para mochileros

primera edición/noviembre 2010

De alguna manera esta revista llegó a tus

manos, pues por algún motivo alguien se

tomó el tiempo y unas cuantas tazas de

café para mostrar por puro gusto y egosen-

trismo una parte de sus pasiones... que

cual? la vaganciaaa!!!

Y esque lo de mochilera lo llevo en el

corazón, en el corazón porque nunca lo he

hecho, cosa que no me limita para dedicar

el primer numero de “vivac” a dos de mis

destinos preferidos: el hermoso desierto de

Atacáma en Chile y por supuesto mi igual-

mente bello país El Salvador.

Con esta revista pretendo (si es que trasiende

del primer número) contagiarte de deseos por

conocer, correr, nadar, acampar, volar, surfear,

comer, en tanto lugar sea posible dentro de

nuestro querido glovito terraqueo y fuera de el

si es posible. Pues en estas cuantas paginas lo

unico que nos limíta es el capital :S...

En fín.. gozemosla miestras dura y no hablo de

la revista, sinó de la vida, pues esta revista está

dedicada a las personas que saben disfrutar cada

momento de ella, ya sea en tu casa, en tu trabajo,

en el parque, en el baño o mejor aún en uno de

nuestros destinos, de los cuales mostraré lo nece-

sario para poder disfrutar mas de ellos, dandote una

guía, guía para aquellos con corazón aventurero y

bolsillo pequeño, pues el dinero nunca alcanza para

llenar las ancias del mochilero. Te mostraré una guía

de lugares económicos, en pocas palabras lo “bueno,

bonito y barato” que necesitas saber antes de

visitar nuestros destinos, te mostraré además

articulos que te interesarán, bueno, o por lo

menos te entetendrán como es el caso de

nuestro artículo de esta primera edición en

el cual te mostramos los tipos de mochileros

que podes encontrarte en este camino de la

buena vida y los placeres de la vagancia.

En fín, con mucho gusto y empeño ha sido

creada esta revista, la cual espero pueda

seguir creciendo mediante tus aportes, ya

que nadie más que vos sabe mejor lo que

un mochilero necesita saber antes, durante

y despues de cada aventura, mandanos in-

formación sobre tus lugares favoritos, fotos,

consejos, anecdotas; y así hagamos de

“vivac” nuestra comunidad de mochileros.

Para finalizar.... o mejor dicho para co-

menzar les doy la bienvenida a este bello

mundo de bolsillos vacíos, malos olores,

muchos mosquitos, comidas extrañas,

malos hostales, duchas frías, equipajes

perdidos, ampollas, zapatos rotos, en

fín... de muchas alegrías.

Atte. Claudia Chita

contenido

bienvenido(a)

sin rastas no hay paraíso

atacama

el salvador

Chile. El decierto más árido del mundo, paisajes surreales.

El mochilero, el estereotípo, que clase de mochilero sos?

Un pequeño país, donde el contacto con la natu-raleza y las emociones son imperdibles.

Él es diferente, él es genuino. Su marca de

identidad es que tiene ‘rastas’ o aspira a ha-

cérselas o asegura que en algún momento

de su vida las tuvo. Pero no todo son rastas,

mochila y frases típicas. Hay otros detalles

que pueden ayudar a identificar al mochilero

como las pulseras de macramé, los panta-

lones de colores y alguna prenda adquirida

en el mercado local del país de turno, es-

pecialmente hecha para turistas, por mucho

que queramos pensar que es ropa realizada

por ellos y para ellos y que colaboramos con

su economía local disfrazándonos como au-

ténticos payasos. Estas características dan

la idea equivocada de que somos todos

iguales y no es así. Aquí tienes una lista de

los subgrupos dentro del gran grupo:

- El ‘hippie’: Este tipo se presenta

como hippie y trata de comportarse como

un hippie hablando del amor, de la paz,

de la marihuana y sus múltiples virtudes.

Después de tanta tolerancia y buen rollo

te sorprende con un discurso en el que

muestra su odio hacia al resto de mor-

tales que no entiende sus argumentos y

acepta vivir dentro del sistema. Suele to-

‘hippie’ y del ‘buena onda’, sólo que termina cabreando a

todo el que se acerca. Viaja libre, sin responsabilidades y,

por supuesto, sin dinero. Al principio me preguntaba intriga-

da cómo sobrevivía este subgrupo. Huye si te encuentras con

uno porque el secreto es simple: viven de los demás.

- El ‘lonely-planetero’: No se mueve sin su biblia: la

guía de viajes. Hotel, buses, agencias... Todo tiene que ser

una recomendación del libro sagrado. No suele mezclarse con

la gente local y vive en un constante estado de pánico: si lees la

Lonely Planet entenderás de que hablo. La guía ha convertido a

casi todos los latinoamericanos en timadores, ladrones o asesi-

nos; en cualquier lugar acecha el peligro. El ‘lonely-planetero’

viaja acojonado y nunca, jamás, bajo ningún concepto, se sale

de la ruta marcada por la guía. Predecible y cobarde, pero una

fuente de información adicional para cualquier viajero de otra cat-

egoría.

- El ‘energético’: Es aquel que asegura sin pestañear que lleva

un mes parado en un lugar porque las energías fueron propicias.

Conoce a gente interesante cuando la energía es positiva y chus-

ma cuando se vuelve negativa. Su filosofía suele basarse en la im-

posición del bolsillo: viaja sin un céntimo y espera que las energías

lo lleven de un lugar para otro.

- El ‘gigolo’: Viaja para ser el terror de las ‘nenas’. Su objetivo es

colarse entre tantas faldas como países. Cansa su discurso repetitivo

sobre sí mismo, se considera un trotamundos seductor, y su invariable

técnica de ataque. Ninguna mujer está a salvo si el ‘gigoló’ está cerca.

cargado con la mochila pateándose la ciu-

dad entera buscando un lugar para dormir

que le permita ahorrarse diez céntimos.

- El ‘deprimido’: Esta categoría está

muy unida a la anterior. No tiene mucho

dinero pero en vez de ser un ‘rata’ y de-

jar en paz al resto del personal, se pasa

todo el día quejándose y llorando por

lo carísimo que es este continente. El

deprimido debería haber empezado el

viaje por Canadá o EEUU.

- El ‘buena onda’: Al principio,

contagia con su buen humor y su

alegría desmedida. Después, puede

llegar a cargar. Da gracias constan-

temente por la posibilidad de estar

viajando y es capaz de enfadarse si

observa a alguien serio a su alred-

edor. Mucho cuidado con este tipo

de mochilero que puede aparecer,

sin avisar, en cualquier categoría

de esta lista. ¡No todo va a ser

hablar, llorar o ahorrar!

- El ‘aprovechado’: En to-

dos los lugares tiene que haber-

los. Aspira a ser una mezcla del

car algún instrumento y, si no tienes la mala

suerte de que esté hospedado en tu hotel,

hasta te alegras de conocer a un músico

principiante.

- El ‘artesano’: Cuando el dinero

empieza a menguar en la cuenta del viaje

siempre hay una opción: hacer artesanías

de macramé. Este tipo absorbe las técni-

cas de los verdaderos artesanos y los de-

jan ‘compuestos y sin novia’. Forma parte

de la nueva y abundante competencia para

los trabajadores locales. La mayoría intenta

aprender también algo de malabares y en-

caja perfectamente en la primera categoría:

el hippie.

- El ‘rata’: Malos cálculos económicos

antes de iniciar el viaje han generado un

subgrupo difícil. Éste debió pensar que en

América Latina era todo gratis o que acá se

podía vivir con un dolar al día. Suele mov-

erse en grupos grandes, se cuela en los

parques nacionales, alquila un coche con

otros siete ‘ratas’ y siempre cocina en el

hostal o albergue, depende de lo que sea

más barato. También se le ha visto caminan-

do en la oscuridad de la noche, lloviendo y

Sin ‘rastas’ no hay paraíso

Atacama

El desierto de Atacama es el

desierto más árido de todo el

planeta, y ocupa unos 105.000

km² de superficie. Este desierto se

extiende por el norte de Chile, entre

los ríos Loa y Copiapó, en la Región de

Antofagasta y el norte de la Región de Atac-

ama. El desierto de Atacama está enmarcado

por la cordillera de los Andes y la costa.

Estar en el desierto de Atacama es estar en otro

planeta, sus paisajes surreales, con la mezcla del

desierto, la cordillera de los Andes, volcánes, gaisers

de tatio, el salar de Atacama, el valle de la luna y una

visita a San Pedro de Atacama es algo imperdible para todo

buen mochilero.

Empezando desde Antofagasta hacia Calama, la ciudad más

cercana a san Pedro de Atacama, en donde por unos pocos

dolares te llevarán a San Pedro, ojo si nunca has estado en

altura ya que podrías sufrir del mal de altura y con ello tu

viaje quedaría reducido a unos cuantos lugares visitables de

esta pequeña pero desértica ciudad. Te recomiendo que te

alojes uno o más días en Calama a fin de aclimatarte y no

sufrir desaventuras en tu viaje.

Siguiendo nuestra aventura, llegamos al valle de la luna,

prácticamente el primer lugar antes de llegar a san Pe-

dro. San Pedro de Atacama es un pequeño poblado

ubicado en uno de los oasis que se encuentran en

el altiplano de la II Región de Chile. En esta zona

geográfica se encuentran algunas de las más altas

cumbres de la Cordillera de los Andes. Su gran im-

portancia actual, se debe a que es considerada la

capital arqueológica de Chile y a lo extremo de

su entorno geográfico, privilegiado en cuanto

a la hermosura de sus paisajes y al azul de sus

cielos siempre despejados.

Existen muchos tours bastante económicos

a los cuales se puede acceder, recuerda que

es una ciudad desértica, pero hace frio por las

noches y de día las temperaturas oscilan entre

los 20 a 25 grados Celsius.

Además de su habitual belleza el desierto de Ata-

cama cuenta en este momento con el fenómeno

del “Desierto Florido” que cada cierto tiempo se

da en el norte de Chile y en el cual destacan her-

mosas flores como las patas de guanaco, suspiros

y añañucas, que tiñen de violeta, blanco y ama-

rillo, una región marcada generalmente por sus

paisajes solitarios y secos. El fenómeno, de por si

especial, tiene este año una nueva particularidad

,ya que a diferencia de ocasiones anteriores no

esperó hasta septiembre para hacer su aparición.

Así, quienes visiten las explanadas entre Copiapó

y la zona norte de la Región de Coquimbo, podrán

contemplar y maravillarse con este colosal jardín que

brotó en julio y que cubre en especial a los sectores

aledaños a Huasco y Caldera.

Como en años anteriores, se espera la llegada de

miles de turistas, que cámara fotográfica en mano se

trasladan hasta el Desierto de Atacama para presen-

ciar y capturar imágenes de un fenómeno que en el

mundo no tiene comparación.

Chile

No olvidar:¬Gafas¬Bloqueador solar

Siendo el país más pequeño de America continental con

(20.742 km²), nada está lejos en El Salvador: playas,

volcanes, bosques, lagos, ríos, ruinas arqueológicas,

pueblos pintorescos y además BARATO.

Las aguas calientes son las predilectas por los mo-

chileros y surfers que visitan este país, con su

clima trópical las playas son un alivio ya sea de

día o de noche, opuesto a esto podes encontrar

bosques frescos en las montañas, con cafetales

y pueblos donde degustar la gastronomía locar

y pasar la noche.

Entre los lugares que no te podes perder se

encuentran las playas de La Libertad (El

Zunzal) preferidas por los amantes de las

olas y jóvenes por su activa vida nocturna.

Otro lugar es el complejo de volcánes;

conformados por el volcán de izalco, ila-

matepeq, cerro verde y lago de coate-

peque, donde podes realizar camina-

tas a los cráteres, practicar canopy,

deportes acuaticos o simplemente

relajarte entre la naturaleza.

Si lo que querés es conocer la cultura

precolombina destacan las ruinas de Tazumal

y San Andrés, pero sobretodo Joya de cerén: sitio

habitado por un pueblo agricola y abandonado en el año

250, el cual fué cubierto de lava devido a la erupción del

volcán de ilopango, por lo que se logró conservar a lo largo

de los años y preservar el estilo de vida de la gente común,

que comían, como habitaban, etc.

Parte importante de la historia reciente de este país es la

guerra civil sufrida en los años ochenta, podés conocer más

sobre ella en el museo de la revolución en Perkín, Morazán.

Lugar donde la guerra golpeó con mayor fuerza, sitio lib-

erado por la guerrilla y blanco de múltiples atáques y en-

frentamientos, en este lugar se encuentra el campamento

guerrillero rodeado de bellezas naturales.

Por ultimo debés visitar el pueblo colonial de Suchitoto, lugar

que se convirtió en pueblo fantásma durante el conflicto ar-

mado, lo que un día fué lugar de guerra ahora es un foco de

desarrollo artístico y artesanal el cual antepone la paz como

inspiración. Este pueblo se encuentra a un lado del lago de

Suchitlán, bosques y cascadas. Se encuentra Tambien “Ciu-

dad vieja”, sitio arqueológico en que se situó la Villa de San

Salvador primer hacentamiento de los españoles en el país.

el pulgarcito de Américael SalVador

no olvidar:¬Bloqueador solar¬Repelente contrainsectos