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Centro Universitario “Vladimir I. Lenin”
Facultad de Ciencias EconómicasCentro de Estudio de Dirección
Trabajo de Diploma
Estudio de la identidad organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas.
Autora: Zoe Marlen Leyva Manzano
Tutor: Dr. C. Eriberto Bauzá Vázquez Profesor Titular
Las Tunas, Junio 2008
" Las organizaciones que presentan rasgos más nítidos y definidos de identidad poseen en general un desempeño más satisfactorio que
aquellas otras donde dichos rasgos se presentan de manera ambigua.”
Jorge Etkin y Leonardo Schvarstein
Agradecimientos
En particular a mi tutor Dr.C Eriberto Bauzá Vásquez por su ayuda y orientación pues ha sido una guía valiosa en el desarrollo de este Trabajo de Diploma.A mis amigas Anibet, Natalys, Angela, Maydel, Ailyn y Yuliet que mantuvieron fidelidad en los momentos difíciles; por las palabras de aliento que nunca faltaron, a ustedes gracias por su amistad real y sincera.
A los profesores Olga López, Anita Bello, Guillermo Ramírez, Enrique Marañón, Francisco Bermúdez y Ramón Morel del Centro de Estudios de Dirección por su entera colaboración.A todos los profesores mis más sinceros agradecimientos por incentivarme al éxito que hoy materializo, por brindarme los conocimientos adquiridos en el transcurso de la carrera y por llevarme por el camino de la inquietud intelectual.A la Revolución que me forjó como persona de bien e hizo posible la realización de mi sueño.A todas aquellas personas que de una forma u otra contribuyeron a la elaboración de esta investigación.
A todos gracias por su granito de arena.
DedicatoriaA los seres más especiales del mundo mis padres Arístides Juan Leyva Leyva y Marlenis
Natividad Manzano Escalona pues todo lo que soy o espero ser se lo debo a ellos. Tantas veces he logrado saber de sus desvelos y los he visto pensando en mi futuro, que les doy las gracias por darme la vida, por su amor incondicional, por su ternura, sacrificio, abnegación y por todas las cosas que me han enseñado para enfrentar la vida ya que son producto de su esfuerzo y perseverancia por mí. Los amo porque son míos.A mis sobrinos y primos, cuando el futuro le parezca demasiado incierto, piensen que luchar por un motivo los hará diferente y que el conocimiento es lo único que convierte al hombre en un ser inmortal.A mis hermanos que aunque estén lejos, son la luz inmanente en mi existencia.A mis abuelos Pedro, Belkis y Gloria que aunque no están físicamente los llevo en el corazón.A mi familia, amigos y vecinos que me proporcionan alegría y depositaron su amor y confianza en mi realización profesional.
RESUMEN
En el actual siglo, las Instituciones de Educación Superior como sistemas complejos,
están sujetas cada vez más a los cambios que se operan en el entorno político,
económico, social y cultural. En el caso de las universidades cubanas en particular, se
refuerza su compromiso social, de ahí que, la gestión de sus procesos deberá tener en
cuenta las necesidades del desarrollo estratégico institucional para buscar la excelencia
de éstos, lo que significa asegurar la calidad de los mismos.
Es en este contexto, que comienza a prestársele atención al comportamiento de los
miembros de estas instituciones (profesores, estudiantes y demás personal implicado)
asociándolo a estudios de cultura organizacional, valores y más actualmente a la
identidad. El Centro Universitario de Las Tunas como parte del sistema de Instituciones
de Educación Superior cubana, está inmerso en este proceso para el logro de la
excelencia universitaria, sin embargo, en el mismo persisten insuficiencias que inciden
en su perfeccionamiento.
Es así que, en su nivel de respuesta social se constituyó como problema científico de
esta investigación, las insuficiencias en el desarrollo de la identidad organizacional del
Centro Universitario de Las Tunas limita su desarrollo estratégico.
Por tanto, el Trabajo de Diploma está dirigido a caracterizar el estado actual del
desarrollo de la identidad organizacional del Centro sustentada en una estrategia
organizativa para su diagnóstico. Al implementar la estrategia se obtuvo como resultado
que la universidad no tiene una identidad consolidada y por tanto se propusieron un
conjunto acciones para la comprensión e interiorización de las mismas.
ABSTRACT
Now a days, the higher Education Institutions, wich are considered complex systems,
are closely tied to all the changes that are taking place in the political, economical, social
and cultural environment. In the particular case of the Cuban universities, its social
obligation is strenghtened, so that the management of its processes should take into
account the needs of the institutional and strategical development just to look for its
excellence, wich means to ensure its oven quality.
It is in this context that it begins to pay attention to the behavior of the members of these
institutions (teacher, students and the rest of the people implied in this task), who are
associated to studies of organizational culture, values and more recently to identity. The
University Center from Las Tunas, as part of the Cuban higher Education Institutions, is
immersed in this process to achieve the University excellence, although in this very
process there are still lats of insufficiencies that fall in its improvement.
That is why in its social answering level it was set up as a scientific problem of this
investigation, the insufficiencies in development of the organization identity of the
University Center from Las Tunas which limit its strategic development.
Thus, this Diploma Paper is intended to characterize today’s conditions in the
development of the organizational identity of this Center, sustained in an organized
strategy for its diagnosis. When this strategy wos applied we got as its result that the
University does not have a consistent identity and so they were proposed different
actions for the understanding and deepening of them.
ÍNDICE
Introducción……………………………………………….............................................. 1
Capítulo I: Fundamentación teórica de la identidad, identidad organizacional, identidad en el contexto universitario y su diagnóstico……………………………………………………………… 6
I.1. La identidad. Sus generalidades gnoseológicas……………………... 6
I.2. Identidad organizacional y universitaria……………………………….. 14
I.3. El diagnóstico de la identidad organizacional………………………… 23
Capítulo II: Estrategia organizativa para el diagnóstico de la identidad organizacional del Centro Universitario de Las Tunas………….. 30
II.1. Caracterización del Centro Universitario de Las Tunas……………... 30
II.2. Estrategia organizativa para el diagnóstico de la identidad
organizacional……………………………………………………………. 36
II.3. Resultados obtenidos de la estrategia organizativa para
diagnosticar la identidad organizacional………………………………. 40
Conclusiones…………………………………………………………………………........ 59
Recomendaciones………………………………………………………………………… 60
Citas y Referencias Bibliográficas……………………………………………………... 61
Bibliografía…………………………………………………………………………………. 64
Anexos………………………………………………………………………………………. 72
INTRODUCCIÓN
La situación actual de incertidumbre, inestabilidad, conflictos y confusión que
caracteriza a la humanidad, influye en que cada pueblo consolide su historia; esta sobre
los cimientos de sus tradiciones y costumbres, reafirma su identidad como camino
decisivo de asegurar su futuro.
Por esta razón el mundo es cada vez más complejo y globalizado, donde se producen
grandes y continuos cambios tanto en lo económico, político, social y tecnológico
provocando un gran impacto en la sociedad y con ello en su identidad, lo cual se hace
extensivo a la identidad de las organizaciones. En estas circunstancias de variabilidad e
inseguridad donde el entorno se torna cada vez más retador, la identidad de las
organizaciones y entre ellas las de las universidades se ve afectada y se hace
necesario fortalecerla puesto que la misma necesita ser reconocida, establecida y
aceptada por las personas.
Las universidades cubanas están viviendo en un entorno de permanentes
transformaciones, es por ello que en este contexto histórico social actual en que se
desenvuelven vale adentrarse en el estudio de su identidad organizacional, pues es
esencial que esté bien definida la originalidad, particularidad y singularidad de la
universidad como organización, la cual debe permanecer en el tiempo y debe asegurar
la supervivencia de la institución.
Las investigaciones de la identidad organizacional cuentan con una escasa veintena de
años y en la actualidad se ha convertido en uno de los más populares tópicos; así cómo
cada persona es reconocida por los demás, de acuerdo a ciertas características que lo
identifican como tal: el sexo, la edad, la cultura, el modo de ser, los valores, es decir, su
identidad personal; las organizaciones también tienen una identidad organizacional.
De esta manera y como plantea Santillán (2006) “por identidad organizacional
entendemos la personalidad de la entidad. Esta personalidad es la conjunción de su
historia, de su ética y de su filosofía de trabajo, pero también está formada por los
comportamientos cotidianos y las normas establecidas por la dirección” [1]. Por tanto,
se puede considerar desde esta perspectiva como el conjunto de rasgos que
caracterizan o distinguen a las organizaciones y las diferencian de otras.
Ahora bien, si se desea que las universidades cubanas tengan un proceso de mejora
continua en el fortalecimiento de su identidad organizacional, resulta preciso trazar
acciones en vista del reconocimiento de la identidad como sentido de pertenencia para
que las personas se sientan orgullosas de la universidad que les abre las puertas del
ámbito profesional.
Es de esta forma que el Centro Universitario de Las Tunas como parte del sistema de
Instituciones de Educación Superior cubana, encamina sus esfuerzos a alcanzar la
excelencia y calidad en la formación integral de profesionales competitivos que
respondan a las expectativas del territorio, así como garantizar la superación continua
de su personal docente y, a la implicación en el logro de sus objetivos por el resto de
los miembros de la comunidad universitaria. Ello es posible si se presta la debida
atención a una gestión de sus procesos sustantivos, estos se sustentan en el desarrollo
de una cultura organizacional que en su configuración resulta una adecuada identidad
organizacional.
Sin embargo, para cumplimentar los propósitos anteriores es imprescindible prestar
atención a un conjunto de insuficiencias que se han detectado de forma empírica y de
acuerdo a la observación cotidiana, las cuales pueden incidir directa o indirectamente
en el alcance de tales objetivos y es posible que tengan efecto en la problemática a
tratar. De esta forma, se detectan las siguientes situaciones como son:
Existen insatisfacciones con los medios de trabajo y las condiciones laborales para
el desempeño de los docentes y personal de apoyo.
El nivel académico y científico del claustro de profesores resulta insuficiente para
cumplir con los requisitos y exigencias de una universidad de excelencia.
Solo se ha logrado la acreditación de una carrera de las ocho que se imparten en
el Centro.
Los espacios físicos en las oficinas de trabajo resultan limitados lo cual provoca un
estado de hacinamiento y con ello descontento entre los docentes.
La infraestructura civil del Centro no responde al crecimiento y desarrollo del
mismo desde el punto de vista docente, investigativo y sociocultural, lo cual se
visualiza en la escasez de aulas, albergues, salones de estudio.
Inadecuado sistema de señalización lo que limita la identificación de las diferentes
áreas y su distribución física (por áreas y departamentos).
Las condiciones estéticas internas se ven afectadas fundamentalmente por las
limitaciones en el mantenimiento de las instalaciones higiénico-sanitarias, la
iluminación, los locales docentes y las áreas deportivas y recreativas, así como por el
deterioro del mobiliario.
Es insuficiente la divulgación de los servicios y productos asociados a los procesos
universitarios en los medios de difusión masiva radial, televisiva y escrita.
Ante tales circunstancias resulta obvio, realizar un estudio de la identidad organizacional en la universidad como premisa para los procesos de cambio y de mejora estratégica institucional.
De acuerdo con los argumentos anteriores, se parte del problema científico de esta investigación el cual está dado en las insuficiencias en el desarrollo de la identidad organizacional del Centro Universitario de Las Tunas limita su desarrollo estratégico.
Atendiendo al problema planteado se declara como objeto de estudio el desarrollo de la identidad organizacional.
De este modo el objetivo general de este trabajo estará dado en caracterizar el estado
actual del desarrollo de la identidad organizacional del Centro Universitario de Las
Tunas sustentado en una estrategia organizativa para su diagnóstico.
Asumiendo este objetivo general el campo de acción resulta el diagnóstico de la
identidad organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas.
Teniendo en cuenta lo precedente se plantea como hipótesis que al caracterizar el
estado actual del desarrollo de la identidad organizacional en el Centro Universitario de
Las Tunas se podrán trazar acciones en vías de su consolidación y de esta manera
contribuir con su influencia al desarrollo de esta institución.
El tema que se analiza se ha convertido en una prometedora línea de investigación, sin
embargo a pesar de que se revela una inclinación hacia su estudio en el contexto
universitario, el mismo es todavía insuficiente.
Abordar la problemática de la identidad organizacional exige un estudio riguroso de las
diversas ciencias que desde su objeto de estudio presentan múltiples enfoques y
modos de comprenderla en su variedad. De manera que podamos apreciar los aportes
de la antropología, la filosofía, sociología, psicología entre otras, las cuales exteriorizan
criterios necesarios para interpretarla.
A continuación serán desarrolladas las siguientes tareas investigativas:
1. Determinar los elementos gnoseológicos de la identidad, identidad organizacional
e identidad organizacional en el contexto universitario.
2. Establecer la caracterización del Centro Universitario de Las Tunas describiendo
los antecedentes que sustentan la formación y desarrollo de su identidad.
3. Elaboración y aplicación de una estrategia organizativa para el diagnóstico del
estado actual de la identidad organizacional en un contexto universitario.
4. Análisis de los resultados y propuestas de acciones para fomentar el desarrollo de
la identidad organizacional universitaria.
Los métodos de investigación utilizados para darle cumplimiento a las tareas son:
De nivel teórico:
1. Histórico-Lógico: para determinar la Caracterización del Centro Universitario de
Las Tunas.
2. Hipotético-Deductivo: para la construcción de la hipótesis y establecer la relación
entre las diferentes categorías que se traten en el marco teórico.
3. Análisis y síntesis de la información: para establecer los elementos gnoseológicos
y los referentes teóricos conceptuales que sustentan el proceso investigativo.
De nivel empírico:
1. La observación: se emplea para valorar las manifestaciones y comportamientos de
los miembros de la comunidad universitaria y agentes externos a la universidad
con los rasgos distintivos o identitarios; así como, las condiciones materiales y de
infraestructura del Centro.
2. Las entrevistas individuales: se realizan para obtener información en el diagnóstico
de la identidad, fundamentalmente para precisar insuficiencias tanto en el
desarrollo institucional, como en los elementos identitarios que pueden resultar
incoherentes con éstos.
3. Encuestas: se confeccionan para recoger información sobre los elementos
específicos que configuran la identidad de la institución, básicamente es de forma
anónima para la mayor objetividad y veracidad posible evitando así, la distorsión
de información.
El aporte práctico-metodológico de esta tesis está en la estrategia organizativa y la
caracterización de los principales elementos ó componentes de la identidad
organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas y la influencia en su desarrollo.
El tema en cuestión es de gran importancia y de novedad debido a que ha sido poco
estudiado en la institución y es completamente nuevo, además de que responde a las
recomendaciones derivadas del proyecto de investigación: “Modelo para la formación y
desarrollo de la cultura organizacional en instituciones de educación superior” y tributa
al mismo; por cuanto la universidad cubana y en específico la tunera está en proceso
continuo de cambio y de perfeccionamiento por lo que abordar la temática de identidad
se constituye en sustento y garantía del desarrollo estratégico institucional.
La estructura de este Trabajo de Diploma contiene la introducción, dos capítulos,
conclusiones, recomendaciones, bibliografía y anexos. El primer capítulo aborda los
fundamentos teóricos (aspectos fundamentales sobre identidad, identidad
organizacional, identidad en el contexto universitario y diagnósticos realizados por
distintos autores) y en el segundo capítulo aborda la caracterización del Centro
Universitario de Las Tunas con énfasis en los aspectos que determinan su identidad, la
estrategia organizativa para el diagnóstico de la identidad organizacional y la
caracterización de sus principales elementos.
CAPÍTULO I: FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA DE LA IDENTIDAD, IDENTIDAD ORGANIZACIONAL, IDENTIDAD EN EL CONTEXTO UNIVERSITARIO Y SU DIAGNÓSTICO
En este primer capítulo de la investigación se presentan una serie de conceptos y
aspectos teóricos sobre la identidad, identidad organizacional e identidad en el contexto
universitario los cuales son necesarios de acuerdo a la perspectiva que va acorde con
la temática. Conjuntamente con ello, se hace referencia a diversas formas de
diagnósticos realizados por distintos autores los que tienen en cuenta elementos que
componen la identidad organizacional.
I.1. La identidad. Sus generalidades gnoseológicas
Ante los vertiginosos cambios en que se desenvuelven las universidades cubanas vale
adentrarse en el estudio de la identidad de las mismas, lo que significa que éstas
manifiesten cualidades que resulten armónicas con sus necesidades de desarrollo
estratégico y su compromiso social, de manera que se hagan pertinentes los procesos
sustantivos y su impacto resulte efectivo, más allá incluso de los límites en los cuales se
desarrollan.
Pero al estudiar la identidad en este contexto, primero, es necesario establecer
determinadas precisiones conceptuales de esta categoría y a partir de allí, incursionar
desde las diversas posiciones epistemológicas, enfoques y áreas del conocimiento que
la toman como categoría de estudio. Por tanto abordaremos la identidad desde
diferentes enfoques hasta concretar en el contexto universitario.
La identidad es privilegiada en sus inicios por la antropología, remite a la cultura, la
subjetividad, el imaginario social y siempre al ancho mundo de lo simbólico. Ella, ha
sido analizada principalmente en sus expresiones étnicas. No es sino que hasta hace
unas pocas décadas cuando la sociología de la cultura enriquece sus objetivos de
análisis, al agregar algún calificativo al ámbito de las representaciones sociales; es así
que la identidad comienza a representarse en los procesos políticos, populares,
sectorial (obrera, campesina, indígena) u organizacional.
El concepto de identidad ha sido abordado por disímiles autores quienes han apreciado
la complejidad del tema y su tratamiento adquiere cada vez más una medular
trascendencia, tanto es así, que su estudio se ha hecho necesario desde diversas
ópticas, es decir, desde la política, la ideología y la cultura en sus distintas
manifestaciones artísticas y literarias, así como desde las disciplinas de las ciencias
sociales.
Desde que aparece el término identidad en nuestro idioma hacia el siglo XV, se le han
asignado tantas propiedades inherentes a él que lo hacen un término polisémico y
polémico. Es un vocablo que proviene del latín "identitas", que significa "lo mismo", es
decir, "cada cosa es lo que es", y en su misma redundancia se pone de manifiesto esta
condición intrínseca de la identidad: lo singular e idéntico, la unicidad y la "mismidad" de
cada cosa. Identidad equivale a ser genuino y legitimo.
Lichtenstein (1961) define la identidad, como la experiencia del autoconocimiento
consciente específico de los rasgos personales únicos de uno mismo y de una
continuidad interna a través de todos los cambios de personalidad en la vida [2]. Del
mismo modo resulta más apropiada, Grinberg, L. y Grinberg, R. (1973) los que
consideran que la identidad alude a la continuidad de un individuo, que a su vez puede
mantener un cierto nivel de integridad que lo ayuda a diferenciarse de otros y a
mantener la estabilidad a través de circunstancias diversas y de transformaciones y
cambios. [3]
Por otra parte Torregrosa (1983) conceptualizando la identidad planteó: "(…) es
contribuir a restaurar como objeto legítimo, en el estudio del hombre, el de su
subjetividad, el de la conciencia y con ello, obviamente la conciencia de sí mismo, es
decir, la identidad personal" [4] y la Real Academia Española define el término como el
"conjunto de circunstancias que distinguen a una persona de las demás" citado por:
Massafra (1998). [5]
Podemos interpretar del análisis de las consideraciones anteriores que la identidad vista
desde lo personal e individual es el conocimiento que tiene el individuo de si mismo, el
cual tiene rasgos únicos que le otorgan un carácter distintivo que marca la diferencia de
los demás.
La identidad personal es la continuación de la personalidad propia, la cualidad del
sujeto de permanecer siendo él mismo. Todos los seres humanos poseen una
personalidad única, aunque esta se manifiesta de distintos modos. Cuando describimos
a las personas lo hacemos en términos de rasgos o cualidades: impulsivo, serio, crítico.
Así un rasgo sería agrupaciones de conductas específicas que se presentan
habitualmente. Un rasgo de personalidad es una forma de comportarse estable y
duradero, que va más allá de una simple reacción a una situación concreta. Con esta
última consideración podemos reafirmar que los rasgos más estables de la
personalidad son en definitiva los que conllevan a la identidad personal.
Brubaker y Cooper (2001) mencionan que el concepto de identidad ha sido utilizado
para propósitos tan distintos que se ha vuelto ambiguo y ha perdido su especificidad. La
identidad de las personas no es algo dado y cerrado, por el contrario, está sujeta a
permanentes definiciones y re-definiciones de uno mismo en relación con los demás.
Tampoco se debe pensar como algo que se transforma tan rápidamente que pierde su
sustento, sino que se constituye sobre una base difícil de cambiar. [6]
Tal como lo plantean Brubaker y Cooper la identidad de las personas no es algo dado y
cerrado, sino que está sujeta a permanentes definiciones y redefiniciones de uno mismo
con relación a los demás. El proceso de identificación que vive el estudiante
universitario dentro de la relación que establece con sus nuevos colegas, la misma
institución y su entorno, redefinen esa identidad la cual es adquirida desde los primeros
años de vida personal y académica, ya que cada individuo tiene la inteligencia de hacer
nuevas relaciones por medio de su subjetividad, por ende, la identidad nunca será una
unidad cerrada ni concluyente.
La identidad aparentemente es algo que todos tenemos pero que pocas personas
realmente pueden definir. La identidad es un proceso tanto conciente como inconciente
que se logra a partir de ambas circunstancias. Innata en el aspecto de que en vista de
que nacemos en un lugar determinado, con unos padres determinados, etc., (…) ciertas
cosas como el idioma y ciertas costumbres serán adquiridas sin nuestro
consentimiento; sin embrago a medida que se va creciendo el proceso se vuelve más
conciente y el individuo se vuelve capaz de decidir que comportamientos, actitudes,
vestimenta e inclusive idiomas quiere aprender y hacer suyos. (…) ésta se va formando
conforme el curso de nuestras vidas y las experiencias que tenemos a partir de ésta. Silva (2006). [7]
Teniendo en cuenta lo anterior se concuerda con los autores puesto que la identidad es
lo conciente e inconciente que cada persona va conformando en el transcurso de su
existencia a través de las experiencias y aprendizajes adquiridos. Esta identidad de las
personas no es algo dado ni cerrado sino que tiene un carácter dinámico y está en
continúo perfeccionamiento; además de ser un proceso complejo, que se constituye
internamente y bajo las condiciones del ambiente en el que conviven (padres, abuelos,
hermanos) y que comparten con sus similares (profesores y amigos como agentes
sociales de las culturas familiares y escolares).
Es por ello que coincidimos con D´Angelo (2002) cundo afirma que la identidad
(personal, grupal, cultural, nacional) es una categoría imprescindible en la comprensión
de la subjetividad social, la que refiere múltiples aspectos de la realidad social; material,
estructural y espiritual en sus interrelaciones. [8]
Según Álvarez y Valencia (2002) en las ciencias sociales la identidad individual se
concibe como el conjunto de atributos que remiten a las cualidades propias del
individuo, lo que lo constituye y define ante el entorno, destacando su particularidad [9].
Además agrega, desde la perspectiva de la psicología la identidad del individuo se
reconoce y se reafirma en su relación con otros, en la confrontación con otras
identidades, de las cuales puede distinguirse y diferenciarse. Toda identidad surge y se
desarrolla en un proceso de interacción. La identidad individual refiere a lo propio, a lo
que el individuo es, a lo que constituye su sustancia y que es al mismo tiempo lo que
constituye su diferencia con los otros. Así, A no es = B; A es A y es por lo tanto
diferente de B. [10]
Dubar (2000) afirma que la identidad no es otra cosa que "el resultado estable y
provisorio, individual y colectivo, subjetivo y objetivo, biográfico y estructural de los
diversos procesos de socialización que, conjuntamente, construyen los individuos y
definen las instituciones " [11]. De este modo, la identidad es lo subjetivo, pero también
lo social, son las pertenencias y exclusiones, las afinidades y diferenciaciones, las
cercanías y distanciamientos. La identidad está vinculada a la concepción de sociedad
y a la percepción que se tiene de la propia posición dentro de ésta; también las
expectativas, los valores y las normas forman parte del mismo proceso unitario de
conformación de la identidad.
Una vez que un grupo humano, estructurado ha adquirido cierta identidad y sus
miembros se han podido identificar con ella, entonces, esta identidad constituye una
realidad. Selznick (1957). [12]
La identidad se define como la manera en que los miembros de un colectivo (nación)
consideran como propias las instituciones que dan valor y significado a los
componentes culturales de su sociedad y su historia; en base a tributos, rasgos,
símbolos que nos permiten reconocernos como tales.
En cuanto al concepto de identidad, Requillo (1991) afirma que las identidades se
construyen en la interacción cotidiana con otros sujetos urbanos, son plataformas
colectivas desde las cuales el yo de los actores (nosotros) interactúan con los demás
(los otros) y necesita exteriorizarse, objetivarse en formas y contornos precisos: Hablar
de identidad es hablar de clase social, de grupo, de oficios, de nombres y prácticas
cotidianas, de espacios y territorios. [13]
Cada ente social, individual y colectivo, tiene una identidad que se construye a partir de
un proceso de comunicación e interacción en la práctica cotidiana con los demás, lo
que le confiere unidad y cohesión. Este se convierte en un sistema de correlación social
donde los individuos comparten y tejen historias.
Al decir de M. Limia (2003) “Las identidades son proyectos de vida, no cuelgan del aire.
La gente constituye identidades, vive identidades, produce y reproduce identidades”
[14] porque mediante la construcción de identidades el sujeto adquiere una guía, una
orientación en la vida y para la vida en sus interrelaciones individuales y grupales en el
marco de su actividad biopsicosocial, histórico-cultural y pedagógica.
La identidad como proyecto de vida es una de las ideas a la que mayor atención deben
prestar el colectivo de profesores de cada una de las Instituciones de Educación
Superior, porque los estudiantes de la universidades necesitan que les ayuden a perfilar
de forma ascendente su proyecto de vida y esto se logra con el conocimiento, por parte
del personal docente y de los valores identitarios; lo que permitirá que en el diseño y
planificación de actividades, acciones, estrategias y metodologías se tenga en cuenta
su tratamiento como aspecto fundamental en el trabajo pedagógico que se desarrolla
actualmente en las universidades.
La identidad vive integrada por todas las identidades y los elementos institucionales,
que es posible visualizar en función de la ocupación, la justicia, la escuela, los partidos
políticos, la iglesia, la familia, género, territorio, lengua; manifestándose como vivencia
de la misma con niveles más o menos claros de conciencia grupal para si, son los
elementos valorativos de la vida diaria, de un grupo que se sabe original, no por el
grado de diferencia con el que su identidad se manifiesta, sino esencialmente por lo
auténtico de esa identidad, manteniendo sus sistemas de valores o dan evidencia de
mantenerlos, no persiguen parecerse a otro, aunque reconocen la existencia de este
último como tal. Reyes (2000). [15]
De acuerdo a lo antepuesto podemos considerar a la identidad como una totalidad no
de sumatorias de identidades particulares sino como la integración de estas que van
generando nuevas cualidades, que se asume de manera consciente y que su esencia
está en el carácter auténtico de ella misma a partir de hacer consistente los valores que
en su contenido los hacen particulares y únicos.
Así mismo, Leyva Barciela (2004) manifiesta que la identidad es necesidad sentida de
arraigo y pertenencia, participación y autorrealización, que se expresa en las formas de
actuación humanas a la que le dan sentido y continuidad, lo que no implica inmovilismo,
sino por el contrario evolución, cambio y desarrollo como expresión de las
contradicciones que se superan. [16]
Identificada con Leyva Barciela vale recalcar la importancia de radicar en un país como
el nuestro, cuya política educacional permite a los jóvenes poder autorealizarse
personal, profesional y socialmente con entera libertad; gracias a las posibilidades que
ofrece la Revolución, no solo de formación integral sino también de realización como
futuros profesionales cuya inserción demanda de los graduados, ser dignos
representantes del legado histórico de la patria.
El estudio de la identidad por los diferentes autores pone de manifiesto la relevancia y
vigencia de sus definiciones las cuales no se niegan unas a otras sino todo lo opuesto
se enriquecen hasta llegar a la esencia de la identidad. También es evidente cuan difícil
es objetivizar lo subjetivo teniendo en cuenta las coincidencias, complementaciones y
diferencias en las posiciones de los estudiosos del tema. Podemos apreciar que de una
u otra manera se destaca el crédito que le conceden a los diferentes componentes de la
Unidad Bio-psico-social del hombre.
Para demostrar de manera sucinta lo anterior, nos apoyaremos en el esquema
siguiente:
Niño AdultoAdolescente ó Joven
Grupo ó ColectivoIndividuo Sociedad
Unidad Bio-psico-social
FUENTE: Elaboración propia
La gráfica implica una interpretación de niño-adulto e individuo-sociedad teniendo en
cuenta el carácter integral, mutuamente influyente y recíproco. La identidad abarca
desde la concepción del (niño) hasta la (adultes), lo que implica ver la dinámica de su
desarrollo en la formación de valores, rasgos de personalidad, continuidad de su
evolución, nivel de integridad, conciencia de si mismo. El niño no nace personalidad,
deviene personalidad (individuo) el cual forma parte de grupos o colectivos y actúa no
solo en base a su formación sino fundamentalmente al tipo de sociedad a que
pertenece. Es importante destacar que las transformaciones del niño a adolescente o
joven y adulto son etapas diferenciadoras en cuanto a su evolución y formación en
dependencia de las influencias que recibe del medio que le rodea.
Analizando la mismidad (parte intrínseca de la identidad personal ó individual) podemos
valorarlo en su evolución ontogenética, que abarca desde la concepción del hombre
hasta la adultes. En este proceso el sujeto se configura para darle significado a su
mundo vivencial y a sus proyectos de vida en espacio y tiempo determinado. Mientras
que la otredad (parte intrínseca de la identidad colectiva) se añaden valores de
pertenencia a un grupo, familia, vecinos, profesores, compañeros de clase y en la etapa
laboral con sus compañeros de trabajo.
Fernando Ortiz (1993) manifiesta que la identidad se va formando en un proceso
complejo, desintegrativo e integrativo. La identidad se conforma a través de la
conjugación de necesidades, aspiraciones, medios, ideas, trabajos y peripecias de sus
componentes diversos. [17]
El proceso de formación de identidades se produce en primer lugar, porque cada
individuo nace en una sociedad que posee una estructura social y cultural determinada,
o sea, cada uno se encuentra insertado en un mundo social objetivo, a los cuales nos
adaptamos, transformamos, mediante la internalización de valores, normas,
interpretaciones de esa realidad.
El perfil de las identidades encierra un contenido dinámico que se desarrolla en un
proceso permanente de construcción y deconstrucción, en términos de individuos,
grupos y comunidades. La identidad está sometida a cambios, enriquecimientos,
transformaciones; la misma se ensancha o extiende y se adapta según los diferentes
contextos históricos, culturales, económicos, políticos y sociales que permiten que no
se pierda su esencia sino que se modifiquen.
Por tanto, la identidad trae implícita en si misma la dialéctica de la diferencia: todo lo
que existe en el universo, cada cosa u objeto y cada organismo biológico, son
determinados, por su propiedad y su forma material. El término identidad está contenido
en todo aquello que es idéntico a si mismo y distinto del resto, cada ser es único e
indivisible. En síntesis todo lo que tiene existencia real y objetiva puede percibirse,
analizarse y reconocerse pero siempre adquieren un carácter diferenciador. Identidad
implica noción del ser que es perceptible o imaginable por otros, implica conocer,
recordar y reconocer, esto es, identificar.
Unas de las cuestiones que es significativo destacar dentro de la presente investigación
es que la identidad ha dejado de entenderse como un proceso exclusivo de las cosas y
los seres humanos. La identidad es también la de las organizaciones sociales: un grupo
étnico, nacional, ideológico, cultural y mercantil. Así que podemos hablar de la identidad
de un individuo, de un grupo, colectivo, profesional, ocupacional, de civilización y de
una entidad, con distintos niveles de pertenencia. Esta pluralidad de pertenencia de
cada uno de ellos será reconocible por el conjunto de signos o representaciones
visibles que le son propios y característicos: sus signos de identidad.
Finalmente podemos resumir que, la identidad nos remite a la idea de “lo mismo”, o
sea, a una cualidad en virtud de la cual, cada quien es lo que es, en correspondencia
con su propia esencia. Esto, a su vez, no es otra cosa que ser uno mismo a partir de la
conciencia de nuestra particularidad y singularidad. La identidad se hace presente
cuando asumimos como individuos, que somos una entidad separada y distinta de las
otras, aunque casi al mismo tiempo nos percatemos que requerimos vincularnos a
grupos, organizaciones e instituciones que a su vez también generan identificaciones y
significados.
I.2. Identidad organizacional y universitaria
Identidad en el contexto de las organizaciones
En la actualidad las organizaciones se mueven dentro de un entorno turbulento, con
interacciones entre sus elementos y con grandes e imprevisibles cambios. Las
organizaciones son sistemas diseñados para lograr metas y objetivos por medio de los
recursos humanos, materiales y financieros; es un convenio sistémico entre personas
para lograr algún propósito específico. Funciona mediante normas y bases de datos,
cuyas reglas y normas deben sujetarse a todos sus miembros. Es un grupo social
compuesto por personas, tareas y administración, que forman una estructura sistémica
de relaciones de interacción, tendiente a producir bienes y servicios para satisfacer
necesidades de una comunidad dentro de un entorno y así poder satisfacer su
propósito distintivo que es su misión.
Considerando al grupo social como una red de interacciones, decimos que una
organización es el conjunto de relaciones y regulaciones internas que preserva la
autonomía del sistema y asegura la continuidad del grupo, Sotelo, C. (2001) [18]. La
fuente de la cohesión interna que distingue a la organización como una entidad
separada y distinta de otras es la identidad.
La identidad, como esencia de la cultura, es un conjunto de características de la
organización que le da continuidad en el tiempo, coherencia a pesar de la
heterogeneidad de sus miembros, especificidad en su relación con el exterior y en sus
valores, y que permiten la identificación de sus miembros con ella; para que algo tenga
identidad debe permanecer igual a si mismo.
La identidad es a la organización lo que la personalidad al individuo, pues al igual que
las personas, las organizaciones desde su “nacimiento” desempeñan determinados
roles. La identidad de la organización está representada por os rasgos o atributos que
la caracterizan ante su público, es decir, las características que la misma asume de
modo consciente o inconsciente y que le sirven de elemento diferenciador para que se
reconozca a sí misma y pueda expresarse y comunicarse con autonomía hacia todo lo
que la rodea.
Por identidad organizacional entendemos la “personalidad” de la entidad. Esta
“personalidad” es la conjunción de su historia, de sus valores, de su ética y de su
filosofía de trabajo, pero también está formada por las normas o leyes establecidas por
la dirección (hecho que le confiere un carácter estratégico) y por los comportamientos
cotidianos de los individuos pues no se es el mismo en todos los círculos sociales en
los que se interactúa. El comportamiento cambia de acuerdo al grupo o lugar, se asume
la identidad de este y se desarrolla el orgullo de pertenecer a él. Es decir, el trabajador
y el estudiante asumen una identidad dentro de la institución que cambia según se
encuentre en el centro de trabajo, con sus dirigentes, en clase, con sus amigos, con sus
profesores, en la calle y con su familia.
La identidad organizacional no sólo forma parte de la personalidad de la organización,
sino que la conforma y fortalece, la dota de aspectos peculiares que van, desde la
propia constitución física de la organización, hasta la expresión de la misma en todas
sus facetas.
Es así que, la identidad constituye un instrumento operativo dentro de la empresa que
forma parte de un ejercicio esencialmente pluridisciplinar que es más completo de
aquello que sólo “se ve” de la empresa: la identidad emerge del lado más profundo de
la entidad y se manifiesta de múltiples maneras, siendo la gráfica-visual, una de sus
tantas formas de manifestarse.
Por lo que, la identidad organizacional además de ser, trabaja. Su trabajo es semiótico,
de producción de discursos. Las herramientas de este trabajo son los signos, relaciones
entre significantes y significados que los miembros de la organización establecen para
identificar a la organización y cumplir con su trabajo. En tantos compartidos estos
signos establecen regulaciones consensuales y dan pie a la generación de imágenes.
En efecto, a través del tipo de interacciones comunicacionales que generan y que la
generan, la identidad suele presentarse como imagen en el sentido amplio del término
no restringido a lo meramente visual.
De esta manera, la identidad es mucho más que un signo, más que una grafía, más que
un logotipo ya que todo lo que la organización es, tiene, dice y hace, deja de decir o de
hacer, es expresión de su identidad organizacional, de ahí que no sólo sean logotipos y
símbolos. Éstos conforman la parte de referentes visuales de la identidad, pero no la
identidad en su conjunto.
Así, la identidad organizacional se compone, de forma íntegra, en la parte interna de la
institución. Al formarse en la parte más profunda de la organización, se establecen y se
generan atributos únicos que aportan diferenciación de una organización a otra, se
observa la naturaleza intrínseca que la identidad posee en sí misma.
Esta parte interna de la organización se refleja por medio de las actuaciones, mensajes
y actividades que realiza la organización, y quedan plasmados en la imagen. Ésta actúa
o debe actuar, por tanto, como si de un espejo se tratase, y ambas han de estar
situadas en un mismo nivel, de forma que cualquier cambio generado en la identidad se
ha de manifestar automáticamente en la imagen.
Sólo hay una forma de lograr que la organización tenga una imagen propia para sus
diferentes públicos: siendo única, realmente. Y para ello los primeros que deben
percibirlo así son sus propios trabajadores, quienes han de ser portadores de los
valores o atributos que dicha organización reconoce en sí misma como esenciales.
De tal modo, “la identidad organizacional permite que la institución comprenda su
singularidad con respecto a otras organizaciones o colectividades, al formarse a partir
de elementos identificadores y diferenciadores como las condiciones políticas,
económicas, sociales y culturales, la historia, la posición geográfica en que se ubica, los
hábitos, la forma de actuar y los rasgos del comportamiento, entre otros”. Bauzá y
Marañón (2006). [19]
Como se expresa, la identidad organizacional hace referencia al espacio social,
psicológico, económico y cultural de pertenencia. La identidad organizacional está
compuesta por rasgos, características y representaciones que asimilan, interiorizan y
comparten los miembros de la organización lo que le permite identificarse con ella para
luego compararse en cuanto a semejanzas y diferencias con otras instituciones de su
entorno. Así pues, la identidad organizacional que comparten los individuos, se recibe,
se transforma, se enriquece, se recrea y hasta se abandona o se pierde.
Por su parte, Strategor (1995) plantea que la identidad de una organización es, el
producto de su historia, grandes actos fundadores que han generado su creación y su
desarrollo, grandes personas que han asegurado su dirección (¿sus héroes?) y grandes
momentos que han modelado sus estilos de vida, sus hábitos de comportamientos, sus
mitos, sus ritos y sus tabúes [20]. También añade que, (…) la identidad es expresada
en las organizaciones como el elemento y la atmósfera indispensable para su
respiración y su vida histórica. [21]
Se concuerda con Strategor ya que por lo general la historia queda en los archivos por
esta razón es preciso conocer la historia de la organización porque comprende toda una
serie de acontecimientos y sucesos históricos que tienen una significación importante
para ella. Constituye una referencia para sus miembros puesto que les permite percibir
mejor la realidad de la entidad. Esta historia debe ser divulgada y trasmitida a todos sus
públicos pues ayudaría a entender la trayectoria que ha seguido la institución desde su
creación hasta su actualidad más reciente, la cual sería vivida en conjunto, lo que
traería consigo un sentimiento de pertenencia hacia la misma.
Ahora bien, una institución se construye sobre valores cuando sus actores
organizacionales no la sirven solamente como instrumento económico, sino también
como una fuente que le proporciona satisfacciones personales, intelectuales y afectivas.
Por ello, produce una identidad a la que pueden suscribirse sus miembros, que pueden
marcar todos los aspectos de la vida en la organización.
La identidad organizacional sería la suma de características, valores, objetivos,
actitudes y creencias con los que la entidad se autodefine y se autodiferencia de otras
similares o distintas categorías. Se materializa a través de una estructura. Se define por
los recursos de que dispone y el uso se hace que de los mismos, por la interacción que
existe entre sus integrantes y con el entorno, por las formas en que asumen esas
relaciones, por los propósitos que orientan las acciones y los programas existentes para
su implementación y control.
Desde la perspectiva comunicacional Tejada Palacios (1987), sostiene que “la identidad
es el yo de la organización, es una pieza fundamental del edificio de esta. La identidad,
es pues el conjunto de atributos que una organización quiere proyectar para ser
reconocida de esa (y sólo de esa manera) por los públicos de la organización. ” [22]
La identidad viene definida por el conjunto de rasgos tangibles y no tangibles de la
personalidad de la organización Pizzolante Negrón, I. (2001).Hace referencia a una
serie de valores y atributos con los que la organización se define, y con los que se
presenta a las diferentes audiencias; quien además agrega que, la identidad es la
totalidad de la personalidad de la organización, que se deriva de sumar una serie de
rasgos determinados, los cuales son: Filosofía, Historia, Cultura, Estrategia, Estilo de
gestión, Reputación, Publicidad y Conducta de empleados, vendedores y otros
representantes de la organización. [23]
Se comparte el criterio de Palacios y de Pizzolante en cuanto a que la identidad
organizacional la componen todos aquellos rasgos y atributos que le confieren
propiedad a la organización, algunos de ellos visibles y otros no pero que le otorgan a la
organización originalidad, distinción y particularidad de las otras entidades; si estas
cualidades se perdieran afectarían decididamente a la organización porque todos los
seres humanos o las cosas poseen características que los hace únicos y de no tener
esta identidad seríamos uno más en cualquier lugar del mundo.
Por tanto, cualquier aspecto, comunicación, información, conducta, actuaciones han de
ir marcadas por la pauta de la identidad organizacional. Pero este marcaje no ha de ser
violentado ni forzado, sino que, si el concepto de identidad organizacional es tomado en
este sentido y es compartido y aprovechado por todos los componentes y elementos
que integran la entidad; surgirá de una forma espontánea, natural, voluntaria que
fortificará aún más, la personalidad y el carácter de la organización.
De manera sintética planteamos que, toda institución dispone de una identidad
organizacional representada por la fusión de rasgos ó cualidades (historia, misión,
imagen, ritos, normas, comunicación) que brotan desde el interior de sus raíces, de su
personalidad, de sus fortalezas y debilidades en fin de su esencia. Estas características
las asume la organización como propia, de modo conciente o inconciente, lo que le
permite identificarse con su público (interno o externo) y diferenciarse del resto,
manifestándose o expresándose como una entidad única e irrepetible que tiene
especificidad y continuidad en el tiempo a través de su evolución.
La identidad en el contexto universitario
En las condiciones del mundo de hoy y sus retos futuros, se concuerda en que debe
imponerse una nueva visión de la Educación Superior, materializada por la búsqueda
de la pertinencia, el impacto y la optimización, en síntesis, la calidad de sus procesos;
ello incluye en primer lugar, el ajuste constante a las nuevas exigencias emanadas de
los cambios asociados al desarrollo político, económico, social y de las concepciones
de gestión predominantes.
Dado que el papel de la universidad es una consecuencia de leyes y regularidades
objetivas que responden a las características propias de la sociedad, revelar éstas pasa
por una conceptualización y contextualización de la universidad, que de manera
comprometida permita prever su movimiento y desarrollo, así como su propia
existencia.
Al hablar de la universidad se hace referencia al maravilloso universo que existe en el
interior de ella con toda su riqueza cultural y la pluralidad que conlleva pues la
universidad como lo indica la naturaleza de su nombre es un mundo simbólico con una
identidad dada por la variedad y diferencia donde se producen interacciones entre sus
integrantes y permite la formación, reformación y transformación de todos.
La universidad se identifica por sus valores, por su personalidad en suma de su
esencia, es decir, la condición que la hace ser ella y no otra. Una vez que se ha
identificado internamente y se ha informado sus valores de identidad organizacional a la
comunidad universitaria los cuales forman parte de la institución, esta se debe dar a
conocer a la sociedad a través de la gestión de la comunicación. Por tanto, es preciso
que exista una definición preliminar de la identidad organizacional desde la institución,
para que los públicos internos identifiquen y se identifiquen con ella; para
posteriormente, comunicar y proyectar esa identidad diferenciándora, con los públicos
externos.
Por tanto, la universidad debe asumir una identidad organizacional que refleje
debidamente su filosofía y su forma de trabajar, debe proyectar su personalidad y elegir
la manera de presentarse ante la comunidad universitaria, abarcando todos los puntos
de contacto entre ella y su público. De esta forma la identidad puede dar a sus
trabajadores y estudiantes una idea clara de lo que pueden esperar en términos de
servicio y lograr así que permanezcan fieles a la organización que respeta sus
necesidades y con la cual están familiarizados.
Es por ello, que resulta indispensable para la universidad contar con una identidad
organizacional claramente definida puesto que cuando existe una adecuada definición y
gestión de la identidad genera motivación entre todos los integrantes de la comunidad
porque produce un fuerte sentimiento de pertenencia, de compromiso y de
responsabilidad con la institución, lo que le dará resultados notables con el
comportamiento de sus miembros pues mostrarían el infinito amor, dedicación y
fidelidad hacia su trabajo y hacia su organización. Por otro lado, la formación de la
identidad inspira confianza entre los diferentes públicos de la universidad (tanto interno
como externo) ya que la homogeneidad en la difusión de mensajes, equilibra la
impresión que se obtiene de la entidad.
Si se concibe a la universidad como un sistema de procesos Álvarez, C. (1996) [24], la
misma puede modelarse si se consideran como componentes a los procesos que la
integran. Dichos procesos, aunque tienen identidad propia, en su interrelación expresan
las cualidades del todo al cual pertenecen, confiriéndole a la institución universitaria un
carácter holístico Fuentes, H., Musa, J. y Mestre, U. (1997) [25] y, a su vez, estos
procesos constituyen la estructura espacio – temporal que dan respuesta a las
necesidades sociales que se concretan en la preservación, desarrollo y difusión de la
cultura.
De manera que, como señalan H. Fuentes y A. Estrabao (2000), “…la universidad como
institución social se desarrolla en la contradicción dialéctica que se produce entre la
preservación, el desarrollo y la difusión de la cultura, lo que permite determinar la
estructura y organización de sus procesos como un todo, así como la dinámica del
desarrollo de los mismos, revelando las regularidades y leyes que se dan en su
comportamiento…”, y añaden, ”…cuando se determinan los componentes (procesos) y
las relaciones entre ellos, se sistematizan éstos y ello permite precisar la estructura de
la universidad, o sea, considerando sus procesos, las relaciones que entre ellos existen
y con un contexto en particular, lo que la hace propia y singular…”.[26]
En esta panorámica, la cultura organizacional se presenta como premisa que determina
la peculiaridad, propiedad y singularidad de la universidad como organización que
alcanza su máxima expresión en la identidad como cualidad distintiva de la cultura
organizacional.
Asimismo consideramos que la identidad organizacional es mucho más que un conjunto
de señas que permiten identificar a la universidad, esta permite identificar por un lado,
pero también diferenciarla de otras similares. La identidad organizacional es la marca
de la institución pues la dota de una serie de atributos, de valores, de conceptos, de
modos de ser específicos que la introducen en la dialéctica de la disimilitud, porque de
la misma manera que no existen dos personas homogéneas, tampoco hay dos
entidades idénticas.
Alcanzar la identidad organizacional como cualidad en la universidad, significará que los
participes internalicen y hagan suyos los rasgos primordiales de la institución, para así
lograr el sentido de pertenencia hacia la misma como elemento importante y valioso
dentro del grupo y para compartir los objetivos personales con los organizacionales, de
igual manera que facilitará los procesos de adaptación externa, manifiesto en la
interdependencia organización – entorno.
Así, la identidad organizacional se conforma en todo aquello que permita distinguir a
cada universidad como singular y diferente de las demás; bajo la consideración de que
esta identidad como cualidad distintiva de la cultura organizacional y caracterizada por
rasgos culturales propios, tiene además múltiples manifestaciones, está en sus roles y
en su tecnología, en sus sistemas de información y control, en los modos en que se
toman las decisiones, en los procesos de socialización de sus miembros, en la
disciplina que imparte, en las formas que se asumen el poder y la autoridad, en los
modos de interacción entre sus integrantes, en sus paredes y en su equipamiento.
De este modo, la identidad organizacional resultará en el conjunto de atributos que una
Institución de Educación Superior debe proyectar para ser reconocida de esa y sólo de
esa manera por el entorno y desde el punto de vista operacional, posibilitar la
reproducción comunicativa de la cultura organizacional y proveer un sentido de
dirección, al detallar el cómo se desempeñará la institución, lo que servirá de guía a sus
actores organizacionales para el crecimiento y desarrollo de la misma.
De acuerdo a los criterios de Díaz Barranco (2005), tratar en específico acerca de la
identidad universitaria, éste llega a considerarla como un proceso de comunicación que
se desarrolla como cualidades esenciales de una organización que se manifiesta en lo
social, lo organizacional, lo gerencial, lo grupal y lo individual. El que algunos individuos
puedan ser más competitivos que otros, en opinión de este autor, no niega que se
pueda desarrollar la gestión de la identidad organizacional en todos los niveles y grupos
de la universidad y que debe realizarse al tener en cuenta el contexto social y la
relación de la identidad grupal con la identidad nacional y los retos que esta última
impone. [27]
Entendemos que vale considerar la identidad universitaria como un proceso de
comunicación, pero es necesario tener en cuenta la socialización de los elementos
culturales entre los miembros de la organización, lo que incluye la motivación, el
liderazgo, así como los procesos afectivo - volitivos que acompañan a las personas
durante su permanencia en la misma, por lo que la identidad organizacional aún cuando
trasmite sentido y significados, también depende del acompañamiento de un grupo de
procesos sociopsicológicos que definen la relación entre sus integrantes y con el
entorno.
Es así que Cabral, Villanueva y col. (2006) definen operacionalmente la identidad
universitaria como un sentimiento de pertenencia, una identificación a una colectividad
institucionalizada, según las representaciones que los individuos se hacen de la
realidad social y sus divisiones y donde se configuran factores tales como: la
experiencia escolar pasada, la pertenencia, las relaciones humanas; la percepción de la
universidad como unidad, la territorialidad, las afinidades; la educación, el vínculo, las
reglas y la dificultad del ingreso a la institución. [28]
El comprender el nivel de desarrollo de la identidad organizacional de los universitarios
y profesores sirve para generar estrategias que produzcan una mayor identificación de
los alumnos y educadores hacia su universidad, y con ello impulsar el crecimiento
institucional hacia dentro y fuera de ella.
De ahí la cuantía, de desarrollar una identidad organizacional que le otorgue a la
comunidad universitaria asegurar modos de pensar, hacer y ser coherentes con la
satisfacción de las necesidades de su entorno y que generen a esta institución
cualidades que le permitan autoidentificarse, autovalorarse y autodiferenciarse del resto
de las instituciones.
Resumimos que fortalecer la identidad organizacional es todo un reto porque exige que
nos visualicemos a nosotros mismos en el contexto de nuestra organización y de
nuestro entorno social, no como espectadores, sino como actores organizacionales en
cuyos hombros recae, no colectiva sino individualmente, la responsabilidad de ser
mejores y de hacer de nuestra universidad un espacio académico de calidad. En este
asunto no puede haber ambigüedades: Es preciso que cada cual asuma la importancia
de su participación este proceso.
I.3. El diagnóstico de la identidad organizacional
El diagnóstico de la identidad, o auditoría de la identidad, persigue el conocimiento de la
identidad existente, sus características y su impacto. Cómo llevar a cabo el diagnóstico
es algo que puede realizarse siguiendo diversos procedimientos. Casi todos ellos
presentan unos elementos comunes que son los datos a obtener y como lograrlo.
Lorsch (1986) propone unos cuestionarios a contestar por lo directivos de las empresas,
mediante los cuales se trata de identificar las creencias y actitudes de éstos hacia un
conjunto de aspectos claves de la organización. Este autor hace énfasis en los
elementos vinculados a las creencias acerca de objetivos y de la competencia. [29]
La forma de recoger toda la información puede ser mediante encuestas dirigidas a los
miembros de la organización, así como a través de la información que la organización
va elaborando como consecuencia de su actividad corriente. En general, los puntos
sobre los que se debe recabar información son los siguientes: Historia, signos y
símbolos, fundadores, valores y oficio.
Calori, Livian y Sarnin (1989) han utilizado también los cuestionarios para analizar la
identidad de una organización. La suma de las percepciones individuales que las
personas tienen de los valores reconocidos, así como de las normas de
comportamiento asociadas a tales valores, constituyen un medio para conocer la
identidad o identidades existentes. [30]
Concretar acerca de la identidad de una organización no es algo sencillo, dado que los
elementos a analizar son en su gran mayoría abstractos y están en gran medida
presentes en cada uno de los miembros de la organización, lo que hace que las
respuestas de éstos a los cuestionarios aplicados venga mediatizada por ellos.
En la práctica, no se trata sólo de diagnosticar y caracterizar el tipo de identidad de una
organización, pues es necesario evaluar el impacto que la identidad tiene sobre los
miembros de ésta y considerar si la existente propicia que los mismos puedan llegar a
comprender cuáles son los valores subyacentes; ya sea a través de un proceso de
aprendizaje formal o mediante la observación de la actuación de los directivos.
Los directivos de la organización pueden desarrollar modos de actuación que
provoquen cambios en la identidad organizacional implementando acciones prácticas
que solucionen los problemas que afectan determinados elementos de la misma y de
lidiar con la resistencia al cambio que puede traer aparejado el intento de innovación,
así como confiar en los beneficios que acarreará la permanencia de la nueva identidad
organizacional una vez que se haya concluido el proceso de cambio, siempre sobre la
base de garantizar el éxito organizacional.
Por otro lado, Cristian Calderón [31] ha desarrollado un modelo de diagnóstico de la
identidad organizacional, el cual consta del siguiente conjunto de elementos
relacionados:
Proyecto organizacional y valores: Son el eje de la acción organizacional.
Conforman el centro de la identidad organizacional y los valores sobre los que se
sustenta.
Liderazgo y estilos de administración: Orientan el quehacer de la organización,
coordinan las actividades de las personas.
Normativa: Comprende tanto las premisas indecidibles del decir organizacional
(cultura), como las que se suponen producto de la decisión. La parte normativa
contiene todo tipo de normas (formales o no).
Tecnología: Es el conocimiento aplicado.
Imagen corporativa: Imagen gráfica y física que se le construye a la identidad, la
cual proyecta la imagen del cuerpo de la organización.
Mercados, públicos objetivos: Esto es tarea del marketing que se encarga de la
relación de la organización y su público estratégico con el objetivo de satisfacer
necesidades y demandas a través de sus productos.
Investigación de necesidades y demandas: realizada para maximizar la relación
con los mercados y públicos objetivos.
En el entorno de la organización se pueden distinguir: la cultura global, el estado
que establece regulaciones, otras empresas y diferentes grupos de presión.
La operacionalidad para el diagnóstico de la identidad organizacional es:
1. Se trata de conocer el proyecto.
2. Se debe caracterizar el liderazgo.
3. Se debe diagnosticar el clima organizacional y la coherencia que debiera
existir entre los proyectos organizacionales y las competencias de las personas.
4. Se debe medir si la tecnología es adecuada para el desarrollo del
proyecto.
5. Se debe ver el tipo de cultura dominante en la organización. También se
debe determinar el grado de conciencia existente en la organización respecto al
marco jurídico del que la organización expresa su acción.
Para poner en práctica el modelo de diagnóstico entonces es necesario analizar
profundamente cada uno de los elementos y las relaciones que se establecen entre
ellos.
Otra manera que resulta interesante para diagnosticar la identidad organizacional es
teniendo en cuenta la tipología:
Lucas Martín (1997) aporta una definición de Identidad relacionándola, de forma directa,
con todos los elementos que conforman la empresa. Para el autor, la Identidad es una
realidad percibida por la empresa, que se puede dividir en cuatro tipos de Identidad
[32]:
1. Identidad técnica.
2. Identidad de servicio.
3. Identidad axiológica.
4. Identidad de mercado.
La Identidad técnica alude a los procesos que la organización lleva a cabo y a la calidad
substantiva de los mismos. La Identidad de servicio, hace referencia a la eficacia en la
relación con los sujetos de la comunicación externa (capacidad de comunicación,
solución a los problemas, agilidad administrativa) e interna. La axiológica, tiene que ver
con las dos relaciones que el autor considera centrales en una organización: el
compromiso con el cliente y la responsabilidad de los empleados en la tarea. Por último,
define a la Identidad de mercado relacionándola con la amplitud de la oferta y el
conocimiento de la demanda.
En esta misma línea, Sanz De La Tajada (1994) [33] plantea que la Identidad de la
empresa debe entenderse como el conjunto de características (atributos) que permiten
diferenciarla de otras organizaciones, con independencia de cómo sean percibidas en
su contexto exterior. En este sentido, la Identidad es la manifestación codificada de la
cultura de la empresa, y puede ser desagregada en un corpus constituido en ocho
variables: Identidad axiológica, social, de servicio, administrativa, institucional,
mercadológica, técnica y económico-financiera.
La Identidad axiológica se refiere al conjunto de valores morales y profesionales que la
organización profesa. En esencia, se trata de la ética, entendida como un
comportamiento moral de la empresa dentro de sus áreas que corresponden a su
actividad. García - Marza, D.V (2004) [34]. La Identidad social, alude a la presencia
social de la organización más allá del mundo del mercado. La de servicio, se refiere al
campo de prestación de servicio para los clientes de la organización. La Identidad
administrativa afecta a las características de la empresa que van, desde las relaciones
laborales hasta, inclusive, aspectos de la motivación de los trabajadores.
La Identidad institucional, está ligada a la presencia de la empresa dentro de los
gremios políticos. La mercadología comprende las capacidades y competencia de la
empresa en el mercado. La técnica está relacionada con la producción y calidad de
bienes y servicios y, por último, la Identidad económico financiera hace referencia al
grado de solidez económica de la empresa.
Resulta interesante para nuestra investigación hacer una reinterpretación de estas
tipologías y relacionarlas con las actividades, procesos y particularidades de la
universidad; es decir, que la universidad como organización estará en condiciones de
definir como variables identitarias lo técnico, de servicio, lo axiológico y de mercado.
Por consiguiente, se puede afirmar que una correcta caracterización de la Identidad en
una organización posibilita el poder definirla desde diferentes perspectivas. De ahí que
tenga un gran valor cualitativo para la organización, ya que marca las pautas que debe
seguir para desarrollar una acción coherente en todas sus manifestaciones posibles por
y para sus públicos y desde todas las áreas que la comprenden. La Identidad pasa por
un proceso subjetivo y de valoración personal, en el cual la institución recibe
significación y semántica, a través de un juicio basado en la apreciación y la
experiencia, tanto desde el punto de vista interno como externo. De esta forma, la
Identidad se transforma en Imagen Sanz González, M.A y González Lobo, Mª A. (2005)
[35]. Es la resultante de la manifestación comunicativa de la empresa en relación a sus
públicos.
A la hora de caracterizar la identidad, no podemos olvidar las tres dimensiones que la
componen, porque la identidad no conforma un hecho aislado vinculado sólo y
exclusivamente a la empresa, sino que forma parte de un proceso en el que intervienen
tres elementos:
1. La empresa: lo que es en sí, su Identidad organizacional.
2. La comunicación organizacional: lo que la empresa dice de sí misma en sus
diferentes manifestaciones.
3. Los públicos: el resultado de dicha comunicación y comportamientos de las
personas, que configuran la realidad institucional (Imagen).
Cabe añadir, finalmente, que la identidad de la empresa tiene tres dimensiones
conceptuales y operativas, relacionadas en secuencia, que tienen que ver con lo que la
empresa es, lo que ella dice de sí misma que es y lo que los públicos que se relacionan
con ella creen que es la empresa. De esta manera identificamos dichas dimensiones,
respectivamente, como la identidad propiamente dicha -el ser de la empresa-, la
comunicación que la empresa hace de su propia identidad y, finalmente, el resultado de
dicha comunicación en términos de imagen percibida por los públicos de la realidad
empresarial. Sanz de la Tajada (1994). [36]
Otra perspectiva de valorar la identidad es la referida por Meza Lueza quien tiene en
cuenta los siguientes elementos de Identidad Organizacional [37]:
1. Nombre de la Organización.
2. Historia.
3. Filosofía.
4. Principios y valores.
5. Visión.
6. Misión.
7. Objetivos.
8. Estrategias.
9. Planes de Acción.
10. Proceso de Socialización:
Estructura Organizacional, Roles y Funciones.
Lineamientos del Comportamiento: políticas, reglas, normas.
Elementos Culturales: costumbres y hábitos, tradiciones, ritos, tecnología,
comportamiento, lenguaje y vestimenta
11. Proceso de Simbolización
Preceptos - Valores – Artefactos – Símbolos
12. Proceso de Institucionalización
Historicidad, Socialización, Simbolización, Legalidad y
Legitimidad
13. Análisis FODA: (Fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas).
En sentido global se ha tratado de exponer las principales experiencias encontradas
sobre la forma de explorar, diagnosticar o simplemente indagar sobre la identidad
organizacional. Es primordial señalar que de la gran cantidad de información que
manejamos sobre identidad en general y en particular sobre la identidad organizacional,
las experiencias sobre cómo investigar estas son extremadamente limitadas y en la
mayoría de los casos poco precisas, lo cual hace que en nuestra investigación se
justifique el objetivo y la hipótesis de la misma.
Conclusiones parciales.
Se consideró la identidad de manera general como premisa en la comprensión posterior
de la identidad organizacional y específicamente en el contexto universitario lo cual
componen los elementos teóricos que sustentan la investigación y permiten orientar
adecuadamente al cumplimiento del objetivo.
De las pocas experiencias que se hayan socializado por las diferentes vías científicas
documentales (textos en formato plano o digital), se tienen en cuenta aquellas que
resultan significativas para elaborar la estrategia organizativa para el diagnóstico de la
identidad universitaria.
CAPÍTULO II: ESTRATEGIA ORGANIZATIVA PARA EL DIAGNÓSTICO DE LA IDENTIDAD ORGANIZACIONAL DEL CENTRO UNIVERSITARIO DE LAS TUNAS
En este capítulo se expondrán dos aspectos fundamentales que necesariamente se
constituyen en los aportes principales de la investigación; el primero, relacionado con la
Caracterización del Centro Universitario de Las Tunas representando al espacio donde
se desarrolla el estudio propuesto y considerando en ella los aspectos que desde su
creación han devenido como elementos constitutivos de su cultura organizacional y su
identidad. El otro detallará la Estrategia Organizativa para el diagnóstico de la identidad
y a partir de este poder llevar a efecto el conocimiento de los elementos o rasgos
constitutivos de la identidad organizacional universitaria en el Centro de referencia.
II.1. Caracterización del Centro Universitario de Las Tunas
La Educación Superior se inició en Cuba en el año 1728, con la fundación de la
Universidad de la Habana. Cuando la revolución triunfa, en el año 1959, se encuentra
con una Educación Superior basada en una pobre estructura de carreras, medios de
enseñanzas pasivos y memorísticos, con un claustro con escaso trabajo de
investigación científico, y la educación de postgrado era insignificante.
Ello motivó una reestructuración profunda de todo el sistema universitario que se
materializó con la reforma universitaria de 1962, la que proyectó una educación superior
moderna, de alto nivel y muy ligada a los destinos de la nación. Comenzó así, un
impetuoso desarrollo en la enseñanza universitaria donde se produjeron cambios
sustanciales que resultan importantes para posteriores etapas donde las continuas
transformaciones del sistema educacional han trascendido hasta la concepción de la
nueva universidad cubana del siglo XXI.
Tanto las transformaciones políticas del proceso revolucionario cubano y su incidencia
en el perfeccionamiento de la Educación Superior y el desarrollo sociopolítico de la
comunidad universitaria, el contexto formativo en que se desarrollan los procesos
universitarios; así como, la evolución en la formación y desarrollo de la cultura
organizacional de las Instituciones de Educación Superior y la formación de valores, se
constituyen en indicadores que permiten establecer las tendencias mas importantes de
este sector y por consiguiente del Centro Universitario de Las Tunas desde su
conformación.
La formación de una nueva cultura organizacional en las Instituciones de Educación
Superior Cubana, los cambios y reordenamiento en la enseñanza universitaria cubana
con la consolidación de una cultura organizacional en un contexto político y social en
transformación, las nuevas concepciones en la gestión universitaria como garantía de la
continuidad y calidad de los procesos sustantivos e incidencia en la consolidación de
una cultura organizacional, así como la cultura organizacional en el contexto de la
Universalización son etapas que contribuyen a valorar el desarrollo de la Educación
Superior cubana y su incidencia en el Centro Universitario de Las Tunas (tomado de
Bauzá 2006).
De esta manera, el 23 de julio de 1973 por Resolución Ministerial No.266 del Ministerio
de Educación, se funda la Filial Universitaria de Holguín adscripta a la Universidad de
Oriente. En 1974 se declara oficialmente constituida la Unidad Docente de Las Tunas
dependiente de la Filial Universitaria de Holguín y con ello se inicia la Educación
Superior en la actual provincia de Las Tunas. En este período de 1974-1975
comenzaron a desarrollarse mediante el Curso para Trabajadores (CPT) las
especialidades de Licenciatura en Economía e Ingeniería Agrónoma y Mecánica.
Con la división político-administrativa en 1976 y la creación del Ministerio de Educación
Superior ese propio año, la Educación Superior en Las Tunas, se institucionaliza como
Filial Universitaria, manteniéndose adscripta al Centro Universitario de Holguín (antigua
Filial Universitaria), lo cual permite cierta independencia fundamentalmente en lo
académico y posibilita el desarrollo de una cultura propia a partir, desde lo interno, del
fortalecimiento de las relaciones interpersonales y de compromiso con objetivos de
trabajo vinculados al desarrollo de algunos procesos sustantivos principalmente la
docencia y la investigación.
En el curso 1977-1978 se abren dos nuevas carreras Licenciatura en Contabilidad y
Finanzas y en Economía de la Industria, remplazándose la Licenciatura en Economía.
En el curso 1983-1984 el Ministerio de Educación Superior tomó la decisión de trasladar
la subordinación del Instituto Superior Técnico de Holguín (ISTH) para la Universidad de
Camagüey pues aunque esta estaba más alejada tenía mejores condiciones materiales
y docentes-metodológicas, el claustro de profesores poseía más experiencia y a ello
agregarle que el ISTH se inclinaba por los perfiles de carrera técnicas e industriales
convenientes al desarrollo de esta provincia, mientras que las condiciones de Las
Tunas estaban orientadas a la esfera agrícola, azucarera y pecuaria cuestión esta que
incidía en la conformación de una identidad sustentada en las características propias
del territorio tunero.
El 12 de octubre de 1983, conjuntamente con las labores constructivas de los edificios
que hoy ocupan el actual Centro Universitario, se comenzó la construcción del Memorial
“Lenin” que fue inaugurado el 12 de noviembre de 1983 por el compañero Alexander
Kapto embajador plenipotenciario de la URSS en Cuba; se encontraban además en la
presidencia, el primer Secretario del Partido Comunista de Cuba en la provincia
Francisco García Ferrer, el Cónsul de la URSS para las provincias de Holguín, Las
Tunas y Camagüey; el Secretario de la Embajada Soviética en Cuba y otros dirigentes.
A partir de entonces nuestro Centro lleva el nombre de Vladimir Ilich Lenin.
La subordinación a la Universidad de Camagüey en 1984 y la aparición en 1987 de los Cursos Regulares Diurnos, permiten una consolidación de la comunidad universitaria tunera, mejora el nivel académico del claustro, se comienza a dar respuesta a algunas necesidades de la educación de postgrado en el territorio; así como, a la solución de determinados problemas científicos y a que la extensión universitaria se constituya en un proceso a considerar en la labor de la organización, lo que conforma determinados comportamientos, creencias y valores que dan sentido propio a esta organización, independientemente de que a la misma estuvieran asociadas políticas, normas y procedimientos del propio sistema de la Educación Superior y de la Universidad de Camagüey, en particular, y por tanto, fuera en alguna medida reflejo de la cultura organizacional de ésta, del mismo modo que se gestan las condiciones para continuar desarrollando la incipiente identidad organizacional.
A finales del curso 1986-1987 se produce el traslado para el primer edificio terminado
en las nuevas construcciones que se acometen para este Centro en la Avenida Carlos
J. Finlay y al iniciar el siguiente curso 1987-1988 se comienzan a impartir por primera
vez dos especialidades en el Curso Regular Diurno (CRD) Contabilidad y Finanzas y
Agronomía; es un paso significativo para la Educación Superior en el territorio porque
permitía que los egresados de la enseñanza preuniversitaria pudieran acceder por
primera vez a estudios superiores en su provincia.
En el curso 1988-1989 comienza la apertura de la red de Unidades Docentes que
garantizarán la calidad del proceso docente – educativo en la formación de los
egresados del CRD; en este curso tiene lugar el inicio de la Unidad Docente en la
Empresa de Cultivos Varios “Antonio Guiteras”. En el año 1992 se integra al Centro, la
Filial de Cultura Física, y por acuerdo No. 2602 del Consejo de Ministros se declara el
Centro como Facultad Independiente.
Tres años más tarde y atendiendo al desarrollo alcanzado por la institución le es
otorgada, por la Resolución Ministerial 95/95 del 15 de mayo de 1995, la condición de
Centro Universitario lo que se constituye en premisa que favorece la consolidación de
su desarrollo lo que permite el aumento de la credibilidad y reconocimiento del territorio
por su encargo social al mismo y la elevación del potencial científico y académico del
claustro, elementos esenciales en la configuración de rasgos culturales que lo
identifiquen y lo caractericen, fundamentalmente en la demostración de
comportamientos y conductas asociados al compromiso incondicional con la
Revolución. En el curso 1998 – 1999 se crea la Facultad de Ciencias Agrícolas
atendiendo a la nueva estructura aprobada por el Ministerio de Educación Superior.
A pesar de las serias limitaciones de estos años, la disposición, preparación y
voluntariedad del claustro de profesores y trabajadores del Centro Universitario de Las
Tunas (CULT) garantizó la sostenibilidad de la Educación Superior en el territorio, lo
que reforzó un clima político de integración favorable y con éste el reforzamiento de
valores, sobre todo en lo político y lo ideológico.
Desde el punto de vista de su ubicación geográfica el Centro Universitario está situado
al Este de la ciudad cabecera de la provincia, en la zona suburbana, distanciada del
casco histórico de la ciudad a unos cinco kilómetros, colindando en su parte frontal con
un asentamiento poblacional urbano y a su izquierda con la comunidad rural de San
José. Rodeado de un grupo de instituciones importantes, como el complejo de la salud,
la delegación del Ministerio del Interior (MININT), centros escolares y el Telecentro
Tunasvisión, entre otros.
Se puede decir que nuestro territorio posee una base económica que es
fundamentalmente industrial-agropecuaria con predominio de la industria azucarera, la
producción agropecuaria y la industria sideromecánica.
En la actualidad en el CULT se forman profesionales en 13 carreras (Anexo 1)
considerando las modalidades de CRD, CPT, Educación a Distancia y las carreras en
las Sedes Universitarias, lo que representa una matricula de 15 133 estudiantes,
distribuidos en 4 Facultades y 8 Sedes Universitarias Municipales. Se proyecta que
inicien nuevas carreras, lo que significará un incremento en la formación de
profesionales. En la actividad de Postgrado con una proyección de matrícula que
sobrepasa los 6000 profesionales, se significan las 8 Maestrías que se desarrollan y el
proceso de autoevaluación para la acreditación de las mismas. Este quehacer eleva el
impacto y pertinencia de la Institución en el territorio.
La Facultad de Ciencias Agrícolas y la de Ciencias Económicas se crearon en 1998, y
las de Ciencias Sociales y Humanística y la de Ciencias Técnicas en 2003, al ser estas
las cuatro facultades que hasta la actualidad y conjuntamente con los cuatro Centros de
Estudios, conforman el Centro Universitario.
El enfoque integral para la labor educativa y político-ideológica de manera intencionada
atraviesa todos los procesos universitarios, el mismo integra el sistema de influencias
que recibe la comunidad universitaria al jerarquizar el trabajo individualizado. La
pertinencia de la formación de profesionales revolucionarios y altamente
comprometidos es una de las condiciones que favorece esta actividad en el entorno del
Centro Universitario.
El CULT cuenta con los Recursos Humanos necesarios para asegurar el desarrollo de
los procesos sustantivos, los cuales contribuyen al cumplimiento de la Misión y al objeto
social de la Institución.
El Claustro en la Sede Central con 221 profesores de ellos: 24 con categoría de
Doctores en Ciencias, 67 Master en Ciencias, 18 con categoría docente de Profesores
Titulares, 48 Auxiliares, 65 Asistentes y 91Instructores. También se completa la planta
con 90 Adiestrados a los que se suman los 16 ATD, así como los 2658 profesores y
tutores a tiempo parciales que aseguran el cumplimiento de todos los procesos en las
Sedes Universitarias Municipales (SUM).
El Centro Universitario incrementa las relaciones con otras instituciones del territorio y
del país; en este aspecto se refiere a la diversidad de organismos, empresas y
unidades de servicios y, además las relaciones con otros Centros de Educación
Superior del país y de la provincia, lo que fortalece el desarrollo académico y científico
del claustro, así como la potenciación de los procesos sustantivos.
Las relaciones internacionales constituyen una fuente para concretar posicionamientos
importantes en la arena internacional. Con la elaboración de la Carpeta de Servicios
Académicos que contiene la oferta de los productos de las Facultades en cuanto a
Cursos de Postgrados, Diplomados y Maestrías, así como la gestión y los resultados de
los Profesores Invitados. Se han ubicado 15 profesores de 10 solicitados en la bolsa de
colaboración CUBA-MES-VEN. Actualmente se gestionan dos proyectos
internacionales y otros en integración con universidades del país. Se desarrollan tres
eventos internacionales, uno de los cuales ha alcanzado alto reconocimiento.
Para satisfacer las expectativas del entorno y darle cumplimiento a su encargo social el
Centro Universitario de Las Tunas tiene como Misión garantizar con un claustro
revolucionario y comprometido, de elevado nivel científico y académico, la formación
integral de profesionales, la educación postgraduada, la gestión de la ciencia, la cultura
y la innovación tecnológica para el desarrollo local sostenible.
De la misma manera que su Visión estará proyectando hasta el 2010 lo siguiente:
1. El Centro se declara Universidad.
2. Se incrementa el número de Facultades y carreras.
3. Se incrementa el número de cursos de postgrados y maestrías.
4. Se cuenta con un mayor número de Centros de Estudios.
5. Hay un incremento sostenible en la formación de doctores.
6. Se acreditan nuevas carreras y programas de maestrías.
7. Se desarrollan doctorados curriculares propios.
8. Hay reconocimiento nacional de la Ciencia y la Innovación Tecnológica.
9. El Centro se declara autorizado en algunas ramas de las ciencias en la formación
doctoral.
10.Se incrementan sosteniblemente las categorías docentes superiores.
11.Se perfecciona el trabajo con la reserva de cuadros y todos los cuadros
promovidos cumplen con los requisitos.
12.Mayor satisfacción de estudiantes y profesores por el número de ordenadores.
13.Crecen las instalaciones, recursos y medios para la actividad universitaria en la
sede central y las sedes universitarias municipales.
14.La informatización de los procesos sustantivos garantiza los requerimientos de
éstos en cuanto a la utilización de las Tecnologías de la Información y las
Comunicaciones (TIC).
15.Se acredita el modelo de gestión económico financiera.
16.Se mantiene la condición Listo para la Defensa en la Tercera Etapa.
17.Todos los procesos sustantivos de la Universidad tienen una alta pertinencia e
impacto.
18.La extensión universitaria se sustenta por la gestión de proyectos.
19.Se fortalece sostenidamente la labor educativa y política ideológica en la formación
integral de los estudiantes.
20.Se incrementa notablemente el nivel de satisfacción de los estudiantes con el
desarrollo de los procesos sustantivos.
En la estrategia se establecen tanto los valores compartidos como los deseados los
cuales son:
Valores Compartidos: Dignidad, Patriotismo, Honestidad, Solidaridad,
Responsabilidad, Humanismo, Laboriosidad, Hospitalidad.
Valores Deseados: Cientificidad, Excelencia, Sentido de Pertenencia y
Creatividad.
De esta forma y conjuntamente con otros elementos se conforma la proyección
estratégica y la dirección por objetivos basadas en valores y que se convierten en los
enfoques de gestión para esta institución de altos estudios, los cuales en la medida que
son aplicados se convierten junto a la historia descrita en soportes de la identidad
organizacional.
II.2. Estrategia organizativa para el diagnóstico de la identidad organizacional
La identidad organizacional no es más que el conjunto de elemento que caracteriza o
distinguen a una institución y la diferencia de otras. Si ello es así, nuestro problema
comienza por tratar de encontrar, estudiar, definir y hacer valer tales rasgos o
elementos. Diversos trabajos muestran que la primera dificultad se encuentra ahí, en
ese proceso de necesario estudio hacia adentro y hacia afuera (historia, misión,
entorno, recursos humanos, imagen) que debe permitir una definición experta de lo que
hay o debe de haber en cada organización como bueno y distintivo. Para ello, se
implementa una estrategia organizativa para diagnosticar la situación actual de la
identidad organizacional en el Centro Universitario el cual contará con una serie de
pasos para llevarlo a término.
Paso1. Determinación de los Objetivos
Se definen los objetivos para este tipo de estudio y se dividen en Objetivo inmediato y
Objetivo mediato. El primero, se constituye en la referencia para la orientación de los
pasos siguientes y si es necesario en la estimación de los recursos sobre aquellos
aspectos en que hay que ponerle mayor énfasis para lograr la integración de las
actividades y garantizar el esfuerzo de todos los actores vinculados a éstas y se
encargará además de fijar las normas concretas para alcanzar los objetivos mediatos.
Por su parte los objetivos mediatos deben ser consistentes como orientación general y
deben marcar la guía para las acciones, precisando la meta a alcanzar para lograr el
estado deseado, están dirigidas siempre a la transformación y crecimiento de la
organización y no del mantenimiento del estado actual de la misma porque entonces no
responderían a las necesidades del cambio.
Paso 2. Posibilidades y limitaciones
Para dar cumplimiento a la estrategia organizativa y orientar adecuadamente el
diagnósticos de la identidad dada las pocas referencias que existen sobre ello, se hace
necesario reconocer cuales son los elementos que pueden aportar al desarrollo de la
investigación y en consecuencia, cuáles se consideran las barreras que limitarían la
misma.
Es por ello que se deberán tener en cuenta las posibilidades para enfrentar el proceso
de diagnóstico así como las limitaciones. Se consideran posibilidades aquellos aspectos
que potencian favorablemente el diseño de instrumentos, la determinación de los
rasgos ó elementos, estimados para el diagnóstico y la seguridad en su aplicación. Del
mismo modo, pero de manera contraria se estiman las limitaciones, dado en las
barreras, insuficiencias o carencias que pueden disminuir la efectividad del diagnóstico.
Para determinar tanto las posibilidades como las limitaciones se sugiere tener en
cuenta el sustento teórico, las experiencias anteriores en el estudio del tema, la
preparación del personal investigador y a investigar, su disposición a colaborar y los
espacios o momentos que se disponen para realizar la intervención del diagnóstico.
Paso 3. Concepción y organización del diagnóstico identitario
En este paso se tendrán en cuenta los anteriores y a partir de ellos, y de los elementos
teóricos que sustentan el conocimiento de la identidad, se concretarán los componentes
organizativos de este paso:
a) Definir y conceptualizar los rasgos ó elementos identitarios: Son unidades de
información que señalan lo que está ocurriendo, deben ser comprensibles y fáciles
de interpretar, son herramientas útiles; como conjunto proporcionan una visión
rápida de la situación y favorecen a la obtención de información de una manera
rápida y eficaz.
b) Elaborar instrumentos u opciones investigativas:
Encuestas: Es una técnica muy apropiada para tomar información rápida y con
una buena cantidad de información.
Entrevistas: Tiene que ser concretada. Es conveniente que sea por medio de una
grabadora para no perder los detalles y poder entender bien lo que se dice al
entrevistador. Se debe respetar al individuo.
Observación: Se debe planificar los aspectos a observar. Se describe lo que la
persona o institución hace; además describe lo que está pasando.
c) Determinación de los grupos o actores implicados para el diagnóstico: Las
características propias de un diagnóstico de este tipo, es decir, relacionado con la
identidad, requiere que se tengan en cuenta a todos los grupos internos y externos
que intervienen directa o indirectamente en la conformación de la identidad de la
organización.
Paso 4. Implementación del Diagnóstico.
La implementación del diagnóstico no es más que la aplicación consecuente de los
instrumentos o vías que propicien la información sobre el fenómeno estudiado; por tanto
la implementación es lo que concederá el carácter dinámico al proceso estratégico o
como lo abordamos aquí: estrategia organizativa para diagnosticar la identidad de la
organización, por lo que resultará la concreción de la propuesta.
El diagnóstico permite determinar las características de la identidad para determinar el
estado actual de ésta y si puede ser mejorado, así como qué técnicas o acciones a
realizar para mejorar las situaciones con las insuficiencias detectadas.
El diagnóstico es un amplio examen y una evaluación de la identidad con el fin de
valorar cual es su nivel de desarrollo y su relación con el desarrollo de la institución.
Este diagnóstico se dirige a la indagación sobre las condiciones objetivas y subjetivas
que inciden en el desarrollo de la identidad.
Paso 5. Evaluación y monitoreo
El proceso de evaluación servirá para retroalimentarse de las desviaciones que puedan
tener lugar durante la aplicación del diagnóstico y hacer las correcciones pertinentes,
convirtiéndose en un proceso sistemático que permita a los implicados (investigador e
investigados) adoptar decisiones que faciliten el ajuste o la coherencia de la estrategia.
Se sigue la lógica del proceso de aplicación de los instrumentos y se concederá importancia
a las opiniones emitidas por los investigados y a las observaciones, informaciones y
orientaciones necesarias por parte del investigador de manera que tenga un efecto educativo
que facilite la comprensión por los primeros del estudio y el contenido de este.
Desde este paso se contribuye a una reformulación sistémica e integradora del proceso de
diagnóstico de la identidad y desde los elementos que aporta será posible también
reconsiderar la estrategia organizativa.
Paso 6. Acciones para la mejora continua de la identidad organizacional universitaria
Una vez definidos los elementos correspondientes a los resultados del diagnóstico y
teniendo presente la retroalimentación de ese paso, se procede a concretar lo referente, a
través de un conjunto de acciones para mejorar de manera continua y sistemática la
identidad de la institución que conlleve a su consolidación.
Como resultado del diagnóstico será posible establecer la proyección, que no es más
que la concepción o previsión de los cambios, transformaciones, mantenimiento o
fortalecimiento de los rasgos identitarios según lo requieran. Los mismos se basan en
los resultados obtenidos de las etapas anteriores y se considerarán a partir de acciones
para mejorar o solucionar las insuficiencias, mantener los resultados positivos y
consolidar los que se perciben de manera incipiente.
II.3. Resultados obtenidos de la estrategia organizativa para diagnosticar la identidad organizacional
Paso 1. Determinación de los Objetivos
Objetivos inmediatos:
Determinar las condiciones objetivas y subjetivas que posibilitan o no caracterizar
la identidad organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas.
Precisar las acciones pertinentes para desarrollar con éxito el proceso de
diagnóstico identitario en el Centro Universitario.
Propiciar las condiciones para que a través de un proceso creativo se deriven
acciones de cambio y reforzamiento de los rasgos identitarios del Centro
Universitario de Las Tunas.
Objetivo mediato: Contribuir a consolidar el desarrollo de una identidad organizacional en
el Centro Universitario de Las Tunas que armonice con sus necesidades de desarrollo
estratégico, a través de un proceso de acciones transformadoras sustentadas en el
diagnóstico identitario que permita la autenticidad, el sentido de pertenencia y la legitimidad
necesarias como expresión de su identidad en el sistema de Educación Superior Cubano.
Paso 2. Posibilidades y limitaciones
Posibilidades en la realización del diagnóstico:
1. Contar con un sustento teórico conceptual sobre identidad permite establecer los
rasgos ó elementos para desarrollar el diagnóstico identitario.
2. El nivel cultural de los miembros de la comunidad universitaria resulta asequible
para comprender el tema de identidad, lo cual posibilita desarrollar la
investigación con una mayor precisión y una menor inversión de tiempo.
3. Tener identificada la estructura de la organización facilita el dirigir la investigación
y la aplicación de las diversas técnicas a los diferentes niveles de esta y a las
áreas con mayor potencial de información.
Limitaciones en la realización del diagnóstico:
1. Existe un limitado estudio de la identidad en el contexto universitario lo que
reduce las posibilidades de alternativas investigativas para tenerlos como
referentes comparativos en este tipo de investigación.
2. Los escasos antecedentes de diagnósticos identitarios y la poca experiencia
acumulada en este tipo de actividad pueden disminuir las posibilidades de
profundización en el estudio a realizar.
3. La excesiva carga de trabajo del personal que labora en el Centro dificulta
establecer espacios de tiempo para realizar el diagnóstico en sus diversas
formas (aplicación de encuestas, entrevistas y dinámicas de grupos).
Paso 3. Concepción y organización del diagnóstico identitario
a) Elementos que se constituyen en el contenido caracterológico de la identidad
organizacional:
1. La Institución: Lo que es en sí, su nombre y sus características. Su fachada,
ubicación, visibilidad, estructura física y funcional, así como los métodos y
políticas de dirección.
2. Actores organizacionales ó público (interno/externo): Constituyen el sistema
social interno y externo de la institución que está compuesta por individuos y
grupos tanto grandes como pequeños. Son los seres vivientes, pensantes y
sentimientos.
3. Misión: Es el momento actual de cara al futuro. Expresa la razón de ser, su
esencia y el objetivo más general del proceso de gestión de la formación y
desarrollo de la cultura organizacional, al indicar una dirección general, una
filosofía que motive y sirva de guía para procurar una unidad de propósitos en la
comunidad universitaria dirigida a desarrollar una identidad organizacional. Será
la referencia más adecuada y tal vez la única, para derivar la formulación
apropiada de objetivos y estrategias específicas que deben ser consistentes
entre sí y con la propia misión.
4. Visión: Se entiende por visión aquellas aspiraciones, sueños de la universidad
con mirada al futuro que implica el desarrollo de capacidades y la
transformación, sin olvidar las características que en el presente desarrolla el
proceso, flexible ante los posibles escenarios, sin una exagerada precisión, pero
constante y trascendente.
5. Procesos Universitarios: Son todas aquellas actividades distintivas, propias de
este tipo de institución educativa y que solo se desarrollan en esta, vinculada a la
formación a través de la instrucción y educación. Para las instituciones de
educación superior se reconocen cuatro procesos sustantivos primarios, siendo
estos, la formación del profesional, la extensión universitaria, la ciencia y la
técnica y la superación profesional, así como otros dos procesos, la gestión
económica financiera y de recursos humanos.
6. Historia: Es la biografía cronológica de la institución donde se reflejan los
principales sucesos históricos por los que ha transitado la misma. Es la
documentación inicial y permanente; debe recoger todos aquellos hechos,
fechas, logros fundadores y todas aquellas personas que hicieron posible su
creación. Reconstruir la historia lleva implícito fomentar el hábito de recordar.
7. Liderazgo: Los líderes son individuos que por sus cualidades, capacidades y
aptitudes son capaces de influenciar (o desmotivar) a sus colaboradores. Son
personas transformadoras, deben ser visioneros, capaces de hablar del futuro,
deben saber comunicar y tener confianza en si mismo.
8. Principios y valores: Tipos de creencias que los actores organizacionales
sostienen respecto a lo que consideran importante (bueno ó malo, correcto ó
equivocado). Son modalidades, ideales de conducta. Los valores ayudan a
mantener cierto equilibrio al enfrentarse al ambiente externo. Estos valores
deben definirlos, explicar su importancia y darle la divulgación adecuada a toda
la comunidad universitaria.
9. Tradiciones: Comportamiento social repetitivo de celebración con tiempo
específico (anual, semestral, mensual o diario), donde se realiza un rito. Permite
reconstruir y explicar todo fenómeno. Acontecimientos transmitidos oralmente de
generación en generación. Es tradición todo aquello que una generación hereda
de las anteriores y, por estimarlo valioso, lega a las siguientes.
10.Ritos: Se denomina rito a un acto repetido invariablemente. Mediante este se
produce un reencuentro. La celebración de los ritos (ritual) puede consistir en
fiestas y ceremonias, de carácter más o menos solemne, para celebrar una
tradición. Tienen un carácter simbólico por ejemplo los claustros docentes, actos
de graduación, celebraciones especiales, entre otras.
11.Tecnología: Empleo de la ciencia y la técnica. Es la comunicación dentro de la
institución, los recursos tecnológicos modifican el modo de interactuar de los
integrantes. Proporciona los recursos con los que trabajan las personas e influye
en las tareas que desempeñan. Es el conjunto de conocimientos e información
propios de una actividad, así como su disponibilidad técnica, que pueden ser
utilizados en forma sistemática para el diseño, desarrollo, fabricación y
comercialización de productos o la prestación de servicios, incluyendo la
aplicación adecuada de las técnicas asociadas a la gestión global.
12.Comportamiento: Actitudes, conductas y modo de actuar (en el tiempo y lugar
laborales) de cada una de las personas que trabajan en la institución, forman
parte de la identidad institucional y afectan determinantemente el clima
organizacional. Un modo de comportamiento puede ser definido como un estado
anímico formado por una red de reglas, estímulos y prohibiciones; que orientan y
modelarán el modo de comportamiento en que se conducirán los individuos en la
institución.
13.Lenguaje: Al igual que el comportamiento, la manera (oral o escrita) en que se
comunican los integrantes de la organización determinan la identidad
institucional. El lenguaje oral es fugaz, momentáneo y cotidiano. Muchas veces
sin coherencia lógica; sin embargo, el escrito puede estar cargado
emocionalmente y de esta manera manifestar lo que sentimos, deseamos y
concluimos. En el proceso comunicativo de mensajes escrito y oral, existen
signos lingüísticos diferentes, unos con reglas y otros sin lógica y coherencia. En
tal sentido la lengua hablada es más efectiva que la escrita, porque para
transmitir el énfasis, o la entonación de las palabras, el lenguaje oral es
excelente. Para la construcción del lenguaje escrito se debe ser más cuidadoso,
pues éste cuenta con atributos auxiliares del lenguaje oral, que se emplean y
logran reforzar la expresión (mímica, gesticulación, entonación, etc.)
14.Vestimenta: Es necesario que existan cierta normatividad en el uso de la
vestimenta institucional. El modo de vestir, el uso de prendas, el momento en
que se usan y la ocasión transmiten mensajes que resultan perceptibles y
observables como rasgo identitario.
15.Simbolización: Es la representación sensorialmente apreciable de una realidad,
en virtud de rasgos que se asocian con esta por una convención socialmente
aceptada. Representa los emblemas o figuras que guardan un significado con
alguna actividad o área de la organización.
16. Imagen: Una imagen es una representación visual de un objeto mediante
técnicas diferentes de diseño, pintura, fotografía, video. Es el modo a través del
cual la organización expresa su identidad (representación en el imaginario
simbólico). Sus modos de expresión son una serie de atributos que se
consideran representativos, distintivos dentro de la organización, se proyectan a
través de acciones de comunicación. Es la representación e impresión que
tienen los individuos tanto de los procesos de la organización como de sus
condiciones físicas. Dicho de otra manera, es la representación mental que
tienen las personas y la sociedad en general de una organización, de sus
directivos, de sus realizaciones, de sus iniciativas y de sus productos o
servicios. La imagen es un elemento importante en el funcionamiento de la
institución y deberá trabajarse en función de que se tenga claridad respecto a
cómo es concebida la organización, tanto por sus miembros internos y externos
u otras entidades con las que se relacione.
17.Comunicación: Es un proceso de interacción social a través de símbolos y
sistemas de mensajes que se producen como parte de la actividad humana. Es
la transferencia de información y la comprensión entre dos o más personas. Es
un puente de significados entre los hombres y le permite conocer las ideas, los
hechos, los pensamientos y sentimientos de los demás. Para entender la
comunicación se necesita tratar de comprender cómo se relacionan las personas
entre sí. La comunicación es simbólica: los sonidos, gestos, letras, números y
palabras sólo representan o son una aproximación de las ideas que se pretenden
transmitir. A través de la comunicación se difunden las metas de la institución.
Ella orienta, motiva y crea un clima que incentiva la participación del personal.
18.Entorno: Conjunto de elementos relacionados entre si fuera de los límites de la
institución. Ejerce influencia sobre ella de forma tal que determina el éxito o
fracaso de la misma. Representa el ambiente del sistema objeto, donde
intervienen los problemas relativos a las variables económicas, tecnológicas,
demográficas, político-legales, ecológicas, sociales entre otras; las cuales se
vinculan directamente con el quehacer de la organización y la impactan de
manera positiva o negativa.
19.Condiciones laborales y recursos para trabajar: Representan el estado de los
recursos materiales con que cuentan los docentes y no docentes para realizar su
trabajo, además del estado de las oficinas, la tecnología o medios e implementos
de trabajo, la disponibilidad y accesibilidad a los mismos.
b) Los instrumentos que se utilizaron en el diagnóstico fueron: La encuestas,
entrevistas y la observación.
Encuesta I: Se hizo con el objetivo de determinar los principales rasgos que se
constituyen en elementos identitarios en el Centro.
Encuesta II: Se concibie con el objetivo de conocer el dominio por parte de los
miembros de la comunidad universitaria sobre los elementos identitarios del
Centro.
Guías de entrevistas: Se realiza con la participación de directivos del Centro para
conocer si la Institución tiene una identidad consolidada.
Guía de observación: Se constatan las manifestaciones y actuaciones de los
miembros de la comunidad universitaria, así como las condiciones materiales y
de infraestructura.
c) Los actores implicados en el diagnóstico son: En el caso de la Universidad como
organización se toman como referentes grupales; los profesores, los estudiantes,
trabajadores no docentes y los directivos.
Paso 4. Implementación del Diagnóstico
Después de haberse definido los elementos que se constituyen en el contenido
caracterológico de la identidad organizacional, de haber elaborado los instrumentos,
determinado los grupos y actores implicados en el diagnóstico; se procedió a su
implementación cuyos resultados fueron los siguientes:
De acuerdo a la Encuesta I donde se persigue conocer por parte de profesores y
estudiantes los rasgos identitarios tanto positivos como negativos, se destaca que los
profesores y estudiantes consideran que los estudiantes son solidarios, honestos,
revolucionarios, alegres, laboriosos, divertidos, combativos, responsables y en
ocasiones muestran poco interés hacia el estudio. En relación a los propios profesores,
estos se consideran preocupados, revolucionarios, honestos, con deseos de
superación, sacrificados, preparados y algunos con poca formación pedagógica y
metodológica para enfrentar el proceso docente educativo con la calidad que se
requiere en este tipo de institución. Los trabajadores no docentes según su opinión son
incondicionales, revolucionarios y se distinguen por su laboriosidad, además como
negativo tenemos que todavía es bajo su nivel cultural, que tienen poca preparación
para su desempeño y es limitada su profesionalidad. (Anexo 2)
Respecto a los Procesos Universitarios comentan que la Formación Profesional es
aceptable y que se han obtenido resultados, que existe experiencia en una parte del
claustro, que se ha logrado un profesional más integral pero que todavía coexisten falta
de horas de estudios y las práctica laborales son aún deficientes. Acerca de la
Extensión Universitaria plantean es adecuada la programación de actividades, esta
hace posible que se vincule con la localidad pero todavía es poco representativa, tiene
poca variedad y tiene pobre participación.
En relación a la Gestión de Recursos Humanos, opinan los profesores que es regular,
que hay organización, preocupación por la superación, pero no se tiene en cuenta como
eslabón fundamental y el reconocimiento que reciben es insuficiente lo cual genera
desmotivación en los trabajadores. La Educación de Postgrado se destaca por la buena
formación del claustro, es creciente, tiene alta demanda, con acceso amplio a
diplomados y maestrías, no obstante hay carencia de locales y pocos recursos. La
Ciencia y Técnica es creciente, se han alcanzado logros, pero a pesar de eso, todavía
hay muchas actividades que afectan tener esta como prioridad, falta de proyección
integral, poco funcionamiento y escasa estimulación. La Gestión Económica Financiera
está mejorando, se han logrado avances, sin embargo, el proceso inversionista no
responde a las necesidades crecientes de la universidad y los recursos para apoyar los
demás proceso son insuficientes.
Como símbolos del Centro Universitario los docentes comentan, que está la plaza
Lenin, Génesis, Escalinata y el Logotipo del CULT aunque refieren que hay poca
divulgación de símbolos y logotipos, lo que trae consigo que las personas no se sienten
representadas.
Dentro de los valores con los que se identifican está la laboriosidad, profesionalismo,
honradez, honestidad, responsabilidad, patriotismo, el ser revolucionarios pero todavía
se necesita trabajar en su desarrollo y que a la vez sean compartidos por todos.
La tecnología es adecuada pero aún insuficiente y en muchas ocasiones no se cuidan
racionalmente y su servicio no es equitativo. Respecto a los sistemas de comunicación
se puedes decir que existe falta de tecnología y la existe no es bien aprovechada, no
hay señalización, hay carencia de información oportuna y falta de explotar otros canales
o espacios.
Por otro lado el liderazgo o estilos de dirección lo entienden que es visionero, hay
movimiento en la formación de líderes jóvenes, tendientes a ser participativos, no
obstante estiman que el liderazgo realmente es autoritario y que hay poca participación
de las personas en la toma de decisiones.
Ahora bien, los estudiantes opinan en esta misma encuesta que ellos son críticos,
entusiastas, revolucionarios, atentos, que tienen juventud, son alegres, carismáticos,
hospitalarios, bondadosos, calmados, maduros, habladores, impulsivos, con excesiva
gesticulación al hablar, imaginativos, que en ocasiones tienen descortesías y carencia
de educación formal.
A los profesores los caracterizan como sencillos, responsables, que poseen una
preparación aceptable, que son profesionales, que en ocasiones le falta creatividad y
algunos carecen de formación pedagógica.
En su opinión, los trabajadores no docentes son sencillos, tienen un buen servicio, son
consagrados, amables, serios, incondicionales; pero pese a ello, destacan que es bajo
su nivel cultural y educacional y están poco preparados.
En cuanto a los Procesos Universitarios consideran que la Formación Profesional es
buena y bastante aceptable, que tienen compromiso, la ven como una oportunidad
máxima, sin embargo, plantean inquietudes pues carecen de bibliografía, es poco
rigurosa, las prácticas no se preparan bien y no hay suficientes horas de estudio. Con
respecto a la Extensión Universitaria creen que se hacen actividades pero falta
iniciativa, tiene poca divulgación, en ocasiones es efímera, no hay motivación y posee
una elevada fluctuación de personal.
La Educación de Postgrado según su punto de vista, es de excelencia y en parte
insuficiente, la Ciencia y Técnica la ven en avance y la Gestión Económica Financiera
es confiable, está mejorando, pero manifiestan su preocupación en cuanto al estipendio
ya que nunca es pagado en fecha.
Identifican a la plaza Lenin y Génesis como parte de su simbología además comentan
que la universidad aún es identificada por la categoría de filial y que los símbolos son
pocos reconocidos y no tienen propaganda.
Se sienten identificados a través de los valores como la integralidad, la solidaridad, la
honestidad, la responsabilidad, el patriotismo, la laboriosidad, con ser revolucionarios,
antimperialistas e internacionalistas.
Consideran que en las tecnologías hay desarrollo de la computación, progreso de los
medios de elaboración de alimentos pero hay muy poco acceso a Internet. A los
sistemas de comunicación le hace falta más fluidez, no es oportuno, existen pocas
señalizaciones, el servicio y la pizarra es insuficiente.
A sus líderes los ven como personas visioneras, pero sus dirigentes de la FEU no
saben llegar a los estudiantes, no se hacen sentir, las acciones de la FEU piensan que
es limitada, son poco creativos, inactivos y no mueven masas.
Como se observa en los resultados de la encuesta aplicada tanto a profesores como
estudiantes hay coincidencia en cada una de las situaciones o ítems investigados, lo
cual es manifestación de que el Centro Universitario se reconoce por cada uno de sus
miembros de manera compartida, lo que significa ser reflejo de una identidad. Esto no
quiere decir que en los rasgos identitarios identificados todos sean valorados de
manera positiva, por lo que se impone establecer acciones que hagan coherentes los
rasgos identitarios de la institución con las exigencias de la nueva universidad cubana
de hoy.
De la Encuesta II realizada a los profesores, estudiantes y trabajadores no docentes del
Centro Universitario se refleja que el 42,5% del total de los encuestados conoce la
misión de la universidad la cual es la razón de ser de la misma, el 40% conoce en parte
la misión debido a que no se comunica adecuadamente y el 17,5% dice no conocerla.
Aún cuando la minoría no conoce la misión de la universidad resulta preocupante por
cuanto esta es el principal elemento orientador de sus miembros hacia una identidad
organizacional. (Anexo 3)
Respecto a la visión, el 45% de los encuestados plantean que no dominan como está
conformada la visión de la universidad y que no tienen idea de que pueda plantearse en
su contenido; el 32% cree conocerla en parte y el 33.5% afirma que si. Resulta motivo
de análisis por parte de los directivos, si realmente se quiere consolidar una identidad
que garantice el desarrollo estratégico de la institución; considerar la necesidad de que
todos los miembros de la universidad compartan la visión como destino compartido, que
garantice la legitimidad y sentido de pertenencia.
El juicio que emiten los actores organizacionales acerca de las condiciones laborales
está dada en que, el 47,5% manifiesta que estas son en parte adecuadas pues hay falta
de iluminación, no existe mantenimiento en la limpieza y en la mayoría de los casos el
hacinamiento en las oficinas trae consigo determinadas informalidades, del mismo
modo el 45% respondió que sus condiciones no son las más apropiadas y solo el 7,5%
dio respuesta positiva.
En correspondencia a lo anterior, el 47,5% refiere que no dispone de los recursos
vitales para hacer bien su trabajo pues hay escasez de tecnología, de aulas,
departamentos; solo el 42,5% dice que en parte y el resto afirma que si (10%).
Es importante para consolidar la identidad de la universidad reconocer como el 65,5%
respondió afirmativamente que se sentía orgulloso de pertenecer a la universidad
tunera pues a pesar de la muchas adversidades la consideran como parte de su vida, el
15% renegó de sentirse orgulloso lo que no es significativo y el 22,5% respondió que en
parte porque consideran que aún le falta mucho por mejorar.
En cuanto a los valores, el 45% expone que si conoce los valores compartidos de la
institución y se sienten identificados con ellos lo cual debe convertirse en el eje que
dinamiza los comportamientos hacia una identidad propia del centro; no obstante, se
debe continuar insistiendo en el proceso de socialización de los valores, por cuanto más
del 30% lo conoce en parte y el 22,5% no sabe de ellos. Sin embargo, el 37,5% de la
comunidad plantea que domina los valores en parte, porque se saben algún que otro
significado y modo de actuación de los mismos, el 30% manifestó que no los domina ya
que no existe divulgación de ellos a través de los medios de comunicación en la
institución, además de que no se realizan talleres ni dinámicas de grupo. Mientras que
el 32,5% respondió que si.
El 72,5% alegó que en su universidad no existen rasgos identitarios, de ellos el 15%
respondió que en parte y el 12,5% que si; estos comentaron que esos rasgos eran la:
plaza Lenin, Génesis, plaza Mella, el logotipo de la universidad, solo aludiendo los
rasgos a los elementos objetivos o materiales de la misma.
Respecto a la historia del Centro un 65% de los encestados contestó correctamente
que la universidad dejó de ser Filial para convertirse en CULT en 1995, el 20% no
emitió juicio alguno por no saber y el 12,5% respondió que había sido en el 1976 que
fue cuando todavía era Filial y un 2.5% respondió que en 1974.
El 67,5% de la comunidad universitaria ratifican no dominar la historia de la institución
producto que de que no fluye la comunicación, no se le da la debida divulgación; incluso
estudiantes y profesores que llevan cinco años en la universidad expresan que no se
generalizan los sucesos que han formado parte de la vida y obra de la misma. El 30%
manifiesta distinguir en parte ciertos acontecimientos, como por ejemplo cuando se
fundó, algunos fundadores; mientras que el 2.5% dice conocer la historia.
Conjuntamente con lo anterior, el 82,5% de los partícipes corroboran que ignoran
cuales son los fundadores de la universidad, lo cual es excesivamente elevado y el
17,5% respondió que distinguen algunos creadores iniciales de la institución, como
Jesús Labrada Patterson y Alfredo Acosta, aunque incluyen otros que no lo son.
Al igual que desconocen la historia, el 30% de la comunidad plantea que nunca se
difunde la historia y el 47,5% atestiguan que no se divulga la misma; ni a través de la
extensión universitaria cuya función es exactamente mantener al corriente a todos de
las actividades y los acontecimientos más recientes, ni por la intranet, ni a través de
cualquier otro medio.
Si se quiere lograr una verdadera identidad en el CULT se hace ineludible insistir en
que los participes de la institución compartan su historia, no sólo para conocer que ha
hecho esta desde su fundación, sino también como mecanismo para consolidar su
destino futuro en correspondencia con la conformación de la nueva universidad cubana.
El 52,5% de los actores protagónicos emiten que el claustro de profesores se
corresponde en parte a las exigencias de la nueva universidad pues todavía le falta
mucho por seguir superándose, por tener más sed de conocimiento y por seguir cada
día siendo mejores; el 25% declara que si y solamente el 22,5% respondió que no.
Desde lo simbólico son generadores de imagen positiva e identidad del Centro
Universitario la plaza Lenin por su significado y como espacio político cultural, de la
misma manera que la escultura Génesis, el cartel de la entrada y el actual logotipo;
aunque de este último no se tiene referencia de su significado, también el busto a José
Martí donde se sitúa el asta de la enseña nacional. No se reconocen como símbolos
identitarios el mural a José Martí del docente ni la plaza Mella.
Finalmente el comportamiento que asumen los miembros de la comunidad no se
corresponde con las exigencias de la nueva universidad ya que el 50% manifestó que
no y el 30% que en parte pues los rasgos que los distingue según su opinión son: que
se sienten desmotivados, falta da hábito de estudio, la FEU no tiene protagonismo, la
educación formal está deteriorada, desinterés, no se es dinámico, en ocasiones se
muestra apatía y desinterés hacia el cumplimiento de las tareas, que los estudiantes
internos no hacen vida universitaria y que no tienen iniciativa, mientras que el 20%
respondió que si pues según su punto de vista son dedicados, responsables,
disciplinados, alegres, educados, tienen entrega y energía.
Se puede valorar de manera global que al igual que en la encuesta anterior, el Centro
Universitario posee rasgos identitarios que la distinguen, no obstante existen
determinados elementos que requieren ser encausados y orientados hacia una
identidad sólida. Por tanto, es imprescindible trabajar en función de los valores
compartidos y de los elementos de la subjetividad de los miembros de la comunidad
universitaria, puesto que las mayores referencias identitarias continúan revelándose en
su aspecto tangible.
La entrevista se efectuó a profesores y directivos del Centro Universitario, los cuales
poseen experimentados conocimientos en los temas asociados a la investigación.
(Anexo 4)
Las opiniones de estos entrevistados coincidieron en los disímiles aspectos que se
preguntaron acerca de la identidad del Centro, de acuerdo con esto se expuso que
la universidad tiene una identidad con un cierto nivel de consolidación, que quizás
no todo lo que se pudiera haber avanzado en ese sentido pues para que una
identidad esté consolidada tiene que reunir ciertos requerimientos, rasgos,
características especificidades que la diferencien de otras.
Manifiestan que la universidad ha sufrido un proceso de transformaciones y
modificaciones pues de Unidad Docente se convirtió en Centro Universitario por
tanto esa propia identidad la va conformando en el propio proceso de desarrollo del
Centro; es decir con ello, se han obtenido resultados, reconocimientos nacionales y
sociales, y eso es producto de su profesionalismo lo que hace que las empresas u
organismos busquen ayuda para resolver sus problemas de capacitación y
prestación de servicios.
Es así que, según su veredicto se puede hablar de una identidad porque
indiscutiblemente la tiene, pero no se puede departir de una identidad consolidada
pues la identidad no es un fenómeno abstracto, o sea, se concreta en aspectos
específicos como el lenguaje, la forma de vestir, el comportamiento que se adopta
en cada uno de los lugares del Centro en fin esa identidad está presente en todos.
A su parecer, los rasgos propios que distinguen a la universidad están conformados
tanto por rasgos positivos como negativos. Los entrevistados exteriorizan que uno
de esos rasgos son los valores, como por ejemplo la sencillez de sus trabajadores
pues siempre están disponibles a atender a cualquier persona. Otro rasgo es que no
existe diferenciación entre el campus universitario y la residencia estudiantil pues de
la misma forma que el estudiante está vestido en su beca también se pasea así por
el campus y es algo que en su opinión no ayuda ya que genera un entrelazamiento
entre lo que debía ser y lo que es; consideran que el estudiante tiene que respetar
su campus porque este es el espacio donde hay que tener una forma de vestirse y
de comportarse debido a que si llega un visitante encuentra que hay como una
especie de contaminación que no establece separación.
Otra cualidad es que sus profesores son muy jóvenes, lo que resulta importante
porque da la posibilidad de la formación, a un tiempo bastante largo para que sus
profesores jóvenes puedan fortificar la universidad de acuerdo a sus peculiaridades.
Agregan que sus trabajadores se caracterizan por cumplir y que existe cierto nivel
de compromiso por parte de todos en el centro y eso hace que se trabaje en el
postgrado, que se investigue y que se busquen soluciones. La mayoría coincide en
que hay exceso al ponerles límites a las personas y piensan que eso no es bueno
pues no le permite a la comunidad desarrollar sus capacidades creativas.
Complementan que las relaciones personales son buenas y esto ayuda a crecer ya
que lo que tiene uno, forma parte de todos, es decir, se socializa. Otra característica
es que hay estudiantes diversos, por ejemplo no es lo mismo un estudiante de la
Facultad de Economía ó de Ciencias Sociales que un estudiante de Cultura Física;
indiscutiblemente hay diferencias por el propio desempeño de la profesión, las
habilidades que tiene que formar los estudiantes de economía es en el laboratorio,
en la biblioteca mientras que los de cultura física necesitan de lugares abiertos.
Para los entrevistados la comunicación es un elemento vital, y irrefutablemente existen
problemas con ella pues declaran que no todo se comunica correctamente, expresan
que se utiliza mucho el medio digital, y este es de gran valor por su rapidez pero no
todos tienen la posibilidad de acceder a estas computadoras todo el día; además
agregan que no tiene efectividad en ocasiones porque a veces se requiere que la
información se de cara a cara, mirando a los ojos de la persona para ver que piensan y
opinan. Le suman a esto que los niveles no comunican hasta abajo y las informaciones
que se necesitan saber quedan a cierto nivel y esto trae como consecuencia que no lo
sepan ni los profesores ni los estudiantes.
En cuanto a las ceremonias, ritos y tradiciones que se celebran en la institución de
carácter sistémico opinaron que existen actos por el aniversario de Lenin, que se
realizan imposiciones de medallas por aniversarios de trabajo, hay proyectos
universitarios como el de Puerto Padre, Menéndez y Manatí y que se cuenta con tres
Eventos Internacionales como es el caso de “Innovación Educativa” (INNOED), el otro
es el “Foro Iberoamericano de Orientación Educativa” (FIDOE) y finamente COMUR
que es el “Taller Internacional de Trabajadores Comunitarios Rural” estos eventos
marcan a la universidad de prestigio. Están también las Jornadas de Trabajos de
Diplomas, las graduaciones, matutinos y actos.
Sin embargo, revelan que estas ceremonias deben mejorar pues no se cuenta con un
equipo suficientemente preparado para lograr que las actividades tengan garantía y
efectividad, incorporan además que los actos se hacen con premura y lo que se hace
así, no queda bien.
Concluyen señalando que la identidad de la universidad es procesual, es decir, es un
proceso, y esta se puede deteriorar, enriquecer y modificar porque es un proceso
práctico de la vida. De una forma u otra todos contribuimos a la formación de la
identidad, siempre que estemos conciente de lo que hacemos pues a veces lo que
hacemos es destruirla ya que no tenemos claridad de que cuando se está en el Centro
todos formamos parte de la identidad.
Con las entrevistas se corrobora las informaciones y resultados obtenidos por las
encuestas aplicadas, confirmándose que el Centro Universitario tiene su identidad, sin
embargo, se considera también que se debe continuar sistematizando en cuanto a los
hechos, actividades y significaciones hacia la consolidación de la identidad.
De manera general en la observación (Anexo 5) efectuada se pudo constatar que:
La tecnología es adecuada y responde en cierta medida a las necesidades de los
docentes y estudiantes pero aún es insuficiente.
El nivel académico y científico del claustro es todavía insuficiente pero en el Centro
se trabaja arduamente en el proceso de formación de los profesores para cambios
de categorías y transformar la composición categorial existente.
Se establecen relaciones con otras universidades del país para desarrollar y
fortalecer la formación científica del claustro, se han obtenido resultados
superiores en cuanto a doctorados, investigaciones, eventos, publicaciones,
grupos de investigación y proyectos.
La comunicación a veces no fluye adecuadamente pues muchas cosas no se
divulgan, no hay sistematicidad en la información de los resultados que ha
obtenido la institución.
El acceso a internet es deficiente lo cual limita la labor investigativa, la motivación
hacia esta actividad y la inmediatez de la información.
No hay información para facilitar el trabajo en ocasiones pues los profesores no
tienen acceso a Internet.
Los espacios físicos de las oficinas no son los más adecuados pues hay mucho
personal y los departamentos son muy pequeños.
La infraestructura del Centro no responde al crecimiento y desarrollo del mismo
desde el punto de vista docente, investigativo y sociocultural, lo cual se visualiza
en la escasez de aulas, albergues, salones de estudio.
Son favorables las condiciones estéticas externas, aún cuando el Centro no ha
logrado todavía completar una infraestructura acorde con sus propias
necesidades.
Todavía existe un inadecuado sistema de señalización que limita identificar las
áreas y su distribución física.
Aún es bajo el número de carreras acreditadas en el Centro.
Las condiciones estéticas se ven afectadas esencialmente por las limitaciones en
el mantenimiento de las instalaciones higiénicas sanitarias, los locales docentes y
las áreas deportivas así como del deterioro del mobiliario.
Las relaciones personales son buenas pues se conocen y colaboran entre todos,
principalmente a nivel de departamentos o áreas de trabajo, a pesar de las
insatisfacciones que se tiene por las condiciones laborales y materiales existentes.
En sentido general podemos exteriorizar que el Centro Universitario de Las Tunas tiene
un identidad que representa lo suigéneris, lo singular que le otorga un carácter distintivo
y marca la diferencia con otras instituciones; pero no posee una identidad
organizacional consolidada pues para que ello suceda; la universidad debe perfeccionar
los elementos o rasgos que la conforman y después que esto ocurra, se han de
informar a los actores internos los cuales forman parte de la institución y posteriormente
darse a conocer a la sociedad a través de la gestión de la comunicación.
Paso 6. Acciones para la mejora continua de la identidad organizacional universitaria
Para contrarrestar las limitaciones derivadas de los resultados del diagnóstico, así como
para potenciar los elementos positivos, se trazan un conjunto de acciones para
consolidar la identidad organizacional del Centro:
1. Perfeccionar el liderazgo de equipo considerando como factor clave un proceso de
comunicación eficiente y que potencie vías y mecanismos de motivación, que
garanticen modos de actuación en la comunidad universitaria ajustados a la dinámica
del desarrollo institucional.
2. Consolidar conductas positivas hacia el trabajo y el estudio que propicien un clima
organizacional entre los miembros de la comunidad universitaria donde se revele la
integración de los esfuerzos y el desempeño individual con los compromisos grupales.
3. Priorizar en los sistemas de dirección una estructura y tecnología acordes a las
necesidades de desarrollo y a tono de la nueva universidad cubana que permitan una
imagen organizacional distintiva en el entorno y dentro del sistema de las Instituciones
de Educación Superior.
4. Consolidar los valores compartidos definidos en la estrategia institucional mediante un
proceso de concientización e interiorización, asumiendo la conceptualización e
interpretación por todos los miembros de la comunidad universitaria.
5. Estudiar en profundidad el proceso de socialización de los valores de manera que
se sistematicen los mismos y que respondan a las necesidades del desarrollo
profesional, científico y cultural de los miembros de la comunidad universitaria.
6. Afianzar la historia y tradiciones desde el liderazgo, la comunicación y la
motivación basados en la credibilidad, la legitimidad y el sentido de pertenencia.
7. Desarrollar acciones (conferencias, conversatorios y talleres) que trasmitan el
conocimiento de la historia del Centro, sus principales logros individuales y
colectivos desde su creación y su participación en el desarrollo socioeconómico
del territorio.
8. Reabrir la sala de historia del Centro, por lo que significa, para así trasmitir las
vivencias más trascendentes que han acontecido en el desarrollo institucional, a
través de las diferentes generaciones que han sido parte de la vida de la institución
como modo de asegurar las premisas de la identidad universitaria.
9. Se debe preparar a un equipo especializado que garantice que las actividades,
celebraciones, tradiciones se realicen mejor.
10.Fortalecer los elementos identitarios para que tributen positivamente a la identidad
organizacional del Centro Universitario.
11. Generar alternativas para la tecnología e infraestructura del Centro Universitario que
propicien adecuadamente el crecimiento y desarrollo del mismo, desde el punto de
vista docente, investigativo y sociocultural.
12.Diseñar una estrategia comunicativa que potencie una mayor fluidez en la
información y mejora de los proceso de comunicación interna que permita el
conocimiento y concientización oportuna de la misión, visión, valores y tradiciones.
Conclusiones parciales
Se establecen los antecedentes y la caracterización del Centro Universitario de Las
Tunas y su vínculo con el desarrollo de la Educación Superior a partir del triunfo
revolucionario teniendo en cuenta diversas etapas, lo cual resulta una novedad para la
construcción histórica de este Centro, con la peculiaridad de que esta caracterización
apunta a los antecedentes que se convierten en sustento histórico en la formación y
desarrollo de su identidad.
La concepción de la estrategia organizativa para el diagnóstico de la identidad
organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas resulta la guía principal para
esta actividad y se convierte en aporte práctico metodológico de esta investigación lo
que se comprueba en la efectividad de su implementación y a través de los resultados
obtenidos.
Se muestran en este capítulo un conjunto de acciones para iniciar el camino a la
consolidación de la identidad organizacional de la universidad tunera, que de aplicarse
adecuada y consecuentemente se podrá lograr una identidad en esta institución que
responda a las expectativas de su entorno y a las exigencias de la nueva universidad
cubana.
CONCLUSIONES
1. Los elementos gnoseológicos abordados sobre la identidad desde lo general,
sostienen la continuidad de la lógica investigativa, además de constituirse en el eje
conductor hacia la descripción y comprensión teórica de la identidad
organizacional e identidad en el contexto universitario; así como, del diagnóstico
de la identidad, elemento este tratado muy poco en la literatura y que se
convirtieron en la guía para la aplicación de la investigación de manera práctica.
2. El tema estudiado revela novedad, dado que es la primera vez que se investiga la
identidad organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas, por lo que se
percibe la importancia de este y la necesidad de su continuidad de manera que
contribuya a encauzar adecuadamente el desarrollo estratégico institucional.
3. Dadas las insuficiencias en el desarrollo de la identidad organizacional del Centro
Universitario de Las Tunas, estudiarla desde su diagnóstico exigió elaborar una
estrategia organizativa con estos fines, de modo que se pudo caracterizar
adecuadamente el estado actual de la misma en esta institución; y sobre esa base
hacer las valoraciones con mayor precisión y objetividad y sobre ella definir un
conjunto de acciones encaminadas a la consolidación identitaria.
4. Al aplicar conscientemente las acciones propuestas contribuirá a lograr la autenticidad,
el sentido de pertenencia, y la legitimidad necesaria como máxima expresión de la
identidad organizacional en el Centro Universitario de Las Tunas ajustándose a sus
necesidades de desarrollo estratégico y a las características propias de la nueva
universidad cubana.
RECOMENDACIONES
Extender el estudio a la mayor cantidad posible de personas que componen la
comunidad universitaria e incorporar en el diagnóstico a aquellas personas que sin
formar parte de esta comunidad reciben directa o indirectamente el servicio del
Centro Universitario.
Dar a conocer a los directivos del Centro los resultados de la investigación e
imponer que se implemente de forma íntegra las acciones para el reforzamiento y
consolidación de la identidad universitaria, y así, evaluar su impacto.
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61.Zamora Pérez, Yamilet. Diagnóstico de la Cultura Organizacional manifiesta en la
Facultad de Ciencias Agrícolas. Trabajo de Diploma. – Las Tunas, 2003. -52 p.
62.Zavala, Lauro y Alvarado, Lauro. Loger Bartra: identidad cultural y ciencias
sociales/ En revista Versión- (2): 11-28, abril, 1992.
AnexosAnexo 1. Cantidad de Carreras en el Centro Universitario de Las Tunas
Centro Universitario Las Tunas
Facultad deCiencias
Económicas
Facultad de Ciencias Agrícolas
Facultad de Ciencias Técnicas
Facultad de Estudios
Socioculturales
Contabilidad
Economía
Agronomía
Ingeniería Industrial
Informática
Estudios Sociocultural
esComunicació
n Social
Derecho
Educación a
Distancia
Contabilidad
Estudios Sociocultural
esDerecho
Historia
I.C.T.B
S.U.MAgropecuari
a
Procesos Agroindustrial
esPsicología
Anexos
Anexo 2. Encuesta ICon el propósito de perfeccionar el proceso de gestión de nuestra universidad así como el establecimiento de un proceso de mejora continua del mismo, presentamos a usted un conjunto de indicadores a los cuales pedimos que respondan. Les agradecemos de ante mano su valiosa colaboración.
Estudiante ( ) Profesor ( )
Exponga dos rasgos que usted considera identifican a la universidad tunera de acuerdo a:
1. Las personas
Rasgos
Positivos Negativos
a) Estudiantes
b) Profesores
c) Trabajadores no Docentes
2. Los Procesos Universitarios
Rasgos
Positivos Negativos
a) Formación Profesional
b) Extensión Universitaria
c) Gestión de Recursos Humanos
d) Educación de Postgrado
e) Ciencia y Técnica
f) Gestión Económica Financiera
3. Símbolos, logotipos u otros. Estos rasgos pueden ser tanto positivos como negativos.
4. Valores. Estos rasgos pueden ser tanto positivos como negativos.
5. Tecnologías. Estos rasgos pueden ser tanto positivos como negativos.
6. Sistemas de comunicación. Estos rasgos pueden ser tanto positivos como negativos.
7. Liderazgo o estilo de dirección. Estos rasgos pueden ser tanto positivos como negativos.
Anexos
Anexo 3. Encuesta II Realizada a estudiantes, profesores y trabajadores no docentesCOMPAÑERO (A): Estamos realizando un estudio sobre la identidad de la institución. Para el mismo es imprescindible contar con su ayuda. Por tanto le estaríamos muy agradecidos de su valiosa colaboración. Por favor, responda con el mayor grado de sinceridad.
1. Conoce la misión del la universidad.
Sí____ No____ En parte____ 2. Conoce la visión de la universidad.
Sí____ No____ En parte____ 3. Sus condiciones laborales son las más adecuadas.
Sí____ No____ En parte____ 4. Dispone con todos los recursos necesarios para hacer bien su trabajo.
Sí____ No____ En parte____ 5. Se siente orgulloso de pertenecer a la Universidad Tunera.
Sí____ No____ En parte____ 6. Conoce los valores compartidos de la universidad.
Sí____ No____ En parte____ 7. Domina usted los valores compartidos.
Sí____ No____ En parte____ 8. Conoce si en su Universidad existen rasgos identitarios.
Sí____ No____ En parte____
¿Puede mencionar alguno de ellos?
9. Sabe en que año la Universidad dejó de ser Filial para convertirse en Centro Universitario de Las Tunas.
1984____ 1995 ____
1900____ 1974 ____
1992____ 1976 ____ 10.Conoce la Historia de la Universidad.
Sí____ No____ En parte____ 11.Domina cuales son sus fundadores.
Sí____ No____ Algunos____
a) Diga el nombre de algunos de ellos (as):
12.Se divulga con frecuencia la Historia de la Universidad.
Sí____ No____ Nunca ____ En parte ____ 13.¿Cree usted que la superación del claustro se corresponde con las exigencias de
la nueva universidad?
Anexos
Sí____ No____ En parte____
14.¿Los comportamientos que asumen los miembros de la comunidad universitaria se corresponden con las exigencias de una universidad de excelencia?
Sí____ No____ En parte____
15.¿Qué rasgos distinguen estos comportamientos que hacen que el CULT sea diferente al resto de las universidades cubanas?
16. ¿Cree usted que estas imágenes tienen algún significado que genere identidad al Centro Universitario de Las Tunas?
Sí____ No____ No estoy seguro____ Sí____ No____ No estoy seguro____
Sí____ No____ No estoy seguro____ Sí____ No____ No estoy seguro____
Sí____ No____ No estoy seguro____ Sí____ No____ No estoy seguro____
Anexos
MUCHAS GRACIAS
Anexos
Anexo 4. Entrevista aplicada a los directivos del Centro Universitario y profesores.
Es difícil creer que una organización está carente de identidad, por tanto partiendo del
presupuesto de que todas las organizaciones poseen una identidad preguntamos:
1. ¿Cree usted que el Centro Universitario tiene una identidad consolidada?
2. ¿Cuáles son los rasgos que usted considera sean propios, distintivos y legítimos
de esta universidad?
a) Puede referirse a los estudiantes, profesores, sistemas de dirección.
3. ¿Cree usted que esta identidad se configura tanto por los rasgos positivos como
negativos?
4. ¿Se puede considerar a la comunicación de este centro como un elemento de su
identidad?
5. ¿De que manera el sistema de comunicación que existe se constituye en una vía
para trasmitir la identidad?
6. ¿Cuales son los ritos, celebraciones u otras actividades de carácter sistémico que
identifican la universidad?
Anexos
Anexo 5. Guía de observación participativa.
1. Contrastar el espacio físico que ocupa la Universidad respecto a su entorno.
2. Verificar la limpieza, organización y estado físico de las áreas.
3. Comprobar el estado físico de las áreas y departamentos.
4. Verificar en que medida se hace uso de la tecnología y medios de comunicación.
5. Identificar si existe un sistema de señalización y si este resulta adecuado.
6. Verificar el estado de las relaciones interpersonales en los diferentes niveles y
entre ellos.
7. Comprobar el estado actual de la comunicación en los diferentes niveles y entre
ellos.
8. Patentizar la imagen del centro.
