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POEMAS DEL PINTOR
Edición / Eliana DávilaDirección artística y diseño / Alfredo Montoto Sánchez
Corrección / Victoria HernándezComposición computarizada / Jacqueline Carbó Abreu
© Adigio Benítez Jimeno, 2002© Sobre la presente edición:Editorial Letras Cubanas, 2002
ISBN 959_10_0732_9
Instituto Cubano del LibroEditorial Letras Cubanas
Palacio del Segundo CaboO’Reilly 4, esquina a Tacón
La Habana, Cuba
E_mail: [email protected]
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PREFACIO
Tenga cada cual su almay tendremos un alma común.
DULCE MARÍA BORRERO
Fueron las llamaradas cual su mirarchisporroteando sobre los metalesy las cometas locos autorretratosen vano intento de un eclipse de sol
fueron los pájaros festivos con disfraces de pájaroslos caimanes verde bosque cual viejos galanesy los paisajes antes de arribardonde podría el sitiero
como cubano al finmadrugar y continuar soñandoel sueño de la patria
fueron el dibujo y la pinturamas
¿qué ha pasado al hombre del oficio?¿qué sucede ahora a este pintorque cambia la pasión y escribe?
¿qué lo mueve a lanzarse en un pretenso vuelocon alas emplomadas no emplumadas?
¿será que la poesíael texto amigo
le deviniera antipintura?
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ciertamente ahora los espacios de la luzlos de la inmensa claridaden la pequeña porción de los formatoslos espacios para ser contrapunteadospor una línea siguiendo su destinoo una mancha en sí misma colorinmóviles quedaronpues el que siempre pintor fuera llamadopor el nombre de oficio no respondemas no será por mucho tiempono por desgano de su hambre supremano por olvido de su sana codicia
él siente la pintura como una religiónverdaderaexenta de dioscarente de su épica divinade sus danzas ritualesde sus horas litúrgicassus sacramentos y libros sagradospero digna de la sublimidad deiformedigna de la místicaenvoltura de sus cielos doradosde sus llamadas a maitines y laudesdel eufemismo musical de sus salmospurificantes de las almas creyentes
no es que se abandonea un equívoco desliz de la creaciónno es que sea la paloma equivocadalastimera perdida en el cantar
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es que desde niño adorador ha sidoy ama ese halo de la escrituraespíritu de la letraimpronta del sentimientoen la blancura desolada
es que barbarie y civilizaciónambas padecey si a diario puede ser el corrupto del verboquisiera para sí algo del buen decirque resanara el ripionuestro de cada día
quisiera nombrar lo cotidiano con asombroen palabras tan bellas como interluniotan sagradas como osariotan estrelladas como nocturnidadmas juiciosa es su prudenciasabe que no esun poeta nato nunca fueun versista con estudios de hispánicanunca puso los pies en un aula de latíny a medio camino como estáentre el inculto y el bestsellermás bien se define como un poeta prestadoque en vez de versos escribe probabilidadesen el ábaco de las letras haciendoel peligroso juego del advenedizo
ojalá que el poema un día u otroel habla le redima.
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La línea fue trazada cuando el Señor lanzó el relámpago
en un principioÉl separó luz y tinieblascreando el claroscuro
del barrunto y la amalgamapasó a discriminar luces y sombrasy entre las sangrías de un espacio inefableextendió la banda de los diez grises
el tinte denso en los pesados horizontesdonde grumos de barro sólo sugeríanaquel futuro atrezo de las formas
allá en la vastedad de las tensionescuando el estrato absorbe el titanio de la luzabrió el espectro con lluvias en el irisy por encima hizo saltar la brillantezpreviendo los metales y el reflejo en el río
eso hizo el Señor durante el primer díay fue dulce su gestoinaugurando la pasión para los hombrespara que mucho tiempo pasado el origenmucho tiempo después que el Paraíso
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deviniera una vana esperanzasagrados fueran los dibujos de Leonardolos retablos de Grünewald
del viejo Lucasy acá en nuestras triviales alegríasdivinas fueran las pinturas de los niños
Él vislumbró la idea en la preñezde un pensamiento ágil
instántaneocentelleante
y allí estabanítida
la génesis mayordando señales para su alumbramiento
en sus benditas manos vino la realidad enteracada pieza ajustada al gran formatolo inmensurable en cifras de años luzlo ingenioso de la complejidad vivientecada cosa una viñeta con un nombre y un color
y todo fue fácil al designio inexorablecuán lejos de la duda ansiosa del mortalcuán distante del pintorcuyos hallazgos felices
si en saldo los hubiereno serían más que meras aproximacionesal dibujo de la línea puraal matiz incontaminado
pero el Divinoseguro de sí mismo
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no reparó en obstáculosle eran extrañas las míseras dificultadesexpresivas y técnicasel demasiado camelar un asunto temáticoel trazo que no ciñe propiamente a la imagenlos excesos en la mezcla aditivala carencia de eufonía en un color sin timbres
no tuvo cual el pintor mundano
que pensar y pensar el bocetoa veces ya sin la luz de la lámparano constató
cual el mortal pintorque el métier es azarosouna lucha de amor con una amanteque a veces se encabritaa veces se abroquelao puede equivocarnos en artero subyugar
Ciertamenteel Gran Hacedor no tuvo oficio
ninguno que por tal habilidadcual sobrenombre
a su llamado respondierapero todos los reunía en su diestra magistral
no tuvo antecesor que aprendizaje le brindarano tuvo el consejo valioso del ancianonadie le enseñó la condición sublimenadie le instruyó cómo dar alas al ángela serpentear por la campiña un arroyueloa combinar el lila
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el rosael amaranto
sobre el pedúnculo y las hojas verdes
ah Señoren cierto modo
fuiste Tú tambien el desamparadofuiste Tú el más ilustre de los autodidactasel más entusiasta de los aficionados
Menos mal que la obra del Todopoderosonecesariamente era infalibley resultó impecablede una solidez superlúcidade un acabado imperecedero
menos mal que no le sucedió con la Creaciónlo que a este artista humano con ciertas obras suyasque rompió
rehízoy ha vuelto a destruir
rasgando el lienzo a cuchilladaspor sus manos vencidas e iracundasal no lograr de manera convincenteel paisaje oriundotodo quietud
todo silenciotodo naturaleza
Él realizó a su modo la faenasin carboncillo
sin sanguinasin grafito
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sólo con el obraje de la idea absoluta
no tuvo así que lamentarse en la carenciade esos materiales veneradoslos indelebles
los trascendenteslos afectivos
los Winsor and Newton Artists Materialscon el AA Extremely Permanentlos Staedtler Marsmatic ZeichentuscheLascaux Émulsion Polymère Acrylique
entre el Divino y el mortalexisten sus diferencias
no obstanteperdón por la osadía
en algo estamos a la parÉl creó al artista
pues concibió al hombremas el pintor le dio una fisonomíay desde entonces tiene rostro
El Sumo Maestro y quien practica la pinturaestamos a la inversa ante la realidadÉl la gesta
y el pintorsólo la presenta en la mentira
curioso es que la salvacióndel que no más levanta un simulacroestaría en decir bien la verdaden el engaño de las utopías
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En un sutil discernimiento propio de la excelsitudpensó el Señor que la verdadpuede mostrar duras aristasdispuso
entoncesque lo real
no sería sólo la certezay no ofendiera la extrema desnudez
frente a las evidenciaspues
situó las aparienciasveló con nubes el demasiado solen aquella tensa atmósfera de los primeros díasrestó a la luna llena los menguanteseclipsó por minutos la esfera terrestreen los atardeceres tiñó de gualda el bosquey quemó el rojo veneciano del caminohasta tornarlo al sepia de la oscuridad
eso hizo el Creador para inducira aseverar y negar al mismo tiempoa la vez contrastar y simularesclarecer y hacer dudar al unísonopensando que lo opuesto y lo supuestohabrían de predecir el sfumatode la luz resbalando a la penumbraen la apoteosis de la ideal belleza
y la simetría aproximada de La Primaveraa un lado Flora bajo el soplo de Céfiroy al otro las Gracias al blanco de Cupido
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y habrían de anticipar lo insólitoy delirante de la modernidadcon un blando reloj desfallecidoun perfil de frente o un lavabo de tela
pronuncióentonces
el Señoralgunos aforismos al respectoy sucedió lo inesperado
de su sapienciade sus palabras en estéreas resonanciasde sus lucubraciones sobre el pro y el contranació la teoríay de ésta el ejercicio del criterio
luego los hombres tuvieron la nociónde diferentes lecturas en la obra de arte
confundióseasí
el Anticristoy no pocas veces el pintor
Arribó a la séptima y última jornaday vino la catarsisluego en la serena complacencia de su orbital espírituroció con sellador la magna obra de artepara fijarle al tiempo eterno su existencia
después nombre le pusoLa Creación
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en esa frase de cierre como un talismánde modo que pasadas incontables erassu ejemplo siguiera este pintorcuando a su mente le arribara aquella líneaun tanto fragosa
Oleaje de nubesal titular su dibujo de la tempestad
Contempló al fin lista su obraflamante
inobjetableimperecedera
la proeza en sus divinas manosera lo nuevo por la pimera vez inéditocomo nunca más lo fue principio alguno
indiferente a todo juicioa prueba de riesgo ante los pareceresinvulnerable ante la críticainmune al fluctuar de las valoraciones
no temblócual temblara este pintor
al preguntarse qué pensará de sus pinturassu amigo el dadaístalanzador de huevos rojos y amarillosa la blanda tez de los espectadores
Para el Sublime Omnipotentetodos los hitos fueron idénticosequidistantes de su gran amortodo vino por igual cumplido
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a su férreo mandato consagradosin distingos entre ternuras y avatares
tan caros al mortalcreando así el distanciamiento
mas aquí el pintor con su bombearlos sentimientos en su leve corazón
la patria íntimadice haber transitado
uno a unolos diversos estados anímicos de la maestríay ha percibido ese instanteel más alto
el más solemneel momento ritual del oficiocuando frente a la superficie expectante de la cartulinala tersa lámina
la hoja inmaculadase dispone a tatuarle la blancura virgencon la tinta o el creyón a mano alzada
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Del tramado negrísimorasgando la blancura extensaemerge mi dibujo
suerte de aguardado y de sorpresadonde no hubo más que desmemoriami dibujo es presencia
haciéndose a sus claros y sus sombrasa opacidades y transparencias mutuassegún la luz se acerque o aleje de las formas
negando el dominio voraz de la tersurala torpe inercia que el soporte ofrecela estolidez de su frecuencia muda
cierto es que hubo duda en el posible hallazgomas un ligero temblor al cabo se hizo firmeen el trazar de la mano
y viene mi dibujo precisando perfilesempujando sus miembrosrompiendo la molicie
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por tan venturoso advenimientopor acercarme íntimos auguriosun moderado regocijo expreso
pero en silencio mi interior deslumbrocon esas líneas que en sucesión prosiguencomo relámpagos oscuros
principio fue y ahora es fin que ya no se despidees una conclusión que siempre naceporque no es gesto que se inhibe
es una floración unida por enlacesentre líneas cortas de comedido portey otras largas huyendo hacia los márgenes
en el formato cual vientre que lo acogepara alumbrar al ser que lateemerge mi dibujo entre ritmos y tensiones
en rayados de rectas muy tenacesa poco doblándose onduladasen un fluir que sigue hacia otros cauces
en meandros y curvas en parábolasen cruzamientos dejando entre enmarcadosel umbra de Van Dyck y el rojo de cinnábar
el quinacridone del tierra rosa pardocolor de alfareríade caminos resecos o anegados
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y el verde doré visible entre la brumade las horas tempranascuando la hoja guarda aún brillo de luna
en la fibra prensadami dibujo ha nacidosin villancicos ni toques de campanas
línea a línea ha nacidoen el número de oro deja verlas claves del enigma que en su venir descubro
viene a decirnos lo que su vida esnos habla desde su única ventanaen un cuento más de mirar y de creer
viene a servir a quien lo aguarday alimentarle un poquito la ilusiónsi es que gusta de escuchar su fábula
que diga de su fortuna o desazónde su lealtad y su ternuraviolenta en el momento del horror
extienda su ideario su filosofíasu consigna ingenua pero juramentadaciento por ciento legítima
y cuente de la mano y su aventura plásticay diga algo del hombreque línea a línea le ha ideado una semblanza
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El pintor al público le ofreceun saludo amistoso en sus pinturasa través de un mirar basado en pajaritascual si el mundo fuera de papel plegado
ingenuidad sin dudas dislate de un adultoapegado en exceso a ser un cuasi niñoun modo digamos de querer dilataraquella infancia de memorable agrado
a su sentir no tiene otra propuestadigna de igualar en lozaníaen gallarda presencia en cuerpo de decoroa tal supuesto doblez en papirola
pues una pajarita es buena imagensímbolo muy puro entre los signos levesel tropo rey de las formas apaciblesquien ella fuera sería el nunca odiado
hallarla entre los dedos es sorpresael levante de una fresca alegríael pintor le alaba su sencillo porteajeno al deslumbrar de argenterías de oro
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figura hecha a imagen de la lealtadsu influjo tiene el poder de hacernos grácilcualquier entretiempo de ese ir y venircolmándonos a veces al punto del estrés
jamás en sus aristas de remarcado filoo en sus dobleces de punzantes esquinasdejó de ser el personaje afablela llegada del bien aparecido
pues su mutismo nuestra amistad entiendequiere el artista un diálogo en su hablarideándole presencia y que al mirarlael tiempo se haga noble y sosegado
con su apoyo el pintor busca las ideascercanas al amparo de la bondadaun si su pecar de quijotescofuérale dado a la ternura del tonto
así en lugar de la mancha poderosala sombra tensa y el color irasciblebástale la gracia de una línea cruzadasobre el malva o el olivo atemperados
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Para el buen desear del año nuevohizo el pintor una tarjeta a plumacreó la estampa en pliego de Fabrianodonde el trazar dejaba rosas de la maderahelechos gigantes cañas bravasy lirios de cintas en los troncos
a punto en cruz levantó una cercade colgantes con campanillas morasjazmín de enredadera y cundiamorallí fue a posarse una bandadade canarios sinsontes colibríesy en el traspatio por la yerba de guineaaves de airones y colas de abanico
junto al camino que conduce al mar cercanosituó uvas caletas lianas mangles rojosy la yagruma que imaginó argentadapor el intenso brillar de las hojascontra el monte de sombras pardo_violetas
para el buen desear del nuevo añohizo el pintor una tarjeta a plumacreó la estampa en un tramado negro
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donde ideaba la puesta de un saludoarborescente de la vida a la vida
en aquel florar de tan pequeño ámbitofue el vasto deseo que el pintor alentabapor el advenimiento de los buenos díasen el nuevo año de los hogares
cuánto hubiera querido que en su postal la líneaalcanzara la fuerza de un conjuroy el tiempo real hiciera un fausto devenircuánto hubiera deseado remitirla infinitade casa en casa a todos los destinos
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Por aquello de ir a favor de los sueñosque desde joven me rondabanquise pintar un día el paisaje desnudodonde un sol radiado con su luz primariapenetrara la sierra por picos y laderasel cielo todo claro exactamente limpiocayendo en la planicie de asombroso verdorel paisaje dormido que en sus inicios fueraun sitio de sosiego lavado por diluvioscon orillas de arena aún no violadasaquella gran sabana antes del hierroantes de los caballos y los hechos terriblesaún sin luchas ni crónicas ni lágrimaspero no fue logrado mi propósitopues resultaba ser un paisaje imprevistode una coloración demasiado brillantepara las frías madrugadasquise agregar entonces algunos animalescomo sapos majaes jutías caracolesen un fondo de palmeras y yagrumaspero los personajes quedaron literariosy con la vida equívoca pues eran de papelentonces recordé que muy de madrugadacuando se hablan los pájaros en sus primeros trinosy el paisaje se inunda en la neblina
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algunos van de prisa al encuentro del díay las botas se les llenan de fangobusqué por tanto la divina proporcióny situé la brigada con banderolas y pancartascon algunas vicarias y coralillos en el céspedjunto a la nueva escuela de los aleros blancospero tampoco pude conquistar mi propósitopues alguien opinó que aquellas genteshechas a la siena y a la alizarinaquedaron muy pegadas a la tierrano tuve otro remedio que elevar la miraday sucedió entonces que en la cima del monteaparecieron los intrusos metálicoscon garfios y poleas y transpirando humolos cuales a la postre me llenaron de dudapues eran inquietantes figuras sin reversoy allí con su presenciasu impertinencia y su mutismo torpeamenazaban la quietud campestredecidí pues reflexionar de nuevopero al cambiar de rumbo topé la encrucijaday ahora no logro concebir mi paisaje
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Si el pintor pudiera escribiríatodo el alfabeto sobre el amorlas sílabas en fiesta por su glorioso arriboletra a letra formando su nombre en verdegaltoda vocal abriendo el recinto del besotoda oración aquilatando una cariciael predicado en la referencia que lo aluderendido el verbo adjetivado en el amar
nombraría in extenso el sustantivo amoren el paginado de principio a finamor
la primera palabraamor
la última palabray sería el poemario un texto espléndidoresplandecientemás brillante que el brillointrínseco de las cosas brillantes
amorla palabra estelarteñida en rosas y perfumesencendida en fiebres de la pasiónla más alta y dulce
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la más cálida y prístinala más fundamentada y loca del diseño verbal
la palabra casi vivientecasi divinacasi luz
la del arrobamiento y la esperanzala de la audacia y el ruborla del goce incluso en sufrimientosla del celo hasta el cándido egoísmola del delirio en la demencia del sueñola que puede mover al ciego crimenla del pecado y el perdónla tan extensa como la vida y aún despuésamor
la palabra crucial de la poesía
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Perdónpuesto que escribo y me regalo
en la intimidad de las palabraspermítame decirleque soy una persona agradecidainfinitamente agradecida
no por haber nacidopropiamente
que si ello es siempre un suceso de admirarsi maravilloso es el nacer del díacon su estruendo de arreboles y de pájarossi estupendo es el nacer del ríoen el ojo de agua donde brotay corre lejos a calmar la sedmas ya no vuelve a ser jamás tan purasi portentoso es el nacer de la semilla un árboldía río árbol ciegos son de ojos y de almasni más ni menos que la piedra grisno engendrada de padres ni de diosesmi deudami gran deudami carísima deudase debe a que al nacerun par de ojos he traído
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y por ellos pasa el mundoy a su través al mundo me devuelvo
qué gran virtudsuerte que no tuvo ni una estrella
por estos ojos míospequeños y angulosos
casi orientalespor estos ojos negribrunosnacidos para ver de peculiar manerase le ha dado a mi visión a mi sentiren usufructo toda la creación
toda la creaciónla tan descomunalla real la míticala medida total dentro del irisrecibiendo para mi pequeñez
que es un despojo apenasde la providencia
en magnífica dádiva al mortal conferidala mayúscula grandeza y lo asombrosamente mínimolo matérico palpable y la utopíael sueño áureo que no alcanzó el filósofoel pasado sediento en la heredad sin términoel futuro de interminables pasosla distancia de andenes nunca inalcanzableslos astros de las auroras infinitastoda la creación para mi ver pequeñolos metales escondidos y las floracioneslas alas del zunzún y el pantano de las bestiasel ámbito por donde discurrirdel polvo al polende la mina al viento
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del mar hacia otros maresel perímetro por donde ir y venirde lo abrupto a lo apacibledel rechazo a la complacenciadel éxtasis a la fecundidadlos objetos con esa vocación de formadispuestos a ser fruta vaso y vinosegún mi modo acariciante de creerlosla luz que encarna verdea o amarilleceal hacerse color a través del vitralel umbra que proyecta un castillo de arenalas pisadas haciendo de la playa una texturalas compuertas abriendo el agua de irrigarla bandera que fue roja y sigue siendo rojala que cantaba una canción de cunacuando el pintor fue cañero en San Nicolás de Bariy acá en la cima de mis sentimientosesa faz que sobrepasa sus contornosmás allá de la línea más allá del retratomás allá de la vida desaparecida
cierto es que también a mi ver se le ha dadoen evidencia para maldecirla revelación de lo execrabletodo cuanto quemara con fuego de los ojoslas sierpes dibujando el rictusde la mentira no piadosa o la verdad impíala socavante lengua de la maledicenciala sonrisa de la fascinación emboscandouna mordida de áspidla aldea de la hambruna y la muerte seguradel niño que sabía de su muerte por hambrela guerra y sus fotografías
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esa contienda que debiera sólo serla gran batalla amistosa de los trebejosla delación del guía cerca de la llegadael puñal en la espalda el tiro en la nucala boca en la tierra y unos cuencos vacíosla salida del camposanto
carísimacarísima es mi deudalas gracias en miríadas debo dar¿a quién las he de dirigir?si no hay Sumo Hacedor y mis padres ya murierona la naturaleza le va mi gratitudpor tener ante mis ojos encandiladoscual los de un búho con demasiada claridadel total inventario de la creaciónel inmenso catauro de las imágeneseste asombroso mundo de seres y de cosasfabuloso prontuario de las maravillasque antes descubrieran dos célebres aventurerosémulos del gran navegante
Don José Severino Boloñael impresory Don Eliseo Diegomi maestro
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Si intensifico el karminrotcolor del peligro
los labios sangranla frente abandona su inocenciay las uñas se muestran vanidosas
si no empleo con mesura el púrpura indantrenocolor del delirio
el rocío se enturbialos pétalos destilan su candory la rosa se quema envuelta en cólera
si coloco en exceso azul de Prusiacolor del abismo
el aire pierde su delgado pesoel horizonte apaga sus resplandoresy no se ve la palma vibrando sobre el talle
si a la mezcla añado negro de bujíacolor del gemido
he perdido la luz
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Ah pintornadie como túde la luz se alimenta
nadie como tú se nutrede esa gigantesca claridadabarcadora de mundos y edadesy rincones dormidosque en exacto ritual aún a oscurastiende su euforia sobre la tierrapara que tú distingas rojos renovadosy otros verdes pises al andar
bendita para ti sólo es la luzbenefactora sobre la cartulinacuando de allí te llega como un fuego cruzadode excitación a la mirada
como tú de la luz no se valeni el pez abisal ni el fuego fatuoni el haz que deja ver sombras chinescas
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L’ art c’est l’azur
VÍCTOR HUGO
Martí es azulasí en mi mente lo hago iluminarporque imagino azul a la poesíay a ese claro vivir de los hombres
porque en verdad lo pienso de un color que me subyugasi digo azul veo pasar el aguaen el fondo de piedras de un arroyoy si junto al fuego azul pronuncioes el halo en la cresta de la llama
así pues al Apóstol mi mente lo colorade un matiz que en unción pláceme tendercual el pensar le diera en ofrenda de fervortan obligado estoy ante el Maestrode mi modesto arte y de mi andar la vidaesta con que sus pasos aprendiendo sigoque de imaginero mi oficio se resuelveen honras a quien debo amarcomo él amaba en su interior serenoy en su verbo levantisco
pero decir azul no logra ser lo exactoal definir un tono de valor martianopues un color en trazas de oblación
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no puede ser común el mero colorardel tinte sobre cualquier espacioel color del Apóstol es un azul sui generistan cálido y puro tan colorque describirlo es un absurdosólo dado a la licencia del poetapara quien se revela en prueba inescrutableun azul más que cerúleo más que prusiamás que turquesa más que ultramarinode una coloración que nunca ha sido vistafuera de su piel y su vestido
habrá quien se pregunte¿por qué no otra entonación de su figura?
no sería el Apóstol gris charcoalóxido de cromo o amarillo de Nápoles
pudiera yo pintor y en tal dominioposeedor del círculo cromáticodesde el blanco de plata al negro de humoescoger para pigmento de su tezotro timbre más propio de la carnepor ejemplo carmíneo cinabrio rosa madderpero éstos son los tonos de la bandera que le inclinoy de la herida que lo derribaraMartí es azul salvo su sangre
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Detonante es la noche de La Habanala «Siempre fidelísima ciudad»con giraldillas de pechos muy bruñidosy labios muy lustrales
la fascinante noche del trópico insularbañada por las aguas de este mar caribeñovenida en la ola fría y sin embargollegando a mí tan cálida como una noche árabe
noche habanera ansiada por el mundopara pasearla sobre los adoquinesjunto a la cantería donde el extraño encuentrala impronta de un diseño vital desconocido
noche cubana gozo del forasteroRampa abajo hasta llegar al murodonde la hostilidad del mar se desmenuzay espuma le rocía en la piel acalorada
noche para dárselas de osado bucaneroabordando el lanchón de la villa de Reglay en dirección opuesta a la salida del solretardar un poco la llegada del día
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para subir despacio la loma del Ángelentre callejas alumbradas por la gran farolarespirar el aire alto del Torreóny en todo sitio vivir leyendas idas
noche de la bahía bordeando la ciudadque ayer fuera entusiasmo de antiguos grabadoresy hoy alza la antorcha de la refineríaflameando siempre su consigna roja
noche pulsando en casonas y castilloslatiendo en bares y hoteles remozadosy allá distante de la Fuente de la Indiaen la moderna urbanidad creciendo
noche propicia para amar la nochepara loar su musical plasticidadaunque ya no se vean calesas y tranvíasni cocuyos en los restos de la muralla
noche ideal para parrandas buenassi del mareo no pasas al delirio del vértigomomentos sucesivos para no mirar la horay darse sólo a un tiempo implícito
noche criolla para seducirpara quitarle el cinturón de castidada la alegría y dejarla que bailefarandulera
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El gran agitador del recio brazo que terminaen una sonrisa sin par
el que entra y saluda con la voz adelantadaa todos los pensamientos y noticias
desbordado al hablar en torno a decires alegresesos que pueden volar en cualquier vientoy siempre van más altos que la derrota
el de los claros sentimientos guiando sus palabrasel de las palabras amables animando sus gestosel de los gestos hermosos tendidos en la mano
el que reparte el corazón como un pastel de vivo rojoy se queda a pecho abierto bombeando sólo a impulsos
de buena voluntada todos enseñando la lecciónsin apenas darse cuenta de su gran sabiduríasin tal vez notar que desprendersees cosa de almas grandes
el que no lograría ser de rostro fielmente pintadoen toda la verdad expresiva
pues su mejor retrato es el viviente y es su artesin embargo yo pintor lo concibiera naïfcon cuerpo de dragón chino calado
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o un jaguar al temple sobre papel amateno olvidaría
desde luegoabrillantar con cadmio sus medallas
así es el otro de la misma sangre míael que fue amamantado por los mismos senos
en su acogida en su semblantejamás veré sino la suerte del lado de los hombresme impedirá mirarlo hondo en su interiordonde suelen sentarse tristes silenciosy así mostrando sólo su alegríano sufrirá el hermano ninguna de sus penas
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Pajarita de papel—la mejor que pintó Adigio—es un pequeño prodigiodonde se esconde un tropel
LUIS TOLEDO SANDE
Flanqueada de ilusioneste asomas tímida y por suerte en parabienesbien acompañaditadel sorpresivo engendro verdegris
el caimán de la islacon muchos años y galas de tenorio
Surnaihija primogénitaotra vez concebida
que ni Dios podría hacerlopara la vida y la pintura erestú y tú misma cara y cruzlas dos nacidas de mi poder humanopues yo soy a mi manera el Todopoderosoque a la luz dos veces te he traídoayer los pies desnudos tibios diminutoshoy vestida y en zapatillas blancasayer fuiste el origen cuando te concebimoscriatura natural hija del partorevelándose en ti el milagro de amorhoy abracadabra y ahí estás mi pequeñaánima en el misterio de la pintura
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He ahí a pincel y mano alzadael retrato de mi nieta
Selenaenmarca la mejilla de los trece añosapenas el comienzo de un solferino rosaen los labios la porción de pigmentohace el encarnado de un garanza frutalel violeta cobalto de las sombras animala frente festonada de asteroidesen un cintillo ajustando el pelo a rayas
sentada así Selena en su limón de lunaniña en la paz despreocupada idamira una y otra vez el esplendor celesteallá donde puede su interés pioneroescrutar la suma sabiduría
así envuelta en rara luz de lunaSelena es lumbre cuando el sol se ponesalvada está mi nieta ya salvadade esas cosas terrenas que pesan como mundos
a la vida le guiña y le sonríecon fuegos de eternidad bajo el corpiñono la alcanzan esquirlas de este tiempo que estalla
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y con la historia quema y luto impone
sólo de la tierra a sus oídos llegael orfeón de los pájaros amaneciendo
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Más allá del retratotu visión se extiendetu cuerpo en el dibujo no se limita
tal como aparecesempapada de miel
es decir barnizadadesbordas el contorno de tu desnudeza expansión del deseo
trasciendes la visión de imagen contenidatú no eres un símil de apariencia turbadoraporque en el lienzo lates
vaporosa en corrientesexpandida a mi gustotu retrato rebasa las proporcionesy la noción de ámbito
translúcido es tu cuerpo en aceite de linoy tu pelo y tus dedosvolátiles como la trementina
retratada en deseosamores emanandoiluminas el aire más allá del rectángulo
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más allá de los lados y las esquinashasta los exteriores oscuros y mugrientosdando luz de tus pechos y calor de tus muslos
más allá del diseño te devuelves colorde ligera que vienes al pincelhecha gestual figura
ya tu imagen prosigue y sigues siendo túprolongada y presente
y aquí estás realizadaen la pintura carnemás allá del contornodesbordada al amor
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Figura de fondosubyacente figuraentidad indecisaentre el ser y no llegar a seralgo de apócope rige tu referenciasólo sabemos cuán parca es tu misiónde coro de secuaz de apoyode simple resonanciaen la secuencia de los cuerposdonde eres un apóstol sin prédica situadoen el borde izquierdo del panel
La Asunción de la Virgenen el que escondes un cuarto de cabezapara todos los cuartos de siglospersonaje más o menos terciariosemiclandestinosin huellas de sucesos relevantesen tu vida pública o privadaausente de la felicidad o de las penasde la sorpresa o la meditaciónde los estados que marcan los registros facialespersonaje menos que una cariátide menos que una gárgolano más que el atestiguamiento imprescindibleclavo y salpara la observancia del milagro
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víctima eres del contextodonde resultas un número oprimidopor un concepto vago y anulantede la identidad y aún de la vidavíctima eres de las relacionesde los tramados linealesy las tensiones inherentes al diseñoes decir que nunca llegarás a ser atípicoque nunca escalarás el centro del cuadropues dispuesto está para todas las edadesque no serías San Martín de Toursjinete en legendario corcelrepartiendo su capa con el desnudono serías Jesús en la Crucifixióndonde con los donantes en el fervor de la piedadCristo aparece culminando el triángulono serías Fray Hortensio Félix Paravicinode luminosa palidez su rostrono serías siquiera el desconocidonoble castellano de la mano en el pechoel de la cincelada empuñadurapobre alma debatiéndoteen tu tarea de casi inadvertidoentre cromados rostros e icónicos sayalesjusto fuera investirte Personaje de Fondoy que tu cuerpo y nombre deducidoshayan de ser también glorificadosbajo el milagro de la Asuncióncuando el cielo se junte con la humilde tierrapues igualmente en tien tu sutil modestiael Greco armó los artificiosde su gran pintura
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Confiesosoy culpableel único culpablede las cosas que pinté y no debí pintarde los cuadros que no hice y debí hacer
confiesoque el oxígeno me alegracual si el aire fuera invadido de alcoholesy cediendo a la intención de agradono por edulcorar sino por dar alivioconcebí enormes dalias hidropónicasy así fuera el patio una tierra tranquiladonde lo telúrico su compulsión calmaratodo el tiempo eterno de la pintura
confiesoque habiéndoseme dado sólo la ficciónquise darle vida a un hombre artísticoy a la vez extraplásticoespecie de vocero del pronósticoque emitiera señales del mañanay pinté caminos arroyos y pantanosatravesados por héroes en columnay obreros de guante peto y máscaraalumbrados a la luz de una antorcha
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confiesopecar de tozudezsi naciera de nuevoojalá que no venga con este mismo corazónpues va a querer reandar lo andadoy me haría pintar las mismas obrascon algunas variantes
por supuesto
confiesoque si soy condenadoyo
pintor de temasno sabría qué pintar en el infierno
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Señores Jurados del Juicio Final
por la Virgen de la Adoración de los Reyesque pintara al templo Gentile da Fabriano
por la del pecho fruta entre ángeles rojosbajo un pórtico develado amamantando al niño
por la Dolorosa desfallecida en la gran piedad redondasosteniendo ensangrentado a Jesús muerto
por la del Vir Dolorum en el misal de Olomoucentre sarmientos de acanto en lazos circulares
por la Virgen de la Misericordia de Enguerrand Charontoncon manto azul y vestido de briscados
por la del Libro de las Grandes Horas de Rohany la del pintor anónimo del Alto Rin
por la del Breviario de María de Guelderny la de Verona entre marrones y dorados
por la del Canciller Rolin ella sentadasobre un piso enlosado de jaspe y pórfido
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por la Madonna de la Zarza Ardienteaparecida al Moisés de la mirada dura
por la del maestro de la Anunciación de Vienapor todas las vírgenes góticas
no me juzguen sólo por mis crímenessólo por mis pinturas las peores
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Contra el lienzo incontrastado y mudocontra el soporte albayaldado a fondo neutrocontra el paño virgen la tela inmaculadacontra la lechosa imprimacióncontra el lino y el percal en crudocontra el blanco yermo como tierra baldíacontra la superficie sin quebranto ni gloriacontra la serenidad que no es lago ni cielocontra el ámbito de luz igualitariacontra lo idéntico a sí mismo en todas sus partescontra el silencio plástico de una causa omitidacontra el discurso inverso contra la pasmosa calmamuerte al aparejoviva el sol asterisco
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Y fue condenadopues además de sus confesas culpasy sus transgresiones comprobadasquiso al neoplasticismo superponerle por contrastebestias desconocidas de increíble color azufradoy titular la obraAnimales Minerales Industriales Inmortales
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Nunca más regresaronlas noches de los cuentoslas noches de los niños sentadosen el ruedo con las piernas cruzadasen torno al balance de la abuela
nunca más se ha sabidode Juan Matagigantesdel desventurado Rey de Persiadel sensible Periquitoy de Chiquirritica
nunca más Doña Licavolvió a reunirnos al pie de su regazopara hablarnos del perro que volvió a su casade Nicolasón y Nicolasillode los cuatro ministros sabiosy del pájaro de oro en el jardín del rey
¿qué habrá sido de la hermosa durmientedel hombrecillo de la playa secretadel joven remendón y su casaca?
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Si es que vas a ser pradosi es que el pintor sería él mismo su paisajellévate un crisantemo donde la tierra es húmedaen las manos que flores dibujaron
si es que habrás de ser sombrasiempre al mismo valor de claroscurolleva la frente para entonces tan lívidauntada en el polvo de la luz
si es que todo ante ti lo verás pardo violetael probable colordel firmamento subterráneo
lleva blanco de platapara dar más brillantes tus destellos de fósforo
si es que sientes temorde que en tiempo tan largo te olvidasendale tu amor al tiempoy alguien curioso del pasadomañana te amaría
como serás el hombre en la memoriay el hombre que serás esta vez para siemprees igual al que has sidofúndete a la virtud que tu pincel describe
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estarás con nosotrosla alegría común sin ti se perdería
si es que te callarástu frase no tendría ni principio ni findeja aquí tu palabrase fundirá a la de otros
si es que serás banderay tu más limpio rojo tu carmíneoexento no estará de algunas manchaslímpialo de los yerrosopón al desacierto tu trabajo
pues a la paz te irásno te baste el bucólico placer de aquel fauno dormidomueve aquí tus brazoscoloca allí los bloquesdel gran muro continuado y cambiante
si eres un hijo justollévate tus medallasa la tranquila orilla donde tu padre esperatodos los días noches y las noches díasallí donde su pecho sin laurostu cotidiana rebelión convoca
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Ha pasado una miríadamillones de billones de centuriaslos años han pasado en trillones de mileniosotros soles nacieron y estallaronen los espacios más remotos y escondidos
los planetas se han helado y germinadoen muchas estaciones de nevar y florecerse ha igualado en sucesivas vecesla edad de la estrella más antiguay tú estás ahí
pintor con tus pinturasinmóvil y calcáreo y fríotanto tantísimo tiempo...
ÍNDICE
Prefacio / 51. La línea fue trazada cuando el Señor... / 112. Del tramado negrísimo / 233. El pintor al público le ofrece / 294. Para el buen desear del año nuevo / 315. Por aquello de ir a favor de los sueños / 336. Si el pintor pudiera escribiría / 357. Perdón puesto que escribo y me regalo / 398. Si intensifico el karminrot / 459. Ah pintor / 4610. Martí es azul / 4711. Detonante es la noche de La Habana / 4912. El gran agitador del recio brazo... / 5313. Flanqueada de ilusiones / 5714. He ahí a pincel y mano alzada / 5815. Más allá del retrato / 6316. Figura de fondo / 6517. Confieso / 6918. Señores Jurados del Juicio Final / 7119. Contra el lienzo incontrastado y mudo / 7520. Y fue condenado / 7621. Nunca más regresaron / 7922. Si es que vas a ser prado / 8023. Ha pasado una miríada / 85
