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TEOLOGÍA SISTEMÁTICA - ministerioyave.tkministerioyave.tk/seminarios/downloads/SistematicaTomoI.pdf · teologÍa sistematica en dos volumenes volumen primero traducciÓn e condensaciÓn

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  • TEOLOGA SISTEMTICA

    VOLUME PRIMEIRO

  • CHARLES HODGE, D.D.

    TEOLOGA SISTEMATICA

    EN DOS VOLUMENES

    VOLUMEN PRIMERO

    TRADUCCIN E CONDENSACIN

    Santiago Escuain

    NOTA: Los textos [entre corchetes] son palabras aadidas porel traductor para dar claridad bien aadiendo antecedentes inexistentesen el presente texto debido a la condensacin, bien por otras causas.Tambin ocasionalmente traducciones de trminos latinos o de otraslenguas que el autor da sin traducir. Excepto cuando se d mencin expresa de ello, las citas bblicashan sido tomadas de la versin Reina- Valera, Revisin 1977.

  • Editorial CLIEGalvani 11308224 TERRASSA (Barcelona) EspaaE-mail: [email protected]: http://www.clie.es

    TEOLOGA SISTEMTICA - Vol. IEdicin en rsticaCharles Hodge

    1991 por Editorial CLIE para esta edicin en castellano

    Ninguna parte de este libra puede serreproducida sin el permiso escrito de los editores, con la excepcin de breves citas.

    Depsito Legal: SE-2412-2003 (I)ISBN 84-8267-354-8 Impresin: PublidisaPrinted in Spain

    Clasifquese: 4 TEOLOGA: Teologa sistemticaC.T.C. 01-01-0004-01Referencia: 22.45.51

  • INDICE

    INTRODUCCIN

    CAPTULO I

    SOBRE EL MTODO

    1. La teologa, una ciencia 212. El mtodo teolgico 233. El mtodo especulativo 244. El mtodo mstico 255. El mtodo inductivo 27

    El telogo debe ser gobernado por las mismas reglas que el hombre de ciencia.6. Las Escrituras conenen todos los datos de la teologa. 31

    CAPTULO II

    TEOLOGA

    1. Su naturaleza 35Definiciones de teologaTeologa natural2. Los hechos de la naturaleza revelan a Dios 37 Argumento escritural para la Teologa Natural3. La insuficiencia de la Teologa Natural 404. La teologa cristiana 45Teologa Propia, Antropofoga, Soteriologa, Escatologa, Eclesiologa

  • CAPTULO III

    RACIONALISMO

    1. Significado y uso del trmino 472. Racionalismo desta 48 3. La segunda forma dei racionalismo: Su naturaleza, refutacin e historia 524. Dogmatismo 545. El papel propio de la razn en cuestiones de religin 57

    La razn es necesaria para la recepcin de una Revelacin.- Diferencia entre Conocimiento y Entendimiento.- La razn debe juzgar acerca de la credibilidad deuna Revelacin.- Lo Imposible no puede ser credo.- La razn debe juzgar acerca delas Evidencias de una Revelacin

    6. Relacin entre Ia filosofa y la Revelacin 62[7. Papel de los sentidos en los asuntos de la fe] 65

    CAPTULO IV

    MISTICISMO

    1. Significado del trmino 67Uso filosfico del trminoEl misticismo conocido en la Historia de Ia Iglesia

    [2. El misticismo en Ia Iglesia Primitiva 71El montanismo.- El llamado Dionisio.- EI Neoplatonismo]

    3. EI misticismo durante Ia Edad Media 71[Caractersticas generales de aquel perodo.- Diferentes clases de telogos medievales.-Tendencias pantestas del misticismo.-] Msticos evanglicos

    4. EI misticismo durarite y despus de Ia Reforma. 72El efecto de la Reforma en la mente popular.- [Msticos entre los Reformadores.-Schwenkfeld]

    [5. El Quietismo 73Carcter general.- Lderes del movimiento.- Madame Guyon, Arzobispo Feneln]

    [6. Los Ququeros o Amigo 73Su origen e historia primera.- Sus doctrinas.

    Las doctrinas de los Amigos Ortodoxos.Amigos Heterodoxos.- Los puntos de vista de Barclay]

    7. Objeciones a Ia Teora Mstica 74No tiene fundamentos en la Escritura.-Es contraria a los hechos de la experiencia.-Es generadora de mal

  • CAPTULO V

    LA DOCTRINA CATOLICORROMANAACERCA DE LA REGLA DE LA FE

    1. Declaracin de la doctrina 812. La doctrina Catlica Romana acerca de las Escrituras 813. La Tradicin 83Doctrina Tridentina4. EI oficio de la Iglesia como Maestra 86Los rganos de la Iglesia para la enseanza.- La teora Galicana.- La teora Ultramontana5. Examen de las doctrinas romanistas 876. Examen de la doctrina de la Iglesia de Roma acerca de la Tradicin 87Diferencia entre Tradicin y la Analoga de la Fe.- Consentimiento Comn.Tradicin yDesarrollo.- El estado de la cuestin-- Argumentos en contra de la doctrina de la Tradicin7. El oficio de la Iglesia como Maestra 100

    Doctrina romanista acerca de esta cuestin.- La definicin romanista de la Infalibilidadse basa en una errnea teora acerca de la Iglesia.- La doctrina de la Infalibilidad se basaen una falsa presuposicin de la perpetuidad del apostolado.- Los modernos prelados noson apstoles.- La Infalibilidad se basa en una falsa interpretacin de la promesa deCristo.- Est contradicha por los hechos.- EI reconocimiento de una Iglcsia Infalible esincompatible con la Iibertad civil o religiosa

    CAPTULO VI

    LA REGLA PROTESTANTE DE LA FE

    1. Enunciado de la doctrina 117El Canon

    2. Las Escrituras, dadas por Inspiracin Divina 119La naturaleza de la Inspiracin.- La Inspiracin es sobrenatural.- Distincin entreRevelacin e Inspiracin.- Hombres inspirados fueron rganos de Dios.- Prueba de ladoctrina.- Argumento basado en el significado y uso de la palabra Inspiracin.- Basadoen el significado de la palabra Profeta. Basado en las declaraciones de las Escrturas.- LaInspiracin se extiende de manera igual a todas las partes de la Escritura.- Se extiendetanto a las Palabras como a los Pensamientos.- Inspiracin plenaria.- Objecionesconsideradas

    3. Teoras adversas 133La doctrina racionalista.- La teora de Schleiermacher.- Objeciones a esta teora.-Inspiracin en gracia.- Inspiracin parcial.

    4. La Integridad de la Escritura 1405. La perspicuidad de la Escritura.- El derecho al libre examen 1416. Normas de interpretacin 143

  • PARTE I

    TEOLOGA PROPIA

    CAPTULO I

    EL ORIGEN DE LA IDEA DE DIOS

    1. El conocimiento de Dios como cosa innata 147 . .Lo que se entiende por conocimiento innato.- Prueba de que el conocimiento de Dios esinnato 2. El conocimiento de Dios no se debe a un proceso de razonamiento 1543. El conocimiento de Dios no se debe exclusivamente a la Tradicin 1554. Se puede demostrar la existencia de Dios? 156

    CAPTULO II

    TESMO

    1. El argumento ontolgico 159Tal como lo presenta Anselmo.- Descartes.- El doctor Samuel Clarke.Cousin

    2. El argumento cosmolgico 162 .El principio de la Causa Suficiente.- Naturaleza de la causalidad.- La conviccinintuitiva de la necesidad de una causa para cada efecto.- La objecin de Hume alargumento cosmolgico

    3. El argumento teleolgico 170Su naturaleza.- Evidencias de designio en el mundo

    4. Objeciones al argumento teleolgico 173.La negacin de las causas finales.- Objeciones de Hume y Kant

    5. El argumento moral o antropolgico 180Naturaleza del argumento.- Argumento basado en la existencia de la mente.

    Basado en la naturaleza del alma.- Basado en la naturaleza moral del hombre

    CAPTULO III

    TEORAS ANTI-TESTAS

    1. Qu se entiende por Anti-Tesmo.- Atesmo 1872. Politesmo 188

  • 3. Hilozosmo 1894. Materialismo 190 . . .

    La doctrina de Epicuro.- El materialismo en Inglaterra durante el Siglo Diecisiete.-Locke.- Hartley.- Priestley.- El materialismo en Francia durante el Siglo Dieciocho.- EIpositivismo El materialismo cientfico.- Principios conductores Correlacin de fuerzasfsicas y mentales Argumentos en contra del materialismo.- 1. El materIalIsmocontradice los hechos de la consciencia2 Contradice las verdades de la razn .3: Es inconscuente con los hechos de la experiencia4. EI materialismo es ateo5. Invlido el argumento materialista en base de la analogaArgumento directo en contra de la teora de la correlacln de las fuerzas fsicas, vitales ymentales

    5. Pantesmo.- Sus tres formas principales 228 Principios generales del sistemaHistoria del pantesmo Pantesmo brahmnicoEl pantesmo, la religin original de los hindues.- Relacin del pantesmo hindu con elpolitesmo.- Su efecto sobre la religinSu efecto sobre la vida social.El pantesmo griego.- La escuela jnica.- La escuela eleticaLos estoicos.- La doctrina de Platn AristtelesEl pantesmo medieval. Los neoplatnicos.- Juan Escoto Engena.- El moderno pantesmo

    CAPTULO IV

    EL CONOCIMIENTO DE DIOS

    l.Se puede conocer a Dios? 259Estado de la cuestin.- Dios, inconcebible.- Dios, incomprensible.- Nuestroconocimiento de Dios es parcial .Cmo nos formamos la idca de Dios?-- Prueba de que este mtodo es digno deconfianza

    2. Dios no puede ser conocido de manera plena 267 .El argumento de Sir William Hamilton contra los TrascendentalistasLa doctrina de Sir William Hamilton Dios es objeto de la fe, pero no del conocimiento - Diferentes clases de ignorancia.-Prueba de que Sir Willam Hamilton nega que podemos conocer a Dios.- Argumentoscontra su doctrina.- Lo Impensable o Imposible no puede ser un objeto de feObjeciones generales a la teora de HamiltonBasada en una definicin errnea de lo absoluto e infinito.- En una definicin errneade conocimiento.- Necesidad de una Revelacin sobrenatural

  • moral.- La doctrina escritural en cuanto al origenpuede impedir el pecado en un sistema

    7. lnmutabilidad 288

    LA NATURALEZA Y LOS ATRIBUTOS DE DIOS

    CAPTULO V

    1. Definiciones de Dios 2732. Los atributos divinos 273

    La relacin de los atributos con la esencia de Dios.- Los atributos divinos no difierenmeramente en nuestras concepcionesLos atributos divinos no pueden ser resueltos a una mera causalidad.- Difieren envirtualidad

    3. La clasificacin de los atributos divinos 2774. La espiritualidad de Dios 279

    Consecuencias de admitir que Dios es Espritu 5. lnfinitud 282

    La idea de Infintud no es una mera negacin.- El Infinito no es la Totalidad. Lainfinitud de Dios con respecto al espacio

    6. Eternidad 285Doctrina escritural.- La posturas filosfica.- Las modernas perspectivas filosficas

    Declaraciones filosficas.- Los atributos absolutos de Dios no son inconsecuentes con laPersonalidad

    8. Conocimiento 289Su naturaleza.- La posibilidad de conocimiento en Dios impedida en la teora pantesta.-El conocimiento y el poder no deben ser confundidos.- La doctrina de la Escrituraacerca de este extremo.- Las objeciones al conocimiento divino.- Lo real y lo posible.-La Scientia Media.- Origen de la distincin Las objeciones apremiadas por los agustinos.- PrescienciaLa sabidura de Dios

    9. La voluntad de Dios 293Significado del trmino.- La libertad de Ia voluntad divina.- Voluntad decretal ypreceptiva.- Voluntad antecedente y consecuente.- Voluntad absoluta y condicional.- Lavoluntad de Dios como base de la obligacin moral

    10. El poder de Dios 296 .El origen de la idea de poder.- Omnipotencia.- Negacin del poder.- Poder absoluto.-Potentia absoluta y Potentia Ordinata.- No se deben confundir Ia Voluntad y el Poder

    11. La santidad de Dios 299Base sobre la que se niegan atributos morales a Dios

    12. Justicia 300Sentido del trmino.- Justicia en su relacin con el pecado.- La reforma del delincuenteno es el objeto primario del castigo.- La prevencin del crimen no es el objeto primariodel castigo.- Prueba de la doctrina escritural. Concepciones filosficas de la naturalezade la justicia

    13. La bondad de Dios 306La doctrina escritural.- Benevolencia.- Amor.- La existencia del mal. Teoras queinvolucran la negacin del pecado.- El pecado considerado como el medio necesariopara el mayor bien.- La doctrina de que Dios no

    del mal

  • 14. La verdad de Dios 31315. La soberana de Dios 314

    CAPTULO VI

    LA TRINIDAD

    1. Observaciones preliminares 3172. Forma bblica de Ia doctrina 318

    Cul es la forma que adopta.- Prueba escritural de la doctrina.- Carcter progresivo de laRevelacin divina.- La frmula bautismal.- La bendicin apostlica

    3 El perodo de transicin 322Necesidad de una declaracin ms definida de la doctrina.- Conflicto con el error.- Losgnsticos.- Los platonistas.- La doctrina de Orgenes.- EI sabelianismo.- El arrianismo

    4. La doctrina de la Iglesia presentada en el Concilio de Nicea 327Motivos por los que se convoc el Concilio.- Diferencia de opinin entre los miembrosdel Concilio.- Semi-arrianos.- Ortodoxos.- El Concilio de Constantinopla.- El CredoAtanasiano

    [5. Puntos decididos por los Concilios de Nicea y de Constantinopla 332l.Contra los sabelianos.- 2. Contra los arrianos y los semiarrianos.- 3. Las relacionesmutuas de las Personas de la Trinidad]

    [6. Examen de la Doctrina Nicena 332Subordinacin.- Generacin eterna.- Filiacin eternaObjeciones apremiadas contra la doctrina de la Filiacin eternaRelacin del Espritu con las otras Personas de la Trinidad]

    [7. Concepciones filosficas de la doctrina de Ia Trinidad] 332

    CAPTULO VII

    LA DIVINIDAD DE CRISTO

    1. El testimonio deI Antiguo Testamento 333El ProtoevangeIio.- Jehov y el Angel de Jchov.- Evidencia contenida: 1. En el Librode Gnesis; 2. En los otros Iibros histricos del Antiguo Testamento;3. En el libro de los Salmos; 4. En los libros profticos

    2. Las caractersticas generales de la enseanza del Nuevo Testamento acerca de Cristo 3441. El sentido en el que Cristo es llamado Seor2. Cristo es presentado como en Objeto de nuestros afectos religiosos3. Las relaciones que Cristo tiene con Su pueblo y con el mundo.- Su autoridad comoMaestro.- Su control sobre todas las criaturas4. La naturaleza de Sus promesas

  • 5. Su control sobre la naturaleza3. pasajes particulares del Nuevo Testamento que ensean la deidad de Cristo 352

    1. Los escritos de S. Juan-- Juan 1:14.- Otros pasajes en el Evangelio de S.Juan.- EIultimo discurso de nuestro Seor.- Las Epstolas de S. Juan.- El Apocalipsis 2. LasEpstolas de Pablo.- La Epstola a los Romanos.- Corintios.- Glatas.- Efesios.-Filipenses.- Colosenses.- Las epstolas pastorales de S. Pablo.- La Epstola a losHebreos.- Otros escritores sagrados del Nuevo Testamento

    CAPTULO VIII

    EL ESPRITU SANTO

    1. Su Naturaleza 369Su Personalidad.- Prueba de Su Personalidad.- La Deidad del Espritu Santo

    2. El oficio del Espritu Santo.- 1. En Ia naturaleza; 2. En la obra de la Redencin.- ElRevelador de toda verdad divina.- Aplica a los hombres los beneficios de la Redencinde Cristo 375

    3. Historia de la doctrina con respecto al Espritu Santo 378

    CAPTULO IX

    LOS DECRETOS DE DIOS

    1. La naturaleza de los decretos divinos 381La Gloria de Dios es la causa final de sus decretos.- Los decretos se pueden reduca a unpropsito.- Los decretos de Dios son inmutables.- Son libres.- Son ciertamenteeficaces.- Se relacionan con todos los acontecimientos.- Las acciones libres estnpreordenadas

    2. Objeciones a la doctrina de los decretos divinos 3901. La preordenacin inconsecuente con la libre agencia.- 2. La preordenacin del pecadoinconsecuente con la santidad.- 3. La doctrina de los decretos destruye toda motivacinpara el esfuerzo.- 4. Su fatalismo

    CAPTULO X

    LACREACIN

    1. Diferentes teorias sobre el origen del universo 3951. La teoria puramente fsica.- 2. Las teoras que presuponen inteligencia en la mismanaturaleza.- 3. La doctrina escritural

    2. Creacin mediata e inmediata 3963. Prueba de Ia doctrina de una Creacin ex nhilo. 3974. Objeciones a Ia doctrina de una Creacin ex nhilo. 398

  • 5. El designio de la Creacin 399Doctrina escritural en cuanto al designio de la Creacin

    6. El relato mosaico de Ia Creacin 400Objeciones al relato mosaico de la Creacin. La Geologa y Ia Biblia

    CAPTULO XI

    LA PROVIDENCIA

    1. Preservacin 403La naturaleza de Ia preservacin.- La preservacin no es una creacin continuada.-Objeciones a la doctrina de una creacin continua.- Doctrina escritural sobre estacuestin

    2. Gobiemo 407Enunciado de la doctrina y Prueba de la doctrina1. La evidencia de la operacin de Ia Mente en todo lugar2. En base de nuestra naturaleza religiosa3. En base de predicciones y promesas4. En base de la experienciaLa doctrina escrituralLa Biblia ensea--1. La providencia de Dios sobre la naturaleza; 2. Sobre el mundoanimal; 3. Sobre las naciones; 4. Sobre los individuos, sobre las acciones libres de loshombres; 5. La providencia de Dios con respecto al pecado

    [3. Teoras diferentes acerca del gobiemo divino 4151. La teora desta de la relacin de Dios con el mundo.2. La teora de la total dependencia3. La doctrina de que no hay eficiencia ms que en la mente4. Teoria de la armona preestablecida5. La doctrina del ConcursusObservaciones acerca de la doctrina del Concursus]

    4. Los principios involucrados en la doctrina escritural de la Providencia 415La Providencia de Dios sobre el universo material.- 1. El mundo externo tiene unaexistencia objetiva real.- 2. La materia es activa.- Las leyes de la naturaleza.- Launiformidad de las leyes de la naturaleza, congruente con la doctrina de la ProvidenciaLa Providencia de Dios en relacin con los procesos vitalesLa Providencia de Dios sobre criaturas racionales Distincin entre la eficienciaprovidencial de Dios y las influencias del Espritu Santo

  • 1. Empleo de la palabra 423Definicin de un milagro.- Objeciones a esta definicinRespuesta a las anteriores objecionesLa doctrina de una Ley SuperiorObjeciones a la doctrina de una Ley Superior2. La posibilidad de los milagros 432 3. Puede un milagro ser conocido como tal? 434 Milagros mentirosos.- La insuficiencia dei testimonio humano 4. El valor de los milagros como prucba de la Revelacin divina 440

    CAPITULO XIII

    LOS NGELES

    1. Su naturaleza 4432. Su estado 445 3. Sus misiones 445 4. Los ngeles malos 448

    El poder y la agencia de los espritus malos.- Posesiones demonacas

    PARTE II

    ANTROPOLOGA

    CAPTULO I

    EL ORIGEN DEL HOMBRE

    1. La doctrina EscrituraI 4552. Teoras antiescriturarias 456

    La doctrina pagana de la generacin espontnea.- La moderna doctrina de Ia generacinespontnea.Teoras del desarrollo.- Lamarck.- Los vestigios de Ia creacin.- Darwin. Observacionessobre la teora darwinista.- Es atea.- Una mera hiptesis.

    CAPTULO XII

    LOS MILAGROS

  • Teoras acerca del Universo.- Darwin.- J. J. Murphy.- Owen.- La doctrina comn.-Dificultades admitidas para la doctrina darwinista.- Esterildad de los hbridos.-Distribucin geogrfica.

    Pangnesis3 La antigedad del hombre 469

    Habitaciones lacustres.- Restos humanos fsiles.- Huesos humanos hallados con los deanimales extinguidos.- Instrumentos de slex.- Razas humanas.Monumentos antiguos.

    CAPTULO II

    LA NATURALEZA DEL HOMBRE

    1. La doctrina Escritural 475 Verdades asumidas en las Escrituras,- Relacin deI alma con el cuerpo. Dualismorealista.

    2. Tricotoma 480 Antiescritural.- Pasajes dudosos.3. Realismo 482

    Su carcter general.- Humanidad genrica.- Objeciones al realismo.- En base de laconsciencia.- Contrario a las Escrituras.- Inconsistente con la doctrina de la Trinidad yde la Persona de Cristo.]

    CAPTULO III

    EL ORIGEN DEL ALMA

    1. Teora de la Preexistencia 483 2. Traducianismo 4853. Creacionismo 487

    Argumentos en base de Ia naturaleza del alma4. Observaciones finales 488

    CAPTULO IV

    UNIDAD DE LA RAZA HUMANA

    [ 1. Concepto de Especie 492 Caractersticas generales. - Definiciones]

    [2. Evidencias de Ia identidad de Ias Especies 492 Estructura orgnica.- Fisiologa.- Psicologa]

    [3. Aplicacin de estos crterios al hombre 492 La evidencia cumulativa]

    4. El argumento filolgico y moral 492La hermandad del hombre

  • CAPTULO V

    EL ESTADO ORIGINAL DEL HOMBRE

    1. La doctrina Escritural 4952. EI hombre creado a Ia imagen de Dios 4973. Rectitud original 4984. EI dominio sobre las criaturas 499[5. La doctrina de los Romanistas] 5006. La doctrina Pelagiana y Racionalista 500

    Las disposiciones inmanentes pueden tener un carcter moral.- Juicio general de loshombres acerca de esta cuestin.- Argumento en base de la Escritura,y de la Fe de laIglesia.- EI carcter de las disposiciones depende de su naturaleza. Objecionesconsideradas.- Los Pelagianos ensean que el hombre fue creado mortal.

    CAPTULO VI

    EL PACTO DE OBRAS

    1. Dios hizo un pacto con Adn 5012. La promesa 5023. La condicin 5034. La pena 5035. Las partes 5056. La perpetuidad del pacto 505

    CAPTULO VII

    LA CADA

    Relato escritural.- El rbol de vida.- El rbol del conocimiento.- La serpiente.- Latentacin.- El efecto deI primer pecado 507

    CAPTULO VIII

    EL PECADO

    1. La naturaleza de la cuestin 5132. Teoras filosficas 515

    Limitacin del ser.- La teora de Leibnitz.- Antagonismo.- La teora de Schleiermacher.-La teora sensorial.- El egosmo Teoras teolgicas.

  • 3 La doctrina de la Iglesia Primitiva 5284 La teoria Pelagiana 530

    Argumentos en contra de la misma5 La doctrina de Agustn 534

    Elemento filosfico de su doctrina.- Por qu hizo del pecado una negacin.- El elementomoral de su doctrina

    6 La doctrina de la Iglesia de Roma 539Diversidad de doctrina en la Iglesia Latina.- Semi-Pelagianos.- Anselmo, Abelardo -Toms de Aquino.- Los Escotistas

    La doctrina Tridentina acerca del Pecado OriginalLa verdadera doctrina de la Iglesia de Roma7 La doctrina Protestante acerca del pecado 551

    El pecado es un mal especfico.- Tiene relacin con la ley.- Esta ley es la ley de Dios.-Extensin de las demandas de la Ley.- El pecado no esta limitado a acciones de lavoluntad.- Consiste en la ausencia de conformidad a la Ley de Dios.- Incluye culpa ycontaminacin

    8. Los efectos del pecado de Adn sobre su posteridad 5619. Imputacin inmediata 562

    Enunciado de la doctrina.- Base de la imputacin del pecado de Adn.- Adn, cabezafederal de su raza.- El principio representativo en las Escrituras.- Este principio,involucrado en otras doctrinas.- Argumento en base de Romanos 5:12-21.- En base delconsentimiento general.- Objeciones

    10 Imputacin mediata 574Origen de la doctrina en la Iglesia Francesa.- Sostenida por telogos en otras Iglesias.-Objeciones.- Teora de la propagacin

    11. Preexistencia 58112 Teora Realista.

    La teora del Presidente Edwards.- La teora Realista propia.- Objeciones13 El pecado original 593

    Su naturaleza.- Prueba de la doctrina.- En base de la universalidad del pecado.En basede la total pecaminosidad del hombre.- En base de la incorregible naturaleza delpecado.- En base de sus tempranas manifestaciones.- Evasiones de los anterioresargumentos.- Declaraciones de la Escritura.- Argumento en base de la necesidad de laRedencin.- En base de la necesidad de la Regeneracin.- En base del bautismo deprvulos.- En base de la universalidad de la muerte.- En base del comn consentimentode los cristianos. Objeciones.- Los hombres, responsables slo de sus actos voluntarios.Inconsistente con la justicia de Dios.- Hace de Dios el autor del pecado. Inconsistentecon el libre albedro.

    14 El asiento del pecado original 618El alma entera es su asiento

    15 Incapacidad 621La doctrina tal como es enunciada en los Smbolos Protestantes.- La naturaleza de laincapacidad del pecadorLa incapacidad no es una mera ausencia de inclinacin.- Surge de la carencia dediscernimiento Escritural.- Slo es declarada con referencia a las Cosas del Espritu.-En qu sentido es natural.- En qu sentido es moral.- Objeciones a la popular distincinentre capacidad natural y moral

    Prueba de la doctrina

  • El argumento negativo.- Involucrado en la doctrina del Pecado Original. Argumento enbase de la necesidad de la influencia del Espritu.- En base de la experiencia.-Objeciones.- Inconsecuente con la obligacin moral. Destruye los motivos para elesfuerzo.- Alienta a la negligencia

    CAPTULO IX

    LIBRE ALBEDRO

    Libre Albedro 6411. Diferentes teorias de la voluntad 643

    Necesidad.- Contingencia.- Certidumbre2. Definicin de los trminos 651

    Voluntad.- Motivo.- Causa.- Libertad.- Libertad y capacidad.Autodeterminacin yautodeterminacin de Ia voluntad

    3. La certidumbre, consistente con la libertad 658Puntos de acuerdo.- Argumentos en favor de Ia doctrina de la certidumbre.- En base delprevio conocimiento de Dios.- En base de la previa ordenacin.- En base de laProvidencia.- En base de las doctrinas de la gracia.- En base de la consciencia.- En basedel carcter moral de las voliciones.- En base de la naturaleza racional del hombre.- Enbase de la doctrina de la causa suficiente.

  • mismo punto.Se han eliminado algunas discusiones histricas que, aunque interesantes, son de poca

    PREFACIO DEL TRADUCTOR

    Es con satisfaccin que he prestado mi grano de arena a la difusin de esta magnaobra de estudio en lengua castellana. Aunque publicada en ingls en 1971, hacepues ya 120 aos, sigue teniendo un fuerte impacto en el mundo de habla inglesa,donde contina actuando como obra formativa, de estudio y referencia, ycontribuyendo a Ia defensa de la fe una vez dada a los santos.

    Hodge combina en esta magna obra la piedad con la erudicin, estudiando consumo esmero las doctrinas bsicas de Ia fe cristiana. El lector seguir la historia deIas doctrinas ms centrales desde el siglo primero, su formulacin bblica, y enmuchos casos su historia a lo largo de los seis primeros concilios y a travs de lasgrandes Confesiones Reformadas.

    Tambin advertir como el autor contrasta Ias doctrinas biblicas con lastendencias racionalistas y filosofistas que, habiendo hecho un gran impacto enAlemania desde el siglo XVIII, dejaron sentir amargos efectos en el siglo XIX yhasta nuestro siglo, dando una aparente justificacin intelectual a la lncredulidad yal atesmo. Hodge estudi dos aos en Alemania, y se familiariz profundamentecon estas escuelas de pensamiento, siguiendo de cerca su desarrollo (conoca bienel alemn, y lea atentamente las principales revistas filosfico/teolgicas de lasdiversas escuelas); trata por ello con conocimiento de causa estas tendenciasdoctrinales, y estudia con rigor sus orgenes, presuposiciones, naturaleza yresultados. Por cuanto la escena teolgica actual en Ia Cristiandad es hija enmuchos aspectos de estas tendencias, el estudioso cristiano har bien en estudiarcuidadosamente esta obra, monumento de la Teologa Reformada.

    La tarea de condensacin, para hacer la obra ms accesible al gran pblicocristiano hispano, ha sido penosa para el mismo traductor. Naturalmente, haejercido su criterio. Pero nada se ha cambiado de la perspectiva del autor. Dehecho, no se ha cambiado el texto, el cual es del mismo Charles Hodge. Se haeliminado material, lo cual est indicado con puntos suspensivos (...) en el cuerpodel texto, por lo que el estudioso podr identificar los cortes en la obra original, siasi lo desea. Esta eliminacin de material se ha hecho en el sentido de no alterar lalnea de razonamiento de Hodge. Se han eliminado citas redundantes apoyando un

    relevancia para la situacin actual.

  • La perspectiva escatolgica, postmilenialista, es una de Ias caractersticashistricas de Ia Teologa Reformada, y ser quiz el punto en que muchos lectoresdiscreparn, como honradamente discrepa este mismo traductor. Y las posturasescatolgicas, aunque no afectan la doctrina acerta de Dios, de la Persona deCristo, de Su obra en la cruz, o la aplicacin de Su obra al creyente, si que tienengrandes consecuencias en cuanto a la concepcin de la obra actual de Dios en elmundo y con respecto a la Iglesia y la vocacin de la misma, asi como acerca de lamisin y conducta del cristiano en el mundo. Siendo que estas diferencias tienentan grandes implicaciones, no seria honrado minimizarlas. As, el cristiano estllamado a juzgar todas las cosas, todas las humanas formulaciones, todas lasenseanzas, por medio de la piedra de toque de la Palabra de Dios, y por ella, enoracin y dependencia de Dios, formar toda su visin. Es necesario, pues, que cadacreyente lea y estudie Ia Biblia con seriedad, y permita que su mente sea moldeadapor las Escrituras mismas.

    Dicho lo anterior, se debe aadir que el valor intrnseco de esta obra, de cuyanaturaleza y estructura ya se ha dado una ligera idea unas lneas ms arriba, msque compensar por esta rea de desacuerdo teolgico con el gran telogo dePrinceton. .

    Como toda obra humana, est sujeta a las humanas faltas. Sin embargo, si estaobra consigue cimentar la confianza del cristiano en el Libro de los libros, laPalabra de Dios, ayudarlo a un conocimiento ms inteligente de su contenido,desenmascarar las pretensiones de la falsamente llamada ciencia y de las vanasfilosofias de los hombres, que quisieran poner sus pobres pensamientos en lugar delos pensamientos que Dios ha comunicado, y llevarlo tambin a examinarlo todo enbase de las Escrituras (cf. Hch 17: 11), incluyendo el mismo contenido de estaobra, habr alcanzado su propsito, esto es el de su autor original, y el del traductory el de los editores, conduciendo a cada creyente a escudriar las Escrituras parahallar a Dios, a DlOS manifestado en carne, el Seor Jesucristo, que es el Camino,la Verdad y la Vida, y por medio de esta palabra, y conducido por el EsprituSanto, llegar as a conocer al Padre y al Hijo, y los propsitos de Dios en todas lascosas y para nosotros y nuestro andar, y Su gloria, y Su amor para con nosotros enCristo Jess.

    !A l sea Ia gloria por todas Ias edades!

    Santiago EscuainCaldes de Malavella (Gerona), enero de 1991

  • TEOLOGIA SISTEMATICAINTRODUCCIN

    CAPTULO I

    SOBRE EL MTODO

    1. La teologa, una cienciaEN todas las ciencias hay dos factores: hechos e ideas; o, hechos y la mente. Laciencia es ms que conocimiento. El conocimiento es la persuasin acerca de lo quees cierto en base de una evidencia adecuada. Pero los datos de la astronoma, de laqumica o de la historia no constituyen la ciencia de estos departamentos delconocimiento. Tampoco la mera ordenada disposicin de los hechos constituyeciencia. Los hechos histricos narrados por su orden cronolgico son unos merosanales. La filosofa de la historia supone que estos hechos deben ser comprendidosen base de sus relaciones causales. En cada departamento se supone que el hombrede ciencia debe comprender las leyes por medio de las que se determinan loshechos de la experiencia; de modo que no slo conozca el pasado, sino que puedapredecir el futuro. El astrnomo puede predecir la posicin relativa de los cuerposcelestes para los siglos futuros. El qumico puede decir con certeza cul ser elefecto de ciertas combinaciones qumicas. Entonces, si la teologa es una ciencia,tiene que incluir algo ms que un mero conocimiento de los hechos. Tiene queincluir una exhibicin de la relacin interna de estos hechos, unos con otros, y decada uno de ellos con todos los dems. Tiene que poder mostrar que si se admiteuno, no se pueden negar otros.

    La Biblia no es un sistema de teologa del mismo modo que la naturaleza no esun sistema de qumica o de mecnica. Es en la naturaleza que encontramos loshechos que el qumico o el fsico tienen que examinar, y de ellos determinar lasleyes que los rigen. De la misma manera, la Biblia contiene las verdades que tieneque recopilar el telogo, disponer y exhibir en su mutua relacin interna. sta es ladiferencia entre la teologa bblica y la sistemtica. La funcin de la primera esdeterminar y enunciar los hechos

  • 22 INTRODUCCIN

    de la Escritura. La funcin de la ltima es tomar estas hechos, determinar surelacin entre s y con otras verdades relacionadas, asi como vindicarias y mostrarsu armona y consistencia. Y no es sta una tarea fcil, ni de poca importancia.

    La necesidad de sistema en teologaEs natural preguntarse: Por qu no tomar las verdades tal como Dios ha visto

    adecuado revelarlas, y ahorrarnos as la fatiga de mostrar su relacin y armonia?La respuesta a esta pregunta es, en primer lugar, que no se puede hacer as. Es

    tal la constitucin de la mente humana que no puede dejar de intentar sistematizar yconciliar los hechos que admite como ciertos. En ningn departamento delconocimiento se han quedado los hombres satisfechos con la posesin de una masade hechos no asimilados. Y tampoco se puede esperar que los estudiantes de laBiblia se queden satisfechos con ello. Existe, por tanto, la necesidad de construirsistemas de teologa. ...

    Segundo: Se obtiene de esta manera una clase muy superior de conocimiento alque se consigue por la mera acumulacin de hechos aislados. Una cosa es saber,por ejemplo, que existen ocanos, continentes, islas, montes y nos por toda lasuperficie de la tierra; y otra cosa ms elevada es saber las causas que handeterminado la distribucin de la tierra y del agua sobre la superficie de nuestroglobo; la configuracin de la tierra; los efectos de esta configuracin sobre el clima,sobre las razas de plantas y animales, sobre el comercio, la civilizacin y el destinode las naciones. ... Lo que es cierto de otras ciencias es cierto de la teologa. Nopodemos saber qu es lo que Dios nos ha revelado en su Palabra a no ser quecomprendamos, al menos en cierta medida, la relacin que tienen entre s lasverdades separadas que esta Palabra contiene. Le cost a la Iglesia siglos de estudioy controversia resolver el problema acerca de la persona de Cristo; esto es, ajustary llevar a una disposicin armnica todos los hechos que la Biblia ensea acerca deeste tema.

    Tercero: No tenemos eleccin en esta cuestin. Si queremos cumplir connuestro deber como maestros y defensores de la verdad tenemos que tratar de traertodos los hechos de la revelacin a un orden sistemtico y una mutua relacin. Esslo as que podremos exhibir de una manera satisfactoria su veracidad, vindicarlosfrente a objeciones, o hacer que ejerzan todo su peso sobre las mentes de loshombres.

    Cuarto: sta es evidentemente la voluntad de Dios. l no ensea a los hombresastronoma ni qumica, pero les da los hechos en base de los que se erigen estasciencias. Tampoco nos ensea teologa sistemtica, pero nos da en la Biblia lasverdades que, apropiadamente entendidas y ordenadas

  • CAPTULO I - SOBRE EL MTODO 23

    constituyen la ciencia de la teologa. Asi como los hechos de la naturaleza en todosrelacionados y determinados por las leyes fsicas, as los hechos de la Biblia estntodos relacionados y determinados por la naturaleza de Dios y de sus criaturas. Yas como I quiere que los hombres estudien sus obras y descubran su maravillosarelacin orgnica y armnicas combinaciones, as es su voluntad que estudiemos suPalabra, y aprendamos que, como las estrellas, sus verdades no son puntos aislados,sino sistemas, ciclos y epiciclos en una armonia y grandeza sin fin. Adems de esto,aunque las Escrituras no contienen un sistema de teologa como un todo, tenemospartes elaboradas de este sistema en las Epstolas del Nuevo Testamento. Y stasson nuestra autoridad y gua.

    2. El mtodo teolgicoCada ciencia tiene su propio mtodo, determinado por la peculiar naturaleza de lamisma. sta es una cuestin de tal importancia que ha sido constituida como undepartamento propio. La literatura moderna abunda en obras sobre Metodologa,esto es, sobre la ciencia del mtodo, y estas obras tienen el propsito de decidir losprincipios que deberan regir las investigaciones cientficas. Si se adopta un mtodofalso, es como quien torna un camino errneo que nunca le llevar a su destino. Losdos grandes mtodos inclusivos son el a priori y a posteriori. El primeroargumenta de Causa a efecto, el segundo de efecto a causa. El primero se aplicdurante siglos incluso a la investigacin de la naturaleza. Se intentaba determinarcuales deben ser los hechos de la naturaleza en base de las leyes de la mente o delas supuestas leyes necesarias. ... Todos saben lo que cost establecer el mtodo dela induccin sobre una base firme y lograr un reconocimiento general de suautoridad. Segn este mtodo, comenzamos recogiendo hechos bien establecidos, yde ellos inferimos las leyes generales que las rigen. En base del hecho de que loscuerpos caen hacia el centro de la tierra se ha inferido la ley general de lagravitacin, que estamos autorizados a aplicar mucho ms all de los lmites de laexperiencia real. Este mtodo inductivo se basa en dos principios: Primero: Quehay leyes de la naturaleza (fuerzas) que son las causas prximas de los fenmenosnaturales. Segundo: Que estas leyes son uniformes. Por ello tenemos la seguridadde que las mismas causas, bajo las mismas circunstancias, producirn los mismosefectos. Puede darse una diversidad de opinin acerca de Ia naturaleza de estasleyes. Se puede suponer que sean fuerzas inherentes en la materia; o pueden serconsideradas como modos uniformes de la operacin divina; pero en todo casodebe haber alguna causa para los fenmenos que percibimos a nuestro alrededor, yesta causa tiene que ser uniforme y permanente. Es sobre estos principios que sefundamentan todas las ciencias inductivas, y es por ellos que son conducidas lasinvestigaciones de los filsofos naturales.

  • 24 INTRODUCCIN

    El mismo principio se aplica a la metaffsica que a la fsica; a la psicologfa que ala ciencia natural. La mente tiene sus leyes, lo mismo que la materia, y estas leyes,aunque de naturaleza distinta, son tan permanentes como las del mundo externo.

    Los mtodos que se han aplicado al estudio de la teologia son demasiadonumerosos para poderlos considerar por separado. Quiz puedan reducirse a trescases generales: Primero, el especulativo; segundo, el mstico; tercero, el inductivo.Estos trminos, desde luego, estn bien lejos de ser precisos. Se usan a falta de algomejor para designar los tres mtodos generales de investigacin teolgica que hanprevalecido en la IgIesia.

    3. El mtodo especulativoLa especulacin presupone ciertos principios de una manera apriorstica, y en

    base de ellos emprende la determinacin de lo que es y de lo que debe ser. Decideacerca de todas las verdades, o determina acerca de lo que es cierto en base de lasleyes de la mente, o en base de los axiomas implicados en la constitucin delprincipio pensante en nuestro interior. Es bajo este encabezamiento que se debenponer todos aquellos sistemas que se basan en cualquier tipo de presuposicionesfilosficas a priori. Hay tres formas generales en las que se ha aplicado este mtodoespeculativo a la teologa.

    Forma desta y racionalistaLa primera forma es aquella que rechaza cualquier forma de conocimiento

    acerca de las cosas divinas aparte de la que se desprende de la naturaleza yconstitucin de la mente humana. Presupone ciertos axiomas metafsicos y morales,y en base de ellos desarrolla todas las verdades que est dispuesta a admitir. A estaclase pertenecen los escritores destas y estrictamente racionalistas de lasgeneraciones pasadas y presente.

    Forma dogmticaLa segunda forma es el mtodo adoptado por aquellos que admitiendo una

    revelacin divina sobrenatural, y concediendo que tal revelacin est contenida enlas Escrituras cristianas, reducen sin embargo todas las doctrinas as reveladas a lasformas de algn sistema filosfico. Esto lo hicieron muchos de los padres [de laIglesia] que intentaron exaltar la pistis a gnosis, esto es, la fe de la gente llana enfilosofa para los acadmicos. ste fue tambin en mayor o menor grado el mtodode los escolsticos, y halla una ilustracin incluso en el Cur Deus Homo deAnselmo, el padre de la teologfa escolstica. ... Este mtodo sigue an en boga. Seestablecen ciertos principios, llamados axiomas, o primeras verdades de la razn, yde ellos se

  • CAPTULO I - SOBRE EL MTODO 25

    deducen las doctrinas de Ia religin mediante un curso argumental tan rgido eimplacable como el de Euclides. Esto se hace en ocasiones para el total derribo delas doctrinas de la Biblia y de las ms profundas convicciones morales no slo delos cristianos sino de las masas de la humanidad. No se permite murmurar a laconciencia en presencia del dominador entendimiento.A este mtodo se le ha aplicado el trmino ms bien ambiguo de dogmatismo,porque intenta conciliar las doctrinas de la Escritura con la razn, y llevar a que suautoridad repose sobre evidencias racionales. EI resultado de este mtodo ha sidosiempre, hasta all donde ha tenido xito, el de transmutar la fe en conocimiento, ypara llegar a este fin se han modificado de manera indefinida las enseanzas de laBiblia. Se espera de los hombres que crean no en base de la autoridad de Dios, sinode la de la razn.

    Los transcendentalistasEn tercer lugar, los modernos transcendentalistas estn adheridos aI mtodoespeculativo. Son racionalistas en el sentido amplio del trmino, y no admiten unafuente ms elevada de verdad que la razn. Pero debido a que ellos consideran larazn como algo muy diferente de lo que piensan los racionalistas ordinarios, lasdos clases estn, en la prctica, muy distanciadas. Los trascendentalistas difierentambin esencialmente de los dogmatistas. Los ltimos admiten una revelacinexterna, sobrenatural y autoritativa. Reconocen que por ella se dan a conocerverdades que la razn humana no puede descubrir. Pero mantienen que estasdoctrinas, cuando son conocidas, pueden ser demostradas como ciertas en base delos principios de la razn. Emprenden dar una demostracin independiente de lasEscrituras acerca de las doctrinas de la Trinidad, de la Encarnacin, de laRedencin, as como de la inmortalidad del alma y de un futuro estado deretribucin. Los trascendentalistas, por su parte, no admiten ninguna revelacinautoritativa aparte de la que se encuentra en el hombre y en el desarrollo histricode la raza. Toda verdad tiene que ser descubierta y establecida por el proceso delpensamiento. Si se concede que la Biblia contiene verdad, slo es asi en tanto quecoincide con las enseanzas de la filosofia. Esta misma concesin se hacelibremente acerca de los escritos de los sabios paganosstas son las principales formas del mtodo especulativo en su aplicacin a ateologia. Estos temas sern presentados para una ms plena consideracin en uncaptulo posterior.

    4. EI mtodo msticoPocas palabras han sido tomadas con mayor latitud de significado que el trminomisticismo. Aqu se debe tomar en un sentido antittico a la

  • 26 INTRODUCCIN

    especulacin. La especulacin es un proceso dei pensamiento; el misticismo esasunto de los sentimientos. Lo primero presupone que es la facultad delpensamiento aquella mediante la que llegamos ai conocimiento de la verdad. Losegundo, desconfiando de la razn, ensea que slo se debe confiar en lossentimientos, al menos en la esfera religiosa. Aunque este mtodo ha sidoapremiado de una manera indebida, y se han erigido bajo su gua sistemasteolgicos que son o bien totalmente independientes de las Escrituras, o en los quelas doctrinas de la Biblia han sido modificadas y pervertidas, no se debe negar quedebemos una gran autoridad a nuestra naturaleza moral en cuestiones de religin.Ha sido un gran mal en la iglesia que se haya permitido que la comprensin lgica,o lo que los hombres llaman su razn; conduzca a conclusiones que son no slocontrarias a la Escritura, sino que hacen violencia a nuestra naturaleza moral. Seconcede que nada contrario a la razn puede ser cierto. Pero no es menosimportante observar que nada contrario a nuestra naturaleza moral puede serverdad. Tambin se debe admitir que la conciencia es mucho menos susceptible aerrar que la razn, y que cuando entran en conflicto, real o aparente, nuestranaturaleza moral es la parte ms fuerte, y afirmar su autoridad a pesar de todo loque podamos hacer. Tiene correctamente el puesto supremo en el alma, aunque,con la razn y la voluntad, est en total sometimiento a Dios, que es razn infinita yexcelencia moral infinita.

    El misticismo en su aplicacin a la teologiaEn su aplicacin a la teologa, el misticismo, ha adoptado dos formas

    principales, la sobrenatural y la natural. Segn la primera, ... presupone que Dios,por su relacin inmediata con el alma, revela a travs de los sentimientos y pormedio de intuiciones verdades divinas con independencia de la enseanza externade su Palabra; y que lo que debemos seguir es esta luz interior, y no las Escrituras.

    Segn la segunda, la forma natural del mtodo mstico, no es Dios, sino laconsciencia religiosa natural del hombre, excitada e influenciada por lascircunstancias del individuo, lo que deviene la fuente del conocimiento religioso. ...La consciencia religiosa de los hombres en diferentes edades y naciones se hadesarrollado histricamente bajo diversas influencias, y por ello tenemos, diversasformas de religin: la pagana, el islam, y el cristianismo. Estas no se contraponencomo verdaderas y falsas sino como ms o menos puras. La aparicin de Cristo, suvida, su obra, sus palabras y su muerte tuvieron un efecto maravilloso sobre lasmentes de los hombres. Sus sentimientos religiosos fueron ms profundamenteagitados, ms purificados y elevados que nunca antes. ... Todos, por ello, enproporcin a la pureza y elevacin de sus sentimientos religiosos, tienen intuicionesde cosas

  • CAPTULO I - SOBRE EL MTODO 27

    divinas, como las que tuvieron los apstoles y otros cristianos. La santidad perfectallevaria a un conocimiento perfecto.

    Consecuencias del mtodo msticoDe esta teoria se desprende lo siguiente: (1) Que no existen cosas como una

    revelacin ni una inspiracin, en el sentido teolgico establecido de estos trminos.La Revelacin es la presentacin o comunicacin objetiva sobrenatural de laverdad a la mente, por el Espritu de Dios. Pero segn esta teoria, no hay ni puedehaber tal comunicacin de verdad. ... La inspiracin, en el sentido escritural, es laconduccin sobrenatural del Espfritu, que hace infalible a quien es sujeto de ellapara comunicar verdad a los otros. Pero segn esta teoria nadie es infalible comomaestro. ... (2) La Biblia no tiene autoridad infalible en asuntos de doctrina. Lasproposiciones doctrinales que contiene no son revelaciones del Espritu, sino sloformas bajo las que hombres de cultura judaica dieron expresin a sus sentimientose intuiciones. Hombres de otra cultura y bajo otras circunstancias habran empleadootras formas o adoptado otras declaraciones doctrinales. (3) El cristianismo, portanto. no consiste en un sistema de doctrinas, ni contiene tal sistema. Es una vida,una influencia, un estado subjetivo; o es un poder dentro de cada cristianoindividual, sea como sea que se describa o explique, que determina los sentimientosy sus perspectivas acerca de las cosas divinas. (4) Consiguientemente, el deber deun telogo no es interpretar la Escritura, sino interpretar su propia conscienciacristiana; determinar y exhibir qu verdades acerca de de Dios se implican en sussentimientos para con Dios; que verdades acerca de Cristo se implican en sussentimientos para con Cristo; qu ensean los sentimientos acerca del pecado, de laredencin, de la vida eterna, etc. ete.

    Este mtodo encontr a su ms distinguido e influyente defensor enSchleiermacher...

    5. El mtodo inductivoRecibe este nombre porque concuerda en todo lo esencial con el mtodo

    Inductivo aplicado a las ciencias naturales.Primero: El hombre de ciencia acude al estudio de la natura1eza con ciertas

    presuposiciones. (1) Presupone la fiabilidad de sus percepciones sensoriales. ... (2)Tiene tambin que presuponer la fiabilidad de sus funciones mentales. ... (3) Tieneque confiar tambin en la certidumbre de aquellas verdades que no se aprenden dela experiencia, sino que se dan en la constitucin de nuestra naturaleza: Que a cadaefecto le corresponde una causa; que aquella misma causa, en igualescircunstancias, producir los mismos efectos; que una causa no es un meroantecedente uniforme, sino que contiene dentro de si misma la razn de que ocurrael efecto.

  • 28 INTRODUCCIN

    Segundo: El estudiante de la naturaleza, al tener esta base sobre la quesostenerse, y estas herramientas con las que trabajar, pasa a percibir, recoger ycombinar sus hechos. No tiene la pretensin de inventarlos ni modificarlos. Tieneque tomarlos como son. Slo se cuida de que sean reales, de tenerlos todos, o almenos todos los necesarios para justificar cualquier inferencia que pueda deducirde ellos, o cualquier teoria que pueda erigir sobre ellos.

    Tercero: En base de los hechos asi determinados y clasificados deduce las leyesque los rigen. ... Es de esta manera que se ha ido edificando el vasto cuerpo de laciencia moderna. ...

    A. El mtodo inductivo en su aplicacin a Ia TeologaLa Biblia es para el telogo lo que la naturaleza para el hombre de ciencia. Es

    su arsenal de hechos; y su mtodo de determinar la que la Biblia ensea es elmismo que el adoptado por el filsofo natural para determinar qu ensea lanaturaleza. En primer lugar, acude a la tarea con todas las presuposicionesanteriormente mencionadas. Tiene que dar por supuesta la validez de las leyes de lafe que Dios ha impuesto en nuestra naturaleza. En estas leyes se incluyen algunasque no tienen aplicacin directa a las ciencias naturales. Por ejemplo, la de ladistincin esencial entre el bien y el mal; que Dios no puede ordenar nada contrarioa la virtud; que no se puede hacer el mal para que venga el bien; que el pecadomerece castigo, y otras verdades bsicas similares, que Dios ha implantado en laconstitucin de todos los seres morales, y que no pueden ser contradichas porninguna revelacin objetiva. Pero estos primeros principios no deben ser aceptadosde una manera arbitraria. Nadie tiene derecho a asentar sus propias opiniones, pormuy firmemente que las mantenga, y llamarlas verdades primarias de la razn,haciendo de ellas la fuente o prueba de las doctrinas cristianas. No se puedeintroducir nada con derecho bajo la categoria de verdades primarias, o leyes de lacreencia; que no puedan soportar las pruebas de universalidad y necesidad, a lo quemuchos aaden la evidencia inherente. Pero la evidencia inherente est incluida enla universalidad y la necesidad en cuanto a que nada que no se inherentementeevidente puede ser creido universalmente, y que lo que es inherentemente evidentese abre paso en la mente de toda criatura inteligente.

    La recoleccin de los hechosEn segundo lugar, el deber del telogo cristiano es determinar, recoger y

    combinar todos los hechos que Dios le ha revelado acerca de I mismo y denuestra relacin con l. Estos hechos estn en Ia Biblia. ... Se puede admitir que lasverdades que el telogo tiene que reducir a ciencia, o, para hablar

  • CAPTULO I - SOBRE EL MTODO 29

    ms humildemente, que tiene que disponer y armonizar, estn reveladas en parte enlas obras externas de Dios, en parte en la constitucin de nuestra naturaleza, y enparte en la experiencia religiosa de los creyentes; sin embargo, para que no erremosen nuestras inferencias de las obras de Dios, tenemos en su Palabra una ms clararevelacin de lo que la naturaleza nos revela; y para que no interpretemoserrneamente nuestra propia consciencia y las leyes de nuestra naturaleza, todo loque se puede aprender legtimamente de esta fuente se encontrar reconocido yautenticado en las escrituras; y para que no atribuyamos a la enseanza del Espiritulas operaciones de nuestros propios afectos naturales, encontramos en la Biblia lanorma y la pauta de toda genuina experiencia religiosa. Las Escrituras ensean noslo Ia verdad, sino cules son los efectos de la verdad sobre el corazn y laconciencia, cuando es aplicada con poder salvador por el Espritu Santo.

    EI telogo debe ser conducido por las mismas normas queel hombre de ciencia.

    En tercer lugar, el telogo debe ser regido por las mismas normas en larecoleccin de los hechos que las que guian al hombre de ciencia.

    1. Este recogimicnto de hechos debe hacerse con diligencia y cuidado. No esuna tarea fcil. Hay en cada departamento de investigacin una gran capacidad deerror. Casi todas las teorias falsas de la cencia y las doctrinas falsas en teologia sedeben en gran medida a errores en cuanto a cuestiones, factuales. ...

    2. Este recogimiento de hechos debe llevarse a cabo no slo de manera(cuidadosa, sino que tambin debe ser inclusivo, y, si es posible, exhaustivo. .. Enteologa, una induccin parcial de particulares ha conducido a errores serios. Es unhecho que las Escrituras atribuyen omnisciencia a Cristo. De esto se infiri que lno podia tener una inteligencia finita, sino que el Logos tambin revestido en Icon un cuerpo humano con su vida animal. Pero es tambin un hecho escritural quese le atribuyen a nuestro Seor desconocimiento y crecimiento intelectual, as comola omnisciencia. Ambos hechos, por tanto, deben quedar incluidos en nuestradoctrina de su Persona. Tenemos que admitir que tena una inteligencia humana, ascomo una inteligencia divina, Es un hecho que todo lo que se pueda predicar de unhombre exento de pecado se predica en la Biblia de Cristo; y tambin es cierto quetodo lo que se predica de Dios se predica tambin de nuestro Seor; de ah se hahecho la inferencia de que hubo dos Cristos -dos personas-, el uno humano y el otrodivino, y que moraban juntos de una manera muy semejante a como el Espritumora en el creyente.... Pero esta teora pasaba por alto muchos hechos quedemuestran Ia personalidad

  • 30 INTRODUCCIN

    individual de Cristo. La persona que dijo tengo sed es la misma que dijo: Antesque Abraham fuera, yo soy. Las Escrituras ensean que la muerte de Cristo tuvo eldesignio de revelar el amor del hombre y de lograr la reforma de los hombres. Deahi Socino neg que su muerte fuera una expiacin por el pecado, o satisfaccin dela justicia. Pero este ltimo hecho est tan claramente revelado como el primero; ypor ello ambos tienen que ser tomados en cuenta en nuestro enunciado de ladoctrina referente al designio de la muerte de Cristo.

    Necesidad de una induccin completaSe podria dar un sin fin de ilustraciones acerca de la necesidad de una

    induccin inclusiva de los hechos para justificar nuestras conclusiones doctrinales.Estos hechos no deben ser negados voluntariosamente ni pasados por alto condescuido, ni ponderados con parcialidad. Debemos ser honrados aqui, como elverdadero estudioso de la naturaleza es honrado en su induccin. Incluso loscientficos se sienten a veces impelidos a suprimir o pervertir hechos que militan encontra de sus teorias favoritas; pero la tentacin a esta forma de falta de honradezes menos intensa en su caso que en el del telogo. Las verdades de la religin sonmucho ms importantes que las de la ciencia natural. Se presentan al corazn y a laconciencia. Pueden suscitar los temores o amenazar las esperanzas de los hombres,por lo que estn bajo una fuerte tentacin de pasarlas por alto o de pervertirlas. Noobstante, si verdaderamente deseamos saber qu es lo que Dios ha revelado,tenemos que ser conscientemente diligentes y fieles en nuestra recogida de loshechos que El nos ha dado a conocer, y en darles su debido peso. ... Si la Bibliaafirma que la muerte de Cristo fue una satisfaccin de la justicia, le es impermisibleal telogo incluir la justicia en la benevolencia para que concuerde con su teoria dela expiacin. Si la Escritura nos ensea que los hombres nacen en pecado, nopodemos cambiar la naturaleza del pecado, y transformarla en una tendencia alpecado y no realmente pecado, a fin de libramos de la dificultad. ... Tenemos queafrontar los hechos de Ia Biblia como son, y erigir nuestro sistema de modo que losabarque en toda su integridad.

    Los principios tienen que ser deducidos en base de los hechosEn cuarto lugar, en teologia como en la ciencia natural, los principios se derivan

    de los hechos, y no se fuerzan sobre ellos. Las propiedades de la materia, las leyesdeI movimiento, del magnetismo, de la luz, etc., no son decididas por la mente. Noson leyes del pensamiento. Son deducciones en base de los hechos. EI investigadorve o determina mediante observacin cules son las leyes que determinan losfenmenos materiales; no inventa

  • CAPTULO I - SOBRE ELMTODO 31

    estas leyes. Sus especulaciones acerca de Ias cuestiones cientficas no valen nada, ano ser que estn sustentadas por los hechos. No es menos acientfico para eltelogo asumir una teoria en cuanto a la naturaleza de la virtud, del pecado, de lalibertad, de la obligacin moral, y luego explicar los hechos de la Escritura enconformidad a estas teorias. Su nico curso adecuado es derivar su teoria de lavirtud, del pecado, de la libertad, de la obligacin, en base de los hechos de laBiblia. ... Es evidente que se perturbar completamente todo el sistema de la verdadrevelada, a no ser que consintamos en derivar nuestra filosofia de la Biblia, en lugarde explicar la biblia por medio de nuestra filosofia. Si las Escrituras ensean que elpecado es hereditario, tenemos que adoptar una teoria del pecado que concuerdecon este hecho. Si ensean que los hombres no pueden arrepentirse, creer o hacernada espiritualmente bueno sin la ayuda sobrenatural del Espiritu Santo, tenemosque hacer que nuestra teora de la obligacin concuerde con este hecho. Si la Bibliaensea que llevamos la culpa del primer pecado de Adn, que Cristo llev nuestraculpa, y que padeci la pena de la ley en nuestro lugar, estos son hechos con losque tenemos que hacer que concuerden nuestros principios, ... Es el principiofundamental de todas las ciencias, y el de la teologa entre el resto, que la teoratiene que ser determinada por los hechos, y no los hechos por la teoria. As comolas ciencias naturales eran un caos hasta que se admiti el principio de induccin yse aplic con fidelidad, asi la teologia es una masa de especulaciones humanascarente de todo valor, cuando los hombres rehusan aplicar el mismo principio alestudio de la Palabra de Dios.

    6. Las Escrituras contienen todos los hechos de la Teologa.Esto es perfectamente consistente, por una parte, con la admisin de verdades

    intuitivas, tanto intelectuales como morales, debido a nuestra constitucin comoseres racionales y morales; y, por otra parte, con el poder controlador sobrenuestras creencias que es ejercido por las enseanzas interiores del Espritu, o, enotras palabras, por nuestra experiencia religiosa. Y esto por dos razones. Primera:Toda verdad tiene que ser consistente. Dios no se puede contradecir a s mismo. Ino puede forzamos mediante la constitucin de la naturaleza que nos ha dado acreer una cosa, y mandamos en su Palabra a creer lo opuesto. Y segunda: Todas lasverdades que nos ensea la constitucin de nuestra naturaleza o la experienciareligiosa son reconocidas y autenticadas en la Escritura. Esto es una salvaguarda yun lmite. No podemos asumir este o aquel principio como intuitivamenteverdadero, o esta o aquella conclusin como demostrablemente cierta, y hacer detodo ello una norma a la que la Biblia se tiene que amoldar. Lo que es cierto conevidencia inherente tiene que ser demostrado as, y es siempre

  • 32 INTRODUCCIN

    reconocido en la Biblia como cierto. Se han erigido sistemas enteros de teologasobre llamadas intuiciones, y si cada hombre tiene la libertad de exaltar sus propiasintuiciones, como los hombres suelen llamar a sus intensas convicciones,tendremos tantas teologas como pensadores. La misma observacin se puedeaplicar a la experiencia religiosa. No hay forma de conviccin ms ntima eirresistible que la que surge de la enseanza interior del Espritu. Toda fe salvadorareposa sobre su testimonio o demostraciones (1 Co 2:4). Los creyentes tienen unauncin del Santo, y conocen la verdad, y ninguna mentira (falsa doctrina) es de laverdad. Esta enseanza interior produce una conviccin que ningn sofisma puedeoscurecer, y que ningn argumento puede sacudir. Est basada en la consciencia, ylo mismo se podra intentar convencer a un hombre de que no crea en su existenciaque convencerlo de que no confie en la certidumbre de lo que as ha sido enseadode Dios. Pero se tienen que mantener dos cosas en mente. Primero: Que estaenseanza interior o demostracin del Espritu se limita a cosas enseadasobjetivamente en la Escritura. Se nos da, dice el ApstoI, para que podamosconocer cosas que nos han sido dadas gratuitamente, esto es, que nos han sidoreveladas por Dios en su Palabra (1 Co 2:10-16). No se trata, entonces, de unarevelacin de nuevas verdades, sino de una iluminacin de la mente, de modo queaprende la verdad, la exceIencia y la gloria de cosas ya reveladas. Y segundo: Estaexperiencia est descrita en la PaIabra de Dias. La Biblia nos da no sIo Ias hechosconcernientes a Dios y a Cristo, a nosotros mismos, y a nuestras relaciones connuestro Hacedor y Redentor, sino que registra tambin los legtimos efectos deestas verdades en las mentes de los creyentes. As que no podemos apelar anuestros propios sentimientos o experiencia interior como base o guia, a no ser quepodamos mostrar que concuerda con la experiencia de hombres santos tal como seregistra en Ias Escrituras.

    La Enseanza del EspirituAunque la enseanza interna deI Espritu, o experiencia religiosa, no constituye

    un sustituto de la revelacin externa, es sin embargo una gua inestimable paradeterminar qu es lo que nos ensea la regla de la fe. La caracterstica distintiva delagustinismo, tal como lo ense el mismo Agustn y tal como fue enseada por losms puros telogos de la Iglesia Latina durante la Edad Media, y que fue expuestapor los Reformadores, y especialmente por CaIvino y los telogos de Ginebra, esque la enseanza interior del Espritu recibe su puesto apropiado en ladeterminacin de nuestra teologa. La cuestin no es en primer lugar y de maneraprincipal: Qu es verdadero para el entendimiento?, sino, qu es verdadero parael corazn renovado? No se trata de esforzarse en que las declaraciones de la

  • CAPTULO I - SOBRE EL MTODO 33

    Biblia armonicen con la razn especulativa, sino en someter nuestra dbil razn a lamente de Dios tan como se revela en su PaIabra, y por su Espritu en nuestra vidainterior. ... El verdadero mtodo en teologa demanda que los hechos de laexperiencia religiosa sean aceptados como hechos, y que cuando sean debidamenteautenticados por la Escritura, se permita que interpreten las declaracionesdoctrinaIes de la Palabra de Dios. Tan legtima y poderosa es esta enseanzainterior del Espritu que no es cosa infrecuente encontrar a hombres sosteniendodos teologias: una del intelecto, y otra del corazn. La primera puede encontrarexpresin en credos y sistemas de Teologa, y la otra en sus oraciones e himnos. ...

    EI verdadero mtodo de la teologa, entonces, es el inductivo, que da porsupuesto que la Bblia contiene todos los hechos o verdades que constituyen elcontenido de la teologa, as como los hechos de la naturaleza son el contenido delas ciencias naturaIes. Tambin se da por supuesto que la relacin de estos hechosbblicos entre s, los principios invoIucrados en los mismos, las leyes que lasdeterminan, estn en los mismos hechos, y que de ellos tienen que deducirse, ascomo las leyes de la naturaleza son deducidas de los hechos de Ia naturaleza. Enninguno de ambos casos se derivan los principios de la mente ni se imponen sobrelos hechos, sino en ambos departamentos, y de la misma manera, los principios oleyes son deducidos en base de los hechos y son reconocidos por la mente.

  • CAPTULO II

    TEOLOGA

    1. Su naturaleza.SI las perspectivas presentadas en el anterior captulo son correctas, la pregunta dequ es la teologa? ya ha recibido respuesta. ... La teologa trata de los hechos yprincipios de la Biblia.... Las partes de cualquier todo orgnico tienen una relacinnatural que no se puede ignorar ni cambiar con impunidad. Las partes de un reloj, ode cualquier otro mecanismo, tienen que estar dispuestas en su manera normal, otodo estar confuso y carente de valor. Todas Ias partes de una planta o animalestn dispuestas para responder, un fin determinado, y son mutuamentedependientes. No podemos poner las races de un rbol en lugar de sus ramas, nilos dientes de un animal en lugar de sus pies. As es como los hechos de la cienciase dispnen. No los dispone el naturalista. Su actividad es slo determinar cul esla disposicin dada por la naturaleza de los hechos. Si se equivoca, su sistema esfalso, e invlido en mayor o menor grado. Lo mismo es evidentemente cierto conrespecto a los hechos o verdades de la Biblia. No se pueden sostener aislados, niadmitirn de ninguna otra disposicin que el telogo pueda decidir asignarles.Tienen entre s una relacin natural, que no se puede pasar por alto ni pervertir sinque los hechos mismos queden pervertidos. ... Es importante que el telogo sepa sulugar. l no es el dueo de la situacin. No puede construir un sistema de teologapara dar satisfaccin a su imaginacin como tampoco el astrnomo puede ajustarlos mecanismos del cielo tal como le parezca mejor a l. As como los hechos de laastronoma se disponen en un cierto orden, y no admitirn otro, as sucede con loshechos de la teologa. Por ello, la teologfa es la exhibicin de los hechos de laescritura en su orden y relacin apropiados, con los principios o verdades generalesinvolucrados en los mismos hechos, y que impregnan y armonizan e todo. ...

  • 36 INTRODUCCIN

    Definiciones de TeologaSe dan frecuentemente otras definiciones de Teologia:1. A veces la palabra se restringe a su sentido etimolgico: un discurso acerca

    de Dios. Orfeo y Homero eran considerados telogos entre los griegos porque suspoemas trataban de la naturaleza de los dioses. ... Esta palabra sigue emplendoseen este sentido restringido cuando se usa en contraste a la antropologia, soteriologay eclesiologa, como departamentos de la teologa en su sentido ms amplio.

    2. La teologia se considera a veces como la ciencia de lo sobrenatural. Peroqu es lo sobrenatural? La respuesta a esta pregunta depende del sentido que se led a la palabra naturaleza. Si por naturaleza se significa el mundo externogobernado por leyes fijas, entonces las almas de los hombres y otros seresespirituales no quedan incluidas bajo este trmino. En este uso de la palabranaturaleza, lo sobrenatural es sinnimo con lo espiritual, y la teologa, como laciencia de lo sobrenatural, es sinnimo con la pneumatologia. Si se adopta estapostura, la psicologa deviene una rama de la teologia, y el telogo debe, como tal,ensear filosofa de la mente.

    Pero la palabra naturaleza es a menudo tomada en un sentido ms amplio, paraincluir al hombre. Entonces tenemos un mundo natural y un mundo espiritual. Y losobrenatural es lo que en este sentido trasciende a la naturaleza, de modo que loque es sobrenatural es tambin necesariamente sobrehumano. Pero no esnecesariamente sobre-anglico. Tambin la naturaleza puede denotar todo lo queest fuera de Dios; entonces lo sobrenatural es lo divino, y Dios es el nico objetolegitimo de la teologa. Por ello, en ningn sentido de la palabra es la teologia laciencia de lo sobrenatural. .... .

    3. Una definicin ms comn de Teologia, especialmente en nuestros das, esque se trata de la ciencia de la religin. Pero la palabra religin es ambigua. Suetimologia es dudosa. Cicern la deriva de relegere, ir frente a, considerar.Entorices Religio es consideracin, observancia devota, especialmente en lo quepertenece a la adoracin y al servicio de Dios. Religens es devoto, consciente. ...Agustn y Lactancio derivan la palabra de religare. volver a atar. En base de esto,religio es la base de la obligacin. Es aquello que nos liga a Dios. Subjetivamente,es la necesidad interior de unin con Dios ... expresa un estado mental. Hay variasformas en que se describe este estado en cuanto a lo que es de una maneracaracterstica. De la manera ms sencilla, es descrito como el estado de la menteinducido por la fe en Dios, y un sentido debido de nuestra relacin con l. ..,Bretschneider: Fe en la realidad de Dios, con un estado mental y forma de vivir

    1. Nat. Deor. II.28

  • CAPTULO II TEOLOGA 37

    concordante con esta fe. O, ms vagamente: Reconocimiento de La relacinmutua entre Dios y el mundo (Fischer), o, El reconocimiento de una causalidadsobrehumana en el alma y vida del hombre (Theile). Fe fundamentada en elsentimicnto de la realidad del ideal (Jacobi). La sensacin de una totaldependencia (Schleiermacher). La observancia de la ley moral como institucindivina (Kant). Fe en el orden moral del universo (Fichte). La unin de lo finitocon lo infinito, o Dios viniendo a la propia consciencia en el mundo (Schelling).2

    Esta diversidad de posturas en cuanto a qu es la religin es suficiente parademostrar cun totalmente vaga e insatisfactoria tiene que ser la definicin deteologia como la ciencia de la religin. Adems, esta definicin hace a lateologia totalmente independiente de la Biblia. ...

    Por ello, tenemos que limitar la teologa a su verdadera esfera, como la cienciade los hechos de la revelacin divina en tanto que aquellos hechos tratan de lanaturaleza de Dios y de nuestra relacin con l, como sus criaturas, comopecadores, y como sujetos de la redencin. Todos estos hechos, como ya hemosobservado, se encuentran en la Biblia. Pero como algunos de ellos estn reveladosen las obras de Dios, y por la natura1eza del hombre, existe en ello una distincinentre la teologia natural, y la teologia considerada distintivamente como unaciencia cristiana.

    Con respecto a la teologa natural, existen dos opiniones extremas. La una esque las obras de la natura1eza no dan una revelacin fiable del ser y de lasperfecciones de Dios; la otra, que tal revelacin es tan clara e inclusiva que haceinnecesaria cualquier revelacin sobrenatural.

    2. Los hechos de Ia naturaleza revelan a DiosLos que niegan que la teologia natural ensea algo fiable acerca de Dios

    entienden comunmente por naturaleza el universo externo y material. Pronuncianinsatisfactorios los argumentos ontolgico y teleolgico derivados de la existenciadel mundo y de las evidencias de designio que contiene. El hecho es que el mundoes es una prueba de que siempre ha sido. en ausencia de toda evidencia de locontrario. Y el argumento del designio. se dice, pasa por alto la diferencia entremecanismos muertos y un organismo vivo, entre la manufactura y el crecimiento. Elhecho de que una locomotora no se pueda hacer a si misma no es prueba de que unrbol no pueda crecer. La primera se forma ab extra [desde fuera], poniendo juntassus partes inertes; el segundo es desarrollado por un principio vital interior. Laprimera necesita de la presuposicin de un hacedor externo y anterior, el segundoexcluye, se dice, tal asuncin. Adems, se apremia que las verdades

    2. Vase Hutterus Redivivus, I.2., de Hase.

  • 38 INTRODUCCIN

    religiosas no admite prueba. Pertenecen a la misma categoria que las verdadesestticas y morales. Son objetos de la intuicin. Para ser percibidas, tienen queserlo a su propia luz. No se puede demostrar una cosa como hermosa o buena aaIguien que no percibe su hermosura o excelencia. Por ello, se apremia tambin, esinnecesaria la prueba de la verdad religiosa. Los buenos no precisan de pruebas; ylos malos no pueden apreciarIas. Todo lo que se puede hacer es afirmar la verdad ydejar que despierte, si es posible, el dormido poder de la percepcin.

    A. Respuesta a los anteriores argumentosTodo esto son sofismas. Porque los argumentos que sustentan las verdades de la

    religin natural no salen exclusivamente de las obras externas de Dios. Los msevidentes y eficaces surgen de la constitucin de nuestra propia naturaleza. Elhombre fue hecho a imagen de Dios, y revela su linaje de una manera taninequvoca como cualquier clase de animales inferiores revela el origen del que hansurgido. Si un caballo sale de un caballo, el espritu inmortal del hombre, con suinstinto de convicciones morales y religiosas tiene que ser linaje del Padre de losEspritus. ste fue el argumento con el que Pablo se dirigi en la Colina de Marte alos caviladores filsofos de Atenas. El hecho de que la esfera de la teologfa naturalno se limita meramente a los hechos del universo material se hace patente con elsentido de la palabra naturaleza, que, como ya hemos visto, tiene muchos sentidoslegtimos. ...

    2. La segunga objecin a la teologa natural es que sus argumentos soninconclusivos. Este es un punto que nadie puede decidir por otros. Cada uno tieneque juzgar por s mismo. Un argumento que para una mente es concluyente puedeser ineficaz para otras mentes. El hecho de que el universo comenz, que no tienela causa de su existencia en si mismo, y que por ello tiene que haber tenido unacausa extramundana, y las infinitamente numerosas manifestaciones de designioque exhiben tienen que ser inteligentes, son argumentos para el ser de Dios, quehan dado satisfaccin a las mentes de la gran mayora de personas inteligentes entodos las pocas en el mundo. Por ello, no deberan ser echados a un lado comoinsatisfactorios porque no todos sientan su peso. Adems, como se acaba deobservar, estos argumentos son slo confirmatorios de otros ms directos ypoderosos, derivados de nuestra naturaleza moral y religiosa.

    3. En cuanto a la objecin de que las verdades religiosas son objetos de laintuicin, y que las verdades intuitivas ni necesitan prueba ni la permiten, se puederesponder que en cierto sentido es verdad. Pero las verdades inherentementeverdaderas pueden ser ilustradas; y se puede mostrar que su negacin involucracontradicciones y absurdos. Toda la geometria es una

  • CAPTULO II TEOLOGA 39

    ilustracin de los axiomas de Euclides; y si alguien niega alguno de estos axiomas,se puede mostrar que tiene que creer imposibilidades. De la misma manera, sepuede admitir que la existencia de un ser de quien dependemos, y ante quien somosresponsables, es asunto de intuicin; y se puede reconocer que es cosainherentemente evidente que slo somos responsables ante un ser personal, y sinembargo la existencia de un Dios personal se puede presentar como una hiptesisnecesaria para dar cuenta de los hechos de la observacin y de la existencia, y quela negacin de su existencia deja el problema del universo sin solucin eirresoluble. En otras palabras: se puede mostrar que el atesmo, el politesmo y elpantesmo involucran imposibilidades absolutas. ste es un modo vlido dedemostrar que Dios es, aunque se admita que su existencia es, despus de todo, unaverdad inherentemente evidente. El tesmo no es la nica verdad evidente por smisma que los hornbres son propensos a negar.

    B. Argumento escritural para la Teologa NaturalLas Escrituras reconocen claramente que las obras de Dios revelan su ser y

    atributos. Y esto lo hacen no slo mediante frecuente referencia a las obras de lanaturaleza como manifestaciones de las perfecciones de Dios, sino mediante unadeclaracin directa. Los cielos cuentan la gloria de Dios, y eI firmamento anunciala obra de sus manos. Un da comunica mensaje a otro da, y una noche a otradeclara la noticia. No es un lenguaje de palabras, ni es oda su voz. Pero por toda latierra sali su pregn, y hasta el extremo del mundo su lenguaje (Sal 19:1-4). Laidea de un testimonio perpetuo, dice - el doctor Addison Alexander,3 escomunicada mediante la figura de un da y una noche siguindose unos a otroscomo testigos en sucesin ninterrumpida. ... La ausencia del lenguaje articulado,lejos de debilitar el testimonio, lo potencia. Incluso sin habla o palabras, los cielosdan testimonio de Dios a todos los hombres.

    Los escritores sagrados, al contender con los paganos, apelan a la evidencia quelas obras de Dios dan acerca de sus perfecciones: Comprended, necios del pueblo;y vosotros, fatuos, cundo seris sabios? El que plant la oreja, no oir? El queform el ojo, no ver? El que amonesta a las naciones, no castigar? No sabr elque ensea al hombre Ia ciencia? (Sal 94:8-10). Pablo dijo ... a los hombres deAtenas: El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que hay en l, siendo Seordel cielo y de la Tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni esservido por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues l es quien da atodos vida y aliento y todas las cosas. Y de una misma sangre ha hecho toda nacin

    3. Comm. on Psalms, in loco

  • 40 INTRODUCCIN

    de las hombres, para que habiten por toda Ia faz de la tierra; y les ha prefijado elorden de las estaciones, y las fronteras de sus lugares de residencia; para quebusquen a Dios, si tal vez, palpando, pueden hallarle, aunque ciertamente no estlejos de cada uno de nosotros. Porque en l vivimos, Y nos movemos, Y somos;como algunos de vuestros propios poetas tambin han dicho: Porque somostambin linaje suyo. Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que laDivinidad sea semejante a oro, o plata, o pledra, escultura de arte y de imaginacinde hombres (Hch 17:24-29).

    El Apstol declara no slo el hecho de esta revelacin, sino tambin suclaridad: Porque la que de Dios se conoce es manifiesto entre ellos, pues Dios sela mamfest. Porque las cosas invisibles de l, su eterno poder y divinidad se hacenclaramente visibles desde la creacin del mundo, siendo entendidas por medio delas cosas hechas, de modo que no tienen excusa. Pues habiendo conocido a Dios,no le glorificaron como a Dios, ni le dieron las gracias (Ro 1: 19- 21).

    Por ello, no se pueden tener dudas razonables acerca de que no slo el ser deDios, sino tambin su poder eterno y deidad quedan revelados en sus obras,estableciendo un firme fundamento para la teologa natural.

    3. La insuficiencia de la Teologa NaturalLa segunda opinin extrema acerca de la Teologa Natural es que hace

    innecesaria una revelacin sobrenatural. La cuestin de si el conocimiento de Diosque se deriva de sus obras es suficiente para llevar a los cados a la salvacin escontestada de manera afirmativa por los racionalistas, pero de manera negativa portodas las ramas histricas de la Iglesia Cristiana. Acerca de este punto sonunnimes las Iglesias griega, latina, luterana y reformada.

    La cuestin en cuanto a la suficiencia de la teologa natural, o de las verdadesde la razn, tiene que ser contestada en base de la autoridad de las escrituras. Nadiepuede decir a priori qu es lo necesario para la salvacin. La verdad es que es slopor revelacin sobrenatural que sabemos que hay salvacin para los pecadores. Esslo por esta misma fuente que podemos saber cules son las condiciones de lasalvacin, o quines son los sujetos de la salvacin.

    A. Lo que dicen las Escrituras acerca de la salvacin de los hombres. Lasalvacin de los prvulos.

    Lo que ensefian las Escrituras acerca de este tema, en conformidad a la doctrinacomn entre los protestantes evanglicos, es primeramente:

    1. Que todos los que mueren en Ia infancia son salvos. Esto se infiere de lo quela Biblia ensea de la analoga entre Adn y Cristo. As pues, como

  • CAPTULO II TEOLOGA 41

    por la transgresin de uno vino la condenacin a todos los hombres, de la mismamanera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificaci6n de vida.Porque as como por la desobediencia de un hombre los muchos (hoi polloi =pantes) fueron constituidos pecadores, as tambin por la obediencia de uno, losmuchos (hoi polloi = pantes) sern constituidos justos (Ro 5: 18, 19. No tenemosderecho a poner lmite alguno a estos trminos generales, exepto los que la mismaBiblia les imponga. Las Escrituras no excluyen en ningn lugar a ninguna clase deinfantes, bautizados o no, nacidos en tierras cristianas o paganas, de padrescreyentes o incrdulos, de los beneficios de la redencin de Cristo. Todos losdescendientes de Adn, excepto Cristo, estn bajo la condenacin; todos losdescendientes de Adn, excepto aquellos de los que se revela expresamente que nopueden heredar el reino de Dios, son salvos. ste parece ser el claro sentido de laspalabras del Apstol, y por ello no duda en decir que donde abund el pecadomucho ms ha sobreabundado la gracia, que los beneficios de la redencin excedencon mucho a los males de la cada; que el nmero de los salvos excede con muchoal de los perdidos.

    Esto no es inconsecuente con la declaracin de nuestro Seor, en Mateo 7:14,de que slo unos pocos entran por la puerta que conduce a la vida. Esto debeentenderse de los adultos. Lo que la Biblia dice se dirige a aquellos en todas lasedades a quienes atae. Pero se dirige a aquellos que pueden bien leer, bien or. Lesdice lo que deben creer y hacer. Sera una total perversin de su significadoaplicarla a aquellos a los que y de los que no habIa. Cuando se dice: EI que creeen el Hijo, tiene vida eterna; mas el que rehusa creer en el Hijo, no ver la vida,sino que la ira de Dios permanece sobre l (Jn 3:36), nadie comprende esto comoimpidiendo la posibilidad de la salvacin de los infantes. ...La conducta y ellenguaje de nuestro Seor en referencia a los nios no deben ser consideradoscomo una cuestin de sentimientos, ni como una mera expresin de una actitudbondadosa. Es evidente que las consideraba como ovejas del rebao por el cuaI,como el Buen Pastor, pona su vida, y de las cuales l dijo que jams perecerian, ninadie las arrebataria de sus manos. De ellos dice l que es el reino de los cielos,como si el cielo estuviera, en gran medida, compuesto de las almas de los infantesredimidos. Es por ello la creencia general de los protestantes, en contra de ladoctrina de los romanistas y de los romanizadores, que todos los que mueren en lainfancia se salvan.

    B. La regla del juicio para los adultos2. Otro hecho general claramente revelado en la Escritura es que los hombres

    sern juzgados por sus obras, y en base de la luz que cada uno haya tenido. Diospagar a cada uno conforme a sus obras: vida eterna a los que,

  • 42 INTRODUCCIN

    perseverando en hacer bien, buscan gloria y honra e inrnortalidad, pero ira y enojoa los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a lainjusticia. Tribulacin y angustia sobre todo ser humano que obra el mal, el judioprimeramente y tambin el griego, pero gloria y honra y paz a todo el que obra elbien, al judio primeramente y tambin al griego; porque ante Dios no hay acepcinde personas. Porque todos los que han pecado sin ley, sin ley tambin perecern; ytodos los que han pecado bajo Ia ley, por la ley sern juzgados (Ro 2:6-12).Nuestro Seor ensea que aquellos que pecaron con conocimiento de la voluntadde Dios sern azotados con muchos azotes; y que los que pecaron sin talconocimiento sern azotados con pocos azotes; y que el dia del juicio ser mstolerable para los paganos, incluso para Sodoma y Gomorra, que para los queperecen bajo la luz del evangelio (Mt 10:15; 11:20-24). El Juez de toda la tierrahar lo que es justo. Ningn ser humano sufrir ms que lo que merezca, ni msque lo que su propia conciencia reconocer como justo.

    C. Todos los hombres bajo condenacin3. Pero Ia Biblia nos dice que si fueran juzgados segn sus obras y segn la luz

    recibida, todos los hombres seran condenados. No hay justo, ni an uno. Todo elmundo es culpable delante de Dios. El veredicto queda confirmado por laconciencia de cada hombre. La consciencia de la culpa y de la polucin moral esabsolutamente universal.

    Es aqui que falla totalmente la teologia natural. No puede dar respuesta a lapregunta: Cmo se justificar el hombre delante de Dios?, o Cmo puede Diosser justo y justificar al impo? La humanidad ha ponderado ansiosamente estapregunta durante siglos, y no ha logrado satisfaccin. Se ha aplicado el oido en elseno de la humanidad para captar el son suave y bajo de la conciencia, y no harecibido respuesta. La razn, la conciencia, la tradicin y la historia se unen enproclamar que el pecado es muerte; y por ello que por lo que a la sabidura yrecursos humanos concierne, la salvacin de los pecadores es tan imposible comola resurreccin de los muertos. Se ha probado todo medio concebible de expiaciny purificacin, sin mrito alguno.

    4. Las Escrituras, por tanto, nos ensean que los paganos estn sin Cristo,excluidos de la ciudadania de Israel y extranjeros en cuanto a los pactos de lapromesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo (Ef2:12). Son declarados sinexcusa, Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni ledieron gracias, sino que se hicieron vanos en sus pensamientos, y su necio coraznfue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloriadel Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, decuadrpedos y de reptiles. Por

  • CAPTULO II TEOLOGA 43

    lo cual tambin Dios los entreg a la inrnundicia, en las concupiscencias de suscorazones, de modo que deshonraron entre si sus propios cuerpos, ya quecambiaron la verdad de Dios por la mentira, adorando y dando culto a las criaturasen lugar de al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amm (Ro 1:2-25). EIApstol dice de los gentiles que andan en la vanidad de su mente, teniendo elentendimiento entenebrecido, excluidos de la vida de Dios por la ignorancia quehay en ellos, por la dureza de su corazn; los cuales, despus que perdieron todasensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase deimpureza (Ef 4:17-19).

    5. Siendo todos los hombres pecadores, y pudiendo ser con justicia acusados deuna impiedad e inmoralidad inexcusables, no pueden ser salvados por ningnesfuerzo ni recurso de su propia parte. Porque se nos dice que los injustos noheredarn el reino de Dios ... No os dejis engaar; ni los fornicarios, ni losidlatras, ni los adlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones,ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarn elreino de Dios (1 Co 6:9). Porque tened bien entendido, que ningn fornicario, oinmundo, o avaro, que es idlatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios(Ef 5:5). Ms an, Ia Biblia nos ensea que uno puede ser externamente justodelante de los hombres, y ser sin embargo un sepulcro blanqueado, siendo sucorazn la morada de la soberbia, de la envidia o de la malicia. ... Y ms an queesto; aunque un hombre estuviera libre de pecados externos, y, si fuera posible, lofuera de pecados del corazn, esta bondad negativa no seria suficiente. Sin santidadnadie ver al Seor (He 12:14). El que no nace de nuevo, no puede ver el reinode Dios (Jn 3:3). El que no ama, no ha conocido a Dios (1 Jn 4:8). Si algunoama al mundo, el amor del Padre no est en l 1 Jn 2:15). El que ama a su padreo a su madre ms que a mi, no es digno de mi Quin, pues, puede ser salvo? Si laBiblia excluye del reino de los cielos a todos los inmorales, a todos aquellos cuyoscorazones estn corrompidos con soberbia, envidia, malicia o codicia; a todos losque aman al mundo; a todos los que no son santos; a todos aquellos en los que elamor de Dios no es el principio supremo y controlador de todas sus acciones, esevidente entonces que por lo que a los adultos se refiere, la salvacin se tiene queencerrar a limites muy estrechos. Tambin es evidente que la mera religin natural,el mero poder objetivo de la verdad religiosa general, tiene que ser tan incapaz parapreparar a los hombres para la presencia de Dios como las aguas de Siria para sanarla lepra.

    D. Las condiciones necesarias para la salvacin6. Viendo pues que el mundo no conoce a Dios mediante la sabidura; viendo

    que los hombres, dejados a si mismos, inevitablemente mueren en sus

  • 44 INTRODUCCIN

    pecados, agrad a Dios salvar a los creyentes mediante la locura de lapredicacin (1 Co 1:21). Dios ha enviado a su Hijo al mundo para salvar a lospecadores. Si hubiera sido posible cualquier otro mtodo de salvacin, Cristo hamuerto en vano (G 2:21; 3:21). Por ello, no hay ningn otro nombre por el que loshombres puedan ser salvos (Hch 4:12). El conocimiento de Cristo y la fe en l sondeclarados como esenciales para la salvacin. Esto se demuestra: (1.) Porque loshombres son pronunciados culpables delante de Dios. (2.) Porque nadie puedeexpiar su propia culpa y restaurarse a s mismo a la imagen de Dios. (3.) Porque sedeclara de manera expresa que Cristo es el nico Salvador de los hombres. (4.)Porque Cristo encomend a su Iglesia la misin de predicar el evangelio a todacriatura debajo del cielo, como medio designado de salvacin. (5.) Porque losApstoles, en el cumplimiento de esta misin, fueron por todas partes predicando laPalabra, dando testimonio a todos los hombres, judos y gentiles, a los sabios y alos ignorantes, que deban creer en Cristo como el Hijo de Dios para ser salvos.Nuestro mismo Seor enseo esto por medio de su precursor: El que cree en elHijo, tiene vida eterna; mas el que rehsa creer en el Hijo, no ver la vida, sino quela ira de Dios permanece sobre l (Jn 3:36). (6.) Porque la fe sin conocimiento espronunciada como algo imposible. Porque todo aquel que invocare el nombre delSeor, ser salvo. Cmo, pues, invocarn a aquel en el cual no han credo? Ycmo creern en aquel de quien no han odo? Y cmo oirn sin haber quien lespredique? Y cmo predicarn si no han sido enviados? (Ro 10: 13-15).

    Por ello, y como ya se ha dicho, es la fe comn del mundo cristiano que por loque se refiere a los adultos, no hay salvacin sin el conocimiento de Cristo y la feen l. sta ha sido siempre considerada como la base de la obligacin que tiene laIglesia de predicar el evangelio a toda criatura.

    E. ObjecionesA la objecin de que esta doctrina no es consecuente con la bondad y la justicia

    de Dios, se puede responder: (1.) Que la doctrina slo da por supuesto lo que elobjetor, si es Teista, tiene que admitir: esto es, que Dios tratar a los hombres enbase del carcter y conducta de los mismos, y que los juzgar en correspondencia ala luz que cada uno de ellos haya tenido. Es debido a que el Juez de toda la tierratiene que hacer lo justo que todos los pecadores reciben la paga del pecado, por unaley inexorable, a no ser que sean salvos por el milagro de la redencin. Por ello, alensear que no hay salvacin para los que ignoran el evangelio, la Biblia sloensea que un Dios justo castigar el pecado. (2.) La doctrina de la Iglesia acercade esta cuestin no va ms all de los hechos del caso. Slo ensea que Dios harlo que vemos que realmente hace. l, en