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- -;11,1nC11111112711211111111111111,1111111111111' 11 1: EL REY DE DAHOMEY DISTRIBUYENDO CAURIS ir SUS T1117)PAS. Año III. 15 DE ENERO DE 1880. Núm. '13. ADVERTENCIA IMPORW TE. Habiendo l'esuelto variar las fe- chas de salida de nuestro periódico, desde hoy aparecerá los dias 15 y 30 de cada mes. SUMARIO: TEXTO: Actualidades, por D. LItei0120 Paren, del [tesis-Viaje al centro de África, por . Slanley (colino tiacion).-Una ex- pedicion á las cuevas de Artá, por el DI'. D. Angel Pulido Fernatide,l(conclusion).-La prensa entre los chinos.-El palacio-castillo de Miramar, por D. J. Velarde.-Les gra- bados de este número, por L.-La cuna y la cruz (poesía), por D. Vielor Balaguer.-El audifono.-La fiesta del Hipó- dromo (correspondencia de París). por Un español del Boa- inoár.-Crónica de la futura Exposicion universal de Nue- va-York, por D José Jordana y Morera.-La Zelanda (Neer- landa), por D. Larlos Costee.-Miscelánea. GRABADOS: Distribucion de los cauris.-Teatro de S. Car- los en Nápoles.-Jóven árabe llevando la piel de un leon muerto á sus manos.-Aguador de Córdoba.-Casa, de una .familia de negros en los Estados Unidos.-El palacio-cas- tillo de Miramar.-Una torre de la pagoda de Vilnour.- Acueducto de Mérida.-La fuente de Andrómeda.-Vista de Para.-Combate de un calman y un jaguar.-Los jaba- líes espantados. ACTUALIDADES. n.n Afi l o nuevo vida nueva. dice el adagio. Año nuevo vida vieja debía decir. Al entrar en el año tercero de nuestra publica- •ion queda demostrado que nos vamos haciendo veteranos. No obstante, por no dejar por mentiroso al adagio, inauguramos hoy una época no escasa en novedades para nuestros lectores. Por de pronto EL VIAJERO tendrá la satisfacción de visitarles dos veces cada mes, correspondiendo á los deseos d.e muchos y al favor del público en general. En cuanto á las demás novedades que de- ben tenerse en cuenta,"nuestro prospecto. las anun- cia con suficiente claridad. En estos días se viaja poco. El cariz de hielo que presenta el tiempo basta para retraer á los que por pura aficion lo hacen; y aún contiene á los que viajan mas por obligacion que por costumbre. Los intrépidos, los que afrontan sin miedo los rigores de la estacion son los que buscan los goces de la familia, los que no hubieran podido pasar las •pascuas con satisfaccion, á no haber salvado en es- tos dias las considerables distancias que los sepa- 'roban de sus padres, de sus hijos, de sus hermanos. No se han apagado todavía los ecos de los cara- millos y panderos do Noche Buena que evocan los tretas puros -recuerdos dál hombre y las tradiciones de la familia, convidando á las dulzuras del hogar doméstico. Si pudiera tratarse en broma un asunto lan serio como el conflicto promovido en el A fghanistan , di- ríamos que á los ingleses podría suceder que des- pues: de haber ido por lana volviesen... sin ella. Aquello vu de mal en peor. Completamente inespe- rada la resistencia que encontraron en los afgha- nes puede' hacer muy critica su situacion. Una lar- ga serie de combates encarnizados se han librado en poco tiempo junto á Cala con varia fortuna, y la prensa inglesa no oculta ya la profunda alarma de la opinion pública. El ,Slanclard, al cual consideramos bastante fide- digno, refiere que el general Massy, con su caba- llería, habla tratado de unirse con la brigada de Macpherson en el cansino de Shuzni, con el objeto de impedir la union que á su vez intentabais reali- zar los regimientos afghanos procedentes de dicha poblacion, con los que vertían de Kohirtan, en número de 10.000 hombres. La caballería llegó al punto convenido primero que le brigada de infantería, la cual, retrasada en su marcha (retraso que el diario inglés no esplica satisfactoriamente) fué atacarla por fuerzas consi- derables. Los ingleses contaban -solo con tres es- cuadrones y tina haWria de artillería y á pesar de una debsnsa bizarra se vieron precisad/s abandonar bis canceles, si bien despues hubieron (le recuperarlos, gracias al auxilio de la brigada Alacplusrson. l'osleriísime i sM se lin dicho n pue Rolcrls , el con- quistador de Cald, estaba sitia/lo pm 20.000 af- ghanos, en siluacion muy comprometida, y aun- que ga se CneNi a u que ],) se i s tonto, las noticias a, dejan de ser alarmantes para la pialerosa terca. Luego se ha sabido el levantamiento del sitio. Los efghanes les son inferiores en los recursos del arte militar, pero cuentan la ventaja de hallar- se en terreno propio, enardecidos el acudir en de.. Tensa de. su hogar, hollado por el extranjero, y COI/ la fuerza que da el derecho de defensa, además de los recursos abundarles de un pais tan quebrado come e] suyo. Se ha colocado la piedra primera de un faro mo- delo, el de Eddystone, (pie habrá de alzarse a la entrada de la bahía de Plymouth. El ingeniero di- rector de la obra ha prometido que estala concluido dentro de cuatro años. El foco luminoso se producirá por medio de los aparatos eléctricos mas perfeccionados, de manera que el resplandor que lento anima á los navegan-

Viajero Ilustrado

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11 1:

EL REY DE DAHOMEY DISTRIBUYENDO CAURIS ir SUS T1117)PAS.

Año III. 15 DE ENERO DE 1880. Núm. '13.

ADVERTENCIA IMPORW TE.

Habiendo l'esuelto variar las fe-chas de salida de nuestro periódico,desde hoy aparecerá los dias 15 y30 de cada mes.

SUMARIO:

TEXTO: Actualidades, por D. LItei0120 Paren, del [tesis-Viajeal centro de África, por .Slanley (colino tiacion).-Una ex-pedicion á las cuevas de Artá, por el DI'. D. Angel PulidoFernatide,l(conclusion).-La prensa entre los chinos.-Elpalacio-castillo de Miramar, por D. J. Velarde.-Les gra-bados de este número, por L.-La cuna y la cruz (poesía),por D. Vielor Balaguer.-El audifono.-La fiesta del Hipó-dromo (correspondencia de París). por Un español del Boa-inoár.-Crónica de la futura Exposicion universal de Nue-va-York, por D José Jordana y Morera.-La Zelanda (Neer-landa), por D. Larlos Costee.-Miscelánea.

GRABADOS: Distribucion de los cauris.-Teatro de S. Car-los en Nápoles.-Jóven árabe llevando la piel de un leonmuerto á sus manos.-Aguador de Córdoba.-Casa, de una.familia de negros en los Estados Unidos.-El palacio-cas-tillo de Miramar.-Una torre de la pagoda de Vilnour.-Acueducto de Mérida.-La fuente de Andrómeda.-Vistade Para.-Combate de un calman y un jaguar.-Los jaba-líes espantados.

ACTUALIDADES.n . n

Afil o nuevo vida nueva. dice el adagio.Año nuevo vida vieja debía decir.Al entrar en el año tercero de nuestra publica-

•ion queda demostrado que nos vamos haciendoveteranos. No obstante, por no dejar por mentirosoal adagio, inauguramos hoy una época no escasaen novedades para nuestros lectores.

Por de pronto EL VIAJERO tendrá la satisfacciónde visitarles dos veces cada mes, correspondiendoá los deseos d.e muchos y al favor del público engeneral. En cuanto á las demás novedades que de-ben tenerse en cuenta,"nuestro prospecto. las anun-cia con suficiente claridad.

En estos días se viaja poco. El cariz de hieloque presenta el tiempo basta para retraer á los quepor pura aficion lo hacen; y aún contiene á los queviajan mas por obligacion que por costumbre.

Los intrépidos, los que afrontan sin miedo losrigores de la estacion son los que buscan los gocesde la familia, los que no hubieran podido pasar las•pascuas con satisfaccion, á no haber salvado en es-tos dias las considerables distancias que los sepa-'roban de sus padres, de sus hijos, de sus hermanos.

No se han apagado todavía los ecos de los cara-millos y panderos do Noche Buena que evocan lostretas puros -recuerdos dál hombre y las tradiciones

de la familia, convidando á las dulzuras del hogardoméstico.

Si pudiera tratarse en broma un asunto lan seriocomo el conflicto promovido en el A fghanistan , di-ríamos que á los ingleses podría suceder que des-pues: de haber ido por lana volviesen... sin ella.Aquello vu de mal en peor. Completamente inespe-rada la resistencia que encontraron en los afgha-

nes puede' hacer muy critica su situacion. Una lar-ga serie de combates encarnizados se han libradoen poco tiempo junto á Cala con varia fortuna, yla prensa inglesa no oculta ya la profunda alarmade la opinion pública.

El ,Slanclard, al cual consideramos bastante fide-digno, refiere que el general Massy, con su caba-llería, habla tratado de unirse con la brigada deMacpherson en el cansino de Shuzni, con el objetode impedir la union que á su vez intentabais reali-zar los regimientos afghanos procedentes de dichapoblacion, con los que vertían de Kohirtan, ennúmero de 10.000 hombres.

La caballería llegó al punto convenido primeroque le brigada de infantería, la cual, retrasada ensu marcha (retraso que el diario inglés no esplicasatisfactoriamente) fué atacarla por fuerzas consi-derables. Los ingleses contaban -solo con tres es-

cuadrones y tina haWria de artillería y ápesar de una debsnsa bizarra se vieron precisad/sabandonar bis canceles, si bien despues hubieron(le recuperarlos, gracias al auxilio de la brigadaAlacplusrson.

l'osleriísime isM se lin dicho n pue Rolcrls , el con-quistador de Cald, estaba sitia/lo pm 20.000 af-ghanos, en siluacion muy comprometida, y aun-que ga se CneNi a u que ],) seis tonto, las noticias a,dejan de ser alarmantes para la pialerosa

terca. Luego se ha sabido el levantamiento del sitio.Los efghanes les son inferiores en los recursos

del arte militar, pero cuentan la ventaja de hallar-se en terreno propio, enardecidos el acudir en de..Tensa de. su hogar, hollado por el extranjero, y COI/

la fuerza que da el derecho de defensa, además delos recursos abundarles de un pais tan quebradocome e] suyo.

Se ha colocado la piedra primera de un faro mo-delo, el de Eddystone, (pie habrá de alzarse a laentrada de la bahía de Plymouth. El ingeniero di-rector de la obra ha prometido que estala concluidodentro de cuatro años.

El foco luminoso se producirá por medio de losaparatos eléctricos mas perfeccionados, de maneraque el resplandor que lento anima á los navegan-

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EL VIAJERO ILUSTRADO. N." 13.

les un tormentosas pueda percibirse á ladistancia de diez y nueve millas, unos treinta kiló-metros. •• •

En Rusia se ha realizado un pensamiento de Pe-dro el Grande: la union del mar Blanco con ellago Omega por medio (le una magnifica vio, que ála vez servirá para establecer la comunicacion conel mar Báltico.

El trayecto comprende de Proventz á Somush,con ocho estaciones postules.

No puedo negarse que los rusos, aunque algomás despacio que otras naciones, van siemprelóela adelan le.

A propásito de la luz eléctrica. En el puente deWaterloo, en Londres, se ha hecho una pruebaexcelente de ese género de alumbrado que vá cun-diendo en Inglaterra como en los Estados Unidos.

Los ensayos efectuados en el muelle del Támesisdesde el 17 de Diciembre de 1878 al ti de Noviem-bre de 1879 duraron 1.374 horas, consumiéndoseen ese tiempo 27.097 bujías eléctricas.

Para formarse idea de la importancia del nuevoalumbrado basta saber que en la actualidad llegaá veintisiete kilómetros la medida de los hilos es-tablecidos á lo largo del Támesis.

Ha fallecido un astrónomo inglés que halda ad-quirido alguna celebridad en la India; A Ilan Brown.Hace treisla años partió de Inglaterra con objetode establecerse en la India. Un principe tan ilus-trarle botito espléndido, el rajah de Uranancore, leproporcionó los medios de fundar Un observatoriode iwimer Orden, á la altura de dos mil menos sobreel nivel del mar.

Los resultados fueron sumamente beneficiosospara le ciencia y para el dilatado imperio indico.La prensa .inglesa consagra un recuerdo á AllanBrown, pero no nos dice quién habrá de sustituirleen el puesto que tanto hollo', con su saber y con suinquebrantable perseverancia.

En un informe recienlemente dirigido á la Aca-demia de Ciencias de Paris, se manifiesta la apari-cien en algunas viñas francesas é italianas de laenfermedad conocida en América con el nombre de

tete parecida al oidium, aunque al con-[vario que éste, se presen la debajo de la epidermis.En el tecnicismo do la Bolánica se la conoce porPeronospora

El informante procura desvanecer la alarma queha ocasionado semejante huésped en les viniculto-res, asegurando que como su aparicion es muy tar-día y solo se manifiesta en los brotes de Otoño, nopodrá causar 'litigian daño de consideracion.

Advierte además que el atildan únicamente apa-rece en el suelo americano despees de las grandeshumedades, per lo cual no es de esperar que ennuestros climas, más secos que hemedos, encuen-tre condiciones propias para desarrollarse.

Sin embargo, los cosecheros de Burdeos no lastienen todas consigo, y hubieran agradecido muchomás un eficaz remedio que un tranquilizador in-forme.

El presidente de los Estados Unidos en su men-saje al Congreso se ocupa del proyecto del canalinteroceánico, por el istmo de Panamá, mostrán-dose partidario del trazado por Nicaragua. ffSi estecanal, dice, se emprendiera bajo los auspicios de losEstados Unidos, indudablemente se obtendría el ca-pital necesario, en América y en Europa,

Hay antecedentes que pueden servir de explica-cion á esas palabras de M,'. Huyes. Es preciso re-cordar la escision provocada en el Congreso de Pa-ris por haber reservarlo su voto el almirante Amen,al tratarse do cuestion tan importante. Mr Amen,muy amigo del general Grzint, manifestó al presi-dente Hayes que la casa Rotschild proporcionarlala tercera parte (lel capital necesario para abrir elcanal de Nicaragua, si Gran t. consentía en ponerseal frente de la compañia americana que hubiere deorganizarse para la ejecucion de las obras.

Y el general, que estaba en Chicago, tuvo cono-cimiento el mismo dia del paso dado por el alud-rente. Poco despues, conversando con un periodista,dijo que siempre habla sido partidario del trazadopor Nicaragua, opinando que el canal debía serneutralizado é intervenido además por el Gobiernode la Unión. .

La opinion de Mr. Gran', viene á ser poco menosque aquello de tila América para los americanos.»Entre tanto Mr. Lesseps se propone hacer unaactiva propaganda de su proyecto en los mismosEstados Unidos.

Conmutando el combate del monitor peruanoHuasca, • con la escuadra chilena, el Herald, deNueva-York, tiene la candidez de escribir lo si-

.guiente:«Los españoles, y aun ménos los hispanos-sud-

americanos, no hablan sido considerados como laclase de hombres que de tal manera pueden batirseen el mar; pero no se necesitarán muchos combatescomo este para establece! , su fama.»

Si se tratase de un periodicucho cualquiera, deesos cuyos redactores lo mismo desconocen la his-toria que olvidan el deber de ser imparciales, nohabríamos hecho caso alguno de lo anteriormentetrascrito; pero tratándose de una publicacion tanconocida como el colega neoyorquino, y no pudien-do suponer que sus' redactores sean capaces demostrar ignorancia á sabiendas, por el gusto delastimarnos, preferimos creer que al consignar

, aquel juicio, fueron sorprendidos por la inocencia ócandidez de algun colaborador novato, •

que no escucha ni arrullo de las olasuque cantan las hazañas españolas,

Y no queremos añadis más, por consideracionesfáciles de comprender atendida la índole de nuestrarevista.

•En correspondencias de Lima se anuncia como

inminente una revolucion en aquella república, ácausa del vivo descontento suscitado por los reve-ses de la guerra. Hay disidencia entre los jefes delos ejércitos aliados. El ghneral peruano Flores,segun se asegura, ha negado sir cooperacion al Pre-sidente de Bolivia, general Daza, retirándose al in-terior.

Tamhien se participa la llegada al Callao de unnuevo buque acorazado, el Lorenzo, recien com-prado con el producto de la suscricion nacional.

Por otra parle llegan rumores de haberse pro-puesto una paz honrosa al Perú, que desgrachda-mente •ha Sido desechada. El gobierno se ve obli-gado á inspirarse en el espíritu belicoso del puebloque., en su inmensa mayoria, quiere continuar laguerra liaste el último trance.

Esto se desprende de le lectura de la prensa ycartas particulares de aquel infortunado país, por-que no debe haberse consultado á las madres,

¡Pobres madres!

En otro lugar de este número encontrarán loslectores una descripcion detallada acerca de legranfiesta de la caridad que se celebré, en el Hipódromode Paris. Nuestro ilustrado corresponsal no ha ol-vidado ning,un detalle interesante.

El espectáculo en su conjunto ha ofrecido caree-téres grandiosos.

—; Soberbio! ;soberbio!—exclamaba un amigoque tuvo la fortuna de presenciarlo.

Una soberbia consagrada á la fraternidad de lasnaciones.

Tenernos que registrar en esta crónica una noti-cia muy triste: la che la muerte del eminente poetaD. Adelardo Lopez Ayala. Embargado el ánimo porel sentimiento no encontramos palabras para espre-serio fielmente.

Al asociarnos al duelo de la España literarianuestro pensamiento va á deponer en la tumba delpoeta una corona de siemprevivas.

LUCIANO GinciA. DEL REAL.

VIAJE AL CENTRO DEL AFRICAEN BUSCA DEL DOCTOR LIV1NGSTONE.

POR M. E. STANLEY.

(CONTINUACION.)

Marcha.—Paisaje interesante.—Desercion.—Cadena de es-clavos.—Destino contrario.—Marcha de Shaw.—Bosquesin limites.—Occoone de follaje —Ougounda.—Rumoreede guerra.—Enorme caja.—Malaria.—Delirio infernal.—Debajo de un sicomoro.—Manyara.—Visita del jefe.—Ori-llos del Gembé —Mitin.

El día siguiente, 20 de Setiembre, era el fijadopara nuestra marche. La fiebre me habla dejado muydébil, y era poco razonable ponerme en camino ental estado; pero tenía prisa por romper de una vezcon los profetas de desgracias, cuyas advertencias,relatos y temores desmoralizaban á mi gente. Porotra parte, era preciso obrar así, pues habla dicho áBen Misil) que un blanco no faltaba á su p alabra, yme hubiera desacreditado si por debilidad no me hu-biera puesto en camino.

Pasé revista á toda la caravana delante del tem-bé, con banderas desplegadas; cada cual estaba jun-to á su fardo; y durante un momento no se oyeronmás quo aclamaciones, carcajadas y gritos de ale-

gría. Les árabes se habían reunidcr,para vernos 111/1r-

chas; todos estriban en( eseepto Ben Nasib, á quienhabla ofendido sin duda mi tenacidad en no seguirsus consejos. El anciano jeque me envió á decir quese hallaba enfermo y que la era imposible despe-dirse.

¡Pobre jeque! si tú hubieras sabido lo que habíaen el fondo de esa tenacidad. El buen hombre, soconsolaba, no obstante, pensando que yo debíasabermejor que él lo que me convenía hacer, lo cual noera dudoso, pues él no poma explicarse el motivoque me impelía á marchar por el poniente á travésde tantos obstáculos, cuando el camino de levanteestaba len despejado,

Cincuenta y un hombres y tres muchachos, ele-gidos por mi, componían aquella expedicion, al pa-recer inútil, que iba en busca de un viajero perdi-do. El cargamento que se les confiase componia demil dotis, e sean cuatro mil metros de tela, seis car-gas de bebida, cuatro de municiones, una tienda,una cama, efectos personales,. un cojan de drogas,algunos libros, dos cargas de té, de azocar y café,una de harieas y de vetas, y otra de comestibles,tal como carne, sardinas-en latas y cosas diversas;en paquete separado estaban los utensilios de co-cina.

Todos mis hombres habían ocuparlo su puesto, es-cepto Bombay, que no había vellido aún; al fin se leencontró llorando en brazos de su dulcinea.

—1Por qué os alejáis, Bombay, le dije, cuando se-beis que vamos á marchar y que s • os está espe7raudo'

—¡Oh, señor! era preciso que me despidiera demi querida. ¿No haríais vos lo mismo?

—¡Silencio, insolente!—¡Oh, es muy justo!—¿Qué teneis, Bombay?—Yo, nada.Comprendiendo que Bombay tenía gana de dis-

putar, y no encontrándome yo de humor para re-sistir sus impertinencias delante de los árabes,descargstéle algunos latigazos, lo cual bastó paraobligarle á entrar en razona pero siendo objeto delas 'censuras de los jeques, mis supuestos amigos.

—¡Basta, basta! decían, no le peg,ueis más; el po-bre hombre sabe mejor que vos lo que le espera enel camino que vais á seguir, lo mismo que todos losdemos, •

Si algo podía aumentar la irritacion que me cau-só la insolencia de Bombay, era que interviniesengratui lamente aquellos hombres en una cosa que noles importaba. Pude, no obstante, contenerme; perocontesté muy alto que no toleraría que ninguno semezclase en mis asuntos, á ménos que no desearadisputar personalmente conmigo.

—¡No, no, banal exclamaron todos; nosotros noqueremos indisponernos con vos. ¡En el nombre deAlá! marchad en paz.

—Adios, pues, y sed felices, les dije yo tendién-doles la mano.

—Adios, señor, echos; os deseamos toda venturaposible; que Dios sea con vos y- os guíe.

Hechas las salvas de ordenanza, los guías desple-garon sus banderas, y cada conductor Minó su car-ga. Poco tiempo despues, en medio de los gritos yde los cantos, la cabeza de la columna dió vuelta alángulo occidental del tembé, siguiendo el caminoque conduce á Ougorinda,

Dirigiéndome en Lárices á Shaw, le dije:—Ahora, amigo mio, es preciso marchar, y os es-

pero; si no podeis andar, montad en un asno.—Dispensado e, Sr. Stanley, pues temo que no

podría seguiros.Por qué? •

—No sé; pero me siento muy débil.—Yo lambiera lo estoy, pues, hasta ayer no me

abandonó la fiebre, como sabeis vos mismo. No re-trocedais delante de estos árabes; recordad que Kr-teneceis á la raza blanca

dirigiéndome á Selim, Bombay y Mabrquki,les dije:

—Ayudad á Shaw á que monte en su asno, ymarchad junto á él.

Apenas. habíamos andado quinientos pasos, elasno salvaje que montava Shaw, anuijoneado por elastuto Mabrouki, descargó un par coces, lanzan-do á su jinete á cuatro pasos de distancia, con tan'mala suerte, que cayó en un espino. Los gritos deShaw me hicieron acudir al punto.

—¿Qué os pasa, pobre compañero? le pregunté.¿Estáis herido?

misericordia! Os ruego, Sr. Stanley, queme dejeis volver.

—¿Cómo, sólo por esta caida?. Vaya, un poco chevalor, pues me sería muy penoso tener que decirque habíais retrocedido. No hay nin gunoque al de-jar un sitio agradable no sienta alguna tristeza.Volved á montar en vuestro asno, amigo mio, y te-ned un poco Más-de energía.

Hora y media despues de nuestra salida del pue-

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N.° 43. EL VIAJERO ILUSTRADO. 3

blo, estábamos en Mkoueukoué, pais natal de Man-. ganga, nuestro alegre cantor.

Depositáronse los fardos en una de las casas delpueblo, y se levantó mi tienda; la mitad de mishombres volvieron otra vez á Kouihara á fin deabrazar tina vez más á sus mujeres á á sus prome-tidas.

Hacia la entrada de la noche me sentí acome-tido de nuevo por la fiebre; pero cesó el dtaque an-tes de rayar el día, aunque dejándome muy débil.

Al salir por la mañana para llamar á mis hom-bres, faltaban más de veinte; Keif-Halek, individuo-de la caravana de Livingstone, encargado de los de'spachos del doctor, no había parecido eón.

Escogí algunos servidores entre los más fieles yrobustos, y les mande á buscar á los ausentes. Ade-mas Mandé á pedir á Ben Nasib una larga cadenapa/9 esclavos.

Por la tarde presentáronme nueve de los culpa-- bles, no habiéndose encontrado á los otros, y al mis-

mo tiempo me entregó Selim una fuerte cadena conuna docena de argollas: Keif-Halek llegó con losdespachos que debía dar á Livingstone.

Reuní á mi gente, y enseñándoles la cadena, lesdije:

—Soy el primer viajero blanco que ha llevadoeste objeto en sus bagajes. Los buenos no deben te-mer nada; esta • cadena no es más que para los la-drones, que despees de percibir una parte de su sa-lario huyen con su carga, su fusil y sus municiones;de hoy en adelante, si cualquiera llega á desertar,me detendré el tiempo necesario para que lo bus-quen, y se le encadenará hasta el término del viaje.-11-Iabeis oído todos?

—¡Sí, amo nuestro!Recogiáse la tienda á las seis de la tarde, y em-

prendimos la marcha hacia Inesouka, á cuyo puntollegamos despues de una jornada de dos horas. Aldia siguiente, cuando llegó el momento de marchar,faltaban dos hombres, Asmani y Kingarou. Barakay Bombay •salieron en su persecucion, con Orden deno -volver sin ellos, y nosotros pasamos el dia en elpueblo, más bien por. complacer á Shaw que porotro motiva.

Por la noche llegaron los desertores; era-la terce-ra vez que Kingarou se escapaba, y por lo tantoera imposible el pardee; despues de dar algunos pa-los á los culpables, se les puso en la cadena, segunlo prevenido, recompensando á Baraka y Bombaycon dos metros de tela de primera clase.

Al día siguiente desapareció otro conductor consu fusil y treinta metros de algodon, que era el pre-cio de su contrato.

Kaugera, á donde llegamos por la tarde, estabade fiesta: los ausentes acababan de llegar de la cos-ta, y era de ver cómo las mujeres, los ancianos y losniños rodeaban á los viajeros con maestr ías de ad-miracion. En cambio de tan buena acogida, referíanellos historias maravillosas sobre lo que habían vistoá orillas del mar en Zanzibar, haciendo especialmeneion ríe losgrandes buques, de los hombres blan-cos, de los peligros que habían corrido, y, en unapalabra, de lodos los incidentes del viaje.

Levantamos el campo el día 2's; á las tres horasde marcha dimos vista á un frondoso bosque, y pocodespues llegamos á Kigandou. En el momento enque nos deteníamos delante de este pueblo, gober-nado por la hija de Mkasihoua, se me advirtió quepara entrar era precisa satisfacer el tributo; pero nohabiéndome conformado, nos re•iramos á una milla(lel burgo, á un campo infestado por las ratas, hastadonde nos persiguieron las invectivas de los indije-nes, quienes nos acusaban de huir cobardemente dela guerra, abandonando á Mkasihoua en la hora delpeligro. .

Al tocar en la empalizada de aquel campo, Shawquiso echar piá á tierra, perdió los estribos y cayó:esta pantonuma comenzaba ya á ser demasiado fre-cuente, y el ver que mis .:entes se precipitaban paralevantarle, diles Orden de no ocuparse de él. El in-sensato permaneció en la misma postura en que ca-.

ó, expuesto á los rayos del sol, y cuando al cabo deuna hora le pregunté si le era cómoda aquella posi-cion, concluyó por sentarse y comenzar á llorar co-mo un niño.

---¿Quereis volver á Kouihara? le pregunté.—;Oh, sí, os lo suplico! No podría ir ya más lejos.—Esta bien; he llegado á creer que será mejor

para todos nosotros, pues ya habeis apurado mi pa-ciencia. Se as ha metido en la cabeza que no podreishacer el viaje, y seria imposible disuadiros; pero pe-sad bien mis palabras; si volveis allá, os costará lavida. ¡Quién os cuidará si enfermais? Hoy no os-faltala salud: lo que teneis es hipocondria; pero si se.apodera de vos la fiebre y el delirio, nadie, sabrá eu-raros: - .01 lo repito, Shaw, si volveis sois hombremuerto.

—¡0h, desgraciado de mí! ¡Cuánto siento habertomado parte en esta expedicion! ¡Yo creía que elAfrica era muy distinta de lo que es! De todos mo-

dos, os ruego, señor, que me dejeis marchar.El dia siguiente so empleó en hacer los prepara-

tivos que exigía la marcha de Shaw. Construyeseuna fuerte camilla y se alquilaron cuatro hombresvigorosos en Kigandou para que llevaran al enfer-mo. Mandé amasar pan; dile una buena provisionde té y un cabrito asado para que comiera duranteel camino.

Aquella noclie la pasamos juntos. Shaw tomó unacordeon que le había regalado en Zanzíbar, y tocódiferentes aires en aquel pobre instrumento. No obs-tante, los cantos sencillos y familiares que le oi en-tonar me hicieron el efecto de celestiales armonías,y cuando por' fin terminó la cancion i Oh pais natal,dulce país! rirtestros corazones enmudecieron á lapar.

E127 nos levantamos muy temprano; reinabaentrenosotros una actividad poco acostumbrada, porquela marcha deberla ser penosa; pero atrás quedabantodos los enfermos. Mabrak Selim quedaba confia-rlo á un doctor indígena que se comprometía á cui-darle á cambio de algunos metros de tela, pagadosde antemano. No iban conmigo sino los sanos y ro-bustos, los que podían andar con ligereza y muchotiempo.

La trompa anunció por fin la hora de marcha.Shaw se echó en su camilla, que levantaron los con-ductores; mis gentes formaron dos filas con bande-ras desplegadas, y entre aquella doble linea pasó elhombre á quien tantas atenciones había dispensado,y que no tuvo corazon para seguirme hasta el fin.Los conductores se dirigieron hacia el Norte, y yohacia el Sur, con paso ligero y con la tranquilidaddel que se quita un peso de encima.

El 29 llegamos á Kikouron: habíamos caminado,como la vispera, sobre un suelo agrietado, dondehabla numerosos árboles enanos, sobre los que seelevan infinitos hormigueros hechos con tierra ama-rilla.

Escápese de aquella tierra resecada, de aquellavegelecion muerta, un veneno sutil que penetra, noménos peligroso que el que se aspira, segun dicen,á la sombra riel upas. Los primeros efectos de esteveneno, llamarlo la malaria, se producen en las en-trañas, donde quedan por el pronto confinados; des-pees invade al paciente una languidez opresiva, unasoñolencia irresistible, una tendencia continua ábostezar. La lengua adquiere un color enfermizo,casi negro, con un tinte amarillento; los clientestambien se vuelven amarillos, 0rd • riéndose de unasustancia nauseabunda; los Ojos despiden un brillosingular, y se I I enan de, agua. Cuando se declaranestos síntomas comienza la fiebre, y no tarda en des-encadenarse, consumiendo el cuerpo del infeliz enquien se ceba.

A veces va precedida esta fiebre de un fuerte estre-mecimiento; mientras dura, aunque. se amontonenmantas sobre el enfermo, no se conseguirá dis-minuir en lo más mínimo el filo mortal que le so-brecoge. - Sigue despues un dolor de cabeza de unaintensidad extraordinaria, y tambien uno muy agu-do en los riñones; pasa luego á la columna verte-bral extendiéndose á los hombros, se apodera delcuello, y fijase definitivamente en la frente y en eloccipucio. Entiéndase que hablo por lo que he pa-sado yo mismo, pues Lenge presentes todas las fasesde la crisis.

El 1." de Octubre., prosiguiendo siempre nuestrocamino al sur-sudoeste, llegamos al borde de un an-cho estanque; cerca de la orilla, bajo un árbol mag-nífico, había un gran espacio medio abrasado, queen ménos de una hora se trasformó en un magnifi-co campamento. El árbol era una higuera-sicomoro,denominado el jigan te de lbs .bosques de Uunyaffin-nezi: jamas balee visto otro tan hermoso; mediatreinta y ocho pies de circunferencia; hubiera bas-tado para que se albergase debajo todo un rerdmien-lo, y su sombra abarcaba un espacio de ciento veintepies de diámetro.

La salud y el vigor, que habla vuelto á recobrar,me permitieron que adinirase todo cuanto me rodea-ba: experimentaba en sentimiento de bienestar y desatisfaccion que no había conocido en Kouihara,donde me hacia padecer la inaccion; hablaba conmis gentes como si fueran mis iguales, y discutia-mos todos amistosarnente sobre las eventualidadesdel viaje.

Terminado el trabajo del día, y viéndonos com-pletamente seguros en nuestro campamento, cadacual sacó su pipa, satisfecho de haber cumplirlo consu deber, y se preparó al descanso.

El día 2 de Octubre, estábamos ya en caminopara Manyera: 1a , fue de seis horas y media,y en extremo fatigosa, pues el ardor del sol era ex-cesivo, si bien los árboles del bosque nos protegíanmucho con su sombra. El sendero presentaba unterreno rogizo y duro, sin 'obstáculos; la marcha erafácil; pero nos acosaba la tzelzé, que abunda muchoen aquellos parajes. Con frecuencia hallábamos unesqueleto ó un cráneo en el borde del sendero; de

elj,lieleritscoapgdingoae,mus,yisere apenas pasaba dia en que no seest

ireglau crál:c:10-taísiiisi::oen1 iaarena a brasa -pudimos

acercarnos á la puerta del pueblo, pero se nos pro-hibió la entrada, pues como había guerra pm todaspartes, Iris habitantes no queriím admitir dentro tlesus muros á ninguna caravana extraujera. Nos en-viaron á una especie de campo situado cerca (le unosestanques, cuya agua era buena; pero el recinto nocontenía más que media docena de chozas ruinosas,nada aúnalos para gente fatigada.

Cuando se hubieron reparado las chozas, di algu-na lela al guía y le envii, al pueblo para qur hici;‘raalgunas compras, pues teníamos en perspectiva 1111,

ve Bias de marcha por un pais desierto, y necesita-

117uemsolas idnijdei rsoPne nasla gbit. (t?a"q'tittee. sPemh ils)nantemente la venta de granos, y el hombre volviécon las manos vuelas.

El caso era grave: enviar á Kikourou no Me pa-reció conveniente, porque de este modo deberían,permanecer varios días; mejor era ValelLSedeoll[LOCUde diplomacia, y por lo tardo elegí algunas tela,mejores y se las en tre ,mie á Bombay para que lis lle-vara al jefe, ofreciénjole amistosos afecto, del Mou-soungou. El jefe no quiso admitir tampoco lo (11101ellevaban la segunda vez, y contesté que le dejaranen paz.

No había medio de convencerle; llombayinutilmente su elocuencia, y mis gentes, sin ocultarsu mal humor, hubieron de entregarse el descanso.

Entánces me acorb de los discursos do unNjara, amigo de Ben-Nasib: ,O.1 1 ! baria, bina, tondecia, los obstáculos serán Inas fuertes que vos;creedlo no pasareis. Los Vouatnanyura son malos,y mino aún los Vouskononga y los Vonazavira;es viajar cuando el pais esta en guerra,

Por la mañana muy temprano envio. á Bombay concuatro mantos de gran prer•io, ocho metros dezo de algodon y muchos cumplirlas de mi parte pm,el jefe, pues era necesaria una gran dosis de poi -ca con un hombre lan arisco como Nla-Manyera, ydemasiado poderoso para tenerle 1: n 11,I . enemigo.

Mi esplendidez no tardó, por fortuna, en producirse efecto; al calla de una hora vi llegar á 11/111.

ea de habitantes del [niobio que llevaban sobrecabeza cajas llenas de sorgbo, de arroz, de maiz ede habichuelas, y poco despees apareció el jefe mis-mo, acompañado de treinta tiradores y ile veintelanzas. Traían de regalo aves, cabras, miel, ycantidad de grano suficiente paro alimentar a lois,gentes durante cuatro días. El valor de los artieuloslos compensaba con creces el de mis géneros.

Fui á recibir al jefe a la puerta del campamento,y le in"vité a que entrase en mi tienda, la coral habíaarreglado ya con todo el lujo que podía disponer;tapiz de Persia y mi piel de oso estaban extendidos,y mi cama cubierta con LH/ paño encarnado.

Rogué A Ma-Manyera, así como A los otros ofi-ciales que lo acompañaban, que tomaran asiento:todos me contemplaban con un asombro inexpli-cable-, mi rostro, mi traje, todo, en fin, cuanto merodeaba, les había dejado agradablemente. estupefac-tos. Miráronse despues unos a otros, y prnrum pie-ron en carcajadas, haciendo castañetear los dedosvarias veces. Maganga, mi inti, rprete, nui .r e l encar-gado de manifestar al jefe cuanta satisfaccion loecausaba su visita.

Pasados algunos minutos, que empleamos en elcambio de cumplidos, lo 11110 ULO continua-ran las carcajadas, Ma-Manyera manifestó el deseode ver mis armas. La carabina de diez y seis tiresfue objeto de observaciones A cual más lisonjeras;la belleza de los revolvers y su esquisito trabajo,que pareció una maravilla á todos aquellos hombresadmirados, inspiraron al jefe elog i os elocuentlsi-mos, y creí necesario continuar la exposicion. LOS

fusiles de gran calibre, disparados con doble cargade pólvora, hicieron brincar á mis visitantes; perovolvieron lnégo á sentarse, riendo convulsi va men te.

En medio de la admiracion general, esplique ladiferencia que habla entre los árabes y los blancos,y despues abrí la caja de medicamenlos. En téncesel asombro rayé en éxtasis, y llegó á tal p l into, que.creí que iban á volverse locos.

El j efe preguntó de que servias aquellas botelli-tas, cuya trasparencia y arreglo le produeian, asicomo á sus oficiales, suspiros de admiración.

labracurar;

D yoque

11 o, ausignifica

aso

, recordará que medicina quiere decirmagia.

¡Oh, Oh, ah! exclamaron mis admiradores.

Decididamente tenía yo sobre los árabes de másmérito una superioridad inmensa.

—Hir aquí, dije, tornando un frasco de aguardien-te medicinal, el verdadero porobé, ó la cerveza delos blancos. Y poniendo unas gotas en una cuchara,se las presenté al jefe.

Page 4: Viajero Ilustrado

ambossitio.

pocos segundos

JOVEN ÁRABE LLEVANDO LA PIEL DE UN LEON MUERTO Á S US MANOS.

EL VIAJERO ILUSTRADO. N.' 11

rea y disparé. lino de los tres animales dió un saltoperpendicular y cayó muerto; los otros dos huyeron(aedo enormes saltos y rebotando en el suelo como

EL TEATIllo DE SAN CARLOS EN NÁPOLES.

Durante los tres dias que estuvimos en aquellosparajes, se mataron dos búfalos, dos jabalíes, trescamas, una cobra, tres abutardus, ocho pintadas,un pelicano y des águilas, sin contar los antílopes.

Dispuse que ahumaran la mayor parte de la car-ne, pues asi podriamos arrostrar sin temor el de -

---------------------

•Ilacht, hacia! ;Que cerveza más fuerte- bebenlos blancos! ;Oh, se me abrasa la garganta!

—Si, contesté yo: peroes muy bueno; con un poco

do este licor pueden serlos homInTs fimrles y g

e-nerosos, si bien e=. verdadque una fuerte dósis losvuelve malos , y que.toman demasiadomorir.

—Dadme un poco, dijo

uno dr los jefes.—A mí también.—A mi tambien.'Todos pidieron, y satis-

fice sus deseos. 'faenadodespiles un frasco ill110-

1/lile1),—Esto os para c r uzar el

dolor de cabeza y 1,1 mor-dedura de las serpientes.

Al oiti esto, el

jefe á quejarse de un roer-te dider de cabeza, st'do.per rl gusto ale probar:111111)1111 droga. 1.1ijele iputcerrara!.o jos, y le apli-111i el frasco debajo de lanariz. resellado rw,

iuáttico; el cerillo, eeye

ti, espaldas, como heridodel rayo, hachada unostiesto.-5 indescriptibles.

En t.,11(11110 á los ukele-

les, no parecías ya o l-, l uilos; sosr.ga han; lan-zaban ya verdaderas rugi-

1„,1¡¡,,ánd,,,s0 m i es a otros. daban ruidosas pul- ' pelotas; y (le tal modo, gin: a listinadas, castañeteaban los dedos y hacho, mil gestos desaparecieron de mi vista.

l_s..t.nuoll n*.iicos. Semejanteen uno de nues-

tros le:111m,, habría liech,desternillar de risa á MI,el páltlic...

lit-Nliinvera se levan-té al Iiii; balase reit'o la le

o, que le ,arreen lágri-mas tv las

Va no guiso saber mas;111`1 . 11 sus oticiales inani-lésinta deseos de oler

el frasa .0, y Se-

;:1111 lo ¡ball harielidillas

la 111:J1/111e S'econ aquella visila regia,110 hl 1111, sr q uedar le--

11105 litileaVillielOS.Al I eill'ellar,e iba di-

ciendo .),1:1-1).1anyera:estos blancos sa-

i teu 111,10 ellaIllo hay quesaber en el mundo: losárabes 5011 111Ia miseria ásulodo.

din enmrendiniosla marcha 111 dic' '' 'en alGomhr, que dista funtivohoras y cuarto (le Manye-ra. Apenas S:1111110S de los1,11111)0S, dende ondillabanlas espigas, vinos tinamagnifica manada de ca-bras.

Dos horas despees pe-netramos en 1111 partmeinmenso. Aquel Ora unode los mas (:.xplentlidospaisajes que habia vistoen Africa: desde la ,..11111/111, las eminencias ase

las llanuras,divistibmise limitadas deMofetas, ile cabras, de gi-rafits y de ;millones, quehicieron bullir la sangreell mis

Destilamos silenciosa-mente por aquel edén pa-ra llegar al Gombé, cuyasaguas perezosas correnpor aquel sitio, y cercadel cual debizunos haceralto.

Apenas se hubo elegido el espacio mas convenien-te para tomar el campamento, migan-hl: mi carabi-

jna de dos cañones para ir á recorrer aquellos para-es. Al salir ele una espesura vf tres antiloyes muy

gordos que nadan á un centenar de pasos; al mo-mento puse una rodilla en tierra, torné la pante-

siert/1, y el 7 de Octubre, di Orden de levantar el cam-

po, can pum sentimiento de mis hombres.• Partieron todos no obstante. si bien con repug-

nancia: yo me quedé unpoco atrás para avivar el

paso de los :porosos; pero.Id callo do media hora ob-serve, con no poca estraámza, que estaba descansan-do la caravana; los bagajesyacia q por tierra, y loshombres, reunidos por gru-pos, hablaban entre si,gesliculando con aire irri-

lado'. mi carabinade manos de Salina, intro-duje dos caigas de plomo,ajusté mis revolvers, yMe derecho á los descon- -lentes: por su parte ellosbaldan cogido sus armas,y dos de ellos, cuyas ca-bezas asomaban pee cruel-lea de un hormiguero, di-rigían el canon vir dondeyo debía pasar; el 11/10 eraAsumid y el otro i`dabrou-ki, que habían sido á l d esguías del jegue Ben-Nasib.

Sin vacilar tul monam-to, incliné la carabina yapunte á los dos, amena-zándoles con la muerte sivio venias al momento áexplicarse. Comprendien-do (me seria peligroso para

no moverse, abandonaron al momento el

Asmani avanzó de lado,.simulando una sonrisa, pe-ro sus ojos lanzaron unasombria mirada de :U uer-te; -el otro se deslizó pordelras de luí y echó pólvo-ra en su mosquete; volví-me rápidamente, y toquécasi su rostro con el cailortde mi carabina; el arma sele cayó de las manos: re-chacólo con la mía, y lohice rodar á diez pasos dedistancia. EntOnces, enca-rándome con Astuani, elhombre gi gantesco, lemande gin: dejara la suya,y al decírselo levanté lacarabina y puse el dedo enel gatillo: jamas he visto-un hombre en mayor peli-gro de muerte.

Me repugnaba vertersangre, y lo deseaba evi-tar; pero si no dominaba aaquel hombre, si no con -seguía humillarle,desde luúgo contar perdidami autoridad. El único me-dio de obligarles ti toar-el131` era darles una pruebade fuerza irresistible; miti-gue se emplease contraellos, mi energía debíaobligarles, y era precisoque se reconociera mi po

aunque me viera pre-cisado á castigar la insn-bordinacien con la muertc.

Lejos de obedecerme , As-inaui levanlú el brazo pa-ra apuntar su fusil; erallegada su t::1 tinta hora:sólo un segundo le sepa-raba do la muerte, cuandode pr11 11 1(1 deSliZ6Se Ill-bronki por la espalda de socompañero, (lió un salto,yarrancándole el arma gri-tó con horror:

—¡ Desgraciado ! Osas.apuntar á tu amo'

V echándose luego a mispies, Nlabrould me suplicóque no les castigara.

—Todo ha concluido, exclamó; iremos al lagopara buscar al andan() Nionsoungou. ;Responded,hombres libres! ¿No es verdad que bicis todos al'sroalang,aorzii..ka sin quejaras:'Decidlo asi al amo á una

—;li Ouallah, al Onallah! banayango. ¡Sí por

'11111E 11111111 I,

Page 5: Viajero Ilustrado

E UNA FAMILIA DE NEGROS EN LOS ESTADOS UNIDOS.CASA D

N." 13. EL VIAJERO ILUSTRADO.

Alá, si por Alá! No haya más palabras, exclamarontodos á la vez.

—Pide perdon, ó véte, añadió el orador dirigién-dose á Asmani.

El gigante obedeció' á satisfaccion de todos.Debía perdonar, y asi lo hice,.esceptuaado ti Bom-

hay. y Ambari, los instigadoresde le rebelionf

Si Bombay, en su calidad dejefe, hubiera reprimido desde elprincipio toda espresion de malhumor, no hubiera llegado lacosa á tal extremo; pero desgra-eiadaMente, como llevo dicho,era el más opuesto á la marcha,no ciertamente por cobardía, si-no que para él ho habla másDios que su estómago. Toman-do, pues, una lanza, apliqué elmango sobre las espaldas -deleapiln; salté luego sobre Am-bari, cuya expresion irónica-cambió de pronto, y sujeté á los-dos á la cadena, advirtiéndoles-que no se les soltaría hasta quepidieran perdon. Por último,

-aconsejé á Asmani y á su inse-parable compañero Mabrouki-que no reincidiesen, sino que-rían recibir el género de muertede que acababan de escapar.

Ya que de mis hombres hablo,voy á bosquejar ligeramente lahistoria de aquellos que másfigurarán en estas páginas.

Estos personajes son, segun-el puesto que ocupan en la ca-ravana: el capitan Bombay, Ma-brouki-Speke, el guía Asmani,-Ehoupereh, Oulimengo, Kha-misi, Ambari, Djoumeh, Ferro-

.jji, Maganga, Selim y Kaloulou.Bombay debe á los escritos

-de Barloo, de Speke y de Grantuna magnifica reputacion: estosseñores le dieron excelentes cer-tificados; pero yo no podría ha-cer lo mismo; como criado particular, sin másobligacion que la de servir á su amo, hubiera sidoirreprochable; pero como capitan de caravana. noservía. Tenia demasiadas preocupaciones, y era Muyinquieto: algunos días lo haciatodo aturdidamente; daba una

,órden olvidándose al momento;perdía O rompía 'todos los obje-tos confiados á su custodia.

Mabrouki cabeza de toro, se-gun le llama Burton, ó Mabrou-ki-Speke, segun le llamo yopara diferenciarle de los otrosMabroukis de la caravana, valemás que su reputacion.

Asmani, el gigante de hom-bros hercúleos y guía y fundí ála vez, es cazador y muy su-persticioso; tiene mucho apre-cio á su carabina y á ciertacuerda trenzada impregnadaen la sangre de todos los ani-males que ha matado desde quecaza. Le inspiran mucho miedolos leones, fuera de ellos; to-dos los animales son para élbuena presa. En sus labios seve siempre la sonrisa, no gra--ciosa ni benévola, sino falsa,humilde y traidora. Asmani se-ría capaz de cortar el cuello áun hombre sin cesar de son-reirse. •

Choupereh, moceton vigoro-so de unos treinta años, se dis-tingue por su buen natural ycarácter jocoso. Cuando hablay se le ocurre algun chiste,excita la risa de todos sus•com-pañeros. Jamas he disputadocon él; una buena palabra has-ta para que se exceda á sí mismo; es el más fuerte,-el de más robusta salud, el más amable y fiel delodos mis hombres tel tipo completo del buen com-pañero.

Khamisi, ¡Oven de veinte años, cuida mucho de supersona, es muy activo; pero jactancioso, á la vezque en extremo cobarde.

Ambari debe tener unos cuarenta años, era unode los fieles de Speke, y no me hubiera abandona-do sino frente á un enemigo temible. No le falta ca-pacidad.

Djournah era el que más injurias recibía de sus

compañeros, porque les molestaba con sus rarezasde viejo. Mestrábase conmigo deseoso de compla-cerme.

Oulimengo era el - más locuaz de todos; mozo det re i n ta años,allo, robusto y muy atlirdidn, y tan co-barde corno fanfarreo, aunque muy amigo de los

placeres, no le arredraba el trabajo, ~trabase ale-gre hasta en los días de más fatiga. Con cien comoél hubiera atravesado toda el Afrka, aunque con lacondicion de no tener que batirse.

Ferrajji, el antiguo pinche de cocina de Speke,era un »ven de recursos, que siempre encontrabamedio para salir del paso en sus pequeños servicios.Si le pedía un plato y tenia señal de grasa ó de hu-mo, le frotaba con el dedo, creyendo que esto bas-taba; si le devolvia una cuchara por estar simia, cretaque con saliva y la punta del mandil tenia lo sufi-ciente para estar limpia y en disposicion de servir.

Maganga es un Muyamonezi, natural de Mko-uenkoué, muy robusto, servidor fiel, excelente pa-gazi y de buen carácter. El era quien siempre co-menzaba los cantos, haciendo renacer la alegría de

todos, que formaban coro siguiendo é su compañe-ro, coro Si -avale que resonaba á lo lejos el bos-que, atenioriz'ink á los babel roles.

Al acercatmos á m i l uieblo, y para saber si la pn-lilacion sería contraria, 1\laganga empezaba á can-tar: si eran hostiles 5t huidos, cerriibanse las puer-

tas (le pronto y nos anwriazabandesde los Mirras; si por el e(111-Lronio eran allilgoS, Sallasnuestro eticluintrn dirigi(Mdoonspalabras anidases.

Despues (le mi persona, el M-ili ...MIMO más inlpo • lilinie era Se-lim, el júven límalo cristiano~acompañaba desde drrnsa leo.

Hubiera podido enten-derme eral los árabes quo l'II-1,11111' en el (1111 -111111), y tarobiena del,. la benevolencia. euu llar1111' 11.11t111,111.

1'111' C1111(1111111 111)1 • 1`111111,111 -10 C111-b11, y 1111111'1 .11'1 S11 11111eS1111: si 1,-11,1, los iliseipulosdul 'mm11/11111

111/1111 .1111,11111 felicitaciones.

I Ittltia (mirado nii Serviciode 1870 , desde ullyit

Hr) 1 -1W 111111111111111) 1111/11•11,all • i1V1.1,,1/1111 . )S, jnnlo-..., lalinsinIne-ridiolnd, hincas,, y 1:, I'lS111.

fiel yla la lorlerte, sin 11111:11111 y sin

5;niv/11,11 \11 .11111/1 , yal elogiarle 111/ 11111'1111 hacerlo1,1111, (111,11 11,1,11'11111 mis senti-mientos de gratitud.

Esta es, si 1111'11 Iff,srplejada 1.:1-1+1111111111e, 1,/ 1/1,:101 . 1i1 111' 11,S

principales lionda-es 11111 ,` 1.111.11111-

ini caravana.

UNA UNPF.1111:11IN A LAS IIEVAS NIIT.I1,111 l. 1,0,1,1,

Angel Pulido Fernandez.

(i:ONCLUSION.

Sentados los linOS en el principio

x. de la escurra V

los otros sobre apropiadas rocas, Iodos, COrilemplilli-(10 la azulada superficie del Mal'1111e delan11. 1.10,1/1/.11S 1'11 eX-

11.1.11(11a fl',1111[1/1111 11,15,111 (.11,11.11/1-

111/ . Se 1'11 el /112 . 1%1/111111 • 1/111'1 11111,

(71111 •0 azul del niel,,, énello en nuestra Marca ba 1,,11.11

descansar de lo ya andado yprepil •arliOS para lo qua clama-

Mi/lamía; que l'eet11-11 -11'

;tules de llegar al •orille.Y COMO en 1..51dis cirmilisiall-

eMS aun los mas imalicos mis-tan escuchar 5 (mien 11-111-,

y ha visto, n,, Tuttipropuso al docto Lino—igir,toc1' 1'uai dan Gaspar—que 11i,jrsr•.

si consideraba á estas de A.rtailiferiOreS las TM [labia Vis.'"

t en otros lugares.—Seria ligereza, señores,—

comenzódiciendo ,1111.-

1 - 1-11-11' de un 1110(10 decisivoque tales grutas son sa-

perimes a todas las otras, porque ofreciendo todas y cada unaparticularidades de gusto va•ia-rlo, quedan sujetas roca,,tan las cosas al fallo criteriopuramente individual de esemismo gusto; y asi corno re-cuerdo que formando parte doIn expedicion á las grutas deBélgica iba un l iolarids queaseguraba era capaz de matar:á un hombre por el .p-omage 1'rare créete, en tan lo otra señoraque iba en nuestra compañía de-

cía que estuvo á punto de ponerse mala porque enun hotel de Paris le sirvieron dicho plato, de igualmodo las cuevas contienen singularidades que pue-den entusiasmar á unos y desagradar á otros;semejante apuro opto por decirles á ustedes el sellopredominante de algunas, y á cuál se inclina comopreferente mi gusto.

El Monasterio de Piedra tiene varias, pero lasllamadas Carmela, Del Artista, por su pequeñez einferior calidad no merecen ocuparme, y me concre-

taré á la llamada de la Cola deleaballo, por estar in-mediatamente (letras de este bellísimo salto de agua.

Page 6: Viajero Ilustrado

6

Una sala espaciosa, en cuyo lecho se ven suspen-didas monstruosas y fantásticas concreciones, ofre-ce le particularidad de que tiene una gran boca,por la cual cae, Como una trasparente cortina, elrio Piedra desde una elevacion de 1 i!ur pies de altu-ra: per censiguiente, sus bellezas especiales son:

luz nanirál abundante, que permite ver toda a la

grandiosidad de la sala, matizada de un verde oscuro por el musgo que reviste las piedras; utai rio

que cae con atronador estrépito por delante ce suboca natural, y el cual brinda con lodos los efectosde una calarais diamantes cuando el sol ponien-te le ilumina; un tranquilo lago con una bermosi-sima luz azulada en su centro. lié aqui ahora susdefectos: primero, el 5110 muy húmeda y mojadiza,parque la cascada cubre toda lit pieza con un pol-villo de agua paree:i rle al de una llovizna; segundo,(pm el nutsgo oculta el verdadero Color de las rocas,y tercera, que sido consta de una pieza, pues otrapequeñita que tiene, y en donde ex iste un inanan-tia! de rica agua, apenas merece citarse. Esta grutacerrada, no tendría importancianinguna.

La gruta de Iláru, tan ponderada, superior sinduda á las de Rochefort, constituyen un verdaderoahuecamiento de 111111 espaciosa montaña, por elcual se puede andar multitud de horas, teniendodifereriles salidas, pero lodos verdaderos agujeros,el (le Hán, de Belvaux, de Salpélre, d'AJO-11de.

Sus bellezas partictibireS son lo imponente de suentrada, que para itniellos jis constituirá tal belle-za, la amplitud de sus salas, una de las cuales, la1101 'Mune, mide 150 metros de largo por 135 de an-cho en se parle más estrecha, y 50 de alto; el do,deslizándose Mislerioso y ansenazador por las os-curidades, la inip •eSion de le barca, algunas rocasC111 . 10511S, y sobre todo, si la salida se hace por la11111V11 y el agujere de Han, el agujero de entrada,tooslrando el azul de las aguas y del cielo per entrela densa oscarblad [le las rocas, es de un efectoideal indescriptible. Defectos: sucia y húmeda por

sus paredes en granules extensiones desnu-das de concreciones, imponentes desplomes, y fal-las por Sil misma angilitud, de efectos de conjunto;el sello earacterislic0 'le astas cuevas es el de serterroríficas y asusta-mujeres.

Las del Drach, eentiguas á CstaS, son tan gran-des, que el mismo gula confiesa no haberles recor-vide por complelit: podría andarse 001 ellas multi-lial de horas: sus bellezas particulares consisten:Primera, en sus lagos. hermosísimos, ideales, de1111 ag.111 1;111 cristalina, que dejan ver el fondo Lo-an, si estuviese seca, y hay que remover el liquidoe pedradas para convencerse de su existencia. Aún1; tundo ser/ meches los lagos que tienen, todos TI

(mal MAS merecen citarse por su inde.scrip-tilde hermosura los llamados Lago 'N'euro, Lago delos Lago Blanco y liado de la reina Es-

El guija, jóven inteligente como pocos, sabe sa-car partido do sus luces de quinqué, y sobre todonu el Layo Negro presentar un escenario que pa • e-e inia irresistible mansion de ondinas. SO,Sindo,

1,1zYlaclitais abundantiSionis, y cn muchos puntos denívea blancura; para ejemplares, de museo, brinda1101110 ninguna otra. Defectos: primera, lo bajo desu lecho, por lo cual, y por la manera de extender-se, revelan formar inaterisaS grietas del suelo: sogioulo, lo aeCidenlado ü desnivelado de su piso: y'oreen), grandes desprendimientos de rocas por do-quiera.

Estas de Arlá ofrecen: primero, entrada superiortodas, como ya dije; segundo, 111111 satisfactoria

11101101 .0.1011, 11/111 K0001%1011 casi arquitectónica en-tro su anchura y .su altura, en terMinos de que pa-recen haber sido hechas de exprofeso; tercero, pisomás igual y seco que ninguna; cuarto, ambiente1111'151 agradable; quinto, riqueza de concreciones, yc.-dilemas hasta lo indecible; sexto, una vestidura 3decorado más completo por todas parles, tal vez1101 . su mayor antigüedad y falta de desprendimien-tos; y sétimo, que permiten esos efectos generalesque 11r11113111/ de admiracion. Sin la (1" jtiene la de Piedra, sin los lagos de las del DiRqlcclue.sin la MI) plitud de las del valen, si/1embar go,1Ymás, en mi concepto, que todas las otras:

inla

s eacuil ro más a • listicas, más acabadas, Más explenni(t(Mil i s, más s-utiles:as.

Es ile abservacien general lo siguiente: l a dePiedra despide en seguida al curioso; en las de Ilánlo que más agrada es la salida; en las del D-apañes el fastidie del visitante selie,;lea;eillt,,i01liasnes-,pu largo; en estas de Artá pasan lhoras, y contraria la conclusion d

—.Dice usted verdad, Lino—observé ‘tliosifill'u.i 'Ro s ta,7--y lamí estoy yo para proba r lo, cine no siento can-sancio, ni he conocido el miedo, ni me he ¿ncon-rado jamás mólenla.—Pues ya ganará bienes cuartos el propietario

de estas cuevas,—dijo D. Gaspar.—Paretse debía suceder así, y sin embargo, no su-cede. Empiece usted á comprender esto conside-

EL -VIAJERO ILUSTRADO.

rando que hasta hace pocos años, en que su actualpropietario, D. .losó Quint Zaforteza y 'l'ogores,ilustrado mallorquin, á quien pertenece este prediollamado de la ferie, en donde se encuentra lagruta, construyó las escaleras de entrada, aquí nopenetraba nadie que no fuera algan intrépido via-jero, porque habla aquello de descolgarse con cuer-das, escalas y demás recursos de este tenor quehoy se rechazan con justicia, porque el viajero, yel viajero de inlereses, basca comodidades. Agregueusted á esto que pertenece á España, ó á una de susprovincias marítimas, y basta para que no se visi-ten todo lo debido.

Lo primero se remedió construyendo esa suaveescalinata cuando doña Isabel II visitó esta isla,porque se creyó que tambien visitarla las cuevas;por fin no vino, pero el beneficio quedó hecho, yhecho sigue.

En cuanto á lo segundo, es de carácter nacionalno saber explotar nuestras bellezas naturales; másde sesenta mil viajeros pisan todos los años lascumbres del Bigi, ea Suiia, sólo por ver una salidadel sol y un extenso panorama; miles de viajerostambien visitan el año las grutas de Han y de Ro-chefort. ¡Cuántos utiles no podrían atraer aqui tato-bien estas bellísimas campiñas de la isla, estas cos-tas de incomparables encantos, y estas abundantesy sin rivales grutas , Mallorca tiene por explotar to-davía su mejor riqueza natural, mas segura que suscosechas y más productiva que sus industrias, por-que no hay dinero unas saneado ni que con másabundancia se prodigue que el de la bolsa del via-joro.

Ese elegante ferrocarril, que arruina con su quia-liaos() TI los accionistas; estas villas y pueblos, endonde el 'Animo rebocillo de las payesas y los an-chos calzones del payes parecen protestar de unaislamiento inmerecido; esas ideales costas y vegasque no reconocen superioridad, podrían adquiriruna vida inusitada, y presenciar ese portentoso bu-llir de viajeros eme constituye la riqueza principalde la Suiza, y que ha cuajado de elegantes hotelesle tan pequeña COMO dichosa floreciente patria deGuillermo Tell.

Es sensible que nuestra patria, adornada de ri-quezas naturales como pocas, no alcance el aprecioque debla; ponme si es verdad que España no pre-senta las agudas cimas, los imponentes glaciePs, ylas masas de nieves del Oberland Bernois, ni losmágicos lagos del Thini, los Cuatro Cantones, encambio posee otras bellezas de primer orden parael viajero. Sus ciudades encierran infinitas y esti--madisiums yjoas de la antigüedad, catedrales de lasmejores de Europa y Museos sin rival; sus camposofrecen valles cuino los de 'l'uy, Barcia y Pes, cuy-os encantos se escapan á la pluma; montañas, ya'escuetas y caprichosas comu las de Monserrat, yavariadas y frondosas como las de Navarra, ya sor-prendentes y ricas como las de Cardona, todas ad-mirables; grutas 00100 la llamada de Griegos,cerca de. Ileteta, en Cuenca; las de Mondragon, enGuipúzcoa, Arte y otras muchas; y cascadas COMO

las de Piedra; y sobre todo esto la más rica, la másnotable y la más original y variada coleccion detipos y costumbres, desde el historiado y lujoso ga-llego, de melosa lengua y mas dulce carácter, hastael ligero, morisco y sencillo valenciano, de recelosacondicion; desde el oscuro y ceñido traje de charrobasta el amplio y pintado del maragalo; y, sin em-bargo, de. es[os y otros infinitos atractivos de subellísimo cielo, y de sus mil y la particulares en-cantos, ;cuán pocos son los viajeros que la recor-ren en comparador, de los que visitan otras nacio-nes quizás memos interesantes que la nuestra!...

Pero dejando este asumo, en el cual grave capi-tulo . de cargos teridriamos que dirigir á nuestroatraso, á nuestra musulmana incuria, á nuestrasluchas intestinas, á la poca consideracion que aunse sabe guardar en nuestro país al extranjero, ánuestra ineptitud propagandista, á nuestros detes-tables asedios de coununicacion en muchos puntos,y a la fa lla de seguridad que en ellos existe, seguncreencia muy general del extranjero, á donde lleganmuy á menudo noticias de asaltos de trenes y aten-tados en las vías más concurridas, y á otros detallesile esta naturaleza, que sumándose dan por resul-tado el desden con que se mira lo nuestro; dejando,repito, esto y circunscribiéndome á las cuevas queacabamos de visitar, es indubitable que una buenapropagando atraería á ellas multitud de viajeros, deesos que á millares abandonan todos los años suhogar sin otro propósito que el de presentarse don-de exista una maravilla que contemplar, y ésta esde las primeras entre las mejores. ¿Verdad, donGaspar?

—Mucho que sí,'—respondió el interpelado;—estoes m ejor q uo requeson y almlbar; esto es arropía.

—Pues esta arropía, y otras limpias por el es-tilo que tenemos, es de necesidad que las saboree-mos en primer término nosotros, para que sepamos

N," 13,

lo mucho bueno que encierra nuestra casa, y . des-pues que procuremos las saboreen los extranjeros,para lo cual es preciso que les hagamos conocer suexistencia y entonemos esos cantos de alabanza /tonque ellos saben llevar lu gente á contemplar susmaravillas. En esta facilidad de comunicacionesque el progreso establece; en esta inquietud que losveranos determinan por do . quiera, lanzando lagente 11 lejanas tierras; en esta curiosidad insacia-ble, y en este noble atan de aprender que caraele-riza á las sociedades modernas, todas das naciones

qua cuidan de su adelanto dirigen una investigado-ra mirada á su seno para ver C1110 pueden exhibir alviajero; ¡desgraciadas las que, teniendo mucho,pierden por abandono y apatía este riquísimo ve-nero de prosperidad! Y con lo dicho basta, señores.

--¡Chachipél—exclamó D Gaspar, dando á Linocariñosa palmadita en el hombro;—;que no se hu-biera usted vestido esos refajos de sacristía y se hu-biera metido á predicador, qué buenos sermonespodría usted largar!

—Yo creo que no se le enmohecerá la lengua,—dijo sonriéndose doña Rosita.. —Nunca,—repuso con celeridad el malagueño;—

señora, si parece una lanzadera.

LA PRENSA ENTRE LOS CHINOS.

Hemos podido reunir datos muy curiosos acercadeltorigen é importancia en el Celeste Imperio delas publicaciones periódicas, que entre nosotrosconstituyen una instilucion poderosa.

Citaremos en primer término la Gaceta del Go-bierno, que cuenta once siglos ole existencia, hablen-

' do salido á la luz pública en tiempo de la dinastíade f ang, que reino en China del siglo vil al x denuestra era.

El carácter oficial de dicha publicacion, impresay editada por empleados públicos, responsables de'sus actos, y aún de sus gestos ante los jueces queresiden en la capital, se echa de ver en el Tat-tsing-Lloei-lien, compilacion de las leyes promul-gadas por la dinastia reinante desde el siglo XVII.W. .1. Meyers, uno de los sinólogos más distingui-dos de nuestra época, indica en un artículo muy cu-rioso, publicado en la China Recree, cómo se reco-jen los datos destinados á la Gacela.

Un empleado permanece en palacio lodos los díaspara recibir los informes, edictos, decretos, nombra-mienlos, etc., que el gran Consejo considera que de-ben publicarse, y los lleva el Nui-Ko, ú oficina cen-tral de los archivos y cancillería del Imperio, en lacual se tiene el deber de enviarlos á su destino. Noobstante, y con el objeto de aprovechar el tiempo, al-gunos funcionarios subalternos van al Nui-Ko á sa-car copias, no oficiales, de los expresados documen-tos, que de esta manera son conocidos tintes de quese haya hecho la notificucion Entre los co-pistas, los noticieros de la Gacela son siempre losque llegan primero. Asi los empleados reciben elmismo tiempo, sino antes que el Nui-Ko, los des-pachos que contienen copias auténticas de los edic-tos expedidos á provincias.

Si el lector quiere formarse una idea de lo que esla Gacela china, imagínese un cuaderno de una do-cena de hojas de un papel pardo oscuro, con cubier-ta de papel amarillo, de más cuerpo, y con las pa -labras Hing-Pao, á manera de título, en uno de SUS.

extremos.Se publican dos ediciones además de la del go-

bierno, con su permiso, ó a lo menos con su toleran-cia: una de ellas manuscrita. Sich-Pelo, aparecemucho árales que la impresa, Ti-Tang. La tercera,larga y estrecha, lleva el nombre de Tehang_pek,y se vende lambien algo más pronto que la edicionoficial.

Se insertan en la Gaceta los nombramientos delos empleados, notas biográficas, la crónica de lamirle, memorias sobre la administracion civil y mi-litar, informes de los censores, anuncios de las fun-ciones religiosas, de las ejecuciones de criminales,noticias de las provincias, etc.

Quien se suscriba al King -Pao y al Fatsinghin-shin, anuario del imperio que sale á luz cada tresmeses, puede hallarse al corriente de cuanto en elmundo oficial ocurre en aquella nacion inmensa.

Respecto al contenido de la Gaceta china, conta-mos con algunas traducciones. El padre Contancinha publicado extractos en las Lettres edifiantes.Los periódicos ingleses Cantan Reg 'seer, ChinesseRepsilo•y y Nal•lit China Herald, impresos en Chi-na, han publicado extensos fragmentos del King-Pao. El The Nonti China Herald tuvo la feliz ideade publicar en tomos anuales las referidas traduc-ciones, desde 1872, dando así á conocer fielmente loque es la Gaceta de Pekin. A continuacion trascri-bimos algunas, que se refieren al lao 1875:

«I 1 y 12 de Febrero.—Decreto ordenando que se

Page 7: Viajero Ilustrado

N .° 13. EL VIAJERO ILUSTRADO. 7

remita cierta cantidad de incienso del Thibet á Wen-pie, gobernador general encargado del trasporte degranos,' para que sean piadosamente ofrecidas aldios de los ríos, en reconocimiento por la solidez delas orillas del Gran Canal durante la peligrosa inun-docion del otoño.»

s3 de Mayo.—El gobernador de Chan-si, PanVuen-Chen, eleva al Trono un informe acerca delas virtudes de una señora de Cham-si, y pide, en re-presentadora de muchas personas influyentes, quese erija uremonumento Conmemorativo para inmor-talizar su nombre. La señora IIó se habla casado, ála edad de diez y ocho años, con Lu-Chuyug, hijode un subgobernador.

»El marido, que vivía en casa de sus padres, cayóenfermo en el otoño del año 12"de Toung-tchi (1873),ofreciendo su mal síntomas alarmantes. Sin embar-go, su esposa, aunque de noche se ocupaba secreta-mente en quemar incienso y rezar, de din estabacontenta y tranquila, al parecer, por ahorrar disgus-tos á sus ancianos suegros. Por espacio de muchosmeses no pudo ni siquiera desnudarse, consagradaenteramente al cuidado de su esposo, llegando, comoúltimo recurso, á cortarse del brazo un pedazo decarne para administrárselo al enfermo mezcladocon los medicamentos.. Sin embargo, tal solicitudfue inútil, y Lu-C,huya murió.

»La desgraciada consorte, abrumada por el dolor;no quiso sobrevivir á su marido, y despues de haberescrito á sea cuñada con el objeto de que acudiese ácuidar de sus padres, sacrificó ser vida, á la edad detreinta y cuatro años, en el altar de la felicidad con-yug al.

»¡Que la virtud de la señora Hó sea enaltecidacomo se desea!»

«6 de Setiembre.—Edicto: •»Tso Tsung-tan, gobernador general del Kanson

y de Chensi, ha presentado una Memoria anuncian-do la captura de los rebeldes, y pide gracias y ho-nores para los vivos y para los Muertos que contri-buyeron á este resultado.

»El general Tchang Tchung Ruta ha conseguidola captura de los bandidos que el año último burla-ron la persecucion de las tropas cerca del Llotchcon.

»Se manda al ministerio que tome nota de estaMemoria é informe acerca de las recompensas. Serecomienda tambien á la atencion del Ministerio unoficial muerte en un combate.»

Por las citas anteriores puede comprenderse queel Ring-Pao, lo mismo en el fondo que en la for-ma, no es un periódico tal como en Europa le cono-cemos. sino la Gaveta Oficial.

De aquí la necesidad de publicar en la China ver-daderos diarios, necesidad que interpretaron muybien los editores del Dctilly-Prest , en Hong-Kong,y del Nori-China-Herald, en Shang-hai, impri-miendo algunas hojas en el idioma del Celeste im-perio, y preparando el camino que siguió algunosaños despues el Shun-Pao. Este periódico, dado á laluz pública en 'Sana-hai por un inglés, Mr. ErnestoMajor, se compone de un pliego de papel muy del-gado, de 96 centímetros de largo y GO de ancho, im-preso por una sola cara, y formando, al doblarse ála largo por la mitad, como dos grandes cintas, di-vididas cada una por líneas verticales, en cuatro pá-ginas numeradas.

Cada página del Shun-Pao consta de 39 colara-nas, cada una de las cuales contiene 52 caracteres;esto es, que teniendo en-cuenta lo que ocupan el tl-tulo y la fecha y los espacios vacíos, forma un totalde cerca de 14.000 caracteres por número.

Trata de los asuntos más diversos. En un númeroque llegó á nuestras manos, hay un articulo de fon-do., un segundo artículo, un «primer Sang-hai» de-dicado al estudio de los ejércitos de Francia, Alema-nia y Rusia, dos páginas y Media de noticias de pro-vincias, y por último, los decretos de-le Gaceta dePelan. En la página sexta principian los anuncios,que- los negociantes extranjeros lascan más inteligi-bles á las chinos por medio de viñetas: un piano,rana máquina, un fusil, etc. Se comprende fácilmen-te la importancia de un periódico diario de tales con-diciones en un pueblo tan inabordable hasta ahoraá los europeos, y tan pagado de su civilizadora sin-gular. La tirada del Shun-Pao en 1877 ascendía á8.000 números.

Su éxito afortunado, sus tendencias progresivas ysu actitud favorable á los extranjeros, debian susci-tarle rivalidades; y en efecto, los chinos publicaronsucesivamente el VVei-Pao y el Y-Pao, bastanteparecidos en la forma, pero de ideas opuestas alShan-Pao.

A la muerte del jóven Emperador Toungt-chi, enEnero de 1877, el editor del Shten-Pao, en señal deduelo, imprimió en tinta azul el número en que apa-rece la noticia. Despees, cuando subió al trono Ko-nangsu, en prueba de regocijo, se publicó en papelencarnado con tipos negros. El lomee-Pao se publi-Có en las referidas circunstancias en papel Ordina-

' rio con tipos rojos.

Ni el Wei-Pao ni el Y-Pas pudieron sostenerse,habiendo cesado á poco tiempo . en sn publicacion.El único competidor del Sitar-Pao en Sang-hai esactualmente el Sin-Pao, per iódico que se publicatambien todos los días. pero cuya tirada es pequeña.Este periódico, á pesar de ser órgano de los elemen-tos oficiales, se ha singularizado por sus eanards,sus artículos sobre asuntos pueriles, sus tendenciasautocráticas y su ódio á los extranjeros. Constaigualmente de ocho páginas con cubierta amarilla.

A la vez que los periódicos citados, en China sepublican varias revistas científicas dirigidas por eu-ropeos, con la colaboracion de escritores del pais.Una de ellas, editada por una sociedad inglesa, apa-rece en cuadernos mensuales, y no cuesta más quedos francos y medio al año.

, Hay tambien un periódico ilustrado, en cuyas pá-ginas se reproducen los grabados del IllustratedLondon News y el nen Loa, fundado últimamen-te en Sincawe, cerca de Sang-hai, por los jesuitas.

En la colonia inglesa de Shon-Kong se imprimentres periódicos chinos, dos diarios y uno que saletres veces semanalmente.

Reasumiendo: en d'imperio chino, hablando conexactiteid, no hay prensa, al menos con la represen-tacion con que hoy la conocernos. Las imitas publi-caciones oficiales y semi-oficiales que tienen linalo-gia con las de Europa, carecen ele importancia. Y,sin embargo, los periódicos que allí están dirigidospor extranj eros 0 sometidos a su influencia, demues-tran, con su éxito creciente, la necesidad de unaprensa indígena, inteligente, que, esparcida por lasprincipales ciudades del interior, sin duda habría decontribuir á que se abriesen las puertas de la Chinaá la civilizaron europea más que con cuantos re-cursos han empleado hasta ahora las naciones po-derosas de Occidente.

EL PALACIO-CASTILLO DE MIRAMAR.

UN RECUERDO DE 1--IEGLOS INFORTUNIOS.

Al castillo de Miramar va unido el recuerdo deuno de los episodios más trágicos y conmovedoresde nuestra historia moderna. Nuestra Marginadorase representa la noble figura del desgraciado empe-rador cle Méjico, MaxiMiliano, y la interesan lisiinade su esposa Carlota, hija del Rey Leopoldo de Bél-gica; fusilado él en Querétaro en 1866, y ella locade dolor.

En la breve histeria de ese monumento, asentadosobre elevadas rocas á la orilla del mar, á corta dis-tancia de 'Trieste, hay algo de maravilloso, queimpresiona tristemente al espíritu, á pesar de lasmagnificencias .que encierra y del eXplénalido pano-rama que desde sus torres se descubre.

Hace unos diez y ocho años, Maximiliano, her-mano del. Emperador de Austria, Francisco José,había ocupado los puestos más honrosos y ele-vados en set país. Había sido almirante de la mari-na imperial, gobernador del reino Lombardo-Vene-to, - y presidente de la Cámara Alta, llamada de losnobles. Jóven todavia, pues nació en 6 de Julio de1832, purecia ya cansado de los honores y..dispuestoá prescindir' de las sugestiones de la ambicion.

Enamorado del sitio donde se destaca Miramar,concibió el pensamiento da construir allí un palaciopara pasar en él la vida en compañia de su esposa,á quien adoraba, en . completo retiro.

Le hicieron observar que no era muy apropósitoaquel punto, donde no habla mas que rocas y algu-nos olivares que se Mullan á su espalda; pero per-sistiendo en su idea, contestó que le bastaban elmar y el cielo para embellecerle.

Y en seguida, un pueblo ele obreros y artífices seestableció sobre aquellas peladas cumbres, y en loscimientos de roca, abiertos por medio cío la pólvoray del hierro, se afirmaron las bases del soberbio pa-lacio, que es á la vez castillo, donde alternan losmármoles con el oro, las obras maestras del artecon las de las doradas y la literatura.

A la aridez de las rocas sustituyeron los explen-dores de una mansion de delicias, cual obedeciendoá una evocacion de las hadas, para ver deslizarse laexistencia venturosa de dos príncipes que se ama-ban con ternura.

¡Qué fugaz, qué breve fue tanta dicha!Maximiliano, huyendo de la ambicion, habia en-

trado en su palacio, al cual nombró Miramar por-que siempre acarician su frente las brisas del Adriá-tico, y seducido por el cetro de un imperio bañadopor las olas del Atlántico, salió por sus puertas parano volver más.

Rectificpaemos.-Si no tornó en vida, traspasó susumbrales muerto.. Para ceñirse la corona salió de Miramar un díahermoso de primavera, en 1864, y su féretro fuetrasportadoalb un tristisimodia de invierno de 1868.

La infeliz esposa, devorada por los más cruelessufrimientos, privada de la luz de In l'azor), vagan-do bajo los artesonados donde habia sida alliagadapor los más dulces sueños del amar, ofreció á busojos del mundo el espectáculo de la desgracia umsgrande, del dolor más augusto de la época actual.

Desde el palacio-castillo se domina cd mar a unaaltura imponente. Trieste con su golfo, los puertosde Muggia y de Pirano y la costa de Istria Lacia elEste, constituyen un punto de vista admirable. Porun lado se contempla la inmensidad, por oh ., el pin-toresco litoral del Friul, que se pierde en el hori-zonte.

En la relación de una visita á :\ bramar, hecha porun ilustre viajero, Sir Iriarte, en 1875, encontra-mos algunos detalles muy interesantes, que trascri-bimos á CODLintiacion: ri_a.) revela el carácter de N la- •ximiliano en SIL gabinete de estudio, construido conarreglo al modelo del gire ocupaba á bordo de la fra-gata Nooara, cuando alié la vuelta al inundo. Allícada cosa tiene su poesía, y todo habla con elocuen-cia ir la imaginacion.

»Sobre la mesa, al lado del libró entreabierto, seven los bustos de Iloniero, de Dan le, de Sita kespea-re y del anciano principe de Midler:Lar:Ir. EH la bi-blioteca leo mimbres de poetas ITEIIICEESeS, los másverdaderos y grandes. Luego asaltan la memoria to-dos los recuerdos y sorprenden al espíritu balas lasevocaciones. Ya retratos de amigos OYE IisE,-nomias se detienen los ojos del principe iniHirastrabaja, ya figuras alegóricas, entre las cueles cam-pea tus mapa del imperio de Carlos V, reinogioso sobre el cual no se ponis jamas el sol.

»En diversos salones se encuentran a cada pasocuadros al fresco, debidos al primal de Cesar delAc[ua, el afamado artista de Trieste, les errarlas repre-sentan episodios del drama de SI...1 g .,-.MSEmMEMe, queprincipia con una tiesta y acaba con la unas som-bría tragedia. LUggiE Se pasa a la sala del trola d o n-de se ostenta el retrato de Nlaximiliano, de elierp,entero, con el manto imperial y el cetro en la mano.

»Por una irrision de la suerte, que espanta y Ine-la el corazón, junto al retrato se lee In inscripeionsiguiente: Si Artuna care.ie lnlli (Ir.

»A algunos pasos de la puerta de entrada, Intyun pequeño museo que Contiene lodos los recuerdaspersonales del príncipe, sus trajes, sus armas, sucetro, al lado ale curiosidades científicas que hablacoleccionado en sus viajes, como fraguarme, r l e ro-

culturas egipcias, objetos de CCMEOilii.-E1 il g Iras azte-cas, ejemplares preciosos para el rtsdurlie dr: la Irlis-oria Natural,

Tales son los recuerdos memorables del palacio-castillo de I\liramar.

J. -1'ELARDE.

LOS GRABADOS DE ESTE NÚMERO.

EL PALACIO-CASTILLO DE -1\lin...yrAn.

(Tense el arliculo que lleva el ntisup,

AGUADOR DE COLOM-ERA.

Con decir que el tipo está tomado del natural porun artista distinguido, podernos escusartiós de aña-dir explicaciones.

En Córdoba, corno en Sevilla y otros poblacionesde Andalucía, los varoniles descendientes de los ára-bes, lo mismo sirven para rejonear toros que DEMI

desempeñar oficios tan pacíficos corno el q ue nues-tro grabado representa.

CASA DE UNA FAEWILLAulN)EmoNZGROS EN LOSESTADOS

El cuadro se refiere ir una plantarion del Estadode Virginia.

Ese negro que juega con su hijo, en DIME4'Dei g desu madre, es un ciudadano de la gran república; líarecobrado su libertad despues de 'la lucha encarni-zada que sostuvieron áltimarneale los Estados delNorte con los del Sur, y disfruta de un duo tan pre-cioso con espansiones envidiables en el seno de la •familia, y en medio de una naturaleza pródiga.

Su vivienda tiene tanto de casa como de cunea,

pero allí no le falta nada de lo necesario, y no am-biciona nada de lo superfluo.

EL TEATRO DE 50N CiP.I.OS EN :NÁPOLES.

En el viaje á Nápoles publicado 'en este periódico,habrán visto nuestros lectores tina descripcion de-tallada de tan famoso monumento.

Su aspecto convida á las más elevadas satisfac-ciones del espíritu. Si se posee un verdadero senti-miento de la música,—dice otro viajero,—si se DIME

á este arte divino en lo que tiene de !irás puro, debeser imposible no encontrarse bajo la influencia de

(1) Si la fortuna os tararear, no lo dejois r:wapar.

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EL VIAJERO ILUSTRADO. N," 1.1

El, [1..\C1(14.:-ASTII,1_0 DE

LOS JABALIES.-UN PÁNICO.

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N.° 1

3.

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EL, VIAJERO ILUSTRADO. N .° 13.

sus oficiales, al son de una música estrepitosa, en-tre salvas de artillería y ahullidos de fieras másbien que gritos de hombres.

Los esclavos iban amontonando sacos-de cauris,piezas de tela y rollos de tabaco, al rededor cde S. M.que principió á arrojarlos á las tropas. Los soldadosse los disputaban á. puñetazos, á puntapiés, á cabe-zadas y á mordiscos con febril encarnizamiento.

Los cauris y los rollos de tabaco iban ti parar ámanos de los soldados más fuertes ó más ágiles; laspiezas de tela se las repartían casi siempre los ofi-ciales, á quienes los soldados no osaban disputar-selasm

De esta manera paga el rey de Dahomey á sustropas, resultando el precio sumamente económico,porque si ca da uno de los sesenta mil soldados queforman dicho ejército recibiese, regularmente laparte abetuna de la suma distribuida, habría dequejarse, y con razon, de su insuficiencia, mientrasque, de aquel modo, si no llega á cojer un solo cau-ris tiene gris atribuirlo esclusivamente á su malalubina, puesto que habrá sentido caer la lluvia deconchas sobre su cabeza durante las largas horasde la revista.

Los JALIALÍES. —UN PÁNICO.

Este grabado es copia del precioso cuadro deMr. Gridél. No puede representarse mejor el espanto.de los fieros animales al verse sorprendidos en !alo-dio de la noche por el silbido estridente de la loco-motora, que anuncia la llegada de lo que es paraellos un inónstruo, el mónstruo del progreso, con ca-bellera de fuego y penacho de humo.

La composicion es notabilísima, y sorprende porsus caracteres de verdad en todos los detalles.

ACUEDUCTO DE MÉRIDA.

Mérida, fundada por tina colonia romana, todavíaconservaba, veintitres años antes de Jesucristo. mu-rallas cuyo circuito abrazaba seis leguas, 3,700 tor-res, 84 puertas, 5 fortalezas y gran número de mo-numentos religiosos y civiles, entre cuyas ruinasaparecen las del acueducto, de que nuestra láminaes copia.

Se halla aún en buen estado de conservacion, yconduce á la ciudad aguas que vienen de una dis-tancia de seis kilómeteus. Es del periodo de la deca-dencia del imperio romano.

Hay en Mérida otro acueducto más célebre, Ida-orarlo por el pueblo el de los Milagros, pero del cualno quedan en pié sino diez arcos. Se cree que fuéfundado por Trajano, que tenía ,gran cariño á Mé-rida, por haber nacido en Itálica, cuyas ruinas estánno lejos de ella. A juzgar por tales restos, no fué, elde los Milagros inferior á los acueductos de Segoviay de Tarragona.

VISTA se PARA.

Esta importante ciudad del Brasil, llamarla Cam-bien Santa María de Belen, á cuyo puerto lleganlas olas del rey de los idos, ó de las Amazonas, seofrece á la vista del viajero, como ceñida por unaancha faja de bananos y cocoteros. Entre sus casasrojas y blancas descuellan campanarios inundadosde luz.

En esta población se reunen todas las razas indí-genas; los mestizos y negros abundan tanto comolos blancos descendientes de los conquistadores. Laindolencia que los caracteriza, efecto del influjo delclima, les impide aprovecharse, como la hubiera he-cho otra raza más emprendedora, de las cuantiosasriquezas que les rodean, en minas, selvas, vastaspraderas y hierras fecundadas por los ríos más cau-dalosos.

CONIDATE DE UN CAláiÁN Y UN JAGUAR.

Es una escena de las que suele ofrecer el río de lasAmazonas. A punto de ser alcanzarlo un ciervo portic jaguar', se siente libre de tan terrible enemigo. Esque éste, á su vez, ha sido acomelido por un caimán,que le cojo por una pata trasera. Vuélvese el jaguar,lanzando un rugido de dolor y rabia, y con sus gar-ras intenta cegar al enemigo; pero el caimán se' li-bra del ataque, hundiéndose en el agua sin soltar lapresa. Un Ultimo esfuerzo por ambas partes los hacesalir á liar de agua, mas en seguirla desaparecen,hundiéndose en el fondo del rlo.

L.

LA CUNA Y LA CRUZ.(Cumposieion Irnrlucidn niel errada/1,de la 1.1.1elle »EL AMOR.

par L. G. de lt.)

Recuerdo un dia dialel más hermoso de Mayo;la aurora nos sOnreia.y de rubor se encendia,del sol al tímido rayo.

Tarnbien nuestro amor, bien mio,

bdlld aquel iba en su aurora,yendo por el bosque undulecual Van las ondas de un rlode corriente bullidora. ,

Las manos entrelazadas,el placer en las miradas,girábamos ea redúrdel árbol, do están grabadaslas cifras de nuestra lunario.

Girando entóncesemito alas de 1/1111.4105a,las ilusiones de rosaque, poblaban el ciende nuestra mente ardorosa;

Con robar Une enojos daá la luz que brear allá,los ojos al tronco fijos,«tal vez de este árbol se harála cuna de nuestros lti,l0S.vr

—Me dijiste,—y lotlavtaal alma mia enagenade tu acento la arnionia,las dulce cual la cadena'que á aquél tronco nos ruin.

,,Ay!.,—mu r muré—Irist.e ideahiriéndome ante Inr

en que el 111110O se menea;mide este árbol puede que seade nuestra baldar In cruz!»

VICTOR

EL AUDÍFONO.

La Gazzelle de Cincinati anuncia que el profesorde Graydon, de dicha ciudad, ha inventado una má-quina para oir, ó audifono, que no tiene nada de co-man con otra máquina del mismo nombre, que sedice inventada por un intrigante de Chicago. El au-difono Graydon consiste en un pequeño electro-micrófono en el centro de cuyo diafragma está suje-to un cordon de una longitud cualquiera, y cuyootro extremo está fijado á un pedazo de madera. Elobjeto del aparato es hacerse oir de los sordos, y su -funden es tan fácil como sencilla. La persona aque-jada por la sordera se coloca el pedazo de maderaentre las dientes, y la persona deseas.a de conversarcon ella habla por . el electro-micrófono, teniendocuidado de mantener el cundan en estado de tension.

Por este medio, segun la teoría del inventor, elsordo, no pudiendo oir por las orejas, oye, si sepuede decir así, por los dientes; en el_sentido de queos comunicarlo el sonido por los nervios de los dien-tes y por los huesos de la cara hasta el nervio au-ditivo, y de allí al cerebro. El instrumento no obramás que en el caso de que la sordera resulte de en-fermedad, ó cuando el nervio auditivo no es accesi-ble por las vías ordinarias. ES evidente que si elnervio auditivo está paralizado, la accion del audi-fono es inda.

Ultimamente se han practicado interesantes ex-periencias andifónicas en la escuela de sordo-mudosde Cincinnati. Una jóven de color enteramente sor-da, á la cual hablaba el profesor á una distanciade 25 pies, ha repetido palabra por palabra todo loque le decía. Otra jovencita sardo-muda de naci-miento, ha anunciado, por medio de los dedos, quehabía oído sonidos mientras el profesor la hablaba,y que había notado diferencias de intensidad y en-tonacion.

Inútil es añadir que como era la primera vez ensu vida que ola, no podía comprender el sentido delas palabras.

El audifono parece llamarlo á realizar maravillo-sos resultados, sobre todo si M. Edisson, al arrancarlos tullimos secretes á la luz elécrica, se digna per-feccionar esta nueva invencion. Salvo el casodeparálisis del nervio auditivo, no habrá ya sordos, ypor consiguiente mudos, puesto que el mutismo esmi simple resultado de la sordera, y 'desaparecien-do la sordera-causa, deberá desaparecer tambiennecesariamente el mutismo-efecto.

De todas las invenciones de este siglo, la másadmirable es quizá la que vuelva el oido y le pala-bra mi los sordo-mudos.

CORRESPONDENCIA DE PARIS.

LA FIESTA DEL HIPÓDROMO.

Paris 19 de Diciembre.Esto es indescriptible, señor Director, como no

puede calcularse la muchedumbre que ayer se atro-pellaba, desde las primeras horas del din, t't laspuertas del inmenso escenario. Abiertas poco antesde las nueve se desbordó por ellas el gentío. '

A las diez, con la obertura de la Multa di Por-lici, empezó la fiesta. El aspecto de la sala deslum-braba. Más de 7,000 luces alumbraban los diversos

IO

dulce emocion, cuando uno se detiene ante esa es-cena célebre donde con tanta perfeccion se han re-presentado gran nautere de obras maestras,

Jóves ÁRABE LLEVANDO LA PIEL DE UN LEON MUERTO

Á SUS MANOS.Haber hecho el viaje á Argelia sin adquirir una

piel de Icon, es corno haber estado en Roma sindar una piedra de las ruinas del Coliseo.

El tributo que pagan al formidable rey del desier-to las caravanas y los q bares, tolerableera tan in

queen la Argelia hasta hace pocos años, los árabesllevaban hasta una veneracion supersticiosa su agra-decimiento á los intrépidos cazadores, muy escasospor desgracia, que podían hacerle frente y librarlesdel yugo terrible.

Toda el mando recuerda el nombre de Jallo Ge-rard, el célebre matador de leones. Puede asegurar-le que en el Abreu francesa aluna el nombre de Ab-el-Eader inspira más entusiasmo y veneracion quela de aquel oficial frunces, que con valor y sangrefria incomparables, armado de mía carabina de ROS

ellii0MIS, /pie jamas erró el tiro, alcanzó cuarentatrofeos como el que lleva con orgullo cl héroe denuestro grabado. Ese jóven mató al leon de un ba-lazo entre los ojos, desde la copa de un árbol, don-de le estuvo aguardando toda una noche.

La próspera colonizador' de Argelia' es causa deque vayan desapareciendo esas fieras, que antes eranmás comunes allí (pm les lobos en nuestros bosquesdel Norte.

.A PUENTE DE ANDOMEDA, EN LA GRANJA.

Las descripciones del real silfo de la Granja sonbastante, conocidas. Sin embargo, diremos que lapreciosa fuente de Andrómeda se alza en el centrode un estanque, id rededor del cual ocho estatuasrepresentan los elementos y los diversos géneros depoesía.

Ei asunte que simboliza la fuente eslá tomado dela fáPerseo y Andrómeda. Sobre un bajo-relieve del Musco Capitalino se ve á Perseo ayudan-do gallardamente á Andrómeda á bajar de SU roca.A sis pies se agita el dragon moribundo.

tope de Vega ha escrito un poema acerca de aque-lla heroina mitológica. y Conmine una tragedia.

kridie, en sus MeinOrfesis, nos explica el asun-to del mole que sigue: uCasiope, esposa de Cefeo,rey de Etiopía, estaba tan envanecida con su belle-za, ' pie se la figure superior á la de las Nereidas.Enojadas estas ninfas, hicieron salir del fondo delroer nn niórISIrlin cine causó tales estragos en los do-

uhrs del citado monarca, que no habiendo fuer-zas humanas suficientes á combatirle con éxito, serecurrió al oráculo de Júpiter Ammon. La respnes-ta que obtuvieren los desgraciados reyes fué queexpusiesen á merced del monstruo á Andrómeda, suhija única.

ulóié preciso ejecutar la triste sentencia, y la ilus-tre víctima quedó atada sobre una roca, aguardandole muerte, cuando Perseo, hijo de Júpiter y de Da-mt, pasando por casualidad, fijó los ojos en ella.Venia de la gloriosa conquista de la cabeza de Me-dusa, que llevaba sobre su escudo, volando por me-dio íle las alas fijas á los pies, corno las de Mercu-rio. Oyó de labios de Andrómeda la causa de su des-

' gracia, mató el mOnsirun, y luego el rey y la reinaconcedieron con grande alegría la mano de su hijaá su liberiador.»

UNA Tonna nt: I,A PAGODA DE VILNOUR.

La pagarla (le Vil man: es uno de los monumentosmás colosales de la India. Está situada sobre el ca-mino ,pie. conduce de Calcuta ir Pondichery, cercade esta nItirea ciudad. Todas sus torres aparecen de-coradas con multitud de figuras alegóricas y 'otrosdetalles de escultura. No menos variada es la orna-inentacien de las bellas colmenas que sostienen lasgalerías.

JIMIO 11 la ¡arre de entrada se ve el gran carro delos ídolos, al cual se hallan uncidos caballos de inri,dera. Durante las festividades, los fieles se disputanel honor de arrastrarle, con ayuda de fuertes cables.En las ceremonias del templo y en las procesiones,les elefantes desempeñan los papeles más majes-tuosos.

EL REY DEL DAIIONLEY insammuvinsmo CAMUS .i SUSTROPAS.

Respecto al cancere, pequeña concha que sirve demoneda en el Dahomey, ya hemos consignado losdatos correspondientes al hablar de la 'capital deaquél reino africano.

Nuestro grabado representa el sanguinario reyBabada en Widah, en el acto de recompensar á suejército, do l'euros° de una expedicion afortunada.

Un viajero testigo presencial describe de este mo-do la escena: dada la seña, el ejército saludando alpasar con sus burras á su jefe supremo, desfiló pordelante del trono, llevando los soldados á cuentas á

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N.° 43. EL VIAJERO ILUSTRADO. •1

cuerpos de edificio, bajo el techo de hierro y decristal.

Lo que atraía en primer término la atencion, erauno de los monumentos más elegantes de la arqui-tectura española, la gallarda Giralda- Y junto áSevilla Murcia, representada por una casita de lahuerta, con la correspondiente decoracion. Tren-bien sorprendian las- tiendas del Monde Ilustre, dela Illastracion y otras.

Doscientos profesores obedecían la batuta mági-ca de Olivier Metra, el director de la orquesta enlos bailes de la ópera, y las campanas de la Giraldaformaban un juego armónico de atractivo inesplica-ble con los violines y clarinetes. Me parecía quemurmuraban el nombre de mi patria, de mi amadaEspaña y vela asomar dulces lágrimas á los ojos doalgunos compatriotas.

S. M. la Reina Doña Isabel: llegó poco despeesde la diez acompañada de las damas de su servi-dumbre. La esperaban el comité organizador y unaverdadera córte de mujeres elegantísimas y de hom-bres de talento.

La reina presidia la fiesta ocupando el palco des-tinado al..Jefe del Estado francés. Mr. Grevy sehabla privado de asistir á .1a fiesta sin duda porotalanteria.

¡Viva España! ¡Viva Francia! ¡Viva Múrcia!Estos gritos resonaron repetidas veces.Luego los acordes de la marcha húngara y de la

mascarada de Artand, Quince pianos las ejecuta-ron, produciendo una sonoridad asombrosa.

La animacion llegó á su apojeo.

¡Paso á los toreros! ¡Los toreros..!No llevarán la civilizacion, pero llevan el garbo,

la bizarría y el valor.Las más hermosas damas se apresuran á verlos,

sin oculCar su admiracion. Algunas hacen gestosde horror, de un horror gracioso, peré la mayorparte de ellas los contemplan con simpatía.

Nada menos que la 1V/archa de las Antorchassirve de introduccion á los diestros. ¡Qué estrépitorle aplausos! Parece que los franceses se vuelvenlocos.

Realmente la cosa se esplica. Allí aparece todoel personal de la plaza, alguaciles, picadores ycuatro cuadrigas de mulillas, en pos de Lagartijo yde Angel Pastor, del Gordito y Gonzalo Mora. Nofaltan más que lúa Loros.

Al terminar la marcha de las antorchas princi-pió el paso doble de Pepe-Hilo, tocado por la or-questa de banderías.

Esto nos gusta más á los aficionados; á los afi-cionados á lá propiedad de las cosas, que aunquela música del Pepe-Hipo hace bullir la sangre es-pañola entre la nieve que circunda el Hipódromo,no nos agrada ménos la marcha de las antorchas..

La cuadrilla, dándose el aire de Triana, recorrela calle formada por las tiendas y estrados de SaraDernha •dt, la Croizetle, los artistas del teatro Fran-coni y las discipulas del Conservatorio.

Sara Bernhardt, la estrella del Teatro francés,viste con tocado tan sencillo como elegante. Lamodestia es el mejor adorno de aquella gentil ca-beza, en cuya frente irradia la llama del genio.

Les artistas saludan á los toreros con una lluviade flores; ellos responden quitándose las monterasy haciendo unos arqueos de cuerpo, infinitamentemás graciosos que los de caja.

Los diestros se detienen á saludar á la reinaDoña Isabel.

Enire.la orquesta de guitarras se distinguen loscantaores, y entre los canloo•es brillan la Maria yRomero, ídolos de los aficionados al canto fla-menco.

La música de la guardia republicana ejecuta laobertura de Oberón y la de Metra un vals: luego...la Maria se presenta delante de la fila de lostoreros..

Los bravos son atronadores: Una admósfera deentusiasmo enardece aquellos rostros morenos, á lamelodiosa voz de la cantaora sevillana y al compásde bandurrias y de guitarras.

No son ya aplausos atronadores, sino verdaderastempestades las que á cada copla se suceden.

Vivas á España, á Sevilla, á la cantaora y á lostoreros.

Luego Rosa Mauri, en cuya pandereta CarolusDurand ha pintado una admirable escena de toros,ejecuta el paso español. La ovacion continúa, y lapandereta se rifa entre siete números, cada uno delos eriales ha costado 1.'200 francos.

No causa ménos entusiasmo el vaile de gitanossobre una tarima. A los pies de las bailaoras caenllores y monedas: las unas se venden en públicasubasta y las otras van á parar á la alcanclade lospobres.

.•.Dentro de una góndola del siglo sur, la hermosa

Judith, la hechicera, principia á decir-la buena ven-tura y á recojer billetes de banco. ¡Oh! cuánto debeMurcia á los hechizos y hechicerías de la. grandeactriz!

Despees de presenciar la farándola, el baile pro-venzal, de escuchar la marcha del Tannahuser porlos coros de la Opera y de asistir á la despedida en-tusiasta que se hizo á Los toreros, llega el turnopreferente de la atencion á la rifa y venta de ob-jetos.

Cuando esta carta vea la luz ya serán demasiadoconocidos los detalles cíe esta parte, la más esencialde la fiesta. No habré de consignar aqui sino la im-presion de mi agradecimiento como español á unbeneficio tan grande para España.

Lo más atractivo de la fiesta para la juventud bu-llidora y para los aficionados á aventuras fue laverbena. Damas enmascaradas circulaban en todasdirecciones ostentando trajes caprichosos, compi-tiendo en lujo, en buen gusto y en elegancia, lasbellezas de celebridad española resplandecian en elvasto escenario como verdaderas estrellas. con lasmantillas españolas, blancas y negras, 11/ con capasvenecianas.

Actores y saltimbanquis rivalizabau por atraeral público. En el estrado del Monde Parisien sedaban conferencias y conciertos burlescos, aplau-didisimos por la alegre sociedad del demi-monde.

El prestigitador Hermand hacia arodillas frenteá las tiendas del Comercio y de la Industria, perono electrizaba tanto al público como las actricesvendedoras y las del circo Franconi.

Sara Bernhardt vendía autógrafos, Maria Vergecigarros, las hermanas Legault cajetillas y petacas,las Bareth panderetas y tambores; Maria Lerommúsica y fotografiar, Maria Chainpagney licores.etc., etc. Raimundo Madrazo y otros afamados ar-tistas estaban tambien convertidos en mercaderes,en pro de la caridad. Y se vendían tambien edicio-nes y más ediciones del Paris-Murcia.

El conjunto maravillaba como la r•alizacion deun sueño de prodijios. No hay memoria de fiestasemejante en los anales de Paris.

fin español del Bouleuá•.

CRÓNICA DE LA FUTURA EXPOSICION UNIVERSALDE NUEVA-YORK.

Individuos nombrados para constituir el comitéejecutivo de la Exposicion.—Asamblea generalpróxima á realizarse con la aprobacion y bajo lapresidencia del ex presidente de la república, ge-neral Grant.--Noticias Geográficas de los señoresStebbins y Pricc, presidente y secretario respec-tivamente del comité general.--Juicio de la pren-sa de Nueva-York acerca de la Exposieion es-pañola en el certamen de Filadelfia.—Méritoatribuido á la parte agricola del mismo.—Men-cion honrosa del concurso que presta al proyectoel periódico donde las presentes crónicas se pu-blican.

Desde que en cumplimiento del acuerdo tomadoen la junta anterior, el comité general de la Expo-sicion dejó nombrado el ejecutivo, se ha ampliadoéste con varios miembros más, elegirlos de entre laspersonas de, más respetabilidad, arraigo y talentodel pais. Entre esta pléyade de verdaderas capaci-dades, figuran los distinguidos nombres de S. A.Haines, presidente; W. H. C. Price, secretario;W. A. Cole, Match; D. G. Vi illiamson; R. G.Rolston; E. L. Talcott; 13. A.Willis; Reverendo Pa-dre Newman; U. Welsh; L M. Bales; J. TrumbullSmith; M. C. Addams; C. Schelesinger; G. J. Sch-neider; Ch. \V. Hall; J. Talcott; general C. R. Gra-ham; M. Perry; S. Wonnser; F. LiOrnstead; T. Bel •ter; A. S. Sullivan y otros. Varias son las reunionesque el indicado comité ha celebrarlo con el fin depreparar una asamblea general que sea la última ymás completa manifestacion riel pais en favor delproyecto. Al efecto, serán invitados á esta reunionlos hombres más influyentes de todos los estados, yse espera asimismo que presida el acto el generalGrant, asi que termine el , viaje á Méjico, que va áemprender muy en breve, si es que no lo está yarealizando á la hora en que esta crónica se escribe.El ex-presidente de la república, instado prévia-mente por su particular amigo el Reverendo PadreNewman, ha manifestado ya su conformidad con laidea de aquella gran reunion, de la cual acepta lapresidencia, y dicho se está que este acto puede con-tarse como decisivo para la realizacion del gran cer-tamen, dada la gran influencia y popularidad de quegoza en los Estados Unidos aquel victorioso gene-ral. La constancia, la actividad y la pericia, si asípuede decirse, de las primeras personas que se pu-sieron al frente del proyecto, va dando sus resulta-dos. Entre este isómero debe contarse en primer tér-mino á los ilustres Stehbins y Price, presidente y

secretario general respectivamente, que 'roban des-cansado un momento, ni se dan punto de reposo pa-ra que aquella grande empresa llegue ir feliz tér-mino.

1-1. G. Slebbins (bueno es apuntar algun dato Ido.gráfico para mejor conocimiento de las personas quepromueven la Exposicioni, es 1111 .1/1111911e1 10 muyacreditado é influyente en los círculos financieros deNueva-York. Ha sido presidente de la emnision delparque central, cuya obra, una de las mas bellas yfastuosas del mundo en Su clase, se hizo durante suudministracion. Al dejar esto cargo fue elegirlo pre-sidenle del Stock Exchange de la misma dudad,dejando recuerdos gratos de su paso por aquel po-deroso establecimiento. Stebhins ha sido tam-bien diputado por el estado de Nueva-York, y hoyal honrarle con la presidencia del dimite de la Ex-posicion internacional, sus electores han podido vercon satisfaccion, que, á pesar de sus sesenta ó másailos, SU inteligencia y su actividad son las mismasde que hacía alarde en la plenitud de la edad viril.

W. 1-1. C. Price, el inean sa.i.e secretario cuyaamabilidad, rdencion y cortesia son t a n grandes co-rno su reconocido talento, no cuento mas que cua-renta y siete años de edad. Es natural del Estado deAlabama, en cuya Universidad fue graduado. Du-rante la guerra civil militó en el campe de los con-federados desde 1811) á 1814, ó Sea durante ledo eltiempo que duró aquella terrible lucha, alcanzandoun alio puesto en la gerarcana militar por SUS cono-cimientos, pericia y arrojo. Diez años hace que seestableció en Nueva-York, donde en 181l1 fundó elperiódico semanal ''he (}rocen, del que es editor,director y propietario. Esta publicador ' es la mejorde su clase en aquel pais, y goza de universal repn-lacien. Posteriormente ha fundado el ...1siérica, quepromete ser una do las revistas más nolables de in-tereses materiales. Escritor castizo y fácil, oradorpersuasivo y correcto, emprendedor é incansablepropagandista, M. Price se puede considerar rtoniola enearnacion del proyecto de la Expesiden inter-nacional, á la que dedica todo su saber, fuerzas yactividad.

Por lo demas, y volviendo ahora á la reseña de lossucesos gire á aquella empresa se refieren, justa esno pasar en silencio la controversia que d ' hl, algu-nos periódicos norte.americanos comienza á iniciarserespecto al modo y forma con que medrara les y ex-tranjeros doliere, 113 les conviene concurrir al corta-n-1CH proyectado. Corno es natural, se hacen compa-raciones, y se vuelve los Ojos hacia lo sucedido enlas últimas Exposiciones de Paris y de Filadelfia. Nefalla quien se ocupa de España, por lo Inri leemosen uno de l os 1...111'.DS semanales más ilustrarles rleNueva-York, y al hacerlo, bueno es que digamosasimismo, que se prodigan justos ehrgios á la Expe-sicion toda, que de sus productos 111 ./.0 España enFiladelfia, añadiéndose que la parle agrícola fue lamejor y unas completa de cuantas se expusieron alpúblico en el dilatado parque de la ciudad de Pene.Esta confesión, hecha por los mismos 'ronde-ameri-canos, es en verdad lisonjera, y debe servir de estí-mulo para no dejar que en lo sucesivo decaiga porincuria ó negligencia el buen concepto de quepresenle gozamos en aquel país, verdadero emporiode la agricultura y el comercio, sine lo es tambiende la mayor parte cíe las artes industriales.

De la no menos honrosa mellaron que tambienhace la prensa do Nueva-York, del interés con que

Mañana se ocupa del proyecto de Exposicion, yde los elogios que hace del director de este diario contal motivo, nada hemos de decir, por razones queestán al alcance de todos. Recibirnos con gratitudlas galantes declaraciones de nuestros compañerosen la prensa de aquella rica metrópoli, y persevera-•emos en el propósito de ayudar en cuanto podamosá la realización de la noble empresa que en dichaciudad se está organizando, con el esfuerzo del masinteligente y levantado patriotismo.

JOSÉ JORDANA Y Morumn.(La Mañana.) •

LA ZELANDA(NEEI I I,ANDA;

POR CARLOS CosTEn.

Hace algun tiempo que varios periódicos de Bru-selas anunciaron que un escritor y un pintor, bel-gas. que Carlos Costes y Adolfo Dillens acababande embarcarse para la Nueva Zelanda: elogiabanmucho el valor de ambos viajeros; pero lamentabansu desgraciada suerte, dando á entender . que Seriandevorados por los neo-zelandeses. De pié en la cu-bierta del Águila, el pintor y el escritor parada]]por el contrai g o muy tranquilos, sabiendo bien queen la Zelanda que iban á visitar no hay costum-bre de alimentarse de costillas de pintores, ni decerebros de escritores.

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EL VIAJERO ILUSTRADO.N." 13.

12

flabian salido bien equipados del puerto de Am-beres, con Sil morral repleto y el palo en la mano,

saboreaban el perfume de, los excelentes cigarrosque les habla regalado su opulento y buen amiga.

El doclorForchaux les diO tarnbien al despedirseexcelentes indicaciones, acompafiadas de ds bote--llas de ron ríelaJamaica; y por temor de qu

oe llega

sen ir altar víveres los viaje-ros agregaron á las que lleva-ban agregaro

1.11111111a porcion dedorar'' ahumada.

El buque partir,. Corría elvires de, mayo; al sol brillabaCOI/ todo Sil esplendor y el cie-lo estaba e0111ple.11110111110 des-pejado.

Los dos amigos debían se-guir el (1111 . 51, del Escalda occi-dental (Wester Seltelde), Ila-luedo el !lord, ¡1,0111.111,

1111 din 611 . 1"10 1111 perro paratapar el bam i ete que se abrióes uno (l •' Slis des naos101,11e1/01 P111111 las costa, de 111

Flandes zelatelm:as ú holande-sas ,Zenw,ch v,,,,nd,ITH)las de de Develand delSud (ZindlSevelancb, y llega-rihn 1.1 111 viola dr; Ele,ingar

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Iv 11/111 torre, e altaslas a fi nas, que ['meco, ¡lee

i1,1171 i1 cubrir el ana y la 0110,1,11,110'11h) 1,11,11011e ell el

M.,le los ma . blos y lasciadade,1t I Ireeell y desapare-em, 111,111H, 111111011 erran-

llily 1 . 1111 . 11 . ell'iiie.,„111.).

temparal, 'Oí' vede.de mi buque, y no sesnbr si SIllilere la quilla en4 . 1 riel,) o Vil el afina.

y Ciislei • e-dabanpeie-ellee,', apoyada,. ,:,, ,•1 paln macen ¿Dende está 1

mapa .; pregantO Dillens.—11(1e aqIlf, (10,1,dillirifin rusa

geográfica de Zelatnla perfectamenteharnind, •

--;Conocen VV. bien el

arena, más ó menos grande, Bankvan Zouteland,el Banco del Pais de la Sal.,»

Al escuchar al mayor, los dos amigos miraban-instintivamente el agua del rio, que l idiaba aquellarica tierra de Zelanda, acariciándola y ferlizándolapara -absorberla despees; el beso, el amor y lamuerte:

El mayor continuó así:«La más lenta de estas ago-

nías fue la de Neimerswaal:orgullosa con Su comercio ysus infinitas riquezas. prote-gida por altos muros y pro-vista de fuertes torres, creiasela reina del Escalda; pero noeran suficientes sus diques pa-ra preservarse del enemigo,porque el mar habla destruidootros mejores. Los caballosherrados de plata no bastaronpara salvar á la soberbia ciu-dad.

»En 1551, las aguas arreba-tan parle de un dique, pene-trando en la despeesinunda el Escalda todo un ba •

-rio; ere 1557 y en la focino delal 12 de enero estalla tal

tempestad, que la mayor par-le de las casas caen á tierra;

• en 1555 declarase un incen-dio; y en 1571 repítese la roun-

ddacion. hasta ()n'Anees ba-l•an acudido siempre los Es-tados provinciales en ansiliodo los habitantes de Neimers-waal; pero en hincos se les dijoque sus desgracias se repetíancon demasiada frecuencia yque salieran de sus apuros co-mo pudieran, En doce años secontaron seis inundaciones yun incendio.

»Sin embargo, en 1574 sevolvió á prestar ausilio, perodesde esta época fue desman-telada la ciudad diez veces

consecutivas. Desde 1574 á 1631, no existió másque- un dique, y la floreciente ciudad quedó redu-cida á un pueblo. En este último año abandona-ronle los habitantes para huir de los prisioneros de

guerra, marinos y soldadosque por Orden superior eranconducidos á las aguas inte-riores de Zelanda; y por Ul-timo en 1634 derriba ronselas casas que aún quedaban,se desempedraron las callesy se transportó todo el mate-rial para venderlo en públicasubasta. Este fue el fin deNeimerswal.

— ¡ Flesinga 1 esclamó depronto Dilleus.

En efecto, la ciudad estabaá la vista.

Bajo el fondo del cielo deun azul agrisado, cubierto denubes inmóviles y amenaza-doras como e/1 dia de tempo-ral, destacábanse sobre lasverdosas ondas del 1. 10 lasblancas y rojas velas de losbuques, los negros postes delas estacadas, los pardos mu-ros de la ciudad, la blancaarena de la playa, la flecha,de un campanario, le puntade 1111 faro, la silueta de unaiglesia y algunos tejados ro-jos, dominando todo esteconjunto una bóveda formadapor jigantescos olmos.

Criando se detuvo el buque,nuestros dos viajeros descen-dieron á una lancha, acom-

pañados por el mayor, abordaron á una gran esta-cada que servia de desembarcadero, treparon poruna resbaladiza escalera y penetraron en una som-bría bóveda al final de la cual les pidió sus pape-les un agente de policia.

—¡Tis claar! dijo el funcionario al ver que esta-ban ea regla los documentos; podeis pasar.

Al die siguiente escribía el poeta, reasumiendosus impresiones de viaje, de esta manera;

"Entrada en Flesinga; aspecto nuevo é inespera-do: á nuestra derecha se encuentra un muelle y uncanal 1»rdado de gigantescos árboles; al frente otrocanal semejante y á la-derecha una estatua de Nuy-

pais a denle van'amigo del dael..1 . •-

n . 11;111K , antiguo rnut'nr rielelereila de las islas neerlan-lit,i1.

--Sido le e01101 • 11111S porbeberle visitado de paso, 1»./1/-

ie,turi,11.

iiel'1111111'1.1111111‘111.1111113?

11111 • 11,1 gusto.t a i tylir 10010 r l Milpa y

11,111 . 1 .10le e011 la vista: 11111,-

I111 loS 1,1; amigos le mira- ,

bao ,-dleneiesainente. J . :Vd II /I ,.,2=.j,Z-

11,1110 de 111 .11'1111 111111,11 y -Frf1e11~--ri,l1i . i111, tipo erdadm•amen-te indita/ . (le 111111 seda -1.11 11 11 lir primera Vititill

u-- •

s :I 111 1,111' q Lir -11111,1`, van rol, 1111111111111 11

y hablaba lentamente --)1111' pel19,111 •111111. 1 5 10 111112 ha-

1,1,111l101,1111'; y cornea-n) asa:

—nNavegais hacia esa par-te del pais 111111, 11,1S romanosllamban, al mismo tiempoque Flandes, la Suira ries-apiadada; pero ya no Anclanbosques en Zelanda.

»Veo nueve islas en estemapa: en el año seiscientosse contaban catorce, si hemos de diír fe. á un mapaformado cuidadosamente noventa y dos años 1111Sde la llegada de San \Villebrord a ‘Valcheren, deaquel que convirtió á los zelandeses al cristia-nistno

»Todas estas islas no estaban protegidas contrael mar más que por sus dunas. El Walcheren yI3eveland del Norte, no eran sino pantanos, cuan

-do 00 abismos, pudiendo decirse lo mismo de I3eve-!and del sud, de la isla Philip's Lord, de la Dui-veland (isla de los pájaros), de la de Sclionwen ydel pais llamado de Neimerswaul.

»En 1663, se cuentan ya diez y ocho islas; la tier-

VISTA DE PARA.

,,Orizaral y algunos otros pueblos muy ricos, co-mo por ejemplo, Neimerswaal, se hundieron igual-mente entre las ondas. En este último era tangrande la riqueza que ponían herraduras de plata

ra gana sobre el mar, y se ve entre otras, al oeste deWalcheren, una pequeña isla sumergida ahora,llamada Zouteland, Vais de la sal. En dicho añotenia altas dunas v dos grandes pueblos: Schoon-velde, el campo he' máosó, y el Wals-Vlaander, la

escollera de los Flamencos, ambos desaparecieronbajo las aguas.

á los caballos. En todos los puntos de Zelanda seabren por un momento las puertas ir la agriculturay se pueden esplatar las salinas, pero de pronto loinvade todo el mar y desaparece lo que existía. LosWicligen, esos grandes bancos de arena, eran enotros tiempos un hermoso y floreciente pueblo.

:Md aqui la parte triste de la historia de esa pro-vincia: un-pueblo animoso, honrado, perseverante,industrioso y tenaz adquiere un espacio de terreno,le realza, le proteje con diques, le fertiliza y con-cluye por convertirle en una mina de oro; pero undio el mar ú el rio se agitan brutalmente, y todasaquellas riquezas quedan reducidas ir un banco de

COMBATE DE UN CALMAN Y UN JAGUAR.

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N.° 13. EL VIAJERO ILUSTRADO.. I3

ter bastante mala. En las fachadas de las casashasta en los muebles se halla muy marcarlo el gus-to rústico.

»Estamos lejos, muy lejos de Bruselas. Se en-cuentran algunas, pero muy pocas casas Pintadasde blanco; ef pardo, el gris y el ocre son los coloresque más dominan, parecen Irisles y pobres las pro-longarlas hileras de casas; la luz, la lluvia y el bar-ro dejan en ellas vestigios indelebles. Si brilla elsol, no le mireis, porque seguramente quedareisciegos. Los zelandeses parecen detestar el colorblanco, no sé si será por gusto ó por economia ymanifiestan grande aficion á los tintes muy vivos.

»Grandes tilos bordean lod muelles, dando som-bra á las casas con su verde follaje, á la vez que áuna parle de la calle y sus •dos aceras. Una de éstases inabordable para Ics-transeuntes, pues dividelas casas un enrejado. Ha-ce poco tiempo que hablaen las aceras un bancocorrido, donde se sentabanlas señoras para tomar elfresco por las noches, óver pasar á la gente du-rante el día. La otra aceraque es del dominio públicoestá embaldosada de ladri-llos.

»Hemos entrado, acosa-dos por el hambre, en elHotel del Comercio, perteneciente á Peters, y po-co despees de sentarnos á.la mesa nos sirvieron dosgrandes beefteaks que na-daban en una salsa par-dusca y grasienta, segui-dos de dos enormes vasosde cerveza; todo desapare-ció en un abrir y cerrarde ojos.

»Nuestro compañero noscontemplaba con placeradmirando nuestro buenapetito. Cuando termina-mos, seguímosle al salendestinado para tomar elcafé, donde estaban repre-sentadas todas las clasessociales. ;Qué pron to echa-mos de ver, que todo eranuevo, original é impre-visto, que estábamos á milleguas ele Bélgica; en otropueblo, en otra civiliza-cion! •

»Los hombres distin-guense por sus modalescorteses que contrastansingularmente con la ru-deza belga ; las 'mujeresparecen más confiadas, yse las respeta más que ennuestro pais.

El carácter espansivo,aunque rudo de los fla-mencos, no existe ya aqui;todos parecen muy obse-quiosos y de afable carác-ter, reconócese pronto lainfluencia dela educacion,de la instruccion y de ladisciplina.

Aqui no hay caprichos y si mucha reflexion; seríe, pero con gravedad, no como entre nosotros. Sehabla sobre todo de negocios y de dinero; y el tonoque se emplea es el de un pueblo que se cree supe-rior á los damas. A nosotros nos tienen por pedan-tes, y nos llaman veletas, término despreciativoque se da á los habladores, á los aturdidos y á lospródigos.

El sonido de su voz es más dulce órgutural, pro-pio del holandés del Norte y del Sud.

Al mostrarnos la estatua de Nuyter y la torre dela antigua iglesia Oucle Kerke, el mayor nos refi-rió la anécdota siguiente:

" El que más tarde llegó á vire-almirante de Ho-landa y de la Frisia Occidental, Nuyter, el atrevidomarino que debía hacer temblar á Francia, Sue-cia é Inglaterra, que osó remontar el Támesis, sem-brando la consternacion en .Lóndres, era todavíaun niño, cuando (lió una prueba de su sangre fria éintrepidez. Teniendo diez años, subió cierto díahasta la flecha de la iglesia de, Oack Ker • /ce, dondeacababan de hacer obras; alguno, por broma, quitóla escala, creyendo que el muchacho llamarla en suauxilio criando quisiera descender, pero no fuá así,despues do permanecer (ligan tiempo montado en

la flecha, con grande espanto cíe le multitud quedesde abajo observaba todos los movimientos delniño, éste bajó rompiendo á taconazds las pizarrasy agarrándose á los ganchos y clavos que servíanpara fijar aquéllas.

»Esta antigua iglesia ofrece algunas curiosidades:entre otras una columna con varias inscripcionesque indican la elevacion que alcanzó el agua cuan-do penetró en el monumento, en la época de lasmareas, durante la luna nueva y la llena.

»Si el viento sopla entónces del Oeste, el Escalday el mar invaden la ciudad: el S de Enero de 1(i82,elevóse el agua en la iglesia á sesenta centímetrosy á un metro quince centímetros el 15 de Enerode 1808.

. UNA TORRE DE LA PAGODA DF, VILNOUR.

»Se halla tambien en ella la tumba de Almanque en 6 de Abril cle 1572 libró á flesi riga cíe suguarnicion española:

»Esta ciudad es una de las tres principales deZelanda y la segunda que se levantó en armas pararecobrar su independencia.

»Era el sábado de pascua de dicho año; la Brielleacababa de ser tomado; por todas partes se dabanvivas al duque de Alba; mientras que un tal Juande Cuyck, señor de Herpt, llegaba á Flesinga y pre-dicaba á los ciudadanos, preparándoles á la resis-tencia.

»Los furrieles españoles, sin sospechar nada, des-embarcaron en la ciudad á fin de preparar el aloja-miento de Osorio Angulo, jefe del regimiento deSicilia, un buen regimiento cuyos individuos, sinohablaban el idioma del pais, se hacían comprendermuy bien con sus espadas. El ingeniero Pachecoiba con ellos, encargado de la construccion de lanueva ciudadela.

»El domingo fueron á la casa de la ciudad_ paraanunciar la llegada de las tropas cuando comenza-ra la próxima marea. Daban las doce; los furrielesespañoles insolentes por el hecho de hallarse enpais conquistado, se paseaban bulliciosamente, losciudadanos que saltan de la iglesia agrupáronse al

rededor de ellos y les anuncian D o que no queríanmás guarnicion extranjera,

«Intervino un magistrado y reprendió á los pai-sanos, pero no le 0.9elle11/111 . 011; los furrieles se enco-lerizan, se cruzan las palabras amenazadoras y porUltimo llegan á las manos. Alman recibe un golpede un español, y no teniendo armas corre á buscar.las. A los pocos momentos circula la voz de queAlman se prepara á resistir y todo el pueble le si-gue cn masa; media hora despees, las calles,. pla-zas y muelles están ocupados por 11111/ roullitud ar-mada que grita l luviosa: ¡fuera ta guarnicion, fuerala guarnicion!

,;Los recuerdos de la gran guerra del siglo diez yseis se conservan tan vivos en el e/11'11nel de los ze-

laudases, que hace treintacilios llevaban todavía ensus sombreros la media lu-na de plata y la divisa fran-cesa y calvinista Ende-

mes ..A despiqueriel

l 'd' elLgu(''I 'dI: la noche volve-mos al hotel partí cenar, ynos sorprende le l'aisló('de la retreta. Cuatro vigo-rosos tambores, cubierta lacabeza con un enorme gor-ro, avanzan tocando unruidoso redoble y delantevu 11/1 soldadite 111115 tecasin pinfano.

El /11ey111' Se 111 . 11,ide denosotros hasta el din si-guiente, .y poco despuéssalimos á dar tau paseo

Por rrl uncís sitios ve-mos vagar varias formasblancas; son las CV/edil:1,que salen todos los sába-dos por la F11/(1111' para abas-tecerse de provisiones ycorrer sus avenlaras , yvisten siempre 11/10Snes largos de ICia

Desde 11. 1 alto, ole la tirrre.de las iglesias salen unasvoces roncas, caseadas,plañideras y gangosas, di-ciendo á inlervalosvan de clocó das 01111/1 el,punto.)

<Se conli mara.)

MISCELÁNEA.

La Caccia de ilinsena dainteresantes plia-moressobre el alentad, ' del 1.°de.Diciembre contra el elflpe-

J'actor de Itusia, Con arre-glo á las disposicionesi1(1011/11/1/e1, el /l'el/ imperial

//Libia salido 11 media nochede le estacha) Sinflio-pol. El tren que conducíalos equipajes riel empera-dor, y que comprendía 14.wagottes y dos locomoto-ras, había partido media

hora antes.Por una feliz circunstancia, el tren imperial al-

calizó (11 tren de equipajes y lo adelantó i nedia ho-ra. En el tren de equipajes iban 50 personas. En elmomento en que este tren acababa de dejar la esta-clon de .Moscou, á unas dos verstas y media, SI: oyóele pronto una violente explosion. El wagon sufrióun fuerte sacudimiento y luego otro, de cuyas re-

sultas volcó. La locomotora delantera quedó sepa-rarla del tren, y la segunda locomotora descarriló,asi como tambien varios \vagones, quedando otrosatravesados en la vía. El cuarto evagon do equipa-

jes chi:, inedia vuelta completa, quedando las el1/11.0

ruedas en el aire. Por fortuna, las personas queiban en el tren 110 sufrieron más que el susto.

Las huellas dejadas por la explosion condujeronal juez de instruccion it la casa vecina, en la que

no había nadie. En el patio, y debajo cle nieve,había tendidos hilos que comunicaban con una ba-tería que se hallaba en una granja, desde la que sepodía observar fácilmente el paso de los trenes. Di-cha casa, segun las declaraciones tomadas, fuecomprada en el loes de setien)bre por un jóven quese hacía pasar por ciudadano de Samara. Los-veci-nos le vieron cavar en la cueva á pretexto do sacararena. El jóveá Labia construido un canal subter-

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EL VIAJERO ILUSTRADO.

De 1853 á 1870, año en que fue destronado Na-poleon, trascurrieron 17.años.

El príncipe Imperial tenia '17 años cuando murióea padre:

El príncipe Imperial tenia 17 heridasen su cuerpo.' Hay 17 letras en el nombre Le licutenceixt Carey.

rimen que comunicaba con un cuarto minado.La ruina tenia 22 tensas de longitud y tres de

profundidad.La morada del autor del atentado presentaba un

aspecto miserable. Los hilos estaban tendidos deba-jo de la alfombra. La batería misma estaba encerra-da en un cejan encarnado ordinario. Las ropas queallí se han encontrado parecen indicar que han sidovarias las personas que han trabajado en los prepa-rativos del atentado. Se hallaron tambien restos deuna cernida que debió haberse despachado pocosmomentos antes.

Parece que el mismo din del atentado, el Daily-

Nema recibió Uf] despacho de San Petersburgo, enque se lerda que en la noche del 27 de Noviembrehabía sido preso en jóven que llevaba un saco conmaterias explosivas en la estacion de Elisabethgrad,de la linea de Odessa á Moscou.

Flan llegado á nuestras manos los prospectos deLa 1 Insiraelon Española y Americana y de La

Moda Elegante Ilustrada para el año en que entra-rnos, juntos en una hoja ratly manuable y enlazadosbajo lino forma tan original como elegante. En vi-ñetas dorítdas y plateadas se representan los atribu-tos de arf111111, D11111iCaCi0rICS, cual si se quisiera mos-trar lo que mútuamente se apoyan y los elementosque 11•111 concurrirle á su grande reputacion.

Con gusto IlDrel lerlliUDOS esta ocasion para con-signar que realmente la una y la otra se han con-quistado en España puestos irreemplazables; La

flusdraeinn como enciclopedia artística y literaria,donde se reproducen de 11111 modo gráfico cuantoshechos importantes ocurren, en cualquier Orden decosas o en cualquier punto del globo; La Modacomo 1111X111Zir eficaz en las familias para que el be-llo secli1/1.1erle resolver el problema de vestir cons-tantemente con elegacia y economía, conferirle á laposicion respectiva, enseñando lodo lo necesario enel variado ramo de labores y corle de prendas.

Todo el inundo conoce las boyas, gruesos cuer-pos flotantes de madera ó de palastro, que sirvenpare iirire • il • los gansos tia canal, para indicar. „,al navegante la existencia de un banco, una rocaun arrecife que es precisa evitar.

Las boyas son excelentes señales de dio, y cuan-do el mar está en calina, pero cuando está tomen-

,11Salieree1111 birle las olas, y sobre todo de no-che, precisamente cuando serían más útiles.

Lni normainericanos acaban de encontrar elmedio de establecer verdaderos faros mi estas boyas.

La leen se trasforma en un vasto depósito, hechopalli,iro, vis el cual se acumula, hasta una pre-

sion de diez atmósferas, un gas especial muy eco-nómico, obtenido por la destilacion del aceite desquish, y de diversas materias grasas de desperdicio.Este gas arde en Ulla de faro ordiriario ysu 1111.111a resiste á todos los temporales. Se deja en-cendida noche y dia, lo cual es mas barato quePUM lene] , lin personal encargado de cuidarla.

EI gas se renueva cuando la provision está cercade iiiiidiars • , lo f ue ocurre ncarla cuatro Mí:SCSI)próximamente, y es siempre fácil de encontrar, enel Ultimo mes, un dia favorable para hacer la opera.cien th rellenar el depósilo.

Estas hoyas lurniriosas, combinadas en los filiasde niebla con las boyas silbantes, que están ya en-sayadas y funcionando en diferentes puertos, per-mitirán, en varios paises, viajar con tanta seguridaddo noche mane de día, lo mismo en el invierno queen el verano, lo que no carece de importancia.

Un DreeUrallr der l irle fue un día á confesarse encompañia de sea esposa.

Ln ulula- se confesó primero, y entre tanto el cu-ra so durmió. Ella, creyendo que con el ruido delórgano no halda podido oir su absolucion, se apartódel confesionario.

Entónces llega el marido; cree que el cura ronca,y le pregunta:

—¿Duerme V., padre?—No, no; decía V. que su marido os procurador

y que Y. y el pasante se aman hace dos años: siga,siga, que no pierdo ripio.

Es bastante curioso el siguiente caso ocurrido enla parrognial iglesia de Santa Cruz, de Valencia.Entre - otros debta verificarse un casamiento, parael cual estaban presentes los padrinos, parientes delos novios y convidados por los mismos; pero en elmemento en que iba ú ser unirla para siempre lafeliz pareja, se le ocurrió fl él una necesidad urgen-te que no admitia anejen; asilo manifestó á los pa-drinos y efectivamente abandonó la iglesia, prome-tiendo volver dentro de breves instantes, pero loque volvió fué la espalda, pues pasó una hora, dos y

tres, y no pareció, recibiendo con esto el consiguien-te disgusto la familia; los convidados y el vicario dele parroquia que vestido con los ornamentos sagra-dos, estaba dispuesto para la ceremonia, todo erancomentarios, miradas a la prierta, • recados y diligen-cias de los concurrentes, hasta que por fin, acordó-se volver pacíficamente á casa y esperar que el no-vio diese esplicaciones su conduela; pero esto noha podido verificarse porque hasta la hora presentenada se sabe del fugitivo.

En Brandeburgo ha tenido lugar un curioso in-'ciden te.

Terminaban las grandes maniobras del ejércitoaloman, cuando el teniente coronel Rosernberg, je-fe del regimiento Mimo 3 de húsares (húsares deZiethen), hizo una apuesta con el jefe de la undéci-ma brigada de infantería, mayor general Bogan vonWangentieim, sosteniendo que, á distancia de 600metros, 65 hombres de su cuerpo obtendrían mejo-res resultados que 50 tiradores elegidos del regi-miento fusileros de, Brandeburgo núm. 35, utilizan-do los primeros su nueva carabina y los segundos elfusil Mauser.

Aceptada la apuesta, se verificó en los pasadosdios esa prueba de tiro al blanco, presenciándola elcomandante general del tercer cuerpo de ejército,varios jefes de brigada y muchos oficiales de laguarniciono '

La infantería hizo 150 disparos y • los húsares 225,siendo Iris resultados los siguientes: 106 tiros bue-nos los fusileros y 107 los ginetes, de donde se de-duce que la infantería aprovechó el 70'7 por 100 desus municiones y los húsares el 47'5.

Aun cuando la ventaja quedó por los húsares,hay que observar que en los infantes sólo quedaron43 balas sin dar en blanco, mientras los gmetes noaprovecharon 118, pero de todos modos se demostróprácticamente que en la defensa de una posiciontambien pueden sostener un fuego terrible los sol-dados de, caballería, echando pié á tierra.

W. T. Bla4.well, fabricante de tabacos de Bur-ilara de la Carolina del Norte, es considerado comoel hombre que contribuye con la mayor suma dedinero 11 su gobierno, de entre todos los fabricantesdel mundo. Su cuota anual importa 500,000 duros.

—¿Dile estás tocando, Julia?—Un nocturno, y por cierto que no acabo de in-

terpretarlo á conciencia.—Pero, hija, es churro: ¡cómo ha de salir bien un

nocturno tocado á las diez de la mañana? Si quieresque resulte aceptable, cierra las persianas y encien-de el.quinqué.

No ha muchos Bias, y á orillas del Sena, iba átener lugar uno de esos lances que la sociedad juz-ga necesarios; un duelo; pero un duelo nó de esosque se resuelven con un 'fiero rasguño, ni que con-cluyen con un almuerzo, nó; un duelo á muerte.

Los testigos en su puesto, los adversarios pron-tos a la señal, la noche algo imponente y el silenciodigno de la noche, ponían la s-ituacion muy á pro-pt'isilo para el capítulo de las más terroríficas no-velas, y cuando nada faltaba, el ruido de un cuerpoque se cae y se sumerge ere el agua, llegó á oidosy al alma de uno de los adversarios, que diciendo:

—Aguárdenme. Vds,se tiró al rio.No pasaron cinco minutos si/1 que volviera á apa-

recer; mas no solo: traía en los brazos á una mujerbastante joven, .desconocida y sin sentido, que lo-gró salvar y.volver á esta vida, que tanto empellotuvo en abandonar.

Y cuando hubo cumplido tan -generosamente esamisia/1, volviendo a su puesto y dirigiéndose al ad-ve •sario, le dijo:

--Caballero, estoy á sus Ordenes de V.; podemosempezar,

—Con un hombre como V., no se puede uno ba-tir; déme,V. un abrazo, seremos amigos,—le 'Contes-tó aquel; y usi, tan noblemente, concluyó ese lance.

El núm.. 17. Un corresponsal del periódico L'Union ~elle, de Los Angeles, le escribe, refi-riéndose á las coincidencias del m'in-n . o-17, que hatenido conexion con la familia de Napoleon III, losiguiente:

Hay 17 letras en el nombre Napoleon Bonaparte.Los. guarismos del año 1808, año en que nacióNapoleon sumados dan el núm. 17.

La ex-emperatriz Eugenia nació en 1826; su-ménse los guarismos y se tendrá el núm. 17: la fe-cha del matrimonio de Napoleon con Eugenio es1853, sumados los guarismos, dan 17.

Se han verificado con éxito feliz en San Sebas-tian, por la. sociedad de salvamentos marítimos,los ensayos dd la flecha Delvigne, que lanzada porun mosquete, recorrió una distancia de 45 grado«(le elevacion. Con los resultados, pueden darse ca-si pór salvadas las vidas de los tripulantes de losbarcos que embarranquen en aquella playa. Si lasembareacionesmáufragas quedasen á mayor distan-cia de la costa que la que alcanzan las flechas, unbote salvavidas que se constituye en Motrico, reci-birá á su bordo á los tripulantes. Este bote, pro-visto de cajas de aire y válvulas de desagne, reunelas mejores condiciones de seguridad..

Cada aldea está gobernada por oficiales elegiddXanualmente. El clima y el paisaje son de una belleklza sin igual. Santa Fé, la capital, se halla situada: Id'4'7.000 pies sobre el nivel del mar, casi á la misrlaltura que Méjico.

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1( f,114„por escaleras colocadas en el exterior. La luz entra

por una abertura del diámetro de un tubo de chi-menea que á través de las paredes penetra en los 1.r!cuartos exteriores. Cada uno de estos edificios,cuyo interior está pintado de blanco, puede conie-ner sobre cuatrocientas personas. '04,

Los indios de Nuevo Méjico reciben muy hospita-,k,lariamente á los extranjeros; pero ningun viajero,M/ 8 "14lau rI

cllehiple rnaentraear teajamel centro del edificio donde /1,11»,/A %en la que Siempre se miman tient \ 4,1N:/`

el fuego sagrado de Moctezuma y se practican lo' ':etantiguos ritos de la religiou d.e los aztecas.

Por la estacion de Cannon-Street, de Lóndres pe-san 632 trenes al día; 130 en tres horas de la ma-ñana, 130 en tres horas de la tarde, y• los demásdistribuidos en el tiempo restante. 40.000 viajerosacuden ú vienen diariamente á esta estacion. Unsistema de señales está colocarlo dentro de una jau-la de cristal á la entrada de le estacion y contiene67 palancas maniobra de agujas, disco y guias.

Dice La Voz. riel Pirineo que es objeto de mil co-mentarios el hallazgo en aquella comarca de losdescendientes de aquel rey de Madagascar, que, se-gun dicen, dejó depositadas en el Banco de Lóndresla friolera de seis millones de libras esterlinas. Poi'lo que se cuenta, el referido rey de Madagascar re-sultaría ser hijo del pueblo de Asioll, provincia deGerona, y se llamaba Francisco Bonet y Vidal, ha-biéndose encontrado su partida de bautismo y otrosdocumentos que confirman el haberse ausentadodel país durante su juventud con objeto de embar-carse para lejanas tierras.

Uno de sus más directos descendientes en la ac-tualidad está sirviendo COMO dependiente de uncasino.

Un periódico americano ha publicado una intere-sarle descripcion de la comarca menos conocida dela America del Norte, el Nuevo Méjico, donde seencuentran indios pertenecientes á la antigua sa-cio]) de los aztecas. Estos indios, cuyo número secalcula en 7.000, ocupan catorce aldeas. Son paci-ficas y hospitalarios, principalmente en los distritosde Alburquerque y Bernalillo, donde residen lasmás ricas y antiguas familias españolas.

Una de las más curiosas aldeas es la de Taos, enla que casi todos los habitantes viven en dos gran-des edilicios de sillería, con cinco pisos, y de formapiramidal; de modo que cada piso es más pequeñoque el inferior. Estos edilicios contienen un núme-ro considerable de aposentos; se entra en cada piso

El nuevo procedimiento de locoinocion subterrá-nea, por el cual se ha concedido recientemente pri-vilegio de invencion. evitará segun vemos en laprensa barcelonesa, el empleo de toda fuerza mo-triz de vapor ó animal adherida á los carruajes.Consiste el procedimiento en un cajon de hierro co-locado y empotrado dentro de la tierra en toda laextension del camino que se trate de recorrer. Latapa de este cajon se abre por medio de un dispara-do • motor al qne va unido un cable sin fin ó arro-llado segun fuere el trayecto de la linea. El mismodisparador lleva un freno que sirve para sujetar elcable ó cuerda á la locomocion exterior o sea á loscoches y vehículos. La fuerza que pone en movi-miento el cable-, que á su vez impulsa á los coches,se halla fija al extrema de la linea, pudiendo darlauna máquina de vapor ó algun motor hidráulico-

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N." '13. EL VIAJERO ILUSTRADO.15

Los indios de Nuevo-Méjico son ciudadanos ame-ricanos: pero prefieren estar exentos de las contri-buciones, ni quieren vetar ni ejercer empleo algu-no. Encuéntrense en el territorio Un gran númerode ruinas de monumentos aztecas, que ya contabaisuna gran antigaedad cuando Hernan-Córtés se apo-deró de Méjico.

Estos monumentos se hallan en el Colorado y enla parte Noroeste de Arizona.

Consisten en montones de piedras de color ber-mejo cubiertas de dibujos groseramente grabados yrepresentando todas las especies de animales: bi-sontes, ciervos, lobos, etc. Desgraciadamente noexisten en el pais ní leyendas, ni narraciones quepuedan indicar el origen de estas esculturas.

Un ingeniero inglés, el señor Cowper, ha encon-trado el medio de reproducir la escritura á grandesdistancias por medro de su telégrafo escribiente.Con este telégrafo se trasmite el despacho al mis-mo tiempo que se escribe.

El principio del telégrafo de Cowper es el delpantógrafo. Se sabe que la posiciou de un plintosobre una curva plana está determinada por un sis-tema de coordenadas. De la misma manera, en elpresente caso, la punta del estilo ó punzan que for-ma la letra, esté determinada por su distancia ádos líneas fijas que forman los dos bordes adyacen-tes de la hoja del papel. El telégrafo trasmite estasdistancias y las recombina en la estacion de desti-no de modo que un segundo estilo adquiere un mo-vimiento que reproduce la escritura original.

El señor Cowper emplea dos alambres conducto-res. Además cada aparato, tanto el trasmisor caldoel receptor, son dobles. Uno de los sistemas tras-mite las componentes verticales y el otro sistemalas laterales. A la llegada ambas se trasforman poruna disposicion pantográfica.

Los dos papeles, el de la estaciou de envio sobreel cual se escribe, y el dc la estacion de destino enel cual se estampa el despacho, se mueven lateraly automáticamente. Se obtiene un autógrafo exac-to y no una escritura convencional ó un facsimiledel despacho.

Las últimas noticias que los periódicos publicanrespecto de la Abisinia, dicen que el obispo Mas-saia, vicari.o apostólico en el pais de Gales, ha caldoprisionero del rey de Abisinia, cerca de Debratavar.

Monseñor Nine, en nombre del Vaticano, ha ro-gado calurosamente al Gobierno francés, y por suintermedio á los demás Gobiernos que usen de todasu influencia para obtener la libertad de monseñorMassaia.

El Papa empleará tambien otros medios, envian-do delegados á Abisinia.

Una señora inglesa ha sido privada de la tutelade su hija, de edad de ocho años, por causa delateisnio.-Su marido, del cual vive separada, ha pe-dido á los tribunales que declaren que una personaatea, aunque sea por otra parte la más honrada delinundo, no es digna. de ejercer la tutela de sus hi-jos. Se ha dacio la rezan al esposo, y la madre ateaha sido excluida de la tutela.

El hecho no es nuevo en Inglaterra. Sentenciassemejantes fueron hace tiempo pronunciadas con-tra el poeta Shell y el filósofo Mill.

El conflicto entre Egipto y la Abisinia presentanuevamente aspecto alarmante. La mision confiadapor el khedive á Gordon-Bajá ha fracasado. El reyJuan de Abisinia insiste más tenazmente que nuncaen que se le ceda á Massonah fr otro puerto equi-valente sobre el mar Rojo, y una gran cantidad en(linero. Amenaza, si sus exigencias no son atendi-das, con retener en rehenes á la inision Gordon yentrar en seguida en campaña.

GALvANr.—La ciudad de Bolonia ha inauguradoel monumento elevado á Galvani, uno de sus máspreclaros hijos. El ilustre fisiólogo está representa-do en él momento en que descubre la electricidadanimal tocando con dos metales diferentes los ner-vios lumbares de una rana.

puertas. A fin de poder pasearse á su gusto en elparque que poseía habla mandado abrir un subter-ráneo de seis kilómetros para no tener que trope-zar con los obreros que trabajaban ni ser visto porellos. También habla hecho abrir en medio de suspropiedades un lago de diez kilómetros de largo ytres de ancho.

A pesar de la reclusion á que se había condena-do, tomaba gran interés en los asuntos públicos.Cuando se proclamó la separacion de la Iglesia yel Estado en Irlanda, die una suma de 750,000 fran-cos para socor'r'o de los curas que se quedaron sinasignacion.

No ha dejado hijos, ha muerto soltero, y le here-da un sobrino segundo, hijo de un primo, porquesus hermanos tambien murieron sin haberse casado.

EL monomaniaco tenia una fortuna de cuarentamillones de francos.

Es curiosa la descripcion de los jardines geográ-ficos inventados por los alemanes, habiéndose inau-gurado uno de esta clase en Paris, cuyo coste as-ciende á mas de un millon y medio de francos.

En él se ha trazado un mapa de la tierra en esca-la de 1 á 500,000, apareciendo en grandes propor-cioneslos países principales de Europa: con objetode hacer más eficaz y palpable la nueva enseñanza,la arena representa la superficie de la tierra, lasrocas, las cordilleras, el verde césped, las aguas; lasestaquillas lucen los colores nacionales de cadapueblo; los alambres semejan las vias férreas ytelegráficas, y todo está dispuesto de manera que losniños puedan instruirse en la Geografía mientrasse pasean.

Dicen los diarios de Metz que'en dicha ciudadexiste una asociados] .ornitológica, ó mejor dicho,ornitófila, fundada hace dos años con el nombre deFauna, y que cada invierno, al acercarse los gran-des frior, apela á la caridad pública en favor de lasaves.

Varios cepillos colocados por la sociedad en loscafés y otros sitios públicos, recogen los donativosque sirven para comprar granos, que luego se es-parcen por los glásis y paseos de la ciudad.

Las aplicaciones de la electricidad parece queno tienen límite, y los descubrimientos á que clanlugar aumentan diariamente. Sabias experienciashechas por Mr. Planté han inducido á la aplica-don de la electricidad para el grabado sobre el vi-drio ó el cristal. Para ello se cubre la lámina de vi-drio con una disolucion muy concentrada de nitratode potasa, por la simple version del liquido sobrela lámina colocada horizontalmente, y. en casoque ésta sea curva, se hace la disolucion más espe-sa por medio de una sustancia gomosa que facilitela adherencia al vidrio. Así dispuesto éste, se unetino de los reóforos, de platino, de una batería de50 ó 60 elementos, al cristal, sumergiéndolo en lacapa flúida que lo recubre, y de modo que esté encontacto con los bordes de aquel en la mayor ex-tensiltn posible: el otro reóforo se recubre por unestuche aislador, dejando tan sólo al descubiertola extremidad del mismo, que tambien es de plati-no, y con él se va recorriendo el cristal en las di-recciones que convenga para el grabado que sedesee fijar en él. Un hacecillo luminoso se produceen el camino seguirlo por esta punta de platino, ycualquiera que sea la rapidez con que se dibuje óescriba, los trazos hechos quedan claramente gra-bados en el cristal: si se escribe lentamente estosaparecen muy marcados y profundos, y por el con-trario tenues y superficiales si se efectúa el traza-do con rapidez. El ancho del grabado depende delgrueso del hilo del platino. Es indiferente emplearuno ó otro reóforo para el dibujo, pero si se usa elnegativo no se requiere una corriente eléctrica tanintensa corno para el positivo.

LÁMPARA PARA VELADAS QUE INDICA LA 11013A. —ES-

ta lámpara consiste en un sistema ingenioso quepermite dar la hora por medio de la combustion delaceite. El mecanismo es el siguiente: por encimadel receptáculo de aceite estáis adoptados dos tu-bos verticales de cristal. El tubo de la izquierdacontiene el aceite y está provisto de graduacionesque representan las horas; el tubo de la derecha setermina por la mecha embebida de aceite que pro-duce la luz por su combustion.

El aparato ha sida construido por el inventorM. Henry Belin, de tal manera que es necesariouna hora para Consumir la cantidad de aCeite con-tenida entre dos graduaciones. Un reflector, dis-puesto por debajo de la llama, proye'cla rayo lumi-noso á través del tubo graduado. Durante la noche

se puede ver distintamente á qué altura está si-tuado el aceite del tubo graduador y leer la horacorrespondiente.

Segun-datos de la Direccion de aduanas, el re-sinnen de las cantidades y valores de los principa-les articulos exportados por las aduanas de la Pe-nínsula é islas Baleares durante setiembre Ultimo,arroja 42.307.603 pesetas (le valores, G.:156.004 másque en setiembre de 1878, habiendo habido aumen-to en la exportador) de conservas alimenticias,corcho no clasificado, esparto en rama y obrado,anis, cominos, almendras, avellanas, frutas secas yverdes no clasificadas, alpiste, avena, cebada, lia-bas, habichuelas, cobre v plomo en barras, plan-chas, etc., calamina, otro's minerales, papel, rega-liz, sal, seda en reina y vinos de todas clases.

De vino se exportaron 32 013,1)13 HIPOS, valora-rlos en 13.738,132 pesetas, á saber: 19.900,234 litrosá Francia, 1.504,632 ir Inglaterra, 3.459,423 al res-to de Europa, 2.842,411 á le América española,4.705,51)7 á la extranjera, 44,710 al Asia y Ocea-nía. El total de litros se descompone de este modo:29.1579,157 valorados en 8.903,748 pesetas de vinocon un; 807,203 en 1.734,4015 de Jerez; 2.060,053 en1.734,406 de Jerez; 2.000,053 en 3.000 , 978 de gene-roso. Sobre setiembre de 1878 hubo, pues, un au-mento en el vino comun de 9.092,80:1 en cantidades

2 ,727,542 en valores; en el de. Jerez 111.151)8 yy

227.210 respectivamente, y en el generoso 1.120,848y 1.081,271.

El acei le comen exportado fué kilógraums 057.780,valorados en 862.002 pesetas.

Son de interés los siguientes pormenores que conmotivo de la muerte de la célebre cazadora de 1,,ing-Eddy, Lucía Lobdell, publica un periódico amei:icano:

° Esta mujer singular se casó á la edad de 17 añoscon un marinero del Valle de Dell/MUT; al-mudo-/lada al año por su marido, dejó las vestiduraspropias de su sexo, Ildep[,:i el traje de hombre y SPdedicó á la vida de los cazadores de las selva;, ite-rantb ocho años vivió errante en los bosques selita-rios, construyendo, para albergarse, rústicas eahn-fias. Veíasela de tarde en tarde en 10,-: lugares ha-bitados á donde acudia para proporcionase muni-ciones y vender la caza y las pieles. Enferma en1860 se retiró á Belhany, en Pensil venia, y escribióun interesante libro, en el cual rehuía sus C/ICCrinSé indica el número de gamos, osos, partieras, galossilvestres y zorros muertos por ella.

Durante su. eshincia nu Bethany, una jóven delpueblo SO enamoró locamente (le la cazadora, quevestia siempre de hombre, y que no tuvo inconve-niente en pedir su ruano. Descubierto el sexo doLucía tuvo que huir durante la noche para sustraer-se á las venganzas proyectadas por los parientes dela joven engañada.

Volvió á su vida errante hasta que en 1877 pudocomprar una buena casa de campo, á donde se reti-ró y en donde despees de haber estado dedicada átrabajos agricolas, acaba de fallecer."

En Alemania se recomienda el siso del cloruro depotasio para aumentar el crecimiento de las lanas.Un quimico aleasen observando le existencia de es-ta sustancia en las secreciones de los laníferos, hizoexperimentos pata averiguar si el usode este mate-rial aumentarte el crecimiento de lana. El resultadoha demostrado plenamente que el uso de cloruro de,potasio (una parte del cloruro con nueve partes (lesal) aumenta la produccion de lana y mejora la sa-lud general de los animales.

El poeta Daurat se casó muy viejo con una niña.Díjole un día el rey Carlos IX:—Tu casamiento es absurdo, está fuera de re-

gla...—Señor, ha sido una licencia poética,—replicó

Daurat.

El servicio sanitario en Nueva-York tiene una or-ganizacion muy particular. Todos los veranos du-rante los calores se divide la ciudad en 50 distritos,en cada uno de los cuales hay médicos encargadosde visitar todas las habitaciones, de dar consejoshigiénicos de examinar á los niños y de presentardespués al Comité sanitario un informe sobre la sa-lubridad general, indicando las medidas que debenadoptarse.

Estas visitas duran' cinco semanas y son remu-neradas por el municipio con la cantidad de 500francos á cada médico.

Ademas de esto, dos especialistas vis itan los con-ductos que atraviesan el agua y el gas, y la venti-lacion.„

Ha muerto en Lóndres, á donde no habla ido másque tres veces en treinta años, el duque de Paraban,cuyas originalidades habían contribuido á su cele-bridad tanto como sus riquezas.

to, Habitaba en sus estados de Welbeck-Abbey (con-dado de Nottingham). Padecia de una enfermedadcutánea, y no queria recibir á nadie. Los que teniannecesidad de hablar con él lo hacían á través de las

Page 16: Viajero Ilustrado

il MOLINOS MONTADOS CON SU MECANISMO SOBRE COLUMNA-TORRE DE FUNDICION, ELEGANTES Y SOLIDAS

Movidos por maquina de vapor semi-fija con caldera tubular de las llamadas A REFOUR DE FLAMNE, fogon amovible, sistema el

mas económico corno consumo de combustible pudiendo quemar carbon, leña, turba, cok, etc.mision y todo queda

lconcluido , el ' molino

Estalárnina representa MOLINO DE CUATRO PARES DE MUELASpuede funcionar imme-

Movido por una máquina de vapor horizontal semi-fija, de llama invertida.uno de los la [JOS 'mismo- tliatainenle; una , hora

,d ,„ do ,,, ,1„1„,,,,„„ de Las muelas de calidad extra-superior, proceden de las mejores canteras de lo. Ferie-sons-Joue.rre. Etrabajo.

¡Ilesos y mas satisfado- basta para ejecutar este

:poli/maque la casa II er-Las muelas de calidadmann-Lachapelle de Pa- extra-superiores, salenrus construye para la

molienda de eereales.— de las mejores canteras

.. —.. de la lierté-sous-JouarredleprilSenla cuatro paresy pueden ser prepararlas

pares de m uelas puede4

- ~.5.,,..,„tri,

moler trigos duros o tri-

de novelas al Romero deconforme se pida ,para

;LnnentasSe á vol Colad. wor.

gol tiernos.sil, parar el trabajo y Sin "-

Iiingilllgenero ile ilicle.E- f _..tiene la ventaja de ser

La torre de fundicion

lneaniesas molinos sobraIiii ó Sea saidlso de esto,

.-4,1;t,;.'•,-;,-- insensible tanto á la hu-

qUe ti Valida Una re- ..1„,,,,..,.,,-)

W>1.,'-li--iiú la sequedad, lo cual en los

calcinada dd funilicion piedad como al calor y ále

pulacionuniversal.—Las paises calientes sobre to-Ventajas glie estas mole - II do, dislocan tan fila-Mis o'recen SOL« 1.10S mnte los armazones delos deiliaS San las si- madera aun los mejorgaleotes: Solidez á todaprueba platea el peso de

,9--,,._•-...

construidos. — Estos In-convenientes no tienenla Columna lipoyalidose IllffiK0111",ninguna influencia sobre

cii el sus10 le dela] filena

o 11» ' nuestra torre de fundi-d, asiento que el entino ...:,‘.~.- _ eion ni sobre su meca-I liinclointr sin n e- nismo.

: 111~1 zEl mecanisine conser-

ri,idad de armadura, ----inampostcria ni visi l lode jiertiOs. ../:"77,,,rry•

mente sus puntos fijos

/va Cambien indefinida-

La torre llega COri sil .niccaniSill0 COMpletainClite montada, se coloca en el sitis que debe ocupar ; se y funciona siempre con la mas grande regularidad.

Estos molinos pueden funcionar por medio de fuerza hidraúlica 15 per maquinaarregla la 11.11101a dem/ice/e en el entablamento y la muela corriente sobre elarbol: se las cutre el cerco. se coloca la tolva sobre su cuadro se adapta la de vapor y fuerza hidraulica combinadas d por maquina de vapor solamente.II olea motriz sobre el árbol horizontal , so coloca la correa cle. traes- • 1 Enmo franco de un folleto con todos los detalles necesarios.) -

INSTALACIONES . ESPECIALES DE MOLINOS DE VAPOR'PARA MOLER CEREALES

Sistema J. HERMANN-LACHAPELLE, Ingeniero, 144, Faubourg-Poissonn iére , PARIS

EXPOSICION UNIVERSAL 1878 - MEDALLA DE ORO4 Diplomase de Honor, Medalla de oro y gran Medalla de oro en Lyon, Moseou, Bruselas, 1872, 1873, 1875,

Medalla de progreso en Viena 1873

In-DIGESTIVO

CHASSAINGCON LA PEPSINA Y CON LA DIÁSTASIS

La Pepsina y la Diaslasis son los dos zwentes naturales éindispensables de la Digeslion. ttl Vino de Chassaing haobtenido, en 1861, un informe de los e n es favorables de laAcademia de Medicina de Paris. Desde aquella época se hagranjeado un lugar de los mas hoporlantes en la Terapéutica,y es prescrito universalmente contra las

DIGESTIONES PENOSAS IS INCOMPLETASDOLORES DE ESTÓMAGO, DISPEPSIAS, GASTRALGIAS,

CONVALECENCIAS LENTAS, VÓMITOS,DIARREA, PÉRDIDA DEL APETITO, DE LAS FUERZAS, ETC.

buen callo ha hecho nacernumerosas .lotilaciones y falsílicaelo-nes.— Exigir la firma In el Mulo yel collar gua sello 111 camilla.

Paris, 6, Avenue Victoria, y en las principales Pharmacias.

1711allos y Recompensas en las ExposicionesLyon 1872, Paris 1873, Paris 1878

ARTirp,

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VINO

1(1

N .° 13.EL VIAJERO ILUSTRADO.

neta ae dualialCOMISION, CONSIGNACION Y TRÁNSITOS.

Transportes generales maritimos yterrestres, de domicilio á domicilio, encombinacion con todos los ferrocarrilesnacionales y extranjeros.

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Page 17: Viajero Ilustrado

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