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7/24/2019 ricoeur-ppio-de-placer-y-ppio-de-realidad.doc

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EL PRINCIPIO DEL PLACER Y EL PRINCIPIO DE REALIDAD

La inclusin de la pulsin de muerte en la teora de las pulsiones significa, en el sentido ms estricto, una revisin

total1.

Freud, postulando la equivalencia entre los principios de placer y de constancia, pensaba inscribir el psicoanlisis en la

tradicin cientfica de Helmhol y Fechner. !l psicoanlisis poda acreditarse como ciencia gracias a esa cuasi fsica

del aparato psquico y a la transcripcin cuantitativa de los fenmenos econmicos subyacentes a la interpretacin ".

Frente a la muerte, la libido cambia de sentido y recibe el nombre mtico de !ros# y el principio de realidad,

diametralmente opuesto al principio del placer, despliega frente a la pare$a !ros%&natos toda una $erarqua de sentidoque nosotros abarcamos con el nombre, igualmente mtico, de 'nan().*

Ms all del principio del placer... equivale, en 1+", a decir- introduccin de la pulsin de muerte en la teora de las

pulsiones.

&res momentos en el desarrollo del significado del concepto freudiano de realidad-

1. Los escritos metapsicolgicos de 1+1%1+1/ consagran una primera ampliacin del concepto de realidad, dndole

un sentido econmico, homog)neo al que la primera tpica confiere, por otro lado, a las nociones de inconsciente,

preconsciente y consciente# la realidad, dicho grosso modo, sera el correlato de la funcin de conciencia. 0asando as

de un sentido descriptivo y clnico a un sentido sistemtico y econmico, habremos transcrito el concepto inicial en un

nuevo registro, pero sin haberlo transformado realmente. ". !nriquecimiento derivado de la investigacin de la

relacin ob$etal. *. 2ntroduccin del narcisismo y paso a la segunda tpica- Lo real no es solamente lo contrario de la

alucinacin, sino la dura necesidad tal como se descubre ms all del abandono de la postura narcisista y ms all de

los fracasos, decepciones y conflictos que culminan en la )poca del !dipo. La realidad se llama entonces necesidad y,ya a veces, 'nan().3

1. Principio de realidad y procesos secundarios:'ntes de la pulsin de muerte, la realidad es un conceptoregulador de igual categora que el principio del placer# por eso recibe tambi)n el nombre de 4principio5. 6espu)s de

la pulsin de muerte, la nocin de realidad se carga con un sentido que la sit7a al nivel de las grandes fueras cuasi

mticas que se reparten el imperio del mundo. !sta transfiguracin estar simboliada en el t)rmino de 'nan(), que

recuerda a la ve el destino de la tragedia griega, la naturalea en la filosofa del 8enacimiento y de 9pinoa, y el

eterno retomo de :ietsche./

:o hay duda de que el punto de partida de las observaciones freudianas sbrela realidad es clnico# ;8icoeur, 0., 1+/, pp. ""%""3.+8icoeur, 0., 1+/, pp. ""3%""/.18icoeur, 0., 1+/, p. "*, nota 11.11C. D. G2H, p. "3# 9. !. G6, p. *3# tr. esp. i, p. ". citado por 8icoeur, 0., 1+/, p. "*".1"8icoeur, 0., 1+/, p. "**.


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4!l hecho de encontrar un ob$eto se?ual no es, a fin de cuentas, ms que una manera de volver a encontrarlo5. 0ara la

libido, el futuro est atrs, en la 4felicidad perdida5.1*

!l deseo quiere ante todo lo imposible. A

Frente a las dificultades del mundo e?terior, Ael principio de placerB resulta no slo inoperante sino peligroso. ;8icoeur, 0., 1+/, p. ".1+8icoeur, 0., 1+/, p. "."8icoeur, 0., 1+/, p. "."18icoeur, 0., 1+/, pp. "3%"/.""8icoeur, 0., 1+/, p. ">.


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dicho de otro modo, una especie de elasticidad orgnica o, si se quiere, la manifestacin de la inercia ;&rg het$

inherente a la vida orgnica5.

ese carcter pulsional es lo que autoria, de modo definitivo, a erigir la inercia en pie de igualdad con la pulsin de

vida.

MNayamos, pues, a lo e?tremoO lo e?tremo es esto- el viviente es muerto no por fueras e?teriores que lo sobrepasan,

como en 9pinoa, muere, va hacia la muerte por un impulso interior- 4&odo

ser viviente muere por raones internas... la meta de toda vida es la muerte5.1 e$or PIo peorJP- la vida misma no

es voluntad de cambiar, de desarrollarse, sino voluntad de conservarse. 9i, pues, la muerte es meta de la vida, todas las

motivaciones de la vida slo son rodeos hacia la muerte, y el as llamado instinto de conservacin slo es una tentativadel organismo para defender su propia manera de morir, su personal camino hacia la muerte. Los cambios nos son

impuestos por los factores e?teriores, por la tierra y el sol, o sea por el medio ambiente preorgnico de la vida# el

progreso es trastorno y distraccin, a los que se adapta la vida a fin de proseguir, en este nuevo plano, su designio

conservador. 0or eso resulta cada ve ms difcil morirse- cuanto ms se prolonga y se complica el camino hacia la

muerte, ms se individualia y singularia. !n cuanto al llamado 4instinto de perfeccin5, representa sin duda una

consecuencia de esa forada adaptacin# si todos los caminos estn interceptados hacia atrs por la represin, Mqu)

remedio sino seguir huyendo hacia adelante, por el camino del progreso intelectual y la sublimacin )ticaO 0ero nada

de todo ello demanda un 4instinto de perfeccin5 diferente de las tendencias conservadoras de la vida.

I:o testimonia todo ello la ndole conservadora de la vida y la compulsin repetitiva inherente a la vidaJ"*

0or lo mismo que la vida camina hacia la muerte, la se?ualidad es la gran excepcin en esa marcha de la vida hacia la

muerte.13 !s &natos quien revela el sentido de !ros como lo que resiste a la muerte. Las pulsiones se?uales son 4las

aut)nticas pulsiones de vida# act7an contra el designio de las otras pulsiones, designio que, en ran de sus funciones,conduce a la muerte# este hecho se@ala entre unas y otras pulsiones una contraposicin cuya importancia ha sido

reconocida desde mucho tiempo atrs por la teora de las neurosis5.

el deseo del otro est implicado inmediatamente en la posicin de !ros# es siempre en compa@a de otro como el

viviente lucha contra la muerte, contra su muerte, tras la que va cuando est aislado y separado, a trav)s de largos

rodeos de adaptacin al medio ambiente natural y cultural."

Freud siempre fue dualista

Hay que llevar el nuevo dualismo no ya al nivel de las direcciones, de los fines y de los ob$etos, sino al nivel de las

'uer(as mismas#"

2. La pulsin de %uer#e y la des#ruc#i+idad del supery - 8epetidas veces ;ya enMs all...,pero sobre todo en %lyo y )l ello y en !Q malestar en la cultura$ habla Freud de la pulsin de muerte como de una energa 4muda5, por

oposicin al 4clamor5 de la vida. ;


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!l caso de la melancola ;


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-'/ E& LA NE,A)I0IDAD una tendencia a restablecer una situacin anterior

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