Uso seguro de Internet

Módulo II. La Internet de los chicos: guía para adultos Uso seguro de Internet Curso virtual

Octubre 2009. Buenos Aires.

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Tabla de Contenidos del Módulo

Introducción........................... 2 Acercándonos al tema II.............. 2 En este módulo ........................ 2

Desarrollo .............................. 3 1. La Internet de los chicos .......... 3 2. El qué, el dónde y el cómo de los chicos ................................... 5 Contextos de uso ...................... 6 Guía de aplicaciones.................. 7 Navegador (o browser, en inglés) ... 7 Correo electrónico .................... 8 Mensajero instantáneo ............... 8 Salas de Chat.......................... 10 Aplicaciones P2P ..................... 10 Juegos.................................. 11 Weblogs................................ 12 Redes sociales ........................ 14

La autoría de las lecciones del curso Uso Seguro de Internet fue realizada por Mariana Berruezo y Verónica Chehtman en Buenos Aires durante el primer semestre de 2007 y posteriormente actualizada en el año 2008 y 2009. Estos recursos fueron elaborados el marco de las actividades de Entre Padres, el canal de Educared Argentina dedicado al vínculo familia y escuela.



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Introducción

Acercándonos al tema II

Clara es escritora y mamá de dos nenas de 9 y 13 años. Hace ya un tiempo que debate con su marido, no saben qué hacer… La computadora de la casa está “secuestrada” por sus hijas.

La mujer la usa fundamentalmente para escribir, y realmente la necesita. Cada tanto, cuando consigue sentarse a escribir, aparecen carteles que no entiende. No pasa un día sin escuchar las quejas de las chicas: “… somos siempre las últimas en enterarnos de todo, no sirve de nada ver las fotos del cumpleaños ¡cuando ya están preparando el pijama party del próximo! La mamá de Luz compró una notebook ¡y le pasó la suya a su hija! Encima dice que lo hizo porque es fundamental para estudiar...” Clara tiene miedo de que sus hijas se obsesionen con la computadora y se aíslen… que se la pasen paveando sin ver la luz del sol, sin hacer nuevas amigas. Le cuesta entender para qué necesitan estar conectadas todo el día. Por otro lado, piensa que es mejor que haya una sola computadora, de uso familiar, y así poder supervisar lo que hacen las chicas. Oscar, su marido, cree que es demasiada inversión comprar otra computadora sólo para que las sus hijas se entretengan… que va a tener trabajo extra, instalando y desinstalando programitas, antivirus, juegos.

En este módulo

En el módulo anterior se introdujeron algunas nociones generales acerca de qué es Internet y cómo funciona. En este módulo, se presenta un panorama del uso que los

chicos hacen de Internet, y una guía de los propósitos y aplicaciones más populares, con el objetivo de ayudar a comprender la forma en que las nuevas generaciones se manejan en la Red.



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Desarrollo

1. La Internet de los chicos

¿Cómo usan los chicos Internet y las TIC en general? La respuesta es: ¡fácilmente!

Los chicos piensan en términos de “ventanas”. Buscar algo es “googlear”; entrar a un sitio que

requiere clave es “loguearse”. En general, los más jóvenes carecen de los preconceptos y los temores

que padecen los adultos cuando incursionan en la Web.

Estas particularidades se dan, además, en el marco del surgimiento de nuevos rasgos culturales,

nuevos códigos y nuevos lenguajes. Los investigadores hablan hoy de la “generación M” (Rideaut,

2005) como aquella que nace en el seno de la cultura multimedia y digital. Diferencian a los “nativos

digitales” de los “inmigrantes digitales”, es decir, quienes no han nacido en el seno de esta cultura

(Vilches, 2001; Prensky, 2004). La actual generación de chicos nació con un amplio acceso a las TIC en

general (computadoras personales, programas informáticos, etc.) y a Internet en particular.

Prácticamente no necesitan una alfabetización en el dominio técnico de la Red porque lo adquieren de

manera intuitiva y espontánea (Prensky, 2004).

¿Cómo son estas nuevas generaciones? ¿En qué se diferencian de sus predecesoras?

� Los inmigrantes caminan mirando las costumbres locales y tratando de comportarse adecuadamente, mantienen siempre resabios de épocas anteriores y viejos hábitos (lectura en papel, imprimir los correos electrónicos, entre otros).

� Los nativos “saben”; su cultura les es obvia. Entre los chicos, son los de mayor edad quienes han sido denominados “Generación de la Red”1 (Cebrián, 2000), aquellos que ya no se plantean su existencia, porque ya estaba allí cuando nacieron; no necesitan aprenderla porque su aprendizaje resulta intuitivo, inherente a su propia condición (Navarrete, 2004). Los más pequeños -denominados “Generación M” o “Nativos”- nacieron en un mundo con acceso a Internet; son chicos multimedia y multitarea: con capacidad de interactuar al mismo tiempo con distintos media y realizar diversas actividades simultáneamente2.

1 Para Cebrián, el término “Generación Red” alcanza a aquellos que tenían entre 2 y 22 años en 1999. Para este grupo, su primer punto de referencia es la Red. Cebrián, J. L. 2000. 2 Los chicos usan más de un medio al mismo tiempo. Por ejemplo, navegan por Internet mientras miran televisión.

Los estudiantes de hoy no acaban de cambiar a los del pasado, no es simplemente un cambio de su argot, ropas, adornos del cuerpo o

estilos, como ha sucedido en generaciones previas. Ha ocurrido una discontinuidad realmente grande. Se puede incluso llamarla

“singularidad”, un acontecimiento que substituye cosas fundamentales que absolutamente no van a ninguna parte. Esta “singularidad

supuesta” es la rápida difusión de la tecnología digital llegada en las décadas pasadas del siglo 20.

Mark Prensky (2005)



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“Esta manera de relacionarse con las Tecnologías de la Información y de la Comunicación por parte de las cohortes más jóvenes influye en la evolución y socialización de los mismos, en sus sistemas de aprendizaje, en la adquisición de conocimientos y especialmente en sus métodos comunicacionales y de ocio (…). De todas ellas, la más revolucionaria es Internet. La red de redes, en sí misma, no deja de ser un canal de comunicación. Lo que la convierte en especial resulta de su capacidad de aglutinar todos los demás canales y sistemas de comunicación, integrando audio, video, letra escrita, incorporando en un mismo formato y con una misma mecánica de acceso y uso, todos los medios de comunicación y de distribución de conocimiento, en el que todo lo que existe tiene cabida… de manera virtual”. (Lorenzo, 2005).

Las investigaciones muestran que los menores hacen un uso de Internet distinto al de los adultos

(Parent internacional, UK).

Los adultos hacen un uso pragmático de la Red: estudiar, hacer trámites, comprar en el

supermercado.

Los chicos hacen un uso mucho más social, vinculado al ocio, al esparcimiento y a la socialización.

Para ellos, Internet trae, como nunca antes, el mundo al alcance de sus ojos y manos. “Años atrás,

a los niños les parecía que nunca llegaba la hora de salir, puesto que lo más interesante estaba fuera.

La casa era el ámbito de la seguridad, de las necesidades esenciales, de los deberes… pero había que

salir para encontrarse con amigos, para jugar, para ir al cine o a la biblioteca. Y si había peligros -

que los había-, había que ir con cuidado, tal como nos decían nuestros padres. Hoy, en cambio, lo que

más esperan los niños es el momento de llegar a casa, porque el hogar es el lugar del descanso, de la

cultura, de lo afectivo, de la comunicación… En casa tenemos la biblioteca, nuestra selección de

discos, las películas que más nos gustan y la posibilidad de hablar por teléfono o de enviar mensajes y

fotos a través de Internet o del móvil. La casa acoge la ciudad entera en un único espacio. Ha dejado

de ser una parte de un complejo ecosistema y muestra una clara tendencia a convertirse en un

espacio autosuficiente, otra característica destacada e inquietante de la ciudad moderna” (Tonucci,

F, 2006).

Veen (2002 y 2003) señala que la actual “e-Generación”, además de usar las TIC, es capaz de

desarrollar procesos mentales vinculados a ellas. Entre las nuevas capacidades desarrolladas por los

actuales chicos de entre 3 y 18 años está la exploración integrada de la información, la posibilidad

de realizar una multitud de tareas de diferente naturaleza, la habilidad para procesar información

simultánea, y para procesar información de forma no lineal.

Esta nueva forma de pensar, de hacer y de relacionarse tiene su correlato: una nueva cultura,

nuevos lenguajes y códigos, nuevos productos culturales a través de los cuales expresan sus

pensamientos y reflexiones.

Y, lógicamente, todo ello se traduce en la realización de nuevas actividades en las que también

necesitan orientación por parte de los adultos.

Por eso, así como enseñamos a los chicos y chicas a cuidarse en el mundo físico, debemos ayudarlos a

conocer este nuevo mundo en red y aprovechar la experiencia en línea3, pero también a entender los

riesgos que presenta y, especialmente, inferir los peligros –más concretos- en relación con el modo en

3 Con la noción de “experiencia en línea” se hace referencia a la experiencia que se obtiene al desarrollar distintas actividades conectado a Internet.



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que se utiliza Internet o algunas de sus herramientas. De esta forma, estarán más seguros dentro del

“mundo virtual”, tal como lo hacen cuando circulan, solos o acompañados, en el mundo físico.

Sin embargo, para los adultos, como inmigrantes digitales, se plantea todo un desafío: es difícil

encontrar el punto de apoyo para ser referentes de los nativos digitales, que se manejan en la Red con

tanta fluidez. De allí, la importancia de conocer cómo funciona y hacerlo desde la perspectiva y

hábitos de uso de los propios chicos.

En la práctica, principalmente por las diversas razones ya enumeradas, los chicos y

adolescentes acceden a los nuevos entornos virtuales de significado e interacción sin una

guía y -mucho menos- formación.

En su mayor parte, aprenden a usar Internet como autodidactas, y por ensayo y error. En el mejor

de los casos, son orientados desde la escuela y en relación con actividades particulares, como hacer la

tarea o desarrollar un proyecto. En lo que respecta a las habilidades sociales, la orientación está

dada más por el contacto con sus pares, usuarios de La Red con los que interactúan, que por los

adultos.

Según Generaciones Interactivas en Iberoamérica (2008)4, el 46% de los chicos expresó que sus padres

se limitan a preguntarles “qué hacen” mientras navegan en Internet. El 36% dijo que sus padres "no

hacen nada" y el 27%, que a veces "echan un vistazo". Sólo el 9% contestó "hacemos algo juntos" y el 5%

señaló: "miran mi e-mail" o "comprueban por dónde navegué".

2. El qué, el dónde y el cómo de los chicos

Para comenzar a comprender cómo es Internet desde la perspectiva de los chicos, en este apartado se

presenta una guía de conceptos y aplicaciones para acercarse a la Web “con ojos de niño”.

Los principales usos de la WWW en América Latina, tanto por parte de los adultos como de los chicos5

son la búsqueda de información, el intercambio de mensajes por correo electrónico y la comunicación

a través de la mensajería instantánea.

Un estudio realizado con chicos de entre 10 y 15 años, que hacen búsquedas con distinto grado de

pericia y navegan por páginas Web, muestra que conectarse a Internet es una de las actividades

más valoradas y populares6. Muchos prefieren navegar que hacer cualquier otra cosa, desde mirar

televisión y hablar por teléfono hasta, incluso, hacer deporte. En este sentido, la investigación

4 Generaciones interactivas en Iberoamérica. Niños y adolescentes ante las pantallas . Investigación realizada por Telefónica, en colaboración con la Universidad de Navarra y el programa Educared de Fundación Telefónica. Fueron encuestados 25.000 chicos y chicas, de entre 6 y 18 años, de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Venezuela. 5 Indicadores de uso de Internet en Latinoamérica 200 7, Tendencias Digitales. Caracas, 2007. 6 Los menores en la Red: comportamiento y navegación segura. Rocío Miranda de Larra. Cuadernos / Sociedad de la Información 6. Fundación Auna. Madrid, 2005. http://www.fundacionorange.es/documentos/analisis/cuadernos/los_menores_red.pdf



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Generaciones Interactivas en Iberoamérica (2008) arroja una contundente evidencia: el 45% de los

chicos y chicas de America Latina de entre 6 y 9 años elige Internet frente a la TV.

Entre sus actividades preferidas se encuentran:

� Enviar y recibir mensajes (uso del correo electrónico). Casi todos (más del 90%) tienen al menos una cuenta de correo electrónico y muchos tienen más de una cuenta, que la consultan periódicamente entre 1 y 5 veces a la semana7.

� Encontrarse con amigos y conversar en tiempo real (uso de mensajeros instantáneos y participación en redes sociales o comunidades virtuales). Cuando acceden a Internet, una de las primeras cosas que hacen es abrir su mensajero instantáneo (MSN por ejemplo), ver quién de su lista de contactos está en línea, entablar una conversación y cambiar los datos de su perfil.

� Divertirse a solas o con otros, pero “a la distancia”. El entretenimiento en red abarca desde los juegos propiamente dichos (juegos en red, salones virtuales de juego, entornos de simulación con juegos de roles) hasta la participación en comunidades virtuales y el uso de blogs. A partir de los 12 años aproximadamente, los chicos suelen desarrollar nuevos hobbies electrónicos o enriquecer y organizar otros más tradicionales, seguir el rastro de algún ídolo, además de comenzar a bajar e intercambiar música, videos e ilustraciones.

Los chicos y chicas desarrollan estas rutinas en distintos lugares. A continuación se presenta una

descripción de los contextos de uso más usuales.

Contextos de uso

Internet está siempre allí, sin horarios ni lugar o en cualquier horario y en todo lugar. Con sólo

tener a mano una computadora con conexión a la Red, es posible acceder a una cuenta de correo

electrónico, al blog de un amigo para dejar un comentario, al “Neopets” o al “Argentum” (juegos en

línea, de los que hablaremos más adelante). No importa desde dónde, ni desde qué equipo, y por eso

las ventajas se multiplican.

Esto hace que los contextos de uso sean muchos y heterogéneos.

Los chicos se conectan desde su casa, desde la casa de algún amigo o un primo, desde la escuela,

desde el laboratorio de inglés, desde la máquina del club, desde un ciber y, cada vez más, desde un

teléfono celular u otro aparato portátil. Para los menores de 10 años, los lugares de acceso a la Web

más habituales son la casa (49%) y la escuela (46%); en cambio, a partir de los 11 se incorpora el ciber.

(Generaciones Interactivas en Iberoamérica, 2008). Tienen muchas alternativas de acceso y a

medida que desarrollan mayor independencia para movilizarse por el barrio o la ciudad, se les

abren nuevas posibilidades de conexión. Junto con éstas también varían las condiciones en que

acceden: con o sin banda ancha, con o sin antivirus, con una computadora último modelo o una más

antigua, en compañía de adultos concientes y cuidadosos, solos, en compañía de adultos más

descuidados o en forma grupal con otros chicos.

En definitiva, los contextos de uso de Internet por parte de los chicos son difíciles de prever y

controlar. De hecho, la principal forma de acceso a Internet en América Latina son los cibercafés, y

7 Internet y los Estudiantes de Secundaria . Reflexiones originadas por una encuesta hecha con 303 alumnos de tercero de secundaria de Tarapoto, sobre usos de Internet. Perú, 2006. http://www.educared.edu.pe/espaciodecrianza/columnista/1174/internet-y-los-estudiantes-de-secundaria/



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a éstos le siguen el hogar, el trabajo, las escuelas y otros centros de estudios (Tendencias Digitales,

2007). De los chicos que tienen computadora y acceso a Internet de su casa, muchos (y pareciera que

es más común entre los varones), prefieren el ciber para conectarse.

Guía de aplicaciones

Navegador (browser, en inglés)

El navegador es nuestra puerta de entrada a la WWW y, como su nombre lo indica, el medio para

navegar a través de sus páginas. Es el programa que abrimos para “conectarnos” y se utiliza para

recorrer los sitios y páginas Web, y “seguir” los enlaces de hipertexto que éstas presentan.

El navegador de uso más extendido es el MS Internet Explorer, de la compañía Microsoft, pero hay

otros como el Mozilla Firefox, que está ganando cada vez más terreno.

A medida que se pasa de un enlace a otro, se va

trazando la ruta de la navegación. Como los

navegadores guardan registro de estos pasos, es

posible retroceder y optar por explorar nuevos

caminos. El botón “Atrás” (back), identificado con

una flecha que apunta hacia la izquierda, permite

volver a la página inmediatamente anterior. Si ya

retrocedimos, entonces el botón “Adelante”

(forward), identificado con una flecha que apunta

hacia la derecha, permite volver a las páginas ya

visitadas dentro de la misma ventana.

Mientras se navega es posible guardar un sitio o

página Web como “favorito”. Esta función sirve como

“señalador” para que el navegador recuerde la

dirección URL de una página, a la que a veces no

sabemos siquiera cómo llegamos. Visualizando la

página de interés, se selecciona la opción “Favoritos” o

“Marcadores” en el menú principal del navegador y se

guarda la página como tal. Los favoritos, además,

pueden organizarse en carpetas por categorías,

ponerles un nombre, etc. La organización servirá para

localizar la página o sitio de forma más ágil dentro del

“listado sábana” de favoritos y carpetas de favoritos. Si tenemos señaladas muchas direcciones como

favoritos, la organización en carpetas se vuelve fundamental.

Los navegadores también permiten bajar archivos de Internet (download, en inglés). Bajar un archivo

es guardar una copia en nuestra computadora. Los chicos, mucho más que los adultos, bajan archivos

de cualquier tipo: un antivirus, un juego, las fotos de una fiesta o una canción. Esta práctica es de

suma utilidad, pero hay que tener en cuenta que no tiene garantía. Los archivos pueden ser lo que



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dicen ser, pero también algo más o algo distinto. Por ejemplo, pueden contener virus, contenido

peligroso o ilegal, etc.

Los navegadores son la herramienta básica para el acceso a la Red. Al mismo tiempo, pueden brindar

información sobre el usuario (es decir sobre nosotros) a los servidores de las páginas que visitan. Por

ello, al usarlos, es necesario que chicos y chicas (al igual que los adultos) tomen el recaudo de activar

las opciones de seguridad necesarias.

Correo electrónico

El correo electrónico es la aplicación más popular de Internet; todos sabemos de qué se trata, por lo

que nos detendremos sólo para destacar los aspectos más sustantivos:

� Se trata de un servicio de correspondencia electrónica privada, que para ser consultado requiere contar con un nombre de usuario y una contraseña. La privacidad de esta correspondencia es muchas veces vulnerada con mensajes no deseados (SPAM), por la captura fraudulenta de contraseñas (phishing) o por el descuido de su propio dueño.

� Todos cuentan con las mismas funciones básicas: emitir mensajes, recibirlos, responderlos o reenviarlos a una persona o a un conjunto de destinatarios, remitir copias en modo oculto o público, imprimir mensajes, marcarlos y organizarlos en carpetas, crear y organizar una agenda de contactos, etc.

� Salvo algunas limitaciones de peso, permite adjuntar archivos de cualquier tipo.

� Existen servicios de correo electrónico pagos y gratuitos. Estos últimos pueden ser solicitados y consultados por la Web con sólo completar un formulario.

Finalmente, cabe agregar que tener un correo electrónico es, en casi todos los casos, un

requisito para “adherirse” y poder aprovechar el abanico de propuestas de la Web:

redes sociales, blogs, comunidades, etc.

Aunque los chicos prefieren la mensajería instantánea como modalidad de

comunicación, es importante que cuando usen el correo tengan ciertos cuidados para no ponerse en

riesgo. Por ejemplo, no abrir archivos adjuntos sospechosos, ni responder con datos y/o información

personal, por más confiable que parezca su origen.

Mensajero instantáneo

Las aplicaciones de mensajería instantánea (por ejemplo el MSN, el Yahoo Messenger, el Google Chat y

el Skype) permiten (como el teléfono) la comunicación en tiempo real entre dos o más personas.

Funcionan a través de una ventana, desde la cual se accede a una lista de contactos, con los que se

puede “chatear” (del inglés to chat, charlar) al hacer clic sobre ellos.

Aunque en un comienzo los mensajeros eran únicamente para la comunicación escrita, actualmente

permiten entablar un diálogo por texto, por voz o por video entre dos o más usuarios, a través de

una cámara Web (o webcam).



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Los chicos y chicas se mantienen conectados casi siempre que están cerca de una computadora.

Apenas se conectan, cambian las configuraciones del mensajero. Adaptar el perfil al estado de ánimo

o las novedades del día, es algo que suelen hacer con regularidad. Les toma apenas un segundo e

implica, entre otras cosas: modificar el nombre que los identifica para otros usuarios, decidir el

“estado” con el que se presentan (“Conectado”, “Vuelvo enseguida”, etc.) y redactar el mensaje

personal que se ve debajo del nombre y la foto o imagen que los identifica.

Lo usual es agregar a las personas conocidas a la lista de contactos para poder

contactarse con ellas. El procedimiento consta en emitir un mensaje que pide

autorización al destinatario para incorporarlo a la lista. Luego hay que esperar

su aceptación. Las aplicaciones de mensajería instantánea permiten optar por

permitir que cualquiera nos incorpore directamente a su lista de contactos o,

por el contrario, que medie una solicitud para que otro nos incorpore a su lista.

Una vez que un contacto está incorporado, es posible saber si está en línea o

no, conocer su estado (disponible, no disponible, ausente), enviarle mensajes o

archivos, bloquear sus mensajes, etc.

Lógicamente, también es posible incluir a otras personas que no conocemos

dentro de nuestra lista, o estar incluidos en listas de desconocidos, con o sin

nuestra autorización, según la forma en que esté configurado nuestro perfil. Es, en este sentido, que

la comunicación puede volverse riesgosa.

Por ello es importante que los chicos y chicas mantengan siempre seleccionada la opción

de que sólo los contactos admitidos puedan enviarles mensajes instantáneos, ya que

esto implica que cualquier interesado tenga que requerir su autorización para

incorporarlos a su lista de contactos y enviarles mensajes.

Las opciones de configuración disponibles dependen del tipo de mensajero y la versión que esté

instalada en la PC que se utiliza, pero por lo general se muestran en el perfil del usuario cómo

“Configuración personal”. En particular, siendo tan popular entre los chicos el uso del MSN, se indica

la ruta para acceder a estas opciones en ese servicio de mensajería instantánea: Usuario/

Configuración personal/ Opciones / Privacidad.

Algunas otras configuraciones de la misma aplicación y también filtros especiales independientes

pueden servir de ayuda con los chicos más chicos para llevar un control sobre las comunicaciones que

mantienen por este canal 8.

De todos modos, siempre, como se verá en detalle más adelante, es más recomendable acompañarlos

en su uso, dialogar y establecer pautas que construyan responsabilidad y confianza mutua.

8 Para ello, es posible activar la opción de guardar un historial de las conversaciones mantenidas a través del MSN: Usuario/ Configuración personal/ Opciones /Mensajes.



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Salas de Chat

Las salas de Chat son espacios en línea de comunicación en tiempo real con funcionamiento

multiusuario. Es decir, admiten por defecto muchos usuarios al mismo tiempo (los mensajeros

instantáneos, en cambio, establecen de inicio la comunicación entre dos usuarios, y para que se sume

un tercero, éste debe ser invitado). Aunque la comunicación que se desarrolla a través de estas salas

se denomine “chatear”, al igual que en los mensajeros instantáneos, se puede decir que el Chat es

una especie de “abuelo” de la mensajería instantánea actual.

En las salas de Chat es posible participar de un diálogo público donde todos pueden intervenir sin

orden de prioridad y, por esta característica, suelen ser muy caóticas. También es posible invitar o

ser invitado a una conversación privada entre dos o más usuarios de la sala. Esto sucede cuando, por

alguna razón, dos usuarios deciden hacerse a un lado y dialogar con más intimidad (de un modo más

parecido a la mensajería instantánea).

También, existen Chats que son moderados por un referente que ordena el diálogo y organiza las

intervenciones. En estos casos la experiencia suele ser más enriquecedora para los participantes.

En la actualidad los Chats moderados no son tan populares entre los chicos y chicas como lo eran a

comienzos de la Era Internet. Suelen estar presentes, pero sin gran protagonismo, en portales Web de

distinto tipo, como una herramienta de comunicación más entre los usuarios de una comunidad

virtual. Se utilizan en juegos en red, de rol, aplicaciones P2P y distintos tipos de propuestas Web de

las que hablaremos a continuación.

Lo más importante a tener en cuenta es que, a diferencia de los mensajeros

instantáneos, en la sala de Chat no hay una lista de contactos. Están todos aquellos

que quisieron entrar y hablan quienes quieren hablar, acerca (claro) de lo que

quieren decir. Esto lleva a que el anonimato sea total: en la mayoría de los casos, no

hay una dirección comprobada de correo electrónico por detrás de cada usuario que interviene.

Aplicaciones P2P

Las aplicaciones Peer to Peer (Par a Par) son aquellas que permiten intercambiar archivos entre

usuarios, de allí su nombre que enfatiza el intercambio entre pares. Los archivos se transfieren desde

una computadora a otra, con la misma lógica con la que se “bajan” archivos de la Web. Estos

archivos pueden ser de música, de video, de software o de cualquier otro tipo.

Se caracterizan por ser descentralizadas. No utilizan servidores o computadoras centrales, sino que los

archivos a compartir son los que están guardados en las computadoras de los propios usuarios, que

autorizan a otros usuarios a “bajar” desde ellas archivos “que ponen para compartir”.

Además, facilitan el intercambio directo de archivos entre usuarios. Ejemplos de ellas son Ares9,

eMule10, Kazaa11, entre otros.

9 http://aresgalaxy.sourceforge.net/ 10 http://www.emule.com/es/



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Cabe señalar que muchas aplicaciones P2P afrontan problemas judiciales, ya que generalmente en el

intercambio se vulneran derechos y medidas de protección de la propiedad intelectual. Estas acciones

judiciales a veces se extienden sobre los usuarios y, si son menores de edad, recaen sobre los padres.

En este marco, es conveniente hablar con los chicos y explicarles claramente las consecuencias de un

uso indebido de la Red, y eventualmente, evaluar la utilización de herramientas técnicas que

controlen las “bajadas” (download, en inglés).

Es una buena práctica –afortunadamente, bastante frecuente- que en los sitios Web se incorpore una

guía para padres12 (Parents Guide, en inglés) desde donde se descarga el programa para transferencia

de archivos. Es muy recomendable ingresar y conocer estas guías para saber cuáles son las

recomendaciones que proponen.

Juegos

Internet y la WWW brindan enormes facilidades y un

amplio abanico de opciones para jugar con otros a

distancia. Los juegos en línea son aquellos juegos que

usan la red como medio de soporte. En línea existen:

� Juegos individuales: una persona juega sola contra

“la máquina” a lo largo de distintas sesiones que se

interrumpen. Entre otras muchas propuestas, se

puede jugar partidos de ajedrez, bridge o damas,

resolver enigmas o juegos de ingenio o jugar un match de tenis.

� Juegos multi jugador: se juega con o contra otras personas.

� Juegos de rol: se desarrollan en escenarios o mundos de fantasía. Cada jugador asume distintos

roles y se simula el devenir de personajes, mascotas virtuales, países o ciudades, negocios, entre

otros.

Para jugar en línea muchas veces es necesario bajar algún programa adicional, que permita, por

ejemplo, visualizar el escenario de juego o configurar parámetros en el sistema. Además, los juegos

multi jugador y los juegos de rol suponen la interacción con otros jugadores y para ello ponen a

disposición distintas herramientas de comunicación, como mensajeros instantáneos internos, foros,

salas de Chat, áreas de comunidad, acceso a los datos del perfil y/o a la performance de otros

usuarios.

Los juegos de rol generan un vasto mundo a su alrededor, a partir de la comunidad de

usuarios aficionados, sus intereses y códigos que los unen. El grado de afición al juego

en sí mismo o a la comunidad de personas que lo rodea depende de las edades y las

11 http://www.kazaa.com/us/index.htm 12 Como ejemplo, se puede acceder a la Guía para Padres del Kazaa en http://www.kazaa.com/us/help/guide_parents.htm



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situaciones particulares de cada uno. Pero es muy frecuente que se creen lazos entre jugadores y

nuevos grupos de pertenencia para los chicos. En este marco, se producen diversos fenómenos

grupales y suele ocurrir que algunos sucesos (bromas, referencias, trucos, etc.) sólo tengan sentido

dentro del grupo y, aún cuando se deje de jugar, los chicos reincidan en sus visitas a la comunidad

para localizar amigos y dejar mensajes.

Juegos individuales más populares: Neopets13, Sims, los juegos de Disney Latino, Cartoon Network, etc. Juegos en red más populares: Club Penguin14, Counter-Strike, Winning Eleven, Manager Zone15, Yahoo juegos y Kids16, etc. Juegos de rol: Argentum Online17, Second life, etc.

Como en el caso de las aplicaciones P2P, los sitios Web de los juegos suelen incorporar una guía para padres, que siempre es muy recomendable consultar.

Weblogs

La palabra “weblog” proviene de la expresión en inglés logging the web (“escribir” en la web). En

español se los conoció primero como “bitácora”, aunque cada vez más se impone el uso de la

abreviatura del inglés “blog”.

El blog es una página Web de fácil administración cuyo fin es que las personas, sin experiencia en

programación ni diseño Web, tengan y mantengan un espacio en la WWW donde publicar, con mucha

comodidad, el material que deseen. Por otro lado, el término blog refiere tanto a una página Web

“hecha por uno mismo” como a la herramienta Web (la aplicación) para crear blogs.

Inicialmente, los blogs sólo permitían publicar textos sin un formato particular. Actualmente es

posible cambiar el tipo de letra, cambiar el color de fondo, enlazar a otras páginas Web, agregar

imágenes, música y hasta video. Con estas prestaciones, en el último tiempo (sobre todo, en los

últimos cuatro años) se originó una amplísima variedad de aplicaciones:

� Los weblogs18 propiamente dichos (con una preponderancia de la palabra escrita).

� Los fotologs19 o flogs (las entradas del usuario son básicamente fotografías).

� Los videoblogs20 o vlogs (dan protagonismo al video).

� Los moblogs (pueden consultarse y actualizarse desde un teléfono móvil).

13 http://www.neopets.com/ 14 http://play.clubpenguin.com/ 15 http://www.managerzone.com.ar 16 http://kids.yahoo.com/games 17 http://ao.alkon.com.ar/ 18 https://www.blogger.com/; http://es.wordpress.com/ 19 http://blog.flickr.com/es 20 http://www.movabletype.org/



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Como los otros miembros de esta familia de aplicaciones, los blog ponen a disposición de los usuarios

una rica gama de servicios:

� Facilitan la actualización de la información u otros recursos publicados, y pueden tener un autor o varios. Las modificaciones quedan en primera plana, con indicación de autor, fecha y hora en que se realizaron. Las ediciones anteriores, por su parte, pueden archivarse y ponerse también a disposición en espacios secundarios.

� Permiten dejar o “postear” comentarios públicos (cualquiera que acceda puede leerlos) acerca de lo que está publicado. El autor del blog puede luego editarlos o eliminarlos. También existen blog moderados. En estos casos, los comentarios que dejan los navegantes pasan por el filtro del moderador y éste decide si los publica o no.

� Cuentan con un servicio de favoritos, para agregar los blog o flog visitados con frecuencia, donde se dejan usualmente comentarios.

� La mayoría son públicos. Sólo algunos, como por ejemplo My Space, permiten mantener espacios privados de publicación, aunque es necesario seleccionar esta opción.

Los chicos, sobre todo los adolescentes, pueden (y

suelen) construir sus propios blogs, vlogs, flogs y

moblogs, actividad que puede ser muy divertida y, porqué

no, formativa. Los utilizan a menudo en forma de diario

personal: plasman las novedades de su vida, cuentan sus

preocupaciones y alegrías, publican fotos, piden opinión

para resolver asuntos, etc.

El mundo blog es fascinante, y tan rico y diverso como las

personas que lo integran, pero es necesario entender su

naturaleza para disfrutarlo.

� Por un lado, como lectores, es útil tener criterios de referencia para evaluar la validez de los contenidos publicados en un blog.

� Por el otro, como autores, es útil recordar que aquello que se publica en un blog puede ser leído y utilizado de manera distinta de la intención original. En este sentido, es necesario ser cuidadoso, ya que todo lo que se publica en Internet queda a la vista de cualquier visitante.

Cuando los chicos tienen un blog (a partir de los 12 o 13 años generalmente), es preciso conversar acerca de esta exposición, explicarles que es fundamental que no figuren datos personales que puedan identificarlos a ellos ni a amigos o familiares (el nombre y apellido, la dirección, el teléfono, el nombre de la escuela).

También es importante cerciorarse de que no figure información que pueda ser nociva u ofensiva para otra gente, o que los exponga a problemas en la escuela o incluso legales. Esto también es importante para ayudarlos a que comprendan:

� cómo deben leer los blog de otras personas;

� que no deben tomarse tan en serio algunas publicaciones “posteadas” que los atañe; y

� que deben ser respetuosos a la hora de “postear” comentarios en blog ajenos.



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Redes sociales

Como fue tratado en el módulo anterior en el apartado de tendencias, las redes sociales o entornos Web de social networking se encargan de reflejar en una página Web las relaciones sociales de un miembro de la Red en relación con los otros. Se trata de un mapa de relaciones dinámico, que se fue construyendo con el tiempo, y que se alimenta de la invitación a “amigos” a sumarse a la “red de uno” en el ámbito de una red social, por ejemplo MySpace o Facebook.

El grado de aceptación de este servicio entre los chicos y chicas cada vez gana más terreno, principalmente entre los adolescentes.

Las redes sociales suelen combinar herramientas y servicios de los blogs y de los mensajeros instantáneos. Las propuestas de las distintas redes sociales resultan muy atractivas para los chicos y adolescentes. Por lo general, permiten compartir recursos entre sus contactos como videos, álbumes fotográficos, enrolarse en causas, hacer juegos o competencias, etc. Además también se combinan con buscadores de “Spaces” o de personas, envían reportes semanales o mensuales que informan sobre los nuevos contactos de nuestros contactos, la actualización de datos, etc.

Por todas estas razones, lo importante es cerciorarse de que los parámetros de privacidad configurados para el usuario son los adecuados, que la información personal pública no exponga al usuario, que esté activo el procedimiento de solicitud de permisos para formar parte de la propia red de contactos, y para enrolarse en las listas de contactos ajenas, etc.

Se recomienda a los padres acceder con frecuencia a los sitios y redes de sus hijos, conversar con ellos acerca de las ventajas y beneficios que encuentran en la red social, saber porqué prefieren una a otra, dialogar sobre el grado de exposición “aceptable” y los límites, etc. En suma, poner en práctica todas las recomendaciones que fueron señaladas para las aplicaciones P2P, los weblogs y los mensajeros instantáneos.

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