convexosy translcidos. Su aroma dulcey hmedo me recordaba todaslas cosas maravillosas quehaba experimentado a lo largo

    de mi vida.De repente, cuando me en-

    contraba cegado y sin alientoante aquel resplandor, el caminose llen de una tempestad dealas. Escapndose de las ce-gadoras profundidades llegaronen enjambre los ngeles queyo estaba esperando, con susalas recogidas apuntando a lasalturas. Se movan con pasosetreos; eran como nubes decolores en movimiento, y susrostros transparentes perma-necan inmviles a excepcinde un leve temblor extasiado ensus pestaas radiantes. Unospjaros turquesa volaban entre

    ellos con risas felices como deadolescentes, y unos animalescolor naranja deambulaban gi-

    Barrido del valle de la no-che por el genio de un vientoonrico, me encontr al bordede un camino, bajo un cielo deoro puro y claro, en una tierramontaosa de extraordinarianaturaleza. Sin necesidad demirar, senta el brillo, los ngu-los y las mltiples facetas deaquellos inmensos mosaicosque constituan las rocas, delos precipicios deslumbrantes,y el destello de innumerableslagos que me miraban comoespejos en algn lugar abajo en

    el valle, tras de m. Mi alma sevio embargada por un sentido deiridiscencia celestial, de libertad,de grandiosidad: supe que esta-ba en el Paraso. Y sin embargo,dentro de esta mi alma terrenal,surgi un nico pensamientomortal como una llama que metraspasara y con qu celo,con qu tristeza lo preservdel aura de aquella gigantescabelleza que me rodeaba-.Esenico pensamiento, esa llamadesnuda de sufrimiento puro,no era sino el pensamiento demi tierra mortal. Descalzo y sindinero, al borde de aquel caminode montaa, esper a los ama-

    bles y luminosos habitantes delcielo, mientras el viento, comola anticipacin de un milagro,

    les, en una fantasa de manchas

    negras. Las criaturas se enro-llaban como ovillos en el aire,estirando sus piernas de satnen silencio para atrapar las flo-res volantes que circulaban y seelevaban, apretndose ante mcon ojos brillantes.

    Alas! Ms alas! Por todaspartes, alas! Cmo describirsus circunvoluciones y colores?Eran suaves y tambin podero-sas leonadas, violetas, azulprofundo, negro aterciopelado,con un polvillo arrebolado enlas puntas redondeadas delas plumas curvas. Eran comonubes escarpadas fijas en la

    espalda luminosa de los nge-les, suspendidas en arroganteequilibrio; de tanto en tanto, unngel, en una especie de trancemaravilloso, como si le fueraimposible contener por mstiempo su felicidad, en un ef-mero segundo, abra sin previoaviso esa su belleza alada y eracomo un estallido de sol, comouna burbuja de millones de ojos.

    Pasaban en enjambres, mi-rando al cielo. Sus ojos eransimas jubilosas, y en sus mira-das acert a ver el vrtigo delvuelo. Se acercaban con pasosdeslizantes, bajo una lluvia deflores. Las flores derramaban

    su brillo hmedo en el vuelo; losesbeltos y elegantes animalesjugaban, sin dejar de ascender

    NAR RATI VA UNIVERSAL

    LA PALABRAPor VLADIMIR NABOKOV (*)

  • 8/4/2019 N 320

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    9A CCI N I N FORMA T I V ADel 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    en remolinos; los pjaros taande felicidad, remontando el vue-lo para luego caer en picado. Yyo, un mendigo cegado y azoga-do, segua parado al borde delcamino, con un mismo y nicopensamiento que apenas logra-ba balbucear dentro de mi almade mendigo: Llmales, dilesoh, diles que en esa la ms es-plndida de las estrellas de Dioshay una tierra, mi tierra quese muere en la ms absolutay acongojada oscuridad. Tuvela sensacin de que si tan slohubiera podido agarrar con lamano aquel tornasol resplan-deciente, hubiera podido traera mi tierra una alegra tal quelas almas de los humanos sehubieran visto iluminadas alinstante y hubieran comenzadoa girar alrededor

    Alc mis manos trmulas, yesforzndome por impedir elcamino de los ngeles tratde agarrar el dobladillo de suscasullas brillantes, de tocar losbordes, los extremos trridos y

    ondulantes de sus alas curva-das que se deslizaban entre misdedos como flores con pelusa.Yo corra y me precipitaba deuno a otro, implorando comoen un delirio su indulgencia,pero los ngeles seguan sucamino sin detenerse, ajenos am, con sus rostros cinceladosmirando a las alturas. Era unahueste que ascenda hacia unafiesta celestial, hacia un clarode un bosque de un resplandorinsoportable, donde tronaba yrespiraba una divinidad en laque no me atreva ni a pensar.Vi telaraas de fuego, manchasde colores, dibujos y diseosde carmes gigante, rojos, alasvioletas, y sobre todo y sobrem, el suave susurro de una olavellosa que ascenda. Los pja-ros coronados con un arco iristurquesa picoteaban, las floresse desprendan de las brillantesramas y flotaban. Esperad unminuto, escuchadme!, les grita-ba, tratando de abrazarme a laspiernas de algn ngel vaporo-so, pero sus pies, impalpables,inalcanzables, se me escurrande las manos, y los extremosde aquellas alas grandes selimitaban a quemarme los labiosa su paso. En la distancia, unatormenta incipiente amenazabacon descargar en un claro dora-

    do abierto entre rocas vvidas,los ngeles se retiraban, lospjaros cesaron en sus agudasrisas agitadas; las flores ya novolaban desde los rboles; sentuna cierta debilidad, fui enmu-deciendo

    Y entonces ocurri un mila-gro. Uno de los ltimos ngelesse qued rezagado, se volviy en silencio se acerc a m.Divis sus ojos cavernosos dediamante fi jos en m desde elarco imponente de su ceo.En las nervaduras de sus alasextendidas reluca algo quepareca hielo. Las propias alas

    eran grises, un tono inefable de

    gris, y cada pluma acababa enuna hoz de plata. Su rostro, lasilueta levemente risuea de suslabios y su frente limpia y despe-jada me recordaron otros rasgosque conoca y haba visto en latierra. Las curvas, el destello, elencanto de todos los rostros queyo haba amado en vida pare-cieron fundirse en un semblantemaravilloso. Todos los sonidosfamiliares que haban llegadodiscretos y ntidos a mis odosparecan ahora fundirse en unanica y perfecta meloda.

    Se acerc hasta m. Sonri.Yo no pude devolverle la mirada.Pero observando sus piernas,not una red de venas azulesen sus pies y tambin una plidamarca de nacimiento. Y deduje,a partir de esas venas, de aquellunar diminuto, que todava nohaba acabado de abandonar latierra por completo, que quizspudiera entender mi plegaria.

    Y entonces, inclinando lacabeza, tapndome los ojos

    medio ciegos con las palmasde las manos, sucias de barro,comenc a enumerar mis penas.Quera explicarle lo maravillosaque era mi tierra, y lo terriblede su sncope negro, perono encontr las palabras quenecesitaba. A borbotones, re-pitindome, balbuce una seriede trivialidades, le habl de unacasa quemada en la que huboun tiempo en el que el brillo queel sol dejaba en el parqu sereflejaba en un espejo inclinado.Parlote de viejos libros y tilosviejos, de pequeeces, de misprimeros poemas escritos enun cuaderno escolar color co-balto, de un gran peasco gris,

    cubierto de frambuesas salvajesen medio de un campo lleno demariposas y escabiosas perono pude, no acert a expresar loms importante. Me confunda,me trastabillaba, me quedabacallado, comenzaba de nuevo,una y otra vez, en un hablar con-fuso que no llevaba a ningunaparte, y le habl de habitacionesen una casa de campo fra yllena de ecos, le habl de tilos,de mi primer amor, de abejorrosdurmiendo entre las escabiosas.Me pareca que en cualquiermomento, en cualquier momen-to, me vendran las palabraspara decir aquello que quera,

    lo ms importante, que llegaraa poder contarle todo el dolorde mi tierra. Pero por algunaextraa razn slo me acordabade minucias, de pequeeces ydetalles mundanos que no acer-taban a decir ni a llorar aquellaslgrimas corpulentas de fuegoque yo quera contar sin acertara hacerlo

    Me qued callado y alc lacabeza. El ngel esboz unasonrisa atenta, silenciosa, con-templndome con celo desdesus ojos alargados de diaman-te. Y supe entonces que meentenda.

    - Perdname exclam y

    bes con humildad aquel plidopie con su marca de nacimien-to-.Disculpa que no sepa hablarsino de lo efmero, de trivialida-des. Y sin embargo, t, mi ngelgris, de corazn amable, meentiendes. Contstame, ayda-me, dime, dime, qu es lo quepuede salvar a mi tierra?

    Me tom por los hombros uninstante en un abrazo de sus

    alas de paloma y pronunciuna sola palabra, y en su vozreconoc todas aquellas vocessilenciadas y adoradas. La pala-bra que pronunci era tan mara-villosa que, con un suspiro, cerrlos ojos e inclin an ms la ca-beza. La fragancia y la melodade la voz se extendieron por misvenas, y se alzaron como el solen mi mente: las innumerablescavidades que habitaban miconciencia se prendieron en ellay repitieron aquella cancin ed-nica y brillante. Estaba lleno deella. Con la tensin de un nudobien lazado, me golpeaba en lassienes, su humedad temblaba

    en mis pestaas, su dulce hieloabanicaba mis cabellos, y erauna lluvia de calor celeste sobremi corazn.

    La grit, me deleit en cadauna de sus slabas, alc mis ojoscon violencia, rebosantes dearcos iris radiantes de lgrimasde alegra

    Dios mo el amanecer deinvierno brilla verdoso ya en laventana y no consigo recordaraquella palabra de mi grito.

    (De PURO CUENTO)

    EL PUERTOPor VLADIMIR NABOKOV (*)

    En la peluquera ola a rosaspodridas, las moscas zumbabanpesadamente. El sol arda en elsuelo como charcos de miel, elbrillo de los frascos hera la vistay el viento se colaba a travsde la larga cortina en la puerta,hecha de cuentas de arcilla ycanutillos de bamb ensartadosen apretados hilos que entre-chocaban y lanzaban reflejoscuando alguien la apartaba conel hombro para entrar. Frente a

    l, en el vidrio empaado, Niki-tin estudi su rostro bronceadopor el sol, los pesados rizos decabello claro, el destello de lastijeras abrindose y cerrndose junto a su odo, y sus ojos: lamirada atenta y severa de al-guien que se mira en el espejo.La vspera haba llegado deConstantinopla, donde la vidase haba vuelto insoportable, aeste antiguo puerto en el sur deFrancia; por la maana visitel consulado ruso, la oficina deempleos, vag por las estrechascalles de la ciudad que bajabanal mar, se sinti cansado, des-madejado por el calor, y entr acortarse el cabello, a refrescarse

    la cabeza. Junto al silln el sueloestaba cubierto de brillantesrizos y cabellos cortados. Elpeluquero recogi jabn lquidoen el cuenco de su mano. Nikitinsinti un agradable frescor en lacoronilla, los dedos del barberountaron con fuerza la espuma,y luego cay la ducha helada.El corazn le dio un vuelco. Lafelpuda toalla se movi por sucara, por sus cabellos hmedos.

    Nikitin rompi con el hombrola lluvia ondulante de la cortinay sali a la calle que se abracuesta abajo. La acera derechaestaba a la sombra; por la iz-quierda, en un ardiente resplan-dor junto al bordillo, temblabaun delgado arroyo; una nia decabellos negros, sin dientes,con la cara cubierta de pecas,reciba en un balde un chorrosonoro y brillante; y el arroyo, yel sol, y la sombra color violeta,todo flua, se deslizaba cuestaabajo, hacia el mar: un pasoms y all, al fondo, entre lasparedes de las casas, creca su

    compacto brillo de zafiro. Por ellado de la sombra avanzabanunos pocos transentes. A suencuentro vio venir a un negrocon el uniforme de las tropascoloniales, su cara le record unchanclo mojado. Un gato saltcon suavidad del asiento deuna silla de mimbre abandonadaen la acera. Una voz de cobre,provenzal, comenz a hablarrpidamente en alguna ventana.Golpete el postigo verde. En untenderete, entre mariscos colorlila, olorosos a algas, reluca eloro rugoso de unos limones.

    Ya junto al mar, Nikitin miremocionado su denso azul,

    que a lo lejos pasaba a un plataenceguecedor, el rielar del soljugando suavemente en la bor-da blanca de un yate, y luego,tambalendose por el intensocalor, fue a buscar el pequeorestaurante ruso cuya direccinhaba ledo en la pared delconsulado.

    En el pequeo restaurante ha-ca calor como en la peluqueray estaba un poco sucio. Al fondo,junto a una amplia barra, trans-parentaban unos bocadillos yfrutas bajo las ondas grisceasde la muselina que los cubra.Nikitin se sent, enderez los

    hombros para despegar la cami-sa de su espalda mojada. En lamesa vecina coman dos rusos,marineros de un barco francs,por lo visto, y varias mesasms all un viejito solitario congafas doradas sorba con ruidoel borsh de su cuchara. Secn-dose sus gruesas manos con unpao, la duea lanz al recinllegado una mirada maternal.Sobre el suelo, dos peludoscachorros agitaban sin cesarsus patas; Nikitin lanz un silbi-do; la vieja perra, casi sin peloy con una pelcula verde en lacomisura de sus comprensivosojos, puso su cabeza sobre lasrodillas del hombre.

    Uno de los marineros se di-rigi a l contenidamente, sinprisa.

    Espntela, le pegar laspulgas.

    Nikitin acarici la cabeza dela perra, alz los ojos brillantes.

    Eso no me preocupa,sabe... Constantinopla... Las

    barracas... Usted qu cree...Est recin llegado?

    pregunt el marinero. La voz in-mutable. Una malla en lugar dela camisa. Todo l fresco, hbil.El cabello negro cortado ntida-mente sobre la nuca. La frentedespejada. Un aspecto generalde decencia y serenidad.

    Ayer por la noche respon-di Nikitin.

    El borsh y el ardiente vinole hicieron sudar an ms. Ledaban ganas de estar tranqui-lamente sentado, de platicar encalma. Por la puerta se colaban

    el sol brillante, el rumor y elreflejo del arroyo en la calle,lanzaban destellos los anteojosdel viejito ruso sentado en la es-quina, bajo el contador del gas.

    Busca trabajo? le pre-gunt el segundo marinero,mayor de edad y de ojos azules.Tena bigotes plidos, de morsa,pero tambin pareca muy lim-pio, pulido por el sol y el vientosalado.

    Nikitin sonri.

    Pues claro... Hoy mismo es-tuve en la oficina de empleos...Me propusieron clavar postes

    de telgrafos, trenzar cuerdas,pero no s...

    Venga con nosotros dijoel de cabello negro de fogo-nero... Vale la pena, crame...Eh, Lialia!... Mis ms cumplidossaludos.

    Entr una seorita de rostrofeo y tierno, con un sombreroblanco. Avanz por entre lasmesas, le sonri primero a losperros y luego a los marinos.Nikitin pregunt algo pero olvidqu era al mirar a la muchacha,el movimiento de sus caderas,por el cual es fcil reconocera una seorita rusa. La duea

    mir tiernamente a su hija queestaba cansada, que habraestado todo el da en la oficina, obien en una tienda. Haba en ellaalgo enternecedor, provinciano,a uno le entraban ganas depensar en el jabn de violetas,en el apeadero de un pobladode dachas en medio de un bos-que de abedules. Lgicamente,afuera no haba Francia alguna.Movimientos sedosos. La flojeraque provocaba el sol.

    No, no es nada complicadodeca el marinero, se tratade esto: un cubo, el depsitodel carbn. Levanta un pococon una pala... Al principio es

    fcil, mientras el carbn est

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    10 A CCI N I N FORMA T I V A Del 26 de Agosto al 8 de Setiembre de 2011

    apilado: cae en el cubo; luego sevuelve ms difcil. Llena usted elcubo, lo pone en la carretilla. Lalleva rodando hasta el fogoneroprincipal. ste, con un golpe depala, zaz!, abre la puerta delhorno, zaz! Con ella misma lolanza, sabe usted, en amplioabanico, para que caiga parejo.Es un trabajo fino. No debeapartar la vista de la aguja, y si

    baja la presin...En la ventana, desde la calle,

    se asomaron la cabeza y loshombros de una persona tocadacon un panam, vestida con unsaco blanco.

    Cmo le va, Lialia?

    Se acod en la ventana.

    S, s, claro, hace calor, nodeja de despedir calor. Se dejauno puesto slo los pantalonesy la malla. La malla luego quedanegra. Pero le estaba hablandode la presin. En el horno, yasabe, se crea un sedimento,una costra como de piedra; la

    rompes con un atizador largo.No es fcil. Pero en cambio, encuanto sales a cubierta, el sol,aunque sea en el trpico, te pa-rece fresco, y luego te duchas,te metes en tu camarote, a tuhamaca, una bendicin, perm-tame decirle...

    Mientras tanto, en la ventana:

    Y l, oiga esto, afirma queme vio en el automvil!

    Lialia hablaba en voz muyalta, excitada. Su interlocutor, elseor de blanco, permaneca depie, en la calle, y en el cuadradode la ventana se vean sus hom-

    bros redondos, su cara suave yafeitada, que el sol iluminaba amedias: un ruso con suerte.

    Adems, me dijo, luca unvestido color lila, pero no tengoningn vestido color lila. Pero linsista: zhe vu zasiur.

    Por qu no hablan en

    ruso? se volte hacia ellosel marinero que haba habladocon Nikitin.

    El hombre en la ventana dijo:

    Pues yo, Lialia, les conse-gu la partitura. Se acuerda?

    Oli as, como a propsito,como si alguien se entretuvierainventando a esta seorita,

    aquella conversacin, aquelrestaurante ruso en un puertoextranjero; oli a la cotidiani-dad provinciana, y al instante,por una extravagante y secretaasociacin de ideas, el mundopareci todava ms amplio,daban ganas de navegar por losmares, entrar a golfos fabulosos,escuchar a escondidas almasajenas.

    Me pregunta cul rumbo?Indochina as, simplemente,dijo el marinero.

    Nikitin, pensativo, golpe elemboquillado contra la pitillera;en la tapa de madera haban

    grabado con fuego un guiladorada.

    Se la debe pasar uno bien.

    Pues claro, muy bien.

    Pero cunteme algo. SobreShanghai o sobre Colombo.

    Shanghai? Estuve all.Una lluvia caliente, la arenarojiza. Hmedo como en un in-vernadero. Pero en Ceiln, porejemplo, no baj; me tocaba laguardia ese da, ya sabe...

    El hombre del saco blanco,encogiendo los hombros ledeca algo a Lialia a travs dela ventana, en voz muy baja ycon aire significativo. Ella le es-cuchaba, inclinando la cabeza aun costado, acariciando con unamano la oreja abarquillada delperro. ste haba sacado su len-gua de un rosa fuego, respirabaalegre y rpidamente, miraba alespacio iluminado de la puerta,pensando, casi seguro, en sivala la pena volverse a acostaren el piso caliente del umbral.Y pareca que tambin el perropensaba en ruso.

    Nikitin pregunt:

    A quin debo ver?

    El marinero hizo un guio asu amigo como dicindole: loconvenc, ya ves. Luego dijo:

    Es muy sencillo. Maana

    bien temprano vaya al viejopuerto, en el segundo muellehallar a nuestro Jean-Var. Ha-ble con el ayudante del capitn.Seguro que lo contrata.

    Con atencin y claridad Nikitinmir la frente despejada e inteli-gente del marino.

    Qu haca usted antes,en Rusia?

    ste encogi los hombros ysonri forzadamente.

    Qu haca? Era un imbcilrespondi por aqul la voz debajo del bigotudo.

    Al rato, ambos se levantaron.El joven sac una billeteraque guardaba bajo la hebilladel cinturn, a la usanza delos marineros franceses. Algohizo rer a Lialia, que se habaacercado a ellos. La muchachales tendi la mano con la palma,seguramente un poco hmeda.Retozaron los cachorros en elpiso. El hombre en la ventana se

    volvi silbando distrada y sua-vemente. Nikitin pag la cuentay sali sin prisa al sol.

    Eran cerca de las cinco de latarde. El azul del mar abajo, en-tre las callejuelas, hera la vista.Llameaban los techos redondosde los baos callejeros.

    Regres a su miserable hotely, cruzando lentamente las ma-nos en la nuca, en la benditaborrachera del sol, se tir bocaabajo en su cama. So que eraotra vez un oficial, que avanza-ba por las laderas de Crimeacubiertas por arbustos de losque crecen bajo los encinos, y

    al paso, con la fusta, cortaba lasfelpudas cabezas de los cardos.Despert porque se ri en sue-os; despert, y en la ventanaya azuleaba el crepsculo.

    Se asom a aquel frescoabismo y pens: all abajo sepasean mujeres, y entre ellashay rusas. Qu buena estrella!

    Se alis el cabello, limpi laspuntas de sus botas con unextremo de la cobija, abri sumonedero slo tena cincofrancos y volvi a salir a pa-sear sin rumbo fijo, a disfrutar suociosa soledad.

    A esta hora haba ms genteen la calle que por el da. A lolargo de las estrechas calles quebajaban hacia el mar, tomabanel fresco personas sentadasfrente a las casas. Pas unamuchacha con un vestido delentejuelas... Alz sus pesta-as... Un tendero ventrudofumaba con el chaleco abierto,sentado a horcajadas sobre unasilla de mimbre, apoyando loscodos en el espaldar, la t rinchade la camisa asomndole sobreel vientre. Unos nios, en cucli-llas y a la luz de una linterna,echaban barquillos de papel alagua negra que corra junto a la

    acera. Ola a pescado y a vino.

    De las tabernas de marineros,iluminadas por una luz amarilla,salan los torpes sonidos de unorganillero, golpes de palmadascontra la mesa, gritos de tonosmetlicos. Y en la parte alta de laciudad, por el bulevar principal,bajo las nubes de las acacias,arrastraba los pies y se rea lamultitud nocturna, centelleabanlos finos tobillos de las muje-

    res, los zapatos blancos de losoficiales de barcos. Aqu y all,como un multicolor fuego arti-ficial congelado, llameaban enla oscuridad color lila los cafs:pequeas mesas sobre la acera,la sombra de los lamos cayen-do sobre los toldos listados ilu-minados desde adentro. Nikitinse detuvo. Se imagin una jarrade cerveza, helada y pesada.Al fondo, tras las mesas, lossonidos de un violn se retorcancomo unas manos, y un arpa ar-pegiaba densamente. Mientrasms banal es una msica, msnos llega al corazn.

    En la primera de las mesas

    vio a una mujer vestida de ver-de, cansada una mujer de lacalle, balanceando la puntadel zapato.

    Me tomar algo decidiNikitin, pero no, mejor no...Aunque...

    La mujer tena ojos de mue-ca. Haba algo muy conocido enaquellos ojos, en la larga lneade su pierna. La mujer tom sucartera y se levant como sillevara prisa. Vesta una blusalarga de seda esmeralda quecea sus caderas muy abajo.Pas junto a l entrecerrandolos ojos por la msica.

    Sera muy extrao pensNikitin. Por su mente pas algo,como una estrella que cae, y,olvidando las cervezas, se le-vant y la sigui por un callejnoscuro y brillante. Un farol alar-g la sombra de la mujer, quese desliz por la pared y parecipartirse. La mujer avanzabalentamente, y Nikitin refren elpaso temiendo darle alcance sinsaber por qu.

    Pero no hay duda de que esas... Dios mo, qu bendicin...

    La mujer se detuvo al bordede la acera. Sobre una puerta

    negra arda una lmpara colorframbuesa. Nikitin pas juntoa ella, volvi sobre sus pasos,rode a la mujer, se detuvo. Conarrullante risita, la mujer le lanzuna tierna palabra en francs.

    Bajo la tenue luz del lugar,Nikitin vio su atractivo y cansadorostro, el brillo hmedo de susdiminutos dientes.

    Esccheme le dijo Nikitinen ruso, con sencillez y en vozbaja. Nos conocemos desdehace mucho, hablemos mejor ennuestra lengua materna.

    Ella alz las cejas:

    English? You speak en-glish?

    Nikitin la mir fijamente yrepiti ya con cierta impotencia:

    No siga, estoy seguro.

    Tes polonais, alors? pre-gunt la mujer alargando la l-

    tima slaba a la manera surea.Nikitin se dio por vencido,

    sonri forzadamente, le dioa la mujer el billete de cincofrancos, se volvi rpidamentey comenz a cruzar la plazaque tambin bajaba al mar. Almomento escuch unos pasosapresurados que le daban al-cance, una respiracin, el rocede un vestido. Se volvi. No vioa nadie. Slo la plaza vaca,a oscuras. El viento nocturnoarrastraba por los adoquines lahoja de un peridico.

    Nikitin suspir, volvi a sonrersin ganas, se meti las manos

    en los bolsillos bien adentro y,mirando las estrellas que seencendan y se apagaban pali-deciendo como avivadas por unenorme fuelle, comenz a bajaren direccin al mar.

    All, junto al brillo de la lunasobre las olas, en el malecn depiedra del viejo muelle, descolglos pies y permaneci as muchotiempo, con la cabeza echadahacia atrs, apoyndose en laspalmas de sus manos extendi-das tras l.

    Rod una estrella fugaz, depronto, como deja de latir, porun segundo, el corazn. Un

    fuerte y limpio golpe de vientoagit sus cabellos, plidos enel resplandor nocturno.

    Traduccin de Jos ManuelPrieto. (de Letras Libres)

    (*)Vladmir Nabkov, cuyonombre completo en ruso eraVladmir Vladmirovich Nabkov(San Petersburgo, 22 de abril de1899 (10 de abril del calendario juliano) Montreux, Suiza, 2de julio de 1977), fue un escritorde origen ruso, nacionalizadoestadounidense, uno de los msgrandes del siglo XX, como seevidencia leyendo estos relatos.

    Escribi sus primeras obrasliterarias en ruso, pero se hizointernacionalmente famosocomo un maestro de la novelacon su obra escrita en ingls,especialmente su famosa no-vela Lolita (1955), un retratode la sociedad estadounidensea travs de la metfora delviaje, en cuyo trama un hombrede mediana edad se enamoray sostiene una relacin conuna adolescente. Es conocidotambin por sus significativascontribuciones al estudio de loslepidpteros y por su creacinde problemas de ajedrez. (DeWikipedia)

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    N OTICIAS CULTURALES DE AQU Y DE ALL NOTICIAS C ULTURALES HETER OGN EA

    (actualidad.rt.com)

    Un grupo de cuatro cientficosde diferentes pases descubrie-ron el mecanismo molecular quecausa los estados de ansiedad.Los investigadores tardaroncuatro aos en poder explicarlos procesos qumicos del ce-rebro que disparan la respuestade nuestro organismo en lassituaciones estresantes.

    Partiendo de que todas laspersonas reaccionan de formadiferente a los acontecimien-tos traumticos el trabajo vinomotivado por la voluntad debuscar factores que influyen enel comportamiento humano enel estrs y medirlos.

    Se saba ya que ciertos indi-viduos son ms susceptibles depadecer los efectos negativosdel estrs que otros y, aunquela mayora de nosotros expe-rimentamos acontecimientostraumticos, slo algunas perso-

    F r a s e / c i t a sDemasiados compositores de nuestra poca pretenden ser modernos, sin poseer el don

    de la originalidad. Y no comprenden que todo artista original es moderno por fuerza.

    Heitor Villa-Lobos, msico (Brasil, 1887-1959) (Del Boletn Sodrecultura)

    In s t ru /m e n te sHydraulis

    Es un antiguo instrumento musical de viento que funcionaba con un sistema de receptculosllenos de agua para mantener constante la presin del aire. Fue uno de los primeros instrumentosde teclado y el antecesor del actual rgano neumtico. Fue inventado en Grecia en el siglo III a.C. por un tal Ctesibio, quien ide diversos aparatos que funcionaban con agua y aire. Conocidopor los romanos, se extendi por todo el Imperio, usndose en actos pblicos y diversos espec-tculos. Los rganos hidrulicos comenzaron a dejar de usarse a partir del siglo XIII, sustituidospor los de fuelles. (Del Boletn Sodrecultura)

    D e s c u b i e r to e l m e c a n i s m o

    q u e p r o v o c a e l e s t r snas llegan a padecer trastornospsiquitricos relacionados conellos, como depresin, ansiedado sndromes postraumticos,por razones que no estn cla-ras cuenta el jefe del equipo,Robert Pawlak (Universidad deLeicester, Reino Unido).

    Para resolver el problema,los cientficos tuvieron quecombinar tcnicas genticas,

    moleculares, electrofisiolgicasy de comportamiento, partiendodel centro emocional del cere-bro: la amgdala cerebral. Lasinvestigaciones mostraron quela amgdala reacciona al estrsincrementando la produccin deuna protena denominada neu-ropsina que por su parte poneen funcionamiento un gen quedetermina la respuesta a nivelcelular y del comportamiento.

    El equipo utiliz a ratonespara realizar los experimentos.Los estudios en ratones revela-ron que, al sentirse estresados,

    evitaban zonas del laberinto deexperimentos donde se sentanespecialmente inseguros, espa-cios abiertos e iluminados a losque no entran cuando sientenansiedad, explica Pawlak.Pero cuando los investigadoresbloqueaban la produccin de laprotena clave en la amgdalacon frmacos o con manipula-ciones genticas, los ratonesabandonaban ese comporta-

    miento motivado por el estrs.

    Nuestra conclusin es que laactividad de la neuropsina y losmecanismos asociados puedendeterminar la vulnerabilidad alestrs, seala Pawlak.

    Ahora que se ha descubiertoel mecanismo del estrs, sepuede encontrar los mediospara controlarlo. Los cientficosesperan que su hallazgo ayudea los mdicos a desarrollar te-rapias preventivas y curativasde los desrdenes psiquitricosasociados al estrs

    La a s o m b ro s a

    c a p a c i d a d d e l a s

    a v e s p a r a v o la r c o np re c i s i n e n tre

    o b s t c u l o s(SloCiencia.com)

    El equipo de Huai-Ti Lin de la Universidad de Harvard en-tren unas palomas para que volaran a travs de un bosqueartificial con una pequea cmara sujeta a la cabeza, propor-cionando a los cientficos literalmente imgenes a vista depjaro. Adems filmaron a las palomas desde ambos lados.De este modo, es posible reconstruir lo que ve el animal ytambin cmo se mueve.

    Los mtodos que usan las palomas para maniobrar a tra-vs de entornos difciles podran ser usados como modelopara desarrollar tecnologa destinada a pilotos automticospara aeronaves. Las palomas, con una visin panormica dems de 300 grados, estn bien preparadas para esa tareade maniobrar porque su visin les permite evaluar obstcu-los a ambos lados. Tambin pueden estabilizar la visin ycambiar rpidamente entre campos de visin distintos conun pequeo movimiento rpido de la cabeza.

    Los investigadores tambin han constatado que las avestienen otras habilidades que seran importantes para aero-naves autopilotadas, como por ejemplo que saben elegirlas rutas ms directas. ste es un modo muy eficiente deatravesar el bosque, ya que las aves tienen que cambiarmenos de direccin, consumiendo as menos energa, ytambin porque llegan ms rpido al otro lado.

    Otro hallazgo interesante es que parece que la direccincon la que las palomas salen del bosque es exactamente la

    misma con la que entran, a pesar de todos los cambios dedireccin y giros que hacen dentro del bosque.

    Al utilizar un robot o una aeronave no tripulada, tendraun valor incalculable poder simplemente proporcionarlelas coordenadas del lugar de destino sin tener que darleinformacin detallada de todos los obstculos que podraencontrar en el camino.

    (SloCiencia.com)

    MADRID, 17 (EUROPAPRESS)

    Desinfectar el exterior de losproductos puede ser insuficientepara eliminar los patgenos ali-mentarios perjudiciales, segnun estudio de la Universidad dePurdue (Estados Unidos) que ha

    D e s i n fe c t a r e l e x te r io r d e l o s a l im e n t o s

    p u e d e s e r in s u f ic i e n te p a r a e l im i n a r la

    s a l m o n e l la y e l e . c o l i

    demostrado que la salmonellay el e. coli pueden vivir dentrode los tejidos vegetales.

    El e. coli 0157: H7 se en-cuentra en los tejidos de losbrotes de soja y la salmonellaen las plntulas de cacahuete,despus de que las semillas delas plantas se contaminaran conel patgeno antes de la siembra.

    La investigadora postdoctoralen ciencias de los alimentos,Amanda Deering, asegura quelas semillas pueden estar con-taminadas antes o despus dela siembra a travs del suelocontaminado o del agua.

    Los patgenos estaban entodos los tejidos ms impor-tantes, incluyendo el tejido que

    transporta los nutrientes en lasplantas, explica Deering, cuyainvestigacin se ha publicado enla revista Food Protection andFood Research International.

    Encontrar los patgenosdentro de las plantas ha sido

    un desafo porque las pruebasrequieren cortar trozos de plan-tas, lo que puede provocar quelas bacterias se muevan delexterior al interior o viceversa.Se hace difcil saber dnde pudohaber estado un patgeno antesde haber cortado la planta,asegura Pruitt, co-autor de loshallazgos.

    Los resultados son a menudoimprecisos debido a los mtodosde permitir que las bacterias semueven, dijo Robert Pruitt, unco-autor de los hallazgos.

    Deering utiliz un fijador paracongelar la ubicacin de las bac-

    terias en los tejidos de la plantaantes de cortar las muestras.Los anticuerpos marcados conun tinte fluorescente se utiliza-ron para detectar los patgenos,en un proceso llamado inmuno-histoqumica.

    Esto nos muestra lo mscercano a lo que haba en laplanta cuando estaban vivos lospatgenos y el aumento de n-mero de bacterias se mantienedurante al menos 12 das, lo quesuele durar la investigacin,expone Deering.

    Segn Deering y Pruitt, paraun saneamiento adecuado delos productos se debera elimi-nar la salmonella y el e. coli dela superficie de los alimentos, ytambin de los tejidos internospor lo que aconsejan cocinarlos alimentos a temperaturas enlas que se matan y eliminan lospatgenos.

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    Las recetas de Doa Mara

    Riones a l v ino b lanc oINGREDIENTES: (para 4 personas) 700 g. de riones de ternera o de cordero,250 g. de cebolla,

    4 cucharadas soperas de aceite, 1 ramita de perejil, 1 diente de ajo, 1 vaso de vino blanco, sal.

    PREPARACIN: Limpiar bien los riones. Picar la cebolla muy finamente.

    Poner en la cacerola los riones y cubrir con la cebolla picada. Rociar con el aceite y cocer afuego lento durante 5 minutos.

    Por otro lado, machacar el perejil con el diente de ajo y agregar el vino.

    Incorporar este preparado a los riones y dejarlo cocer durante 5 minutos. Salar y ponerlo acocer otros 5 minutos ms.

    Listos!! Quedan muy bien acompaados con un pur.

    Nota: Conviene utilizar un vino blanco seco de calidad. Recuerde: nunca utilice para cocinar un

    vino que no bebera solo. Cuanto mejor sea el vino, mejor ser el resultado del plato.

    Tar t a de zapal l i t osINGREDIENTES: 1 disco de masa comprada (va a usar una hoja de masa, guarde la otra en la

    heladera en su envase), 5 zapallitos, 3 huevos, 1 cebolla, 1 cebolla de verdeo, 100 g de queso cre-moso o de queso rallado, sal y pimienta c/n, 1 pizca de nuez moscada, morrn verde, aceite c/n.

    PREPARACIN: En una sartn con un poquito de aceite, colocar las dos cebollas y el morrn.Rehogar por 5 minutos.

    Agregar los zapallitos cortados en cuadraditos, cocinar hasta que estn tiernos pero que no sedesarmen. Condimentar y dejar enfriar (si tiene lquidos, escurrir).

    Agregar los huevos, unir bien todo, agregar una taza del queso elegido (reservar un poquito paracubrir el relleno)

    Poner el disco de tarta en un molde de 24 cm de dimetro, agregar el relleno. Cubrir con quesoen trocitos o con queso rallado.

    Llevar a horno suave durante 30 minutos

    Profesora Silvia Medero.

    Los que nunca han odo hablar de ella, se preguntarn:

    -Quin es Mara Antonia Grompone?Vamos a ser muy breves. Pero el lector podr consultar su

    Curriculum en Internet (tiene 137 pginas!)

    Es Ingeniera Qumica y Doctora en Qumica, ttulos obtenidosen la Universidad de la Repblica.

    Es, desde hace unos aos Profesora grado 5 de Facultadde Qumica y Catedrtica de Fsicoqumica y del Laboratoriode Grasas y Aceites.

    Actualmente se desempea como Directora del Departamentode Ciencia y Tecnologa de los Alimentos.

    Ha dado mltiples cursos, tanto en nuestro pas como en elextranjero (habra que preguntarse en qu pas no ha realizadouna exposicin).

    Son muy numerosos los artculos publicados en revistas deprimer nivel, as como en libros junto a otros autores.

    Ha trabajado tambin en empresas, como jefa de Control deCalidad y Desarrollo.

    Pero, a Mara Antonia, le ha interesado siempre la educacin,la explicacin y la aplicacin de la ciencia en todos sus niveles.

    Han sido numerosos los cursos que ha dictado para docentesde Educacin Media.

    El da 2 de setiembre, a las 19 y 30horas estar presentandosu ltimo libro, en Casa de la Universidad, en Tacuaremb.

    La Ctedra Washington Benavdez, la Casa de la Universidady ADESTA tienen sumo placer en realizar esta presentacin.

    La misma no ser una charla tcnica, sino para todo pblico.

    La acompaar y realizar su presentacin la QumicaMarisa Garca, profesora de Facultad de Qumica, docente yex Inspectora.

    El libro que se presentar est muy bueno, estando a la ventadurante la exposicin.

    Los esperamos.

    M a r a An to n i a

    Gro m p o n e v i e n e

    a Ta c u a re m b .

    D e l M i n i s t e r i o d e G a n a d e r aAgr icu l tu ra y Pesca

    23 de agosto de 2011.

    Uruguay qued habilitado para utilizar el cupo de carne vacuna de calidad superior de la UninEuropea.

    Luego de varios meses de intensas gestiones bilaterales, en el da de la fecha se public en elDiario Oficial de la Unin Europea la comunicacin de la Comisin Europea facultando al Ministeriode Ganaderia, Agricultura y Pesca de Uruguay, a travs de la Direccin General de los ServiciosGanaderos, a expedir los certificados de autenticidad requeridos en el Reglamento (CE) Nro 620/2009.

    Este cupo fue creado por la Unin Eu