Don Pepe tiene una pequeña librería en el garaje de su casa. Un día necesitó hacer un tramite en el que se requería una fotocopia del DNI

El notó que por su casa no había ninguna tienda que ofreciera este servicio y habiendo algunas empresas y un pequeño instituto cerca parecía una buena opción de negocio

De modo que decidió comprar una fotocopiadora

En un inicio Don Pepe encargó a su hijo mayor la atención de los pedidos de fotocopias y Don Pepe se dedicaba a atender la librería. Así entre los dos se turnaban para atender a los clientes.

El éxito fue tal que al año Don Pepe decidió contratar a dos personas más para que sus hijos pudieran dedicarse a estudiar, ya que la librería les quitaban mucho tiempo.

De sus dos trabajadores, Manuel empezó a trabajar hace seis meses, pero cómo se necesitaba de más gente, hace tres meses se contrató a Miguel. Los dos ganan el sueldo mínimo, que es s/750.00.

Sin embargo, Roxana, la hija de don Pepe, que estudiaba administración en el instituto comentó

que de contratar personal deberían de llevar una planilla. “¿Una planilla?

¿Pero qué es eso y para qué nos sirve? ¿ No basta con pagarles mensualmente?” –pregunto Don Pepe confundido

Su hija le explicó que una planilla es un registro donde se pone la lista de trabajadores y sus sueldos

Además tener trabajadores formalmente implicaba que no solo debían pagarles el sueldo mínimo sino que también otros beneficios sociales como la gratificación; ya que se acercaba Julio – Don

Pepe escucho acerca de las planillas y se quedó muy preocupado

¿ Cuánto le iba costar en realidad contratar a una o dos personas más? ¿Le alcanzaría el dinero?