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Ruta Con Vivac Por La Sierra de Bejar Candelario Con La SGE
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Ruta con vivac por la sierra de Béjar Candelario con la SGE
13 y 14 de julio de 2013.
Introducción.‐
Un año más la SGE ofrece la posibilidad de adentrase en la montaña pasando la noche en sus alturas y efectuando un recorrido circular por sus valles y cimas.
Como en los años anteriores hemos optado por dirigirnos a la sierra de Gredos aunque en esta ocasión a su macizo más occidental, la sierra de Candelario o Béjar.
La ruta se adentra en este macizo por la que quizás sea la garganta glaciar más espectacular de toda la sierra, la garganta de Hoyamoros, recorrida por el río Cuerpo de Hombre, en cuyo circo más elevado se tiene pensado pernoctar.
Desde este lugar las cimas ya no quedan lejos, por lo que la segunda jornada será una alta travesía por las principales cimas del macizo: Torreón, Canchal de la Ceja y Calvitero, al tiempo que una magnífica oportunidad para dar vista a las restantes gargantas, la del arroyo Malillo con la laguna del Duque y la del Trampal, que orientadas hacia el NE. y casi paralelas, muestran otros dos excelentes ejemplos de valles glaciares.
Desde la cima del Calvitero nos descolgaremos hacia el NO. para acabar en la Plataforma, el lugar habitual de acceso a la sierra, que situada a 1.900m nos evitará una larga y canicular bajada, pues en este lugar habremos dejado algún vehículo con el que recoger los utilizados para llegar a la salida el día anterior.
Creemos que la ruta es interesante por mostrarnos una sierra no muy conocida entre nosotros pero llena de valores geomorfológicos y ambientales. El vivac en Hoyamoros puede ser muy agradable pues el amplio circo rodeado de escarpes rocosos configura un gran escenario natural, que, además, tiene una pequeña cueva vivac habilitada que nos podría servir de refugio en caso de mal tiempo.
Por su parte la segunda jornada, con menos desnivel, adecuada para un segundo día de marcha con cierto peso en las mochilas, nos va a ofrecer una casi completa visión de la sierra de Candelario, pues recorreremos su espina dorsal cimera, acabando, tras la marcha, en el precioso pueblo de Candelario.
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Datos prácticos:
Candelario dista 222km. del punto de salida. La ruta en coche pasa por Ávila y Barco de Ávila, desde donde nos desviaremos al oeste para llegar a Candelario.
Para acceder al inicio de la ruta hay que hacer 3 o 4km. más, iniciándose en el Puente del Avellanar, entrada a la conocida como Dehesa de Candelario.
La Plataforma donde dejaremos los coches para el final de ruta está como a unos 8km. de Candelario.
El primer día se ascienden unos 900m. en un recorrido de unos 7km.
La segunda jornada se asciende unos 500m. y se descienden unos 650m. con una distancia total de unos 10,5km.
En conjunto la ruta es algo más corta que las de años precedentes, pero lo hemos preferido así por no caer de nuevo en las bajadas largas y agobiantes por el calor de las marchas anteriores.
Algunos datos sobre la sierra de Béjar.
La sierra de Béjar o Candelario, que a partir de ahora denominaremos del primer modo, se encuentra en la parte SO. de la provincia de Salamanca, limitando al SE. con la de Ávila y al O. y SO. con Cáceres. Al sur se encuentra el valle del Jerte; al N y NE el Aravalle y el Tormes y al NO. el río Cuerpo de Hombre que atraviesa la antes industriosa localidad de Béjar.
Las poblaciones principales son Béjar al N., Barco de Ávila al NE., Jerte al S. y Hervás al SO.
La sierra presenta una disposición alargada en sentido SO.‐ NE. con el pico Pinajarro al SO., dominando poderoso desde las alturas la bella e interesante localidad de Hervás y el valle extremeño del Ambróz; en el otro extremo, al N.‐NE., encontramos la Peña Negra de Becedas, no lejos de la estación de esquí de la Covatilla.
En conjunto la distancia entre los picos de 2.000m más alejados en el citado sentido SO.‐NE. es de unos 13km., pero si a esta unimos las laderas y contrafuertes próximos podemos hablar de una extensión, en dicha orientación, de más de 20km.
Transversalmente, esto es, por ejemplo entre Candelario, al Oeste, y el valle del Jerte al Este, hay una distancia de unos 12km., distancia más o menos general y válida en dicho sentido.
Por lo expuesto podemos ya entender que nos hallamos ante un macizo no muy extenso, pero sí bastante desnivelado y poderoso en cuanto a su masa y laderas, pues la extensión de su
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zona culminante es muy amplia en relación con el conjunto y sus valles de piedemonte bastante bajos. Por todo ello las vertientes superan con mucha frecuencia los 1.000 o 1.200m.
Por otro lado, una característica de esta sierra es que sus cimas no son afiladas y airosas, pues parece que una gran masa de hielo cubrió sus áreas culminantes sin permitir que el periglaciarismo definiera crestas afiladas con cimas agrestes. Solo donde los circos de distintas vertientes se acercan a la cresta divisoria, ésta se estrecha y es en dichos lugares donde la sierra presenta un aspecto más alpino y airoso. Esto en cuanto a las cimas, pues por el contrario las cabeceras de los valles sí han tenido una potente y definida acción morfogenética glaciar por lo que muestran todos los elementos comunes con las grandes gargantas glaciares del Alto Gredos.
Además de otros menores, pues se han reconocido unos 14 o 15 aparatos glaciares funcionado en el Pleistoceno en Béjar, las principales lenguas fueron las de la garganta del Malillo o del Duque y la del Trampal, orientadas al E.‐NE., favorecidas sin duda por el efecto de sotavento, y la de Hoyamoros o Cuerpo de Hombre, que orientada a barlovento, justo al contrario que las anteriores, fue generada por una muy amplia cabecera de alimentación.
Por tanto estamos en una montaña con formas eminentemente glaciares, de hecho se calcula que la extensión máxima del área glaciada llego a ser de unos 57 km2, pero con la particularidad, como en otras montañas del macizo Galaico o los montes de León, de la presencia y efectos de un gran domo glaciar cimero que ha dejado su impronta en las altas planicies culminantes.
Bajo el punto de vista de las rocas y de la geología nos encontramos ante una montaña eminentemente granítica, común con el resto de Gredos, estructurada en sus principales líneas topográficas por la acción tectónica de grandes y profundas fracturas, entre las que destacan las que enmarcan el macizo al NO., la falla de Béjar, y sobre todo la que se sitúa al SE., la conocida y decisiva, incluso a escala peninsular, falla del Jerte‐Plasencia.
En cuanto al clima la sierra, dada su ubicación y disposición, presenta un contrate pluviométrico muy definido entre la vertiente bejarana, la oeste, bastante oceánica, y la abulense, la oriental, mucho más seca o mediterránea. Este hecho se concreta en los más de 1.000mm. anuales de la localidad de Béjar frente a los 640mm. de Barco de Ávila. Desde el punto de vista térmico estamos ante un ejemplo de régimen mediterráneo continentalizado de altura, con verano fresco y seco y el resto del año, con precipitaciones repartidas e incrementadas en estaciones equinocciales, fresco, e invierno claramente frío con medias por debajo de los 3ºC en las poblaciones de fondo de valle.
En relación a la cubierta vegetal hay que apuntar la presencia de unas 1.400 especies con media docena de endemismo gredense e incluso alguno estrictamente bejarano. La notable biodiversidad es debida en buena medida, a su posición a caballo de las influencias mediterráneas y atlánticas, funcionando a lo largo de los tiempos como una verdadera isla
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biogeográfica en la que han encontrado acomodo múltiples especies que luego han quedado aisladas en sus cimas y laderas.
Como diferencias con la vegetación más conocida de Guadarrama cabe señalar la mayor presencia de castañares, muy favorecida por el hombre, y de abedulares. También la menor presencia del pinar de silvestre, aunque se han realizado repoblaciones frecuentes y consta su secular presencia natural. Los robledales de melojo, frecuentes en el resto del Sistema Central, también están aquí muy presentes.
En las alturas el piso del matorral de leguminosas con presencia abundante de piorno, en este caso además de con jabino con cambrón gredense, el Echinospartumbardanesii, una especie de erizón, es lo más habitual. Por encima entramos en el dominio de las herbáceas y gramíneas del piso cimero de las montañas mediterráneas, el cual se enriquece y adorna con las interesantes especies asociadas a las lagunas y aguazales de los remansos topográficos de los circos glaciares.
Bajo el punto de vista de la fauna se han reconocido 146 especies de aves, 44 mamíferos, 21 reptiles y 13 anfibios, además de un número amplio, e indeterminado de insectos.
Respecto a la protección de la sierra de Béjar hay una buena parte amparada por algún tipo de figura protectora aunque a decir verdad en ocasiones con criterios de zonificación discutibles, en apariencia más debidos a razones administrativas que naturalísticas.
La vertiente abulense se encuentra dentro del parque Regional de la Sierra de Gredos declarado como tal en 1996. Sin embargo la vertiente salmantina está dentro de la Reserva de la Biosfera de la Sierra de Béjar‐Francia, una de las más extensas de España, así declarada en 2006.
Más curioso y sospechoso, vinculado sin duda a la implantación de la estación de esquí de la Covatilla, es el espacio Natural de Candelario, que ¡desde 1992! está a la espera de que se apruebe su Plan de Ordenación de los Recursos Naturales. Como es bien sabido hay un fuerte debate social sobre la pertinencia de esta instalación deportiva y su adecuación a una efectiva protección ambiental de esta parte de la sierra de Béjar Candelario.
Algunas consideraciones y consejos sobre la ruta.
Como es bien sabido una ruta de dos días, por el equipo que obliga a transportar, nos debe hacer extremar la atención sobre el peso. Hemos de ser, por tanto, muy estrictos en no llevar nada innecesario o prescindible.
La comida caliente, sopas para la cena y bebidas del desayuno, la lleva la organización. El resto de alimento hemos de llevarlos de forma individual.
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A pesar del aparente calor del verano hemos de utilizar, pues vamos a dormir por encima de los 2.000m., un saco que nos permita pernoctar con confort con temperaturas cercanas a los 0ºC.
Por supuesto hemos de contar con una colchoneta o plancha de dormir.
Las mochilas han de tener suficiente capacidad; mejor por encima de los 40 litros.
Gafas, gorros de sol, cremas de ídem, son obligatorios…, pero no debemos olvidar que podemos pasar tanto calor como frío en cuanto se levante el viento, se entolde el cielo o bajen un poco las temperaturas…, por lo tanto equipo versátil, variado y a ser posible ligero…
Atención a las rozaduras en los pies con el calor. Es interesante llevar, además de parches, medias o calcetines limpios y buenos para el segundo día.
Es muy conveniente llevar linterna, a ser posible frontal.
La hora de salida será las 8 de la mañana del sábado en el lugar habitual; el transporte se efectuará con coches particulares con cuyos propietarios lo habremos acordado previamente.
La vuelta será al final de la tarde del domingo, pues los traslados en coche y la distancia a Madrid no permitirán volver mucho antes.
Haremos un seguimiento detallado de la previsión meteorológica y solo en el caso de unas condiciones del tiempo claramente desfavorables tomaríamos decisiones que podrían cambiara este plan, de lo que informaríamos puntualmente.
Esperamos que disfrutéis de este nuevo vivac en montaña.
Fernando Santacecilia y Pedro Nicolás