Una puerta al futuro de la educación

Bogotá - México, DF

Pedagogía concePtual:Una puerta al futuro de la educación

Director conceptual: Miguel De Zubiría Samper

Equipo pedagógico:

Esperanza Reyes de RíosCarlos Alberto De Zubiría Bazurto

Nubia Isabel Valero Moreno

30 años formando personas amorosas, talentosas y gestoras de cambio social

FundacIÓn InteRnacIonal de Pedagogía concePtual alBeRto MeRanI

Miguel de Zubiría SamperFundador y Director Científico

georgie Ragó de de ZubiríaCofundadora alejandro de Zubiría Ragó Director Fundación Social Alberto Merani Director Editorial Universitaria Alberto Merani

Juan Sebastián de Zubiría RagóDirector General Unidad de ProyectosPresidente Fundación Tecnológica Alberto Merani

Patricia Parra SarmientoMiembro de Asamblea General

autores Miguel De Zubiría SamperWalter Sánchez ChinchillaEsperanza Reyes de RíosCarlos Alberto De Zubiría BazurtoNubia Isabel Valero MorenoSonia Ríos ÁngelTeresa del Rosario Vinueza BrittoRuth Ligia Portero FloresAlejandro De Zubiría RagóArnulfo Mesa LaraJuan Sebastián De Zubiría RagóPatricia Beatriz Vega GarcíaMarco Gudiño MejíaLaureano Coral QuinteroJaneth Rosas CharríaJorge Giraldo Rodas

Área: EducaciónPrimera edición: Bogotá, Colombia, agosto de 2018ISBN. 978-958-5513-00-6 © Fundación Tecnológica Alberto Merani - Carrera 10 #23-32 - Tel. (57+1) 2841086© Fundación Internacional de Pedagogía Conceptual Alberto Merani - Carrera 10 #23-32 - Tel. (57+1) 7433399© Fundación Social Alberto Merani - Carrera 11 # 18-58 sur Barrio Ciudad Jardín - Tel.(57+1) 7038854© Academia Colombiana de Pedagogía Conceptual – Cel. 3502441692© Ediciones de la U - Carrera 27 # 27-43 - Tel. (+57-1) 3203510 www.edicionesdelau.com - E-mail: [email protected] Bogotá, Colombia Coordinación editorial: Adriana Gutiérrez M.Ilustración carátula: Georgie Ragó de De Zubiría Impresión: DGP Editores SAS. Calle 63 #70D-34, Pbx. (57+1) 7217756Impreso y hecho en Colombia Printed and made in ColombiaNo está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopia, por registro y otros medios, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright.

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Contenido

PrólogoEl corazón de la Pedagogía Conceptual ......................................................................... 7Miguel De Zubiría Samper

MÓDULO 1: Pedagogía afectiva .........................................................................17

Pedagogía conceptual afectiva: libertad y autorrealización .................................19Miguel De Zubiría Samper

Educar para el futuro, seis mundos ................................................................................49Walter Abel Sánchez Chinchilla

MÓDULO 2: Pedagogía conceptual afectiva ...................................................63

Desarrollo afectivo del ser humano: vínculos y cualidades ...................................65Esperanza Reyes de Ríos

Desarrollo afectivo del ser humano: motivaciones y metas ..................................91Nubia Isabel Valero Moreno

Carlos Alberto De Zubiría Bazurto

El talento artístico y la formación de mentes estéticas ........................................ 113Sonia Ríos Ángel

MÓDULO 3: Pedagogía conceptual cognitiva ...............................................131

Enseñar a Pensar ................................................................................................................. 135Teresa del Rosario Vinueza Britto Ruth Ligia Portero Flores

Pedagogía conceptual una puerta al futuro de la educación - Miguel De Zubiría Samper

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Teoría de las seis lecturas................................................................................................. 169Alejandro De Zubiría Ragó Arnulfo Mesa Lara

Metacognición en la educación superior .................................................................. 189Juan Sebastián De Zubiría Ragó Patricia Beatriz Vega García

¿Qué y cómo formar en la primera infancia? Aplicación de Pedagogía Conceptual ......................................................................... 221Marco Gudiño Mejía

MÓDULO 4: Pasado, presente y futuro de pedagogía conceptual ............239

Biografía de pedagogía conceptual ........................................................................... 241Laureano Coral Quintero Janeth Rosas Charria Jorge Giraldo Rodas

Didáctica conceptual socrática ..................................................................................... 257Miguel De Zubiría Samper

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Prólogo

El corazón de la Pedagogía Conceptual

Miguel De Zubiría Samper

Protéptica

“En la obra maestra de Tomás Moro (1516), los habitantes <<aman y veneran a Dios Todopoderoso, al que debemos nuestra existencia y nuestra potencial

felicidad>>. Pero también <<consideran que el disfrute de la vida […] es el objeto natural de todos los esfuerzos humanos>>, afanándose con razón y el intelecto

para otorgarse a sí mismos medios para disfrutar”1.

Pedagogía Conceptual no son sus diversas teorías educativas, sino una pre-gunta, y solo una: ¿qué enseñar hoy? Única guía permanente y perdurable en estos 30 años de reflexión, investigación e innovación educativa incesante.

Y todavía hoy me parece la pregunta educativa central, de cualquier tiempo y cualquier época. Sin embargo, prácticamente nadie se la fórmula; se da por sentado el eterno quadrivium heredado desde Comenio: matemáticas, cien-cias, sociales y lenguajes. Se asume como cuestión central los cómo enseñar o las didácticas, enseñar lo mismo de siempre, inalterable, como si la historia estuviese detenida. Solo Pedagogía Conceptual se interroga el qué; lo ha he-cho sin descanso.

Más allá de sus 6 teorías, su esencia es una y el mismo interrogante siempre: ¿qué enseñar hoy? Le interesa la pertinencia muy sobre la calidad. Diseñar una educación pertinente es su invariante funcional -diría el maestro Piaget- o

1 McMahon, Darrin M. Una historia de la felicidad. Santillana Ediciones. México. 2006. Pág. 172.

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su identidad. Si te apasiona esta pregunta: ¡eres un pedagogo conceptual!, aunque no hayas leído ninguno de los 27 libros conceptuales, o las decenas de publicaciones.

“Sin embargo, se me ocurrió que ser desdichado era fácil, en realidad, era la manera más fácil de hacer las cosas; no exigía valor, esfuerzo ni grandeza.

Cualquiera podía serlo. La verdadera realización, comprendí a una temprana edad, era luchar por ser feliz” 2.

Pedagogía Conceptual busca incansablemente la pertinencia educativa, es decir, la respuesta a qué enseñarles hoy a nuestros hijos y estudiantes. Sus resultados atañen no solo a los profesores, también a papás y mamás, directores de curso, coordinadores, a las alcaldías, Secretarías, al MEN y a los teóricos de la Pedagogía.

Irónica. ¿Qué consideras que identifica mejor a la Pedagogía Conceptual?

“Lo que somos hoy viene de nuestros pensamientos de ayer, y nuestros actuales pensamientos construyen nuestra vida futura:

nuestra vida es una creación de nuestra mente”, Buda3.

Por favor, ordena de 1 a 6 las siguientes opciones. 1 la más característica, 6 la menos. Destínale el tiempo requerido, parece sencillo, pero es complejo.

_____ Mentefactos_____ Teoría de las Seis Lecturas y operaciones intelectuales_____ Talento y creatividad_____ Vínculos y felicidad_____ Cualidades humanas_____ Pedagogía Afectiva

Todas son teorías de Pedagogía Conceptual, desarrolladas durante estos ya treinta largos años. Ninguna es esencial a la Pedagogía Conceptual, pues no da respuesta definitiva a la pregunta: ¿qué enseñar hoy? Fue, es y siempre será una teoría abierta en continua gestación, indetenible. Mientras existan nuevos y mejores planteamientos que los anteriores ante su eterna pregunta,

2 Prager, Dennis. A la conquista de la felicidad. Grupo Editorial Norma. Bogotá. 1999. Pág. 8.3 Haidt, Jonathan. La hipótesis de la felicidad. Editorial Gedisa. Barcelona. 2006. Pág. 41.

Prólogo

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¡la Pedagogía Conceptual estará viva! Es un preguntar, no un responder, un quehacer eminentemente socrático.

Durante su génesis, se identifican seis grandes respuestas. Tiene un pasado, un presente y un destacado futuro, recién nacido dos meses atrás. Mi sorpresa es enorme cuando compruebo que el futuro de la Pedagogía Conceptual tiene ya casi 30 años, ¡pero no lo vimos como futuro! Y sí lo es, el punto de llegada estaba en el origen.

La última gran paradoja es que el futuro de la Pedagogía Conceptual lo condensa el libro virtual Educar para la Libertad, el cual hasta ahora nadie lee, ni siquiera yo.

La mejor respuesta al ejercicio sería la siguiente: ¿es la tuya?

--6-- Mentefactos--5--Teoría de las Seis Lecturas y operaciones intelectuales--4-- Talento y creatividad--3-- Vínculos y felicidad--2-- Cualidades humanas--1-- Pedagogía Afectiva

Significa que los últimos componentes o teorías en aparecer superan los an-teriores, como era de esperar. La arqueología corre inversa a la historia. Este prólogo es un ensayo de arqueología conceptual de las teorías llamadas Peda-gogía Conceptual, cuyo primer resultado descubre que sus teorías valen me-nos que su pregunta inicial: ¿qué enseñar hoy? El motor inagotable de nuevas y más poderosas teorías.

Mayéutica

“La ideación suicida parece muy común en los adolescentes. El centro de Control de Enfermedades (CDC) realizó la

investigación sobre la conducta de riesgo en 16 mil estudiantes de secundaria, a quienes preguntó: «¿ha pensado seriamente

en suicidarse en el último año?». Entre el 25 y el 37% aceptaron haber pensado en ello. De estos, el 75% había

formulado algún plan para suicidarse”4.

Sus teorías mantienen su valor hoy; no hemos de sepultar todavía a ningu-na, tienen plena vigencia. Son respuestas a problemas muy relevantes de la

4 De la Garza, F. (2007). Depresión en la infancia y adolescencia. México: Trillas. Pág. 102.

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educación actual y, sobre todo, del futuro, la dimensión privilegiada de la Pe-dagogía Conceptual. Seis respuestas a ¿qué enseñar hoy? agrupadas en tres capítulos:

Pedagogía Conceptual Cognitiva.Pedagogía Conceptual Afectiva.Pedagogía Afectiva.

Pedagogía Conceptual Cognitiva

Fue la primera respuesta de 1987. Postuló que, a cambio de enseñar fechas, informaciones, longitudes de los ríos, fechas de batallas, nombres de virreyes... como era y aún hoy es la tradición al enseñar Ciencias Sociales, era mejor ense-ñar conceptos sociales, como clase social, estado, cambio social, revolución, zonas geográficas..., para que nuestros aprehendices comprehendan su socie-dad. De allí su nombre Pedagogía Conceptual.

Su primer interesante hallazgo fueron los mentefactos: nocionales, propo-sicionales, formales, argumentales, conceptuales, categoriales. Herramientas metacognitivas para organizar grandes volúmenes de conocimientos, los más relevantes, y estructurarlos en la mente. Todavía es válido y pertinente diseñar currículos conceptuales para las diversas áreas curriculares.

Se comprobó que, para aprehender estructuras cognitivas, los aprehendices debían dominar ciertas operaciones intelectuales. Entre las siete principales, ciertamente leer, cuando desarrolla la útil Teoría de las Seis Lecturas.

A los pocos años de inicio, el antiguo e innovador Instituto Alberto Merani, ya no lo es, ofreció talleres para jóvenes talentos en diversas disciplinas. Mos-traron que de poco sirven los conceptos o las operaciones intelectuales si no engranan en una genuina pasión de largo aliento que canalice los esfuerzos intelectuales y práxicos de un joven. El talento y la creatividad son el punto de llegada de la Pedagogía Conceptual cognitiva, dominante en aquel entonces.

¿Qué tal este ejemplo de talento y decisión? “A los 78 años, Harry decidió em-barcarse en un viaje en su velero, ¡alrededor del mundo! A los 88 años decidió que era una buena oportunidad para repetir el viaje”5.

5 Niven, David. Los cien secretos de la mejor mitad de la vida. Editorial Norma. Bogotá. 2006. Pág. 24.

Prólogo

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Pedagogía Conceptual Afectiva

“Los vínculos íntimos con otros seres humanos son el centro alrededor del cual la vida de una persona gira, no solamente cuando es un bebé,

un niño pequeño o un escolar, sino durante toda su adolescencia y también durante sus años de madurez, así como durante su vejez. Es de estos

vínculos íntimos que una persona obtiene su fortaleza y el placer de vivir”6.

Para la sociedad actual hemos de enseñar conceptos, operaciones intelec-tuales y explorar los talentos de cada estudiante. Tesis que hoy sigue siendo perfectamente válida.

Todo parecía claro; sin embargo, quince años atrás, una circunstancia fortuita vigorizó la Pedagogía Conceptual: la Liga Colombiana Contra el Suicidio. Nos sacó de las materias tradicionales, del quadrivium, y nos puso frente al sentido de la vida y de la muerte. Muchos intentos de suicidio los realizan muchachos con educación profesional y altos coeficientes intelectuales. ¿Cómo puede ser? Pues, presumiblemente, dominan los conceptos, las operaciones intelectuales y son talentosos. ¿No es esto lo definitivo? No.

La primera demoledora respuesta la dio Howard Gardner, con su Teoría de las Múltiples Inteligencias. No es una, como pensamos hasta 1983, ¡sino siete in-teligencias!; ahora propone nueve. Entre esas, descubrió dos definitivas para el buen vivir: la inteligencia interpersonal y la inteligencia intrapersonal.

En 1997, Jeanne Segal subraya el error de la Psicología Cognitiva: “Nuestro coeficiente intelectual puede ayudarnos a comprender y afrontar el mundo a determinado nivel, pero precisamos nuestras emociones para entendernos y tratar con nosotros mismos y, a su vez, entender y tratar con los demás”7. Por supuesto que sí.

La Liga Contra el Suicido nos conectó con trabajos muy prometedores cono-cidos como Psicología Positiva, cuyo nombre lo dice todo, ocupada principal-mente de la felicidad o el bienestar subjetivo.

Abordamos los primeros encuentros con jóvenes suicidas con una nueva herramienta, de gran empleo actual: los afectogramas. Estos grafican qué tan bien, aceptable o mal operan los diversos vínculos de un niño, joven o adulto, miden su felicidad o infelicidad; ni más, ni menos. El poeta De Villena destacó su importancia: “La felicidad es el único problema que valdría la pena resolver

6 Myers, David G. Psicología Social. McGraw-Hill. 2000. Pág. 466.7 Segal, Jeanne. Su inteligencia emocional. Ed. Grijalbo. España. 1997. Pág. 18.

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en la vida. Si no se es feliz, ¿qué importa el resto? ¿Por qué no morir, si no hay otra cosa que desdicha?”8.

“Una montaña de datos revela que la mayor parte de las personas es más feliz con vínculos que sin ellos. Un gran número de encuestas

efectuadas en decenas de miles de europeos y norteamericanos ha producido el mismo resultado: al ser comparadas con las personas solteras

o viudas y especialmente con las divorciadas o separadas, las personas casadas reportan ser más felices y estar más satisfechas con la vida”9.

Debíamos enseñarles a nuestros estudiantes a iniciar, desarrollar, enriquecer y, cuando hubiese lugar, cerrar vínculos, definitivo para ellos, si anhelamos que lleven las mejores vidas posibles. Un estudio impactante comprobó que la feli-cidad aportada por 17.000 horas de educación es inferior a ser un buen amigo. Luego deberíamos incluir la asignatura amigología y otras experimentadas por muchos años por la Fundación Alberto Merani con prometedores resultados.

“Por cada hora pasada usando internet, se disminuye en 24 minutos el contacto con la gente, con los amigos, los compañeros de tareas y la familia”10.

La pregunta fue: siendo tan importantes los vínculos, ¿por qué no todos los niños y jóvenes los desarrollan? ¡Porque no se les enseña! Las familias y, en par-ticular, la educación son de cabo a rabo cognitivas, no forman afectivamente. No hay tiempo ni recursos, ni saberes.

Se gesta la teoría de las cualidades humanas. Con estás a la mano y los afec-togramas se creó un ambicioso programa curricular: el Programa Sócrates. Las dos nuevas respuestas a ¿qué enseñar hoy? fueron: vínculos y cualidades hu-manas. ¿Cómo? Mediante el Programa Sócrates. Pronto enfrentó un problema serio, los vínculos son poco modificables y las incompetencias peor. ¿Entonces?

“El sentimiento de soledad, más que el mero número de conocidos y contactos que una persona realmente tenga, es el correlato más directo a la salud: cuanto más sola se sienta una persona,

peor tenderán a ser sus funciones inmunológicas y cardiovasculares”11.

8 De Villena, Luis Antonio. La felicidad y el suicidio. Editorial B, S. A., Barcelona. 2007. Pág. 10.9 En Myers, David G. Psicología Social. McGraw-Hill. 2000. Pág. 605.10 Goleman, Daniel. Inteligencia social. Editorial Planeta. México. 2006. Pág. 15.11 Goleman, Daniel. Inteligencia social. Editorial Planeta. México. 2006. Pág. 342.

Prólogo

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La respuesta duró años en llegar: una serie de libros para padres/madres de familia destacó la importancia de formar hijos emprendedores y apasionados. ¿Cómo? Ni idea. Y en el 2017 vio la luz editorial el más polémico libro de 27: ¡El genial capitalismo!, cuya tesis es que el capitalismo es la primera sociedad de la larga historia y larguísima prehistoria humana que requiere anhelos, sueños, ilusiones, metas personales, libremente elegidas. El capitalismo, más que un sistema económico, es un sistema psicológico.

Era la pista que buscamos más de diez años sin ningún resultado prometedor: ¡las metas personales! Las requiere el capitalismo para operar y el joven para hacerse autotélico o autónomo.

Pedagogía Afectiva

“Por cada cien artículos especializados sobre la tristeza, solo se publica uno sobre la felicidad”12.

Las metas personales llevaron a los metagramas. El genial capitalismo permi-tió entender algo refundido en la pertinencia, concepto central de la Pedago-gía Conceptual. Luego de treinta ininterrumpidos años de estudio, sabíamos mucho sobre los individuos, ¡aunque nada sobre su sociedad! Si bien, una edu-cación es pertinente cuando humaniza a los jóvenes para disfrutar su sociedad presente y sobre todo futura.

¿En cuál sociedad habitan nuestros jóvenes? ¡En el genial capitalismo! Genial porque requiere seis libertades individuales. Requiere trabajadores con anhe-los, metas, sueños, ilusiones. ¿Los estamos formando? No, para nada. La vieja educación solo educa muchachos obedientes, respetuosos, responsables, ja-más jóvenes autotélicos. Tesis futura para Pedagogía afectiva: formar jóvenes autotélicos que disfruten y exploten el genial capitalismo. ¿Cómo?

Ya lo sabíamos hace treinta años, recién se publica en el libro virtual Educar para la libertad.

12 Seligman, Martin E. P. La auténtica felicidad. Ediciones B, S. A., Barcelona. 2003. Pág. 21.

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Conceptual

Pedagogías formativasEducar para el buen vivir

C: Pedagogía conceptual hoy

Pedagogías activas

¿Qué enseñar hoy?Pertinencia educativa:

equilibrio individuo y sociedad

Pedagogía conceptual 1 Cognitiva

PC 1.1 Ciencias sociales Conceptos sociales

Fundamentos Mentefactos

PC 1.2 Mentefactos Operaciones intelectuales

T G lecturas

PC 1.3 Conceptos+ Operaciones Talento y creatividad

Talento y creatividad

PC 2.1 Liga + psicoligía positiva Vinculos y afectogramas

Evaluaciones actitudinales Socio biología Psicología de la felicidad

PC 1.2 Vinculos Cualidades humanas

Afectividad humana

PC 1.3 Vinculos+ Cualidades Programa Sócrates

El genial Capitalismo

PC 3.1 Educar para la libertad

PC 3.2 FIOPA

(Pedagogía conceptual diciembre 2017)

Pedagogía conceptual

Pedagogía conceptual 2 Afectiva

Pedagogía afectiva 3

P 1.1. La Pedagogía Conceptual trabaja la pregunta ¿qué enseñar hoy?P 2. La Pedagogía Conceptual pertenece a las pedagogías formativasP 3. La Pedagogía Conceptual difiere de las Pedagogías activas por sus fundamentosP 4. Tres rupturas básicas sobresalen en Pedagogía Conceptual

P 1.1. La Pedagogía Conceptual trabaja la pregunta ¿qué enseñar hoy?

Pedagogía Conceptual es una pregunta; nada más. La pregunta ¿qué enseñar hoy?, por ende, atiende la pertinencia, cuya última respuesta es formar mucha-chos “auto” (ellos mismos) “télicos” (diseñen y realicen SUS sueños).

P 2. La Pedagogía Conceptual pertenece a las pedagogías formativas

Estas educan a sus niños y jóvenes para el buen vivir o la buena vida. No -o no solo- para trabajar, sino de cara a los seis mundos en los cuales discurre su adultez. El mundo de:

Prólogo

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1. Amor2. Trabajo3. Proyectos4. Intelectual5. Tiempo libre6. Amistades y grupos

P 3. La Pedagogía Conceptual difiere de las Pedagogías activas por sus fundamentos

La tesis del buen vivir, la buena vida o educar para la vida la formularon desta-cados educadores. Entre ellos Montessori, Decroly, Pestalozzi, Dewey…

Solo que en su momento, inicios del siglo XX, se desconocía qué era una buena vida. Gracias a cientos de investigaciones de la reciente Psicología Positiva se conocen científicamente qué factores producen infelicidad, cuáles son irrele-vantes y cuáles sí crean felicidad. Estas investigaciones fundamentan la Peda-gogía Conceptual actual.

P 4. Tres rupturas básicas sobresalen en Pedagogía Conceptual

La primera gran ruptura de la Pedagogía Conceptual ocurrió al nacer, cuando plantea modificar drásticamente el cómo y el qué enseñar en Ciencias Sociales. Que no eran Ciencias Sociales, sino listados de batallas, ríos, departamentos, virreyes: informaciones carentes de conceptos.

La segunda ocurre con la Liga Colombiana Contra el Suicidio, que sitúa la pre-gunta qué es una buena vida y origina la Pedagogía Conceptual afectiva.

La tercera ruptura ocurrió más recientemente con la publicación del libro Edu-car para la libertad, el cual recoge la esencia del planteamiento actual: formar jóvenes autotélicos y una didáctica probada durante diez años con logros enormes en el anterior e innovador Instituto Alberto Merani. ¡Ni más, ni menos!

Expresiva 1. Modelación. Mis tareas

En su didáctica, la Pedagogía Conceptual concluye siempre con la fase expre-siva: aplica los conocimientos vistos primero en el profesor, en este caso yo.

Mi mayor aprehendizaje con este prólogo es descubrir la Pedagogía Concep-tual siempre idéntica y diferente a sí misma: permanece invariable, a pesar de mutar. Gran paradoja brotada de ser no una reunión de teorías, sino una y

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siempre la misma pregunta: ¿qué enseñarles hoy a nuestros estudiantes? Lo esencial para vivir y disfrutar al máximo su sociedad, de cara a ellos, a los suyos y a sus contemporáneos.

Para cumplir esta ambiciosa meta educativa, solo requieren convertirse en ge-nuinos jóvenes autotélicos, que, como vamos viendo, es una labor extensa, co-menzada a sus tempranos doce meses de edad. Siempre y cuando los papás, los colegios y las universidades entiendan la importancia crucial de educar para la libertad, no para la obediencia.

He de concentrarme en tres tareas personales:

1. Desarrollar y afianzar la FIDPA, Fundación Internacional de Psicología y Pedagogía Afectiva.

2. Promover y realizar seminarios sobre el libro virtual Educar para la liber-tad, que contiene los fundamentos y la didáctica para educar jóvenes autotélicos.

3. Demostrar que los metagramas atenúan el riesgo de suicidio en jóvenes con intentos previos.

Expresiva 2. Simulación

• ¿Cuáles son tus principales conclusiones sobre la Pedagogía Conceptual?• ¿Cuáles son tus tareas personales?

Expresiva 3. Ejercitación

Pienso que entre todos hemos de asumir el reto de crear y poner a andar la Academia de la Pedagogía Conceptual. Nada más ¡ni menos!

Pedagogía afectiva: libertad y auto-realizaciónMiguel De Zubiría SamperCreador de Pedagogía Conceptual

Psicólogo, Pontificia Universidad Javeriana. Magister Honoris Causa en Educación e Inteligencia, Pontificia Universidad Católica del Ecuador. Doctorado en Investigación Educativa, Universidad de Sevilla – España. Estudios universitarios en música, biología y química, filosofía, matemáticas y lógica dialéctica.

Sus trabajos de los últimos años se focalizan sobre la olvidada afectividad humana y el tema de la felicidad, vistas ambas desde un abordaje científico y riguroso, y también su contraparte, las tres mayores epidemias psicológicas de nuestro tiempo: la Soledad, la Depresión y el Suicidio.

Autor de veinticinco libros en psicología y educación. Entre ellos: Teoría de las Seis Lecturas Tomos I y II; Fundamentos de Peda-gogía Conceptual; Mentefactos I; ¿Qué es el Amor? El Mito de la Inteligencia y los Peligros del Cociente Intelectual; La Afectividad Humana; Psicología de la Felicidad; Formar no solo Educar; Cómo ser Feliz; El Genial Capitalismo.

Investigación en Psicología Educativa Contemporánea: Afecto-gramas y Metagramas.

MÓDULO 1: Pedagogía afectiva

Educar para el futuroWalter Sánchez Chinchilla

Pedagogo Conceptual, Contador Público egresado de la UFPS de Cúcuta, Especialista en Desarrollo Intelectual y Educación de la Fundación Internacional de Pedagogía Conceptual Alberto Merani-USC. Magister en Educación Docencia de la universidad de Manizales. Ex catedrático de las Universida-des Libre de Pereira, de Sucre, Autónoma de Colombia, de Caldas y de Manizales. Docente invitado en las universidades de Medellín, del Magdalena, Libre de Pereira, del Valle, Eafit y la UPTC. En la actualidad profesor de tiempo completo de la Universidad Central en Bogotá y miembro del Grupo de Investigación Ataralawaa Amma.

Autor del libro "Control Interno Conceptual y Práctico" (en segunda edición) y coautor del libro "Contabilidad Concep-tual e Instrumental" (en quinta edición), Valores Contables Competencias Socioafectivas en Contaduría Pública y Teoría del Control escritos con base en el pensamiento conceptual.

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Pedagogía conceptual afectiva: libertad y autorrealización

Miguel De Zubiría Samper

Fase afectiva

Protéptica. ¿Eres feliz?

“Las relaciones cercanas que brindan apoyo, en las que uno siente que agrada, en las que hay reafirmación y estímulo de los amigos íntimos

y de la familia, predicen tanto la salud como la felicidad”, Myers, David G.1.

Esta podría ser la pregunta personal más importante de la vida: ¿eres feliz? Esta decide la calidad general de vida que llevas. ¿Lo eres, cuánto? Yo lo soy al 73% y tres años atrás lo fui al 60%, luego he mejorado bastante… para mi edad.

Tengo dos ventajas sobre ti. La primera, que entender la felicidad resulta de-finitivo para la vida, ni que decir para la de un niño o un joven, quienes recién comienzan a vivir con su destino en plena construcción. Al finalizar este breve artículo estaremos a mano: reconocerás la felicidad como un asunto capi-tal para niños y jóvenes; más para tu existencia próxima, ¡tienes mucho por mejorar-te!

La segunda ventaja es que he cuantificado mi felicidad con precisión, y no un año, sino durante doce años continuos, desde el 2006. En la actualidad soy un

1 Myers, David G. Psicología Social. McGraw-Hill. 2000. Pág. 602.

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73% feliz. Finalizada la lectura de este –espero- interesante artículo, te quedan varias tareas por cumplir. Por ejemplo, conocer tu porcentaje de felicidad, para lo cual te recomiendo mi libro ¿Eres feliz? y realizar el taller de felicidad personal. Te restan años para descifrar la pregunta más compleja de la existencia, lo fue para mí: extraer mis genuinas pasiones, ¡son seis!, recién dos meses atrás lo descubrí.

La felicidad y el autoconocimiento permiten llevar la mejor vida posible que te mereces, también tus actuales estudiantes; de eso trata la Pedagogía Con-ceptual Afectiva, de formar niños y jóvenes más felices y autotélicos. Esta bella palabra será muy importante, de momento solo regístrala: autotelia.

Comencemos: ¿es la felicidad un asunto pedagógico o psicológico?

Pareciera psicológico por estudiarlo la Psicología Positiva; solo treinta años se interrogó por las fuentes de felicidad. Hoy más de ochenta países indagan este tema maravilloso, participan psicólogos, neurólogos, sociólogos, hasta arquitectos y economistas. Todo lo humano se relaciona, más temprano que tarde, con la felicidad o infelicidad. Sabemos mucho sobre qué hace felices a las personas.

Veamos una primera conclusión. Siempre se pensó que la felicidad dependía de la cultura y de cada individuo concreto: que cada cultura y cada quien son felices a su manera. No parece ser así. Para sorpresa de sociólogos y antropólo-gos, la felicidad es un invariante universal antropológico y psicológico, ajeno a la cultura y a la sociedad singular, ajena a cada persona concreta.

Por ejemplo, sin importar su cultura o individualidad, quienes son más felices crean gratos y enriquecedores vínculos y quienes los tienen son más felices. Claro, sencillo, directo.

Retomemos la pregunta inicial: ¿es la felicidad una cuestión psicológica o pe-dagógica? La Psicología no responde algo central, si bien nos conecta con la Pedagogía: ¿por qué no todas las personas crean gratos vínculos que las harían felices? En esencia, hay tres hipótesis:

1. Porque carecen de metas o motivaciones personales que requieran co-nectarse con otros. En mi época, si quería jugar quemados o cualquier otro juego colectivo, debía ir puerta tras puerta invitando a mis vecinos y convenciéndolos. A ellos les ocurrirá igual.

2. Porque son escasas sus competencias o cualidades interpersonales. O peor, presentan incompetencias como ser antipático, conflictivo, aislado o cualquiera otra de las diez incompetencias interpersonales.

Módulo 1: Pedagogía afectiva - Pedagogía Afectiva: Libertad y Auto-realización

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3. Porque sus pobres vínculos les impiden ejercitar sus competencias y crean un círculo vicioso.

Más interesante es lo que viene: alguien le podría enseñar a sus estudiantes a:

1. ¿Crear metas o motivaciones interpersonales? Sí.2. ¿Ejercitar sus competencias o cualidades interpersonales? Sí.3. ¿Mejorar sus pobres vínculos y salir del círculo vicioso? Sí.

Todas las respuestas son claras, sí. ¿Pero quién podría enseñar estas destrezas definitivas para ser feliz? ¡Un pedagogo afectivo! Luego, si bien la felicidad es un objeto psicológico, sus poderosas aplicaciones conectan con la Educación y la Pedagogía. En particular, con la Pedagogía Afectiva, nuestro magnífico tema a lo largo y ancho del presente artículo.

Irónica. Sabes más de fraccionarios, gramática y futbol ¡que de ti mismo!

“Un niño de cinco años evacuado de Londres, durante la última guerra mundial y separado de sus padres, cuando se le preguntó quién era,

respondió: «No soy nada de nadie»”, Desmond Morris (1984)2.

Te pregunto: ¿podrías sumar 2/4 + 3/6 = ? Me temo que sí, desde pequeños sumamos fraccionarios decenas o cientos de veces. Lo primero es hallar el mí-nimo común múltiplo de los denominadores. Aunque no he sumado durante décadas, seguro lo logro y tú también. ¿Cierto?

¿Puedes identificar el error gramatical en oraciones como: Él salió mañana con su perro? Me temo que sí, somos lingüistas expertos, desde niños. Tal experticia gramatical demuestra cualquier nativo de una lengua que el lin-güista Noam Chomsky postula un mecanismo lingüístico innato, venido en la dotación biológica de la especie. Posiblemente exista tal mecanismo, en su magnífica arqueología de la mente; Steve Mithen lo encuentra al comparar nuestra mente con la de monos antropoides carentes de tal módulo mental, las diferencias resultantes son enormes.

¿Sabes cuándo un jugador de futbol comete una falta, cuál y cómo la sanciona el reglamento? Me temo que sí, lo aprehendimos en nuestras clases de Educa-ción Física o, mejor aún, con nuestros amigos.

2 Morris, Desmond. El zoo humano. Plaza y Janés. Barcelona. 1984. Pág. 129.

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Sobre lo otro sabemos mucho; sin embargo, muy pocos jóvenes, adultos… o viejos pueden responder las cuatro preguntas de la vida: 1-- ¿Para dónde vas?, 2-- ¿Con quiénes?, 3--¿Quién eres?, 4-- ¿Qué quieres, en verdad? Casi nadie lo logra, contraviniendo el precepto moral de los griegos. ¿Cuál es la razón de esta gran omisión intelectual?

Nosotros

Los otros Lo otro

Una razón es saber mucho del mundo, la gran obsesión de los colegios y las universidades, aunque muy poco de los otros y casi nada de nosotros mismos. Los griegos pensaron que deberíamos saber todo de nosotros, mucho de los otros y algo del mundo exterior. El MEN puso las cosas patas arriba, invirtió los valores y las prioridades culturales.

¿Qué ocurriría si los estudiantes aprehendiesen mucho de ellos mismos y de las personas que los rodean? Podrían originar una gran y genuina re-evolución educativa que sitúe al sujeto como centro de la educación y no cual simple apéndice receptor.

Mayéutica. ¿Educar para la obediencia, a educar para obedecer-se?

“La felicidad es el único problema que valdría la pena resolver en la vida. Si no se es feliz, ¿qué importa el resto?

¿Por qué no morir si no hay otra cosa que desdicha?”,

De Villena3.

3 De Villena, Luis Antonio. La felicidad y el suicidio. Editorial B, S. A. Barcelona. 2007. Pág. 10


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Tesis: debemos educar a nuestros niños y jóvenes para obedecer-se

Parece muy sencillo y progresista afirmar: ¡para obedecer-se! Aunque todas las sociedades agrícolas y precapitalistas, sin excepción, educaron a sus hijos y estudiantes a obedecer a otros. Funcionaron bien, imperaba el orden social y, salvo frecuentes guerras, perduraron cientos o miles de años, recuerda la so-ciedad egipcia o romana. En general, cualquier sociedad requiere obediencia, todas menos la sociedad capitalista.

El mecanismo fue sencillo: los padres le enseñaron a sus hijos el ABC de la obediencia, adelante sus profesores y luego sus futuros jefes. A las buenas o muchas veces a las malas. ¿Por qué hoy debería ser distinto?

Arg. 1. Para obedecer en sociedades tradicionales

“Los vínculos íntimos con otros seres humanos son el centro alrededor del cual la vida de una persona gira, no solamente cuando es un bebé, un niño pequeño

o un escolar, sino durante toda su adolescencia y también durante sus años de madurez, así como durante su vejez. Es de estos vínculos íntimos que una

persona obtiene su fortaleza y el placer de vivir”, Myers, David G. (2000)4.

4 Myers, David G. Psicología Social. McGraw-Hill. 2000. Pág. 466.

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En una sociedad jerárquica o tradicional obedecer y ser obediente fue magní-fico. Define el segundo mandamiento de la religión cristina, amar y obedecer a sus padres, luego de amar a Dios por sobre todas las cosas. Si los peque-ños obedecen a sus padres, luego a sus profesores y jefes las cosas marchan perfectamente, única cualidad esencial de quienes jamás serán gobernantes. El pueblo siempre fue el 95% de la población, la inmensa mayoría; obedecer cimentó la sociedad, garantizó el orden y el buen funcionamiento de cualquier sociedad hasta 1770.

Sociedades heterónomas, con precisas figuras de autoridad, imponían sus normas, leyes y principios, casi siempre por la fuerza, en ocasiones brutal. Por su importancia para mantener unida la sociedad, las sanciones ante cualquier desobediencia fueron severas.

Los padres le definían todos los quehaceres a cada niño y así ocurrió igual mi-les de años. Eran sociedades tradicionales, apoyadas en la tradición. Solo los locos cuestionaban el orden establecido, y sabemos bien cómo acabaron.

Arg. 2. Para obedecer-se en sociedades libres

Los padres le enseñaron a sus hijos el precepto central: “¡Obedece!”. Cualidad humana por excelencia para el grueso de la población, como tú, yo o María; e igual sorprendentemente para los funcionarios y gobernantes. Nadie se esca-pó de obedecer a otros.

Durante los últimos doce mil años, ni el más loco intuyó una sociedad de hombres y mujeres libres, cada quien obediente a sí mismo, ¡pues crearía el caos absoluto!... Solo el genial capitalismo, esta innovadora y re-evolucionaria sociedad logra lo impensable: que cada quien sea libre de trabajar o no, de levantarse o no, de grabarse tatuajes o cuidar su piel, de tener una o muchas parejas, y así indefinidamente. Solo hay una regla: para obtener los recursos para lograr tus sueños realiza tu mejor trabajo a otros. Es la primera sociedad de hombres y de mujeres libres de la larga historia humana, promueve plenas libertades de:

1. Anhelar Lo que quieras2. Aprehender Lo que quieras3. Trabajar Como y donde quieras4. Emprender La empresa que quieras5. Amar A quien quieras6. ¡Ser feliz!


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Obedecer-se es esencial en sociedades libres, como el capitalismo, que con sus seis geniales libertades requieren jóvenes autotélicos. Sociedad loca les pare-ce a los actuales socialistas, que las odian, aborrecen las libertades capitalistas, prefieren que el Estado decida por ellos.

Der. Máximo cambio educativo

El impacto del capitalismo ha sido asombroso. En las últimas décadas cambió todo: la tecnología, el trabajo, las comunicaciones, todo, solo se le ha resistido la vieja educación tradicional. Todavía hoy la sufren nuestros niños y jóvenes, encerrados en salones con pupitres alineados, silentes escuchan a su profesor, representante de la sociedad tradicional.

Superar este desajuste requiere no un cambio didáctico, ni evaluativo, ni curri-cular, ¡sino un cambio total de un paradigma educativo a otro; una completa revolución cultural! Todavía por nacer, que le dé vía libre a la educación para la libertad, centrada en obedecerse. ¿Es posible enseñar este arte? Lo desconoce-mos; sí sabemos que sin estas nuevas enseñanzas las escuelas y colegios segui-rán enviando obedientes empleados al mercado laboral, cada vez más inútiles.

En este breve artículo aprehenderás:

“La época moderna ha combatido muchas enfermedades, pero parece que una de las plagas de la humanidad en realidad ha empeorado: la soledad”.

1. Por qué hoy se deben formar niños y jóvenes felices que se autoconozcan.

2. La esencia de la Pedagogía Conceptual Afectiva, volcada en formar estu-diantes felices y autotélicos, no solo brillantes.

3. Las cuatro preguntas de la existencia, sin sus respuestas, de momento:

a. ¿Para dónde vas? Tus metas 2018 o metagrama.

b. ¿Con quiénes? Tu afectograma.

c. ¿Quién eres en verdad? Tus cualidades e incompetencias.

d. ¿Qué quieres? Tus motivaciones fundamentales.

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¿Para dónde vas?

¿Quién eres?

¿Qué quieres?¿Con quiénes?

Interesante, ¿cierto?

Conceptual. Pedagogía conceptual afectiva

• Supraordinada. Guía a la Pedagogía Conceptual en la pregunta: ¿qué enseñarles a los niños y jóvenes hoy de cara a su futuro? La pertinencia educativa.


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• Exclusión. La Pedagogía Conceptual Cognitiva forma jóvenes brillantes: enseña operaciones intelectuales e instrumentos de conocimiento.

• Isoordinada. La Pedagogía Conceptual Afectiva forma jóvenes felices y autorrealizados.

• Infraordinada. Tres capítulos estructuran la Pedagogía Afectiva: el autoco-nocimiento, el interconocimiento y comprehender el capitalismo.

Supraordinada. Guía a la Pedagogía Conceptual en la pregunta: ¿qué enseñarles a los niños y jóvenes hoy de cara a su futuro? La pertinencia educativa

“No creemos que la gente sea tímida porque carezca de habilidades sociales, sino porque no las ha practicado lo suficiente —comenta la terapeuta

Nicole Shiloff—. Hablar por teléfono o pedirle una cita alguien son habilidades que se pueden aprender, igual que si se tratara de un revés en tenis.

La clave está en permanecer un tiempo en esa zona incómoda, en aprender a tolerar la ansiedad. Si lo practicas, puedes alcanzar un nivel que deseas”.

Luisa es una muchacha brillante de 13 años, lo ha sido desde niña. Tiene una gran facilidad para comprehender, le basta con escuchar y listo, lo graba, los profesores comentan que no necesita tomar apuntes; por supuesto que no. E igual expresa muy bien sus ideas.

Alberto difiere de ella, cada año pierde un par de materias, es un regular estu-diante, se sitúa al final del salón. Eso sí, saluda con entusiasmo a sus compañe-ros, es simpático, amable y muy optimista. Lo apodan “sonrisal”.

¿Preferirías ser Luisa o Alberto? ¿Brillante o feliz?

Ambas grandes cualidades tienen primera importancia en la vida humana, óptimo sería poseerlas juntas, sin duda. Aunque si solo fuese una, ¿la de quién elegirías? La inmensa mayoría de personas responden las de Alberto, con toda la razón.

Esta pregunta de apariencia ingenua señala dos tipos de pertinencia educati-va: condensadas en la dualidad ¿intelecto o corazón? ¿Cuál de ambas cualida-des importa más para ti: conocimientos o sentimientos? Luisa destaca en sus cualidades intelectuales, Alberto en sus cualidades humanas.

Una educación potenciadora de las operaciones intelectuales, escuchar, expre-sarse y otras, como las de Luisa, tiene pertinencia intelectual. Una educación

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Una puerta al futuro de la educación