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ENAH| ESCUELA NACIONAL DE ANTROPOLOGA E HISTORIABELTRN VOLANTE
ADRIN ALBERTO
ANTROPOLOGA POLTICADR. ALFONSO BARQUN
SEORAS EN EL PODERA MANERA DE INTRODUCCIN
El papel de primera dama, con algunas excepciones histricas, ha
sido, tradicionalmente y en
apariencia, secundario y protocolario. Se circunscribe a ser el
de acompaante de su marido en
recepciones, giras oficiales y otros eventos sociales. En Mxico,
el papel de la primera dama ha
estado ligado al tabajo de beneficencia y al impulso de ciertos
programas sociales, buscando resaltar
la cara humana del gobierno. Sin embargo el asistencialismo y la
caridad de los grupos dominantes,
representados en primera instancia, por "las seoras en el poder"
son actividades polticas ligadas
directamente a la imagen, no solo de la primera dama, sino
tambin del presidente o gobernador
segn sea el caso. En estas actividades se ha encontrado, por lo
menos en trminos mediticos, una
forma relativamente sencilla de neutralizar ciertos conflictos
sociales.
Actualmente el concepto de primera dama ha perdido popularidad
tras comenzar a ser
cuestionado por mujeres y hombres comprometidos, por lo menos en
el papel, con las luchas de
gnero. Aunque los pases mas tradicionales siguen dando cierto
peso y/o importancia al trabajo de
primera dama, en pases como Ecuador ha sido suprimido por
considerarse sexista y anacrnico y
en Francia la pareja del presidente ha desdeado el papel de
primera dama para mantener su trabajo
como periodista. En Mxico el papel de primera dama mantiene
cierta relevancia y a veces tambin
una buena dosis de protagonismo, como lo fue en su momento, el
caso de Martha Sahagn, quien,
segn algunos opinlogos, era quien tomaba las decisiones de
gobierno.
Ms all de las secciones de sociales, las primeras damas cumplen
un papel en la agenda
poltica de sus maridos, ya que, como mencionan Swarts, Turner y
Tuden (1994:103) "la poltica
siempre implica metas pblicas". Estas metas, aunque
necesariamente tengan implicaciones
econmicas, de poder o de cualquier otra naturaleza nunca pierden
de vista el contexto cultural en
que se inscriben. Como veremos ms adelante, ste moldea y
significa muchas de sus actividades
adems de servir de gua para el arraigo o desarraigo de ciertos
modelos de comportamiento.
El caso de las primeras damas de nuestro pas nos permite
acercarnos a una forma particular
de ejercer el poder, de enviar mensajes al grupo sobre el que se
ejerce y de legitimar las prcticas y
polticas que se proponen verticalemente, "de arriba hacia
abajo". El proceso poltico que se
desarrolla en Mxico con sus particularidades, su normatividad y
su complejo simbolismo
conforman un todo dentro de la estructura total de la sociedad.
Esto permite la articulacin de
ciertos roles y relaciones que, adems de unir a representantes y
representados, confieren
legitimidad, representatividad y permiten mantener cierta
estabilidad y continuidad.
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PODER, POLTICA Y MATRIMONIO
La edicin de septiembre de la revista "Quien" incluy en sus
pginas centrales un artculo sobre la
primera dama y 16 esposas -primeras damas de sus respectivos
estados- de gobernadores actuales
en funciones. La revista, de forma sutil, va guindonos a travs
de las dificultades que sortean "las
esposas de los hombres en el poder", primero para aparecer en la
revista y despus con la
generalidad de sus vidas. Las primeras pistas que nos dan en la
introduccin del artculo respecto a
su importancia dentro de la jerarqua poltica de nuestro pas se
pone de manifiesto cuando nos
indica que ellas son la "cabeza de las causas sociales de los
gobiernos de sus maridos", pero, que
significa esto?
Como ya se mencion con anterioridad las "seoras en el poder"
tienen a su cargo la tarea de
crear una especie de contrapeso asistencialista y humanitario
dentro de la gestin de sus maridos.
Ellas brindan su "apoyo" durante el sexenio presidiendo el DIF
-local o nacional segn sea el caso-
e impulsando algunas polticas pblicas orientadas a los sectores
infantiles y en general a los
sectores de la socidad ms desfavorecidos. Desde la perspectiva
de Swarts, Turner y Tuden
podmos afirmar que ellas brindan "apoyo" porque "contribuyen a
la formulacin y/o
instrumentalizacin de [ciertos] fines polticos" (1994:106).
Estos fines polticos tienen que ver con
la legitimidad de sus maridos y de ellas mismas. Swarts, Turner
y Tuden (1994:106) dicen al
respecto que:
La legitimidad es un tipo de apoyo que deriva no de la fuerza o
de su amenaza sino de los valores
-formulados, influidos y afectados por fines polticos- que
tienen los individuos... La legitimidad deriva
de valores que proceden del establecimiento de una conexin
positiva entre la entidad o el proceso que
tiene legitimidad y tales valores
En ste caso la conexin positiva que se genera entre la
asistencia pblica y ciertos valores
"universales", como la humildad, la solidaridad, la compasin,
etc., permiten que la poblacin
general reconozca en la primera dama a una mujer comprometida y
por consiguiente como
depositaria de los mismos valores que l. El apoyo y la
legitimidad tambin se relacionan con el
poder el cual"se ejerce no como una esfera separada sino como la
cristalizacin de las actividades
modeladas por una cultura que codifica a su manera los
comportamientos humanos" (Abels,
1997:3). Es por esta razn que, en mi opinin, las seoras, sin
excepcin, hablaron de sus familias
como lo primero en sus vidas, incluso sobre la poltica o el
trabajo. El poder no esta separado de la
sociedad sobre la que se ejerce ni de sus normas o codigos
culturales.
Las seoras en el poder son, en primer lugar, mujeres.
Precisamente por eso, an en una
sociedad "igualitaria", tienen un rol asignado al interior de
sus familias por lo cual este debe ser el
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tema fundamental en sus vidas y es claro en todas las
entrevistas que, por lo menos en el papel, as
es. Incluso entre las que tiene estudios y vida profesional es
claro que las ocupaciones del hogar,
"ser el sosten de la familia", "la cabeza del hogar" o cualquier
otra expresin usada por las primeras
damas para reflejar su compromiso familiar, es bsico.
Un aspecto ms a tomar en cuenta dentro de la generalidad del
artculo es el espacio
dedicado a cada primera dama. En general las esposas de los
gobernadores tienen una pgina
mientras la primera dama de Mxico tiene 4 pginas an cuando no
particip en la entrevista. Es
facil en este caso demostrar que la diferencia de espacio tiene
que ver con la "divisin de privilegio
y status, los cuales corresponden a la distribucin de poder y de
autoridad" (Fortes y Evans-
Pritchard, 1979:88). Incluso desde la introduccin se pueden ver
algunas conversaciones ventildas
en las que las esposas de los gobernadores se dicen "hay que
pedirle permiso a Anglica Rivera"
antes que a sus propios maridos. Me parece que lo anterior es
solo un ejemplo de la importancia que
tiene el status derivado del poder, sea ste propio o por
extensin.
ANGLICA RIVERA. LA PRIMERA DAMA
La esposa del presidente Enrique Pea Nieto, Anglica Rivera, es
actriz, en alguna ocasin modelo
y presentadora de televisin. Entre sus principales intereses
nunca pareci estar el de la poltica y
sin embargo, es primera dama. Como esposa del Presidente de
Mxico ha viajado a 22 paises, se ha
reunido, junto a su marido, con los principales jefes de Estado
del mundo, ha disfrutado de algunos
partidos de la seleccin nacional de futbl en el extranjero,
utiliza vestidos de entre 30 y 45 mil
pesos y ha participado en algunos eventos caritativos privados y
de gobierno. Estos y otros datos
interesantes aportados por la revista nos llevan a preguntarnos
si stas conductas son de inters
pblico y si por consiguiente tienen alguna relevancia en trminos
de reproduccin social. La
respuesta obvia es si, pero es correcta?.
El reportaje dedicado a Anglica Rivera arranca hablando de como,
en un evento caritativo
con empresarios y artistas, la primera dama es capaz de conmover
al pblico asistente y recauda 15
millones de pesos en una obra de "caridad" para cuatro
fundaciones de asitencia privada entre las
cuales una le pertenece. No es nada nuevo que las primeras damas
tengas sus propias fundaciones
-por ejemplo "Vamos Mxico"- y tampoco que las usen en su
benefici, la diferencia y el plus que
tiene en este caso es que su fundacin ayuda a personas con la
misma enfermedad que su hermana.
El sindrome de Turner.
Este tipo de actividades tiene menor resonancia en los medios
debido a que, en mi opinin,
se realizan entre un circulo de personas muy cerrado, todas de
un mismo estrato social
independientemente de sus actividades profesionales, todas con
inters en que se conozca su
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actividad filantrpica y todas con deseos de que se mencione pero
no se de mucha importancia al
hecho de que los 15 millones de pesos recaudados se lograron
mediante la subasta de cojines. Albur
aparte, tenemos que considerar que estas divergencias econmicas
tan marcadas son precisamente
las que dan sentido al sistema de clases que permiten mantener
grupos cultural y econmicamente
tan distintos en un sistema poltico nico (Fortes y
Evans-Pritchard, 1979:92).
Otra de las pinceldas polticas que son de llamar la atencin en
la primera dama de nuesto
pas y de las que toma nota la revista es qu ha tenido que hacer
algunos ajustes a su imagen
coincidiendo con la discusin en el congreso del paquete de
reformas y la consiguiente baja
porcentual en la popularidad de su marido. Estos cambios que
incluyen el tamao de la falda, la
sesin fotogrfica con otra revista del corazn y una gira por
Europa aunados al espectaculo que al
respecto se monta en los medios de comunicacin son de gran
utilidad. En primer lugar quitan la
atencin del primer mandatario y los legisladores, todos ellos
inmersos en debates fundamentales
para la vida nacional, y adems, ayudan a trivializar el hecho de
que la primera dama dedique parte
de su tiempo a dar entrevistas a revistas del corazn, a viajar o
a comprar ropa de lujo (Abels,
1997).
La revista tambin cuestiona algunos cambios en la vida
individual de la primera dama; hace
una especie de contraste entre su epoca de actriz, sus exitos en
telenovelas y su actual estado de
"compaera"con bajo perfil. Obviamente esto no ha impedido que
aproveche los beneficios
econmicos que incluyen ser la esposa del presidente pues, como
lo menciona la revista,
acostumbra hacer viajes en familia, comprar ropa de diseador,
acudir a conciertos en Europa, etc.
De esto ltimo se podria argumentar que quiz lo haga con dinero
propio sin embargo en el nivel
moral se cuestiona la actuacin de la primera dama debido a que
se pone en tela de juicio su
compromiso social frente a la vida de lujos que aparenta -y que
muy probablemente tenga-.
Hay muchas ventajas en ser primera dama, hay muchos beneficios
econmicos, y sociales en
ello. Tambin se crean redes que la vinculan con grupos
hegemnicos a travs del matrimonio o de
la alianza poltica, mediante las cuales, se afianzan en el grupo
de poder trazando nuevas fronteras
polticas. De esta forma se sienta un presedente que permite
normalizar el hecho de que una actriz
-as en tono despectivo- adquiera tal relevancia poltica y por
consiguiente se articulen agrupaciones
polticas y lites del entretenimiento creando nuevos smbolos, los
cuales, objetivan roles y
relaciones que generan estabilidad y continuidad.
La prxima pareja presidencial podra estar hecha bajo la misma
formula: un candidato
joven y bien parecido -digamos Manuel Velasco- y una esposa
salida de la pantalla de televisin
-Anah-. Creo que es as como se contruye la teatralidad poltica y
se modifican, o mejor dicho se
amoldan, los diversos grupos en el poder para serguir
manteniendo su legitimidad y el poder que les
permite tener control al margen de nuestra voluntad.
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LA PRIMERA DAMA DE COAHUILA
Alma Carolina Viggiano, esposa de Rubn Moreira y primera dama de
Coahuila es una mujer con
estudios de maestra en gobernanza y comuicacin poltica, lo cual,
nos hace suponer que no
desconoce el medio y que a diferencia de la primera dama si
tiene inters en los temas polticos. En
un sentido su posicin es la misma: esposa primero, madre y
acompaante de su marido en eventos
polticos pero con una ligera diferencia. Su nivel de estudios le
permite tener un trabajo
"justificado" en el servicio pblico como directora del Consejo
Nacional de Fomento Educativo de
la SEP, lo cual, la obliga a vivir la mayor parte del tiempo en
el Distrito Federal.
Para la primera dama de Coahuila resulta fundamental la
negociacin al interior de su
familia y su publicacin en este tipo de revista. As un acto que
pareca haberse desarrollado solo al
interior de su familia se vuelve pblico y en algun sentido
ejemplar en el conjunto de la vida social.
Una mujer debe poder desarrollarse profesionalmente sin que esto
afecte sus relaciones de pareja y
familiares. De esta forma se pone en accin el mecanismo que
permite sustituir ciertos smbolos o
referntes culturales obsoletos por otros nuevos y mejor
articulados tanto con la ideolgia del
igualitarismo como con las relaciones econmicas emanadas del
sistema capitalista.
La seora Viggiano tiene algunos logros importantes durante la
gestin de su marido en los
temas que le competen: entrega de becas, impulso a la generacin
de leyes de asistencia social en
su estado y la creacin de una nueva institucin pblica: La
procuradoria para nios, nias y la
familia. En est punto no podra aventurar la afirmacin de que
todas las primeras damas tengan
poder, sin embargo, si creo que el cargo como tal si lo tiene ya
que, como explica Cohen (1979:39)El poder es concebido como la
capacidad para influenciar la conducta de otros o influenciar
el
control sobre las acciones valoradas...El poder es segmentario,
es decir, no puede ser totalmente
contenido dentro de las relaciones de autoridad...
Por lo cual, y segn su actuacin en las tareas pblicas que
realicen, estas mujeres pueden ir
ganando cada vez mas poder mientras se mantengan dentro de las
relaciones de autoridad operantes,
es decir, dentro de la estructura de la sociedad. Aunque en
Mxico el caso mas sonado -El de Marta
Sahagn- haya sido tambin un fracaso -por circunstancias muy
particulares- debemos recordar
otras primeras damas del mundo que, gracias al poder que
acumularon y la legitimidad que
pudieron obtener las llevaron a ser presidentes -como en el caso
argentino- o a ocupar puestos de
gran envergadura -como el caso de Hilary Clinton-.
En conclusin, el puesto de primera dama no goza de la
legitimidad emanada de la eleccin
popular pero si puede crear la suya a partir de su intervencin
en asuntos pblicos, y, aunque en
apariencia no tiene poder directo si tiene el que se asocia a su
marido. En mi opinin esa es la
importancia de tener una primera dama interesada en la poltica y
no solo una actriz.
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BIBLIOGRAFIA
Abels M.
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en Revista
Internacional de Ciencias Sociales, # 153, UNESCO.
Barquin, A.
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culturales en torno al
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Rural
Cohen. A.
(1979). "Antropologa poltica: el anlisis del simbolismo en las
relaciones de poder, en
Jos Llobera (comp.) Antropologa poltica. Barcelona,
Anagrama.
Fortes, M. y Evans-Pritchard, E. E.
(1979). Sistemas polticos africanos, en: Jos Llobera (comp.).
Antropologa poltica.
Barcelona, Anagrama.
Swarts,M., Turner, V., y Tuden, A.
(1994). Antropologia Poltca: Una introduccin, en: Alteridades.
Ao IV, num 8
*Sitios en internet:
http://es.wikipedia.org/wiki/Primera_dama
http://www.abc.es/20120607/estilo-gente/abci-efecto-trierwieler-201206071206.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Marta_Sahag%C3%BAn
http://es.wikipedia.org/wiki/Hillary_Clinton
*Consultados el 17 de octubre de 2014
