10
80 1 INTRODUCCIÓN Si el reinado de Isabel II significa la consolidación del Nuevo Régimen y la creación de un Estado Liberal, bajo un liberalismo doctrinario, censitario o conservador en base a los intereses de la oligarquía, el sexenio revolucionario significa el intento de implantar un liberalismo democrático, y de extender la participación política a las clases medias y populares. Pero este intento de instalar en España el liberalismo democrático y la participación de las clases medias y populares va a fracasar después de seis años de inestabilidad, volviendo el dominio de la oligarquía, que es lo que significa la Restauración. En 1868 asistimos a una crisis económica, social con insurrecciones campesinas y obreras y el deseo de la burguesía baja y obreros de en participar en la política. En ese contexto la oposición de progresistas, demócratas y republicanos habían acordado en el Pacto de Ostende convocar una nueva Asamblea Constituyente y emprender acciones contra la monarquía de Isabel II. 2 LA REVOLUCIÓN DE 1868, “LA GLORIOSA”. El apoyo popular a la revolución de 1868 hizo que adquiriera tintes revolucionarios, puesto que no sólo querían derrocar a la Reina, sino también introducir reformas para modernizar el sistema liberal, hacerlo más democrático (eliminar el sufragio censitario, participar las clases populares, etc.). Los objetivos de la revolución: Lograr el respeto de los derechos ciudadanos. Reconocer la soberanía nacional. Constituir unas Cortes constituyentes, elegidas mediante sufragio universal. Por eso, este movimiento era distinto de los anteriores ya que, además, los protagonistas eran dobles y antagónicos: por un lado, la burguesía, que pretendía acabar con los obstáculos que impedían la modernización del sistema capitalista, y, por otro lado, las clases populares, que querían TEMA 8. EL INTENTO DE REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA: EL SEXENIO REVOLUCIONARIO (1868-1874). 1. Introducción. 2. La revolución de 1868, la “Gloriosa”. 2.1. Triunfo de la revolución. 2.2. El gobierno Provisional y las Juntas Revolucionarias. 3. Del Gobierno Provisional a la Monarquía democrática. 3.1. El periodo constituyente. 3.2. La Constitución de 1869. 3.3. La regencia del General Serrano. 4. El reinado de Amadeo I de Saboya (1871-1873). 5. La I República (1873-1874). 5.1. Hacia la República Federal. 5.2. El giro de la República hacia la derecha. 5.3. Los problemas de la República y su fin. Juan Prim y Prats

TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

  • Upload
    vuthu

  • View
    221

  • Download
    2

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

80

1 INTRODUCCIÓN

Si el reinado de Isabel II significa la consolidación del Nuevo Régimen y la creación de un Estado Liberal, bajo un liberalismo doctrinario, censitario o conservador en base a los intereses de la oligarquía, el sexenio revolucionario significa el intento de implantar un liberalismo democrático, y de extender la participación política a las clases medias y populares.

Pero este intento de instalar en España el liberalismo democrático y la participación de las clases medias y populares va a fracasar después de seis años de inestabilidad, volviendo el dominio de la oligarquía, que es lo que significa la Restauración.

En 1868 asistimos a una crisis económica, social con insurrecciones campesinas y obreras y el deseo de la burguesía baja y obreros de en participar en la política. En ese contexto la oposición de progresistas, demócratas y republicanos habían acordado en el Pacto de Ostende convocar una nueva Asamblea Constituyente y emprender acciones contra la monarquía de Isabel II.

2 LA REVOLUCIÓN DE 1868, “LA GLORIOSA”.

El apoyo popular a la revolución de 1868 hizo que adquiriera tintes revolucionarios, puesto que no sólo querían derrocar a la Reina, sino también introducir reformas para modernizar el sistema liberal, hacerlo más democrático (eliminar el sufragio censitario, participar las clases populares, etc.).

Los objetivos de la revolución:

• Lograr el respeto de los derechos ciudadanos.

• Reconocer la soberanía nacional.

• Constituir unas Cortes constituyentes, elegidas mediante sufragio universal.

Por eso, este movimiento era distinto de los anteriores ya que, además, los protagonistas eran dobles y antagónicos: por un lado, la burguesía, que pretendía acabar con los obstáculos que impedían la modernización del sistema capitalista, y, por otro lado, las clases populares, que querían

TEMA 8. EL INTENTO DE REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA: EL SEXENIO REVOLUCIONARIO (1868-1874). 1. Introducción. 2. La revolución de 1868, la “Gloriosa”. 2.1. Triunfo de la revolución. 2.2. El gobierno Provisional y las Juntas Revolucionarias. 3. Del Gobierno Provisional a la Monarquía democrática. 3.1. El periodo constituyente. 3.2. La Constitución de 1869. 3.3. La regencia del General Serrano. 4. El reinado de Amadeo I de Saboya (1871-1873). 5. La I República (1873-1874). 5.1. Hacia la República Federal. 5.2. El giro de la República hacia la derecha. 5.3. Los problemas de la República y su fin.

Juan Prim y Prats

Page 2: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

81

transformar las estructuras de la propiedad agraria que no se arreglaron con las desamortizaciones.

Así pues, “La Gloriosa” comienza con el típico pronunciamiento militar, apoyado por la burguesía pero, al intervenir activamente el pueblo, se convierte en una auténtica revolución con grandes repercusiones. 2.1. Triunfo de la revolución

La revolución comenzó en Cádiz, cuna del liberalismo español, al pronunciarse el cuerpo de marina el 19 de septiembre de 1868 al mando del almirante Juan Bautista Topete, al grito de “Viva España, con honra”.

Regresa Prim, general progresista de gran prestigio (guerra de Marruecos) que fue elegido jefe del Comité Revolucionario en Ostende, del exilio y se reunió con los sublevados, consiguiendo rápidamente el apoyo de la población de Cádiz, que se hizo dueña de la ciudad. En los días siguientes, con tres fragatas, Prim fue sublevando sucesivamente Málaga, Almería y Cartagena.

En Cádiz se formó la primera Junta Revolucionaria y, a continuación, otra en Sevilla pero, rápidamente, en muchas ciudades españolas se fueron constituyendo otras tantas Juntas Revolucionarias que organizaban el alzamiento y lanzaban

llamamientos al pueblo. Las consignas eran parecidas en todos los lugares: sufragio universal, libertad absoluta de imprenta, abolición de la pena de muerte, abolición de las quintas, supresión del impuesto de consumo y de quintas, elección de Cortes que hicieran una Constitución, etc.

El movimiento se extendió como un reguero de pólvora sin hallar apenas resistencias y el Gobierno y la Corona se encontraron completamente aislados. Desde Madrid envían un ejército (al mando del marqués de Novaliches) para defender a la Reina, pero son derrotados por Serrano en Alcolea.

Juan Bautista Topete y CarballoMANIFIESTO REVOLUCIONARIO.

“Valencianos: sonó por fin la hora de la libertad. Hemos alcanzado la reparación de nuestros agravios, la realización de nuestros deseos y la inauguración de una era que de hoy mas simbolizará la moralidad, la justicia y la dignidad. A impulsos de un movimiento generoso, nacido al calor de las ideas de unión y fraternidad en los corazones verdaderamente liberales, han caído derrumbados en el polvo la injusticia de la opresión, la tiranía de los imbéciles y el reinado de las orgías. Premio al trabajo, igualdad de derechos, justicia en todo y para todo, tal es el lema de nuestra santa revolución, la primera que registrará la historia en sus páginas de oro, como el cimiento más sólido de nuestra generación futura.

¡Cobrad aliento, generosos y esforzados valencianos! La conquista de vuestras libertades ha empezado; pero es preciso dar pronta cima a tan grandiosa obra: en vuestra lealtad, en vuestra cordura, en vuestro acreditado patriotismo, confían hoy más que nunca vuestros conciudadanos para que alleguéis en torno suyo vuestros comunes esfuerzos. ¡Viva la libertad! ¡Viva la soberanía nacional! ¡Abajo los Borbones!”

Valencia, 29 de septiembre de 1868.

Batalla del puente de Alcolea

Page 3: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

82

El Gobierno no vio más salida que dimitir e Isabel se exilia desde San Sebastián a Francia el 29 de septiembre de 1868. 2.2. El Gobierno Provisional y las Juntas Revolucionarias

Las Juntas Revolucionarias surgieron por toda la geografía nacional, que asumieron la dirección de la revuelta y consolidaron el pronunciamiento al transformar el golpe militar en una revolución al armar al pueblo y crear grupos de defensa civil parecidos a la antigua Milicia Nacional (Voluntarios de la Libertad).

Sin embargo, se evidenció rápidamente que existían diversas revoluciones, como es el caso de Madrid, donde llegaron a formarse dos Juntas, una integrada por unionistas y progresistas y otra por demócratas. En cualquier caso, el objetivo esencial, derrocar el gobierno, se había conseguido para progresistas (Prim) y unionistas (Serrano) y quedaban frustradas las aspiraciones de los demócratas y republicanos y, sobre todo, de las masas populares.

Así, en los primeros días de octubre, los firmantes del Pacto de Ostende, sobre todo, progresistas y unionistas, tomaron la dirección del movimiento para formar un Gobierno Provisional, en el que aparecen figuras como Prim, Ruiz Zorrilla y Sagasta. Su primer trabajo fue convencer a las Juntas de que se disolviesen, a cambio de dar satisfacción a sus peticiones e integrar a sus miembros significativos en la administración, y desarmar a la Milicia Nacional que les había dado apoyo, lo que fue tomado por los campesinos andaluces como una maniobra contra la revolución social pretendida, dando lugar a levantamientos. Estaba claro que una cosa era derrocar a los Borbones y otra muy distinta poner en duda la propiedad privada o querer proclamar la República.

3. DEL GOBIERNO PROVISIONAL A LA MONARQUÍA DEMOCRÁTICA

El Gobierno Provisional presidido por Serrano y con Prim como hombre fuerte del Gobierno, convocó Cortes Constituyentes, con triunfo del sector monárquico democrático, lo que parecía significar una cierta estabilidad para afrontar la difícil situación.

Además, se reconocieron inmediatamente la libertad de imprenta, el derecho de reunión y asociación y el sufragio universal; se aprobó la reforma de la enseñanza, la democratización de los ayuntamientos y Diputaciones y la emancipación de los hijos de los esclavos en las colonias.

Pero había demasiados problemas:

• Sociales: derivados de la crisis agrícola y el paro existente, así como la no eliminación de las quintas

(que se mantienen debido a dos guerras: la de Cuba y

LAS AGITACIONES DE OBREROS Y CAMPESINOS.

Las agitaciones del campesinado sin tierras tiene una importancia grande en la dinámica política del siglo XIX. Ya en 1861 tuvo lugar la sublevación de Loja, dirigida por Rafael Pérez del Álamo, quien llegó a reunir a más de diez mil jornaleros que ocuparon fincas y localidades. Otro tanto vino a ocurrir en Montilla (Córdoba), en 1873. En este contexto de “hambre de tierra”, el esfuerzo de la propaganda anarquista encontró un amplio eco. “El alzamiento de Loja, como la huelga general de Barcelona de 1855 no eran acontecimientos esporádicos, ni revueltas de díscolos o manejados por manos arteras. Eran los primeros signos de la participación en la vida nacional de unas clases – obreros, jornaleros agrícolas, campesinos pobres – que hasta entonces no habían contado en el juego político del país. Eran un aldabonazo precursor de la intervención de la clase obrera en los destinos de España”.

Tuñón de Lara, M. y Núñez de Arenas, M.: Historia del movimiento obrero

español, Barcelona, Nova Terra, 1970, p. 83.

Francisco Serrano y Domínguez

Page 4: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

83

la Carlista, que se reinicia con la llegada de Amadeo I). Además, el Impuesto de Consumo se sustituye por otro peor: el de Capitación, impopular e insolidario, pero necesario por la delicada situación de Hacienda.

• Económicos: destacan los enfrentamientos entre el Gobierno (librecambista) y los industriales catalanes (partidarios del proteccionismo).

• Políticos: sobresalen las citadas guerras Carlista y de Cuba, el asesinato de Prim, la escisión del partido Progresista, la consolidación del partido Republicano y la actitud de Amadeo I.

3.1. El Periodo Constituyente

El mayor logro de la Revolución del 68 fue el establecimiento del sufragio universal, con el que se convocaron elecciones a Cortes Constituyentes para redactar la Constitución de 1869. Las elecciones dieron la victoria a la coalición gubernamental.

En este período, el general Serrano fue nombrado regente hasta llegar a un consenso para ocupar la Corona (ya que en los comicios venció la coalición monárquica-demócrata: progresistas, unionistas y demócratas monárquicos). 3.2. La Constitución de 1869

Se puede decir que se trata de la primera constitución española verdaderamente democrática pues, además de reflejar la soberanía popular (era el pueblo quien elegía al monarca y limitaba sus poderes), reconocía derechos fundamentales como el de reunión, asociación e inviolabilidad de correspondencia.

LA CONSTITUCIÓN DEMOCRÁTICA DE 1869. “La Nación Española y en su nombre las Cortes Constituyentes, elegidas por sufragio universal, deseando afianzar la justicia, la libertad y la seguridad, y proveer el bien de cuantos viven en España, decretan y sancionan la siguiente Constitución: Art.1. Son españoles: 1º. Todas las personas nacidas en territorio español. 2º. Los hijos de padre y madre españoles, aunque hayan nacido fuera de España. 3º Los extranjeros que hayan obtenido carta de naturaleza (…). Art. 3. Todo detenido será puesto en libertad o entregado a la autoridad judicial dentro de las veinticuatro horas siguientes al acto de la detención. Toda detención se dejará sin efecto o elevará a prisión dentro de las setenta y dos horas de haber sido entregado el detenido al juez competente (…). Art. 17. Tampoco podrá ser privado ningún español: Del derecho a emitir libremente sus ideas y opiniones, ya de palabra, ya por escrito, valiéndose de la imprenta o de otro procedimiento semejante. Del derecho a reunirse pacíficamente. Del derecho de asociarse para todos los fines de la vida humana que no sean contrarios a la moral pública; y por último, Del derecho a dirigir peticiones individuales o colectivamente a las Cortes, al Rey y a las autoridades (…). Art. 21. La Nación se obliga a mantener el culto y los ministros de la religión católica. El ejercicio público o privado de cualquiera otro culto queda garantizado a todos los extranjeros residentes en España, sin más limitaciones que las reglas universales de la moral y del derecho. Si algunos españoles profesaren otra religión que la católica, es aplicable a los mismos todo lo dispuesto en el párrafo anterior (…). Art. 32. La soberanía reside esencialmente en la Nación, de la cual emanan todos los poderes (…). Art. 34. La potestad de hacer las leyes reside en las Cortes (…). Art. 38. Las Cortes se componen de dos Cuerpos Colegisladores, a saber: Senado y Congreso. Ambos son iguales en facultades, excepto en los casos previstos en la Constitución (…). Art. 60. Los Senadores se elegirán por provincias. Al efecto, cada distrito municipal elegirá por sufragio universal un número de compromisarios igual a la sexta parte de concejales que deban componer el Ayuntamiento (…).

Page 5: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

84

Se establecía también la libertad religiosa, reconociendo la práctica de otras religiones. Así mismo, contemplaba la descentralización estatal. Establecía la monarquía constitucional, con soberanía popular y división de poderes:

• El legislativo era bicameral (Congreso y Senado), elegido por sufragio universal (masculino y directo.

• El poder judicial gozaba de total independencia. Incorporó los Jurados para delitos políticos (para garantizar derechos y libertades) y mantuvo la pena de muerte, aunque limitada a casos concretos.

• El ejecutivo residía en el Rey (era jefe del Estado), pues los ministros gobernaban en su nombre. El monarca podía disolver las Cámaras (sólo una vez en cada legislatura) y sanciona las leyes.

El gobierno local quedaba en manos de los Ayuntamientos democráticos, encargados, además, de la instrucción pública primaria, obligatoria desde 1857.

En resumen, es una Constitución que responde a los principios ideológicos del partido progresista y demócrata. 3.3. La Regencia de Serrano

Según la Constitución, Serrano fue nombrado Regente y Prim Jefe del Gobierno y ministro de Guerra pero lo que buscaban era un monarca que encajara con la Carta Magna, tarea que fue difícil, pues unos renunciaban y otros eran rechazados por las Cortes.

Pero también durante este período se llevó a cabo una intensa labor legislativa para acomodar las leyes a la nueva Constitución: se aprobó un nuevo Código Penal (más humanitario), se legalizó el matrimonio civil, la Ley Orgánica del Poder Judicial y se creó el Registro Civil.

Pero los problemas del gobierno provisional se acumulaban apareciendo sublevaciones campesinas, revueltas obreras, insurrecciones en Cuba y Puerto Rico y las dificultades a la hora de encontrar un rey eran múltiples; finalmente Prim opta por Amadeo de Saboya, perteneciente a unas de las dinastías más prestigiosas de la Europa del momento puesto que consiguió la unificación italiana (1870).

Los compromisarios así elegidos se asociarán a la Diputación provincial respectiva, constituyendo con ella la Junta electoral. Cada una de las Juntas elegirá a pluralidad absoluta de votos a cuatro senadores (…) Art. 65. El Congreso se compondrá de un diputado al menos por cada 40.000 almas de población, elegido con arreglo a la ley electoral. Art. 66. Para ser elegido diputado se requiere ser español, mayor de edad y gozar de todos los derechos civiles (…). DISPOSICIONES TRANSITORIAS. Art. 1. La ley que en virtud de esta Constitución se haga para elegir a la persona del Rey y para resolver las cuestiones a que esta elección diere lugar formará parte de la Constitución (…)”.

Amadeo I de Saboya

Page 6: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

85

4 EL REINADO DE AMADEO DE SABOYA (1871-73)

Amadeo de Saboya, elegido en noviembre de 1870, no empezó bien su reinado puesto que nada más llegar a España se encontró con que su principal valedor, el general Prim, había sido asesinado. Aunque políticamente era correcto y neutral, nadie le apoyaba y los problemas sólo se agudizaban:

. La Iglesia porque, durante la unificación italiana, la casa de Saboya mantuvo una postura anticlerical. Preferían, igual que la aristocracia y parte del ejército, al hijo de Isabel II, Alfonso.

. La nobleza latifundista se le oponía porque los principios democráticos del régimen podían derivar hacia el socialismo y la disolución del orden tradicional (deseaban la vuelta al liberalismo doctrinario que, con el voto censitario, alejase las probabilidades de cualquier revolución).

. La burguesía, sobre todo la catalana, se distanció del régimen descontenta con la política librecambista, retirando incluso el apoyo financiero a Amadeo y optando por Alfonso de Borbón.

. La monarquía democrática fue atacada incluso por las clases populares así como por los demócratas y por los republicanos. Y no digamos por las fuerzas obreras, especialmente anarquistas, agrupadas en la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT).

. El resto de partidos (unionistas, progresistas -que desaparece-, etc.) estaban divididos y Amadeo no fue capaz de agruparlos. La coalición y los gobiernos se desunieron unos tras otros. Práxedes Mateo Sagasta y el General Serrano se suceden en el gobierno, hasta que el estallido de la nueva guerra carlista y los problemas de orden público llevan a Serrano a pedir al rey la suspensión de las garantías constitucionales (libertades). La negativa de Amadeo originó la dimisión de Serrano; sustituido por Ruiz Zorrilla, que ganó las nuevas elecciones con el Partido Radical (nueva facción escindida de los progresistas).

El final del reinado tuvo su origen en la insubordinación de los oficiales de Artillería: Zorrilla presentó un decreto al rey para disolver dicho cuerpo, pero eso conllevaba un doble problema para Amadeo: si firmaba, se enemistaba con los militares; y, si no lo hacía, con los escasos políticos que le eran fieles. De modo que presentó su renuncia en febrero de 1873.

Amadeo I frente al féretro del general Prim

LA RENUNCIA DE AMADEO DE SABOYA. 

“Grande  fue  la  honra  que  merecía  la  Nación  Española eligiéndome para ocupar  su  trono, honra  tanto más por mi apreciada  cuanto  se  ofrecía  rodeada  de  las  dificultades  y peligros que lleva consigo la empresa de gobernar un país tan hondamente perturbado (…). 

Conozco  que me  engaño mi  buen  deseo. Dos  años  ha  que ciño la corona de España y la España vive en constante lucha, viendo cada día más  lejana  la era de paz y ventura, que tan ardientemente anhelo. Si fueren extranjeros los enemigos de su dicha, entonces, al frente de estos soldados, tan valientes como  sufridos,  sería  el  primero  en  combatirlos,  pero  todos los que con la espada, con la pluma, con la palabra, agravan y perpetúan  los  males  de  la  Nación  son  españoles;  todos invocan  el  dulce  nombre  de  la  patria,  todos  pelean  y  se agitan  por  su  bien,  y  entre  el  fragor  del  combate,  entre  el confuso,  atronador  y  contradictorio  clamor  de  los  partidos, entre  tantas  y  tan  opuestas manifestaciones  de  la  opinión pública,  es  imposible  saber  cuál  es  la  verdadera,  y  más imposible aún, hallar el remedio para  tamaños males. Lo he buscado  ávidamente  dentro  de  la  ley  y  no  lo  he  hallado. Fuera  de  la  ley  no  ha  de  buscarlo  quien  ha  prometido observarla. Nadia achacará a flaqueza de ánimo mi resolución (…). 

Estos son, señores diputados,  las razones que me mueven a devolver  a  la Nación  y  en  su nombre  a  vosotros,  la  corona que me ofreció  el  voto nacional, haciendo de  ella  renuncia por mí, por mis hijos  y  sucesores.  Estad  seguros de que,  al desprenderme  de  la  Corona,  no me  desprendo  del  amor  a esta España  tan noble como desgraciada, y de que no  llevo otro pesar que el de no haberme sido posible procurar todo el bien que mi leal corazón para ella apetecía. – AMADEO. 

Palacio de Madrid, 11 de febrero de 1873. 

Page 7: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

86

5 LA I REPÚBLICA (1873-1874)

Tras la marcha de Amadeo de Saboya, Congreso y Senado (en contra de lo que dictaba la Constitución) se constituyeron en Asamblea Nacional y asumieron la soberanía. Este vacío de poder intentó ser cubierto con la proclamación de la I República pero fracasará debido a que las circunstancias políticas (inestabilidad y radicalización progresiva) así se lo impidieron.

Hay, pues, un cambio sociopolítico: por primera vez en la historia de España, el poder civil se impone al Ejército y a la Iglesia. Por otra parte, las clases populares tuvieron cierto protagonismo pero su idea de la República era más social que política (asociada al mito del “reparto” de tierras).

Sin embargo, los republicanos se dividieron entre los que pretendían instituir una República Federal por la vía revolucionaria y los que querían hacerlo por la democrática. Esta lucha acabó por desprestigiarles y destruir el sistema. Además, el peligro de disolución social empujo a la República hacia posturas conservadoras (pues la burguesía estaba asustada: agitación, caos, inseguridad, cantones...).

4.1. Hacia la República Federal

Como decíamos, tras la dimisión de Amadeo, el 11 de febrero de 1873, el Congreso y Senado asumen la soberanía y proclaman la República. Estanislao Figueras fue elegido primer presidente, ayudado por un gabinete de republicanos en coalición.

Pero existía una gran incongruencia: una República bajo una Constitución monárquica. Por eso, urgía convocar Elecciones Constituyentes, que elaboraran una nueva Constitución.

En mayo de 1873 se celebran elecciones a Cortes con el objetivo de elaborar una estructura federal del Estado. Sin embargo, la abstención fue mayoritaria por el retraimiento de los partidos tradicionales (los alfonsinos de Antonio Cánovas del Castillo, constitucionalistas de Sagasta y radicales de Ruiz Zorrilla), el rechazo a la participación política de los anarquistas, e incluso del pueblo (desanimado por la no aplicación de medidas sociales concretas).

Vencen pues los federalistas y, reunidas las Cortes en junio, se proclama la República Federal. Figueras abandona el poder y se nombra presidente a Francisco Pi i Margall.

En este breve período se redacta el proyecto de la Constitución Federal de 1873, precipitada e innovadora: soberanía popular (la 1ª que lo menciona claramente), gran independencia del Poder Judicial, intenta solucionar el problema colonial con la asimilación de Cuba y Puerto Rico como Estados de la nación española y la regulación de otros enclaves coloniales, pretende conformar una estructura territorial integrada por 17 estados federados y presentaba incluso un cuarto poder denominado “poder de relación” (reservaba al presidente de la República las facultades de nombrar al jefe del poder ejecutivo, como si de un monarca constitucional se tratara).

Estanislao Figueras

Francisco Pi i Margall

Page 8: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

87

Pero, en contra de lo que cabría esperar, en lugar de pacificación creció la inestabilidad:

• Los federalistas insisten en sus objetivos y surge el levantamiento cantonal (sobre todo en Cartagena, en el mes de julio, y en otros lugares de la costa mediterránea), que se niega a reprimir Pi i Margall (porque era federalista). Además, los obreros apoyan este movimiento, especialmente el sector anarquista, por lo que se convierte en un problema político-social, con marcado tinte popular y revolucionario.

• No se solucionan los problemas sociales. • Se hizo más intensa la guerra carlista, que se extiende a Cataluña. • En un mes tuvo que formar tres gobiernos

Debido al cariz de la situación por las causas señaladas y ante la necesidad de controlar tan graves problemas se produce un giro del régimen hacia la derecha.

4.2. El giro de la República hacia la derecha.

Renuncia, pues, Pi y Margall; y la única salida que le queda a la República es la de controlar el orden público. Tras la elección de Nicolás Salmerón como presidente el 18 de julio, éste encargó a los generales Pavía y Martínez Campos la pacificación del área andaluza y levantina. Paradójicamente, el ejército que había pretendió marginar se convertía de nuevo en el instrumento de su salvación.

De 1873 a 1874, los cantones fueron cayendo; a la vez que la República perdía atractivo para las clases populares y lo ganaba para los sectores burgueses y financieros, que veían cómo se alejaba el peligro revolucionario. Como consecuencia de esta contradicción entre libertad y autoridad, dimite Salmerón, que se negó a firmar penas de muerte consideradas imprescindibles para mantener el orden.

Se hace cargo de la presidencia Castelar en septiembre; y, con el giro definitivo hacia la derecha, se revistió de poderes extraordinarios que le permitieran suspender las Cortes y recortar las libertades. Esta posición provocó la aparición de dos posturas: por un lado los intransigentes, mayoritarios en las Cortes, que querían que la República se orientara hacia la izquierda; y, por otro, los antiguos radicales, partidarios de estabilizar la situación como única salida del régimen.

Carlos VII a los españoles: “Españoles: la obligación del Rey es morir por su pueblo o salvarle. Doy gracias a dios porque me ha permitido besar la tierra sagrada de mi patria, en que están los sepulcros de mis mayores (…). Yo os lamo a la vez a todos, sin distinción de partidos. Yo os llamo a todos los españoles, que son todos mis hermanos. La  santa  religión  de  nuestros  padres  está  perseguida,  los  buenos  oprimidos,  honrada  la  inmoralidad,  triunfante  la anarquía,  la hacienda pública entrada a saco, el crédito perdido,  la propiedad amenazada,  la  industria exánime (…). Si siguen así las cosas, el pobre pueblo queda sin pan y la España sin honra. Nuestros padres no hubieran sufrido tanto; seamos dignos de nuestros padres. Por nuestro Dios, por nuestra Patria y por vuestro Rey, levantaos, españoles. Ya sabéis quién soy y también lo que quiero. ¿Qué he de querer sino la grandeza y la felicidad de España? Quiero salvarla con vuestra ayuda, hoy que está perdida, y con vuestra ayuda fundar un Gobierno justo, un Gobierno digno de los grandes tiempos de nuestros padres y conforme también con los tiempos en que vivimos (…)”. 

Nicolás Salmerón

Page 9: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

88

4.3. Los problemas de la República que la llevan a su fin.

Las sublevaciones obreras y campesinas (sobre todo en Andalucía que pretendían resolver el problema de la estructura de la propiedad de la tierra) se agudizan, al igual que las guerras carlistas (en sus zonas tradicionales) y los conflictos coloniales. Ante esta situación, la oposición conservadora, dirigida por Cánovas, aprovechará para conspirar en pro de la vuelta de la monarquía borbónica.

La realidad es que se suceden los desórdenes callejeros, las manifestaciones, los escándalos políticos, los altercados anticlericales y los pronunciamientos militares.

Por otra parte, la inestabilidad política progresiva es manifiesta y prueba de ello es la sucesión de cuatro presidentes de la república en menos de un año: Figueras, Pi y Margall, Salmerón y Castelar. Ello, en parte es producto de la grave división interna, coexistiendo tres tendencias: los republicanos federalistas benevolentes (partidarios del control del orden público y dirigidos por Pi y Margall), los republicanos federalistas intransigentes (muy

radicalizados y liderados por José María de Orense) y los republicanos unitarios (más conservadores, centralistas y dirigidos por Castelar).

Precisamente, el cantonalismo es la expresión de la radicalización del federalismo y del movimiento obrero. Consistió en la declaración de Estado independiente (a la manera de las polis griegas) de diversas ciudades españolas. Se trataba de la República desde abajo, que luego se unirían en la federación española. Estos cantones estaban alentados por los anarquistas, socialistas y los republicanos intransigentes. Los cantones más importantes fueron los de Cádiz, Algeciras, Tarifa, Sevilla, Loja, Salamanca, Granada y sobre todo Cartagena pero fueron rápidamente reprimidos por el ejército salvo el de Cartagena, que resistió hasta el final de la República.

En este clima de inestabilidad y radicalización el general Pavía disuelve las Cortes, Cánovas acelera la Restauración y Martínez Campos da un golpe de Estado en Sagunto. El primer intento de liberalismo democrático puro había fracasado pues se abre paso la Restauración, que no sólo significa una vuelta de los Borbones, sino también un dominio del liberalismo dogmático y la preponderancia de la oligarquía.

Emilio Castelar

Page 10: TEMA 8 SEXENIO REVOLUCIONARIO · PDF filepor Serrano en Alcolea. Juan Bautista Topete y Carballo MANIFIESTO REVOLUCIONARIO. “Valencianos: sonó por fin la hora

Historia de España Curso 2010/2011

Prof.: Juan A. Molina

89

COMPOSICIÓN HISTÓRICA

Realice una composición histórica sobre el sexenio revolucionario (1868-1874) a partir del análisis de los documentos que se le proporcionan.