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FACULTAD DE CIENCIAS VETERINARIAS U.N.C.P.B.A “PANCREATITIS AGUDA FELINA: DESCRIPCIÓN DE UN CASO CLÍNICOIrazábal, María; Paludi, Alejandro; Landa Roberto. Mayo, 2017 TANDIL

“PANCREATITIS AGUDA FELINA

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Page 1: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

FACULTAD DE CIENCIAS VETERINARIAS

U.N.C.P.B.A

“PANCREATITIS AGUDA FELINA:

DESCRIPCIÓN DE UN CASO CLÍNICO”

Irazábal, María; Paludi, Alejandro; Landa Roberto.

Mayo, 2017

TANDIL

Page 2: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

PANCREATITIS AGUDA FELINA: DESCRIPCIÓN DE UN CASO

CLÍNICO.

Tesina de la Orientación en Sanidad Animal, presentada como parte de los

requisitos para optar al grado de Veterinario del estudiante:

Irazábal, María.

TUTOR: M.V Paludi, Alejandro.

DIRECTOR: Dr. Landa, Roberto.

EVALUADOR: M.V. Fogel, Fernando.

Page 3: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

DEDICATORIAS Y AGRADECIMIENTOS.

A mi familia, papá, mamá, hermanos, abuela y sobrinos, por siempre confiar en

mí, acompañarme en este camino y ayudarme a cumplir mis metas.

A mis amigos de siempre y a los que me dio la facultad, por su apoyo

incondicional.

A mi director de tesis, el Dr. Roberto Landa por su apoyo absoluto, su buena

predisposición y colaboración durante el desarrollo de esta tesina.

Al Dr. Alejandro Paludi, por sus enseñanzas y excelente trato que me brindó junto

a todo su equipo de trabajo durante mi Residencia.

Page 4: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

RESUMEN.

La pancreatitis felina ha surgido recientemente como una enfermedad común e

importante desde el punto de vista clínico en los gatos. La etiología no está bien

establecida; el conducto biliar y pancreático terminal común en los gatos puede

ser un factor predisponente para el desarrollo de la pancreatitis aguda al permitir el

reflujo de bilis dentro del páncreas y la autodigestión del mismo. La pancreatitis no

presenta signos patognomónicos. La mayoría de los gatos llegan a la consulta con

letargia, anorexia, deshidratación y taquipnea. El diagnóstico es difícil debido a

que los hallazgos clínicos y de laboratorio son inespecífico y comunes a varias

enfermedades gastrointestinales y metabólicas. El tratamiento de la pancreatitis

aguda es sintomático y de sostén, ya que no se conocen las causas específicas

de la misma.

Palabras claves: felinos, pancreatitis aguda.

Page 5: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

ÍNDICE.

INTRODUCCIÓN. ................................................................................................... 1

RESEÑA BIBLIOGRÁFICA ..................................................................................... 2

REPASO ANATÓMICO. .......................................................................................... 2

ETIOLOGÍA ............................................................................................................. 5

CLASIFICACIÓN. .................................................................................................... 5

FISIOPATOLOGÍA .................................................................................................. 6

SIGNOS CLÍNICOS ................................................................................................ 9

DIAGNÓSTICO ..................................................................................................... 10

ANÁLISIS DE LABORATORIO .......................................................................... 10

DIAGNÓSTICO POR IMAGEN .......................................................................... 12

DETERMINACIONES ESPECIALES ................................................................. 14

ANATOMÍA PATOLÓGICA MACROSCÓPICA E HISTOPATOLOGÍA. ................ 15

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL ............................................................................. 16

TRATAMIENTO ..................................................................................................... 17

PRONÓSTICO ...................................................................................................... 20

DESCRIPCIÓN DE UN CASO CLÍNICO DE PANCREATITIS AGUDA EN UN

FELINO. ................................................................................................................ 22

RESEÑA DEL ANIMAL: ........................................................................................ 22

MOTIVO DE LA CONSULTA: ............................................................................... 22

ANAMNESIS: ..................................................................................................... 22

SEMIOLOGÍA CLÍNICA: ........................................................................................ 22

EVOLUCIÓN. ........................................................................................................ 29

DISCUSIÓN. ......................................................................................................... 29

CONCLUSIÓN. ..................................................................................................... 32

BIBLIOGRAFÍA. .................................................................................................... 33

Page 6: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

1

INTRODUCCIÓN.

La pancreatitis es un trastorno del tracto digestivo que afecta con frecuencia a

perros y gatos. Los signos de las enfermedades del hígado, páncreas e intestino,

pueden ser muy similares. Esto hace que el diagnóstico preciso constituya un reto

formidable para el veterinario (Schaer, 2006).

Esta patología es la inflamación y daño del parénquima pancreático secundarios a

la activación intra-parenquimatosa de enzimas pancreáticas que provocan la

autodigestión del páncreas exócrino, debido a que las enzimas digestivas se

activan prematuramente, particularmente las proteasas y fosfolipasas. Por lo tanto,

la activación de éstas a nivel intracelular o intraductal provocan inflamación,

hemorragia, necrosis celular y necrosis de la grasa peripancreática. La liberación

de las enzimas digestivas a la circulación sanguínea causa efectos sistémicos con

una respuesta inflamatoria sistémica, vasodilatación e hipotensión, edema

pulmonar, CID, sintomatología neurológica, fallo respiratorio y fallo renal. (Ettinger

y Feldman, 2007).

Los principales signos clínicos son letargia, anorexia, decaimiento y deshidratación

(Hill and Van Winkle, 1993; Gerhardt et al., 2001; Ferreri et al., 2003).

En un estudio de retrospectiva, se le hizo necropsia a 40 gatos con pancreatitis

aguda: 20 % padecía trombosis, no se especificaba si era venosa o arterial, y no

se mencionaba la localización de la trombosis. Las lesiones en pulmón se

presentaron en 30 % de los gatos, edema pulmonar, signo de síndrome de

distress respiratorio agudo (ARDS) fue la patología más común. Otras

complicaciones que se mencionaron fueron: efusión pleural (12%), efusión

abdominal (7,4%) y efusión pericárdica (5%). (Hill and Van Winkle, 1993).

Los objetivos del presente trabajo consisten en realizar una reseña bibliográfica

sobre pancreatitis aguda en felinos y la descripción de un caso clínico de la

misma.

Page 7: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

2

RESEÑA BIBLIOGRÁFICA.

REPASO ANATÓMICO.

La principal función de las células acinares del páncreas exócrino es secretar

fluido rico en enzimas digestivas que degradan las proteínas, los lípidos y los

polisacáridos. Esta secreción rica en proteínas, es diluida y transportada a través

de un sistema de conductos por la profusa secreción acuosa, rica en bicarbonato,

secretada por las células centroacinares y de los conductos y descargada en la luz

del duodeno. La secreción pancreática relacionada con la ingestión de alimentos

se produce como respuesta al estímulo cefálico (por ejemplo, la preparación y

aroma de la comida) y a la estimulación gástrica e intestinal, debida a la presencia

de alimento en el estómago e intestino delgado. La secretina y colecistoquinina,

liberadas a la sangre por la porción proximal del intestino delgado al pasar el

alimento ácido y parcialmente digerido del estómago al duodeno, estimulan la

secreción de los componentes de los jugos pancreáticos ricos en bicarbonato y

enzimas respectivamente (Williams, 2006).

El páncreas se ubica en estrecha relación con la porción craneal del duodeno

dentro del mesoduodeno y del mesogastrio dorsal. En él se diferencian su cuerpo

(Corpus pancreatis) de ubicación media, un lóbulo derecho del páncreas (Lobus

pancreatis dexter) o rama derecha duodenal y un lóbulo izquierdo del páncreas

(Lobus pancreatis sinister) o rama izquierda esplénica. Estos lóbulos forman una U

abierta caudalmente por la que discurre la vena porta (cisura del páncreas,

Incisura pancreatis). El páncreas del gato presenta la forma simple de una U cuyo

lóbulo izquierdo, algo más corto, se encuentra en el origen del omento mayor, en

la pared dorsal del abdomen, mientras que el derecho acompaña a la parte

descendente del duodeno.

Los conductos excretores difieren según la especie, el gato posee un conducto

pancreático. Éste desemboca junto con el conducto colédoco, en la papila mayor

del duodeno en la porción inicial de ese órgano.

Page 8: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

3

Figura 1. Ubicación anatómica del páncreas. (Dos Santos, 2015).

Los vasos sanguíneos del páncreas provienen de la arteria celíaca y de la arteria

mesentérica craneal. La arteria hepática, que discurre hacia la derecha, da origen

a la arteria pancreaticoduodenal craneal para el lóbulo derecho del páncreas. El

cuerpo y el lóbulo izquierdo están vascularizados por la arteria esplénica y por

arteria pancreaticoduodenal caudal, rama de la arteria mesentérica craneal. Las

venas del páncreas drenan en la vena porta.

Page 9: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

4

Figura 2. Diagrama de distribución de las ramas de la arteria celíaca y de la

arteria mesentérica craneal. 1, arteria aorta. 2, arteria celíaca. 3, arteria

mesentérica craneal. 4, arteria hepática. 5, arteria gástrica izquierda. 6,

arteria esplénica. 7, arteria gástrica derecha. 8, arteria gastroduodenal. 9,

arteria pancreaticaduodenal craneal. 10, arteria gastroepiploica cranel. 11,

arteria pancreaticaduodenal caudal. 12, arteria yeyunal. (Diana., et al 2015).

La inervación es autónoma. Las fibras simpáticas provienen del plexo solar

mientras que las parasimpáticas derivan del tronco vagal dorsal.

Los vasos linfáticos drenan en los nódulos linfáticos pancreático-duodenales, que

pertenecen al linfonódulo celíaco (Koning y Liebich, 2005).

Page 10: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

5

ETIOLOGÍA.

En la mayoría de las pancreatitis agudas no está bien establecida una etiología

específica, aunque en numerosas ocasiones se nombran agentes infecciosos

asociados tales como Toxoplasmosis y Pleuritis Peritonitis Infecciosa Felina. Los

traumatismos son otras de las causas (Minovich y Paludi, 2011).

En diversos estudios se ha demostrado una asociación entre la pancreatitis, la

enfermedad inflamatoria intestinal (EII) y enfermedades biliares (por ejemplo,

colangitis), esto puede estar relacionado con la distribución anatómica de los

conductos biliares y pancreáticos que se unen y por lo general tienen una apertura

común dentro del duodeno de los gatos (Birchard et al., 2002). La relación que

existe entre estos tres desórdenes se la conoce con el nombre de triaditis.

El conducto biliar y pancreático terminal común en los gatos puede ser un factor

predisponente para el desarrollo de la pancreatitis aguda al permitir el reflujo de

bilis dentro del páncreas. Esta teoría del reflujo biliar en el canal común fue

postulada para asociar la pancreatitis y enfermedad biliar en los seres humanos, si

bien la colelitiasis, la cual suele estar presente en los humanos es excepcional en

los gatos. La observación de que hasta dos tercios de los gatos con pancreatitis

aguda o crónica tienen colangiohepatitis brinda un sostén adicional a esta teoría

del canal común. La enfermedad intestinal inflamatoria también se presenta en

algunos casos de pancreatitis y podría estar relacionado con la inflamación del

páncreas y árbol biliar (August, 2007).

CLASIFICACIÓN.

Los sistemas clasificatorios vigentes de la pancreatitis felina se fundamentan en

los patrones histopatológicos del páncreas en necropsias más que por criterios

clínicos o clinicopatológicos. La pancreatitis fue categorizada como aguda y

crónica dependiendo si existen cambios histopatológicos permanentes (crónica) o

no (aguda). (August, 2007).

Page 11: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

6

Tabla 1. Clasificación de las pancreatitis (Minovich y Paludi, 2011).

AGUDA :(33%) infiltración neutrófilos,

necrosis, edema, hemorragia, sin

fibrosis.

CRÓNICA :(67%) cambios

histopatológicos irreversibles,

primariamente fibrosis.

Necrotizante aguda: (83%) necrosis

grasa peripancreática y acinar.

Crónica activa: (25%) infiltración

neutrófilos, necrosis, inflamación

mononuclear crónica, hiperplasia

nodular y fibrosis.

Aguda supurativa: (17%) escasa o

nula necrosis grasa, inflamación

supurativa extensa.

Crónica: (42%) infiltración

mononuclear y fibrosis extensa.

No existen correlaciones reales entre las presentaciones histopatológicas y su

desarrollo clínico. Sin embargo, si existe un patrón de conducta diferente entre la

presentación crónica y la aguda. La aguda es generalmente de aparición rápida y

observable fácilmente por el propietario del animal. En su forma supurativa existe

la posibilidad de aparición de choque, caquexia, dolor abdominal y disnea, que es

posible observar en forma regular. La crónica es de aparición lenta, en muchas

ocasiones subclínica o de descubrimiento post mortem. (Minovich y Paludi, 2011).

FISIOPATOLOGÍA.

El denominador común que puede sobrepasar los efectos protectores

antiproteasas, podría implicar una serie de factores que originan alteraciones en el

metabolismo e incrementar la permeabilidad de las membranas lipoproteicas que

rodean a las hidrolasas lisosómicas en las células acinares dando como resultado

una activación inadecuada de proenzimas y autodigestión. Las características de

las enzimas pancreáticas activadas y sus efectos sobre el páncreas se exponen

en la tabla 2 (Schaer, 2006).

Page 12: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

7

Tabla 2. Características de las enzimas pancreáticas y sus efectos sobre el

páncreas (Schaer, 2006).

ENZIMA ACTIVADORES EFECTO

BIOQUÍMICO

EFECTO

BIOLÓGICO

PREDOMINANTE

Tripsina Enterocinasa,

catepsina B,

pH bajo.

Proteólisis,

activación

de proenzimas.

Edema,

liquenificación,

necrosis,

hemorragias.

Quimotripsina Tripsina. Proteólisis. Edema, hemorragia.

Elastasa Tripsina. Elastólisis

de vasos

sanguíneos.

Hemorragia.

Fosfolipasa A Tripsina,

ácidos biliares.

Formación

de lisofosfatidas.

Necrosis

de coagulación,

necrosis grasa.

Lipasa Ácidos biliares. Descomposición

de triglicéridos.

Necrosis grasa.

El desarrollo de la autodigestión pancreática requiere la existencia de isquemia y

afección vascular. Si se mantiene la circulación pancreática, la pancreatitis

edematosa es un proceso relativamente benigno auto-limitante. La insuficiencia de

la micro-circulación pancreática conduce a una retención prolongada de enzimas

activadas y metabolitos auto-digestivos, se incrementa la probabilidad de lesión

adicional y perpetúa la enfermedad. Una vez que se desarrolla la isquemia ocurre

necrosis de grupos celulares. La intensidad de la pancreatitis es proporcional al

número de vasos embolizados. Por ello, la prevención de la éstasis y trombosis

vascular es decisiva para determinar la progresión de la enfermedad (Hardy,

1992).

Page 13: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

8

Cuando los mecanismos protectores pancreáticos son superados, lo que en un

momento era un proceso localizado se transforma en una enfermedad poli-

sistémica potencialmente peligrosa para la vida desarrollando una serie de

alteraciones bioquímicas y fisiológicas serias como consecuencia de la

diseminación sistémica de los fermentos tóxicos (Hardy, 1992).

Bajo condiciones normales, la actividad de estas enzimas digestivas sobre el tejido

pancreático está impedida por una red de mecanismos defensivos. Estas enzimas

digestivas existen como precursores inactivos para evitar la autodigestión. La

separación física mediante el empaquetamiento de los cimógenos en gránulos

membranosos dentro de las células acinares, junto a la distancia entre el sitio de

liberación de la enterocinasa y los cimógenos, impiden la activación enzimática

prematura. La presencia de inhibidores enzimáticos dentro del páncreas (inhibidor

de la tripsina secretora pancreática, α1 antitripsina) y en la circulación (α1-

antitripsina, α2 macroglobulinas) también aborta la activación enzimática

inadvertida. Los esfínteres musculares en los conductos pancreáticos bloquean el

reflujo de los contenidos duodenales, que a nivel experimental demostraron inducir

inflamación pancreática (Nelson y Couto, 2000).

Los acontecimientos iniciales que inducen la pancreatitis tienen lugar en las

células acinares y parecen estar relacionados con alteraciones en la concentración

citosólica de calcio ionizado libre [Ca 2+]. Diversos estímulos nocivos pueden

provocar la alteración de la señalización dependiente de la [Ca 2+] normal, lo que

induce una disminución de la secreción pancreática. Como consecuencia, los

gránulos de zimógeno, que contienen las enzimas pancreáticas inactivas, se

acumulan en las células acinares y acaban fusionándose con los lisosomas. Esto

provoca la activación prematura de los zimógenos por las enzimas lisosómicas y el

bajo PH lisosomal (Tams, 2005).

Los gránulos cimógenos se fusionan con los lisosomas que contienen proteasas,

activando el tripsinógeno. A partir de este punto, se activan otras enzimas

digestivas y ocasionan aumento de la permeabilidad capilar y otras lesiones

Page 14: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

9

pancreáticas directas, así como también el inicio de la cascada de aminas

vasoactivas. La tripsina, fosfolipasa A, elastasa, lipasa y colipasa son

responsables por la lesión vascular y necrosis. La inflamación pancreática se

extiende localmente hacia el estómago, duodeno y colon. Los polipéptidos

vasoactivos liberados hacia la circulación sistémica a partir del páncreas inflamado

producen muchos de los efectos sistémicos asociados por lo común con la

pancreatitis aguda grave (necrosis hepatocelular, edema pulmonar, degeneración

tubular renal, cardiomiopatía, hipotensión y coagulopatía intravascular diseminada

[CID]). La magnitud de la pancreatitis es máxima cuando se han consumido los

inhibidores de proteasa endógenos y la perfusión del páncreas es mínima (Nelson

y Couto, 2000).

SIGNOS CLÍNICOS.

Los signos clínicos de la pancreatitis aguda en gatos son inespecíficos y similares

a numerosas patologías gastrointestinales y disturbios metabólicos. La mayoría de

los gatos llegan a la consulta con letargia, anorexia, deshidratación, y taquipnea.

En contraste con los perros, los signos gastrointestinales son de rara aparición en

los gatos (Hill y Van Winkle, 1993; Gerhardt et al., 2001; Ferreri et al., 2003).

Según Paludi (2011), la letargia es un signo patognomónico del curso agudo, y la

depresión es la manifestación del dolor.

El daño endotelial celular, mediado por enzimas proteolíticas y radicales oxhidrilos,

activa la vía extrínseca de la coagulación resultando en coagulación intravascular

diseminada (CID) y tromboembolismo (Ruaux, 2000). El edema intersticial puede

ser resultado del aumento de la permeabilidad vascular pulmonar. Esta condición

puede causar ventilación-perfusión irregular y en consecuencia generar síndrome

de distress respiratorio agudo (SDRA) e hipoxia orgánica. Otro factor que

contribuye al SDRA, es la activación de la fosfolipasa A2 y elastasa que resulta en

la degradación de surfactante pulmonar. La efusión pleural y el tromboembolismo

pulmonar deterioran la función respiratoria (Lopez et al., 1995; Ruaux, 2000;

Page 15: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

10

Mansfield et al., 2003). La obstrucción extrahepática biliar puede ser secundaria a

la inflamación peripancreática y el edema, porque el conducto pancreático termina

cerca del conducto biliar en la papila duodenal mayor.

En un estudio de retrospectiva, se le hizo necropsia a 40 gatos con pancreatitis

aguda: 20 % padecía trombosis, no se especificaba si era venosa o arterial, y no

se mencionada la localización de la trombosis. Lesiones en pulmón se presentaron

en 30 % de los gatos, edema pulmonar, signo de síndrome de distress respiratorio

agudo (ARDS) fue la patología más común. Otras complicaciones que se

mencionaron: efusión pleural (12%), efusión abdominal (7,4%) y efusión

pericárdica (5%). (Hill and Van Winkle, 1993).

El líquido pleural está posiblemente originado por efectos de las enzimas

pancreáticas a distancia y mediadores inflamatorios sobre la pleura y la

vasculatura. Asimismo, las trombosis pulmonares pueden también contribuir al

desarrollo de efusiones (Minovich y Paludi, 2011).

DIAGNÓSTICO.

A pesar, de los avances en las técnicas diagnósticas utilizadas, arribar a un

diagnóstico definitivo, continúa siendo un reto en muchos casos. La historia y los

signos clínicos de la pancreatitis son inespecíficos y comunes a varias

enfermedades gastrointestinales y metabólicas; por eso se recomienda realizar

varias pruebas para descartar otras enfermedades (Ettinger y Feldman, 2007).

ANÁLISIS DE LABORATORIO.

Hemograma:

El leucograma de estrés se aprecia en casos leves, con mayor leucocitosis y

desvío a la izquierda leve a intenso en los cuadros más serios. Los recuentos

plaquetarios por lo regular son adecuados a menos que exista CID. El plasma

Page 16: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

11

puede ser lipémico e ictérico. Los gatos con pancreatitis a menudo tienen anemia

arregenerativa moderada (Nelson y Couto, 2000).

Bioquímica sérica:

En los gatos, el perfil bioquímico es variable, puede ser normal o mostrar

alteraciones que afectan a parámetros del riñón, hígado, glucosa, proteínas y

electrolitos (Schaer, 2006).

Los componentes de mayor utilidad en el perfil de bioquímica sérica son las

concentraciones del nitrógeno ureico sanguíneo (NUS), creatinina, glucosa,

albúmina, calcio y billirrubina total, así como también las actividades enzimáticas

hepáticas (fosfatasa alcalina [FA], alanina transaminasa [ALT]) (Nelson y Couto,

2000).

Las anomalías bioquímicas más frecuentes son el aumento de las actividades

enzimáticas del hígado e hiperbillirrubinemia (que suele ser un reflejo de

enfermedad hepática concurrente), azotemia, hipercolesterolemia,

hipoalbuminemia e hiperglucemia; esta última puede ser transitoria o permanente

(Steiner y Williams, 1999).

La azotemia prerrenal se detecta en más del 50% de los gatos y perros con

pancreatitis aguda y es atribuible a la contracción del volumen por los vómitos,

falta de ingesta de líquidos y extravasación de líquidos hacia el tercer espacio

(cavidad abdominal, espacio intersticial) por el daño vascular. La azotemia renal y

falla renal aguda son complicaciones poco habituales pero preocupantes de la

pancreatitis grave que pueden relacionarse con la vasoconstricción inducida por

aminas vasoactivas o hipovolemia prolongada. La presencia de la

hipoalbuminemia podría derivar del derrame vascular y peritoneal (Nelson y Couto,

2000).

Page 17: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

12

La hiperglucemia y glucosuria son frecuentes, pero la cetonuria es poco regular,

sugiriendo que el estrés puede ser una causa más común para estas

anormalidades que la diabetes mellitus. (August, 2007).

La actividad de amilasa y lipasa aumentadas significa que hay algo mal en el

animal, pero puede ser una afección gastrointestinal, hepática o renal (Williams,

2005).

Análisis de orina:

Suele revelar una elevada densidad urinaria secundaria a una deshidratación

(Steiner, 2003).

DIAGNÓSTICO POR IMAGEN.

Radiografía:

Su principal interés es que permite descartar otros diagnósticos diferenciales en

pacientes con signos clínicos similares (Xenoulis y col, 2008).

Se deben solicitar tanto placas abdominales como torácicas. Hay que descartar

cuerpos extraños radiopacos, obstrucciones gastrointestinales, peritonitis y otras

causas de abdomen agudo, o efusión pleural secundario a pancreatitis (Saunders

et al., 2002).

Los posibles hallazgos radiográficos en gatos con pancreatitis son la disminución

del detalle y del contraste en el abdomen craneal, dilatación del intestino delgado

(por líquido o gas), hepatomegalia y presencia de una masa abdominal en

posición craneal. Si estamos ante un caso de pancreatitis aguda podemos

encontrar efusión pleural y acumulación de líquidos en los pulmones

observándose en una placa simple de tórax (Steiner y Xenoulis, 2009).

Los gatos con pancreatitis a menudo tienen líquido detectable con la radiología en

los compartimientos corporales. De los gatos que tienen indicios de colecta, la

Page 18: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

13

mayoría exhibe efusiones en las cavidades pleural y abdominal (Nelson y Couto,

2000).

Ecografía:

La ecografía es muy útil para detectar patologías asociadas con la pancreatitis.

Mientras que el páncreas normal se visualiza en escasas ocasiones, el órgano

inflamado adquiere una mayor hipoecogenicidad. En presencia de la inflamación

grasa peripancreática, el perímetro del páncreas se vuelve hiperecogénico. La

inflamación del limbo derecho puede hacer que el duodeno aparezca engrosado.

Los pseudoquistes y abscesos pancreáticos anecoicos y la ascitis pancreática

también pueden detectarse con la ecografía. La superposición de las asas

intestinales distendidas constituye la principal limitación de esta técnica (Schaer,

2006).

Según Saunders et al. (2002), otros posibles hallazgos ecográficos son derrame

abdominal, aumento del tamaño del páncreas, hepatomegalia, lesiones cavitarias

del páncreas (pseudoquistes) y calcificacion del páncreas.

Figura 3. Páncreas hipoecogénico rodeado

por mesos ligeramente hiperecogénicos en

un gato con pancreatitis. (Diez-bru et al., 2008).

Page 19: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

14

DETERMINACIONES ESPECIALES.

Inmunorreactividad de la Lipasa Pancreática (PLI):

La lipasa pancreática inmunoreactiva, es la prueba que se considera más precisa

para el diagnóstico de esta patología en felinos, en contraposición con tripsina like.

Permite medir de manera específica la concentración sérica de lipasa pancreática

felina. Ésta es la principal ventaja de la prueba con respecto a las tradicionales; las

cuales miden de manera indiscriminada la actividad de lipasa de cualquier origen

(pancreático, gástrico, duodenal), por lo tanto tienen baja especificidad para la

enfermedad pancreática en comparación con la PLI (Saunders et al., 2002).

PANEL A PANEL B

Figura 4. Prueba SNAP cPL ®. Panel A; una mancha (derecha) de color más

claro que la mancha control (izquierda) indica una concentración sérica de

Spec cPL en el intervalo de control y sugiere que la pancreatitis es

improbable. Panel B; una mancha problema de color más oscuro que la

Page 20: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

15

mancha control indica una concentración sérica de Spec cPL por encima del

intervalo de control y puede haber pancreatitis (Steiner, 2010).

ANATOMÍA PATOLÓGICA MACROSCÓPICA E HISTOPATOLOGÍA.

La visualización macroscópica del páncreas (durante laparotomía exploratoria,

laparoscopia o necropsia) podría proporcionar evidencias de enfermedad pancreá-

tica exócrina en algunos casos. No siempre se observan lesiones pancreáticas

macroscópicas sugerentes de pancreatitis en gatos con esta enfermedad, en

especial en casos leves. Aunque estas lesiones no se han definido en el gato,

pueden consistir en necrosis de la grasa peripancreática, hemorragia y congestión

pancreática y una superficie capsular granular opaca (Figura 5). Sólo puede

hacerse un diagnóstico definitivo de pancreatitis, así como diferenciar la

pancreatitis aguda de la crónica, mediante un examen histopatológico del tejido

pancreático. Sin embargo, la histopatología pancreática no se realiza

habitualmente en la práctica clínica porque exige procedimientos invasivos que

son caros y potencialmente peligrosos en gatos hemodinámicamente inestables.

Además, las lesiones inflamatorias del páncreas suelen estar localizadas y es fácil

que pasen desapercibidas en la histopatología, en especial cuando sólo se ha

examinado una sección del páncreas (Xenoullis y Steiner, 2009).

Page 21: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

16

Figura 5. Aspecto macroscópico del páncreas de un gato con pancreatitis aguda durante una necropsia. El páncreas (flecha blanca) aparece necrótico y edematoso. La inflamación parece extenderse al duodeno, que también aparece edematoso y congestionado (flecha punteada) y al mesenterio peripancreático (necrosis de la grasa peripancreática; flecha negra). Estos cambios macroscópicos son muy sugestivos de pancreatitis (Xenoulis y Steiner, 2009).

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL.

El diagnóstico diferencial por lo usual se centra en los problemas de letargia,

anorexia, pérdida ponderal y vómitos.

Cuando se presenta el vómito se lo aborda buscando manifestaciones localizantes

como dolor, o masas abdominales, y descartando procesos infecciosos,

parasitarios y metabólicos. El hipertiroidismo debe ser descartado en los gatos

gerontes mediante la concentración sérica de T4 (tiroxina) total.

La aproximación al diagnóstico de la ictericia primero es la exclusión de etiología

prehepáticas, y luego la indagación de los causales hepáticos y poshepáticos. La

asociación de la pancreatitis aguda y lipidosis hepática con incremento de la

Page 22: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

17

mortalidad y la colangiohepatitis fueron demostrados en algunos estudios. Un

elevado índice de sospecha debe ser adoptado para la pancreatitis con los gatos

con enfermedad hepática o biliar.

La pancreatitis puede ser la causa de diabetes mellitus, en algunos gatos, pero la

verdadera asociación entre estas enfermedades es poco clara (August, 2007).

TRATAMIENTO.

Se desconocen las causas específicas de pancreatitis, y el tratamiento es

básicamente de apoyo, es decir, para mantener los gatos estables y aliviar los

signos clínicos.

Los objetivos del tratamiento son:

- Corregir la deshidratación y anomalías de los electrolitos.

- Aliviar el dolor.

- Control de vómitos.

- Proporcionar apoyo nutricional.

- Prevenir las complicaciones.

Corregir la deshidratación y anomalías de los electrolitos.

La deshidratación y los desequilibrios de electrolitos son comunes en gatos con

pancreatitis y es esencial un tratamiento de apoyo. Los gatos con pancreatitis

necesitarán fluidoterapia para mantener la hidratación adecuada. Puede

administrarse por vía subcutánea o vía endovenosa.

El objetivo principal es asegurar que el páncreas está siendo adecuadamente

perfundido. Inicialmente, los líquidos deben corregir la deshidratación durante las

primeras 12-24 hs y también satisfacer las necesidades de mantenimiento y

sustituir las continuas pérdidas de líquidos por vómitos, diarrea y pérdidas del

tercer espacio (por ejemplo, derrames peritoneales secundarios a pancreatitis).

Page 23: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

18

Aliviar el dolor

Los analgésicos son fundamentales porque un gato con dolor no va a comer, y el

gato necesita mantener la ingesta calórica para ayudar con la curación así como

para evitar una lipidosis hepática que puede ocurrir como consecuencia de una

ingesta calórica inadecuada.

El manejo del dolor es uno de los aspectos más importantes del tratamiento de la

pancreatitis. Puede utilizarse buprenorfina u otros analgésicos de prescripción

para ayudar a reducir el dolor. La buprenorfina (0,02-0,03 mg/kg cada 6h EV, IM,

SC o PO) es un narcótico que ha demostrado conseguir un control excelente del

dolor en gatos. Es el tratamiento del dolor de primera línea más habitual para la

pancreatitis aguda.

Los gatos con pancreatitis aguda o crónica también pueden beneficiarse de

tratamiento del dolor, y las opciones para pacientes ingresados o ambulatorios

incluyen el parche de fentanilo, buprenorfina sublingual o parenteral, butorfanol

parenteral (0,2-0,5 mg/kg cada 6-12h EV, IM o SC) o tramadol (2-4 mg/kg cada 8h

PO).

Control de vómitos

El maropitant (1 mg/kg cada 24 horas SC, EV o PO) es un nuevo medicamento

que se ha convertido rápidamente en la primera línea de defensa para náuseas y

vómitos en gatos. Actúa sobre los receptores de neuroquinina (NK) en el centro

del vómito. Este fármaco no sólo reduce las náuseas y los vómitos, sino que

también tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

La metoclopramida (0,25 -0,5 mg/kg cada 8-12 hs EV, IM, SC O PO; 1-2 mg/kg

PVC 24 hs) es un antagonista de la dopamina e inhibe los vómitos bloqueando los

receptores de la dopamina del sistema nervioso central en la zona gatillo de los

quimiorreceptores.

Page 24: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

19

El ondansetrón (0,5 mg/kg EV más 0,5 mg/kg/h durante PVC 6hs) actúa sobre los

receptores 5-HT3 de serotonina en la zona gatillo de los quimiorreceptores y

también es muy eficaz en gatos.

El omeprazol (0,75- 1 mg/kg cada 24 hs PO) o la ranitidina (0,5 -1 mg/kg cada 24

hs PO) reducen la secreción gástrica ácida en el estómago, lo que podría ayudar a

un gato que padezca de náuseas.

Proporcionar apoyo nutricional

El manejo nutricional de los gatos con pancreatitis sigue siendo un reto. La

elección de un soporte nutricional enteral frente a uno parenteral, durante la

pancreatitis aguda en gatos suele ser beneficiosa y bien tolerada.

El gato puede alimentarse con una dieta blanda, fácilmente digerible y baja en

contenido graso. Si tiene demasiadas náuseas para comer, y especialmente para

gatos con pérdida del apetito, puede ser necesario utilizar la alimentación por

sonda, bien por sonda nasogástrica, nasoesofágica, esofagostomía, gastrostomía

o yeyunostomía, para proporcionar una nutrición adecuada.

Si el gato está vomitando, debe suspenderse la alimentación, pero idealmente no

por más de 48 horas por que puede presentarse una lipidosis hepática (Roura,

2015).

Prevenir las complicaciones

Aunque las bacterias no cumplen un papel primario en la pancreatitis aguda, el

páncreas necrosado es un excelente medio para la proliferación microbiana

(Nelson y Couto, 2000).

Los antibióticos que podrían utilizarse incluyen amoxicilina, enrofloxacina,

amoxicilina/ácido clavulánico, metronidazol, clindamicina o doxiciclina.

La cobalamina (vitamina B12) es una vitamina hidrosoluble que es absorbida en el

ileon. Puede observarse una reducción de las concentraciones de cobalamina

sérica en gatos con enfermedades gastrointestinales como enfermedad

Page 25: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

20

inflamatoria intestinal. Es común que los gatos con pancreatitis tengan

simultáneamente una enfermedad gastrointestinal, por lo que podría ser adecuado

el uso semanal de vitamina B12 en una dosis de 0,25 mg/inyección durante 6

semanas (Roura, 2015).

Terapia con glucocorticoides

Es común que los gatos con pancreatitis padezcan otras patologías concurrentes.

El término “triaditis” hace referencia a colangitis, enfermedad inflamatoria intestinal

y pancreatitis. Por lo tanto, el tratamiento con dosis antiinflamatorias de

prednisona, prednisolona o dexametasona no está contraindicado en gatos y

puede ser efectivo (Laboratorios Iddex, 2011).

PRONÓSTICO.

El pronóstico de la pancreatitis en gatos, depende de la gravedad del proceso

inflamatorio, las complicaciones sistémicas y pancreáticas, y la presencia de otras

enfermedades como colangiohepatitis, enteritis, diabetes mellitus (Ettinger y

Feldman, 2007).

Siempre debe ser considerada una enfermedad crítica, de pronóstico entre

reservado a grave (Minovich y Paludi, 2011). En la mayoría de los casos, si la

pancreatitis es leve, las posibilidades de recuperación son buenas. En otros casos,

lo que parece ser un caso leve puede progresar, o puede tratarse de forma

satisfactoria de modo que solo haya recurrencias, a veces graves. Si hay otras

enfermedades concurrentes tales como diabetes mellitus, enfermedad hepática o

enfermedad inflamatoria intestinal, el pronóstico es más reservado.

La pancreatitis aguda puede causar la destrucción de una gran cantidad de tejido

pancreático. La cantidad de tejido afectado puede determinar lo que suceda a

Page 26: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

21

continuación. Algunas de las consecuencias más comunes son: pancreatitis

crónica, diabetes tipo I e insuficiencia pancreática (Roura, 2015).

Page 27: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

22

DESCRIPCIÓN DE UN CASO CLÍNICO DE PANCREATITIS AGUDA

EN UN FELINO.

RESEÑA DEL ANIMAL:

ESPECIE: felino.

RAZA: Siamés.

SEXO: macho, castrado.

EDAD: 5 años.

PESO: 3,700 kg.

MOTIVO DE LA CONSULTA:

14/04/2016:

ANAMNESIS:

Llega a consulta un gato Siamés. Su dueña comenta que estuvo con vómitos, y

que no come hace dos días. Lo notan decaído, y se aísla de la familia,

comportamiento que no es habitual en él.

SEMIOLOGÍA CLÍNICA:

INSPECCIÓN GENERAL:

En la consulta se nota que el animal está decaído y letárgico. La condición

corporal del mismo es mala.

INSPECCIÓN PARTICULAR:

Las mucosas se observan levemente ictéricas y el pliegue cutáneo está retrasado

(mayor a 3 segundos).Se realiza un análisis rápido de orina que determina alta

densidad y cristaluria.

PALPACIÓN:

Page 28: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

23

Se percibe contracción de la pared abdominal como respuesta dolorosa a la

misma.

PERCUSIÓN:

A la percusión torácica se percibe un tono mate.

AUSCULTACIÓN TORÁCICA:

Se auscultan sonidos pulmonares levemente disminuidos.

FRECUENCIA CARDÍACA:

Normal: 120 latidos por minuto.

FRECUENCIA RESPIRATORIA:

Aumentada: 60 movimientos por minuto.

TEMPERATURA:

Levemente disminuida. 37,5 °C.

Se extrae sangre para perfil general básico y glucemia, arrojando los siguientes

resultados:

HEMOGRAMA

Análisis Valores Valores de referencia

Hematocrito 32% 28-45%

Glóbulos rojos 6.400.000/mm³ 5.000.000-

10.000.000/mm³

Hemoglobina 10,5 g % 8-16 g %

INDICES HEMATIMÉTRICOS

Volumen Corpuscular

Medio 50 fl 39-58 fl

Page 29: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

24

Conc.Hemoglob.

Corp.Media 32.80 g/dl 31-35 g/dl

Observaciones: Plasma ictérico.

RECUENTO LEUCOCITARIO

Análisis Valores Valores Valores de

referencia.

Recuento leucocitario 26.000/mm³ 5.500-

19.000/mm³

Neutrófilossegmentados 60% 15.600/mm³ 2.500-

12.500/mm³

Neutrófilos en banda 26% 6.700/mm³ 0-300/mm³

Linfocitos 1% 260/mm³ 1.500-

7.000/mm³

Monocitos 9% 2.340/mm³ 0-850/mm³

Eosinófilos - - 100-1000/mm³

Formas juveniles: 4 metamielocitos.

Observaciones: Leucocitosis. Neutrofilia con desvío a la izquierda regenerativo.

Linfopenia. Monocitosis.

BIOQUÍMICA SANGUÍNEA

Page 30: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

25

Análisis Valores Valores de referencia

Urea 48 mg/dl 30-60 mg/dl

Creatinina 1,06 mg/dl h/1.5 mg/dl

Glucosa 88 mg/dl 70 -110 mg/dl

GPT 53UI/I h/40 UI/I

GOT 24 UI/I h/40 UI/I

FAS 70 UI/I h/150 UI/I

Observaciones: Suero ictérico.

El paciente queda internado por el día, ya que hace varios días que no come y por

el estado de deshidratación en el que se encuentra. Los resultados de laboratorio

son inespecíficos. Por lo tanto se procede a una terapia de sostén:

Hidratación endovenosa (solución ClNa),

Tramadol 1-2 mg/kg (EV),

Dexametasona 0,1-0,5 mg/kg(EV),

Ácido tióctico 1ml/10kg (EV) ,

Enrofloxacina 5mg/kg (EV),

Ondansetrón 0.1-0.15 mg/kg (EV),

Ranitidina 1 ml/10kg (EV).

Al final del día el paciente regresa a su casa, y al día siguiente debe volver a la

clínica para ver como fue la evolución del mismo.

15/04/2016:

En la consulta, el animal sigue decaído y las mucosas están levemente ictéricas.

La dueña comenta que volvió a vomitar. Vuelve a quedar internado por el día, con

hidratación endovenosa y se repite la medicación. Si no hay una evolución

Page 31: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

26

favorable en el transcurso del día, se indica la realización de una ecografía

abdominal y se toma muestra para el test de pancreatitis.

16/04/2016:

El paciente vuelve a control, sigue con decaimiento, pero ya no vomita más. Se

toma muestra para realizar el test de pancreatitis, Lipasa inmunoreactiva, cuyo

resultado es positivo.

Se realiza la ecografía abdominal.

INFORME ECOGRÁFICO: se observa hipoecogenicidad del parénquima

pancreático y aumento del tamaño del mismo. Mesos hiperecogénicos.

Imagen sugerente de colecta pleural, por lo tanto la doctora solicita

ecocardiografía y placa de tórax.

De acuerdo a los siguientes resultados, el diagnóstico se basa en una pancreatitis

aguda. Se continúa con el tratamiento ambulatorio, nuestro paciente ingresa a la

mañana y se retira a la noche. Durante el día se le administra la medicación

correspondiente y se lo hidrata de manera endovenosa.

El tratamiento consiste en:

Hidratación endovenosa (solución ClNa),

Tramadol 1-2 mg/kg (EV),

Dexametasona 0,1-0,5 mg/kg(EV),

Ácido tióctico 1ml/10kg (EV) ,

Enrofloxacina 5mg/kg (EV),

Ranitidina 1 ml/10kg (EV).

17/04/2016:

El paciente vuelve a consulta, está mejor de ánimo y más integrado. Pero no tiene

apetito. Queda internado nuevamente hasta la noche y se repite el tratamiento.

Page 32: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

27

18/04/2016:

La dueña comenta que durante el transcurso de la noche, el gato presentaba

dificultad para respirar. En la revisación clínica, nuestro paciente presenta

respiración taquipneica, su frecuencia respiratoria es de 60 movimientos por

minuto. A la auscultación torácica los sonidos pulmonares están levemente

disminuidos.

El paciente queda internado y se hacen los estudios complementarios solicitados.

Los resultados son los siguientes:

ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL: atriograma y ventriculograma

conservados. Función sistólica conservada. Efusión pleural 4mm en

contacto con cintura cardíaca y de 20 mm en espacio cardio-frénico.

Se realiza una radiografía de tórax, que confirma la colecta pleural.

Figura 4. En la placa de rayos x (incidencia latero-lateral), se puede apreciar la

pérdida de la silueta cardíaca y el colapso de los lóbulos pulmonares.

Terapeútica: Se indica furosemida 25 mg (comprimido). Administrar ¼ comprimido

cada 12 hs por cinco días.

Se repite el tratamiento:

Hidratación endovenosa (ClNa),

Page 33: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

28

Dexametasona 0,1-0,5 mg/kg (EV) ,

Enrofloxacina 5mg/kg (EV),

Tramadol 1-2 mg/kg (EV),

VIT. B 1-5 ml (EV).

19/04/2016:

Vuelve a consulta y la dueña comenta que lo sigue viendo decaído y que no come,

por lo tanto ella le da ENSURE® con jeringa vía oral. Continúa internado de

manera ambulatoria y se repite el tratamiento. Y se le da de comer con jeringa

cada seis horas. Nuestro paciente a la noche regresa a su casa.

20/04/2016:

Viene a control, se lo ve mejor, está más atento. La dueña comenta que comió

solo. Se aplica:

Enrofloxacina (SC) 5mg/kg,

Triamcinolona 0,11 a 0,22 mg/kg (SC),

Tramadol 1-2mg/kg (SC),

Ranitidina 1ml/10kg (SC),

Ácido tióctico 1 ml/10kg (SC).

Nuestro paciente regresa a su casa. La dueña debe continuar con la

administración de furosemida, y debe controlar que se alimente.

Si el paciente sigue evolucionando favorablemente, debe volver a control en 48 hs.

22/04/2016:

Ciro vuelve a consulta, se lo ve más animado. No demuestra dificultad respiratoria,

come por sus propios medios. En la revisación clínica las mucosas se observan

rosadas y la retracción del pliegue cutáneo es menor a 3 segundos. Se repite la

medicación y continúa tomando furosemida.

Page 34: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

29

26/04/2016:

El paciente regresa a control. Su dueña comenta que come por sí solo, no tiene

dificultad para respirar. Y recuperó su estado de ánimo habitual. Se repite la

radiografía de tórax, la cual demuestra la ausencia de efusión pleural.

El doctor Paludi procede a darle el alta médica a nuestro paciente.

EVOLUCIÓN.

A pesar de las recaídas que presentó el paciente, la evolución fue favorable. En el

lapso de 12 días, se recuperó debido al tratamiento intensivo que recibió el animal.

DISCUSIÓN.

Considerada antes como poco frecuente, la pancreatitis ha surgido recientemente

como una enfermedad común e importante desde el punto de vista clínico en los

gatos. Es con gran diferencia el trastorno más frecuente del páncreas exócrino en

el gato y se cree que induce una morbilidad y mortalidad significativas si no se

controla de manera adecuada. (Steiner y Xenoulis, 2009).

Se cree que los felinos son susceptibles de padecer pancreatitis debido a que el

conducto biliar y pancreático terminal común son un factor predisponente para el

desarrollo de la misma al permitir el reflujo de bilis dentro del páncreas. (August,

2007).

El caso reportado en el presente trabajo ocurre en un gato Siamés, macho,

castrado, de 5 años de edad. Lo llevan a consulta porque lo notan decaído,

inapetente y con vómitos. Se procede a realizar una anamnesis completa y

revisación clínica del paciente. En la primera consulta, el paciente mostró dolor

abdominal, y se encontraba decaído y deshidratado, por lo cual se decidió extraer

sangre para realizar hemograma y bioquímica sérica, pero estos resultados fueron

Page 35: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

30

inespecíficos. En el hemograma se aprecia leucocitosis, neutrofilia con desvío a la

izquierda regenerativo, linfopenia y monocitosis. La única observación en cuanto al

análisis de bioquímica sérica, es el suero ictérico. Estos datos son acordes a los

planteados por los autores Nelson y Couto (2000), Schaer (2006) y Minovich y

Paludi (2001).

En base a la anamnesis, revisación clínica y los análisis de laboratorio, se inicia un

tratamiento paliativo para luego proceder con el diagnóstico. Como el animal no

evoluciona como lo esperado, se realiza una ecografía. En el informe ecográfico

se observa el páncreas hipoecogénico rodeado por mesos ligeramente

hiperecogénicos y se sugiere la colecta pleural. A continuación se extrae una

muestra para test de pancreatitis, lipasa inmunoreactiva, cuyo resultado es

positivo (Saunders et al., 2002; Schaer, 2006; August, 2007).

Con estos resultados, se inicia un tratamiento intensivo específico para

pancreatitis aguda orientado a corregir la deshidratación y anomalías de los

electrolitos, aliviar el dolor, controlar los vómitos, proporcionar apoyo nutricional y

prevenir las complicaciones (Roura, 2015; Nelson y Couto, 2000).

El animal no evoluciona como lo esperado, y vuelve a consulta con dificultad

respiratoria y taquipnea. Se indica la realización de un electro y ecocardiograma, y

se realiza una radiografía de tórax. Estos estudios confirman la efusión pleural

(Méndez et al., 2006). A partir de esta corroboración se continúa con el tratamiento

anteriormente planteado y se agrega al plan terapéutico un diurético (furosemida)

en comprimidos para aliviar el acúmulo de líquido en pleura y por lo tanto mejorar

la dificultad respiratoria.

Si bien el diagnóstico es difícil, ya que los signos son inespecíficos, éste se basa

en evidencias que orientan al clínico a sospechar de la enfermedad, teniendo en

cuenta los signos, la anamnesis, y el diagnóstico por imágenes (radiografías,

ultrasonografía). (Ettinger y Feldman, 2007).

Page 36: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

31

Lo importante a destacar en este caso de pancreatitis aguda, es la dificultad

respiratoria que presentaba el paciente debido a la efusión pleural que se pudo

confirmar con el ecocardiograma y la radiografía de tórax (Steiner y Xenoulis,

2009; Nelson y Couto, 2000).

Page 37: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

32

CONCLUSIÓN.

La pancreatitis aguda ha surgido recientemente como una patología importante

desde el punto de vista clínico en los felinos, a pesar de que su diagnóstico es

difícil debido a que los datos del examen físico y los de laboratorio son

inespecíficos. Dentro de esta problemática es importante incorporar al diagnóstico,

la ultrasonografía y el test de lipasa inmunoreactiva como métodos de diagnóstico

complementarios.

En este caso clínico, fue de suma importancia agregar como métodos de

diagnóstico la radiografía de tórax y el ecocardiograma para confirmar la efusión

pleural en nuestro paciente, que originaba la dificultad respiratoria del mismo.

Esta efusión pleural fue lo más llamativo del caso, la cual según ciertos autores es

producto de las enzimas pancreáticas y mediadores inflamatorios liberadas a

distancia sobre la pleura y la vasculatura.

Page 38: “PANCREATITIS AGUDA FELINA

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