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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN
ESCUELA PROFESIONAL DE MEDICINA
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN
PACIENTES DEL SERVICIO DE ORTOPEDIA Y
TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL HONORIO
DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010 – 2015”
Tesis presentada por la Bachiller:
Elizabeth Evelyn Aquino Apaza
Para optar el Título Profesional
de Médico Cirujano
Tutor:
Dr. Luis Dongo Mardini
AREQUIPA – PERÚ
2016
1
ÍNDICE
RESUMEN 2
CAPÍTULO I. INTRODUCCIÓN 3
CAPÍTULO II. MARCO TEÓRICO 6
CAPÍTULO III. MATERIAL Y MÉTODOS 21
CAPÍTULO IV. RESULTADOS 24
CAPÍTULO V. DISCUSIÓN 42
CAPÍTULO VI.
CONCLUSIONES 48
RECOMENDACIONES 49
CAPÍTULO VII.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 50
ANEXOS 53
2
RESUMEN
De las muchas complicaciones que afectan a las personas con diabetes mellitus, ningunas
son tan devastadoras como las relativas al pie, dada la gran prevalencia de la diabetes
mellitus y las graves consecuencias en términos de amputaciones y calidad de vida que
conllevan para los pacientes.
Objetivo: Determinar la prevalencia y tratamiento del pie diabético en pacientes del
servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza
periodo 2010 – 2015.
Material y métodos: Estudio observacional, retrospectivo y transversal. Se incluyeron 115
pacientes hospitalizados con el diagnóstico de pie diabético. Se aplicó una ficha de
recolección de datos. Los datos fueron extraídos de las historias clínicas y transcritos a la
ficha. Los datos se vaciaron al programa Microsoft Excel 2010 y se analizaron mediante
frecuencias absolutas y relativas.
Resultados: La prevalencia de pie diabético fue de 7.5%, la mayor frecuencia se presentó
en el año 2013 (23.48%). El 70.43% fueron varones, la edad promedio fue de 60.78 años y
el 40.00% tenían como ocupación su casa. El 99.13% presentaron Diabetes Mellitus tipo 2,
con un tiempo de evolución de 11 a 15 años (27.83%). El 41.74% de los pacientes se
encontró un tiempo de evolución de la lesión antes de su hospitalización menor a 15 días,
así mismo se determinó que la mayoría se localizó en el antepié (66.09%). El grado de
severidad de pie diabético más frecuente fue el grado IV según la clasificación de Wagner
(41.74%). El germen aislado más frecuente fue el Staphylococcus aureus (25.64%). Al
73.04% se les realizó amputación del miembro inferior afectado, el grado de severidad más
frecuente encontrado es el grado IV; las amputaciones infracondíleas (38.15%) seguidas de
las rayectomías (33.33%) son las intervenciones mayormente practicadas; las
reamputaciones fueron solo del 8.33%. El tiempo de estancia hospitalaria promedio fue de
1 a 3 semanas (47.83%).
Palabras claves: Pie diabético, tratamiento de pie diabético.
3
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
De las muchas complicaciones que afectan a las personas con diabetes mellitus, ningunas
son tan devastadoras como las relativas al pie, dada la gran prevalencia de la diabetes
mellitus y las graves consecuencias en términos de amputaciones y calidad de vida que
conllevan para los pacientes.
Según la Asociación Americana de Diabetes, la prevalencia mundial fue estimada en 2,8 %
en el año 2000, y se prevé que alcanzará el 4,4 % para el 2030, como consecuencia del
envejecimiento de la población y la creciente urbanización. En nuestro medio, la
prevalencia de la diabetes mellitus en Perú, se estima hasta en 8% (1).
El pie diabético incluye una serie de síndromes en los que la interacción de la pérdida de la
sensación protectora por la presencia de neuropatía sensitiva, el cambio en los puntos de
presión a causa de la neuropatía motora, la disfunción autonómica y la disminución del
flujo sanguíneo por enfermedad vascular periférica pueden dar lugar a la aparición de
lesiones o úlceras inducidas por traumatismos menores que pasan desapercibidos. (2)
También parece correlacionarse con el control metabólico de la enfermedad, aunque
puede aparecer en diabéticos con buen control glucémico, a veces es la primera
manifestación de la enfermedad en pacientes que desconocían que eran diabéticos.
En general, se estima que el 80% delas amputaciones mayores se lleva a cabo en pacientes
diabéticos. Aproximadamente un 15 a 20% de los diabéticos presentara un cuadro de pie
diabético en el transcurso de su vida y aproximadamente el 20% terminara en amputación.
(3)
4
Escalante G, en Hospitales de la Costa Norte Peruana año 1990 – 2000 encontró de un total
de 625 historias clínicas que registraron amputaciones del miembro inferior, sólo 312
(49,2%) fueron ocasionadas por pie diabético. El 61,2% fueron varones y la edad promedio
fue 63,5±10 años. El 98,4% presentaron diabetes mellitus tipo II, 56,5% sufrieron
amputaciones mayores y 10,4% amputaciones mayores secuenciales. Se identificó estadíaje
de pie diabético según Wagner con un cuarto grado en 45,0%. El tiempo con enfermedad
de los pacientes hasta la primera amputación fue entre 11 y 20 años (31,2%), destacando
13,6% casos con pie diabético como primera forma de presentación de DM y 2,5% con
sintomatología de larga data pero que carecían de diagnóstico de diabetes mellitus. De las
amputaciones, sólo el 8,3% fueron sometidas a desbridación. (4)
Torres, Gutiérrez, Ramírez, en el Hospital Dos de Mayo entre 2006 – 2008, encontraron
que de los 166 pacientes evaluados con pie diabético la edad promedio fue 59.4±12.0 años.
El tiempo promedio de enfermedad de diabetes fue 12.5±8.1 años. El 95.2% presentaba
neuropatía diabética y 48.8% insuficiencia arterial periférica. Recibieron tratamiento
quirúrgico 125 pacientes: 27 (21.6%) limpieza quirúrgica, 40 (32.0%) amputación menor y
58 (46.4%) amputación mayor. (5).
Cieza Z, en el Hospital Manuel Ignacio Montero de la ciudad de Loja Ecuador, en el
periodo 2000 a 2008, encontró que de 106 pacientes con diagnóstico de pie diabético el
56.31% fueron varones. La edad predomínate fue mayor a 66 años y el 33.98 % eran
jubilados. 47.57% de pacientes con pie diabético se les realizaron amputación y todos ellos
tenían Diabetes Mellitus tipo 2. La extremidad inferior con alta frecuencia de amputación
fue la derecha (59.18 %) y la amputación mayor se realizó en 53.06% de los casos. Según
el estadíaje de Wagner, el grado IV fue el más frecuente (73.47 %). El tiempo de evolución
de la diabetes Mellitus 2 hasta la primera amputación fue entre 6 a 15 años y con un
promedio del 40.82 %. 14.22 % se sometieron a una reamputación en un tiempo menor a 2
años. (6)
En nuestro medio, Flores Vilca, en el Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza en el
año de 1985 a 1995 encontró un promedio de amputaciones por año de 4,64%, y el mayor
porcentaje en los 2 últimos años. De los 51 pacientes amputados el 66.67% fueron varones.
La edad predominante fue de 61 a 80 años y el 49.02% tenían como ocupación su casa. El
5
tiempo de diabetes mellitus fue de 6 a 10 años y el 96.08% presentaba DM tipo 2. Según la
clasificación de Wagner, el grado IV fue el más frecuente (47.06 %) La mayor frecuencia
se encontró en pacientes varones, mayores a la quinta década de la vida, con diabetes tipo
II. Se encontró que el mayor número de amputaciones fueron supracondíleas (41.18%). (7)
En nuestro medio, el pie diabético no difiere en sus características con relación a otros
lugares pero el manejo de este es variable, ya que la infraestructura, los recursos, factor
socio cultural-económico, nos hace totalmente distintos y dada la importancia de esta
enfermedad y sus consecuencias, es necesario que en nuestro medio, se realicen estudios
que nos permitan conocer la situación actual, a fin de realizar actividades preventivas; ya
que la prevención es el pilar fundamental del tratamiento del pie diabético. Por lo tanto el
presente trabajo se orienta a determinar la prevalencia y el tratamiento de pie diabético en
pacientes del Servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital Regional Honorio
Delgado Espinoza periodo 2010 – 2015. Para lo cual se plantearon los siguientes objetivos:
- Determinar la prevalencia de pie diabético
- Determinar la distribución de acuerdo a edad
- Determinar la distribución según el sexo.
- Determinar la distribución según la ocupación.
- Determinar el tipo de diabetes Mellitus.
- Determinar el tiempo de evolución de diabetes mellitus.
- Determinar el tiempo de evolución de la lesión en los pacientes con pie diabético.
- Determinar la localización de la lesión en los pacientes con pie diabético.
- Determinar el grado de la lesión en los pacientes con pie diabético.
- Determinar el tipo de tratamiento según grado de la lesión del pie diabético.
- Determinar la extremidad amputada.
- Determinar el nivel de amputación.
- Determinar las complicaciones y reintervenciones quirúrgicas en pacientes amputados.
- Determinar el tiempo de hospitalización.
6
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
DIABETES MELLITUS
Hoy en día, la diabetes mellitus (DM) es una causa importante de discapacidad y muerte en
prácticamente todos los países de las Américas, afectando desproporcionadamente la
economía y los presupuestos de atención de la salud de los países en desarrollo, y la calidad
de vida de los individuos, sus familias y sus comunidades, mientras que 387 millones de
adultos vivían con diabetes en 2014, la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la
Organización Mundial de la Salud (OMS), estiman que la proyección del número de
personas que desarrollarán diabetes para el 2030 será más de 400 millones. (8)
Según la OMS la diabetes, es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no
produce insulina suficiente o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que
produce. La insulina es una hormona que regula el azúcar en la sangre. El efecto de la
diabetes no controlada es la hiperglucemia (aumento del azúcar en la sangre), que con el
tiempo daña gravemente muchos órganos y sistemas, especialmente los nervios y los vasos
sanguíneos.
Según la Asociación Americana de Diabetes (ADA) se clasifica en:
DM1: destrucción de células B que lleva a la deficiencia absoluta de insulina.
DM2: defecto progresivo en la secreción de insulina, asociado a un aumento en la
resistencia a la insulina.
7
PIE DIABÉTICO:
Según la OMS, es la infección, ulceración y destrucción de tejidos profundos de la
extremidad inferior relacionados con trastornos neurológicos y diversos grados de
enfermedad vascular periférica. También se lo define como un síndrome y una
complicación crónica de la DM de gran magnitud y gravedad, cuya etiología es
multifactorial, producto de neuropatías sensitivomotoras, angiopatía y afectación
inmunológica. Estos trastornos pueden resultar en infección, ulceración y gangrena que
impliquen hospitalización y/o cirugía mutilante que podría provocar incapacidad parcial o
definitiva en el paciente. (9)
1. Fisiopatología:
Cuando se conoce la fisiopatología de las lesiones del pie, es posible establecer el
tratamiento adecuado, pero el desconocimiento ha generado un enfoque incorrecto de la
atención del pie diabético, el cual durante años se catalogó de manera errónea como un
problema vascular, siendo que en este caso, las ulceras son de origen vascular solo en 15%
de los casos.
Entre los factores causales de pie diabético tenemos extrínsecos e intrínsecos que dependen
de las características del paciente, la enfermedad, las comorbilidades, el estilo de vida,
además de socioculturales y educativos.
A. Factores intrínsecos:
1. Del paciente: cuando es mayor de 45 años y del sexo masculino, es más propenso el
síndrome del pie diabético.
2. Del padecimiento: la hiperglucemia persistente causa neuropatía y daña el endotelio
vascular. Los trastornos del metabolismo, como la hipertrigliceridemia provocan
macroangiopatía y microangiopatía, y aceleran la ateroesclerosis. El sedentarismo y la
obesidad contribuyen al descontrol metabólico, con la consiguiente hiperglucemia.
3. Comorbilidades: la nefropatía y la insuficiencia venosa periférica dan lugar a hipotrofia
de la piel, con mayor susceptibilidad a la ulcera crónica. La retinopatía causa ceguera, la
cual limita la movilidad y el autocuidado del paciente de modo que se torna más
propenso a los traumatismos de los pies.
8
B. Factores extrínsecos:
1. Trauma externo: el factor externo, causa directa y absoluta de una lesión del pie
diabético es el traumatismo, que pueden ser mecánico, físico o químico.
2. Tabaco y alcohol: son factores relacionados que predisponen a la lesión, el tabaco por la
marcada vasoconstricción que ocasiona directamente en las arterias periféricas, y el
alcoholismo porque la persona se descuida y porque favorece la neuropatía y
hepatotoxicidad que agravan la situación sistémica del paciente.
3. Riesgos ocupacionales: los diabéticos dedicados al trabajo de campo en zonas rurales,
que acostumbran a deambular descalzos o calzando solo sandalias, están muy expuestos,
así como las personas sometidas a temperaturas extremas.
4. Estrato socioeconómico: es una causa relativamente relacionada con la falta de recursos
para la atención médica y el autodescuido.
5. Falta de educación sobre la diabetes: este factor está muy relacionado con la falta de
prevención y el desarrollo de lesiones. Es importante establecer la diferencia entre un
paciente informado y uno educado en el conocimiento dela diabetes y sus
complicaciones.
6. Periodos prolongados de confinación en cama: los pacientes diabéticos de edad
avanzada con secuelas neurológicas centrales o medulares, abandonados, etcétera,
presentan mayor riesgo de ulceración y amputación. (10)
C. Factores absolutos extrínsecos e intrínsecos
1. Neuropatía periférica: La neuropatía está implicada en la fisiopatología de la úlcera en
un 80-90% de los casos, la hiperglucemia crónica es el factor de riesgo más importante
para el desarrollo de la neuropatía, porque produce alteración de la bomba Na/K ATPasa
del nervio y atrofia axonal, lo que condiciona a la disminución de la velocidad de
conducción del nervio. Esta neuropatía afecta a las fibras nerviosas sensitivas
(superficiales y profundas, por lo cual el paciente no podrá advertir la lesión ni poner en
marcha mecanismos de defensa para evitarla), motoras (ocasiona una pérdida del tono y
atrofia de la musculatura intrínseca del pie, produciéndose un desequilibrio entre
tensores y flexores, alteraciones en la distribución de las cargas y un desplazamiento
hacia delante de la almohadilla grasa que se encuentra bajo la cabeza de los
metatarsianos. Todo esto origina deformidades en los pies perdida del tono y atrofia
9
muscular que incrementan la presión máxima en zonas concretas del pie facilitando la
aparición de hiperqueratosis y traumatismos repetidos, que en última instancia conducen
a la ulceración) y autonómicas (que tiene como consecuencia la pérdida de la sudoración
del pie, tornándose la piel seca y agrietada donde se pueden formar fisuras que son el
inicio de una lesión o la puerta de entrada a la infección). Métodos de evaluación
simples como la ausencia de reflejos aquilianos o la insensibilidad a la aplicación de un
monofilamento de nylon, designado Semmes- Weinstein 5.07, son factores predictores
de riesgo de úlceras plantares.
2. Enfermedad vascular periférica: La enfermedad vascular en los diabéticos es infra
rotuliana, bilateral y multisegmentarea; generalmente causada por aterosclerosis
acelerada, la cual está presente hasta en el 50 % de pacientes con una úlcera de pie
diabético además de afectar el mecanismo de cicatrización de heridas en extremidades
inferiores amputadas. La calcificación característica en las arterias diabéticas es
circunferencial y se distribuye de forma difusa a lo largo de la longitud del vaso y
aparece dentro de la túnica media; esto produce el típico aspecto en tubería de plomo de
las arterias calcificadas en las radiografías. La mayoría de las úlceras del pie son neuro-
isquémicas, que el paciente disocia del resto del cuerpo debido a la pérdida del feedback
sensitivo, a pesar de la isquemia severa. La microangiopatía diabética (denominada
"enfermedad de vasos pequeños") no es probable que sea la causa principal de una
úlcera o mala cicatrización de heridas. (11)
La neuropatía, con o sin isquemia asociada, está implicada en la fisiopatología de la úlcera
del PD en el 85% a 90% de los casos. Por tanto, el pie insensible, sea bien perfundido o
isquémico, debe considerarse como de alto riesgo de úlcera. (12)
3. Infección: la característica más importante de la infección del pie diabético es la
frecuencia con la que es polimicrobiana. El diagnostico de infección es clínico y se
fundamenta en la presencia de al menos dos de los siguientes signos: inflamación,
induración, eritema perilesional, hiperestesia, dolor, calor local y exudado purulento. El
deterioro de la función del leucocito está bien estudiado en los pacientes diabéticos. Esto
representa un defecto en el tratamiento de la infección una vez establecida, pero no
necesariamente una mayor propensión a la infección. En las infecciones del pie diabético
10
no llevar a cabo una técnica de cultivo adecuada que obtenga múltiples
microorganismos puede reducir el resultado del tratamiento, por lo tanto el cultivo se
debe obtener de la profundidad de la ulcera. La combinación más típica de
microorganismos comprende la triada de cocos grampositivos (estafilococos,
estreptococos del grupo B, enterococos), bacilos aeróbicos gramnegativos (Escherichia
coli, enterobacter, proteus, pseudomona) y anaerobios (bacteroides fragilis, clostridium,
peptoestreptococos). Son frecuentes varias combinaciones diferentes de
microorganismos. El germen aislado más frecuentemente es el Staphylococcus aureus.
Los exámenes de laboratorio son de escasa utilidad para par el diagnostico de estas
infecciones, excepto cuando se trata de osteomielitis. (13)
2. Localización y tiempo de evolución de la lesión:
El pie topográficamente se divide en antepié, mediopié y retropié (talón). Las ulceras
plantares se deben a un traumatismo repetitivo; aparecen debajo de las cabezas de los
metatarsianos, el sesamoideo medial y la base del quinto metatarsiano. Las ulceras sobre el
dorso y zona medial y lateral del pie se deben a un traumatismo constante ejercido por el
calzado (14). Las ulceras del talón suelen relacionarse con isquemia por enfermedad arterial
periférica. Las ulceras diabéticas se localizan con mayor frecuencia en el antepié.
En cuanto al tiempo de evolución de la lesión, según estudios los pacientes acuden con un
tiempo de evolución de lesión menor a 30 días en un 50% de los casos.
3. Exámenes auxiliares:
- Radiografías: aunque las radiografías constituyen la piedra angular del diagnóstico de
los trastornos óseos del pie diabético, su sensibilidad, su especificidad 75% y el
espectro de trastornos que pueden detectar son limitados, sin embargo es la primera
prueba diagnóstica que se hace. Detecta osteólisis, fracturas, luxaciones, calcificación
arterial, presencia de gas y deformidades.
- Evaluación vascular: el método más usado es el Eco-Doppler, tenemos otros como la
angiografía, pletismografía digital, determinación de la presión transcutánea de O2. La
angiografía mide el diámetro transverso de la luz arterial en tanto que el Eco-Doppler
y la angiorresonancia detectan la velocidad de flujo. El objetivo de la evaluación
11
vascular es determinar si hay una circulación adecuada que apoye la curación primaria
con o sin intervención quirúrgica.
4. Clasificación del pie diabético:
La clasificación de Meggitt-Wagner es probablemente junto con la clasificación de Texas el
sistema de estadíaje de lesiones de pie diabético más conocido. Fue descrita por primera
vez en 1976 por Meggitt pero fue popularizada por Wagner en 1981.
Este sistema tiene seis grados de lesiones, de las que las primeras cuatro se relacionan con
la profundidad de la lesión a través de las partes blandas. Las últimas dos son
completamente diferentes y se relacionan con el grado de perdida de la vascularidad en el
pie. De ellos, la mayoría de los tratamientos ambulatorios se aplican a las lesiones de los
grados 0 y 1, mientras que las lesiones más profundas y graves de los grados 2 y 3 tiene
más probabilidades de exigir tratamientos hospitalarios. El tratamiento de los grados 4 y 5
es claro, es decir, la amputación de la porción gangrenada del pie o la extremidad con
consideraciones concomitantes de revascularización de la extremidad y tratamiento de la
infección cuando sea necesario (15).
Clasificación de los grados de severidad del pie diabético de acuerdo con la escala de Wagner (16)
Grado 0: La piel está intacta, pero las prominencias óseas suponen un pie en riesgo.
Grado 1: Ulcera superficial y localizada.
Grado 2: Ulcera profunda que alcanza los tendones, el hueso, los ligamentos o las articulaciones.
Grado 3: Absceso profundo, osteomielitis.
Grado 4: Gangrena de los dedos o del antepié.
Grado 5: Gangrena de la totalidad del pie.
12
Grado 0
Grado 1
Grado 2
Grado 3
Grado 4
Grado 5
13
También está la clasificación de Texas, que detalla la profundidad e infección de la lesión;
siendo una clasificación muy detallada, su principal desventaja es que puede llevar a
confusión dadas las 12 posibles categorías en que puede encontrarse la lesión evaluada.
Recientemente se ha publicado la clasificación conjunta de la Sociedad Americana de
Enfermedades infecciosas (IDSA) y el Grupo Internacional de Trabajo de Pie Diabético
(IWGDF). Esta se basó en el sistema de clasificación PEDIS, que es el acrónimo de la
evaluación basada en la Perfusión, Extensión, Profundidad (Depth), Infección, Sensibilidad,
originalmente desarrollada por la IWGDF, ofrece una valoración semicuantitativa de la
severidad de la lesión del pie diabético (17).
5. Tratamiento de las ulceras del pie diabético:
La recomendación número XIV del Consenso de la Sociedad Española de Angiología y
Cirugía Vascular de Pie Diabético establece, con un nivel de evidencia tipo I que “la
corrección metabólica, el control de los factores de riesgo y el reposos funcional de la zona
afectada constituyen las medidas básicas esenciales en el tratamiento del pie diabético (18).
Limpieza quirúrgica:
Idealmente se debe disponer de un tópico de curaciones, equipado con una los
requerimientos mínimos para realizar curaciones: camilla, coche de curaciones, equipo de
cirugía menor, hoja de bisturí, gasas estériles, guantes estériles, campos descartables. La
solución ideal para la curación es el suero fisiológico o cloruro de sodio 0.9%, dado que no
daña las células de granulación. El uso de soluciones yodadas o jabones, enlentecen la
cicatrización al inhibir la proliferación de fibroblastos. Se recomienda la limpieza con el
suero fisiológico, el desbridamiento manual de los tejido desvitalizados, el retiro de las
áreas hiperqueratósicas que generalmente aparecen alrededor de las úlceras neuropáticas,
porque éstas también enlentecen el cierre de las lesiones. En todos los casos de infección
severa, el desbridamiento quirúrgico de los tejidos necróticos y de huesos o fragmentos de
huesos comprometidos es fundamental para la adecuada cicatrización.
Desbridamiento:
14
Se hará si existe necrosis ya que son caldo de cultivo para infecciones, inician una respuesta
inflamatoria y retrasan la curación al representar una barrera mecánica para el tejido de
granulación. Existen tres tipos de desbridamiento: quirúrgicos, mecánicos y enzimáticos.
El desbridamiento mecánico es el menos utilizado, ya que es traumático y poco selectivo y
en ocasiones puede arrastrar tejido sano. El desbridamiento enzimático se realiza mediante
la aplicación tópica de enzimas (proteolíticas y fibrinolíticas) que inducen a la hidrólisis del
tejido necrótico superficial; su indicación es en ulceras superficiales que no presenten
signos de infección o previo al desbridamiento quirúrgico; no deben utilizarse durante la
fase de granulación (19).
Antibióticos:
En un gran porcentaje de ulceras, existe colonización bacteriana, casi siempre es
polimicrobiana, que precisará tratamiento antibiótico sistémico. Como en todas las
infecciones se mantiene el principio de que la selección ideal de un régimen antibiótico se
basa en los resultados del cultivo siempre que sea posible. La elección de los antibióticos,
la duración del tratamiento y la administración oral frente a endovenosa, depende de la
gravedad de la infección y el estado clínico del paciente (20). La finalidad del antibiótico
durante el manejo del pie diabético no es prevenir, si no controlar o eliminar el agente
infeccioso con el objetivo de no llevar la infección a nivel óseo produciendo la temible
osteomielitis con el riesgo de pérdida del miembro afectado.
Amputaciones:
La única indicación absoluta para la amputación es la isquemia irreversible en una
extremidad enferma o traumatizada. La amputación también puede ser necesaria para
conservar la vida de un paciente con una infección incontrolable (21). Antes de realizar una
amputación, casi siempre se debe solicitar una interconsulta con un cirujano vascular. Si la
amputación se hace necesaria, se deben realizar todos los esfuerzos para garantizar las
mejores condiciones quirúrgicas. Todos los problemas médicos se deben tratar de forma
individualizada. Las infecciones se deben tratar de controlar de la mejor forma posible, y la
nutrición y el sistema inmunológico se deben valorar mediante las pruebas de rutina.
15
Los pacientes diabéticos que sufren una amputación mayor presentan aumento del índice de
mortalidad hasta en 75% en los siguientes cinco años.
La decisión debe ser consensuada y la determinación debe tomarla el paciente o el
responsable legal de la familia, con consentimiento informado. En caso que el paciente opte
por el salvamento del pie, el médico debe esforzarse por lograrlo y suspender el esfuerzo
cuando se establezca el fracaso terapéutico. Así, el principal objetivo será determinar el
nivel más adecuado de amputación (22).
Determinación del nivel de amputación:
La prueba más utilizada y más difundida es el Eco-Doppler, la cual se usa como guía para
establecer los niveles generales de perfusión. Toda amputación que se realiza en el pie se
denomina menor y las que se realizan por arriba del tobillo, incluyendo la infracondílea y
supracondílea, se denominan mayores.
A. Amputaciones menores:
Son aquellas que se limitan al pie. Los niveles de amputación parcial del pie son:
a) Amputación o desarticulación de los dedos
b) Desarticulación metatarsofalángica
c) Amputación parcial del antepié
d) Transmetatarsiana
e) De Lisfranc (desarticulación transmetatarsiana)
f) De Chopart (desarticulación a través de las articulaciones transversas
astragalonavicular y calcáneocuboidea combinada)
La amputación de un único dedo, salvo escasa excepciones, habitualmente produce escasos
problemas durante la marcha y la bipedestación. La amputación del dedo gordo
prácticamente no afecta a la bipedestación o a la marcha a un ritmo normal. Si el paciente
camina rápidamente o corre, sin embargo, aparece una cojera causada por la pérdida del
empuje normal que ofrece el dedo gordo. La amputación del segundo dedo frecuentemente
es seguida de un hallux valgus debido a que el dedo gordo tiene a desviarse hacia el tercero
para rellenar el espacio dejado por la amputación. La amputación de cualquiera de los otros
16
dedos causa pocos problemas. De éstos, el quinto es el más frecuentemente amputado
siendo la indicación más frecuente el acabalgamiento sobre el cuarto. La amputación de
todos los dedos produce escasa alteración en el paso lento ordinario, pero es incapacitante
para la marcha rápida, además interfiere con la posición en cuclillas y el acto de ponerse de
puntillas. Habitualmente no requiere más prótesis que un relleno para el calzado. La
amputación de más de dos rayos suele ser más incapacitante que la amputación
transmetatarsiana. La amputación transmetatarsiana producirá una incapacidad en relación
con el nivel de amputación: cuanto más proximal el nivel, mayor la incapacidad y requiere
un relleno para el calzado. Las amputaciones a niveles más proximales del nivel
transmetatarsiano producen una considerable torpeza al caminar debido a la pérdida del
soporte y del empuje. Consecuentemente, la mayoría de las amputaciones del antepié y
mediopié han sido descartadas en favor de otras más funcionales del retropié y del tobillo.
Ocasionalmente, sin embargo, estos procedimientos están indicados especialmente en el
paciente diabético. La amputación a cualquiera de los niveles de Chopart o Lisfranc acaba
con una deformidad residual en equino debido a la pérdida de las inserciones dorsiflexoras
y puede hacer necesaria una artrodesis subastragalina o una reamputación a un nivel más
proximal debido a que esta deformidad impide la deambulación. (23)
B. Amputaciones mayores:
Los distintos sitios de amputación y desarticulación en el miembro inferior son:
a) Amputación de Syme.
b) Amputación Infracondílea.
c) Desarticulación de la rodilla.
d) Amputación Supracondílea.
Amputación de Syme: descrita en 1842 por James Syme, la intervención tiene buena
fiabilidad. Su inconveniente es que al cabo de unos años se desarrolla una pérdida de altura
del talón, que hace perder a esta técnica su ventaja principal: el apoyo distal. La incisión
empieza en la vertical de la punta del maléolo externo y se extiende transversalmente hacia
adelante, hasta alcanzar un punto situado 1 cm por debajo y delante del maléolo interno.
Luego continúa por la planta del pie a partir de uno de los puntos de referencia, para
alcanzar el segundo, cortando en sentido transversal la parte anterior del talón. Se secciona
17
la tibia y el peroné unos 5 mm por arriba de la mortaja tibioperonea, según una dirección
perpendicular al eje de la pierna.
Amputación Infracondílea: en los pacientes diabéticos la amputación de colgajo largo
posterior es la más conocida y da prioridad a las condiciones circulatorias favorables de la
cara posterior de la pantorrilla. La cicatriz es desplazada hacia adelante, lo que no causa
casi molestias si es móvil con relación a los planos profundos. El nivel se sitúa entre 12.5 –
15 cm debajo de la articulación, lo que da lugar a un muñón bastante corto, cilíndrico y en
un contexto tisular que se revela como el más favorable para la pierna (24).
Desarticulación de la rodilla: la desarticulación de la rodilla permite conseguir un
excelente muñón terminal. Los nuevos encajes y los mecanismos de rodilla protésicos que
proporcionan un control de la fase de balanceo han eliminado muchos de los
inconvenientes previos con este nivel de amputación. Aunque se ha probado las ventajas de
su uso en niños y adultos jóvenes, su uso en ancianos y en especial en el paciente con
isquemia ha estado muy limitado.
Amputación Supracondílea: en este procedimiento se pierde la rodilla, por lo que es
extremadamente importante que el muñón sea lo más largo posible para proporcionar un
brazo de palanca fuerte que controle la prótesis. Casi todas las amputaciones, incluso por
encima de la rodilla, se hacen por problemas isquémicos y no se debe intentar la miodesis
para no comprometer más adelante el limitado suministro vascular. No obstante, la
estabilización muscular por mioplastia es deseable en los miembros isquémicos para evitar
el desplazamiento anterolateral del extremo de hueso seccionado.
Complicaciones:
- Hematoma: retrasa la curación de la herida y sirve de medio de cultivo para una
infección bacteriana. Si se forma se debe tratar mediante vendaje compresivo. Si se
asocia con un retraso en la curación se debe evacuar.
- Infección: los porcentajes publicados se encuentran entre el 12 y el 28% de todos los
pacientes, cualquier infección profunda de la herida se debe tratar mediante un lavado y
desbridamiento inmediato, dejando la herida abierta y los antibióticos de acuerdo al
cultivo.
18
- Necrosis de bordes cutáneos: la cicatrización adecuada del muños se alcanza en el 80-
85% en las amputaciones por debajo de la rodilla y entre el 85-90% en aquellas por
encima de ésta. Su terapéutica consiste en la resección del borde necrótico y la
aplicación de apósitos húmedos, aunque en el caso de existir una necrosis externa se
debe reconstruir el muñón en quirófano.
- Trombosis venosa profunda: se ha publicado una incidencia entre el 5 y el 40%. Hay que
tener en cuenta que en la pierna contralateral también se puede producir, puesto que se
hallan incrementado los factores de riesgo de trombosis, por lo cual durante el periodo
postoperatorio hay que realizar profilaxis antitrombótica mediante heparinas de bajo
peso molecular.
- Dolor: después de haber superado el dolor del postoperatorio inmediato, algunos
pacientes continúan sintiendo dolor crónico como consecuencia de varias razones. El
primer paso es el diagnóstico de la causa del mismo, diferenciar el dolor residual de la
extremidad del dolor del miembro fantasma. (25)
6. Nuevos avances en el tratamiento de pie diabético
Ninguno de los nuevos y avanzados productos mencionados a continuación sustituye un
buen cuidado de las heridas y por lo regular son coadyuvantes.
- Terapia de presión negativa: consiste en la succión subatmosférica continua o
intermitente realizada sobre la herida quirúrgica a través de una esponja de poliuretano o
de alcohol polivinílico y sellada con un plástico adherente transparente. Todo ello está
conectado a una bomba eléctrica adherida a un recipiente que recoge el exudado de la
herida, utilizando un tubo flexible. El dispositivo más empleado es la V.A.C Therapy®.
Actúa sobre las heridas del pie diabético reduciendo el edema local, aumentando la
perfusión sanguínea local, la cicatrización, estimulando la proliferación de tejido de
granulación y eliminando el exudado.
- Oxigenoterapia hiperbárica: el mecanismo básico por el cual se compromete la
cicatrización en cualquier herida es una combinación de hipoperfusión e infección con la
consecuente hipoxia hística; por otra parte la hipoxia compromete la proliferación de
fibroblastos, la síntesis de colágena, la producción de factor angiogénico y el mecanismo
intracelular antibacteriano de los leucocitos, lo que propicia un medio ideal para la
infección. Se sabe que la tensión de oxígeno en tejido lesionado es menor de 20 mmHg y
19
que una reducción de esta tensión por debajo de 30 mmHg altera los mecanismos
antibacterianos de los polimorfonucleares. Así mismo, hay estudios que demuestran que
las elevaciones intermitentes de la tensión de oxígeno (por arriba de 30 mmHg) en el
tejido cicatrizal son necesarias para la neovascularización en el microambiente
isquémico. la terapia aumenta la tensión de oxígeno y la capacidad destructiva de los
leucocitos, e inhibe la formación de toxinas por los anaerobios. Pero su uso se ha
fundamentado en bases científicas débiles y no está del todo claro que pacientes se
beneficiaran de esta terapia, en que momento debe esta iniciarse o detenerse, así como la
determinación de criterios de inclusión de pacientes.
- Factores de crecimiento plaquetario recombinante: el gel de Becaplermin está
constituido por factores recombinantes de crecimiento plaquetario humano lo que
aumenta la mitosis en los fibroblastos y quimiotaxis de células endoteliales.
- Factor estimulante de colonias de granulocitos recombinante: lenogastrim, ayuda
en la cicatrización.
- Equivalentes sintéticos de la piel: son dos los principales: Dermagraft; consiste en un
cultivo de fibroblastos dérmicoss de neonatos, cultivados in vitro sobre una malla
bioabsorbible de poliglactina. Los fibroblastos que proliferan en la malla secretan
fobronectina, glucosaminas y otras proteínas que interactúan para producir una matriz
dérmica. Aun no se comercializa a gran escala por su costo elevado y Apligraf; consiste
en dos capas primarias; una dermis y una epidermis. La capa epidérmica incluye un
estrato protector corneo formado por queratinocitos vivos. La capa dérmica está
compuesta de fibroblastos dispersos en la matriz colágena. La FDA ha aprobado su uso
en el pie diabético.
- Células madre: de los diferentes tipos de células madre, las endoteliales son las que se
han empleado a partir de modelos experimentales en ensayos clínicos que afirman que
este tratamiento lleva a un aumento de la tensión transcutánea de oxígeno, mejora la
cicatrización de la herida y disminuye el dolor en reposo; no obstante los estudios son
muy escasos y limitados en cuanto a tamaño muestral.
- Ketanserina: es un antagonista de los receptores serotoninergicos-2 que inhibe la
agregación plaquetaria, bloquea la vasoconstricción y devuelve su forma al eritrocito
con mejoría de la perfusión tisular. La ketanserina al 2% en forma tópica obtiene los
mejores resultados en ulceras de Wagner 1, 2 y 3 y aceleran su cicatrización.
20
- Pentoxifilina: Campbell realizo una revisión del MEDLINE y encontró que en dosis de
800 a 1200mg/día hay mejoría para los síntomas de insuficiencia vascular, como
distancia caminada, parestesias, temperatura de la piel y respuesta general subjetiva.
Esta revisión proporciona evidencia de que la pentoxifilina es una alternativa de la
cirugía vascular en el tratamiento de la enfermedad vascular periférica de los pacientes
diabéticos.
- Apósitos hidrocoloides: el concepto de cicatrización húmeda de las heridas incluye en
evitar la deshidratación y muerte celular, acelerar la angiogénesis y facilitar la
interacción de factores de crecimiento con las células blanco. Se dispone de DuoDERM
CGF.
- Estimulación de la fase I de cicatrización: se dispone de un producto con el que no es
necesario mantener húmedas las gasa, ya que son material biodegradable, lo que evita
desprender el tejido de granulación. Estos productos son el satín hemostático S-100 y la
gasa hemostática S-99.
- Matriz moduladora de proteasas: Programan Matrix® (COR-C), actúa uniéndose e
inactivando las metaloproteinasas, lo que favorece la protección de los factores de
crecimiento endógeno, que se liberan en el lecho de la herida de forma gradual una vez
que se han reducido las proteasas. Está indicado para tratar lesiones postquirúrgicas con
cierre por segunda intención.
Ninguno de los nuevos y avanzados productos mencionados sustituye un buen cuidado de
las heridas. La clave del cuidado requiere desbridamiento agresivo, control de la infección,
descarga del área bajo presión y restaurar la circulación al área cuando sea necesaria.
(26,27)
21
CAPÍTULO III
MATERIAL Y MÉTODOS
3.1 LUGAR Y PERIODO
El presente trabajo de investigación se realizó en la ciudad de Arequipa, en el Servicio de
Ortopedia y Traumatología del Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza, durante los
meses de enero y febrero del 2016.
3.2 POBLACIÓN DE ESTUDIO
Nuestra población está comprendida por las historias clínicas de pacientes con diagnóstico
de pie diabético, atendidos entre enero del año 2010 a diciembre del año 2015 en el
Servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital Honorio Delgado Espinoza de
Arequipa.
Criterios de inclusión:
- Historia clínica completa en archivo.
Criterios de exclusión:
- Historias clínicas con datos incompletos
- Historia clínicas con patologías asociadas de índole quirúrgico o médico que
agraven el estado de salud como enfermedades del tejido conectivo,
hiperfibrinogenemia, anemia hemolítica entre otras que alteren la lesión diabética.
3.3 METODOLOGÍA
3.3.1. Tipo de estudio:
Según Altman es observacional, retrospectivo y transversal.
22
3.3.2. Diseño de investigación:
El presente estudio, está comprendido dentro del diseño del estudio de investigación no
experimental transversal, ya que no se construyó ninguna situación, sino se observaron
situaciones ya existentes y las mediciones se realizaron en una sola oportunidad.
3.4 OPERACIONALIZACIÓN DE VARIABLES
Variable Indicador Escala
Edad Fecha de nacimiento De intervalo
Sexo Características sexuales Nominal
Ocupación Datos obtenidos de la historia clínica Nominal
Tipo de DM Datos obtenidos de la historia clínica Nominal
Tiempo de evolución de
DM Datos obtenidos de la historia clínica De intervalo
Tiempo de evolución de
la lesión Tiempo de enfermedad De intervalo
Localización de la lesión Región anatómica Nominal
Exámenes auxiliares Datos obtenidos de la historia clínica Nominal
Grado de la lesión Clasificación de Wagner Ordinal
Tratamiento Datos obtenidos de la historia clínica Nominal
Extremidad amputada Región anatómica Nominal
Nivel de amputación Clasificación anatómica. Nominal
Complicaciones post-
operatorias De acuerdo a la evolución Nominal
Reintervenciones
quirúrgicas Datos obtenidos de la historia clínica Nominal
Tiempo de
hospitalización Fecha de hospitalización De razón
23
3.5 TÉCNICA Y MÉTODO DEL TRABAJO
La recolección de datos se realizó mediante el llenado de la ficha de recolección de datos
elaborada mediante el análisis de las Historias Clínicas, de acuerdo con los criterios a
investigar expuestas en los objetivos y variables. (Anexo 1).
Para lo cual se revisó Historias Clínicas. Previamente se coordinó con la dirección del
Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza para la autorización del permiso de ingreso al
departamento de estadística.
3.6 PROCESAMIENTO Y ANÁLISIS DE DATOS
Los datos recolectados se digitaron en el programa Microsoft Office Excel 2010 dentro de
una base de datos.
Se analizara los datos mediante el cálculo de frecuencias absolutas y relativas. Los
resultados obtenidos se expresaron en tablas.
24
CAPÍTULO IV
RESULTADOS
25
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 1
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO POR AÑO
AÑO NÚMERO PORCENTAJE
2010 12 10.43
2011 19 16.52
2012 25 21.74
2013 27 23.48
2014 20 17.39
2015 12 10.43
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 1 observamos un incremento anual de la casuística hasta el año 2013
(23.48%), posteriormente una disminución del número de casos en los dos últimos años.
26
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 2
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN SEXO
SEXO AÑO TOTAL
2010 2011 2012 2013 2014 2015 NÚMERO PORCENTAJE
Femenino 3 4 8 9 8 2 34 29.57
Masculino 9 15 17 18 12 10 81 70.43
115 100.00
En la tabla N° 2 observamos un predominio del sexo masculino con el 70.43% (n=81).
27
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 3
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN GRUPO
ETÁREO
GRUPO
ETÁREO NÚMERO PORCENTAJE
30 a 40 años 3 2.61
41 a 50 años 14 12.17
51 a 60 años 42 36.52
61 a 70 años 31 26.96
> 70 años 25 21.74
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 3 observamos una mayor casuística en el grupo etáreo de 51 a 60 años con
36.52% (n=42), le sigue en importancia el grupo de pacientes con la edad de 61 a 70 años
con un 26.96% (n=31)
28
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 4
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN OCUPACIÓN
OCUPACIÓN NÚMERO PORCENTAJE
Profesional 10 8.70
Comerciante 14 12.17
Su casa 46 40.00
Chofer 14 12.17
Agricultor 13 11.30
Otros* 18 15.65
TOTAL 115 100.00
(*) Carpintero, cocinero, sastre, albañil, panadero y mecánico.
En la tabla N° 4 muestra que la ocupación con mayor número de casos es “su casa” 40.00%
(n=46), seguido en importancia “otros” con un 15.65% (n=18).
29
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 5
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN TIPO DE
DIABETES MELLITUS
TIPO DE
DIABETES NÚMERO PORCENTAJE
DMT1 1 0.87
DMT2 114 99.13
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 5 se observa que la mayor cantidad de pacientes presentaban diabetes
mellitus tipo 2 (99.13%)
30
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 6
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN TIEMPO DE
EVOLUCIÓN DE LA LESIÓN
TIEMPO DE
EVOLUCIÓN NÚMERO PORCENTAJE
0 a 15 días 48 41.74
16 a 30 días 38 33.04
31 a 60 días 13 11.30
61 a 90 días 8 6.96
Más de 90 días 8 6.96
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 6 se observa que el tiempo de evolución de la lesión más frecuente es de 0 a
15 días con un 41.74% (n=48).
31
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 7
DISTRIBUCION DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN REGIÓN
ANATÓMICA
REGIÓN
ANATÓMICA NÚMERO PORCENTAJE
Antepié 76 66.09
Mediopié 3 2.61
Retropié 8 6.96
Mixto 6 5.22
Todo el pie * 22 19.13
TOTAL 115 100.00
(*) 6 pacientes con compromiso de pierna.
En la tabla N° 7 observamos que la región anatómica donde se ubica la lesión con mayor
frecuencia es el antepié 66.09% (n=76)
32
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 8
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN
CLASIFICACIÓN DE WAGNER
WAGNER NÚMERO PORCENTAJE
GRADO 0 0 0.00
GRADO I 5 4.35
GRADO II 10 8.70
GRADO III 27 23.48
GRADO IV 48 41.74
GRADO V 25 21.74
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 8 observamos que el grado de lesión con mayor frecuencia según la
clasificación de Wagner es el grado IV con un 41.74% (n=48), seguido por el grado III con
un 23.48% (n=27).
33
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 9: DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN
EXAMENES AUXILIARES
EXAMENES
AUXILIARES NÚMERO PORCENTAJE
RADIOGRAFÍAS 44 100.00
-No lesión ósea 18 40.91
-Lesión ósea 26 59.09
ECODOPPLER 58 100.00
-Sin lesión 18 31.03
-Estenosis 31 53.45
-Oclusión 3 5.17
-Ambos 6 10.34
ANGIO TEM 15 100.00
CULTIVO 39 100.00
Coccos gram positivos
-Staphylococcus aureus 10 25.64
-Enterococcus spp. 3 7.69
Bacilos gram negativos
-Klebsiella spp. 3 7.69
-Proteus spp. 8 20.51
-E. coli 6 15.38
-Pseudomona auriginosa 1 2.56
-Acitenobacter spp. 1 2.56
-Citrobacter 1 2.56
Candida spp. 1 2.56
Negativo 5 12.82
En la tabla N° 9 observamos que el examen auxiliar más usado en apoyo al diagnóstico es
el ecodoppler (n=58), seguido de la radiografia simple de pie (n=44). Además el germen
más frecuentemente aislado es el Sthaphylococcus aureus (n=10).
34
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 10
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN
TRATAMIENTO EMPLEADO
TRATAMIENTO NÚMERO PORCENTAJE
Limpieza
quirúrgica 17 14.78
Injerto 2 1.74
Amputación 84 73.04
Sin tratamiento* 12 10.43
TOTAL 115 100.00
(*) Pacientes con tratamiento indicado de amputación
En la tabla N° 10 observamos que el tratamiento empleado más frecuente es la amputación
con un 73.04% (n=84).
35
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 11
PACIENTES AMPUTADOS POR PIE DIABÉTICO SEGÚN TIEMPO DE
EVOLUCIÓN DE DIABETES
TIEMPO DE
DIABETES NÚMERO
AMPUTACIÓN
PORCENTAJE SI NO
N % N %
0 a 5 años * 23 17 20.24 6 19.35 20.00
5 a 10 años 23 16 19.05 7 22.58 20.00
11 a 15 años 32 23 27.38 9 29.03 27.83
16 a 20 años 18 12 14.29 6 19.35 15.65
> 20 años 19 16 19.05 3 9.68 16.52
TOTAL 115 84 100.00 31 100.00 100.00
(*) 6 pacientes son diagnóstico de debut.
En la tabla N° 10 observamos que el tiempo de evolución de diabetes mellitus más
frecuente es de 11 a 15 años con un 27.83% (n=32), de los cuales el 27.38% (n=23) son
amputados.
36
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 12
DISTRIBUCIÓN DE MIEMBRO INFERIOR AMPUTADO EN PACIENTES CON
PIE DIABÉTICO
EXTREMIDAD
AMPUTADA NÚMERO PORCENTAJE
Derecha 45 53.57
Izquierda 37 44.05
Ambas 2 2.38
TOTAL 84 100.000
En la tabla N° 12 observamos que el miembro inferior derecho es el más frecuentemente
amputado con un 53.57% (n=45)
37
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 12
NIVEL DE AMPUTACIÓN SEGÚN GRADO DE PIE DIABÉTICO
(CLASIFICACIÓN DE WAGNER)
NIVEL DE
AMPUTACIÓN NÚMERO
GRADO III GRADO IV GRADO V PORCENTAJE
N % N % N %
Digitales 4 0 0.00 4 9.52 0 0.00 4.76
Desarticulación
metatarsofalángica
6 4 21.05 2 4.76 0 0.00 7.14
Rayectomía 28 7 36.84 21 50.00 0 0.00 33.33
Infracondílea 32 8 42.11 13 30.95 11 47.83 38.10
Supracondílea 14 0 0.00 2 4.76 12 52.17 16.67
TOTAL 84 19 100.00 42 100.00 23 100.00 100.00
En la tabla N° 12 observamos que el nivel de amputación con mayor frecuencia es
Infracondílea con 38.10% (n=32), de los cuales el 30.95% (n=13) es grado IV. Seguida en
frecuencia por rayectomía con un 33.33% (n=28), de los cuales el 50.00% (n=21) es de
grado IV.
38
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 13
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES AMPUTADOS POR PIE DIABÉTICO SEGÚN
COMPLICACIONES POST-OPERATORIAS
COMPLICACIONES
POST-OPERATORIAS NÚMERO PORCENTAJE
Sin complicaciones 60 71.43
Con complicaciones
-Infección 4 4.76
-Necrosis 14 16.67
-Ambos 6 7.14
TOTAL 84 100.00
En la tabla N° 13 observamos que el 71.43% no presento complicaciones. Además que la
complicación más frecuente fue la necrosis con un 16.67% (n=14).
39
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 14
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES AMPUTADOS POR PIE DIABÉTICO SEGÚN
REINTERVENCIÓN QUIRÚRGICA
REINTERVENCIÓN QUIRÚRGICA NÚMERO PORCENTAJE
Sin reintervención 60 71.43
Con reintervención
-Desbridación 13 15.48
-Injerto 4 4.76
-Reamputación de digital a rayectomía 2 2.38
-Reamputación de digital a infracondílea 2 2.38
-Reamputación de infracondílea a
supracondílea 3 3.57
TOTAL 84 100.000
En la tabla N° 14 observamos que el 71.43% (n=60) de pacientes amputados no fue
necesaria una reintervención. Además observamos que al 15.48% (n=13) se le realizo
desbridación.
40
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 15
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN CONDICIÓN
DE ALTA
CONDICIÓN DE
ALTA NÚMERO PORCENTAJE
Alta médica 89 77.39
Alta a solicitud 19 16.52
Fallecido 5 4.35
Fugado 2 1.74
TOTAL 115 100.00
En la tabla N° 15 se observa que la condición de alta más frecuente es alta médica con un
77.39% (n=89), seguido en frecuencia de alta a solicitud con un 16.52% (n=19).
41
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010-2105”
TABLA N° 16
DISTRIBUCIÓN DE PACIENTES CON PIE DIABÉTICO SEGÚN ESTANCIA
HOSPITALARIA
SEMANAS NÚMERO PORCENTAJE
< 1 semana 20 17.39
1 - 2 semanas 28 24.35
2 - 3 semanas 27 23.48
3 - 4 semanas 16 13.91
> 4 semanas 24 20.87
TOTAL 115 100.00
En la tabla N°16 observamos que la mayor estancia hospitalaria fue de 1 – 2 semanas con
un 24.35% (n=28), seguida muy de cerca por 2 – 3 semanas con 23.48% (n=27).
42
CAPÍTULO V
DISCUCIÓN
Se revisaron 115 historias clínicas del Servicio de Ortopedia y Traumatología del Hospital
Regional Honorio Delgado Espinoza que cumplieron con los criterios de elegibilidad, las
cuales son objeto del presente estudio.
Según la literatura del 15 a 20% de los diabéticos presenta un cuadro de pie diabético en el
transcurso de su vida. Se encontró que en el periodo de estudio de nuestro trabajo, que de
3478 pacientes que estuvieron hospitalizados con el diagnostico de diabetes mellitus el 7.5
% presentó pie diabético, esto se explicaría por una mala codificación de las historias
clínicas debido a que no se consignan todos los diagnósticos.
En la distribución por año se encuentra un incremento anual en el número de pacientes
atendidos por pie diabético hasta el año 2013 (23,48%), esto se explicaría por la transición
epidemiológica relacionado con los cambios demográficos y económicos que se han
experimentado en la última década probablemente asociado al incremento de la incidencia
de casos de diabetes mellitus tipo 2 en la población en general. En los dos últimos años se
ve una disminución esto se explicaría por diversas razones como: la existencia de sub
registros, el pie diabético no se considera como diagnóstico de alta y el mal procedimiento
de archivo de las historias clínicas en el servicio de estadística.
En la distribución por sexo se encuentra un predominio de varones (70.43%), datos que
coinciden con otros estudios Escalante(4) (61.2%), Flores(7) (66.67%), Cieza(6) (56.31%).
Demostrando que hay un alto riesgo de pie diabético en los varones lo cual coincide con la
literatura, ya que el sexo masculino es un factor de riesgo en el desarrollo de una ulceración
1.6 veces más y de 2.8 a 6.5 más veces de amputación.
43
En cuanto a los grupos de edad, observamos en la tabla N° 3, la mayor incidencia en los
rangos de entre 51 a 70 años (63.48%), la edad promedio fue de 60.78 años, datos que
coinciden con Torres(5) donde su edad promedio fue 59.4 años, Escalante(4) 63.5 años. Esto
se explicaría debido a que hay mayor riesgo de pie diabético a medida que se incrementa la
edad, especialmente desde la quinta hasta la séptima década de la vida y se deba a las
posibles dificultades para el autocuidado correcto; así como los problemas para detectar la
aparición de signos o síntomas de pie diabético en la población adulto mayor.
Los pacientes con pie diabético de este estudio están conformados en su mayoría como
trabajadores manuales no profesionales (91.30%), lo que implicaría además un trabajo
forzado a nivel de miembros inferiores; agregado a un nivel socioeconómico bajo pueden
afectar la adherencia al tratamiento y repercutir en el control metabólico lo que influye en
la aparición y progresión de complicaciones del pie diabético. El 40.00% consigna como
ocupación su casa, lo que podría relacionarse por la edad avanzada de la mayoría de los
pacientes.
En la tabla N° 5 se observa que de todos los pacientes estudiados, el 99.13% tenía diabetes
mellitus tipo 2, dato que coincide con Escalante(4) (98.4%), Cieza(6) (98.06%) demostrando
como muchos otros estudios que este tipo de diabetes es la prevalente en la población que
padece pie diabético, debido a la hiperglucemia crónica asociado con la hiperinsulinemia y
dislipidemia; es el factor de riesgo más importante para el desarrollo de la neuropatía, lo
que condiciona a la disminución de la velocidad de conducción del nervio dando lugar a la
aparición de lesiones o úlceras inducidas por traumatismos menores que pasan
desapercibidos.
Estudiando la distribución según tiempo de evolución de la lesión, el 74.78% presentó un
tiempo menor a 30 días, la mayoría 41,74% tuvieron un tiempo de evolución de la lesión
menor a 15 días; lo cual contrasta con lo encontrado en la literatura, según estudios los
pacientes acuden con un tiempo de evolución de lesión menor a 30 días en un 50 % de los
casos. Pensamos que esto es explicable por la neuropatía en el diabético, ya que impide
toda percepción fina de cualquier corte o traumatismo que puede pasar inadvertido por días
o semanas, y no es raro que el paciente refiera que la lesión “acaba de aparecer”, cuando en
realidad sucedió mucho antes, así mismo en varios casos las lesiones se producen por
44
debajo de las callosidades lo que agregado a la disminución de la agudeza visual y además
la mala recolección de datos al momento de la elaboración de historias clínicas consignan
un tiempo de evolución de la lesión relativamente corto.
Al evaluar la localización o región anatómica afectada (tabla N° 7) se pudo observar que la
más frecuente se presentó en la región del antepié (66.09%), lo cual coincide con la
literatura 58%. Pensamos que esto se explicaría por la neuropatía motora que contribuye a
la atrofia de los músculos intrínsecos del pie, predominando entonces el tono de la
musculatura flexora, con deformidades que crean puntos de presión en las cabezas de los
metatarsianos y en el dorso y la punta de los dedos y por ende úlceras. Sólo 06 pacientes
(5.22%) tuvieron además compromiso de la pierna, cambios de coloración, edema y
gangrena en sus diferentes niveles. Pero más importante que la localización es la gravedad
de la lesión la que determina el pronóstico.
En la tabla N° 8, se resume la clasificación del pie diabético según Wagner. Así tenemos
que del total de pacientes la mayoría son de grado IV (41.74%) seguido del grado III y V
con 23.48% y 21.74% respectivamente. Escalante(4) en su estudio reportó que el 45% eran
de grado IV. Lo que nos orienta el desarrollo de lesiones severas que requieren
hospitalización y/o cirugía para su manejo.
Respecto a los exámenes auxiliares realizados, de las 44 radiografías realizadas el 59.09%
presentaban lesión ósea como fracturas, amputaciones, gas y osteólisis; sin embargo la
radiología convencional tiene muy baja sensibilidad y especificidad para detectar
precozmente la infección ósea ante de las 2 semanas; por lo cual el diagnóstico es clínico.
Pero es importante realizar siempre una radiografía simple del pie para estudiar el estado
óseo próximo a la ulcera. El objetivo de la evaluación vascular es determinar si hay una
circulación local adecuada que apoye la curación primaria con o sin intervención
quirúrgica, en nuestro estudio de los 58 ecodoppler que consignan en las historias clínicas
el 53.45% corresponde a estenosis y el 31.03% corresponde a sin lesión este último dato
se explicaría porque no hubo uniformidad en la realización de esta prueba; ya que en
algunos años de estudio no se contaba con el equipo en el hospital para la realización de
dicho examen; por lo cual se realizaban en otros centros o no lo hacían por no contar con
medios económicos.
45
De los 39 pacientes a quienes se les realizó cultivo el 87.18% se encontró un sólo germen
similar a lo reportado por Elguera, Solis y Arismendiz en el Hospital Arzobispo Loayza que
encontraron un solo germen en el 80% de los casos, sin embargo la literatura reporta que
se aíslan de 3 a 5 gérmenes por cultivo en los casos de pie diabético infectado, la razón
sería el no aislamiento de bacterias anaeróbicas estrictas en el laboratorio del hospital. Los
gérmenes Gram (+) más aislados en este estudio fueron Staphylococcus aureus (25,64%),
seguido por Enterococcus (7,69%). Los gérmenes Gram (-) más aislados fueron Proteus
(20.51%) y Escherichia coli (15.38%) atribuyéndolo al hecho de haber utilizado
antibióticos previamente y tener hospitalizaciones prolongadas.
Respecto al tratamiento realizado en nuestros 115 pacientes, se puede observar que sólo al
16,52% se les realizó limpieza quirúrgica (02 pacientes además de injerto
dermoepidérmico) y amputación a 84 pacientes (73.04%), datos que coinciden con Torres(5)
(21.6% y 78.4% respectivamente). Flores(7) en su estudio realizado en la ciudad de
Arequipa entre los años de 1985 a 1995 encontró a 51 pacientes amputados por pie
diabético; el incremento en el número probablemente este asociado al aumento de la
incidencia de casos de diabetes mellitus tipo 2 en la población en general, así como que las
personas con diabetes viven lo bastante como para desarrollar complicaciones en los pies.
Estudiando la distribución según tiempo de evolución de la diabetes mellitus encontramos
que el 29.03 % tuvo un tiempo de evolución de 11 a 15 años, siendo el promedio de 12.63
años, dato que coinciden con Torres(5) el tiempo promedio de enfermedad de diabetes fue
12.5 años para desarrollar pie diabético, esto podría explicarse debido a que la neuropatía
periférica se presenta habitualmente en la diabetes mellitus después de 10 años de
evolución lo cual posteriormente predispone a la aparición de lesiones o úlceras.. Además
se encontró 06 pacientes con diagnóstico de debut, esto se explicaría porque cerca de la
mitad de los casos de diabetes mellitus tipo 2 son asintomáticos y sería la primera
manifestación de la enfermedad.
De los 84 pacientes que fueron sometidos a amputación de extremidad inferior, el 53.57%
sufrió una amputación de extremidad derecha, lo cual coincide con Escalante(4) (54.0%) y
Cieza(6) (59.18%). En nuestro estudio no encontramos gran diferencia entre si la extremidad
46
amputada es la derecha o izquierda, y esto puede explicarse porque la ateroesclerosis en la
diabetes a menudo es bilateral.
En la tabla N° 12, resume el nivel de amputación según el grado de severidad,
encontrándose que al 54.87% se le realizo amputación mayor, dato que coincide con
Escalante(4) (56.5%), Cieza(6) (53.06%), Torres(5) (46.4%). Según la clasificación de Wagner
el grado IV fue el más frecuente tanto en amputaciones digitales, rayectomías e
infracondíleas con un porcentaje de 9.52%, 50% y 30.95% respectivamente. La mayor
cantidad de pacientes fueron sometidos a amputaciones infracondíleas (38.10%), seguido
de las rayectomías (33,33%). Flores(7) encontró que el 41.18% fueron amputaciones
supracondíleas en contraste con el 16.67% hallado en nuestro estudio, esto podría
explicarse en relación con un mejor manejo médico quirúrgico, lo que tiene trascendental
importancia porque la amputación menor a diferencia de la mayor, no produce
discapacidad total, permitiendo que el paciente se reintegre a sus actividades.
Respecto a la principales complicaciones post-operatorias (tabla N° 13) vemos que un
porcentaje de 71. 43% no presentó complicaciones, siendo la necrosis de los bordes del
muñón operatorio (16.67%) la principal complicación, estando también la infección y
necrosis (7.14%). Esto se explicaría por la enfermedad arterial periférica que se da en el pie
diabético debido al déficit de aporte sanguíneo lo cual se traduce en una mayor dificultad
para la cicatrización de la herida, así como una menor capacidad de defensa frente a la
infección.
En la tabla N° 14 se observa que de las reintervenciones quirúrgicas a los pacientes
amputados, el 8.33% fueron reamputados (2.38% reamputación rayectomía e infracondílea
respectivamente y 3.57% reamputacion supracondílea), dato similar encontró Flores(7)
(5.88%) . Esto se explica debido a pacientes que ingresaron con un grado de lesión IV y V,
los cuales se rehusaron a una amputación radical y optaron por una más conservadora, la
cual a posteriori, tuvo que volver a realizarse. A 13 pacientes se les realizo desbridación y
a 4 colocación de injerto dermoepidérmico.
Es importante poder determinar la condición de alta de los paciente, donde se encontró que
de los 19 pacientes (16.52%) con alta a solicitud, 12 pacientes tenían la indicación de
amputación los cuales se rehusaron a dicho procedimiento probablemente por el temor a la
47
discapacidad e invalidez que conlleva una amputación. Se encontró además 04 casos de
pacientes fallecidos por shock séptico, ya que los pacientes mueren a consecuencia de la
infección generalizada que se inicia en el pie (01 de ellos no tolero el acto quirúrgico) y 01
caso por paro cardiorespiratorio lo que se explica por comorbilidades propias de la
enfermedad como anemia, hipoglicemias y trastornos hidroelectrolíticos.
La estancia hospitalaria promedio fue de 19.37 días, dato que coincide con Flores(7) que
encontró un tiempo de hospitalización de 20.82 días. La mayor frecuencia se dio entre 1 a 3
semanas (47.83%). Las variaciones del tiempo de hospitalización de los pacientes con pie
diabético se relacionan de acuerdo al nivel de amputación, que cuenten con exámenes
auxiliares, diabetes descompensada que tiene que ser estabilizada; lo que conlleva a un
tiempo mayor de permanencia.
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CAPÍTULO VI
CONCLUSIONES
1. La prevalencia de pie diabético en el periodo de estudio fue de 7.5%. La mayor
incidencia se presentó en los años 2013 y 2012 (23.48% y 21.74% respectivamente).
2. De los 115 pacientes con pie diabético se encontró mayor prevalencia del sexo
masculino (70.43%), la edad predominante fue mayores a la quinta década de la vida,
conformada en su mayoría por pacientes que se dedicaban a “su casa” (40.00%).
3. Se encontró que el 99.13% de los pacientes con pie diabético tuvieron Diabetes
Mellitus tipo 2, con un tiempo de evolución de diabetes en su mayoría entre 11 a 15
años (27.83%), además de 6 pacientes con diagnóstico de debut.
4. En el 41.74% de los pacientes se encontró un tiempo de evolución de la lesión antes de
su hospitalización menor a 15 días, así mismo se determinó que la mayoría se localizó
en el antepié.
5. El grado de severidad de pie diabético más frecuente fue el grado IV según la
clasificación de Wagner (41.74%).
6. De los exámenes auxiliares realizados, el germen aislado más frecuente fue el
Staphylococcus aureus.
7. Al 73.04% de los pacientes con pie diabético se les realizó amputación del miembro
inferior afectado, el grado de severidad más frecuente encontrado es el grado IV; las
amputaciones infracondíleas (38.15%) seguidas de las rayectomías (33.33%) son las
intervenciones mayormente practicadas; la gran mayoría no presentó complicaciones
por lo cual la reamputaciones fueron solo del 8.33%.
8. En nuestro estudio se encontró que el 16.38% solicito su alta, de los cuales más de la
mitad tenían indicación de amputación.
9. El tiempo de estancia hospitalaria promedio fue de 1 a 3 semanas.
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RECOMENDACIONES
1. Es importante puntualizar la necesidad de una actividad médico-preventiva para evitar
la aparición de las manifestaciones del pie diabético o para detectarlas en forma
oportuna, evitando su progresión. Con esta finalidad se debe promover el control
metabólico euglicémico y nutricional, el cuidado diario de los pies, la asistencia
periódica a los controles y el examen clínico completo que incluye el estado de los
pies.
2. Elaboración de protocolos de atención de pie diabético detallando la clasificación y el
tratamiento correcto a seguir, de tal manera que internos, enfermeras y personal médico
de otras especialidades estén familiarizados con el tema y comprendan la necesidad de
realizar un tratamiento oportuno para disminuir el riesgo de complicaciones.
3. Proporcionar a los médicos métodos de ayuda diagnóstica, necesarios para determinar
el nivel de amputación así como para la detección oportuna de alteraciones en el pie de
pacientes diabéticos.
4. En los pacientes que ya han sufrido una amputación, y que por tanto presentan alto
riesgo para desarrollar nuevas úlceras y amputaciones nuevas, es necesario programas
de seguimiento y prevención.
5. Mejorar los sistemas de registro de información en las historias de emergencia e
historias clínicas. Para facilitar la realización de futuros trabajos de investigación.
50
CAPÍTULO VII
1. Bibliografía:
1 Manual para el diagnóstico y tratamiento del pie diabético. Servicio de
Endocrinología Hospital Alberto Sabogal. Lima, Perú. 2014. Disponible en:
http://www.endocrinoperu.org/
2 Gómez Hoyos E. Pie diabético. Elsevier. Junio 2012. Disponible en:
http://www.elsevier.es/mobile/en-revista-seminarios-fundacion-espanola-
reumatologia-274-articulo-pie-diabetico-90161927.
3 Martínez F. Epidemiologia y costos de atención del pie diabético. “Pie Diabético
Atención Integral”. 3a Ed. Mexico: McGrawHill/Interamericana Editores, S. A;
2010: Cap.: 2. Pág.: 13.
4 Escalante Gutiérrez D, Lecca García L, Gamarra Sánchez J, Escalante Gutiérrez G.
Amputación del miembro inferior por pie diabético en Hospitales de la costa norte
peruana 1990 – 2000: Características clínico-epidemiológicas. La Libertad, Perú:
Universidad Nacional de Trujillo. 2003. Disponible en: http://www.scielo.org.pe/
5 Torres Aparcana H, Gutiérrez C, Pajuelo Ramírez J, Pando ÁlvarezR, Arbañil
Huamán H. Características clínicas y epidemiológicas de los pacientes
hospitalizados por pie diabético en el Hospital Nacional Dos de Mayo entre 2006 y
2008, Lima, Perú. Disponible en: http://ateneo.unmsm.edu.pe/.
6 Cieza Zulueta P. Prevalencia de pie diabético y riesgo de amputación de miembro
inferior en pacientes del Hospital Manuel Ignacio Montero periodo 2000 – 2008. La
Loja, Ecuador. Universidad Nacional de Loja. 2010.
7 Flores Vilca M. Estudio de pacientes amputados por pie diabético en el servicio de
ortopedia y traumatología del Hospital Regional Honorio Delgado Espinoza entre
1985 – 1995. Arequipa, Perú: Universidad Nacional de San Agustín, 1997.
8 RIMA. Alimentación saludable: Clave para la lucha contra la diabetes. RIMA.
Brasil. Noviembre 2015. Disponible en: https://www.rima.org/Noticias.aspx.
9 Martínez F. Definición del problema. “Pie Diabético Atención Integral”. 3a Ed.
Mexico: McGrawHill/Interamericana Editores, S. A; 2010: Cap.: 3. Pág.: 20-21.
10 Martínez F. Fisiopatología. “Pie Diabético Atención Integral”. 3a Ed. Mexico:
McGrawHill/Interamericana Editores, S. A; 2010: Cap.: 6. Pág.: 44-45.
51
11 Mahía Vilas M. La diabetes mellitus y sus complicaciones vasculares: un problema
social de salud. Rev. Cubana Angiol y Cir Vasc 2000; 1(1):68-73. Disponible en:
http://www.bvs.sld.cu/revistas/ang/vol1_1_00/ang15100.htm.
12 Neyra-Arisméndiz L. Pie Diabético. Rev Soc Peru Med Interna. Lima, Perú. 2012.
Pág.: 76. Disponible en: http://www.medicinainterna.org.pe/
13 Martínez F. Infecciones en el pie diabético. “Pie Diabético Atención Integral”. 3a
Ed. Mexico: McGrawHill/Interamericana Editores, S. A; 2010: Cap.: 13. Pág.: 134-
135.
14 Brodsky J. Pie diabético. “Pie y tobillo”. 8a Ed. España: Marbán Libros; 2011:
Cap.:23. Pág.: 1095-1096.
15 Brodsky J. Pie diabético. “Pie y tobillo”. 8a Ed. España: Marbán Libros; 2011:
Cap.:23. Pág.: 1106-1107
16 Ishikawa S. Pie Diabético. “Campbell Cirugía Ortopédica”. 11a Ed. España:
Elsevier España, SL; 2010: Cap.: 82. Pág.: 4102.
17 Manual para el diagnóstico y tratamiento del pie diabético. Servicio de
Endocrinología Hospital Alberto Sabogal. Lima, Perú. 2014. Disponible en:
http://www.endocrinoperu.org/
18 Vaquero C. Pie Diabético. 1a Ed. Valladolid 2012. Pág.: 64.
19 Vaquero C. Pie Diabético. 1a Ed. Valladolid 2012. Pág.: 67-69.
20 Brodsky J. Pie Diabético. “Pie y tobillo”. 8a Ed. España: Marbán Libros; 2011:
Cap.:23. Pág.: 1127.
21 Robert K. Principios generales de las amputaciones. “Campbell Cirugía
Ortopédica”. 11a Ed. España: Elsevier España, SL; 2010: Cap.: 9. Pág.: 500.
22 Martínez F. Nivel de amputación en el pie diabético. “Pie Diabético Atención
Integral”. 3a Ed. Mexico: McGrawHill/Interamericana Editores, S. A; 2010: Cap.:
21. Pág.: 206.
23 Richardson D. Amputaciones en la región del pie. “Campbell Cirugía Ortopédica”.
11a Ed. España: Elsevier España, SL; 2010: Cap.: 10. Pág.: 514-516.
24 Camilleri A. Amputaciones y desarticulaciones de los miembros: miembro inferior.
“Técnicas quirúrgicas en ortopedia y traumatología” 1a Ed. España: Elsevier
España, S. L; 2009: Cap.: 31. Pág.: 418-420.
25 Vaquero C. Pie Diabético. 1a Ed. Valladolid 2012. Pág.: 159.
52
26 Vaquero C. nuevos avances en el tratamiento del pie diabético. Pie Diabético. 1a Ed.
Valladolid 2012. Pág.: 162-166.
27 Martínez F. Modalidades terapéuticas coadyuvantes y avances en el tratamiento de
las lesiones del pie diabético. “Pie Diabético Atención Integral”. 3a Ed. Mexico:
McGrawHill/Interamericana Editores, S. A; 2010: Cap.: 12. Pág.: 206.
53
2. Anexos:
FICHA DE RECOLECCIÓN DE DATOS
“PREVALENCIA Y TRATAMIENTO DE PIE DIABÉTICO EN PACIENTES DEL
SERVICIO DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA DEL HOSPITAL REGIONAL
HONORIO DELGADO ESPINOZA PERIODO 2010 – 2015”
NOMBRE: ________________________________________________________________
N° HC: __________________________________________AÑO:____________________
1) EDAD
( ) 30 a 40 años
( ) 41 a 50 años
( ) 51 a 60 años
( ) 61 a 70 años
( ) Mayor a 70 años
2) SEXO
( ) Masculino ( ) Femenino
3) OCUPACIÓN
( ) Comerciante
( ) Agricultor
( ) Jubilado
( ) Ama de casa
( ) Profesional
( ) Otros
4) TIPO DE DIABETES MELLITUS
( ) DM1 ( ) DM2
5) TIEMPO DE EVOLUCIÓN DE LA DIABETES.
( ) Menor a 5 años
( ) 5 a 10 años
( ) 11 a 15 años
( ) 16 a 20 años
( ) Mayor a 20 años
6) TIEMPO DE EVOLUCIÓN DE LA LESIÓN.
( ) Menor 15 días
( ) 15 – 30 días
( ) 31 – 60 días
( ) 61 – 90 días
( ) Mayor a 90 días
7) LOCALIZACIÓN DE LA LESIÓN.
( ) Antepié ( ) Mediopié ( ) Retropié
8) EXAMEN AUXILIAR:
( ) Radiografía
( ) Ecodoppler
( ) Angiografía
( ) Otros
54
9) CULTIVO:
SI ( ) _____________________________________________________ NO ( )
Gérmenes aislados: _________________________________________________________
10) CLASIFICACIÓN DE WAGNER:
( ) Grado 0
( ) Grado I
( ) Grado II
( ) Grado III
( ) Grado IV
( ) Grado V
11) TRATAMIENTO:
( ) Limpieza quirúrgica.
( ) Colgajo y/o injerto.
( ) Amputación
12) EXTREMIDAD AMPUTADA
( ) Derecha ( ) Izquierda
13) TIPO DE AMPUTACIÓN
( ) Amputación y desarticulación de
dedos.
( ) Amputación Transmetatarsiana.
( ) Rayectomía
( ) Amputación de Lisfranc
( ) Amputación de Chopart
( ) Amputación de Syme
( ) Amputación Infracondílea
( ) Desarticulación de la rodilla
( ) Amputación Supracondílea
14) COMPLICACIONES POST-OPERATORIAS
( ) Infección
( ) Necrosis
( ) Hematoma
( ) Otros
15) REINTERVENCIONES QUIRÚRGICAS
( ) Desbridación ( ) Injerto ( ) Amputación secuencial
16) TIEMPO DE HOSPITALIZACIÓN
( ) < 1 semana
( ) 1-2 semanas
( ) 2-3 semanas
( ) 3-4 semanas
( ) >4 semanas