conética

Año XIX

Volumen IV

diciembre 2009

Boletín Informativo de la Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico

en b

reve

Honrando la Confianza del Pueblo

OEG exime de restricciones a empleados cesanteadosLa Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico (OEG) emitió una Opinión en la que concluyó que las restricciones a ex servidores públicos y ex servidoras públicas contenidas en la Ley de Ética Gubernamental no serán aplicables a los empleados cesanteados, conforme a la Fase II, en virtud de la Ley Núm. 7 del 9 de marzo de 2009.

La Oficina determinó, mediante el uso de la técnica de analogía reconocida en nuestro ordenamiento jurídico, que la excepción del articulado de la Ley de

Ética Gubernamental relacionada a los ex servidores públicos contenida en la Ley Núm. 7 para los empleados cobi-jados en la Fase I se extiende a los ex servidores públicos cesanteados bajo la Fase II. Dicha interpretación permite que los contratistas tanto del sector pú-blico como privado puedan emplear a los servidores públicos cesanteados, que tengan la preparación y experien-cia necesaria para prestar el servicio, eliminando así las restricciones para su contratación.

Reconociendo que dicho objetivo pudiera verse limitado por ciertas disposiciones de la Ley de Ética Gubernamental, me-diante enmienda en la Ley Núm. 7, se estableció que los empleados que se acogieron a la Fase II también estarían eximidos de las restricciones para las actuaciones de los ex servidores públi-cos incluidas en nuestra Ley. Específi-camente, de las disposiciones que están relacionadas con participar en asuntos en los que intervinieron mientras estuvieron activos en el Gobierno como servidores públicos; ocupar algún cargo o tener

Ofic

ina

de É

tica

Gub

erna

men

tal d

e P

uerto

Ric

o

E

stad

o Li

bre

Aso

ciad

o de

Pue

rto R

ico

● ¿Cuándo educamos, logramos prevenir? 3

● Seis valores que contribuyen al fortalecimiento del servicio público 4

● Administración pública digital: Retos y Metas (Parte II) 6

continúa pág. 2

OEG exime de restricciones a empleados... (cont. portada)

conética Boletín Informativo de la Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico 2

interés pecuniario en entidades a las que hayan contratado o reglamentado durante su desempeño en el servicio público u otorgar un contrato con la agencia de la que cesaron dentro de los dos años de su cese.

Al así determinar, se expresó lo siguiente: No podemos olvi-dar que la finalidad del Artículo 3.7 de la Ley de Ética Guber-namental es evitar que los servidores públicos desempeñen sus tareas considerando su posterior intervención en los mis-mos asuntos o en asuntos relacionados en el sector público o privado, y no en lo que genuinamente le pueda beneficiar al Pueblo de Puerto Rico. Si tomamos en consideración que los empleados de la Fase II no cesaron en el Gobierno con el ob-jetivo de tomar alguna ventaja de sus relaciones con el sector privado, entonces, tenemos que concluir que las restriccio-nes contenidas en el Artículo 3.7 de la Ley de Ética tampoco pueden ser aplicables a aquellos empleados cesanteados en virtud de dicha fase.

La Opinión formal de la OEG puede ser accedida a través de nuestro portal en la Internet: www.oegpr.net.

OEG emite opinión sobre restricciones a empleados del BGF que se acogen a Plan de Renuncias Voluntarias

La Oficina de Ética Gubernamental de Puer-to Rico (OEG) fue consultada sobre si los servidores públicos que se acojan al pro-grama de renuncias voluntarias provisto por el Banco de Gubernamental de Fomento de Puerto Rico (BGF) estarán excluidos de las prohibiciones sobre ex servidores públicos establecidas en el Artículo 3.7 de la Ley de Ética Gubernamental.

Para la OEG atender esta consulta evaluó que el BGF adoptó la Resolución Núm. 9109 emitida el 22 de abril de 2009 por la Junta de Directores de dicho Banco. Mediante dicha

Resolución se autoriza un Programa Voluntario de Reducción Permanente de Jornada y un Programa de Renuncias Volun-tarias Incentivadas. Dicho programa es sustancialmente idén-tico a los programas que ofrece la Ley Núm. 7. La OEG determinó que el contenido en la Ley Núm. 7, que es el de las renuncias voluntarias incentivadas, está cobijado en igualdad de condiciones en la Resolución 9109, por lo que el propósito o la razón para incentivar dicho tipo de renuncias es la misma en ambos preceptos, promover la creación de empleos en el sector privado y reducir la nómina gubernamental. Por lo anterior, y utilizando también la técnica de la analogía recono-cida en nuestro ordenamiento jurídico, la OEG eximió de las restricciones contenidas en el Artículo 3.7 de la Ley de Ética Gubernamental a aquellos empleados que se acojan al Pro-grama de Renuncias Voluntarias Incentivadas del BGF.

Para información adicional puede comunicarse con el Área de Asesoramiento Jurídico, los lunes y viernes, al (787) 622-0305 extensiones 252, 277 ó 314.

desde el Centro para el Desarrollo del Pensamiento Ético

¿Cuándo educamos, logramos prevenir?

Al momento de pensar en prevención pensamos en todo aquello que va dirigido a evitar una conducta negativa, ya sea a través de la amenaza de un castigo, una infracción o meramente una advertencia de sanción. En el ámbito legal, por ejem-plo, la prevención tiene como fin último el disuadir al individuo de que no ejecute el comportamiento legalmente prohibido, de manera que la persona, a sabiendas de las consecuencias negativas que supon-dría una determinada actitud, se abstiene de incumplir lo dispuesto en las leyes. No obstante, la prevención no puede asociarse con cambiar una conducta negativa por miedo a un castigo. El concepto de pre-vención hace entender al individuo que la conducta negativa debe evitarse no por la sanción que se recibe, sino porque actuar de una forma apropiada brindará un bien social. Es decir, el propósito de la prevención es que el individuo transforme la conducta por convicción. Entonces, ¿Cómo hacemos en-tender esa diferencia? ¿Cuál es la manera más efectiva de llevar ese mensaje? Y en el ambiente laboral, ¿Qué alternativas tiene la organización para poder transformar con-ductas inapropiadas o mantener conductas saludables en los entornos laborales?

Dándole respuesta a estas preguntas, los expertos en el tema coinciden en reconocer que la prevención es utilizar todo nuestro conocimiento para evitar un problema, y por ende, la educación es el elemento principal para llevar cualquier tipo de iniciativa para lograrlo. Un buen proceso de educación no sólo considera enseñar aptitudes y capaci-dades a los individuos sino que considera la enseñanza de principios. Por ejemplo, en un salón clases en donde se instruye sobre una materia, el estudiante estará aprendiendo no sólo sobre los conceptos académicos sino que aprenderá sobre la responsabilidad, el compromiso y el compañerismo, entre otros.

Según las referencias utilizadas para este artículo, el aprendizaje de valores es suma-mente importante porque principalmente ayuda a prevenir las situaciones que pueden ser adversas para los individuos.

Existen varios elementos a considerar para llevar un proceso adecuado de prevención a través de la educación. Se debe:

1. Establecer la educación oportuna. La enseñanza de valores, en las etapas tempranas de los individuos, contribuye a crear conciencia sobre las implicaciones negativas de una conducta. Esto significa que la información debe llegar a tiempo, antes de que ocurran los eventos. Esa responsabilidad recae en las diferentes instituciones sociales (familia, maestros, líderes comunitarios).

2. Reconocer que el proceso de ense-ñanza es fundamental en la vida del ser humano y la sociedad. El incluir la edu-cación en los procesos de transformación se remonta a los orígenes mismos del ser humano. La educación es lo que transmite la cultura, permitiendo su evolución. Por ejemplo, antes de elegir los consejeros

en la China imperial, los emperadores los sometían a estudios sobre gobierno y so-bre conductas. Estos tenían el propósito de mejorar la calidad de las decisiones y sobre todo prevenir conductas adversas al estado.

3. Crear una cultura de valores. Recordar que la educación a través de la enseñanza no se limita al mundo académico sino tam-bién al modelaje de valores. La educación no sólo se produce a través de la palabra. Está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes.

4. Considerar la educación continua. Promover la educación continuamente ayu-da a la gente a prepararse anticipadamente y a comprender las necesidades que se tienen. La educación constante favorece a la formación del individuo en todas sus etapas de crecimiento. Le facilita al indi-viduo atemperarse a los cambios y poner en práctica los valores. Además, estimula y fortalece los hábitos y conductas salu-dables en los entornos laborales.

La forma más sencilla de prevenir es edu-car. La prevención a través de un buen proceso de educación contribuye a que las personas tengan una vida más llevadera, permitiendo la realización personal y profe-sional. Se debe recordar que la educación preventiva se basa no sólo en lo teórico; es el aprendizaje continuo puesto en la prác-tica, aplicando el conocimiento adquirido como una alternativa de desarrollo para enfrentar los retos. Prevenir es ver y es-tar preparado para lo que pueda suceder, la mejor forma es conocer y educarnos. El conocimiento da poder, el poder bien uti-lizado puede otorgar mucha tranquilidad en el ambiente que convivimos.

3

Por: Eduardo García Orta, MBA & Mercedes Pabón Ríos, MA Promotores de la Ética Gubernamental, OEG

desde el Centro para el Desarrollo del Pensamiento Ético

Seis valores que contribuyen al fortalecimiento del servicio público y el desarrollo de la sociedad puertorriqueña

La Oficina de Ética Gubernamental de Puer-to Rico (OEG) consciente de la necesidad de fomentar las conductas éticas en los esce-narios de trabajo en el sector gubernamental destaca seis valores éticos que son impor-tantes en el proceso decisional de las perso-nas. Los mismos, que son imprescindibles en la formación del carácter de los individuos, deben ser parte integral en el servicio público puertorriqueño. Estos valores son: el respe-to, la justicia, el civismo, la responsabilidad, la solidaridad y la confiabilidad.

Por tanto, fomentar una conciencia colec-tiva sobre la importancia de los valores en el servicio público podría significar que las acciones que se tomen en el Gobierno es-tén enmarcadas en los mejores intereses del País. Dichas conductas representarían un beneficio directo para todos los secto-res incluyendo áreas como la seguridad, la salud, el ambiente, la educación y la in-fraestructura, entre otros. A esos efectos, es preciso repasar cómo se definen los seis va-lores que forjan el carácter y de qué manera cada uno de éstos puede contribuir con el fortalecimiento del Gobierno. A continuación se examina cada valor, así como su relación con el servicio público.

RespetoAl buscar cuál es la definición de la palabra respeto se menciona que es un valor que permite a los individuos reconocer, aceptar y apreciar las cualidades del prójimo. En esa dirección Erich Fromm¹ destaca que el respeto no significa temor y sumisa reverencia; denota la capacidad de ver a una persona tal cual es, tener conciencia de su individualidad única. Respetar debe ser preocuparse porque las demás personas crezcan y se desarrollen según sus capaci-dades. Además, es importante señalar que

el respeto no sólo se manifiesta con la ac-tuación de las personas respecto a las leyes, sino que ésta también se expresa hacia la autoridad, como sucede con los estudiantes y sus maestros o los hijos y sus padres.

Algunas formas de ejercer el respeto en el área de trabajo son mediante la cortesía, la decencia y el compañerismo. Una persona respetuosa escucha a otros, además, per-mite a los demás tomar parte en las decisio-nes que los afectarán. También, rechaza la violencia y, en todo momento, el lenguaje es-tereotipado, uno que no discrimine a las per-sonas por género, raza, religión, impedimen-to u orientación sexual. Se puede decir que ejercer el respeto es tratar a las personas por su valor individual y reconocer las normas generales que comparte la sociedad.

Justicia“La justicia es la mesura, simbolizada por la balanza, es decir, por el equilibrio y la pro-porción: a cada uno su parte, ni mucho ni poco”.² En un contexto similar la Real Aca-demia Española se refiere a la justicia como una virtud que se inclina a dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece. Ésta tam-bién es vista como el conjunto de normas que establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e institucio-nes, autorizando, prohibiendo y permitiendo acciones específicas en la interacción de in-dividuos. Se supone que en toda sociedad humana la mayoría de sus miembros tenga un concepto claro de lo que es ser justo. Al considerarse la justicia en las acciones diarias dentro del sector gubernamental se puede decir que es la virtud que mueve a los empleados públicos y empleadas públicas a actuar de acuerdo a lo que es correcto. La justicia, que no se limita a los casos que se

tratan en los tribunales, es aquel sentimien-to de rectitud que gobierna la conducta y promueve respetar los derechos de los demás. La justicia es un valor que debe ser reconocido por servidores públicos en su de-sempeño diario, algo que pudiera facilitarles el comprender la realidad de los demás to-mando en cuenta su circunstancia. Por tanto, se debe actuar con honestidad, rectitud y, so-bre todo, ser compasivo.

CivismoEl civismo es la capacidad de llevar la cor-tesía, el respeto y el orden a toda la socie-dad en su conjunto en vías de crear un clima propicio para la convivencia. También, quiere decir vivir en comunidad; sentirse parte de la sociedad, parte de un pueblo y estar orgullo-so de pertenecer a éste. Dichas virtudes son las que convierten a las personas en buenos ciudadanos, algo que está estrechamente relacionado con lo que se plantea es la ética. Al vivir en sociedad es necesario tener pre-sente cuáles son las normas ciudadanas que rigen la conducta en dicho lugar. Civismo es un valor que promueve una cultura de con-vivencia solidaria que se obtiene del com-promiso social de las comunidades y de las personas que viven en ella.

conética Boletín Informativo de la Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico 4

Por: Ángel L. Durán Quintana, MA Ayudante de la Directora Ejecutiva, OEG

continúa pág. 5

Seis valores que contribuyen... (Cont.)Una sociedad con una actitud favorable hacia el civismo permite la colaboración de los ciudadanos, grupos civiles, sindica-tos, empresarios y representantes electos en las decisiones que impactan al país. No necesariamente se trata de ingresar en una asociación, o ser militantes de algún partido político, sino no estar desentendidos de lo que pasa a su alrededor y fomentar un clima propicio para la convivencia y la par-ticipación ciudadana. Cuando un servidor público ejerce su trabajo con dedicación en beneficio de los ciudadanos está actuando con civismo.

ResponsabilidadSegún Hans Jonas³ el ser humano es el úni-co que posee el valor de la responsabilidad. Sólo éste puede escoger consciente y de-liberadamente entre alternativas de acción, las cuales tienen consecuencias. En ese sentido, se puede decir que responsabili-dad es la capacidad existente en todo sujeto para reconocer y aceptar las consecuencias de sus acciones. También, se vincula con el respeto a los compromisos que hacemos con las demás personas.

Ser responsable dentro del servicio pú-blico es tratar de que todos nuestros actos sean realizados de acuerdo con una no-ción de justicia. Además, es percatarse de que todas las acciones, todo compromiso, impactan de alguna manera a alguien. Por tanto, es necesario cumplir con la parte que corresponde en un trabajo o equipo en vías de preservar y mejorar el entorno laboral. Una persona responsable toma de-cisiones conscientes, acepta las consecuen-cias de sus actos y está dispuesto a rendir cuentas de ello. Es decir, responsabilidad en el servicio público es la capacidad de cumplir con los compromisos contraídos con el País.

SolidaridadLa solidaridad es uno de los valores huma-nos por excelencia, uno que es significativo porque requiere de nuestros buenos sen-timientos para salir adelante. Según Karol Wojtyla4, no es un sentimiento superficial, es la determinación firme y perseverante de

empeñarse por el bien común. La solidari-dad, que se practica sin distinción de credo, sexo, raza, nacionalidad o afiliación política, es ayudar y poner las capacidades al servi-cio de los demás. Asimismo, es la cualidad de ofrecer apoyo a otras personas, sobre todo, en tiempos difíciles. La Asociación Internacional de Clubes de Leones plan-tea que la solidaridad es un valor de gran trascendencia para el género humano, pues gracias a ella no sólo se han alcanzado los más altos grados de civilización y desarrollo a lo largo de la historia, sino que se ha lo-grado sobrevivir y salir adelante luego de los más terribles desastres.

El valor de la solidaridad puede significar tomar como nuestro un problema que en principio no nos afecta. En el año 2000, la Organización de las Naciones Unidas, en su Declaración del Milenio, destacó la solidari-dad como uno de los valores que debían re-gir las relaciones internacionales en el Siglo XXI. Como funcionarios públicos podemos ser solidarios al realizar actos tan cotidianos como atender cortésmente a un ciudadano, ser sensibles en las decisiones que impac-tan a la gente y colaborar con compañeros en el área de trabajo.

ConfiabilidadEl valor de la confiabilidad es aquel que permite a las personas depositar la verdad en otros individuos estando seguros de que ésta permanecerá intacta. Es preciso señalar que las relaciones humanas están basadas en el principio de la confiabilidad, marco desde donde uno puede construir relaciones fructíferas para el futuro. Dicho valor genera la motivación, el deseo y energía en los lugares donde esté presente. Por tanto, es necesario comenzar a construir relaciones sustentadas en la confiabilidad para poder desarrollar solidez en el sector público.

En el lenguaje cotidiano puertorriqueño se suele decir que depositamos la confianza o tenemos confianza cuando se está seguro de que la otra persona no fallará. Las per-sonas que logran la confiabilidad con sus acciones comparten características tales

como: inspiran transparencia; afrontan la realidad tal cual como es; mantienen sus compromisos; y escuchan antes de llegar a conclusiones. Es por eso que fomentar la responsabilidad personal y grupal en el sector público fortalece la confiabilidad del pueblo en su Gobierno.

Luego de examinar los seis valores del carácter se puede concluir que los mismos son fundamentales para que los empleados gubernamentales desarrollen sus más al-tos estándares de servicio en el Gobierno. Contar con servidores públicos compro-metidos con la responsabilidad de servir al País, siguiendo un alto sentido de justicia y solidaridad solidifica el sector gubernamen-tal. Asimismo, cultivar el respeto mutuo es un paso para cimentar aún más las conduc-tas necesarias para actuar de acuerdo a las normas éticas que deben estar presentes en toda sociedad y su gobierno.

1 Destacado psicólogo social, psicoanalista, filósofo y humanista alemán miembro del Instituto de Investiga-ciones Sociales de la Universidad de Frankfurt. 2 Señala una de las definiciones de justicia ofrecidas por Aristóteles.3 Conocido por su influyente obra El imperativo de la responsabilidad publicado en Alemania en 1979. Su trabajo se centra en los problemas éticos y sociales creados por la tecnología.4 Fue el Papa de la Iglesia Católica de 1978 a 2005.

5

desde el Área de Sistemas de Información

Administración pública digital: Retos y Metas (Segunda Parte)La experiencia nos ha demostrado que el desarrollo tecnológico inclusivo de una agencia entraña la necesidad de promover la unión de las agencias, para gestionar bienes y servicios integrados, oportunos y democráticos; lo cual a su vez debe reper-cutir en la participación y desarrollo de la ciudadanía misma. Desde esta perspectiva, este proceso también debe incluir la capaci-tación de la ciudadanía; ya sea mediante la educación y fortalecimiento sobre el uso y manejo de la tecnología de información. Además, proveer todo tipo de herramienta o recurso que promueva la inclusión ciudada-na en los procesos gubernamentales, siem-pre destacándose el acceso a las nuevas modalidades electrónicas de los servicios gubernamentales.

Es de suma importancia, que al momento de implementar cambios, se tenga presente dejar a un lado la burocracia, que hace que grandes proyectos no tengan el éxito para el cual fueron creados. En una era donde los avances tecnológicos presentan soluciones de largo alcance, el foco principal de una ad-ministración pública de excelencia debe cul-tivarse a partir de un servicio de excelencia a la ciudadanía y un crecimiento y desarrollo sostenible a nivel de globalización, donde cada sociedad logre posicionarse con una estructura sólida, que inclusive pueda con-tribuir al desarrollo regional y global.

La Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico (OEG) está llevando a cabo iniciativas trascendentales relacionadas a las tecnologías de información. El portal de esta Oficina, provee recursos educativos en formato digital, como por ejemplo el boletín informativo, Conética, la revista académica Ethos Gubernamental, entre otros diversos recursos que no solamente están disponibles para los servidores y servidoras públicas, sino para todas las personas que accedan al mismo. Además, la OEG mantiene un siste-ma vía Internet para la radicación electrónica de los informes financieros. Un sistema de información vía Internet, donde los comités

de ética pueden registrar y monitorear las horas de los cursos de cada servidor pú-blico. Además, provee dos cursos en línea, donde los funcionarios y empleados públicos pueden educarse en temas de ética. Esto conjuntamente con diversas iniciativas que promueven la reducción del uso de papel y mayor uso de los sistemas de información, promoviendo a su vez la identidad de una agencia verde.

Este siglo nos invita a trascender los para-digmas forjados durante décadas. Una ad-ministración pública digital que actúa inteli-gentemente en este siglo, tiene que mirar el horizonte del servicio público conocido como 24/7, lo cual significa que opera 24 horas al día y siete días a la semana, donde el ciudadano tenga la oportunidad de ob-tener servicios fuera de horas laborales tradicionales. Un gobierno que se organice y desarrolle electrónicamente, para contribuir al desarrollo e incorporación de la sociedad en los procesos del gobierno¹. Ante todo, es importante que las entidades gubernamen-tales y las empresas privadas fomenten la interdependencia y la inclusión amplia y participativa, para contribuir al desarrollo in-clusivo y sostenido de la sociedad.

La tecnología de informática, es un compo-nente que puede ser utilizado para lograr inclusión tanto a nivel interagencial como a nivel de la ciudadanía. Puede transformar la identidad tradicional de una organización mediante diversos mecanismos, como la proyección pública y los sistemas de infor-mación. Una proyección pública incluye la creación de portales del gobierno, que inte-gren una diversidad de servicios, manejo de la información que se recopile y la garantía de una accesibilidad segura a la información por parte de la ciudadanía. En relación a los sistemas de información, éstos deben incluir una estructura organizacional desde donde se realice la operación, un área en la cual se provea y garantice la seguridad de dicha información.

El tiempo es ahora, Puerto Rico cuenta con leyes que respaldan una administración pública que integre avances tecnológicos, como la Ley de Gobierno Electrónico ², la Ley para Reducir la Brecha Digital³, Ley para el Desarrollo de Centros Gratuitos de Acceso a la Internet a través de todo Puerto Rico 4, Ley para Garantizar el Acceso de Información a las Personas con Impedimentos y otras leyes y órdenes administrativas que promueven el gobierno electrónico. Es tiempo de reforzar y promover el uso de las herramientas que los avances tecnológicos proveen, con el fin de transformar la administración pública, que tiene como norte, el servicio de calidad y ex-celencia. Claro está, reforzar o promover no radica simplemente en más legislación, tam-bién incluye acciones sencillas que resulten en cambios transformadores. Hay que colocar en justa y clara perspectiva que el impacto de grandes cambios puede radicar su origen en elementos pequeños. Le corresponde a cada agencia identificarlos, programarlos y sostenerlos; proceso que en si mismo generará la unidad interagencial necesaria para optimi-zar la calidad de los bienes y servicios que producimos para el bienestar y el desarrollo de cada ciudadano y la sociedad en general.

1 Cruz, N., Hernández, W., Martínez, V., Martínez, D., Rodríguez, C., y Rosado, R. A. (2008). Reflexiones sobre el gobierno electrónico y el desarrollo inclusivo, Ethos Gubernamental, 5, 169-204. 2 Ley Núm. 151 de 22 de junio de 2004, cuyo propósito es establecer la política pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico en el área de las tecnologías de información.3 Esta Ley fomentó la creación del Proyecto “Tec-nología a tu Alcance” destinado a reducir la brecha digital en las comunidades especiales del país.4 Ley Núm. 100 de 26 de agosto de 2005, promueve en coordinación con las agencias del gobierno, los mu-nicipios, las empresas privadas y entidades educativas, la implantación de un programa abarcador que incluya el establecimiento de un Centro Gratuito de Acceso al Internet en cada municipio, debidamente reglamentado. 5 Con el advenimiento de la era informática se ha producido una transformación en las comunicaciones a nivel mundial. Los avances en la tecnología de la informática son extraordinarios a tal extremo que se han inventado equipos para facilitarle a las personas con impedimentos físicos el llevar una vida de mayor independencia y productividad. En ese sentido, el uso de sistemas audiovisuales interactivos se ha generalizado por constituir un medio eficiente para obtener infor-mación electrónicamente disponible.

conética Boletín Informativo de la Oficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico 6

Por: Wilnelia Hernández Castro, MBA Desarrolladora de Sistemas de Información, OEG

desde nuestra biblioteca

Fernández Arias, Eduardo & Montiel, Peter. Crisis Response in Latin America: Is the Rainy Day at Hand junio 2009. Interamerican Development Bank and Williams College. Acceder en: http://idbdocs.iadb.org/wsdocs/get-document.aspx?docnum=2024179. Este trabajo examina las alternativas dis-ponibles para los países latinoamericanos en las políticas contracíclicas para enfrentar la actual crisis económica global, concluyendo que la mayoría de estos países poseen una situación fiscal para enfrentar dicho déficit fiscal. Cometario Editorial.

Moncure, Pemberton, Riehecky, McDonnell y otros. Valores para la vida: Para desarrollar la autoestima. The Child’s World. Una serie de libros que pro-porcionan a los adultos ideas para discutir con naturalidad el tema de los va-lores con sus hijos e hijas. Nuestra cultura tiene muchos valores complejos y conflictivos, pero hay algunos que son fundamentales. Se trata de valores universales y perpetuos que proporcionan los medios para que podamos vivir más eficazmente en nuestra propia comunidad y en el mundo en general. Cometarios Janet Moncure.

"Cultiva aquellos hábitos que quisieras que dominaran tu vida."

Cita del nuevo milenio

Elbert Hubbard

Órgano Informativo de laOficina de Ética Gubernamental de Puerto Rico

PO Box 194200San Juan PR 00919-4200

Tel. (787) 622-0305TTY (787) 999-4865Fax (787) 754-0977

www.oegpr.neteticamail@oegpr.net

Lcda. Zulma R. Rosario VegaDirectora Ejecutiva

Srta. Lorna M. Castro FigueroaEditora

Sr. Ángel L. Durán QuintanaDiseñador Gráfico

Sra. Wilnelia Hernández CastroSr. Eduardo García OrtaSra. Mercedes Pabón RíosSra. Gladys Malpica de SchafferColaboradoresco

nétic

a

Onestito y Clara Ética

Onestito:El Artículo 2.4 de la Ley de Ética Gubernamental dispone entre los deberes de la Oficina, la respon-sabilidad de promover y formular políticas y programas de conducta ética y moral para los servidores públicos dirigidos a la consecución de varios objetivos, entre los que se encuentran: 1. El establecimiento de criterios de excelencia, integridad personal, honestidad, responsabilidad y ve-racidad en las gestiones públicas para inspirar, fomentar y restituir la confianza de los ciudadanos…

La lectura de este Boletín Conética puede ser acreditada para horas de educación continua, y así cumplir con la obligación de 10 horas de educación en materia de ética gubernamental, normas de sana administracion pública y valores. Debe completar esta forma y hacerla llegar al Oficial de Enlace o al Director de Recursos Humanos de su Agencia o Municipio.

Conserve copia para su expediente personal.

Nombre Inicial Ap. Paterno Ap. Materno

Últimos cuatro dígitos de su número de seguro social

Agencia o Municipio

Área de Trabajo

Puesto que ocupa

Certifico que he leído en su totalidad el ejemplar del Boletín lnformativo Coné-tica, Volumen IV del Año XIX, cuya por-tada lleva por título el siguiente tema:

OEG exime de restricciones a empleados cesanteados

Solicito que se me acredite el tiempo de esta lectura (2.5 horas) para educación continua, según lo dispuesto en la Carta Circular Núm. 2008-04 de la OEG.

Firma

Fecha

Rec

orte

por

aqu

í

Oye, Clara, estuve en un curso de la OEG y me quedé pensando en algo que dijo el conferenciante: “La ética se modela”. Eso significa que debemos dar el ejemplo no sólo en el ámbito del trabajo.

Tienes toda la razón. Una persona ética hace más de lo que la ley requiere y menos de lo que le prohíbe. La ética empieza por casa. Las leyes, los códigos y las normas son guías instrumentales que nos orientan y sirven de referencia pero los principios que conocemos se ponen en práctica en el liderazgo que responsable-mente ejercemos.

Por eso, es necesario no sólo hablar de ética sino practicarla. Contribuimos al bienestar social al poner en práctica estos valores. El buen ejemplo es la lección más grande. Ejercer el liderazgo comunitario es una expresión de ese compromiso ciudadano.