Upload
others
View
1
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
La palabra reestructuración puede sonarnos poco
familiar y poco evangélica, por lo tanto, no es fácil
relacionarla con nuestra espiritualidad y misión.
Pero cuando hablamos de reestructuración debemos entender renovación
espiritual, compromiso y celo apostólico con nuestra misión. La reestructuración
para nosotras no es solamente reordenamiento estructural para adecuarnos a los
cambios de las comunidades en sus nuevos contextos o para solucionar la dificultad
de escases de personal; sino, sobre todo, es un movimiento de renovación espiritual
orientado a la misión. La motivación fundamental no debe ser el miedo de que la
congregación se esté extinguiendo sino el renovado entusiasmo por el seguimiento
de JESÚS.
Por lo tanto, la reestructuración debe ser vivida como una oportunidad de
renovarnos espiritualmente y de reavivar el fuego de la vocación que sea capaz de
reavivar otros fuegos. Debe ser mirada como una “buena noticia” para nuestra vida
consagrada.
Nos cambia el universo de nuestra mirada apostólica; las relaciones de obediencia,
las posibles relaciones de comunidad incluyendo nuevos sujetos, nuestros hábitos
pastorales y comunitarios, nuevas culturas en juego; nos cambia también las
posibilidades de destinos abriendo a nuevos países. Toca por tanto temas muy
sensibles para nosotras: vida de comunidad, misión, cultura.
1. Como adquirir y vivir la espiritualidad de la reestructuración o
espiritualidad para el cambio en la misión.
Frente a los cambios congregacionales se dan diferentes reacciones: se
pueden recibir con resignación, lo que supone poco o ningún esfuerzo
por cooperar con el objetivo que se pretende, y probablemente
resistencias internas, que no nos permiten asumir el cambio
interiormente, y aun externas, que dificultan abiertamente su ejecución.
Por eso es importante que todas nos involucremos en el proceso de
reestructuración y seamos responsables en el cambio personal y
comunitario.
Es necesario que haya un proceso de reflexión que nos permita a todas
entender lo que se busca, aportar, asimilar la nueva propuesta, y trabajar
los posibles consensos. Pero el camino de la racionalidad no siempre
nos lleva al acuerdo. Porque hay cosas que nunca están tan claras como
ESPIRITUALIDAD DE LA REESTRUCTURACION DE LA MISION.
1
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
para que todas las veamos igual; porque nuestras miradas están
condicionadas por nuestras historias y puntos de vista; y, sobre todo,
porque nuestra razón funciona muy ligada a nuestros afectos, por lo
tanto:
a) Es fundamental que el proceso parta de nuestro esfuerzo por centrar
la mirada en Dios y renovar nuestra disponibilidad a aceptar lo que Él
quiera, aunque contradiga mi propio querer e interés.
b) Es importante que en todo el proceso estemos atentas a purificar
nuestra mirada comunitariamente, centrando en Dios la intención. Que el
proceso racional de análisis y ponderación de datos y razones sea
siempre orado bajo el prisma de la disponibilidad.
c) La invitación es: Fidelidad a Jesús Sediento de la Gloria del Padre,
fidelidad al pueblo y fidelidad en el seguimiento de Jesús con la actitud
de María en las bodas de Caná; “Hagan lo que Él les diga”, ¡ya es la
hora!
2
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Espíritu Santo, Perfecciona la obra que Jesús comenzó en mí. Apura para mí el tiempo De una vida llena de tu Espíritu. Mortifica en mí La presunción natural. Quiero ser sencilla, Y Llena de amor de Dios Que ninguna fuerza humana
Me impida hacer honor A mi vocación religiosa misionera Que ningún interés, Por descuido mío, Vaya contra la justicia.
Que ningún egoísmo reduzca en mí Los espacios infinitos del amor. También la disponibilidad, apertura al proceso, La prontitud al cambio. Que la efusión de tu Espíritu de amor Venga sobre mí, sobre la comunidad, Y sobre la congregación. Todo sea grande en mí. Amén
ORACION AL ESPIRITU SANTO.
3
Exigencias de la iglesia para vivir la espiritualidad
de la misión hoy.
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
“La Iglesia en América, como en otras partes, está llamada a ‘salir’ de su zona de
confort y ser fermento de comunión. Comunión entre nosotros, con nuestros
hermanos cristianos y con todos los que buscan un futuro de esperanza. Debemos
ser, cada vez más plenamente, una comunidad de discípulos misioneros, llenos de
amor del Señor Jesús y de entusiasmo por la propagación del Evangelio
Una iglesia misionera, por su misma naturaleza tiene un deber permanente de
convertirse pastoralmente; es decir, la Iglesia está en estado permanente de misión.
Conversión pastoral significa, entonces, que la evangelización nunca puede
reducirse a la mera administración o al mantenimiento de las estructuras actuales,
lo que denotaría estancamiento y declive gradual. “La reforma de estructuras que
exige la conversión pastoral sólo puede entenderse en este sentido: procurar que
todas ellas se vuelvan más misioneras, que la pastoral ordinaria en todas sus
instancias sea más expansiva y abierta, que coloque a los agentes pastorales en
constante actitud de salida y favorezca así la respuesta positiva de todos aquellos
a quienes Jesús convoca a su amistad” (EG, 27).
El Papa Francisco tiene un sueño para la Iglesia de Cristo: que sea una Iglesia
misionera. Escribe:
“Sueño con una opción misionera capaz de transformarlo todo, para que las
costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y toda estructura eclesial se
convierta en un cauce adecuado para la evangelización del mundo actual más que
para la auto preservación” (Papa Francisco, Exhortación Apostólica Evangelii
Gaudium (EG), 24 de noviembre de 2013, 27).
El sueño del Papa Francisco es el de una Iglesia pobre para los pobres, una Iglesia
cercana a los olvidados y abandonados, una Iglesia que transmita la ternura de
Dios. Quiere una Iglesia evangelizadora, llamada a confrontarse constantemente
con la amplitud y riqueza del Evangelio. Quiere una Iglesia dispuesta a salir de su
propia zona de confort (cf. EG, 20): una Iglesia dispuesta a remar mar adentro para
obtener una grandiosa pesca. La primacía de Dios en el Pueblo de Dios. El sueño
del Papa Francisco, es el de una Iglesia que vive como Pueblo de Dios: Pueblo de
Dios santo y fiel.
LECTURA DE LA PALABRA DE DIOS
LECTURA ORANTE DEL TEXTO. (Lectio Divina en el texto del día)
4
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
a) Leamos varias veces el texto para que clarifiquemos cuales son las
exigencias de una Iglesia reestructurada. Escribamos esas exigencias.
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
a) Hacemos un momento de silencio orante para gustar de las mociones del
Espíritu y lo que Dios está suscitando en nosotras. Confrontamos con la
Palabra de Dios y concluimos este momento de oración escribiendo uno o
dos desafíos que el Espíritu haya suscitado en mí.
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
Reflexión
4
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Exigencia desde la vida consagrada para vivenciar
la espiritualidad de la reestructuración de la misión.
Caminaré
Antífona: Hazte compañero inseparable de mis caídas y tribulaciones y enséñame a gozar en el camino Caminaré siempre en tu presencia por el camino de la vida. Te entrego, Señor, mi vida, hazla fecunda. Te entrego mi voluntad, hazla idéntica a la tuya. Caminaré a pie descalzo, con el único gozo de saber que eres mi tesoro. Toma mis manos, hazlas acogedoras Toma mi corazón, hazlo ardiente. Toma mis pies, hazlos incansables. Toma mis ojos, hazlos transparentes. Toma mis horas grises, hazlas novedad. Hazte compañero inseparable de mis caídas y tribulaciones y enséñame a gozar en el camino de las pequeñas cosas que me regalas, sabiendo siempre ir más allá sin quedarme en las cunetas de los caminos. Toma mis cansancios, hazlos tuyos. Toma mis veredas, hazlas tu camino. Toma mis mentiras, hazlas verdad. Toma mis muertes, hazlas vida. Toma mi pobreza, hazla tu riqueza. Toma mi obediencia, hazla tu gozo. Toma mi nada, haz lo que quieras.
Toma mi familia, hazla tuya. Toma mis pecados. Toma mis faltas de amor, mis eternas omisiones, mis permanentes desilusiones, mis horas de amarguras.
Camina, Señor, conmigo;
1
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
LECTURA DE LA PALABRA DE DIOS.
LECTURA ORANTE DEL TEXTO. (Lectio Divina en el texto del día)
En nuestro proceso de transformación de estructuras, hay que reforzar
el valor propio de nuestra consagración religiosa que, a veces,
colocamos entre “paréntesis” en nuestras evaluaciones y
planteamientos, considerándolo como una “cuestión personal y
privada”. En realidad, la consagración religiosa es la que confiere la
fuerza motriz a nuestras actividades misioneras. De nuestra
consagración nace la disponibilidad para la misión de la congregación y
el mejor profetismo de nuestra vida religiosa-comunitaria.
La espiritualidad de la reestructuración de la misión no va a ser una
solución mágica para todas nuestras dificultades y desafíos actuales.
Nuestras dificultades no dependen principalmente de las estructuras
actuales de la vida religiosa, la espiritualidad de la reestructuración de
la misión, sin embargo, es una nueva oportunidad para hacer despegar
el ser y la misión de nuestra vida con un nuevo ardor y como
contribución eficaz a la nueva evangelización.
Para que la vida consagrada sea “buena noticia”, la reestructuración
debe ser un proceso global, que abarque todo el ser y todas las
dimensiones de nuestra vida consagrada misionera y al mismo tiempo;
un proceso pausado, pero no eterno, estimulado constantemente por
las superioras, implicando a todos los miembros de las comunidades
por medio del diálogo corresponsable y de la espiritualidad compartida.
El éxito depende de nuestra implicación personal y comunitaria.
Independientemente de nuestra edad.
Lo que queremos con la espiritualidad de la reestructuración de la misión es inaugurar una realidad nueva, que no sea un remiendo. Durante el camino hay que luchar contra toda tentación de insatisfacción, de inseguridad, miedo o egoísmo, haciendo nuestra la
2
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
pedagogía del misterio pascual: morir a algo para resucitar a una vida nueva. Cristo resucitó muriendo y murió resucitando. La muerte es el único camino hacia la resurrección. Las muertes que deberemos hacer durante nuestro proceso de reestructuración de la espiritualidad de la misión tienen que estar siempre iluminadas por las nuevas ilusiones de vida nueva que queremos conquistar. La reestructuración está siendo un nuevo Pentecostés, que nos purifica
y fortalece y anima a vivir la misión. Es mucho más interesante ser
religiosa hoy que hace cuarenta años. Esto nos hace recordar las
palabras de Juan Pablo II en su Exhortación Apostólica sobre la “vida
consagrada y su misión en la Iglesia”:
“Vosotros no solamente tenéis una historia gloriosa que recordar y contar, sino una gran historia que construir. Poned los ojos en el futuro, hacia el que el Espíritu os impulsa para seguir haciendo con vosotros cosas grandes”1.
a) ¿Qué actitudes me exige la vida consagrada hoy para vivir la
espiritualidad de la reestructuración de la misión? Las escribo
________________________________________________________
________________________________________________________
________________________________________________________
b) ¿De estas actitudes cuáles reconozco en mí y cuáles debo
reforzar en mi vida espiritual para aportar eficazmente al
proceso de reestructuración de la misión?
________________________________________________________
________________________________________________________
________________________________________________________
1 VC 110
Reflexión
4
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Exigencias desde nuestra espiritualidad, carisma, y nuevas
generaciones para vivenciar la espiritualidad de la reestructuración de la misión hoy.
SALMO. ECHA LAS REDES
Antífona. Tú, fecundador de almas: llégate a
nuestra orilla, devuélvenos, Señor, a tu alegría
Desde que Tú te fuiste
no hemos pescado nada.
Llevamos veinte siglos
echando inútilmente
las redes de la vida,
y entre sus mallas
sólo pescamos el vacío.
Vamos quemando horas
y el alma sigue seca.
Nos hemos vuelto estériles
lo mismo que una tierra
cubierta de cemento.
¿Estaremos ya muertas?
¿Desde hace cuántos años no nos hemos reído?
¿Quién recuerda la última vez que amamos?
Y una tarde Tú vuelves y nos dices:
«Echa la red a tu derecha,
atrévete de nuevo a confiar,
abre tu alma,
saca del viejo cofre
las nuevas ilusiones,
dale cuerda al corazón,
levántate y camina».
Y lo hacemos sólo por darte gusto.
Y, de repente, nuestras redes rebosan
alegría,
nos resucita el gozo
y es tanto el peso de amor
que recogemos
que la red se nos rompe cargada
de ciento cincuenta esperanzas.
¡Ah, Tú, fecundador de almas: llégate
a nuestra orilla,
camina sobre el agua
de nuestra indiferencia,
devuélvenos, Señor, a tu alegría
(José Luis Martín Descalzo)
1
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Una misión en proceso de reestructuración requiere una resignificación de nuestra
espiritualidad misionera y debemos hacerlo volviendo a las fuentes de nuestro
carisma haciendo énfasis en los siguientes aspectos:
MISIÓN CON VOCACION MÍSTICO PROFÉTICA: “Conocí, de un modo sentido, superior a cuanto puede decirse con lengua humana, la generación del Verbo Eterno y cómo Dios es Padre de todos los hombres, con una paternidad tan intensa que en vano intentaría ponderarla. Conocí del mismo modo la adopción que Dios hace de nosotros en el santo bautismo”. 2
Esta experiencia de la paternidad divina y la filiación por el bautismo, unida al don de la maternidad espiritual de los indios, la llevan a iniciar la obra misionera
Al conocer esta experiencia podemos comprender la increíble actividad apostólica, impulsada precisamente por el fuego divino que devoraba su alma. La vida mística de Santa Laura y su celo misionero se explican mutuamente. Laura inicia su obra cuando en su proceso espiritual llega a la unión transformante o matrimonio espiritual. De su unión mística con Dios Padre nace su vida profética con la mirada puesta en Jesús sediento de la gloria del Padre y su dinamismo misionero para hacer que todo el mundo desde el bautismo y la Palabra conozca y ame a Dios. Cuando Santa Laura contempla con los ojos del corazón a Jesús sediento en la Cruz, comprende que si ella no toma su cruz y lo sigue no puede ser su discípula misionera. (Lc. 14, 27)
UNA MISIÓN SIN FRONTERAS: “…me dolían como verdaderos hijos, desde
entonces los llamé mi llaga con mayor razón. (Aut pág. 246,4)
UNA MISIÓN CON NUEVOS ESCENARIOS, TIEMPOS Y SUJETOS
EMERGENTES: “…Puede ser que con el tiempo lleve Dios a la Congregación
entre infieles civilizados, entre paganos nobles y ricos y aún entre musulmanes
fanáticos. Pues, para entonces, les ruego conservar en el fondo, el mismo
espíritu de apostolado que aquí se preceptúa; pero adaptando la forma exterior
a las necesidades y conveniencias del personal que entonces manejen... busquen
siempre el bien de los misionados y no se apeguen ni a modos, ni a medios”…3
MISIÓN CON PROTAGONISMO DE LA MUJER: “Entre los débiles y pequeños,
el triunfo es reservado a la mujer” (Aut. 332,4)
2 Misericordias de Dios en un alma Pág. 207 3 Madre Laura, Directorio Tomo I, No. 249
LECTURA DE LA PALABRA DE DIOS.
LECTURA ORANTE DEL TEXTO. (Lectio Divina en el texto del día)
2
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
MISIÓN INTER-RELACIONES HUMANAS Y CÓSMICAS: Laura Montoya
aprende a encontrar a Dios en cada persona “este amor del prójimo que en alguna
manera se confunde con el de Dios en el alma, es tierno, es delicado, y no sufre
intermitencias” (Aut. 1103,1)
Sabe que este amor humano está interrelacionado con el cosmos; por eso propone
que las hermanas de la congregación unan sus voces a las de la naturaleza para
adorar a su Creador. (Aut. 440,4.)
(Voces místicas de la naturaleza Pág. 646) (Aut. 675,5-676.1)
MISIÓN, INCULTURACIÓN E INTERCULTURALIDAD: “Los atacaron en la médula del alma: en sus tradiciones, y ¿qué querían?” (Aut pág. 637,3)
Inculturación; …superarlos en su modo de vivir, es alejarlos…” (Aut. 336,4).
Interculturalidad: “Ellos no eran fieras cuando vino la raza blanca a América; los
volvieron fieras los tratamientos irracionales. “(Aut. 637,3)
METODO, ESTILO Y ACTITUDES MISIONALES “La congregación sea como
nómada “(Aut. 994,2)
“Y sabe, padre mío, que he pensado que ese sacrificio tan inusitado, cual es el de dejar para siempre su cuna la Congregación, nos lo ha exigido Dios, porque nos quiere como ÉL. Él no conservó durante su vida, ni fue propiedad de la Sagrada Familia, la cueva de Belén. ¡La desnudez fue completa y así quiere que seamos las misioneras llamadas a servirle tan de cerca! ¡Oh santa desnudez! ¡Oh bella abnegación de todo! ¡Oh pobreza hermosa que hace rebosar de dicha a los religiosos perfectos, cuánto debemos amarte! Otras veces he pensado si Dios querrá, que la Congregación sea como nómada y que vaya como las piedras del río, sin hacer puesto permanente, totalmente universal y totalmente libre. Que vaya de tierra en tierra sin arraigar, como su amado pueblo de Israel iba de cautividad en cautividad, para mejor extender el conocimiento de Dios. No lo sé, pero hay algo que parece indicarlo. Entonces la Congregación causará mayor escándalo en el mundo y se sufrirá más, porque el mundo cobra caro lo nuevo, lo no esperado. De todos modos, Dios es dueño y árbitro de todo y hará lo que sea su santísima voluntad.” (Aut. Pág. 994,2-3)
3
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
a) ¿Con qué actitudes demuestro que mi vida religiosa es un signo nuevo
y cuestionante para los demás?
____________________________________________________
____________________________________________________
____________________________________________________
b) Escribir tres elementos de la doctrina de Santa Laura que nos desafían
a dar el paso a la reestructuración de la misión.
____________________________________________________
____________________________________________________
____________________________________________________
c) Escriba los pasos que usted crea necesarios para concretizar desde
dónde, cómo y cuándo reestructurar nuestra misión.
____________________________________________________
____________________________________________________
____________________________________________________
Reflexión
4
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Salmo para dar la vida Antífona: Infúndenos, Señor, el deseo de darnos y entregarnos. Señor, dame la valentía de arriesgar la vida por ti, el gozo desbordante de gastarme en tu servicio. Dame, Señor, alas para volar y pies para caminar al paso de los hombres. Entrega, Señor, entrega para “dar la vida” desde la vida, la de cada día.
Infúndenos, Señor, el deseo de darnos y entregarnos, de dejar la vida en el servicio a los débiles. Señor, haznos constructores de tu vida, propagadores de tu reino, ayúdanos a poner la tienda en medio de los hombres para llevarles el tesoro de tu amor que salva. Haznos, Señor, dóciles a tu Espíritu para ser conducidos a dar la vida desde la cruz, desde la vida que brota cuando el grano muere en el surco
Desafíos desde nuestro carisma para
vivenciar la espiritualidad de la
reestructuración de la misión hoy.
“Instrumentos de roca, inflamados en amor de compasión, eran los que Dios necesitaba
para desarrollar sus misericordias entre esos pobres infieles y esta servidora debía ser la
formadora, o el instrumento formador de Dios. Cuerpos puestos a prueba de toda dureza,
sensibilidad sin mimos, casi de bronce, voluntad intrépida y corazón ardiente como un
serafín, me parecían condiciones indispensables y para conseguirlo debía tratarlas con
alguna energía y poner en juego muchos resortes.” Aut. Madre Laura II edic. Pág. 392
1
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
La misión es el eje sobre el cual gira nuestra vida consagrada y la realidad que da
unidad a todas sus dimensiones. La misión es el principio unificador y la principal
fuente de armonía personal y comunitaria.
El Papa Francisco en la exhortación apostólica Evangelii Gaudium nos dice: «La vida se acrecienta dándola y se debilita en el aislamiento y la comodidad. De hecho, los que más disfrutan de la vida son los que dejan la seguridad de la orilla y se apasionan en la misión de comunicar vida a los demás». Cuando la Iglesia convoca a la tarea evangelizadora, no hace más que indicar a los cristianos el verdadero dinamismo de la realización personal: «Aquí descubrimos otra ley profunda de la realidad: que la vida se alcanza y madura a medida que se la entrega para dar vida a los otros. Eso es en definitiva la misión». 4
La misión es el centro sobre el que hay que hacer girar todo el proceso de las RRR.
La fidelidad a nuestra misión tiene que ser la razón y la meta de una reestructuración
auténtica. El punto de partida de nuestra vida es siempre la misión de Jesús
sediento de la gloria del Padre.
La sed de Jesús, llevó a Madre Laura a lanzarse al compromiso misionero entre
el pueblo indígena, negro y campesino, desde un proceso de inserción, respeto a la
cultura y dignificación del ser humano, con el único fin de dar Mayor Gloria a Dios.
La experiencia del Sitio la expresamos en la vivencia heroica de las virtudes y en
nuestro compromiso misionero, ad gentes, ad intra y ad extra, vivido en itinerancia
y ardiente celo apostólico, teniendo a María como Madre, Maestra, Modelo de
servicio y de entrega, que sale al encuentro de la vida.
La meta de todo este proceso es reestructurar-reconfigurar -resignificar, nuestra
misión específica en la Iglesia.
“Saciar la sed de Jesús hoy, es volver al primer amor, vivir la centralidad de nuestra
misión en la persona de Jesús sediento.
4 E.G.No. 10
LECTURA DE LA PALABRA DE DIOS.
LECTURA ORANTE DEL TEXTO. (Lectio Divina)
en el texto del día)
2
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
a) A partir de la reflexión de la E.G. # 10 y dentro del proceso de la
reestructuración de la misión, ¿dónde me ubico actualmente, con qué
criterios y actitudes estoy viviendo, y cuáles son mis motivaciones
fundamentales.
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
b) ¿Qué hechos concretos de tu vida actual te hacen sentir comunicando
vida a los demás? o por el contrario buscas justificaciones para
defender tu acomodamiento?
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
c) Conocedoras de la situación interna de la Congregación y de los
desafíos que cada día nos presentan los clamores de los pueblos que
aún no acompañamos, ¿qué medidas debemos tomar para continuar
saciando la sed de Jesús?
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
Oración Final:
Es la mañana; profundo anhelo, hiere el alma pura y virginal; y en el Sagrario, de
pan el velo cubre la carne que ha de saciar a la misionera emprendedora, que con
Jesús quiere volar a las playas abrasadoras, donde pretende almas comprar.
Con su sangre, con su vida, con cuanta ama, con cuanto es; para su bien, para su
dicha, aunque impotente muera después.
Y si tu nombre fuera alabado por tantos miles de almas sin fe; que me importa ser
olvidada y abandonada morir por Ti. AMEN.
Reflexión
3
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
RETIRO ESPIRITUAL MENSUAL.
ESPIRITUALIDAD DE LA REESTRUCTURACIÓN DE LA
MISIÓN HOY.
En comunidad organizamos lo que será nuestro día de retiro, para celebrar comunitariamente todo lo vivido durante el mes de oración y reflexión personal.
Tenemos seis momentos que serán distribuidos a lo largo del día, según acuerdo comunitario.
Es necesario que cada hermana tenga en sus manos el material que se ha reflexionado y orado durante el mes, además los apuntes personales que ha realizado producto de sus reflexiones, la biblia, su cuaderno de apuntes y lapicero.
La hermana que orienta el retiro prepara los materiales que necesita con anterioridad.
PRIMER MOMENTO
MOTIVACION.
Jesús aparece unido al Padre por la oración. A través de la oración Él
mantiene viva en sí la conciencia de su misión.
“El anuncio del evangelio siempre tiene la dinámica del éxodo y del don,
de salir de sí, del caminar y sembrar siempre de nuevo, siempre más
allá. El Señor dice: “Vayamos a otra parte, a predicar también en las
poblaciones vecinas, porque para eso he salido” (Mc. 1,38)
Cuando está sembrada la semilla en un lugar, ya no se detiene para
explicar mejor o para hacer más signos allí, sino que el Espíritu lo mueve
a salir hacia otros pueblos”. 5
5 E.G # 21
1
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
No adelantar, Dios Santo, en el camino de tu servicio, es retroceder. Bien lo
comprendo Señor, y por eso voy, con tu gracia, a pasar este día que me concedes
y que es para mí, un día de salud, aplicando a mi alma la luz del Espíritu Santo a fin
de ver claramente en ella lo que puede impedirme tu servicio, lo que retarde mi
anhelada unión contigo.
Dame pues, Señor, la luz y la gracia que necesito para ello, por los méritos de Jesús,
el divino modelo que me has dado “Haced el arca dijo Dios a Moisés, según el
modelo que habéis visto en el monte”. Del mismo modo me dices a mí: haz tu vida
conforme al modelo, que has visto en el monte, que no es otro que Jesús crucificado.
Por tu amor y para servirte mejor, haré este Santo retiro. Sé, oh Espíritu Santo, la
lumbre de mi alma, el incendio que avive mi amor y la fortaleza que me sostenga en
las luchas que debo librar para que triunfe tu gracia sobre mi rebelde naturaleza.
María Inmaculada sea mi maestra y conductora en este santo retiro para que sea
verdaderamente un paso que dé hacia los brazos de Dios y que me fortalezca para
mi apostolado querido en el cual pueda hacerte amar de muchas almas. Amén.
LECTURA ORANTE Y ESCUCHA ATENTA.
(Qué dice el texto.)
Lectura de Mc. 1, 35-39
✓ Hacer lectura de las frases anotadas en la lectura
personal.
✓ Resaltar las ideas que se repitieron, hacemos eco
comunitario.
____________________________________________________
________________________________________________
_______________________________________________
_______________________________________________
ORACION PREPARATORIA AL RETIRO
2
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
SEGUNDO MOMENTO: MEDITACIÓN
(Qué me dice Dios a mí en este texto)
MOTIVACIÓN.
A través de la oración Jesús mantiene viva en sí la conciencia de su misión.
Mantener viva la conciencia de la misión y no encerrarse en el resultado obtenido:
Vamos para otros lugares. ¡He salido para esto precisamente!
Seguramente se extrañaron, Jesús no era como se lo imaginaban. Tenía una
conciencia mucho más clara de su misión y quería transmitirla a los discípulos, no
quiere que se encierren en el resultado ya obtenido. Al igual que Jesús, debemos
mantener bien viva la conciencia de nuestra misión. (reconfiguración,
resignificación).
En este momento retomemos las respuestas dadas a la reflexión que hicimos
durante los cuatro temas de oración. Reflexionemos a la luz del texto bíblico.
(reestructuración).
TERCER MOMENTO: ORACION.
(Qué le quiero decir yo a Dios sobre el texto)
MOTIVACIÓN.
La oración es la práctica habitual de Jesús como lo señala Marcos varias veces y
lo hacen también los otros evangelistas. Después de una jornada intensa de su
misión de enseñar y sanar, Jesús busca ansiosamente la comunicación con el
Padre en la oración.
Santa Laura Montoya en su autobiografía nos relata: “Pero en la oración de aquel día, le dije al Señor: Tómame Dios mío, invádeme de tal modo que no quede nada en mí que no esté lleno de Ti, con esa propiedad que tienes para comunicarte e invadir a los que amas. Todo fue decirle esto a mi Dios, para sentirme llena de Él que ya no tuve otra oración, por más de veinte días”. (Aut. V Ed. Pág. 1080). Expresamos en voz alta nuestra oración a Dios.
3
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
CUARTO MOMENTO: CONTEMPLACIÓN.
(A qué me invita Dios en el texto)
MOTIVACIÓN
A la luz de la Palabra leída, meditada y orada, entro a descubrir qué camino me
sugiere Dios, a qué me invita, qué actitud nueva debo asumir en la misión para
actuar como Jesús.
QUINTO MOMENTO: COMPROMISO.
(Qué hacer como resultado de la oración)
MOTIVACIÓN. A la luz de la Palabra debemos descubrir con mucha limpieza la
voluntad de Dios en cada una y en la comunidad, para iniciar una vida nueva.
SEXTO MOMENTO: CELEBRACIÓN COMUNITARIA
Canto: La vida es un océano (destellos #44 pág.80)
Signo: rompecabezas con el escudo de la congregación.
(Ver anexos)
Instrucciones: La comunidad armará el rompecabezas y
compartirán sentimientos y cómo se sintieron haciendo la
actividad, además responden las siguientes preguntas:
1. ¿Qué elementos de la espiritualidad de la
reestructuración de la misión descubro en el
escudo?
2. ¿Los símbolos del escudo están en consonancia
con mi compromiso? ¿En qué? (Cada hermana
lee sus compromisos en voz alta y expresa la
armonía o consonancia de sus compromisos con
los símbolos del escudo).
4
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración
Salmo. La pesca
Antífona. Boguemos, boguemos, que Jesús aguarda y vamos felices la red a tirar.
La barca está lista, María nos espera Y allá en lontananza se ve la ribera; Loa eterna ribera donde llegaremos; Guiadas por María, boguemos, boguemos. ¡Salud, oh María! Dulce misionera; Contigo es muy dulce salir a la pesca. Salud, salud, boguemos, boguemos, Que ya nos sostiene tu dulce mirar. Son muchos los peces, ¡Oh Madre querida! Y está turbulento y agitado el mar. Más tú nos sostienes y tiras las redes Llenando la barca del fruto del mar. Boguemos, boguemos, que Jesús aguarda Y vamos felices la red a tirar.
Jesús, dulce amor del alma, Espera un poco y verás Que ayudadas por tu Madre Mucho vamos a pescar. ¡Gloria a Ti, gloria a María, ¡Gloria a Ti!
Con dulces acentos y suave rumor Entonen los labios un himno de amor. Tal vez nuestro cuerpo se fatigará Pero la barquilla no sucumbirá.
María la guía, Jesús nos espera Y allá en lontananza se ve la ribera, La eterna ribera donde llegaremos; Guiadas por María, boguemos, boguemos.
Canto: El triunfo del Sitio. (Destellos #114) Abrazo de paz.
5
Proceso Congregacional de Reestructuración, Resignificación, Reconfiguración