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Resumen capítulos XX – XXX. SANTUARIO – WILLIAM FAULKNER XX: Después de su visita a Oxford en busca de información sobre Temple, Horace llega de nuevo a Jefferson y se encuentra con la noticia de que a Ruby la han sacado del hotel donde estaba hospedándose y que se encontraba durmiendo en la cárcel. Lo anterior provocó en el abogado una cólera en contra del administrador del lugar, quien le explicó que debía ceder ante las pretensiones de las mujeres de la iglesia que se encontraban inconformes con la presencia de esta mujer en el hotel. Pasado esto Horace se dirige a casa de su hermana Narcissa quien se encuentra molesta y le pide que se vaya de Jefferson por el bien de la reputación de su familia y que le deje ese caso a otro abogado, no soporta la idea de los cotilleos de las mujeres chismosas que se encuentran a su alrededor. Horace sospecha que quien fue el responsable de que desalojaran a Ruby del hotel había sido el fiscal del distrito en busca de satisfacer las exigencias de quienes podían ser jurados de conciencia en su audiencia. XXI: En la estación de tren se encuentran dos jóvenes muchachos llamados Virgil Snopes y Fanzo, quienes acababan de llegar a Memphis y estaban buscando donde apearse, después de varias visitas a hoteles que consideraron muy costosos, encontraron un edificio de tres pisos que les interesó, era el burdel de Miss Robe. Allí se quedaron por dos semanas sin siquiera imaginarse el por qué tantas mujeres estaban en ese lugar, ni la razón de la música. Iban a visitar sitios de mujeres algunas noches. Hasta que llegó Clarence Snopes quien les llevó a un sitio de solo mujeres negras. XXII: Horace por fin encuentra luego de tres días un lugar para Ruby y su hijo, era una casa vieja y destartalada en la cual vivía una

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Resumen capítulos XX – XXX. SANTUARIO – WILLIAM FAULKNER

XX:

Después de su visita a Oxford en busca de información sobre Temple, Horace llega de nuevo a Jefferson y se encuentra con la noticia de que a Ruby la han sacado del hotel donde estaba hospedándose y que se encontraba durmiendo en la cárcel. Lo anterior provocó en el abogado una cólera en contra del administrador del lugar, quien le explicó que debía ceder ante las pretensiones de las mujeres de la iglesia que se encontraban inconformes con la presencia de esta mujer en el hotel.

Pasado esto Horace se dirige a casa de su hermana Narcissa quien se encuentra molesta y le pide que se vaya de Jefferson por el bien de la reputación de su familia y que le deje ese caso a otro abogado, no soporta la idea de los cotilleos de las mujeres chismosas que se encuentran a su alrededor.

Horace sospecha que quien fue el responsable de que desalojaran a Ruby del hotel había sido el fiscal del distrito en busca de satisfacer las exigencias de quienes podían ser jurados de conciencia en su audiencia.

XXI:

En la estación de tren se encuentran dos jóvenes muchachos llamados Virgil Snopes y Fanzo, quienes acababan de llegar a Memphis y estaban buscando donde apearse, después de varias visitas a hoteles que consideraron muy costosos, encontraron un edificio de tres pisos que les interesó, era el burdel de Miss Robe.

Allí se quedaron por dos semanas sin siquiera imaginarse el por qué tantas mujeres estaban en ese lugar, ni la razón de la música. Iban a visitar sitios de mujeres algunas noches. Hasta que llegó Clarence Snopes quien les llevó a un sitio de solo mujeres negras.

XXII:

Horace por fin encuentra luego de tres días un lugar para Ruby y su hijo, era una casa vieja y destartalada en la cual vivía una mujer que era popular por preparar hechizos para los negros. Allí se quedó miss Goodgwin y su pequeño hijo.

Al llegar a su casa Horace manda a instalar el teléfono para que Ruby pudiera contactarlo, pero pasados días quien se contacta con él no es precisamente ella sino el senador Clarence, quien afirma tener información que al abogado podía interesarle. Al principio Bembow se mostró receloso con lo que este hombre le decía, sin embargo llamó su atención y acordaron reunirse esa misma noche.

Snopes tenía realmente una información apetecida por el abogado y era la ubicación de Temple, pero a cambio de esto le pidió una remuneración. Snopes era un hombre que solía frecuentar lugares de diversión masculina y le gustaba mucho un sitio de negras en específico. El senador acompaño al abogado al burdel de Miss Robe.

XXIII:

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Al llegar al prostíbulo de Miss Robe el senador insinúa que si el abogado quiere divertirse más y a menor precio él podía llevarlo a ese lugar.

Al ingresar a dicho lugar Minnie lo guía hasta donde Miss Robe se encuentra y lo recibe a la defensiva puesto que no le gustaban las visitas de los abogados, en la charla que sostienen Bembow hace alusión al caso que está llevando y le pide un poco de comprensión y entendimiento a la dueña, quien se muestra reacia al comienzo pero cede a las pretensiones del abogado a que le dejaran hablar con Temple.

En la habitación, Temple se encuentra totalmente arropada por una sabana y pide que dejen la luz apagada pues no quería que nadie la viera en dicho estado. Al inicio se mostró rebelde y poco colaborativa con Horace, sin embargo, no tuvo problema en contar aquello que había vivido en la casa del francés.

Su relato es un poco difuso y suele mezclar periodos de tiempos diferentes del mismo dia. Sin embargo recordaba muy bien cómo se sentía y describía su manera de alejarse de dicha realidad en la que se encontraba. Su defensa fue la de imaginarse en otros lugares o desear ser un hombre, Temple ya no estaba del todo cuerda, en su relato se podía notar ciertas desfases de trauma.

RELATO COMPLETO DE LA “VIOLACIÓN DE TEMPLE”

Le habló de cuando estaba tumbada en la oscuridad con Gowan roncando a su lado, oyendo el ruido de las vainas de las mazorcas, notando la oscuridad llena de movimiento y sintiendo que Popeye se acercaba. Oía el ruido de su propia sangre corriéndole por las venas y los pequeños músculos del rabillo del ojo separándose más y más y cómo las aletas de la nariz se le enfriaban y calentaban alternativamente. Luego Popeye estaba a su lado y ella le decía Vamos. Tócame. ¡Tócame! Eres un cobarde sino lo haces. ¡Cobarde! ¡Cobarde!

—Quería dormirme, ¿sabe? Y él se limitaba a estar allí de pie. Se me ocurrió que si hacía de una vez lo que quería hacer, podría dormirme. Así que dije ¡Eres un cobarde si no lo haces! ¡Eres un cobarde si no lo haces!, y sentía que mi boca se preparaba para gritar y sentía dentro de mí ese nudo caliente que es lo que grita. Luego esa desagradable mano suya, tan fría y tan delicada, me tocó donde estaba desnuda, moviéndose indecisa dentro del abrigo. Era como hielo vivo y mi piel empezó a saltar alejándose de ella como esos pequeños peces voladores delante de una embarcación. Era como si mi piel supiera la dirección que iba a tomar la mano antes de que se moviera y siguiera retrocediendo a saltos por delante de ella para que no encontrara nada cuando llegara allí.

»Después llegó al comienzo de mi vientre y yo no había comido nada desde lacena del día anterior y las tripas se me empezaron a mover y a sonar a vacías y era tan fuerte el ruido de las vainas que parecían reírse. Y yo pensé que se reían de mí porque Popeye estaba metiendo la mano por la cintura de la braga y yo seguía sin convertirme en chico.

»Lo curioso es que yo no respiraba. Llevaba mucho tiempo sin respirar. Así que creí que estaba muerta e hice otra cosa muy curiosa: verme a mí misma dentro del ataúd. Quedaba muy bien, toda vestida de blanco, ya sabe. Llevaba un velo como de novia y estaba llorando porque estaba muerta o por mi aspecto enternecedor o algo por el estilo. No: era porque habían puesto hojas de mazorca en el ataúd. Lloraba porque habían puesto hojas de mazorca en el ataúd donde yacía muerta, pero todo el tiempo sentía que

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la nariz se me calentaba y se me enfriaba, y veía a toda la gente sentada alrededor del ataúd, diciendo ¿Verdad que está preciosa? ¿No es cierto que está preciosa?

»Pero yo seguía diciendo ¡Cobarde! ¡Cobarde! ¡Tócame, cobarde! Me enfadé muchísimo porque tardaba tanto en hacerlo. Me puse a hablarle y a decirle ¿Crees que voy a estar aquí tumbada toda la noche sólo por tu conveniencia?, le decía. Déjame que te explique lo que voy a hacer, le decía. Pero allí seguía yo, tumbada, con las vainas riéndose de mí y mi carne dando saltos para alejarse de su mano, pensando en lo que iba a decirle; le hablaría como hace una maestra en la escuela, y en seguida yo era la maestra; la mano una cosita negra como un niño de color, más o menos, y yo la maestra. Porque yo decía ¿Cuántos años tengo? y yo misma contestaba que cuarenta y cinco. Tenía el pelo gris, anteojos y el pecho tan abultado como las mujeres de esa edad. Llevaba un traje sastre de color gris, yo que nunca he podido ponerme nada gris. Y le estaba diciendo lo que iba a hacer y la mano se paraba y volvía a pararse como si ya fuera capaz de ver la vara de dar azotes.

»Luego dije que aquello no bastaba. Tenía que ser un hombre. De manera que pasé a ser un viejo con una barba blanca muy larga, y el hombrecito negro se fue haciendo cada vez más pequeño y yo decía Ahora. Vas a ver ahora. Ya soy un hombre. Entonces pensé en ser un hombre, y tan pronto como lo pensé, sucedió. Hizo una especie de ruido apagado, como cuando, al soplar, se dilata el extremo cerrado de un tubito de goma. Estaba frío, como el interior de la boca si se la tiene abierta. Lo sentía perfectamente y seguí tumbada muy quieta, procurando no reírme de la sor-presa que se iba a llevar. Sentía los saltos de mi carne dentro de las bragas por delante de su mano y cómo estaba allí tumbada procurando no reírme de lo sor-prendido y enfadado que iba a estar en cosa de un minuto. Pero de repente me quedé dormida. No fui capaz de esperar despierta a que su mano llegara allí. Me quedé dormida sin más. Ya no me sentía dar saltos delante de su mano, pero oía las vainas de las mazorcas. No me desperté hasta que vino aquella mujer y me fui con ella al cuarto del granero. 

…….

Al salir del cuarto donde se encontraba Temple Horace deseó que la muchacha muriera, que él muriera, que todos los de aquella casa se murieran, salió trastornado después de esa conversación, se despidió de Miss Robe quien le rogó que sacara a esa pobre muchacha de ahí y la alejara de Popeye.

Cuando llegó a su casa Horace llegó a una conclusión:

“Entonces se dio cuenta de lo que significaba aquella sensación en el estómago. Dejó la fotografía a toda prisa y se dirigió al cuarto de baño. Abrió la puerta precipitadamente y buscó a tientas el interruptor de la luz, pero, sin tiempo para encontrarlo, se abalanzó a oscuras hacia el retrete hasta apoyarse en él con los brazos extendidos mientras las vainas de las mazorcas producían un estruendo terrorífico bajo los muslos dela muchacha. Tendida, con la cabeza ligeramente alzada y la barbilla hundida —como una figura desprendida del crucifijo—, contemplaba algo negro y furioso que salía rugiendo de su cuerpo descolorido. Estaba atada de espaldas —desnuda— sobre una plataforma que avanzaba velozmente por un túnel negro, y la negrura fluía en rígidos filamentos por encima de su cabeza mientras resonaba en sus oídos el rugido de las ruedas de hierro. El vagón salió disparado del túnel por una larga pendiente cuesta arriba, y en seguida la

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oscuridad superior quedó desgarrada por paralelas claridades de fuego vivo, hacia un crescendo semejante a una respiración contenida, un intervalo durante el cual la muchacha se meció suave y perezosamente en una nada donde brillaban, pálidos, innumerables puntos luminosos. Muy por debajo de ella oía el débil, el furioso estruendo de las vainas de las mazorcas.”

XXIV:

Temple se asoma desde su cuarto para mirar el pasillo y ve a Minnie que estaba al lado de la puerta de Miss Reba, de nuevo en su cuarto se queda paciente a esperar que esta baje las escaleras. Eran las 10 de la mañana y la joven mira en el cuarto unos trajes negros de Popeye en una silla y varios vestidos nuevos, sombreros y perfumes de marca que le pertenecían, todo lo volvió un revoltijo y seguido los lanzo a una esquina en un episodio de rabia. Encuentra una pistola que guarda debajo de la almohada y vuelve a sentarse en la cama.

A las 12 Minnie le sube el almuerzo, Temple no lo mira y solo abre la puerta para pedir una copa de ginebra, cosa que en principio le niegan, pero al cabo de 15 minutos le suben lo que la joven quería. Al observar la mujer el estado de las prendas tiradas en el suelo junto con los perfumes y demás, reprende a Temple y dice que no entiende el porqué de su actitud para con Popeye.

A las 5 de la tarde sale Miss Reba, inmediatamente Temple busca su sombrero de entre la ropa del rincón, saca su monedero y baja las escaleras, se encuentra con Minnie en el vestíbulo y le ofrece 10 dólares para que la deje salir por 10 minutos, cosa a la que la mujer se niega por miedo a perder su puesto y también por miedo a la reacción de Popeye. Después de ofrecerle 20 dólares esta cede y Temple logra salir de la casa.

Dos hombres la estaban vigilando, uno en un taxi y otro que se encontraba al otro lado de la calle, mientras, ella entra a un bar que se encontraba en la esquina, hace una llamada y regresa a la casa. Minnie le sube una copa de ginebra que la joven guarda, a las 6:30 Miss Reba le envía otra copa que también guarda. Se acuesta a dormir y se levanta a las 9:30, se baña, se arregla y se toma el vaso donde guardó las dos copas de ginebra, baja, logra salir de la casa.

Popeye se encontraba en un carro frente a la casa, le abre la puerta y después de una discusión breve entre él y Temple, la joven por fin sube al auto. La charla se basaba en que Popeye iba a conocer a alguien llamado Red, que según Temple era más hombre que Popeye y que por esto él debería temerle. Llegaron al Grotto donde se apearon en un sitio retumbante de música.

Entraron al lugar y empezaron a bailar, Temple miraba agitada por todo el lugar buscando entre las personas que se encontraban allí, fue por un trago y mientras lo tomaba por fin encontró a quien estaba buscando en la puerta, a Red. Estaba junto a Popeye sentada y bebiendo, cuando el joven se le acerca y le pide a Temple que bailen, esta se niega y acto seguido Red saluda a Popeye.

Después de beberse toda una botella Temple baila con Popeye, luego están en la mesa de juego, se logra escabullir y escapar de ese ambiente y luego sale de la pista de baile para encontrarse con Red en una mesa de otra sala. Al verlo, se abalanzo sobre él, este

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la apartó a la fuerza y luego la joven empezó a pedirle que se escaparan juntos, acto seguido tienen una conversación acerca de Popeye, luego volvieron a la pista de baile.

Temple siguió bailando, pero del estado de alicoramiento en que se encontraba no reaccionó sino hasta el momento en que se vio agarrada por dos hombres que estaban en el recinto, no podía escapar mientras estos se dirigían a la salida. Red la siguió con la mirada pero pareció no importarle y no dejó de jugar. Los dos hombres la subieron a un coche y mientras arrancaban vio a Popeye encender un cigarrillo en un auto cercano.

XXV:

Se encontraban en el en un salón donde había un ataúd negro con arreglos de plata rodeado de arreglos florales por todas partes, había una orquesta que tocaba jazz delante del ataúd y en otro lado se encontraba Gen vociferando que se acercaran a beber ponche, mientras gritaba que Red era un gran hombre, que era un gran amigo y que era como su hijo.

Más que un funeral, parecía una fiesta, los asistentes vestían de colores brillantes, hablaban alegremente y tomaban como si lo fuera, todos decían que a Red no le hubiese gustado que fuera algo solemne, a causa de que el encargado quería calmar y bajar los ánimos para que pareciese más un funeral, se formó una pelea.

El coche fúnebre se fue al cementerio seguido de 6 packards descapotados llenos de flores.

Un taxi se apeó en frente de la casa de Miss Reba dejando a 3 mujeres y un niño, una de ella era la dueña de la casa y las otras dos una regordeta, Miss Mirtle y otra delgada, Miss Lorraine. Al entrar a la casa entraron al cuarto de la anfitriona y se pusieron a tomar cerveza. La señora regordeta lloraba de cuando en vez mientras la otras dos la calmaban. El niño que iba con esta, se tomaba la cerveza de Miss Reba cuando esta se distraía.

Cuando entradas ya en tragos comenzaron a charlar acerca de lo acaecido entre Popeye, Red y Temple. Narraba Miss Reba que cuando el primero llevó a la joven a la casa tiempo atrás, nada bueno esperaba que pasara, decía que le compraba trajes, sombreros y perfumes de marcas por montón, pero que Temple los arruinaba en sus episodios de ira, pues a pesar de que la complacía con esto, no la dejaba salir de la casa ni hablar por teléfono.

Para colmo de males, él se iba y regresaba día de por medio dejándola sola y encerrada. Cuando sus ausencias empezaron a prolongarse, pasó algo que se veía venir, Temple salía y una mañana llegó con un joven llamado Red, al que subió a su cuarto y se encerraron por hora y media. Minnie que presencio esto informó inmediatamente a Miss Reba. Al día siguiente cuando los jóvenes volvieron a aparecerse, esta abordó a Red para advertirle que dejara de hacer esas cosas en su casa, que dejara de dañar la reputación de ese negocio. Sin embargo estas cosas siguieron pasando durante 4 mañanas seguidas. Luego no volvieron y Popeye se ausentó por una semana entera, Temple hacía de las suyas con aquel muchacho como si fuera una “mula en celo”. Un día finalmente Popeye los encontró desnudos y se quedó contemplándolos haciendo un sonido como de relinche.

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Al final Minnie interrumpe la conversación con el niño en las manos y dijo que éste se había tomado una jarra entera de cerveza.

XXVI:

Horace se encontraba aún en pijama escribiendo una carta a su esposa pidiéndole el divorcio, se lavó y cambió, fue a la estación de trenes donde se encontró con Snopes. Luego caminando le pareció ver a su hermana por entre los almacenes, la perdió de vista.

Narcissa se encuentra con el fiscal Graham, un hombre que se pagó la universidad con su propio trabajo, que le gustaba jugar póker y se graduó sin honores. La mujer le pregunta sobre las posibilidades que tiene su hermano de ganar el proceso y este le responde que cree que tiene pocas probabilidades porque ellos tenían pruebas de que ese hombre era culpable. Por ultimo esta le pregunta que cuando aproximadamente se iba a acabar el proceso, Graham le responde que a más tardar el 24.

Cuando Narcissa llega a casa empieza a escribir una carta a Belle informándole que su esposo volvería el día 24, luego llama a Horace y le pregunta la dirección de su mujer.

….

En la barbería se encontraba snopes con un ojo morado y con magulladuras, afirmando que lo habían atropellado. Pero renegaba mucho de los judíos diciendo que no pagaban el precio justo por lo que un americano si pagaría bien. El barbero le pregunta que a qué coche estaba intentando venderle algo antes de que lo atropellara.

XXVII:

Una semana después de su visita a Memphis, Horace llama a Miss Reba para saber si Temple aún se encontraba en su casa, esta le dice que si pero que desaprobaba el que enviara a un policía a su casa, se ponen de acuerdo para que la notificación sea diferente de la normal. El día anterior al juicio Horace se vuelve a contactar con Miss Reba y esta le informa que ambos se habían ido.

El día del juicio, Horace llama Mrs Goodwing al estrado, esta cuenta la misma historia que le había contado al abogado, cuando el fiscal la fue a interrogar, pregunta acerca de la fecha de matrimonio con Lee, Horace inmediatamente objeta dicha pregunta y después el juicio se aplaza para el día siguiente.

El abogado se dirige a la casa de la loca a buscar a la mujer y al niño para arreglar los detalles del interrogatorio del día siguiente, sin embargo no la encuentra ahí sino que está en la cárcel con Lee. Horace se dirige a la cárcel. Allí tiene una conversación con ambos. Cuando Goodwing se queda dormido, el abogado aprovecha para hablar con Ruby acerca del pago de sus honorarios, esta se pone a la defensiva pues pensó que se Benbow se le estaba insinuando.

Esta le cuenta que años atrás él se había ido a las filipinas y que ella lo había esperado juiciosamente durante 9 meses, cuando se enteró que Lee volvería renunció a su trabajo e intentó buscarlo en el barco sin éxito alguno, después uno de sus compañeros le confiesa que este se encuentra en la cárcel de Leavenworth por haber matado a un soldado por una negra. Luego consigue trabajo para lograr ir tras él y poderlo sacar de la cárcel, pero no tenía como pagar un abogado, así que le pagó de la única manera que

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pudo. Cuando por fín pudo sacar a Goodwing de la cárcel gracias a un abogado y a un senador que logró interceder, ambos estaban sin un peso y cuando la mujer le cuenta como pudo pagar el abogado, Lee solo le golpeo.

Después de que amaneciera, benbow sale con la mujer a desayunar.

A las 9 Horace llega a los juzgados, cuando ingresa a la sala donde se llevaba su proceso ve un hombde cabello negro rizado con algunos visos de canas. Luego sin darse cuenta Temple es llamada al estrado y atónito no respondía bien a los llamados del juez.

XXVIII

En el estrado sentada en el banco de los testigos se encontraba sentada Temple vestida de negro y con la mirada al final de la sala, como distraída. El fiscal comienza a hacerle preguntas personales a la joven a las que ella responde mecánicamente, luego muestra una mazorca manchada, hizo unas declaraciones dadas por un ginecólogo que fueron muy inoportunas en su momento, razón por la cual Horace objeta y el juez le da la razón.

Interrogatorio del fiscal a Temple:

— ¿Dónde estaba usted la mañana del domingo doce de mayo? — En el cuarto-almacén del establo.

Girando a medias, señaló a Goodwin con el dedo. — ¿Ha visto usted antes a ese hombre?

— Temple siguió mirando al fiscal del distrito, el rostro completamente rígido, vacío de expresión. Desde muy cerca, los ojos, las dos manchas de colorete y la boca eran como cinco objetos absurdos en un plato pequeño conforma de corazón—. Mire hacia donde le señalo. ¿Dónde lo vio usted?

— En el cuarto-almacén.— ¿Qué hacía usted allí? — Esconderme. — ¿De quién se escondía? — De él. — ¿Ese hombre que está ahí? Mire hacia donde le señalo.— Sí. — Pero él la encontró.— Sí. — ¿Había alguien más allí? — Estaba Tommy, Dijo que…— ¿Estaba dentro o fuera del cuarto-almacén? — Estaba fuera, junto a la puerta. Vigilaba. Dijo que no permitiría… — Un momento. ¿Le pidió usted que no dejara entrar a nadie? — Sí. — ¿Y él atrancó la puerta desde fuera? — Sí.— Pero Goodwin entró. — Sí.— ¿Llevaba algo en la mano?— Llevaba una pistola.

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— ¿Intentó Tommy detenerlo? — Sí. Dijo que…— Espere. ¿Qué le hizo a Tommy? Temple le miró. — Llevaba la pistola en la mano. ¿Qué le hizo entonces?— Disparó contra él.

Acto seguido entró un hombre mayor y se acercó prepotentemente al estrado, preguntó si ya habían terminado con el interrogatorio de Temple, se la llevó mientras esta hacía ciertos intentos de soltarse pero él le decía algo al oído y ella accedía a irse con él. Al llegar a la puerta otros 4 hombres los rodearon y cubrieron completamente a la joven y así se fueron del lugar.

XXIX:

Horace sale del juzgado y Narcissa lo recoge, llora en el trayecto hacia la casa de su hermana, cuando llega come mucho y dice que saldrá a fumar un habano. Cuando sale, empieza a caminar hasta que visualiza la ciudad, pasa por el lado de la cárcel, llega a la plaza donde hay un tumulto de gente, se sienta en la acera del hotel, pasadas las 11 un mozo negro que trabaja en el hotel le dice que entre a la sala de muestras a lo que Horace acepta.

A las 12 se visualiza un fuego por la ventana del hotel, Horace sale corriendo junto con los demás que estaban en la sala, luego va hacía donde veía de donde provenían las llamas, se encuentra con un hombre en llamas con una lata de breva en la mano, se abre paso en la multitud y ya nada se ve dentro de las llamas. Los espectadores lo agarraron para que no se acercara más. Sin embargo cuando notaron que él era el abogado del que estaba en la hoguera pensaron en lanzarlo a él también, pues consideraban justo ese castigo para alguien que había defendido a aquel que perjudico a la inocente chica universitaria con una mazorca.

XXX:

En Kingston esperaba un señor mayor de bigote canoso y puntas engomadas al abogado Horace, cuando este llegó lo dejó cerca a su casa y este se fue caminando. Entró por la puerta de atrás y su mujer se encontraba en la cama leyendo una revista. Benbow le pregunta por la pequeña Belle a lo que esta responde que se encuentra en otra casa y que la llamó hace dos noches.

Horace llama a la pequeña Belle para asegurarse de que esté bien y ella tiene una muy corta y fría conversación con él. Bell su esposa le dice que no la moleste, que ella ya la había llamado y que cierre la puerta de atrás.