México, D.F., 22 de junio de 2011.

Versión estenográfica de la participación de la maestra Elba Esther Gordillo, Presidenta del CEN del SNTE en el marco del 5º Congreso Nacional de Educación y el 3er Encuentro Nacional de Padres de Familia y Maestros que se llevó a cabo en el Centro Cultural del México Contemporáneo del SNTE.

Muy buenos días, compañeras, compañeros, personalidades que nos honran con su siempre grata y estimulante presencia; señores empresarios; señores intelectuales; diputados; senadores; dirigentes de las secciones; muy particularmente, muy buenos días señor Secretario General del Sindicato, profesor Juan Díaz y su Comité Ejecutivo Nacional. Es hoy un día muy especial para todos nosotros, para el sindicato, y no tengo la menor duda que para todos

y cada uno de aquellos ciudadanos interesados y comprometidos con el que logremos la excelencia educativa, en todos sus niveles y en todas y cada una de sus exigencias. Para el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación es un gran honor, pero amén del honor y de la cortesía que como maestros, que como ciudadanos debemos, quisiéramos decir que nos sentimos muy contentos del acercamiento que esta organización ha logrado tener con un grupo de la sociedad muy interesada por la educación, pero no sólo desde la perspectiva crítica, que lo ha sido, que lo es y

qué bueno, que nos ha cuestionado en algunos momentos y que ha sido para bien; algunas veces no hemos coincidido y lo más probable es que en muchas otras logremos acuerdos y haya diferencias, indiscutiblemente. Pero lo que hay que reconocer es que ―Mexicanos Primero‖ sí tiene un serio compromiso con la educación pública de México. Lo reconocemos los maestros, lo reconocemos y lo reconoce, no tengo la menor duda, la sociedad. Y no sólo eso,

agradecemos lo que ―Mexicanos Primero‖ y la Fundación realiza en invertir recursos que la ciudadanía, a través de una enorme promoción que realizan, logran que muchos de nuestros compañeros maestros se preparen, se capaciten, se actualicen, tanto a nivel nacional como internacional, y no es solo eso, también con nuestros chiquillos, nuestros niños de primaria, de secundaria han tenido el beneficio a través de un programa que tienen que se llama ―Bécalos‖, al que le agradecemos ese apoyo por la educación. Pero hoy esta mañana para hablarnos desde una posición crítica, propositiva, amistosa, porque es nuestro amigo y espero así lo sienta y se sienta en casa, nos acompaña el doctor Claudio X. González. Muchas veces, ustedes lo han escuchado, lo hemos analizado y yo le quiero decir, Claudio, que en lo personal agradezco la oportunidad de que tengamos un diálogo de tú a tú, no sin falta de respeto, todo lo contrario, pero que nos haya permitido acercarnos cada día más y más, yo no tengo rubor en decir que en muchas de las propuestas que hemos hecho hemos tenido coincidencias con ellos, han avalado algunas cosas que hemos propuesto, otras las han criticado, pero siempre hemos ido en un ánimo constructivo. Aquí están muchos de sus colaboradores a los que les agradecemos esa contribución y a los miembros del Comité Nacional que han estado trabajado. Y muy particularmente muy bienvenida señora Claudia Caraza, su presencia nos honra, es la compañera de vida del doctor Claudio X. González.

Creo, más bien estoy convencida que todos y cada uno de nosotros los que estamos en este bello lugar y quien a través de internet y el sistema de comunicación que hemos establecido con todas nuestras secciones, y no dudo estando aquí los señores Secretarios de Educación en los estados, coincidimos en lo que dijera el doctor Claudio X. de que traería datos duros, diríamos veraces, que sacuden conciencias, que invitan a reflexiones y que demuestran que la educación, como hace muchísimos años dijera el Sindicato, es tarea de todos. Yo quisiera, si se me permite, comentar brevemente que me siento muy, muy estimulada por su participación, muy convocada, muy comprometida y también muy obligada a comentar con ustedes que cuando estábamos viendo lo de evaluación universal, cuando estábamos reflexionando sobre la evaluación de carrera, cuando de maneras muy diferentes plantear a Mexicanos Primero la demanda por tener el registro o el directorio de todos los trabajadores de la educación, también a nosotros nos sorprendió, porque es increíble que ni el propio Sindicato los tenga. Y hay que hacernos autocrítica. Cuando uno se hace autocrítica no se trata de autoflagelarse o destruirse, sino simple y llanamente hacer un alto para una reflexión y corregir las cosas. También nos han dicho que quieren saber cuántos comisionados están en el SNTE, y yo he adquirido un compromiso que lo manifiesto claramente, a reserva de algunas posiciones que es equis, zeta, ye, de que hice un compromiso con Mexicanos Primero de entregarles los comisionados por sección y los que están en el Comité Ejecutivo

Nacional. Aquí están varios secretarios de educación en los estados que nos acompañan, y rogaríamos que también hiciéramos lo propio para poder transparentar, como bien se dijera aquí, en dónde están y cómo están. Sabemos que hay muchos maestros que aparecen comisionados por el SNTE, que no es así; están comisionados en desempeños de actividades académicas, muchas veces en las propias direcciones de educación, y a veces no sabemos dónde. Sí es necesario rendición de cuentas. Tengo algunas, no discrepancias, sino algunas cuestiones que me gustarían manifestarlas. Una: primero, en el mundo no todos los sistemas educativos son lo mismo, México, Francia, por ejemplo veía que en una de las páginas que nos mostraron, están varios países pero no aparece Francia, Francia se caracteriza por tener un sistema educativo público, nacional, educativo, y si comparamos el sistema educativo con el de Estados Unidos, veremos que en Estados Unidos el sistema está totalmente descentralizado y que mucho del financiamiento del tema educativo está allá, por los propios ciudadanos, y es en los consejos educativos donde se define.

Por lo tanto, si bien es cierto que el presupuesto de educación en nuestro país en este momento para mí no es satisfactorio, pero sí es importante, la interrogante no está específicamente en cuánto se invierte, sino cómo se invierte y la transferencia de dónde van los recursos. Yo sí solicitaría que ahí hiciéramos un alto y revisáramos, en verdad los presupuestos estatales, ¿el propio presupuesto nacional está sujeto a una

transparencia en su aplicación de que va específicamente al sector educativo? O algunas veces va a otros menesteres, no necesariamente ilícitos, pero a otras partes de gobierno, como plazas públicas, carreteras, o a solucionar la nómina de tal o cual cuestión, y el cargo se le hace al presupuesto. Es cierto que no todo es dinero, pero también es cierto y estoy de acuerdo, que la prueba PISA no es algo que nos debe asustar, al contrario, es algo que debemos asumir, y que no es nuestra enemiga. Lo único que decimos es, y usted lo planteó muy bien, doctor, que en

un país de tanta inequidad, lo primero que tenemos que partir es el problema es la equidad, en un país de tanta injusticia, el proceso educativo pasa por la distribución del ingreso. Tenemos niños que no tienen una alimentación apropiada, tenemos niños con altos niveles de violencia intrafamiliar, hay problemas de salud en nuestros educandos, y aún tenemos problemáticas serias de la infraestructura escolar, aún tenemos problemas graves, escuelas donde todavía no hay sanitarios, no hay agua, y hay cuestiones elementales que urge resolver. Pero usted dijera algo que a mí me llamó muchísimo la atención y me interesa de fondo, no sólo como maestra, como mujer, como ciudadana, sino como dirigente de este gran gremio, y que le quiero reconocer: nos satisface, doctor, se lo agradecemos, porque no es hostigando al SNTE ni a los maestros como vamos a avanzar, es con la corresponsabilidad de todos, y aceptando el que dar dignidad social, reconocimiento social, particularmente a los maestros, es como podemos realmente hacer que se tome conciencia, y todos nos esforcemos por ser mejores. Pero el planteamiento que muchas veces nos hemos hecho todos, y reflexionamos todos es: ¿por qué el atraso de nuestro sistema educativo público? Porque la educación es el todo, el sistema educativo. ¿Por qué hoy en el siglo XXI, que sabíamos que venía, por qué ante el Tratado de Libre Comercio, que sabíamos que también nos iba a obligar en el ámbito de la competitividad de orden económico, no nos actualizamos y no nos preparamos? Se nos planteó que el federalismo educativo era la solución, se cuestionó mucho a este gremio de que tuviera objeciones para el federalismo educativo. Lo discutimos y lo analizamos y definimos objetivos muy claros del federalismo, pero aún no hemos evaluado en materia de calidad educativa los resultados del propio federalismo. Entonces, yo sí quisiera decir algo, que creo no puedo soslayar: hemos tenido gobiernos que no han tenido como prioridad de Estado a la educación y esto es dramático. Si los gobiernos, que son los responsables, institucionalmente hablando, y hablo clarito, si la Secretaría de Educación Pública no

asume el rol que la exigencia de la era del conocimiento, de la convivencia armónica, cordial, del desarrollo pleno y armónico de cada individuo y de las sociedades en un mundo de globalidad, donde la competencia, pero también el individualismo, donde la carencia de valores, donde la falta de cultura en el más amplio y estricto sentido del arte, de la música, no complementa nuestro sistema educativo, estamos mal. El cambio estructural tiene que pasar necesariamente por ese lado. Y quiero aclarar, no es una crítica a nadie en lo personal, sino ha llegado el momento de que los gobiernos, del color que sea, tomen conciencia que la educación tiene que ser una prioridad nacional y convertirla en eso, en política de Estado, que hasta hoy no se ha dado. Nos debemos congraciar que seamos los ciudadanos, porque el SNTE también está formado por ciudadanos; que seamos los ciudadanos, ―Mexicanos Primero‖ desde su trinchera, ―Únete‖ o tantos más grupos, aquí hace un momento se acaba de retirar por razones de compromisos el ingeniero Madero, pero también ha sido un hombre que se ha esforzado y se ha comprometido mucho en el tema educativo y con quien hemos hecho propuestas también muy concretas.

La organización está en el mejor ánimo y la disposición. Aquí está nuestros representantes de los padres de familia a nivel nacional. ¿Qué nos hace falta? ¿Qué realmente es lo que requerimos para resolver este asunto? Sí ya estamos dialogando, ya estamos hablando, pues que la autoridad nos convoque a todos,

a que cada uno asuma su compromiso de fondo y que impere más la política educativa que la política electoral.

En siempre, no hay dardo dirigido; hay objetividad y claridad en el planteamiento, y lo digo por las especulaciones que suelen darse cuando estos temas se tratan. Lo planteó usted bien: qué hacemos con tantas normales ya no patitos, con tantos monstruos de normales y con una demanda de más de casi 200 mil maestros por plaza y con una enorme incapacidad, primera, de darles empleo, pero lo más grave: cómo evaluamos si vienen bien formados o no. Hoy mismo, en un periódico, hay quienes se manifiestan porque no haya una evaluación para poder acceder a una plaza, pero antes cuestionaban la forma no muy, no transparente, la opacidad para designar las plazas. Hoy sale en un medio. ¿Qué hacemos? ¿No hay que hacer un cambio estructural de normales? ¡Basta! Y ese cambio estructural de normales, obviamente, va a traer problemas políticos. Pero esas son normales que ya no funcionan, que ya no hay, dinero, ya no hay empleo, ya no tenemos posibilidad de cobertura, ya no tenemos posibilidad de plazas para ese nivel. Pero la otra: ¿qué maestro queremos para el siglo XXI? ¿Qué ciudadano tenemos que formar en éste? ¿Con ese mismo método y esquema tradicional? No funciona. Y con eso coincidimos, lo hemos coincidido, requerimos un cambio estructural. Requerimos que los papás y las mamás estén más cerca de la escuela, sí. Nada más que hay un planteamiento, doctor: hoy la mamá tiene que salir a trabajar, el papá tiene que trabajar también y nuestros niños están sujetos no al abandono de sus papás, a la necesidad socioeconómica por esa inequidad de la que está siendo sujeto la gran mayoría de nuestro país. Ayer hablábamos de 40 millones de pobres, hoy hablamos de 47 millones. Crecen y crecen y crecen los pobres.

Y sale el papá y la mamá a buscar trabajo. ¿Qué debe ser la escuela? ¿No debiera ser la escuela el detonante social, no debiera ser eso que usted habló bien y lo ha dicho y lo hemos platicado, la escuela ser ese detonante social y para hacerlo tenemos que empoderar a la escuela, empoderar a los maestros, empoderar a los alumnos, empoderar a los papás para poder ver ahí los problemas cotidianos, eso sí sin perder la rectoría de una educación nacional perfectamente integrada, perfectamente estructurada en todos los niveles? Entonces, la exigencia es no sólo que tengamos escuelas con horarios ampliados, sino ya es una exigencia tener escuelas de tiempo completo. Reformar normales, escuelas de tiempo completo es fundamental para que no nos sucedan los asuntos dramáticos que usted también planteara bien. Esos chiquitos que por las necesidades de ir a adquirir los mínimos de bienestar material, se sienten abandonados en la calle, sujetos a programas de televisión que no siempre el niño tiene la capacidad de la definición que, y luego más hoy con el internet y toda esta cuestión que sabemos también interpela valores, también deforma, también puede deformar como puede construir, y usted lo dijo, no hay nada más como el acercamiento humano, el trato humano para lograr el desarrollo. Son más las cosas que nos unen que las que nos dividen. Algunos nos han querido poner a pelear, la lección que hoy estamos dando creo que es importante, este es el ejemplo que requerimos dar a muchos, la posibilidad de diálogo, la posibilidad de compartir. Yo quiero decirle, doctor, con toda gratitud, que le agradezco a nombre del sindicato el esfuerzo que hace con Bécalos para que los maestros puedan ser becados y puedan ir al extranjero. Ojalá a nivel nacional también la propia Secretaría de Educación viera que es importante buscar maestros que pudieran tener año sabático conforme a sus capacidades y que se lo hayan merecido, porque sólo así vamos a elevar la calidad de la educación. Quiero decirle que también tenemos que abatir y combatir las burocracias administrativas. Tenemos demasiada burocracia en las instancias de la administración de la educación y poca inteligencia

pedagógica, poco debate educativo, poco análisis de lo que se requiere y se debe hacer. Y lo dijo usted muy bien, queremos con líneas verticales pensar que todos los ciudadanos, todos los niños en un país pluricultural, pluriétnico, cosmogónico, con diferentes visiones se eduque de la misma manera. Quiero que sepa, hace muchos años el Sindicato –y sepa todo mundo- propusimos flexibilidad en el calendario escolar y en el horario. Hay niños que tienen que ir a ayudar a sus padres a la cosecha, a la pizca, a sembrar o a vender al mercado o a hacer muchas actividades no propias de su edad, pero que exige y que también les educa, porque les educa el que compartan otro tipo de actividades con sus padres; porque que en esos periodos dejan de ir a la escuela; usted habló de deserción escolar. ¿Por qué dejan de ir a la escuela? En algunos casos porque tienen que ir a ayudar a los padres. Ahí el Sindicato ha dicho que estamos dispuestos a flexibilizar el calendario, a que en donde haya requerimientos de ese tipo las vacaciones se den en razón a las necesidades de los educandos, no en razón de nuestras propias necesidades. Que no se haya hecho no es cuestión nuestra, es cuestión de que lo implemente a quien le compete o a quienes les compete. El otro asunto que hemos planteado es que cada entidad federativa debe saber su vocación productiva, si antes en Baja California Norte lo que les sustentaba era producir sorgo, y hoy estamos hablando de que hay más maquila, obviamente tenemos que capacitar y actualizar a nuestros muchachos para que tengan acceso a un empleo y tengan medios, oferta escolar para ir a sistemas ampliados de larga distancia o escuelas abiertas para asistir. Hemos dicho que no se vale tener las escuelas cerradas, ¿por qué no abrirlas el sábado y el domingo? Son los únicos espacios que tienen canchas, que tienen manera de que vayan a hacer deporte, a donde puedan ir los padres el día que no tienen clases, ir a darnos conferencias, a hablarle a los niños de lo que hacen, a los compañeritos de sus hijos a hablarles de lo que hacen. En fin, hay

mucho qué hacer, muchísimo qué hacer. Y no se trata aquí de ver quién es el bueno y quién es el malo, yo soy de las que creen que el ser humano tiene claros y tiene oscuros, lo importante es dónde está su compromiso. Quiero decirle gracias, amén de que estoy segura, usted aceptará un tiempo más para recibir algunas preguntas que muchas de las compañeras, de los compañeros, y muchos de los asistentes a este evento, probablemente quieran hacerle. Le quiero decir que nos sentimos muy contentos del acercamiento que hemos tenido con ―Mexicanos Primero‖, y que el que venga usted con esa serenidad, con esa convocación a encontrar soluciones, sin descalificaciones, con esa autoridad que da el estar haciendo por la escuela pública lo que muchos, perdóneme, de su clase, no lo hacen, lo hacen en razón de otro tipo de intereses, pero no lo hacen con esta vocación y este compromiso social, que no me avergüenza decirlo, sino me honra y me da mucho gusto. Es un gran gusto para el sindicato tenerlo, permítanos, como amigo, pero sobre todo, porque la amistad no siempre, en mi caso le tengo, pero no siempre hace que coincidamos en ideales, en objetivos, en sueños o en compromisos. Se acepta a cada quien cómo es. Gracias porque compartamos juntos estos ideales. Por parte del sindicato yo le garantizo a usted, a ―Mexicanos Primero‖, a todo, a la fundación que representa, que no vamos a fallar, y no vamos a fallar porque no es cosa de Elba Esther Gordillo, porque la educación, como usted lo había dicho, está ya a donde quería hace muchos años el sindicato que estuviera, a debate nacional, y lo están debatiendo los mejores y las mejores mexicanas de México, entre ellos, muy destacadamente es usted, doctor Claudio. Le agradecemos, y qué buen ejemplo que estén aquí sus hijos, permítanme decirles que

el buen maestro es el que da ejemplo en la familia. Muchas gracias, jóvenes por estar, señora. Y compañeros, si hubiera alguna pregunta, si las hay, les rogamos hacerlas llegar, porque el doctor está dispuesto a dar respuesta a ellas. Agradecemos muchísimo las preguntas que han hecho, ha sido de gran interés y hay algunas, que si me permite doctor, me gustaría también compartir con él y algunas inquietudes. Primero, tenemos que aceptar como maestros, como Sindicato, que mucha de la deserción escolar, de niños en la calle también es responsabilidad de nuestra escuela. Una escuela vertical, autoritaria hace que el niño no se sienta a gusto. Es una exigencia de una escuela democrática, participativa y activa; una escuela donde los niños también opinan sobre qué quieren de sus maestros, donde los padres tienen puertas abiertas para que juntos busquemos la solución a sus problemas de diferente índole, y una escuela donde el maestro tutele el bienestar de todos y cada uno de los niños. Eso es empoderar. ¿Qué queremos, cuál es el ideal para el sindicato, cuál es el ideal para la organización, para los maestros de México en razón del Siglo XXI en materia educativa? ¿Cuál es la diferencia entre el Siglo XX y el Siglo XXI? Muy sencilla, ayer educamos para la forja de hombres institucionales. Teníamos un sistema educativo memorizador, es decir, no educábamos, instruíamos. Hoy el reto es educar; como bien lo dijera el doctor, integralmente educar. Para ello mismo si ayer en el Siglo XX fue institución, la vida institucional para garantizar, obvio, no olvidemos qué sistema era, no olvidemos las características de ese México y que cumplió sus objetivos. Hoy el hilo filosófico más importante es una forja de ciudadanos, ciudadanos críticos, democráticos, tolerantes, productivos, pero como sabemos que ciudadanos es deberes y derechos, entenderemos que ahí el maestro tiene un factor medular, el ejemplo; y los dirigentes más por lo que representamos.

Una magnifica escuela, bueno, para el SNTE esa escuela es aquella que no sólo se dedica a despertar el interés por el conocimiento y no sólo promueve que nuestros niños en el aula participen más o en los espacios de la escuela; queremos una escuela que amplié sus muros y que haga de la comunidad la gran escuela nacional para construir un mejor país. Y no lo olviden, a mayor nivel profesional de los padres de familia nuestros niños también tienen otro nivel en su propia aula, donde los papás leen, donde los papás practican ciertas normas de valores, como bien lo dijo aquí el doctor, donde los papás no riñan, es decir, a mayor escolaridad de los padres menor dificultad para el proceso de enseñanza-aprendizaje, para la educación, pero también debemos aceptar que por la misma inequidad tenemos un nivel educativo de adultos, bastante, todavía bastante bajo, en términos de nuestros objetivos, y en ese sentido, amigas, amigos, creo que tenemos una enorme, enorme tarea todos, y la enorme tarea es, si los papás no saben, ayudémoslos, y para esto son los consejos de participación social, para que nos reunamos con ellos, les expliquemos, los estimulemos, y dejen de pensar que las escuelas son guarderías de niños, sino instituciones donde los requerimos para confluir y mejorar la educación de nuestros hijos. Y para finalizar, a mí me gustaría muchísimo plantear un asunto a todos los que aquí estamos. Decía el doctor Claudio X., el doctor Claudio, a nombre de Mexicanos Primero, que había que levantar la mira; yo diría a los maestros que tenemos un amplio, profundo sentido nacional, que sabemos que la educación pública es patrimonio del país, no de un gobierno, no de un grupo, menos nuestro, que tenemos la misión más importante, la vital, la de transformar esto, la de la rendición de cuentas, sí, la de valores, sí, la de la productividad, sí, la de la vida en armonía, sí, pero también la de la justicia.

Sólo hombres libres podremos alcanzar un mundo más justo y más equitativo, no sólo en el contexto de lo humano, sino de la vida, y por eso creo, compañeros, que hoy en el exhorto, porque así escuché que dijo, ―los exhorto‖, le decimos que no tenga la menor duda, que cual águilas, que es el símbolo de nuestra bandera, desplegaremos las alas, nos atreveremos a transitar por esos grandes y terribles retos, no son fáciles, vamos a tener detractores, por bien o por mal, por incomprensión, por

ignorancia, o de mala fe, no importa, eleven las alas, cual águilas fuertes, y forjemos la patria que queremos, ya no más lo que vemos, ya no más depresión, ya no más tristeza, vámonos alegres, contentos, hoy creo que hemos tenido una magnífica conferencia, hoy empecemos a desplegar esas alas que hace tiempo venimos mejorándolas, pero que hoy definamos que cual águilas transitemos por el mundo sin querer ser igual a los de Finlandia, a los de Corea, a los de China, a los de Chile o a los de Uruguay, simple y llanamente ser mexicanos de calidad, de dignidad, y universales, en igualdad de condiciones.

Muchas gracias.

--o— Maestra Elba Esther Gordillo Morales

Presidenta Nacional del SNTE

Reeditado para la página de la Sección 27 del SNTE

Srio. Gral. Jaime Quiñonez Muñoz

Colegiado de Formación Sindical MEB Yolanda Gpe. Zatarain Osuna