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Parte II clic

Parte II clic A todas las bestias de los campos abrevan; en ellas, su sed apagan los onagros

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Parte II

clic

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A todas las bestias de los campos

abrevan; en ellas,

su sed apagan los onagros.

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Sobre ellas habitan las

aves de los cielos,

que dejan oír su voz entre la fronda.

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De tus altas moradas abrevas las montañas, del fruto de tus

obras se satura la tierra; la hierba haces brotar para el ganado; y las plantas, para

el uso del hombre.

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Se empapan bien los árboles de Yahveh,

los cedros del Líbano que él plantó.

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Para que saque de la tierra el pan,Para que saque de la tierra el pan,y el vino que recrea el corazón del hombre,y el vino que recrea el corazón del hombre,

para que lustre su rostro con aceitepara que lustre su rostro con aceitey el pan conforte su corazón.y el pan conforte su corazón.

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Allí ponen los pájaros su nido; su casa, en su copa, la cigüeña.

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Los altos montes son para

los rebecos; para los damanes,

el cobijo de las rocas.

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Hizo la luna

para marcar los tiempos,

conocer el sol su ocaso.

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… en ella rebullen todos los animales

de la selva.

Mandas tú las tinieblas, y es la noche …

Continúa en “Esplendores de la Creación” Parte III