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EN MOVIMIENTO 8 Marzo 2011. Despierta Mujer Mujer que llevas luz en tu interior, un día quisieron volverte sombras jugando a considerarte una piltrafa. Él, como señor feudal te hizo esclava de sus rencores y broncas que descarga en tu piel de mujer enamorada. Sola, en tu silencioso dolor lloras, malherida y callada. Anda tú , que tienes incuestionables derechos denuncia al malvado que te daña, toma tu coraje, eres digna, respeta tu cuerpo y alma y a salvo del malvado , quedarás con tu energía. Angelical mujer, que de tentación te acusaron desde el antiguo testamento y siempre sospechada de ser un ser sin alma. Destruye la tradición que considera, que eres un trapo a disposición de tu señor y amo. Soy la luz de aquella niña tímida, que halló una piedra, y pulió su existencia STELLA MARIS TABORO, Poeta de Argentina. 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Historia y porvenir Alianza Mujer ha querido realizar el presente suple- mento en home- naje a las madres, esposas, novias, hermanas, hijas, abuelas, bisabue- las y tatarabuelas; trabajadoras, em- presarias, estu- diantes y desem- pleadas; del cam- po y de la ciudad; del Viejo y del Nuevo Continen- tes; de todos los credos y partidos. ¡A LA MUJER! En especial a la mujer dominica- na, digna de un mejor porvenir, de vivir en un mejor país. Sirva el contenido de este suplemen- to de EN MOVI- MIENTO, instru- mento de Alianza País, a esclarecer tanto el origen de este día especial como a darnos claridad sobre las grandes tareas en pro de la libera- ción de la mujer y de toda la Huma- nidad.

Suplemento En Movimiento

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Suplemento En Movimiento dedicado al día Internacional de la Mujer.

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Page 1: Suplemento En Movimiento

EN MOVIMIENTO 8 Marzo 2011.

Despierta Mujer Mujer que llevas luz en tu interior, un día quisieron volverte sombras jugando a considerarte una piltrafa. Él, como señor feudal te hizo esclava de sus rencores y broncas que descarga en tu piel de mujer enamorada. Sola, en tu silencioso dolor lloras, malherida y callada. Anda tú , que tienes incuestionables derechos denuncia al malvado que te daña,

toma tu coraje, eres digna, respeta tu cuerpo y alma y a salvo del malvado , quedarás con tu energía. Angelical mujer, que de tentación te acusaron desde el antiguo testamento y siempre sospechada de ser un ser sin alma. Destruye la tradición que considera, que eres un trapo a disposición de tu señor y amo. Soy la luz de aquella niña tímida, que halló una piedra, y pulió su existencia STELLA MARIS TABORO, Poeta de Argentina.

8 de marzo, Día Internacional de la Mujer

Historia y porvenir Alianza Mujer ha

querido realizar el presente suple-

mento en home-

naje a las madres,

esposas, novias, hermanas, hijas,

abuelas, bisabue-

las y tatarabuelas; trabajadoras, em-

presarias, estu-

diantes y desem-pleadas; del cam-

po y de la ciudad;

del Viejo y del

Nuevo Continen-tes; de todos los

credos y partidos.

¡A LA MUJER! En especial a la

mujer dominica-

na, digna de un mejor porvenir, de

vivir en un mejor

país.

Sirva el contenido

de este suplemen-to de EN MOVI-

MIENTO, instru-

mento de Alianza

País, a esclarecer tanto el origen de

este día especial

como a darnos claridad sobre las

grandes tareas en

pro de la libera-ción de la mujer y

de toda la Huma-

nidad.

Page 2: Suplemento En Movimiento

Página 2

Empoderamiento de

la mujer y políticas

públicas

Venecia Pineda

El fenómeno de la Globalización ha sido responsable en gran me-dida de que hoy por hoy nuestras sociedades se mantengan en un

constante cambio, así como tam-bién redefinición de sus pro-blemáticas y realidades. Todo esto se traduce, como una consecuencia lógica, en que la misión vital del Centro de Solida-ridad para el Desarrollo de la Mu-

jer, CEMUJER, sea aunar esfuer-zos para el establecimiento de los derechos de las mujeres en cuanto su condición de ser huma-no social y productivo. Porque, no podríamos hablar de empoderamiento de la mujer, co-mo nuestro articulo indica, sin que la mujer se considera una persona con deberes y derechos, y es el objetivo principal de dicho Centro, el acompañar a estas mu-jeres en ese auto-reconocimiento, por lo que la clara visión de quie-

nes integran esta institución es la de convertirse en un medio, más que en un fin en si mismo. Es fa-cilitar a las mujeres de los secto-res populares, en su generalidad, la opción de poder discernir por ellas mismas en base al conoci-miento de “con que cuentan”. Este enfoque es el de entender que las mujeres tienen igual dere-cho que los hombres, pero, no solo quedarse en esa afirmación, sino también trabajar para que estas alcen su voz en los espacios

políticos, sociales, comunitarios y al interior de la familia, convir-tiéndose este empoderamiento teórico en un empoderamiento real. Durante el proceso de desempe-ño de años de acompañamiento en las áreas de educación-cultura, producción, organización, muchas de las mujeres empieza a re-

flexionar sobre su realidad como algo ajeno, tímidas; hemos podi-do observar gratamente en un tiempo posterior su fortalecimien-to, al punto en que ellas descu-

bren su poder y sus necesidades, y por tanto se dan cuenta de los beneficios por los que tienen que luchar, entre otras podríamos mencionar las políticas públicas con equidad.

Es así como ellas descubren, des-de su lugar que, “El Estado tiene una función reguladora en la so-ciedad y se ocupa, entre otras cosas, de la distribución del ingre-so y de la equidad. La manera en que éste actúa es por medio de políticas públicas que se pueden entender como programas de ac-ción del gobierno en un determi-

nado sector”. Puede decirse que las mujeres de las asociaciones y federaciones, hoy están conscientes del papel del Estado para la priorización de los recursos y por tanto la urgen-cia de mantener y aumentar las organizaciones con clara visión del derecho de sus familias a te-ner los servicios de alimentación, salud, oportunidades laborales, educación, centros de atención para las niñas y niños, recreación, deportes, acceso a actividades

artísticas y culturales en general, en síntesis derechos como ciuda-danas de un país que se define democrático. Así mismo las mujeres ejecutivas y técnicas de CEMUJER, que vie-nen acompañando a estas muje-res entienden, uniendo su voz con Judit Astelarra, que “La igualdad de oportunidades es el punto de partida, necesario, sin el cual no

se puede abordar otros cambios en el sistema de género” Este gran reto que hemos expre-sado, no es posible garantizarlo sin una organización fortalecida,

es por esto que por mandato de la Asamblea, este equipo incluido la Junta Directiva se ha avocado revisar para identificar las fortale-zas y debilidades, así como las metodologías y enfoque que han perdido vigencia, para el FORTA-LECIMIENTO INSTITUCIONAL, el mismo ha significado un proceso de reflexión y revisión de metas, objetivos, propósitos, desempe-ños y otros aspectos propios de una actualización organizacional que busca buenos resultados en

una sociedad cambiante.

Tomado de http://www.cimacnoticias.com/site/Centro-de Documentación.37402.0.html Nueva Iden-

tidad Tomado de http://www.mediterraneas.org/

article.php3?id_article=269, Judith Astela-

rra en su documento Políticas de género

en la Unión Europea y algunos apuntes

sobre América Latina

HERNANDEZ, Ángela. La escritura como Opción Ética. Pág.188

La foto muestra a un grupo de mujeres de Alianza País

(responsable de este suplemen-to), al momento de realizar una ofrenda floral en el Alatar de la

Patria. Alianza Mujer es una pro-puesta que, dentro del proyecto general Alianza País, asume la

lucha por reivindicar políticamen-te la mujer dominicana, a partir su particular condición que la

hace doblemente víctima de una sistema social injusto.

Alianza Mujer, una pro-

puesta política

Page 3: Suplemento En Movimiento

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Precedentes y hechos a propósito del al Día Inter-nacional de la Mujer

Rosa Suarez de Cáffaro y Rosi-

na Rodríguez

1907 • Obreras textiles desfilan por las calles de Nueva York con carteles que reclaman mejores condiciones de tra-bajo y derecho al voto. La policía reprime a las mani-festantes. Fue la primera manifestación de estas tra-bajadoras que tres años más tarde formarán su pro-pio sindicato. 1908 • En Chicago, el 3 de mayo, las feministas socialistas realizan una jornada en el teatro Garrick para hacer campaña por el sufragio femenino y contra la escla-vitud sexual. Es el primer Día de la Mujer. 1909 • En Nueva York, el Comité Nacional de la Mujer del Partido Socialista Nortea-mericano, recomienda a todas sus secciones, esta-blecer en el último domingo de febrero, una jornada a favor del sufragio femenino bajo la denominación de Women´s Day. 1910 • En Copenhague se realiza la II Conferencia Internacio-nal de Mujeres Socialistas donde las delegadas del Partido Socialista Nortea-mericano, Lena Morrow Le-wis y May Wood Simons, proponen establecer un Día Internacional de la Mujer. Esta iniciativa es apoyada por Clara Zetkin. La resolu-ción final indica que si-guiendo el ejemplo de las camaradas norteamerica-nas, se dedicará un día es-pecial a las mujeres para

promover el sufragio, entre otras reivindicaciones. En Estados Unidos se siguió celebrando el Women’s Day, el último domingo del mes de febrero, hasta 1914. 1911 • El primer Día Internacio-nal de la Mujer tiene lugar el 19 de marzo en Alema-nia, Austria, Dinamarca y Suiza, conmemorando un levantamiento ocurrido en Prusia en esa fecha. Las demandas fueron: derecho a voto, igualdad de oportu-nidades para ejercer cargos públicos y acceso al trabajo

remunerado. 1913 • El 17 de febrero (2 de marzo en el calendario occi-dental), las mujeres rusas celebran, por primera vez, el Día Internacional de la Mujer bajo la denominación de Día Internacional de las obreras. Se produce una fuerte represión por parte de la policía zarista y algu-nas de las organizadoras son deportadas. 1914 • Tienen lugar diversos ac-tos en Alemania, Suecia, y Francia. En el primer país, la actividad se centró en jornadas de protestas con-tra la guerra, el militarismo y el derecho al sufragio. 1915 • En Oslo, un gran contin-gente de mujeres sale a las calles el 8 de marzo para repudiar la Guerra Mundial. 1917 • En plena guerra, las mu-

jeres de San Petersburgo, contrariando las órdenes de las dirigencias de los parti-dos, realizan una manifes-tación pidiendo pan y el regreso de los combatien-tes. • En adelante, el 8 de mar-zo queda instituido como Día Internacional de la Mu-jer Comunista y se cele-brará con gran despliegue en todos los países de la órbita comunista, especial-mente durante la década de 1920, pero sin el agregado final. En occidente, los par-tidos comunistas serán quienes convoquen a esta

celebración. 1930 • Mujeres sindicalistas uruguayas realizan ac-tividades el 8 de marzo para enviar ayuda a los republicanos españoles. 1931 • En Cuba, a propuesta de las activistas Panchi-ta Batet y Josefina Ma-dera, tiene lugar la ce-lebración del primer Día Internacional de la Mu-jer. • En México aparece la

convocatoria “8 de marzo. Día Internacional de la mu-jer trabajadora. Las muje-res en el frente de lucha del proletariado”. 1934 • La Agrupación Cultural Femenina de Venezuela ce-lebra, por primera vez, el Día Internacional de la Mu-jer y da a conocer un “Mensaje a la Mujer Vene-zolana”, para denunciar la situación de las prisioneras políticas. 1935 • Mujeres del Partido Nacio-nal Revolucionario, PNR (hoy PRI), y del Partido Co-munista de México celebran conjuntamente el 8 de mar-zo. 1936 • El Movimiento Pro Eman-cipación de la Mujer Chilena (MEMCH), realiza un home-naje por el Día Internacio-nal de la Mujer. 1944

• Venezuela. Primera cele-bración del 8 de marzo. El Congreso Nacional aprueba la ley del sufragio femeni-no. • Durante un acto por el Día Internacional de la Mujer, diversas organizaciones de mujeres chilenas acuerdan convocar a un congreso unitario que dará origen a la Federación Chilena de Instituciones Femeninas (FECHIF), bajo la dirección de la escritora y pedagoga Amanda Labarca. 1945 • En Inglaterra, en el Día Internacional de la Mujer, bajo la presidencia de Lady Megan Lloyd George, dele-gadas de veinte países del mundo se reúnen en el Al-bert Hall de Londres, para aprobar el proyecto de Car-ta de la Mujer que será pre-sentada más tarde en la Conferencia de las Naciones Unidas en San Francisco. 1946 • La Unión Femenina de Uruguay asume la respon-sabilidad de organizar las actividades del 8 de marzo. 1956 • En Ecuador se realiza la I Conferencia de la Mujer Trabajadora, donde las par-ticipantes exigen igual sala-rio por igual trabajo. 1964

Con motivo del 8 de mar-zo, se difunde el “Llamamiento a la Mujer Mexicana” para crear una organización unitaria de mujeres. FUENTES

NASH, Mary y TAVERA, Susan-na:

Experiencias desiguales: Con-flictos sociales y respuestas

colectivas (Siglo XIX) Madrid, 1995, Ed. Síntesis, p.

58 Articulo en página de Inter-

net Gaby Cevasco** Feminismo en

el Peru PUBLICACIONES ISIS INTER-

NACIONAL, Ana Maria Portugal,

Mujeres de Hoy.

Page 4: Suplemento En Movimiento

Página 4

El Día Internacional de la Mujer

Antecedentes históricos Rosina Rodríguez

La desigualdad de las mujeres

es una preocupación que se remonta a la antigua Grecia. Se

dice que fueron los sofistas los primeros en hacer plantea-

mientos al respecto. Recorde-mos que las mujeres en esa

sociedad ten-ían la condi-

ción de los esclavos y los

niños, es decir no eran ciuda-

danas. Esta desigualdad

práctica se afirmaba en

los mitos, que presentaban dos proyectos de ser humano car-

gados de significados diferen-

tes. Un ejemplo es el mito de Pan-

dora de Hesíodo (siglo VII u VIII ac). Hesiodo narra que

Pandora fue moldeada por Hefesto de una mezcla de tie-

rra y agua, elementos contra-rios al fuego, y que harán de

ella un ser de sexualidad ines-table, cínica y voluble. El fuego

es la razón, la inteligencia, la capacidad de discernir. Cuando

Prometeo entrega el fuego a la raza humana le da el don para

aprender todas las ciencias. En la Odisea, Homero va a pre-

sentar a Ulises como el perso-naje racional e inteligente, y a

Penélope como la mujer obe-diente que espera incansable el

regreso de su señor. El ideal femenino para los griegos es la

mujer que se ocupa del hogar y

facilita la vida al varón para

que se dedique a la política. Aristóteles va a legitimar esta

doble mirada del hombre y de la mujer cuando señala que las

mujeres son naturaleza y los hombres cultura.

Así, a lo largo de la historia occidental, los pensadores van

a continuar dando significados diferenciados a estos dos pro-

yectos de ser humano. En la ilustración, Rousseau va a decir

que por “naturaleza” el hombre pertenece al mundo exterior

público, y la mujer al mundo interior privado. Es decir, el

hombre pertenece al mundo de la producción, de la política,

mientras que la mujer al mun-

do del hogar, de la crianza de

los hijos. Y señala que la edu-cación de las mujeres debe

estar en función de los hom-bres.

Hegel sostendrá que el destino de las mujeres es la familia y el

destino de los varones es el

Estado. Schopenhauer escribirá

que lo femenino es una estra-tegia de la naturaleza para

reproducir el ser. Kierkegaard va a decir “que la mujer no

tiene vida propia” y solo por medio del hombre va a ser

realmente libre. Frente a este tipo de pensa-

miento van a surgir pensado-ras/es que cuestionarán la rea-

lidad patriarcal y el pensamien-to que la sustenta. En 1405,

Christine de Pisán criticará el discurso de la inferioridad de

las mujeres en “La ciudad de las damas”. En 1673, el

filósofo cartesiano Poulain

de la Barre publicará Sobre

la igualdad de los sexos, considerada la primera

obra que explícitamente fundamenta la demanda de

la igualdad sexual. En 1791, Olympe de Gouges

morirá en la guillotina por transgredir las leyes de la

naturaleza al proclamar la “Declaración de los dere-

chos de la mujer y la ciudada-na”. En 1792, Mary Wollstone-

craft redactará la célebre Vindi-cación de los derechos de la

mujer. Paulatinamente, las mujeres

pasarán de la queja a la de-manda de sus derechos. Y de

una acción individual a una

acción colectiva, de manera que sus reclamos se integrarán

al debate público. Así, la reivin-dicación de las mujeres se con-

vertirá en una cuestión política.

Para el siglo XIX, el feminismo

aparecerá como un movimiento social de carácter internacional.

La Revolución Francesa en el 1789 y las demás revoluciones

liberal-burguesas de esa época plantearon como objetivo cen-

tral la consecución de la igual-dad jurídica y de las libertades

y derechos políticos. Pronto surgió la gran contradic-

ción que marcó la lucha del primer feminismo: las liberta-

des, los derechos y la igualdad jurídica que habían sido las

grandes conquistas de las revo-luciones liberales no afectaron

a la mujer. Los "Derechos del

Hombre y del Ciudadano" que

proclamaba la revolución fran-cesa se referían en exclusiva al

"hombre" no al conjunto de los

seres humanos.

Primer Día Internacional de La Mujer.

El primer Día Internacional de la Mujer fue organizado en los

Estados Unidos el último día de

febrero de 1908. Ese día las

organizaciones de mujeres so-cialistas llamaron a desarrollar

enormes manifestaciones públi-cas para luchar por el derecho

de la mujer al voto y por sus derechos políticos y económi-

cos. En 1909, en fecha similar, 2,000 personas asistieron a

una demostración para celebrar el Día de la Mujer en Manhat-

tan, Nueva York. En 1910, las feministas y las socialistas de

todo el país se unieron a la celebración de este día de mo-

vilización popular.

La Segunda Conferencia de

Mujeres Socialistas que tuvo lugar en Copenhague, Dina-

marca, el 27 de agosto de 1910 estableció el 8 de marzo como

Día Internacional de la Mujer. A esta conferencia asistieron más

de 100 delegadas de 17 países representando sindicatos, parti-

dos socialistas y organizaciones de trabajadoras. Las represen-

tantes de los Estados Unidos llevaban como objetivo propo-

ner el establecimiento de un

día internacional de la mujer.

Al final, la propuesta fue pre-sentada por Clara Zetkin y Kat-

hy Duncker (miembros del Par-tido Socialista Alemán). La pro-

puesta señalaba: "En unión organizaciones de clase,

partidos políticos y sindica-tos proletarios en cada país,

las mujeres socialistas del mundo celebrarán cada año

un Día de la Mujer. Su obje-tivo principal será obtener

el derecho a voto de la mu-jer. Esta demanda debe ser

levantada dentro del con-texto global de los asuntos

concernientes a las mujeres

de acuerdo a los principios socialistas. El Día de la Mu-

jer debe tener un carácter

internacional y deber ser preparado cuidadosamen-

te." Interesantemente, mientras las

organizaciones socialistas im-pulsaban la noción de la con-

fraternidad internacional de los

trabajadores, la noción de que

las mujeres se organizaran políticamente fue motivo de

gran controversia dentro de un movimiento controlado por

hombres. El primer Día Internacional de

la Mujer fue organizado en los Estados Unidos el último día de

febrero de 1908. Ese día las organizaciones de mujeres so-

cialistas llamaron a desarrollar enormes manifestaciones públi-

cas para luchar por el derecho de la mujer al voto y por sus

derechos políticos y económi-cos. En 1909, en fecha similar,

2,000 personas asistieron a

una demostración para celebrar

el Día de la Mujer en Manhat-tan, Nueva York. En 1910, las

feministas y las socialistas de todo el país se unieron a la

celebración de este día de mo-vilización popular.

La Segunda Conferencia de Mujeres Socialistas que tuvo

lugar en Copenhague, Dina-marca, el 27 de agosto de 1910

estableció el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer. A

esta conferencia asistieron más de 100 delegadas de 17 países

representando sindicatos, parti-dos socialistas y organizaciones

de trabajadoras. Las represen-tantes de los Estados Unidos

llevaban como objetivo propo-

ner el establecimiento de un día internacional de la mujer.

Al final, la propuesta fue pre-sentada por Clara Zetkin y Kat-

hy Duncker (miembros del Par-

tido Socialista Alemán). La pro-

puesta señalaba: "En unión organizaciones de clase,

partidos políticos y sindica-tos proletarios en cada país,

las mujeres socialistas del mundo celebrarán cada año

un Día de la Mujer. Su obje-tivo principal será obtener

el derecho a voto de la mu-jer. Esta demanda debe ser

levantada dentro del con-texto global de los asuntos

concernientes a las mujeres de acuerdo a los principios

socialistas. El Día de la Mu-jer debe tener un carácter

internacional y deber ser

preparado cuidadosamen-

te." (Sigue en la 6)

Page 5: Suplemento En Movimiento

Página 5

Esta edición especial de EN MOVIMIENTO es coordinado por Luis Ulloa Morel y Rosina Rodríguez. Tel. 809-238-5409. /

Colaboraciones a: [email protected]

Zetkin, Clara

(1857-1933) Política feminista alemana, creadora del Día Internacio-nal de la Mujer (8 de mar-zo). Zetkin (de soltera ape-llidada Eissner) nació en

Wiedenau (Sajonia) el 5 de ju-lio de 1857. Mientras estudia-ba para maestra en Leipzig, se casó con un estu-diante ru-so, Osip

Zetkin, e ingresó en el Par-tido Socialdemócrata en 1881, poco antes de que fuera prohibido por el go-bierno de Otto von Bis-marck. Después de pasar ocho años exiliada en Suiza, regresó a Alemania cuando se levantó la prohibición, en 1890, para organizar la sec-ción femenina del partido. En 1907 ayudó a organizar la primera conferencia in-ternacional para mujeres, y en 1910, durante la confe-rencia de mujeres socialis-tas celebrada en Copen-hague, propuso la resolu-ción que convirtió al 8 de marzo en el Día Internacio-nal de la Mujer. A partir de 1914, año en que Alemania entró en la I Guerra Mundial, Zetkin co-laboró con su amiga Rosa Luxemburgo en actividades para detener la guerra, se unió a los espartaquistas y fue encarcelada en varias ocasiones. En 1918 se con-virtió en miembro del pri-mer Comité Central del Par-tido Comunista, y lo repre-sentó en el Reichstag desde

1920 hasta 1932, aprove-chando su última interven-ción para hacer un llama-miento a la unidad contra el auge de los nacionalsocia-listas (nazis). Cuando éstos alcanzaron el poder en 1933, Clara Zetkin se exilió a la Unión Soviética, donde murió poco después.

Tristán, Flora (1803

-1844)

Autora y activista francesa que escribe en su lengua natal sobre Perú; y es tam-bién recordada por ser la abuela del pintor Paul Gau-guin. Hija de una dama francesa y del aristócrata peruano Mariano Tristán y Moscoso, quien no la reconoció legalmen-te, nació en París. Esta condi-ción de bastarda le impidió recobrar los bienes pertenecientes a su padre, por lo que se vio obligada a contraer apresuradamente un matrimonio de conve-niencia; esta unión se disol-vió años más tarde, a causa de los celos crónicos y ma-los tratos del esposo. En 1833, visitó Perú con el fin de reclamar su herencia paterna y esclarecer todo lo relacionado con su situación familiar, empresa que se vio frustrada por las cons-tantes negativas de su tío paterno Juan Pío. De regre-so a Francia, emprendió una campaña a favor de la emancipación de la mujer, los derechos de los trabaja-dores y contra la pena de muerte. En 1840, publicó la Unión obrera, en donde cla-

ma por la necesidad de los trabajadores de organizarse y aboga por su "unidad uni-versal". Karl Marx, refirién-dose a ella, dijo que era "una precursora de altos ideales nobles". Peregrinaciones de una pa-ria (París, 1833-1834; tra-ducida al español en 1946) presenta, con un auténtico sabor romántico, sus impre-siones durante su viaje a Lima y Arequipa, y muestra su identificación con las costumbres propias de am-bas regiones.

Stone, Lucy (1818-

1893)

Nacida en West Brookfield, Massachussets, en 1918. Trabajó como profesora en la Sociedad Americana en contra de la Esclavitud. En sus clases abogó tanto con-tra la esclavitud como a favor de los derechos de la mujer. Fue la responsable de unir al movimiento a Susan B. Anthony. Al casarse en 1855 con Henry B. Blackwell, activo militante del movimiento en contra de la esclavitud, am-bos prometieron tener de-rechos absolutamente iguales en su matrimonio. En protesta contra las leyes discrimina-torias, Stone man-tuvo su apellido en contra de la costumbre anglosa-jona de cambiarlo por el de marido. En 1869 formó la Asociación Americana por el Sufragio de la Mujer (American Woman Suffrage Associa-tion), menos militante que

la Asociación Nacional por el Sufragio de la Mujer (National Woman Suffrage Association) de Elizabeth Candy Stanton y Susan B. Anthony. Su organización sólo hizo campaña por la consecución del voto femenino, no ocupándose de otras situaciones dis-criminatorias que pudiera sufrir la mujer.

Roussel, Nelly

(1878-1922)

Librepensadora, anarquista y feminista francesa. Militó por la difusión de las ideas neomaltusianas, favorables

al uso de la anticoncep-tivos, y contra la ley france-sa de 1920 que prohib-ía el con-trol de la natalidad y su propa-

ganda. Oradora de talento, dio conferencias por toda Francia exaltando la mater-nidad consciente y atacando el machismo de los hom-bres, incluidos el de muchos militantes de izquierdas. Reclamó la independencia completa para las mujeres, fundada en unas nuevas relaciones entre ambos sexos. Entre sus escritos destaca Palabras de comba-te y esperanza (1919).

Nelken, Margarita

(1896-1968)

Aunque nacida en Madrid, al ser hija de judíos alema-nes emigrados a España, no obtuvo la nacionalidad has-ta 1931.

(Sigue en la 6)

Clara Zetkin y Rosa Luxemburgo

Mujeres que han hecho historia

Page 6: Suplemento En Movimiento

Página 6

(Viene de la 5) Tras marchar muy joven a Paris y estudiar pintu-ra, música y periodismo,

muy pronto colaboró en periódicos y

revistas es-pecializadas de diversos países. En 1931 ob-

tuvo su acta de diputada

por el Partido Socialista, aunque tuvo que esperar para tomar posesión hasta que le fue concedi-da la nacionalidad espa-ñola. Sobre el voto feme-nino opinaba, como mu-chos otros diputados de su partido, que las muje-res españolas no estaban preparadas para ejercer libremente el voto. Volvió a ser elegida dipu-tada en 1933 y 1936. Al

estallar la guerra colabo-raba con el Partido Co-munista y con sus orga-nizaciones afines, for-

mando parte del Comité de Auxilio Femenino y del Comité Nacional de Mujeres Antifascistas. Con la finalización de la guerra emigró a México. Entre sus principales

obras destacan: La mu-jer en las Cortes Consti-tuyentes (1931) y La condición social de la mujer en España.

Salome Ureña (1850-1897) Nacida de padres cultos, Nicolas Ureña y Gregoria Díaz y León. Desde niña leía mucho y se aprendía lo que leía. Sus padres le inculcaron conocimien-

tos, cultura y el camino de la sabiduría. En el año 1880 se casó con Francis-

co Henríquez y Carvajal

que también era un hombre muy notable y

culto. Procrearon cuatro hijos: Francisco, Pedro, Max y Camila. En el 1881 con las enseñanzas del insigne educador puerto-rriqueño Eugenio María de Hostos fundó el Insti-

tuto de Señoritas, mu-chas mucha-chas se edu-caron y se prepararon intelectual-

mente allí. Salomé tam-bién se de-dicó a la poesía. Llegó a ser una de las mejores poetisas que ha dado el país. En sus escritos siempre expresaba mu-cho amor por su país, su profundo patriotismo y amor a la libertad. Sa-lomé fue mujer fuerte, siempre en lucha contra la adversidad, ella ins-

piró una revolución con su poesía. Murió en el 1897 en la ciudad de Santo Domingo.

Ercilia Pepin (1886 -1939) Nació en Santiago estu-dió en la Escuela de Se-ñoritas de ese pueblo. Desde muy joven em-

pezó a dar clases y en el 1901, cuando tenis 16 años la nombraron Direc-tora de la Escuela de Ni-ñas del poblado de Niba-je. Por su destacada par-

ticipación en la educa-ción en el 1908 la nom-braron como profesora del Colegio Superior de Señoritas de Santiago. Maestra incansable en su tiempo libre preparaba muchachas para ser ma-estras. Ercilia luchó mu-cho por el derecho de las mujeres al estudio y a trabajar fuera del hogar para poder destacarse igual que los hombres.

En sus clases exigía a los alumnos que respetaran el Himno Nacional y la Bandera Dominicana.

(Viene de la 4)

Interesantemente, mientras las organizaciones socialistas im-

pulsaban la noción de la con-fraternidad internacional de los

trabajadores, la noción de que las mujeres se organizaran

políticamente fue motivo de gran controversia dentro de

un movimiento controlado por hombres.

¿Porqué se escogió el día 8 de marzo para este objeti-

vo? Los antecedentes históricos

para tal opción no se consi-guen fácilmente. Sin embargo,

se atribuyen dos hechos im-portantes como motivo de ins-

piración para escoger esa fe-cha. Ambos eventos ocurrieron

en la ciudad de Nueva York. El primero fue una gran mar-

cha de trabajadoras textiles en el año 1857. Miles de mujeres

marcharon sobre los barrios adinerados de Nueva York en

protesta por las miserables

condiciones de las trabajado-

ras. El segundo, ocurrió en 1908.

Ese año 40,000 costureras in-

dustriales de grandes factorías

se declararon en huelga de-mandando el derecho de unirse

a los sindicatos, mejores sala-rios, una jornada de trabajo

menos larga, entrenamiento

vocacional y el rechazo al tra-

bajo infantil. Durante la huelga, 129 trabajadoras murieron

quemadas en un incendio en la fábrica Cotton Textile Factory,

en Washington Square, Nueva York. Los dueños de la fábrica

habían encerrado a las trabaja-doras para forzarlas a perma-

necer en el trabajo y no unirse

a la huelga.

"En Europa, el primer Día In-ternacional de la Mujer se ce-

lebró el 19 de marzo de 1911,

en Alemania, Austria y Dina-

marca. Las alemanas escogie-ron esta fecha porque en esa

fecha en 1848 el Rey de Prusia, amenazado con un alzamiento

armado, prometió una serie de reformas, incluyendo una in-

cumplida promesa de entregar el derecho a voto para las

mujeres. Para organizar dicha celebración en 1911 se repar-

tieron un millón de volantes en Alemania. Alejandra Kolon-

tai, la revolucionaria y femi-nista rusa, ayudó a la organi-

zación del evento, y escribió: "La manifestación excedió

todas nuestras expectati-vas. Alemania y Austria

eran un furioso mar de mu-jeres. Las mujeres se reun-

ían en todas partes, hasta en los pequeños pueblos y

villas, los centros de reu-nión estaban tan repletos

que hasta tuvieron que pe-dirle a los trabajadores va-

rones que asistieron que le

cedan su lugar a las muje-

res."

Como podemos apreciar, han

habido dos ramas de las luchas de mujeres:

· Una que se concentraba en la explotación industrial

femenina, · Y otra concentrada en la

obtención de derechos civiles para las mujeres, en particular

el derecho al voto. Las socialistas trataron de unir

ambas luchas. Sin embargo, hubo un sector de mujeres de

la clase media y alta que sólo se concentraron en la lucha por

el voto, desasociándose con la lucha de clases en el contexto

de las mujeres. Por ello, el 8 de marzo es re-

cordar al mundo la lucha que han desarrollado las mujeres y

no pocos hombres por acabar con la desigualdad de las muje-

res y hacer posible una socie-dad más justa, en la que todos

y todas tenga las mismas opor-tunidades, las mismas posibili-

dades de alcanzar la felicidad.

Fuente: Isis Internacional, Pu-

blicaciones Internacionales. 2009

Page 7: Suplemento En Movimiento

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La mujer dominicana que nace junto a la República en 1844, entra a la vida repre-sentativa en circunstancias políticas, sociales y econó-micas muy limitadas: se desenvuelve en una nación marcadamente rural e in-serta en un estatus económico con carac-terísticas feudales. La Re-pública Dominica-na fue el resultado de la labor de grupos políticos específicos (los trinitarios, los conservadores), en los que comprometidas, pero escasas mujeres, participa-ron. La colaboración de mujeres como María Trinidad Sánchez (que arriesgaba la estabilidad de su hogar pa-ra planificar conspiraciones pro- independencia) y Con-cepción Bona Hernández (que desde su sumisa posi-ción de mujer, puso un gra-nito de arena con una labor característica de las jóvenes de la época: bordó el escudo de la pri-mera bandera dominicana), pudo parecer a algunos un atrevimiento reprochable; en realidad no, que ellas aceptaran aquellos riesgos era una muestra de que también a su género les afectaba la situación política de la nación y por lo tanto, ellas estaban dispuestas a hacer algo por el cambio social necesario para los dominicanos. Creada la República y reali-zada la Restauración el país se organiza lentamente en

todas sus instancias. En aquellas circunstancias, el papel de la mujer aflora en el área educativa y en las letras. Tal es el caso de Salomé Ureña de Henríquez, quien dirigió el Instituto de Seño-ritas, fundado bajo la orien-tación del maestro Eugenio María de Hostos, quien abiertamente afirmaba que "los hombres deben devol-ver a la mujer el derecho de vivir racionalmente". Las primeras estudiantes de Salomé Ureña, son las que van a conformar el primer magisterio femenino de principios de siglo, donde figuras como Luisa Ucema Pellerano se destacaron. A principios del siglo XX, la mujer empieza a tener una limitada participación, sobre todo en el magisterio y en la vida intelectual. Para entonces, el marco rural aún predomina en la sociedad dominicana, la política está identificada y sostenida por caudillos (civiles y militares), y el rol de la mujer debe ser enten-dido fundamentalmente como hogareño. La República Dominicana alcanza el millón de habi-tantes en 1920, momentos en los que la feministas Ana Emilia Abigail Mejía, Miner-va Bernardino y la poetiza Virginia Elena Ortea sobre-salen en el ambiente social dominicano. En esta década existía un grupo de mujeres interesa-das en obtener derechos civiles y políticos, la mayor-ía eran maestras, (Petronila Gómez por ejemplo). Uno de los pueblos en el que existió un reducido movi-miento feminista, aunque pero con unas ideas muy claras, fue San Pedro de

Macorís. El proyecto con el que las feminis-tas querían lograr sus derechos civiles y políticos choca de frente con el inicio de la dictadu-ra de Rafa-el Leónidas

Trujillo en 1930, cuando la nación dominicana cuenta con un millón de habitan-tes. Inmediatamente la au-tonomía del movimiento feminista va en declive. Las planificaciones cambian, los puntos que les interesaba reivindicar se adaptan con carácter de obligatoriedad a lo que era la agenda del régimen. A Trujillo le intere-saba darle un toque de mo-dernidad al régimen y una forma de lograrlo era incorporan-do a las mujeres, pues eso lo haría ver como un gobernante democráti-co y libe-ral. Cuando el dictador da las prime-ras mues-tras de su estilo de gobernar, las dominicanas sabían que si pertenecían al movimiento feminista, deb-ían tener tendencia trujillis-ta, pues esa era la única forma de apoyar que sus ideas. Eso implicaba, según Neici Zeller, especialista en desa-

rrollo de proyectos de la United States Agency for International Development (Agencia Internacional para el Desarrollo, AID), que si alguna mujer daba una con-ferencia o a hacer alguna demostración, debía expre-sar ante el público asisten-te, su gratitud al presidente Trujillo por sus buenos de-seos hacia las mujeres. Algunas mujeres se retiran del movimiento al darse cuenta de la magnitud de lo que sucede, otras, interesa-das en destacarse política-mente, se quedan en él. Las presiones por los derechos políticos de la mujer y el deseo de darle un tono más dulce a la dictadura, hace que Trujillo les permita me-dir su capacidad de fuerza y convocatoria, por eso, para las elecciones del 1934 y 1938, les permite ejercer un voto simbólico, en cuyas boletas de elección las mu-jeres debieron escribir "yo quiero obtener el derecho al voto". Lo que comprobó Trujillo fue la capacidad organizativa de los grupos feministas, que para ese tiempo estaban apoyados por la Comisión Internacio-nal de Mujeres, cuya sede estaba en Washington, Es-tados Unidos. Durante la dictadura y en el ocaso de la misma, la mujer desempeñó un pa-pel crucial: fueron el apoyo, sostén y motiva-ción para los maridos, hermanos o familiares que combatieron la opre-sión, además de resistir los asesinatos o desapa-riciones de sus familia-res. Connotadas figura del sector femenino que tuvieron participación

(Sigue en la 8)

La mujer dominicana: Breve reseña de su historial de lucha

María Trinidad

Sánchez, heroína nacional

Evangelina Rodríguez, pri-mera médica del país, Tuvo que sobreponerse a infinitas formas de discrimina-ción.

Abigaíl Mejía, escritora y fe-minista domi-nicana.

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(Viene de la 7) activa de la lucha contra Trujillo. Es aquí donde el espacio de las hermanas Mirabal muestra su fuer-za y amplitud. Ellas son

la representación perfec-ta del escudo femenino dominicano con que se encontró el Trujillo en el ocaso de su dictadura. Las negativas de Minerva

Mirabal y el apoyo emo-cional y práctico que ésta recibió de sus hermanas, no solamente ejemplificó el cansancio de una na-ción respecto a una dic-tadura, sino el valiente rechazo que las domini-canas acumularon duran-te aquellos años de opre-sión. El ajusticiamiento del tirano ocurre en 1961, cuando en el país hay tres millones de

habitantes y una socie-dad no tan rural como en 1930. La mujer dominicana co-mienza a insertarse en las diferentes instancias de la sociedad a partir de la revolución de abril del 1965, lo que representó un avance hacia la parti-cipación de la mujer en la vida democrática do-minicana. Este fue un proceso que

se desarrolla y que ad-quiere mayor dimensión en la medida en que hay más libertades y por el hecho de que ya no es el hombre la única fuente de ingresos para la fami-lia. Eso provocó que la mujer se incorporara a la fuerza de trabajo, fenó-meno que no fue exclusi-vamente dominicano, pues en las décadas de los 60 y 70 se operan a

escala mundial profundas transformaciones socia-

les; surgen movimientos políticos, ideológicos, que le asignan a la mujer un papel más activo, dinámico y protagónico en la toma de decisiones, en la participación de la

vida pública y empresa-rial. Luego de la apertura y de que la sociedad do-minicana se inserta de-ntro del sesgo moderno, afloran nuevas profesio-

nes. A las instituciones de estudios superiores no sólo llega un mayor número de mujeres, sino que escogen nuevas ca-rreras, como ingeniería, arquitectura, administra-ción de empresas, dere-cho, medicina, ciencias de la informática, eco-nomía y sociología.

En la década del 70 y el 80, y en todo mo-mento hubo do-minicanas que tra-bajaron y

lucharon por las reivindi-

caciones del género. En la década del 80 surgen más de 30 organizacio-nes de mujeres que des-arrollan actividades en áreas como educación, investigación, cultura, generación de empleos, salud y promoción.

Un lugar destacado han tenido las luchas de la mujer del campo por una vida digna.

Actualidad

La población dominicana

creció demográficamen-te; de los nueve millones

de habitantes que tiene el país, el 52 por ciento es mujer, según el últi-mo censo de población del 1993. Las reivindicaciones que en el campo social, inte-

lectual y político, ha lo-grado la mujer, desde un punto de vista de grupo, gremios sociales, parti-dos políticos y grupos de la sociedad civil, son nu-

merosas.

En las últimas tres déca-das la mujer participó en la vida pública, no de manera restringida, pero si aplacada por el duro escudo del dominicano machista, quien casi por obligatoriedad, tuvo que sensibilizarse y recono-cer la capacidad y el alto nivel intelectual alcanza-

do por la mujer. De cara al siglo 21, tene-mos una sociedad ma-yormente femenina, con una alta participación en la vida pública, privada e intelectual. En la activi-dad electoral, le corres-ponden a la mujer el 33 por ciento de los cargos esto gracias a la resolu-ción legislativa del 8 de marzo del 1993. Median-te esa misma resolución, también se convirtió en ley un proyecto que mo-dificó el artículo cinco de la Ley de Organización Municipal, para que en la boleta electoral munici-

pal de todos los partidos se incluya una mujer en los puestos de síndico o

vice síndico. La destaca-da abogada Aura Celes-te Fernández, reconoce el alto interés de parte de la mujer dominicana, especialmente en esta última década, de tras-

pasar las fronteras del hogar y de lo tradicional para convertirse en un ente productivo. "Este es un factor muy objetivo, - afirma la Dra. Fernández

- pero también hay un componente de subjetivi-dad altísimo. No es lo mismo una mujer que aporta en el hogar (siendo una buena ama de casa o madre de fa-milia) a una mujer que con esos dos componen-tes también aporta una cuota de lo que es el presupuesto familiar, porque puede estar me-jor colocada al interior

del hogar, para fijar y determinar lo que son las propias políticas, de po-der ser tomadas mayor-mente en cuenta por su pareja y ser respetada". La mujer dominicana se desarrolló más al nivel de un sector social, es-pecíficamente el nivel medio (y a un nivel alto de la clase media), a pe-sar de esto, aún hay que trabajar mucho a la mu-

jer del pueblo. Para Aura Celeste Fernández, esto es necesario porque hay un componente de edu-cación en donde la mujer del pueblo "no tiene ac-ceso a la educación for-mal y eso de por sí es una limitante para cual-quier tipo de despertar de conciencia". Fuente: Monografías. com

Historia de la mujer Domi-

nicana, Manuela Lora.

(MODIFICADO).

Hermanas Mirabal

Mamá Tingó, mártir campe-sina