60

Por su salud Nº 17

Embed Size (px)

DESCRIPTION

 

Citation preview

Page 1: Por su salud Nº 17

Por su

Page 2: Por su salud Nº 17

w w w . c l i n i c a b i b l i c a . c o m

Agradecemos a quien los reconoce.

Creemos en los estándares mundiales de excelencia

Dios nuestro, ¡Qué tu poder dure para siempre !

Salmo 104:31bls

Expresamos nuestro sincero agradecimiento al Sr. Presidente Barack Obama, a su comitiva y a la Sra. Anne Andrew, Embajadora de los Estados Unidos de América, por habernos elegido como su Hospital, durante la recién pasada visita a Costa Rica.

Mayo 2013

Page 3: Por su salud Nº 17
Page 4: Por su salud Nº 17

¡Sí! Cuidar de los demás, de pobla-ciones vulnerables que a lo largo de ochenta y cinco años de historia han podido creer que los sueños y las oportunidades son posibles, cuando extendemos con nuestro esfuerzo la mano para ayudar a otros, a los más necesitados.

La mística que nos ha caracteri-zado en este largo caminar, ha permanecido intacta, se ha soli-dificado, ha crecido gracias a la grandeza de nuestro Creador, que siempre nos lleva de su mano.

Desde su creación, nuestro hospi-tal ha sabido reinventarse, ha sa-bido trascender con fe y encontrar una luz de esperanza en los mo-mentos difíciles, ha podido hacer camino al andar, con pasión, con sabiduría, con entrega.

Es una palabra que encierra una connotación muy importante, que ejemplifica con claridad lo que ha significado el Hospital Clínica Bíblica en nuestras vidas y en las de múltiples generaciones que han creído en nosotros para sanar, mejorar y cuidar de los demás.

Trascender

4 XVII Edición

Editorial

Page 5: Por su salud Nº 17

Un trabajo que desde el inicio ha tenido la guía de nuestro Creador, quien nos ha permitido tomar una ruta llena de gratificaciones y llevar el apoyo solidario para seguir creyendo, la sapiencia a través del expertise médico, una sonrisa para aliviar, y el humanismo ante todo para sanar.

Dios ha sido nuestro faro a lo lar-go de ochenta y cinco años. Lo que empezó en 1929 gracias a una pareja que se anticipó a su época para construir un gran pro-yecto, hoy se erige en el centro de San José, en el corazón de cada costarricense que lo ha visto cre-cer, que ha recorrido sus pasillos, que ha visto como la excelencia se puede llevar adelante cuando creemos en hacer las cosas bien, cuando contagiamos a cada uno de nuestros colaboradores con que el bien de uno es el bien de todos.

Hoy me siento privilegiado; ingre-sé aquí como mensajero siendo un “chiquillo”, con diecisiete años de edad y grandes deseos de sur-gir. Este hospital es parte de mi casa, es mi familia, ha sido por décadas parte de mi vida. A él, y a muchas personas que creyeron en mí les debo grandes enseñan-zas. Dios por algo me puso en este bendito lugar y supe apro-vechar la oportunidad al máximo. Escalé posiciones hasta ser el ad-ministrador de este hospital por muchos años hasta pensionarme.

Aún recuerdo cuando entré en 1954; unos pocos cuartos, una sala de maternidad, una sala de

cirugía y consulta externa, eran todo lo que conformaba la clíni-ca. Y hoy, que sigo perteneciendo a este lugar, recorro sus pasillos con regocijo, con agradecimiento, al ver cómo una obra al servicio de Dios y del pueblo costarricen-se ha podido crecer y expandirse en el tiempo.

Hoy somos uno de los diez mejores hospitales de la región latinoamericana, contamos por tercera vez consecutiva con la acreditación de la Joint Commission International (JCI), somos el único hospital que brinda consejería espiritual y una visión que trasciende nuestras paredes con Acción Social, una iniciativa visionaria que se extiende a lo largo del territorio costarricense. Somos una institución que forma líderes, que promueve una salud preventiva, que le permite a cientos de personas ambicionar con un mejor mañana con la reinversión de nuestras utilidades en obras, en nuestra gente.

Porque nuestros esfuerzos van más allá de brindar salud; somos gente que cuida de la gente, de la vida, de la grandeza que Dios nos dio.

Hoy, trascendemos, celebramos ochenta y cinco años de existen-cia, de dejar huella, de formar parte de usted y de sus seres que-ridos, y de esta gran familia llama-da Hospital Clínica Bíblica.

Por Héctor Alfaro HernándezMiembro del Consejo EspiritualHospital Clínica Bíblica

El comienzode un gransueño

5XVII Edición

Page 6: Por su salud Nº 17

Acreditado por

Miembro de

Presidente Junta Directiva de ASEMECO: Sr. Jaime Cabezas Peterson

Director General: Lic. Bernal Aragón Barquero

Consejo editorial: Dr. Alekcey Murillo AlfaroLicda. Ivonne Umaña RojasMMM. Adela Argüello Ruiz

Coordinación general:Lorena Morera Vásquez Directora de Mercadeo Tel:(506) 2522-1400

Edición y producción general:Altea Comunicació[email protected]

ImpresiónE Digital ASEMECO, Asociación de Servicios Médicos Costarricense, razón social sin fines de lucro del Hospital Clínica Bíblica.

Publicación informativa oficial del Hospital Clínica Bíblica Teléfonos: (506) 2522-1000 www.clinicabiblica.com

Se prohíbe la reproducción total o parcial sin la autorización expresa de sus directores.

Las informaciones expresadas en esta publica-ción pretenden orientarle acerca de su salud y la de los suyos. Siempre recurra a su médico.

Índice

Dejando Huella¡Hola Dios!

De PortadaUn gran legado

Dosis Espiritual85 años de hacer

historia

6 XVII Edición

14

24

40

Page 7: Por su salud Nº 17
Page 8: Por su salud Nº 17

Dr. Abel Pacheco de la EspriellaExpresidente de la República

“Un profundo sentimiento”Deseo felicitar a la querida Clínica Bíblica en su cumpleaños número ochenta y cinco. En esa

octogenaria y noble institución interné pacientes en repetidas ocasiones, durante los años que

ejercí la medicina. También yo fui internado y atendido más de una vez. Hoy que escribo esta

nota, mi esposa se encuentra allí recibiendo tratamiento a causa de una neumonía.

En todas esas ocasiones, he sido testigo de la eficiencia, el orden, el respeto, la limpieza y la

cordialidad siempre presentes.

Debo agregar que existe allí algo omnipresente que es difícil de encontrar en muchos lugares:

un profundo sentimiento cristiano en todo el personal. Sí, por oficinas, patios, pasillos, salas y

habitaciones, Jesús está ahí presente.

Luis Alberto Monge Álvarez

Expresidente de la República

Al celebrar los ochenta y cinco años del Hospital Clínica Bíblica al

servicio del pueblo de Costa Rica, deseo expresar mis felicitacio-

nes y mi agradecimiento a nombre de costarricenses y extranje-

ros que se han favorecido de su fructífera existencia. Este recono-

cimiento abarca a directores, ejecutivos y a sus colaboradores de

todos los niveles. Su eficiencia y alto espíritu de responsabilidad,

han sido factor esencial para el merecido prestigio alcanzado por

el Hospital Clínica Bíblica.

“Una fructífera existencia”

8 XVII Edición

Dedicatorias

Page 9: Por su salud Nº 17

Cumple ochenta y cinco años el Hospital Clínica Bíblica. Es moti-vo más que suficiente para que las y los costarricenses felicite-mos a esta noble institución y a quienes han laborado en ella durante estos años, con cariño, esmero y dedicación.

A lo largo de la segunda mitad de este período que celebramos, son muchas las oportunidades en que he recurrido por diversos motivos a Clínica Bíblica. Nací en esta institución un 24 de diciem-bre. Siendo niño, en varias opor-tunidades mi madre me llevó a consultas médicas; y en cada una de ellas, además del calor humano, se notaba siempre algo distinto, algo nuevo, como sím-bolo de superación permanen-te para servir mejor al prójimo. ¡Gracias, Clínica Bíblica!

Para una Semana Santa, duran-te el período que ejercí como presidente de la República, mi abuelo materno, a quien siem-pre cariñosamente llamamos “Farfar”, sufrió una caída y se quebró la cadera. Cuando me avisaron, me regresé a San José para encontrarlo ya en la Bíblica. ¡Farfar tenía apenas 101 años! Sin dudarlo ni un minuto, él y yo tomamos la decisión de ope-rarlo para restablecer su salud. Tres horas después estaba en la sala de recuperación, y tres me-ses después caminaba de nuevo

como el roble que siempre fue. ¡Gracias, Clínica Bíblica!

Hoy Costa Rica tiene la oportuni-dad de incursionar en lo que al-gunos llamamos ‘turismo médi-co’, en el que personas de otros países viajan a Costa Rica para realizarse aquí tratamientos mé-dicos de extraordinaria calidad. Nuestro país puede colocarse a la vanguardia de este tipo de ser-vicios, y hacerlo de manera más acertada si logramos establecer buenos modelos de cooperación entre las organizaciones públi-cas y privadas en el campo de la salud. Podemos formar todo un conglomerado de actividad eco-nómica alrededor de esto. Sé de primera mano que la Bíblica está liderando un esfuerzo importan-te en este sentido. ¡Gracias, Clí-nica Bíblica!

Hacia el futuro, el mundo de la medicina y los tratamientos mé-dicos seguirá cambiando aún más rápido. Estos cambios re-querirán instituciones pujantes y con visión de futuro. La Bíblica tiene todo esto, para servirnos mejor a las y los costarricenses.

¡Gracias, Clínica Bíblica, y que cumpla muchos años más!

José María Figueres Expresidente de la República

“Símbolo de superación permanente”

Haciendo camino al andar

9XVII Edición

Page 10: Por su salud Nº 17

Óscar Arias SánchezExpresidente de la República

“Un honor, un compromiso”El Hospital Clínica Bíblica celebra ochenta y cinco años de brindar salud en Costa Rica. Brindar salud es un privilegio y una responsabi-lidad, un honor y un compromiso, que nos acerca más a los seres hu-manos.

Siempre me ha llamado la aten-ción que el origen de la medicina se confunde con la religión y la filosofía. Eso no es producto del azar, sino que obedece a la razón misma de esta profesión. Todas las preguntas trascendentales que se ha planteado el ser humano a lo largo de la historia, la medicina ha pretendido responderlas. ¿Quié-nes somos? ¿De dónde venimos? ¿Por qué existe la muerte? ¿Por qué existe el dolor? No debe de extrañarnos, por tanto, que céle-bres médicos como Hipócrates, Galeno, Averroes y Maimónides fueran, a su vez, filósofos. Y tam-poco debe de extrañarnos que Ánton Chejov, Sir Arthur Conan Doyle, Schiller y Keats fueran, ade-más de escritores, médicos. Todos ellos fueron médicos preocupados por el perfeccionamiento del cuer-po humano, pero también por el perfeccionamiento de su espíritu. Todos ellos abrazaban la profunda convicción, que yo comparto, de que la salud humana tiene que ver con mucho más que órganos y te-jidos: tiene que ver con la fe y con

la esperanza, con la solidaridad y con la amistad, con el amor y la compasión, con la justicia y con la equidad.

Es conocido que al terminar mis estudios secundarios, mi primera intención fue estudiar medicina. Pero mis ideas de la práctica mé-dica eran, a decir verdad, un poco románticas. La noción de ayudar a las personas me encantaba, pero cuando tuve que disecar el primer sapo, decidí mejor cambiar de pro-fesión. Mi admiración hacia la me-dicina y la atención a la salud, sin embargo, permanece inalterable. Sigo sintiéndome embargado por un profundo respeto frente a cada persona que ha consagrado su vida a la preservación de la existencia y al mejoramiento de la calidad de vida de los demás. Sigo sintiéndo-me asombrado frente al sacrificio que conlleva la profesión médica y frente a los enormes desafíos físi-cos y emocionales que entraña.

Me tocó la dicha de nacer en el Hospital Clínica Bíblica, y al igual que muchos otros costarricenses, he vuelto en varias ocasiones y he comprobado la marca imborrable del amor y el cuido que dedica su personal a los pacientes. No sé cuántas veces en mi vida me ha ayudado una persona desconoci-da, a quien no tuve la oportunidad

de agradecerle. No sé cuántas ve-ces en mi vida alguien ha hecho un sacrificio por mí, sin que yo me entere. No sé cuántas veces en mi vida se me ha olvidado o simple y sencillamente no me ha sido posi-ble expresar mi gratitud. Hoy pue-do hacerlo, y no sólo en nombre mío, sino también en nombre de los miles de pacientes que durante ochenta y cinco años hemos con-tado con los servicios del Hospital Clínica Bíblica.

Gracias a cada doctor de este hos-pital que estudia en las noches un procedimiento innovador para sal-var la vida de un paciente. Gracias a cada una de sus enfermeras, que se inclinan mil veces sobre la cabe-cera de un enfermo. Gracias a su personal administrativo, que es en gran medida responsable por el hecho de que este sea uno de los mejores hospitales del país. Tenía razón quien dijo que “uno puede pagar de vuelta el préstamo en oro que pidió, pero permanece eterna-mente en deuda con aquellos que le fueron amables”.

10 XVII Edición

Dedicatorias

Page 11: Por su salud Nº 17

“La consagración a la excelencia

médica”Con gran alegría felicito al Hospital Clínica Bíblica al ce-lebrar ochenta y cinco años de servir con amor y concien-cia a la familia costarricense.

Como hijo de una familia de clase media josefina de 1940, nací en la casa de mis padres en Aranjuez. Yo era el terce-ro de los hijos; y el cuarto, mi hermano Álvaro, nació tam-bién en la casa dos años des-pués. Pero las cosas ya habían evolucionado en las finanzas paternas y en los usos médi-cos cuando, en 1947, nació Gerardo (qdDg), quien vino al mundo con los adelantos de la Clínica Bíblica.

Conocí entonces a esta ins-titución en su elegante y pe-queño edificio de madera que hoy alberga la cafetería, y re-cuerdo con claridad la impre-sión que tuve de distinción y grandeza.

Muchas veces después he te-nido el privilegio de gozar de sus servicios para mi familia, y cada vez ha aumentado mi admiración por el progreso alcanzado y la consagración a la excelencia médica, con un trato personal profundamen-te imbuido en amor cristiano. La sabia dirección de Bernal Aragón ha sido patente en el extraordinario avance empre-sarial de esta maravillosa ins-titución.

¡FELICITACIONES! Que Dios continúe bendiciendo a la Clí-nica Bíblica y a todo su perso-nal para que sigamos disfru-tando de sus beneficios ante el dolor de la enfermedad y ante el gozo de una nueva vida.

Cordialmente,

Miguel Ángel Rodríguez EcheverríaExpresidente de la República

Una obrade fe y esperanza

11XVII Edición

Page 12: Por su salud Nº 17

En su 85 AniversarioNos honramos de ser un socio estratégico de esta institu-ción, con la cual compartimos el valor de la excelencia, del servicio y de la solidaridad. Creemos en la importancia de la mejora continua y como su aliado financiero, hemos sido testigos de la mística que ha inspirado el crecimiento del Hospital Clínica Bíblica, du-rante ochenta y cinco años, para ofrecer a sus pacientes un constante crecimiento en las áreas de mejora de la ca-lidad de los servicios y de la infraestructura.

El Banco de Costa Rica ha for-mado parte de esta historia de humanidad en la que sus fundadores, socios y colabo-radores han visto traducir las necesidades de salud de sus pacientes en soluciones efec-tivas de servicios. Como su aliado financiero, aportamos para el desarrollo de impor-tante infraestructura, como la remodelación y el equipa-

miento médico de la Torre Omega, la construcción de sus ascensores, la expansión de sus servicios a otras áreas del país, mediante la compra de un terreno en Santa Ana para la construcción de una clínica de atención primaria, con un departamento de imá-genes, un laboratorio y un he-lipuerto.

Acompañar el desarrollo del Hospital Clínica Bíblica se ha traducido también en atender la necesidad de ofrecer una oficina bancaria dentro de sus instalaciones, en San José, en beneficio directo para su per-sonal, sus pacientes y el públi-co en general, con un horario de atención y servicios acor-des con los requerimientos de este centro de salud.

El Hospital Clínica Bíblica no solo es un cliente muy impor-tante para el Banco de Costa Rica, por la oportunidad de permitirnos servirles día con

día, sino que también repre-senta una relación solidaria que nos ha abierto la posi-bilidad de extender nuestra responsabilidad corporativa hacia la promoción de otros impactos sociales positivos, como lo ha sido la experien-cia de ser su aliado estratégi-co de importantes iniciativas como el Programa Lazos, con el cual miles de mujeres de zonas alejadas han podido realizarse mamografías y así detectar tempranamente el cáncer de seno.

Sabemos que el futuro está lleno de oportunidades en las que el BCR y el Hospital Clíni-ca Bíblica podremos realizar más proyectos, inspirados en el bien común y encamina-dos a impulsar el desarrollo social, la competitividad y la sostenibilidad de Costa Rica.

12 XVII Edición

Dedicatorias

Page 13: Por su salud Nº 17
Page 14: Por su salud Nº 17

Nuestro Hospital Clínico Bíblico, como se llamó antiguamente, inició labores hace ochenta y cinco años con un objetivo cla-ve: “Servir a Dios y a la sociedad costarri-cense...” Y para cumplir con ello, la oración habría de ser un factor esencial.

¡Hola Dios !

14 XVII Edición

Dejando Huella

Por Marco PérezConsejo de Acción Social

Page 15: Por su salud Nº 17

De cada cien colones que nos quedan de reserva, apro-ximadamente cuarenta van dirigidos a Acción Social; los otros sesenta son utilizados en el desarrollo de tecnología e infraestructura que garantizan a nuestros pacientes seguri-dad y calidad del servicio.

Sin duda, para aquellos que hemos sido tradicional-mente religiosos, ya sea evangélicos o católicos,

esta no es la forma correcta de iniciar una oración. Hemos apren-dido a orar y a rezar dentro de ciertas estructuras y formatos que deben demostrar nuestra reve-rencia a Dios, y empezar una ora-ción con “¡Hola Dios!” no calza en nuestras tradiciones.

Angie (como ella prefiere ser lla-mada) es una de las imagenólogas que ha recorrido el país en nues-tra unidad móvil Lazos, realizan-do estudios de mamografías que, probablemente cuando usted esté leyendo esto, ya habrán llegado a la suma de diez mil. Un encuen-tro con esta joven técnica llena a cualquiera de alegría y se hace difícil imaginar que ella es una re-presentante de nuestra institución que día a día, al igual que muchos de nuestros colaboradores, debe enfrentarse al temor y al dolor de nuestros pacientes. Los que nos sentamos en puestos de dirección e incluso en puestos administra-tivos, conocemos sobre estas si-tuaciones por referencia; pero son otros y otras quienes verdadera-

mente entran en contacto con el sufrimiento de las personas, des-de niños hasta ancianos, que de-ben confrontar los temores que generan una grave enfermedad.

Misioneros norteamericanos, con acentos muy simpáticos, eran las personas que enseñaban a mu-chos de los pacientes de enton-ces a orar, a tener una plática con Dios, pero ¿“¡Hola Dios!”? No, eso jamás; así no se inicia una oración formal; particularmente si nos ha-llamos frente a una situación que demanda una verdadera interven-ción divina.

Angie no es una joven religiosa pero sí temerosa de Dios, y sabe reconocer cuándo enfrenta un caso donde la intervención de Dios es la única respuesta que puede traer alguna luz de espe-ranza a una paciente.

Apoyo solidario

Las personas que se atiende en Lazos llegan a realizarse una ma-mografía, pero vienen escasas de conocimiento; muchas de estas damas llegan asustadas y en al-gunos casos llenas de tabúes. Con

Ayudando a la población costarricense

15XVII Edición

Page 16: Por su salud Nº 17

frecuencia esconden a sus maridos o compañeros lo que se van a reali-zar y creen que van a sufrir dolores insoportables. “¿Y eso no es como un majonazo?”

El contraste con las damas que se atiende en nuestro hospital, es enorme. Las pacientes que vie-nen al Hospital Clínica Bíblica en su mayoría cuentan con muy bue-na educación y saben a lo que vie-nen; llegan en sus propios autos, o acompañadas, dispuestas a pagar y siempre elegantes. Muchas de es-tas señoras pertenecen a los altos niveles socioeconómicos del país y es una fortuna que vengan a exa-minarse con nosotros porque es gracias a esta gente que reconoce la más alta calidad de los servicios, que se generan los recursos (reser-vas o utilidades) para poder aten-der a muchas personas a través del programa de Acción Social de la Clí-nica Bíblica.

Día a día se atiende en Acción Social a decenas o cientos de personas, con igual calidad de servicio que el que reciben aquellos y aquellas pa-cientes que entran por nuestras an-chas puertas en el Hospital Clínica Bíblica. La gente que viene a Acción Social no cuenta con los recursos para pagar por servicios clínicos y médicos; pero son gente amada por Dios, que merecen atención y cuidado y se les atiende de igual manera. Muchos de estos pacien-tes de Acción Social huelen a pobre. Sí, yo lo sé; esa frase no suena muy bien; pero a veces hemos perdido la sensibilidad para reconocer que hay gente, mucha gente en nuestra

16 XVII Edición

Dejando Huella

Page 17: Por su salud Nº 17

sociedad, a la que no alcanza ni para los pasajes del bus, mucho menos para un perfume.

Una de estas personas fue doña María (a quien no he tenido el privilegio de conocer). La unidad móvil se hallaba realizando una gira en la provincia de Heredia y, como es normal, la agenda esta-ba llena. Doña María no estaba incluida en la lista de pacientes y sumarla no era posible. No obstante, a esta joven dama le llamó la atención lo que sucedía con Lazos y día tras día pasó de cerca, quizá esperando que al-guien la llamara. Angie lo notó y uno de esos días la llamó para preguntarle por qué pasaba por allí con tanta frecuencia. María le respondió: “Porque yo me siento una pelotita en un seno y no sé qué hacer...” Y fue así como, tan pronto hubo un chancecito, An-gie pasó a María.

Cuando esta joven dama, de ape-nas unos cuarenta años de edad, se preparaba para el estudio de mamografía, Angie notó que no era una bolita, sino más bien una pelota de béisbol. Ahora el susto lo sufría Angie, y al colocarla en el mamógrafo, le pidió a María que le permitiera sacarle una foto a la pantalla que dejaba entrever la gravedad del caso. Ante aquella situación, donde el temor invadió la unidad móvil, María preguntó: “¿Qué vamos a hacer ahora?” Y Angie le dijo; “Vamos a rezar...” Y así empezó: “¡Hola Dios!” Y con palabras muy sencillas, le dijeron

al único y sabio Dios que necesi-taban un milagro.

Angie recordó el número de un cirujano amigo y se atrevió a en-viarle desde su teléfono la foto de pésima resolución; al verla, el cirujano concluyó que había que intervenir a doña María de inmediato; pero… ni el carnet del seguro le iba a servirle. Sin embargo, cuando le hablamos a Dios, Él escucha nuestros corazo-nes y abre las puertas que sólo Él puede abrir.

Doña María fue operada en cues-tión de días y una persona que deambulaba sin esperanza, hoy ha encontrado razón para vivir. “¿Te imaginás? Ahora hasta no-vio encontré, aunque sólo tengo un seno...” le comentó María a Angie.

En la Biblia leemos: “En aque-llos días, él (Jesús) fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios.” Yo imagino que sus pa-labras de inicio para aquella lar-ga reunión del Padre con el Hijo inició algo parecido a la solicitud del encuentro de María y Angie: “¡Hola Dios!”

Cada vez que un paciente ingresa por nuestras puertas, debemos recordar que, a pesar de contar con los mejores recursos médi-cos y tecnológicos del país y de América Latina, siempre debe-mos acudir al Médico Supremo y decirle: ¡Hola Dios!

Cuidando del prójimo

17XVII Edición

Page 18: Por su salud Nº 17

El nacimiento de la Academia Strachan es un retorno al pasa-do de nuestro hospital, cuando se creó la primera escuela de au-xiliares de enfermería en el país.

Volver a nuestrasraíces

18 XVII Edición

Dejando Huella

18 XVII Edición

Estudiantes de la Academia Strachan

Page 19: Por su salud Nº 17

Volver a nuestrasraíces Solventando las

necesidadesdel país

19XVII Edición

Con su apertura, se magnifi-có el sueño de seguir ofre-ciendo excelencia, pero esta vez en las aulas.

Este nuevo proyecto toma forma con la academia que inicia prime-ramente como instituto parauni-versitario, especializado en brindar diplomados en carreras vinculadas con el área de la salud, tan necesa-rias para el desarrollo del país.

El Centro de Formación Academia Strachan es una apuesta visionaria, que implicó años de estudio para analizar el mercado costarricense en cuanto a la carencia de carreras vitales no solo a nivel local, sino fundamentales para el mejora-miento continuo del centro médi-co.

Con esto, el Hospital Clínica Bíblica hace camino al andar, apoyando al sistema de salud costarricense, y en esta primera etapa se capa-cita a futuros técnicos en carreras como Asistente de Laboratorio, de Farmacia y de Registros Médicos y Estadísticas.

“Pero además, con su apertura se busca también darle oportunidad de estudios y empleo a las nuevas generaciones que en estos momen-tos están en carreras saturadas; así aportamos nuestro grano de are-na”, anota Heller Suazo, directora de Desarrollo Organizacional del Hospital Clínica Bíblica.

De gran valor

Una de las particularidades de esta academia, sin duda la constituye el respaldo de ochenta y cinco años de experiencia en el campo de la salud del Hospital Clínica Bíblica.

Se trata de buscar la excelencia al más alto nivel; por lo que la con-signa futura es ofrecer postgrados para especialidades médicas y en otras áreas donde exista la necesi-dad de talento humano en el país.

Pensando en esa mejora continua, se pretende implementar a mediano plazo un sistema de educación a distancia, tipo e-learning, que le facilite al estudiante el poder cursar materias teóricas desde la casa. Con esto se podrá llegar a una mayor población y brindar oportunidades a quienes no puedan trasladarse a un instituto para continuar con sus estudios. Y las horas prácticas sí se realizarán en el hospital.

Al ser este centro hospitalario un ente acreditado internacionalmen-te, los estudiantes adquirirán una preparación en los lineamientos de calidad internacional para el mejo-ramiento continuo.

La meta es lograr que esta acade-mia sea parte de los indicadores de evaluación de la Joint Commission International, y certifique su cali-dad a nivel mundial.

Page 20: Por su salud Nº 17

Estas palabras reflejan claramente el significado que tiene para Natalia Mondragón el tener la oportunidad de estudiar en la Academia Strachan.

“Grandemente bendecida”

Con veintinueve años de edad y madre soltera de un menor de ocho, ella encontró en Acción So-cial del Hospital Clínica Bíblica una bendición que, como ella misma dice, ha marcado su vida de mane-ra extraordinaria.

Sin contar con los recursos econó-micos necesarios para poder estu-diar, encontró el apoyo y el brazo solidario para enrumbarse y pen-sar que sí es posible salir adelante.

“A futuro, si está en mis manos, apo-yaré a otras personas para que pue-dan tener la oportunidad así como yo la tuve, y puedan superarse como yo lo estoy haciendo en este momento”.

Su historia comenzó a escribirse con otra tinta, tiempo atrás, cuan-do ella y su hijo recibieron asisten-cia en Acción Social y la Dra. Violeta Gutiérrez le habló precisamente de la posibilidad de recibir una beca al cien por ciento para Asistente de Laboratorio, Farmacia o Registros Médicos que imparte la academia.

“Muy motivada, escogí Asistente de Laboratorio; no cuento con los medios económicos para pagarme una carrera como esta, pero mis deseos de superación son gran-des”, añade Natalia, que trabaja medio tiempo en un call center en español.

“Me considero una mujer gran-demente bendecida por Dios”, menciona. “Si no hubiera recibido el apoyo tanto de la organización en sí como de las personas (entre las cuales cabe destacar a doña Laura Brenes, directora de Acción Social; Guadalupe Arias, trabaja-dora social; y Violeta Gutiérrez), no hubiera podido suplir las nece-sidades para estudiar, ya que me han ayudado no solo con la carrera sino también con las herramientas necesarias: cuadernos, uniforme y hasta computadora”, señala Mon-dragón, agradecida.

20 XVII Edición

Dejando Huella

Obras que dejaron huella

Cuando los esposos Enrique y Susana Strachan pisaron suelo costarricense en 1921, jamás se imaginaron que aquel sueño visionario de querer ayudar a otros, se transformaría con el pasar de los años en una obra que crece y se consolida en múltiples ac-ciones que dejan huella.

Ellos llegaron como parte de un gru-po de Misioneros Latinoamericanos, que al ver lo difícil de la atención de salud en el país, no solo por existir un único hospital (San Juan de Dios) sino porque los profesionales en la salud eran muy escasos, comenzaron a trabajar llevando alivio, soñando y forjando lo que vendría tiempo des-pués.

La forma de ser de ambos les permi-tió anticiparse y trazar un concepto en salud y bien social que se con-cretó en 1929, fecha en que nace el Hospital Clínico Bíblico, conocido por la gente años después como Hospital Clínica Bíblica.Ante esa realidad nacional, ellos también dieron su apoyo para crear la primera escuela de auxiliares de enfermería y poder contribuir con la atención de la salud de la población costarricense.De ahí que la academia lleve el nom-bre de sus fundadores, en honor a esos valores solidarios y cristianos que dejaron huella.

20 XVII Edición

Page 21: Por su salud Nº 17

Con diecinueve años de edad, la apertura de la academia le permitió acercarse a lo que es su próxima meta: Técnico en Farmacia.

“Lo que siempre quise estudiar”

Desde que conoció la creación de la Academia Strachan, Enoc José Contreras Rodríguez comenzó a vi-sualizar su objetivo de aprender y crecer profesionalmente.

“El hecho de que la institución pertenezca a uno de los mejores centros hospitalarios, fue sin duda un gran aliciente y la mejor reco-mendación; y sobre todo cuando supe que impartirían Farmacia, algo relacionado con lo que siem-pre quise estudiar”, menciona.

Muy optimista y contento por lo aprendido hasta la fecha, Enoc espera continuar creciendo de la mano de Dios y de la institución que ha sido un impulsor en la bús-queda de sus sueños.

“La enseñanza que he recibido ha sido excelente. Los profesores son amigables, pero nunca han dejado a un lado la disciplina”.

Ella afirma que esto no lo espe-raba en su vida, solo confía en que Dios continúe bendiciéndola y ayudándola, pues tal como afir-ma, “no es fácil ser madre, ama de casa, colaboradora de una em-presa y estudiante al mismo tiem-po; pero esta oportunidad la debo

y la voy a aprovechar al máximo para dar lo mejor de mí. Espero muy pronto verme laborando en el campo de la medicina, y por supuesto espero continuar estu-diando y así llegar a un nivel más alto cada vez”, menciona.

Capacitandopara servir

21XVII Edición

Page 22: Por su salud Nº 17

Su horizonte lo tiene muy claro: ser una ex-celente estudiante para que vean en ella una buena profesional y se le abran las puertas en un futuro próximo.

“Altamente motivada”Su sueño comenzó a gestarse a principios de

año, cuando ingresó a la carrera técnica de Asistente de Laboratorio en la Academia.

Calidad y respaldo

Desde el momento en que supo sobre la Academia Strachan, Zulema Obando Durán supo que debía estudiar ahí. “La imagen que posee es bastante buena, la charla previa que nos brindaron y las oportunidades que ofrecen me moti-van a hacer mejor las cosas día con día”.

Es por ello que espera terminar su carrera con éxito y desempeñarse como una bue-na profesional en el mediano plazo.Para Katherine Méndez Qui-

rós, una joven de diecinueve años, el respaldo y la calidad que posee la academia fue sin duda su principal motivo para adentrarse de lleno en este nuevo reto.

“Es accesible para cualquier persona en materia de dine-ro; actualmente no trabajo, y las facilidades que brinda este centro son de vital im-portancia”, comenta.

Ella menciona que le gusta mucho la manera en que los profesores imparten las lec-ciones, el ámbito del labo-ratorio clínico y todo lo que este conlleva. “Dominan la materia a la perfección y nos brindan sus conocimientos al cien por ciento, lo cual me garantiza que este es el lugar correcto para estudiar la carrera”, indica.

Mi meta es alcanzar el más alto nivel de calidad con respecto a mis conocimientos previamente adquiridos y aplicarlos de manera correcta, con el fin de obtener no sólo la satisfacción profesional de brindar lo mejor de mí, sino también de ayudar al impulso y el creci-miento del prestigio de esta institución.

22 XVII Edición

Dejando Huella

22 XVII Edición

Page 23: Por su salud Nº 17
Page 24: Por su salud Nº 17

Un granlegado

24 XVII Edición

De Portada

Con una mística que ha trascendido al paso de los años, el Hospital Clínica Bí-blica es parte de la historia de miles de costarricenses que por generaciones han encontrado en sus paredes y fuera de ellas el alivio ante la enfermedad, la prevención de la salud y la calidez hu-mana, pero ante todo la esperanza de soñar con un mañana mejor.

Page 25: Por su salud Nº 17

Un granlegado A través de la plataforma de Acción Social, el Hospital Clí-

nica Bíblica, a lo largo de sus ochenta y cinco años de existencia, ha facilitado el acceso a la salud integral de las poblaciones con factores de vulnerabilidad cultural, geográfica y socioeconómica, llegando a distintos secto-res de la sociedad en pro de un bienestar a nivel de salud en la población costarricense.

Marcando un camino

25XVII Edición

Desde sus inicios, hace varias décadas, ha sido un hospital fundado sobre los principios de

amor para Dios y el prójimo.

Fueron los esposos Harry y Susan Beamish de Strachan quienes se convirtieron medio siglo después de su nacimiento en los motores de este gran sueño. Ellos, con su dedicación y entrega al servicio de la humanidad, transformaron vidas en toda la región, gracias al trabajo desarrollado con lo que se denominó en aquel entonces

“Campaña para la Evangelización de América Latina”.

Si bien en un principio Costa Rica no era la prioridad entre sus pla-nes, pues visualizaban otro desti-no, Dios les tenía otro plan y poco a poco fue marcándoles un cami-no lleno de grandes sorpresas y gratificaciones.

Era 1921 y las condiciones de la salud pública en el país eran di-fíciles; enfermedades endémicas como el paludismo y la tubercu-losis diezmaban a la población,

Continua pág 28

Page 26: Por su salud Nº 17

26 XVII Edición

De Portada

De excelencia

El Hospital Clínica Bíblica ha logra-do desarrollar todo un engranaje que lo distingue en calidad, segu-ridad y tecnología en el proceso de la atención hospitalaria. Con vi-sión y entrega ha sabido tejer una historia de grandes éxitos para la-mejora de la calidad de vida en la población costarricense.

¿Cómo lo ha hecho? Con el esta-blecimiento de metas en cada uno de sus procesos.

Uno de ellos lo constituye la acre-ditación internacional, por tercera vez consecutiva, de parte de Joint Commission International (JCI), que lo cataloga como un hospital de clase mundial donde la calidad y ante todo la seguridad hospitala-ria son una consigna.Esto ha significado que sea el cen-tro hospitalario de referencia para grandes acontecimientos interna-cionales en los que el país ha sido sede. La Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA, los Juegos Cen-troamericanos, la visita del presi-dente de los Estados Unidos, Sr. Barack Obama, y diversas misio-nes internacionales, son parte de la cultura de excelencia que posee el Hospital Clínica Bíblica y lo han hecho ser merecedor de esa con-

fianza, a la que solo los grandes centros pueden aspirar.

Un trabajo continuo

Sin embargo, la visión del hospital siempre ha ido adelante, ambicio-nando y gestando nuevos objeti-vos en toda su integralidad. Uno de ellos fue, años atrás, cuando se decidió su participación en el proceso de Bandera Azul Ecológi-ca impulsado por el Instituto de Acueductos y Alcantarillados; el centro obtuvo el galardón tiempo después, consciente de que es un compromiso continuo que debe mantenerse año tras año.Lo mismo ha ocurrido a nivel de infraestructura, equipamiento, alianzas y capacitación médica, donde se han podido intercambiar conocimientos sobre diversas téc-nicas quirúrgicas e innovaciones en distintas áreas de estas ciencias de la salud, con hospitales como Cleveland Clinic, catalogado entre los mejores de Estados Unidos.El desarrollo de un laboratorio de hemodinamia, y un novedoso equipo que permite tratar proble-mas coronarios en Latinoamérica, son parte del abanico de posibili-dades que solo un hospital líder puede tener.Además, se han realizado con-

Siempre ha estado a la vanguardia. Desde que abrió sus puertas, el Hospital Clínica Bí-blica se ha convertido en un centro hospita-lario por excelencia, que marca la pauta local e internacionalmente.

Page 27: Por su salud Nº 17

Construyendouna nueva etapa

27XVII Edición

venios con hospitales de clase mundial, así como entidades lo-cales de gran prestigio, como el proyecto público-privado entre el Instituto Tecnológico de Cos-ta Rica, a través de su Centro de Investigación en Biotecnología, con el fin de desarrollar células de piel para procedimientos re-constructivos en pacientes que así lo requieran; y más reciente-mente con el Hospital de Florida, en los Estados Unidos, convenio que permitirá a ambos centros retroalimentarse en el campo médico y científico.

Tecnología de punta

Entre las diversas mejoras que se han implementado con los años, está el ultrasonido intravascular, lo más especializado en ultraso-nidos intracoronarios, que permi-te ver las arterias del corazón por dentro, además de observar las placas de colesterol directamen-te para obtener un diagnóstico más preciso del paciente.Y es que, pensando en mejorar la calidad de vida del paciente, el hospital introdujo tiempo atrás una cámara de flujo laminar; un novedoso equipo que permi-te la preparación de soluciones de medicamentos y mezclas de alimentación intravenosas para cuidar a los pacientes que lo ne-cesiten durante su proceso de convalecencia.

Al alcance

Otro de los avances del hospital ha sido “Lexi Comp”, una nove-dosa herramienta tecnológica

que consiste en un programa en línea que tiene acceso a doce base de datos relacionadas con información de todo tipo dirigida a los médicos, farmacéuticos y el resto del personal del centro hos-pitalario.Informed también es otra iniciati-va desarrollada en el Hospital Clí-nica Bíblica, con el fin de que los médicos y profesionales de diver-sas disciplinas puedan acceder a cientos de títulos y publicaciones especializadas de las más presti-giosas del mundo.Además, a través de la Asocia-ción Médica del Hospital Clínica Bíblica, se han realizado diversas capacitaciones en educación mé-dica continua tanto para médicos generales como para especialis-tas, con expositores internacio-nales del más alto nivel.

Procedimientos de punta

Como parte de esa mejora conti-nua, en el 2012 el hospital realizó el primer reemplazo de válvula aórtica por vía percutánea (pe-queña incisión en la piel) para tratar la estenosis severa, un pa-decimiento que reduce la irriga-ción de la sangre del corazón al resto del organismo.

También realizó un procedimien-to único en la región centroame-ricana, al aplicar la ciencia en el vientre materno con una cirugía fetoscópica láser, para tratar el síndrome de transfusión feto-feto, procedimiento que fue todo un éxito.

Page 28: Por su salud Nº 17

28 XVII Edición

De Portada

especialmente a aquellas personas que vivían en zonas bajas y costeras. En San José solo existía el Hospital San Juan de Dios, que en múltiples ocasiones se encontraba congestio-nado, con dos pacientes por cama y muchas veces instalados sobre col-chones en los pasillos.

Todavía no existía la seguridad so-cial en territorio costarricense. Tampoco la Facultad de Medicina, ni la de Enfermería, ya que la Uni-versidad de Costa Rica no se había establecido.

Toda esa situación preocupó a doña Susana, quien había recibido en Londres un año de especialización en obstetricia, y se asombraba al ver las condiciones de vulnerabili-dad en que algunas mujeres daban a luz.

Con fe y convicción

Si algo marcó la vida de los Stra-chan, fue su amor hacia el prójimo; desde un inicio, ellos hicieron lo hu-manamente posible para mejorar las condiciones de vida de cientos de niños y familias costarricenses.

Sin embargo, resolver la situación que reflejaba la Costa Rica de aquel entonces, parecía una labor titáni-ca para esa pareja misionera. Pero llenos de fe, oraron y le pidieron a Dios que les iluminara cada paso; y fue así como se encontraron plena-mente convencidos de que debían arar el camino en lo que por mo-mentos parecía un desierto.

Tiempo después, la voluntad del

Viene pág 25

Page 29: Por su salud Nº 17

Mirando hacia elfuturo

29XVII Edición

Creador se manifestó y engrande-ció para llevar a cabo este sueño posible.

El Hospital Clínico Bíblico, como se llamó en un principio, surgió como una noble causa social. Un 14 de julio de 1929 se abrieron sus puer-tas. Lo que parecía impensable fue logrado, el Señor siempre pro-veyó, se compró una propiedad y poco a poco, se alcanzaron los fondos necesarios para ir suplien-do las necesidades. Así se constru-yó una segunda planta y se fueron ampliando los horizontes.

Tiempo después, apareció una gran mujer en la vida de esta insti-tución: la Dra. Marie Cameron.

Abriendo puertas

En su discurso inaugural, el Sr. Enrique Strachan dijo: “Pero, pre-guntará alguien, ¿de dónde en-tonces viene todo el dinero que ha hecho posible una obra tan grande? Es una pregunta natural y lógica, la cual contesto así: En pri-mer lugar, todo es el resultado de la oración. Esto puede parecer una respuesta simplista para muchos, en vista de que para una inmen-sa mayoría de personas la oración es letra muerta. Sin embargo, esa es la verdad. Dios no es el Dios de muertos, sino de vivos, y de la mis-ma manera que hizo milagros en el pasado, así los repite hoy cuan-do existen las condiciones que los produzcan, es a saber: la fe y la obediencia. Así es que cada día en nuestra institución buscamos la dirección, la bendición y la ayuda

de Dios en todo lo que nos pro-ponemos. Y creemos firmemente que si después de nuestra petición Él nos inspira a embarcarnos en al-guna tarea para Su gloria y para el bienestar de nuestros semejantes, entonces Él se encargará, de una manera u otra, de proveer lo nece-sario para su realización”.

Esas palabras reflejan claramente como la mano bondadosa de Dios ha permitido convertir al Hospital Clínica Bíblica en un pionero de la excelencia, en una institución que inspira y es ejemplo con cada obra que realiza.

Quienes han pasado por este centro hospitalario lo saben muy bien; donde parece que se cierra una puerta, se abren otras tres para magnificar una obra, una ac-ción en beneficio de los demás.

Así lo indicaba don Héctor Alfaro Hernández, quien se convirtió en el administrador del hospital, lue-go de que la Misión Latinoameri-cana dejara este gran proyecto, pues era imposible mantenerlo. “No podían endeudarse, no po-dían conseguir un préstamo; en-tonces, con gran pesar, nos indi-caron que hasta aquí llegaban”, recuerda.

Corría el año 1968, y fue a partir de ese momento que un grupo de médicos encabezados por el Dr. Cabezas López, dijeron “nosotros lo administramos”.

“Comenzamos con nada, tuvimos que pagarles a ellos un poco de

Page 30: Por su salud Nº 17

30 XVII Edición

De Portada

inventario, medicinas, ropa. Y comenzamos como una sociedad anónima. En el año 1973 se cons-tituye bajo el nombre de Aseme-co”, menciona don Héctor, anti-guo administrador del hospital.

Un proyecto visionario

Los retos eran múltiples; había que mejorar infraestructura, fa-cilitar mayores condiciones a los pacientes, y equipo, y no se con-taba con el dinero necesario.

No obstante, como el mismo don Héctor recuerda, Dios siempre les marcó el camino y fue abrien-do puertas, donde parecía que nunca se abrirían. “Siempre Dios ha intervenido en este hospital”, señala.

A partir de ese momento, co-mienza a gestarse una nueva era en la historia de esta gran insti-tución: curar a todo aquel que lo necesitara, sin dejar de lado la ayuda social y espiritual. Aquel proyecto visionario se expandió y ha sabido reinventarse y evolu-cionar con el pasar de los años.

Acción Social del Hospital Clíni-ca Bíblica es un claro ejemplo de cómo algo que en estos tiempos se podría llamar responsabilidad social empresarial, marcó el nor-te desde un inicio, décadas atrás. Ahora es una institución octoge-naria que ha transformado mu-chas vidas a través de los años.

Su fórmula ha sido mantener la visión de salud integral, a la que se ha dedicado esfuerzos y recur-

sos para convertir en realidad los sueños de poblaciones en vulnerabilidad social.

Gracias a esta consigna, ha podido aliviar la carga y mejorar la salud de muchas familias y en especial de mujeres en todo el país, en una labor que requiere la participación directa de los actores de la comunidad comprometidos solidariamente con la salud integral de su pueblo.

La unidad móvil Lazos, que ha recorrido diferentes comunidades en el territorio nacional y que brinda la oportunidad de detectar el cáncer de mama en forma temprana (algo vital para salvar la vida de cientos de mujeres), es parte de lo que este hospital ha sabido construir durante su larga vida.En la ruta hacia la excelencia, convirtió un compromiso voluntario en una práctica de vanguardia, y hoy es un hospital acreditado por tercera vez consecutiva por Joint Commission International (JCI). En un reencuentro con su pasado, creó recientemente la Academia Strachan; un proyecto que solventará a futuro las necesidades de cientos de jóvenes y profesionales médicos. Además, cuenta con uno de los mejores programas de educación al paciente, que cuida, educa y protege a la población costarricense.

Son ochenta y cinco años de hacer historia y de calar en la vida de cada uno de ustedes.

Fuentes consultadas: Sr. Héctor Alfaro Hernández Ex administrador del Hospital Clínica BíblicaUna reseña histórica. Nuestra Clínica. Recopilación de Franklin Cabezas B. 1996

Page 31: Por su salud Nº 17

31XVII Edición

Page 32: Por su salud Nº 17

32 XVII Edición

De Portada

En pro del desarrollo social

Con esas palabras se refiere el pa-dre de la Iglesia La Soledad, Car-los Humberto Rojas Sánchez, a la labor que el hospital ha desarro-llado a lo largo de ochenta y cinco años.

Para él, sin duda la institución fue más allá de mejorar la salud de la población costarricense, pues también se ha proyectado a la comunidad para ser un apoyo in-condicional en todo momento.

“Es digno de alabar la presencia social que ha tenido este cen-tro hospitalario en el tiempo. Yo nací en el Hospital Clínica Bíblica y mis hermanos también. Quiero a este hospital, pero esa cercanía afectiva va más allá, al conversar con personas de los alrededores y conocer los diversos apoyos en campañas de salud, en obras ma-teriales y sociales, que benefician a nuestra comunidad”, anota el padre Rojas.

“En los tres años que llevo de es-tar en la Iglesia La Soledad, hemos

vistos esos beneficios; estábamos en una situación muy crítica de abandono, hubo que habilitar ciertos servicios tanto en la igle-sia como en el salón parroquial, y el hospital nos donó mobiliario y tuvo un papel importante”, aña-de.

“Yo pienso que los costarricenses somos muy fieles al hospital pre-cisamente porque de una u otra forma sabemos que estamos co-laborando para que otras perso-nas puedan tener acceso a servi-cios médicos. La mística espiritual que posee este centro es algo que conocemos”.

El Hospital Clínica Bíblica cons-tituye un buen testimonio de lo que es la responsabilidad social empresarial, y un ejemplo muy visible de cómo se puede invertir las ganancias en la sociedad mis-ma, para construir una Costa Rica más justa, más solidaria, y en bus-ca de la equidad en las poblacio-nes vulnerables.

“Hay una frase muy buena que dice así: ‘ce-sen las palabras y que hablen las obras’; y el Hospital Clínica Bíblica en esto posee mu-cha solidez y ejemplos que demostrar”.

Page 33: Por su salud Nº 17

El fruto de un enorme esfuerzo

33XVII Edición

Por el acontecimiento tan especial de celebrar los ochenta y cinco años de existencia del Hospital Clínica Bíblica, quiero manifestar que para mí es un honor escribirles como paciente y como representante de los pacientes en la Junta de Salud.

Hace apenas un año comencé a hacer uso de los servicios de salud en nuestros Ebais, y en varias ocasiones he manifestado mi gratitud y satisfacción por la forma en que he sido aten-dido en todas las secciones del centro de salud. lguales mani-festaciones he escuchado de múltiples personas con las que he mantenido alguna conversación relacionada con los servicios que ustedes prestan en nuestras comunidades.

He leído con todo cuidado la información que a través de bo-letines y otros medios nos han brindado, y que es una herra-mienta para efectuar una mejor gestión como miembros de la junta. También he seguido con atención los informes brinda-dos por el Área de Salud San Sebastián - Paso Ancho, y de ellos he concluido que realizan una gran labor en beneficio de las comunidades cubiertas por dicha área.

Como asegurados, expresamos nuestra gratitud.

¡Y adelante!, en procura de mejores índices de salud cada día.

Atentamente,Quírico Céspedes HerreraRepresentante de pacientesJunta de Salud Área de Salud de San Sebastián y Paso AnchoConvenio Caja Costarricense del Seguro Social -ASEMECO

Gratitud y satisfacción

Page 34: Por su salud Nº 17

34 XVII Edición

De Portada

Tuve la oportunidad de pertenecer a la Junta de Salud del Ebais de la Carpio en los años 2007, 2009 y 2010; y fue muy importante mirar poco a poco la transformación del Ebais que tenemos actualmente.

Hoy, tenemos un Ebais muy bueno. Se cuenta con nueve y tres preconsultas odontológicas. La Carpio es una comunidad privilegiada no solo por la in-fraestructura que ya existe, sino también por la esencia de la gente.

Felicito a Asemeco, al Hospital Clínica Bíblica, y a todo el personal por la mejora en la calidad de atención hacia los usuarios.

Presidenta de Aso CodecaNorhellen Jiménez CalderónÁrea de Salud de la Carpio, San JoséConvenio Caja Costarricense del Seguro Social -ASEMECO

Reciban un cordial saludo en nombre del personal de nuestra institución, el Cen-Cinai de León XIII, que brinda servicios de alimentación y educación a cien niños y niñas, cuyas edades oscilan de los dos y los seis años.

Nuestro centro se ubica en una zona de alto riesgo social y económico, debido al alto nivel de delincuencia, y sus beneficiarios viven en condiciones de pobre-za extrema. Es por ello que uno de nuestros objetivos en el área de nutrición, es promover la calidad de vida a través de un sano suministro de alimentos, ya que la mayoría de nuestros beneficiarios sufren desnutrición leve o moderada.

Agradecemos a todo su personal por su valiosa colaboración a lo largo de este tiempo. Han sido de gran ayuda para nuestra población infantil.

Esperamos seguir contando con su apoyo. Muchas felicidades en su aniversario.

Licda. Beatriz DíazDirectora CEN- CINAI, León XIII San José

De gran apoyo

Una comunidad privilegiada

Page 35: Por su salud Nº 17
Page 36: Por su salud Nº 17

Entre acordes, gubias y un

“Contar con este gran vecino ha significado para nosotros algo muy positivo, que nos da seguridad pero ante todo tranquilidad, ya que por muchos años, cuando no existía la Torre Omega, estuvimos solos. Es un sector donde la historia trasciende”, asevera Martín Prada.

36 XVII Edición

De Portada

Con una herencia de más de un siglo, ellos le dan vida a un oficio que ha trascendido las barreras del tiempo. Su trabajo encanta, emociona, pero ante todo deleita, viajando por el mundo con sus finos acordes; y está asentado allí, a la par de su gran vecino: el Hospital Clínica Bíblica.

36 XVII Edición

Page 37: Por su salud Nº 17

gubias y un Proyectándonos

37XVII Edición

Ellos son luthieres que por décadas han aprendido a darle voz a cada uno de los instrumentos que llegan a sus

manos. La familia Prada ha sabido mantener su estirpe a través de los años; poseen la sensibilidad para valorar la música y entender las necesidades del intérprete; y percibirla hasta lograr esa acústica ideal.

Tal ha sido su precisión y la excelencia con la que construyen o restauran un violín, una viola o cualquier otro instrumento de arco, que con su legado enamoran dentro y fuera de nuestras fronteras.

Todo comienza a gestarse en el sur de la capital, donde levantaron un sueño en una casa construida en 1910, y junto a la cual, diecinueve años después, se tejería otra gran obra con la que compartirían el ideal de crecer y ante todo de lograr la excelencia: el Hospital Clínico Bíblico (como se le llamó en un principio).

La historia detrás de esta familia de luthieres se desarrolla a la par de un gran gran baluarte de generaciones de costarricenses: el Hospital Clínica Bíblica, que ha sido testigo fiel de cómo estos maestros de la música han prevalecido en el tiempo con sus obras de ingeniería. Así como los Prada comenzaron a

formar cada acorde, más de un siglo atrás, sus vecinos también han ido cimentando las bases de un sueño que cuida y mejora la calidad de vida de cientos de personas que han recorrido alguna vez sus diversos pasillos.

Fue don Jesús Prada, el abuelo de don Martín, quien observó, al llegar a suelo costarricense, la gran necesidad que existía en aquel momento de reparar y hacer ajustes a instrumentos como guitarras y violines, que venían del otro lado del charco.

Siendo niño descubrió su gran talento, y de manera autodidacta comenzó a trazar las finas curvas y líneas de una vida ligada a los sonidos.En ese lugar comenzaron a darse a conocer, como vecinos cercanos y espectadores de un hospital que por años ha cuidado y velado a diario sus sueños.

Cuenta don Martín, que sin duda el tener al hospital tan cerca ha sido una gran bendición. “Siempre hemos estado ligados de una u otra forma; mi primo, el ginecólogo Carlos Prada Díaz (qDp), operaba mucho allí; y nosotros, cuando hemos tenido alguna dolencia, hemos recurrido al centro hospitalario.

Page 38: Por su salud Nº 17

38 XVII Edición

De Portada

Un gran talentoAunque su abuelo murió muy joven, las páginas siguen escribiéndose en las manos de su hijo Manuel, quien fuera padre de don Martín y tuvo la oportunidad de despertar y transmitir en su hijo este gran legado.Con el tiempo, Martín pudo encontrar en lo que denominaron Casa Prada 1900 la pasión para desarrollar el oficio de sus amores. Combinó la habilidad y su talento innato con estudios en la ciudad de Cremona, Italia, cuna de este arte. Ahí perfeccionó la técnica y los secretos que esa antigua casa de madera ha compilado por generaciones y que hoy resguarda como un verdadero tesoro. “Cuando mi abuelo murió, mi padre tenía siete años. Yo no conocí a mi abuelo; pero es esa parte afectiva, de emociones, de sentimientos, de abrazar una profesión en un vínculo sanguíneo, lo que va sumando”, dice Martín Prada, tercera generación de Casa Prada 1900, Laboratorio di Luiteria.Don Jesús Prada produjo muchísimo; él era un asturiano, un músico que tocaba su guitarra y supo tallar la madera con gran maestría. Al ver la necesidad de reparar y construir los instrumentos de arco que venían de otras partes del mundo, descubrió que él mismo podía hacerlo. Y justamente así comenzó a gestarse todo.“Mi abuelo tallaba tan bien que tuvo la oportunidad de hacer diversos tallados en las puertas de la Iglesia La Merced”, recuerda Martín Prada, maestro liutaio.

Nuevas generaciones

Gracias a la dedicación y la excelencia que caracterizan a los Prada, poco a poco su trabajo comenzó a darle la vuelta al mundo; al igual que iba ocurriendo con el centro médico. Un músico por aquí y otro por allá se convirtieron en el mejor portafolio para que diversos músicos e instrumentistas hagan vibrar sus acordes con un Prada.¿Cómo lo lograron? Trabajando con ahínco, entre acordes, maderas y matices, fieles protagonistas de cómo un luthier puede llenar de vida, de alma y de historia los sonidos que se expresan con el tiempo; pero también de cómo la excelencia puede prevalecer cuando se hacen las cosas bien.

“Ha habido una huella que nos ha marcado. Tengo cuarenta años de trabajar en la profesión; y desde que nació la Orquesta Sinfónica Juvenil, le doy mantenimiento y además restauro”, señala Martín Prada.

Y es que cuando surgió la Orquesta Sinfónica Juvenil y se produjo la reestructuración de la Orquesta Sinfónica Nacional hace cuarenta años, ya los Prada tenían muchos años de brindar el servicio en familia, para muchos países del mundo.Ellos elaboran las piezas como se hacía antiguamente, empleando los mismos métodos de construcción y preparación de los barnices y las resinas naturales. “Todos los materiales son traídos de Europa, especialmente de Italia”, indica el tercero de estos talentosos hombres, luthieres que con alma, vida y corazón llevan la excelencia en sus venas y han podido dejar huella al igual que su flamante vecino, con el que por años se han acompañado mutuamente.

Page 39: Por su salud Nº 17

39XVII Edición

Page 40: Por su salud Nº 17

85 años de hacer

40 XVII Edición

Dosis Espiritual

10“Que te alaben, Señor, todas tus obras;

que te bendigan tus fieles. 11 Que hablen

de la gloria de tu reino; que proclamen tus

proezas, 12 para que todo el mundo conoz-

ca tus proezas y la gloria y esplendor de tu

reino” (Salmo 145:10-12, NVI)

Por Sixto PorrasDirector regionalEnfoque a la Familia

40 XVII Edición

Page 41: Por su salud Nº 17

85 años de hacer historia La dedicaciónde nuestroscolaboradores

41XVII Edición

Los designios de Dios siempre nos sorprenden. Que lo diga el testimonio fiel del Hospital Clínica Bí-

blica.

Es la Misión Latinoamericana quien funda, como parte de su visión evangelizadora, el Hos-pital Clínico Bíblico (así se le llamó en sus orígenes; con el pasar del tiempo la gente co-menzó a llamarle Clínica Bíblica y así se quedó). Todo comienza a gestarse en el corazón de don Enrique y doña Susana Stra-chan; ellos tenían el sueño de impulsar un hospital que aten-diera a los más necesitados y, así aportar para la mejora de los índices de salud del país.

En 1968, la Misión Latinoame-ricana deja el Hospital Clínica Bíblica en manos de naciona-les. Pero no existían los recur-sos necesarios para enfrentar la tarea, de modo que todos los empleados dieron parte de su salario para mantener la operación. Desde entonces, fueron hombres y mujeres cos-tarricenses los que asumieron el reto de llevar adelante esta gran aventura, y perseveraron.

En múltiples ocasiones, clama-ron a Dios por milagros… y los vieron. Fueron ellos los que se convirtieron en héroes de la fe.

Hoy, el Hospital Clínica Bíblica, a sus ochenta y cinco años, con su longeva y plena experiencia, se levanta con más de mil cien personas al servicio de Costa Rica y con proyectos en marcha que traen salud y esperanza.

Una obra de feA paso firme y con una visión renovada, se puso a caminar con miras a los años que esta-ban por venir, al tiempo que se consolidaba como la clínica pri-vada más prestigiosa del país. Dirigidos por una junta directi-va que sirve voluntariamente, con un equipo de profesionales del más alto nivel y en un cre-cimiento constante, el Hospital Clínica Bíblica se erige para se-guir haciendo historia con un espíritu de obediencia y fideli-dad a nuestro Señor Jesucristo.

Pero no solo eso; la mística de trabajo y la lealtad de todo el personal, inspirado en los valo-res de la solidaridad, la integri-

Page 42: Por su salud Nº 17

42 XVII Edición

Dosis Espiritual

Un legado inspirador

El destino no es producto de la suerte; es el resultado de las de-cisiones que tomamos y de com-prender que siempre tiene que inspirarnos una visión que nos haga caminar hacia un mejor mañana.

Quien deja de soñar, comienza a morir, porque todo lo que hace se circunscribe a satisfacer las necesidades del presente. Man-tenerse ocupado es muy fácil, pero el escribir la historia solo lo logran los soñadores de Dios. Y es mientras caminamos cuando nuestras fuerzas son renovadas, al igual que Abraham, pues fue en su vejez cuando vio cumplido todo lo que Dios le había prome-tido. Es entonces cuando se con-vierte en el “padre de la fe”, el originario de una bendición que ha bañado a todas las familias de la tierra porque se mantuvo mirando al invisible, al único y su-premo Dios.

En los momentos difíciles, Dios levantó án-geles que con sacrificio, entrega y dedi-cación le dijeron “sí” a esta misión que ha inspirado este ministerio de Dios.

Page 43: Por su salud Nº 17

Hacia la excelencia

43XVII Edición

El legado que se levanta después de ochenta y cinco años es de excelencia, honestidad y amor al prójimo. No han perdido la pasión, el deseo de servicio y las ganas de superarse.

dad, la innovación, el buen servi-cio al cliente y la cooperación, han hecho del Hospital Clínica Bíblica una entidad con sentido humano. Todos los colaboradores, en dife-rentes circunstancias, han respon-dido con identificación y empatía. Sin ello, hubiera sido imposible cumplir la misión que Dios puso en el corazón de los misioneros don Enrique y doña Susana Stra-chan. Esta es una buena oportunidad para levantar la mirada al cielo y dar gracias a Dios porque ha hecho maravillas en momentos cruciales, porque ha remozado la visión y ha puesto personas extraordinarias a servir en este ministerio inspirado en el corazón de Dios.

Solo celebran los valientes, los que en lugar de rendirse, conti-núan. Celebran los que dijeron “presente” en los momentos de-cisivos del Hospital Clínica Bíblica. Los que con tesón eligieron levan-tar la frente para comprender que el servir a los demás y ofrecer lo mejor no es una opción: es un im-perativo. Solo celebran quienes le permiten a Dios convertirse en el centro de su existencia y han com-prendido que nuestro paso por la vida no es una tarea egocéntrica, sino un patrimonio que dejamos a las nuevas generaciones. Cuando Dios llamó a Abraham para convertirlo en el padre de

multitudes, lo puso a contar estre-llas en el cielo y le ordenó que ca-minara en obediencia, y Abraham saludó con esperanza el cumpli-miento de esa promesa.

Por eso, la Biblia dice de Abraham que fue un hombre que depositó en Dios su confianza: “8 Por la fe Abraham, cuando fue llamado para ir a un lugar que más tarde recibiría como herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba. 9 Por la fe se radicó como extranjero en la tierra prometida, y habitó en tiendas de campaña con Isaac y Jacob, herederos también de la misma promesa, 10 porque esperaba la ciudad de cimientos sólidos, de la cual Dios es arquitecto y constructor. 11 Por la fe Abraham, a pesar de su avanzada edad y de que Sara misma era estéril, recibió fuerza para tener hijos, porque consideró fiel al que le había hecho la promesa. 12 Así que de este solo hombre, ya en decadencia, nacieron descendientes numerosos como las estrellas del cielo e incontables como la arena a la orilla del mar” (Hebreos 11:8-12, NVI).Igual que Abraham, hoy somos testigos fieles de que Dios cumple lo que promete, trae nuevas fuer-zas cuando estas se han extingui-do y recibimos lo que Él ha dicho que será la herencia para quienes vienen detrás de nosotros.

Page 44: Por su salud Nº 17

La música tiene la virtud de es-timular nuestro cerebro y ha-cerlo reaccionar de diversas maneras. Una hermosa melo-

día nos conmueve, una música de suspenso nos inquieta, una canción alegre y rítmica nos puede hacer saltar de alegría, y una obra musical nos puede relajar hasta producirnos tanta paz que nos hace dormir.Pero la música también es curativa, no sólo para el espíritu, sino también para ciertos padecimientos físicos.

La música es una maravillosa medi-cina, y para nosotros, en la Orquesta Filarmónica, celebrar el 85 aniver-sario del Hospital Clínica Bíblica es algo que va más allá de un simple concierto; es un reconocimiento a una institución dedicada a ayudar y servir en el campo de la salud con pasión y excelencia.

Marvin ArayaDirectorOrquesta Filarmónica de Costa Rica

Tiene un poder mágico que trasciende; ¿pero sabían que la música también es curativa, no sólo para el espíritu, sino incluso para ciertos pa-decimientos físicos? Con música reconocemos a una institución dedicada a ayudar y servir en el campo de la salud con una gran mística.

Una maravillosa medicina

44 XVII Edición

Dosis Espiritual

Estamos orgullosos de com-partir con ustedes el talento que Dios nos dio, y celebrar juntos este aniversario, llenos de gratitud y mucha alegría.

Page 45: Por su salud Nº 17

45XVII Edición

Page 46: Por su salud Nº 17

La grandeza de servir

Cuando todo lo que se hace está fun-dado en el amor y el servicio, su destino es la grandeza.

46 XVII Edición

Dosis Espiritual

Pastor Luciano Romero*

Page 47: Por su salud Nº 17

Para compartir este articulo permítanme hacer men-ción parcial del discurso de inauguración del Hospital

Clínica Bíblica, que pronunció don Enrique Strachan el 14 de julio de 1929: “Este hospital será fundado sobre los principios evangélicos de amor para con Dios y el prójimo… Jesucristo sanó, sin distinción reli-giosa, a todos los enfermos que a él llegaron. Nosotros, siguiendo su ejemplo, procuraremos hacer lo mismo”. Esas palabras que fueron expresados hace ochenta y cinco años, se convirtieron en el funda-mento y la semilla de lo que hoy celebramos con gratitud a Dios.

En el evangelio de Lucas 22:24-30, dice: “Hubo también entre ellos una disputa sobre quién sería el mayor. Pero él les dijo: Los reyes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que sobre ellas tienen autoridad son llamados bienhe-chores; mas no así vosotros, sino sea el mayor entre vosotros como el más joven, y el que dirige, como el que sirve. Porque, ¿cuál es ma-yor, el que se sienta a la mesa, o el que sirve? ¿No es el que se sien-ta a la mesa? Mas yo estoy entre vosotros como el que sirve. Pero vosotros sois los que habéis per-manecido conmigo en mis prue-bas. Yo, pues, os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí, para que comáis y bebáis a mi mesa en mi reino, y os sentéis en tronos juzgando a las doce tribus de Israel”.

Cuando Jesús se encuentra con esta disputa, aprovecha no sola-mente para enseñar, sino también para romper algo que los hombres habían adoptado por naturaleza; incluso retoma una pregunta an-terior de sus discípulos: “¿Quién es el mayor en el reino de los cie-los?” (Mateo 18:1).

El escenario nos presenta a la ma-dre de dos de los apóstoles (Ja-cobo y Juan), arrodillada frente a Jesús, con sus dos hijos a su lado. Inclusive se trataba de un tema advertido por Jesús desde el capí-tulo 18 de Mateo. Pero allí estaba la madre, intercediendo por sus hijos. Obviamente, la madre esta-ba pidiendo lo que en el seno de la familia, los hijos ya habían ex-presado como deseo. El favor es planteado así: “Ordena que en tu reino uno de estos hijos míos se siente a tu derecha y el otro a tu izquierda” (Mateo 20:21). Aquí la petición no es una ocurrencia de la madre; Jesús lo sabe y por eso contesta en plural en el verso 22: “No saben lo que están pidiendo”.

Para Jacobo y Juan, como para su madre, el concepto de grandeza que conocían era dependiendo del lugar que uno ocupa en rela-ción a aquel que consideramos el más grande, pero Jesús es categó-rico en su respuesta acerca de cuál debe ser el modo de entender la grandeza, al afirmar: “Pero entre ustedes no debe ser así” (Mateo 20:26a). Luego introduce una fra-se: “entre ustedes” (verso 26b).

Siempre a la vanguardia

47XVII Edición

Los conceptos y modelos de grandeza que el hombre maneja son contrarios a los de Dios.

Page 48: Por su salud Nº 17

Habla de una búsqueda del cora-zón humano, por decisión propia y para complacencia propia; rom-pe con la condición interna y de-clara que la única grandeza que el Reino de Dios comprende, ES LA GRANDEZA DEL SERVICIO.

Mateo 20:25-28: “Entonces Je-sús, llamándolos, dijo: Sabéis que los gobernantes de las na-ciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero en-tre vosotros será vuestro siervo; como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos”.

Y les enseña:● “con ustedes será diferente”, les da a entender el Señor;● no deben tener el modelo del mundo de señor–siervo;● deben cambiar su modo de pensar;● deben actuar conforme al nue-vo modelo del servicio dado por él mismo.

Amor y servicioSin duda, el Hospital Clínica Bíblica, tras ochenta y cinco años de servicio, hoy ocupa un lugar de liderazgo; es una gran institución de vanguardia con grandes logros y reconocimientos, y la razón es que fue fundada bajo el principio del amor y el servicio, y eso trae como fruto la grandeza.

Solo podemos decir: ¡Todo se lo debemos a Dios; la gratitud, el honor, la adoración y el servicio, todo por Dios y para Dios! Lo que nos mueve a trabajar, a soñar, son el amor y el servicio. Y estoy seguro de que lo que viene será todavía mayor al presente.

Mi mensaje para Dios, Salmo 145:10-11:

“¡Que te alaben, Señor, todas tus obras! ¡Que te bendigan tus fie-les! ¡Que anuncien tus grandes hechos para que todo el mundo los conozca!”

Mi mensaje para mis compañe-ros, Hebreos 6:9-12:

“Queridos amigos, aunque ha-blamos de este modo, no cree-mos que esto se aplica a ustedes. Estamos convencidos de que ustedes están destinados para cosas mejores, las cuales vie-nen con la salvación. Pues Dios no es injusto. No olvidará con cuánto esfuerzo han trabajado para Él y cómo han demostrado su amor por Él, sirviendo a otros creyentes como todavía lo hacen. Nuestro gran deseo es que sigan amando a los demás mientras tengan vida, para asegurarse de que lo que esperan se hará rea-lidad. Entonces, no se volverán torpes ni indiferentes espiritual-mente. En cambio, seguirán el ejemplo de quienes, gracias a su fe y perseverancia, heredarán las promesas de Dios”.

48 XVII Edición

Dosis Espiritual

Tendencia a pensar en un alto concepto de uno mismo.

Llegar a la grandeza solo porque se quiere llegar, hasta sin impor-tar quienes sean afec-tados con tal de alcan-zar la grandeza,

Tener el concepto de grandeza basado en posiciones y funciones, etc.

Lucas 22: 24-30 muestra algunas

características de la naturaleza humana:

*El pastor Luciano Romero Acevedo es miembro de la Junta Directiva y pastor principal de la iglesia Casa de Alabanza, con sede en Bello Horizonte, del Centro Comercial Plaza Montescazú 600 metros al este, Escazú. Tel. 2228-5626; correo electrónico: [email protected] /casadealabanzacr.or

Page 49: Por su salud Nº 17

49XVII Edición

Page 50: Por su salud Nº 17

Testimoniales

Con gran profesionalismo

Nuestro hijo Armando Esteban, sufrió un gravísimo accidente de coche en Liberia. Después de un traslado urgente en avión privado a San José, fue internado en el Hospital Clínica Bíblica. Desde el primer momento fue tratado con eficiencia y gran profesionalismo por los doctores.Ahora que le han salvado la vida, tanto mi esposa como yo queremos agradecer todo lo que han hecho por él. En especial, queremos manifestarle nuestro reconocimiento al cirujano Dr. Enrique López Jiménez, quien lo operó y que con tanto esmero le ha seguido en el post operatorio.También deseamos agradecer los cuidados y la coordinación de todo el equipo médico enca-bezado por el Dr. Manuel Rojas Oreamuno. Además, ha sido atendido por el Dr. Elliot Garita Jiménez y el Dr. Eddy Zúñiga Calvo. A todos ellos les debemos que nuestro hijo vuelva a España en perfectas condiciones.Hemos expresado nuestra satisfacción a la compañía hotelera Riu por el acierto de haber elegi-do al Hospital Clínica Bíblica en aquel momento; así como al embajador de España, quien nos

manifestó la misma opinión.Con la gratitud por haber sido atendidos por excelentes profesionales que nos han

hecho sentir como en nuestra propia casa y con ejemplar espíritu, reciban nuestro más afectuoso saludo.

Ignacio Esteban y FranciscaPalma de Mallorca, España

Al más alto nivelDespués de haber estado en el ser-vicio de urgencias, este hospital es uno de los mejores que he visto en el mundo. ¡Los médicos son todos amables e inteligentes!Donna Woodard, EEUUStewart Lender Services

Eso es lo que ocupamos

Sirva la presente para saludarles y a la vez darles mis más expresivas

gracias por la atención recibida durante mi intervención quirúrgica de

la cadera.Las atenciones fueron tan amables y tan bien recibidas que personal

y médicos como los de este centro de salud son los que necesitamos

en nuestro bello país, Costa Rica, para la atención de los enfermos; en

especial personas de la tercera edad que nos volvemos niños nueva-

mente.Que el Señor les pague con creces tanta bondad con los más necesita-

dos y en los momentos menos esperados.

Dios les Bendiga hoy, mañana y siempre.

Atentamente,Sra. Odilie Brenes Solano

Sr. Grerardo Morales B.

Un buen tratoEsta nota es para agradecer y dejar por escrito nuestro reconocimiento a la excelente labor y el buen trato que hemos recibido del personal médico, en especial al Dr. Solís y al personal de enfermería Carolina Morales, Vannia, Mariane-lla, Gabriela, Melina, Marco, José y Joshua, por el paciente Rodrigo Meneses Jiménez. Que Dios los bendiga.Lilliana de Meneses

50 XVII Edición

Cuerpo & Mente

Page 51: Por su salud Nº 17

Exitosos chequeosQuiero agradecer a Mauricio, Jisbelka, Yahaira y a todo el personal que interviene con los chequeos médicos, por todo el apoyo que nos brin-daron en los quince días de chequeos médicos del Grupo Ernst and Young, y por el buen trato a los pacientes. Sin duda no habrían sido un éxito estos chequeos sin la excelente coordinación por parte de todos los equipos.Es un gusto y un honor trabajar con gente tan profesional como uste-des; espero seguir trabajando por muchos años más con este mismo grupo.Sé que es su trabajo; pero no está de más agradecer por tan valiosa ayuda.De todo corazón, mi agradecimiento.María Segura Brenes.Claim Division Team Leader

¡Eternamente agradecidos!Debo agradecerles profundamente la atención profesional, oportuna y exacta en los diagnósticos de enfermedades que ha recibido mi hijo en su centro médico. Él ha tenido que ser intervenido quirúrgicamente en dos ocasiones; sin embargo, gracias a Dios y la intervención de los doctores Oswaldo Alvarado y Jorge Martínez, se han prevenido complicaciones en la salud de nuestro hijo, que es nuestro mayor tesoro.Recalco principalmente la disponibilidad y las acertadas decisiones que siempre nos ha brindado el Dr. Jorge Martínez desde que Allan nació hasta estos casi siete años de bendiciones con él. Nos alegra sentirnos seguros de la calidad de profesionales en salud y humanidad que respaldan la sa-lud de mi hijo.Vivimos eternamente agradecidos. Que Dios les bendiga.Ing. Allan Rivera Benavides y familia

Plenamente satisfechaLes escribo para manifestarle mi satisfacción total con el trato recibido durante mi chequeo médico. Se percibe la calidad y el profesionalismo del per-sonal a cargo. ¡Mil gracias!Sandra FonsecaManager’s assistant - Costa RicaStewart Lender Services

Agradecemos su confianzaen nuestrosservicios

51XVII Edición

Page 52: Por su salud Nº 17

¡Trabajamos, con el ejemplo!

¿Sabía usted que nuestra respon-sabilidad inicia en casa? Desde

tiempo atrás implementamos una serie de iniciativas que

velan por el bienestar de todos los que confor-

mamos el Hospital Clínica Bíblica.

52 XVII Edición

Cuerpo & Mente

Page 53: Por su salud Nº 17

Conscientes de que debe-mos cuidar nuestro recur-so más preciado, nuestra gente, para ser una em-

presa responsable, emprendimos desde hace algunos años proyec-tos que generan motivación en todos los colaboradores.

El programa de Salud Deportiva del hospital echó a andar el sue-ño de muchos y apoya el talen-to en múltiples disciplinas, pero también patrocina el deporte hacia lo interno. Actualmente, existen varios equipos de fútbol sala y una vez al año se realiza un campeonato de este balompié durante el mes de aniversario del hospital.

Además, en este mismo periodo se realizan actividades deportivas como campeonatos de pin pong, rallys deportivos por equipos y campeonatos de futbolín para todos los trabajadores. De esta

forma se les motiva a “que somos un solo equipo”, menciona Heller Suazo, directora de Desarrollo Organizacional del Hospital Clíni-ca Bíblica.

Pensando siempre en ese mejo-ramiento de la calidad de vida, en julio del 2012 comenzó un proyecto fijo por mes de clases de zumba, que vienen acompa-ñadas con charlas de nutrición y el apoyo de una especialista del hospital en este campo. “Parale-lamente, arrancó la iniciativa de brindar al veinticinco por ciento de la población un chequeo mé-dico a través del consultorio de medicina de empresa interno que tenemos, para ser congruen-tes con nuestra filosofía de traba-jo”, señala Suazo.

“Yo amo mi vida”

Con esta elocuencia se denominó a otra iniciativa que se desarrolla

Una culturallamadaHospital ClínicaBíblica

53XVII Edición

A la fecha, participan alrededor de sesenta colaboradores por sesión, según el día.

Cuando el ser humano se siente satisfecho consigo mismo al alcanzar diversas metas, se siente bien psi-cológicamente y a nivel laboral se motiva para ha-cer lo mejor cada día. Cuando el individuo se moti-va, mejora su capacidad de triunfar en la actividad física y en la vida.

Page 54: Por su salud Nº 17

en el Hospital Clínica Bíblica, la cual arrancó el año pasado; con-siste en un programa que se reali-za durante el primer trimestre del año y en el cual se le da soporte en varias áreas a quince personas con un alto índice de masa cor-poral (IMC), según los datos es-tadísticos que maneja la médico de empresa a través del chequeo anual a todos los trabajadores.

En este programa se les brinda tres sesiones de ejercicios por semana de una hora cada sesión, para ba-jar de peso durante los tres meses del programa, y se acompañan con charlas de nutrición, psicolo-gía, apoyo y motivación de las je-faturas en los horarios de trabajo para que puedan asistir (el hospi-tal tiene jornadas de trabajo 24/7

durante todo el año con turnos de doce horas).

De acuerdo con la directora de Desarrollo Organizacional, otro aspecto importante que se busca es que cada colaborador que participa en estas sesiones de ejercicios logre una liberación de endorfinas que permitan disfrutar de la vida, sentirse deleitados por muchas cosas y resurgir con facilidad de las crisis personales sin demasiadas cicatrices emocionales. Al liberar endorfinas mediante el ejercicio, como sucede también durante otro tipo de actividades, logramos que nuestros colaboradores participen en varias áreas porque promueven la calma, gozan de un estado de bienestar, ayudan a mejorar el humor, reducen el dolor en alguna zona del cuerpo, retrasan el envejecimiento, bajan los niveles de ansiedad, bajan los niveles de estrés y, en fin, obtienen grandes beneficios y resultados en el tiempo.

“Un profundo agradecimiento”

54 XVII Edición

Cuerpo & Mente

“La aceptación de iniciativas como las clases de zumba ha sido tan buena, que pasamos de una clase a tres clases de este baile tan saludable, y se ha elevado el nivel de dificultad: en vez de zumba se brindan clases de acondicionamiento físico con una duración de una hora por cada sesión los días lunes, miércoles y viernes”, anota Heller Suazo, directora de Desarrollo Organizacional del Hospital Clínica Bíblica.

Veinte años han transcurrido desde que inicié labores en esta gran institución; definitivamente lo mejor que ha pasado en mi vida laboral. Veinte años de gran-des retos, de trabajo, de conocer gente, y sobre todo de muchas bendiciones tanto para mí como para mi familia.

¿Cuántos compañeros han pasado por estos pasillos? Algunos han tenido la di-cha de acogerse a su pensión; otros (muy pocos) han cambiado de trabajo y otros se han marchado, pero son muchos más los que aún continúan laborando y vien-do la grandeza de Dios manifestada en el crecimiento que ha experimentado el hospital.

En estos veinte años, hemos sido testigos de este gran crecimiento. La planta física pasó a incrementarse en al menos cuatro veces con respecto a los años noventa. Un nuevo edificio de hospital (Cabezas López), la Torre de Consultorios Omega y el edificio de estacionamiento son solo tres claros ejemplos del crecimiento ex-perimentado. Si bien esto requiere de una fuerte inversión financiera, también representa la oportunidad de trabajo para muchos compañeros, quienes llegan con la ilusión enorme de pertenecer a la gran familia del Hospital Clínica Bíblica. Esta es una institución diferente que ha

Por Guillermo Delvo Colaborador del Hospital Clínica Bíblica

Page 55: Por su salud Nº 17

“Un profundo agradecimiento”

Estableciendoalianzas

55XVII Edición

marcado la pauta como líder en me-dicina privada a nivel nacional y más allá, gracias a los reconocimientos internacionales por su nivel de exce-lencia en calidad hospitalaria y la cer-tificación continua por parte de Joint Commission International; y al valio-so aporte de un excelente equipo de trabajo de profesionales en ciencias médicas, en el área de administración y profesionales en recursos humanos.

Y es precisamente el recurso humano el que más se beneficia con todas las garantías que ofrece el hospital. La administración moderna considera al talento humano como el recurso más valioso del cual dispone una empre-sa. De ahí que muchas empresas res-ponsables brinden espacios de espar-cimiento a sus colaboradores, con la finalidad de crear lazos interpersona-les y relajación. En el Hospital Clínica Bíblica se procura que estos espacios de esparcimiento se brinden integral-mente, combinando actividades de tipo social, cultural, física, al aire libre y espiritual. Dentro de esas actividades de espar-cimiento desarrolladas por la institu-ción, encontramos:● carrera atlética de diez kilómetros “Corramos por su Salud”, una vez al año desde 1998;● Campeonato Interno de Fútbol Sala en categorías Masculino y Femenino, en el marco de las actividades de la

celebración de cada aniversario del hospital;● ejercicios de acondicionamiento fí-sico, tres sesiones a la semana; ● mesas de futbolín y ping pong, a disposición de todos los colaborado-res; ● biblioteca para los colaboradores (con más de cien libros).

Y lo más importante, la labor de cre-cimiento espiritual, que se realiza a través de diversas actividades orga-nizadas por el departamento de Con-sejería Espiritual, que también realiza los devocionales semanales en cada departamento de la institución. Ade-más, se ofrece dirección espiritual de manera personalizada, a quien así lo solicite. Un capítulo aparte merece el trabajo que se realiza desde el departamento de Acción Social. Ellos llevan salud integral a muchas comunidades rurales del país. Un grupo de profesionales en ciencias médicas, así como colaboradores del departamento de Consejería Espiri-tual, llevan alivio físico y espiritual a muchas zonas del territorio costarri-cense. Este es nuestro Hospital Clínica Bíbli-ca. Una institución grande y diferen-te, guiada por la mano de nuestro se-ñor Jesucristo y el aporte de personas con gran visión empresarial.

Page 56: Por su salud Nº 17

¡Trabajamos conlos mejores!

Page 57: Por su salud Nº 17
Page 58: Por su salud Nº 17
Page 59: Por su salud Nº 17
Page 60: Por su salud Nº 17