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PROBLEMAS DE

RENDIMIENTO Y FRACASO

ESCOLAR

Hablamos de problemas de rendimiento o fracaso escolar cuando el estudiante concluye una determinada etapa en la escuela con calificaciones no satisfactorias, lo que se traduce en la no culminación de la enseñanza obligatoria. La realidad educativa no se puede desligar de su componente humano, ya que en la planificación de la enseñanza

se debe tener en cuenta que existen seres humanos diferentes. Por ello, nos podemos encontrar con una gran diversidad de perfiles:

o Niños sin recursos para manejar sus capacidades en su totalidad. o Niños con aprendizaje lento o Niños con problemas emocionales de base que secundariamente generan dificultades

de aprendizaje o Niños con bajas capacidades cognitivas o Niños con severos problemas atencionales

Una inadecuada detección a tiempo puede desencadenar un bajo rendimiento escolar

y consecuencias psicológicas importantes. Las malas calificaciones recibidas por un alumno de manera continua independientemente de motivo (a excepción del pasotismo) tienen afectación psicológica en la mayoría de los casos. Entre las consecuencias psicológicas más habituales que se derivan del fracaso escolar encontramos: - Estrés y ansiedad infantil - Depresión - Baja autoestima - Desmotivación

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- Inseguridad - Problemas conductuales

ESTRÉS o ANSIEDAD INFANTIL

Uno de los aspectos fundamentales a la hora de estudiar y tratar un caso de estrés infantil, es conocer el origen de la ansiedad y distinguir si ésta es producida por una situación de fracaso escolar o si por el contrario, la ansiedad y el estrés crean como consecuencia un fallo en el ritmo de estudios del niño.

Indicadores de Estrés o Ansiedad Infantil

- “Imposibilidad” de hacer los deberes - “Falta de ganas” de acudir al centro escolar - “Cambios de humor significativos” - “Respuestas desmedidas” ante hechos que ocurren a su alrededor.

BAJA AUTOESTIMA

Autoestima es la discrepancia que existe entre lo que pensamos que somos y lo que nos gustaría ser, es decir, es cómo valoramos lo que pensamos que somos.

En el área infanto-juvenil, se pueden hablar de cinco áreas:

- Área social (sentimientos del niño o adolescente sobre las relaciones con sus amigos)

- Área académica (qué piensa de su faceta como estudiante) - Familiar (cómo se siente como parte integrante de su familia) - imagen corporal (cómo ve su aspecto físico o sus capacidades físicas) - Autoestima global (valoración general que hace de sí mismo).

Tenemos que estar muy atentos a lo que los niños cuentan o hablan de sus relaciones con los compañeros, amigos, si se siente aislado, si se burlan de él, etc.

Debemos tener especial cuidado con aquellos niños que transmiten continuamente frases o calificativos negativos sobre ellos mismos, sobre su forma de comportarse o de ser: “nadie quiere jugar conmigo, nadie me quiere, todo lo hago mal, soy una mierda, etc”.

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El uso frecuente de este tipo de frases puede resultar muy dañino para la autoestima del niño, pues llegará incluso a creérselas.

Indicadores de Baja Autoestima

- Actitud excesivamente quejosa y crítica para llamar la atención. - Victimismo - Necesidad compulsiva de llamar la atención (interrupción continua)que es respondida

con mensajes negativos haciendo que su actitud demandante aumente. - reciben respuestas negativas por lo que su actitud demandante aumenta. - Actitud inhibida y poco sociable (dificultad para relacionarse) - Temor excesivo a equivocarse (mutismo, uso frecuente de la muletilla “no se”) - Actitud insegura. Poca confianza en sí mismo.Temor a hablar en público y un

marcado sentido del ridículo. - Ánimo triste. - Actitud perfeccionista. - Actitud desafiante y agresiva por la inseguridad que le generan las situaciones. - Actitud derrotista. Se autoperciben como fracasados. - Necesidad compulsiva de aprobación.

Analicemos algunos casos de frases muy inapropiadas para la autoestima infantil, y algunas posibles formas de sustituirlas:

"No valgo para nada": Todo el mundo vale para algo, lo que sucede es que a veces nos empeñamos en llevar a cabo actividades para las que no tenemos habilidades, mientras ignoramos o no damos importancia a aquellas que nos salen bien. Esta frase se podría sustituir por frases más concretas que se refieran de forma específica a la tarea en la que no hemos sido hábiles y a ese momento en concreto.

"Todo me sale mal": seguro que si simplemente piensas en el día de hoy eres capaz de decir al menos tres cosas que has hecho correctamente. Las frases que suelen referirse a la globalidad deberían ser sustituidas por frases más concretas que sólo se refieran a lo que realmente ha salido mal.

"Nadie me quiere": cuando oigan a alguno de sus alumnos esta frase, no la pasen por alto. Es un fiel reflejo de los sentimientos de ese niño. Quizá sea un buen momento para buscar ayuda de un psicólogo que evalúe la autoestima de su alumno y le ayude y enseñe tanto a la familia como al niño a mejorarla.

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INTERVENCIÓN

Podemos decir que el niño sufre a consecuencia de ese “fracaso escolar”, pero ni lo crea ni lo difunde, ni lo provoca. El niño sólo se limita a sufrir las consecuencias de ese fracaso.

Seguramente, ese niño del que hablamos tendrá alguna dificultad en algún tema o área escolar. Por ejemplo, le costará fijar la atención, o le resultará especialmente difícil el aprendizaje del cálculo, leer, escribir, etc.

Si en la escuela o en casa se dan cuenta a tiempo, se podrán estudiar esas dificultades y poner en marcha el programa o intervención necesaria para la superación de éstas: una mayor atención sobre el niño, ayuda de un especialista, adaptación de los objetivos educativos, etc.

Si al contrario, la detección es más tardía, no se le da la importancia necesaria etc., el niño presentará dificultades o trastornos del aprendizaje acumulándose esos obstáculos a cada curso escolar.

CONSEJOS

- Enséñale a planificar las tareas a la hora de estudiar.

- Demuéstrale que le quieres no por sus éxitos sino por él mismo.

- Permítele que tome decisiones y dale responsabilidades acordes a su edad.

- Jamás hagas comparaciones con otros niños o compañeros.

- No le hagas sentirse inútil o culpable y anímale a confiar en sí mismo y a valorarse.

- Enséñale a no desanimarse ante los fracasos y a luchar para conseguir los objetivos.

- Enséñale a buscar alternativas para superarse. - Foméntale la lectura - Enséñale palabras nuevas a través de juegos,

háblale mucho y con propiedad.

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HUMOR

FRACASO ESCOLAR El 21 de enero en el programa de RNE “En días como hoy” presentado por Juan Ramón

Lucas, abordaron el problema del fracaso escolar con el secretario de estado de Educación, Mario Bedera, el sociólogo Julio Carabaña y Juanjo Nieto, director del Instituto Julio Verne de Leganés. A la hora de emitirse ( de 9 a 10 de la mañana) obviamente, pocos docentes pudimos escucharlo, pero merece la pena sobre todo por las propuestas tan valientes y rompedoras que realiza el sociólogo Julio Carabaña Catedrático de la Universidad Complutense de Madrid por eso os dejamos el enlace.

En días como hoy - Cuarta hora - 21/01/11 http://www.rtve.es/alacarta/audios/radio/dias-como-hoy---cuarta-hora---21-01-11/993621/