Fue exhibida el domingo en el marco de la XXIV versión del festival Temporales de Puerto Montt

Obra sobre empleadas del retail desnuda la violencia social en que viven los trabajadores chilenos El montaje de la compañía La Vehemencia está basado en la novela “Mano de obra” de la escritora Diamela Eltit y es dirigido por Sebastián Dahm. “Retrata la miseria humana y la sobreexplotación”, señala la actriz Natalia Alfaro. La función fue dedicada María Quilahuilque, una trabajadora de 35 años de un supermercado Unimarc de Puerto Montt que el año pasado se suicidó debido al estrés que le provocó el acoso laboral de parte de sus supervisores. por TATIANA OLIVEROS Y MARCO FAJARDO

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La dura vida de los trabajadores chilenos, sumidos en la violencia social y la sobrevivencia

económica de un modelo de crecimiento empobrecedor, es la trama que desglosa la obra

“Personal”, que la Compañía La Vehemencia presentó el domingo en el Teatro Diego

Rivera, en el marco del festival Temporales de Puerto Montt.

Basada en una novela de Diamela Eltit (“Mano de obra”, de 2002) y bajo la dirección de

Sebastián Dahm, “Personal” retrata la vida de cuatro mujeres que trabajan en un

supermercado, quienes además viven y comparten una vivienda social mínima, lugar

donde se desarrolla la historia.

Estas empleadas sobreviven en el sistema, con la ferocidad de una comunidad unida por el

desamparo, donde los afectos, las lealtades y la solidaridad, como valores del humanismo,

se han perdido.

La función que se realizó el domingo fue lleno total y uno de los momentos más emotivos

fue cuando las actrices le dedicaron la función a María Quilahuilque, una trabajadora de 35

años de un supermercado Unimarc de Puerto Montt que el año pasado se suicidó debido al

estrés que le provocó el acoso laboral de parte de sus supervisores.

El montaje de 75 minutos tiene un elenco conformado por las actrices Natalia Alfaro,

Macarena González, Johana del Campo y María Paz Ruiz. La presentación se enmarca en el

festival de teatro que es organizado por la municipalidad de Puerto Montt, el gobierno

regional Los Lagos y la corporación cultural local, y reúne en sus 24 días de programación

a más de 250 artistas provenientes de Chile, Colombia, Costa Rica, España y Argentina,

con un total de 89 funciones.

U N A P R O T E S T A A N T I S I S T É M I C A

Una de las innovaciones de la compañía fue que, a diferencia de la adaptación de Alfredo

Castro, donde los personajes son hombres, en este montaje todas son mujeres.

“Nos gustó mucho cómo esta retratada la miseria humana, y cómo aborda el tema de la

sobrexplotación de los trabajadores. Nos entusiasmaba mucha la idea de mostrar esto a

través de cuatro mujeres, que a menudo son abusadas en sus trabajos. Quisimos ser las

voces de estas mujeres”, revela Natalia.

“Personal” es una protesta al sistema capitalista, a la explotación de los trabajadores y a la

precariedad, en una muestra del esfuerzo y la lucha constante por sobrevivir en un sistema

crecimiento empobrecedor. Es así como estas cuatro mujeres afectadas por el trabajo

avanzan hacia lo inexorable: la destrucción de sus cuerpos, sus almas y sus relaciones, por

el dolor laboral, que es en el fondo un dolor social.

En esta obra se remarca de forma exagerada la pérdida de un discurso político social que es

remplazado por lo vulgar, el insulto y lo grosero, lo cual va dando toques de humor y aires

a la obra.

Natalia cuenta que trabajaron en la obra los últimos tres años. “Partió como un proyecto de

titulo que posteriormente montamos en Lastarria 90, luego la mostramos acá en Puerto

Montt, esto hace casi tres años. Yo me quedé a vivir acá y decidimos volver a montar la

obra ahora con elenco de local. Lo presentado el domingo es un remontaje que hicimos,

respetando la dirección original de Sebastián Dahm”.

“La obra retrata la vida de cuatro mujeres que trabajan en un supermercado y además

viven juntas, entonces está el tema de la vivienda, porque viven en una vivienda social

mínima, y reciben el sueldo mínimo y además son explotadas laboralmente”, cuenta.

La obra transcurre durante un año y a medida que va pasando la obra se va reflejando la

dureza de esta forma de vida, agrega Natalia. Pero la imagen de las obreras dista de ser

ideal: la obra también cuenta cómo la competencia que impone el neoliberalismo ha hecho

mella en ellas.

“Cuando comienza (la obra) ya vemos el cansancio devastador que les produce el sistema

laboral y terminan pésimo, devastadas. Se retrata la miseria humana en su máxima

expresión, de hecho una de las mujeres se va de la casa porque su objetivo era seguir

ascendiendo en el trabajo y a costa de sus mismas colegas y que además son sus

compañeras de casa, decide irse porque aspira a ser supervisora, no aspira a más”, dice

Natalia.

Para María Paz, este personaje representa lo más duro de este sistema de trabajo. Es “la

explotación del hombre por el hombre, es el individualismo de la misma sociedad reflejado

en la explotación laboral, demuestra el lado más terrible y más oscuro del ser humano,

representado en este personaje que es Pilar, que finalmente las abandona por sus

intereses”, dice. “Las otras tres personajes quedan desoladas ante la traición y finalmente

deciden organizarse nuevamente para dar la pelea”.

L A D E D I C A T O R I A

En cuanto a la dedicatoria a Quilahuilque, surgió cuando en unos de los ensayos uno de los

técnicos les mencionó el caso. “Ella dejó una carta en donde señalaba el por qué de su

decisión, aún siendo madre, y era porque ya no soportó el hostigamiento de sus

supervisores, de hecho hay una parte en la carta donde detalla que era encerrada, era

castigada, era maltratada física y sicológicamente”, indica María Paz.

“Creemos que en esta sociedad frente a la explotación a los trabajadores, la mujer siempre

se va a ver más afectada, en principio por su rol de madre, porque la sociedad tiene

principios patriarcales y machistas, entonces la mujer y en este caso la del sur del Chile se

ve mayormente afectada y se vio reflejado en el caso de María Quilahuilque de 35 años, que

tenía toda una vida por delante, tenía hijos”, agrega.

“Anteriormente en este sector se vio la explotación a las mujeres en las salmoneras, hoy es

el retail, mañana no sabemos qué va a ser”, lamenta. “La explotación ya está naturalizada

dentro del ser humano, por eso el individualismo, la explotación de unos sobre otros, el

querer escalar a costa de otros. Lamentablemente estos casos quedan escondido y nosotros

con este homenaje quisimos recordar a hacer visible a las trabajadoras que son explotadas

diariamente”.

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